REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA

MINISTERIO DEL PODER POPULAR PARA LA EDUCACIÓN

UNIVERSIDAD, CIENCIAS Y TECNOLOGÍA
UNIVERSIDAD DE ORIENTE
EXTENSIÓN MATURÍN

EL MANTENIMIENTO CENTRADO EN CONFIABILIDAD.

Profesor: Estudiantes:
Aníbal, Fariñas Zerpa, Juan
C.I: 29.936.958
Luis, Padilla
C.I: 24.504.983
Ángel, Blanco
C.I: 31.293.831
Carlha, Hernández
C.I: 22.710.513

Maturín, Enero 2023.

 Mantenimiento Centrado en Confiabilidad es una filosofía de
mantenimiento utilizada con el fin de asegurar que los activos físicos de una
empresa u organización se mantengan operando dentro de su contexto
operacional requerido por algún usuario que este los utilice. Para la realización
de este mantenimiento se realizan una serie de tareas o pasos de manera
ordenada y sistemática, para lograr identificar los requisitos o las actividades de
gestión de un mantenimiento preventivo aplicable y eficaz hacia los equipos de
una instalación, teniendo en cuenta las consecuencias operativas, económicas
y de seguridad que se pueden producir. Con el fin de reducir errores, reducir los
costos, aumentar la eficiencia y productividad. Al utilizarla se elaboran planes de
mantenimiento de estos equipos basándose en asegurar las funciones para las
cuales fueron creados.
Tiene sus orígenes a principios de la década de 1970 desarrollada
inicialmente por la industria comercial de aviación para mejorar la seguridad de
los vuelos y confiabilidad de sus equipos. Para el año 1974, el Departamento de
Defensa de los Estados Unidos, ha usado esta filosofía de mantenimiento de sus
sistemas militares aéreos. Teniendo más de 30 años de desarrollo. El MCC, Ha
tenido un impacto significativo que otros sectores se interesen en aplicar esta
filosofía de gestión de mantenimiento. Sectores como generación de energía,
petrolera, química, gas, refinación y la industria de manufactura, interesados en
ella y adecuándola a sus necesidades de operación. Es utilizada no solo para
identificar tareas de mantenimiento, sino que también se utiliza como marco de
referencia para analizar el riesgo en equipos, clasificar componentes
significativos para el mantenimiento y detectar áreas de oportunidad de mejora
en el mantenimiento de equipos complejos. Si es aplicado con éxito y eficacia,
genera aumento de la eficiencia, mejora la productividad y brinda la sustitución
de activos en dado caso de fallas o su destrucción si llegase a pasar. Por otro
lado, existen una serie de inconvenientes que se deben analizar en función de
los objetivos y presupuesto antes de decidirse por esta estrategia de
mantenimiento ya que es complejo, requiere tiempo y recursos además que no
posee un coste de mantenimiento establecido. Y es una metodología que
depende de la identificación del tipo de mantenimiento que corresponde a cada
activo. Entre los pasos que sigue esta metodología para aplicarla se encuentran
una serie de preguntas básicas como son; ¿Qué funciones desempeña el activo?
¿Que origina la falla? ¿Qué ocurre cuando falla? ¿Qué se puede hacer para
prevenir o predecir la falla?... las cuales ayudan a identificar la problemática,
saber cómo se originó y a llegar a una posible solución de la misma. De igual
manera cuenta con una serie de herramientas que facilitan la clasificación del
MCC como son el Análisis de Modos de Fallo y Efectos (AMFE); método el cual
busca evaluar el impacto de un fallo identificando dónde y cómo podría fallar un
proceso. El Análisis de Peligros y Operabilidad (HAZOPS); este método es muy
parecido a AMFE, pero va un paso más allá y crea vínculos entre los modos de
fallo, los efectos y las causas de los mismos. Mientras que el Análisis del Árbol
de Fallas (FTA) y la Inspección Basada en Riesgo (RBI) están muy relacionadas,
pues la FTA es una herramienta gráfica utilizada para examinar la causa raíz de
una falla a nivel de sistema y obtener una evaluación probabilística del riesgo y
finalmente la RBI la cual es denominada la encargada de la toma de decisiones
para optimizar los planes de inspección en equipos de materia industrial. Antes
de realizar el mantenimiento centrado en la confiabilidad, la formación es
obligatoria y el coste de puesta en marcha del programa puede ser elevado. El
MCC aunque es efectivo, es un método complejo y difícil de llevar a cabo, pero
es el más rentable a largo plazo.
Esta Metodología posee un análisis sistemático, objetivo y documentado,
aplicable a cualquier tipo de instalación industrial y muy útil para el desarrollo u
optimización de un plan eficiente de mantenimiento preventivo y predictivo con
fin de solución a una problemática de algún activo. Debe ser llevado por
personas con la debida formación para garantizar su éxito. Es una metodología
que lleva a los equipos a ser más seguros y confiables para el personal, empresa
u organización en la cual es necesaria su utilización, ofrece un mayor
cumplimiento de las normas de seguridad y al medio ambiente donde se
desempeñe. Posee múltiples herramientas que facilitan el análisis y la
recolección de la información manteniendo un orden sistemático y estructurado.
También posee asociación a los beneficios humanos, como es la mejora entre
distintas áreas de la empresa y llegar a tener mejor entendimiento entre
mantenimiento y operaciones. También que se busca mejorar sus resultados al
combinarlo con otras metodologías tales como el mantenimiento radical, el
mantenimiento basado en la condición y el proceso de jerarquía analítica.