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Fundamentos Teórico-Prácticos
de la Enfermería de
Emergencias
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2 7A
URGENCIAS, EMERGENCIAS
64 2
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Y CUIDADOS CRÍTICOS I
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Fundamentos Teórico-Prácticos
de la Enfermería de
Emergencias
URGENCIAS, EMERGENCIAS
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Y CUIDADOS CRÍTICOS I
2 7 A
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8
Colección Líneas de Especialización para Enfermería
NOTA
Las ciencias de la salud se encuentran en constante desarrollo. Conforme surjan nuevos conocimientos,
se requerirá incorporar estos al proceso enfermero. Los editores y el (los) autor(es) se han esforzado
para que los cuidados e indicaciones terapéuticas sean precisos y acordes con lo establecido en la fecha
de publicación. Sin embargo, ante los posibles errores humanos, cambios y desarrollo de los cuidados de
salud, ni los editores ni cualquier otra persona que haya participado en la preparación de la obra
garantizan que la información obtenida en ella sea precisa o completa; tampoco son responsables de
errores u omisiones, ni de los resultados que con dicha información se obtengan. Los editores no pueden
garantizar la exactitud de toda la información contenida en este libro referida a la aplicación de
técnicas, procedimientos o medicamentos. En cada caso individual el lector deberá verificar esta
información mediante la consulta de la literatura pertinente.
I XA
Enfermería), entidad distinguida con el Sello Europeo de Compromiso por la Excelencia 200+,
acreditado por el Club Gestión de Calidad, de acuerdo a los estándares del modelo de Excelencia
H
EFMQ (European Foundation for Quality Management).
2 7 A
FUDEN © 2015
64 2
Veneras, 9 - 28013 Madrid
www.fuden.es
d a a ,
r iz a R O I P :
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Segunda edición: Enero 2015
T O m,
a A S l .
Coordinador editorial: Álvaro Trampal Ramos
i co
c arg R G a
Diseño y Maquetación: David Borreguero Fuster
A m
Des @ g
Revisión Técnica: Maribel Morente Parra, Leticia Piney Diez de los Rios, Marcos Rojas Jiménez,
V 9 9
Manuel Camós Ejerque, Miguel Morejón de Gracia, Juan Manuel Lopez-Reina Roldan,
rg a s 9 5 .
María Torres de Sebastián, Álvaro Trampal Ramos
a v a 23 .
Ilustraciones: Karen Guzmán Reyes 1
Diseño de cubierta: Carmen Castillo Delgado
ah i x 7 . 2
8
ISBN13 de la línea: 978-84-92557-36-3
ISBN13 del libro: 978-84-16191-23-9
Depósito Legal: M-1141-2015
Todos los derechos reservados. Este libro o cualquiera de sus partes no podrán ser reproducidos ni archivados
en sistemas recuperables, ni transmitidos en ninguna forma o por ningún medio, ya sean mecánicos o
electrónicos, fotocopiadoras, grabaciones o cualquier otro sin el permiso previo de los titulares del Copyright.
Las fotografías han sido cedidas por los autores y se prohíbe la reproducción total o parcial de las mismas.
Agradecimientos
H I XA
2 7 A
A todos los familiares y seres queridos de los mismos
2
por haberles privado de su compañía.
64
d a a , A todos ellos,
r iz a R O I P :
a u to T O m , Gracias.
g a A S il . co
c ar R G m a
Des VA s@g . 9 9
a rg a 1 9 5
a v 23 .
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8
H I XA
2 7A
64 2
d a a ,
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a u to T O m,
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8
ÍNDICE DE AUTORES
Coordinador
Colaboradores
H I XA
María Ángeles Altea Cabezas
2 7 A
64 2
Diplomada en Enfermería. Especialista en Enfermería del Trabajo. Instructora
d a a
en Soporte Vital Avanzado y en Soporte Vital Avanzado al Trauma por el Plan
,
r i a R O I P :
Nacional de RCP, Sociedad Española de Medicina Intensiva, Crítica y Unidades
z
to O ,
Coronarias (SEMICYUC). Colaborador Docente de la Fundación IAVANTE.
a u T m
a A S il . c o
Empresa Pública de Emergencias Sanitarias, Consejería de Salud, Junta de
c a rg A R G m a
Andalucía. Servicio Provincial de Granada.
s V
DeElena Álvarez Borrajo gas@ 95.99 g
v a r Máster Universitario
3 .1 en Enfermería de Urgencias,
h
Emergencias,
a
Diplomada en Enfermería.
ixCatástrofes87 2
.2 Humanitaria, Universidad de Sevilla.
y Ayuda
a
Empresa Pública de Emergencias Sanitarias, Consejería de Salud, Junta de
Andalucía. Servicio Provincial de Sevilla.
Colaboradores
Colaboradores
H I XA
Diplomada en Enfermería. Máster Universitario en Enfermería de Urgencias,
Emergencias, Catástrofes y Ayuda Humanitaria. Instructora en Soporte Vital
7 A
Avanzado al Trauma por el Plan Nacional de RCP, Sociedad Española de
2
64 2
Medicina Intensiva, Crítica y Unidades Coronarias (SEMICYUC).
d a a
112 Emergencias Sanitarias de Extremadura, Servicio Extremeño de Salud.
,
Área de Plasencia.
r iz a R O I P :
Jaime Rodrígueza u to T O m ,
a Alarcón
A S il . c o
c a rg en Enfermería.
Diplomado
A R G m aen Enfermería de Urgencias,
Máster Universitario
s
De Emergencias, V
Catástrofes y Ayuda g
@Humanitaria, 9 9 Nacionalde deSevilla.
Universidad
a s
Instructor en Soporte VitalgAvanzado
rMedicina Intensiva, 9
al Trauma 5
por.el Plan RCP,
Sociedad Españolavdea 3 . 1
aEmpresa Pública.2de2Emergencias
Crítica y Unidades Coronarias
h
(SEMICYUC).
a i x 7 Provincial de Sevilla. Sanitarias, Consejería de
8Servicio
Salud, Junta de Andalucía. Vocal del Consejo
Español de Triage Prehospitalario (CETP).
Colaboradores
H I XA
Diplomada en Enfermería. Licenciada en Antropología Social y Cultural. Máster
Universitario en Gestión de Servicios Sanitarios, Escuela Nacional de Sanidad
7 A
(UCM). Instructora de Soporte Vital Básico y Avanzado por la American Heart
2
64 2
Association (AHA). Servicio de Atención Municipal de Urgencia y Rescate
d a a
(SAMUR-Protección Civil), Ayuntamiento de Madrid.
,
r iz a R O I P :
ut
Francisco Torres García o T O m ,
Diplomadoa en a A S . co
de SoporteilVital
c
pora rg HeartAAssociation
la American
Enfermería. Instructor
R G (AHA).m Servicio
Básico y Avanzado
a de Atención Municipal de
s
De Urgencia V @
y Rescate (SAMUR-Protección g 99 de Urgencias
Civil), Ayuntamiento de Madrid.
Vicepresidente 3º de la g
r a s
Sociedad Española9 .
de5Medicina y
av a
Emergencias (SEMES).
2 3 . 1
h i x . 2
a 87
PRÓLOGO DEL ÁREA
r g a 5 . en Enfermería, da
de Especialización
9
a v a
respuesta a las necesidades formativas
2 en
3 . 1
beneficio de la adquisición de
conocimientosh
a x
y icompetencias en .
7 2 ámbito, mediante un diseño curricular
este
8
con contenidos modulares de carácter enfermero. Una obra de cuidada edición
que se adentra en los conceptos y parámetros biomédicos sin soslayar la
atención holística del enfermo crítico.
El proporcionar cuidados de la más alta calidad, por parte de un enfermero
especializado en cuidados críticos y urgencias puede ser desafiante; debe
permanecer flexible y ser creativo, por lo tanto debe contar con bases técnicas
y conocimientos suficientes además de habilidades y la capacidad de pensar
críticamente. La atención enfermera al paciente en situación crítica debe
PRÓLOGO 13
responder a la metodología enfermera, realizando un ejercicio de pensamiento
crítico para valorar rápida y eficazmente al paciente según sus prioridades
asistenciales. Revisando siempre las últimas recomendaciones y protocolos
nacionales e internacionales, y las investigaciones enfermeras centradas en el
paciente crítico, debe asegurarse una Práctica Basada en la Evidencia que
ofrezca al paciente una atención de la más alta calidad y excelencia posible.
La Colección Líneas de Especialización en Enfermería de FUDEN es una
herramienta útil en la actualización de conceptos y en su caso, ayudar al
desarrollo de nuevas habilidades. Es para mí un honor el poder prologar esta
Área de Capacitación, que cuenta con los elementos necesarios para servir
de apoyo en nuestra práctica diaria.
FUNDAMENTOS TEÓRICO-PRÁCTICOS DE LA
ENFERMERÍA DE EMERGENCIAS
Aún a pesar del riesgo de caer en el tópico enfermero que supone remitirnos
a las aportaciones que Florence Nightingale haya podido hacer a esta disciplina,
amén de que pueda reconocérsele su actitud paradójica en el concepto
feminista, ya que elevó a la máxima categoría la imagen de la mujer enfermera,
H I XA
pero no la de la mujer médico; hay que reconocerla como la inspiradora de las
actuales unidades de Cuidados Críticos, gracias a la selección de los pacientes
en un nuevo orden organizativo. 2 7 A
Desde que en 1854, tras el estallido de laa guerra
2
64Franco-Rusa en Crimea,
ofreciera sus servicios como voluntaria,
a d aal secretario deOguerra
, británico,:tras
r iz
conocer las deficientes condiciones
t o sanitarias O
queR imperaban
, P
en elIHospital
de Scutari o Üsküdar a T
u(hoy parteAdeSEstambul, en.cTurquía),o m y viajara
acompañadarde
a a
g38 enfermerasRalGfrente de batalla, il
ahasta la haenfermería actual,
s c V A g m
Denerelación
son muchas las transformaciones
a
que
con los cuidados críticoss y@
el perfil enfermero
de urgencias.5 . 9 9 experimentado
PRÓLOGO 15
En dos semanas la señora de la lámpara o dama del candil, como la
denominaban los heridos hospitalizados, logró montar una cocina para preparar
la comida de 800 hombres; una lavandería donde se desinfectaba la ropa de
los pacientes, además de dotar a los heridos y enfermos con diez mil camisas
compradas con los donativos que conseguía, además de desarrollar la
estadística hospitalaria que tanto apoyo ofrece actualmente a cualquier estudio
de investigación que se precie.
El entorno de cuidados críticos y la atención que en él se presta, tal y
como hoy se entiende, podemos fecharlo en la década de los años 50, como
respuesta a las necesidades de soporte ventilatorio a las personas afectadas
por una epidemia de poliomielitis en algunos de los países europeos y Estados
Unidos, aunque concretamente en España no se crea la primera unidad hasta
1965, en la Fundación Jiménez Díaz de Madrid.
Desde entonces se ha producido un desarrollo vertiginoso, con una
excelente atención personalizada a los pacientes, una elevada implicación de
los profesionales en su autoformación, unos avances espectaculares de la
tecnología y un abordaje ético de las situaciones de crisis o de riesgo vital que
han conferido a estos servicios una identidad incuestionable en la carrera
profesional y la especialización. H I XA
2 7 A
2
Como muestra de la evolución que ha experimentado el conocimiento
64
d a
enfermero en este ámbito, surge la obra que hoy nos ofrece un equipo de
a ,
profesionales motivados por la vertiginosa transformación del Sistema de
r iz a R O I P :
a u to T O
Salud en general, y los cuidados críticos en particular, convertidos en un
m,
a A S il . o
Área de Capacitación del Programa de Formación de la Especialidad de
c
c a rg A R G m a
Cuidados Médico-Quirúrgicos, que podrá desarrollarse en breve, tras la
De s V g
entrada en vigor del Real Decreto 450/2005, de 22 de abril, sobre
@ 9 9
especialidades de Enfermería. a s 5
rga las futuras3.demandas.
9 de formación que la
v a 1
aplicación adeh
xa
Para poder dar respuesta
2 2 surge la Colección Líneas de
tali decreto desencadenará,
7 .
8
Especialización en Enfermería; ambicioso proyecto diseñado para garantizar
la calidad profesional con carácter clínico-asistencial en cada una de las
especialidades, a través de manuales de estudio y consulta, que podrán ser
adaptados a los programas formativos que se generen. En lo que concierne a
las Urgencias, Emergencias y Cuidados Críticos, esta serie estará compuesta
por seis ejemplares, de los que éste es el primero en publicarse, y que se
complementará con tres más, relacionados con los ámbitos de gestión, ético-
legislativo e investigador.
PRÓLOGO 17
H I XA
2 7A
64 2
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a A S il . co
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Des V @ g 9 9
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a v a 23 . 1
ah i x 7 . 2
8
PRESENTACIÓN DE LA OBRA
H I XA
La ampliación del catalogo de especialidades de Ciencias 7 deAla Salud con
las especialidades enfermeras ha dado respuesta 4 2
a las
2demandas sociales,
profesionales y académicas de diferentes a 6
áreas de conocimientos y
competencias. Este hecho no ha z a
sido el
a
dcaso de la Enfermería
O , de Urgencias,:
o r i
Emergencias y CuidadostCríticos. T O R , I P
a a u A S . c o m
a r g
Esta especialidad
R G
profesional tiene por fin il
último
a salvar vidas, asistir
esc quecríticamente VAenfermo m
al paciente
Deficaces satisfagan sus a s @gnecesita
ya que
demandas. .
respuestas precisas y
La atención
5 9 9 de urgencia y
a rg dinámico
emergencia supone un ejercicio
v 3 . de 9
1 toma de decisiones; así, la
i x
valoración y cuidados
h a enfermeros . 2 2
han de responder a una secuencia de
prioridadesa que garantice la8 7
satisfacción de las necesidades del paciente,
tanto biológicas como psicológicas y sociales, prestando una atención
integral y holística.
La formación avanzada se hace indispensable para alcanzar estos
objetivos. Los conocimientos de los fundamentos teórico-prácticos de la
Enfermería de Emergencias centran al profesional enfermero en el marco
de su actividad asistencial, definiendo y conceptualizando el mundo de las
emergencias, la estructura sanitaria necesaria para dar respuesta a las
PRESENTACIÓN DE LA OBRA 19
necesidades asistenciales del paciente con urgencia vital, sus orígenes y
fundamentos, y determinando su mapa de competencias y perfil profesional
en el ámbito nacional e internacional. Los capítulos 1 y 2 se centran en este
marco conceptual.
La Enfermería de Urgencias y Emergencias requiere del uso de la
metodología enfermera para ofrecer y garantizar la atención holística del
paciente crítico. El estudio y puesta en práctica del Proceso Enfermero debe
determinar el desarrollo futuro de esta especialidad profesional, siendo la
herramienta necesaria que pone de manifiesto la atención enfermera y que
proporcione la base para el desarrollo de la investigación enfermera en
urgencias y emergencias. La descripción y características de la metodología
se presentan en los capítulos 3 y 4.
La Enfermería de Urgencias y Emergencias atiende a pacientes tanto a
nivel hospitalario como extrahospitalario. Las características del acceso del
paciente a cada uno de estos contextos precisan del estudio de la organización
y metodología de trabajo de la Recepción, Acogida y Clasificación de pacientes
en las urgencias hospitalarias y de la asistencia en el traslado de pacientes
críticos; lo que es objeto de los capítulos 5 y 6.
I X A
La valoración y los cuidados enfermeros del paciente crítico A H
priorizarán
7
alteraciones que supongan un riesgo vital. a Los6 4227, y8 resuelvan
las necesidades biológicas de manera que se identifiquen
capítulos
las
y 9 tratan la
atención del paciente sometido d aaoxigenoterapia,, fluidoterapia y
r iz a
farmacoterapia, ya que es fundamental para laO R O de su Isalud,
recuperación P : así
a u o
t de losSregistros
como el manejo e interpretación o m ,
T electrocardiográficos.
a
rg de Emergencias A i l . c
G se formarámy aprofundizará en el estudio
c a
La Enfermería
s crítico, los A R
V cuidados sbasados gen la evidencia
epaciente
Ddel a @ . 9 9 supondrán una
a r
pieza fundamental para el éxitog y la excelencia
. 1 9de5 la oferta asistencial, que
garantice el enlace y a
i x v
continuidad 2 3 de la asistencia prehospitalaria
de cuidados
2
a h
a la hospitalaria.
87 .
Este libro pretende dar respuesta a todas estos planteamientos y objetivos
reflejando el desarrollo de esta especialidad profesional que busca un
reconocimiento académico futuro como Especialista y Máster Oficial con
acceso al Doctorado, para satisfacer así las necesidades de los enfermeros
de urgencias y emergencias y de la propia sociedad como principio y fin del
sentido de nuestro esfuerzo y potenciando además el desarrollo de la
disciplina en este campo.
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d a a ,
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8
PRESENTACIÓN DE LA OBRA 21
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8
ÍNDICE
CAPÍTULO 1.
ENFERMERÍA DE URGENCIAS, EMERGENCIAS Y
CUIDADOS CRÍTICOS. DEFINICIÓN Y CONCEPTOS
H35I
XA
BÁSICOS. ANTECEDENTES Y PERFIL PROFESIONAL
2 7 35 A
1. Introducción
64
2. Sistemas integrales de urgencias,
2
d a a
emergencias y cuidados críticos , 38
r iz a
2.1. Antecedentes históricos R O I P
38 :
u to
2.2. Conceptos
a T O m, 40
a A S il
2.3. Factores que influyen en la
g . co
c ar A R G m a
mortalidad de las emergencias 41
Des V @ g
2.4. Modelos Asistenciales
9 9 44
rg a s 9 5 .
2.5. La Atención Urgente, Emergente
a v a 3 . 1
y de Cuidados Críticos en España
2 48
i x 2
ah 87.
2.6. La Cadena Asistencial
3. Atención Enfermera en Urgencias,
54
d a a
5.4. Formación por competencias
, 122
r iz a R O
6. Espacio europeo de educación superior.
I P :
to T O ,
Nueva estructura de la enseñanza universitaria
a u m 124
a A S il . co
7. Análisis comparativo de la situación actual
c arg R G a
en españa y el resto de países del entorno
A m
Des V @ g 9 9
europeo. Formación pregrado y postgrado 127
8. Referencias
r g a s 9 5 . 134
a va 223. 1
i x
ah 87. 137
UNIDAD II. Metodología Enfermera en Urgencias y Emergencias
CAPÍTULO 3.
APROXIMACIÓN AL PROCESO ENFERMERO
EN URGENCIAS Y EMERGENCIAS 139
1. Introducción 139
2. Proceso enfermero: conceptos básicos 141
2.1. A qué llamamos Proceso Enfermero 142
2.2. Fase de Valoración 142
2.3. Fase de Diagnóstico 144
2.4. Fase de Planificación 145
2.5. Fase de Ejecución 147
2.6. Fase de Evaluación 148
3. La disciplina enfermera.
El modelo de cuidados 149
4. El lenguaje estandarizado 151
4.1. Necesidad de estandarizar 151
4.2. Diagnósticos Enfermeros.
Taxonomía NANDA 152
4.3. Clasificación de Intervenciones Enfermeras 153
4.4. Clasificación de Resultados de Enfermería.
Nursing Outcomes Classification 155
5. Rol de la enfermera de urgencias y emergencias 156
6. Experiencias de aplicación de metodología
enfermera en emergencias 159
6.1. La experiencia en Andalucía 159
6.2. Otras experiencias 160
7. Referencias 162
H I XA
CAPÍTULO 4.
2 A
7 165
2
PROCESO ENFERMERO EN URGENCIAS Y EMERGENCIAS
64
1. El proceso enfermero como instrumento
de los cuidados y del desarrollod a a ,
r iz a disciplinar
R O 165
I P :
1.1. Definición
u to T O , 167
1.3.rg a a
1.2. Objetivo
A S il . com 169
c a Organización
R G m a 169
Des2. 2.1.
1.4.
VA s@g
Beneficios del
Etapa uno: Valoración
desarrollo metodológico
. 9 9 173 171
Recogida de datos
a a
rygfuentes 3.19 5 174
x
2.2. Tipos de
i v
ade recogida .de2datos
datos 2 177
a
2.3. h
Métodos
8 7 179
2.4. Organización y registro de la información 185
2.5. Análisis e interpretación de la información 186
3. Etapa dos: Diagnóstico 187
3.1. Conceptualización del Diagnóstico Enfermero 188
3.2. Diagnósticos Enfermeros
y problemas de colaboración 189
3.3. Tipos de Diagnósticos Enfermeros
y formulación 190
3.4. Taxonomía diagnóstica 192
4. Etapa tres: planificación de los cuidados 194
4.1. Establecimiento de prioridades 194
4.2. Formulación de objetivos 196
4.3. Determinación de las intervenciones 199
4.4. Registro del plan de cuidados 203
4.5. Interrelaciones NANDA, NOC y NIC 204
5. Etapa cuatro: la ejecución y la documentación 204
5.1. Validación y preparación 204
5.2. Intervención 205
5.3. Documentación de los cuidados 205
6. Etapa cinco: Evaluación 206
6.1. El proceso de la evaluación 207
7. Aspectos ético-legales 209
7.1. Derechos de los usuarios 209
7.2. Responsabilidades de los usuarios 210
7.3. Derechos de los profesionales enfermeros 210
7.4. Responsabilidades de los
profesionales enfermeros 211
8. Referencias 214
H I XA
UNIDAD III. La atención de Urgencia y Emergencia en
2 7 217 A
2
Unidades Hospitalarias y Extrahospitalarias
64
d a a ,
CAPÍTULO 5.
r iz a R O I P :
a u o T O
LA RECEPCIÓN, ACOGIDA Y CLASIFICACIÓN DE
t
PACIENTES EN LAS URGENCIAS HOSPITALARIAS m, 219
g a A S il . co
c a r
1. Introducción
R G m a 219
Des2. 2.1.
1.1.
VA s@ygclasificación
Definición de RAC
Evolución de la recepción, acogida . 9 9 220 220
Historia
a
arg 23.19 5 220
env
2.2. Triage a
hix en España87.2
el mundo 221
a
2.3. Triage
3. La consulta de RAC de Enfermería
222
CAPÍTULO 6.
TRASLADO DE PACIENTES CRÍTICOS 249
1. Introducción 249
2. Traslado sanitario en Urgencias,
Emergencias y Cuidados Críticos 251
2.1. Tipos de traslado 251
2.2. Peculiaridades de la asistencia
sanitaria durante el traslado 251
2.3. Normativa sobre vehículos sanitarios
2.4. Elección del medio de transporte
253
H I
255 XA
2.5. Fisiopatología del traslado
2 7 A 256
64 2
3. Metodología del traslado sanitario 262
d a a
3.1. Decálogo Prehospitalario
,
262
r iz a R O
3.2. Asistencia y material en el traslado sanitario
I P : 264
a u to T O m,
3.3. Posiciones e inmovilización del paciente 268
g a S
4. Proceso enfermero en el Traslado
A il . co
c ar R G
de Pacientes Críticos
m a 274
Des VA s@g
4.1. Valoración de necesidades orientada
. 9 9 275
al Transporte de Pacientes Críticos
a rg a 1 9 5
4.2. Juicio Diagnóstico/Identificación de Problemas
276
a v 23 .
a h i x
4.3. Intervenciones enfermeras en el
7 . 2
8
Traslado de Pacientes Críticos 279
4.4. Registro enfermero en el traslado sanitario
279
5. Traslado sanitario en situaciones especiales 288
5.1. Traslado del paciente politraumatizado 288
5.2. Traslado de gestantes 290
5.3. Traslado de niños críticamente enfermos 291
5.4. Traslado de pacientes con riesgo NBQ 298
6. Referencias 302
UNIDAD IV. Bases de la Valoración y
Cuidados del Paciente Crítico 307
CAPÍTULO 7.
EL PACIENTE SOMETIDO A OXIGENOTERAPIA
EN URGENCIAS Y EMERGENCIAS 309
1. Introducción 309
2. El oxígeno 310
2.1. Medidas de seguridad 310
2.2. Normativa reguladora 310
3. Recuerdo anatómofisiológico del aparato respiratorio 314
3.1. Fosas Nasales 316
3.2. Faringe 317
3.3. Laringe 317
3.4. Tráquea 318
3.5. Bronquios 318
3.6. Pulmones 319
4. Recuerdo fisiológico de la respiración 320
4.1. El transporte e intercambio de gases 322
5. Indicaciones de la oxigenoterapia
H I XA
en urgencias y emergencias
2 7 326 A 326
2
6. Mecanismos fisiopatológicos de la hipoxia
64
6.1. Causas de la hipoxia
d a a
6.2. Manifestaciones de la hipoxia ,
327
328
r iz a R O I P :
7. Valoración y monitorización del estado ventilatorio
328
u to
7.1. Valoración clínica
a T O m, 328
g a A S il . co
7.2. Monitorización mediante pruebas complementarias
329
c ar A R G m a
8. Sistemas de administración de oxígeno 333
D es V @ g 9
r g s
8.1. Sistemas de bajo flujo
a
8.2. Sistemas de alto flujo 9 5 .9 334
337
a v a 23 . 1
8.3. Ventajas e inconvenientes 341
i x 2
ah 87.
9. Manejo avanzado de la vía aérea
9.1. Dispositivos para la limpieza
341
H I XA
CAPÍTULO 8.
2 7 A
EL PACIENTE SOMETIDO A FLUIDOTERAPIA Y
64
FARMACOTERAPIA EN URGENCIAS Y EMERGENCIAS
2 399
a a
1. Introducción
2. Distribución del agua reniz a d
el organismo R O, 399
I P
400 :
u
3. Necesidades diarias
a o
t básicas S T O m, 401
g a A il . co
4. Monitorización
a r en
c e hidroelectrolítico R G
fluidoterapia
m a 401
4.1.
Des 4.2. Balance VA s@g
Valoración del estado de volemia
. 9 9 401
a r g a
hidroelectrolítico
1 9 5 404
5. Indicacionesadevla fluidoterapia. Tipos
2 .
3 de
h i x . 2
a
soluciones.
87
Características
5.1. Soluciones cristaloides
y clasificación 405
406
5.2. Soluciones coloides 410
5.3. Sangre y Hemoderivados 410
6. Complicaciones de la fluidoterapia 413
7. Normas generales para el uso
de fluidoterapia intravenosa 414
8. Farmacoterapia en Enfermería 414
9. Principios generales de farmacocinética
y farmacodinamia 415
10. Farmacoterapia en pacientes especiales 417
10.1. Farmacoterapia en la mujer
embarazada y la lactancia 417
10.2. Farmacoterapia en los pacientes pediátricos 421
10.3. Farmacoterapia en los pacientes geriátricos 423
11. Vías de administración de fármacos y fluidos 424
11.1. Principales vías de administración
en urgencias y emergencias 426
11.2. Complicaciones de las vías
de administración 442
12. Reguladores del ritmo de infusión 443
12.1. El sistema de infusión 444
12.2. Reguladores manuales de flujo 445
12.3. Reguladores electrónicos
o bombas de perfusión 446
13. Fármacos de uso en urgencias,
emergencias y cuidados críticos 449
14. Proceso enfermero en el paciente sometido
a fluidoterapia y farmacoterapia 449
14.1. Diagnósticos enfermeros más frecuentes 451
14.2. Intervenciones enfermeras I
452
H XA
15. Referencias
2 7 A 456
64 2
CAPÍTULO 9.
d a a ,
r iz a R O
REGISTROS E INTERPRETACIÓN ELECTROCARDIOGRÁFICA
P
459
I :
1. Introducciónaut
o T O ,
m 459
g a A S il . co
c a r
2. Recuerdo
A R G
anatomofisiológico del corazón
m a 460
es
D 2.2.
2.1. Circulación
V cardiaca
@ g 9 461
r g a s y ventricular
Sístole y diástole auricular
9 5 .9 461
2.3. Circulación coronaria
2.4. Controla v a del corazón 2 3 . 1 462
a h i x nervioso
7 . 2 463
2.5. Células
8
cardíacas
2.6. Despolarización y repolarización
463
463
2.7. Sistema especializado de conducción 465
3. Principios electrocardiográficos 466
3.1. Derivaciones cardiacas 466
3.2. Papel del electrocardiógrafo.
Mediciones de tiempo y voltaje 472
3.3. Ondas, intervalos y segmentos 474
3.4. Monitorización cardíaca 445
3.5. Artefactos 477
4. Análisis de un trazado de ritmo 478
5. Ritmos sinusales 482
5.1. Ritmo sinusal 482
5.2. Taquicardia sinusal 483
5.3. Bradicardia sinusal 484
6. Arritmias del nodo sinusal 486
6.1. Arritmia sinusal 486
6.2. Bloqueo sinusal y pausa sinusal 486
7. Arritmias auriculares 489
7.1. Marcapasos auricular errante o migratorio 489
7.2. Contracciones prematuras auriculares 490
7.3. Taquicardia auricular paroxística 492
7.4. Flutter auricular 492
7.5. Fibrilación auricular 495
8. Arritmias del nodo auriculo-ventricular 498
8.1. Contracciones prematuras o extrasístoles nodales 498
8.2. Ritmos de la unión 500
9. Bloqueos auriculo-ventriculares 503
9.1. Bloqueo AV de primer grado 504
9.2. Bloqueo AV de segundo grado tipo I,
Mobitz I o Wenckebach 504IXA
9.3. Bloqueo AV de segundo grado Tipo II A H
o Mobitz II 2 2 7 507
a 64
9.4. Bloqueo AV de tercer grado o completo 509
a d a
10. Arritmias ventriculares
O , 512
:
r iz R I
10.1. Contracciones prematuras ventriculares
to O , P
512
a u S T
10.2. Taquicardia ventricular
co m 516
r a A
10.3. Ritmo idioventricular
g G a il . 518
s ca A R m
10.4. Ritmo idioventricular acelerado
V g 519
D e @
10.5. Fibrilación ventricular
a s . 9 9 520
r
10.6. Asistolia
a g . 1 9 5 521
i x a v
11. Referencias
2 23 527
ah 87.
H I XA
2 7A
64 2
d a a ,
r iz a R O I P :
a u to T O m,
a A S il . co
c arg A R G m a
Des V @ g 9 9
rg a s 9 5 .
a v a 23 . 1
ah i x 7 . 2
8
UNIDAD I
H I XA
2 7 A
1. INTRODUCCIÓN
64 2
En la actualidad y debido al aumento d a
ade situacionesOde, urgencia médica,
r iz
tanto a nivel individual (enfermedades
a R
cardiovasculares, I
accidentes de P :
tráfico,
accidentes laborales)a u o
t a nivel colectivo O ,
T(incendios, catentados,
m accidentes
g a como
A S il . o
a r
múltiples, etc.) la sociedad
R G
exige no solo a
acciones
m encaminadas a prevenir
e c unasino
estassamenazas,
Dproporcione V A de@
la existencia
asistencia de laa s
una gestructura sanitaria adecuada que
. 9 9
a rg . 1 9 5
mejor calidad en caso de urgencias médicas
i x v
individuales o colectivas.
a para una 2 3
2 planificación de atención a
a
Las accionesh necesarias
8 7 . adecuada
las urgencias y emergencias son muy amplias, incidiremos en la fase
extrahospitalaria, dado el auge que ha tenido en las últimas décadas en
nuestro país la atención prehospitalaria al enfermo grave, pero sin olvidar
la importancia de los hospitales, así como su clasificación en niveles de
atención a las urgencias, de las características de los servicios de cuidados
críticos, etc.
87.2
integradora deh
a todas relacionadas con las urgencias.
En nuestro país es a finales de los 80 y principios de los 90 cuando
ante informes como el del Defensor del Pueblo (informe desfavorable
sobre la situación de las urgencias), de la Comisión Abril (propone la
instauración de Sistemas Autonómicos de Emergencias, recomendando
la creación de Empresas Públicas), etc.; se comienzan a crear los Servicios
de Emergencia Extrahospitalaria. Cubriendo en la actualidad estos
Sistemas Integrales de Urgencias y Emergencias a la totalidad de la
población española.
2.2.1. Sistema
2.2.2. Urgencia
d a a
no sanitario que requerirían de respuestas diferenciadas, aunque susceptibles
,
r i a
de actuación coordinada si fuera preciso.
z R O I P :
u
En el ámbito asistencial,
a o O
t este tipo Sde demanda,
T considerada m , como una
g A .
arequiere deRunGprofesional que realice
urgencia subjetiva, c o
il una avaloración inicial;
c a r A m a
que s
e decida si es o no
Vuna urgencia
DNivel Asistencial adecuado al gcaso.
y
@ g
proceder a derivarla
9 9 la Institución o
r a sEste proceso9de5objetivación
. supone un
a v a o Coordinación,
acto profesional de Regulación
2 3 .1 concepto clave en los SIUE.
a hix 8 7 .2
2.2.3. Emergencia
MORTALIDAD
H I XA
2 7 A
ADAPTADO DE: OMS, en Martín A (9).
64 2
d a a ,
r iz a R O I P :
a u to T O ,
mdemoras en la
Comprobamos que
a A S
es durante la fase co
II donde mínimas
il .
asistenciaa
c rg grandesAaumentos
suponen R G de la mortalidad,
m a siendo el punto TL
e
D50 sel tiempo en queVla mortalidadsha@ g
alcanzado el 50%.9Este punto indica
de forma indirecta el gradiente
r g a
de gravedad con5
9 .9 al tiempo. Este
respecto
límite es variable segúnvlaa
a 3 .1que se nos presente. En esta
patología emergente
2
h
fase II es donde
a x detectarse7.las2emergencias, y es en la que se produce
isuelen 8 sanitario. La actuación que se realiza sobre
el primer contacto con el sistema
el paciente va a modificar la curva, como se describe en la Figura 2.
La primera curva muestra cómo sólo la prestación de unos primeros
auxilios, unos gestos salvadores a las víctimas, puede permitir una reducción
de la mortalidad; a partir de ahí será necesaria la presencia de los equipos
médicos de asistencia sanitaria (EMAS) y la posterior evacuación hacia el
hospital. La atención hospitalaria concluiría con el aumento de las
posibilidades de supervivencia y disminución de las discapacidades (9).
MORTALIDAD
EMAS Hospital
Traslado asistido
XA
Primeros auxilios
A H I
1 10
2 2 7
100 1.000 ACCIDENTES
a 64 Unidades
EMAS: Equipos médicos de
a d a O , :
Arbitrarias
asistencia sanitaria
to r iz O R , I P
a u S T c o m
rg a G A a il .
s c a V A R
ADAPTADO DE: OMS, en Martín A (9).
g m
De a s @ 5 . 9 9
v a rg 3 . 1 9
h i x a . 2 2
a que modifican
Otros factores 7
8 la morbimortalidad en las emergencias son:
La capacitación técnica del personal que realiza la acción terapéu-
tica, a la que nos referiremos más adelante, y los recursos que dispo-
nen para ella.
La idoneidad del medio de transporte sanitario, referido tanto a la
adecuación física, del material técnico y personal que lo realiza como
por el tiempo que se emplea en su traslado.
El acceso telefónico.
La forma de analizar la demanda.
La forma de dar respuesta a las urgencias.
Según los recursos activados (Tabla 1).
Tabla 1.
a t o T O m ,
Despacho
a A S il . co
a rgMédica ARG
Regulación
c m a
DeTsRegulación no MédicaV @ g 9 9
rg a s 9 5 .
IPO DE RESPUESTA
a v a 2 3 . 1
a h i x
Con recursos propios
7 . 2
Derivando a otras 8
instituciones
RECURSOS ACTIVADOS
Escalón básico o avanzado sin médico
Escalón avanzado con médico
Dos escalones de activación encadenada sin médicos (básico-avanzado)
Dos escalones encadenados o tipo encuentro con médicos en el avanzado
(activación simultánea)
Regionalización de la demanda.
Asistencia in situ (stay and play).
Evacuación asistida de los pacientes.
H I XA
2 7 A
64 2
Evacuación en base a la regionalización de los recursos asistenciales.
d a a
norteamericano. El modelo alemán se basa en un dispositivo aéreo
,
r iz a R O I P :
mediante helicópteros muy extendido, así como en móviles terrestres.
a u t o T O ,
Este país dispone de dos dispositivos complementarios, uno basado
m
a A S l . co
en técnicos y otro avanzado, en médicos (Aerztenotdients y Rettungsdients).
i
c a rg Extrahospitalarios.
A R G m a que se está implan-
s
c) Medicalizados V
De tando en nuestro país, muy gEs la fórmula
@al modelo5francés, 9 9 pero con la dife-
a s
similar
rg sanitario .
9atiende in situ la emergen-
renciación de quevelapersonal
a únicamente 2 3 . 1
que
h i
cia/urgencia
a xactúa
7 . 2 en la fase extrahospitalaria, asegurán-
8
dose la continuidad de cuidados en base a procesos y protocolos
asistenciales conjuntos con el hospital. Estos protocolos están muy
desarrollados en algunas autonomías, como en Andalucía, donde exis-
te un íntimo contacto en cuanto a procesos asistenciales consensuados,
formación, etc., entre los Equipos de Emergencia de la Empresa Pú-
blica de Emergencias Sanitarias (EPES), Dispositivos de Cuidados
Críticos y Urgencias (DCCU) del Servicio Andaluz de Salud (urgencias
extrahospitalarias), y los Servicios de Cuidados Críticos y Urgencias
d a a
un lugar distante, donde son recibidos e interpretados por un médico, el cual
,
r i a
revierte órdenes concretas de actuación (Figura 3).
z R O I P :
u
En todos los modelos
a o O ,
tcada vez seSestáTutilizando másolamTelemedicina,
g
informatización
r a G
de historias clínicas, l .c bioclínicos, apoyo
Atransmisión adeidatos
s ca a otros niveles
diagnóstico
V R
Aasistenciales, g
etc.m
e
D La EPES de Andalucía cuenta a s @ . 9 9en Málaga y más
a rg desde
.
el
1 año
9 5 1999
i x a v
recientemente en Sevilla con Equipos de
2 2 3 Coordinación Avanzada (ECA),
ahun médico ubicado
compuestos por
y un Técnico de Emergencias8
7.en la Sala de Coordinación y una enfermera
Sanitarias (TES) en la unidad móvil asistencial,
de tal suerte que cuando son enviados en determinadas situaciones a una
asistencia por el médico coordinador, la enfermera envía telemáticamente
información sobre signos y síntomas, constantes vitales, electrocardiogramas,
etc. a la Sala de Coordinación; el médico, ante estas informaciones, toma
decisiones sobre el caso, pudiendo ordenar el traslado a un centro hospitalario,
enviar un equipo de emergencia de apoyo, o dar instrucciones terapéuticas
que resuelvan la situación.
64 2
de respuesta, satisfacción del usuario) al resto de recursos. De la mano de los
avances en Telemedicina y la posibilidad de enviar cada vez más bioseñales,
d a a ,
a este tipo de recurso y a la Enfermería se le presenta un interesante campo
r iz a R O I P :
de desarrollo, como así se constata en el interés y puesta en marcha de recursos
a u to T O m ,
a A S il . o
de este tipo en varias comunidades autónomas de nuestro país (Figura 4).
c
c a rg A R G m a
s
De en España V @ g 9 9
2.5. La Atención Urgente,
r g a s
Emergente y de
9
Cuidados
5 . Críticos
a
aven 1961, en.2Madrid,
2 3 . 1
a
En España,h i
se x
inicia 7 el Servicio de Urgencias de la
8
Seguridad Social para atención a las urgencias, pero sin elementos móviles
con capacidad asistencial (6).
En 1982, Álvarez Leiva, al clasificar el transporte sanitario en primario,
secundario y de alto riesgo, pone el dedo en la llaga de las deficiencias de la
época relacionadas con la atención prehospitalaria: El transporte primario
normalmente se realiza por medios propios [ ]; y en carretera por el primer vehículo que
accede [ ], que motiva un altísimo índice de mortalidad durante el transporte por
agravamiento de las lesiones primitivas.
SISTEMAS
INTEGRALES DE
URGENCIAS
H I XA
2 7 A
64 2
d a a , secundario: se
iz a
En relación al transporte rsecundario, asevera:R ElOtransporte IP [ ],
realiza habitualmente poru to
medio de vehículos [ T] O
carentes de nivelm ,
asistencial
a a graves un riesgoAañadido
suponiendo paragpacientes
S a la patología
il . coinicial (12).
c r
a a aparecer A G
Rservicios g m a
e s
Comienzan
Dextrahospitalarias V s @ de asistencia
9 9a las urgencias
como en g
r a
Ciudad Real con
9 5
el .
006, SAMU en Sevilla,
Cantabria, etc., basadosven
a 1
aexperiencias2de3.países que utilizan el sistema de
x
i 87.2
dispacht o el dehregulación sanitaria.
a
La Organización sanitaria ha gozado de indiferencia, desinterés y falta
de participación de los profesionales, que entienden estas tareas como
ajenas; sin embargo, no podemos ignorar que la actividad sanitaria se
desarrolla en un entorno político y social cambiante, y que en definitiva,
éste incide modificando las formas, objetivos y resultados de la asistencia.
Por tanto el Sistema Sanitario ha de responder diseñando estrategias que
den respuesta a esos cambios y que satisfagan las necesidades sociales en
materia sanitaria.
Factores demográficos
c a rg citar:ARG
ejemplos podemos
m a
s V
De En diciembre de 1988gapareció g
@dentro del 5Informe
9 9del Defensor del
a s .
9 pública sobre los servi-
r negativa de3la.opinión
a v a
Pueblo una valoración
2 1
a h i x
cios de urgencias.
7 . 2
En 1990 la Comisión 8 Abril propone la puesta en marcha de Sistemas
Autonómicos de Emergencias, recomendando la creación de Empre-
sas Públicas.
Necesidad de potenciar la asistencia prehospitalaria a las emer-
gencias, al objetivarse que una pronta actuación sanitaria in situ, re-
duce significativamente las tasas de mortalidad en las patologías más
prevalentes en las emergencias extrahospitalarias, como los síndromes
coronarios agudos, los traumatismos, etc.
a a
vde la financiación
2 3 .del sistema.
ah i x
Aspectos básicos
7. 2
8
Básicamente los pasos desde que la cadena se activa hasta que se desactiva,
pasarían por diferentes fases, desde la Preocurrencia1 hasta la Atención
Hospitalaria y por diferentes sucesos, desde la aparición del Incidente hasta
la Llegada al Hospital. La Cadena Asistencial consta de una serie de elementos
interrelacionados entre sí.
1. Circunstancias previas al incidente y que pueden propiciar su aparición, por ejemplo: condiciones
climatológicas, estado de la vía, etc.
v a 3 . 1
hixa Laun atención
atenderla y/o se precisa
tratamientoaadecuado.
traslado a2otro centro de mayor nivel para un
87.2 a la emergencia la dispensarán los
Dispositivos de Urgencias y Emergencias del lugar donde ocurra el incidente.
Figura 5.
H I XA
MODELO SUECO
2 7 Policía A
64 2
Teléfono de urgencia (90000)
d a a CENTRAL
, Bomberos
r iz a R O SAMUIP:
a u to T O m ,
g a A S il .c o
ca r A R G m a
D es V @ g 9 9
rg a s 9 5 .
a v a 23 . 1
a h i x 7 . 2
MODELO SOVIÉTICO8
Teléfono único (02) Policía
H I XA
2 7 A
64 2
d a a ,
r iz a R O I P :
a u to T O m ,
a A S il . c o
c a rg A R G m a
De s V @ g 9 9
rg a s 9 5 .
Figura 6. Sala de Coordinación.
a v a 23 . 1
h i x 7 . 2
a del CCU son8los técnicos informáticos, de mantenimiento,
Otro personal
el personal de administración, etc.
Los Recursos Técnicos están, fundamentalmente, compuestos por las
comunicaciones, que permiten mantener la intercomunicación entre los
distintos elementos, facilitando la actividad parcial de cada uno y la global
del sistema. Las comunicaciones fundamentalmente giran en torno a las
radiofónicas, todos los elementos del sistema deben estar conectados entre
sí, o al menos con el CCU, mediante radio; así como es necesaria la conexión
Puede clasificarse:
H I XA
2 7 A
64 2
d a a ,
r iz a R O I P :
a u to T O m,
a A S il . co
c arg A R G m a
Des V @ g 9 9
rg a s 9 5 .
a v a 23 . 1
ah i x 7 . 2
8
H I XA
2 7 A
64 2
d a a ,
r iz a R O I P :
a u to T O m,
a A S il . co
c arg A R G m a
Des V @ g 9 9
rg a s 9 5 .
a v a 23 . 1
ah i x 7 . 2
8
a v 2 3 .1
hix primario,
Traslado
a 8 7 .2 un ejemplo de reanimación
constituye
extrahospitalaria y de primeros auxilios profesionales. Es aquel que
se realiza desde el lugar de la urgencia hacia un Centro Asistencial.
Consiste en enviar un equipo de emergencias y su material de reani-
mación al lugar del suceso; el principio es asegurar el mantenimien-
to de las funciones vitales, si es posible, por un tratamiento
etiológico, rescatar, reanimar y estabilizar con el fin de orientar al
paciente al hospital más indicado, informando a través del CCU de
su llegada y del estado clínico de dicho paciente.
I XA
El paciente es asistido en el lugar por un equipo experto en este tipo de
H
2 7 A
situaciones, que disponen del material y medios adecuados para una adecuada
2
asistencia in situ y un transporte con garantías al hospital más adecuado
64
d a
según el estado y patología del paciente. El equipo debe informar
a ,
inmediatamente al CCU su disponibilidad cuando ésta se produzca, para una
r iz a R O I P :
nueva activación.
a o
use tactivarán A T O ,
msin cobertura
Los equipos aaéreos S
ante .
emergenciaslen
i c o
zonas
c
terrestre a rg se prevean
o cuando
A R G m a (cronas) de más de 20
tiempos de llegada
s V
e de llegada al lugar. as@
Dminutos g 9 9
rg 9 5 .
v a 3 . 1
2.6.1.4. C hixa . 2 2
a
ENTROS ASISTENCIALES
8 7
En el nivel extrahospitalario todo centro deberá contar con unos mínimos
que garanticen la asistencia en primera instancia a la urgencia, incluida la
reanimación cardiopulmonar (RCP) avanzada, recursos que deberán
dimensionarse adecuadamente y cubrir las 24 horas del día.
La definición del ámbito de cobertura de estos Centros, deberá establecerse
conforme a criterios de accesibilidad, promoviéndose en lo posible la
continuidad de la asistencia y en la información sobre el paciente y contar
d a a ,
r iz a R O I P :
2.6.1.5. F ORMACIÓN
a u t o T O m ,
a A S i l . c o
c a rgelementos
La formación,
A R G decisivomenala atención a la emergencia,
aspecto sumamente
espermanentementeVen íntimaaSistema
es uno
Destar
de los clave del
@ g de Emergencias,
Integral
9 9 que debe
r g s
relación con el5
9 . de elementos de la
resto
cadena. Supone la aptitud
a v a de los recursos
2 3 . 1
humanos del sistema. Para que
esta aptitud seah
a x se tiene
laiadecuada
7 . 2 implementar una formación orientada
que
8
primordialmente al paciente, a la consecución de los objetivos de la empresa
y a las necesidades de desarrollo del profesional, debiendo crearse un sistema
de formación permanente para todos los escalones profesionales y niveles
asistenciales (Figura 12).
En la formación estarán implicados y participarán todos los profesionales
del sistema; los objetivos estarán enfocados a desarrollar los conocimientos
teóricos, aptitudes y habilidades necesarias en varias áreas multidisciplinarias,
para asumir las actividades asistenciales en situaciones de emergencia.
2 7 A
64 2
d a a ,
Asimismo, es importante r iz a
implicarse con R
la O
sociedad I P : el
mediante
a u o
tde puertasSabiertas;O
T mediante m ,
desarrollo de jornadas
g a A il . co programas de
a r
educación sanitaria,
R G
insistiendo en formar
m a a
la población en primeras
escetc.a seguir
actitudes
Dbásica,
enV A de emergencia
caso
a s @ g sanitaria,9formación
. 9 en RCP
(Figura 13).
r g 1 9 5
i x a va 223.
ah ENFERMERA
3. ATENCIÓN 87.EN URGENCIAS, EMERGENCIAS
Y CUIDADOS CRÍTICOS
Aparición de la emergencia
ACTIVACIÓN DE LA CADENA
CADENA ASISTENCIAL
ACCESO TELEFÓNICO
Teléfono único
C.C.U.
FORMACIÓN
Recursos humanos
Recursos técnicos
H I XA
RECURSOS MÓVILES
2 7 A
64 2
Unidades básicas
Unidades asistidas
d a a ,
r iz a R O I P :
a u o
t Extrahospitalario
CENTRO ASISTENCIAL
T O m,
a A S il . co
c arg A R G
Hospitalario
m a
Des V @ g 9 9
a s
rg de la emergencia 9 5 .
a
Resolución
v a 3 . 1
2 LA CADENA
ah i x
DESACTIVACIÓN
7 . 2 DE
8
d a
a tienen establecidos, unos perfiles
Así mismo, empresas como la a EPES, O :unos
profesionales en tres niveles o r iz O R
t otros;SenTsu Intranet corporativa
y con criterios en cada nivel , I
catalogadosP
a
como imprescindibles a u
y deseables A . c o m podemos
leer: En a rg el modelo A R Gpor Competencias il
aes el eje principal de la política
e s c EPES
V
de Gestión
g m 9 como un proceso
Dimplementada por el Área de Desarrollo de
a s @Personas. Lo entendemos
5 . 9
a r g
individualizado, cuyo fin es desarrollar todo el 9
potencial
. 1 de una persona, mediante la
sus funciones a
x devconocimientos,
adquisición sistemática a
el ipuesto de trabajo.7
en h .
Por 2 23 y actitudes para el desempeño de
habilidades
tanto, se establecen los mapas de competencias
8
por categorías profesionales, indicadores y elementos de evaluación y seguimiento, siendo
la principal herramienta la Evaluación del Desempeño Profesional (EDP). Este modelo
se implanta y pone en marcha con el fin de que los profesionales consigan alcanzar su
máximo nivel de competencia (24).
Consideramos, pues, la Evaluación del Desempeño como el instrumento,
la herramienta para desarrollar la Gestión por Competencias. La EDP se ha
ligado a evaluación de resultados, asociada a incentivos y habría que entenderla
como oportunidad de mejora de las competencias de los profesionales.
2. En la página Web de la Fundación IAVANTE podemos encontrar una guía para la elaboración de
mapas de competencias (26).
CRITERIOS DE SELECCIÓN
FUNCIONES / RESPONSABILIDADES
• Asistencia en UVI Móvil.
• Gestión del material fungible
• Gestión del pequeño utillaje
• Mantenimiento y Limpieza de UVI Móvil
• Control de Stocks y Caducidades
• Gestión de fármacos - Sueroterapia
• Documentación y Registros
CONOCIMIENTOS (SABER)
• 136 DUE
• 77 SVA (I)
• 82 Inglés Básico (D)
H I XA
• 24 Conocimientos en informática. Nivel usuario (D)
2 7 A
• 137 Urgencias y Emergencias para Enfermeros
64 2
H (H /S )
a a ,
38 Técnicas de SVA: Todas (I)zad
ABILIDADES ACER ABER HACER
•
r i R O I P :
u o
t de comunicación
32 Habilidades sociales
a O
Ty escrita (I) com
oral ,
•
g a G A S i l .
•
r
40 Manejo Telecomunicaciones
c41aManejo Paciente A R (I)
m a
e s •
V Pediátrico (D)
D 41 Técnicas Pediátricas (D)gas @ g 9 9
•
r 9 5 .
a v a 23 . 1
A
h
CTITUDES
37 a
•
i x
Capacidad de Relación8 7
(I)
. 2
• 48 Capacidad de Trabajo en Equipo (I)
• 38 Capacidad de Análisis (D)
• 27 Satisfacción al cliente (I)
• 40 Orientación a resultados (I)
CONOCIMIENTOS (SABER)
• Los Conocimientos anteriores y
• 138 Metodología en Enfermería
• 82 Inglés Básico (I)
• 24 Conocimientos en informática. Nivel usuario (I)
• 90 Salud laboral (I)
• 4 Calidad. Nivel básico (I)
• 86 Manejo de Recursos (I)
• 87 Actuación en catástrofes (I)
• 32 Metodología de Investigación (D)
• 79 Conocimientos básicos de Electrocardiografía (D)
• 26 Conocimientos en SI y TI aplicados a la salud
• 8 Conocimiento de la Cultura del Grupo EPES
H I XA
2 7 A
HABILIDADES (HACER / SABER HACER)
• Las Habilidades anteriores y
64 2
• 41 Técnicas Pediátricas (I)
d a a ,
r i a R O
• 47 Cumplimentación de la Historia Clínica (I)
z I P :
a u t o
• 42 Manejo Telemedicina (D)
T O m,
• 48 Lectura EKG (D)
a A S il . co
c a rg A G
• 14 Capacidad para asumir compromisos
R m a
• 19 Adecuada utilización de los recursos disponibles
De s V @ g 9 9
• 22 Capacidad para detectar problemas y aplicar soluciones
• 59 Trabajo en Equipo
rg a s 9 5 .
a v a 23 . 1
• 24 Capacidad para las relaciones interpersonales
h i x 7 . 2
Lasa
A
Actitudes anteriores y8
CTITUDES
•
• 41 Capacidad para asumir responsabilidades adicionales (D)
• 39 Planificación y organización (D)
• 1 Actitud de aprendizaje y mejora continua
• 32 Reconoce los logros y asume los errores
• 7 Creatividad, Innovador, flexibilidad, menete inquieta
REQUISITOS PARA PROGRESAR
• Cumplir al 100% todas las funciones y competencias definidas
para el Enfermero EPES.
FUNCIONES / RESPONSABILIDADES
• Las Funciones anteriores y
• Coordinación - Gestión de Recursos.
• Triaje de gravedad insitu.
• Lectura de Electrocardiogramas.
• Diseño de Dispositivos de Riesgos y de Catástrofes.
• Coordinación de Dispositivos de Riesgos Previsibles.
CONOCIMIENTOS (SABER)
• Los Conocimientos anteriores y
• 82 Inglés Básico (I)
• 86 Conocimientos Básicos de Gestión Recursos (I)
• 32 Metodología de Investigación (I)
• 79 Conocimientos básicos de Electrocardiografía (I)
XA
• 88 Diseño de Planes de Riesgo (D)
Lasr a
g anterioresR y G A S i l . c o
c a• Actitudes
A g m a
s 48•CoordinaciónV
De 39 Planificación y Organización
del Trabajo en
@
Equipo
s (I)
9 9
a 5 .
•
41 Capacidad a
arg 23.1 (I)
paravasumir responsabilidades
9
ahix
adicionales (I)
87.2
•
Des
MAPA DE COMPETENCIAS DEL ENFERMERO DE UNIDAD DE CUIDADOS CRÍTICOS Y URGENCIAS
c
CONOCIMIENTOS
a
FUENTE: Fundación IAVANTE
a
rg
h
GRADO DE DESARROLLO PRIORIDAD
i
a
x
CÓDIGO CONOCIMIENTOS ÓPTIMO EXPERTO EXCELENTE 1 2 3 4
a
V
C-0004 Calidad nivel básico I I I
v
u t
Conocimientos básicos de calidad
A
a
o
C-0077 Soporte vital avanzado I I I
r
R
8
i
rg
Técnicas específicas de aplicaciones en Soporte Vital Avanzado
7
z
a
G
.
C-0082 Inglés básico I I I
s
2
El profesional puede hablar y comprender una lectura a nivel básico en inglés
A
d
2
S
C-0083 SVA Pediátrico I I I
@
a
3
Técnicas específicas de aplicación en Soporte Vital Avanzado en el paciente pediátrico
g
.
T
a
C-0165 Conocimiento en metodología de cuidados enfermeros I I I
1
m
Técnica específica
9
a i
5
C-0174 Bioética I I I
R
64
l
.
.
Técnica específica
2
O
9
c
,
C-0181 Derechos y deberes de los usuarios I I I
9
o
El profesional conoce la carta de derechos y deberes de los ciudadanos en Andalucía
7
m
C-0355 Cuidados en los principales procesos críticos y de urgencias I I I
,
A
Técnica específica
I
H
C-0362 Valoración de necesidades I I I
I
75
76
Des c
GRADO DE DESARROLLO PRIORIDAD
a
CÓDIGO CONOCIMIENTOS ÓPTIMO EXPERTO EXCELENTE 1 2 3 4
rg
h i
C-0448 Sistema de clasificación de pacientes y medición del producto sanitario I I I
x
El profesional conoce sistemas de clasificación de pacientes y de medición
a
del producto sanitario
V
v
u
C-0455 Conocimientos en Técnicas de Comunicación I I I
t
A
a
El profesional conoce técnicas de comunicación verbal y no verbal
o r
R
8
i
rg
C-0079 Electrocardiografía básica D I I
7
Técnicas específicas para la realización e interpretación básica en electrocardiografía
a
G
.
a
s
C-0081 Atención al traumatizado D I I
2
A
d
Técnicas específicas de aplicación en la asistencia inicial al paciente traumatizado grave
2
S
@
a
C-0024 Conocimientos en informática nivel usuario D I I
3
g
.
El profesional utiliza adecuadamente los paquetes informático
T
a
1
básicos de su organización
m
O
9
a
C-0032 Metodología de investigación nivel básico
i
5
R
64
.
.
2
escritura científica, búsquedas bibliográficas y normas de publicación) D I I
9
c
,
El profesional conoce la metodología y técnicas básicas para participar
9
o
adecuadamente en un proyecto de investigación o liderarlo
7
m
C-0045 Conocimiento del entorno de la Emergencia Sanitaria D I I
,
A
El profesional conoce las especificidades de la atención en emergencias sanitarias
I
H I
P :
XA
Tabla 4.
Des c
MAPA DE COMPETENCIAS DEL ENFERMERO DE UNIDAD DE CUIDADOS CRÍTICOS Y URGENCIAS
a
HABILIDADES FUENTE: Fundación IAVANTE
a
rg
h
GRADO DE DESARROLLO PRIORIDAD
i
a
x
CÓDIGO HABILIDADES ÓPTIMO EXPERTO EXCELENTE 1 2 3 4
a
V
v
H-0024 Capacidad para las relaciones interpersonales I I I
u t
El profesional tiene habilidades sociales que pone de manifiesto en su
A
a
o
entorno profesional y en cualquier situación de interacción personal
r
R
8
i
rg
H-0032 Comunicación oral y escrita I I I
7
z
a
G
.
El profesional optimiza sus relaciones interpersonales mediante
s
la capacidad de expresarse adecuadamente de forma oral y escrita
2
A
d
2
H-0038 Técnicas de SVA: todas I I I
S
@
a
3
Manifestación adecuada en la práctica diaria del manejo de la técnica
g
.
T
a
H-0041 Manejo Paciente Pediátrico I I I
1
m
Manifestación adecuada en la práctica diaria del manejo de la técnica
9
a i
H-0044 Manejo de las Urgencias más frecuentes I I I
5
R
64
l
.
Manifestación adecuada en la práctica diaria del manejo de la técnica
.
2
O
9
c
,
H-0048 Lectura EKG I I I
9
o
Manifestación adecuada en la práctica diaria del manejo de la técnica
H-0050 Seguridad pasiva y activa
7 I I I
m,
A
Manifestación adecuada en la práctica diaria del manejo de la técnica
I
H
H-0058 Manejo de metodología específica I I I
I
77
78
Des c a
GRADO DE DESARROLLO PRIORIDAD
a
rg
h
CÓDIGO HABILIDADES ÓPTIMO EXPERTO EXCELENTE 1 2 3 4
i
a
x
H-0089 Individualización de cuidados I I I
a
Manifestación adecuada en la práctica diaria del manejo de la técnica
V
v
u
H-0153 Atención al paciente crítico urgente I I I
t
A
a
Manifestación adecuada en la práctica diaria del manejo de la técnica
o r
R
8
i
H-0177 Facilitar la relación con el paciente, la familia (padres y/o responsables) I I I
rg
7
El profesional tiene capacidad empática y de comunicación
a
G
.
que pone de manifiesto en su relación con los familiares
s
2
A
d
H-0180 Manejo del aparataje necesario para aplicar los conocimientos señalados I I I
2
S
@
Manifestación adecuada en la práctica diaria del manejo de la técnica
3
g
.
T
H-0183 Técnicas de inmovilización I I I
1
Manifestación adecuada en la práctica diaria del manejo de la técnica
m
O
9
H-0226 Principales intervenciones en urgencias (canalizaciones, sondajes, vendajes )
a i
5
R
64
.
.
2
Manifestación adecuada en la práctica diaria del manejo
9
c
,
de la técnica en su ámbito de responsabilidad
9
o
7
H-0373 Registros de enfermería (plan de acogida, valoración inicial, plan de cuidados ) I I I
m
Manifestación adecuada en la práctica diaria del manejo de la técnica
,
A
I
H I
P :
XA
Tabla 5.
Des
MAPA DE COMPETENCIAS DEL ENFERMERO DE UNIDAD DE CUIDADOS CRÍTICOS Y URGENCIAS
c
ACTITUDES FUENTE: Fundación IAVANTE
a
GRADO DE DESARROLLO PRIORIDAD
a
rg
h
CÓDIGO ACTITUDES ÓPTIMO EXPERTO EXCELENTE 1 2 3 4
i
a
x
A-0001 Actitudes de aprendizaje y mejora continua I I I
a
El profesional busca continuamente cómo obtener aprendizaje,
V
v
u
incluso de los errores, para mejorar su actividad diaria
t
A
a
o
A-0018 Honestidad, sinceridad I I I
r
R
8
i
rg
El profesional es coherente consigo mismo y con el entorno.
7
z
Piensa lo que dice, dice lo que piensa y hace lo que piensa y dice
a
G
.
a
s
A-0034 Tolerante, dialogante y autocontrol I I I
2
A
d
El profesional manifiesta una actitud moderada en su comunicación
2
S
@
a
interpersonal, no dejándose llevar por reacciones exageradas
3
g
.
T
A-0041 Capacidad de asumir compromisos y responsabilidades I I I
1
El profesional es capaz de adquirir la responsabilidad de un proyecto
m
O
9
desde la confianza de que saldrá delante de forma óptima
a i
5
R
64
l
A-0042 Saber estar I I I
.
.
2
El profesional manifiesta un comportamiento (conducta verbal, no verbal)
9
c
,
2
adecuado en todas y cada una de las situaciones en las que se encuentra
9
o
A-0043 Discreción 7 I I I
m
El profesional establece con criterio qué información debe utilizar y dónde,
,
A
no generando ni prestándose al cotilleo fácil o el rumor
I
H
79
80
De
GRADO DE DESARROLLO PRIORIDAD
s
CÓDIGO ACTITUDES ÓPTIMO EXPERTO EXCELENTE 1 2 3 4
c a
A-0048 Positivo I I I
a
El profesional se plantea, ante todo, que las cosas son posibles
rg
h i
A-0049 Respeto y valoración del trabajo de los demás, sensiblemente
x
a las necesidades de los demás, disponibilidad y accesibilidad I I I
a
El profesional es consciente de que sin los demás, su trabajo no sería óptimo.
V
v
Sabe reconocer las aportaciones, sabe establecer mecanismos de potenciación
u t
A
a
A-0050 Responsabilidad I I I
o
El profesional es un profesional
r
R
8
i
rg
7
A-0051 Sensatez I I I
a
G
.
El profesional piensa las cosas antes de hacer o decir
s
2
A
d
A-0053 Orientación a satisfacer expectativas de pacientes y familiares
2
S
@
(receptividad a inquietudes y necesidades del enfermo y familia) I I I
3
El profesional lleva a cabo todas las técnicas, cuidados, tratamientos, etc.,
g
.
T
a
que el paciente necesita “según proceso” y según “su ámbito de responsabilidad”,
1
m
manifestando en el trato habitual con él preocuparse no sólo de sus necesidades
9
a
físicas, sino también de sus necesidades psíquicas, sociales y espirituales
i
5
R
64
2
O
9
c
El profesional es técnicamente bueno, y humanamente también
,
2
9
o
A-0002 Actitud emprendedora D I I
El profesional manifiesta iniciativas y conductas abiertas 7
m,
hacia nuevos retos, proponiendo qué y cómo
A
I
A-0004 Autonomía y colaboración D I I
H I
a u to T O m ,
siones.
a A S il . co
c a rg educación A R Gsanitaria a losmusuarios.
a
sProporcionar
V
De Asumir las competencias g
@ de5los.9futuros 9 especialistas.
rg a s
en formación
9
v a
a de investigación 3 . 1
2 en cuidados, relevantes en enferme-
h x
Impulsar ilíneas
7 .
ría deaurgencias y emergencias
2
8 (27).
En cuanto a la Enfermería en las Salas de Coordinación de los Servicios
de Urgencias y Emergencias y haciendo un ejercicio ecléctico, entre algunas
de las que disponen actualmente de mesas de enfermería como la del SUMMA
112, la del SESCAM y las que desarrollaba la Enfermería de la Sala de
Coordinación del 061 de Sevilla, podríamos proponer las siguientes
competencias y funciones:
Supervisión de la Teleoperación.
2 7
dados, protocolizados y sobre todo en situaciones de alta frecuenta- A
ción (epidemias de gripe, etc.) 64 2
d a a , triaje telefóni-
iz a
En situaciones de saturación
r R O
podría realizar un primer
I P :
a u to
co de la demanda según protocolos T O
establecidos .
m , 4
a A S il . c o
a rg deAlosRavisos
Coordinación
c G de enfermería
m a en fines de semana
Des(17, 28, 29). V gas@ 95.99 g
v a r 3 .1
a 2
ahix 87.2
3. La ECE sirve de enlace entre el paciente, su familia y los sistemas formales de cuidados, sanitarios
y sociosanitarios, con el fin de mejorar su calidad de vida. Se encuadran dentro del Servicio de
Continuidad de cuidados en domicilio y su trabajo es el de gestión de casos. Desarrollan su labor
desde hace varios años en comunidades como Canarias y Andalucía.
4. Según la Ley 44/2003 de Ordenación de las Profesiones Sanitarias (LOPS), en sus artículos 5.1, a)
b) y c); artículo 7.1 y 2 a), la enfermera es responsable del triaje en emergencias colectivas y
responsable de la Recepción, Acogida y Clasificación de los pacientes que acuden al área de urgen-
cias de los hospitales, todo ello en base a unos protocolos estandarizados y siguiendo modelos
internacionalmente reconocidos.
5. En la página Web de la Agencia podemos ver como se desarrolla el proceso de acreditación (31).
d a a
públicas y privadas, sindicatos, colegios profesionales, instituciones científicas,
,
con variadas ofertas formativas.
r iz a R O I P :
Con la Formación u
a t o
Continuada debemos O m ,
T tener profesionalmente una
A S . c o
sea s argaporinstituciones
doble relación,
encaquellas
V A G
un lado tenemos
R donde g m
prestemos
il y exigir que así
derecho a recibirla
a nuestros ser vicios
e
Dprofesionales, y por otro lado a s @ . 9 9 tenemos la
como tales profesionales,
obligación de participar a rg en3nuestra
activamente . 1 5
9 Formación Continuada,
x a v
en aras a nuestraiactualización, 2 2 de conocimientos e incremento
adquisición
h
a todo ello enmarcado
competencial; 7 .
8 dentro de nuestro desarrollo profesional
y como gran objetivo el de dispensar la mejor de la atención posible a los
ciudadanos. Es vital, pues, que estemos comprometidos con la Formación
Continuada.
La Formación Continuada es una herramienta con la que cuentan los
profesionales y las empresas para actualizar periódicamente los conocimientos,
facilitar la adaptación a nuevos perfiles, y mejorar los niveles de competencia
y cualificación profesional.
d a a
desde cursos de expertos, máster, hasta la especialización. Como
,
r iz a R O
consecuencia de la Declaración de Bolonia y la instauración del Espacio
I P :
a u to T O ,
Europeo de Educación Superior, la formación graduada va a sufrir grandes
m
a A S l . co
cambios, esencialmente el giro se producirá unificando las actuales
i
c a rg R G m a
licenciaturas y diplomaturas en el nivel de Grado, y en los estudios de
A
De s V @
posgrado de Máster Oficial6 y Doctorado. g 9 9
a s
rg (RD)31393/2007, 5 .
9 de 29 de octubre, por
Tras publicarse el RealaDecreto
v . 1
ala ordenación.de2las2 enseñanzas universitarias oficiales,
h i x
el que se establecen
a españolas 8tuvieron7 de plazo hasta febrero de 2008 para
las universidades
presentar las carreras que deseaban impartir, así como de proponer los planes
de estudio que les resultaron más interesantes (36).
6. Máster Oficial es un grado y titulación a nivel nacional, que sumando sus créditos a la titulación de
grado, puede dar acceso al doctorado a los Diplomados y/o Grados en Enfermería; diferente de los
Máster Universitarios, que si se podían cursar, pero que son titulaciones propias de las Universida-
des que los imparten; y también diferentes a los cursos semipresenciales o a distancia, organizados
por entidades privadas o sin ánimo de lucro, que, en ocasiones lo denominan así en relación al
número de horas (aunque esta última práctica no es del todo correcta).
H I XA
2 7 A
64 2
d a a ,
r iz a R O I P :
a u to T O m,
a A S il . co
c arg A R G m a
Des V @ g 9 9
rg a s 9 5 .
a v a 23 . 1
ah i x 7 . 2
8
H I XA
Para la superación de estos retos debemos:
2 7 A
6
• Abrirnos campo y consolidar funciones de gestión 2
4 de recursos, para lo
d
que sería necesario formación específica a
a en este campo. ,
r i z a R O I P :
• Adaptarnos al medio
a u to T
extrahospitalario, O
a las
m
tecnologías y ,
avances en
a A S i l . co
c a rg
transporte sanitario.
A R G m a en telecomunicaciones,
s a V
De en informática, en telemedicina,
• Adaptarnos las nuevas tecnologías, ag
@etc. 5.99
los avances
rg a s 9
v a
a el perfil.profesional 3 . 1
2 de la enfermera de urgencias y
i x
• Definir claramente
a h 7 2
emergencias. 8
• Establecer las competencias profesionales, en varios niveles e ir
avanzando en nuestro desarrollo profesional.
• Desarrollar un modelo de carrera profesional que reconozca e incentive
a los profesionales.
H I XA
• Uso racional de los distintos recursos de urgencias y emergencias.
2 7 A
•
64 2
Importancia crucial de la continuidad de cuidados y tratamiento desde
a a
los primeros momentos en los que se produce la emergencia, durante el
d ,
r iz a R O I
traslado y en los servicios de cuidados críticos hospitalarios.P :
a u to O
T no es trabajo m ,
g a A S il . co
La atención
r
ca nuestra
a la
R G
emergencia sanitaria
Alabor de forma a
mquizás oculta,
fácil, a veces
e s
desarrollaremos
V
D cuidados y atenciones sumamente @ g
silente,
9 dispensando
r g a s viviendo
penosas,
9 5 .9 momentos de
frecuentes
a v
estrés, pero que a buen aseguro, actuando
2 3 .1la debida profesionalidad y
con
a
generosidad, ix la impronta
hdejaremos 8 7.2del deber cumplido, saborearemos con
regusto el trabajo bien hecho y ofreceremos a la sociedad lo mejor de nosotros
mismos; para garantizar una respuesta adecuada, y dentro de un equipo
multidisciplinar, a ese bien tan preciado para todo ser humano como es la
salud, y que tan fácil es perder en ciertas ocasiones sin la ayuda de unos
profesionales competentes.
XA
peligro la integridad física de los actuantes ni de terceras personas que
H I
pudieran afectarse. Es primordial pues, garantizar y establecer como primera
A
2 7
medida en nuestras actuaciones, la seguridad de todos los implicados y evitar
2
nuevos incidentes.
a 64
a d a O , :
to r iz O R , I P
a u S T co m
rg a G A a il .
s c a V A R g m
De a s @ 5 . 9 9
v a rg 3 . 1 9
h i x a . 2 2
a 8 7
d a a
www.enfer meriadeurgencias.com/documentos/fundamentos/
,
competencias.pdf.
r iz a R O I P :
28. Menchaca MA, Pérez
a u o
t JL, Cerdeira JC, O
T Tévar F,cAlonso
m , C, Mora J.
de a
Serviciorg A S . o
il de Sanidad. Co-
c a A R G
Urgencia Médica de Madrid. Consejería
m a
e s
munidad de Madrid.
V Incorporación
@ g
de
D Coordinador de UrgenciasgadelsSUMMA 112.
la Enfermería
9 en el Servicio
9 Servicio de Ur-
r 9 5 .
Madrid:
a h 8 7.2
29. Moyano Jiménez M. Aspectos Básicos en la Coordinación del Transporte
Secundario, Papel de la Enfermería. Actas del VII Congreso Nacional
SEMES; 1995 May 31 Jun 1-3. Oviedo: Edicomplet; 1995.
30. Agencia de Calidad Sanitaria de Andalucía. Manual de Competencias de
la Enfer mera de Emergencias y Urgencias Extrahospitalarias.
Versión ME 1 52_02. Sevilla: Agencia de Calidad Sanitaria de Andalu-
cía; 2007.
H I XA
2 7 A
64 2
d a a ,
r iz a R O I P :
a u to T O m,
a A S il . co
c arg A R G m a
Des V @ g 9 9
rg a s 9 5 .
a v a 23 . 1
ah i x 7 . 2
8
1. INTRODUCCIÓN
H I XA
Los enfermeros en España hemos obtenido, poco a poco,A un merecido
lugar en la disciplina que nos ocupa, la Enfermería 2 2 7 de Urgencias,
Emergencias y Cuidados Críticos, aunque ela 6 4
camino no ha estado exento de
obstáculos y todavía queda el a reto a
d más importante:O , conseguir :una
t
especialización reconocida.o r
Una iz O
sólida formación R universitaria,deIPcarácter
generalista, tanto a u
humanista comoS
T c m
oa nuestra activa
r g a G A científica, unida
i l .
a estos servicios, así
c a
participación en el proceso
sen las sociedades A Rde creación
V científicassafines
y
g
desarrollo
m de
e
Dcomo @
a para el19 . 9 9
y todo ello reforzado con una
a r g
creciente contribución investigadora
. 5 de la enfermería de
avance
i x a v
emergencias, y ante todo, con el trabajo
2 2 3 constante en este ámbito, son las
claves que hanh
a posibilitado que .
87deactualmente nadie discuta nuestra presencia
en este medio. La importancia este hecho radica en que no siempre fue
así, ya que el reconocimiento jurídico de la necesidad de profesionales
enfermeros en los equipos de soporte vital avanzado extrahospitalarios es
muy reciente Real Decreto (RD) 619/1998, de 17 de abril, sobre Transporte
Sanitario y sólo se hizo realidad tras la reivindicación de nuestros
representantes profesionales (1).
64 2
Enfermería de Emergencias y Catástrofes como la especialidad que
esperamos muy pronto sea reconocida.
d a a ,
r iz a R O I P :
2. DESARROLLOaDE u o
tLA ENFERMERÍA O
T ESPAÑOLA ,
mEN LOS
a A S il . co
c
SERVICIOS a rgDE EMERGENCIA
A R G EXTRAHOSPITALARIOS
m a
s V
DeLa práctica de la enfermeríagenasel @ g 9 9 en cuanto a la
5 .
medio extrahospitalario,
ry catástrofes,3es.un19fenómeno que se inicia en la
v a
asistencia a las emergencias
a 2 en una fase de consolidación,
h
década de los 80, yx
i 7
que se encuentra . 2
actualmente
a
con unas perspectivas de futuro8 que actualmente pasan por la creación de un
área de capacitación específica dentro de la especialidad Médico-Quirúrgica
reconocida oficialmente. Los avatares por los que pasa la figura del Diplomado
en Enfermería durante estas décadas están marcados por el desconcierto que
supone el desarrollo de una nueva disciplina. El inicio de los Servicios de
Emergencias Extrahospitalario vino marcado con la creación en 1980 de
secciones sanitarias en el seno de servicios contra incendios y salvamento,
con unidades móviles medicalizadas.
g a sApoyo
. 9
psicológico en situaciones
5 de emergencia.
r de9
psicosociales Características psicológicas y familiares
av
en Enfermería a . 1
3 de relación y comunicación para
en situación
2 urgencia y emergencia
h i x
en Urgencias
. 2
Habilidades
a y Emergencias
87 Enfermería de Urgencias y Emergencias
Recursos sanitarios de urgencias
en la Atención Primaria
ENFERMERÍA DE Interrelación profesional y transferencia
URGENCIAS/EMERGENCIAS de pacientes en situaciones de urgencias
EN ATENCIÓN PRIMARIA
y emergencias desde el nivel de Atención
Primaria al nivel de Atención Especializada
Atención Primaria Urgente Extrahospitalaria:
formación y prevención de la comunidad
(escuela, asociaciones ciudadanas, empresas, etc.)
rg a s 9 5 .
Hidrocución
Ahogamiento y cusiahogamiento
DE RGENCIAS Y MERGENCIAS
a v a
A PERSONAS EN SITUACIÓN
23 . 1
Disnea. Insuficiencia respiratoria
h i x
DE TRAUMATISMOS DIVERSOS
a 7 . 2 Inconsciencia
Y ALTERACIONES SEVERAS
8 Coma
Estados de shock
Convulsiones
Taponamiento cardiaco
Dolor torácico. Infarto agudo de miocardio.
Complicaciones
Insuficiencia cardiaca. Edema agudo de pulmón
Tromboembolismo pulmonar
Aneurisma torazo-abdominal
Intoxicación grave
Hemorragias
d a
Cuidados ante la hipotermia
a ,
El recién nacido de alto riesgo
r iz a R O I P :
Síndrome del distrés respiratorio del recién nacido
a u to T O ,
Síndrome de la muerte súbita del lactante
m
a A S il . co
Síndrome de hipertensión craneal en el niño
De @ 9
Cuidados ante las crisis hipóxicas en cardiopatías cianóticas
Y MERGENCIAS
EN PEDIATRÍA
a s 5 . 9
Cuidados ante crisis convulsivas en niños
v a rg 3 . 1 9
Cuidados ante las deshidrataciones graves
h i x a . 2 2
Cuidados ante el niño quemado
Cuidados durante el transporte de pacientes pediátricos
a 8 7
Accidentes en la infancia
Trauma pediátrico
Cetoacidosis diabética en Pediatría
Deshidratación en Pediatría
Emergencias y Urgencias más frecuentes en Pediatría. Septicemia.
Intoxicación. Hidrocución. Ahogamiento y preahogamiente.
Identificación y cuidados ante el posible maltrato infantil.
Responsabilidad social
NÚCLEOS BLOQUES
Valoración sindrómica. Triage. Soporte de las funciones vitales y
manejo de las técnicas relacionadas con las Urgencias y Emergencias
Atención de Enfermería a las Urgencias y Emergencias Médico-Quirúrgicas
Atención de Enfermería a las Urgencias y Emergencias Traumatológicas
Atención de Enfermería a las Urgencias y Emergencias Pediátricas
Atención de Enfermería a las Urgencias y Emergencias
ASISTENCIAL Obstétrico-Ginecológicas
Atención de Enfermería a las Urgencias y Emergencias
Psiquiátricas y Psicológicas
Atención de Enfermería en el Transporte Sanitario
Autoprotección del Personal Sanitario
Asistencia a múltiples víctimas y catástrofes
Farmacología de Urgencias y Emergencias
Aplicación de Protocolos y Procedimientos de Enfermería
Método Científico
Diseño de proyectos de investigación
INVESTIGACIÓN Líneas de investigación en Enfermería de Urgencias y Emergencias
Aplicación Estadística
Publicación Científica
Búsqueda y análisis de la información H I XA
Formación
2 7 A
D
Docencia a otras enfermeras
64 2
OCENCIA
a a
Docencia a otros miembros del equipo
Educación para la salud a la población
d ,
Formación
r iz a R O I P:
Docenciatao enfermeras TO ,
A
a
DMINISTRACIÓN
a u a otros miembros
Docencia
otras
A S del equipo
. co m
arg ComitésA
Y GESTIÓN
Educación para
R G
la salud a la población
a il
s c V g m
DAe
de bioética
s @
Confidencialidad, intimidad
a 5 . 9 9
rginformado 3.19
SPECTOS
Secreto profesional
BIOÉTICOS
v a
Consentimiento
a 2
h i x 7 .
Ley General de Sanidad
a Leyes Autonómicas 2
A SPECTOS
8
Legislación sobre Transporte Sanitario
LEGALES Carta de derechos y deberes del usuario
Los derechos del niño
Responsabilidad civil, penal y administrativa
TÉCNICAS,
HABILIDADES, Técnicas de valoración
SIGNOS Y SÍNTOMAS Técnicas diagnósticas
EN LA ENFERMERÍA Técnicas de urgencia y emergencia
DE URGENCIAS
Y EMERGENCIAS
Tabla 4.
r z a
de las situaciones críticas tanto en eliámbito prehospitalario R
como O hospitalario.
I P :
Dominar los mecanismosu
a o
t manejo de Múltiples
para T O m
Víctimas y aseguramiento , del área en
•
g a
situaciones de urgencias, emergencias y A S
desastres en el área
il . c o
prehospitalaria, así como en la
ca
adaptación r
del entorno
A R
hospitalario G
a la Recepción,
m
Acogidaa y Clasificación de esos posibles
e s
eventos V
con múltiples víctimas.
D Poseer actualización de las Guías degManejo @ g 9 9de Intervención Hospi-
•
r a s PreHospitalario5
9 .
y Guías
talarias.
v a
a de estrés para.2 3 . 1
2medidas terapéuticas en aquel lugar donde el
•
h i x
Saber actuar en situaciones
7 iniciar
a su salud, así como8continuarlas durante su traslado al Centro Hospitalario y en
paciente pierde
este mismo.
• Tener habilidades en el manejo de sistemas de comunicación, tanto alámbricas como
inalámbricas, que permita la optimización de resultados.
• Disponer de capacidad de comunicación con todas las personas que conforman la red de
atención en el campo de la emergencia pública, destacando la necesidad de desarrollar un
sistema integrado de asistencia.
• Estar facultado para elaborar así como actualizar planes de emergencia y planes de contingencia.
• Disponer de capacitación en triage y Recepción, Acogida y Clasificación.
H I
y toma de decisión, de comunicación, de flexibilidad y de trabajo en equipo;
XA
a situaciones de estrés, de liderazgo y dirección, de identificación de problemas
2 7 A
como características personales de estos profesionales. Y como características
64 2
profesionales, la gestión de cuidados, el juicio clínico crítico, la colaboración
a a ,
con el equipo multidisciplinar de salud y la comprensión de la diversidad cultural.
d
r iz a R O I P :
Todo ello para asumir suoresponsabilidad
gestor, investigador, a u O
con
tenfermero deStraslado
T aéreo,cmarítimo ,
el rol asistencial, educador,
m o terrestre;
a como
A il . o
enfermero
c a rgcentrales A
en de R Gy centros m
radio a
de coordinación de urgencias,
es examinadorVen casosadesabuso
Denfermero @ g 9
sexual, enfermero
9 integrante de
r g
Juntas Institucionales de Emergencias y Desastres,
9 5 .
enfermero certificado en
a vital básico
trauma y enfermero envsoporte
a 2 3 1
.y avanzado (20).
i x 2
ah 87.
5. COMPETENCIAS
5.1. Conceptualización
Ahora bien, para que una persona pueda llevar a cabo los comportamientos
incluidos en las competencias que conforman el perfil de exigencias de un
puesto es preciso que en ella estén presentes una serie de componentes:
Saber (conocimientos): el conjunto de conocimientos acerca de siste-
mas, técnicas, etc. que permitirán a la persona realizar los comporta-
mientos incluidos en la competencia.
Saber hacer (habilidades/destrezas): que la persona sea capaz de apli-
car los conocimientos que posee a la solución de los problemas que le
plantea su trabajo. Así, no basta con que la persona conozca las técni-
cas e instrumentos para desempeñar una tarea, sino que debe saber
H I XA
aplicarlos a su situación de trabajo particular.
2 7 A
64 2
Saber estar (actitudes/intereses): no basta con hacer eficaz y
d a a
eficientemente las tareas incluidas en el puesto de trabajo; es preciso,
,
r iz a R O I P :
también, que los comportamientos se ajusten a las normas y reglas de
a u t o T O ,
la organización, en general, y de su grupo de trabajo, en particular.
m
g a A S il . c o
Querer
c
a r hacer
A R G
(motivación): además de
m
lo
a anterior, la persona debe
esquerer llevar a cabo
V los
D motivacional. Por ejemplo, @ g
conocimientos. Nos referimos
9 pues al aspecto
9 los conocimientos
r g una
a s persona puede
9 5 .
tener
precisos para realizar
a v aenadecuadamente
2 3 .el1triagesudecomportamiento
pacientes en urgen-
h x
cias, saber iaplicarlos
a de la organización
su
7 . 2
trabajo y adecuar a las
normas 8 y del grupo de trabajo; sin embargo, si com-
prueba que sus esfuerzos por conseguir un triage eficaz y eficiente no
se valoran, no tienen ninguna repercusión sobre sus evaluaciones del
desempeño o no son apoyados por sus superiores o colaboradores, puede
llegar a decidir que no merece la pena esforzarse por hacerlo bien.
Tabla 6.
PERFIL DE COMPETENCIAS
ah i x . 2
9) Llevar a cabo un trabajo cooperativo, dentro de un enfoque interdisciplinario.
7
8
10) Conocer la naturaleza ética de la profesión y de los principios generales relacionados con
la salud y los cuidados.
11) Conocer los principios de financiación sociosanitarios, capacitando para la utilización
adecuada de dichos recursos.
12) Comprometerse con el autoaprendizaje como instrumento de desarrollo y responsabi-
lidad profesional.
13) Establecer mecanismos de evaluación, considerando los aspectos científico-técnicos y los
de calidad percibida.
14) Tener capacidad innovadora y de divulgación de los hallazgos científicos.
a v a 2 3 . 1
en los tres colectivos, aunque con niveles de conducta diferentes:
a h i x 7 . 2
1) En los tres colectivos 8
se detectó una necesidad de afiliación que se
manifiesta en una competencia concreta: Espíritu de Servicio, es decir
los profesionales muestran una cierta satisfacción prestando ayuda a
los demás, amistad o cuidando la intimidad de los pacientes cuando
éstos lo precisan. Estas características se añaden en nuestro colectivo
a la competencia Comprensión de los Demás lo que significa que no
sólo se intenta dar servicio, sino que se procura comprender el signifi-
cado y la trascendencia de lo que manifiestan otras personas, tratando
de satisfacer al interlocutor cuanto éste se encuentra en dificultades.
• Utilizar los conceptos teóricos y el conocimiento de los cuidados de enfermería como base para
la toma de decisiones en la práctica enfermera de urgencias y emergencias.
• Impulsar líneas de investigación que sean relevantes para el diagnóstico, las intervenciones y
los resultados en urgencias y emergencias.
• Adoptar actitudes concordantes, en la toma de decisiones éticas y en su aplicación, con el
Código Deontológico de la Enfermería.
• Realizar la recogida y análisis de datos de salud o enfermedad de la persona, familia o comuni-
dad, de forma continua y sistemática, en base al marco conceptual de enfermería adoptado para
la prestación de cuidados enfermeros en el ámbito de urgencias y emergencias, y en base al
conocimiento científico, la concepción de los cuidados enfermeros, los componentes de la
situación y la percepción del paciente y su ecosistema.
• Realizar los pertinentes planes de atención de enfermería estandarizados para su posterior
aplicación mediante planes de atención de enfermería individualizada basados en los diagnós-
ticos enfermeros formuladas, y evaluar de forma eficaz y rápida las respuestas humanas que se
generan ante los problemas de salud reales y/o potenciales que amenazan la vida o no permi-
ten vivirla con dignidad
• Evaluar, y modificar si hay pertinencia, los planes de cuidados basándose en las respuestas del
paciente, de la consecución de los objetivos y de los resultados medidos.
H I XA
•
2 7 A
Prestar atención integral a la persona, para resolver individualmente o como miembros de un
equipo multidisciplinar, los problemas de salud que le afecten en cualquier estadio de la vida
64 2
con criterios de eficiencia y calidad.
•
d a
Someter a triage los pacientes a los que se prestan cuidados en situaciones de emergencias y
a ,
r i a R O
catástrofes, y aplicar la RAC Recepción, Acogida y Clasificación a los que se prestan cuidados
z I P :
urgentes en el ámbito hospitalario y de atención primaria de salud, y en el ámbito de la atención
u to T O m,
urgente extrahospitalaria cuando no proceda, o esté superado, el triage, determinando la
a
a A S l . co
prioridad del cuidado basándose en las necesidades físicas y psicosociales y en los factores que
i
c arg R G a
influyan en el flujo y la demanda de pacientes.
A m
De
•s V @ g 9 9
Utilizar con destreza y seguridad los medios terapéuticos y de apoyo al diagnóstico que se
rg a s 9 5 .
caracterizan por su tecnología compleja.
•
a v a 23 . 1
Establecer una relación terapéutica eficaz con los usuarios para facilitarles el afrontamiento
ah i x 7 . 2
adecuado de las situaciones que padezcan.
•
que le compete.
8
Participar activamente con el equipo multidisciplinar aportando su visión de experto en el área
3,5
3
2,5
2
1,5
1
0,5
0
Espíritu de
servicio
Pensamiento
conceptual
al logro
Orientación
Iniciativa
Comprensión
de los demás
por el orden
y la claridad
Preocupación
Pensamiento
análitico
información
Búsqueda
H I XA
2) “Necesidad de logro”. Parece que las características 7 deA la asistencia
4
extrahospitalaria, en la que los pacientes graves 2
2que sobreviven pasan
a
al nivel hospitalario, determina la percepción6 de que el resultado final
de la asistencia quede fuera dea d a
la capacidad del O , para alcan-
profesional : le
to r iz
zarlo, de ahí que el profesional tienda a O R
marcarse metas , I P
parciales que
a u S T c o m profesional.
permitan a hacer
rg Búsqueda A
una valoración objetiva de su .actuación
Gde Información i l
a también detectada en los
s La a
c competencia
V A R g m
De bilita anticiparse a problemas
tres colectivos, está relacionada
g s @con la necesidad
. de9
9
a inherentes1a9asistencias
logro, ya que posi-
5 inesperadas, per-
v a r
mite reducir laaincertidumbre 3
acerca .
del resultado final.
i x 2 2
87. constituye una guía de actuación, que
ah de Procedimientos
3) El Manual
en muchos casos marca la primera meta a cumplir y mejorar. Se percibe
también como un elemento de protección, tanto en lo relativo a los
riesgos físicos que supone la asistencia extrahospitalaria como a los
legales. En este estudio se ha detectado también que los procedimien-
tos suponen una herramienta que fomenta el espíritu de equipo, ya que
una actuación coordinada en una situación compleja requiere que se
haya definido previamente y con claridad cuál debe ser la función de
cada miembro del equipo.
a
Deseo de producir a un efecto sobre los demás,
end a,
II: I MPACTO E
influira ello o impresionarles,O fin de conseguir :
I
to r iz
NFLUENCIA
O R
que sigan un plan o línea de acción determinada
, I P
a u Capacidad S T c o m
CP: C
r g a ONCIENCIA
deGlas A
organizaciones y i l .
para entender las relaciones de poder dentro
aa los demás lo que han
utilizarlas adecuadamente
s c a DD: DVARCapacidad de comunicar
P OLÍTICA
g m
De a
AR
s
de hacer @ 5
para que cumplan los . 9 9 de uno,
deseos
rgteniendo en cuenta
D
el 9
IRECTRICES
v a 3 . 1 interés de la organización
L: Lixa 2 2
a h 8o 7 .
Capacidad
IDERAZGO
equipo.
para desempeñar el rol de guía de un grupo
Implica el deseo de mandar sobre otros
AD: APROVECHAMIENTO Capacidad para identificar recursos y establecer
DE LA DIVERSIDAD redes de relación, , de forma que estos ayuden
a mejorar los resultados de la organización
IO: INTEGRACIÓN EN LA Capacidad para orientar el comportamiento
ORGANIZACIÓN en la dirección indicada por las necesidades,
prioridades y objetivos del SAMUR
DP: DESARROLLO Capacidad para emprender acciones eficaces para
DE PERSONAS mejorar el talento y las capacidades de los demás
CRÉDITOS
UNIVERSIDAD PROVINCIA DENOMINACIÓN ECTS ORIENTACIÓN
Universidad MÁLAGA Máster en cuidados integrales 60 Mixto
de Málaga de enfermería en situaciones
críticas y urgencias en el adulto
Universidad BARCELONA Máster en atención integral al 60 Mixto
Autónoma enfermo crítico y emergencias
de Barcelona
Universidad BARCELONA Máster en atención integral al 60-120 Mixto
de Barcelona enfermo crítico y emergencias
Universidad MADRID Máster en urgencias, 60 Académica
Europea emergencias y críticos
de Madrid
Universidad MADRID Máster en cuidados críticos 120 Mixto
Rey Juan Carlos
Universidad MURCIA Máster en enfermería de 60 I XA
Profesionalizante
H
de Murcia anestesia y cuidados intensivos
2 7 A
64 2
d a a ,
r iz a R O I P :
a u o O
t como ya seShaTcomentado anteriormente,
m ,
En el ámbito docente,
a A il . c o las
c a rgeuropeas están
universidades
A R G dentro
trabajando
m adel marco del EEES, que
es en todos losVpaíses se aajustará
homogeniza
Dsuperior los estudios enfermeros. La g
@a las 4.6005loshoras
duración de estudios de educación
9 9reguladas por las
g s
rformación .
9 (240 créditos europeos y
directivas comunitarias.vLaa
a y postgrado 3 . 1
pregrado
2 y doctorado) es prácticamente
h i x
cuatro años académicos)
7 . 2 (máster
ael ámbito de la8unión europea (Tabla 10).
igual en todo
En los países europeos existe una numerosa oferta de especialización en
diversos ámbitos del ejercicio profesional. Es ahí donde encontramos
diferencias importantes, en las necesarias especialidades enfermeras. En los
países europeos hay una numerosa oferta, con múltiples programas y
contenidos, el número de especialidades varía notablemente según el país, de
un número pequeño de especialidades en algunos países hasta las 50 que
posee Reino Unido (27) (Tabla 11).
Tabla 11.
Cuidados Intensivos
iz a
Traumatología
r y Urgencias
R O
Cuidados
I P
Anestesia
a to
u Anestesia T
Cuidados Intensivos O Anestesia,
m
a A S il . c o
c a rg A R GG m a I
s F INLANDIA
V
DeCuidados Intensivos Traumatología @ g RECIA
9 9 y Urgencias RLANDA
a s
rg Intensivos 5 .
y Urgencias Traumatología
9 Cuidados Intensivos
a v a Cuidados
2 3 . 1
a h i x 7 . 2
Anestesia Anestesia
L UXEMBURGO
8 H OLANDA P ORTUGAL
u to
a de criteriosApara T O m ,
a
El establecimiento
g S la evaluación
il . c olos especialistas
c r
aformación. VAR G m a de
sen
De El informe sobre programas @ g 9 9
r g a s y criterios
9 5 .
relativos a la formación con-
va especialmente
tinuada de los enfermeros,
a 2 3 1
. los que se refieran a la acre-
ditaciónh i x 2
. de profesionales en áreas funcio-
8del7avanzada
a y la acreditación
nales específicas dentro campo de la especialidad.
La participación en el diseño de los planes integrales dentro del ámbi-
to de la correspondiente especialidad.
El establecimiento de los criterios para la evaluación en el supuesto
de nueva especialización.
La propuesta de creación de áreas de capacitación específica (28).
H I XA
2 7 A
64 2
d a a ,
r iz a R O I P :
a u to T O m,
a A S il . co
c arg A R G m a
Des V @ g 9 9
rg a s 9 5 .
a v a 23 . 1
ah i x 7 . 2
8
d a a
ra de las enseñanzas universitarias y se regulan los estudios universita-
,
r i a R O
rios oficiales de Grado. BOE núm. 21, de 25 de enero.
z I P :
19. Sociedad Españolaude
a o O m ,
t EnfermeríaSde TUrgencias y Emergencias. Perfil
g a
para EnfermeríaG A . c o
il Urgencias y Emergen-
a r
profesional
ciasc[monografía en A R Clínica Avanzada en
m a
Dedes Urgencias y Emergencias
Vinternet]. [citado
@ g Española
Sevilla: Sociedad
9 9 de Enfermería
r g a s 9 5 .
21 Jul 2008]. Disponible en URL:
a v a 2 3 .1
www.enfer meriadeurgencias.com/documentos/fundamentos/
a hix
perfil_profesional.pdf.
8 7 .2
20. Federación Iberoamericana de Enfermería de Urgencias y Emergenicas.
Perfil Profesional de la Enfermería de Urgencias, Emergencias y Desas-
tres [monografía en internet]. Chihuahua (México): Federación Iberoame-
ricana de Enfermería de Urgencias y Emergenicas. Perfil Profesional de
la Enfermería de Urgencias, Emergencias y Desastres [citado 21 Jul 2008].
Disponible en URL: www.enfermeriadeurgencias.com/documentos/fun-
damentos/perfil_ibameue.pdf.
METODOLOGÍA ENFERMERA
EN URGENCIAS Y EMERGENCIAS H I XA
2 7A
64 2
d a a ,
r iz a R O I P :
a u to T O m,
a A S il . co
c arg A R G m a
Des V @ g 9 9
rg a s 9 5 .
a v a 23 . 1
ah i x 7 . 2
8
H I XA
2 7A
64 2
d a a ,
r iz a R O I P :
a u to T O m,
a A S il . co
c arg A R G m a
Des V @ g 9 9
rg a s 9 5 .
a v a 23 . 1
ah i x 7 . 2
8
CAPÍTULO 3
1. INTRODUCCIÓN
H I XA
2 7 A
2
Vivimos unos momentos profesionales en los que, con mayor o menor
64
d a a
acierto, escuchamos hablar con asiduidad de Proceso Enfermero en todo
,
r i a R O
lo que se relaciona con nuestra disciplina, la enfermera. No sólo en las
z I P :
a u to T O m,
reuniones científicas enfermeras (Congreso de la Sociedad Española de
a A S il . co
Enfermería en Urgencias y Emergencias, Congreso de la Sociedad Andaluza
c arg R G a
de Enfermería en Cuidados Críticos, etc.) sino que también en las
A m
Des V @ g 9 9
multidisciplinares (Congreso de la Sociedad Española de Calidad Asistencial,
rg a s 5 .
Jornadas de la Asociación de Economía para la Salud, etc.) se pueden observar
9
a v a 23 . 1
cada vez más comunicaciones y ponencias que abordan aspectos como los
h i x 7 . 2
modelos de cuidados, lenguajes estandarizados, intervenciones enfermeras,
a 8
investigación orientada a resultados; algunas políticas sanitarias cuentan entre
sus objetivos el de la implantación de esta metodología de cuidados y el
desarrollo de la cartera de servicios enfermera en sus equipos asistenciales;
los proveedores de acciones formativas incrementan cada vez más la oferta
orientada a la ciencia enfermera. Con seguridad podríamos continuar
enumerando evidencias que muestran la existencia de un proceso de cambio
en el rol enfermero dentro de las organizaciones y de la cartera de servicios
ofertada a la comunidad.
d a a
científicamente que el contacto con el paciente reduce su ansiedad) y
,
r i a R O I P :
reconocimiento (dejo registrada mi valoración y problema detectado, así como
z
to O ,
mi intervención y resultados obtenidos: el paciente se encuentra más tranquilo).
a u T mgeneralidades
a A S il . c o
c
de procesoa rg
Este capítulo no quiere
A
ser
enfermero. NuestraR
uno
G más de los
pretensióng
que
esm
se
quea
escriben con
sea una herramienta válida
e
Dpara s V s @ 9 9 el ámbito de las
hacer práctica esta metodología,
a siendo específico
rg hospitalarias 5 . para
9 extrahospitalarias. Para
urgencias y emergencias,a
v tanto
aalgunos ejemplos 3 . 1
como
2que pueden ilustrar los contenidos
ello hemos incluido
a h i x 7 . 2
teóricos, para una mejor 8
comprensión.
del tema con la bibliografía aportada.
Recomendamos una profundización
Alfaro nos plantea que es una forma dinámica y sistematizada de brindar cuidados
enfermeros. [ ] promueve unos cuidados humanísticos, centrados en unos objetivos
(resultados) y eficaces (1).
Es sistemático, está conformado por un conjunto predeterminado de
fases encadenadas como un método científico de resolución de problemas.
El dinamismo lo aporta la experiencia de la enfermera, la adaptabilidad del
método al cuidado del individuo, del núcleo familiar y de la comunidad,
que será capaz de ir de un paso a otro en función de la sospecha diagnóstica,
enfatizando tal vez determinados aspectos de la valoración para confirmar
el diagnóstico. El aspecto humanista está íntimamente relacionado con
H I XA
nuestra consideración de los intereses, valores y deseos del usuario de nuestro
2 7 A
servicio. Por último, cuando hablamos de que se centra en resultados nos
referimos a que todo el proceso busca conseguir los mejores resultados, de
64 2
la forma más eficiente, que nos permitan comprobar y demostrar que nuestra
planificación ha sido efectiva. d a a ,
r iz a R O I P :
El PE consta de cinco
a u o T e O
t ejecución ySevaluación.
fases sucesivas interrelacionadas:
m ,valoración,
diagnóstico, planificación,
a A il . co
c a rg A R G m a
s V
e Fase de Valoración as@
D2.2. g 9 9
rg 9 5 .
v a 3
a toda .la2información
2 . 1
necesidadesa h i x
En esta fase recogeremos
7 sobre la satisfacción de las
8 de salud del usuario, así como los recursos
de cuidados y el estado
y potencialidades con las que cuenta. Se pueden distinguir cuatro pasos:
recogida, validación, organización y registro de los datos.
En la recogida obtendremos datos objetivos y subjetivos, actuales y
pasados. De forma automática, cuando nos enfrentamos a una situación
de urgencia o emergencia, lo primero que hacemos es recoger datos, ya
sea por medio de la observación directa, la entrevista (con el paciente,
familia o testigos) o el examen físico. Nos estamos acercando al paciente
Ejemplo. Cuando nos presentamos ante una paciente con dolor torácico
de manera automática ya estamos recogiendo datos por medio de la ob-
servación (se lleva la mano al pecho, gesto de dolor, sudoración, etc.). En
los primeros segundos ya estamos recogiendo datos a través de la entre-
vista (¿qué ha pasado?, ¿cuándo empezó el dolor?, ¿dónde le duele?, ¿cómo
es el dolor?, ¿se va a algún sitio?, ¿tiene antecedentes?, ¿es la primera vez
que ocurre?, ¿es alérgico a algo?, ¿toma medicación para algo?, etc.). De
forma simultánea ya hemos empezado con el examen físico mediante la
inspección, palpación, percusión y/o auscultación (valoramos si el dolor
aumenta con nuestra palpación, tomamos la presión arterial, monitorizamos
la actividad cardiaca, etc.).
Una vez los datos han sido validados deberemos organizarlos según
una sistemática que permita su fácil interpretación, tanto de forma aislada
como de sus posibles interrelaciones. Como ya veremos en más de una
ocasión, es de suma importancia tener claro cuál es el modelo que estamos
utilizando. En un supuesto modelo orientado desde la fisiopatología los
r g a s pertenecen 5
9 al .rol interdependiente de
a v a
la enfermera, y Diagnósticos Enfermeros
2 3 . 1(DE), que pertenecen al rol
independienteh
a x de la enfermera.
o ipropio
7.2
8
Luis MT define el PC como aquellos problemas de salud reales o potenciales en
los que el usuario requiere que la enfermera haga por él las actividades de tratamiento y
control prescritas por otro profesional, generalmente el médico (4).
Por su parte, el DE lo definió la NANDA en su 9ª Conferencia como
un juicio clínico sobre la respuesta de un individuo, familia o comunidad frente a
procesos vitales o problemas de salud reales o potenciales, que proporcionan la base
para la selección de la actuación enfermera destinada a lograr objetivos de los que la
enfermera es responsable.
r g a s el plan. 5.
9resolución de los problemas
v a 3 . 1
detectados.aNo ixa son igual
En primer lugar tendremos
htodos 8
que
7 .
de
2
priorizar
2 la
importantes ni se pueden tratar en el
mismo momento. Sobre la priorización sólo existen recomendaciones de
cómo llevarla a cabo, basadas en la experiencia asistencial. Muchas
enfermeras no sabrían explicar en qué se basan para decidir qué problema
tratar primero, pero en la práctica lo hacen a diario perfectamente. Está
claro que comenzaremos con los problemas que amenazan la vida de las
personas, pero ¿cómo priorizar después? Algunas autoras recomiendan
abordar en primer lugar los problemas que sean prioritarios para el paciente,
a continuación los que contribuyan a la aparición o permanencia de otros
Para cada problema debemos fijar algún objetivo, es decir, tendremos que
H I XA
determinar a priori cuál es el resultado que esperamos obtener, el que permita
evaluar la resolución del problema. Se trata de dar sentido a nuestra práctica
2 7
asistencial, detallar qué esperamos conseguir con nuestra actuación.
A
2
6de4si se trata de un problema
a EnOa
El tipo de objetivo será diferente dependiendo
d ,
de colaboración o de un diagnóstico
r iz a enfermero. R el primer caso,P
I :
puesto
que el tratamiento depende o
aut decorrecta O
T los objetivos
otro profesional, m ,
siempre irán
encaminados g a laarealización A S
del il . c
cuidado prescrito o y a hacer frente a
r
ca precozmente
las complicaciones R G
Alos signos
que puedan a
m medidas
aparecer, instaurando para prevenirlas
e s V
Den el caso de los diagnósticosgenfermeros@ g 9 9
y detectando
r a s y/o síntomas
5 de. éstas. Por
9 deberán ir siempre
el contrario,
v a 3 . 1
los objetivos
hixa si delel8paciente
encaminados a conductas
intervenciónamediremos 7.22ha cumplido el objetivo marcado. Las
paciente. En el momento de evaluar nuestra
Por último, como no podría ser de otra manera, es necesario plasmar por
escrito el plan que hemos diseñado. Hay que tener en cuenta que en la mayoría
de las ocasiones no podremos ver resuelto el problema, es decir, que nuestros
compañeros deberán seguir trabajando en base al plan diseñado. Se trata de
promover la comunicación entre los cuidadores, facilitar la continuidad de
los cuidados.
Para que sea posible realmente, la planificación de cuidados en urgencias
y emergencias deberá estar hecha antes de enfrentarnos a la situación. Es
decir, si conocemos de antemano qué tipo de pacientes o demandas son las
más frecuentes ya podríamos tener planificados los cuidados de sus problemas
de colaboración y diagnósticos enfermeros más frecuentes. Si ya sabemos
H I XA
2 7 A
que el dolor precordial es uno de los motivos de demanda asistencial urgente
2
más frecuentes en nuestro entorno, sería lógico que ya estuviera consensuado
64
d a
con nuestros compañeros cuáles deberían ser los objetivos e intervenciones
a ,
cuando nos llegará este tipo de pacientes. De la misma manera, podríamos
r iz a R O I P :
a u to T O
conocer cuáles serán los diagnósticos enfermeros más frecuentes (el temor,
m,
a A S il . o
la falta de conocimientos, etc.). Pero en este caso es necesario dejar claro que
c
c a rg A R G m a
los objetivos e intervenciones deben ser personalizados, en función de la
De s V g
persona, sus características (edad, cultura, raza, etc.) y sus potencialidades
@ 9 9
a s
(qué podemos conseguir con ella).
rg 9 5 .
v a 3 . 1
ixa
Ejecución 87.
deh
2.5. Fase a
22
En esta fase pondremos en práctica el plan diseñado, llevando a cabo las
intervenciones que hemos prescrito. Es necesario hacer hincapié en la
conveniencia de conocer las intervenciones enfermeras más frecuentes, para
poder valorar si somos capaces de realizarlas. Nadie pone en duda que, a
partir de algunos años de experiencia, todos somos capaces de canalizar vías
venosas periféricas, administrar medicación parenteral o instaurar sonda
vesical, de forma correcta, aséptica, eficiente, etc. Pero, ¿sabemos disminuir
No podemos decir que sea la fase más importante, porque todas lo son.
Pero sin lugar a dudas esta es la fase que determina la efectividad de nuestras
intervenciones, de nuestra práctica asistencial. Se trata de evaluar, de la forma
más objetiva y reconocida posible, los resultados de nuestro plan de cuidados.
Ahora es el momento de volver al objetivo propuesto y comprobar en qué
H I XA
medida se ha conseguido.
2 7 A
Ejemplo. ¿Hemos conseguido que el paciente 2
4 que la muerte no
6IAM?
verbalice
d a
tiene por qué ser una de las consecuencias a del ¿Hemos conseguido
, Es posible que
i
que el paciente se muestre más
r z a
tranquilo R O
y colaborador?
I P : la
respuesta sea afirmativa,
a o
ut depero en urgencias O
T y emergencias ,
mamásvecestiempo.
no es
posible ver elaresultado
g A
nuestra S l
intervención,ihace. c o
falta
a r R G m a
eNoscconseguir el resultado
Dellas VA esperado
a s @ g deberse a9varias
puede
. 9 razones. Entre
debemos insistir en querlaginterrelación
a . 1 9
de las 5
distintas fases del proceso
h i x avpodemos
puede ser la clave para entender qué ha
. 2 2 3 Tal vez el objetivo no era el
pasado.
a
correcto, pero también
8 7pensar que fueron las intervenciones las que
fallaron (ya sea en su elección o en su ejecución). Ahora se entenderá mejor
nuestra insistencia con la detección del problema, porque llegados a este punto
puede ser que descubramos que el problema para el que habíamos propuesto
objetivos e intervenciones no existía, el problema era otro.
Esta sería una visión global y general (con algún ejemplo concreto) de la
aplicación del proceso enfermero en nuestro ámbito de actuación. No obstante,
será necesario el estudio de los siguientes apartados para su puesta en práctica.
El proceso enfermero nos dice cómo se deben hacer las cosas, cómo se
Desguaje estandarizado.
valores g y con9la9utilización de len-
comunidad
r g a s 9 5 .
a va evidencia 2 3 1
. sobre su utilización en
disponible
i x
4) Validez demostrada,
7.
ahasimilables al8propio.
entornos 2
5) Viabilidad. Posibilidad de éxito de acuerdo al tiempo necesario para su
implantación, la relación entre recursos necesarios y disponibles, nece-
sidades de adaptación a los procesos organizativos vigentes, etc. (2).
Explicitar todos los modelos por los que se podría optar requeriría un
extenso capítulo específico. Dado que resulta fácil acceder a bibliografía que
nos oriente y explique cada uno de ellos, nos limitaremos a señalar que en
nuestro entorno el más utilizado es el de Virginia Henderson, aunque algunas
4. EL LENGUAJE ESTANDARIZADO
d a a
utilidad de estar incluido como lenguaje enfermero reconocido es que implica
,
r i a R O
que el sistema de clasificación es aceptado como soporte para la práctica
z I P :
to O
enfermera al proporcionar una terminología clínicamente útil (5).
a u T m ,
a A S il . c o
por sel c arg diagnóstico,
Los diagnósticos
concepto
enfermeros
V A R Gse ordenan
entendiendo g
en
m
esta
como
a taxonomía
tal el
alfabéticamente
elemento principal o
e @
Dparte esencial y fundamental,glaaraízs de la formulación 9
.9nuevos
diagnóstica. Puede
a r
constar de una o más palabras. En cada .
edición 1
se9 5
incluyen diagnósticos
i
o revisiones de losx v
a e inclusive
existentes, 2 3
2se eliminan algunos. Las propuestas
h 7 .
adiagnósticos y la8revisión de los actuales se someten a un proceso
de los nuevos
sistemático que determine su consistencia con los criterios establecidos para
los diagnósticos enfermeros. Todas las propuestas son clasificadas en etapa
de desarrollo o validación según las evidencias aportadas.
Etiqueta diagnóstica
Es el nombre, denominación del diagnóstico. Es una frase concisa y
puede incluir calificativos, junto a ella se incluye entre paréntesis el
año en que se aprobó el diagnóstico. Si hay varias fechas se correspon-
den con las revisiones posteriores.
Definición
Explica de forma clara y precisa el diagnóstico. Expresa su naturaleza
esencial y delimita su significado. Permite diferenciar cada etiqueta de
las restantes.
Características definitorias
Son las características, evidencias clínicas que definen un diagnóstico
real. Son concretas y están presentes cuando nos encontramos ante H I XA
una etiqueta diagnóstica en concreto.
2 7 A
64 2
Factores relacionados
d a a ,
r iz a R O I P :
a u o
Son los factores etiológicos O
y contribuyentes o factores de ,riesgo
t de riesgo)SqueTtienen relaciónom (en el
caso de los diagnósticos
rg a G A a il . c con la aparición
s
dela
c diagnóstico.
V A R g m
De a s @ 5 . 9 9
v a rg
4.3. Clasificación de Intervenciones
3 . 1 9
Enfermeras
h i x a . 2 2
En 1987a Johanne McCloskey 7
8 y Gloria Bulechek crean el primer grupo de
investigación para desarrollar la Clasificación de Intervenciones de Enfermería
(NIC) en el College of Nursing de la Universidad de Iowa (6).
Entre los años 1987 y 1992 se elabora la clasificación, y a partir del año
1990 se comienza a elaborar la taxonomía. A partir del año 1993 se inicia el
uso para su prueba y perfeccionamiento clínico. Es a partir del año 1996
cuando se inicia su uso generalizado mientras se sigue trabajando en su
mantenimiento y actualización constante.
H I XA
son las evidencias documentales que respaldan el criterio de resultado
o los indicadores que se proponen dentro de éste.
2 7 A
64 2
5. ROL DE LA ENFERMERA DE URGENCIAS
d a a ,
Y EMERGENCIAS
r iz a R O I P :
a u to O
Tcrítico y delcorolm ,
a
Cuando hablamos
g del entorno
G A
del S
paciente i l . que desempeña
la enfermerar
ca enconelunacuidado R
A habilidad
de éste, la imagen a
menmás extendida presenta a
e s V
Dde técnicas, más o menos complejas, @ g 9 9 de multitud
profesionales gran
a s práctica
ralgpaciente, 5el
.desarrollo
9 de tecnología específica
a v a 2 3 . 1
y de manejo
h i x
que persiguen estabilizar
. 2 además de conocimientos en
a que le permiten
fisiopatología 87 monitorizar su evolución y detectar
tempranamente posibles complicaciones.
Si pensamos en el usuario nos lo imaginamos con multitud de dispositivos
externos de monitorización o soporte (electrodos, catéteres, dispositivos de
inmovilización) y en una relación de entrega sin cuestionamientos a
intervenciones y decisiones de los profesionales implicados.
En estos entornos es importante una actuación rápida, y resulta
incuestionable que la enfermera debe prestar cuidados derivados de su rol
identificar e intervenir v r g 1
aresolver los2problemas 9 5
el profesional
. de cuidados y los efectos
i x a para
. 2 3
a
independiente.
h
del proceso sobre la capacidad
8 7 de la persona para funcionar de modo
v a rg
ciente crítico. Tempus Vitalis. 2002;
3 . 1 9
31-35.
i x
10. Rodríguez Salvador
h a MM, Torres.López
2 2 L, Azañón Hernández R, Rodríguez
7
CameroaM, Palma García8J. Experiencia en la implantación del proceso
enfermero en emergencias. Tempus Vitalis. 2003; 3 (1): 4-10.
11. Péculo Carrasco JA, Rodríguez Bouza M, Jiménez Cordero JP, Grupo
Regional de Proceso Enfermero. Metodología de Proceso Enfermero con
modelo conceptual de Virginia Henderson en asistencias
extrahospitalarias en la provincia de Cádiz. En: Sociedad Española de
Enfermería de Urgencias y Emergencias. Enfermería de Urgencias y
Emergencias: Buscando el consenso. Sevilla: MAD; 2006. p. 29-35.
H I XA
2 7 A
64 2
d a a ,
r iz a R O I P :
a u to T O m,
a A S il . co
c arg A R G m a
Des V @ g 9 9
rg a s 9 5 .
a v a 23 . 1
ah i x 7 . 2
8
da a
las intervenciones enfermeras. Estas etapas no son idénticas a las del actual
,
r i a R O
PE pero fueron determinantes para que un año después un grupo de
z I P :
to O ,
profesoras de la Universidad de Colorado identificaran cuatro de las actuales
a u T m
etapas del PE (1).
a A S il . co
a rg del PEAdelRpasado
Loscmodelos
G no especificaban
m a explícitamente los
s V g
e esperados, de maneraasque@la primera generación
Dresultados 9 9 (1950-1970)
rg y el3proceso; 5 .
9 la segunda generación
estaba enfocada en los a
v problemas
. 1
ixa los8diagnósticos
(1970-1990) priorizaba
7.22llegamos a la tercera generación del
tiempo quealahprofesión evoluciona
y el razonamiento. Al mismo
1.1. Definición
Son bastantes las definiciones que se han dado, hasta el momento, sobre
el PE. Analizaremos algunas de ellas con el fin de identificar las diferencias
en función del modelo o la orientación profesional de la persona que lo
define.
En palabras de Phaneuf, el proceso de Enfermería es un método lógico de
resolución de problemas que debería ser utilizado por todos los profesionales que trabajan
con enfermos (2).
Podemos observar cómo la autora en su definición identifica el PE con el
H I XA
7
método de resolución de problemas, y es que de hecho el PE constituye
2 A
64 2
una de las múltiples variantes del proceso de resolución de problemas aplicado
d a a
de modo particular a los cuidados enfermeros. Por eso, a pesar de algunas
,
r i a R O
diferencias, existen grandes semejanzas entre los dos procesos. Al utilizar el
z I P :
a u to T O ,
término problema, cuyo significado se asocia a dificultad o alteración, limita
m
a A S . c o
la finalidad de los cuidados enfermeros que son la identificación y actuación
il
a rg R
sobre las respuestas del sujeto.
c A G m a
s V
DeUn carácter más amplio y gdescriptivo g
@nos da R.5Alfaro 9 9
r a s 9 . cuando responde
a la pregunta sobre a a
v es el PE?.2El2proceso
¿que . 1
3 enfermero es una forma dinámica
a
y sistematizada h
de i x
brindar cuidados7 .
enfermeros. Eje de todos los abordajes enfermeros,
8
el proceso promueve unos cuidados humanísticos centrados en unos objetivos (resultados)
eficaces. Impulsa a las enfermeras a examinar continuamente lo que hacen y a plantearse
cómo pueden mejorarlo (3). Alfaro introduce en su definición algunas
características importantes que merece la pena analizar:
d a a
trabajar de manera sistemática y estructurada y lo define como un proceso
,
r iz a R O I P :
científico que requiere una serie de capacidades cognitivas, interpersonales y técnicas.
a u to T O ,
Comprende una serie de etapas definidas que responden a reglas lógicas comunes a todos
m
a A S l . c o
los métodos científicos. La destreza necesaria para su adecuada utilización se
i
c a rg R G m a
alcanza mediante la combinación de estas capacidades.
A
s V
DeEstos dos autores al identificarlo g
@ un proceso 9 9 o científico
a scomo
rgel método científico,5 . intelectual
9 que implica razonamiento
lo relacionan directamentea
v con
3
aconcurrente, creativo, . 1
2 crítico y sistemático. La diferencia
i
clínico, pensamiento
h x 7 . 2
se debe al a hecho de que en8el método científico el problema se define
generalmente al principio y la recogida de datos se realiza después de esta
identificación, en el resto de etapas se dan semejanzas con las del PE y con
las del método de resolución de problemas.
El análisis de estas definiciones nos lleva a concluir afirmando que nos
encontramos frente a una herramienta que puede ayudarnos a no perder la
referencia y el objetivo de nuestra actuación profesional: el cuidado al
individuo, familia o comunidad para conseguir el mayor nivel de bienestar
1.2. Objetivo
2 7 A
Evaluar la calidad de los cuidados prestados.
6 4 2
Propiciar el desarrollo profesional
d a
ay el crecimiento, disciplinar ya que
r i z a
sus principios y reglas promueven R O
el pensamiento crítico. IP:
a u to T O m ,
El propósito a
g del proceso para Iyer S
A es dar un a il
marco o
.cde referencia dentro
del cual r
cserlasaatendidas
necesidades A R G m la familia9 y la comunidad
del sujeto de atención,
D e s V @ g
puedan en forma
r g a s
integral (5).
9 5 .9
a v a 2 3 .1
ahix
1.3. Organización
87.2
Igual que el método de solución de problemas proporciona las bases para
el pensamiento preciso y disciplinado en las situaciones cotidianas, el PE
como método de intervención utilizado en la práctica enfermera proporciona
las bases para el pensamiento crítico en enfermería, y consta de una estructura
lógica y secuencial que se establece en cinco etapas, esta división es un poco
artificial, puesto que se trata de un proceso intelectual a menudo difuso, cuyas
etapas, a veces, se superponen.
a h i x desarrollo
7 . 2
8
Aceptando la utilidad del PE en la práctica clínica de enfermería su
utilización no es mayoritaria y en algunos sectores se percibe como un
incremento en las cargas de trabajo del profesional, existe también escasa
sensibilidad sobre la necesidad de incorporarlo como instrumento
imprescindible para cuidar (7). Aunque no es menos cierto que, los servicios
de salud manifiestan que el ciudadano es el centro del sistema, que debe
tomar parte y decidir en su proceso de salud, que se le deben proporcionar
servicios ininterrumpidos, integrales y personalizados, premisas totalmente
a v a la contrastación
afirma la autora deben conducirnos a la
2 .1de dichos datos con el propio
planificación
3 intervenciones,
ix
y será requisito indispensable
paciente. ah 87.2
La valoración Alfaro la define como recogida de datos continua, intencionada,
diseñada para proporcionar la información requerida para:
Recogida de datos.
Análisis y síntesis.
Identificación de respuestas.
a v a 23 . 1
jamás es estereotipar la figura del paciente evitando la individualización
del cuidado.
a h i x 7 . 2
8 datos es continua, aunque por razones
Esta fase de recogida de
metodológicas se estudia en primer lugar. En un principio los datos que se
recogen sirven para conocer la situación inicial, y a medida que se van
proporcionando cuidados, los datos se van obteniendo para determinar los
cambios producidos en el usuario. Collière dice en Promover la vida (1993) que
el proceso de los cuidados deberá crearse a partir de aquello que se descubre al movilizar
las informaciones que proceden de la situación, descodificándolas para comprender su
significado e intentar servirse de ellos para cuidar.
Tabla 3.
• Percepción-manejo de la salud
• Nutricional-metabólico
• Eliminación
• Actividad-ejercicio
• Sueño-descanso
• Cognitivo-perceptual
• Autopercepción-autoconcepto
• Rol-relaciones
• Sexualidad-reproducción
H I XA
• Adaptación-tolerancia al estrés
2 7 A
• Valores-creencias
64 2
d a a ,
r iz a R O I P :
a u to T O ,
mse recogerán
a A S il . co
c a rgen tornoAaRlasGcatorce necesidades
Si utilizamos el modelo de Virginia Henderson,
m
los datos
a enumeradas en su
s
y organizarán
e (11).
Dmodelo V @ g 9 9
a s
rgque se utilice, 9 5 .
Indistintamente delv a
modelo 3 . 1 es necesario disponer de un
a y oriente.2la 2recogida de datos. Disponer de un
documento que h i x
ordene
87diseñado ayuda a adquirir la habilidad de
instrumentoade valoración bien
pensamiento crítico de conocer lo que es relevante.
v a
a la visión 3 . 1
parcialidad y concreta.
2 del paciente. Comprende las
h
Subjetivos. i xReflejan
a preocupaciones, 7 . 2 personal
percepciones, 8 sentimientos e ideas de la persona so-
bre su situación de salud (dolor, malestar, angustia, etc.).
Es preciso tener en cuenta que los datos subjetivos y objetivos pueden ser
contradictorios. En estos casos se deberá obtener información suplementaria
para aclarar la discrepancia.
Los datos según el tiempo son los referidos a los hechos ocurridos antes o
en el momento en se valora al paciente. Los consideramos como:
a
liares
c R G otros miembros
m a del equipo de salud, la
s historia clínica V
De do por la situación del paciente,
y las obras de @ g
referencia. Se utilizan 9
9 estas fuentes cuan-
r g s
a éste no1puede 9 .
5participar, o bien se pre-
cisa información a
avadicional para 2 .
3 o validar datos aportados por él.
aclarar
h i x . 2
a 87
La historia clínica o de salud del sujeto nos permite obtener información
sobre los antecedentes de salud personales y familiares, prever cambios en su
estado. La cumplimentación minuciosa, por parte de todos los que atienden
al paciente es importante por varias razones:
a v a 2 3 .1
ahisexva a observar.
Para qué
87.2
Cómo se va a observar.
Quién va a observar.
I XA
Resonante. Se obtiene un sonido vibrante al percutir sobre el pulmón.
H
2 7 A
2.3.3. Método de entrevista 64 2
d a
aentre el cuidador , y el paciente,: hay
r z a
Es un proceso concreto de irelación R O I P
a to
u con elA
otro elemento que resulta fundamental y es T
la O
colaboración. m
En ,
este contexto
a
colaborar significa trabajar S
paciente i l
y no para . csuoenfermedad. Eso
c
significa a relgpaciente A
que R
debe
G
considerarse comom asujeto activo con quien se
s
Dcomparte V
e un problema para tratar de@
g 9 9 debe saber
a s resolverlo. El profesional
rgmejor. Recoger la9 5 .
más del paciente para cuidarle
a v a 2 3 . 1 información que el paciente
h i x
tiene sobre su situación de salud
.y
2 aprender de la información sobre sus
necesidadesa(14). 87
La comunicación que se establece entre el profesional enfermero y la
persona cuidada o sus familiares la denominamos entrevista, y es la forma de
comunicación que preside nuestros intercambios diarios, Kozier la define
como una comunicación planeada o una conversación con una finalidad (12).
Cada contacto de la enfermera con el paciente y su familia se convierte en
diversas entrevistas que constituyen el proceso de comunicación. En dicho
proceso se dan dos facetas casi inseparables: una interpersonal en la que dos
Tabla 4.
HABILIDADES PROFESIONALES
Una recogida de datos eficaz comporta utilizar convenientemente habilidades
de receptividad (observar, atender, esperar, ser receptivo) y habilidades para
compartir (negociar, apoyar, estimular, disponibilidad).
CARACTERÍSTICAS DEL PACIENTE
H I XA
7 A
Se tendrán en cuenta aspectos culturales, sociales y personales. Identificar
2
expresarnos en su misma forma de manera que favorece 6 4 2
el sistema de representación sensorial preferido por el paciente, nos permite
la empatía. Señales
a
no verbales, que son las que dan más información.
d a ,
r i z a R O I P :
C ONTEXTO DONDE SE REALIZA
Crear un ambientea u o T O
t de relaciónSenfermera/paciente m ,
a terapéutico
g el lugar oportuno A i l . c o
comprende:
c a rElegir
•
A R Gy pertinente
m ade confianza y respeto
De s •Conectar V
con el paciente para g
conseguir
@ un clima
9 9
•Elegir el lugar oportuno ya s
g o personales
pertinente
rambientales 5 .
9(ruidos, teléfono etc.)
•
v a
Evitar interferencias
a 2 3 . 1
a h i x 7 . 2
F INALIDAD
8
Es conveniente delimitar los motivos de la entrevista pero conviene
dejar la iniciativa al paciente para que exponga lo que desea. Posteriormente
se propone el objetivo de la entrevista.
CONTENIDO
Se refiere a lo que se dice como información valorable, pero a veces
la importancia está en lo que no se dice y tendremos que observar una
serie de signos (hablar entrecortado, dudas, omisiones, gestos etc.).
Entre las que nos ayudan a conectar con el paciente porque favorecen la
elaboración de percepciones, emociones o ideas que tenemos:
64 2
Henderson y Abdella propusieron organizar los programas académicos
conforme a problemas de enfermería o necesidades de los pacientes, y no
d a a ,
según diagnósticos médicos (17). Esta corriente dio lugar a numerosas
r i z a R O I P :
a u t o T O
investigaciones que propician que el diagnóstico se desgaje de la valoración
m ,
a A S
para constituirse como fase identificada del PE.
il . co
a rgConferenciaApara
La primera
c R Gla Clasificación mdeaDiagnóstico de Enfermería
Dtuvos V
e lugar en 1973, convocada por la@ g 9 Americana
Asociación de Enfermeras
9
r g a
(ANA), con el objetivo de identificar
s las funciones9de5la.enfermería y establecer
a
av detodas
un sistema de clasificación 2
diagnósticos . 1
3adecuado para su procesamiento
informáticoa yh ixrecogiera
que
8 7 . 2
las situaciones de cuidado sobre las que
actúa la enfermería (17). En el año 1982, lo que se inició como conferencias
restringidas al ámbito de los Estados Unidos de América se amplió a todos
los países de Norteamérica, constituyéndose la North American Nursing
Diagnosis Association (NANDA), Grupo Nacional para la Clasificación de
Diagnósticos de Enfermería. El rigor que imprime a sus trabajos la ha
consolidado como una de las asociaciones más formales en el ámbito científico
de la enfermería, los resultados se pueden considerar importantes, ha aportado
172 diagnósticos destinados al uso clínico, el análisis y la mejora (18).
d a
a de un juicioOclínico
, sobre las reacciones
M. Phaneuf define el DE como: a enunciado : de
o r iz
t Los DE S O R , I P
a los problemas de salud reales
a u y potenciales, a Tde base paracelegir
los procesos vitales
o
de
m una persona,
r g a
una familia o de una colectividad.
G A sirven
i l . las intervenciones
a que son responsabilidad de
lae s c (3). En estaVA R deDElosgtiene
de cuidadosaencaminadas a la consecución muna
resultados
enfermera definición el @
Dy deja de ser la descripción degaunsproblema para . 9 9
perspectiva de amplitud
5reflejar una situación de
salud, una reacción a a r
v humana . 1 9
3ante problemas de salud, se habla
h i x o respuesta
7 . 2 2
de un juicio a clínico, y por
8 lo tanto es la resultante de un proceso de
razonamiento o pensamiento crítico. El DE será una síntesis de la forma en
que el sujeto responde a situaciones que afectan a su salud considerando al
sujeto como ser holístico. También reconoce la existencia de situaciones
reales de problema, y también las situaciones de riesgo para la salud que el
profesional deberá atender. Al tener en cuenta la responsabilidad enfermera
en los procesos vitales implícitamente incluye el aspecto de promoción y
fomento de la salud. Al referirse a la responsabilidad enfermera, delimita el
ámbito legal de DE.
H I XA
3.2. Diagnósticos Enfermeros y problemas de colaboración
2 7 A
2
64 de los datos recogidos
Algunas de las conclusiones que resulten del análisis
en la valoración conducirán a diagnósticos
d a
a enfermeros,Opero , otras no, por lo
r
que cabe identificar dos tipos deiz a R
problemas: los llamados I P :
DE y los problemas
u
de colaboración o problemas
a o
t clínicos como O
Tlo llama Carpenitom ,
(2000).
g a A S . c o
il están dentro del
Los DE a rtal y como los R G
hemos a
definido anteriormente
m
e scindependienteVdeAla prácticas@
Dámbito g y se 9refieren
profesional, 9 a situaciones
r g
que la enfermera identifica, validaa y trata, siendo
9 5
ella .
la responsable del logro
del resultado deseado.
a v a 3
Para estas situaciones
2 1
. de salud cabe utilizar la
i x 2
ah
terminología diagnóstica.
87.
Por otra parte, los problemas de colaboración o clínicos (PC), Luis Rodrigo
y cols, los define como problemas de salud reales o potenciales en los que el usuario
requiere que la enfermera realice por él las actividades de tratamiento y control prescritas
por otro profesional, generalmente el médico (17). El profesional enfermero toma
decisiones independientes frente a los problemas en colaboración y los
diagnósticos enfermeros. La diferencia radica en que en el caso de los
diagnósticos, la enfermera prescribe el tratamiento definitivo para conseguir
los resultados deseados, pero en los problemas de colaboración, la prescripción
1) Insuficiencia respiratoria.
2) Choque séptico.
H I XA
3.3. Tipos de Diagnósticos Enfermeros y formulación
2 7 A
6 4 2
Los DE pueden ser reales, de riesgo y de a
salud describen el estado actual a
a salud. LosOtérminos
delddiagnóstico con ,
unas
real, riego y
:
características
o
diferentes que trataremostde r iz
definir. T O R , I P
a a u A S . c o m
a rg realARG a il
s c V g m
De 9
3.3.1. Diagnóstico
a s @ 5 . 9
Describe la respuesta a
v rg de una persona,
actual
3 . 1 9familia o comunidad ante
x a o un proceso
una situación deisalud
h . 2 2
vital. El DE real se compone de tres
a
partes que son: 8 7
Problema o etiqueta diagnóstica, explicación clara y sencilla de la
situación a la que nos referimos.
Factor relacionado o la causa del mismo, aquellos datos que pare-
cen mostrar algún tipo de relación con el diagnóstico. Pueden identi-
ficarse como antecedentes, asociados, relacionados o contribuyentes
al mismo.
d a
situación de urgencia por infarto de miocardio:
a cardiacoO ,
iz
Dolor r/c inflamación o isquemia
r a de tejido R P :
m/p gestos y ademanes
I
del paciente
a u t o T O m ,
a A S il . co
c a rg A R G m a
De s
3.3.2. Diagnóstico V
de riesgo @ g 9 9
a s
rg a situaciones 5 .
9de salud/procesos vitales
v a
a en un futuro
Describe respuestas humanas 3 . 1
2próximo en una persona, familia o
h i x
que pueden desarrollarse
a 7 . 2
comunidad vulnerables. Su 8 identificación se apoya en la presencia de los
factores de riesgo ambientales, fisiológicos, psicológicos, genéticos o
elementos químicos (17). En este caso el diagnóstico está constituido por
las dos primeras partes y se formula:
A H I
tar, riesgo, real. En este eje la enfermera indica si la persona está en
riesgo de presentar este diagnóstico, si el DE ya existe, o si cabe la
2 2 7
posibilidad de que crezca y se desarrolle en esta área.
a 4
6puede
d a
Descriptor o modificador. Cualquier DE modificarse con un
,
acomo excesivo,Rdisfuncional,
O ineficaz, : etc.
o iz
gran número de descriptores
r O
t regiones corporales , I P
a u
Topología. Partes o S T (tejidos,córganos,
o m regiones o
a
rg anatómicas)
estructuras A
G se localizan
donde il .
adeterminados DE.
c a
s ejes aumentan A R
V la flexibilidad g m
DeEstos a s @en el uso5de.9los9 DE, facilitan la
a
formación de los estudiantes
v rgen el manejo
3 . 1 9los mismos al tener una
de
i
clasificación lógica
h x a favorece su.2aprendizaje
que 2 y promueven nuevas líneas
a
de investigación. 8 7
Además en la Taxonomía II se sustituyen los Patrones de Respuesta
Humana por trece dominios basados en Patrones de Salud. Cada dominio
comprende clases que, a su vez, agrupan los conceptos diagnósticos.
En una época dominada por la informática, es fundamental contar con
una estructura como la Taxonomía II para trabajar con un lenguaje
estandarizado, aunque este lenguaje es estéril si permanece sólo en los libros
y es fecundo en la medida en que las enfermeras intentan identificar, a través
Establecer prioridades.
Formular objetivos.
H I XA
Establecer intervenciones.
2 7 A
Documentación.
64 2
Resumiendo, podemos decir quea d
esta fase
a
a consiste enOescribir
, los resultados
r iz O R I P :
a u to
del usuario que se pueden medir con las intervenciones
T enfermeras, para
o m lograr
los resultados.
a A S il . c
c a rg A R G m a
D4.1. s V
e Establecimiento de prioridades @ g 9 9
rg a s 9 5 .
v a
a con .más 3 . 1
2de un diagnóstico, debe determinarse
i x
Cuando nos encontramos
h
atratados en primer 7 2
cuales serán 8 lugar Alfaro-Lefevre considera que esta
capacidad profesional requiere experiencia y pensamiento crítico, y nos
recomienda elegir un método y emplearlo de forma sistemática.
h i x av prioridad.tres.
co. Se le asigna
2 2 3
En segundo
87 de necesidades humanas de Maslow.
a lugar la jerarquía
En tercer lugar las preferencias del paciente, se trata de tener en cuenta
como prioriza él sus propios problemas.
En cuarto lugar el plan terapéutico, significa tener en cuenta las inter-
venciones de otros profesionales en la situación de salud del paciente.
En quinto lugar los recursos enfermeros, para poder dar respuesta a
cada uno de los problemas (12).
Des
teniendo
@ g 9 9
a s
rgexpresan.3.19 5 .
v
La acción o cambio a que
hixdeacambio.87.22
Segúnaáreas
El tiempo necesario para alcanzarlos.
64 2
nan con cambios de actitudes, sentimientos, valores, etc. Representa-
d a a ,
dos por verbos tales como demostrar, realizar, administrar.
r iz a R O I P :
El tiempo necesarioupara
a o
t alcanzarlos, T O
los objetivos se m ,
establecen para
g a A S il . c o
conseguirlos a:
a r
c plazo. También R G m a
DesLargo VA se lessdenomina
@ g como objetivo
. 9 9 final. Se espe-
ran conseguir con cuidados
a a
rg continuados 1 5
y9el tiempo puede oscilar en-
a v 2 3 .
h i x
tre varias semanas o meses, el
. 2tiempo es relativo; depende del tipo de
a y del problema8a7solucionar o prevenir. Retrasa la evaluación
atención
del problema y, por tanto, impide que el paciente y el profesional reci-
ban el refuerzo positivo sobre el trabajo realizado.
Medio plazo o intermedios. Se establecen para ser logrados en plazo
intermedio al objetivo final o a largo plazo, y enunciados, generalmen-
te, para ir consiguiendo de forma parcial el propósito. Sirven de guía
cuando se realiza evaluación continuada. El tiempo oscila entre una
semana y un mes.
d a a
a definir conductas específicas que demuestren que se ha prevenido, reducido
,
o corregido el problema.
r iz a R O I P :
a u o
t enfermero T O ,
msignos y sín-
Ejemplo. El profesional
a A S i l . co
detectará los primeros
a
tomas
c rdeg las alteraciones
A R G a e intervendrá en cola-
cardiacas y vasculares
m
Desboración para estabilizar
V al paciente. @ g 9 9
a s
rg como metas 9 5 .
v a
Los objetivos se documentan
acuándo lo conseguirá3 . 1
mensurables. Deben indicar lo
2 y en qué grado. Unos objetivos
que el cliente h
a i x
hará, 7 . 2
8 el qué y hasta qué grado.
observables y mensurables definen
s ca V A R g m
D e Minimizar los riesgos.
a s @ . 9 9
Resolver o controlar a rgproblema.3.19
un
5
i x a v 2la2vida diaria.
Ayudar h
a con las actividades
8 7 .
de
Promover un óptimo estado de salud e independencia (4).
a s @ 5 . 9 9
v a rgen el desarrollo.
3 . 1 9
i
Personas con
h x aretrasos
. 2 2
a con enfermedad
Pacientes 7
8 mental, especialmente esquizofrenia.
Para cada una de estas situaciones determina un gran grupo de
intervenciones.
La enfermera siempre debe utilizar el pensamiento crítico cuando
aplique guías a cualquier situación. Cada usuario es único en sus
necesidades y capacidades. Las guías pueden aplicarse de forma inadecuada,
provocando un aumento de los problemas para el usuario. El objetivo de
64 2
Fácilmente accesible.
d a a ,
Actualizado (5).
r iz a R O I P :
a u to T O m ,
a A S il . co
c a rg para A
4.4.1. Directrices R G de lasmintervenciones
la redacción a enfermeras
De1)sLas intervenciones
V @ g 9 9 y la firma.
a
enfermerass la.fecha
deben llevar5
rg deben3incluir 9
a v
2) Las intervenciones
a
enfermeras 2 . 1
h i x . 2 verbos de acción concretos
87 para conseguir los objetivos esperados.
a actividades concretas
y nombrar
continuar con h i x
el plan, documentarlo, suministrar
. 2
a la Recopilación8de7datos (20).
la atención enfermera y
5.2. Intervención
H I XA
tanto componentes físicos, psicosociales y espirituales. Entre las pre-
ocupaciones físicas se encuentran el entorno inmediato, intimidad, rui-
do, olor, iluminación y temperatura.
2 7 A
64 2
Seguridad.
d a a ,
r iz a R O I P : el
a u o
Continuar con la recolección de datos. A
t la recolección O ,
lo largo de la ejecución
Tde datos, estacoinformación
m puede
profesional enfermero
a continúa
g para la evaluaciónA S
G del objetivo il .
a
usarse como
c rprueba A R m aalcanzado y para establecer
es en la atenciónVde acuerdoacon
Dcambios @ g 9
la evolución del sujeto
9 de atención (5).
r g s 9 5 .
a
avde los cuidados
2 3 . 1
h i
5.3. Documentación x . 2
a 87
Documentación del plan de atención. Para comunicar el plan de atención
al personal de varios turnos, debe estar escrito y al alcance de los miembros
del equipo de salud.
Actualmente se utilizan distintos tipos de plan de cuidados. Los de uso
más habitual son los individualizados, estandarizados con modificaciones
y los informatizados. Los primeros son impresos y divididos en columnas
destinadas para el diagnóstico de enfermería, los resultados esperados y las
S (Signos subjetivos).
H I XA
O (Signos objetivos). 2 7 A
A (Valoración o Assessment). 64 2
da a ,
P (Plan).
r iz a R O I P :
u
I (Implementación,
a o
tintervenciones). T O m,
a A S il . co
a rg
E (Evaluación).
c A R G m a
s V
De R (Revaloración). gas@ 95.99
g
v a r 3 .1
a
hix EVALUACIÓN 2
6. ETAPAa CINCO:
87.2
La quinta, y última, fase es la evaluación. Esta es un proceso continuo que
se utiliza para juzgar cada parte del proceso enfermero. Consiste en la
comparación sistemática y planeada entre el estado de salud del sujeto de
atención y los resultados esperados. Aunque la evaluación se coloca en la
etapa final del proceso enfermero, realmente es una parte integral de cada
fase y algo que la enfermera realiza continuamente, por tanto decimos que,
es en si misma un proceso.
a v a 2 3 . 1
a h i x 7 . 2
8
6.1.3. La satisfacción del sujeto de atención
Al evaluar este aspecto hay que tener en cuenta que el sujeto de atención
no siempre tiene el conocimiento de lo que implican unos buenos cuidados y
a veces, por ignorancia puede sentirse satisfecho con unos servicios mediocres,
o al contrario sentirse insatisfecho de algunas intervenciones a pesar de que
se trate de unos excelentes cuidados enfermeros. A pesar de todo es de suma
importancia conocer su apreciación, y discutirla con él.
7. ASPECTOS ÉTICO-LEGALES
H I XA
7.3. Derechos de los profesionales enfermeros
2 7 A
6 4 2
Derecho a un ambiente seguro.a
d a ,
Usted tiene derecho a un ambiente
iz a
laboral seguro según lasrleyes. Las medidas R O
legales le I
permiten P :
negarse
u o
t de inseguridad
a trabajar en condiciones
a O
T demostrada. m ,
a A S il . c o
c a rga no sufrirAacoso
Derecho
R Glaboral. ma
DesDerecho a no sufrir
V acoso sexual. @ g 9 9
a s
rgsexual es un3término
9 5 .
La sumisión aav a
acoso 2 . 1 o situación que de forma
h i x . 2
a e implícita8se7refiere a un determinado trabajador.
explícita
La sumisión o el rechazo de ese tipo de conductas se utiliza como
la base para decisiones laborales que le afecten.
El acoso sexual tiene el efecto de interferir de forma importante
con su rendimiento laboral o de crear un ambiente laborar de inti-
midación, hostil u ofensivo.
H I XA
2 7 A
64 2
d a a ,
r iz a R O I P :
a u to T O m,
a A S il . co
c arg A R G m a
Des V @ g 9 9
rg a s 9 5 .
a v a 23 . 1
ah i x 7 . 2
8
u to
basar en un marco teórico.
a T O m,
a A S il . co
c arg A R G m a
Des V @ g 9 9
rg a s 9 5 .
a v a 23 . 1
ah i x 7 . 2
8
1. INTRODUCCIÓN
H I XA
Australia fue el primer país en implantar un sistema triage estandarizado
2 7
a nivel nacional con éxito y es ahora un requisito obligatorio para todos
A
64 2
los hospitales australianos. La NTS (National Triage Scale), planteada
d a a ,
en1993 por el Colegio Australiano de Medicina de Emergencias, es la
r iz a R O I P
primera escala con ambición de universalización basada en cinco niveles :
u
de priorización (Tabla 1).
a to T O m ,
a A S il . co
En el a
c rg2000, la A
año NTSR G revisada m
fue a
y recomendada como Escala
e s de triage V(Australasians@
Daustraliana g
Triage Scale: ATS).
9 9 Esta escala fue
rga 3de .Medicina
defendida por la Asociación Canadiense .
9de5emergencias
de Emergencias como
a 2 1
usoaen todos los servicios
una escala nacional de v y se asoció
i x 2
7. de Emergencias para su puesta en
ah Nacional de Enfermería
con la Asociación
práctica y enseñanza, creando8la Canadian Triage and Acuity Scale (CTAS).
En el Reino Unido se ha desarrollado un nuevo sistema de triage, creado
por un equipo multidisciplinar que integra, entre otros, a jefes de servicios de
urgencias, médicos, enfermeros, ingenieros de software, diseñadores gráficos y
técnicos de ergonomía. Este equipo dirigido por el Dr. Kevin Mackway-Jones
trabaja desde 1996 con el propósito de unificar los diferentes sistemas de triage
existentes en todo el país. De este trabajo multidisciplinar ha nacido el Sistema
de Triage Manchester (MTS) implantado ampliamente ya en todo el país (2).
NIVEL 1 Resucitación
NIVEL 2 Emergencia
NIVEL 3 Urgente
NIVEL 4 Semi-urgente
NIVEL 5 No urgente
H I
médico. Así, en estudios realizados entre 1997-99, Whitby et al. con la NTS,
XA
escalas triage de cinco categorías al ser utilizadas por personal sanitario no
2 7 A
Beveridge et al. con la CTAS y Wuerz et al. con el ESI, ya demostraron un
64 2
alto nivel de concordancia entre médicos y enfermeras en la utilización de las
a a ,
respectivas escalas. Más recientemente, Manos et al. y Murray y Bondy, han
d
r iz a R O
demostrado un alto nivel de concordancia de la CTAS en paramédicos I P :
canadienses (3-6).
a u to T O m ,
a A S il . co
c a rg A R G m a
De s V @ g 9 9
2.3. Triage en España
a s
renglos países3antes 5 .
9citados y debido a la masiva
v a . 1
hixa las unidades
En España, al igual que
afluencia deapacientes, 7 . 2 2de urgencias frecuentemente se ven
8
desbordadas por una sobre utilización por parte de los usuarios, los cuales en la
mayoría de los casos acuden con motivo de patologías banales que no requieren
este tipo de atención urgente hospitalaria. Hemos pasado de los 18 millones de
urgencias en 1977 a 26,2 en 2007, hecho que dificulta la atención rápida y
eficaz que se les exige. Esto es debido, al menos en parte, a la elevada utilización
de los servicios de urgencias para la atención de situaciones no urgentes, según
estudios hasta el 70%, que pueden condicionar demoras en la asistencia de
pacientes graves además de generar consecuencias negativas para el conjunto
r g a s las.sociedades de medicina
de esta escala, 5
9
vlosasistemasa2sanitarios,
de emergencias están empezando
a 3 1
. la idea de universalizar su
contemplar
2
h
aplicación al resto
a i xde
7 . un trabajo que requiere un
8
esfuerzo de adaptación de la escala a cada sistema en particular.
Así, la Sociedad Española de Medicina de Urgencias y Emergencias
(SEMES) y la Sociedad Catalana de Medicina de Urgencias y Emergencias
(SoCMUE) han adoptado y recomendado el Modelo Andorrano de Triaje (MAT)
y su Programa de Ayuda al Triaje (PAT) para los Servicios de Urgencias
Hospitalarios. En la actualidad este sistema de triage estructurado,
informatizado y aplicado por personal de enfermería específicamente formado
y acreditado se encuentra implantado en hospitales de diferentes características.
Des V g
Acogida y Clasificación), así como las funciones y mapa de competencias
@ 9 9
rg a s 9 5 .
profesionales del enfermero de RAC. Este nuevo término, la RAC, está
a v a 23 . 1
nominado para ser, según la SEEUE, el término de referencia para el triage
ah i x . 2
hospitalario en nuestro país (10).
7
8
3. LA CONSULTA DE RAC DE ENFERMERÍA EN URGENCIAS
HOSPITALARIAS
FASES DE LA RAC av
a hix 8 7 .2
R ECEPCIÓN A COGIDA C LASIFICACIÓN
I XA
La identificación rápida de los pacientes en situación de riesgo vital.
H
2 7 A
4 2
La priorización en función del nivel de clasificación realizado.
6atención
Determinar el área más adecuada
d a a
para la
, del paciente, den-
tro del propio servicio. iza R O :
o r
t periódica T O , I P
a a u
Realizar la reevaluación
A S de los pacientes
. co mespera.
en
a rg al paciente R G a i l
es c
Informar
V A y a su familiag m
sobre la atención que va a requerir
9
D y los tiempos de esperagdeaésta.
s @ 5 . 9
v a r pacientes para
3 . 1 9 la congestión del servicio.
h i x a
Mejorar el flujo de los
. 2 2 evitar
a de un lenguaje
La creación
7
8 común para todo el personal que traba-
ja en los Servicios de Urgencias independientemente del tamaño de
estos (2, 9).
a u o
t o sensibles T o ,
mestado de los
tuales empeoramientos
a A S modificaciones
il . c del
c a rg
pacientes.
A R G m a
s
De Espíritu V g
@crítico frente 9 9 tipo de situacio-
nes y alta capacidad de a s
de observación y sentido
5 . todo
rgvaloración 3de .los19signos o síntomas de los pa-
cientes y dexlos v a
a obtenidos
datos 2mediante los aparatos de medida.
a h i . 2
87y mejora continua y capacidad docente y de
Actitud de aprendizaje
ilusionar, incorporar adeptos y estimular compromiso, ya que el triage
es una tarea nueva entre la profesión, es necesario que los enfermeros
encargados de ello sean capaces de ahondar en el tema y formar a los
compañeros (14).
g a
Promoción de la salud
r G A a il .
s ca básicos deVcalidad
Conocimientos A R g m D 9I
e
D Seguridad activa y pasiva a s @ I5. 9
I
r g
va de Riesgos2Laborales
. I1 9 I I
i x a
Formación básica en Prevención
. 2 3 I I
Bioética a h 87 D D I
Inglés, nivel básico D I I
D = Deseable
I = Imprescindible
iz a d , I
O D IPI :
I
Capacidad de asumir riesgos y
to r T O R
D
,
a u
vivir en entornos de incertidumbre
a A S o
D il.c I
m
a r g
Adecuada utilización
R G
de los recursos disponibles
m a I
ah y diplomática87.
Habilidad negociadora
Manejo de tecnología
D D
D
I
I I
Gestión de camas D I I
D = Deseable
I = Imprescindible
a da D O, I I:
Reconocer logros y asumir errores
r iz R I P
Eficiencia
a u to S TOD coIm, I
Polivalencia ga
r G A D il.
a D I
a
sc a resultadosVA s@g I 99I R m
DeOrientación g a 9I5.
I
Honestidad y sinceridad
a r . 1 I I
h i x
Autocontrol, autoestima, avautoimagen .223 D I I
Resolutivo a 87 D D I
Visión de futuro D D I
D = Deseable
I = Imprescindible
5.1. Entrevista
Tabla 6.
ENTREVISTA
H I XA
2 7 A
¿Qué le pasa?
64 2
Problema principal. Declaración del paciente de su problema o motivo de consulta.
a a ,
Descripción del cuadro y su sintomatología, delimitando el cuadro para formarnos
d
r iz a R O I P :
una opinión de su gravedad. Existencia de dolor, localización y características
u
¿Desde cuándo?
a to T O m,
a A S l . co
Delimitamos si es un cuadro agudo o una afectación crónica, o crónica descompensada
i
c arg R G
(ser exactos en el tiempo)
A m a
Des V @ g 9
¿Qué estaba haciendo usted cuando empezó el problema?
9
rg
¿Cuánto tiempo duró? a s 9 5 .
¿Viene y va?
a v a 23 . 1
h i x 7
¿Todavía lo presenta?
a . 2
8
¿Dónde es el problema?
Describir carácter y severidad si es doloroso usar escalas de dolor
¿Se irradia o extiende su problema hacia alguna zona en concreto?
¿Existen factores que lo alivian o lo agravan?
¿Existen antecedentes anteriores del mismo problema?
En caso de respuesta afirmativa: ¿cuál fue el diagnóstico?
Búsqueda de episodios previos: averiguar existencias de cuadros recurrentes, etc.;
solicitar informes previos de visitas a urgencias y/o estancias hospitalarias relaciona-
das con el cuadro actual
H I XA
2 7 A
Enfermedades conocidas: aporte de informes médicos si las tiene.
2
64que estén o puedan estar
Intervenciones quirúrgicas: aporte de informes si son recientes.
d
Tratamientos actuales o recientes a
a así como
que toma,
,la dosis diaria:y la
i
relacionados con el motivo
r z a
de consulta, R O I P con
a u t
última dosis tomada. o
(Por ejemplo, T
no O
nos interesa si mun ,
paciente
g a
un traumatismo simple de A S
tobillo está tomandoil .oc o
no antibióticos, lue-
r
cano gastaremosVA
go R G
tiempo en investigarm a
cuáles son y anotarlos).
e s
D Vacunas. Pacientes congheridas @ g 9 9 susceptibles
r a s 5 .
abiertas o enfermedades
9
de vacunas.
a v a 2 3 . 1
a h i x 7 . 2
8
5.2. Examen físico y toma de constantes
Examen físico
es cairritable,
cido,
V A
estuporoso. mde Coma9de Glasgow, inter-
Pupilas. Escala
@ g
D una puntuación de 12 puntos
pretada en base a los s
antecedentes
g a del paciente,9ya que, por ejemplo,
9 5 .
r 1
en un anciano con demencia avanzada
a que2es3un.dato de posible gravedad en un
vmientras
x a
puede ser normal,
i .2
ahcon traumatismo
paciente 87craneal.
Exposición. Color (Palidez, cianosis, rubor, ictericia, etc.). Sudoración.
Aspecto (deshidratación, manchas, etc.).
Exploración física. Inspección, auscultación, palpación, percusión de
la zona afectada. Debemos tener cuidado al valorar el abdomen desde
la consulta de triage, ya que maniobras precoces por nuestra parte pue-
den perjudicar una correcta valoración facultativa (dolor tras valora-
ción, que produce defensa abdominal).
Tabla 7.
H I XA
NIVELES DEL SISTEMA ESPAÑOL DE TRIAGE (SET)
2 7 A
64 2
d a a , T IEMPO DE ESPERA
N IVEL T IPO
r iz a D
R O
ESCRIPCIÓN (
P
I0 : ) MINUTOS
H I XA
6.2. El triage en la edad anciana
2 7 A
2
64debe tener en cuenta a la
Las particularidades que el enfermero dea triage
a d a anciano tienen
hora de realizar el triage de un paciente O , que ver con: las
t o
características psicosociales iz O R
yranatomo-fisiológicas ,
especiales de I P edad
esta
(Tabla 8). a u S T c o m
a
rgconsecuencias G A il .
Unacdea las A R m
más importantes deatodos estos cambios es la
s
Dalteración V
e de la biocinética de losasfármacos g
@ en todas 9 9fases: absorción,
sus
transporte y excreción, querg se hacen más 1 5 .
9 aumentando su acción
lentas,
a v a 2 3 .
a h i x
temporal y sus efectos.
7 . 2
8
A la hora de la anamnesis el enfermero de triage debe tener en cuenta
algunas particularidades:
Tabla 8.
DISMINUCIÓN
• Masa muscular
• Espesor de la piel
H I XA
Espesor del tejido óseo 2 7 A
•
64 2
Ritmo intestinal
•
a a u A S . co m
a rg de enfermedades
Elasticidades
• de los vasos
R
y
Gconocidas ma
del tejido conjuntivo il
c A
Des Gasto cardíaco V gas@g 95.99
Padecimiento
•
v a r 3 .1
A a
ix sistólica 87.2 2
aharterial
UMENTO
Presión
•
• Resistencias periféricas
v a r 3 .1
x a
Aspectoifísico.
h .2 2
a 8 7
Constantes vitales, Glasgow, peak-flow, SatO , etc. 2
Prioridad asistencial
Ubicación.
Reevaluación.
r g a s 15: 165-174.
2003;
9 5 .9
8. Morales Asencio a v
JM,aMartínez Díaz
2 3 .1Muñoz Ronda FJ. Consenso
JD,
a hixpara la elaboración
como método
8 7 .2 de estándares de recepción, clasifi-
cación, e intervención sanitaria inicial de pacientes en Urgencias: ob-
jetivos, metodología y revisión bibliográfica (I). Tempus Vitalis. 2002;
2 (2): 51-56.
9. Sociedad Española de Medicina de Urgencias y Emergencias. Sistema
Español de Triaje (SET). Madrid: Edicomplet; 2004.
9. BIBLIOGRAFÍA CONSULTADA
1. INTRODUCCIÓN
De s V g
Malaga y Sevilla, y así sucesivamente en las diferentes comunidades
@ 9 9
Autónomas. a s
rg a mediados 5 .
9de los años 90, en base a la
Los centros 112 se v a
desarrollaron 3 . 1
a europea.2por2 el RD de 1997, que regula el acceso
h i x
a
transposición de la directiva
87
al servicio de urgencias y emergencias a través del 112 y en paralelo con los
servicios de emergencias sanitarios. A finales de los 90 comenzó la integración
de muchos de los Servicios de Emergencias Médicos o sanitarios (061 u otros
números de acceso telefónico) en los centros 112.
Todo el sistema se consolida mediante el RD103/2006 por el que se
establece la cartera de servicios del SNS y se regula por primera vez las
prestaciones de urgencia y emergencia.
No asistencial: Sina u oS
T
dotación especial parac o men ruta
a acondicionamiento
rgasistencial: Permite G A a il . asistencia
s c a
Transporte
V A R asistencia sanitariam
g en ruta
De a s @de SVB y/o5Cuidados
Sin Médico o medicalizada: Servicios
• . 9 9 Enfermeros
v a rg Ofrece en3ruta.1tratamiento
Con Médico o UVI-móvil:
•
9 médico
i x
y cuidados
h aal enfermo crítico.22
S
a 87
EGÚN EL OBJETO DEL TRANSPORTE
H I XA
2 7 A
64 2
d a a ,
r iz a R O I P :
a u to T O m,
a A S il . co
c arg A R G m a
Des V @ g 9 9
rg a s 9 5 .
a v a 23 . 1
ah i x 7 . 2
8
ELECTROMEDICINA
• Monitor-desfibrilador con marcapasos transcutáneo
• Respirador de transporte
• Pulsioxímetro
• Esfigmomanómetro
• Bomba de perfusión
• Capnógrafo
• Glucómetro digital
MEDICACIÓN
• RCP
• Vasoactivos
• Antiarrítmicos
• Broncodilatadores
• Analgésicos mayores y menores
• Neurolépticos
• Hipnóticos
• Miorrelajantes
• Anticonvulsivos y otros
H I XA
MATERIAL PARA AISLAMIENTO DE VÍA AÉREA Y ASISTENCIA DE LA VENTILACIÓN
7
• Laringoscopio con juego completo de palas de adulto y pediátricas
2 A
64 2
• Pinzas de Magill de adulto y pediátricas
d a
• Tubos orofaríngeos y nasofaríngeos para adultos y niños
a ,
• Tubos endotraqueales (adultos/pediátricos)
r iz a R O I P :
• Mascarillas laríngeas (adultos y pediatría) mascarilla tipo Fastrach con accesorios,
u to
y dispositivo Airtrach
a T O m,
a A S
• Kit de cricotiroidotomía
il . co
c arg R G m a
• Balón de reanimación con reservorio de O2 y juego de mascarillas
A
Des V @ g 9
(para neonatos, adultos y pediatría)
9
rg a s 9 5 .
• Equipo portátil y fijo de oxigenoterapia
a v a 23 . 1
• Mascarillas de O2 tipo Venturi, mascarillas de alta concentración con reservorio,
ah i x 7 . 2
mascarillas de nebulizador y gafas nasales.
8
• Trocares torácicos y Válvulas Heimlich
• Aspirador de secreciones portátil y sondas de aspiración (adultos y niños)
CANULACIÓN, PERFUSIÓN Y SONDAJE
• Cánulas intravenosas para acceso de venas periféricas y centrales
• Unidades de cristaloides y coloides de 500 ml. Sueros de 100 ml
(fisiológico y glucosado al 5%)
• Equipos de perfusión de fluidos
• Llaves de tres pasos y prolongadores de sistema
• Jeringas y agujas de varios tamaños Sondas nasogástricas y vesicales, bolsas colectoras
• Lubricante urológico
H I XA
2 7 A
64 2
d a a ,
r iz a R O I P :
a u to T O m,
a A S il . co
c arg A R G m a
Des V @ g 9 9
rg a s 9 5 .
a v a 23 . 1
ah i x 7 . 2
8
Tabla 3.
r iz a
de reacción
R O
sin carretera
I P :
< 90min ó
a u to Costo
T O Sujeto a estado
del tráfico m,< 150 km
g a A S il . c o
c arHelicóptero A R G Poca m a ligeros
capacidad en
DAes
ligero Velocidad
HelicópteroV Accesibilidad@ g
helicópteros
9 9 Primaria
ÉREO NO
medio lugaresa
r g s a
difíciles
Coste elevado
5 .
Sujeto a condiciones
9
> 20 min. en
ambulancia
1
PRESURIZADO
Helicóptero
Pesado av
a Comodidad
2 3 .
meteorológicas
ah i x 2
7. a Transporte de
No8sujeto
Avión sanitario meteorología aeropuerto a Secundaria
AÉREO Avión de Menos aeropuesto, 150-300 km.
PRESURIZADO línea regular afectación por necesidad Secundaria
adaptado fisiopatología de ambulancias > de 300 km.
del transporte
HEMODINÁMICA
Estable 0
Inestabilidad moderada (precisa fluidos < 15 ml/min) 1
Inestable (precisa fluidos > 15 ml/min, inotrópicos o sangre) 2
ARRITMIAS
No 0
Infarto después de las 48 h o arritmias no graves 1
Arritmias ventriculares graves o infarto en las primeras 48 h 2
MONITORIZACIÓN ECG
No 0
Deseable 1
Imprescindible 2
VÍA VENOSA
H I XA
No
2 7 A 0
Periférica
6 4 2 1
Catéter en arteria pulmonar
d a a , 2
r iz a R O I P :
M ARCAPASOS TRANSITORIO
a u t o T O ,
m 0
No
a A S il . co
c a rg (o infartoAen R
Transcutáneo G 48 h. de evolución)
las primeras m a
s
De Endocavitario V @ g 9 9
1
r g a s 9 5 . 2
R ESPIRACIÓN
a v a 23 .1
Frecuenciah
a ix 10 a 2487.2
respiratoria 0
Frecuencia respiratoria 25 a 36 1
Frecuencia respiratoria < 10 o > 36 2
VÍA AÉREA ARTIFICIAL
No 0
Cánula de Guedel 1
Intubación o traqueostomía 2
a u S T c o m
rg a G A a il .
s c a V A R g m
De a s @ 5 . 9 9
v a rg 3 . 1 9
Tabla 5.
h i x a . 2 2
ASIGNACIÓN 7
aDE RECURSO Y8PERSONAL SEGÚN LA ESCALA
DE VALORACIÓN DE TRASLADOS SECUNDARIOS
Des
FISIOPATOLOGÍA SEGÚN EL TIPO DE TRANSPORTE
c a
TRANSPORTE POSICIÓN EFECTOS EN EL PACIENTE
a
rg
TERRESTRE Supina con
h
Aceleración: Desplazamiento caudal de líquidos corporales igual a ↓ PA y ↓ PVC.
i
a
la cabeza en Desaceleración: Desplazamiento cefálico de líquidos corporales = ↑ PA , ↑ PVC y ↑ PIC.
x
el sentido Vibraciones: Mecánicas = Movimientos del paciente, dolor. Acústicas = Ansiedad y/o temor.
a
de la Temperatura: Puede provocar o fomentar la hipo/hipertermia.
V
v
u t
marcha Cinetosis: Provocada por el movimiento simultáneo en dos o más direcciones.
A
a
o
AÉREO NO Supina Aceleraciones y desaceleraciones: Los mismos efectos que en la terrestre,
r
R
8
i
rg
PRESURIZADO transversal pero hay que tener en cuenta cambios bruscos de altura.
7
z
a
G
.
o con la Vibraciones: Sobre todo acústicas = ↑ FC, vasoconstricción periférica.
s
2
A
cabeza al Turbulencias: Pueden provocar movimientos indeseados en el paciente, y movimientos de material mal fijado.
2
contrario
S
Altura: Expansión de gases = ↓ ritmo infusión de sueros, ↑ presión de neumotaponamientos,
@
a
3
del sentido ↑ presión en sistemas de vacío (colchón, férulas, etc.).
g
.
T
de la marcha
a
Disminución de la PpO2 por encima de 1.000 m.
1
m
O
AÉREO
9
Supina con la Aceleraciones y desaceleraciones: Los mismos efectos que en la terrestre, pero hay que tener en
a
PRESURIZADO
i
cabeza al contrario cuenta cambios bruscos de altura. En los aviones el pico de aceleración se produce en el despegue.
5
R
64
2
O
9
c
marcha si no hay ↑ presión en sistemas de vacío (colchón, férulas, etc.). Menos que en el helicóptero al estar presurizado.
,
2
9
o
HIC y al contrario Turbulencias: Pueden provocar movimientos indeseados en el paciente,
si existe HIC 7
y movimientos de material mal fijado.
m,
A
MARÍTIMO Supina con Vibraciones: Sobre todo mecánicas, producidas por el oleaje, pueden producir
I
H
la cabeza en movimientos indeseados en el paciente.
I
el sentido
de la marcha al estar en contacto con ambiente húmedo.
P
Temperatura: Puede provocar o fomentar la hipotermia
:
XA
Tabla 7.
ACELERACIÓN /DESACELERACIÓN
Evitar, siempre que se pueda, iniciar la marcha o detenerse de manera brusca.
VIBRACIONES ACÚSTICAS
Proteger al paciente con orejeras destinadas a tal fin.
Utilizar las señales acústicas, solamente cuando sea necesario.
VIBRACIONES MECÁNICAS
Comprobar el correcto estado de la suspensión del vehículo y la bancada de la camilla.
Entre las dos deben ser capaces de absorber la mayor parte de la vibración.
Colocar al paciente, a menos que exista contraindicación, sobre colchón de vacío
debidamente colocado y fijado.
XA
TEMPERATURA
H I
Acondicionar la cabina asistencial en función de las necesidades del paciente. Calefacción
A
o aire acondicionado.
2 2 7
64 térmicas, luz halógena
Utilizar métodos de control de temperatura: sabanas/mantas
a
a d a
directa, aplicación de baño de suero fresco, infusión de sueros previamente calentados.
O , :
C INETOSIS
o r iz
t bruscos del S O R , I P
Evitar cambios dea u medioT de transporte. om
r g a dirección
G A a il .cde la metoclopramida o
s ca
Se pueden administrar
V A R
fármacos para evitar este
g m
efecto, del tipo
e
DT sulpirida.
a s @ . 9 9
URBULENCIAS
a rg . 1 9 5
i x
Colocar al paciente v 3
asobre colchón de.2vacío,2debidamente fijado al mismo y a la camilla.
h 87 fijado a la estructura del medio de transporte.
a todo el material, correctamente
Mantener
ALTURA
Hinchar los neumotaponamientos con agua bidestilada, para evitar el fenómeno de
expansión de gases.
Tener estricto control sobre pacientes con neumotórax previo o riesgo de éste.
Teniendo incluso que aumentar la presión de succión del sistema de drenaje pleural.
Aumento de la FiO2 , en sistemas abiertos, si se considera necesario por la altura.
DECÁLOGO PREHOSPITALARIO
Alerta
Reactivación
Alarma
Transferencia Aproximación
DECÁLOGO
PREHOSPITALARIO
Traslado Control
H I XA
Estabilización
2 7 A
64 2 Triage
d a
SVB/SVA
a ,
r iz a R O I P :
a u to T O m ,
a A S il . co
c a rg A R G m a
s V
De6) Soporte Vital Básico.gaAplicación g
@ de maniobras 9 9 con el fin de
s 5 .
9 cervical si se sospecha
r realizando3.control
permeabilizar víav a
aérea 1
aasegurar una.2ventilación
2 adecuada y garantizar una
h i
traumatismo,x
a eficaz, aplicando 7
circulación 8 masaje cardiaco y compresión de he-
morragias. Todo ello se efectuará sin material alguno, salvo elemen-
tos de barrera.
7) Soporte Vital Avanzado. Para llevarlo a cabo, es necesario contar con
material sanitario especializado, su objetivo es restablecer o estabilizar
las funciones respiratorias y circulatorias. Dentro de este paso del de-
cálogo, se enmarca también la asistencia integral a pacientes
politraumatizados.
a a
material fungible, gases medicinales y autonomía del material electromédico.
d prehospitalaria ,distinta al entorno
r i a
Estas características, hacen la asistencia
z R O I P :
preparado para este a u o
hospitalario, y debido a testo, se debe contar
T O con un material, específico
m
a ámbito (Figura 5).S
A il . c o
c a rg principalesA R G m a
De s
Las características V g
del material
@ de transporte son:
9 9
a s
rgla estabilización 5 .
9y el transporte de pacientes
Funciones básicas.aPara
v
aemergencia,.2aunque 3 . 1
2 las nuevas tecnologías cada vez
h i
en situación x de
7
a mayores posibilidades.
permiten 8
Manejabilidad. Es importante que el peso y el volumen del material
sea reducido puesto que hay que transportarlo junto al paciente.
Resistencia. El material sufre un desgaste superior al trabajar en un me-
dio hostil; soportan golpes, caídas, lluvia, movimientos violentos, etc.
1. Cuando el estado del paciente requiere de un tratamiento quirúrgico urgente, deben reducirse los
tiempos de traslados a lo mínimo necesario, priorizando su llegada a un centro útil.
H I XA
2 7 A
64 2
d a a ,
r iz a R O I P :
a u to T O m,
a A S il . co
c arg A R G m a
Des V @ g 9 9
rg a s 9 5 .
Figura 6. Ventilador de traslado Oxilog 2000 ®.
a v a 23 . 1
ah i x 7 . 2
8
Con anterioridad a la administración de ventilación mecánica a un paciente
que va ser trasladado, se tendrá en cuenta:
H I XA
El material de monitorización consta de monitor desfibrilador de trasporte
2 7
con medición de pulsioximetría, tensión arterial y algunos cuentan con
A
64 2
capnografía. La adaptación a este material es el más sencillo, la única precaución
a a ,
a tener en cuenta es disponer de baterías suficientes (es necesario llevar
d
r iz a R O I P :
baterías de repuesto) y que el material disponga de todos sus complementos
u to T O m ,
(electrocardiograma, marcapasos transcutáneo, electrodos de monitorización,
a
a A S il . co
c a rg A R G
papel milimetrado de recambio, gel conductor).
m a
e
DVíass V @ g 9 9
rg a s 9 5 .
venosas y perfusiones
v a
a prehospitalaria, 3 . 1
2 la vía venosa de elección en el
a h
En la atencióni xsanitaria 7 . 2
8
paciente crítico es una vía periférica de fácil acceso, grueso calibre,
supradiafragmática en un miembro libre de lesiones y no parético.
Las vías venosas centrales no son de elección en el ámbito extrahospitalarios
ya que su canalización implica mayor complejidad y en una emergencia no
aporta ventajas sobre las anteriores. Esto no quita que su utilización sea
necesaria en situaciones excepcionales o extremas. El acceso venoso debe
efectuarse antes de iniciar el traslado puesto que en marcha requiere
experiencia pudiendo provocar más complicaciones (5).
2. En los casos de traslados secundarios se debe contactar con el hospital emisor para determinar el
número de bombas de perfusión necesarias, así como otros materiales adicionales.
H I XA
2 7 A
64 2
d a a ,
r iz a R O I P :
a u to T O m ,
a A S il . co
c a rg R G m a
Figura 7. Bancada móvil y camilla de traslado de pacientes.
A
De s V @ g 9 9
rg a s 9 5 .
a v a 3 . 1
2 de tal manera que la disposición
i
La camilla queda
h x . 2
alojada en la ambulancia
7
del pacienteasea con la cabeza8 en el sentido de la marcha. De esta manera
podemos enumerar una serie de posiciones de traslado de pacientes, con sus
repercusiones fisiológicas e indicaciones:
H I XA
2 7 A
64 2
d a a ,
r iz a R O I P :
a u to T O m,
a A S il . co
c arg A R G m a
Des V @ g 9 9
rg a s 9 5 .
a v a 23 . 1
ah i x 7 . 2
8
H I XA
2 7 A
64 2
d a a ,
r iz a R O I P :
a u to T O m,
a A S il . co
c arg A R G m a
Des V @ g 9 9
rg a s 9 5 .
a v a 23 . 1
ah i x 7 . 2
8
A H I
2 2 7
a 64
a d a O , :
to r iz O R , I P
a u S T co m
rg a G A a il .
s c a V A R g m
De a s @ 5 . 9 9
v a rg 3 . 1 9
h i x a . 2 2
a 8 7
A H I
2 2 7
a 64
a d a O , :
to r iz O R , I P
a u S T co m
rg a G A a il .
s c a V A R g m
De a s @ 5 . 9 9
v a rg 3 . 1 9
h i x a . 2 2
a 8 7
H I XA
2 7 A
4. PROCESO ENFERMERO EN EL TRASLADO DE
64 2
PACIENTES CRÍTICOS
d a a ,
r iz a R O I P : tan
Paradójicamente, a pesar
a o
udetlas asistencias
de que T
diversos Oestudios ,
demuestran que
m Sanitarias
solo entre el 10 yael 20% A S c o
del Equipo de .Emergencias
il
(EES), son
c a rgverdadero A
de R
riesgo G m
vital , y de que
3
el a
restante 80% de asistencias
e
son smomentos
Dprofesionales, en V
los que la enfermera@ g
puede 9
desarrollar
9 todos sus roles
r g s
a esta1atención
incluidos los independientes 9 .
5 no acaba de proveerse
de manera que la persona a
v y familia2se2beneficien
adeseable. .
3 de la atención enfermera
a h i
integral e integrada x 7
Esta. prestación del cuidado, del verdadero
8
producto enfermero no puede prestarse sin una concepción clara de la
aportación enfermera y sin que sea entendida ésta como la contribución
cuidadora planificada por la enfermera e integrada dentro del plan terapéutico
del EES (es del todo pertinente llegados a este punto, el recordar la
importancia del carácter multi e interdisciplinar de este trabajo) (16).
3. Traduciéndose por tanto en un alto porcentaje de intervenciones delegadas derivadas de los proble-
mas de colaboración.
H I XA
2 7 A
Respirar. Respirar con normalidad es considerado como imprescindi-
ble para el mantenimiento de la vida y en las emergencias esta es, una
64 2
valoración prioritaria. Como indicadores del estado de esta necesidad
a a ,
se encuentran: la presencia de disnea (de esfuerzo o en reposo), la pre-
d
r iz a R O I P :
sencia de ruidos patológicos (roncus, sibilancias, crepitantes, murmu-
u to T O m ,
llo vesicular), la utilización de musculatura accesoria o respiración ab-
a
a A S il . co
c a rg A R G
dominal y la ayuda de algún dispositivo previo a nuestra actuación.
m a
Des @ g
También se incluye alteraciones cardiocirculatorias que afecten a la
V 9 9
a s
hemodinámica del paciente.
rg Peso,3última 5 .
9ingesta, capacidad de deglu-
Alimentación e v
a a
hidratación.
2 . 1
h i
ción, signos
a x 7 .
de deshidratación,2prótesis, edemas, dispositivos previos y
8 posibles interacciones con el traslado.
autonomía que nos indicarán
Eliminación. Frecuencia y características de la eliminación, continencia
urinaria, control eliminación de heces, dispositivos previos y diaforesis.
Movilidad. Limitación de movimientos, el grado de autonomía corpo-
ral y la falta de fuerza o sensibilidad.
Dormir/Descansar. Alteración del patrón del sueño, confort/disconfort
y calidad del descanso.
iz a aduna persona. O , :
to física, como psíquicamente
to r O R
T terapéutico , I P
Aprender. Ela
a u
conocimiento del S
A régimen
. co ym
del proceso en-
rg es básicoApara
fermedad,
a R G a
el autocuidado (18).il
s c V g m
De a s @ 5 . 9 9
v a rg
4.2. Juicio Diagnóstico/Identificación
3 . de9
1 Problemas
x a
hiproblemas 2
.2 que nos llevan a emitir un Juicio
Tres sonalos 87paciente
del
Diagnóstico (JD): los Problemas de Autonomía, Diagnósticos de Enfermería
y los Problemas de Colaboración. Los dos primeros, se engloban en una esfera
independientemente enfermera, mientras que el tercero pertenece a una esfera
de colaboración o de dependencia:
H I XA
de este apartado, el enfermero tiene una gran labor en él para garanti-
zar la seguridad de los pacientes críticos, un almohadillado adecuado,
2 7 A
una postura correcta para evitar caídas, evitar crear más lesiones, etc. y
muchas intervenciones más. 64 2
d a a ,
r iz a R O I P :
a u to
Diagnósticos y resultados enfermeros
T O
relacionados con
,
el TPC (pacientes
m
y familiares)
a A S il . c o
c a rgmuchos diagnósticos
A R G
que g m aser identificados y por lo
s
No existen V
Detanto intervenir en ellos porgael sEES,
puedan
@pero los más 9 9
r 9 5 . frecuentes se detallan
en la Tabla 8.
a v a 2 3 . 1
a h i x 7 . 2
Problemas de colaboración
8
Están compuestos por una serie de signos y síntomas que el enfermero
no puede controlar de manera independiente, y son afrontados por el
conjunto del equipo asistencial. Todo ello hace que la participación en-
fermera para la reducción de este tipo de problemas consista en inter-
venciones multidisciplinares delegadas, que también encontramos des-
critas en la NIC.
r iz a R
Nivel de ansiedad O I P :
a u o 1211
t 17 SAnsiedad O
T verbalizadacom ,
r g a G 11 A a il .
Conducta problemática
s ca V R
A 1404@ g m del miedo9
Autocontrol
D e 03s Busca información.para
a 9 reducir el miedo
r g
a 1605 2Control . 9 5
1del dolor
00132 Dolor Agudo
a v 3
ahix 87.2 localización del dolor al personal sanitario
13 Refiere cambios en los síntomas o
Tabla 9.
INTERVENCIONES NIC
0580 Sondaje vesical 4920 Escucha activa
0840 Cambio de posición 5270 Apoyo emocional
0910 Inmovilización 5340 Presencia
0940 Cuidados de tracción/inmovilización 5380 Potenciación de la seguridad
0960 Transporte 5460 Contacto
1080 Sondaje Gastrointestinal
Manejo del dolor
5510 Educación sanitaria
H I XA
Información sensorial preparatoria
1400
1450 Manejo de las nauseas
2 7
5580
5602 A
Enseñanza Proceso/enfermedad
2300
64
Administración de medicación 2 5618 Enseñanza Procedimiento/tto.
3120
d a a
Cuidados en la intubación
, 5820 Disminución de la ansiedad
3140
r iz a
Manejo de las vías aéreas
R O P
5900
I : Distracción
3160
a u to T O
Aspiración de las vías aéreas
m, 6200 Cuidados en la emergencia
3200
a A S . co
Precauciones para evitar la aspiración
il 6320 Resucitación
3300
c arg A R G
Ventilación mecánica
m a 6360 Triage Catástrofe
De s
3320 V
Oxigenoterapia
@ g 9 9 6482 Manejo ambiental confort
3660
rg a s
Cuidados de las heridas
9 5 . 6486 Manejo ambiental seguridad
3900
v a 3 .
Regulación de temperatura
a 2 1 6490 Prevención de caídas
ah i x . 2
corporal dentro del margen normal
7 6540 Control de infecciones
4044 8
Cuidados cardiacos Agudos 6580 Sujeción física
4160 Control de hemorragias 6654 Vigilancia Seguridad-
4190 Punción intravenosa 6680 Monitorización de signos vitales
4200 Terapia intravenosa 7110 Fomentar la implicación familiar
4360 Modificación de la conducta 7660 Revisión del carro de emergencia
4420 Acuerdo con el paciente 8100 Derivación
4820 Orientación de la realidad
Para asegurarse que los datos transmitidos sean los correctos, siempre se
realizará la transferencia de una manera estructurada y organizada, así la forma
de transmisión de datos de manera verbal sería la siguiente:
6 4 2
ción, circulación, drenajes y sondas y neurológico)
d
Valoración de necesidades básicas,
a ase comunicarán
, las que estén
alteradas. r iz a R O I P :
a u o
t que haya T O m ,
Problemas a de autonomía A S il c o
habido que.suplir.
rg enfermeros.
c a A R G m a
sDiagnósticos
V
De Objetivos e intervenciones @ g 9 9
a
rgsegún s 9 5 .
transmitiendo el grado de con-
secución dexlosa v a
mismos 2
la
.
enfermeras,
3 1
escala aplicada.
a h i 7 . 2
8 susceptibles de ser informados.
Existencia de acompañantes,
Cada día 16.000 personas en todo el mundo, mueren a causa de todo tipo
de traumatismo. El traslado del politraumatizado grave para una evaluación
completa y una atención integral intrahospitalaria es frecuente en nuestro medio.
En esencia, dada la evolución dinámica de las lesiones traumáticas, todo
paciente politraumatizado debe ser transportado a un centro adecuado para
atender sus necesidades asistenciales. La supervivencia depende de un trasporte
rápido a centros con tratamientos quirúrgicos definitivos inmediatos (centro
útil) y no de un trasporte por cualquier medio al hospital más cercano (20).
Estabilización y el traslado
64 2
sión completa de los pacientes debe realizarse idealmente dentro del
vehículo de transporte para evitar la hipotermia. El paciente traumático
d a a ,
debe ser reevaluado constantemente durante el trasporte deteniendo el
r iz a R O I P :
a u t o T O
vehículo si fuera necesario para solucionar situaciones de riesgo vital.
,
mcervical rígi-
a
El transporte requiere A S
inmovilización il
completa:. c o
collarín
c
do,a rgespinal larga
tabla A R G m a laterales de cabeza o fé-
rígida, inmovilizadores
s
De rula V
tetracameral y correas s de@
g 9 9en tres ó cuatro
puntos de anclaje).rg a
Los espacios 1 5 .
sujeción (dispuestas
9 naturales deben ser
óseos
v a
a(rodillas y tobillos).3 .
2 El cuidado de las extremidades
a h i x
almohadillados
7 . 2
afectadas contempla la8 utilización de férulas de inmovilización con
evaluación periódica de pulsos distales, temperatura y coloración de la
piel para evitar isquemias; además, en los casos de traumatismos
craneoencefálicos es muy utilizada la posición de la camilla en anti-
trendelemburg, debido a las ventajas anotadas anteriormente que su-
pone para este tipo de pacientes.
4. La estabilización del paciente con trauma grave, el Soporte Vital Avanzado al Paciente con Trauma
Grave, se tratarán en extensión en los Capítulos 5 y 6 del Libro 2 de esta Área de Capacitación.
H I XA
5.2. Traslado de gestantes
2 7 A
2
64además de la asistencia
Desde el punto de vista del transporte sanitario
d
específica, es necesario tener en cuenta
a
aque el mejorOtratamiento
, para el
iz a
feto es tratar a la madre. Lasrprioridades R I P :son
a u to O
asistenciales
Tconsideraciónen las
m
gestantes
,
iguales a la de cualquier
a paciente, aunS
A así la
il . c o más importante
c a rg es laAprevención
para su transporte
R G del síndrome m a de la compresión de la
DeAspartir de las 20 semanas
vena cava (22). V g
@existe un aumento9 9
rdeg a s
gestación 9 5 . del gasto cardiaco
influenciado por la a a
v de la2gestante. . 1
3 En decúbito supino el útero
comprime laavena
posición
hixcava inferior87 . 2supone
lo que un descenso del 30 al 40% del
gasto cardiaco. Por lo tanto para su traslado lo ideal es la posición decúbito
lateral izquierdo, repeliendo la presentación del útero. Ante la imposibilidad
de realizarla, la elevación de la cadera derecha con una almohada o cuña
puede ser útil. Esto ocurre en la gestante politraumatizada donde la
inmovilización vertebral es necesaria, de manera que puede realizarse un
desplazamiento manual del útero. En las fijaciones para el transporte se debe
evitar presionar con correas u otros materiales inmovilizadotes, el abdomen
materno para no favorecer traumatismos menores.
a u
y pueden ser asumidos
o
t por el hospital O
Tde origen. com ,
g a G A S il .
r
ca de transporte R
A es vital.@ a
m habitualmente
eElsmaterial V
Despecíficos para traslados pediátricos g
Vehículos,
9 9 UVI móvil,
r g a s 5
o una de adulto
9 .adaptada para pediatría.
vMaterial
Para distancias superiores
a 3 1
aa 150 km es 2necesario
. un medio aéreo (helicóptero
h i x
o avión presurizado).
a 7 .
de 2soporte y medicación de reanimación
8
cardiopulmonar de carácter pediátrico. Pero es el aparataje específico el
esfuerzo más importante.
Tabla 10.
H I XA
2 7 A
FISIOPATOLOGÍA DEL TRANSPORTE PEDIÁTRICO
64 2
F
a a
ACTORES SOBRE LOS QUE INFLUYE EL MEDIO DE TRANSPORTE
d ,
Variables fisiológicas
•
i z a
Ory Temperatura (disminuyen R O I P :
Presión alveolar deo
a u t por aceleraciones
2 O en función de,la altura).
Ty desaceleraciones. m
Estado hemodinámico
g a A S il . c o
c
r
a Presión intracraneal
A
por
R G debido a lasmvibraciones).
aceleraciones y a
desaceleraciones.
s •
V
De Acúmulo de aire (problemasgapotenciales
Lesiones (sobre todo las fracturas, g 9
@en aeronaves5no.9presurizadas).
• s
r e intestino). 3.19
v a
Fisiológico (estómago
a(neumotórax, neumoencéfalo
2 o aire intestinal intramural).
a h i
Patológicox 7 . 2
Comodidad
• del paciente 8
y el equipo asistencial.
Funcionamiento de dispositivos de monitorización y tratamiento.
•
• Riesgo de complicaciones asociadas al número de transferencias que es mayor
en aéreos (cuatro transferencias) con respecto a la terrestre (dos transferencias).
Control de la ventilación/oxigenación
H I XA
tración de oxigeno en el interior de la incubadora, se obtiene una FiO2
2 7 A
en el interior del habitacula mediante sellado de la misma que evite
fugas. También es posible administración de oxigeno mediante disposi-
64 2
tivos, tales como: sonda nasofaríngea, mascarillas, cámara de hood, etc.
d a
apor presión pero ,ciclada por tiempo.
3) Ventilación artificial controlada
r iz a R O I P :a1
Presión pico inferior
a u o
t elevadas
a 30 cmH 2
O, PEEP,
T O la FiO 2
regulable, de 0,21
m necesario la
(evitando concentraciones
a A S de oxígeno y c
il . o
que hace
c a rg de aire A
utilización R G al 21% m
comprimido paraacrear la mezcla). FR entre
Des30y Tiempo V parámetros
o 40 rpm, utilizando
@ g 9
de Tiempo Inspiratorio
9 (Tinp)
Espiratorio g
r (Tesp)s
a que se 1calcula
9 .
5a partir de la siguiente
fórmula: a
aFRv= 60 / Tins +.Tesp2 3 .
h i x 2
a 87
Control de la temperatura
H I XA
Control de constantes vitales
2 7 A
2
64 de las constantes
Esta se realiza mediante la monitorización permanente
vitales con monitores multiparamétricos, d a
a aunque todos , los dispositivos
electromédicos y concretamente r iz a R
los de monitorización O I P
se ven afectados :por
u
la vibraciones del traslado,
a o
t siendo imprescindibleO
T la observación m , clínica. Se
g alos signos deRestrésA S . c o
l cambio de color de
y anticiparse a iellos:
deben identificar
a r G m a
scnáuseas, tirajes,
la piel,
Ddeeextremidades,
A del llanto
Vcalidad s @
separación de los dedos,
ogquejidos, hipotensión o hipotonía
9 9 movimientos
boca abierta,.bostezos,
de los ojos sin mantenera
a
g visual,.1retorcerse
elrcontacto
5
9 o aparición de una
i
actividad frenética xoa
v
desorganizada..2 El2 3
confort del niño luz, ruidos y postura
h 7
a para su buena 8evolución durante el traslado.
es importante
La valoración enfermera centrará su atención a las necesidades de
respiración (útil el test de Silverman), alimentación, la eliminación, la movilidad
(indicativo de estabilidad principalmente hipotonías) y la comunicación (ya
que el llanto y su calidad es indicativo de buen estado del RN).
Según el modelo de Virginia Herdenson será difícil encontrar diagnósticos
enfermeros aunque con un niño serán numerosos los problemas de autonomía
sobre los que actuar durante un traslado, al igual que un adulto: Alimentación
Tabla 11.
2 3 . 1
N B
IVEL
h i x 7 . 2
a total de las vías respiratorias
Protección
no siendo el traje hermético
8 cuando el riesgo de lesión dérmica es menor,
NIVEL C
Traje no hermético con mascara con filtro para gas. No suministro de O2
NIVEL D
Cubre con batas, gorro, mascarilla, botas, guantes y protección ocular
c a rg y eficienteAbasada
proporcionada R Gen el Decálogom a
Prehospitalario base secuencial
s
Dedesanitaria V g
@Las peculiaridades 9 9de la asistencia
a s
la actuación sanitaria prehospitalaria.
5
rges de gran3especialización:.
9 espacio reducidos,
a
durante el transporte
v
afungibles, oxigeno, . 1
2electricidad, la meteorología adversa,
h i x
personal, materiales,
7 . 2
el entornoa 8 inmediatas. Estas hacen necesaria un control
social hostil, decisiones
exquisito del material de traslado para: Adaptación de la ventilación mecánica,
monitorización de constantes vitales, vías venosas y perfusiones, sedoanalgesia,
posiciones e inmovilización del paciente.
I XA
el modelo más utilizado es el de Virginia Henderson, siendo éste, a la hora de
H
2 7 A
valorar las 14 necesidades que plantea, priorizamos comenzando por las que
64 2
nos ayuden a identificar problemas de alto riesgo vital: respirar, etc.
d a
ahace especial O , a situaciones:
r iz a
El traslado en situaciones especiales
R
atención
I P
a u o
que salen de la norma,tPolitraumatizados,
T O
Gestantes, ,
Niños críticamente
m
a
enfermos y pacientes A
de riesgo Nuclear, S il . c
Biológico y/o Químicoo (NBQ). Entre
rg es el traslado
ellosclaaestrella A R G m a un alto grado de
s V
Decapacitación: La utilizacióngdeaincubadoras g
neonatal ya que
@ de 5
requiere
9 9 que integran
r s .
transporte
9 de la temperatura y
ventiladores portátiles, a
a v incubadoras
3 . 1
con regulación
2 un control adecuado del traslado y
monitorización
a h i x 7 2
multiparamétrica.permite
8
mantener una continuidad asistencial a centros de mayor nivel.
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Consejería de Salud;
@ g
2001.
9 9
g a s
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v a
a crítica.práctica. 3 1
del.paciente
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h x
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d a
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iz a
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u
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a
15. Miyoshi
c rgE, FujinoAY,RMáximo
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s
Detransport V g
s@ 95
ventilator with patient-triggered
118 (4): 1.109-1.115. rga .99 Chest. 2000;
ventilation.
a v a 2 3 .1
h
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H I XA
2 7 A
64 2
d a a ,
r iz a R O I P :
a u to T O m,
a A S il . co
c arg A R G m a
Des V @ g 9 9
rg a s 9 5 .
a v a 23 . 1
ah i x 7 . 2
8
BASES DE LA VALORACIÓN Y
CUIDADOS DEL PACIENTE CRÍTICO H I XA
2 7A
64 2
d a a ,
r iz a R O I P :
a u to T O m,
a A S il . co
c arg A R G m a
Des V @ g 9 9
rg a s 9 5 .
a v a 23 . 1
ah i x 7 . 2
8
H I XA
2 7A
64 2
d a a ,
r iz a R O I P :
a u to T O m,
a A S il . co
c arg A R G m a
Des V @ g 9 9
rg a s 9 5 .
a v a 23 . 1
ah i x 7 . 2
8
CAPÍTULO 7
1. INTRODUCCIÓN
H I XA
2 7 A
64 2
La oxigenoterapia es la administración de oxígeno (O2) a concentraciones
d a a
mayores de la del aire ambiente, con la intención de tratar o prevenir los
,
r i a R O I P :
síntomas y las manifestaciones de la hipoxia y otros trastornos, ya sean agudos
z
o crónicos.
u t o T O ,
a
El objetivogdeala oxigenoterapia A S il . c om
c a r A R G es mantener
m
unos
a niveles de oxigenación
e s
adecuados que eviten
Vla hipoxia
Dparcial de oxígeno arterial (PaOga
tisular.
@ g
Esto se consigue
9cuando la presión
9 a los 60 mmHg,
r 2 sde hemoglobina
) alcanza
9 5 .del
valores superiores
lo que corresponde a unaa
v saturación
a el O de.2forma 3 . 1 90%.
2 terapéutica disponemos de una
Para poderh
a i x
administrar 7
serie de sistemas que permiten 8 suministrarlo de forma segura y controlada.
2
2. EL OXÍGENO
v a r 3 .1
a 2
ahixreguladora87.2
2.2. Normativa
ALMACENAMIENTO
• Separar de gases u otros materiales inflamables almacenados.
• Mantener por debajo de 50ºC en lugar bien ventilado.
MANIPULACIÓN
• No usar grasa o aceite.
• Abrir la válvula lentamente para evitar los golpes de ariete.
• Prevenir la filtración de agua al interior del recipiente.
• Mantener lejos de fuentes de ignición, incluyendo descarga estática.
• Evitar el contacto con calor y chispas.
• No fumar cuando se manipule el producto.
TRANSPORTE
• Evitar vehículos donde el espacio de la carga no esté separado del compartimiento
del conductor.
• El conductor debe conocer los riesgos potenciales de la carga y la forma de actuar
en caso de emergencia.
• Fijar correctamente los recipientes.
• Cerrar correctamente las válvulas evitando fugas.
H I XA
• Apretar adecuadamente el tapón de acoplamiento de la válvula.
2 7 A
FUGA DE O2 EN ESTADO LÍQUIDO
64 2
d a a
• Evacuar a las victimas a una zona no contaminada.
,
r i a
• Retirar las ropas contaminadas.
z R O I P :
a u to T O
• Lavar la zona afectada con agua durante al menos 15 minutos
m ,
V
a
ERTIDO ACCIDENTAL
A S i l . c o
c rgelunaárea.adecuada
Evacuar
a •
A R G del aire. Lam a
s
De torias
Asegurar
•
V ventilación
@ g inhalación continua de concentra-
9 9dificultades respira-
y convulsiones. rg a
ciones superiores a un 75% puedens .
causar nauseas, vértigos,
9 5
a v a 2 3 . 1
•
a h i x
Eliminar las fuentes de ignición.
7 . 2
8
La Ley 24/2001, de 27 de diciembre, publicada el 31 de diciembre de
2001 de Medidas Fiscales, Administrativas y del Orden Social; en su capítulo
IX, Acción administrativa en materia de sanidad, artículo 4, modifica la
Ley 25/1990, de 20 de diciembre, del medicamento, añadiendo una nueva
sección al capítulo IV, la 8ª, que incluye un nuevo artículo, el 54 bis, con la
siguiente redacción:
Control de la respiración.
El paso de aire a través de los bronquios hasta los alvéolos, ven-
tilación.
Perfusión sanguínea pulmonar.
Las vías aéreas se dividen en superiores formadas por las fosas nasales,
boca, faringe, laringe y tráquea y las inferiores compuestas por los bronquios,
pulmones y pleura (Figura 2).
Figura 2.
Septum
nasal
Orificio
faríngeo
Nasofaringe
del tubo
auditivo
H I XA
2 7 A
64 2 Paladar blando
d a a , Úvula
r iz a R O I P :
a u to T O m, Paladar
a
Orofaringe
A S il . co duro
c arg A R G m a
Des V @ g 9 9
rg a s 9 5 . Base de
a v a 23 . 1 la lengua
ah i x 7
Hipofaringe . 2
8 Epiglotis
Esófago (posterior)
Laringe / Tráquea
(anterior)
Des V g
maxilar y el etmoides. También intervienen en su formación el hueso
@ 9 9
rg a s 9 5 .
lacrimal, cornete inferior, palatino y esfenoides. Cornetes nasales, meatos
v a . 1
nasales donde desembocan los senos paranasales y el conducto lacrimonasal.
a 23
ah i x . 2
Agujero esfenopalatino. El suelo está formado por los huesos maxilar y
7
8
palatino y contiene el agujero incisivo, por el que pasan vasos y nervios
procedentes de las fosas nasales.
Las aberturas nasales posteriores, también llamadas coanas están formadas
por el cuerpo del esfenoides, palatino, vómer y ala interna de la apófisis
pterigoides.
La cavidad posterior corresponde a la parte superior de la faringe o
rinofaringe que se describe más adelante (6, 7).
H I XA
3.3. Laringe
2 7 A
2
4 por un armazón
Situada en la parte anterosuperior del cuello,6formada
d
cartilaginoso en el que destaca la prominencia
a
a formadaO por,el cartílago tiroides
z a
(nuez o bocado de Adán). En suriinterior está tapizadaR I P
por un epitelio ciliado.: Por
u o
t las cuerdas
dentro de la laringe seaencuentran
O
Tvocales encargadas ,
mde la fonación.
a A S i l . c o
a rg laríngeosAson
Los cartílagos
c R Gtres impares: m a tiroides y cricoides y
epiglotis,
s
pares: aritenoides, V
Dlaelaringe del esófago impidiendo
tres corniculados y @ g
cuneiformes. 9
La epiglotis
9 actúa aislando
r g s
a el paso alimentario
9 .
5 al árbol respiratorio.
Entre la epiglotis y a la v a 2
base de la lengua, . 1
3existe una depresión justamente a
cada lado dela h i x
repliegue 7 . 2
glosoepiglótico, denominada vallécula, su importancia
8
radica, a nivel práctico, en que este será el lugar en el que se apoye la pala del
laringoscopio durante la maniobra de intubación orotraqueal.
La membrana cricotiroidea se proyecta desde el borde inferior del cartílago
tiroides hasta la porción anterolateral del cricoides. Tiene 9 mm de altura por
3 cm de anchura aproximadamente, y en el centro tiene una porción triangular
llamada cono elástico. Su parte externa se encuentra directamente bajo la piel
y la interna bajo la mucosa laríngea, por eso representa un punto de acceso
cuando es necesario ventilar al paciente y el resto de métodos no han dado
3.4. Tráquea
d a a
él. Los cilios con sus movimientos ondulantes ininterrumpidos desplazan este
,
r iz a R O
moco; cuando el movimiento es insuficiente se produce la tos (8).
I P :
a u to T O m ,
a A S il . co
c a rg
3.5. Bronquios
A R G m a
s V
DeTienen una estructura similar g 9
a sa@
la tráquea. 5La.9bifurcación traqueal,
v
facilitada por la carina, da a rga dos bronquios,
lugar
3 . 1 9bronquio derecho más corto
h i
y vertical, bronquio x a más .largo
izquierdo 2 2y horizontal (es por esto que en caso
de intubación
7
a selectiva el tubo8orotraqueal suele irse al bronquio derecho).
Cada uno de ellos se dirige al pulmón correspondiente y penetra en él por
el hilio pulmonar. Una vez dentro del pulmón, los bronquios principales se
ramifican originando el árbol bronquial. Como consecuencia de esta
ramificación se obtienen unos tubos de menor calibre denominados
bronquiolos; estos a su vez se dividen en conductos alveolares que terminan
en una especie de saco llamado alvéolos pulmonares. En los alvéolos
pulmonares es donde se realiza el intercambio gaseoso.
Forman uno de los órganos más grandes del cuerpo humano. Su principal
función es la distribución de O2 y el intercambio de gases junto al sistema
circulatorio. Están situados en la cavidad torácica sobre el diafragma, tienen
forma de esponja, son ligeros, elásticos y de consistencia blanda. Poseen la
capacidad de aumentar de tamaño durante la inspiración y disminuir durante
la espiración. Cada pulmón mide entre 25 y 30 cm de largo y tiene una
forma cónica, el derecho se encuentra dividido en tres lóbulos y el izquierdo
en dos. Su volumen es aproximadamente de unos 1.600 ml en el hombre y
1.300 ml en la mujer.
3.6.1. Pleura
64 2
diafragma produciendo un descenso de la presión intratorácica y aumento
de altura del tórax permitiendo así la entrada del aire, por el contrario la
d a a ,
espiración se realiza de forma pasiva debido al retroceso elástico pulmonar
y diafragmático. r iz a R O I P :
a u o
t normales, O
Tpaciente sano m ,
En condiciones a fisiológicas
g sin embargo, A S el
i l . co no hace uso de la
c a
musculatura raccesoria, A R G cuando m a respiratorio aumenta,
el trabajo
ye
Dseries V @ g
la respiración diafragmática no es suficiente, 9
entran en funcionamiento
9 una
a s 5 .
gla ventilación..1La9utilización de la musculatura
de músculos (músculorescaleno, intercostal y esternocleidomastoideo)
v a 3
a de fatiga.2respiratoria
para facilitar e incluso permitir 2
accesoria es a huni x
signo 7 y nos va a proporcionar
8
información acerca del trabajo que representa la ventilación para el paciente
con patología respiratoria.
d a a ,
r iz a R O I P :
a u to T O m,
a A S il . co
c arg A R G m a
e s
Figura 3.
DVOLÚMENES V @ g 9 9
rg a s
PULMONARES ESTÁTICOS
9 5 .
a v a 23 . 1
a h i x 7 . 2
8
VRI C
C I
C V VT
P
T VRE
C
R
V F
R
Figura 4.
Bronquiolo
Arteriola pulmonar
Vénula pulmonar
XA
Alvéolos
A H I
2 2 7 Saco alveolar
a 64 Lecho
capilar
a d a O , :
alveolar
Bronquiolo
pulmonar
to r iz O R , I P
a u S T co m
rg a G A a il .
s c a V A R g m
De Bronquiolo
respiratorio
a s @ 5 . 9 9
v a rg 3 . 1 9
h i x a Vénula
. 2 2
a pulmonar
8 7
Arteriola
pulmonar
NOTA: La unidad respiratoria terminal está constituida por los segmentos de la vía aérea situados
distalmente a un bronquiolo terminal: bronquiolos respiratorios, conductos alveolares y
alveolos. Las arterias bronquiales se ramifican paralelamente a los bronquiolos, mientras que
las venas bronquiales se originan en la periferia de las unidades respiratorias y drenan sangre
de unidades adyacentes.
d a a
(presión parcial de O2). La mayoría del O2 va unido al hierro de la Hb formando
,
r i a R O I P :
oxihemoglobina (HbO2). La relación entre la presión arterial de oxígeno y la
z
t o O ,
cantidad del mismo combinada con la Hb se explica por la curva de disociación
a u T m
a A S il . c o
de la hemoglobina. Esta relación no es lineal, por ello podemos encontrar:
c a rges casi horizontal
A R G m a normal, así con peque-
s curva V
De ños descensos de la PaOgseaproducen
La en un g
@ pequeños
rango de PaO
9 9
s
r y en el contenido 5 . 2
descensos de la satura-
9 O arterial. Pero si la PaO
v a
ción de oxígeno (SatO
adebajo de 50 mmHg, 3
2
. 1 de
2 la curva empieza a tener mucha más
h
disminuye i x
por
7 . 2 2) 2
pendiente, 2 2
Figura 5.
100
90
80 ↑pH ↓pH
Oxihemoglobina (% saturación)
↓DPG ↑DPG
70
↓Temp ↑Temp
60
50
40
30
20
XA
10
A H I
2
10
2 720 30 40 50 60 70 80 90 100
64
PO2 (mmHg)
d a a ,
El transporte de O es telo r iz a
producto del gastoO R O P :
cardíaco (GC) y de, laIcantidad
a u S Ttransporte decodicho
2
mgas depende
a
de dicho gas contenido en
rgque influyen
la A
sangre. Así, el
Gcontenido arterial il .
a de O (SatO y Hb) y en
ele s c a
de los factores
V A Ren el
g msistólico. 2 2
a fórmula: 8
utilizar la siguiente
7 2
D e s 2
V 2
@ g
2 3
9 9
3
a s
g entre.la1PCO
rrelaciones 5 .
9 (reflejado en el número
v a
adisueltas) y el.pH
Este equilibrio explica las 3
2sanguíneo (una expresión logarítmica
a
de moléculas h
de i
CO
x 7 2 2
2 8
de la concentración de hidrógeno - H -). La elevación de la presión parcial de
+
r iz a
cardiogénico, shock hipovolémico, R
intoxicaciónO I
por monóxido P de:car-
bono (CO), etc. u
a to
(10). T O m ,
a A S il . c o
c a rg A R G mDEaLA HIPOXIA
D s
6.eMECANISMOS V @ g 9 9
a s
FISIOPATOLÓGICOS
rgcomo la disminución 5 .
9 de la PaO por debajo de
v a 3 . 1
60 mmHg. a Toda xa conlleva
Podemos definir hipoxemia
hihipoxemia 7 . 2 2
una situación de hipoxia celular.
2
8
Como ya se ha comentado anteriormente, el transporte de O2 depende de
la capacidad de la sangre para su transporte, de su oxigenación y del GC,
cuando aparece la hipoxia, el organismo pone en marcha una serie de
mecanismos compensadores para proteger a los tejidos más sensibles a la
disminución de O2 (cerebro y miocardio), como son:
Aumento del GC aumentando la FC para así elevar el aporte de san-
gre a los tejidos.
La hipoxia celular puede estar causada por anomalías en el ciclo que deben
seguir los gases hasta que son utilizados por las células como combustible
H I XA
metabólico:
2 7 A
64 2 hipoventilación
a a
Alteraciones del intercambio gaseoso alveolo-capilar:
alveolar (depresión del centro respiratorio),
d ,
alteraciones de la ventila-
ción/perfusión, situacionesr iz a R O
de shunt alveolocapilar I P
(atelectasias, :neu-
u
monías) situaciones
a o O ,
tde insuficienciaSenTla difusión deloOmpor un aumen-
a
to de lasgresistencias
r de la G A alveolo-capilar
membrana
a i l .c(fibrosis pulmonar).
2
s ca V R
Ael transporte@degOm: disminución
e Incapacidad para
D hipovolemia), disminución
a s . 9 9 del GC (shock,
5
2
tructura químicav
r g de la Hb
.
(anemia)
1 9
deala molécula (intoxicación
o alteraciones en la es-
i x a 2 2 3 por CO).
ah celulares8que
Alteraciones
7.impidan la captación de O . 2
H I XA
Cianosis central. En la que la sangre ya hipóxica (ya sea debido a mal-
2 7 A
formaciones cardiacas que cursen con shunt o a alteraciones a nivel
pulmonar que cursen con hipoxia), sale de la aorta distribuyéndose a
64 2
todos los tejidos, siendo visible tanto en las extremidades como en
a a ,
lugares que suelen estar bien perfundidos aún en situaciones de com-
d
r i z a
promiso hemodinámico como la lengua. R O I P :
a u o
t En situaciones O
T de bajo GC ,
m Shock
a
Cianosis periférica.
A S il . c o (ejemplo
c a rg se produce
hipovolémico)
A R Gun aumentom del a
consumo de O en los teji-
Desdos V
y órganos principales, g
que dará lugar a cianosis9
@ 9
2
donde la mala per-
r g a s
fusión repercute más rápidamente, como
9 5
son .
el lecho ungueal, zonas
va o cartílagos
acras de los miembros
a 2 3 1
de.las orejas (11).
i x 2
ah 87.
7. VALORACIÓN Y MONITORIZACIÓN DEL ESTADO
VENTILATORIO
Tabla 3.
SATO2 PAO2
97% 95-105 mmHg
94% 70-75 mmHg
92% 67-73 mmHg
H I XA
90% 58-62 mmHg
2 7 A
87%
64 2
52-58 mmHg
84%
d a a
46-52 mmHg
,
r iz a R O I P :
a u to T O ,
m de CO
a A S i l . co
rga la fase final
Capnografía:
c
a es la
A
medición
R G no invasiva
m
de la concentración
atidal CO ETCO ), para 2
sreferida
V de la espiración
De ello se utiliza un aparatogdenominado g (end
@ capnógrafo. 9 9Este consta de un 2 2
a s
r y un fotodetector 5 .
9(sensor). La luz que envía el
v a
emisor de luz infrarroja
a por el CO 3 . 1
2al final de la espiración en proporción
h i x
emisor es absorbida
aa su concentración 7 . 2 2
directa 8 en el gas y la luz que pasa es recibida por el
fotodetector. Normalmente el análisis se hace por aspiración continua
en el circuito respiratorio cerca del tubo orotraqueal (TOT) por flujo
lateral, aunque también puede realizarse en un paciente no intubado
(Figura 6). La información que nos va a proporcionar el capnógrafo va
1. A la hora de interpretar los resultados de la SatO2 ha de tenerse en cuenta que la medición de ésta
a través de pulsioximetría presenta una variabilidad de ±2% con respecto a las mediciones arteriales
en el intervalo de medida de 70-100%.
H I XA
2 7 A
64 2
d a a ,
r iz a R O I P :
a u to T O m,
a A S il . co
c arg A R G m a
Des V @ g 9 9
rg a s 9 5 .
a v a 23 1
Figura 6. Sonda de capnografía tipo gafas y para paciente intubado.
.
ah i x 7 . 2
8
En los servicios hospitalarios se podrán complementar con:
Tabla 4.
ARTERIAL VENOSA
2 7 60-85% A
SatO2 94-100%
64 2 SatO 2
d a a ,
r iz a R O I P :
a u t o T O m,
g a A S il . c o
c derpunción deA
a laR
G m a
s
Técnica
V
De Explicar al paciente lagtécnica @ g
gasometría arterial
9 9
r a s que se1le 9 5 .
va a realizar.
v a
a del paciente 2 3 .
Colocarh
a x
elibrazo 7 . 2sobre una superficie dura y lisa colo-
8
cando la muñeca en hiperextensión (si se punciona la arteria radial). Si
se va a puncionar la arteria femoral el paciente debe estar colocado en
decúbito supino con el muslo en ligera abducción.
Desinfectar la zona con antiséptico, extendiéndolo desde el centro a
la periferia.
Palpar la arteria con los dedos índice y medio, disminuyendo la pre-
sión ejercida al detectar latido.
6 4 2
para ello; se trata de jeringas heparinizadas con heparina sódica. Se podría
utilizar cualquier jeringa, pero siempre que a estuvieran heparinizadas.
a d a O , :
to r iz O R , I P
8. SISTEMAS DEa u
ADMINISTRACIÓN S TDE OXÍGENO c o m
a
rgconocer losAR G A a il .
s c
Antes
ade V distintos g m
sistemas de administración de O ,
e
Dnombraremos a s
las fuentes de administración. . 9
@ Son5fundamentalmente
9 dos,
2
extrahospitalaria.
El O2 suministrado a través de estos sistemas es seco, lo que hace que se
deshidraten las mucosas del árbol respiratorio, para prevenir esto, existen
dispositivos que humedecen el oxígeno añadiéndole vapor de agua
(caudalímetro humidificador). La humedad que proporcionan estos
dispositivos es del 40-60%. Debemos recordar que a mayor flujo más
importante es la humidificación (Figura 7).
a h i x 7 . 2
8.1. Sistemas de bajo flujo 8
Son sistemas que permiten que el paciente inhale aire procedente de la
atmósfera y lo mezcle con el O2 que le suministramos. Por lo que la fracción
de oxígeno inspirada (FiO2) variará en función del patrón respiratorio del
paciente (volumen de ventilación pulmonar, FR) así como del flujo éste
se mide en litros por minuto (l/min) y es la presión a la que sale la mezcla
de aire y O2.
XA
8 l/min 70-80%
MASCARILLA CON RESERVORIO 10 l/min
12-15 l/min
80-90%
95-100% A H I
2 2 7
a 64
a d a O , :
to r iz O R , I P
Dentro de estos u sistemas de bajoTflujo los másm comúnmente
g a a A S il . c o
utilizados son:
c a r A R G m a
DesGafas nasales.VEs un dispositivo @ g 9 9O por medio de
rg a s 5 .
que suministra el
9orificios nasales. Es un sis-
2
dos pequeños tubos
v a introducidos
apara el paciente 3 1
en.los
2ya que le permite hablar y comer.
h i
tema cómodox 7
Tieneavarios inconvenientes
. 2
8 pero el más importante es que no es
útil para suministrar concentraciones de O2 superiores al 40%, por
tanto, en el caudalímetro no debemos marcar flujos superiores a 4-
5 l/min (Figura 8).
Mascarilla simple. Es una mascarilla conectada directamente a
una fuente de oxígeno. Posee dos agujeros a los lados que permi-
ten la exhalación de aire expirado. Proporciona concentraciones
de O2 del 40-60%.
H I XA
2 7 A
64 2
d a a ,
r iz a R O I P :
a u to T O m,
a A S il . co
c arg A R G m a
Des V @ g 9 9
rg a s 9 5 .
a v a 23 . 1
ah i x 7 . 2
8
H I XA
2 7 A
64 2
d a a ,
r iz a R O I P :
a u to T O m,
a A S il . co
c arg A R G m a
Des V @ g 9 9
rg a s 9 5 .
a v a 23 . 1
ah i x 7 . 2
8
d a a
sivos, el O2 es administrado procedente de válvulas instaladas en la
,
r i a R O I P :
pared o de tanques de O2, en las de transporte, el oxígeno proviene
z
to O ,
de bombonas de O2 y de aire comprimido. Se puede administrar a
a u T m
a A S il . co
través de los diversos sistemas no invasivos (cánulas nasales,
c arg R G a
mascarillas, etc.), a través de ventiladores de transporte o bien crean-
A m
Des V @ g 9 9
do una atmósfera dentro de la incubadora, en este último caso se
rg a s 5 .
deberá tener la precaución de controlar que el compartimento esté
9
a v a 23 . 1
cerrado y/o se abra lo menos posible para mantener la FiO2 deseada.
ah i x 7 . 2
Actualmente las incubadoras disponen de un mezclador de gases que
8
posibilita la consecución de una FiO2 del 21 al 100%. En el transpor-
te de neonatos, sobre todo en menores de 1 kg es importante colocar
esponjas húmedas entre la incubadora y el colchón de forma que se
consiga humedecer el ambiente al evaporarse el agua con el calor de
la incubadora, para de esta forma favorecer el mantenimiento de la
hidratación del neonato.
Cada uno de los dispositivos que hemos visto hasta ahora, conlleva
una serie de ventajas e inconvenientes que debemos conocer para elegir
el que mejor se adapte a nuestro paciente en función de sus necesidades
(Tabla 6) (13).
H I XA
Efectiva en tratamientos
a corto plazo
2 7 A
Para alcanzar concentración deseada debe
estar bien fijada a la cara del paciente,
MASCARILLA Proporciona
64 2
puede originar irritación de la piel.
RESERVORIO concentraciones de O2 altas.
No produce sequedad
d a aNo válida para tratamiento a largo plazo.
,
Puede producir toxicidad por O2.
de mucosas
r iz a R O
Impide hablar o comer.
I P :
Suministraau
t o O
T de agobio. cPuede m ,
g a A S
Sensación
i l . o irritar la piel.
c r
concentraciones G Interfiere
a precisas de OV. AR que retirarla m en a
el habla y hay
De
M
s
ASCARILLA 2
@ g para comer.
La FiO puede variar9 9paciente
VENTURI Fácil cambio de
concentraciones a s
rg o si3el flujo
de la 9
mascarilla
2
5
a la . según
cara del
el ajuste
y/o flujo. va
a 2 . 1 es inferior al necesario.
D h i x
Proporciona
ISPOSITIVO alto grado 7 .
ade humedad y aumenta8la cánula2Su peso hace que se desplace la
T
EN dentro de la traquea
movilidad del paciente produciendo dolor al paciente.
a A S i l . co
c arg A R G m a
De s V @ g 9 9
rg a s 9 5 .
T
a v a
ÉCNICA DE ASPIRACIÓN
2 3 . 1
a h i x 7 . 2
Conectar el aspirador8
e introducir la sonda en el lugar deseado (ca-
vidad orofaríngea, orificios nasales o TOT) sin aspirar. Si la aspiración
se realiza a través del TOT3 al notar resistencia nos indicará que la
sonda ha llegado a la carina y se debe retirar uno o dos cm antes de
comenzar la aspiración para evitar lesiones.
3. La aspiración a través del TOT es una técnica aséptica, por lo que siempre que sea posible nos
colocaremos guantes estériles, al menos en la mano que manipula la sonda de aspiración.
H I XA
9.1.2. Pinzas de Magill 2 7 A
64 2
Se trata de unas pinzas que debido a su
d a
aforma angulada , y sus extremos en
forma de anillos nos permitenreliz a
acceso a la VA delR O I P
paciente, manteniendo: en
o
t de su extremo
todo momento la visiónudirecta
a O
T distal. Secutilizan
m ,
como ayuda
g ade IOT, asíRcomo A S . o
il de cuerpos extraños
en la maniobra
c a r G para la extracción
m a
Des
alojados en las vías
VA s@g
aéreas (Figura 12).
. 9 9
a rg a 1 9 5
a v 2 3 .
a h x
9.1.4. Cánulas ifaríngeas
7 . 2
8
Es un dispositivo rígido o semirrígido, hueco y de forma anatómica que al
ser introducidos en la vía aérea superior, ya sea por la boca (orofaríngea) o
por la nariz (nasofaríngea) facilitan el mantenimiento de su apertura y la
aspiración de secreciones. Su finalidad es evitar que la lengua obstruya la VA,
no las aíslan ni impiden la broncoaspiración. La elección del tamaño adecuado
y la realización de una técnica correcta evitan la aparición de complicaciones
que a veces pueden resultar fatales (Tabla 7) (16).
A H I
2 2 7
a 64
Tabla 7.
a d a O , :
t o r iz O R , I P
a u
COMPLICACIONES DE LAS CÁNULAS T
FARÍNGEAS
S c o m
rg a C RG
A a il .
D
s c a
ISPOSITIVO
V A g
OMPLICACIONES
m
DeC ÁNULA Tamaño mayor:
a s @
irritación, lesión local,9
5 . 9
posibilidad
OROFARÍNGEA
v a rgmenor: obstrucción
de laringoespasmo o
3
edema
. 1 9de la VA.
de glotis.
h i x a Técnica incorrecta:
Tamaño
. 2 2Obstrucción al empujar la lengua hacia atrás.
a 8 7
Paciente con reflejo nauseoso conservado:
la colocación forzada del dispositivo puede provocar
vómitos con la consiguiente broncoaspiración.
CÁNULA NASOFARINGEA Rotura de cornetes y hemorragia nasal
Tamaño mayor: Edema de glotis, laringoespasmo
o regurgitación por progresión excesiva.
Técnica incorrecta: Progresión hacia el
esófago dificultando la apertura de la VA.
TÉCNICA DE COLOCACIÓN
TÉCNICA DE COLOCACIÓN
d a a
el correcto estado de los materiales antes de sedorrelajar al paciente (inflar y
,
r i a R O
desinflar el neumotaponamiento, pilas del laringoscopio, etc.).
z I P :
a u to T O m ,
a A S il . co
c a rg
9.2.1. Intubación
R
orotraqueal
A G m a
s V
DeLa maniobra de IOT permitegelamanejo g 9 proporcionando
@definitivo5de.la9VA,
s 9tiempo que protege y aísla
una adecuada oxigenaciónayrventilación al mismo
. 1
i x v
la vía aérea del paciente.
3
a Consiste en.2la2colocación de un TOT a través de las
h 7 a nivel de la tráquea del paciente.
a hasta dejarlo8localizado
cuerdas vocales
El TOT es un tubo de luz gruesa que a través de la boca o la nariz se
introduce en la tráquea hasta un punto situado por encima de la bifurcación
de la tráquea proximal en los bronquios. Los TOT se miden en la escala
americana (la más utilizada actualmente) o en la escala francesa. La escala
americana mide el diámetro interno del TOT y va desde 2,5 a 10 mm
incrementado el tamaño de 0,5 en 0,5 mm. La escala francesa mide la
circunferencia externa en mm y va desde 10 hasta 40 con incrementos de 2
Tabla 8.
INDICACIONES DE LA IOT
y pH
2
Hipercapnia severa.
•
a 6 4 2
a
Agotamiento físico y/o trabajo respiratorio
• a
d excesivo. RO, :
o r iz de la vía aérea. O
t vital hipovolemia,
Pérdida de los reflejos protectores
, I P
•
a u S Ttraumatismoccraneoencefálico
o m (TCE),
Lesiones con compromiso
•
a
rgdel nivel de conciencia
shock, contusión pulmonar, G
etc.. A a il .
s c a V A R (Glasgow <g 9)m
De Compromiso vital por paradagrespiratoria
Alteración o deterioro brusco del mismo.
•
a s @inminente. 5.99
•
v a r 3 . 1 9
h i x a . 2 2
a 8 7
El laringoscopio es un instrumento que permite visualizar la laringe. Está
compuesto por un mango metálico que contiene en su interior pilas que
suministran la energía a la bombilla de la pala con la que se articula. Así
mismo existen en el mercado laringoscopios de fibra óptica que traen integrados
la bombilla en el mango, evitando así las conexiones eléctricas y la bombilla
de la pala. La luz es transmitida a través del haz de fibra óptica (que va por
debajo de la pala hasta la punta de la misma). Por último debemos nombrar el
a @ 5
fórmula. 9(en mujeres se restan
v
2 cm al resultado): a rg 3 . 1 9
h i x a . 2 2
7
a Nº del tubo x 3 = 8cm a introducir
e) A continuación se hincha el neumotaponamiento con 5-10 ml
de aire.
H I XA
2 7 A
64 2
d a a ,
r iz a R O I P :
a u to T O m,
a A S il . co
c arg A R G m a
Des V @ g 9 9
rg a s 9 5 .
a v a 23 . 1
ah i x 7 . 2
8
Para comprobar que el TOT está ubicado correctamente existen una serie
de técnicas de comprobación:
il . c o
a rgla técnicaAdeRIOTGpodemos utilizar
Para facilitar
c m a las siguientes maniobras:
s V
De BURP (back-up-right-pressure). g
@ en desplazar 9 9el cartílago tiroides
a s
rgatrás, hacia3.arriba
Consiste 5 .
9 y a la derecha, de forma
v a
ase presiona contra
ejerciendo presión hacia 1
2 los cuerpos vertebrales cervicales,
a
que la h i x
laringe 7 . 2
8
permitiendo una mejor visualización de la glotis (19).
Sellick. Consiste en ejercer presión sobre el cartílago tiroides de
forma que se limita la posibilidad de broncoaspiración al sellar el
esófago (13).
5. Si el paciente ha sido intubado correctamente las cuerdas vocales que se visualizaban previa la IOT
ya no se ven y si el TOT se ha ido a esófago se seguirán viendo.
La laringe es más corta, más estrecha, más alta más anterior y con un
ángulo más agudo.
La epiglotis tiene forma de “U” y es más larga.
El calibre de la tráquea es menor con un estrechamiento a nivel del
cartílago cricoides que se mantendrá hasta la pubertad, en el adulto
este estrechamiento se encuentra a nivel de las cuerdas vocales. Por
eso, a nivel prehospitalario es mejor utilizar TOT sin balón de
neumotaponamiento, sobre todo en tubos de tamaño de hasta 5,5 mm,
sin embargo a nivel hospitalario se pueden utilizar TOT con balón
(siempre manteniendo las presiones del neumotaponamiento por de-
bajo de 20 cmH2O y controlándolas periódicamente) principalmente
en situaciones que conlleven un aumento de las resistencias en las vías
aéreas, disminución de la compliance pulmonar o en caso de fugas de
H I XA
aire por la glotis alrededor del TOT (17).
2 7 A
En los dos primeros años hay un descenso
2
4 de las estructuras
6cambios
rápido
d a
de la vía aérea superior que sufrirá a
pocos
, hasta la pubertad
iz a mayor de laRepiglotis
en que se produce un descenso
r O y el cricoides.
I P :
Para calcularaelu
to T O ,
m regla que el
a A
tamaño del TOT S podemos utilizar
il . co como
c a rginterno delAmismo
diámetro R Gdebe ser igual
m aladedo meñique o el orificio
Desnasal del niño. V g
En mayores de un año, se puede 9
@ 9 utilizar la siguiente
r g a s
fórmula: nº del tubo (diámetro interno) =
9 4 5
+ .
(edad años / 4).
a va 2 3 . 1
i x la longitud del2TOT a introducir se puede aplicar esta
87o. diámetro interno en mm x 3. En neonatos
ah(edad años/2)+12;
Para calcular
fórmula:
una regla que se puede aplicar es: peso (kg)+ 6 cm para la intubación
nasotraqueal sería: peso (kg) + 7cm.
TÉCNICA DE VENTILACIÓN
Des
MATERIAL NECESARIO PARA EL ACCESO DE LA VÍA AÉREA EN ADULTOS Y PEDIATRÍA
c a
a
DISPOSITIVO EDAD PREMATURO RN Y < 6 MESES > 6MESES Y < 1AÑO 1-2 AÑOS 2-5AÑOS 5-8 AÑOS MAYORES DE 8 AÑOS ADULTOS
rg
h i
CÁNULA 00 0 1 2 3 4 4-5 4-5
x
OROFARÍNGEA
a
MASCARILLA FACIAL Redonda Redonda Triangular Triangular Triangular Triangular Triangular Triangular
V
v
u
o redonda modelo modelo modelo modelo modelo
t
A
a
modelo lactantes niños niños niños adultos adultos
o r
R
8
BOLSA
i
250 500 500 500 1.600- 1.600- 1.600- 1.600-
rg
7
AUTOHINCHABLE (ML)
z
2.000 2.000 2.000 2.000
a
G
.
a
s
TOT <1 kg = 2,5 3,5-4 4 4-4,5 4+ (edad 4+ (edad 4+ (edad 7-7,5
2
A
d
1-2 kg = 3 años/4) años/4) años/4) Mujeres
2
S
@
a
2-3 kg = 3,5 8- 8,5
3
g
.
>3 kg = 3,5-4 Hombres
T
a
1
CM A INTRODUCIR <1 kg =6,5-7 10-12 12 13-14 14-16 16-18 18-22 20-30
m
O
9
POR BOCA 1-2 kg = 7-8 (nº tubo (nº tubo (nº tubo (nº tubo (nº tubo (nº tubo (nº tubo
a i
5
R
2-3 kg =8-9 x 3) x 3) x 3) x 3) x 3) x 3) x 3)
64
2
O
9
c
,
LARINGOSCOPIO
2
Pala recta Pala recta o Pala recta o Pala curva Pala curva Pala curva Pala curva Pala curva
9
o
nº 0 curva nº 1 curva nº 1 nº 2 nº 2 nº 2-3 nº 2-3 nº 2-3
PINZA
7
m
Pequeña Pequeña Pequeña Pequeña Mediana Mediana Grande Grande
,
A
MAGILL o mediana o grande
I
H
SONDA ASPIRACIÓN 6 6-8 8-10 8-10 10-12 12-14 12-14 12-14
I
TRAQUEAL P :
XA
Figura 17. Técnica de ventilación a través de resucitador manual.
H I XA
2 7 A
64 2
a a
Aplicar compresionesrcon iz a d
la mano libre,R Ola, bolsa deIreanima-
sobre P :
ción de formaa u o O
t y observarSlos movimientos
T m ,
su a
probarrg
suave,
A il . c onecesario
del tórax para com-
a R G
eficacia El volumen a
ctórax se eleve, loAque corresponderá m a
administrar será el para que
Deshiperinsuflar, niVhiperventilar
el
@ g a unos 500-600
9 9 ml. No se debe
r g a s (14, 17).
9 5 .
a va 223. 1
i x
ahAVANZADO8DE 7. LA VÍA AÉRA DIFÍCIL
10. MANEJO
Existen una serie de signos que nos van a hacer sospechar que estamos
ante una VAD (Tabla 10) (7). Además, existen una serie de pruebas o test
que se pueden realizar al paciente para saber si nos encontramos ante una
IOT difícil, estas son:
H I XA
Apertura oral: distancia interincisiva menor de 3 cm sugiere dificultad
2 7 A
para la IOT. Para su valoración se le pide al paciente (si está conscien-
64 2
te) que introduzca tres dedos en vertical en su boca, la apertura debe-
a a
ría ser de 6 cm si es menor a dos dedos (3 cm) indica posible dificultad
d ,
para la IOT.
r iz a R O I P :
a u t o T O ,
m el cartílago
a
Distancia tiromentoniana:
AseS
il . c
mide la distanciao entre
a rga la barbillaAcon
tiroides
c R G a
la cabeza en hiperextensión,
m si la distancia
Desesdedos)
menor a 6 cmV(o tres dedos) @ g 9
en adultos o menor
9 de 3 cm (o dos
s
rgade 1 cm3(o.1un9dedo)
en niños o menor .
5 en lactantes indicará
a a
dificultad para lavIOT.
2
h i x 7
a y extensión cervical: . 2
Flexión
8 flexionando el cuello con la boca ce-
rrada debe tocar el tórax con su barbilla. Extendiéndolo su barbilla
se elevará por encima del lóbulo de la oreja, en caso contrario, pro-
bable VAD.
Desplazamiento del maxilar inferior: test de mordida del labio su-
perior. Mide la capacidad de protrusión del maxilar inferior. Si los
incisivos superiores no consiguen morder el labio superior sugiere
máxima dificultad (7).
Tabla 11.
H I XA
CLASIFICACIÓN DE MALLAMPATI
2 7 A
2
4 y pilares
6fauces
C I LASE
a
Visualización de paladar blando, úvula,
a úvula y fauces
C II Visualización de paladard
LASE
Visualización r z a
deipaladar
blando,
blando y base R
O, I P :
C III LASE
a u o
t de paladar duro T O de la úvula
m,
C IV
a Visualización
LASE
A S i l . c o
c a rg A R G m a
Des V @ g 9 9
rg a s 9 5 .
a v a 2 3 . 1
a h i x 7 . 2
Tabla 12. 8
CLASIFICACIÓN DE CORMACK
XA
TÉCNICA DE COLOCACIÓN
A H I
a) Colocar al paciente en decúbito supino.
2 2 7
b) Elegir la mascarilla adecuada al paciente
a 6 4función del peso, com-
en
a d a y el neumotaponamiento
probar el correcto estado de la mascarilla
O , (hin-
:
dante lubricante uporto
riz
char y deshinchar la mascarilla sobre
la parte posterior
una
T O
de
R
superficie
la ML.
dura)
m
y I P
aplicar
, abun-
a a A S il . c o
a rgla cabezaAenRhiperextensión,
c) Colocar
c G m a que no haya sospecha
siempre
Ded)sIntroducir V
de lesión cervical.
@ g 9 9
a s
rgy enpordirección 5 .
9 a la abertura supraglótica
el lado contrario
a
pegada al paladar
a
la mascarilla
v duro 2 3 . 1
caudal apoyando el dedo índice
h i x . 2
en laa 87 a modo de lápiz) hasta llegar a la pared
mascarilla (cogiéndola
posterior de la faringe (Figura 18).
e) Una vez situada en este punto, presionar hacia abajo hasta que se
note resistencia.
f) Inflar el neumotaponamiento con la cantidad de aire que viene mar-
cada en la mascarilla (20 a 40 ml para los números de 3 a 5) se produ-
cirá un ligero movimiento de la mascarilla hacia fuera de la boca y se
observará la protrusión de la laringe.
H I XA
2 7 A
64 2
d a a ,
r iz a R O I P :
a u to T O m,
a A S il . co
c arg A R G m a
Des V @ g 9 9
rg a s 9 5 .
a v a 23 . 1
ah i x 7 . 2
8
ah i x
de traumatismo faríngeo y laríngeo (23).
7 . 2
8
TÉCNICA DE COLOCACIÓN
a d
dos neumotaponamientosz(primero
a el azul) yO , el dispositi-
recolocar :
vo (21, 24). to r i T O R , I P
a a u A S . co m
a rg R G a il
s c V A g m
De
10.2.4. Tubo laríngeo
a s @ 5 . 9 9
a
Se trata de un tubovcon rungglobo de3neumotaponamiento
. 1 9 esofágico y
i x a
otro laríngeohy un conector 7 2 2
. de 15mm para adaptarse a un
a 8 estándar
dispositivo de ventilación. Existe una variante de este tubo que permite
introducir una sonda gástrica a través de un conducto paralelo. Existen
seis tamaños que van desde el 0 al 5. Tiene una ligera forma curva para
adaptarse a la anatomía faríngea y es más pequeño que el tubo esófago-
traqueal, además dispone de una abertura a nivel faríngeo, que permite
ventilar al paciente. La técnica de colocación es similar a la del
Combitube®, por lo que para su inserción se han de seguir los pasos
mencionados anteriormente (7).
H I XA
2 7 A
64 2
d a a ,
r iz a R O I P :
a u to T O m,
a A S il . co
c arg A R G m a
Des V @ g 9 9
rg a s 9 5 .
a v a 23 . 1
ah i x 7 . 2
8
H I XA
2 7 A
64 2
d a a ,
r iz a R O I P :
a u to T O m,
a A S il . co
c arg A R G m a
Des V @ g 9 9
rg a s 9 5 .
a v a 23 . 1
ah i x 7 . 2
8
A R G m a
s V
Dea) Desinflar completamente g
@ y lubricarla
lasmascarilla 9 9abundantemente.
a 5
rgpuede estar3en.1cualquier .
9 posición, por lo que
v a
ade intubación.2es2ideal en pacientes politraumatizados
b) La cabeza del paciente
h i x
este dispositivo
a 7
con sospecha de lesión8cervical. Si es posible, se prefiere la colocación
de la cabeza del paciente en posición neutra.
c) Coger el mango del dispositivo con una mano, colocando la mascari-
lla contra el paladar del paciente (Figura 21).
d) Deslizarla siguiendo la curvatura de de la propia mascarilla hasta
que quede colocada en la posición en que esté el tubo paralelo a
los dientes.
H I XA
2 7 A
64 2
d a a ,
r iz a R O I P :
a u to T O m,
a A S il . co
c arg A R G m a
Des V @ g 9 9
rg a s 9 5 .
a v a 23 . 1
ah i x 7 . 2
8
6. Recordar que antes de proceder a la realización de la técnica se debe comprobar el correcto estado
de los materiales.
Esta técnica permite ventilar al paciente por periodos de tiempo muy cortos
ya que va reteniendo anhídrido carbónico progresivamente.
2 7 A
64 2
Una vez comprobada la entrada de aire se retira el trócar metálico y
se introduce el catéter.
d a
ade 2-2,5 ml sinOémbolo
, y a esta:se le
r z
Conectar al catéter unaijeringa a R I P se
coloca una conexión
a u tode un TOT de T
3 O
mm. A través dem ,
este sistema
a
puede ventilar
g al paciente conA unS l . c
resucitadorimanual.o Conectar a una
fuenter
ca de Oy asuflujo R G
Amáximo, permitiendo a
mla (14).
entrada de aire durante la
D es V 2
@ g 9 9
inspiración salida
a s
durante la espiración
rga los pacientes 5 .
v a . 1 a9través del jet transtraqueal
Otra forma de ventilar
64 2
Colocar al paciente en decúbito supino
d a a con la cabeza en hiperextensión
,
y aplicar antiséptico en la zona
r iz a elegida para el O
R acceso.
I P :
a u o
t en la zona O
deTincisión y practicar
,
muna pequeña
Infiltrar anestesia
a local
A S i l . c o
c a rg
incisión de 3-4 cm
A
sobre
R Gel segundo o a
tercer
m anillo traqueal.
s
De que V
Separar los distintos planoss
g
@ hasta5llegar 9 9al istmo del tiroides
a cutáneos
g se retrae hacia
ranterior
se libera de la tráquea,
.
9arriba y resecar un pequeño
a v a 2 3 . 1
rectángulo de
a h i x la pared
7 . 2 del anillo.
Introducir la cánula 8
de traqueostomía en la tráquea a través de la
apertura, la cual debe ocupar entre dos tercios y tres cuartos del diá-
metro traqueal.
Una vez esté bien colocada la cánula, se fija al cuello del paciente y se
retira el TOT.
Realizar siempre radiografía de control para verificar su correcta
ubicación.
Tabla 14.
FISIOLÓGICOS
• Mantener, normalizar o manipular el intercambio gaseoso.
• Proporcionar ventilación alveolar adecuada o al nivel elegido (hipercapnia permisiva).
• Mejorar la oxigenación arterial.
• Disminuir el trabajo respiratorio: Descargar los músculos ventilatorios.
• Aumentar el volumen pulmonar.
• Abrir y distender vía aérea y alveolos.
• Aumentar la CRF impidiendo el colapso de alveolos y el cierre de la VA al final de la
espiración.
CLÍNICOS
• Mejorar la hipoxemia.
• Corregir acidosis respiratoria.
H I XA
• Mejorar la disnea y el sufrimiento respiratorio.
2 7 A
• Prevenir y/o corregir atelectasias.
64 2
•
d a
Permitir la sedación y el bloqueo neuromuscular.
ay miocárdico. O,
•
r z a
Disminuir el consumo de O sistémico
i 2
R I P :
to
Reducir la presión intracraneal.
•
a u T O m,
a
Estabilizar la pared torácica. A S il . co
c a
•
rgla fatiga deA
Revertir R G respiratorios.ma
los músculos
Des
•
V @ g 9 9
rg a s 9 5 .
a v a 2 3 . 1
a h i x 7 . 2
8
La VM puede ser invasiva o no invasiva, dependiendo de la necesidad de
aislamiento de la vía aérea, de la autonomía respiratoria del paciente y de su
nivel de conciencia. La ventilación mecánica no invasiva (VMNI) utiliza una
superficie de contacto con el paciente (interfase), que la mayoría de las veces
corresponde a mascarillas (ya sean nasales o naso bucales), mientras que la
ventilación mecánica invasiva (VMI) se realiza a través de tubos introducidos
en la luz traqueal.
D(l/min) V s @ . 9 9
a rg a 1 9 5
11.2.1. Presiónixa v 2 3 .
a h 8 7 . 2
La presión es la fuerza que ejerce el gas sobre las paredes del recipiente
que lo contiene: ventilador mecánico, tubuladuras, vía aérea, alveolos.
H
derivada de la situación clínica puede mantenerse positiva contribuyendo a I XA
presión al final de la espiración baja a cero; pero de una forma terapéutica o
2 7 A
la reapertura alveolar mejorando así la capacidad de captación de O2 por el
64 2
paciente. La PEEP debe ser utilizada con precaución, ya que aumenta la
a a
presión intratorácica; se consideran niveles tolerables de PEEP los que no
d ,
sobrepasen los 15 cm H2O (27).
r iz a R O I P :
a u t o T O m ,
a A S il . c o
a rg
11.2.2. Volumen
c A R G m a
s V
De Volumen corriente (VC)gao volumen g
@ tidal 5 9 9
r s 9 .
(VT): cantidad de aire que
v a
el ventilador insufla
a 3 . 1
en cada inspiración
2 al paciente.
a h i x 7 . 2
Volumen minuto:
inspiración.
se 8
obtiene multiplicando la FR por el VT de cada
11.2.3. Flujo
r R O I P :
a u t o T O m ,
a A S il . c o
a rg o A
11.2.6.cSensibilidad R G m a
De s V trígger
@ g 9 9
Es un mecanismo conadistinto
a s 5
rg grado3de.1sensibilidad .
9 que se activa para
x
desencadenar uniflujo v
a inspiratorio.de22gas cuando se detecta una caída en la
a
presión o un h
cambio 8en7 el circuito respiratorio del paciente. Si lo
del flujo
conectamos, pasamos de un modo ventilatorio controlado a un modo
asistido. Su activación se produce por la presión negativa que el paciente
realiza cuando hace un esfuerzo inspiratorio o a través de la captura de un
volumen determinado de aire que circula de forma continua por las
tubuladuras del ventilador utilizando su musculatura inspiratoria, por lo
que se puede decir que el trígger es una medida de la fuerza muscular del
paciente (28).
d a a
lectiva, etc. Estos ventiladores son los más utilizados a nivel general y
,
r iz a
en especial en emergencias.
R O I P :
a u o
t por presión T O m ,
Son aquellos
Ventiladores limitados
g A S . c o
o de flujo continuo.
a se disponeRdeGun control en elaqueilse regula la cantidad de
en losrcuales
s a
c que unaVvezAalcanzada @
presión g mdebe mantener
el equipo hasta el final
e
D de la fase inspiratoria. gas . 9 9
a r 1 9 5
. la presión (valor ajustado).
En estos equipos,vconocemos 3
y controlamos
i x a . 2 2
ah espirado no8lo7podemos
El volumen
mos conectando un espirómetro
controlar, únicamente lo medire-
en la válvula espiratoria (valor medido).
Ventiladores ciclados por tiempo. En este tipo de ventiladores, el
paso de la inspiración a la espiración está determinado por el mando
que regula la duración del Ti. El funcionamiento de éste es indepen-
diente de la presión o volumen alcanzado y su manejo se lleva a cabo
conjuntamente con los controles de flujo y limite de la presión
inspiratoria. A un Ti fijo, un aumento de flujo inspiratorio causaría un
aumento del VT y viceversa.
d a a ,
r i a
El nivel de conciencia del paciente.
z R O I P :
Y especialmenteu
a ento O
Ten VM delcpersonal
situaciones de urgencias y ,
m que asiste
emergencias, la expe-
riencia y a A S il . o
c
al a rg conocimientos
paciente. A R G específicos
m a
s V
DePodemos dividirla según elgtipoasde@ g 9 9
r 5
9en:
ventilador
.
v a
avolumen .22 3 . 1
h i x
a
A) Limitados por
87
VM controlada limitada por volumen o IPPV (intermittent positive
pressure ventilation).
VM asistida. VM asistida-controlada limitada por volumen (IPPV
asistida) assisted intermittent positive pressure ventilation, ventilación
sincronizada mandatoria intermitente (SIMV) Synchronized
intermittent mandatory ventilation, y volumen minuto mandatorio
(MMV) mandatory minute volumen.
s c
seguido por un
V
ciclo
A respiratorio m
sincronizado
g por parte del ventilador.
De alcanzar
En este ciclo ventilatorio se va@
g a s a proporcionar 9
9 5 . el 9volumen o se va a
la presión en la
la programadaa a r vía aérea
v se proporcionaría
programados.
. 1 Si la FR fuese superior a
3 un ciclo inspiratorio coinci-
h i x también
. 2 2
diendoacon el esfuerzo8del7paciente. Habrá que programar también la
sensibilidad del ventilador de acuerdo al esfuerzo muscular del paciente
(trígger). Este patrón se puede usar tanto en pacientes con esfuerzo res-
piratorio como en los que carecen del mismo. Como ventajas presenta la
disminución de la necesidad de sedación del paciente y va a facilitar la
desconexión de la VM, ya que previene la atrofia de los músculos respira-
torios, además permite la sincronía respirador-paciente. Como inconve-
nientes encontramos que puede producir atrapamiento aéreo, favorecer
la aparición de alcalosis respiratoria y aumentar el trabajo respiratorio.
64 2
FR y aumenta el VT. El ciclo respiratorio se inicia por un esfuerzo del
d a a
paciente proporcionando el ventilador un flujo de gas que hace que se
,
r i a R O I P :
alcance la presión que hemos prefijado. El flujo de gas continúa pero
z
to O ,
cada vez es menor a medida que se llenan los pulmones. El paso a la
a u T m
a A S il . co
fase espiratoria del ciclo se inicia cuando el flujo, que es descendente,
c arg R G a
alcanza un determinado nivel. El nivel de flujo inicial va a venir deter-
A m
Des V @ g 9
minado por la intensidad del esfuerzo inspiratorio del paciente. La FR
9
rg a s 9 5 .
es la que realiza el paciente. El VT va a depender del nivel de presión
a v a 23 . 1
de soporte que hayamos fijado, de la resistencia pulmonar y del flujo
ah i x 7 . 2
inicial. Este modo tiene la ventaja de que produce poca desadaptación
8
entre el paciente y el ventilador. Se utiliza como modo de destete. Una
desventaja que tiene es que no podemos controlar el VT pues este
depende de la distensibilidad pulmonar (9).
APRV o IRV. La relación inspiración: espiración convencional es de
1:2 a 1:4 sin embargo en esta modalidad ventilatoria la relación es de
1:1 o ratios superiores y puede asociarse a ventilación controlada por
volumen o por presión. Al mantener una inspiración más alargada evi-
ta la hipoventilación en caso de que se asocie a ventilación controlada
r g a s 9 5 .9
11.5.1. Objetivos, a v 2 3 .1
a y contraindicaciones
hix
indicaciones
a 8 7 .2
Los objetivos de la VMNI son:
Las diferentes patologías en las que puede ser aplicada la VMNI se recogen
en la Tabla 15 (30).
INDICACIONES DE LA VMNI
H I XA
2 7 A
64 2
a
a en lasO
Así mismo, existen una serie zdea d
situaciones que,esta modalidad
: de
r i
to son: S TO
VM está contraindicada, estas
R , I P
a a u A .c o m
r g R G a il
e
s ca
Inestabilidad
V A
hemodinámica.
@ g m 9con FiO de 1).
D Hipoxemia refractariag(PaO a s 5 .
inferior a 60 mmHg 9
v a r muscular.3.19 2 2
i x a
Signos de agotamiento
h . 2 2
a 8
Paciente no colaborador.
7
Anormalidades, traumas, quemaduras faciales que impidan la correc-
ta colocación de la interfase.
Necesidad de IOT para proteger la VA (coma o convulsiones) o para
el manejo de secreciones.
Vómito activo.
64 2
d a
a en urgencias ,
iz
11.6. Ventilación mecánica invasiva a R O P :
y emergencias tor T O , I
a a u A S . c o m
a
PodríamosrgdenominarAlaRVMI G como unm a il
procedimiento de sustitución
e s c
temporal de la V
función ventilatoria @ g
normal, empleado en9situaciones en que
Désta, por diversos motivos, r
nog s
a los objetivos
cumple 9 . 9
5 fisiológicos que le son
a . 1
avfunción los.2ventiladores
propios ejerciendo esta 2 3 mecánicos.
h i x
a mecánicos8se7basan en la ecuación de movimiento del gas.
Los ventiladores
A la fuerza o presión positiva en la vía aérea durante la inspiración se le opone
otra dependiente de la resistencia al flujo aéreo del árbol traqueobronquial y
de la resistencia elástica del pulmón. La ecuación de movimiento establece
que la cantidad de presión necesaria para insuflar los pulmones depende de las
propiedades resistivas y elásticas de los mismos. Estas últimas están limitadas
por la distensibilidad que ofrece al llenado o compliance y el volumen corriente.
Por otro lado las propiedades resistivas están determinadas por el flujo y la
resistencia de las vías aéreas al paso del mismo.
c a rg
A OXIGENOTERAPIA
A R YG VENTILACIÓN
m a MECÁNICA
s V
DeLos cuidados enfermeros ga unaspaciente g
@ sometido 9a9
r 9 5 . oxigenoterapia son
v a
necesarios para ayudar al enfermo a
aconfortabilidad
recibir
2 3un. 1
tratamiento adecuado y cómodo,
la salud cona h i x
y procurarle la máxima
7 . 2 psicológica con el objetivo de recuperar
8
las mínimas complicaciones y secuelas posibles. En estos pacientes
encontramos una serie de necesidades alteradas, las cuales se encuentran
recogidas en la Tabla 17.
El paciente en VM posee unas características que lo diferencian de otros
enfermos: el gran estrés inherente a una enfermedad grave, las medidas
terapéuticas a las que es sometido, el aislamiento físico e incapacidad para
comunicarse, la falta de movilidad, el ambiente, la alta tecnología y sobre
todo la dependencia de un equipo sanitario y de una máquina.
a A S l . co
de su salud adecuados a su nueva situación de vida.
i
c arg A R G m a
De s V @ g 9 9
a s 5 .
v arg la gran23importancia
Estas condicionesadeterminan .19 que tienen la vigilancia
hixestrecha del87paciente,
y monitorización
a .2 interpretar sus constantes vitales,
vigilar los parámetros previamente establecidos, etc. que ayudan a identificar
problemas o a verificar la tolerancia al tratamiento ventilatorio, así como la
trascendencia de procurarle un entorno lo menos inhóspito posible, cubriendo
sus necesidades tanto en el terreno físico como psíquico.
En relación a los cuidados del paciente crítico, éstos irán encaminados
inicialmente a satisfacer las necesidades básicas y fundamentales para la vida,
es decir realizaremos una valoración focalizada centrándonos en las
necesidades vitales, éstas son:
r g a sy tusígeno, etc.95.9
a
00051 Deterioro v ade la comunicación
2 3 .1verbal R/C barreras físicas
hdeixVMNI, TOT,
a
(interfase
8 7 2
o.traqueostomía) m/p no hablar o no poder
hablar (32).
2 7 A
7710 Colaboración con el médico.
64 2
3120 Intubación y estabilización d a a
de las vías aéreas.,
z a
riaéreas. R O I P :
3140 Manejo deu
a lasto
vías T O m,
g a A S il . c o
3160 rAspiración
c
a A Gaéreas. ma
de las vías
R
Des4920 Escucha V @ g 9 9
activa.
rg a s 9 5 .
a v
3320 Oxigenoterapia.a 2 3 . 1
h i x 7 . 2
3300a
8 invasiva.
Ventilación mecánica:
Ventilación mecánica: no invasiva (34).
3180 Manejo de las vías aéreas artificiales.
6680 Monitorización de los signos vitales (FR, pulsioximetría, tensión
arterial).
4232 Flebotomía: muestra de sangre arterial (35).
I
como cualquier otro fármaco, y siempre fundamentada en el juicio clínico,
H XA
2 7 A
para ello siempre que sea posible nos basaremos en la medición de los gases
arteriales y la monitorización del paciente.
64 2
d a
ade numerososOsistemas
, que van:a
r iz a
Para su administración disponemos
de oxígenoO R I Pasí
a u t o
aportar al paciente la concentración
T o m ,
que necesita garantizando
a
su correcta oxigenación. A S il . c
c a rg A R G m a los cuidados de
s El enfermero V
Decalidad en relación a la oxigenoterapia
va a ser el encargado g
@ en el paciente
de proporcionar
9 9crítico, para ello
a s
rg en función 5 .
9las necesidades alteradas
a v a 2 3 . 1
a h i x
establecerá un plan de cuidados
7 . 2 de
detectadas en el paciente. 8
Debemos recordar que trabajamos por y para el paciente, de forma que
todas nuestras acciones y cuidados tienen como finalidad alcanzar el mayor
grado de satisfacción en el usuario, a través de una asistencia organizada,
eficaz y de calidad.
a r . 1
i x av JL. Guía .para
22. González Rodríguez
h 2 2 el3manejo clínico de la vía aérea difí-
a Nuevo Hospital.
cil. Revista 7
8 Hospital Virgen de la Concha Zamora.
SACYL. 2002; 2 (32): 1-16.
23. Biarge Ruiz N, Siles Suárez L. Manejo prehospitalario de la vía aérea en
el paciente politraumatizado. Revista Emergencias. 1999; 11: 47-53.
24. Gabbott, A. El combitubo: su papel en el abordaje de la vía respiratoria
y la reanimación. Revista puesta al día en urgencias, emergencias y catás-
trofes. 2001; 2 (3): 141-144.
1. INTRODUCCIÓN
2 1
las.proteínas en el plasma
hix de la barrera
3
no difundan a través
87estos2
.endotelial es de gran trascendencia en el
movimientoade agua libre entre dos compartimentos.
El CIC representa el 30-40% del peso corporal y entre su composición
caben mencionar electrolitos como el potasio (K+), los fosfatos inorgánicos y
las proteínas.
Todos los compartimentos mencionados anteriormente permanecen en
estrecha relación e interdependencia, teniendo un vínculo especial con los
sistemas digestivo, respiratorio, urinario y la piel, a través de los cuales se
realizan los aportes y pérdidas fundamentales de agua diariamente (1).
Tabla 1.
r iz a
10-30 mmol/día
R O 1-2 mmol/kg:
I P
M (M )
AGNESIO
a u
G++ o
8-20tmeq/kg/día
T O
0,3-0,5 meq/kg
m ,
0,3-0,5 meq/kg
a A S il . co
c a rg R G
MODIFIACADA DE: Arribas Cachá AA (4).
A m a
De s V @ g 9 9
rg a s 9 5 .
v a
a EN FLUIDOTERAPIA23 . 1
a h i x 7 . 2
4. MONITORIZACIÓN
8
4.1. Valoración del estado de volemia e hidroelectrolítico
H I XA
Tabla 2.
2 7 A
64
SIGNOS Y SÍNTOMAS DE ALTERACIONES HIDROELECTROLÍTICAS 2
d a a ,
C UADRO S
r i z a
IGNOS Y SÍNTOMAS
R O I P :
H Sequedadtde
a u o T
piel y mucosas, apariciónO de pliegue ,
mhTA, taquicardia,
cutáneo, debilidad
IPOVOLEMIA
a o ausencia
A S
de pulsos distales,
. c o
febrícula, rubor cutáneo,
il
c arg sed, debilidad
A R G oliguria, m
muscular, adesorientación y coma.
letargo,
g a a A S il . co
c r
Poravía R G
parenteral: sueroterapia,
A nutriciónaparenteral,
m sueros para la
DesLíquidos V sangre
dilución de medicación,
@ g 9
y derivados hemáticos.
9
a s
g gástrico,.1lavado
de lavados:rlavado 5 .
9 peritoneal.
v a 3
a volumen estandarizado
2 de 300 ml/24h.
h i x
Agua endógena:
a 7 . 2
8
El bloque de salidas se compone de los productos derivados del
metabolismo, cuya eliminación se efectúa a través de diversos sistemas
corporales:
64
Como resumen podemos indicar los siguientes cuadros:
2
hidroelectrolítico o ambos, y que requieren medidas de actuación urgentes.
a a
iz a
Shock hipovolémico: rhemorrágico
d R O, (quemaduras,
o no hemorrágico I P :
u t
deshidratación, etc.)
a o T O m ,
a A S i l . co
a rg de líquido
Depleción
c
A R G
extracelular:
m a diarreas, ascitis, trastor-
vómitos,
DesDepleción
nos renales. V
@ g 9 9
a s
g de ingesta
rdiabetes 5 .
9 aumento de pérdidas
acuosa: reducción
a v a
(sudoraciónxexcesiva, 2 3 . 1
insípida,
(coma),
etc.).
h i
a salina: diuréticos,7 . 2
8 neuropatías, insuficiencia suprarrenal
Depleción
aguda.
Alteraciones del equilibrio ácido-base.
Hipernatremia: causas renales, diabetes insípida.
Administración de fármacos intravenosos.
Alteraciones endocrinas (3).
VENTAJAS/ PRECAUCIONES /
FLUIDO CARACTERÍSTICA INDICACIÓNES DESVENTAJAS CONTRAINDICACIONES
Isotónico. Reposición No reacciones de
Concentración de volumen hipersensibilidad Vigilar
Na+ superior al Depleción acuosa Inicio inmediato pacientes
ideal, por lo que Depleción líquido Expansor con IC,
SUERO es ligeramente extracelular Volumen hipoproteinemia
FISIOLÓGICO hipertónico Shock intravascular e IR.
0,9% respecto hipovolémico Poca duración. Vigilar
al líquido Hipocloremia Riesgo de sobrecarga
extracelular. Cetoacidosis sobrecarga de líquidos
pH ácido. diabética (EAP; edemas)
RINGER
contiene
lactato
volumen
Depleción Acuosa
volumen
infundido XA
en hipotermia
I
(riesgo de
H
LACTATO que se
trasforma en
Depleción de
2
líquido extracelular 7En IH
aumento riesgo
A
aumento de
acidosis láctica).
bicarbonato Shock
64 2 daño cerebral Vigilar pacientes
en el
hígado
d a a
Hipovolémico
Quemaduras
,
Riesgo
sobrecarga
con IH
r iz a R O I P :
a u o
Deshidratación
tHipertónica O
Por su baja
Tosmolaridad: m ,
a
Isotónico.
g A
Hipoglucemia S riesgo de
il . c o Contraindicaciones:
Enfermedad
ComaG
G
5%
c a r
LUCOSA
Contiene
A R a
aumento
m de de Adisson,
Des
glucosa insulinico g
V Deplecións@ Proporciona.99 alteración
edema cerebral.
vascular
a r g
Acuosa a 9
energía
1 5 en cerebral
av Hipernatremia
23 .poco tiempo
h i x . 2
a 87metabólica
Alcalosis
Postoperatorio
Contraindicaciones:
fallo renal,
Cubre cardiaco, edemas
inmediato. demanda Precauciones:
GLUCO- Eficaz Pediatría de agua y patología
SALINA como Coma electrolitos cardiovascular,
ISOTÓNICA hidratante hiperosmolar Riesgo tratamiento
no cetósico glucosuria e con corticoides,
< 300 mg/dl hipernatremia sobrehidratación,
desequilibrios
ácido-base
VENTAJAS/ PRECAUCIONES /
FLUIDO CARACTERÍSTICA INDICACIÓNES DESVENTAJAS CONTRAINDICACIONES
Requiere menor Precauciones:
Aumenta Shock volumen a Monitorizar
volumen hemorrágico administrar niveles
SALINO circulante TCE Aumenta GC, de Na+
HIPERTÓNICO redistribuyendo Grave contractilidad y plasmático y
RECOMENDADO líquidos asociado ritmo cardiaco osmolaridad.
USO AL 7,5% del a hTA o y disminuye No asociar
espacio hipovolemia. resistencias a manitol
intravascular al Grandes periféricas. Se puede
extravascular quemados Mejora asociar
función renal. dextrano
d a a ,
r iz a R O I P :
a u to T O m ,
a A S il . c o
c arg A R G m a
s V
e Cristaloides hipotónicosas@
D5.1.4. g 9 9
rg 9 5 .
v a 3 . 1
xacontrario
hilibre.
Producen el efecto
únicamentea
a las2
7 . 2 hipertónicas, proporcionando
soluciones
agua 8
Permanecen menos tiempo en el espacio intravascular
que los fluidos isotónicos, por lo que no están indicados como expansores
del volumen.
Son utilizadas como fluidos de mantenimiento, en alteraciones
hidroelectroliticas, estados de deshidratación hipertónica o en hipoglucemias
(Tabla 5) (2, 4, 5).
VENTAJAS/ PRECAUCIONES /
FLUIDO CARACTERÍSTICA INDICACIÓNES DESVENTAJAS CONTRAINDICACIONES
Deshidratación
con hipernatremia.
HIPOSALINO Aporte Coma Aporta Contraindicaciones:
CLNA de agua hiperosmolar la mitad Normonatremia
0,45% libre exenta diabético con de ClNa Hiponatremia
de glucosa hipernatremia que SF
o HTA
Tabla 7.
VENTAJAS/ PRECAUCIONES /
FLUIDO CARACTERÍSTICA INDICACIÓNES DESVENTAJAS
I X A
CONTRAINDICACIONES
Hipovolemia Riesgo de: A
Precauciones:H
Proteína Hipoproteinemia. hipocalcemia.
2 7
Vigilar función
2 Vigilar aparición
A oncóticamente Estados
LBÚMINA
5%,
AL activa. edematosos
Altera la
6 4
agregabilidad
a
cardiaca y renal.
de
Paracentesis daMuy
Expansor severos plaquetaria. sangrados y de
20%
25%
Ó
del volumen
i z a alergénica R
, de
reacciones
y Ohipersensibilidad. :
plasmático
t o r
de evacuación
Quemados
T O
potencialmente ,
Administración I Plenta
a a uSíndrome
nefrótico AS
infecciosa
. c o mde sobrecarga
(riesgo
r g R G a il circulatoria o EAP)
e s ca V A @ g m 9
D a s 5 . 9
v a rg 3 . 1 9
h i x a . 2 2
a 8 7
5.3. Sangre y Hemoderivados
a r g
glóbulo blanco en la unidad.
. 1 9 5
h i x av . 2 2 3
a
5.3.4. Plasma fresco 87
Indicado para reponer factores de coagulación. La cantidad a transfundir
oscila entre los 10-15 ml/kg. El tiempo de transfusión puede oscilar entre
media hora y 60 minutos. Los riesgos de infección son similares a los de los
concentrados de hematíes, sin embargo las reacciones de alergia y anafilaxia
son más frecuentes.
6. COMPLICACIONES DE LA FLUIDOTERAPIA
s
VOLUMEN
V O DE
g
LAS CARACTERÍSTICAS
De Insuficiencia cardiaca gas@ 95.99
•
Edema agudoadev
ar 23 .1
•
ix
ahcerebral
Edema
•
pulmón
87.2
• Reacciones de hipersensibilidad
• Coagulopatía
• Insuficiencia renal
a u o
t TA,Sdiuresis
Monitorizar hemodinámicamente O
T horaria,cfrecuencia ,
m cardiaca
a fluidoterapia
a
g (2). RG
(FC), rPVC
intensiva
A il . o
c a A g m a
s V
D8.eFARMACOTERAPIA ENgaENFERMERÍA s @ 9 9
r 9 5 .
a v a 2 3 . 1
a h i x 7 . 2
La administración de 8
fármacos es competencia del enfermero, por ello, debe
poseer un conocimiento profundo y global de los fármacos que administra a sus
pacientes, su mecanismo de acción, farmacocinética, interacciones
farmacológicas, reacciones adversas y demás características que le permitan
instaurar la terapia intravenosa de forma segura para el paciente. En situaciones
de emergencia esta idea, adquiere vital importancia debido a las circunstancias
en que se desarrolla, es aquí donde especialmente el enfermero, debe demostrar
sus conocimientos en cuanto a manejo de medicación, prevención de
complicaciones, vigilancia de reacciones adversas, cálculo y ajuste de dosis, etc.
r g a
fármacos, su mecanismo
G A il .
asencillo podemos decir que
y
los efectos
s c asobre el organismo.
V A RDe un modogmás m
efarmacocinética estudia los procesos
Dlatravés a s @ a los que un fármaco
. 9 9 es sometido a
a r g
de su paso por el organismo y la 9 5
farmacodinamia
. 1 explica las acciones
h i x av
de este sobre el organismo.
. 2 2 3
a 87 intervienen en la respuesta del organismo
Los factores farmacodinámicos,
alterando su sensibilidad y por tanto, la relación entre los niveles plasmáticos
y los efectos. Los factores más importantes son:
3. Entendemos por vida media de un fármaco el tiempo que el organismo tarda en eliminar el 50% de
su concentración plasmática.
AUMENTO DE PESO
F. CARDIOVASCULAR
• ↑ Volumen sanguíneo • ↓ Resistencia vascular
• ↓ TA • ↑ FC
• ↓ Hematocrito • ↑ GC
• ↑ Sist. Renina-angiotensina-aldosterona • ↑ Volumen minuto
F. PULMONAR
• ↑ Circunferencia torácica • ↑ Consumo oxigeno
• ↑ Volumen corriente • ↑ Frecuencia respiratoria (FR)
F. RENAL
• ↑ Tamaño y peso riñón • Aminoaciduria proteinuria
• Dilatación sistema colector • Uricosuria, glucosuria
• ↑ FS renal • ↑ pH
F. DIGESTIVA
H I XA
• Estómago: ↑ Secreción ácidos
2 7
• Boca: caries
A
Intestino delgado: ↑ Absorción Ca y Fe
• 2+ 2
64Esófago: pirosis
•
r iz a R O I P :
F. E NDOCRINA
a u t o O
T ↑ Función m ,
a
↑ Función endocrina
•
g A S il . c o• suprarrenal
c↑ r R
aHormonas deVla placenta
A G m a
DeP s •
@ g 9 9
IEL
rg a s 5 .
9 Cloasma gravídico
•
a v a
↑ Pigmentación areola mamaria
2 3 . 1 •
C
a h i x 7 . 2
AMBIOS HEMATOLÓGICOS
↑ Volumen sanguíneo
•
8 ↑ Masa eritrocítica
•
r g a
en que la madre esté recibiendo 5
tratamiento
9 . farmacológico habrá
a v
que evaluar cuidadosamentea los riesgos
2 3
y . 1
beneficios de su mantenimiento
ix los efectos87nocivos
o supresión yahque
a . 2 sobre el niño pueden resultar muy
graves. En este punto, el enfermero desarrolla un papel fundamental ya que
podrá aconsejar sobre la utilización correcta de los fármacos durante este
periodo (11).
En mayor o menor medida, casi todos los fármacos se excretan a través de
la leche materna, originando efectos indeseables en el lactante, por ello siempre
que sea posible se deben utilizar fármacos de acción corta y la mínima dosis
terapéutica eficaz durante el menor tiempo posible, de forma que se reduzcan
al mínimo los efectos perjudiciales sobre el niño.
ca r
Dexametaxona
R G
Morfina
A Nitroglicerina m a
e s
Digoxina
DD) E V @ g 9 9
rg a s 9 5 .
a .
VIDENCIA CLARA DE TERATOGENICIDAD
v
a Diacepam 2 3 . 1
P
i x 2
ATOLOGÍAS EN QUE EL BENEFICIO COMPENSE CLARAMENTE EL RIESGO
a h 7 .
Ácido valproico
Amiodarona
8 Enalapril (2-3º trimestre)
Midazolam
Salicilatos
Barbitúricos Fenitoína
Tabla 12.
o i z
> Proporción de agua y < contenido
r O R
t albumina, S TAlprenolol, diacepam, , I P
a a u
< Concentración
A . c o m lidocaína
ar g
↑ Fracción libre de
R
fármacos
G m a il
c AfinidadVproteínas
A g Salicilatos 99
Des ↓> Permeabilidad g a s @
9 5 .ansiolíticos,
barrera v a r 3 1↑ Efecto
. barbitúricos,anestésicos
opioides, generales,
ix a
hematoencefálica
h .2 2 salicilatos
M
aDepende de maduración
ETABOLISMO 8 7 Cloranfenicol, diacepam,
ELIMINACIÓN metabólica del niño. fenobarbital, fenitoína, teofilina
↓ Función biliar Déficit circulación enterohepatica
Función glomerular Fármacos con excreción renal
y secreción tubular (↑ vida media): aminoglucosidos,
↓ (hasta 3-6 meses de edad). vancomicina, digoxina, cloranfenicol.
H I
Las soluciones orales son más fáciles de dosificar por gotas o mililitros.XA
2 7 A
64 2
La vía rectal debe evitarse, excepto para el tratamiento de las crisis
convulsivas con diacepam. a
damal los R , por lo que: es
Generalmente los niñosiz
r a
utilizan O
inhaladores,
I P
to
preferible utilizarunebulizaciones.
a T O m ,
a A S il . co
rg necesitarán
Losaneonatos
c
A R Gdosis de carga
m amás altas debido a que las
Desmento
concentraciones g
Vplasmáticasstras@dosis únicas .disminuirán
9 9 por el au-
del volumen de g
a r a
distribución. 9 5 requerirán dosis de
Sin embargo,
1
mantenimiento a v
más bajas ya que
2 3 .
el aclaramiento renal y hepático
i x 2
ah
está reducido.
87.
El aclaramiento renal a partir de los 6 meses es equivalente al del
adulto, por lo que a partir de esta edad, las dosis de choque son simi-
lares a las del adulto (con excepción de la digoxina que requerirá
dosis más altas).
En fármacos como los antiepilépticos o la teofilina el aclaramiento
hepático es más alto en niños de 1-2 años que en adultos por lo que se
necesitan dosis/kg más altas (12).
d a a
adversas, interacciones farmacológicas, errores de medicación y falta de
,
adherencia al tratamiento.
r iz a R O I P :
u
Son frecuentes y graves
a o
t entre esteSgrupo O
T de población m ,
los problemas
A . c o
por sla c arporaineficacia
terapéuticos g
administración
V A R G
o toxicidad,
simultánea de g m a
fármacos,
l reacciones adversas
así como ilas
a lo que se añade los
e @
Dcambios farmacocinéticos y gunaasmenor capacidad . 9
de 9compensación del
organismo (Tabla 14) (12, a r
30). . 1 9 5
i x v 2 3
a para la administración
2 de fármacos en el anciano son
Las normash
a generales 7 .
similares a las del adulto pero 8
hay que tener en cuenta la variabilidad fisiológica
de cada paciente, por lo que habrá que evaluar y tratar de forma individual a
cada uno de ellos. Además, los efectos de los fármacos administrados en este
grupo de población, pueden ser muy graves, y por ello se habrán de vigilar
estrictamente los parámetros clínicos de forma que nos ayuden a cuantificar
la eficacia del tratamiento (TA con hipotensores, FC con β-bloqueantes, etc.);
en algunos fármacos concretos se recomienda la disminución de la dosis
habitual (por ejemplo midazolam o cloruro mórfico) (11, 12).
FARMACO-
CINÉTICA EFECTO CONSECUENCIA FÁRMACOS AFECTADOS
ABSORCIÓN ↑ pH gástrico
↓ Velocidad vaciamiento ↑↓ Capacidad ↑ Diacepam, tiamina,
gástrico y motilidad de absorción Fe, Ca, glucosa
↓ FS Intestinal ↑ Propanolol
clormetiazol H I XA
levodopa, labetalol,
2 7 hipoglucemiantes A
ELIMINACIÓN ↓ Aclaramiento renal 2
64orales, litio, procainamida,
Digoxina,
↓ Velocidada
↓ Flujo renal
↓ Filtradoa d a
eliminación
O , metotrexato,:
penicilina,
o r iz
glomerular
t O R fenobarbital,
, I P
tetraciclinas
a u S T c o m
rg a G A a il .
s c a V A R g m
De a s @ ↑ Aumenta
5 . 9 9↓ Disminuye
v a rg 3 . 1 9
h i x a . 2 2
a 8 7
11. VÍAS DE ADMINISTRACIÓN DE FÁRMACOS Y FLUIDOS
a) Vía enteral
64 2
urgencia si no se consigue canalizar un acceso venoso. Se pueden
d a a ,
infundir los mismos fármacos y líquidos por una vía intravenosa.
r i z a R O
También se pueden obtener muestras de laboratorio. I P :
u to T O ,
Otras víasgde a a A S il . comótica, vaginal,
c a r administración
A R Gpero por sum
son: la vía intradérmica,
a
s
oftálmica, intrarterial,
Vintratecal,
Ddeelas urgencias y emergenciasgsólo las@
g escasa aplicación en el ámbito
nombraremos..99
r a s 9 5
v
avías a 2 3 . 1
a h i x 7 . 2
11.1. Principales
y emergencias
de
8administración en urgencias
XA
Bisturí + material de sutura
Apósito estéril Apósito estéril Apósito estéril
A H I
Contenedor
biológico
Contenedor
biológico
2 2 7
Contenedor
biológico
a 64
a d a O , :
t o r iz O R , I P
Tabla 16.
a u S T c o m
a
rg INTRAVENOSOS G A a il .
s DEa
TIPOS c CATÉTERES
V A R g m
DDe a s @ 5 . 9 9I
D
ENOMINACIÓN
G. Unidad de medida de diámetro. Usado para las medidas de las agujas, describe el número de objetos
que tienen que alinearse uno junto a otro para medir una pulgada (Ejemplo: Si hay que alinear 20
agujas para que midan una pulgada, el diámetro de cada aguja será de 20 G).
Fr. Unidad de medida de diámetro: 1Fr=1/3 de 1 mm. Así un catéter de 6 Fr tendrá 2 mm de diámetro.
H I XA
2 7 A
64 2
d a a ,
r iz a R O I P :
a u to T O m,
a A S il . co
c arg A R G m a
Des V @ g 9 9
rg a s 9 5 .
a v a 23 . 1
ah i x 7 . 2
8
Vía intravenosa
Vía periférica (VVP). De elección supradiafragmáticas.
Vía intraósea (VIO). Empleando los dispositivos adecuados.
d a
a firmeO ,
a) Apoyar la extremidadren iz a
una superficie R y plana.
I P :
a u o
t venoso porSencima O
T del territorio ,
m que se va a
a
b) Colocar torniquete
A il . c o
c a rg
examinar.
A R G m a
s V
Dec) Seleccionar el lugar para g
@ y aplicar 9 9
antiséptico.
a s
la punción
rgpiel por debajo 5 .
a . 1del9lugar que se va a puncionar
i x v
d) Estirar ligeramente la
a la mano libre.2 2 3
con el pulgar
a h de
8 7 .
e) Dirigir el catéter en ángulo de 30º en relación al plano cutáneo, con el
bisel hacia arriba, perforando la piel y la pared venosa. Al obtener re-
torno de sangre en la cámara del catéter se avanza el mismo paralelo al
plano de la vena para canalizarla y se retira simultáneamente la aguja.
f) Soltar el torniquete venoso y conectar el sistema de infusión compro-
bando que el líquido fluye libremente.
g) Fijar correctamente la cánula y cubrir con apósito estéril (15).
vena cefálica
vena basílica
vena cefálica
accesoria
X
vena cefálica
media
X
H I XA
2 7 A
vena cefálica 64 2
d a a ,
r iz a R O I P :
a u to T O m,
a A S il . co
c a rg A R G m a
Des V @ g 9 9
rg a s 9 5 .
a v a 3 . 1
2 vena
a h i x 7 . 2 antebraquial
8 media
TÉCNICA DE CANALIZACIÓN
4. Todo acceso vascular que requiera la movilización del cuello del paciente está contraindicado ante
la sospecha de lesión cervical.
Vena
temporal Vena
superficial retromandibular
Vena
auricular
posterior
H I XA
Vena
2 7 A
yugular
externa
64 2
Vena
d a a ,
yugular externa
r iz a R O I P :
posterior
a u to T O m,
a A S il . co
c arg A R G m a Vena
Des V @ g 9 9 facial
rg a s 9 5 .
a v a 23 . 1
ah i x 7 . 2
8 Vena
yugular
Músculo
platisma
anterior
Clavícula
Vena subclavia
Músculo
esternocleidomastoideo
TÉCNICA DE CANALIZACIÓN
TÉCNICA DE SELDINGER
5. Recordar que tras toda canalización de VVC se debe realizar una radiografía de control, que
verifique la correcta colocación del catéter.
TÉCNICA DE SELDINGER
Guía
H I XA
2 7 A
64 2 Dilatador
d a a ,
r iz a R O I P :
a u to T O m,
a A S il . co
c arg A R G m a
Des D
V @ g 9 9
E
rg a s 9 5 .
a v a 23 . 1
ah i x 7 . 2
8
F G
d a a
abajo y ligeramente hacia dentro para unirse a la vena subclavia (14).
, y colocación: de
r iz
Es de elección para la inserción a de catéter R O
Swan-Ganz I P
marcapasos transitorio.uto
a T O m ,
a A S il . co
a
Existen
c rtresg posiblesAaccesos,
R G el anterior,mcentral
a y posterior, que se
es
diferencian en la V
Desternocleidomastoideo. g
relación de la punción con9 los haces del
@
r g a s 9 5 .9
a v a 2 3 .1
T ahix 87.2
ÉCNICA DE ACCESO MEDIANTE ABORDAJE CENTRAL
r iz a R O I P :
a u o
t en decúbitoS supinoO
T con lacextremidad ,
m inferior
a) Colocar al paciente
a A il . o
c a rg
extendida en ligera
A R G
abducción y rotación
m a
externa.
s
Deb) laAsepsia V g
@ extendiéndolo 9 9desde el centro a
periferia. rg s
cutánea con antiséptico,
a 9 5 .
v a
ade referencia.se22 3 . 1
a h
c) Como punto i x 7 puede utilizar el latido de la arteria
8
femoral. Realizar la punción 1 cm. por dentro de la arteria y 2 cm por
debajo del ligamento inguinal, siguiendo el eje del muslo, de manera
que la aguja forme con la piel un ángulo de unos 30º respecto al plano
cutáneo aspirando continuamente con la jeringa6 (Figura 5).
6. En situaciones de PCR la referencia anatómica se toma trazando una línea imaginaria desde la
espina iliaca anterosuperior a la sínfisis del pubis, la vena femoral se localiza en el punto medio de
esta línea y 2 cm por debajo del ligamento inguinal.
Cresta ilíaca
anterosuperior
Ligamento
inguinal
Nervio
femoral
Arteria
femoral
Vena
femoral
Sínfisis
H I XA
2 7
del pubis
A
64 2
d a a ,
r iz a R O I P :
a u to T O ,
mla técnica de
a A S il . c o
c a rgen caso deAdisponer
d) Una vez obtenida la
R G de un catéter
sangre venosa
m
se continúa con
acentral o retirando la aguja
s Seldinger
V
De en caso de disponer degunacatéter g
@del número 9 9de 8,3 o 14 cm de
r s 9 5 .14
longitud.
v a 3 . 1
e) Tras a hixa se8fija7.el2catéter
la canalización
2 a la piel y se tapa con un apósito
estéril (18).
LUGAR DE PUNCIÓN
H I XA
TÉCNICA DE CANALIZACIÓN CON AGUJA INTRAÓSEA MANUAL
2 7 A
TIPO «SETA» O «COOK»
64 2
d a
a dura O , en rotación
a) Apoyar la pierna sobre unaasuperficie y colocarla :
to r iz O R , I P
externa.
a u S T c o m
rg
b) Localizar a el punto de G A
punción y aplicar il .
antiséptico.
a
s c a V A R g m
De y con los dedos índice ygpulgar
c) Colocar la empuñadura de
a
la
s @
aguja intraósea
sujetarla a 5
modo
9
en la9
. 9
de
palma de la mano
pinza a 0,5-1 cm de
la punta, llegando r
vaa2-2,5 cm2en2adultos
3 1
. .
i x a 7
7. Esta distancia hasta el extremo de la aguja nos ayuda a controlar la profundidad de la punción.
Tabla 18.
d
Fallo canalización, rotura vena, hematomas,
a
a Desestructuración , a anatomía
VVP
r iz
extravasación, daño a estructurasa locales,
R
proximal
del catéter, O
O a la vía por
P :
traumatismo.
I
a u to
embolia gaseosa, fragmentación
T de lesión cervical.
Yugular ,
externa: ante sospecha
o m
celulitis, tromboflebitis.
a A S i l . c
VVC ca rgcanalización, A R G m asospecha de lesión cervical
s Fallo
De lesión
hemo/neumotórax, V hematomas,
embolia
@
gaseosa, g Ante
si se ha de girar
9 9 la cabeza.
r g a s
punción arterial, arritmias cardiacas,
o nervios, 1 9 5
Síndrome . vena cava superior.
i
circulación,
a x 7.2vasos EnPacientes
h cardiacas, complicaciones
perforación de grandes RCP: yugular interna/subclavia.
o cavidades
sépticas, trombosis.
8 que no toleren decúbito
supino y/o trendelemburg.
Tabla 19.
50 IX
A
1000 500 250 100
A H
TIEMPO
2 2 7
RITMO DE INFUSIÓN (ML/H)
42 21 10a 6
44 2
24 HORAS
a
ad 21 RO8 , 4 P:
12 HORAS83
o r i
42z
t 63 S 31T O , I
125au 13 om 6
8 HORAS
r g a G A a il .c
6 ca
s 167
V R
A 83 @g42 m 17 9 8
e
HORAS
D4 250
g125as 63
9 5 .925 12
HORAS
333av
r
a 167 2383. 1
3 HORAS
h i x . 2 33 16
2 a 500
HORAS 82507 125 50 25
PAUTA DE SUEROTERAPIA
H I XA
Es el dispositivo que conecta el suero y el catéter, consta de las
siguientes partes: 2 7 A
64 2
d
Punzón: con él se perfora el tapón a
ade caucho O ,
del suero.
r iz a R I P :Nos
a u o
Cámara de goteo: trecipiente O
Tminuto paracoasím
en el cual va cayendo la ,
solución.
g a
permite contar el número
G de A S
gotas por
i l . poder regular el
ritmo
c r
a de infusión. A R m a
s V
De Alargadera: tubo flexible @ g 9 9 y acaba con una
a s
que 5 .
parte del cuentagotas
rg de punción. 9
conexión para elv a
dispositivo
3 . 1
Llavea
oh
ixa 87se.2encuentra
pinza reguladora:
2
en la alargadera y nos permite
regular la velocidad de infusión de la solución.
EQUIVALENCIAS
H I XA
2 7 A
12.3. Reguladores electrónicos o bombas de perfusión
64 2
Son aparatos electrónicos diseñados d a
apara regularOel ,ritmo de perfusión
iz
según se programe. Existe unaramplia a gama de modelosR I
en el mercadoPy :cada
a u o
tde infusión específico O
T y poseecunas ,
mcaracterísticas
uno requiere un sistema
g a A S il . o
que lesc a r
propias. Funcionan con
R G
corriente
A un tiempo
eléctrica aunque
m a cuentan con una batería
H I XA
2 7 A
64 2
d a a ,
r iz a R O I P :
a u to T O m,
a A S il . co
c arg A R G m a
De s V @ g 9 9
rg a s 9 5 .
Figura 8. Bomba de infusión volumétrica.
a v a 23 . 1
ah i x 7 . 2
BOMBAS PERISTÁLTICAS 8
Funcionan al presionar el segmento de silicona que incorporan los sistemas
de infusión a través del movimiento de un rotor provocando el desplazamiento
de la solución. La velocidad de giro de este rotor, condiciona el flujo de
infusión. Este tipo de bombas cuentan con un sensor de goteo que permite
asegurar el flujo continuo de infusión; esta pieza adicional, que conecta la
bomba con el suero puede ser retirada en algunos modelos. Las bombas
peristálticas pueden ser lineales o rotatorias.
H I XA
2 7 A
64 2
d a a ,
r iz a R O I P :
a u to T O m,
a A S il . co
c arg A R G m a
Des V @ g 9 9
rg a s 9 5 .
a v a 23 . 1
ah i x 7 . 2
8
r iz a R O I P :
u to
Relajantes musculares:
a
bromuro de T O
rocuronio, bromuro
m ,
de vecuronio,
a
succinilcolina. A S il . c o
c a rg alcalinizantes:
A R G m a
De
sFármacos
V @ g
bicarbonato.
9 9
a s
rg EN EL3PACIENTE 9 5 .
14. PROCESO x a v a 2 . 1
a h i ENFERMERO
A FLUIDOTERAPIA 7 . 2
Y8FARMACOTERAPIA
SOMETIDO
8. Estos fármacos se tratan con mayor detenimiento en el Anexo II del Libro 2 de esta misma Área
de Capacitación.
@g vestido/acicalamiento
Des00109 Riesgo deVdéficitgdeasautocuidados:
terapia IV de forma continua, rango de movimiento limitado).
5 . 9 9
a r
v IV de2forma . 1 9
3 continua, rango de movimiento
(r/c
mantenimiento
h i x aterapia . 2
a
limitado.
87
00085 (Riesgo de) deterioro de la movilidad física (r/c dolor / molestia
/ rango movimiento limitado).
00148 Temor (r/c falta de familiaridad con la experiencia: proceso de
canalización vascular).
00004 Riesgo de infección r/c procedimientos invasivos, alteración de
las defensas primarias: rotura de la piel.
2 7 A
64 2
1806 Ayuda con los autocuidados: transferencia.
d
1802 Ayuda con los autocuidados:
a
avestir/aseoO ,
personal.
r iz a R I P :
t o
1800 Ayuda al autocuidado.
a u T O m ,
a
g ambiental. A S il . co
6480 rManejo
c a A R G m a
s V
De 1800 Ayuda al autocuidado. @ g 9 9
rg a s 9 5 .
a v a
5240 Asesoramiento.
2 3 . 1
h i x 7 . 2
5380a
Potenciación de 8
la seguridad.
5510 Educación sanitaria.
6540 Control de infecciones.
6550 Protección contra las infecciones.
4220 Cuidados del catéter.
d a arectal. ,
r iz a
2315 Administración de medicación:
R O I P :
u o
t de medicación:
2317 Administración
a O
Tsubcutánea.com ,
g a G A S il .(32).
ca
4030
r
Administracion
A R
de productos a
sanguíneos
m
D es V @ g 9 9
rg a s 9 5 .
a v a 23 . 1
a h i x 7 . 2
8
r a s coloides y5
9 . sanguíneos. El
derivados
va de la2situación
uso de unas u otrasadependerá
2 3 1
. del enfermo y de los objetivos
i x . caso la enfermera debe tener presente
ahque se persigan. En87cualquier
terapéuticos
la monitorización de los signos vitales, para controlar posibles efectos adversos,
bien derivados del tipo de fluido o del volumen administrado. Las precauciones
deben extremarse en el caso de administración de derivados de la sangre.
XA
Las vías de administración más utilizadas en urgencias y emergencias
H I
son la vía venosa periférica, la central -ya sea de acceso periférico o central-, la
A
intraósea y la endotraqueal.
2 2 7
a 64agruparlos en sistemas
a d areguladoresO
En cuanto a los sistemas de infusión, podemos
, :
r i z
simples, regulan el flujo en gotas/minutos;
o O
ty los sistemas electrónicos R I P
manuales, funcionan
,
a
por fuerza de gravedad;u S T que funcionanc o m a través de
r g a aportando G Agran precisióna .
a ilal hora de administrar
a
mecanismos electrónicos
sc IV. VA s@g R m
Demedicación a 5 . 9 9
v
La incorporación del a rg enfermero
proceso
3 . 1
al 9 de trabajo garantiza
método
h i x a . 2 2un lenguaje enfermero estandarizado
unos estándares
a 8 7
de calidad y asegura
que facilitará la continuidad de los cuidados; todo ello va a repercutir en la
salud y bienestar del propio paciente, de forma que se alcance el mayor grado
de satisfacción del usuario.
1. Marín Miranda J, Arias Garrido JJ, Sanpedro Cejas JM, Herrero López A.
Fluidoterapia. En: Gil J, Díaz-Alersi R, Coma MJ, Gil D. Principios De
Urgencias, Emergencias Y Cuidados Críticos [monografía en internet].
Red Universitaria de Servicios Telemáticos Integrados para Comunida-
des Virtuales de Usuarios UNINET: Sociedad Andaluza de Medicina
Intensiva, Urgencias y Coronarias [citado 11 Jun 2008] Disponible en
URL: www.tratado.uninet.edu/c1201i.html.
2. Muñoz Alonso MA, Jaime Montalbán LF, Pérez García A. Fluidoterapia
intravenosa en urgencias y emergencias. [monografía en internet] [cita-
do 11 Jun 2008]. Disponible en URL: www.medynet.com/usuarios/
jraguilar/Manual%20de%20urgencias%20y%20Emergencias/
fluido.pdf.
3. Muñoz Ávila L, Jiménez Murillo L, Romero Fernández M. Manejo
de la fluidoterapia en urgencias. En: Medicina de urgencias y emer-
gencias: guía diagnóstica y protocolos de actuación. Madrid:
Hardcourt; 2000.
H I XA
2 7
4. Arribas Cachá AA, Borrego de la Osa R, Morente Parra MI. Guía de
A
64
fluidoterapia intravenosa. Madrid: FUDEN; 2006. 2
d a
aOrtiz Leyba C,OBonet
, A. Manual: de
5. Montejo JC, García de Lorenzo
r iz a A,
R I P
to
medicina intensiva. 2ªed. Madrid: Harcourt;
au E, Bernabé T O 2000. ,
6. Soteras I,g a
Fácil JM, Capella G A S M, Desportes
il . coF, mMontañés M, et
c a r A R m a
e s
al. Revisión bibliográfica
V
D Revista Emergencias. 2006;
sobre el
@ g
empleo de suero
9salino hipertónico.
r g
18:s72-78.
a 9 5 .9
7. Amado JA, FlórezvJ.a
a 3 .1 Nutrición artificial. En:
Expansores plasmáticos.
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Flórez J. Farmacología
87.23ªed. Barcelona: Masson; 2000.
Humana.
8. Mora Palacios R, Navarro Mira C, Loro Sancho N, Sancho Sánchez
MT, Sancho Sánchez MJ, Folgado Roig J, et al. Enfermería: Fármacos
más utilizados en Urgencias Hospitalarias. Revista enfermería global
2007; 11: 1-23.
9. Dirección de enfermería. Unidad de docencia, calidad e investigación de
enfermería. Guía para la administración segura de medicamentos. Cór-
doba: Hospital Universitario Reina Sofía; 2001.
1. INTRODUCCIÓN
r g s que le ayuden
dotarse de herramientas metodológicas
a 9 5 .9a valorar las diferentes
a v a
del ritmo cardíaco.
2 3 .1
h ixintenta facilitar
Este capítulo
a 8 7 la2comprensión de la electrocardiografía,
.
explicando en primer lugar los principios básicos del EKG. Después de un breve
repaso a la anatomía y fisiología cardíacas, se abordan conceptos básicos como
despolarización, repolarización o derivación cardiaca. La comprensión de estos
conceptos y el de los distintos componentes de un ciclo cardíaco, es imprescindible
para entender el origen y registro electrocardiográfico de cada arritmia.
Un punto importante del capítulo es el apartado referido al análisis de
un trazado de ritmo. El método secuencial que se expone se ha
desarrollado para obtener los datos más relevantes de cara a la
d a a
y otra inferior o ventrículo. Las aurículas funcionan básicamente como bombas
,
r i a R O I P :
cebadoras de los ventrículos, que ayudan a mover la sangre al interior de
z
a u to T O ,
éstos. Los ventrículos proporcionan la principal fuerza que impulsa la sangre
m
a A S . co
hacia los pulmones (ventrículo derecho), o a la circulación periférica
il
arg R G m a
(ventrículo izquierdo). Las dos aurículas están separadas entre sí por un tabique
c A
Des V @ g 9
llamado septum interauricular. Igualmente, los dos ventrículos están divididos
9
rg a s 9 5 .
por otro tabique más grueso denominado septum interventricular. Existen
a v a 23 . 1
cuatro válvulas cardíacas: la válvula tricúspide separa la aurícula derecha
ah i x 7 . 2
del ventrículo derecho; la válvula mitral separa la aurícula izquierda del
8
ventrículo izquierdo (estas dos válvulas se denominan válvulas AV); la válvula
pulmonar separa el ventrículo derecho de la arteria pulmonar y, la válvula
aórtica separa el ventrículo izquierdo de la arteria aorta. La función principal
de estas válvulas es permitir el flujo de sangre en una sola dirección, evitando
por tanto el reflujo sanguíneo. La apertura y cierre de las válvulas se producen
de forma pasiva, es decir, que se cierran cuando un gradiente de presión
retrógrado empuja la sangre hacia atrás, y se abren cuando un gradiente de
presión anterógrado empuja la sangre hacia delante.
a v a 23 . 1
se distribuye por todo el cuerpo, incluyendo las propias arterias coronarias
ah i x 7 . 2
del corazón, para liberar el oxígeno a las células y recoger el dióxido de carbono.
8
2.2. Sístole y diástole auricular y ventricular
H I XA
El período entre la apertura de las válvulas aórtica y pulmonar y su cierre,
durante el cual se contraen los ventrículos, se denomina sístole ventricular.
2 7 A
El siguiente período, desde el cierre de las válvulas aórtica y pulmonar hasta
64 2
su apertura, durante el que los ventrículos se relajan y llenan de sangre, se
a a
denomina diástole ventricular. La secuencia completa se denomina ciclo
d ,
iz a R O P :
cardíaco, que se define como el período entre el inicio de un latido cardíaco y
r I
u t
el comienzo del siguiente.
a o T O m ,
a A S i l . co
c a rg A R G m a
s V
e Circulación coronaria as@
D2.3. g 9 9
g se suministra
rcorazón 5 .
9 a través de las arterias
v a 3 . 1
hixae izquierda, 2procedentes de la arteria aorta. La
El aporte sanguíneo al
coronarias aderecha
8 7 . 2
ambas
arteria coronaria derecha viaja hacia el lado derecho del corazón curvándose
hacia la cara inferior. También aporta sangre a la cara posterior a través de la
arteria descendente posterior. La oclusión de la arteria coronaria derecha
produce infarto inferior y/o posterior. La arteria coronaria izquierda tiene
dos ramas, la arteria descendente anterior izquierda, que baja hacia la cara
anterior, y la circunfleja, que irriga la cara lateral. La oclusión de la descendente
anterior produce infarto de miocardio de la cara anterior, mientras que la
obstrucción de la circunfleja produce infartos de cara lateral.
d a a
automaticidad o capacidad de generar un impulso eléctrico; excitabilidad o
,
r i a R O I P :
capacidad para responder a un estímulo eléctrico y conductividad o propiedad
z
t o
de transmitir el impulso de una célula a otra.
a u T O m,
a A S il . co
2.6.s c arg VA RG gma
De 9
Despolarización y repolarización
a s @ 5 . 9
a
La comprensión devestos rgdos conceptos3 . 1 9 fundamental para poder
es
i x
comprender la génesis
h ade la actividad.2eléctrica
2 cardíaca y, por tanto, el registro
de esta actividad 8 7
a en un electrocardiograma.
Las contracciones y relajaciones rítmicas del músculo cardíaco (sístole y
diástole) precisan de un sistema eléctrico especializado que genere el impulso
y lo transmita después a las células musculares, originando así el ciclo cardíaco.
Este sistema está dotado de propiedades únicas, con células o grupo de células
capaces de generar estos impulsos a una frecuencia determinada, recibiendo
por ello el nombre de células marcapasos. Estas células no están presentes
únicamente en el nódulo sinusal (marcapasos fisiológico del corazón), sino
d a a
del músculo cardíaco, o diástole. Ya solo queda restablecer la misma
,
r i a R O I P :
concentración iónica inicial, de lo que se encarga la bomba de ATP que
z
to O ,
intercambia NA+ por K+, a la espera del comienzo un nuevo estímulo.
a u T m
a A S il . co
c a rg A R G m a
De s V @ g 9 9
Figura 1.
a s 9 5
rg Y REPOLARIZACIÓN .
a v a 23 . 1
i x
FENÓMENOS DE DESPOLARIZACIÓN
2 DE LA CÉLULA
CARDÍACA
ah 87.
Reposo Despolarización Estado Repolarización Restauración Reposo
despolarizado equilibrio iónico
Bomba
ATP
Este sistema está formado por el nódulo sinusal (SA), las vías
internodales, las vías interauriculares o haz de Bachmann, la unión
auriculoventricular o AV, el haz de His y sus ramas derechas e izquierda, y
la red de Purkinke (Figura 2). El nódulo SA está localizado en la aurícula
derecha, cerca de la entrada de la vena cava superior. Sus células marcapasos
poseen el nivel de automaticidad más alto de todo el sistema, con una
frecuencia de descarga entre 60-100 por minuto. Otros posibles marcapasos
poseen frecuencias menores, como el nodo AV (40-60 por minuto) o las
células marcapasos ventriculares (30-40 por minuto). Por lo general, mientras
más bajas estén situadas estas células en el sistema de conducción, menores
son sus frecuencias de disparo. Estos otros posibles marcapasos se
denominan marcapasos ectópicos.
Figura 2.
a v a 23 . 1
ah i x 7 . 2
Rama derecha
8
Rama izquierda
Fibras de
Punkinje
H I XA
despolarización y repolarización a través de las aurículas y de los ventrículos.
2 7 A
3. PRINCIPIOS ELECTROCARDIOGRÁFICOS 64 2
a
daalos estudios , en 1901: por
Las bases del EKG actual seiz
r a
deben R O
publicados
I P
Willem Einthoven, médico
a to
u en 1924.
neerlandés. SusT O
trabajos le m
hicieron, merecedor
del Premio Nobel a de Medicina A S il . c o
c a rg A R G m a a la piel, puede registrar
Els V
electrocardiógrafo, mediante
Deneun EKG habitual hasta 12 puntos g
electrodos
@ pegados
9 9
a sde 5
vista distintos
rgestas proyecciones .
de una misma actividad
9es conocida con el nombre
eléctrica cardíaca. Cadav a
una de
3 . 1
de derivación.hixa . 2 2
a 8 7
3.1. Derivaciones cardiacas
Figura 3.
a v a 23 . 1 DII DIII
ah i x 7 . 2
8 DI
DII DIII
a d aV y V . O, :
V en el punto intermedio
3
o r iz entre
tmedioclavicular O R 2 4
, I P
V en la línea
a u S Tizquierda encoel m quinto espacio
g a
4
intercostal.
r G A a il .
c a R
A anterior@ m
g nivel que
Des VV enen lala línea
5 Vaxilar
g s al mismo
a al mismo1nivel 9 . 9
5que V .9 V. 4
6
v a r
línea media axilar
3 . 4
aVR
aVL
H I XA
2 7 A
64 2
d a a ,
r iz a R O I P :
a u to T O m,
a A S il . co
c arg A R G m a
Des V @ g 9 9
rg a s 9 5 .
a v a 23 . 1
ah i x 7 . 2
8
aVF
DI
DI
DII DIII
DIII DII
aVR aVL
XA
aVR aVL
A H I
2 2 7
a 64
a d a O , :
to r iz O R , I P aVF
a u S T co m
rg a G A
aVF
a il .
s c a V A R g m
De a s @ 5 . 9 9
v a rg 3 . 1 9
h i x a . 2 2 aVR aVL aVL
a 8 7 aVR
DI I
aVF aVF
H I XA
V1 2 7 V6 A
V2 V3
64 2 V4 V5
d a a ,
r iz a R O I P :
a u to T O m,
a A S il . c o
c arg A R G m a
Des V @ g 9 9
rg a s 9 5 .
a v a 23 . 1
ah i x 7 . 2 V 6
8 Derivaciones
laterales
V5
V4
V1 V3
V2
Derivaciones
anteriores
Derivaciones
septales
1 mm 5 mm
0,1 mV
0,2 seg
R
1 mm
5 mm
0,04 seg
0,5 mV
Segmento
Segmento ST
PR T
P
U
H I XA
Q
2 7 A
64 2 S
Intervalo
PR
d a a ,
r iz a R O I P :
a u to T O
Complejo
QRS
m,
a A S il . co
c arg A R G m a
Des V @ g 9 9
rg a s 9 5 .
a v a 23 . 1
ah i x 7 . 2
Figura 8. 8
MARCAS DE 3 SEG EN EL PAPEL DEL EKG
3 seg 3 seg
La primera deflexión del ciclo cardíaco es la onda P, que está causada por
la despolarización auricular. La señal viaja en dirección descendente hacia el
nodo AV, con la punta del vector apuntando a DII (Figura 9), por lo que esta
onda es positiva en esta derivación. La aguja del electrocardiógrafo asciende
conforme la corriente se acerca a su polo positivo, descendiendo a la línea
isoeléctrica al cesar la actividad una vez detenida en el nodo AV. Esto
conforma una onda redondeada seguida por un segmento isoeléctrico que
dura hasta que comience la despolarización ventricular. Este espacio
isoeléctrico se conoce como segmento PR y dura aproximadamente una
décima de segundo. La repolarización auricular coincidirá con la
despolarización de los ventrículos. El hecho de que la magnitud de la corriente
ventricular sea mucho mayor que la producida por la repolarización auricular,
hará que ésta no se pueda apreciar en el EKG.
Figura 9.
H I XA
2 7 A
SENTIDO DE LA DESPOLARIZACIÓN AURICULAR
64 2
d a a ,
r iz a R O I P :
a u to T O m,
a A S il . co
c arg A R G m a
Des V @ g 9 9
a s
rg P 3.19 5 .
a v a 2
ah i x 7 . 2
8
DII
Figura 10.
Brazo derecho
Brazo izquierdo
H I XA
2 7 A
Pierna izquierda
64 2
d a a ,
r iz a R O I P :
a u to T O m,
a A S il . co
c arg A R G m a
Des V @ g 9 9
rg a s 9 5 .
a v a 23 . 1
i x
Brazo derecho
ah 7 . 2 Brazo izquierdo
8 Precordial
3.5. Artefactos
H I XA
Figura 11.
2 7 A
64 2
ARTEFACTO PRODUCIDO POR EL MOVIMIENTO DEL PACIENTE
d a a ,
r iz a R O I P :
a u to T O m,
a A S il . co
c arg A R G m a
Des V @ g 9 9
rg a s 9 5 .
a v a 23 . 1
ah i x 7 . 2
8
La alarma de frecuencia cardíaca baja puede ser activada por bajo voltaje
del QRS (Figura 12). Esto puede deberse a mal contacto o desconexión de
alguno de los electrodos. A veces, también se puede producir por colocación
en lugar incorrecto o electrodos muy cercanos entre sí. En estos casos, el
monitor no puede sensar las ondas R y por tanto dispara la alarma de
frecuencia cardíaca baja. Esto se puede solucionar modificando la posición
de los electrodos o aumentando el voltaje del QRS.
Figura 13.
H I XA
2 7 A
64 2
d a a ,
r iz a R O I P :
a u to T O m ,
a A S il . co
c a rg A R G m a
De s V @ g 9 9
a s
rg DE3RITMO 9 5 .
a v
4. ANÁLISIS DE UN TRAZADOa 2 . 1
h i x 7 . 2
adebe hacerse de8una manera metódica y secuencial siguiendo
El análisis
cinco pasos:
3 seg 3 seg
Los ciclos RR no varían
RR RR RR RR
1500 : 18 = 83 p.m.
Figura 16.
H I XA
Los ciclos RR varían
2 7
3 seg
A
3 seg
RR RR RR RR RR
64 2
d a a ,
r iz a R O I P :14 x 10 = 140
a u to T O m,
a A S il . co
c arg A R G m a
De s V @ g 9 9
rg a s 9 5 .
a v a 23 . 1
Figura 17.
h i x 7 . 2
INTERVALOaPR ALARGADO 8
Figura 18.
QRS estrecho
XA
QRS ancho
A H I
2 2 7
a 64
a d a O , :
to r iz O R , I P
a u S T co m
a
rgSINUSALES G A il .
s c a
5.eRITMOS V A R g ma 9
D a s @ 5 .9
v a r g .1 9
a 23
ahix
5.1. Ritmo sinusal
87.2
El ritmo sinusal (RS) es el ritmo normal del corazón (7). Se denomina
así porque el origen del impulso se encuentra en el nodo SA. El flujo de
corriente viaja de forma normal por el sistema de conducción hasta los
ventrículos. El ritmo es regular (ciclos P-P y R-R iguales), y todas las
ondas P son iguales entre sí (Figura 19). La FC debe estar entre 60-100
por minuto. Los hallazgos característicos del ritmo sinusal se resumen en
la Tabla 1.
Tabla 1.
RITMO SINUSAL
RITMO Regular.
MARCAPASOS Nódulo SA.
FC 60-100 p.m.
H I XA
O
2 7
P Normales, idénticas. Deben ser positivas en DII A en aVR.
y negativas
2
NDAS
I PR 0,12-0,20 seg.
NTERVALO
a 6 4
a d a
QRS Iguales. Entre 0,04-0,11 seg.
O , :
P/QRS 1:1. or
t i z O R , I P
R ELACIÓN
a u S T c o m
rg a G A a il .
s c a V A R g m
De a s @ 5 . 9 9
v a rg 3 . 1 9
h i x a . 2 2
5.2. Taquicardia
a sinusal
8 7
Reúne los mismos criterios que el ritmo sinusal con la única salvedad de
que la FC es mayor de 100 por minuto (Figura 20) (Tabla 2). La taquicardia
sinusal (TS) es la respuesta normal del corazón a las demandas incrementadas
del organismo. Este incremento puede deberse a procesos fisiológicos, como
el ejercicio, o a fisiopatológicos (dolor, fiebre, shock, anemia, hipoxia,
insuficiencia cardíaca, etc.). La TS se inicia y termina gradualmente, en
contraste con otras taquicardias.
TAQUICARDIA SINUSAL
Nervios
simpáticos
(FC 60-150 p.m.)
Tabla 2.
H I XA
2 7 A
TAQUICARDIA SINUSAL
64 2
Regular.
d a a ,
R ITMO
r i z a R O I P :
M Nódulo SA.
ARCAPASOS
FC a >u
o
100tp.m. T O m,
a
Org P Normales, idénticas.A S il . co
c a NDAS
A R G Deben sermpositivas
a en DII.
Des QRS Iguales.
I PR V Entre 0,04-0,11
0,12-0,20
NTERVALO seg. g
@seg. 5.99
rg a s 9
R
a
P/QRS 1:1.v a 23 . 1
ELACIÓN
a h i x 7 . 2
8
5.3. Bradicardia sinusal
Figura 21.
BRADICARDIA SINUSAL
Nervio vago
(FC < 60 p.m.)
H I XA
2 7 A
64 2
d a a ,
r iz a R O I P :
a u to T O m,
a A S il . co
c arg A R G m a
De s V @ g 9 9
Tabla 3.
rg a s 9 5 .
a v a 23 . 1
i x
BRADICARDIA SINUSAL
h
aR Regular. 8 7 . 2
ITMO
7 . 2
8
Espiración Inspiración Espiración
ARRITMIA SINUSAL
H I XA
2 7 A
64 2
Figura 23.
d a
a SINUSALES ,
r iz a
DIFERENCIAS ENTRE BLOQUEO Y PAUSA
R O I P :
a u to T O m,
a A S il . co
c arg A R G m a
De s V @ g 9 9
Bloqueo
rg a s x
9 5 . x x x Múltiplo de x
a v a 23 . 1
a h i x 7 . 2
8
Ausencia
de estímulo x x No es múltiplo de x
CRITERIOS COMUNES
RITMO Ritmo de base generalmente regular; irregular durante la pausa.
MARCAPASOS Nódulo SA.
FC Puede ser normal (60-100) o lento (menos de 60).
ONDAS P Ondas P sinusales durante el ritmo de base; ausentes durante la pausa.
INTERVALO PR Normal durante el ritmo de base; ausente durante la pausa.
QRS Normal (0,10 seg o menos) durante el ritmo de base;
ausente durante la pausa.
RELACIÓN P/QRS 1:1.
CRITERIOS DIFERENCIALES
BLOQUEO SINUSAL El ritmo de base se reanuda a su tiempo después de la pausa,
siendo la longitud de la pausa múltiplo de los intervalos R-R previos.
PAUSA SINUSAL
H I XA
El ritmo de base no se reanuda a su tiempo después de la pausa;
la longitud de la pausa no es múltiplo de los intervalos R-R previos.
Si el ritmo de base es irregular (arritmia sinusal)
2 7 A
2
no se puede diferenciar entre bloqueoy pausa.
64
d a a ,
r iz a R O I P :
a u t o T O m ,
a A S il . co
En cla a rg o paro sinusal
A R G se produce un m a de la automaticidad del
fallo
Dtras
nodo s pausa
V
e SA, lo que provoca que pierda @
su g 9 9 a su tiempo
ritmo y no se reanude
g a
la pausa. Por lo tanto, larlongitud
s de la 9
pausa 5
no
.
suele ser múltiplo de un
ciclo R-R previo. Sin a a
v en el bloqueo
embargo, 2 . 1
3 sinusal, el estímulo es bloqueado
h i x
a fallo del nodo8SA),
a su salida (sin . 2
7 sin pérdida de la automaticidad, ya que el
impulso llegó a generarse, lo que se traduce en una pausa cuya longitud, en
esta ocasión, es múltiplo de cualquiera de los ciclos R-R previos. El uso de
este método para distinguir entre bloqueo y pausa sinusales, es únicamente
útil ante la presencia de un ritmo regular. Si el ritmo de base es una arritmia
sinusal, diferenciar entre ambos ritmos es prácticamente imposible. Estas
dos arritmias pueden estar producidas por un aumento del tono vagal, hipoxia,
o drogas como los betabloqueantes o el digital. Estas pausas pueden o no
producir síntomas dependiendo de la longitud de las pausas.
De s V
miocárdica o infarto.
@ g 9 9
rg a s 9 5 .
v a
aauricular errante 3 . 1
2o migratorio
a h i
7.1. Marcapasosx 7 . 2
8
Esta arritmia se produce porque el nódulo SA comparte el mando
del ritmo cardíaco con otros marcapasos ectópico auriculares o nodales,
alternándose el origen del impulso entre ellos. El ritmo suele ser
irregular, siendo raro que sea regular. Las ondas P varían en tamaño,
forma y duración. En DII pueden ser normales, anormales (aunque
positivas), negativas, o estar ocultas en los complejos QRS (Figura 24)
(Tabla 6).
MARCAPASOS MIGRATORIO
Ondas P distintas
Tabla 6.
H I XA
2 7 A
Tabla 7.
64 2
d a a ,
CONTRACCIÓN PREMATURA AURICULAR
r iz a R O I P :
a u t o T O m ,
R
a
Irregular.
ITMO
A S il . c o
c argFC Depende A R delG
nº de CPA.
m a
s V
De O P Prematura,gdiferente
Foco ectópico en @
algún g
punto de las
9 9
aurículas.
M ARCAPASOS
r a s en forma o 9 5 .
NDA
v a
aNormal. Puede estar 2 3 . 1 tamaño a las P sinusales.
a h
QRSi x 7 . 2 seguido de pausa compensadora.
8
Las CPA pueden aparecer de forma aislada (una sola vez); en una relación
1:1 con los latidos sinusales (bigeminismo auricular); cada dos latidos sinusales
(trigeminismo); cada tres latidos sinusales (cuadrigeminismo); acoplados (dos
extrasístoles seguidas); o en salvas. Si se suceden más de tres seguidas se
habla de taquicardia auricular.
Figura 26.
FC 140-150
p.m.
H I XA
2 7 A
64 2
d a a ,
r iz a R O I P :
a u to T O m,
a A S il . co
c arg A R G m a
De s V @ g 9 9
rg a s 9 5 .
Tabla 8.
v a
a PAROXÍSTICA 23 . 1
TAQUICARDIAh
a i x
AURICULAR
7 . 2
8
RITMO Regular.
FC 140-250 p.m.
MARCAPASOS Algún foco ectópico auricular.
ONDA P Normalmente no se ven ya que pueden estar ocultas en los
QRS o en las ondas T. Si se ven son distintas a las sinusales.
INTERVALO PR No se puede medir.
QRS Normal.
FC 250-400 p.m.
H I XA
2 7 A
Tabla 9.
64 2
d a a ,
FLUTTER AURICULAR
r iz a R O I P :
a u o
t o irregular. S T O m ,
R Regular
ITMO AURICULAR
a A i l . co
F
a rg de laAAuricular
RECUENCIA CARDÍACA
c R a GAV pero es menor
220-360 p.m. La
aque la auricular.
ventricular
m
depende
DeR s V conducción
La mayoría de las s
g
@regular con conducción9 92:1,
ITMO VENTRICULAR
a veces
5 .
rg en aurícula.3No.1hay9verdaderas ondas P.
pero puede ser irregular.
v a
aOndas F en dientes 2
M
h i x Foco
ARCAPASOSectópico
a PR No se puede 7 . 2 de sierra.
I NTERVALO
8 medir.
QRS Normales, cada 2, 3, o 4 ondas F.
d a a
de disminución del gasto cardíaco. Si, por el contrario, la unión AV conduce
,
r iz a R O I P :
pocos estímulos a los ventrículos, ocasionará una FA lenta (Figura 30). Por
a u to T O ,
último, si la frecuencia ventricular se mantiene entre 60-100 por minuto, recibe
m
a A S l . co
el nombre de FA controlada (Figura 31). En cualquiera de los casos, el ritmo
i
c a rg R G m a
siempre será irregular, caracterizándose la FA por tener un ritmo
A
De s V @ g 9
irregularmente irregular. En esta arritmia, el QRS suele ser normal ya que la
9
rg a s 9 5 .
conducción a partir del nodo AV hacia los ventrículos no sufre modificaciones.
v a
a en individuos 3 . 1
2sanos, en los que se presenta como
a h x
La FA puede iocurrir
7 . 2
episodios transitorios, 8 solamente horas o días, pudiendo estar
persistiendo
asociados a estrés, ingesta de alcohol o cafeína, o incluso sin causa aparente.
Este tipo de FA puede revertir espontáneamente a ritmo sinusal o responder
fácilmente a antiarrítmicos o cardioversión sincronizada. En otros pacientes
el ritmo es crónico, y suele estar asociada a alguna patología cadíaca. El hecho
de que las aurículas no se contraigan de forma simultánea, ocasiona que parte
de la sangre no pase a los ventrículos durante la sístole auricular, causando
una estasis sanguínea que puede dar lugar a la formación de trombos. Por este
motivo, estos pacientes deben tomar anticoagulantes también de forma crónica.
H I XA
2 7 A
64 2
d a a ,
r iz a R O I P :
Tabla 10.
a u t o T O m,
a A S i l . co
rg
FIBRILACIÓN AURICULAR
c a A R G m a
De s V
Despolarización
@
caótica deglas aurículas.
9 9
rg a s 9 5 .
R Irregularmente
ITMO
v a irregular.
aMúltiples marcapasos 3 . 1
2en las aurículas.
M
h i x
ARCAPASOS
a 350-650 p.m. 7 . 2
F RECUENCIA AURICULAR 8
FRECUENCIA VENTRICULAR Lenta, controlada o rápida dependiendo de los impulsos
que pasen a través del nodo AV.
ONDAS P Ausentes. En su lugar ondas F. A veces la línea de base
puede aparecer isoeléctrica.
INTERVALO PR No existe.
QRS Normales.
FA a 140 p.m.
Figura 30.
H I XA
2 7 A
64 2
d a aFA a 50 p.m.
,
r iz a R O I P :
a u to T O m,
a A S il . co
c a rg A R G m a
De s V @ g 9 9
rg a s 9 5 .
a v a 23 . 1
Figura 31.
h i x
aAURICULAR CON 7 . 2
FIBRILACIÓN 8 RESPUESTA VENTRICULAR CONTROLADA
FA a 70 p.m.
Cuando el origen del impulso está cercano al nodo AV, el estímulo viaja
hacia las aurículas en dirección retrógrada, produciendo P negativas en DII, y
también hacia delante en dirección a los ventrículos. La localización de la
onda P en relación al QRS dependerá de la velocidad de conducción y de la
ubicación exacta del marcapasos ectópico:
H I XA
2 7 A
64 2
d a a ,
r iz a R O I P :
Tabla 11.
a u t o T O m,
a A S il . co
c arg
CONTRACCIÓN PREMATURA
A R G
DEL NODO AV
m a
De Ms V @ g 9 9
En el nodo AV.
ARCAPASOS
rg a s 9 5 .
v a
aIrregular. .22 3 . 1
R
h i x ITMO
INTERVALO PR Puede no existir. Si existe delante del QRS puede ser corto
(0,10 seg o menos).
QRS Normal.
H I XA
2 7 A
Figura 33.
64 2
RITMOS DE LA UNIÓN
d a a ,
r iz a R O I P :
a u to T O m,
a A S il . co
c a rg A R G m a
De s V @ g 9 9
rg a s 9 5 . Ritmo de la unión
Taquicardia de la unión
(FC > 100 p.m.)
P P P P P P P
Tabla 12.
RITMO DE LA UNIÓN
RITMO Regular.
XA
FC Entre 40-60 p.m.
t o r i seg) no existir.
T O R , I P
QRS a
a u
Normal.
A S . c o m
a rg R G a il
s c V A g m
De a s @ 5 . 9 9
v a rg 3 . 1 9
El ritmo es h i x adiferenciándose
regular, . 2 2
de la bradicardia sinusal por la ausencia
a 8 7
de ondas P, o por ser éstas negativas en DII. La FC está por debajo de 60 por
minuto, y los QRS son normales.
Si aumenta la automaticidad de la unión AV, éste puede incrementar la
frecuencia hasta 60 y 100 por minuto, pasando a llamarse ritmo acelerado de
la unión. Esta arritmia sólo se diferencia del ritmo de la unión por la frecuencia
cardíaca más elevada. Si la automaticidad se incrementa tanto que el ritmo
alcanza una frecuencia mayor de 100 por minuto, se denomina taquicardia
de la unión (Figura 35) (Tabla 13). Esta taquicardia es a veces imposible de
Figura 35.
TAQUICARDIA DE LA UNIÓN
H I XA
2 7 A
64 2
d a a ,
r iz a R O I P :
a u to T O m,
a A S il . co
c arg A R G m a
De s V @ g 9 9
Tabla 13.
rg a s 9 5 .
TAQUICARDIA DEx v a
aUNIÓN .22 3 . 1
h i LA
aR Regular. 87
ITMO
NO Flutter FA
TSV / Flutter
XA
NO
A H I
TSV
2 2 7
a 64
a d a O , :
t o r iz O R , I P
a u S T c o m
a A
rg AURICULO-VENTRICULARES
G a il .
c a
9. BLOQUEOS
s V A R g m
DeEste tér mino se usa para a s @ fallos 5 . 9 9la conducción
auriculoventricular a v aElrgnodo AV23
(AV).
describir 9 de
es .el1responsable de transmitir el
a
impulso hasta hilosx ventrículos
8 7 2 que se produzca la contracción
.para
ventricular. Si el nodo AV deja de hacer su trabajo, puede producirse lo que
se llama asistolia ventricular, sinónimo de parada cardíaca. Cuando recibe
el impulso, lo detiene hasta que los ventrículos están casi llenos. Para cuando
terminen de llenarse, el nodo AV ya ha dejado pasar el estímulo y se produce
la despolarización ventricular. Parte del tiempo que el nodo AV detiene el
estímulo, se refleja en el EKG como segmento PR (no intervalo) que,
sumado a la onda P forma el intervalo PR y que, como se sabe, no debe
durar más de 0,20 seg.
a v a
ventrículos no sufre modificaciones.
23 . 1
a h i x 7 . 2
8
9.2. Bloqueo AV de segundo grado tipo I, Mobitz I
o Wenckebach
Figura 37.
XA
Intervalo PR > 0,20 seg
A H I
2 2 7
a 64
a d a O , :
t o r iz O R , I P
a u S T co m
rg a G A a il .
s c a V A R g m
e
Tabla 14.
DBLOQUEO a s @ . 9 9
a rg
AV DE PRIMER GRADO
. 1 9 5
x v
aRegular. .22 3
Rhi
a ITMO
MARCAPASOS
87
Nodo sinusal.
FC Normal o baja.
ONDAS P Normales.
INTERVALO PR Mayor de 0,20 seg.
QRS Normales.
RELACIÓN P / QRS 1:1.
BLOQUEO AV DE WENCKEBACH
H I XA
2 7 A
Tabla 15.
64 2
BLOQUEO AV DE SEGUNDO GRADOd
a
a I, MOBITZO I O,
r i z a TIPO
R
DE WENCKEBACH
I P :
a u o T O
tregular, ventricularSirregular. m ,
R
g a
Auricular
ITMO
A il . c o
c a rFC La frecuencia
R G
auricular es la del nodo
m a
sinusal, la ventricular depende
del
VAMás ondassP que
nº
DeIs O PRP Alargándose
de
Sinusales.
impulsos conducidos
@ g
QRS.
pero es menor
. 9
que
9
la auricular.
NDAS
a g a
rprogresivamente 1 5
9 una P no va seguida de QRS.
NTERVALO
QRS x
v
a ( < 0,11 seg). 2 3 .
hasta que
a h i Estrechos
8 7 . 2
Figura 39.
BLOQUEO AV MOBITZ II
H I XA
2 7 A
64 2
d a a ,
r iz a R O I P :
a u to T O m,
a A S il . co
c arg A R G m a
Des V @ g 9 9
rg a s 9 5 .
a v a 23 . 1
ah i x 7 . 2
8
H I XA
2 7 A
64 2
Tabla 17.
d a a ,
r iz a R O I P :
BLOQUEO AV DE TERCERo
a u t GRADO O COMPLETO
T O m ,
a A S i l . c o
aR rg Auricular y ventricular
R G regulares aunque aindependientes.
c ITMO
A g m
Des FC Auricular V normal; ventricular
a s @menor que5la FC.9auricular 9 dependiendo
a rgdep.m.
del marcapasos
v . 1
escape (40-55 p.m.
3 9si elestámarcapasos está en el
h i x a
nodo AV o 30-40
. 2 si 2
el marcapasos en los ventrículos).
O aP Sinusales. Pueden
NDAS
7
8 aparecer delante o detrás
del QRS u ocultas en el QRS o en la onda T.
P P P P P P
H I XA
2 7 A
64 2
d a a ,
r iz a R O I P :
a u to T O m,
a A S il . co
c arg A R G m a
Des V @ g 9 9
rg a s 9 5 .
a v a 23 . 1
ah i x 7 . 2
P 8 P
P P P P P P
Figura 41.
2 7 A
NO
64 2
d a a ,
r iz a R O I P :
NO
a u to T O m,
¿El ritmo de los QRS es regular? SI
a A S il . co
c arg
Wenckebach
A R G m a Bloqueo AV completo
Des V @ g 9 9
rg a s 9 5 .
a v a 23 . 1
ah i x 7 . 2
8
El bloqueo AV completo se ve con mucha frecuencia en pacientes de
edad avanzada por degeneración del sistema de conducción, pero puede
verse en pacientes con infarto inferior o anterior, toxicidad por drogas,
miocarditis o endocarditis. Se trata de una emergencia, ya que el ritmo de
escape puede dejar de funcionar, y precisa de la implantación de un
marcapasos transitorio o transcutáneo hasta la implantación de uno definitivo
si la arritmia no revierte.
d a a
en sentido opuesto al QRS. Estas extrasístoles, igual que las auriculares,
,
r i a
pueden aparecer en diversas combinaciones.
z R O I P :
u
Pueden aparecer aisladas
a o O
t (FiguraS43),Ten bigeminismo m ,
(Figura 44),
trigeminismog oa A . c o
il hacer por grupos, y se
c a r cuadrigeminismo.
A R G También lo pueden
m a
e s
denominan salvas. Estas
V salvas
Daparecen dos juntas, se denominan
pueden
@ g
ser de dos
acopladas (Figura.9
o tres seguidas. Cuando
45)9
r g a s 9 5 y, como norma, si
a v asonseiguales
aparecen más de tres seguidas,
2 3 .1 tamañoventricular.
habla ya de taquicardia Las CPV
a h i x
que en la misma derivación
7 . 2 en forma, y duración se llaman
unifocales (producidas 8 foco ectópico). Si son distintas, pertenecen
por el mismo
a focos distintos, y se denominan multifocales (Figura 46). Una extrasístole
que aparezca entre dos ciclos sinusales, sin pausa compensadora, se denomina
interpolada. Cuando el estímulo ectópico es tan prematuro que se monta
sobre la onda T precedente, recibe el nombre de fenómeno “R sobre T”. Durante
la onda T, algunas fibras puede que aún no estén repolarizadas, y otras puede
que estén todavía refractarias (insensibles a estímulos). La estimulación de los
ventrículos en ese momento, puede precipitar contracciones repetitivas y
desencadenar una taquicardia ventricular o una fibrilación.
DI
DI
H I XA
2 7 A
64 2
d a a ,
r iz a R O I P :
a u to T O m,
a A S il . co
rgPREMATURA
Tabla 18.
c a A R G m a
De s
CONTRACCIÓN
V VENTRICULAR
@ g 9 9
a s
g R-R más.corto 9 5 .
Unrintervalo
Irregular.a 1
R
i
ITMO
x a
separavla CPV del QRS
2 2 3
normal anterior.
h 7 .
aFC Determinada8por el nº de CPV.
MARCAPASOS Foco ectópico en uno de los ventrículos.
ONDA P Ausente antes de la CPV.
INTERVALO PR Ninguno en la CPV debido a que no la precede ninguna onda P.
QRS Ancho (mayor de 0,12 seg), de mayor voltaje y distorsionado
(apariencia rara). Normalmente seguido de pausa compensadora.
ONDA T En dirección opuesta al QRS.
CPV
Figura 44.
BIGEMINISMO VENTRICULAR
H I XA
2 7 A
64 2
d a a ,
r iz a R O I P :
a u to T O m,
a A S il . co
c arg A R G m a
Des V @ g 9 9
rg a s 9 5 .
a v a 23 . 1
ah i x 7 . 2
DII 8
CPV ACOPLADAS
Figura 46.
CPV MULTIFOCALES
H I XA
2 7 A
64 2
d a a ,
r iz a R O I P :
a u t o T O m ,
a A S i l . co
c a rgocasiones, A
En algunas unaR G puedemseratardía en vez de prematura.
extrasístole
e
DEstestipo de contracciones
V se denominan @ g latidos de99escape, porque se
producen durante frecuencias
r g a s
sinusales bajas9 5
como. consecuencia de un
incremento del tono a vaLos marcapasos
vagal.
2 3 1
de. escape surgen durante las pausas
i x
ah en un8intento
entre latidos sinusales, 2
7. de subir la frecuencia cardíaca.
Como las extrasístoles auriculares, las CPV son muy comunes, y pueden
ser más frecuentes con la edad avanzada. Muchas de las causas que las
provocan son las mismas que causan las extrasístoles auriculares (estrés,
excesos de cafeína o alcohol, hipoxia o enfermedad cardíaca). Un catéter
venoso central o un intracatéter, que progrese hasta entrar en el ventrículo
derecho, puede provocar este tipo de contracciones (incluso una taquicardia
ventricular o fibrilación), si es estimulado el endocardio con el extremo distal
del catéter (sobre todo en un corazón ya isquémico).
Figura 47.
H I XA
MECANISMO FISIOPATOLÓGICO Y REGISTRO DE TV
2 7 A
64 2
d a a ,
r iz a R O I P :
a u to T O m,
a A S il . co
c arg A R G m a FC 140-250 p.m.
Des V @ g 9 9
rg a s 9 5 .
a v a 23 . 1
ah i x 7 . 2
8
TAQUICARDIA VENTRICULAR
RITMO Regular.
FC 100-250 p.m.
PR No existe.
H I XA
2 7 A
Figura 48. 2
64 VENTRICULAR
PASO DE TAQUICARDIA VENTRICULARa
d a
A FIBRILACIÓN
,
r iz a R O I P :
a u to T O m,
a A S il . co
c a rg A R G m a
De s V @ g 9 9
rg a s 9 5 .
a v a 23 . 1
a h i x 7 . 2
8
El tratamiento depende de la situación clínica del enfermo. Si el enfermo
no presenta pulso, debe tratarse como si se tratara de una fibrilación ventricular.
Si presenta pulso y el paciente está estable, puede tratarse con antiarrítmicos.
Si el paciente tiene pulso pero está inestable hemodinámicamente, puede
tratarse con cardioversión sincronizada.
Figura 49.
a u to T O m,
a A S il . co Ritmo idioventricular
rg
(FC 30-40 p.m.)
c a A R G m a
Des V @ g 9 9
rg a s 9 5 .
a v a 23 . 1
ah i x 7 . 2
8
RITMO IDIOVENTRICULAR
a 8 7
FIBRILACIÓN VENTRICULAR
Figura 51.
H I XA
2 7 A
64 2
d a a ,
r iz a R O I P :
a u t o T O m ,
a A S il . co
c a rg A R G m a
e s
D10.6. V @ g 9 9
rg a s 9 5 .
Asistolia
v a
a o asistolia 3 . 1
2 52) (Tabla 23), es la ausencia
a
La asistoliah i x
ventricular 7 . 2 (Figura
8
de toda actividad eléctrica (y por tanto mecánica) en los ventrículos. Durante
la asistolia, el enfermo no presenta pulso ni presión sanguínea. No se produce
gasto cardíaco ninguno. El EKG puede mostrar algunas ondas P sin
complejos QRS o bien una línea isoeléctrica. Si aparecen ondas P,
normalmente la asistolia ha sido precedida de algún bloqueo AV de 2º o 3º
grado. En este caso, estaría indicada la implantación de un marcapasos
transitorio como se explicó en el Apartado 9.4. El pronóstico suele ser malo
a pesar de los intentos de resucitación.
Tabla 23.
d
de la localización de cada
a
PR Puede variar ligeramente dependiendo
amarcapaso. O,
r iz a R I P :
QRS Normal.
a u to T O m,
a A S il . co
c arg A R G m a
Des V @ g 9 9
rg a s 9 5 .
a v a 2 3 . 1
ah i x 7 . 2
8
c
sistemaa rgconducción,
de
A R G importancia
mayor
m aadquiere la arritmia.
s
DeAfortunadamente, V g
@graves como 9 la9
rg a s
las arritmias más
9 5 . TV o la FV se
a
identifican más fácilmente.
v 3 . 1
Las a hixasinusales87(bloqueo
arritmias .22 o pausa), no dan sintomatología
salvo que las pausas producidas sean largas. La diferencia entre bloqueo o
pausa radica en las características de la pausa. Si ésta es múltiplo de los
ciclos R-R previos, se trata de un bloqueo. Si no es múltiplo, se trata de una
pausa sinusal.
I
diferenciador. Ese elemento puede ser la presencia o ausencia de “dientes
H XA
2 7 A
de sierra”, imagen característica del flutter. No obstante, cuando la frecuencia
64 2
es muy elevada, los ciclos R-R se acortan y no permiten valorar bien la línea
a a
de base. En estos casos, se puede recurrir a la aplicación de alguna maniobra
d ,
r iz a R O I P :
vagal (como el masaje del seno carotídeo), que puede reducir la velocidad
a u t o T O m ,
a A S il . o
de conducción AV, alargar los espacios R-R, y permitir visualizar mejor la
c
c a rg R G a
línea de base. Si existen dientes de sierra, se observan con claridad. Otra
A m
Des V @ g 9
posibilidad es administrar fármacos por vía intravenosa (como la adenosina),
9
rg a s 9 5 .
que además de producir los mismos resultados que el masaje carotídeo,
a v a 23 . 1
a h i x
podría revertir la arritmia.
7 . 2
8
Las contracciones prematuras nodales pueden llevar o no ondas P
delante de los complejos QRS. Si las llevan, éstas deben ser negativas en DII.
Esto las diferencia de las CPA. Cuando no se aprecian, normalmente van
ocultas en el QRS.
XA
tenemos en cuenta la FC lenta de los ritmos de la unión, el diagnóstico
diferencial no es complicado.
A H I
2 2 7
64
El bloqueo AV de primer grado es un ritmo sinusal con un intervalo
a
a d a
PR mayor de 0,20 seg. Si como corresponde, medimos estos intervalos en
O , :
t o r i z R , I P
todos los trazados (sobre todo en corazones isquémicos), su diagnóstico no debe
O
a u
presentar problemas.
S T co m
a A
g AV deR2ºGy 3º grado m
rbloqueos il .
a más ondas P que
s c a
Los
V A g presentan
Decomplejos QRS. a s @ 5 . 9 9
v a rg ventriculares
3 . 1 9
i x a
Las contracciones
h
prematuras
. 2 2 van acompañadas de
87de las contracciones prematuras auriculares
a esto las diferencia
QRS anchos,
y nodales.
XA
un ritmo de reperfusión que suele aparecer durante la terapia trombolítica, y
normalmente va acompañado de buena tolerancia hemodinámica. La TV,
A H I
por otro lado, suele cursar con FC mayor de 140 p.m.
2 2 7
La fibrilación ventricular puede a
64
artefactado por movimientos idezlosa a del paciente.
confundirse con un trazado
delectrodos O , La clínica del:
t o r T O R , I P
enfermo determina elu m
a a diagnóstico.
A S il . co
c a rlagasistolia ocurre
A R G m a una desconexión del
s Con
V
Decable de monitorización podríagaproducir g
algo similar. Únicamente
9 semejante a
@un trazado5isoeléctrico
9
s .
9confirmar el diagnóstico
una asistolia. Tambiéna enreste caso habría.1
valorando elh i x v 2 3
ade conciencia del.2paciente. que
a nivel
8 7