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Seminario de Profundización
Presentado por:
William Andrés Silva Suarez
Cristian Felipe Gutiérrez Aguirre
Lizeth Nathalia Espitia Poveda
Seminario de Profundización
DEDICATORIA……………………………………………………………………………………3
AGRADECIMIENTOS…………………………………………………………………………....4
Resumen…………………………………………………………………………………………...6
Palabras clave…….………………………………………………………………………………..6
Abstrac……………………………………………………………………………………………..7
Keywords…………………………………………………………………………………………..7
Introducción………………………………………………………………………………………..8
Metodología………………………………………………………………………………………11
Etapas de la entrevista……………………………………………………………………………12
Aplicación de la entrevista en el ámbito organizacional…………………………………………15
Discusión…………………………………………………………………………………………24
Referencias……………………………………………………………………………………….27
Elementos a Tener en Cuenta para la Correcta Aplicación de una Entrevista Laboral1
William Andrés Silva Suárez2
Cristian Felipe Gutiérrez Aguirre3
Lizeth Nathalia Espitia Poveda4
Resumen
Palabras Clave
1
Texto publicado en desarrollo del seminario de profundización en Gerencia del Talento Humano como
modalidad de grado para obtener el título en Psicología de la Universidad Cooperativa de Colombia.
2
Estudiante de décimo semestre del Programa en Psicología de la Universidad Cooperativa de Colombia.
3
Estudiante de décimo semestre del Programa en Psicología de la Universidad Cooperativa de Colombia
4
Estudiante de décimo semestre del Programa en Psicología de la Universidad Cooperativa de Colombia
Elements to Take Into Account for the Correct Application of a Job Interview5
Abstract
The importance of the personnel selection process in a company begins
through the recruitment and profiling of resumes, clarifying the above is the
fundamental part of the process to start an interview and thus select the candidates
requested in a selection process. In the first instance, the objective of this document
is to identify the general aspects of the interview, its phases or stages into which
they are divided regardless of the field of application; as well as investigating how
this is developed in the personnel selection process, where the field of
organizational psychology is deepened, identifying the stages step by step, exposing
those differential elements that make the interview of unique selection compared to
the others , highlighting the relevance of why carrying out a good management in
the interview application process leads to having more information that leads to
results that aim to choose an ideal candidate and finally synthesize under an updated
vision, information related to the most essential skills and competencies to be
developed by the organizational psychologist at the time of application.
Keywords
Interview, human talent, personnel selection, organizational psychology.
5 Texto publicado en desarrollo del seminario de profundización en Gerencia del Talento Humano como
modalidad de grado para obtener el título en Psicología de la Universidad Cooperativa de Colombia.
La entrevista a lo largo de la historia ha sido empleada en diferentes áreas del ser humano
que van desde la salud, la farándula, hasta el desarrollo organizacional. Está puede ser
empleada en los diferentes contextos como una técnica, un método o incluso un instrumento
según el fin o uso que se le otorgue. (p. 227)
Para el caso del presente artículo, el área en el cual se centra la revisión de la entrevista es
la psicología, específicamente en el contexto organizacional. Si se sitúa la postura de Barranco
(2013), “la entrevista de trabajo es una negociación entre dos partes, ambas interesadas en resolver
una situación, uno necesita un trabajo y otro un empleado capacitado” (p. 11) también es
considerada “la fase definitiva, dentro de cualquier proceso de búsqueda de empleo o de cambio
de trabajo”. (p. 9)
De todos los sistemas de selección, la entrevista es la técnica más antigua y también la que
posee mayor número de defensores y detractores. Aunque la utilidad y los objetivos a
conseguir pueden ser de índole variada. La entrevista de selección tiene el objetivo
primordial de conocer, además de recabar información sobre el candidato y su historia;
permite observar su presentación y conducta, e intuir algunos de sus rasgos de personalidad
y motivaciones (Barranco, 2013, p. 35).
Sin embargo, independiente del contexto y el concepto que ha ido variando de acuerdo con
los autores, en todos los casos se comparte una misma raíz etimológica como la que ilustra Perea
(2008), ‘’la entrevista se deriva de la palabra francesa ‘entrevoir’, que significa verse el uno al otro”
(p.233),
Otro punto fundamental que hace explícita la importancia que debe tener la entrevista en
las organizaciones del siglo XXI, no solo desde una mirad pragmática, es la consideración ética:
Por ejemplo, como lo mencionan bretones y Rodríguez (2008; citado por Barranco, 2013),
es un limitante “la falta de preparación y formación en su utilización debido a su aparente facilidad,
de manera que muchos empresarios o directivos se sienten capacitados para ‘preguntar’ a los
candidatos” (p. 42). A esta postura se suma González (1998), quien coincide en que:
El lugar asignado a los psicólogos dentro de las empresas puede ser controvertido, discutido,
resistido y hasta desplazado por otros profesionales (administradores, jefe de personal, Lic.
en administración, etc.) Sin embargo, estos últimos no poseen las herramientas técnicas y
menos aún el análisis teórico y profundo que se puede hacer desde la psicología a partir de
la información obtenida (p. 212).
De esta forma, con lo anterior se argumenta claramente, que el rol que el psicólogo debe
asumir en una organización ha venido siendo suplantado por otras áreas de la ciencia, llegando a
presentarse serias carencias en la rigurosidad no sólo de aplicación de la entrevista, sino también
en el análisis que se debe realizar con la información obtenida.
Por este motivo surge la necesidad de abordar este tema en la actualidad, para que así mismo
se brinde una percepción general al lector acerca de la importancia del adecuado manejo de la
entrevista, siendo esto lo que sustenta el presente ejercicio de revisión, y que da lugar a establecer
la pregunta de investigación que indague sobre ¿Cuáles son los principales elementos a tener en
cuenta al momento de aplicar una entrevista laboral?, ya que a través de la adquisición de estos
conocimientos el psicólogo organizacional tendrá una perspectiva actualizada, útil y oportuna
sobre los conocimientos relacionados a la aplicación de la entrevista laboral, para que de esta forma
desarrolle competencias que lo lleven a manejar a profundidad la forma adecuada de hacerlo,
garantizando a su vez un resultado eficaz en la selección del candidato en lo que a entrevista laboral
se refiere. Lo anterior con el fin de evitar los retrocesos, la falta de rigurosidad, sesgos u otras
limitaciones que se mencionaron anteriormente y con las cuales pueda toparse en su cotidianidad
laboral.
Metodología
Asimismo, como criterios principales para la selección de las fuentes, se verificó que fuesen
referentes en su mayoría de las últimas dos décadas, revisados y autorizados por revistas o
editoriales, entre las que se encontraron artículos científicos, libros e investigaciones relacionadas
al proceso de selección, y en específico a la aplicación de la entrevista de selección. Fuentes que
fueron tomadas de las bases de datos de la Universidad Cooperativa de Colombia, Dialnet, eLibro,
Redalyc, ProQuest y Google académico.
Etapas de la entrevista
Hay que tener claridad que al concebir la entrevista como un proceso que conlleva unas
etapas, estas deben seguir una continuidad lineal para que se dé un resultado óptimo, sin embargo,
no quiere decir que no se puede retornar a alguna de las fases de ser necesario, (Roncero y García,
2012, p. 180) pero esto invitaría al entrevistador a que realizara un autoanálisis para descubrir si
debe pulir más sus habilidades durante la intervención.
Sin embargo, otros autores como Acevedo & López (2004), mencionan que la entrevista
contiene seis fases: inicio de la entrevista, primeras impresiones, desarrollo de la entrevista, cima
de la entrevista, cierre de la entrevista, reporte de la entrevista (p. 34, 44). Sence (2007) citado por
Maldonado (2013) apoya las seis fases a seguir, pero la clasificación que realiza es diferente, las
define como: Apertura, rapport, comunicación de las reglas, desarrollo cierre e informe (p. 15, 16).
Con respecto a la primera etapa que es la inicial, el psicólogo debe centrar su total atención
en generar rapport con el aspirante, creando un clima cálido y un ambiente favorable para que la
persona se sienta en confianza, ya que en etapas posteriores se buscará recabar sobre información
personal y si el entrevistado no percibe un entorno favorable es probable que no comparta los datos
requeridos para el respectivo análisis. También es importante conocer las expectativas que tiene el
evaluado sobre el encuentro (Roncero y García, 2012, p.180).
En concordancia con lo anterior, Acevedo & López (2004); Sence (2007) citado por
Maldonado (2013) respaldan que el inicio de la entrevista debe ir acompañado del rapport que
genera el entrevistador a través de una cálida recibida, una frase amable y una explicación concreta
sobre el objetivo del encuentro; Acevedo & López (2004) añaden que se debe tener en cuenta que
la mayoría de los candidatos pueden sentir temor, vergüenza, tensión y sobre todo expectación al
saber que van a exponerse frente a otra persona, por eso esta familiarización ayudará a reducir
tensiones y generar un ambiente confortable (p.34).
Dan continuidad a su idea Llanos (2008) dice “La actitud transparente, espontánea y de
escucha es una forma positiva para crear rapport. Es importante señalar que no se debe prometer al
candidato nada que no se pueda cumplir: las falsas expectativas son una forma de lastimarlo (...)”
(p.61).
Sin embargo, no solo el rapport debe darse en el inicio, sino también la empatía hacia el
evaluado, ya que algunos pueden tornarse agresivos o inquietos por encontrarse en una posición
percibida como inferior. De acuerdo con Acevedo & López (2004) la empatía se define como “la
posibilidad de asimilar la persona del otro, de penetrar en su afectividad, de sentir con él. La
empatía, en principio no es recíproca, pero indudablemente invita a la reciprocidad’’ (p.35).
Así mismo, en esta etapa intermedia o de desarrollo Roncero y García (2012); Sence (2007)
citado por Maldonado (2013) consideran que la obtención de datos relevantes y la formulación
apropiada de hipótesis para entablar nuevas preguntas que permitan validar o descartar las
suposiciones sobre el entrevistado, constituyen los principales objetivos a alcanzar. Acevedo &
López (2004, p. 38) añaden que validar o descartar hipótesis de manera correcta tiene mucho que
ver con qué tan consciente es el entrevistador sobre las fuentes de error en las impresiones primarias
que pueden presentarse en este punto de la entrevista.
Es muy importante que el profesional tenga en cuenta que para alcanzar los objetivos
propuestos en esta fase de la entrevista debe centrarse en agudizar dos de sus habilidades: escucha
activa y preguntar asertivamente (Roncero y García 2012, p.185). Respaldando el saber preguntar
Acevedo & López (2004, p. 40) mencionan en su tercera etapa denominada ‘’proceso o desarrollo’’
dos tipos de entrevista: dirigida y no dirigida. En la primera el evaluador hace preguntas directas y
elaboradas, en la segunda los cuestionamientos deben seguir el hilo de conversación que desea el
entrevistado.
La última fase Roncero y García (2012) la denominan como la ‘’final’’, para está el
entrevistador debe contar con la mayor información planteada al inicio de la entrevista. También
se debe recapitular o verificar la información dada y recibida, para luego planificar nuevas citas o
acordar compromisos de ser necesario, aclarando las dudas que hayan surgido durante el proceso
y finalmente cerrando el espacio con un agradecimiento al entrevistado, deseando que todo le salga
bien (p. 188).
Por su parte Acevedo & López (2004), prefieren dividir esta fase en dos: Cima de la
entrevista y cierre de la entrevista. El punto alto de la entrevista lo determina el evaluador y el
principal criterio es la adquisición de datos que le permitan validar una hipótesis, elaborar un
diagnóstico o tomar una decisión. En cuanto a la culminación, hay que actuar con la cordialidad
inicial y verificar si no quedó algún aspecto faltante (p. 42). Sence (2007) citado por Maldonado
(2013) complementan que en el cierre de la entrevista el evaluador tiene que indicarle al
entrevistado que ya el encuentro está finalizando. Además, Roncero y García (2012, p. 189)
añaden que, en la entrevista clínica, el psicólogo debe tener especial cuidado porque esta etapa
puede ser la más importante.
Toda la información adquirida y validada a lo largo del proceso debe consolidarse en lo que
Acevedo & López (2004) denominaron como “reporte de la entrevista’’. Es importante que el
profesional encargado analice y sintetice de manera objetiva las conclusiones al elaborar dicho
informe, además debe redactar de manera simple y concisa para que las personas que lo lean lo
entiendan claramente, descartando toda ambigüedad (p. 43). Ratificando este enunciado Sence
(2007) citado por Maldonado (2013) dice ‘’Inmediatamente después de que el entrevistador se
despide del entrevistado, se hace un informe sobre todo lo que se averiguo del entrevistado que sea
de interés para la evaluación de su candidatura’’ (p16).
Como se menciona en Barrasa y Castro, (2012), a pesar de que autores como Palacio (2002);
Pereda y Berrocal (2001); Quintanilla (1992); Salgado y Moscoso (2001), reconocen las siguientes
como características indispensables para que se pueda llamar al anterior proceso de comunicación
una entrevista de selección: “preparación, cara a cara, bidireccional, cierta estructuración,
información sobre el puesto y organización, información sobre el candidato”, existen algunas
ramificaciones cada vez más utilizadas en la actualidad y que salen de los criterios expuestos
anteriormente, dentro de las que se destacan:
1. Expectativas ante el puesto: El cual busca el único objetivo de obtener información sobre
cómo el candidato se imagina el puesto de trabajo, indicando los aspectos favorables o
desfavorables de la oferta. Este es un espacio importante para que el candidato pueda aclarar
si sus expectativas pueden cumplirse en algún grado o no (p. 370).
Por otra parte, Alles (2005) argumenta que “muchos entrevistados creen que lo mejor es
empezar suministrando toda la información sobre el cargo y la compañía antes de empezar
el interrogatorio” (p. 34). No obstante, también aclara que no siempre se debe mencionar
esta información, ya que el entrevistado puede condicionarse a lo que la compañía busca y
dar una falsa impresión de sí mismo con el fin de agradar al entrevistador.
Compartiendo la postura de Barrasa y Castro, Alles (2005) expone que conocer la historia
laboral de cada postulante es la base de la mayoría de las entrevistas, argumentando que
“Los especialistas en recursos humanos coinciden en que la manera en que un postulante
ha enfrentado una situación específica pasada es la mejor indicación para verificar cómo se
desempeñará en una situación similar en el futuro” (p. 43).
5. Ambiente familiar y social: El presente elemento se analiza con cautela evitando cuestiones
relativas a la privacidad contempladas legalmente. El entrevistador debe actuar de forma
sumamente prudente para no emitir juicios o valoraciones, o mostrar estereotipos o
prejuicios que podrían sesgar el buen resultado de la entrevista. Las conclusiones más
relevantes en este apartado harán referencia a los intereses vitales que el candidato muestra
y la forma en que los integra, mostrando jerarquía de valores, por lo que se direcciona tanto
hacia el trabajo, como hacia otros aspectos de la vida, llegando a deducirse los roles que es
capaz de desempeñar, y en particular el rol de liderazgo (Barrasa y Castro, 2012, p. 371).
6. Aspectos a detectar por observación: En primer lugar, hay que tener en cuenta la
presentación personal, o la imagen que proyecta el candidato, elementos como la
apariencia, los modales, la forma de vestirse o peinarse, el grado de aseo personal, los
gestos, el tono de voz, etc. Considerando lo anterior como un todo que engloba la forma en
cómo la persona íntegra todos estos aspectos, no se recomendaría evaluar cada aspecto de
forma aislada ya que brindaría una apreciación errada sobre el candidato. También conviene
prestar atención a su facilidad de expresión, fluidez verbal, la capacidad de exponer un
argumento, de objetar una dificultad, de convencer y persuadir al interlocutor. Por último,
su grado de sociabilidad y la actitud que ha demostrado a lo largo de la entrevista, la empatía
y la cercanía lograrán deducir una buena integración de todos estos aspectos propios de la
personalidad del evaluado y la forma en que afrontaría la vida laboral en la organización
(p. 371)
7. Competencias: Es usual que el psicólogo de selección evalúe en una entrevista de trabajo
ciertas competencias que servirán como determinante en la toma de decisiones ante el
candidato, las cuales bajo la postura de Barrasa y Castro (2012) son:
b. Capacidad de síntesis: La aptitud para que, partiendo de una gama amplia de datos
y de informaciones no siempre organizadas, se obtengan conclusiones que faciliten
la planificación del trabajo.
Finalmente, otro elemento de gran importancia que tiene relación frente a los elementos
diferenciales y que igualmente cumplen una función de relevancia en la aplicación de la entrevista
corresponde a lo que en Vallejo (1966) se denomina la “Realización de la entrevista”, en donde se
establecen seis requisitos indispensables a tener en cuenta al momento de la realización o aplicación
de la entrevista y que permitirán garantizar el establecimiento de ese vínculo bidireccional de
comunicación, los cuales se exponen a continuación:
El lenguaje: En donde como principal premisa se debe tener en cuenta el que sea sencillo e
inteligible, el entrevistador debe examinar constantemente si el lenguaje que está utilizando es
comprensible para los demás. [...] Cuando las palabras que se utilizan en una conversación no son
comprensibles para una de las personas que interactúan, el diálogo no cumple con su propósito (p.
28).
En este orden de ideas, no basta con que el entrevistador emplee un vocabulario sencillo e
inteligible, sino que es importante que el entrevistado lo emplee también. No obstante, con lo
anterior el autor no busca suprimir el lenguaje técnico cuando la índole del candidato al cargo lo
requiera, por el contrario, si se demandan ciertos conocimientos técnicos se debe adecuar el
vocabulario a los conocimientos que se espera deba tener el candidato.
Cabe resaltar que teniendo en cuenta este apartado, la atención debe mantenerse fija en lo
que se busca, sin permitir que la imaginación se distraiga con otras cosas, también el saber escuchar
es una herramienta de amplio espectro para poder observar, captar lo que se está escuchando, de
analizar las pausas, los fallos y las incongruencias.
Igualmente, las preguntas deben guardar una estrecha relación con el puesto y con los
requisitos y condiciones personales que se requieren para el desempeño del candidato en el cargo,
obviando por supuesto, los momentos en que sea necesario entablar una relación de simpatía entre
el entrevistador y el entrevistado con el fin de aligerar las incomodidades que por la situación se
puedan generar.
Alles (2005), complementa este apartado fundamental descrito por Vallejo, indicando que
“se debe ser neutral al momento de realizar las preguntas para de esta forma obtener resultados más
exactos” (p.19); llegando así a la conclusión de que el éxito de la entrevista dependerá
sustancialmente de la manera en que se pregunte y se escuche.
El cuestionario: Consiste en un impreso en el que constan bajo epígrafe los aspectos más
importantes que se tratarán en la entrevista. [...] También se conoce como formulario o formato de
entrevista y su estructura y contenido depende de la naturaleza de la vacante, del plan de actuación
de que se trate, de la pericia y de la clase de informe que se tenga que redactar después sobre el
candidato (Vallejo, 1966, p. 34).
En tanto no se estén tomando notas es conveniente mantener este formulario boca abajo
para evitar miradas indiscretas. Este formulario de entrevista cumple la función de evitar que se
olvide algún aspecto importante, para anotar las impresiones de forma ordenada y sistemática y
para simplificar las anotaciones durante la entrevista.
El final de la entrevista: La entrevista debe concluir tan pronto como se hayan obtenido
todos los datos que deseaban averiguarse del aspirante, pero no hay que olvidar que mientras el
candidato no haya abandonado el lugar de realización, puede observarse u oírse algo de interés (p.
35).
El entrevistador debe procurar causar en todos los casos una impresión favorable en el
ánimo del entrevistado, tanto respecto a sí mismo, como al desarrollo de la entrevista. Si bien puede
resultar algo difícil en caso de que no se le haya seleccionado, el entrevistador ha de intentar por
todos los medios que nunca sea desfavorable la impresión producida.
en el proceso de aplicación de la entrevista laboral Atalaya (2001) resalta que es una herramienta
básica que verifica actitudes, reacciones, dudas y fragilidades del postulante lo que permite
identificar aspectos básicos al momento de la aplicación como lo es los intereses de la persona,
valores y cultura ya que los mismos generan empatía.
Discusión
la entrevista es una herramienta necesaria, que permite seleccionar al personal idóneo en las
compañías, donde se ratifica que es una herramienta por excelencia en el proceso de selección de
personal y que es uno de los factores que más influye en la decisión final respecto a la aceptación
o negación de un candidato. Por lo cual es importante identificar qué significa la entrevista, cuales
son las etapas por desarrollar, sus fases y las diferentes habilidades y competencias del psicólogo
para ejercer y desarrollar la entrevista de manera idónea.
Barrancos (2013), nos propone la definición de la entrevista como “la entrevista de trabajo
es una negociación entre dos partes, ambas interesadas en resolver una situación, uno necesita un
trabajo y otro un empleado capacitado” (p. 11) también es considerada “la fase definitiva, dentro
de cualquier proceso de búsqueda de empleo o de cambio de trabajo”. (p. 9). Categorizando así la
importancia de comunicación entre al menos dos personas que lleguen a un acuerdo laboral dentro
del proceso de selección tal cual se evidencia en el desarrollo de este artículo.
El objetivo principal del entrevistador es contratar al mejor candidato, con el perfil que más
se adapte al puesto y a los requerimientos de la compañía, por cual se evidencia la necesidad de
implementar el desarrollo de las etapas de la entrevista; resaltando así su continuidad lineal
e identificando sus tres fases principales: la inicial, intermedia y final las cuales tienen una relación
en común y un solo objetivo garantizar un adecuado desarrollo del proceso de entrevista laboral.
Por tanto, la aplicación y desarrollo de estas etapas dan respuesta en gran parte al logro de
la selección del candidato, teniendo en cuenta procesos de gran importancia como lo es el rol del
psicólogo en la atención brindada al aspirante, garantizando y creando un clima cálido o un
ambiente favorable, aplicando así la etapa inicial. La segunda etapa permite hacer énfasis en la
comunicación asertiva y la importancia de mantener la percepción del evaluado de manera positiva,
evitando hacer juicios en el desarrollo de la entrevista y recolectando así datos importantes para un
óptimo resultado ; por último y no menos importante se menciona la tercera etapa en la cual se
recapitula la información brindada por el entrevistado, se realiza el cierre de un nuevo compromiso
adquirido por parte del entrevistador o se aclaran las dudas generadas en el mismo para poder o no
continuar con el proceso de entrevista laboral organizacional.
sin embargo, autores como (Acevedo & López, 2004, p.34) muestran que existen 6 fases
las cuales son: inicio de la entrevista, primeras impresiones, desarrollo de la entrevista, cima de la
entrevista, cierre de la entrevista, reporte de la entrevista, que impulsan el proceso de selección, la
favorabilidad del candidato en postulación y el aporte al presente artículo.
De acuerdo a este proceso se hace explícita la importancia del papel del psicólogo al
momento realizar una entrevista, identificando elementos necesarios como lo es la comunicación
asertiva, la empatía con el entrevistado lo que conlleva a desarrollar un contacto humanizado,
destacando competencias como la obtención de información de manera asertiva y analizando todos
los datos obtenidos que permita determinar una acción de continuidad en el proceso, proponiendo
objetivos claros entre el entrevistador y el entrevistado.
Se considera determinante que quien desarrolle el proceso de entrevista laboral lo realice de manera
sistematizada aplicando toda la información anteriormente brindada para poder dar asi una
respuesta previa a la contratación del candidato.
Acevedo, A. & Lopez, A. (2004). El proceso de la entrevista: Conceptos y modelos. 4ta Ed.
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Barrasa, A., Castro, A. (2012) Entrevista de selección. En: Perpiñá, C. [Coord.] Manual de la
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Roncero, M., García, G. (2012) El proceso de la entrevista. En: Perpiñá, C. [Coord.] Manual de la
entrevista psicológica: saber escuchar, saber preguntar. Difusora Larousse – Ediciones
Pirámide. Madrid pp. 177-199. Recuperado de:
https://bbibliograficas.ucc.edu.co:4058/es/ereader/ucc/49011?page=1