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HISTORIA DEL DERECHO MEXICANO

UNIDAD 7

El Derecho Mexicano en el siglo XIX

Introducción

Una vez consumada la Independencia del país, los siguientes años estuvieron marcados por una serie de
constantes presiones externas e internas.

Internamente en la primera mitad del siglo XIX aparecen dos grupos políticos principales en México, cuya
razón de ser estaban orientados a imponer un modelo económico y político para el desarrollo de la núbil
nación: federalistas y centralistas. Los primeros pretendían la implantación de un sistema federal y los
segundos querían un sistema monárquico a través de un gobierno central. Sin embargo, es importante
mencionar que existió un tercer grupo, los moderados, cuya intervención fue muy importante en ciertos
momentos en que la pugna por la supremacía del proyecto de nación se tornó radical. Por último, esta división
posteriormente derivó en los liberales y conservadores.

En este periodo también se vivieron guerras de intervención en donde naciones europeas y Estados Unidos de
América atraídos por la riqueza natural del territorio mexicano, aprovecharon la constante desorganización, las
divisiones ideológicas y la crisis económica y sociocultural imperante en nuestro país.

En efecto, durante esta primera etapa, México enfrentó una serie de turbulencias políticas y sociales, que
motivaron la pérdida de más de la mitad del territorio, un país desmoralizado, lleno de carencias y pobreza,
tanto en las zonas rurales como en las ciudades.

Si bien al inicio del siglo XIX el cambio del gobierno colonial al independiente era sólo superficial ya que
permanecía la misma situación interna, trajo como consecuencia que se concientizara sobre la necesidad del
establecimiento de un nuevo orden jurídico acorde a la nueva vida política del país. La construcción de dicho
orden jurídico se desarrolló dentro de la pugna de los grupos políticos por la supremacía de su proyecto de
nación por lo que se obtuvieron leyes y gobiernos distintos, entre los que sobresalen la monarquía
constitucional durante el gobierno de Iturbide; la república, tanto federal como centralista, en el periodo
santanista, cuyo protagonista llegó a ser titular del ejecutivo 11 veces; y un segundo imperio propuesto por el
grupo político conservador.

Con todos estos hechos históricos y otros elementos, tales como la ideología de la Ilustración, los hechos
realizados por los Estados Unidos de América y, desde luego, la Revolución Francesa, se nutrió el Congreso
Constituyente que redactó la Constitución de 1857, la cual fue el pilar de la consolidación de la república
liberal. En dicho ordenamiento jurídico se hace patente una verdadera separación de poderes entre el Estado y
la Iglesia católica, al señalar sus respectivas competencias. Así también, se reglamenta el juicio de amparo; se
propicia, más adelante, el restablecimiento de la Cámara de Senadores, y se eleva, a rango constitucional, las
Leyes de Reforma, consolidando nuestro derecho nacional.

El siglo XIX es, sin duda, un periodo de gran actividad legislativa que determina en gran medida el orden e
ideales para la conformación de un Estado moderno, al romper con el pasado colonial.

Para saber más...


Para una mejor comprensión el contexto histórico del siglo XIX, le invito a consultar el video Siglo XIX
Contexto histórico.
Objetivo particular
El alumnado determinará el desarrollo de las principales Instituciones jurídico-políticas del México
independiente, su evolución Constitucional, los aspectos relevantes de las relaciones Iglesia-Estado y del
proceso codificador civil, penal y mercantil del siglo XIX, el Amparo Mexicano y las relaciones entre la iglesia
católica y el Estado.

El primer Imperio Mexicano


Una vez que en febrero de 1821 se proclamó la Independencia con la emisión del Plan de Iguala, inicia una
nueva etapa en la vida política de la Nueva España, pues al dejar de ser una colonia española,
requería organizarse como nación independiente. Esta transición de un Estado colonial hacia uno nacional y
soberano fue un proceso complejo, debido a que los grupos sociales menos favorecidos estaban esperanzados
que efectivamente se realizaran los cambios económicos y sociales que fueron estandartes durante el
movimiento de Independencia; sin embargo, en contraposición, las clases económicas preponderantes desde la
colonia buscaban conservar sus privilegios. En ese sentido, una de las primeras decisiones que se debieron
tomar fue la organización del nuevo Estado, es decir, determinar la forma de gobierno.

Recuerde que...
Es de suma relevancia no perder de vista que el Plan de Iguala lejos de plasmar los ideales por Hidalgo y
Morelos pretendía el establecimiento de una monarquía constitucional en la que se continuara protegiendo la
posición privilegiada del clero, así como de las clases económicas fuertes que participaban en el aparato
administrativo.
Por otra parte, con base en el Tratado de Córdoba, Iturbide organizó la Junta Provisional Gubernativa. Este
cuerpo gubernamental, de acuerdo con Brom, se considera el primer gobierno del México independiente y
“estuvo integrado por partidarios del Plan de Iguala; sin embargo, no se incluía a ninguno de los caudillos
insurgentes sobrevivientes, en ella predominaban abogados y miembros del bajo clero”, notables por su riqueza
y por su influencia en la sociedad (2004: 163).
“La Junta, se instaló el 28 de septiembre de 1821 y después de prestar juramento de cumplir el Plan de Iguala y
los Tratados de Córdoba, redactó el Acta de Independencia del Imperio Mexicano” (Miranda, 2005: 85).
El objetivo principal de la Junta era elegir la Regencia Provisional, convocar a elecciones para el Congreso
Nacional y conservar el orden y la paz, mientras se organizaba el gobierno definitivo. En tanto, la Regencia
tomó varias medidas que dieron lugar a importantes cambios para la nueva nación independiente, algunas de
ellas fueron (Brom, 2004: 163):
Con dichas medidas, los grupos políticos de la época facilitaron las actividades económicas, culturales y
políticas de la clase media con la intención de obtener su apoyo y fortalecer su proyecto de nación; sin embargo,
la situación del pueblo no mejoró con ellas.

Organización

Una vez organizada la Junta Gubernativa y la Regencia, con base en la orientación política establecido en
el Plan de Iguala se convocó un Congreso Constituyente, cuyo objetivo principal consistió en sentar las bases
para la organización política del imperio mexicano. Dicho Congreso inició sesiones el 24 de febrero de 1822 y
de inmediato se declaró titular de la soberanía, ratificó la religión católica como única permitida y elaboró el
documento Bases Constitucionales, en el que se adoptó como forma de gobierno la monarquía
constitucional con separación de los poderes legislativo, ejecutivo y judicial.

La Junta y el Congreso tuvieron diversas diferencias políticas derivado a que en ellos se encontraban
representados corrientes borbonistas, iturbidistas y republicanas.

En una etapa inicial, el trono imperial sería ofrecido a Fernando VII; sin embargo, las cortes españolas declaran
nulo el Tratado de Córdoba, porque negaba el trono de México a los Borbones y se desconocía la
Independencia de México, razones por las que el Congreso consideró que era un intento de reconquista por
parte de la Metrópoli y proclamó emperador a Agustín de Iturbide, a pesar de los conflictos existentes entre
éstos (Macedo, 2000: 239).

Las pugnas entre Iturbide y el Congreso persistieron, ya que este último manifestaba una fuerte tendencia a
favor de organizar el país en república, por lo que el emperador decide disolverlo y lo sustituye por la Junta
Nacional Instituyente (Soberanes, 2009: 136).

Para saber más...


Sobre los conflictos que tenía Agustín de Iturbide con el Congreso, consulte el video 1822 El año que fuimos
imperio fragmento de la obra escrita por Flavio González Mello y producida por la UNAM en colaboración con
el INBA.

Documentos fundacionales

“Retomando el contenido del Plan de Iguala y los Tratados de Córdoba, el 18 de diciembre de 1822 se expide
el Reglamento Provisional Político del Imperio Mexicano”, entre sus principales postulados destacan (López,
2003:76):
A consecuencia de la pugna existente entre Iturbide y el Congreso, comenzaron a gestarse rebeliones en contra
del Imperio, las cuales tuvieron eco debido a la crisis política, la grave situación económica generada por los
gastos excesivos de la corte imperial y la ejecución de una incorrecta política económica: “el Imperio recurrió a
préstamos forzosos y se aumentó considerablemente la deuda externa; de esta suerte, con la agricultura y la
industria casi paralizadas, la situación del país era francamente alarmante” (Pérez, 2008: 435).

La rebelión más importante fue la encabezada por Antonio López de Santa Anna en Veracruz que llevó a la
expedición del Plan de Casamata en el cual se declaraba nula la proclamación de Iturbide como
emperador y se convocaba a la integración de un nuevo Congreso Constituyente. Estos hechos obligaron a
Iturbide a abdicar el trono en 1823, es decir, a ceder la soberanía de su reino, dando fin al primer imperio
mexicano.

Reflexión
¿Cuáles fueron los documentos constitucionales elaborados al finalizar el primer imperio de Iturbide, en la
primera mitad del siglo XIX? ¿Cuáles eran las tendencias político-sociales que sostenían los partidos
federalistas y centralistas? ¿En qué consistían cada uno de estos proyectos políticos?

Advenimiento del régimen Republicano

Contexto histórico
Para reconocer el contexto social y político que imperaba en nuestro país a principios del siglo XIX, le invito a
que revise el video México: liberales y conservadores y ponga especial atención a los siguientes temas:

 Características de los grupos políticos en el poder.


 Tipos de gobierno desarrollados en la primera mitad del siglo XIX.
 Conflictos nacionales e internacionales.
 La relación del Estado con la Iglesia.

Tras el fallido intento de gobernar la reciente nación bajo un régimen monárquico, la república se convirtió en
la mejor opción para gobernarla, por lo que se restableció el Congreso Constituyente, disuelto por Iturbide. Si
bien se acordó establecer una república como forma de gobierno; inició un intenso debate entre los grupos
políticos sobre qué tipo de república debía ser:
La principal razón por la cual una vez que Iturbide abdicó al trono se vislumbró una forma de gobierno
federalista, obedeció a los diferentes movimientos separatistas de las provincias (entre ellas Guadalajara,
Oaxaca, Puebla, Yucatán y Zacatecas), motivados bajo la creencia de la necesidad de establecer una democracia
en contraposición al anterior orden social que privilegiaba a unos cuantos grupos sociales.

Finalmente, después de varios días de debate, se expidió el 16 de mayo de 1823 el Plan de la Constitución
Política de la Nación Mexicana, el cual establecía la organización del Estado según un sistema federal y la
división de poderes legislativo, ejecutivo y judicial. Meses más tarde, el Congreso Constituyente elaboró
el Acta Constitutiva de la Nación Mexicana el 31 de enero de 1824, que adoptaba la forma de república
representativa, popular y mantenía tanto el sistema federal como la división de poderes, depositando
al legislativo en un congreso bicameral (diputados y senadores); el ejecutivo con la figura del vicepresidente y
el judicial en una Corte Suprema de Justicia y los tribunales estatales” (López, 2003: 76 y 77).

A partir de este momento, inició un periodo en el que se ensayarán diferentes formas de gobierno, transitando
de la república federal, con la intención de establecer un régimen democrático, a la república central, con el
objetivo de imponer la paz y orden que, de acuerdo con los grupos centralistas, imperaba en la época colonial
y se había perdido a causa de la guerra de Independencia.

¿Sabía que…?
Los primeros partidos políticos del siglo XIX era un grupo de personas que compartían determinada ideología política.
En una primera fase se identifican en federalistas y centralistas. Tiempo después se agruparon en asociaciones
llamadas logias masónicas. En el caso de México encontramos la yorquina, de influencia estadounidense, que reunía a
los federalistas y daría lugar al llamado partido liberal, y la escocesa, de influencia inglesa, que agrupaba sobre todo a
los centralistas, más adelante partido conservador (Brom, 2004: 167).
De acuerdo con Rabasa, durante el año 1824, se les denominó centralistas y federalistas al considerar la forma de
gobierno que defendían, y a partir de 1856 conservadores y liberales en relación a su posición frente a las medidas de
reforma (2002,10).

Evolución del movimiento Constitucional decimonónico


Al hablar sobre la evolución del movimiento constitucional decimonónico, hacemos referencia al desarrollo y
evolución de las diferentes Constituciones elaboradas en México durante el siglo XIX (1800-1900), las cuales
representan el ejercicio pleno de la soberanía del Estado mexicano.

Definamos
Soberanía
Durante el siglo XIX el concepto de soberanía se traduce como el poder del pueblo para decidir la forma de
gobierno; dicho poder es representado por el Estado, que actúa conforme a la Ley, lo que hace posible los
derechos y libertad de ser humano, y ésta es elaborada por el poder Legislativo titular de la soberanía popular
(Cruz, 2004: 3-4).

En este sentido, resulta importante recordar que durante la época colonial la soberanía residía en el rey y la
Nueva España, sólo acataba la legislación elaborada por la metrópoli. Posteriormente, al obtener México su
independencia de España, es necesario elaborar sus propias leyes para sustituir el orden jurídico anterior. Dicha
labor legislativa no fue sencilla, ya que durante el siglo XIX el país enfrentó una gran inestabilidad política,
económica y social, derivada, tanto de la lucha permanente entre los grupos políticos, como de los
movimientos armados nacionales y las intervenciones extranjeras.

Revisemos a continuación algunos de los acontecimientos más representativos durante la primera mitad del
siglo XIX.

En el esquema anterior es posible identificar un constante cambio en la forma de gobierno en México durante el siglo
XIX. Inicia con una monarquía constitucional y después se trasforma en una república. Sin embargo, el punto de debate
entre los grupos políticos del país se concentró en la decisión de establecer una república federal o una central. Esta
situación se hace visible en los documentos constitucionales elaborados por cada grupo político, que, al asumir el poder
del país, expedían un nuevo ordenamiento con base en sus ideales políticos, por lo cual podemos agrupar a las
Constituciones en federalistas o centralistas:

Para saber más...


Con la finalidad de tener un panorama general de los diversos ordenamientos fundamentales de este país, le
invito a ver el video del Instituto Nacional de Estudios Históricos de las Revoluciones de México
(INEHRM) Origen y vida de la constitución. Las constituciones de México.

Constituciones Federales

Son los ordenamientos constitucionales que establecen un sistema de gobierno republicano federal, con una
división territorial en estados libres y soberanos unidos en una federación.

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Constitución de 1824

Aprobada el 3 de octubre de 1824, estableció un sistema de gobierno


republicano, representativo, popular y federal. En ella vemos
nuevamente la división de poderes:

Este ordenamiento adoptó los principios de la Constitución Francesa y


la Constitución de Cádiz, y un mecanismo de gobierno semejante al de
Estados Unidos. No obstante lo anterior, este ordenamiento
constitucional mantenía los privilegios del clero y el ejército, aunado a
que no se consagraban disposiciones normativas relativas a derechos
fundamentales.

Constitución de 1857

Es importante destacar que durante la dictadura del Santa Anna se


agravó la inestabilidad socioeconómica y política debido al abuso del
grupo centralista en el poder y la represión que ejercían sobre los liberales, lo que llevó a que la oposición
política emitiera en 1854 el Plan de Ayutla el cual dio nombre al movimiento que terminó con el periodo de
Santa Anna.

En el ámbito jurídico hubo importantes instrumentos que se expidieron y que influyeron en la construcción de la
Constitución Política de 1857, estos instrumentos fueron:

 Ley Ocampo (eliminó el derecho del voto al clero).


 Ley Juárez (eliminó en los negocios civiles los fueros del clero y
del ejército).
 Ley Lerdo (estableció la desamortización de los bienes del clero y
de las extensiones de tierra comunales).
 Ley Iglesias (prohibió a la Iglesia el cobro de derechos a personas
de bajos recursos por la administración de sacramentos).

Un nuevo Congreso Constituyente promulgó el 5 de febrero de 1857 la


Constitución, durante el periodo presidencial de Valentín Gómez Farías.
Organizó el país en forma de república representativa, democrática y
federal; contiene la Declaración de los Derechos del Hombre, establece la
separación de competencias del Estado y la Iglesia y por primera vez se
establecen en sus primeros 29 artículos derechos individuales. Así mismo, la división de poderes estaba
integrada en poder ejecutivo (depositado en un presidente que en su falta asumía el cargo el presidente de la
Suprema Corte), legislativo (unicameral - cámara de diputados) y judicial.

Constituciones Centrales

Estas Constituciones establecen un sistema de gobierno republicano centralista. Concentran el poder y las
funciones político-administrativas en el Estado y el territorio se divide en departamentos con personas
gobernantes elegidas por el presidente.

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Constitución de 1836 o Constitución de las Siete Leyes Constitucionales

Se promulgó el 30 de diciembre de 1836, bajo el periodo del presidencial de José


Justo Corro, es la primera Constitución que crea una institución para la defensa de
los derechos fundamentales. Con estas bases constitucionales se pone fin al
federalismo e inicia la etapa centralista. Una característica destacable de esta
Constitución es que en la misma se reconocía la división de poderes pese a su
ideología conservadora, con el matiz que se contemplaba un Supremo Poder
Conservador encargado de supervisarlos.

Constitución de 1843 o Bases de Organización Política de la República


Mexicana

Con la emisión del Plan de Tacubaya en 1841, dejaron de aplicarse las Siete Leyes, se disolvió el Congreso y se
creó una Junta Nacional Legislativa que en 1843 a través de un nuevo instrumento jurídico denominado Bases
Orgánicas que anulaba el Supremo Poder Conservador y daba mayor peso al poder ejecutivo. Durante la
vigencia de esta Constitución, México pierde más de la mitad del territorio nacional.
Relación entre el Estado Mexicano y la Iglesia católica
Desde los primeros años del México independiente se hicieron diversos intentos para liberar al país del poder y
la influencia de las instituciones sociales coloniales que habían subyugado a la mayoría de los grupos
vulnerables en donde sólo unos cuantos eran privilegiados; “la independencia de México supuso problemas
eclesiásticos muy severos, la población era la misma, sus creencias religiosas las mismas y el clero el mismo;
sin embargo, el vínculo con la metrópoli se había cortado y, por ende el conducto que unía la Iglesia local con la
Santa Sede” (Soberanes, 1996: 131).

Entre los primeros logros para romper con el anterior régimen consistió en la promulgación de la Constitución
de 1824 “donde hay un desprendimiento total de todo tipo de legislación extranjera y el ejercicio absoluto de la
soberanía y de la autodeterminación [mexicana]” (Rabasa, 2002: 2); sin embargo, aún persistían estructuras
novohispanas, una de ellas era la sociedad estamental, integrada por cuerpos privilegiados que poseían fueros,
es decir, concesiones que entregaba el rey a sus súbditos para que éstos se organizaran social y
económicamente. Éstos eran, fundamentalmente, el militar y el eclesiástico.

Es destacada la intervención en el escenario político de Valentín Gómez Farías, quien fue uno de los
personajes que concientizó sobre la necesidad de reformar dichas estructuras coloniales; pensador liberal,
conocido como el “patriarca del liberalismo y precursor de la Reforma, ya que consideraba que para alcanzar el
progreso del país era necesario que el gobierno estuviera libre de la influencia del clero y de los elementos
conservadores” (Miranda, 2005: 112).

En congruencia con su ideología para lograr tal independencia interna, en 1833, al asumir la presidencia de
México, Gómez Farías expidió una serie de leyes destinadas a destruir los privilegios del clero y
subordinarlo al poder del Estado. Algunas de estas reformas fueron (López, 2003: 79 y Brom, 2004: 168):
Las reformas fueron consideradas como un agravio por el grupo conservador integrado por hacendados,
militares y eclesiásticos, por lo que el problema de la disyuntiva entre federalistas y centralistas se complicó
enormemente durante la segunda mitad del siglo XIX, debido a que los federalistas se convertirían
en liberales y los centralistas en conservadores, defendiendo ideologías políticas contrarias, que rebasaron en
mucho una simple cuestión organizativa, ya que ahora resultaba necesario decidir sobre la relación entre el
Estado y la Iglesia.

Es importante señalar que las corrientes liberales y conservadoras “se nutrían forzosamente en los
correspondientes liberalismo y conservadurismo internacionales, México no innovó particularmente en esta
materia ya que los grandes autores europeos y norteamericanos fueron la fuente de inspiración” (Soberanes,
1996: 138).

Durante el Regio Patronato, el papa otorgaba ciertos beneficios a la corona de Castilla para intervenir en
asuntos de la Iglesia, lo que vinculó asuntos de Estado con eclesiásticos.

Por ejemplo...
La Corona tenía el control sobre el cobro de los diezmos de la Iglesia y la decisión sobre el establecimiento o
no de nuevas diócesis en la Nueva España. En tanto, la Iglesia tenía a su cargo la educación, el registro civil y
los cementerios.
Dicha institución en la Nueva España estaba a cargo del virrey, presidentes, oidores y gobernadores, ahora bien,
al obtener la independencia de España, surge un serio dilema: ¿Qué sucedería con el Regio Patronato?, ¿Qué
autoridades tomarían el control de esta institución? ¿El Estado mexicano o el monarca español?

Reivindicación del patronato

De acuerdo con Cruz Barney, en los primeros momentos de México independiente se generaron dos posturas
en el territorio nacional: una a favor de que siguiera el Regio Patronato, pero ahora subordinado al poder del
Estado, y otra, de su extinción. En tanto el monarca español insistía en que el Patronato le correspondía a la
corona. Esta situación es aprovechada por el papa para declarar extinto el Patronato y liberar a la Iglesia católica
del control estatal (2007: 578-579).

Los partidarios a favor de que permaneciera, negociaron con el papa Gregorio XVI para que otorgara el
Patronato al Estado; sin embargo, esta situación no se logró y comenzó una intensa actividad legislativa
durante los gobiernos de corte liberal con el fin de separar la Iglesia católica de asuntos del Estado, tal es el
caso del gobierno de Gómez Farías, visto anteriormente.

Sin embargo, al caer su gobierno, toma el poder el partido conservador con el gobierno de Santa Anna y con
la promulgación de la Constitución de las Siete Leyes Constitucionales en 1836, la Santa Sede reconoce la
independencia de México y se restablece el Patronato.

Separación de jurisdicciones entre ambas potestades

Después de asumir 11 veces el poder, el gobierno de Santa Anna, es derrocado en el año de 1854 con el Plan
de Ayutla del general Juan Álvarez. Con este hecho asume el poder el partido liberal y se retoma la idea de
reforma de Gómez Farías, generando un ambiente de gran tensión entre el partido liberal y conservador lo que
ocasiona la guerra civil conocida como guerra de Reforma.

Al caer el gobierno de Santa Anna, asume la presidencia Juan Álvarez, quien, después de un breve gobierno
renuncia y es sustituido por Ignacio Comonfort, el cual bajo la premisa que México requería una reforma
radical de sus ordenamientos jurídicos orientados a cimentar una verdadera transformación de la sociedad tanto
en el ámbito político y económico organizó un nuevo gabinete integrado por Guillermo Prieto, Melchor
Ocampo, Ponciano Arriaga, Miguel Lerdo de Tejada y Benito Juárez, personajes que promulgaron una
serie de leyes encaminadas a separar la Iglesia de los asuntos del Estado. Entre las leyes más representativas
están (Cruz, 2004: 581):

Pulse en las áreas que se marcan como sensibles para desplegar la


información.

Ley Juárez 1855

 Elaborada por Benito Juárez.


 Eliminó el fuero eclesiástico en asuntos civiles y lo hizo opcional en materia penal.

Ley Lerdo 1856

 Elaborada por Lerdo de Tejada.


 Trata sobre la desamortización de los bienes del clero.
 La Iglesia debía vender sus propiedades y las tierras comunales de
las personas indígenas tenían que ser repartidas entre los integrantes
de la población.

Ley Ocampo 1856

 Elaborada por Melchor Ocampo.


 Eliminó el derecho de voto al clero.

Ley Iglesias 1857

 Elaborada por Ignacio Comonfort.


 Prohibió a la Iglesia el cobro de derechos a las personas de bajos
recursos para la administración de sacramentos.
Se critica a la Ley Lerdo debido a que durante su ejecución, “la falta de fondos por parte de los campesinos, y
su miedo a la excomunión, explica que esta Ley haya acentuado la tendencia hacia el latifundismo, destrozando,
al mismo tiempo, la propiedad comunal de cierto grupo de indios” (Margadant, 2001: 174).

Durante la presidencia de Comonfort adicionalmente se emitieron otros ordenamientos reformistas, destacando


el relativo al derecho de la libertad de expresión escrita en tanto no se contraviniera la moral y libertad.

Después de la promulgación de estas leyes, Comonfort convocó nuevamente al Congreso Constituyente para
elaborar una nueva Constitución, la cual se promulga el 5 de febrero de 1857.

Las Leyes de Reforma

Como hemos visto, antes de entrar en vigor la Constitución de 1857, se elaboraron diversas leyes importantes
para reformar la relación entre el Estado y la Iglesia. Durante la guerra de Reforma se emitieron
otros ordenamientos legislativos que consagraron definitivamente la formación de un gobierno republicano,
federal, representativo y laico, entre ellas destacan (López, 2003: 87-89):

Pulse en las áreas que se marcan como sensibles para desplegar la información.

1859

12 de julio

 Ley de Nacionalización de los Bienes Eclesiásticos. Señala que todos los bienes del clero regular o
secular pasan al dominio del Estado.

23 julio

 Ley del Matrimonio Civil.

28 de julio

 Ley Orgánica del Registro Civil.


 Ley sobre el Estado Civil de las personas.

31 de julio

 Decreto por el cual cesa toda intervención del clero en los cementerios y camposantos.
1860

4 de diciembre

 Ley sobre Libertad de Cultos.

1861

2 de febrero

 Decreto de gobierno que seculariza los hospitales y establecimientos de beneficencia.

1863

26 de febrero

 Decreto del gobierno que extingue en toda la República las comunidades de señoras religiosas.

Para saber más...


Le invito a consultar el video del INEHRM Leyes de Reforma e identifique en qué consistieron los
ordenamientos legislativos antes mencionados.

La Constitución de 1856 y las leyes de Reforma, previas y posteriores a su promulgación, permiten construir un
Estado moderno, al liberarlo de la autoridad de la Iglesia y romper con la sociedad estamental heredada de la
época colonial. Sin embargo, las consecuencias del liberalismo también trajeron consigo nuevos problemas y
dificultades para el país, tales como el despojo de tierras comunales de las personas indígenas, un segundo
imperio en México y la formación de latifundios civiles durante la época porfiriana.

La Constitución de 1857 y la Constitucionalización de las Leyes de Reforma

Entre las características más sobresalientes de la Constitución de 1857 fue el pilar para la consolidación de la
república federal en México; se menciona que fue la primera Constitución mexicana en incluir un capítulo
específicamente dedicado a los derechos individuales (hoy derechos fundamentales); además que confirmaba
los siguientes puntos (López, 2003: 86):
Estas medidas provocaron el descontento del grupo conservador y se proclamaron en contra de la
Constitución de 1857 con el Plan de Tacubaya, del general Felix María Zuloaga, en diciembre de 1857,
apoyado por Juan José Baz y el mismo presidente Comonfort.

Este pronunciamiento cancelaba la Constitución de 1857 y planteaba convocar un nuevo Congreso


Constituyente, en un plazo de tres meses. En lo esencial manifestaba los siguientes puntos (Pérez, 2008: 511):

 Cesa en su vigencia la Constitución porque no satisface las necesidades del país.


 Comonfort continuará en el cargo del presidente con facultades omnímodas.
 A los tres meses, se convocará a un nuevo Congreso Constituyente.
 Se promulgará una ley para la elección de presidente de la República.
 Mientras tanto, habrá un Consejo de Gobierno.

El Plan se acompañaba de una proclama que condenaba la Constitución de 1857 y mencionaba que debía
cancelarse porque agitaba las conciencias y turbaba la tranquilidad de las familias.

En este contexto, Comonfort es destituido de la presidencia y asume el cargo Benito Juárez. Paralelamente, el
grupo conservador designó a Félix Zuloaga presidente de la República, con lo cual hubo dos presidentes: uno
liberal, acorde con la Constitución y el otro conservador, impuesto por el golpe de Estado, creando las
condiciones necesarias para la lucha entre ambos bandos (Soberanes, 2009: 174), conocida como guerra de
Reforma o guerra de los Tres Años (1858 a 1861).
Presidente del grupo liberal presidente del grupo conservador

El segundo Imperio Mexicano


Al finalizar la guerra de Reforma ganó el partido liberal y Juárez restableció su gobierno en la capital del país,
el 11 de enero de 1861; posteriormente convocó a elecciones y resultó electo para el periodo presidencial
1861-1865.

Durante este período Juárez tuvo que enfrentar una severa escasez de recursos que le eran indispensables para
cubrir el gasto público, pagar la deuda pública, así como terminar con los movimientos reaccionarios; esta
escasez originada por la guerra civil y ante la imposibilidad de vender los bienes del clero confiscados generó
que recibiera un país marcado por el desorden y la pobreza.

Este panorama lo obligó a emitir en julio de 1861 un decreto a través del cual suspendía el pago de la deuda
internacional por un lapso de dos años, lo que propició que Francia, España e Inglaterra amenazaran con
intervenir militarmente al país, si bien, la cuantía de la deuda no era tan grande para motivar la intervención,
estos países buscaban mantener influencia política y económica, expandir su territorio, o en el caso de España,
recuperar lo perdido.

Los conservadores, ante su fracaso en la guerra de Reforma, aprovecharon la intervención francesa de


1862 para imponer en México un gobierno netamente conservador, de carácter monárquico, y con ello
recuperar el poder.
El grupo conservador negoció con el emperador Napoleón III, asegurando su apoyo, así como la del clero
mientras durara la intervención francesa, y enviaron una comisión a Trieste (ciudad situada en el norte de
Italia), encabezado por José María Gutiérrez de Estada, Miguel Miramón y Almonte, para convencer al
archiduque Fernando Maximiliano de Habsburgo de que aceptara el trono de México.

Maximiliano, después de exigir varias condiciones, entre ellas el deseo expreso y la comprobación de que el
pueblo mexicano lo requería, aceptó, en su palacio de Miramar (Trieste), el trono de México y firmó
los Tratados de Miramar, dando inicio al segundo imperio mexicano.

Pulse sobre la imagen para revisar los artículos del Tratado.

Organización

Maximiliano al llegar a México, en su gobierno desarrolló una política afín a la del partido liberal y al
contenido de las Leyes de Reforma, estrategia discorde con la posición de la clase conservadora y del clero.

En efecto, desde un principio Maximiliano con la finalidad de legitimar y consolidar su imperio realizó acciones
tendentes a lograr la conciliación de los partidos liberales y conservadores, lo que originó el descontento de
estos últimos. “Maximiliano, hombre de muy buena voluntad hacia México, pronto se encontró aislado: su
negativa para revocar la legislación juarista lo hizo sospechoso a los ojos de los conservadores” (Margadant,
2001: 179).

La cercanía del emperador con liberales mexicanos hizo que tomara decisiones que no fueron del agrado del
clero y que conllevó a que se agravaran las relaciones de México con el Vaticano. Entre las acciones que realizó
fueron las siguientes:
Aunado a la resistencia que comenzó a tener por realizar acciones de ideología liberal la situación de su
gobierno se complicó con la precaria economía del país.

Documentos fundacionales y legales

La política liberal que permeó el imperio de Maximiliano queda de manifiesto en las siguientes acciones (Pérez,
2008: 521 y 522 y Margadant, 2001: 180 y 181):

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1. Promulgó el Estatuto Provisional del Imperio Mexicano.

2. Estableció el respeto a las Leyes de Reforma: desamortización y nacionalización de los bienes del clero, así como la
Ley de Cementerios y la del Registro Civil.

3. Ratificó la separación entre el Estado y la Iglesia.


4. Expidió un decreto de libertad de imprenta.

5. En materia laboral, dictó leyes para mejorar la situación de trabajo agrícola de las personas indígenas, entre
ellas:

 La abolición del encasillamiento, con lo que daba libertad a los peones de abandonar su trabajo, aunque
tuvieran deudas con el hacendado.
 Limitó a 10 horas la jornada laboral.
 Eliminó los castigos corporales.
 Obligó a los patrones a proporcionar servicios médicos y escuelas gratuitas para los jornaleros.
 Suprimió las tiendas de raya y el pago en especie

6. En materia agraria, legisló la dotación de tierras baldías a los indígenas, dando preferencia a los pobres, casados y con
familia.

7. En 1866, elaboró una ley, redactada en español y en náhuatl, que previó la creación de terrenos comunales para cada
población (los fundos legales y los ejidos de los pueblos).

8. Introdujo la costumbre del reparto de aguinaldos a los trabajadores.

9. En materia mercantil, se restableció el Código de Comercio de Teodosio Lares.


10. Estableció el Banco de México como banco emisor.

11. Se crearon:

 Museo Nacional de Historia Natural.


 Ministerios de Justicia y de Instrucción Pública y de Cultos.
 Academia Imperial de Ciencias y Letras.
 Consejo de Beneficencia, presidido por la emperatriz Carlota.
 Junta Protectora de las Clases Menesterosas.
 Se apoyó el trabajo de las hermanas de la caridad de San Vicente de Paul en los hospitales.

Es importante destacar que el principal ordenamiento lo fue el Estatuto, “la inestabilidad política y el estado de
guerra impidieron que el imperio se diera una Constitución. Sin embargo, el gobierno funcionó, en cuanto a su
gobierno, con el Estatuto Provisional del Imperio Mexicano que, aunque formalmente no era una constitución,
si lo era de manera material, en cuanto a su contenido es una ley fundamental” (De la Torre, 2015: 231).

Después de tres años de ejercicio de gobierno, Maximiliano no logró afianzar la monarquía en México, acosado
por las guerrillas y el abandono de las tropas francesas, es derrocado y fusilado por el ejército liderado por
Benito Juárez, el 19 de junio de 1867, en el Cerro de las Campanas, frente la ciudad de Querétaro. Con este
acontecimiento concluye el segundo imperio Mexicano.

Para saber más...


Le invito a ver la película Maximiliano de México. Sueños de poder dirigida por Franz Leopold Schmeizer,
transmitida por TeveUNAM para saber más sobre el segundo imperio mexicano, que a pesar de haber sido un
periodo histórico corto, tiene gran relevancia para la conformación de nuestro México actual.

El Derecho de la restauración: de la República Federal hasta el Porfiriato


Tras el derrocamiento del imperio de Maximiliano, el 15 de julio de 1867, el presidente Juárez entró a la Ciudad
de México e instaló de nuevo el régimen republicano, pronunciando su famosa frase:
Con este hecho inició el periodo conocido como la república restaurada, de 1867 a 1876, durante este periodo los
presidentes fueron Benito Juárez (1867-1872) y Sebastián Lerdo de Tejada (1872-1876), y en el que se realizaron las
siguientes acciones:

Al concluir el periodo presidencial en 1871 se presentaron tres candidatos: nuevamente Benito Juárez, Sebastián Lerdo
de Tejada y Porfirio Díaz. Luego de elecciones con altas sospechas de fraude electoral, Juárez se reelige y Díaz
proclamó el Plan de la Noria, con el que desconoce a Juárez y lo acusa de ser reeleccionista, además de violar el espíritu
de la Constitución.
Para saber más...
Publicado en noviembre de 1871, el Plan de la Noria proponía una serie de reformas políticas y sociales.
Concluía diciendo:

“[…] que ningún ciudadano se imponga y perpetúe en el ejercicio del poder y ésta será la última revolución.”

Pulse aquí para consultar el pronunciamiento.

Una nueva revolución sacude al país, pero en julio de 1872 Juárez muere y la revuelta, prácticamente es
derrotada, por lo que asume la presidencia Sebastián Lerdo de Tejada, en cuya administración hubo dos series
de reformas importantes a la Constitución (Soberanes, 2010: 178-179):

 Primera reforma. Eleva a rango constitucional las Leyes de Reforma.


 Segunda reforma. Se restablece el Senado.

Ambas reformas forman parte de un plan estratégico para afianzar la paz pública y consolidar las instituciones
de gobierno, estableciendo un equilibrio de los poderes supremos. En el aspecto económico, durante el
gobierno de Lerdo, se consiguió organizar un sistema fiscal a nivel nacional que permitió el pago uniforme de
impuestos; se normalizó la contabilidad fiscal y se inauguró la red ferroviaria México-Veracruz, en 1873.

Las reformas y la derrota del imperio no resolvieron los problemas de México, la discriminación, la distribución
injusta de la riqueza y la miseria de amplios sectores sociales será una realidad presente durante el siguiente
gobierno, a cargo de Porfirio Díaz; aún y cuando en dicho periodo fue posible lograr un tiempo de paz, orden y
progreso aparente.

Al finalizar el periodo presidencial de Sebastián Lerdo de Tejada, sus partidarios iniciaron trabajos para
reelegirlo, lo cual produjo enorme descontento en el país, dando inicio a un nuevo movimiento armado, liderado
por Porfirio Díaz con el Plan de Tuxtepec.

Publicado en enero de 1876, el Plan de Tuxtepec admitía como leyes supremas la Constitución de 1857 y
las Leyes de Reforma; pero se suprimía el Senado, se proclamaba el principio de no reelección y se
desconocía al gobierno de Lerdo (Miranda, 2005: 235).

Porfirio Díaz triunfó en la rebelión, convocó a elecciones y asumió la presidencia, dando inicio el periodo
conocido como Porfiriato.

A pesar de los lemas de “Sufragio efectivo y no reelección”, que figuran en el Plan de Tuxtepec, Porfirio Díaz
logró reelegirse en repetidas ocasiones, manteniéndose en el poder desde 1876 hasta 1910, con una interrupción
de 1880 a 1884, periodo en el que gobernó Manuel González, compadre de Díaz. Ahora bien, ¿qué aspectos
caracterizan a esta época? (Rabasa, 2002: 82):

Se centralizó el poder político en manos del ejecutivo y se disminuyó la fuerza de los estados.
Cientificismo

La idea política del liberalismo se sustituyó por el positivismo, formando el grupo de los “científicos”, llamados
así porque afirmaban gobernar según las reglas de la ciencia, con la finalidad de lograr alcanzar el desarrollo
científico y tecnológico de los países europeos.

Hacendismo

Una consecuencia adversa de las Leyes de Reforma, en especial la Ley Lerdo, propició el
despojo de tierras a las personas indígenas favoreciendo la concentración de tierras en manos de
pocos terratenientes (latifundios).

Peonismo

Se reclutaban a los campesinos para trabajar en las haciendas y algunos grupos indígenas que
se mostraban particularmente rebeldes, como los yaquis y los mayas, fueron desterrados de
sus lugares de origen y obligados a vivir en lugares como Valle Nacional, el Valle del Río
Yaqui o Yucatán, en condiciones de miseria y esclavitud.

Extranjerismo

Se favoreció la inversión extranjera. La mayor parte del capital invertido, sobre todo en la
banca, comercio, textiles y minería es de origen francés, en tanto los ferrocarriles, la minería
y el petróleo son de gran importancia las inversiones inglesas, estadounidenses, alemanas y
españolas.

Política "pan y palo"

Se logró la conciliación con grupos adversarios de naturaleza conservadora lo que permitió


mantener la estabilidad del gobierno mediante una política tolerante a la Iglesia, pero
represora a las sublevaciones populares.

Existió una intensa actividad artística y científica. Se crearon con base en el positivismo escuelas e institutos de
investigación. Se fundó la Universidad Nacional. No obstante dichas actividades, el país continuó
sumergido en un alto nivel de analfabetismo.

En 1904 se reformó la Constitución de 1857, retirando al presidente de la Suprema


Corte de Justicia la facultad de sustituir al presidente de la República y se modifica la duración del
periodo presidencial de cuatro a seis años.
Se construyeron 5 mil kilómetros de vías férreas.

Se fundó el Banco de México como único autorizado para emitir moneda.

Como puede observar, el Porfiriato fue un periodo lleno de contradicciones, en donde si bien se considera como
un periodo en el que prevaleció la paz social y abrió las puertas al progreso ya que se experimentaron mejores
condiciones políticas y económicas; al reestablecerse las relaciones con la Iglesia y el extranjero por lo que se
atrajo inversión de diversos países que impulsó la industria del país. En contraposición, el Porfiriato también se
caracterizó por mantener una realidad social marcada por la injusticia, explotación y pobreza de la clase
campesina y obrera expresada en jornadas laborales mayores a 12 horas, bajos salarios, explotación infantil,
analfabetismo, así como la ausencia de leyes que protegieran los derechos laborales, “la consideración del
trabajo como mercancía, sujeta a la ley de la oferta y la demanda. No existía la contratación colectiva de trabajo
y estaban prohibidas las huelgas” (De la Torre, 2015: 244); factores que impulsaron el movimiento
revolucionario de 1910 y dieron fin a este periodo de la historia de México.

Cabe mencionar que durante el siglo XIX las luchas y enfrentamientos fueron entre los grupos de la clase media
y alta, y en el siguiente periodo se verá una lucha de sectores pobres: las clases obrera y campesina, en busca de
derechos sociales y laborales.

Para saber más...


Para identificar otras características y acontecimiento del Porfiriato, le invito a consultar el video Porfirio
Díaz producido por la Filmoteca de la UNAM.

La sustitución del orden jurídico Colonial y la expedición de cuerpos jurídicos


nacionales
Para una efectiva transición del orden jurídico colonial al México independiente resultaba necesario que el
mismo fuera congruente con la nueva situación económica, política y social del país, la sustitución de
ordenamientos debía de llevarse a cabo por tres razones fundamentales (Guerrero, 2018: 153):

1. El derecho vigente en México en el momento de la independencia y aún después era el castellano-indiano y había
sido dictado por el rey.
2. Una gran parte de ese derecho ya no correspondía a las ideas de un gran número de mexicanos.
3. Debido a que la realidad se fue modificando a ritmo acelerado.

Es importante que identifique cómo se define a la codificación del derecho, para ello revise el video del Dr.
Óscar Cruz Barney, La codificación del derecho. Preste atención en los siguientes puntos:

1. Origen del movimiento codificador.


2. Objetivos y causas de la codificación del derecho.
3. Consecuencias del movimiento.
4. Antecedentes del movimiento codificador mexicano.
5. Significado e importancia de la codificación del derecho en México.

Definamos
Codificación
Movimiento de regulación normativa que inicia en el centro de Europa durante el siglo XVIII, con la intención
de reunir en un solo cuerpo legal (código) un conjunto de disposiciones con una temática definida y de acuerdo
con un plan metódico por materias (civil, penal y mercantil) (Pérez, 2008: 525).

Actualmente se define como “una ley que regula toda una rama del derecho, de manera homogénea, sistemática
y articulada, con un lenguaje breve y preciso” (Soberanes, 2010: 187), por ejemplo:

Pulse en cada concepto para desplegar el contenido. Al pulsar en otro, el desplegado volverá a su posición
inicial.

Código Civil
Contiene las leyes que regulan las relaciones jurídicas de las personas, referentes a temas como los
bienes, contratos, obligaciones y sucesiones.

Código Penal
Conjunto de normas que determinan el régimen jurídico aplicable en la administración de justicia en lo
criminal, es decir, definen qué actos son considerados delitos y la forma de sanción.

Código Mercantil
Cuerpo de leyes que regulan las relaciones y actividades comerciales de un país.

El proceso codificador civil, penal y mercantil

El proceso codificador en México inicia inmediatamente después del movimiento de Independencia con la
finalidad de hacer más rápida, enérgica y eficaz la acción de la justicia en el país. El origen de este movimiento
puede identificarse dentro de la Constitución de Cádiz de 1812, en su artículo 258, que plasma la tendencia
codificadora que había invadido Europa a finales del siglo XVIII y “establece la codificación como modo de
formulación del derecho” (Soberanes, 2010: 192). Es por ello que en 1822 se nombra una comisión para
redactar el código civil sin obtener resultados, es hasta 1827 que se promulga el Código Civil de Oaxaca,
primer código del país y de Iberoamérica.

Sin embargo, a causa de los diversos movimientos armados en el país entre liberales y conservadores,
desestabiliza el proceso codificador, y es hasta 1857 cuando el presidente Benito Juárez asigna a Justo Sierra
O´Reilly para la revisión y elaboración del Código Civil.
Este movimiento toma su “perfil definitivo con la expedición del Código Civil para el Distrito y Territorios
Federales de 1870 y concluye en la primera mitad del siglo XX, al dictarse los códigos federales de
procedimientos en materia civil y penal” (Cruz, 2004: 45).

En materia penal en 1872 se emitió el Código Penal para el Distrito y Territorios Federales y Federal.

Por lo que hace a la legislación mercantil, fue hasta el año de 1883 que se separó de la de carácter civil.
El Código de Comercio de México de 1854, conocido como Código Lares estuvo vigente en varios estados a
mediados del siglo XIX. En 1884 se emitió un Código de Comercio para todo el país y posteriormente se emitió
otro en 1889.

¿Sabía que…?
La palabra código proviene del término latín codex, que significa “tronco del árbol o unión de varias tablas”. En
el siglo XIX, el primer gran código de derecho privado es el Código Civil francés o Code Napoleón, de 1804,
debido a que plasma las nuevas ideas de la ilustración referentes a la libertad y a los derechos del hombre
(Soberanes, 2010: 190).
Este cuerpo normativo fue la inspiración para elaborar el primer Código Civil en México.

La legislación procesal y la organización del Poder Judicial

Durante el Porfiriato se emitieron dos códigos de procedimientos civiles en 1870 y 1884 y; dos códigos de
procedimientos penales en 1880 y 1894. Asimismo, una de las principales aportaciones fue la emisión en 1898
de una Ley de lo Contencioso Administrativo.

La impartición de la justicia era indispensable para el régimen Porfirista, ya que era la herramienta que le
permitía mantener la tranquilidad y el orden social a través de las instituciones judiciales.

El poder judicial fungió como un órgano que en la coyuntura política en la que se encontraba, esto es, bajo un
régimen dictatorial, se empleaba como un aparato coactivo del Estado para combatir a los detractores del
régimen político, garantizando con ello la estabilidad del país mediante la aplicación de la normativa civil y
penal.

El poder judicial estaba integrado por el Supremo Tribunal de Justicia del Estado, el cual se conformaba por
ministros, un fiscal propietario y otros tantos suplentes, mismos que eran electos popularmente por un periodo
de cuatro años pudiendo ser reelectos.

“En cuanto a la organización judicial, mencionemos aquí también la reglamentación de los juzgados (federales)
de Distrito y de los Tribunales de Circuito en 1896” (Margadant, 2001: 193).

El Poder Judicial siempre estuvo supeditado al poder ejecutivo.

Legislación administrativa

La administración pública surgió a partir de la estabilidad que se dio durante la dictadura de Porfirio Díaz,
“no fue sino hasta el triunfo de las armas republicanas en 1867, gracias a la relativa paz que se comenzó a vivir,
la administración pública comenzó a desarrollarse, particularmente de desde la segunda y más larga gestión del
general Porfirio Díaz a partir de 1884” (Soberanes, 1996: 178).

Entre las disposiciones normativas más emblemáticas que surgieron en dicho periodo fueron las siguientes:
La literatura jurídica mexicana

Tal y como estudiamos en el punto anterior, durante el periodo del Porfiriato hubo una prolífica emisión de
diversos ordenamientos jurídicos y, paralelamente también existió una producción de literatura
jurídica relevante destacando los siguientes autores:

Pulse en cada una de las tarjetas para visualizar la información

José María Lozano

 Código Civil del Distrito Federal ordenado en forma de diccionario.


 Derecho hipotecario comparado.
 Tratado de los derechos del hombre.

Ignacio L. Vallarta

 El juicio de Amparo y el Writ of Habeas Corpus: ensayo crítico comparativo sobre esos recursos constitucionales.

Emilio Rabasa

 El artículo 14 y el juicio Constitucional.


 La Constitución y la dictadura.
 La evolución histórica en México.

Jacinto Pallares

 El Poder Judicial.
 Derecho Mercantil.
 Contratos solemnes.
 Naturaleza jurídica del cheque mexicano.
 La pena de muerte.
 El doctorado en derecho.
Juan A. Mateos Lozada

 El Cerro de las Campanas: memorias de un guerrillero.


 La majestad caída; o la revolución mexicana.
 Historia parlamentaria de México.

Pablo y Miguel Macedo

Miguel publicó La enseñanza normal y Hojas de Higuera; y junto con su hermano Pablo coadyuvaron en la fundación de
la Escuela Libre de Derecho.

El Amparo Mexicano en el Porfiriato


Como se ha señalado durante el desarrollo de la presente unidad, es a partir de la consumación de la
Independencia que México comienza a emitir una serie de ordenamientos jurídicos congruentes con la nueva
nación que se estaba formando; proceso que fue sumamente complejo debido a las diferentes corrientes
ideológicas antagónicas que prevalecieron durante el siglo XIX.

Por lo que en el periodo del Porfiriato al haber estabilidad política y “paz” en el país, permitió el desarrollo de
diversa legislación: las codificaciones civiles, penales y mercantiles que se precisaron en los puntos anteriores,
la legislación en materia administrativa, así como la regulación de una de las principales figuras jurídicas que
rigen nuestro derecho en materia de constitucionalidad: el amparo.

Importante
Antes de la existencia del amparo como ahora lo conocemos, en diversos ordenamientos se contemplaba un
mecanismo de control de constitucionalidad, en donde dicha función recaía generalmente la Suprema Corte,
entre ellos destacan:
Elementos Constitucionales de 1811.
Constitución de 1824.
Siete Leyes Constitucionales de 1836.
Constitución de Yucatán de 1841. (Es de destacarse que Mariano Otero fue quien propuso que la figura del
amparo prevista en este ordenamiento se aplicara en toda la nación)

Es hasta 1847 que en documento denominado Acta Constitutiva y de Reformas se prevé la figura del juicio
de amparo, en donde los tribunales de la federación son los encargados de ejercer el control de la
constitucionalidad, antecedente que sirvió de base para el establecimiento de los artículos 101 y 102 de
la Constitución Política de 1857.

Pulse sobre la imagen para revisar los artículos del Acta Constitutiva y de Reformas.
“Mediante la tercera ley de amparo del 14 de diciembre de 1883 que ya admite amparo contra sentencias
civiles. Desde el 6 de octubre de 1897, esta materia queda absorbida por el Código de procedimientos civiles
federales” (Margadant, 2001: 193).

En un principio, el juicio de amparo sólo procedía en contra de los actos emitidos por los poderes ejecutivo y
legislativo, fue hasta el año 1908 que se incluyeron los actos del poder judicial.

Hasta el año de 1919 se legisló el amparo como una materia a parte a través de la emisión de la Ley
Reglamentaria de los artículos 103 y 107 y en 1939 la Ley de Amparo.

Pulse en Fuentes de consulta para visualizar la información.

Mi experiencia de aprendizaje
Ordenamientos jurídicos entre el liberalismo y el centralismo
Cuadro comparativo y reflexión
Como se revisó, el siglo XIX para el Derecho Mexicano fue un periodo fructífero en el que con base en la
ideología de la Ilustración, la influencia de Estados Unidos de América y la Revolución Francesa, se emitieron
diversos ordenamientos jurídicos constitucionales orientados a imponer un modelo económico y político para el
gobierno del México independiente que, aún y cuando estuvo permeado por corrientes ideológicas antagónicas,
finalmente trajeron como resultado un nuevo orden jurídico acorde a la vida política del país escindiéndose del
pasado colonial.

En esta actividad identificará las principales características de las Constituciones elaboradas en México
durante el siglo XIX y debatirá sobre la importancia que tuvieron para la consolidación del derecho nacional
mexicano. Para realizarla, consulte detalladamente cada uno de los ordenamientos jurídicos revisados
anteriormente:

 Constitución de 1824.
 Constitución de las Siete Leyes, 1836.
 Bases Orgánicas, 1843.
 Constitución de 1857.

Posteriormente, descargue el cuadro comparativo Constituciones y complete la información solicitada.

Al concluir, responda la siguiente pregunta:

Reflexión
¿Cuáles considera que fueron los aportes del liberalismo y el centralismo para la consolidación del derecho
nacional?

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