Está en la página 1de 11

El idealismo:

El idealismo es un conjunto de teorías que afirman que la idea es el fundamento del ser y
del verdadero conocimiento.

Se dice que es un conjunto de teorías porque el idealismo ha sido desarrollado, revisado y


criticado por muchos filósofos y pensadores. A consecuencia de ello, tiene multitud de tipos
y variantes. Para entender mejor qué es el idealismo hay que definir primeramente qué es
el “ser”, y este se entiende como la materia, la realidad objetiva.

A raíz de esta definición, encontramos dos grandes corrientes de pensamiento filosófico


respecto al ser y al conocimiento. Aquella que afirma que la materia existe
independientemente del espíritu o idea es denominada como materialismo. Por el
contrario, la que defiende que el espíritu prevalece sobre la materia, es el idealismo.

Se caracteriza por:

Tiene su origen en Platón.

Los sentidos nos ofrecen percepciones distintas de la realidad verdadera.

La verdad se encuentra fuera del ser.

Por tanto, a través del intelecto y no de los sentidos, encontramos el conocimiento.

Kant desarrolló los conceptos de fenómeno y noúmeno. El primero de ellos, es el que se


corresponde con lo que vemos y el segundo es donde se alcanzan los límites del
conocimiento.

Indica que solo se puede acceder al conocimiento a través del intelecto.

El idealismo puede dividirse en:

Idealismo platónico

El origen del idealismo lo encontramos en Platón, y su explicación de por qué las ideas
preceden a la materia y al mundo sensible y de que existen con independencia del mismo es
la siguiente. El mundo sensible, es decir, la materia, lo que percibimos a través de nuestros
sentidos, no se corresponde con la idea verdadera de lo que realmente percibimos. Esto se
debe a que cada objeto o cosa que percibimos no es más que un mal reflejo de la idea que
tenemos.

Por ejemplo, hay coches de mil tipos, todoterrenos, furgonetas, deportivos, utilitarios,
grandes, pequeños, azules, rojos, etc. Pero todos estos que estamos viendo lo hacemos e
identificamos como coche gracias a que en nuestra mente tenemos el ideal de coche. Y esta
idea de coche es perfecta e independiente, y gracias a ello, la proyectamos y vemos los
coches en el mundo sensible. En resumen, para Platón, lo que vemos y percibimos es una
copia o proyección imperfecta de la idea de ello que tenemos en nuestra mente.

Así, Platón defiende que el verdadero conocimiento se encuentra fuera del ser. Solamente
en el mundo de las ideas, y a través del uso del intelecto y no de la experiencia sensorial
encontramos el conocimiento. Esta afirmación la desarrolla en su alegoría del mito de la
caverna.

Idealismo objetivo y subjetivo

El idealismo objetivo y el idealismo subjetivo son dos variantes del idealismo. Y se


diferencian fundamentalmente en lo siguiente.

Idealismo objetivo: Para el idealismo objetivo, las ideas no dependen de nada, se descubren


a través de la experiencia. Son independientes del individuo, existen independientemente
del mismo, solo él, a través de la experiencia puede encontrarlas.

Idealismo subjetivo: En cambio, para el idealismo subjetivo, las ideas ya no son


independientes y situadas en un marco abstracto que no depende del ser humano. Sino que
dependen de la mente del sujeto. Cada uno de ellos es diferente y sus ideas están forjadas
por su experiencia personal, no porque exista un mundo aparte donde estas se encuentren
de una misma forma ideal.

Idealismo transcendental

El idealismo trascendental fue desarrollado por el filósofo alemán Immanuel Kant. Según
Kant, para la búsqueda y obtención del conocimiento es necesario que existan dos
elementos, el objeto de conocimiento, y el sujeto, que es la persona que busca ese
conocimiento. El sujeto es que pone las condiciones para que se produzca el conocimiento.

También son importantes en el desarrollo de su teoría los conceptos fenómeno y noúmeno.


El fenómeno, para Kant, sería lo que conocemos del objeto, gracias a la experiencia y
procesos cognoscitivos anteriores. Por el contrario, el noúmeno es aquello que
desconocemos del objeto, son los límites del conocimiento, y se llega a él a través del
intelecto.

A partir del idealismo trascendental, se desarrolla el idealismo alemán. Una escuela cuyos
representantes principales fueron Kant, Hegel, Fichte y Schelling.

El positivismo:

El positivismo es una corriente filosófica que afirma que el conocimiento proviene de la


experiencia, a la vez que se obtiene mediante el método científico.
El positivismo surge en el siglo XIX, y tuvo como precursores y autores destacados a Saint-
Simon, Auguste Comte y Stuart Mill.

Esta filosofía surgió de la necesidad de tratar a los fenómenos sociales con la misma
metodología y otorgándoles la misma categoría que las ciencias naturales. Así, el
positivismo defiende que el conocimiento se obtiene con base en la experiencia, y asegura
que el método científico es la única vía para conseguirlo. Se posiciona así en contra de las
corrientes que rechazan la experiencia como método de investigación.

Características del positivismo

Entre las características que presenta el positivismo, destacan las siguientes:

Rechazo del dogma y de las verdades absolutas.

Observación y experimentación para la búsqueda de leyes y teorías.

Rechazo de la metafísica, todos los fenómenos han de tener explicación científica.

El investigador social ha de ser objetivo, no puede dejar que interfieran sus prejuicios y
preferencias.

El funcionalismo:

El funcionalismo consiste en una visión filosófica empirista y moderna de la sociedad. Toma


en préstamo –al menos en principio- la idea del organismo biológico, para pensar el
colectivo humano como una entidad con necesidades, vinculadas a los fenómenos sociales
de alguna manera.

El funcionalismo puede, sin embargo, aplicarse de distinta manera a distintos campos del
saber. Por ejemplo, existe un movimiento arquitectónico, una teoría psicológica y otros
enfoques distintos que responden al mismo nombre.

El funcionalismo como escuela se enfrenta a su declive frente al surgimiento de la crítica


marxista y de la Teoría del Conflicto, para las cuales el enfoque de análisis social es
radicalmente distinto: hacen énfasis más bien en las relaciones de poder a lo largo de la
historia como método para comprender la gestación de una sociedad determinada.

El funcionalismo se caracteriza por lo siguiente:

Surgió en 1930 en Inglaterra, como fruto del trabajo previo de Durkheim, Radcliffe-Brown,
Bronislaw Malinowski y otros sociólogos y antropólogos de importancia.

Considera la cultura como un todo orgánico, integrado, coherente y funcional.


Permitió el surgimiento de la antropología científica en Estados Unidos. También la
separación entre etnografía y etnología.

Propone una serie de teorías basadas en diferentes disciplinas del saber, dotadas de


enfoques particulares: la teoría hipodérmica, la teoría de los efectos limitados, etc.

Surge como respuesta al evolucionismo y el particularismo histórico.

El estructuralismo:

El estructuralismo es una metodología aplicada en las ciencias sociales, que consiste en


estudiar los fenómenos que les suceden a los individuos de una determinada comunidad, y
ello, en función de las estructuras a las que están sometidos.

Para el estructuralismo existen una serie de estructuras –que son formas de organización–
que condicionan el comportamiento de los individuos que operan bajo estas estructuras.
Esta metodología se suele aplicar a las sociedades, ya que estas comparten numerosos
elementos en común. Tales como el sistema económico, el lenguaje, la literatura, etc. 

Según el estructuralismo, el comportamiento humano se entiende gracias a que dentro de


un sistema determinado se han establecido de forma implícita y explícita unas reglas de
comportamiento. Son totalmente artificiales, y cobran sentido si todos los componentes de
esa cultura entienden esos comportamientos. Por ejemplo, en las sociedades occidentales,
sorber la sopa es de mala educación, mientras que en las orientales significa todo lo
contrario, es un reconocimiento positivo al cocinero. Como vemos, el mismo
comportamiento para unos significa una cosa y para otros, otra. En eso se basa el
estructuralismo, a que los hechos se explican según los condicionantes que operan sobre
ellos. Otro ejemplo lo tenemos en el protestantismo y el catolicismo, para los primeros
la riqueza y el esfuerzo son síntomas de estar agraciado por Dios. En cambio, el catolicismo
predica la austeridad y el sacrificio como forma de agradar a Dios. 

Características del estructuralismo

De la definición de estructuralismo emanan las siguientes características:

El comportamiento de los seres humanos está condicionado por las estructuras presentes
en cada sociedad o cultura.

Es el ser humano el que da significado a los hechos, acciones y costumbres que


experimentan.

Se han de identificar las estructuras, separarlas y analizarlas.


Surge como una herramienta lingüística en la década de los veinte, pero a mediados del
siglo XX se convierte en un método para estudiar las ciencias sociales.

El desarrollismo:

El nuevo desarrollismo no es una simple teoría económica, sino una estrategia nacional de
desarrollo. Se diferencia del desarrollismo de los 50 en que no defiende amplias medidas
para proteger a una industria infante y en que si bien le otorga al Estado un papel central,
cree que para llevar a cabo su tarea, éste debe ser financieramente sólido y
administrativamente eficiente. Por otro lado, a diferencia de la ortodoxia convencional, el
nuevo desarrollismo no cree que el mercado pueda resolverlo todo ni que las instituciones
deban limitarse a garantizar la propiedad privada y el cumplimiento de los contratos. El
nuevo desarrollismo es entonces un tercer discurso, un conjunto de propuestas útiles para
que los países de desarrollo medio, como Brasil y Argentina, recuperen el tiempo perdido y
logren ponerse a la par de las naciones más prósperas.

El desarrollismo no fue una teoría económica, sino una estrategia nacional de desarrollo.
Basándose en las teorías económicas disponibles, buscaba formular la estrategia que le
permitiera a cada país de la periferia capitalista alcanzar gradualmente el nivel de desarrollo
de las naciones centrales. Se basaba en el mercado, porque no hay teoría económica que no
parta del mercado, pero le atribuía al Estado un papel central.

Ahora bien, ¿significa esto que los países de ingreso medio de la región, que cuentan con
amplios mercados internos y democracias consolidadas, como Brasil y Argentina, entre
otros, volverán al nacional-desarrollismo de los años 50? ¿O significa que podemos y
debemos pensar en un «nuevo desarrollismo», una alternativa tanto a la ortodoxia
convencional como al viejo desarrollismo? En este trabajo, después de analizar la crisis de la
estrategia nacional de desarrollo del antiguo desarrollismo, haré una comparación entre
éste, la ortodoxia convencional y el desarrollismo que está surgiendo. El objetivo es mostrar
que, contrariamente a lo que afirma el pensamiento neoliberal dominante –según el cual la
única alternativa a la ortodoxia es el populismo económico–, sí existe una opción
responsable y mucho más compatible con el desarrollo económico.

En los 40, 50 y 60, los desarrollistas y keynesianos dominaban el panorama económico de


América Latina: constituían el mainstream. A partir de los años 70, sin embargo, en el
contexto de la gran ola neoliberal y conservadora, la teoría keynesiana, la teoría económica
del desarrollo y el estructuralismo latinoamericano fueron desafiados por los economistas
neoclásicos. Desde los 80, en el marco de la crisis de la deuda externa, estos economistas
consiguieron aplicar su doctrina a los países en desarrollo. La ideología neoliberal se volvió
hegemónica en América Latina. Se expresó a través de lo que se llamó el «Consenso de
Washington», que yo prefiero llamar «ortodoxia convencional», no solo porque es una
expresión más general, sino también porque si algún consenso existía en los 90, éste
desapareció en 2000. Lo central, en todo caso, es que la estrategia nacional de desarrollo
entró en crisis y fue sustituida por una estrategia impuesta a los países de la periferia por los
países desarrollados.

La socialdemocracia:

La socialdemocracia es una ideología política. Esta se encarga de promover, en el marco de


una economía capitalista, la intervención directa del Estado en la economía. El fin de la
intervención es el de poder redistribuir la renta de una forma más social, garantizando
el estado de bienestar y el interés general.

El principal objetivo de la socialdemocracia es el de reducir los niveles


de desigualdad dentro de una economía. Es por eso que, como corriente de izquierdas,
promueve una redistribución de la riqueza mediante un complejo sistema impositivo. Una
corriente política que dice comprometerse con la pobreza, así como en la prioridad de
poseer unos extensos servicios públicos universalizados.

Aunque se encuentra erróneamente ligada al socialismo, la socialdemocracia dista mucho


del concepto socialista. Ambas son corrientes de izquierdas, pero la socialdemocracia
contempla entre sus principios la garantía de funcionamiento de la democracia
representativa, así como una economía social, pero de mercado.

Principales características de la socialdemocracia

Las principales características que definen a la socialdemocracia moderna, así como sus
reivindicaciones en los distintos órganos parlamentarios son:

Economía mixta.

Servicios públicos reforzados.

Educación gratuita y universal.

Sanidad gratuita y universal.

Un fuerte sistema de Seguridad Social.

Políticas de inmigración y diversidad cultural.

Fuerte democracia representativa.

Apoyo a la ecología.
Apoyo a la creación de representantes intermedios que velen por los intereses de los grupos
más vulnerables (sindicatos, organismos de competencia, organismos de ayuda a los
consumidores…).

Sistema impositivo progresivo.

Política progresista, en contra de los valores conservadores.

Promoción de lo que la socialdemocracia llama “Justicia social”.

Política exterior basada en el cooperativismo y el multilateralismo.

Democracia cristiana:

es una ideología política que existe desde los fines del siglo XIX, cuando el Papa León XIII
escribió la encíclica Rerum Novarum, una respuesta al socialismo y a los nuevos sindicatos
en la cual el Vaticano reconoció las privaciones del trabajador y se dispuso a aliviarlas.

Aunque hay muchas formas de democracia cristiana, generalmente están de acuerdo en


ciertas materias. Su idea del Estado no corresponde a la de los liberales: debe ser
descentralizado y estar compuesto de varios conjuntos, pero debe tener una capacidad
indiscutible. Los democratacristianos creen que la sociedad debe de ser responsable por la
economía, pero no discuten los principios del capitalismo, creen que debe haber un
capitalismo con rostro humano, lo que lo diferencia de la socialdemocracia. La democracia
cristiana se parece más al socialismo cristiano en que cree que el deber del Estado es cuidar
de sus ciudadanos.

Los democratacristianos generalmente siguen la posición del Vaticano en temas morales.


Sin embargo, la mayoría de ellos ha aceptado el divorcio y el gobierno secular, y algunos han
aceptado el aborto.

Sistemas o modos de producción:

De acuerdo a la perspectiva marxista de la historia económica del ser humano, conocida


como Materialismo histórico, los modos de producción son las formas específicas en que la
actividad económica se organiza dentro de una sociedad humana específica, para la
satisfacción de sus necesidades de bienes y servicios.

La teoría marxista propone que un análisis de los modos de producción desde el inicio de la
civilización hasta hoy, nos permite entender el modo en que la economía ha cambiado en
el tiempo.

Esos cambios dependen, por un lado, de las posibilidades productivas del momento, como
la tecnología, la disponibilidad de recursos, el desarrollo del conocimiento, etc. Sin embargo,
también se ven afectados por el ordenamiento social y político de la sociedad que dicho
modelo produjo.

Para comprenderlos, se distingue entre dos factores de importancia:

Las fuerzas productivas. En donde se consideran los actores humanos que ponen en práctica
su fuerza de trabajo, o sea, su cuerpo y su tiempo para trabajar, y el conjunto de saberes
organizados y de herramientas necesarias para producir, conocidas en conjunto
como medios de producción.

Las relaciones de producción. Las relaciones que se dan entre las distintas fuerzas
productivas y que organizan la sociedad en base a relaciones entre las personas y sus
objetos de trabajo, así como entre las distintas clases sociales.

De acuerdo a las teorías de Marx, la capacidad de producir y la participación de las distintas


clases sociales en el ciclo productivo determinan el modo de producción de una sociedad.

Relaciones de producción

Las relaciones de producción, como se dijo antes, tienen que ver con el lugar que los
individuos y las clases sociales ocupan dentro del circuito productivo, especialmente con el
control y la propiedad de los medios de producción. Se trata, pues, de un tipo de relaciones
entre los hombres, pero respecto de las cosas. Pueden ser:

Relaciones de propiedad y control validadas legalmente, respecto a inmuebles, activos o


máquinas empleadas en la producción.

Relaciones laborales o de reparto de las labores, incluidas las domésticas.

Dependencias socioeconómicas entre individuos según su participación en el ciclo


productivo.

Proporciones cuantitativas de los actores sociales en el circuito productivo y en la obtención


de sus beneficios.

Modo de producción primitivo

El primer modo de producción que el marxismo contempla es el primitivo, conocido


también como comunismo primitivo. Típico de la época prehistórica, previa a la llamada
Revolución del Neolítico que produjeron la agricultura y la ganadería.

El comunismo primitivo se da en ausencia de un Estado y de una jerarquía social, así como


de clases sociales, distinguiendo a la hora de repartir el trabajo únicamente en las
capacidades físicas de cada quien. Es un modelo de producción limitado, de bajísimo nivel
de desarrollo, que a duras penas permite la subsistencia de la comunidad.

Modo de producción esclavista

El modo de producción esclavista, como su nombre lo indica, se sostiene en el sometimiento


de otros seres humanos y su reducción a la condición de propiedad, a lo
sumo ciudadanos de tercera, cuyas voluntades están sometidas a un amo particular o al
Estado mismo.

Los esclavos entregan toda su capacidad de trabajo, sin participar en el reparto de los
beneficios obtenidos del mismo, excepto por lo mínimo indispensable para garantizar su
supervivencia y su trabajo continuo. Este fue el modelo de las sociedades clásicas de
la antigüedad, como Grecia y Roma.

Modo de producción feudal

El modelo de producción feudal imperó en muchas sociedades agrícolas de la antigüedad y


en la Europa medieval desde la caída del Imperio Romano hasta el Renacimiento europeo y
la entrada en la Modernidad.

Se caracterizó por un orden político descentralizado, en el que los distintos reinos


reconocían la autoridad local de los señores feudales, terratenientes provenientes de la
nobleza militar. Éstos, a su vez, regían sobre el campesinado plebeyo.

Los señores feudales se llevaban un alto porcentaje de la producción que los campesinos


obtenían de sus tierras. A cambio, les ofrecían orden, estabilidad, protección militar y
permiso para habitar y alimentarse de la cosecha. Era un modelo de producción
eminentemente rural.

Modo de producción capitalista

Según el marxismo, el capitalismo es la explotación de los asalariados.

Es el modelo de producción posterior al mercantilismo y al ascenso de


los comerciantes como clase predominante, en lugar de la nobleza. Surgió con las
Revoluciones burguesas que pusieron fin al medioevo y posteriormente al absolutismo
monárquico.

A medida que el dinero desplazó en importancia a la tenencia de tierras, y la ciencia y


la tecnología a la fe en la religión, un mundo nuevo dio sus primeros pasos hacia una
sociedad industrial. Los siervos campesinos migraron masivamente a las ciudades y se
convirtieron en trabajadores obreros.
Este es el modelo vigente en la mayoría de los países del mundo actualmente. Según la
lectura marxista, consiste en la explotación de la fuerza de trabajo del proletariado por
parte de los burgueses, dueños de los medios de producción, a cambio de un salario.

Así, la burguesía se queda con la plusvalía, que es el añadido de valor que


los trabajadores aportan al precio final del producto, y que siempre es superior
al salario que les es otorgado.

Modo de producción socialista

Propuesto por Marx y Engels como el modelo transitorio entre el capitalismo y la sociedad
utópica sin clases, consiste en una sociedad cuya producción está orquestada en función del
uso y las necesidades de la comunidad, en vez de la acumulación y la ganancia monetaria.

Para ello, el Estado tiene que organizar las fuerzas productivas, aboliendo en alguna medida
la propiedad privada e impidiendo la distribución inequitativa de las riquezas. Este tipo de
modos nunca se ha logrado implantar exitosamente en ningún lado. Los propios Marx y
Engels no dejaron por escrito de qué manera podría darse o producirse.

Fuerzas productivas:

Las fuerzas productivas son todos aquellos medios materiales, la mano de obra y las
técnicas que se utilizan para desarrollar un proceso productivo.

Es decir, las fuerzas productivas incluyen entonces tantos los bienes materiales
(herramientas, maquinaria, terrenos, insumos, etc) como el esfuerzo humano que son
necesarios para llevar a cabo una actividad productiva.

Cabe resaltar que la división de trabajo (reparto de las diferentes tareas que conforman el
proceso productivo) y la ciencia y tecnología forman parte de las fuerzas productivas.

Tipos de factores productivos

Fuerza de trabajo: El esfuerzo humano dedicado a la actividad productiva.

Medios producción: Instrumentos mecánicos y tecnológicos, así como los materiales


necesarios para el desarrollo de bienes y servicios.
Bibliografía

https://economipedia.com/definiciones/idealismo.html

https://economipedia.com/definiciones/positivismo.html

https://concepto.de/funcionalismo/

https://economipedia.com/definiciones/estructuralismo.html

https://nuso.org/articulo/estado-y-mercado-en-el-nuevo-desarrollismo/

https://economipedia.com/definiciones/socialdemocracia.html

https://www.edu.xunta.gal/espazoAbalar/sites/espazoAbalar/files/datos/
1381827539/contido/zoon_politikon/html/78id_democratacristianos.html

https://concepto.de/modos-de-produccion/

https://economipedia.com/definiciones/fuerzas-productivas.html

También podría gustarte