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Derecho Procesal

Civil, Comercial y
Laboral

Comisión A
Prof: Bernardo Giolongo
Alicia Roteta
Julio Loss
Universidad de
Santa fe

Bolilla I
Por: María Virginia Aguirre

Breve repaso sobre la función jurisdiccional del Estado, sobre la acción y el


Proceso:
El Estado debe obtener el logro de sus fines mediante el cumplimiento adecuado de tres
funciones que se pueden caracterizar a priori con facilidad: la legislativa, la
administrativa y la jurisdiccional. A esta distinción primaria obedece la creación y la
separación de Poderes efectuada por el constituyente: Legislativo, Ejecutivo y Judicial.-
Aunque a primera vista parezca que existe una perfecta correspondencia entre cada
función y cada Poder, ella no se presenta en la vida jurídica: salvo el caso del Poder
Ejecutivo, que no puede ni debe efectuar tarea jurisdiccional, cada una de las funciones
mencionadas es cumplida (aunque a distintos niveles) de modo concurrente por cada
uno de los Poderes que actúan en el Estado organizado constitucionalmente.
En efecto: en la Argentina, por ejemplo,
1. La función legislativa es cumplida por el Poder Legislativo, a cuyo exclusivo
cargo está la sanción de la ley en sentido formal; por el Poder Ejecutivo, a cuyo
exclusivo cargo está la promulgación de la ley formal y la reglamentación, mediante
decretos, de las leyes del Congreso; por el Poder Judicial, a cuyo exclusivo cargo está el
emitir acordadas con carácter de norma general y fallos plenarios, con carácter de norma
vinculante para ciertos jueces;
2. La función administrativa es cumplida primordialmente por el Poder Ejecutivo,
por el Poder Legislativo, verbigracia al designar con facultad exclusiva sus propios
empleados subalternos; por el Poder Judicial, verbigracia al designar a su propio
personal;
3. La función jurisdiccional es cumplida primordialmente por el Poder Judicial en
todas sus sentencias; por el Poder Legislativo en el exclusivo caso del juicio político.
Pero no puede ni debe ser ejercida por el Poder Ejecutivo.-

Jurisdicción: se acepta mayoritariamente que la jurisdicción es la facultad que tiene el


Estado para administrar justicia en un caso concreto por medio de los órganos judiciales
instituidos al efecto.

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La jurisdicción constituye un derecho subjetivo del estado, en cuanto es función
articulada por la ley y se trata de un derecho subjetivo público del cual son sujetos
pasivos los individuos, implica al mismo tiempo un deber, desde que toda persona tiene
derecho a pretender del Estado el ejercicio de su actividad jurisdiccional.-
La jurisdicción es indelegable, por la aptitud especial que se requiere para desempeñar
el cargo y por naturaleza intelectiva de la función, debe necesariamente ejercerse por la
persona a quien ha sido conferida.-
Para que tal facultad pueda ser cumplida adecuadamente, el ejercicio de la función
admite ser descompuesto en los siguientes elementos (o atribuciones concurrentes de los
jueces):
 Notio: facultad para conocer de una determinada cuestión litigiosa;
 Vocatio: facultad para compeler a las partes para que comparezcan al proceso;
 Coertio: facultad de emplear la fuerza pública para el cumplimiento de las
medidas ordenadas dentro del proceso, a fin de hacer posible su desenvolvimiento. Se
ejerce sobre personas y cosas;
 Judicium: facultad de resolver el litigio con efecto de cosa juzgada;
 Executio: facultad de ejecutar, mediante el uso de la fuerza pública, la sentencia
no acatada espontáneamente por las partes, a fin de no tornar meramente ilusorias las
facultades antes mencionadas.-

Acción: No hay acción sin derecho y viceversa, por tanto, la naturaleza de la acción
procesal depende de la naturaleza del derecho.
En la tarea doctrinal de explicar qué es la acción procesal, se han sostenido otras
muchas variantes: que es el instrumento jurídico para la solución de un litigio; que es el
derecho que corresponde a toda persona para provocar el ejercicio de la actividad
jurisdiccional del Estado; que es un derecho público subjetivo mediante el cual se
requiere la intervención de la jurisdicción del Estado para la protección de una
pretensión jurídica, etc.
“Es el recurso con el que el ciudadano invoca en su propio favor, la fuerza pública del
Estado. Pone el movimiento el ejercicio del poder jurisdiccional del estado”.-
Es un límite y una condición para la jurisdicción. Se entiende también como un servicio
que el ciudadano presta al Estado; ya que le proporciona la ocasión de intervenir en
defensa del derecho objetivo.-

Proceso: es un conjunto de actos jurídicos concatenados entre sí por personas que


intervienen en esos actos. Se encaminan a la aplicación del derecho sustancial en un
caso concreto.
Alsina: desde la demanda que es el modo normal del ejercicio de la acción, hasta que el
juez la acuerda o la niega en la sentencia, median una serie de actos llamados de
procedimiento cuyo conjunto toma el nombre de PROCESO. Estos actos son actos
jurídicos procesales que se hallan concatenados entre sí de modo que cada uno es
antecedente del que le sigue y sucesor del que le antecede. Son llevados a cabo por el
juez y las partes.-

El derecho procesal. Concepto. Generalidades. Objeto del derecho procesal:


Es el conjunto de normas que regulan la actividad jurisdiccional del Estado para la
aplicación de las leyes de fondo. Estudia el fenómeno jurídico llamado proceso y los
problemas que le son conexos.

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Couture: es la rama de las ciencias jurídicas que estudia la naturaleza, el
desenvolvimiento y la eficacia del proceso.-
Es:
 Conjunto de normas y principios: los principios son los ejes rectores, los valores
que conforman el espíritu del derecho y según los cuales este se asienta. El derecho
procesal tiene principios que hacen a su espíritu y su autonomía e independencia.-
 Regula la actividad jurisdiccional del estado: ejercida por el poder judicial.-
 Para la aplicación del derecho de fondo: a pesar de su autonomía es
interdependiente, puesto que existe en tanto y en cuanto exista el derecho de fondo.-
 Su estudio comprende: la organización del poder judicial, la determinación de la
composición de los jueces, la actuación del juez, partes, defensores y terceros, etc.-

El objeto del proceso:


Se han enunciado diversas teorías en torno al fin del proceso:
Subjetiva: (concepción privatìstica). Para esta concepción el proceso tiene por objeto
decidir las controversias entre partes. Definen al proceso como una contienda entre
particulares, en la que el interés público (Estado) interviene para la protección del
derecho subjetivo imponiendo normas que aseguren la libertad de debate, el régimen de
las pruebas y la decisión judicial. Por consiguiente, corresponde a las partes no sólo la
iniciación, sino el impulso del procedimiento.-
Esta teoría es inexacta porque puede haber por ejemplo, un proceso sin
controversia, como el juicio en rebeldía. (Chiovenda).-
Objetiva: (concepción publicistica). El proceso es un instrumento que la ley pone en
manos del juez para la actuación del derecho objetivo, y por ello debe investirse al juez
de amplias facultades y conferirle la dirección del proceso para evitar que la mala fe o la
negligencia de las partes pueda llevarlo a una solución injusta.-

Verdadero fin del proceso: el proceso tiene por objeto la protección del derecho
subjetivo mediante la actuación del derecho objetivo. (Chiovenda).
El Juez desarrolla una función pública y ésta procura el restablecimiento del orden
jurídico mediante la actuación de la ley. Pero el proceso civil sólo se inicia a instancia
de parte y lo que esta busca es la satisfacción de un interés individual.-

Competencia:
Es la aptitud otorgada a los jueces por la ley para conocer en causas
determinadas. No todos los jueces tienen competencia en todos los casos concretos, pero
sí todos los jueces tienen jurisdicción.-

Competencia federal y ordinaria. Orígenes. Norma constitucionales implicadas:


Debido a nuestro sistema institucional federal, la competencia se divide en:
competencia ordinaria, como la manifestación de la autonomía provincial, y la
competencia federal, como la manifestación de la soberanía nacional.-
Surgido un conflicto lo primero que hay que determinar en si debe intervenir la
justicia federal (nacional) o la justicia ordinaria (provincial); ya que en las provincias no
sólo actúan los jueces provinciales, sino que en ellas coexisten juzgados federales y
provinciales.-
El Art. 116 de la CN establece: “Corresponde a la Corte Suprema y a los
tribunales inferiores de la Nación, el conocimiento y decisión de todas las causas que
versen sobre puntos regidos por la Constitución, y por las leyes de la Nación, con la

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reserva hecha en el inc. 12 del Artículo 75: y por los tratados con las naciones
extranjeras: de las causas concernientes a embajadores, ministros públicos y cónsules
extranjeros: de las causas de almirantazgo y jurisdicción marítima: de los asuntos en
que la Nación sea parte: de las causas que se susciten entre dos o más provincias;
entre una provincia y los vecinos de otra; entre los vecinos de diferentes provincias; y
entre una provincia o sus vecinos, contra un Estado o ciudadano extranjero”. Éstos
forman parte de la justicia federal, por lo que serán de competencia federal.-
La competencia federal es de excepción, se atribuirá competencia en los asuntos
regidos y mencionados en el Art. 116 CN; los demás casos corresponden a la justicia
ordinaria. Le está vedado a los tribunales provinciales entender en aquellos casos que,
por aplicación de la Constitución Nacional o las leyes que han reglamentado las normas
constitucionales, sean de competencia federal en razón de la materia.
Las partes no pueden renunciar a la jurisdicción federal cuando ésta corresponde
en razón de la materia; en cambio sí pueden hacerlo cuando la jurisdicción federal
corresponde en razón de las personas (ej.: si un extranjero demanda a una provincia ante
un tribunal provincial, se entenderá que la competencia federal ha sido prorrogada).
Algunos autores establecen también como característica que es: Inalterable ya
que si una causa es planteada ante un tribunal federal en razón de una persona (ej.
Cónsul extranjero) y ésta es sustituida posteriormente en el proceso, no se verá alterada
la competencia federal; es restrictiva, puesto que en caso de duda entenderá la
competencia ordinaria.-

Sistema de Nuestro Código:


El Código Procesal de Santa Fe señala en su Art. 1 que el poder jurisdiccional en
lo civil y comercial será ejercido por los jueces que establezca la ley orgánica de los
tribunales, hoy ley orgánica del poder judicial (10.160). Está en su art. 9 establece que
la actividad jurisdiccional es ejercida por los magistrados judiciales que establece la
Constitución Provincial. Ellos son:
1. Los Ministros de la Corte Suprema
2. Los jueces de las Cámaras de Apelación y de las Cámaras de lo Contencioso-
Administrativo
3. Los jueces de los Tribunales Colegiados
4. Los jueces de primera instancia de Distrito
5. Los jueces de primera instancia de Circuito
También es ejercida por los jueces comunales que establece esta ley.-
1. Ministerio de la Corte Suprema: El art. 11 de la LOPJ establece que tiene su
asiento en la sede de la circunscripción judicial Nº 1 (Santa Fe) y que se compone de
seis miembros y un procurador general. Actualmente está compuesta por 5 ministros, un
presidente y un procurador general.
Ejerce su competencia funcional, material y personal en todo el territorio de la provincia
(art. 15 de la ley 10.160)
a. Funcional: le compete ser alzada de todos los tribunales inferiores y le corresponde el
conocimiento de: (art. 16 LOPJ)
 Impugnaciones por inconstitucionalidad
 Recursos de revisión contra sentencias dictadas en procesos penales
 Recursos contra las decisiones del Tribunal de Cuentas
 Recursos de nulidad contra sentencias en juicios orales en materia penal
 Quejas por retardo de justicia deducidas contra las Cámaras de Apelación.

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b. Material: le compete el conocimiento de:
 Pretensiones contencioso- administrativas
 Conflictos de competencia entre magistrados de la provincia sin superior común
 Conflictos de atribuciones planteadas entre funcionarios del Poder Ejecutivo y
magistrados o funcionarios del Poder Judicial
 Incidentes de recusación de sus propios integrantes
c. Personal: le compete el conocimiento de:
 Juicios de expropiación promovidos por la provincia
 Juicios de responsabilidad civil promovidos contra los magistrados judiciales.-

2. Cámaras de Apelación y Cámaras en lo contencioso-administrativo:


Tienen su asiento en las sedes de todas las circunscripciones judiciales (art. 23). Se
compone por lo menos con tres jueces y se divide en salas cuando el número de ellos
permite respetar el mínimo.
a.Territorial: ejercen su competencia funcional y material dentro del territorio de su
respectiva circunscripción.
b.Funcional: es alzada de los jueces de 1º instancia con igual competencia material y
cuantitativa en su respectiva circunscripción judicial. Conoce de:
 Impugnaciones que se deducen contra las decisiones de los jueces de 1º instancia
 Las quejas
 Recursos contra los laudos arbitrales
c.Material: conoce de:
 Conflictos de competencia suscitados entre magistrados o funcionarios judiciales
 Recusaciones de sus propios jueces y las de los de 1º instancia
 Impugnaciones contra las decisiones del presidente.
d.Prevencional: cualquiera sea la intervención que se cabe a una cámara en una causa,
radica definitivamente su competencia para futuras impugnaciones.-

3. Tribunales Colegiados: tienen asiento en las sedes de los distritos judiciales 1, 2 y 3


y ejercen su competencia material dentro de los respectivos territorios (art. 60). Cada
tribunal se compone con 3 jueces, sólo recusables con causa. El juez de trámite es
recusable sin causa dentro de los tres días de notificado por cédula el primer decreto.
Distribuyen por orden de entrada los pleitos.
a.Competencia Funcional:
 Conocimiento de lo actuado en la audiencia de vista de causa y emisión de la
sentencia de fondo y mérito que pone fin a los litigios enunciados por el art. 541
CPSF (filiación, divorcio, alimentos, acciones posesorias, despojo y
responsabilidad por hechos ilícitos).
 Emisión del juicio de fundabilidad en el recurso de revocatoria ante el tribunal
pleno, contra decisiones con sustanciación dictada por juez de trámite y contra
decisiones denegatorias del recurso.
Tribunal Colegiado de Familia:

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 Por vía de juicio ordinario: nulidad de matrimonio, tenencia y régimen
autónomo de visita de hijos, adopción, impugnación de paternidad y disolución
de sociedad conyugal no precedido de juicio de divorcio (juez de tramite).
 Por vía de juicio sumario: liquidación de la sociedad conyugal, insania,
inhabilitación judicial y pérdida de la patria potestad (juez de trámite).
 Por vía de juicio sumarísimo: tenencia incidental de hijos, suspensión y
limitación de la patria potestad, tutela y curatela.
 Por juicio verbal y no actuado: venia para contraer matrimonio y divorcio no
contencioso (juez de trámite).
 Por vía de juicio oral: divorcio contencioso, filiación y pretensión autónoma de
alimentos y litisexpensas.
Tribunal colegiado de Responsabilidad Extracontractual:
 Responsabilidad civil extracontractual
 Pretensiones posesorias y de despojo.

4. Jueces de Primera Instancia de distrito: conocen acerca de las personas que tienen
su domicilio en la provincia, las cosas situadas dentro de sus límites y los actos que
deben ejecutarse dentro de su territorio.
Les compete el conocimiento de causas cuyo monto sea menor a 15 unidades jus.
5. Jueces de Primera instancia de circuito: tienen asiento en la sede de todos los
circuitos judiciales y ejercen su competencia material, cuantitativa y funcional dentro de
sus respectivos territorios. Excepto algunos circuitos (8, 9, 32 y 35) donde son ejercidos
por jueces de 1º instancia de distrito.
a. Competencia Material: les compete el conocimiento de
 Locación de muebles e inmuebles urbanos y rurales
 Desalojo
 Faltas, salvo jueces de circuito 1, 2 y 5
b. Competencia Cuantitativa: les compete el conocimiento de toda causa civil y
comercial cuya cuantía no supere el valor de 15 unidades jus.
c. Competencia Funcional: les compete las impugnaciones y quejas deducidas contra
las resoluciones de los jueces comunales.-

6. Jueces comunales: no son magistrados judiciales.


a. Competencia Material: les compete
 Conocer y decidir sobre contravenciones municipales
 Comunicar fallecimientos al juez de distrito correspondiente, casos de orfandad,
abandono material y peligro moral de los menores de edad
 Realizar diligencias que les sean encomendadas
 Autorizar poderes para pleitos y autenticar firmas
b. Competencia Cuantitativa: les compete:
 Asuntos civiles y comerciales cuya cuantía no exceda de 2 unidades jus
 Asuntos laborales que no excedan de 2 unidades jus.-

Atribución de la Competencia:
Dice el art. 1 de la LOPJ que para la organización del Poder Judicial de la provincia de
Santa Fe, esta ley atribuye la competencia en razón de:

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1. El lugar de demandabilidad (competencia territorial)
2. La materia sobre la cual versa la pretensión (competencia material)
3. El grado de conocimiento judicial (competencia funcional)
4. Las personas que se hallan en litigio (competencia personal)
5. El valor pecuniario comprometido en el litigio (competencia cuantitativa)
6. La conexión causal existente entre diferentes litigios contemporáneos
(competencia por conexidad). Incluye casos de afinidad y el fiero de atracción.
7. La prevención procesal (competencia prevencional)
8. El reparto equitativo de tareas entre los jueces.

El art. 2 LOPJ establece:


---> Es prorrogable: expresa o implícitamente:
 La competencia territorial, cuando se litiga a base de derechos transigibles
 La competencia cuantitativa, solo cuando la demanda se promueva ante juez con
mayor competencia de cuantía de la que corresponde al que es competente.
 La competencia por turno.
Prorrogar: es hacer competente a un juez en principio incompetente por voluntad de
las partes.-
La prórroga se puede dar de dos modos: expreso: por acuerdo de partes, se hace por
escrito y también puede ser dejada de lado por las partes de modo tácito
(promoviendo demanda ante un juez diferente al acordado, sin oposición) o expreso;
y tácito: el actor promueve demanda ante juez incompetente y el demandado no
plantea incompetencia.-
---> Es improrrogable: único caso en que el juez puede declararse incompetente de
oficio.
 Competencia territorial, cuando todas las pautas de demandabilidad concurren
en determinados distritos (art. 3 al 14, 16 y 17)(art. 4 CPSF).
 Competencia material, salvo la de los jueces de circuito, que solo puede ser
prorrogada en forma expresa.
 Competencia funcional
 Competencia personal, en los casos previstos en los incs. 3 y 7 del art 93 de la
Constitución Provincial (Inc. 3: juicios de expropiación que promueva la
provincia. Inc. 7: juicios de responsabilidad civil contra los magistrados
judiciales).
 Competencia prevencional
 Competencia por conexidad.
Salvo el caso de competencia por conexidad, la respectiva cuestión de incompetencia
solo puede promoverse por vía que corresponda antes de haberse consentido la
competencia que se reclama (al momento de recibir la demanda o al momento de
iniciarse el proceso). Después de ello, la incompetencia ya no es declarable de oficio (lo
es a pedido de parte por vía de excepción o recusación).
Las partes pueden alegar incompetencia sólo en el término fijado para oponer
excepciones.-
También es prorrogable: 1: la competencia cuantitativa cuando opera desde un juez de
circuito hacia otro de distrito (y no a la inversa) y desde un juez comunal hacia otro de
circuito (y no a la inversa); 2: la competencia por turno que no queda desvirtuada por la

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existencia de una mesa de entrada única; 3: la competencia material de los jueces de
circuito.

COMPETENCIA TERRITORIAL:
Fundamento: que todos los ciudadanos tengan acceso a la justicia.-
Todo juez ejerce sus funciones dentro de un límite territorial que casi siempre está
perfecta y geográficamente determinado por ley.
El Art. 3 LOPJ establece que para la determinación de la competencia territorial, la
provincia de Santa Fe se divide en comunas (unidad geopolítica de la provincia
entendiendo el término comuna como equivalente a municipio); circuitos judiciales
(agrupamiento legal de varias comunas); distritos judiciales (agrupamiento legal de
varios circuitos judiciales); y circunscripciones judiciales (agrupamiento legal de varios
distritos judiciales).-
Circuitos hay 36.-
Distritos hay 19.-
Circunscripciones hay 5 (Santa Fe, Rosario, Venado Tuerto, Reconquista y Rafaela).-
El Art. 4 establece que:
a. En los procesos contenciosos será competente, a elección del actor:
 El juez del lugar en que deben cumplirse las obligaciones que se
demandan
 El del lugar en que se realizó el hecho, acto o contrato que las originó
 El del domicilio del demandado
 El del domicilio de cualquiera si fueren varios demandados y las
obligaciones indivisibles o solidarias.
 Si no tuviere domicilio conocido, podrá ser demandado donde se
encuentre o en el lugar de su último domicilio o residencia.
b. En los actos de jurisdicción voluntaria intervendrá el juez del domicilio de la
persona en cuyo interés se promovieren.
La norma consagra un derecho de opción a favor del actor que no debe
confundirse con la posibilidad de prórroga que establece el art. 2 LOPJ. Si un
litigio tiene tres domicilios diferentes de demandabilidad el actor puede optar
potestativamente entre uno de ellos sin implicar prórroga. En cambio, si los tres
domicilios se hallan en un mismo lugar, no hay opción posible toda vez que
cualquiera de ellos llevara inexorablemente hacia idéntico juez.
Para demandar ante el del otro lugar se precisa el acuerdo base de toda prórroga,
y ello sólo es posible cuando desde los centros judiciales de Santa Fe y Rosario
se va hacia uno cualquiera de los otros centro, pero no desde estos hacia
aquellos.
El art. 5 establece los demás casos de competencia territorial, sin perjuicio de lo
establecido en el art. 4.-

COMPETENCIA MATERIAL:
La LOPJ indica en cada caso que juez deberá entender en razón de la materia en litigio.
Así lo establecen los Arts. 17, 33. 68, 69, 111, 123 y CC.-

COMPETENCIA CUANTITATIVA:
Esta competencia se establece según el monto reclamado en la demanda, la cantidad
sobre la que versa la pretensión.

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A este respecto la ley 10.160 en su art. 8 establece que para asegurar un permanente y
adecuado ajuste del monto pecuniario que determina la competencia cuantitativa, le ley
adopta la unidad denominada ius/jus, que representa el valor que la Corte Suprema de
Justicia establezca prudencialmente.
El jus tiene valores diferentes según las distintas acordadas de la Corte Suprema de
Santa Fe que lo fueren estableciendo para los distintos circuitos. Cuanto más lejos se
está de la sede principal, más alto es el monto.
De acuerdo al texto de la LOPJ, las diferentes competencias cuantitativas se determinan:
a. la de los jueces de circuito y materia declarativa, hasta un máximo de 15 unidades jus
al igual que los jueces de circuito de ejecución civil. b. la de los jueces comunales, hasta
un máximo de 2 unidades jus.
En el art. 3 se establece como se determina la competencia por valor estando derogado
el inc. 3 y el último párrafo.-

COMPETENCIA FUNCIONAL:
Se fundamenta en el posible error judicial que debe ser revisado por otro juzgador que
esté por encima del primero para asegurar la justicia del caso concreto.
El ordenamiento establece un doble grado de conocimiento.
1. Juez unipersonal de 1º grado o 1º instancia que emite su sentencia resolviendo el
litigio.
2. Tribunal que actúa en 2º grado de conocimiento o 2º instancia revisa la sentencia
de 1º instancia.
Este es el 2º grado de conocimiento ORDINARIO.
Además del conocimiento ordinario existe un grado más de conocimiento;
EXTRAORDINARIO; en el cual no puede plantearse cuestiones de hecho, sino
exclusivamente de derecho.
Funciones del Juzgador: 1º grado ordinario: amplias facultades para interpretar y
evaluar los hechos y de aplicar la norma jurídica que crea conveniente al caso.
2º grado ordinario: sólo debe decidir acerca de los
argumentos que expone el perdidoso respeto de la sentencia que le fuera adversa. La
interpretación de los hechos no puede variarla salvo queja expresa del perdidoso en tal
sentido.
Grado extraordinario: conoce de los argumentos del
perdidoso que tengan relevancia constitucional.

COMPETENCIA PERSONAL:
Se establece en razón de las personas que se hallan en litigio, ej.: art. 18 LOPJ. Se
tienen en cuenta además, las causas de excusación y recusación.

COMPETENCIA POR TURNO:


Implica que entre varios jueces que ostenten idéntica suma de competencias, se repartan
las causas de modo equitativo. Hoy el turno se emplea en juzgados penales y federales.
Puede haber dos sistemas: va rotando el juzgado cada 15 días (se una) o rotaba el
juzgado al llegar a resolver por número de causas.
Hoy se emplea el SORTEO a partir de la creación de las MEU (mesas de entradas
únicas) por acordadas de la Corte Suprema de Santa Fe. Por cada materia hay una MEU
donde se sorteará el juzgado al que le tocará entender la causa que entra. La distribución
de causas se hace de modo equitativo y por computadora que elige al azar un juzgado-

COMPETENCIA POR CONEXIDAD:

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Los procesos son conexos cuando, no obstante su diversidad, tienen elementos comunes
o interdependientes que los vinculan. La conexidad puede ser objetiva o subjetiva.
Fundamento: evitar sentencias contradictorias, y resolver todo en una sola sentencia.

COMPETENCIA PREVENCIONAL:
Juzgado prevencional es aquel en el que radican las causas con finalidad de asegurar
pruebas o bienes. Esto determina la competencia del juicio principal.-

Cuestiones de Competencia objetivas: Vía declinatoria y Vía inhibitoria. Su


Tramitación:
Medios que la ley le otorga al demandado para asegurar las reglas de competencia,
cuando el actor elige un juez y este no repele su competencia.
La incompetencia solo podrá ser alegada (por cualquiera de las vías) dentro del plazo
para oponer excepciones dilatorias; siempre teniendo en cuenta el tipo de proceso del
que se trate.-
Existen dos vías:
1. Vía declinatoria: medio acordado por las leyes procesales para que el
demandado cuestiones la competencia del juez ya admitida, deduciendo la
excepción de incompetencia ante ese mismo juez, para que decline en el
conocimiento de la causa. Se sustancia como las demás excepciones dilatorias.
Se emplea entre jueces de la misma provincia.
2. Vía inhibitoria: medio acordado al demandado para que cuestione la
competencia ya admitida por un juez, presentándose ante otro juez, el cual
considera competente y reclame, deduciendo una demanda solicitándole que se
declare competente y reclame al juez que está conociendo en la causa cese su
intervención. Se le pide que mande un oficio o exhorto al juez incompetente para
que se inhiba y remita los autos en el término de 3 días.
Desde el 1º decreto de hará conocer el incidente al otro juez que entiende en el
juicio para que suspenda los procedimientos, excepto alguna diligencia necesaria
de cuya dilatación puede resultar un daño irreparable.
La inhibitoria puede proceder, además de entre jueces de la misma provincia
entre jueces de diferente provincia. Esto a fin de no obligar a una persona
demandada ante un juez incompetente a que se traslade al sólo efecto de plantear
la incompetencia.-

Cuestiones comunes a ambas vías:


 Elegida una vía no podrá usarse en lo sucesivo la otra. Son excluyentes.
 En ambos casos las resoluciones son apelables
 Que el demandado no haya consentido la competencia que cuestiona
Conflictos de Competencia:
Son contiendas que se plantean entre dos jueces cuando ambos emiten resoluciones
coincidentes acerca de sus respectivas competencias para conocer de un asunto
determinado.
El conflicto puede ser: Positivo: ambos coinciden en afirmarse competentes pero solo
uno puede juzgar el litigio; o negativo: ambos coinciden en afirmarse incompetentes
pero alguno de ellos debe juzgar el litigio.
La competencia material para dirimir estos conflictos corresponde a:
 Corte Suprema de Santa Fe: los conflictos de competencia suscitados entre
magistrados de la provincia que no tienen superior común (art. 17 inc. 2 LOPJ)

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 Cámaras de apelación: los conflictos de competencia suscitados entre
magistrados o funcionarios judiciales (art 33 inc. 1 LOPJ)
 Corte Suprema de Justicia de la Nación: los conflictos de competencia
suscitados entre magistrados del país que no tengan superior común (tribunales
de diferente provincia, tribunales federales y provinciales, cámaras nacionales).-

Medios para atacar la incompetencia subjetiva: Recusaciones y Excusaciones.


Recusación sin causa. Procedencia e improcedencia de las diversas cláusulas de
recusación:

Recusación y excusación:
Por medio de estas instituciones se logra el apartamiento del juez de la causa y el pase
de las actuaciones a otro magistrado, cuando esté en tela de juicio la imparcialidad de
aquel. El juez es subjetivamente incompetente.
RECUSACIÒN: es la facultad acordada a los litigantes para provocar la separación del
juez del conocimiento de un asunto de su competencia.
Puede ser:
Sin expresión de causa: en supuestos excepcionales la ley permite que a pesar de existir
alguna causal, el recusado omita expresarla. El art. 9 CPSF establece que son recusables
sin causa:
 Los jueces de 1º instancia de distrito
 Los jueces de 1º instancia de circuito (jueces de paz letrados).
En estos casos la recusación debe hacerse en el 1º escrito de actuación o diligencia. El
actor al presentar la demanda o en su primera presentación. El demandado en su primera
presentación, antes o al tiempo de contestar la demanda, al oponer excepciones en juicio
ejecutivo o en la audiencia.-
 Los jueces de cámara (vocal de los tribunales colegiados) se puede recusar a uno
solo; y la recusación debe hacerse dentro de los tres días de notificado el 1º
decreto de trámite. El actor puede presentar su primer escrito ante el juez a quien
corresponda el reemplazo, manifestando que recusa al que debìa entender en la
causa. Como consecuencia del funcionamiento de mesas de entrada únicas en el
fuero civil, la facultad otorgada al actor ha quedado desvirtuada, debido a que
debe presentar su primer escrito en la MEU y no ante el juez a quien
corresponde el reemplazo.
Las partes podrán usar esta facultad una sola vez en cada instancia; y si fueren
varios actores o demandados sólo uno de ellos podrá ejercerlo.-
Además de los jueces mencionados en el art. 9 CPSF son recusables sin causa:
 Jueces de trámite de los tribunales colegiados (art. 61 LOPJ)
 Árbitros designados por sorteo
Pero no son recusables sin causa:
 Miembros de la Corte Suprema de Santa Fe (art. 12 LOPJ)
 Jueces de los tribunales colegiados (art. 61 LOPJ)
 Jueces comunales (art. 121 LOPJ)
 Peritos (art. 190 LOPJ)
 Conjueces (art. 112)
 Entre otros.-

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Con expresión de causa: esta facultad es irrenunciable por las partes, no pueden abdicar
de ella anticipadamente (diferencia con la recusación sin causa). Su ejercicio no tiene
limitaciones, puede utilizarse tantas veces como situaciones se den. Tampoco hay
restricción legal respecto de los diferentes procesos.
El art. 10 CPSF establece que todos los jueces superiores o inferiores pueden ser
recusados con causa por encontrarse con el litigante, su abogado, o su procurador en
algunas situaciones que establece el artículo.
Podrá recusarse con causa hasta el llamamiento de autos y aún después si la recusación
se fundare en causa nacida con posterioridad. Procede el recurso de nulidad contra
sentencia dictada por juez legalmente recusado.
Puede recusarse con causa a: conjueces, árbitros, peritos.-
Disposiciones comunes: a ambos tipos de recusación.
Los funcionarios del Ministerio Público, los secretarios y demás empleados del poder
Judicial, no son recusables, pero sí separables por el juez respecto de una determinada
actuación cuando se hallan comprendidos en las causales del art. 10.
La sustitución de abogado o procurador no producirá la separación del juez, salvo caso
de parentesco (art. 10 inc. 1).
Trámite: la recusación (salvo última parte del art. 9) debe interponerse ante el juez
recusado o tribunal al que pertenezca. Admitida la recusación sin causa o reconocida la
causal invocada, se dispondrá la remisión de autos o la integración, sin trámite ni
notificación previa. Continuará ante el representante legal sin perjuicio de que si peste
se considera improcedente o las partes la objetan, lleve el incidente al tribunal de deba
deducirlo, Tramita por la vía incidental y no se eleva la causa principal sino el incidente
en caso de no aceptar el reemplazante (art. 14).-
Negada la recusación, se eleva el incidente al superior para que decida con apertura a
prueba por el término de 10 días si fuere necesario (art. 15).
El incidente suspende el procedimiento pero no los términos para contestar traslados,
oponer excepciones, cumplir intimaciones. (Art. 16).-
El art. 17 establece que los jueces no son recusables y según Alvarado Velloso la norma
no veda el deber del juez de excusación cuando media causal.

EXCUSACIÒN:
El juez que no se considere hábil para entender en una causa en forma imparcial tiene la
facultad de excusarse. Constituye un deber a fin de no comprometer su imparcialidad.
Las causales son las mismas que para la recusación, pero existen otras también fundadas
en motivos graves de decoro y delicadeza; que producen en el juez lo que se conoce
como un estado de violencia moral.
Es necesario que el juez explicite los motivos, los que podrán ser apreciados por el
tribunal encargado de resolver. (Art. 11 CPSF).-

Facultades de los Jueces y Presidente de Tribunal:


Son instrumentos que el legislador ha puesto en sus manos para que realice mejor su
tarea de administrar justicia.
Art. 18 CPSF: jueces y presidentes de tribunales o el vocal que corresponda, recibirá por
sí las diligencias de prueba y presidirán todo acto en que deba intervenir la autoridad
judicial.
Con acuerdo de partes la recepción de audiencias podrá ser sometida al actuario
(secretario del juzgado o de cámara) cuando se trate de asuntos de jurisdicción
voluntaria.

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Art. 19 CPFS: los jueces pueden disponer en cualquier momento la comparencia
personal de las partes para intentar una conciliación o requerir explicaciones que
estimen necesarias.
Para jueces comunales, la actividad conciliatoria es un deber no una facultad (art. 125
inc. 2 LOPJ).
Art. 20 CPSF: pueden ordenar medidas para mejor proveer, que suspenden el plazo para
sentenciar hasta un máximo de 30 días (art. 106). No pueden dictarse estas medidas sin
haber previamente llamado autos para sentencia (art. 121).
El art. 240 LOPJ le concede esta facultad a la Corte Suprema de Santa Fe.
Art. 21 CPSF: establece que el juez dirige el proceso y que por eso puede adoptar todas
las medidas que crea pertinentes. Podrá:
 De oficio y aun compulsivamente, en cualquier estado de la causa, disponer la
comparencia de peritos y terceros para interrogarlos,
 Ordenar que se agreguen documentos,
 Revocar sus propios decretos y resoluciones interlocutorias no notificadas,
 Disponer cualquier diligencia necesaria para evitar la nulidad del procedimiento.

Régimen disciplinario:
Art. 22 CPSF: otorga facultad de expulsar de las audiencias a quienes obstruyan su
curso; también otorga facultad de devolver todo escrito ofensivo o indecoroso.
Las sanciones pueden consistir en: prevención, apercibimiento, multa, suspensión y
hasta 15 días de arresto (art. 223 LOPJ)
Pueden mandar testar las frases ofensivas o inapropiadas de los escritos sin recurso
alguno. (Art. 228 LOPJ).
Se puede decretar arresto a quien no devuelve el expediente (art. 57 CPSF).-
El art. 23 establece: facultad de exigir la comprobación de la identidad personal de los
intervinientes.-

Deberes de las partes y sus defensores:


Tienen el deber de conducirse en el juicio con lealtad, probidad y buena fe.
Ante la transgresión de las partes el juez puede imponer una multa de hasta 200 días de
multa en favor de la parte no infractora (día multa art. 695 CPSF); y de los defensores
el juez lo comunicará a los colegios profesionales que ejercen sobre ellos jurisdicción
disciplinaria.-
La LOPJ en su art.300 establece sanciones imponibles por el colegio de abogados:
 Apercibimiento público o privado,
 Multa hasta 10 unidades jus
 Suspensión hasta 1 año (según LOPJ) o 6 meses (Alvarado)
 Cancelación de la matrícula
Estas dos últimas inhabilitan el ejercicio de la profesión en toda la provincia.-
Los defensores y auxiliares de justicia: colaboran en el desarrollo e impulsión del
proceso. Sin perjuicio de las funciones del secretario, abogados y procuradores, podrán:
 Firmar y diligenciar oficios a bancos, oficinas públicas o entes privados así
como solicitudes de certificados y liquidaciones.-
 Solicitar a los registros públicos certificados, informes y la inscripción de
poderes.
 Firmar las cédulas de notificación con excepción de algunas.-

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Los sujetos del proceso deben desenvolverse con sujeción al principio de veracidad.-

Bolilla II
Por: Carina Paniagua

Los juicios singulares contenciosos pueden ser:


1- Declarativos (de conocimiento): En ellos se debaten todas las cuestiones vinculadas
con el conflicto que originó la intervención judicial. Su finalidad es dilucidar un
conflicto definitivamente. La diferencia entre ellos radica en la celeridad del trámite.
Pueden ser:
· Generales: aquí encontramos:
a. juicio ordinario,
b. juicio sumario,
c. juicio sumarísimo y
d. juicio arbitral.
· Especiales:
a. Con trámite oral: ej. responsabilidad extracontractual.
b. Con trámite sumario: ej. desalojo; de división de cosas comunes.
c. Con trámite sumarísimo: ej. rendición de cuentas; alimentos y litisexpensas
(fuera de Santa Fe); acciones posesorias y de despojo (fuera de Santa Fe).
d. Con trámite que varía: juicio declarativo de prescripción.

Estructura de los procesos de conocimiento:


Los procesos este tipo constan de las siguientes etapas:
1- Etapa de postulación o integrativa de litis:
1. Demanda;
2. Asumir calidad de parte;
3. Contestar la demanda.
Comienza con la presentación de la demanda (aunque cabe aclarar que el
proceso puede prepararse mediante el pedido de diligencias preliminares). El actor
asume calidad de parte (en la demanda), cumpliendo con cargas básicas:
a) Denunciar el domicilio real: es donde la persona reside de manera habitual.
b) Constituir domicilio legal (domicilio ad litem): un domicilio para el litigio. Tiene
restricciones geográficas, debe estar ubicado dentro de la jurisdicción del tribunal.

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c) Designar defensa técnica: nombrar representante legal (abogado, inscripto en la
matrícula).
Presentada la demanda, el juez verifica los requisitos de admisibilidad
(presupuestos procesales): formalidades de la demanda, verifica su competencia,
capacidad de las partes y adecuada representación legal.
Si es correcta, el juez tiene por presentado al actor, y cita y emplaza al
demandado a estar a derecho (a asumir la calidad de parte, a hacerse responsable de los
efectos de la cosa juzgada).
Si no comparece, se lo declara en rebeldía (el juicio continuará sin su presencia).
Si comparece, se corre traslado de la demanda al demandado, que tiene la
oportunidad de contestarla (carga); puede asimismo oponer excepciones de previo y
especial pronunciamiento, lo que deberá hacer dentro del plazo para la contestación de
la demanda. Puede no contestar o contestar y, juntamente con la contestación, deducir
reconvención.
En la contestación puede allanarse. O bien puede que la cuestión se declare ‘de
puro derecho’, porque actor y demandado están de acuerdo con los hechos y sólo
disienten en la aplicación del derecho, o porque los hechos controvertidos pueden ser
acreditados con las constancias del expediente, queda conclusa la causa para definitiva:
se prescinde de la etapa probatoria.

2- Etapa probatoria o de confirmación:


Comienza con la apertura de la causa a prueba (en caso de haber hechos
controvertidos). El plazo de prueba será fijado por el juez y no excederá de 40 días.
Producida la prueba se clausura esa etapa. En el mismo decreto que el juez
ordena la clausura de la etapa probatoria, ordena correr traslado para alegar. Los
litigantes pueden presentar un alegato sobre el mérito de la prueba (en los procesos
sumarísimos no procede la agregación de alegatos).
El alegato se reserva en secretaría para que la contraparte no lo vea.
Presentados los alegatos o vencido el plazo para hacerlo, el juez llama a autos para
sentencia.

3- Etapa decisoria:
Comienza con el llamamiento de autos para sentencia. En esta etapa no hay
discusión, no se producen escritos ni se produce prueba. La excepción la constituye la
prueba que el juez ordena producir en virtud de las medidas de esclarecimiento.
Consentido el llamamiento de autos, el juez debe dictar sentencia:
- el juez tiene 30 días para dictarla en juicio ordinario:
- 10 días en el sumario, en el mismo acto o dentro de los 5 días siguientes en el
sumarísimo y la sentencia debe ser notificada.

4- Etapa impugnativa:
Contra la sentencia definitiva procede la aclaratoria (ante el propio juez), los
recursos de revocatoria, apelación y nulidad ante la Cámara de Apelaciones.
Si la sentencia se apela, se pasa a una segunda instancia de conocimiento. El
procedimiento en ella constará de una ‘etapa introductoria’ que comienza con la
presentación de la expresión de agravios. Puede haber una ‘etapa probatoria’ de carácter
excepcional. Finaliza el procedimiento en la ‘etapa decisoria’ con la sentencia de la
Cámara.

JUICIO ORDINARIO

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Todo lo que se legisle para el juicio ordinario se hará extensivo a los demás
juicio declarativos generales o especiales en cuanto sea compatible con las
disposiciones peculiares a cada uno de ellos.
Se sustanciarán por el trámite ordinario los juicios declarativos de competencia
de los jueces de primera instancia (de distrito) que no tuvieran una tramitación especial
o en que se controviertan derechos no susceptibles de apreciación pecuniaria.
El juicio ordinario es el proceso de cognición por excelencia. Es un juicio tipo,
del cual se derivan todos los demás. Permite amplitud en el debate. La vía ordinaria es
la regla.

- MEDIDAS PREPARATORIAS DE JUICIO ORDINARIO


Se encuentran establecidas por el artículo 390 que dice “…El juicio ordinario podrá
prepararse pidiendo el que pretenda demandar:…”.
1. que la persona contra quien haya de dirigirse la demanda absuelva posiciones sobre
hechos relativos a su personería o acerca del carácter en cuya virtud ocupa la cosa
objeto de la acción y cuyo conocimiento sea necesario para el ejercicio de la misma;
2. que reconozca cualquier documento privado, necesario para entablar la demanda;
3. que se exhiba la cosa muebles que haya de ser objeto del pleito y se deposite a la
orden del juez, en poder del mismo tenedor o de un tercero;
4. que se exhiba algún testamento u otro documento cualquiera que sea menester para
entablar la demanda;
5. que se practique mensura del inmueble que haya de ser objeto de la demanda;
6. Que se haga nombramiento de tutores o curadores.

Art. 391 dice “…Si se tratare de servidumbres prediales establecida por la ley cuyo
ejercicio fuese urgente, el juez lo autorizará de inmediato y con carácter provisorio, a
solicitud del actor y previa fianza que éste prestará por la suma en que aquél estime
prudencialmente los perjuicios y el costo de reposición de las cosas a su estado anterior
en caso de ser destinada la acción.

Art. 392 dice “…El que tema ser demandado podrá también pedir la declaración de
testigos o cualquier otra diligencia probatoria en los mismos casos y condiciones
prescriptos para el demandante.
Art. 393: Fuera de los requisitos expresados, no se practicará ninguna diligencia
preparatoria.

Las medidas preparatorias se deben pedir:


 Expresando claramente los motivos por el cual se solicita;
 Las acciones que se proponen deducir o el litigio cuya iniciación se tema;
 Las diligencias pedidas por el que pretende demandar no tendrán valor si no se
entablan demanda o si no se inicia el procedimiento de mediación prejudicial
obligatoria, en su caso dentro del término de 15 días de practicadas sin necesidad
de petición de parte o declaración judicial.
 Caducan en forma automática si no se entabla la demanda en el plazo de 15 días
de firmada el acta de finalización del mismo.
 En caso de reconocimiento ficto, a los 15 días correrán una vez ejecutoriado el
auto que lo declare.

JUICIO SUMARIO
Se sustanciarán por el trámite sumario, salvo lo dispuesto para casos especiales:

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1. Los juicios declarativos generales cuya cuantía no exceda de la fijada para la
competencia por valor de la justicia de paz letrada (justicia de circuito, hasta 60 jus de
acuerdo a lo establecido por el artículo 112 de la L.O.T. –modif.. por Ley 13178-);
2. Los juicios especiales que la ley determina.
Su estructura es similar al ordinario, consta de las mismas etapas, pero los plazos
son más reducidos, hay mayor agilidad en los trámites y mayor concentración de los
actos procesales.

- Estructura: Artículos 408 a 412 del Código Procesal Civil, Comercial de la Prov. De
Santa Fe).
1º) Demanda;
2º) Emplazamiento a estar a derecho;
3º) Traslado por 5 días para contestar la demanda (y 3 días para oponer excepciones);
4º) Apertura de la causa a prueba por 10 días (3 días para el ofrecimiento);
5º) Clausurado el período de prueba, y agregada la prueba ofrecida que no lo hubiere
sido anteriormente o declarada la cuestión de puro derecho, se corre traslado por 5 días
para alegar;
6º) Evacuados los alegatos o vencido el término para hacerlo, se llamará a autos para
definitiva y se dictara sentencia dentro de 10 días.

JUICIO SUMARÍSIMO
Se sustanciarán por el trámite sumarísimo: (Artículo 413 a 415 C.P.C.y C. S.F.).
1. Los juicios declarativos generales cuya cuantía no exceda de la fijada para la
competencia por valor de la justicia de paz departamental en los juicios cuyo monto no
exceda de 10000 pesos y en los casos específicamente previstos para este tipo de
trámites.
2. Los juicios de desalojo, cuando se invoque únicamente falta de pago;
3. Todos los incidentes y cuestiones que no tengan una tramitación propia.
La celeridad en los procesos sumarísimos se ha intentado mediante la reducción
de los plazos y la limitación de los recursos.
Es un procedimiento verbal y actuado que se reserva para cuestiones incidentales,
accesorias, de otras principales.
Se advierten 2 principios:
1. Principio de concentración procesal: que se realicen la mayor cantidad de actos
procesales en el menor tiempo posible;
2. Principio de celeridad procesal.
En éstos, se interpone la demanda que consta de 3 partes (a diferencia de los
otros 2 juicios que se divide en 2):
1º) Comparecer a estar a derecho:
2º) Demanda propiamente dicha;
3º) El ofrecimiento de las pruebas: ésta es la especialidad. Con la demanda el actor
ofrecerá toda la prueba de que intenta valerse. Acompañará los documentos que obraren
en su poder, y si no los tuviere, los individualizará indicando su contenido y lugar donde
se encuentren. Fuera de este momento no se admitirá ninguna otra prueba, tampoco la
de confesión o documental.

Dentro del término de diez días o de 3 si se tratare de incidente. Con la cedula de


emplazamiento se le entregara copia de la demanda, bajo apercibimiento de que si no la
contesta se dictara sin más trámite y conforme a derecho la sentencia que corresponda.

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El demandado será emplazado para que conteste la demanda dentro del término de 10
días o de 3 si se tratare de incidente. Con la cédula de emplazamiento se le entregará
copia de la demanda, bajo apercibimiento de que si no la contesta se dictará son mas
tramite y conforme a derecho la sentencia que corresponda.
Contestada la demanda, el juez fijara una audiencia para la vista de la causa dentro de
30 días, plazo que solo podrá ampliarse en el caso del articulo 403 siempre que se lo
solicité en los escritos constitutivos del proceso (cuando la prueba haya de producirse
fuera de la provincia pero dentro de la republica-60 días-; fuera de la republica -100
días-, pudiendo designar en ambos casos otro menor que prorrogara hasta el máximum
sin necesidad de causa justificada; teniendo en cuenta para que proceda lo expuesto en
el artículo 404.
En la audiencia de vista de causa las partes informaran sobre el merito de la prueba.
El juez dará la palabra al actor y al demandado, respectivamente o a sus procuradores,
representantes legales o patrocinantes.
La exposición de cada parte no podrá durar más de 20 minutos.
- La sentencia será dictada en la misma audiencia o dentro de 5 días.

En el juicio sumarísimo no procederá (artículo 415 CPCyCSF):


1. el emplazamiento previo a estar a derecho;
2. el arraigo del juicio;
3. las excepciones como artículo de previo y especial pronunciamiento (no pueden
oponerse excepciones dilatorias que lo paralicen);
4. la declaración de rebeldía;
5. la representación del rebelde;
6. el recurso de rescisión; y
7. el llamamiento de autos.

JUICIO ORAL: (artículo 541 a 570)


Es de instancia única. Hay 2 Tribunales, uno en Santa Fe y otro en Rosario, para
cuestiones de familia [divorcio, filiación, alimentos] (en Santa Fe: calle Tucumán entre
9 de julio y 1º de Mayo) y de Responsabilidad extracontractual (en calle 9 de julio); y
también de derechos reales (acciones posesorias).
Tendrá competencia para conocer y decidir en estas causas, un tribunal
colegiado compuesto por 3 jueces. El tribunal tendrá preferentemente en cuenta los
principios de inmediación, concentración y publicidad.
En la demanda se debe ofrecer toda la prueba de la que habrá de valerse.

- Trámite:
Presentada la demanda ‘por escrito’, luego el juez ordena correrle traslado por el
plazo de 20 días para que conteste la demanda y ofrezca su prueba, mediante
providencia que se notifica por cédula y con entrega de copias.
Puede oponer dentro de los primeros 9 días de la notificación de la demanda las
excepciones de previo y especial pronunciamiento, como también la litispendencia y
cosa juzgada: La oposición de excepciones suspende el término para contestar la
demanda. Resuelta, en definitiva, la excepción, vuelve a correr automáticamente el
plazo para contestar la demanda, que será de 10 días.
Al contestar la demanda debe ofrecer toda la prueba de que habrá de valerse; además
deberá acompañar los interrogatorios, pliegos de posiciones, puntos a evacuar por

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peritos, documentos que obren en su poder, que de no poseerlos, procurará
individualizar en su contenido expresando además el lugar donde se encuentre.
Luego, el juez de trámite dictará resolución convocando a las partes a una audiencia
dentro de los 30 días con recepción de la prueba y debate sobre su mérito. Cabe destacar
que esta audiencia será pública, salvo que el tribunal disponga lo contrario. En caso de
incomparencia de cualquiera de las partes se aplicará lo previsto en el artículo 559
Abierto el acto de audiencia, se realizarán los actos previstos en el artículo 560 (se da
lectura de las actuaciones y diligencias cumplidas y, -se recibe la prueba ofrecida por las
partes., etc.).
Si hubiera cuestiones incidentales se resuelven en la audiencia, producida la prueba
ofrecida por las partes y la que el tribunal disponga recibir en ese acto, el presidente le
concede la palabra por su orden al actor y al demandado, para que aleguen sobre su
mérito, y al fiscal y defensor, si intervienen, para que dictaminen.
La exposición no puede ser sustituida por escritos (no se pueden leer, no se pueden
llevar alegatos escritos) y no debe exceder de 30 minutos; terminado el debate, el
tribunal pasa a deliberar en forma secreta y resuelve por mayoría de votos.
La sentencia es redactada por el presidente impersonalmente, a menos que esté
en desacuerdo con la mayoría, en cuyo caso lo hará otro magistrado, Vuelto el tribunal a
la sala, se da lectura al fallo (se resuelve en el momento) y así queda notificado a las
partes. Si por la complejidad de las cuestiones presentadas, en el acto de la deliberación
se estima conveniente diferir el pronunciamiento, la sentencia se dicta dentro de los 5
días posteriores y se notifica a las partes por cédula.
En la audiencia deben tratarse todas las cuestiones propuestas, pero el tribunal
puede suspenderla, debiendo continuar al día siguiente hábil.
En particular, se destaca que solo se podrán interponer contra la sentencia definitiva
recurso de apelación extraordinaria y, eventualmente, recurso de inconstitucionalidad,
en el plazo de diez días citando. Los mismos solo podrán versar sobre las formas
transgredidas, las disposiciones legales violadas o erróneamente aplicadas, además
deberá expresarse el pronunciamiento que se pretende.

ACTOS PROCESALES
La determinación del concepto de acto procesal tiene gran importancia práctica.
Por su parte, Couture, define el acto procesal como el acto jurídico emanado de
las partes, de los agentes o de la justicia o aun de los terceros ligados al proceso,
susceptible de crear, modificar o extinguir efectos procesales.
Para Podetti son “actos procesales llevados a cabo por el órgano y sus auxiliares,
por los litigantes y sus auxiliares y por los terceros, encaminados a instruir el proceso,
obtener un fallo y hacer cumplir la resolución que decide la causa.

Actos y diligencias procesales y su documentación:


Los actos pueden clasificarse en:
1) Actos procesales del juez y sus auxiliares:
A- Actos de instrucción: son los que ordenan el procedimiento; pueden consistir en:
a. actos de admisión: comprenden las providencias mediante las cuales se admiten o
rechazan actos procesales de los litigantes.
b. de transmisión: son los que tienen por objeto hacer conocer a los litigantes lo que se
pide o hace en el proceso: por ej. traslados, vistas, notificaciones. Estos actos son
particularmente importantes puesto que aseguran el principio de contradicción y defensa
en juicio.

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c. de conocimiento: se incluyen en ellos la percepción, comprensión y meditación, por
parte del juez, de los diversos elementos aportados al proceso para decisión de la litis.
d. disciplinarios: cumplen el fin de evitar actitudes que obstruyan el trámite procesal.
La ley faculta al juez a aplicar sanciones a sus propios auxiliares, a las partes y a
terceros.
B- Actos de resolución: Comprenden las diversas clases de sentencias, pronunciadas
por el juez, con conocimiento sumario o amplio sobre el mérito de la causa o sobre el
procedimiento, cuando éste ha sido cuestionado. (la sentencia es el principal acto del
órgano jurisdiccional).
C- Actos de ejecución: Son aquellos por cuyo intermedio el juez ejercita un elemento
específico de la jurisdicción: la coacción. A través de ellos se posibilita el cumplimiento
de los mandatos judiciales.

2) Actos procesales de los litigantes, de sus asesores y auxiliares:


· Los actos procesales de los ‘litigantes’ pueden dividirse en:
A- Unilaterales: son aquellos que producen su efecto por la sola voluntad de quien los
realiza. Pueden dividirse en:
a. Actos de postulación: son los que contienen una exteriorización de la voluntad
encaminada a deducir las respectivas pretensiones. Por ej. la demanda, la oposición de
excepciones, los recursos.
A las partes corresponde fundamentalmente la afirmación de los hechos y la
aportación de la prueba. A ese efecto la ley establece los requisitos de la demanda y la
contestación, determina los medios de prueba de que aquellas pueden valerse para
demostrar la verdad de sus afirmaciones, así como la actividad que les corresponde en la
producción de las mismas.
b. Actos de simple impulsión: tienden solamente a lograr el desarrollo del
procedimiento. Por ej. el que solicita que se ordene un traslado.
c. Actos de documentación: están constituidos por las aportaciones de material de
conocimiento (ofrecimiento y producción de prueba, reconocimiento de hechos, de
firmas, documentos, etc.).
d. Actos decisorios: son los que unilateralmente puede cumplir la parte que están
encaminados a la terminación del proceso (como el allanamiento, el desistimiento del
derecho, etc.).
e. Actos de ejecución: son los que realiza el litigante en cumplimiento de una decisión
judicial (por ej. acatando una obligación de dar).
B- Bilaterales: requieren el acuerdo de voluntades de ambos litigantes sobre el litigio o
el proceso, como en los casos de transacción, conciliación, conformidad para que la
cuestión se declare de puro derecho, etc.
· En cuanto a los actos de los ‘asesores y auxiliares de los litigantes’ se distinguen: los
que realizan en nombre de éstos, que configuran la mayoría de los que hacen a título
personal y por propia legitimación (ej. constitución de domicilio por el abogado a los
efectos de la regulación de sus honorarios).

3) Actos procesales de terceros:


Los terceros contribuyen a la instrucción del proceso y a la ejecución de lo
decidido. Existen 2 importantes actos realizados por terceros en el proceso: las
declaraciones de testigos y las adquisiciones de bienes subastados por orden judicial.
Pero tanto el testigo como el adquiriente en una subasta judicial no son parte en el
proceso y no integran el órgano jurisdiccional, ni aun como auxiliares.

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- Diligencia:
Es el acto jurídico procesal que se desarrolla y perfecciona fuera del expediente,
y como diligencia terminada se agrega al expediente otorgándose el cargo (el secretario
da fe que se acompaña esa diligencia, ej. pericia).
El acto jurídico procesal nace al momento en que se incorpora al expediente. El
cargo es el acto por el cual el escrito pasa a integrar el proceso (principio de adquisición
procesal); es la constancia que el tribunal otorga al acto jurídico procesal.

· Medios de expresión:
- Caracteres generales: El procedimiento de nuestro régimen procesal es
fundamentalmente escrito, pero existen numerosos casos en que se autoriza la expresión
verbal. En el procedimiento ordinario, si alguna de las partes se opone a la apertura de la
causa a prueba, el juez las cita a una audiencia a fin de oírlas; ciertas diligencias de
prueba, como la absolución de posiciones, testigos, se reciben también en forma verbal
y actuada. Pero fuera de estos casos, la regla es que todas las peticiones de las partes y
las resoluciones de los jueces deben formularse por escrito.
El informe “in voce” constituye también una forma de excepción importante.
Por este medio, los litigantes o sus abogados podrán informarse de ciertas actuaciones
en el proceso.
- Idioma: Las actuaciones judiciales deben ser hechas en idioma nacional, por su
carácter de instrumento público. Debe traducirse los documentos otorgados en idioma
extranjero que se agreguen a los autos, y la traducción se hará por traductor público
inscripto en la matrícula.
- Escrito: Toda petición de las partes debe formularse por escrito, en papel sellado, lo
cual importa el pago del impuesto de justicia, y se hará con tinta negra, en caracteres
legibles, sin dejar citas en blanco. (art. 32 y 33)
- Suma: Con el objeto de facilitar el despacho y asegurar la correcta agregación de los
escritos a los autos, debe indicarse en el encabezamiento de los mismos el objeto de la
petición, lo que se llama suma o resumen. Pero cuando la suma no traduce con fidelidad
el contenido del escrito, el juez debe atenerse a los términos expresos en que se
formulen las peticiones o se deduzcan los recursos respectivos.
- Firma: Todo escrito debe ser firmado por el interesado o su representante y el abogado
en los casos en que la ley prescribe su intervención. Los representantes, así como los
letrados, deberán hacerlo sobre estampilla.

- Documentación:
Los actos de procedimiento quedan documentados por la agregación sucesiva de
escritos de las partes, de las actas labradas por los secretarios, en su caso, de las
resoluciones de los jueces, los que forman un solo cuerpo de foliatura seguida, que toma
el nombre de ‘expediente’. Al secretario corresponde su formación y custodia, así como
de los documentos que se agreguen.
- Agregación de documentos: Los documentos deben agregarse en forma que permitan
íntegramente se lectura, y cuando no tuvieran margen izquierdo, lo serán en hoja
separada que se unirá a los autos.
- Cuadernos de prueba: Para las actuaciones de prueba se formará un cuaderno para
cada parte, donde se diligenciarán las que ellas propongan. Ordenada la agregación de la
prueba producida cuando no existan diligencias pendientes, los cuadernos se agregan al
cuerpo principal, en primer término el del actor y luego el del demandado.
- Actas: La letra en las actas de las declaraciones y demás actos del procedimiento
deberá ser clara; en las actas de las distintas audiencias se expresará siempre la fecha de

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su celebración, y en sus referencias a interrogatorios, pliegos de posiciones y
documentos, se hará constar la foja en que corren agregados.
El acta es el documento escrito que emana de autoridad pública -juez o
escribano- en el que se relacionan las deliberaciones y resoluciones tomadas en reunión,
asamblea, etc. Es un instrumento que se refiere circunstanciadamente a un hecho o acto
jurídico, relatando la forma de su acontecimiento, del estado de las cosas o las
manifestaciones de voluntad de las personas que participan en él.

COMPARECENCIA, REPRESENTACIÓN, PATROCINIO, DOMICILIO,


ETC.:
- Comparecencia:
Se encuentra previsto en el artículo 30 del Código Procesal Civil y Comercial
provincial, toda persona puede comparecer por si o por apoderado o por medio de sus
representantes legales, con o sin la dirección de letrado, salvo lo dispuesto en la ley
Orgánica 10160 del Poder Judicial.
Hay 4 cargas:
1. Comparecer: Identificación personal (decir quién soy). Para el actor: antes de realizar
la demanda. Para el demandado: si no comparece se lo declara rebelde.
2. Denunciar el domicilio real: dónde vive habitualmente. El que habita con ánimo de
que sea el domicilio (“En su primera presentación, las partes deberán denunciar su
domicilio real…). Debe existir de antemano y subsistir, ya que cuando deja de existir
deja de producir efectos. No tiene limitación en cuanto a la ubicación geográfica, pero
no puede denunciarse domicilio real en un lugar público.
3. Constituir domicilio legal: Se crea a los fines de este juicio en particular, y tiene que
estar ubicado dentro de la jurisdicción del tribunal. (“Todo el que comparezca ante la
autoridad judicial deberá constituir en su primer escrito su domicilio legal dentro del
radio urbano de la ciudad o pueblo que sea asiento del tribunal o juzgado…”)
Si no se denuncia el domicilio real, no llegan las notificaciones que allí debían
efectuarse y se harán válidas únicamente en el domicilio legal. Cuando no se constituye
éste, la ley presume que se lo ha constituido en el domicilio del juzgado y entonces se lo
tiene por notificado en secretaría (se aplica el régimen de la notificación automática).
4. Designar defensa técnica: todo el que vaya a juicio tiene que hacerlo con asistencia
legal.

- Representación. Patrocinio:
Todo litigante tiene el derecho de comparecer personalmente ante cualquier juez
para la defensa de sus derechos.
Pero en algunos casos, es la parte misma quien delega esa intervención en un
tercero que actúa en nombre suyo, es esta la representación convencional.
En otros casos, tratándose de incapaces de hecho, la ley impone la intervención
de la persona que integra su capacidad, esta es la representación legal.
La representación es el acto jurídico procesal en nombre de otro, de manera tal
que los efectos positivos y negativos repercuten no en quien los realiza, sino en quien es
representado. Puede ser: general (para actuar en todos los procesos) o especial (para
determinados procesos).
En el primer escrito se deberá decir en qué carácter se comparece. En casos
urgentes se podrá comparecer al proceso ofreciendo comprobar la personería dentro del
plazo que el juez determine y que no podrá ser superior de 30 días.

LA REPRESENTACIÓN PROCESAL

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La capacidad de la parte, puede ser jurídica (para ser parte), procesal (para actuar
personalmente y por sí misma en el proceso) y postulatoria (para instar directamente
ante la autoridad).
Toda persona (gente o ente) por el solo hecho de serlo tiene capacidad jurídica para ser
parte procesal. Empero, es obvio que todas las personas jurídicas no pueden actuar de
hecho por sí mismas: al igual que ciertas personas físicas, carecen de capacidad civil
para obligarse personalmente (menores impúberes, por ejemplo).
Para obviar en el proceso esta antinomia que existe entre ambas capacidades -y al igual
que lo que ocurre en el derecho en general todos los ordenamientos legales aseguran el
derecho de defensa de tales personas (que son jurídicamente capaces para ser partes
aunque procesalmente incapaces para actuar por si mismas) mediante otra figura que
corresponde explicar ahora: la representación.
toda persona tiene plena libertad para apoderar a un tercero a fin de que lo represente en
ciertos actos por simple aplicación del principio de libertad inherente a ella.
Por tanto, cabe entender aquí por representación la actuación que cumple en el proceso
un tercero ajeno al litigio sosteniendo la defensa del derecho o del interés de la parte
procesal que no puede o no quiere actuar por sí misma.
Surge de ello que la representación admite ser clasificada en legal o necesaria y
convencional o voluntaria.

Representación legal:
Las personas que no puedan actuar por sí mismos en el proceso (es decir,
quienes carecen de capacidad procesal), lo deben hacer por intermedio de su
representante legal.
Son representantes de los incapaces (art. 57 CC):
- De las personas por nacer: sus padres, y a falta de éstos, los curadores que se les
nombre;
- De los menores no emancipados: sus padres o tutores;
- De los dementes o sordomudos: los curadores que se les nombre.
Además de los representantes necesarios, los incapaces son promiscuamente
representados por el Ministerio de Menores, que será parte legítima y esencial en todo
asunto judicial o extrajudicial, en que los incapaces demandan o sean demandados, en
que se trate de las personas o bienes de ellos. Su función no es siempre la misma:
cuando los incapaces se encuentra debidamente representados por su representante
legal, el Ministerio va a cumplir una función de vigilancia y asesoramiento; en otros
supuestos actúa judicialmente en lugar de los representantes legales, por ej. cuando
peticiona la remoción del tutor por mala administración.
·
Representación convencional:
Las personas que gozan de capacidad procesal pueden intervenir personalmente
en el proceso, pero también pueden hacerlo por intermedio de un representante; en este
caso, esa representación es convencional, porque nace de un contrato de mandato y no
de la ley.
La ley 10.996 establece que la representación en juicio ante los tribunales de
cualquier fuero (en la capital Federal o en la justicia federal de las provincias) podrá ser
ejercido por:
1) Quienes deben inscribirse en la matrícula de procuradores:
a- Los abogados con título expedito por la universidad nacional;
b- Los procuradores;
c- Los escribanos que no ejerzan la profesión de tales.

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2) Quienes se hayan eximidos del requisito de la inscripción:
a- Los que ejerzan una representación legal (los padres respecto de sus hijos);
b- Las personas de familia dentro del segundo grado de consanguinidad y primero de
afinidad;
c- Los mandatarios generales con facultades de administrar, respecto de los actos de
administración;
d- Quienes han de representar a las oficinas públicas de la Nación, de las provincias y
de las municipalidades, cuando obren exclusivamente en ejercicio de esa representación.
Presentado el poder y admitida su personería el apoderado asume las
responsabilidades que las leyes le, sus actos obligan al poderdante o mandante como si
él personalmente los practicare. Goza de las mismas facultades y cargas, y tiene los
mismos deberes procesales que su representado. Además de las obligaciones contenidas
en el CC, las leyes procesales disponen responsabilidades y deberes: · los apoderados
están obligados a seguir el juicios mientras no haya cesado legalmente en su cargo; · el
mandatario deberá abonar a se poderdante las costas causadas por su exclusiva culpa o
negligencia; · interponer los recursos legales contra toda sentencia definitiva adversa a
su parte; · asistir por lo menos en los días designados para las notificaciones en la
oficina a los juzgados o tribunales donde tengan pleitos; · presentar los escritos, con
firma del letrado en los casos que corresponda; · concurrir puntualmente a las
audiencias que se celebren en los juicios que interviene.
Actúa por poder, que puede ser:
- general: el representante se puede presentar en cualquier tipo de proceso. Se
otorga mediante escritura pública.
- Especial: para un tipo determinado de juicio. En la provincia de Santa Fe, se
puede otorgar por medio de la “carta poder” (se certifica en presencia y firma del
juzgador)
La especialidad o generalidad del mandato no tiene nada que ver en cuanto a
otorgar amplitud o restricción de facultades.
El poder conferido para un pleito determinado, cualquiera sean sus términos,
comprende la facultad de interponer los recursos legales y seguir todas las instancias del
pleito.

Caso en que se puede asumir la representación sin poder: Art. 43: Podrá asumirse la
representación de parientes ausentes del país, dentro del 4º de consanguinidad y 2º de
afinidad, sin necesidad de acompañar poder, prestando caución de que los actos serán
ratificados. Si no lo fuere dentro de los 3 meses, quedará anulado lo actuado por el
gestor y éste pagará todas las costas causadas.

Termina el mandato judicial por:


. Revocación expresa del mandato en el expediente;
. Renuncia;
. Haber cesado la personalidad con que litigaba el poderdante (cuando el pupilo llega a
la mayoría de edad cesa la personería del tutor);
. Haber concluido la causa para la cual se otorgó el poder;
. Muerte o incapacidad del poderdante: el apoderado continuará ejerciendo su personería
hasta que los herederos o representantes legales tomen la intervención que les
corresponde en el proceso;
. Muerte o inhabilidad del apoderado.

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El cese de la representación significa que finaliza la personería del mandatario,
pero esa extinción no se produce mientras no se exteriorice y justifique la terminación
del mandato en el expediente.

2) Asistencia Técnica:
La asistencia técnica puede ser mediante representación convencional
(anteriormente explicado) o por patrocinio letrado.
El cliente y el profesional están vinculados por la confianza, pero hay ocasiones
en que no se le tiene mucha confianza al abogado y se lo quiere controlar más, entonces
actúa ‘Por Derecho Propio con Patrocinio Letrado’. El cliente le otorga un mandato y
lleva el control de todas las actuaciones judiciales, que tienen que ir firmadas por el
cliente y por su patrocinante
Algunos consideran que la responsabilidad del letrado es menor; pero la
responsabilidad profesional es la misma que la del representante convencional.

3) Por derecho propio en causa propia.

Según el art. 31: En los juicios universales y en los contenciosos ante los jueces
letrados es obligatorio para los litigantes hacerse representar por apoderado inscripto en
la matrícula de procuradores, salvo:
a. cuando se actúe con firma de letrado;
b. para solicitar medidas precautorias o urgentes;
c. cuando los abogados o procuradores actúen en cause propia;
d. para contestar intimaciones o requerimientos de carácter personal;
e. para la recepción de ordenes de pago;
f. para solicitar declaratoria de pobreza.

El Abogado:
Las actitudes que deben asumir los contradictores en un proceso son de un
tecnicismo tal que, si no lo hicieran con el asesoramiento de un experto, sus eventuales
derechos ser verían, desde un principio, frustrados.
Por eso que, para salvaguardar el “debido proceso” y la “garantía de defensa en
juicio” el Código Procesal de la Nación impone a los contradictores el “patrocinio
obligatorio”. Así no se atenderá ninguna demanda, excepción, contestación o cualquier
escrito en el que se sustente o controvierta un derecho si no está firmado por un
abogado. Tal exigencia, que condiciona la legitimidad para actuar, se extiende a los
actos procesales realizados oralmente (durante las audiencias celebradas ante órganos
jurisdiccionales).
Puede actuar en el proceso como: patrocinante letrado, apoderado, gestor,
defensor.
· Patrocinante: La función que cumple recibe el nombre de patrocinio letrado.
Para poder actuar como letrado patrocinante es menester no sólo tener el título
de abogado sino también encontrarse inscripto en la matrícula que, a tal fin, lleven los
colegios públicos de abogados.
El vínculo que une al letrado patrocinante con la parte es contractual. Al derecho
a percibir una compensación monetaria denominada “honorarios”, le corresponde la
responsabilidad por los daños y perjuicios que haya causado por el incumplimiento del
compromiso asumido.
· Apoderado: En el proceso las partes pueden actuar por sí o, por razones de necesidad o
comodidad, hacerse representar por un tercero.

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La representación procesal debe ser invocada cada vez que se actúe, y acreditada
con el testimonio del mandato o designación o el acta judicial pertinente en la primera
presentación.
· Gestor: Puede ocurrir que una parte que deba realizar urgentemente algún acto
procesal se vea impedida de hacerlo personalmente y no haya otorgado con anterioridad
mandato a un tercero. Para tales circunstancias se ha previsto la figura del “gestor
procesal”. La validez de todo lo actuado se encuentra condicionada a que en un plazo
determinado a partir de su primera presentación, se acompañe el poder de la parte a
quien pretendió representar o ésta personalmente ratifique lo actuado.
· Defensor: En el proceso penal, además del patrocinante y del apoderado, existe el
abogado defensor. Este carácter puede ocuparlo un abogado particular o un miembro del
Ministerio Público, cuando el procesado no quiere o no puede nombrar a un abogado
particular.

Los abogados y los procuradores auxilian a las partes:


- los abogados son personas que cuentan con el respectivo título habilitante y asisten
jurídicamente a las partes durante el transcurso del proceso. Su actividad dentro del
proceso se llama patrocinio;
- los procuradores lo que hacen es representar a las partes ante los tribunales.
El procurador actúa en lugar de la parte a quien representa; el abogado
desempeña su función junto a aquella o a su representante prestándole auxilio técnico-
jurídico.
El abogado patrocina a su cliente, sin perjuicio de que pueda ejercer al mismo
tiempo su representación, pues no existe incompatibilidad entre ambas funciones.
El actuar con patrocinio letrado busca proteger la seguridad jurídica, ya que la
persona que tiene el derecho puede llegar a perderlo por actuar mal. El letrado conoce el
derecho. Se prueba que el abogado asesora con su firma en el expediente.

· Capacidad para ser parte: es la aptitud para ser titular de derechos y obligaciones
procesales. Toda persona goza de esta capacidad.
· Capacidad procesal: no siempre el que puede ser parte en un proceso, está habilitado
para actuar por sí mismo; para ello requiere además capacidad procesal, es decir, aptitud
para realizar con eficacia actos procesales de parte.

DOMICILIO
Es el lugar que la ley fija como asiento o sede de la persona para la producción
de efectos jurídicos.
A los efectos del cumplimiento de determinados actos procesales, uno de los
elementos importantes es el domicilio. Al comparecer a juicio nace la carga de
constituir domicilio dentro del radio del juzgado, con la finalidad de poder notificarse
las diligencias necesarias para el desarrollo del pleito. Esta especie de domicilio se
llama domicilio procesal o “constituido”. Pero existen actos que la ley ordena notificar
en el domicilio real (ej. la audiencia para absolver posiciones). Y si la parte no cumple
con la carga de constituir domicilio, la ley impone un régimen especial en materia de
notificaciones: se sustituye la notificación por cédula por el de notificación por
ministerio de la ley (en forma automática, los martes y viernes). Aun así, a fin de
garantizar la defensa en juicio, determinados actos (como la absolución de posiciones en
ciertas circunstancias, la declaración de rebeldía y la sentencia) deben notificarse
personalmente o por cédula en el domicilio real.

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Dada la existencia de 2 tipos de domicilio, se prescribe que, como regla general,
las notificaciones deberán ser practicadas en el procesal o constituido y, como
excepción, en el real (cuando la ley así lo dispone).
Los domicilios demandados y constituidos en el expediente subsisten durante la
tramitación del juicio hasta tanto no se denuncien o constituyan otros.

5- Expedientes:
Es un conjunto de antecedentes y documentos relativos a un asunto. Es un
conjunto de escritos, documentos, constancias y demás papeles pertenecientes a un
juicio, debidamente ordenado, foliado y cosido.
Los actos de procedimiento quedan documentados por la agregación sucesiva de
escritos de las partes, de las actas labradas por los secretarios, en su caso, de las
resoluciones de los jueces, los que forman un solo cuerpo de foliatura seguida, que toma
el nombre de ‘expediente’. Al secretario corresponde su formación y custodia, así como
de los documentos que se agreguen.
Los autos originales podrán ser examinados por las partes, pero no por personas
extrañas, salvo que justifiquen tener algún interés legítimo. Tampoco podrán ser
sacados de la oficina sino entregados por el secretario bajo recibo, al abogado o al
procurador, únicamente en los siguientes casos:
1. para alegar de bien probado, informar, expresar y contestar agravios;
2. cuando se trate de operaciones de contabilidad y se invoque la necesidad de producir
a este respecto alguna actuación;
3. cuando se trate de practicar cuentas de división y adjudicación de bienes;
4. en los juicios de mensura, división de condominio y confusión de límite;
5. en los demás casos que las leyes determinen.
En caso de que un expediente se perdiera, el juez ordenará rehacerlo.

6- Notificaciones:
Las notificaciones constituyen actos procesales de transmisión. El fundamento
de su existencia reside en el ‘derecho de defensa’ de las partes. Como todo acto procesal
se distinguen los siguientes elementos:
a) Sujetos, que son el auxiliar encargado del acto y la persona a quien se va a notificar.
b) Objeto o transmisión del acto procesal cuyo conocimiento interesa.
c) Forma, que es la manera de realizar cada modo de notificación establecido por la ley.
Es un principio básico que el conocimiento efectivo suple cualquier formalidad.

La notificación es el acto por el cual se pone en conocimiento de las partes o de


los terceros una resolución judicial. Es hacer saber las resoluciones judiciales a través de
los modos legales a un litigante o parte interesada en un litigio.
Couture señala que la notificación es una constancia escrita puesta en autos de
haberse hecho saber a los litigantes una resolución judicial u otro acto de procedimiento.
La notificación tiene, en el procedimiento escrito, una importancia
extraordinaria. En el proceso oral, fuera de la citación para la audiencia, no puede
hablarse propiamente de la notificación como institución autónoma. En el sistema
escrito, toda providencia debe ser notificada.
Dentro de nuestro régimen procesal, la notificación es un acto a cargo del
tribunal. Como acto jurídico, está revestido de formalidades legales y su documentación
constituye un instrumento público, porque es ejecutado por un funcionario público en
ejercicio de sus facultades.
Dos son los sistemas fundamentales en materia de notificaciones:

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1. Aquel en que el tribunal se traslada al domicilio de los litigantes: la notificación se
practica en el domicilio del interesado por medio de una cédula que luego se agrega al
expediente; o
2. Aquel donde los litigantes son quienes van a la sede del tribunal: se hace
personalmente en la oficina por diligencia en los autos.
El gasto que demande el despacho de las notificaciones forma parte de las costas
del proceso.
Según el artículo 64 de Cód. de la prov. las notificaciones se practicarán a más
tardar al día siguiente de ser dictada la providencia o resolución respectiva, o antes si el
juez o tribunal lo ordenare o estuviere dispuesto para casos especiales.
La notificación automática es la regla, y la ficta la excepción. El art. 61 establece
que: Toda providencia para la que este código no disponga otra cosa quedará notificada
el primer martes o viernes posterior a su fecha o el día siguiente hábil, en caso de no
serlo aquél, si el interesado no concurriese a la secretaría y dejare prueba de su
asistencia firmando el libro que al efecto deberá llevar personalmente el secretario.
Los diversos tipos de notificaciones se pueden clasificar en:
a) Por ministerio de la ley: Es principio general que las resoluciones judiciales queden
notificadas, en todas las instancias, los días martes y viernes, o el día siguiente “de nota”
si alguno de ellos fuere feriado; esto es, el martes o viernes subsiguiente al que
correspondía y fue feriado.
La notificación automática es la regla, y la ficta la excepción.
El art. 61 establece que: Toda providencia para la que este código no disponga
otra cosa quedará notificada el primer martes o viernes posterior a su fecha o el día
siguiente hábil (por ej. que se tiene por presentada la demanda, que se tiene por
contestada, etc.), en caso de no serlo aquél, si el interesado no concurriese a la secretaría
y dejare prueba de su asistencia firmando el libro que al efecto deberá llevar
personalmente el secretario.
Pero no se considerará cumplida la notificación si:
- el expediente no se encontrare en el tribunal;
- si encontrándose el expediente en el tribunal no se exhibiere a quien lo solicita (esta
circunstancia deberá ser asentada en el libro de asistencia fin de impedir los efectos de
la notificación automática).

b) Por cédula: Se ha reservado este tipo de notificación a las resoluciones más


trascendentales. Las cédulas son instrumentos suscriptos por el abogado o por el
secretario del juzgado y deben contener ciertos recaudos: nombre y apellido de la
persona a notificar; su domicilio, con indicación del carácter de éste (real o constituido);
juicio en que se libra; transcripción de la parte pertinente de la resolución que se
notifica; objeto, si no resulta de la notificación transcripta.
Evidentemente, la primera vez será el tribunal quien deba trasladarse al
domicilio de una de las partes, el demandado, porque de otro modo no podría éste tener
conocimiento del juicio que se le ha promovido.
La notificación por cédula constituye una excepción. Según el art. 62: Deben
notificarse por cédula, si el litigante no concurre a hacerlo a la oficina:
1) La citación y emplazamiento a estar a derecho;
2) Todo traslado o vista, citación de remate, apertura a prueba o decreto denegatorio de
la misma, manifiesto en la oficina, suspensión y reanudación de términos o trámites
suspendidos;

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3) Toda providencia posterior al llamamiento de autos y la primera que se dicte después
que el expediente haya vuelto del archivo o haya estado paralizado por más de seis
meses. En estos últimos dos casos la notificación se hará en el domicilio real;
4) La que haga saber el juez que va a entender, a menos que lo sea por designación de
nuevo titular;
5) La declaración de rebeldía, intimaciones, requerimientos, correcciones disciplinarias,
medidas precautorias o sus levantamientos y las citaciones para absolver posiciones o
reconocer firmas;
6) La designación de audiencias;
7) El llamamiento de autos, las sentencias definitivas y autos interlocutorios con fuerza
de tales;
8) Las demás providencias en que así lo disponga este código o el juez lo ordene
expresamente.
Las cédulas se redactarán en doble ejemplar. El empleado notificador entregará
un ejemplar al litigante (o a persona de la casa o a un vecino que se encargue de hacer la
entrega o, en su defecto, debajo de la puerta) y el otro se agregará a los autos.
La cédula pone acento en la seguridad y afecta la celeridad. En los casos de
notificación por cédula, podrá esta reemplazarse a pedido verbal del interesado, por acta
notarial porque permite mayor celeridad y en algunos casos también por telegrama o
carta documento con aviso de entrega.

c) Personal: Las demás providencias que el juzgado dicte durante la tramitación del
proceso deberán notificarse en la secretaría respectiva. La notificación personal obvia la
cédula y se produce cuando la parte o su apoderado se apersonan a la secretaría, dejando
expresa constancia de que tomaron conocimiento del acto, firmando al pie de la
diligencia extendida por el oficial primero.
Las partes quedan así ligadas al procedimiento, y con ello se evitan numerosos
casos de notificación por cédula, sobre todo tratándose de trámites de importancia
secundaria.
En principio ninguna providencia puede ser cumplimentada antes de notificarse
a las partes, pero, por razones circunstanciales, la ley hace algunas excepciones, como
en el caso en que se decrete una medida precautoria (embargo, inhibición, etc.), porque
es de presumir que si aquel a quien afecta tiene conocimiento de ella antes de que se la
ejecute, tratará de eludir su cumplimiento.

d) Por edictos: El edicto es la publicación que se hace poniendo en conocimiento del


interesado una resolución judicial.
Hay casos en que se ignora la identidad misma de la persona a quien debe
notificarse (caso que se presenta comúnmente cuando una persona fallece y sus
herederos son desconocidos) o puede saberse quién es el demandado e ignorarse su
domicilio actual a los efectos del traslado de la demanda, que es el segundo supuesto.
En ambos casos es entonces necesario efectuar publicaciones que se presumen
suficientes para llevar a su conocimiento la providencia que les afecta.
El art. 67 señala que: Las notificaciones por edictos se harán en el Boletín
Oficial. Los edictos serán redactados con los mismos requisitos que las cédulas, en
forma sintética y reemplazando la transcripción de la providencia por una enunciación
abreviada de su parte esencial.

7- Términos:

30
En materia procesal, la eficacia del acto depende de que sea ejecutado en
momento oportuno, y de allí que la ley reglamente el tiempo fijando límites temporales
a la actividad de los sujetos procesales y establezca los días y horas hábiles en que los
actos pueden ser ejecutados.
La inobservancia de principios legales en esta materia puede ocasionar la
pérdida de un derecho y hasta la extinción del proceso mismo, porque la falta de
contestación a la demanda, por ejemplo, dentro del término fijado por la ley, ocasiona la
pérdida del derecho a contestarla en adelante.
No debe deducirse que la ejecución de los actos fuera de término produzca en
todos los casos los mismos efectos, pues depende de la naturaleza del término. Así, la
resolución de un juez dictada en día inhábil es nula, pero la notificación de la demanda
en las mismas condiciones se tiene por válida si el demandado contesta la demanda sin
impugnarla.
Puede definirse el término diciendo que ‘es el espacio de tiempo dentro del cual
debe ejecutarse un acto procesal’.
Los términos tiene como fin la regulación del impulso procesal, con intención de
hacer efectiva la preclusión de las distintas etapas del proceso que permiten su
desarrollo progresivo.
En nuestro derecho, término y plazo tienen un mismo significado, ello conforme
el artículo 70 que dice los términos o plazos procesales son improrrogables y
perentorios. Fenecen con la pérdida del derecho que se ha dejado de usar, sin necesidad
de declaración judicial ni petición alguna.
Los escritos no presentados en las horas de oficina del día que vence el plazo respectivo
podrán ser entregados válidamente en secretaría, con o sin cago de escribano, dentro de
las horas de audiencia del dia hábil inmediato.

El Cód. procesal establece en el art. 71: “Los términos judiciales empezarán a


correr para cada litigante desde su notificación respectiva; si fueran comunes, desde la
última que se practique, no se contará el día en que tuviere lugar la diligencia ni los
inhábiles… Los términos de horas se cuentas desde la siguiente a la de la notificación y
correrán aun durante las inhábiles”. El código civil establece, por su parte, que las
disposiciones del mismo respecto del modo de contar los intervalos del derecho serán
aplicables a todos los plazos señalados por las leyes, por los jueces o por las partes en
los actos jurídicos, siempre que en las leyes o en esos actos no se disponga de otro
modo. Por esa circunstancia se ha declarado que los códigos civil y comercial son
supletorios del de procedimiento en materia de términos.

El artículo 55 establece que: “Las actuaciones y diligencias judiciales, con


excepción del cargo y de las notificaciones efectuadas por Correos y
Telecomunicaciones, se practicarán bajo pena de nulidad, en día y hora hábiles.
Son días hábiles todos los días del año con excepción de sábados y domingos,
feriados nacionales o de la Provincia, asuetos administrativos provinciales o nacionales,
cuya conveniencia para el Poder Judicial resuelva la Corte Suprema de Justicia en cada
caso, los de carnaval y los períodos de suspensión de la actividad tribunalicia.
Son horas hábiles las que median entre las 8 y las 20.
Los jueces y tribunales deberán habilitar los días y horas inhábiles cuando
hubiere riesgo de quedar ilusoria alguna providencia judicial o de frustrarse diligencias
importantes, para acreditar o asegurar los derechos en litigio…”

31
Entonces: La regla es que se computan por días hábiles (lunes a viernes de 8 a
20 hs.). Por excepción, se pueden habilitar días y horas inhábiles, cuando medie causa
justificada.
Los feriados extraordinarios decretados por el Poder Ejecutivo de una provincia
no influyen en los términos en el fuero federal.
El día es el intervalo entero que corre de media noche a media noche, y los
plazos de día se contarán desde la media noche en que termina el día de su fecha.

- Iniciación: El término comienza, para ser exacto, a partir del instante en que terminó
el día en que la notificación se hizo, o sea, a las 24 hs., no se contará el día en que se
practique la diligencia. Más precisamente, comienzan a correr desde el minuto 0 del día
siguiente del de la notificación (si es por hora, desde el minuto 0 de la hora siguiente).
Si se trata de un término común, empieza a correr después de que todos han sido
notificados y a partir de la última notificación.

- Vencimientos: Si el término es de horas, el vencimiento se produce al terminar la


última de las horas fijadas.
Los términos de días comienzan a la media noche del día de la notificación y
también terminan a la media noche del día se su vencimiento. Los fijados en semanas
vencen a la media noche del último período de siete días.
Tratándose de plazos fijados en meses, terminan el día que los respectivos meses
tengan el mismo número de días de su fecha, pero si el mes en que ha de comenzar un
plazo contare de más días que el mes en que ha de terminar, el último día del plazo será
el último día del segundo mes.

- Plazo de gracia: Los escritos no presentados en las horas de oficina del día que vence
el plazo respectivo, podrán ser entregados válidamente en secretaría, con o sin cargo de
escribano, dentro de las horas de audiencia hábil del día hábil inmediato.
Vencido el plazo señalado hay un día de gracia (entonces si se señala un plazo
de 3 días, se dan 4). Antes, a las 23.30 hs. había que ir al escribano y que este lo
certifique (cargo); hoy se dan las 2 primeras horas de oficina del día hábil siguiente. En
Santa Fe es todo el día de oficina.

· Clasificación de los términos:


1) Legales, judiciales y convencionales.
- Llámese legales los términos expresamente establecidos en la ley (por ej. El de 5 días
para interponer el recurso de apelación). Estos términos son fijos y no pueden ser
modificados por las partes ni por el juez.
- Es judicial el término fijado por el juez en ejercicio de facultades que la ley le
confiere. (Por ejemplo: el término ordinario de la prueba es de 40 días, pero aquél puede
fijar un término menor teniendo en cuenta la naturaleza de la causa). Estos se cuentan
por días corridos, salvo que el juez determine que son días hábiles.
- El término es convencional cuando es fijado de común acuerdo por las partes. No sería
admisible si tuviese por objeto ampliar un término que la ley declara perentorio, pero
nada impedirá que las partes fijaran, por ejemplo, un término para la producción de la
prueba.

2) Perentorios y no perentorios. Según el efecto de su vencimiento.


- El término es perentorio cuando por el solo transcurso del tiempo se produce la
caducidad del derecho que ha dejado de usarse. No requiere ninguna actividad ni de las

32
partes ni del juez. El término perentorio es uno de los casos de impulso procesal por
ministerio de la ley y, por consiguiente, uno de los modos de activar el procedimiento.
- El término no es perentorio cuando, no obstante su vencimiento, puede ejecutarse el
acto mientras la parte contraria no pida el decaimiento del derecho, actitud que se
concreta en la expresión no muy exacta, pero ya corriente, de acusación de rebeldía.
La división de los términos en perentorios y no perentorios no tiene fundamento
lógico y atenta contra la marcha regular del proceso. Todos los términos debieran ser
perentorios, porque si se considera que un acto puede ser ejecutado dentro de un número
determinado de días, no hay razón para que se le extienda hasta tanto la parte contraria
manifieste su voluntad de extinguirlo. Si el término es breve, puede fijársele uno mayor,
pero su vencimiento no debe depender de la voluntad de las partes.

3) Prorrogables e improrrogables.
Serán prorrogables los términos que no estén expresamente declarados
perentorios o fatales. Son improrrogables todos los términos señalados en la ley. Por
consiguiente, la regla es la prorrogabilidad, y sólo son improrrogables los término
legales, pudiendo entonces prorrogarse los judiciales y convencionales.
La improrrogabilidad es un concepto distinto de la perentoriedad. Todo término
perentorio es improrrogable, pero no todo término improrrogable es perentorio.
El ‘término de ampliación’ se diferencia de la ‘prórroga’ en que ésta se concede
después de fijado el término y cuando resulta insuficiente, en tanto que el de ampliación
se establece desde el primer momento, aun cuando luego resulte excesivo.

4) Individuales y comunes.
- Es individual el término fijado a una de las partes para que realice indeterminado acto
de procedimiento, por ejemplo: el término que tiene el demandado para contestar la
demanda.
- Llamase común cuando comprende a las dos partes, aunque puedan actuar
independientemente, por ejemplo: el término ordinario de prueba.
El distingo tiene importancia en cuanto al modo de computar los términos.

5) Ordinario y extraordinarios.
- Se llama ordinario el término fijado por la ley para los casos comunes, es decir, sin
consideración a una circunstancia especial: así, el término ordinario de prueba es de
cuarenta días.
- Es extraordinario cuando el término se concede sólo en presencia de determinadas
circunstancias, de acuerdo con las cuales se gradúa su duración. Cuando la prueba, por
ejemplo, haya de producirse fuera del lugar (fuera de la ciudad), el juez señalará el
término extraordinario que considere suficiente atendiendo a la distancia y a la mayor o
menor facilidad de las comunicaciones.

· Suspensión e interrupción de los términos:


La suspensión importa la no iniciación del término, mientras que la interrupción
supone que el término ha comenzado a correr. En el primer caso, aunque hubieran
transcurrido unos días desde el momento de la notificación hasta que se concede el
recurso, no se toman en cuenta para el cómputo del término, mientras que, en el
segundo, los días transcurridos se descuentan al reabrirse el término.

Causas:

33
- Fuerza mayor: Se trata del caso de la imposibilidad física de ejecutar el acto debido en
el término fijado, cuya apreciación queda librada al criterio judicial. Los casos más
comunes son los que se refieren a la dificultad en las comunicaciones, inundación,
incendio, peste, etc.; pero también constituyen casos de fuerza mayor la enfermedad
grave y la prisión de quien debe ejecutar el acto. Puede, según el caso, importar la
suspensión o solamente la interrupción del término.
- Conformidad de partes: No hay razón para denegar el declarar suspendido o
interrumpido el término cuando las partes lo solicitan, siempre que no se vulnere un
precepto de orden público.
- Fallecimiento o incapacidad: Cualquiera de estas dos circunstancias produce la
interrupción de los términos hasta tanto tomen intervención los herederos del causante
dentro del término que se les fije o se provea del curador al insano.
- Elevación de los autos al superior: Cuando como consecuencia de haberse concedido
un recurso de apelación, se elevan los autos a la Cámara respectiva, los términos quedan
interrumpidos en tanto se resuelve el recurso y vuelvan los autos al inferior. La
interrupción se produce desde que se elevan los autos.
- Falta de entrega de las copias en los traslados: De toda petición o escrito que deba
darse traslado deberá el que los presente acompañar tantas copias cuantas personas sean
con quienes litigue. La omisión de la entrega de las copias autoriza a pedir la suspensión
del término para evacuar el traslado, pero la petición que se formula en ese sentido debe
hacerse antes que quede consentido el auto que ordenó su traslado.

Reapertura del término:


Cuando la suspensión ha sido por tiempo determinado, la reapertura del término
se opera por el vencimiento del plazo fijado, pero si ha sido motivada por la concesión
de un recurso, sólo tiene lugar después que se ha notificado a las partes personalmente o
por cédula el auto que hace saber su devolución.

8- Emplazamientos:
Facultad de convocar (invitar, pero no obligar).
Citación que el juez hace a la parte para que comparezca a estar a derecho,
cumplimentando uno de los principios fundamentales, el debido proceso
Conforme lo establece el artículo 72 que dice “…En los juicios contenciosos (con
excepción de la ejecución hipotecaria y prenda con registro), entablada la demanda se
emplaza al demandado para que comparezca a estar a derecho dentro del término de:
 3 días: si tuviera su domicilio en el lugar del juicio;
 10 días: si tuviera su domicilio dentro de la provincia;
 20 días: si tuviera su domicilio dentro de la república;
 de 40 a 80 días: si tuviera su domicilio en el extranjero.
Con apercibimiento de ser declarado rebelde y seguirse el juicio en la forma que
corresponde.
Si el domicilio fuere desconocido (o la persona incierta) el emplazamiento se
efectuará por edictos, que serán publicados 3 veces, y el término vencerá a los 5 días de
la última publicación (en el BO y/o diario de mayor tirada).

Traslados y vistas. Audiencia. Exhortos y oficios:


Son medios de comunicación. Son todas aquellas formas en que se comunican
las partes entre sí y con el juez.
- Traslados (art.87 a 89): En el proceso no existe comunicación directa entre las partes,
salvo los casos en que fuesen convocadas a juicio verbal, por lo que el juez pone en

34
conocimiento de una de ellas la petición formulada por escrito por la otra mediante la
providencia de traslado. En algunos casos el traslado está previsto por la ley, como en la
demanda. Pero en otros es facultativo del juez.
Se genera la carga de responderlo (que haga saber contra él las defensas que crea
convenientes).
De toda petición o escrito de que deba darse traslado, deberá el que los presente
acompañar con tantas copias cuantas sean las personas con quienes litigue. Deben ser
iguales al original.
Los traslados que no tengan un término establecido por la ley o para los que el
juez no fije uno distinto se considerarán corridos por 3 días.

- Vistas (art. 87 a 89): Otro medio de comunicación entre las partes es la vista.
Como el traslado, tiene por objeto poner en conocimiento de los interesados una
petición o diligencia respecto de cuya procedencia o resultado les corresponde
pronunciarse. Cuándo el juez puede ordenar una vista, en lugar de correr traslado, es
cuestión no decidida por la doctrina ni la jurisprudencia, pero, en general, puede decirse
que, salvo los casos previstos por la ley en que el traslado es obligatorio, la vista
procede siempre que se requiera la conformidad o disconformidad de las partes o
funcionarios que intervienen en proceso para la ejecución o aprobación de una acto de
procedimiento. Actualmente no existe diferencia entre ellos, la única es que las vistas no
generan la carga de contestarlas, sólo notifican (quien la recibe se considera que se ha
enterado).

- Audiencias (art. 90 a 92): Es éste otro medio de comunicación, pero no ya entre las
partes, sino entre éstas y el juez (y eventualmente un tercero, como: peritos, testigos,
etc.).
Las audiencias son siempre públicas, a no ser que causas especiales exijan lo contrario.
La audiencia es el acto por el cual el juez escucha a las partes sobre sus peticiones. En
ellas, podrá cada interesado hacer uso de la palabra una sola vez, a menos que sea para
rectificar sus propios conceptos o el juez crea necesario acordarla nuevamente. Es lícito
dejar un resumen o apunte sobre lo alegado; el secretario levantará un acta donde
relatará en forma abreviada lo ocurrido en la audiencia y lo expresado por las partes.
Serán notificadas con anticipación no menor de 3 días, a no ser que por razones
especiales exijan un término distinto.

- Oficios (art. 93 a 104): Cuando los jueces pertenecen a una misma circunscripción
judicial, aunque sean de distinta categoría, se comunican entre ellos mediante oficios.
Son librados por un juez a otro para encomendarle alguna diligencia o requerirle
informes sobre el estado de un expediente o la remisión de éste. También por medio de
oficios se piden informes a entidades públicas y privadas, o la remisión de actuaciones
administrativas.

- Exhortos (art. 93 a 104): Por el contrario, tratándose de jueces que corresponden a


distintas circunscripciones judiciales (jueces de diferentes provincias), las
comunicaciones se hacen por exhortos o cartas rogatorias, dirigidas a jueces de la
misma categoría, a fin de que practique alguna diligencia que deba realizarse en la
jurisdicción de éste. Así colaboran los jueces de distintas jurisdicciones para una
correcta administración de justicia; esta colaboración se basa en un principio de
reciprocidad para casos análogos.

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-por ejemplo un juez de nuestro país (nacional o provincial) a un juez extranjero, o de
un juez nacional a un juez provincial. De esto se desprende que el exhorto puede ser
interprovincial o internacional
Art. 93: “Cuando una diligencia hubiere de ejecutarse fuera del lugar del juicio podrá
someterse a la autoridad judicial que corresponda por medio de oficio o exhorto; sin
perjuicio de la facultad de trasladarse el juez o tribunal a cualquier lugar de su
jurisdicción y practicarla por sí mismo.
La comisión de diligencias fuera de la Provincia será siempre hecha a jueces de
igual grado.”
Se dejará copia fiel en el expediente de cualquier oficio o exhorto que se libre.
- Mandamientos: orden que el juez emite, en ejercicio de sus facultades) para asegurar
el cumplimiento de una decisión o la eficacia de un acto de proceso; ej. allanamiento.

Providencias y resoluciones:
Las resoluciones judiciales son actos procesales emanados del órgano
jurisdiccional.
El objeto de las resoluciones procesales puede consistir en instruir el proceso, decidir
las cuestiones que se presentan en su desarrollo, resolver lo que constituye el objeto
principal de la causa y ejecutar coactivamente lo decidido.
Todas las providencias que se dictan durante el desarrollo del proceso tienen
como objetivo preparar o facilitar la decisión definitiva.

· Providencias: resoluciones judiciales no fundadas expresamente que deciden sobre


cuestiones de trámite y situaciones secundarias o accidentales.
Las ‘providencias simples’ tienen por finalidad el desarrollo formal del proceso,
es decir que, en general, son actos de instrucción. Proceden respecto de los pedidos que
no requieren sustanciación (vista o traslado a la otra parte) o son dadas de oficio por el
juez en cumplimiento de deberes o facultades que les son propias. No se exigen otras
formalidades que su expresión por escrito, indicación de fecha y lugar y firma del juez o
secretario en su caso.
Existen resoluciones dictadas sin sustanciación pero que resuelven algo más que
actos de mera instrucción, tales como: el rechazo in limine de la demanda o de
incidentes, las que deciden sobre el pedido de medidas cautelares, las que declaran de
oficio la caducidad de la instancia, etc. En estos casos, y a pesar de no ser sentencias
interlocutorias dado que no hay “interlocutores”, por la importancia de la decisión
deben tener la forma de éstas.
Conforme el artículo 105 del Código Procesal Provincial las providencias de
mero trámite serán dictadas en el día que el pedido fuere puesto al despacho:
Autos interlocutorios o resoluciones de incidentes: plazo de 5 días.
Sentencias definitivas: término que se designe para clase de juicio.
Si se hubieran ordenado medidas para mejor proveer, el término se considerará
suspendido desde la fecha del decreto que las disponga hasta que los autos fueren
puestos nuevamente a despacho y, ésta no podrá exceder de 30 días.
Las providencias y resoluciones judiciales de que no se hubieren interpuesto recurso
dentro del término legal quedarán firmes y ejecutoriadas, sin necesidad de declaración
alguna.

· Sentencias interlocutorias: Por medio de ellas, el órgano decide las cuestiones


planteadas por uno de los litigantes y que han sido previamente sustanciadas (es decir,
se ha corrido traslado a la contraria).

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Además de los requisitos exigidos para las providencias simples, deberán contener los
fundamentos de la decisión, la cual tiene que estar expresada en forma positiva y
precisa, y un pronunciamiento sobre costas. Se dictan dentro de los 5 días en que el
pedido fuere puesto al despacho.
· Sentencias definitivas: Son las resoluciones judiciales que ponen fin al proceso. Es el
modo más elevado de la jurisdicción, por medio del cual el juzgador decide sobre la
cuestión principal objeto del pelito.

PROCESO EN REBELDIA
Cualquiera de las 2 partes pueden ser declaradas ‘rebelde’. Consiste en una
solución para que el trámite pueda continuar pese a la inasistencia del citado. Se
perfecciona con:
 la incomparencia;
 el decreto del juez por el cual declara rebelde a la parte;
 la notificación de ese decreto que lo declara rebelde.

Es una ficción que consiste en tenerlo al rebelde por notificado de todos los decretos
dictados, desde el mismo día que se dicten en secretaría. No se le notifica por cédula
nada, sino hasta la sentencia.
La declaración de rebeldía no altera el curso regular del juicio y la sentencia será
dictada siempre según el mérito de autos, sea cual fuere la parte que hubiere incurrido
en rebeldía.

- Trámite:
No habiendo comparecido el demandado citado y emplazado a estar a derecho o
cualquiera de los litigantes que, estando representado por medio de apoderado, fuere
citado nuevamente por renuncia, muerte o inhabilidad de éste, -en cualquier clase de
proceso contencioso (salvo: ejecución hipotecaria, ejecución de prenda con registro,
juicio sumarísimo o juicio de apremio iniciado como incidente)- y vencido el término
para el comparendo, sin ningún otro trámite que el informe verbal del secretario, el juez
declara rebelde a quien no cumplió la carga de comparecer.
Esto se notifica por cédula si el rebelde tiene domicilio conocido o por edictos si
no tiene domicilio conocido, que se publican por 2 días en el Boletín Oficial y en un
diario de la localidad.
Efectuada la notificación, y sin necesidad de que transcurran los 3 días
imprescindibles para que se consienta la providencia, en razón de que ella carece de
efecto preclusivo, pues puede ser revocada en cualquier estado de proceso con la única
condición de que comparezca el rebelde, el proceso debe seguir con las siguientes
alternativas:
1) Si el rebelde tiene domicilio conocido:
El trámite continúa sin su representación, sufriendo los siguientes efectos:
a. se lo tiene por notificado de cualquier resolución (salvo la sentencia definitiva) desde
la fecha de su pronunciamiento;
b. se le corren los traslados desde la misma fecha de la providencia que los ordena;
c. puede decretarse cualquier medida cautelar en su contra, sin necesidad de prestar
contracautela.
Cuando se ordena correr traslado de la demanda (en los procesos de
conocimiento) o citar de remate (en los procesos ejecutivos), continúa el trámite de cada
proceso hasta la sentencia, que debe ser notificada por cédula en el domicilio conocido
del rebelde.

37
2) Si el rebelde no tiene domicilio conocido:
Se le nombrará defensor. Es decir que aquí no se sigue el proceso sin su
representación como en el caso anterior, pero sí puede decretarse cualquier medida
cautelar en su contra, sin necesidad de prestar contracautela.
En este caso, se fija audiencia para efectuar sorteo de entre los abogados
inscriptos en la lista de nombramiento de oficio, a fin de que actúe como defensor del
rebelde. Éste tiene la obligación de hacer llegar a su conocimiento la noticia del pleito y
de recurrir la sentencia adversa a su interés. Tiene derecho a cobrar honorarios.
La providencia que fija fecha para la audiencia queda notificada en la oficina al
rebelde, desde su fecha, pero debe ser comunicada por cédula a la contraparte.
Puede suceder que la audiencia se realice; o bien que no se realice, y en tal caso
debe fijarse fecha para una nueva audiencia (a pedido de parte), a los mismos fines que
la anterior, y así hasta que se realice.
En la audiencia se efectúa el sorteo y se designa, mediante resolución judicial, al
defensor del rebelde, notificándole por cédula del nombramiento efectuado. Puede
ocurrir que:
a- El defensor acepte el cargo: en acta labrada ante el actuario. En tal caso, se ordena
correr traslado de la demanda (en los procesos de conocimiento, ya que hay que tener
presente que no existe representación del rebelde en los procesos ejecutivos). Entonces,
continúa así en trámite de cada clase de proceso hasta la sentencia, que debe ser
notificada por cédula al defensor y por edictos al rebelde.
b- El defensor no acepte el cargo: por razón fundada y admitida por el juez. Entonces se
designa audiencia para un nuevo sorteo.

Declarada la rebeldía, podrá decretarse sin fianza el embargo contra el


demandado para asegurar el resultado de juicio, y contra el actor para asegurar el pago
de las costas.
La sentencia dictada en rebeldía no podrá ejecutarse hasta 6 meses después, a
menos que se preste fianza de devolver lo que ella mande a entregar en caso de
rescisión. Pero, el que hubiere obtenido sentencia contra el rebelde podrá hacer inscribir
como litigioso en el Registro General el derecho que la sentencia hubiere declarado a su
favor y que fuese susceptible de inscripción.

En cualquier estado de la causa, antes de la sentencia, el rebelde puede


comparecer (en cualquiera de los 2 casos) y tomar ‘parte’ (será admitido como parte) en
el proceso en el ‘estado en que se encuentra’ (no puede retrotraerse ningún trámite ni
plazo vencido o por vencer, por el principio de preclusión), entendiéndose con él la
‘tramitación ulterior’. Cesa de esta manera el procedimiento en rebeldía.
En tal caso, si se designó defensor de oficio, cesa su función y puede percibir sus
honorarios, que regulará el juez.
Puede interponer recurso de rescisión (hasta 6 meses después de la sentencia)
contra el procedimiento o contra la sentencia, en el supuesto de comparecer después de
que ésta fuera pronunciada por el juez.

LA CITACIÓN Y EMPLAZAMIENTO A ESTAR A DERECHO


Presentada y cargada la demanda el juez debe dictar una resolución (habitualmente
denominada simple providencia de trámite) por la cual decide admitirla (recordar que el
vocablo significa precisamente dar curso procedimental a la pretensión) o rechazarla
liminarmente: 1) por razones de forma, que siempre podrán ser corregidas por el actor;

38
2) por tratarse de una pretensión respecto de la cual no se permite accionar; 3) por haber
caducado la posibilidad de accionar; 4) por tratarse de un caso no justiciable.
La admisión de la demanda implica, por lo menos, que el juez:
1) acepta su competencia; 2) acepta liminar y provisionalmente la legitimación procesal
sustancial del actor; 3) acepta el domicilio procesal constituido por éste para que se
practiquen allí las notificaciones del caso; 4) establece cuál será el trámite (ordinario,
sumario, etcétera) que imprimirá al procedimiento; 5) ordena citar yemplazar al
demandado para que comparezca a estar a derecho.
Citar es llamar o convocar a alguien para que haga algo.
Emplazar es dar o fijar un plazo para que alguien (en el caso, el demandado) haga algo
(en el caso, comparecer).
Comparecer es presentarse ante el juez citante asumiendo el carácter de demandado.

Por supuesto, esta citación constituye una carga procesal que, como tal, tiene los tres
elementos de toda carga: una orden (comparezca el demandado al pleito), un plazo (el
fijado precisamente en el emplazamiento y que será mayor o menor según la distancia
que exista desde el domicilio real del demandado hasta el de la sede del juzgado) y un
apercibimiento (aviso dado al recipiendario de la carga acerca de lo que le sucederá si
no cumple la orden dentro del plazo otorgado al efecto).
En el caso, tal apercibimiento consiste en la declaración de rebeldía, que se seguirá
conforme lo establece el artículo 76: - contra el demandado que no hubiere
comparecido a estar a derecho; -contra cualquiera de los litigantes que estando
representados por medio

CONCEPTO: se utiliza el vocablo en su sentido de no acatar la orden de comparecer,


por tanto es “ la inactividad como respuesta al requerimiento del juez”.
Si el demandado comparece (es la actividad requerida), el trámite continúa su curso
regular con el siguiente paso procedimental: conferirle traslado de la demanda.
Si el demandado no comparece (es la inactividad como respuesta al requerimiento), el
juez aplica sin más el apercibimiento que decretó inicialmente: declara que el
demandado es rebelde y ordena efectuar la notificación aL demandado respecto de tal
declaración.

EL DESARROLLO DEL PROCESO


A partir de allí el trámite sigue en rebeldía, sufriendo el demandado algunos efectos
contrarios a su interés y que habitualmente consisten en:
1) la continuación normal de la serie procedimental sin la presencia ni representación
del rebelde, a menos que carezca de domicilio conocido. En este solo caso, el juez
provee a su defensa designando a un defensor ad hoc para que niegue todas las
cuestiones fácticas expuestas en la demanda a fin de posibilitar la confirmación
procesal;
2) se considera que el rebelde queda notificado fictamente en la Secretaría de todas las
resoluciones dictadas por el juez, en el mismo día en que ellas han sido emitidas;
3) los plazos de todas las cargas generadas de ahí en más por el juez le correrán siempre
desde el mismo día de la notificación respectiva (y no desde el día siguiente, cual es la
norma habitual en el proceso);
4) el juez puede ordenar medidas cautelares en su contra sin necesidad de que el actor
preste contracautela.

EL TRASLADO DE LA DEMANDA

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Notificada su rebeldía, el juez ordena correr traslado de la demanda al demandado.

REBELDE COMPARECIDO
Artículo 80: Si el rebelde comparece, será admitido como parte, sea cual fuere el estado
del juicio y, cesando el procedimiento en rebeldía, reentenderá con él la tramitación
ulterior. El embargo trabado continuará, no obstante, a menos que preste fianza
equivalente.

EL LLAMAMIENTO DE AUTOS PARA DICTAR SENTENCIA


Agregados los alegatos presentados por las partes o después de declarar que ha decaído
el derecho dejado de usar por quien omitió alegar en el plazo acordado al efecto, el juez
pone fin a la serie procedimental mediante una fórmula cuasi sacramental de añejo uso:
llama autos para sentencia.
Como la palabra autos está utilizada en el sentido de litigio o de expediente, quiere
significar que el juez noticia a las partes de que está en condiciones de emitir la
sentencia y que, por ende, ha terminado el curso y desarrollo de la serie procedimental.
Ahora bien, no podemos dejar de lado lo establecido por el artículo 82 que dice “… la
sentencia dictada en rebeldía no podrá ejecutarse hasta seis meses después, a menos que
se preste fianza de devolver en caso de rescisión lo aquella mande entregar. Pero, el que
hubiere obtenido sentencia contra el rebelde podrá hacer inscribir como litigioso en el
Registro General el derecho que la sentencia hubiere declarado a su favor y que fuese
susceptible de inscripción.

Asimismo es importante resaltar que ante en cualquier estado del juicio y hasta seis
meses después de la sentencia, el rebelde, puede interponer recurso de rescisión, el cual
se encuentra previsto en el artículo 84 del C.C.y C. de la Prov. De Santa Fe
requiriéndose: 1.- que medie nulidad del emplazamiento o que el rebelde acredite no
haber podido comparecer por fuerza mayor o por no haber tenido conocimiento del
pleito y, 2.- Que desde la cesación de la fuerza mayor o desde la noticia del pleito hasta
la instauración del recurso no haya transcurrido sino el máximun del término legal del
emplazamiento y treinta días más.
Dicho recurso se sustanciará en pieza separada y por el trámite del juicio sumario. Y
suspenderá, en su caso la ejecución de la sentencia.

Juicios a los que se aplica la representación, rescisión y suspensión del cumplimiento de


la sentencia:
Es importante señalar lo establecido en el art. 86 que dice que sobre la representación
del rebelde, el recurso de rescisión y la suspensión del cumplimiento de la sentencia
sólo puede entablarse en los procesos declarativos después de los cuales no puede
promoverse otro sobre el mismo objeto.
En el caso del juicio ejecutivo la suspensión del cumplimiento de la sentencia lo
establece el artículo 484 que dice “… el recurso contra la sentencia procederá en efecto
suspensivo, a menos que el actor preste fianza suficiente para responder el resultado del
pleito. En este caso, se sacara n copias necesarias para la ejecución y se elevaran los
autos al Superior…”.

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Bolilla III
Por: Daiana Berardo

DEMANDA
Concepto
Según Alvarado Velloso la demanda es el acto que provoca la iniciación de un
procedimiento necesario para la sustanciación de un proceso. Es la materialización del
ejercicio de la acción procesal con el objeto de formar un proceso. Así, explica que
inseparablemente son tres los conceptos que se relacionan: acción (su objeto es poner en
movimiento el órgano jurisdiccional para formar un proceso), demanda (su objeto es
iniciar un procedimiento) y pretensión (su objeto es lograr la emisión de una sentencia
favorable)

Roland Arazi define la demanda como el acto de iniciación del proceso por el cual se
ejerce el derecho de acción y se deduce la pretensión. A su vez establece que:
 Dentro de la clasificación de los actos procesales y desde el punto de vista
objetivo, la demanda es un acto de petición, y dentro de la dinámica del proceso,
un acto de iniciación.
 Desde el punto de vista subjetivo es un acto de la parte, mas precisamente, el
acto por el cual una de las partes se da a conocer.

Efectos jurídicos de la demanda


Con respecto a este punto, corresponde distinguir los efectos sustanciales y procesales y
a su vez, los efectos de la presentación y la notificación de la demanda.

A) En virtud de su simple presentación, la demanda produce los siguientes


efectos:

Efectos Sustanciales:

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1) Interrumpe el curso de la prescripción, "aunque sea interpuesta ante juez
incompetente,  o fuere defectuosa y aunque el demandante no haya tenido capacidad
legal para presentarse en juicio." (Cód. Civ., art. 3986).
2) Impide la extinción de ciertos derechos sujetos a plazos de caducidad (Cód. Civ., art.
259) o sólo susceptibles de transmisión a los herederos cuando la demanda ha sido
entablada por el causante (Cód. Civ., art. 1099).
3) Determina la prestación debida en las obligaciones alternativas cuando la elección de
aquélla fuere dejada al acreedor (Cód. Civ., art. 641).
4) Extingue el derecho a intentar ciertas pretensiones cuyo ejercicio queda descartado
ante la elección de otras (Cód. Civ., arts. 2175, 2484, etc.).
5) Invalida la venta (Cód. Civ., art. 1361, inc. 6o) y la cesión (Cód. Civ., art. 1442) de la
cosa o crédito que estuviesen en litigio hecha a los abogados, procuradores y
funcionarios judiciales que intervengan en el respectivo proceso.
6) Determina la perdida provisoria de la posibilidad de entablar juicio petitorio cuando
se deduce pretensión posesoria (art 2484 Cod. Civil)
7) Determina que la autoridad que recibe la instancia y los letrados que la suscriben no
puedan comprar la cosa (Cód. Civil, art 1361,6°)

Efectos Procesales:
1) Abre la apertura de instancia: tal circunstancia hace que el juez deba expedirse; en lo
inmediato debe hacerlo respecto de su admisibilidad y cuando pronuncie la sentencia
definitiva lo hará sobre su mérito o fundabilidad. A su vez, nace para el actor la carga de
impulsar el trámite a fin de evitar la caducidad de la instancia.
2) Fija la competencia del juez: ésta queda determinada con relación al actor, y la
autoridad ya no podrá ser recusada sino por causa sobreviniente.
3) Determina el objeto de la sentencia, por cuanto si bien ésta debe pronunciarse
también sobre las defensas del demandado, ellas deben referirse a las cuestiones
planteadas en la demanda (salvo el caso de reconvención).

B) La notificación de la demanda produce, por su parte, los siguientes efectos:

Efectos Sustanciales:
1) Constituye en mora al demandado, quien es desde entonces deudor de los intereses
(Cód. Civ., art. 508) cuando se persigue el cumplimiento de obligaciones cuyo plazo no
se encuentre convenido pero resulte tácitamente de la naturaleza y circunstancias de
aquéllas (id, art. 509, párr. 2°)
2) Desde la fecha en que la notificación tiene lugar, el poseedor de buena fe que es
condenado a la restitución de la cosa es responsable de los frutos percibidos y de los que
por su negligencia hubiese dejado de percibir (Cód. Civ., art. 2433). Además, cuando no
es posible determinar el tiempo en que comenzó la mala fe, debe estarse a la fecha de la
notificación de la demanda (id., art. 2443).

Efectos Procesales:
1) Surge para el demandado la carga de oponer excepciones previas, comparecer y
contestar la demanda.
2) Extingue el derecho del actor de desistir unilateralmente del proceso: a partir de la
notificación solo podrá hacerlo con previa conformidad (expresa o tacita) del
demandado.
3) Extingue el derecho del actor de modificar su pretensión.

42
4) Autoriza a oponer la excepción de litispendencia en otro proceso que se constituya
entre las mismas partes y que verse sobre el mismo objeto y la misma causa.

Clasificación de la demanda
Según su naturaleza la demanda puede ser:
- Constitutiva (con ella se pretende la constitución de una nueva situación jurídica).
- Declarativa (son las que pretenden la declaración de un derecho).
- De condena (por ej.: las que se interponen para cobrar una deuda).
- Ejecutivas (las que se interponen cuando se tiene un título ejecutivo, para hacer
efectivo un derecho ya reconocido).

Dentro del mismo proceso pueden surgir cuestiones vinculadas a la que se ventila en
carácter principal y las cuales toman el nombre de incidentes. De ahí una distinción
entre:
- Demanda principal: introductiva de instancia. Es la que da nacimiento al proceso y
emana, por consiguiente, del actor; con su presentación se abre la instancia; fija el
objeto del debate; establece los límites de la sentencia; y
- Demanda incidental: supone, en cambio, un proceso ya iniciado con relación al cual
es un accesorio, porque agrega al debate un nuevo punto a resolver. Puede emanar del
actor, del demandado o de un tercero. En algunos casos se substanciará con el principal,
en otros, se suspenderá el procedimiento del mismo o se formará incidente separado
para no entorpecer la marcha del procedimiento.

Requisitos para su presentación

A) Requisitos intrínsecos
Para que la demanda produzca efectos jurídicos es necesario que contenga determinadas
enunciaciones y esté revestido de ciertas formalidades. Es necesario distinguir en la
demanda los requisitos extrínsecos de los intrínsecos.
Los requisitos intrínsecos son los que regulan el contenido de la demanda. El art 130 del
Código Procesal de Santa Fe establece que la demanda expresará:

1°) El nombre, domicilio real y legal, nacionalidad, estado civil, profesión u oficio
del demandante. La indicación del nombre del actor o demandante constituye un
requisito que hace a la esencia misma de la demanda, pues su omisión impediría
determinar quién es la persona que deduce la pretensión e imposibilitaría la defensa del
demandado. De tal manera, que la individualización del actor interesa tanto a juez como
a demandado. Al juez por que debe examinar la legitimación y capacidad de quien se
presenta, y al demandado porque, una vez notificado, tiene que estar en condiciones de
oponer las excepciones y defensas pertinentes, y además le permitirá ejercer la facultad
de reconvenir.
Si el actor es una persona física debe expresar su nombre y apellido. Tratándose de una
persona de existencia ideal, debe indicar con precisión el nombre o razón social con que
actúa.
En el caso de que el actor actúe por medio de representante legal o convencional, éste
deberá expresar su nombre y acompañar los documentos (el poder) que acrediten el
carácter que inviste (art 41 CP)
El domicilio a que alude la norma transcripta es el domicilio real del actor, que no debe
confundirse con el domicilio "procesal" o ad litem.

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2°) El nombre y domicilio del demandado si se conocieran. La mención precisa del
nombre y apellido del demandado configura un requisito que se justifica por la
circunstancia de ser aquél el destinatario de la demanda y quien, como el actor, habrá de
quedar vinculado por la sentencia. El domicilio a que se refiere este inciso puede ser el
domicilio real (Cód. Civ., art. 89), o el domicilio especial que las partes hayan elegido
para el cumplimiento de sus obligaciones (Cód. Civ., arts. 101 y 102). La jurisprudencia
tiene decidido que dicho domicilio carece de eficacia procesal hasta tanto la firma del
instrumento no haya sido reconocida enjuicio, o dada por reconocida, razón por la cual,
de no mediar tal circunstancia, la demanda debe notificarse en el domicilio real del
demandado.
Sin embargo, la identificación de la persona del demandado puede suscitar, en algunos
casos, dificultades al actor. Por esa razón el art 73 del CP establece que: “Si el domicilio
fuese desconocido o la persona incierta, el emplazamiento se efectuará por edictos, que
se publicarán tres veces. El término vencerá cinco días después de la última
publicación.”

3°) La designación precisa de lo que se demanda y su apreciación pecuniaria.


Cuando no fuere posible fijarla con exactitud, se suministrarán los antecedentes
que puedan contribuir a su determinación aproximada. Constituye el objeto
mediato de la pretensión deducida en la demanda. El inciso examinado requiere que la
designación de lo que se demanda sea exacta: si, por ejemplo, se reclama el pago de una
indemnización, debe indicarse con precisión la suma de dinero en que se estiman los
daños; si la demanda versa sobre un bien inmueble, el actor debe indicar concretamente
su superficie, ubicación, linderos; etcétera.
La carga de precisar el monto reclamado admite excepción cuando al actor no le fuese
posible determinarlo al promover la demanda, sea por las circunstancias del caso o
porque la estimación dependiere de elementos aún no definitivamente fijados. En tal
caso deberá suministrar los elementos necesarios para la determinación.

4°) Las cuestiones de hecho y de derecho, separadamente. Las primeras serán


numeradas y expuestas en forma clara y sintética, omitiéndose toda glosa o
comentario, los que se podrán hacer en la parte general del escrito.
Las cuestiones de hecho son aquellas que la propia ley establece como generadoras,
modificatorias o extintivas de derechos o de status jurídicos. La exposición de estos
hechos tiene por finalidad la determinación de la causa (causa petendi), o sea la razón o
fundamento en cuya virtud la pretensión se deduce.
A diferencia de lo que ocurre en las legislaciones que siguen el principio de
individualización (conforme al cual es suficiente que el demandante mencione la
relación jurídica de la que deriva la pretensión que hace valer), nuestras leyes procesales
exigen la exposición circunstanciada de los hechos que definen esa relación (principio
de sustanciación). La teoría de la sustanciación solo rige en procesos de conocimiento,
mientras que en los pertenecientes a la llamada jurisdicción voluntaria o tramites no
contenciosos (sucesiones, rectificaciones de partidas, etc) y en los de ejecución rige la
individualización de los hechos, ya que no es necesaria una explicación detallada de
estos: basta que el peticionario indique los que corresponden o que el ejecutante
acompañe el titulo e indique su pretensión según el caso
La "claridad" en la exposición de los hechos reviste fundamental importancia por
cuanto: 1) Al demandado incumbe la carga de reconocerlos o negarlos categóricamente
y, por lo tanto, aquella exigencia es decisiva a los efectos de valorar su silencio o sus

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respuestas evasivas; 2) Los hechos articulados en la demanda (y en la contestación)
determinan la "pertinencia" de la prueba a producirse en el proceso; 3) La sentencia
debe considerar solamente los hechos alegados por las partes.
El demandante debe indicar a su vez las normas jurídicas en que se funda su pretensión,
pero el juez es libre en la elección de la norma o normas aplicables en virtud del
principio iura novit curia. Sin embargo, es evidente que la enunciación de los preceptos
legales, no sólo ayuda al tribunal a la determinación de la acción que se deduce cuando
ella es correcta, sino que facilita al demandado el examen de su posición frente al actor.

5°) La petición en términos claros y precisos.


Mediante la petición el actor concreta el objeto inmediato de la pretensión contenida en
la demanda. Ella debe plantearse en términos claros a fin de que pueda establecerse, con
precisión, cuál es la clase de pronunciamiento judicial que se persigue. La petición
concreta la pretensión del actor como fundamento de su acción y ésta es la que el juez
debe resolver admitiéndola o rechazándola.

Además por la ley 13.151 se determinó que en su caso, el escrito de demanda será
acompañado del acta de finalización del procedimiento de mediación prejudicial
obligatoria.

B) Requisitos extrínsecos
La demanda debe reunir las siguientes formalidades:
. Debe ser hecha por escrito (art 130 CP) sobre fondo blanco y caracteres negros
indelebles, mediante procedimientos que permitan su fácil lectura.
. Redactada en idioma nacional (pudiendo contener citas en latín debiendo ser
traducidas al castellano);
. Con tinta negra
. Extendida en el sellado de actuación correspondiente (art. 33: “no se admitirá escrito
alguno si el sellado correspondiente…”)
. No deberá contener claros y las firmas deberán estar suficientemente aclaradas. (art.
33: “Si no se subsana el defecto dentro de los dos días de la intimación, se tendrá el
escrito por no presentado y se procederá a su devolución sin más trámite ni recurso
alguno”).
. No se usarán abreviaturas, ni se rasparán las palabras equivocadas; sobre éstas se
pondrá una línea que permita su lectura y se escribirán entre renglones las palabras que
hayan de reemplazarlas, salvando el error al final de la diligencia y antes de la firma.
(art. 50 CP)
. Debe llevar la firma del presentante. Cuando la firma sea a ruego del interesado, el
actuario debe certificar que el firmante ha sido autorizado al efecto. (art. 53 CP)
. Las cantidades deben ser escritas en letras (art. 1001 CC)
. No deberá llevar fecha puesta por el actor, ya que la misma será colocada en el
juzgado.
. Debe expresarse en el encabezamiento el objeto de la misma y cerrarse con la firma
del actor o su representante.
. Es necesaria la indicación precisa de la representación que se inviste, acompañada del
poder suficiente que acredite dicha representación.
. Deberá confeccionarse en tanto ejemplares como demandados haya.
Las demandas que no se ajusten a los requisitos establecidos por la norma no deben ser
admitidas por el juez (art 131 y 547 CP)

45
Roland Arazi enuncia además de los requisitos intrínsecos y extrínsecos ya explicados,
a los requisitos fiscales como indispensables para la presentación de la demanda y
explica que al entablarse la demanda el actor debe abonar una tasa de justicia, cuyo
importe es proporcional a la importancia económica del proceso que se inicia. El
importe que pagó el demandante por este concepto le será reintegrado por el demandado
si resulta vencido, porque dicho gasto está comprendido en el concepto de costas.

Documentos que deben acompañarse (supuesto de imposibilidad de hacerlo)


El articulo 137 del CP establece : “El actor debe acompañar a la demanda los
documentos en que ella se funda; si no los tuviere, los designará con la individualidad
posible, expresando su contenido y el lugar en que se encuentren, so pena de abonar, si
los presentare después, las costas ocasionadas por la tardanza.”
La doctrina mayoritaria y jurisprudencia, expresa que se debe acompañar con la
demanda los documentos en que se funda, ya que el demandado no solamente debe
conocer los hechos en que el actor funda su pretensión, sino también la prueba de la que
intenta valerse; de tal manera que resulta reprochable la actitud de mantenerla oculta
con el propósito de sorprender al adversario cuando este ya no se encuentra en
condiciones de contrarrestarla y por lo tanto se ve afectado su derecho de defensa. En
ese caso, la sanción es que correrá con las costas de la presentación tardía.
En este caso, resulta correcto distinguir entre juicio ordinario y ejecutivo. En el juicio
ejecutivo es un requisito de admisibilidad o procedencia de la demanda la presentación
de los documentos (el titulo en el cual se funda la demanda). No sucede así en el juicio
ordinario, aunque generalmente también se presentan los documentos al inicio para
evitar correr con las costas de la presentación tardía.
Peyrano, con una interpretación distinta, sostiene que el análisis de este articulo debe
hacerse a partir de la integración con el art 251 inc 2°, de tal modo que, la presentación
tardía de documentos haría cargar a quien los allegare morosamente, solo en el supuesto
de que dicha presentación tardía, produjere el allanamiento de la contraparte a la vista
de aquellos. Es decir, no es la simple tardanza del hecho lo que da lugar a la carga de las
costas, sino el allanamiento que podría derivarse de aquella.

Facultades de los jueces


ARTICULO 132. “Cuando los demandantes fueren varios, el juez podrá de oficio o a
solicitud de parte, obligarlos a obrar bajo una sola representación siempre que haya
compatibilidad en ella y el derecho sea el mismo. Si no se pusieran de acuerdo, el juez
designará por sorteo entre los profesionales intervinientes en autos por los actores, al
que deba ejercer la representación única. Igual procedimiento se adoptará si fueren
varios los demandados o hicieren mérito de las mismas defensas, sorteándose al
representante único de entre los profesionales que actuaren por los demandados.”
El sentido de esta norma responde a la necesidad de salvaguardar los principios de
celeridad y economía procesal. Se sigue la línea evolutiva del derecho procesal que
persigue que el debate se simplifique, suprimiéndose trámites superfluos para facilitar la
tarea del juez. Así, la unificación de la personería en un litisconsorcio no solamente
contribuye al orden en el proceso, por que facilita el planteamiento de la litis y el
examen de las defensas, sino que es también un medio de acelerar el trámite.

Inadmisibilidad de la demanda
El articulo 131 dice: “Los jueces no darán curso a las demandas que no se deduzcan de
acuerdo con las prescripciones establecidas, indicando el defecto que contengan.
Podrán, también, ordenar que el actor aclare cualquier punto para hacer posible su

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admisión.” Alvarado Velloso explica que la norma prevé un caso de inadmisibilidad (es
decir, no dar curso procedimental a una pretensión). De tal manera, que la demanda no
es apta para que el proceso respectivo pase al estadio procedimental siguiente.
Pero ello no importa el rechazo de la acción, la que podrá interesarse de nuevo, sea
supliendo la omisión, sea promoviendo una nueva demanda.
Si, no obstante los defectos que la demanda contenga, el juez le diera el curso, puede el
demandado oponer la excepción previa de defecto legal en el modo de proponer la
demanda.

Acumulación objetiva de pretensiones


La acumulación de pretensiones es la unión de varias de ellas en un solo proceso con el
propósito de que sean resueltas en la misma sentencia. Su fundamento es la economía
procesal.
Couture la define como: “acción y efecto de proceder el demandante a reunir en una
misma demanda diversas pretensiones que tenga contra el demandado”.
La acumulación de pretensiones puede ser:
* Objetiva (art. 133 CP): Cuando hay varias pretensiones contra una misma persona.
“El actor podrá, antes que se conteste la demanda, acumular todas las pretensiones que
tuviere contra una persona, con tal que no se excluyan entre sí, que pertenezcan a un
mismo fuero y que deban sustanciarse por los mismos trámites.”
* Subjetiva (134 CP): Cuando varios sujetos vinculados por la litis actúan como
actores o demandados en un mismo proceso. “La misma regla que en el caso anterior se
aplicará cuando los actores sean varios y uno o varios los demandados, siempre que la
acción se funde en el mismo título o nazca del mismo hecho y tenga por objeto la
misma cosa.”
Con respecto a la acumulación objetiva de pretensiones, que es la que aquí interesa,
Alvarado Velloso dice que la facultad que la ley le otorga al actor para acumular
pretensiones debe ser analizada ab initio por la autoridad para permitir o no la
acumulación. Y es que no resulta lógicamente posible que el actor acumule contra un
mismo demandado pretensiones que se autoexcluyan entre si. Por ejemplo, si el actor
pretende que el juez ordene al demandado el cumplimiento de un contrato y. al mismo
tiempo, que el juez declare la nulidad de tal contrato, parece claro que el demandado no
podrá defenderse adecuadamente en razón de la contemporaneidad de las pretensiones
antagónicas. Así, para que pueda darse dicha acumulación son tres los requisitos a
cumplir: 1) que no sean contrarias entre si, que no se excluyan, de modo que por la
elección de una quede excluida la otra 2) que pertenezcan a un mismo fuero; 3) que
puedan sustanciarse por los mismos trámites. Cuando esto no ocurre, es deber del juez
señalar el defecto antes de admitir la demanda y, si él no lo advierte, el demandado
puede oponerse a la acumulación mediante la excepción de defecto legal en el modo de
proponer la demanda.

Modificación en la demanda.
El artículo 135 expresa: “El demandante no podrá variar la acción entablada después de
haber sido contestada la demanda, pero podrá ampliar o moderar la petición siempre que
se funde en hechos que no impliquen un cambio de acción.” Así, nuestra ley faculta al
actor a variar, modificar o transformar su pretensión con la condición de que ello se
haga antes de ser contestada la demanda y que no implique un cambio de acción, es
decir, que no se permite una nueva afirmación de fondo del actor ya que si se permitiría
ello se rompería el orden legal de los actos y se vulnerarían los principios de preclusión

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e irreiterabilidad del proceso. Cabe aclarar que la ampliación o moderación de la
pretensión ya no alteran la competencia por valor.
El artículo 136 regula el trámite en caso de ampliación de la pretensión. “La ampliación
autorizada por el artículo anterior no será substanciada especialmente, y podrá hacerse
en cualquier estado de la causa hasta la citación para sentencia; pero si se fundare en
hechos no alegados en la demanda deberá formularse hasta tres días después de la
apertura a prueba, en que se dará un nuevo traslado, por tres días, al demandado.” Esta
norma refiere a la ampliación de la pretensión demandada por efecto de un hecho
nuevo, que es aquel que se exterioriza después de la presentación de la demanda y el
que, siendo anterior a ella, es conocido por el actor con posterioridad a su interposición.
La demanda modificada conserva todos los efectos materiales y procesales producidos
por su interposición

Actitudes que puede adoptar el demandado frente a la notificación de la demanda


1) En primer lugar puede comparecer a estar a derecho. En este caso, quien
comparece puede:
a- Contestar la demanda. (situación que será tratada en el ultimo apartado de la
bolilla)
b- No contestar la demanda, lo que implica el reconocimiento de los hechos
articulados por el actor. (art 143 CP)
c- Reconvenir, es decir, contrademandar al actor.
d- Allanarse a la demanda, reconociendo sus fundamentos (art 230 CP). Adopta
una actitud de sumisión. Para esto es necesario que la relación jurídica litigiosa
verse sobre cuestiones transigibles.
e- Sin que medie allanamiento puede ocurrir, finalmente, que el demandado admita
los hechos invocados por el actor (pero no el derecho) o, a la inversa, admita el
derecho pero no los hechos: esto se conoce con las denominaciones respectivas
de confesión y de reconocimiento.
f- Oponer excepciones previas (tratado a continuación)
2) Puede asumir una actitud negativa y no comparecer, en cuyo caso, el proceso
sigue en rebeldía. (Bolilla 2- art 76 a 86 CP)

EXCEPCIONES DILATORIAS
Concepto
Peyrano dice que las excepciones son “aquellas defensas mediante las cuales, el
demandado (que denuncia la existencia de un impedimento que vicia la validez del
proceso e impide que el mismo pueda constituirse validamente), pretende que se lo
exima temporal o definitivamente de la carga de contestas la demanda”

Lino Palacio las define como “aquellas oposiciones que, en caso de prosperar, excluyen
temporalmente un pronunciamiento sobre el derecho del actor, de manera tal que sólo
hacen perder a la pretensión su eficacia actual, pero no impiden que ésta sea satisfecha
una vez eliminados los defectos de que adolecía.”

Roland Arazi dice que “la excepción es la oposición a que se despliegue la actividad
jurisdiccional, atacando la regularidad de la relación procesal”

Efectos
Efectivamente las excepciones dilatorias son aquellas de previo y especial
pronunciamiento que son propuestas en el proceso con el fin de dilatar, postergar,

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impedir o suspender la serie procedimental hasta que se resuelvan. Esto es, demoran la
actividad procesal del demandado y consecuentemente excluyen de forma temporal
cualquier pronunciamiento sobre el derecho del actor. A través de las excepciones
dilatorias se busca lograr la depuración del proceso para evitar un juicio nulo y así
corregir errores y lograr una sentencia útil que vincule a las partes.
En síntesis, por el solo hecho de su interposición, las excepciones dilatorias paralizan el
tramite del principal, y hasta tanto no se resuelvan y tal resolución quede firma y
ejecutoriada, no puede reanudarse el mismo. (Peyrano)

Clases
El articulo 139 dice: “Las únicas excepciones que pueden articularse como de previo y
especial pronunciamiento son:
1. Incompetencia. Mediante ella el demandado afirma que el actor ha presentado su
demanda ante una autoridad que carece de competencia para admitirla (darle curso). En
rigor y cuando se articulan varias debe ser la primera en quedar resuelta, ya que si la
autoridad se declara incompetente no debe entrar a conocer y decidir las otras
excepciones opuestas.
2. Falta de personalidad en el actor o de personería en su procurador. (Esta
excepción no sólo procede en el caso de que el actor o el demandado sean civilmente
incapaces, sino también en el supuesto de que sea defectuoso o insuficiente el mandato
invocado por quienes pretendan representar a aquéllos.) Es por lo tanto procedente la
excepción analizada cuando el mandato adolezca de defectos de forma o la actuación
del mandatario no se ajuste a los términos en que aquél fue conferido (como ocurriría,
por ejemplo, si el mandato ha sido otorgado exclusivamente para intervenir en un juicio
sucesorio y se demanda por filiación y petición de herencia; o la demanda se dirige
contra una persona distinta de la indicada en el poder; o conferido un poder general de
administración, el mandatario deduce una pretensión que comporta un acto de
disposición).
3. Defecto legal en el modo de proponer la demanda. Puede oponerse esta excepción
como previa cuando la demanda no se ajusta a los requisitos que exige la ley; en
principio, los enunciados en el art. 130. Los defectos deben ser graves, es decir, colocar
al demandado en un verdadero estado de indefensión al no permitirle defenderse
adecuadamente. Procede esta excepción cuando la demanda no se ajusta, en su forma o
contenido, a las prescripciones legales. Tal ocurre, por ejemplo, cuando se omite la
denuncia del domicilio real del actor; o no se precisa con exactitud la cosa demandada
(como ocurre, v.gr., si en la demanda por daños y perjuicios no se individualizan las
distintas partidas que integran la suma reclamada); o la exposición de los hechos
adolece de ambigüedad
4. Falta de cumplimiento del procedimiento de mediación prejudicial obligatoria.”

Según el art. 139 estas son las únicas que pueden articularse como de previo y especial
pronunciamiento. Sin embargo Alvarado explica que la “taxatividad” que surge
expresamente del texto no es exacta, por ello su contenido debe considerarse como mera
enunciación. Es por eso que podemos agregar:
.Cosa juzgada: Mediante esta excepción se impide al actor plantear de nuevo una
cuestión ya resuelta definitivamente.
.Litispendencia: Mediante ella el demandado afirma que se halla pendiente de
procesamiento o de juzgamiento otro litigio en el cual se discute la misma causa
(conexidad causal) o sólo el mismo hecho causal (afinidad) con el objeto de que ambos

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procesos se acumulen en un solo procedimiento. Ademas, son requisitos de la excepción
de litispendencia:
1) Que el primer proceso tramite ante otro tribunal competente, o aun ante el mismo
tribunal. De allí que la excepción no sea procedente si en el proceso invocado para
fundarla ha recaído declaración de incompetencia que se encuentra firme o se ha
operado la caducidad de la instancia.
2) Que el traslado de la demanda del primer proceso haya sido notificado.
3) Que ambos procesos sean susceptibles de sustanciarse por los mismos trámites (no
cabe, por ejemplo, en un juicio ordinario, fundarla en la existencia de un juicio
ejecutivo, ni viceversa).
4) Que las partes actúen con la misma calidad en ambos procesos.
Tanto la litispendencia como cosa juzgada se encuentran receptadas en el Art 141: “La
cosa juzgada y la litispendencia pueden ser alegadas por las partes en cualquier estado y
grado del proceso. Deben también ser suplidas de oficio con los recursos de reposición
y apelación subsidiaria si fuera en primera instancia, y sólo el de reposición en segunda.
En el último caso se dará a la reposición el trámite de los incidentes. Este mismo
procedimiento se observará si se opusieran fuera del escrito de responde. Cuando la
litispendencia se origine por conexión, los autos podrán acumularse o tramitarse
separadamente, según lo aconseje la índole de cada pretensión y el estado de cada
procedimiento. Se dictará una sola sentencia si ambas litis pertenecieren al mismo fuero
y aunque se encontraren en distinto grado. Si no correspondiere a la misma jurisdicción
se emitirá primero la que haya de producir cosa juzgada respecto de la otra pretensión”.
Al efecto, Alvarado Velloso explica que tanto uno como otra responden al principio de
seguridad jurídica, por lo cual son las únicas declarables de oficio y proponibles el
cualquier grado y estado del proceso.

Oportunidad e interposición en cada tipo de juicio.


Según el art 138 las excepciones dilatorias deben interponerse en forma de artículo
previo. En caso de no utilizarse en ese momento procesal, precluye la oportunidad para
deducirla; de modo que, una vez vencido el plazo para oponer excepciones como de
artículo previo o contestada la demanda sin que las mismas se hayan deducido, el
litigante pierde la posibilidad de oponerlas.
La oposición de excepciones como de articulo de previo y especial pronunciamiento
significa también que las mismas deben resolverse en forma previa, esto es, antes de la
sentencia de merito.
Con respecto a los procesos en los cuales pueden oponerse, el art 138 determina que se
interponen en los juicios declarativos (los juicios o procesos declarativos, son aquellos
en los que existe una situación de incertidumbre respecto a la pretensión del actor.) Al
hablar de juicios declarativos debe entenderse que refiere a los procesos ordinario y
sumario (queda excluido el sumarisimo)
El art 140 dispone que “Las excepciones dilatorias serán deducidas simultáneamente en
un solo escrito, dentro de diez días en el juicio ordinario y de tres en el sumario.” Dicho
plazo no se suspende por recusación.

ARRAIGO
Concepto
Alvarado Velloso: “Excepción mediante la cual el demandado afirma que, en caso de
resultar vencedor en el litigio, no podrá percibir del actor las costas causadas en el
proceso. Aceptada por casi todas las legislaciones, puede ostentar disímil fundamento:
el actor no reside en el lugar del pleito o carece de bienes inmuebles o de otros bienes

50
suficientes en el lugar del pleito para hacer frente a una eventual condena en costas.
Cuando se da en el actor la situación prevista por la ley, debe prestar una caución que
garantice al demandado la percepción de su eventual acreencia.”

Lino Palacio: “Excepción que tiende a asegurar la responsabilidad del actor por los
gastos y honorarios a cuyo pago puede ser eventualmente condenado, y que procede
cuando aquél no tiene su domicilio real y efectivo en el país, no siendo suficiente la
ausencia accidental, temporaria o periódica. También procede en el caso de residencia
transitoria en el lugar donde tramita el proceso.”

Peyrano: “Implica una pretensión del accionado excepcionante, de que quien lo


demanda afiance el pago de las costas que eventualmente pudiere quedar obligado a
pagar”

Formas de interposición
Peyrano, explica que el arraigo es una excepción dilatoria a pesar de no estar incluida en
la enumeración del art 139. De tal manera que como tal debe ser interpuesta en forma de
artículo de previo y especial pronunciamiento. Sin embargo el arraigo también puede
ser interpuesto durante el juicio y hasta la sentencia y aun después de ella cuando esta
fuera favorable al demandado. En el caso de que se interponga como excepción de
previo y especial pronunciamiento se suspende el procedimiento, incluso el trámite de
las demás excepciones. En el segundo caso se sustancia en pieza separada sin suspender
el principal. Y en el tercer caso, interrumpe la tramitación del recurso y se aplica lo
dispuesto en el art 331

Casos de improcedencia del arraigo


El art 330 prevé que: “No procederá el arraigo cuando:
1. El demandante poseyera en la Provincia bienes suficientes para pagar las costas
o el demandado se allanare a la demanda en cantidad que permita abonarlas;
(bienes suficientes debe referirse a bienes registrables, de tal manera que el
demandante deberá manifestar la existencia de estos bienes y brindar los datos
registrales necesarios para su individualización)
2. La demanda fuese interpuesta por vía de reconvención;
3. El actor hubiese sido declarado pobre para litigar, por resolución firme anterior a
la oposición del arraigo; (declaratoria de pobreza, legislada en art 332 y ss)
4. Cuando el demandante sea una entidad con personería jurídica, domiciliada en la
Provincia, que por la ley o sus estatutos tenga objetivos sociales sin ánimo de
lucro.”

Sustanciación
El art 331 explica que “Solicitado el arraigo, el Juez substanciará el incidente y lo
resolverá fijando, en su caso, la cantidad por la que debe prestarse la caución. Las costas
se impondrán por su orden si se produjere el desistimiento del demandado después de
rendida la prueba. La Resolución será apelable en efecto devolutivo, y no causa estado.
El incidente seguirá su curso normal, y si la caución no se prestare, el Juez suspenderá
el procedimiento del principal hasta que se otorgue. Transcurridos noventa días,
incluidos los inhábiles, sin que se constituya, procederá la declaración de caducidad del
proceso”
A partir del artículo podemos analizar sus diferentes elementos:

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a) Caucion. Quantum
Couture la define como resguardo o seguridad que consiste, generalmente, en el
depósito o afectación de ciertos bienes al cumplimiento de una obligación derivada del
proceso. El quantum de dicha caucion queda librado al prudente arbitrio judicial
b) Costas
La imposición de costas por su orden se da en el caso del desistimiento del incidentista
y se configura como una excepción a la norma genera contenida en el art 229
(“ARTICULO 229. En cualquier estado del juicio, podrán las partes desistir de sus
acciones o excepciones. Si el desistimiento fuera del proceso y no de la acción, el juez
no lo tendrá por producido sin el consentimiento de la contraparte El desistimiento de la
acción la extingue definitivamente. Las costas serán a cargo de la parte que desista. No
se admitirá el desistimiento sin la justificación del pago de aquéllas.)
c) Recurribilidad del auto que la resuelve.
El incidente de arraigo finaliza con una resolución judicial que impone la carga judicial
de arraigar y decide el quantum de la caucion a prestar. Contra esta resolución se puede
interponer un recurso de apelación que tendrá efecto devolutivo, es decir, no se
suspende la ejecución de la resolución mientras la instancia superior, respecto del que
dictó la resolución apelada, decide si hace lugar o no a la apelación.
d) Carácter provisorio
Peyrano explica que el arraigo tiene naturaleza cautelar, y en virtud de dichas
características, la cosa juzgada en el arraigo es formal y no material; por ende, la
decisión tomada por el juez resulta mutable por que es de índole determinativa y lleva
implícita la cláusula “rebus sic stantibus”, de modo que aun firme la resolución que lo
ordena y fija el monto de la caución, puede este elevarse o disminuirse e incluso
suprimirse.
e) Caducidad por falta de presentación del arraigo
La declaración de caducidad del proceso esta sujeta al procedimiento previsto en los art
232 y ss. El plazo de noventa días corre desde que se notifica al interesado la decisión
que ordena arraigar por el quantum fijado.

CONTESTACION DE LA DEMANDA
Roland Arazi:“es el acto procesal mediante el cual el demandado se opone a la
pretensión de actor, deduciendo todas las defensas que tuviere”
Lino Palacio: “el acto mediante el cual el demandado alega todas las excepciones y
defensas que intenta hacer valer contra la pretensión procesal”

Requisitos e importancia del acto


Cualquiera que sea el tipo de proceso de que se trate, dicho acto reviste importancia
fundamental por cuanto determina definitivamente los hechos sobre los cuales deberá
producirse la prueba y delimita, asimismo, el theina decidendum, pues la sentencia
definitiva sólo puede versar sobre las cuestiones planteadas por ambas partes. De allí la
afirmación corriente de que con la contestación a la demanda queda integrada la
llamada relación jurídica procesal.

De acuerdo al art 142, en el escrito de responde el demandado debe:


1. En lo pertinente, observar las reglas establecidas para la demanda. (Del articulo
130)

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2. Confesar o negar categóricamente cada hecho expuesto en la demanda. Su
silencio, sus respuestas evasivas o su negativa general podrán estimarse como
reconocimiento de la verdad de los hechos a que se refieran.
En cuanto a la “confesión”, o admisión se da cuando en un proceso una parte acepta uno
o varios hechos afirmados por el adversario. Esta admisión puede ser simple (cuando se
acepta lisa y llanamente el hecho afirmado por la otra parte) o calificada (cuando se
acepta ese hecho pero introduciendo en el aclaraciones y explicaciones o atribuyéndose
una configuración jurídica diferente)
En cuanto a la negación de los hechos ella debe ser categórica y circunstanciada, de tal
manera la negativa genérica e indeterminada de los hechos expuestos en la demanda no
satisface el requisito legal y equivale al silencio que autoriza a estimar la existencia de
una admisión de aquéllos. Asimismo, si bien no es necesario que el demandado admita
o niegue punto por punto todos los detalles y circunstancias incluidos en la exposición
del demandante, corresponde, sin embargo, que se pronuncie en forma clara y explícita
con respecto a cada uno de los hechos esenciales sobre los que debe versar el litigio, de
modo que no cumple la exigencia analizada la simple manifestación, corrientemente
utilizada, de que se deben tener por negados los hechos no reconocidos expresamente.
La carga procesal examinada se refiere a los hechos personales del demandado. Con
respecto a los hechos de terceros aquél puede limitarse a manifestar ignorancia, sin que
por ello se haga pasible de ninguna consecuencia jurídica perjudicial.
Constituyen respuestas evasivas, en los términos de la norma analizada, aquellas
manifestaciones reticentes o ambiguas del demandado, como, por ejemplo, la formulada
en el sentido de que no se reconocen ni niegan los hechos expuestos en la demanda.
Entre otros casos, la jurisprudencia ha resuelto que comporta respuesta evasiva el hecho
de negar primero a un acontecimiento lugar en el tiempo, en el espacio y en el
conocimiento, y negar asimismo particularidades de él que no pueden derivar sino de su
ubicación en el tiempo, en el espacio y en el conocimiento; la actitud de quién;
demandado por el cobro de reparaciones efectuadas en una cosa, con detalle de los
trabajos realizados, omite señalar los trabajos que no se ejecutaron limitándose a
reconocer una obligación hasta cierta suma y desconocer el resto del reclamo; etcétera.
Estas respuestas, junto con el silencio y la negativa general podrán estimarse como
admisión tacita de los hechos expuestos por el actor.
3. Reconocer o negar la autenticidad de los documentos privados que se le
atribuyan, so pena de que se los tenga por reconocidos. El demandado tiene la carga
de reconocer o desconocer los documentos que se le atribuyen, pero no los que
provengan de terceros. La sanción para el incumplimiento de este supuesto es mas grave
que la referente a los hechos: el juez deberá tenerlos por reconocidos. El reconocimiento
expreso o tácito del documento por parte del demandado tiene carácter de indivisible; es
decir, producido tal efecto, no puede el demandado pretender que ciertas aclaraciones
contenidas en el documento queden reconocidas y otras no. Esto, sin perjuicio de que el
demandado, por otro medios probatorios, demuestra la falsedad o nulidad del acto
instrumentado en el documento que ha quedado reconocido (Peyrano)
4. Oponer todas las defensas que por su naturaleza no tengan el carácter de
excepciones dilatorias según este Código, especificando con claridad los hechos que
las apoyan. Si fuera de esta oportunidad, se opusiera la prescripción, se
substanciará por el trámite indicado para los incidentes y se resolverá al dictar
sentencia.
5. Deducir reconvención, si hubiere lugar.

Inconstestación de la demanda.

53
El art 143 establece que: “La falta de contestación a la demanda, aun en el juicio de
rebeldía, o a la reconvención implica el reconocimiento de los hechos articulados por el
actor o reconviniente, sin perjuicio de la prueba en contrario que produjera el
demandado o reconvenido. Omitida la contestación, se llamará los autos para sentencia,
si correspondiere; decreto que se revocará si aquéllos solicitaren la apertura a prueba.”
De tal manera que la falta de contestación produce como efecto el reconocimiento de los
hechos invocados por el actor. Peyrano dice que se trata de una presunción iuris tantum
y por lo tanto tal efecto puede ser revertido por el afectado ofreciendo y produciendo
prueba en contrario y desvirtuando la consecuencia derivada de la falta de contestación.
Ante la falta de contestación el actor o reconviniente puede pedir que se llame a autos
para sentencia. Este decreto debe notificarse al demandado quien puede postular la
revocación de dicho decreto, persiguiendo la apertura de la causa a prueba.

Reconocimiento o desconocimiento de los documentos presentados por el actor


(VER ANALISIS ARTÍCULO 142 inc 3° en la página anterior)

Oposición de excepciones (de orden sustancial o material y de indole procesal)


Desde la óptica jurídica la doctrina autoral clasifica a las excepciones en:
 excepciones procesales, son las de previo y especial pronunciamiento, es decir,
aquellas que interpuestas, suspenden el trámite del principal. (ya explicadas en un
punto anterior)
 excepciones de fondo y/o perentorias, que se oponen conjuntamente con la
contestación de la demanda, y el Juez las resuelve con la Sentencia definitiva.
Dentro de las excepciones de fondo nos encontramos con:
a- Excepción de prescripción: El articulo 3962 del Código Civil dispone que “La
prescripción debe oponerse al contestar la demanda o en la primera presentación
en el juicio que haga quien intente oponerla”. De tal manera que si no se opone
en dicha etapa procesal se pierde el derecho de alegarla. Estamos ante una
excepción de naturaleza sustancial y de carácter perentorio que se resuelve en la
sentencia definitiva y no puede ser declarada de oficio por el juez (art 3964
Código Civil)
b- La “sine actione agit”. Es una defensa a través de la cual el demandado
sostiene que el actor carece de legitimación sustancial activa (legitimatio ad
causam) para promover el juicio que ha iniciado. Peyrano dice que es bastante
común que se haga referencia impropiamente a ella bajo la formula de “falta de
acción”, utilizándose el termino “acción” en alusión al derecho sustancial que
tiene el actor para obtener una sentencia favorable. Se trata de una defensa de
fondo que el juez resuelve en la sentencia, comprendida en el art 142 inc. 4 del
CP. Su acogida o no dependerá del plexo probatorio de autos, corriendo el actor
con la carga de probar su legitimidad. El hecho de que el demandado no oponga
la defensa al contestar la demanda, no obsta, a que el juez ex officio declare la
falta de legitimación sustancial del parte del actor. Esto es así, pues sobre el
demandante recae un impedimento sustancial (carece de derecho).
c- Excepción de carencia de acción: mediante la cual el demandado afirma que la
acción intentada en la demanda no es admisible por cuanto la pretensión que
contiene no puede ser procesada (discutida ante un juez o árbitro) ni sometida a
la decisión de un tercero. Ello ocurre en cuatro supuestos:
1)cuando la propia ley prohibe el
procesamiento de una pretensión determinada

54
2)cuando resulta manifiesta la
carencia total de contenido jurídico de la pretensión deducida, que aparece
basada exclusivamente en un interés moral, religioso o social protegido por el
Derecho;
3)cuando surge evidente de la
pretensión demandada que ella no se vincula con un supuesto efectivo de
colisión de intereses, razón por la cual no existe litigio (ni conflicto) susceptible
de heterocomposición. El supuesto constituye lo que habitualmente se denomina
caso abstracto;
4)cuando la pretensión ostenta una
exclusiva naturaleza política que, como tal, no es justiciable. El caso refiere a
ciertos actos de gobierno que sólo están sujetos a responsabilidad política y que,
por tanto, escapan a todo control judicial (por ejemplo, declaración de guerra o
de estado de sitio, fijación del valor de la moneda, etc.).
Esta excepción no debe ser confundida con la tratada anteriormente.
d- Excepción de caducidad de acción: mediante ella el demandado afirma que la
acción intentada se halla caduca por haber sido propuesta luego de finalizado el plazo
establecido por la ley para su deducción válida.
e- Días de llanto o luto (Cód. Civil, art. 3357): con esta excepción el heredero que
ha sido demandado para que acepte o repudie la herencia afirma que momento de
incoarse la demanda no han transcurrido nueve días desde la muerte del causante, por lo
cual solicita su paralización hasta el vencimiento de tal plazo.
f- Contrato incumplido (Cód. Civil, art 1201): mediante esta excepción el
demandado afirma el carácter bilateral del contrato que fundamenta la pretensión de
cumplimiento del actor, con el objeto de que se paralice el procedimiento hasta tanto
éste acredite haber cumplido u ofrecido cumplir su propia prestación o en su defecto,
que la obligación es a plazo.
g- Excepciones fundadas en causas extintivas de las obligaciones: en la
legislación argentina coinciden con todos los medios de extinción de las obligaciones
enunciados en el Código (art. 724) y su objeto es lograr que el juez declare extinguida
la obligación cuya prestación se reclama. Son las siguientes:
1) Excepción de pago (art 725 Código Civil)
2) Excepción de novación (art 801 Código Civil)
3) Excepción de compensación (art 818 Código Civil)
4) Excepción de transacción (art 832 Código Civil)
5) Excepción de confusión (art Código 862 Civil)
6) Excepción de prescripción liberatoria (art 3969 Código Civil)
7) Excepción de remisión de deuda (art 876 Código Civil)
8) Excepción de imposibilidad de pago (art 882 Código Civil)
9) Excepción de renuncia de los derechos del acreedor (art 868 Código Civil)
h- Excepciones fundadas en la existencia de vicios en los actos jurídicos:
coinciden con los vicios de los actos jurídicos que norma la ley civil y tienen por objeto
lograr que el juez anule al sentenciar el acto en el cual el actor basa su pretensión y, por
ende, la rechace. Son las siguientes:
1) Excepción de dolo (art 931 Código Civil)
2) Excepción de violencia (art 936Código Civil)
3) Excepción de error (art 924 Código Civil)
4) Excepción de simulación (art 955 Código Civil)
5) Excepción de lesión (art 954 Código Civil)

55
Reconvención
Lino Palacio: “Sin perjuicio, por lo tanto, de las defensas que puede el demandado
oponer en el escrito de contestación a la demanda, la ley le acuerda el derecho de
deducir reconvención, la cual constituye una pretensión planteada por el demandado
frente al actor y que, al incorporarse al proceso pendiente para la satisfacción de la
pretensión originaria, configura un supuesto de acumulación sucesiva por inserción de
pretensiones. Demandado, por ejemplo, el vendedor por entrega de la cosa, puede
entablar una demanda reconvencional contra el comprador por el pago del precio;
deducida una demanda por cumplimiento de contrato, cabe reconvenir por rescisión o
nulidad de aquél; en el juicio de separación personal o de divorcio vincular, el cónyuge
demandado puede deducir reconvención sosteniendo que la separación o el divorcio
deben declararse por causa imputable al demandante; etcétera.

Alvarado Velloso: “Actitud del demandado que al contestar la demanda contradiciendo


la pretensión del actor, propone una propia demanda contra este. Asi, el demandado
originario adquiere la calidad de reconviniente y el actor originario en reconvenido”

Condiciones y diferencias en el Código Nacional


El art 144 prevé: “La reconvención sólo procederá cuando exista conexión con la
demanda o excepción. Deberá contener los mismos requisitos exigidos para aquélla.”
De tal manera que para la admisibilidad de la reconvención se requiere
imprescindiblemente el cumplimiento de dos requisitos: 1) que la pretensión hecha valer
sea conexa por la causa con la deducida por el actor. Dice Alvarado Velloso, que
siempre se trata de una conexidad mixta subjetivo- causal y 2) Además deberá reunir los
requisitos exigidos para la demanda enunciados en el art 130.
En cuanto a las diferencias con el orden nacional, el art 357 del Código Procesal Civil y
Comercial de la Nación prescribe: “En el mismo escrito de contestación deberá el
demandado deducir reconvención, en la forma prescripta para la demanda, si se creyere
con derecho a proponerla. No haciéndolo entonces, no podrá deducirla después, salvo su
derecho para hacer valer su pretensión en otro juicio. La reconvención será admisible si
las pretensiones en ella deducidas derivaren de la misma relación jurídica o fueren
conexas con las invocadas en la demanda.”A continuación el art 358 expresa:
“Propuesta la reconvención, o presentándose documentos por el demandado, se dará
traslado al actor quien deberá responder dentro de QUINCE (15) o CINCO (5) días
respectivamente, observando las normas establecidas para la contestación de la
demanda.”

56
Bolilla IV
Por: Juan Manuel Appendino

PRUEBA: concepto

El vocablo prueba ostenta carácter multívoco y, por lo tanto causa equivocidad al


interprete y extraordinaria perplejidad al estudiante.
Gran parte de la doctrina autoral considera a la prueba como la aseveración
incontestable y, como tal, no opinable. Otros autores la conceptualizan como:
acreditación, verificación, comprobación, búsqueda de la verdad real o convicción.
La enorme diferencia conceptual existente entre los diversos medios de prueba hace que
la más moderna doctrina que conforma Alvarado Velloso se abstenga de utilizar la
palabra prueba y prefiera el uso del vocablo confirmación (reafirmar una probabilidad):
en rigor, una afirmación negada se confirma con diversos medios que pueden generar
convicción (no certeza o crédito) a un juzgador en tanto que no la generan en otro.
La prueba judicial constituye el conjunto de reglas que regulan la admisión, producción
y valoración de los diversos medios que pueden emplearse para llevar al juez la
convicción sobre hechos que interesan al proceso.

Prueba de los hechos: la regla general es simple y no presenta problemas, en cada


proceso debe probarse todo aquello que forma parte del presupuesto fáctico para la
aplicación de las normas jurídicas, a menos que este exceptuado de prueba por ley. En
el proceso de jurisdicción voluntaria, lo constituyen todos los hecho invocados por las
partes inicialmente y durante su trámite, o que implícitamente sirven de fundamento a
las peticiones que se formulan al juez. En el proceso contencioso civil, laboral y
contencioso administrativo el tema está formado por los hechos alegados por las partes
en la demanda y como excepciones, que no estén exentos de prueba por la ley y los
accesorios a aquellos. Pero en este tipo de procesos surgen dos nociones importantes
que influyen: la afirmación de los hechos o la discusión del hecho que delimitan el tema
de prueba. (Tema de la prueba se entiende lo que en cada proceso debe ser materia de
la actividad probatoria; o sea los hechos sobre los cuales versa el debate).

57
Cuando nos encontramos con la afirmación del hecho por una de las partes, o de ambas
de acuerdo, produce un doble efecto: el de vincular al juez, en cuanto éste tiene el deber
de considerarla al adoptar su decisión, para definir si se encuentra o no probada y si
goza o no de exención de prueba y sus efectos jurídicos. El segundo efecto es que
delimitan los hechos que el juez puede tener en cuenta como fundamento de su decisión,
al estarle prohibido considerar los no afirmados.
Cuando nos encontramos con la segunda noción mencionada, la controversia o
discusión sobre tales hechos, delimita en definitiva la necesidad de probarlos por los
medios autorizados en la ley procesal, salvo los hechos que por otros motivos estén
exentos de prueba.
El tema de prueba se halla circunscripto a los hechos controvertidos y de demostración
necesaria (cuando la ley exige su acreditación no obstante su admisión o el acuerdo de
partes) en el artículo 145 del código procesal de Santa Fe. Además impone el rechazo de
las pruebas ofrecidas, por ser ajenas al tema probatorio, o prohibidas por la ley, o
notoriamente dilatorias, propuestas con el objeto de entorpecer la marcha del proceso, o
manifiestamente superfluas.

A continuación agrego una breve explicación por parte de Alvarado Velloso de la


prueba de los hechos:
Como la etapa probatoria viene después de la correspondiente a la de negación por el
demandado de los hechos afirmados por el actor. Si ambos contendientes están de
acuerdo acerca de la existencia de los hechos afirmados (no hay negación de ellos) se
dice que no hay controversia. En este supuesto quedan equiparadas la contestación
evasiva y admisión tacita de hechos por falta de negación específica.
Por lo contrario, si en la etapa pertinente hubo negación, los hechos controvertidos
deberán ser probados.
Puede ocurrir en algunos casos de no existir negación, y por ende no haber hechos
controvertidos, el actor deba probarlos del mismo modo que si hubieran sido negados,
esto ocurre siempre que:
 Este comprometido el orden público (ejemplo: litigios que versan sobre estado
de familia).
 Haya respuesta en expectativa de los defensores de ausentes, de los herederos
de un causante, del curador de un insano, etc, a quienes la ley autoriza a no
negar hechos y permite que efectúen una negativa genérica solo para provocar
el contradictorio.

Hechos exentos de prueba:


Hay varios tipos de hechos respecto de los cuales están exentos de confirmación (ser
probados):
 Hechos confesados o admitidos por ambas partes: para que necesite prueba un
hecho no basta su afirmación como presupuesto de la pretensión o excepción,
sino que es indispensable que no esté admitido expresa o tácitamente o
confesado por la otra parte, antes de abrirse la etapa probatoria, porque si lo está,
esa admisión o confesión es prueba suficiente, salvo norma en contrario.
Cuando el hecho ha sido confesado judicialmente por la parte contraria, antes del
proceso o en la contestación de la demanda, o antes de abrirse a prueba, se
produce el mismo efecto jurídico procesal, esto es, queda eliminado del tema o
necesidad de prueba, a menos que la ley exija un medio distinto.
No basta el silencio del adversario para que el hecho se considere admitido,
salvo norma legal que lo diga o que tácitamente lo consagre. La admisión del

58
hecho produce el doble efecto procesal de obligar al juez a tenerlo en cuenta y a
considerarlo suficientemente probado (a menos que la ley exija otro medio
especial, o que la parte que lo admita carezca de facultad para confesar o que el
juez sospeche colusión o fraude, o que el hecho sea contrario a otro notorio o
parezca imposible por contrario a reglas elementales de la experiencia).
Cuando la ley exime de prueba al hecho por no ser discutido o negado, en
realidad presume su admisión. Esto ocurre cuando se dispone que a falta de
oposición se dicte sentencia sin abrir a pruebas la instancia, pues equivale a
ordenar al juez que tenga como cierto los hechos de la demanda; en este caso se
trata mas bien de una admisión general de los hechos de la demanda, o de su
reconocimiento.
El artículo 143 del código de procedimiento expresa que la falta de contestación
a la demanda, aun en juicio de rebeldía, o a la reconvención, implica el
reconocimiento de los hechos articulados por el actor o reconviniente, sin
perjuicio de la prueba en contrario que produjere el demandado o reconvenido.
Omitida la contestación, se llamara los autos para sentencia, si correspondiere
por no existir hechos de demostración necesaria; decreto que se revocara si
aquéllos solicitaren la apertura de causa a prueba.
 Hechos presumidos legalmente: cuando un hecho goza de presunción legal, sea
que admita o no prueba en contrario, esta exento de prueba, y éste es
precisamente el objeto de las presunciones. El artículo 226 del código procesal
explica lo anteriormente escrito.

 Hechos cuya prueba prohíbe la ley: si la ley prohíbe probar un hecho por razones
de moral o de otro orden, ese hecho resulta excluido del objeto concreto de
prueba, aún cuando se relaciona con la materia debatida y constituya un
presupuesto de la pretensión o excepción. Dichos hechos se establece en las
leyes de fondo; en el código civil encontramos en el artículo 326, 341,342
(materia de familia).

 Hecho materia de cosa juzgada o de decisión prejudicial: si el hecho está


reconocido en sentencia con valor de cosa juzgada o que constituya
prejudicialidad, es obvio que no necesita otra prueba.

 Hechos no pertinentes e irrelevantes e imposibles: si el hecho no puede influir en


la decisión, su prueba es claramente innecesaria. En este caso el juez debe
rechazar la prueba, por economía procesal, pero solo cuando sea absoluta o
manifiesta la impertinencia. El artículo 145, establece que la prueba deberá
recaer sobre los hechos contradichos o afirmados en el proceso. El juez no podrá
pronunciarse antes de la sentencia sobre la pertinencia de los hechos alegados o
de la prueba solicitada. Pero será desechada la que sea notoriamente
improcedente o prohibida por la ley.

 Los hechos indefinidos. El problema de la prueba de las negaciones y


afirmaciones indefinidas. Es frecuente leer o oír afirmaciones: las negaciones no
deben ser probadas, o quien niega no esta obligado a probar su negación y la
carga de la prueba corresponde a quien afirma. “Estos planteos son erróneos”.
El principio del derecho Romano de quien niega no necesita probar, es cierto
sólo cuando el demandado se limita a negar los hechos alegados, y no propone
excepciones, o el imputado los que se le imputan. Diferente es el caso cuando las

59
partes alegan hechos negativos como fundamento de sus pretensiones o
excepciones, pues entonces no todos son de igual naturaleza, ni producen unos
mismos efectos jurídicos en materia de prueba. Desde este punto de vista puede
formularse la siguiente clasificación:
 Negaciones substanciales o absolutas: como por ejemplo en mi predio
no existe petróleo, nunca he tenido propiedad inmueble en ninguna parte
o en cierta ciudad. O Pedro no me ha pagado los mil pesos, o no me ha
entregado la cosa que me debe, pues eso no significa que la conserve en
su poder. Estas negaciones no requieren prueba

 Negaciones formales o aparentes: son aparente ya que en el fondo


contienen una afirmación contraría. Por ejemplo: esta piedra no es un
diamante, lo que se puede afirmar que es otra especie; este inmueble no
pertenece a Juan, es decir, pertenece a otra persona o al estado. Este
terreno nunca ha sido cultivado o ni edificado, lo cual significa afirmar
que siempre ha estado sin cultivo ni construcciones; en el último caso la
afirmación implícita es de carácter indefinido, y en los demás, definida o
concreta. Sólo los que contienen una afirmación indefinida están
exentas de prueba.

 Las negaciones formales se subdividen en negaciones de derecho, de


cualidad y de hecho. Las de derecho se refieren a la titularidad de un
derecho, a las condiciones requeridas por la ley para su existencia o para
la validez de un acto jurídico, o a la calificación jurídica del acto, y
equivalen a afirmar una situación o condición jurídica opuesta a una
distinta naturaleza jurídica del acto, por lo cual requieren prueba. Por
ejemplo, este contrato no es de mutuo, vale decir que es jurídicamente de
otra especie. Las de cualidad ocurren cuando se niega a alguien o algo
una determinada cualidad, y entonces en realidad se esta afirmando la
opuesta (por ejemplo: Juan no es legalmente capaz, lo cual significa
afirmar que es incapaz por demencia, sordomudez, menoría de edad o
interdicción). La opuesta es la que debe probarse. Las negaciones de
hecho se refieren a los hechos en general, que en el fondo equivalen a
afirmar el hecho contrario, sea este concreto o indefinido. Las
afirmaciones indefinidas (ejemplo: nunca he usado vestido negro, esto
es, siempre los he usado de otro color) están exentas de prueba. Las
afirmaciones concretas (ejemplo: este metal no es oro, lo cual supone que
es de otra especie) deben probarse.
De la clasificación que acabamos de exponer se derivan las siguientes conclusiones: las
únicas verdaderas negaciones son las substanciales o absolutas; las negaciones formales
son el fondo afirmaciones redactadas negativamente; las únicas negaciones que no
exigen prueba son las sustanciales y las formales indefinidas de hecho, por la
imposibilidad de suministrarla en razón de su carácter indefinido y no de la negación
misma; las demás negaciones se prueban demostrando el hecho positivo contrario, bien
sea directamente o mediante indicios o indiferencias de otros hechos, y por este motivo,
tanto el demandante, cuando base en ellas las pretensiones, como el demandado, cuando
las alegue para sus excepciones, están sujetas a la carga de probarlas; si el demandado
se limita a negar expresamente los hechos alegados por el actor, tal negación no
requiere prueba, porque esta corresponde probar por el actor; lo mismo ocurre si el

60
demandado niega el hecho indirectamente, alegando que el verdadero es otro (en este
caso, el demandado puede abstenerse de probar el hecho distinto que alega mientras el
demandante no haya demostrado lo primero, y si esto sucede, la carga de la prueba del
demandado se refiere al hecho positivo que alega y no a la negación del afirmado por
actor.

 Los hechos notorios: son aquellos hechos permanentes,


ocasionales o transitorios (las verdades históricas por ejemplo), conocidos por el común
de la realidad social y cultural. La doctrina discute el grado de conocimientos de los
hechos. Lo importante es que el juez conozca o pueda conocer esa notoriedad del hecho,
bien sea por su conocimiento personal o por la prueba aducida por las partes
(testimonial o pericial), que la comparta y que este convencido del hecho mismo.
Existen hechos notorios transitorios que son la mayoría de los
conocidos como verdades históricas (guerras, revoluciones,
terremotos). También hay hechos notorios permanentes que son los
geográficos (altura de montañas, mares que existen, etc).
Estos hechos están eximidos de prueba, aún cuando no lo acepten las
partes de común acuerdo e inclusive se discuta.

Finalidad de la prueba: ¿Para que probamos en el proceso? ¿Qué se persigue al


llevarle al juez la prueba? La prueba extraprocesal desempeña la función de brindar
seguridad a las situaciones jurídicas y más comercialidad a los derechos reales y
personales enajenables, lo mismo que prevenir y aún evitar los litigios. La prueba
judicial puede enfocarse desde el punto de vista de la parte que la suministra o del juez
que la valora. La parte que la suministra pretende con ella vencer en el litigio o
conseguir su pretensión en el proceso voluntario; y el juez pretende convencerse de la
realidad o verdad para declararla.
Tenemos casos en que la prueba puede ser considerada como un arma de ataque y
defensa, como en los procesos contenciosos, donde se busca obtener lo pedido en la
demanda y las excepciones o conseguir su rechazo. Pero estos fines individuales y
concretos que cada interesado busca con la prueba en el proceso, siempre en su favor y
para su beneficio, no representan el fin que le corresponde por si misma, por su
naturaleza y función procesal.

Hay tres teorías que establecen el fin de la prueba:


 La que considera como fin de la prueba judicial el establecer la
verdad.
 La que estima que con ella se busca producir el convencimiento del
juez o llevarle la certeza necesaria para su decisión.
 La que sostiene que como principal fin es la de fijar los hechos en el
proceso.
Las pruebas son los medios para llevar al juez, en el proceso, un conocimiento (que
puede ser verdad o no), sin que por ello dejen de cumplir el fin a que están destinadas:
permitirle al juez resolver el litigio o la petición del proceso de jurisdicción voluntaria,
con arreglo a lo que considera que es la verdad.
Podemos concluir que el fin de la prueba sostenido por gran parte de la doctrina es darle
al juez el conocimiento o la certeza sobre los hechos, que es la creencia de conocer la
verdad o de que nuestro conocimiento se ajusta a la realidad, lo cual le permite adoptar
su decisión; su fin se satisface, sea que esa certeza corresponda a la realidad, en cuyo

61
caso se estará en la verdad, o que se encuentre desligada de ella y entonces existirá un
error.

Prueba del derecho: uno cosa es que pueda producirse prueba judicial para establecer
que existe la norma (copia ley, testimonios o dictamen de peritos sobre la constumbre,
certificaciones oficiales, etc) y otra muy diferente que sea necesario aducir esa prueba o
llevarla oficiosamente con las formalidades procesales requeridas para la prueba de los
hechos. Lo que se intentara explicar a continuación es cuando puede ser necesaria la
prueba de esas normas:
 Normas legales nacionales para el territorio del Estado: las reglas de derecho
contenidas en las leyes o decretos con valor de leyes del Estado, vigentes en su
territorio, deben ser conocidas por el juez, que tiene la obligación de
averiguarlas y estudiarlas, como también de aplicarlas oficiosamente de acuerdo
con la interpretación que libremente le de. Por consiguiente no son tema de
prueba.
 Normas nacionales escritas de vigencia local o seccional: se exime de prueba
toda norma, o regla de derecho nacional, rija o no en todo el territorio y
provenga del órgano central o de órganos seccionales (como las ordenanzas, los
acuerdos o los decretos).
 Normas consuetudinarias nacionales: la necesidad de la prueba procesal de
costumbre, cuando la suple a la ley o la complementa, depende de la política
legislativa adoptada en cada país. Nuestro sistema consagras que el uso, la
costumbre o la práctica no pueden crear derecho sino cuando las leyes se
refieran a ellos o en situaciones no regladas legalmente. El artículo 217 del
código de comercio establece que las palabras de los contratos o convenciones
deben entenderse en el sentido que les da el uso general, aunque el obligado
pretenda que las ha entendido de otro modo.
 Normas legales o consuetudinarias extranjeras: la mayoría de los autores
aceptan que estas deben ser objeto y tema de prueba. Se debe decretar
oficiosamente esa prueba cuando sea necesaria y las partes no la hayan
suministrado o aparezca incompleta.
 Las reglas o máximas de la experiencia: no son objeto de prueba por si mismas,
sino que constituyen elementos para la formación del criterio del juez, como
también de las partes, peritos y testigos sobre los hechos que se aplican. Por lo
tanto no deben probarse.

Fuentes y medios de prueba:


El medio de prueba consiste en la actividad del juez, de las partes o de terceros,
desarrollada dentro del proceso, para traer fuentes de prueba. Esta actividad se realiza
de la forma indicada en nuestros códigos de procedimientos.
Las fuentes de prueba son las personas o las cosas cuya existencia son anteriores al
proceso e independientes de él, que tienen conocimiento y representan el hecho a
probar.
En la prueba documental los documentos son fuentes, pero su presentación al juicio se
hace en la forma establecida por la ley procesal (medio), que también prevé la manera
de comprobar la autenticidad en caso de desconocerse un documento privado, o de
impugnarse el instrumento público. En la prueba de informes, los hechos que resultan
de la documentación, archivo o registros contables del informante, son fuentes; el oficio
requiriendo el informe y la contestación a tal requerimiento son los medios. En la
confesión, la parte que absuelve posiciones es la fuente, mientras que la declaración es

62
el medio. El testigo es la fuente y su declaración es el medio. En la prueba de peritos, las
personas o cosas que van a ser objeto de un examen judicial son las fuentes, mientras
que perito y su dictamen son medios de prueba.
Los medios son ilimitados; en cambio las fuentes son limitadas, no pueden crearse por
orden judicial, existen o no existen, y si existen deben procurarse los medios para que el
juez las conozca.
La importancia de la diferenciación de estos conceptos permite explicar las facultades
judiciales para esclarecer los hechos controvertidos. El juez civil puede ordenar medios
de pruebas para verificar los hechos afirmados por las partes, pero, en principio, no
puede investigar la existencia de fuentes de prueba.

Prueba producida en otro expediente (trasladada): se entiende que es aquella que se


practica o admite en otro proceso y que es presentada en copia autentica, o mediante el
desglose del original si se trata de documento y la ley lo permite, en segundo proceso.

Su valoración: la prueba producida en otro juicio debe ser objeto de nueva valoración
por parte del juez que interviene en el proceso donde se intenta hacer valer, sin que el
nuevo juez se sienta en manera alguna constreñido por la apreciación hecha en el juicio
anterior. Si sobre la base de la prueba producida en un juicio se consideran acreditados
determinados hechos, esa decisión no obliga al nuevo juez, aún cuando se trate de los
mismos hechos.
Los efectos de la cosa juzgada sólo se refieren a la decisión del juez, a la parte
dispositiva de la sentencia, pero no alcanzan a los hechos que en los considerandos de la
misma se tiene por acreditados.
La valoración de la prueba hecha por el juez en un proceso determinado, sólo puede
servir de orientación en otro proceso, pero la sentencia que se dicte en este último no
puede fundarse exclusivamente en esa valoración. Aún cuando los mismos hechos se
pongan nuevamente en discusión es ocasión de un proceso diverso, en cada proceso el
juez debe construirse en un laboratorio nuevos instrumentos de investigación, y
comenzar otra vez sobre los mismo hechos, según Calamandrei.
La prueba practicada en un proceso cuya caducidad o perención se declaro válida, entre
las mismas partes o contra una de éstas, no requieren ratificación y tienen la eficacia
probatoria que de su contenido se concluye. El artículo 237 del código de procedimiento
de Santa Fe establece que “no obstante la perención, las partes podrán usar en el nuevo
juicio que promovieron las pruebas producidos en el primero”.

CARGA DE LA PRUEBA:

Carga, concepto jurídico: poder o facultad (en sentido amplio), de ejecutar libremente,
ciertos actos o adoptar ciertas conductas previstas en la norma para beneficio y en
interés propio, sin sujeción ni coacción y sin que exista otro sujeto que tenga el derecho
a exigir su observancia, pero cuya inobservancia acarrea consecuencias desfavorables.
Goldschmit la define como imperativo del propio interés.
Carnelutti sitúa a la carga como la tercera figura del deber, distinguiendo los actos
debidos (obligaciones) de los actos necesarios (cargas). La carga sería entonces una
necesidad, si se quieren lograr determinados fines

Cargas, deberes y obligaciones procesales: hay autores que consideran a la carga


como un deber (Carnelutti y Couture). Mientras que otros la consideran como un poder,
derecho o facultad (Michelli, Barrios de Angelis).

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La carga no es un derecho subjetivo, ya que no hay vínculo jurídico entre las partes ni
entre estas y el juez, cuando se trata de cargas procesales. Ejemplo: no podemos decir
que constituye un derecho el comparecer a absolver posiciones a la audiencia que
designa el juez a ese efecto.
Para realizar una mejor diferenciación con derechos y obligaciones se enuncian los
siguientes caracteres de la carga:
 No existe sanción alguna por no adecuarse la conducta a la prevista en la norma
que consagra la carga. Ejemplo: la rebeldía del demandado puede conducir al
dictado de una sentencia desfavorable al rebelde, pero el estado no hace esto
para castigarlo ni para obligarlo a comparecer o a responder, sino con el único
objeto de liberar, por el medio mas expedito posible, a la sociedad, y a si
mismo, de la litis pendiente.

 En la carga no hay coacción, tratándose de cargas procesales, los litigantes


adecuan sus conductas a las previstas en la norma que crea la carga, estimuladas
por el deseo de triunfar. Cuando en el proceso el juez o la parte contraría
pueden exigir compulsivamente el cumplimiento de una determinada conducta,
no estamos frente a una carga sino a un deber u obligación.

 La adecuación de la conducta a la norma se hace en la carga, en interés propio.


La contraria generalmente se beneficia con el incumplimiento de su adversario,
mientras que en las obligaciones su cumplimiento está previsto en interés del
acreedor, éste, por lo menos, es el efecto principal, aun cuando el deudor puede
tener interés en cumplir o liberarse.

 En algún supuesto puede suceder que el cumplimiento de la carga beneficie al


adversario, tal sería el caso de que la comparecencia de absolvente coloque al
ponenente en mejor situación que la incomparecencia, porque el primero
confeso expresamente los hechos.

 Las consecuencias derivadas de la inobservancia de la carga, son de carácter


mediato y eventual.

Carga de la prueba: es una noción procesal, que contiene la regla de juicio por medio
de la cual se le indica al juez cómo debe fallar, cuando no encuentra en el proceso
pruebas que le den certeza sobre los hechos que debe fundamentar su decisión, e
indirectamente establecer a cuál de las partes le interesa la prueba de tales hechos, para
evitar las consecuencias desfavorables a ella o favorables a la otra parte. Con respecto a
las partes indica a quien corresponde evitar que falte la prueba de cierto hecho, si
pretende obtener una decisión favorable basada en él, pero si el juez o la contraparte lo
suministran, queda cumplido el interés de quien era sujeto de tal carga y satisfecha ésta.

La carga de la prueba tiene dos aspectos; subjetivo y concreto, que aconseja


determinada conducta a las partes en un proceso determinado, sino quiere correr el
riesgo de una sentencia desfavorable. Y objetivo y abstracto, que le impone al juez el
deber de fallar de determinada manera ante la ausencia de prueba.

Fundamento de la noción de carga de la prueba y de su distribución: su fundamento


se encuentra en los principios de la lógica, la justicia distributiva y la igualdad de las
partes ante la ley y el proceso, esto es, en la necesidad de darle a todas las partes una

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adecuada e igual oportunidad y una guía segura para la defensa de sus derechos y
libertades.

Reglas generales sobre la carga de la prueba: la falta de prueba perjudica a la parte


que tenía la carga probatoria; para determinar esto último se han establecido distintas
reglas, las que se imponen al juez y cuya observancia es obligatoria a él. Estas reglas
tienen su origen en el antiguo derecho romano, donde la carga de la prueba correspondía
por igual a ambas partes, mientras que en los procesos germanos primitivos, dicha carga
recaía sobre la parte mas débil social y económicamente, fuera demandante o
demandado. Pero a partir de la edad media se sistematiza el concepto de carga de la
prueba, enunciándose las siguientes reglas o teorías:
 El actor tiene la carga de la prueba o tesis que impone al actor la carga de
la prueba: correspondía al actor producir la prueba y, a su vez, el demandado
que oponía excepciones se transformaba en relación con la carga de la prueba,
en actor. Por ejemplo en relación con las obligaciones, el actor no solo debía
probar la existencia de la misma, sino también que ella no se había extinguido,
lo que no es aceptado en la actualidad. La situación del demandado se asimilaba
a la del actor en el supuesto de oponer defensas o excepciones, en cuyo caso
tenía la carga de probar los hechos en que ellas se fundaban, pero si no oponía
ninguna defensa, la prueba debía producirla el actor en su totalidad.

 La carga es de quien afirma, no de quien niega o teoría que impone la


prueba a quien afirma y que exime de ella a quien niega: la carga recaía en
quien afirmaba un hecho y liberaba de ella a quien se limitaba a negar los
hechos expuestos por su contrario. Si el demandado negaba la existencia de la
obligación, por ejemplo, el actor debía probar el hecho constitutivo, pero si el
primero afirmaba haber pagado, él tenía la carga de probar esa afirmación. La
critica que recae sobre esta teoría es que no siempre es posible distinguir la
simple negación con la alegación de un hecho contrario: si niego haber
conducido un automóvil a excesiva velocidad, estoy afirmando que lo hacia a
velocidad reglamentaría.

 La clasificación en hechos constitutivos, impeditivos o extintivos o teoría


que recurre a la naturaleza constitutiva o, por el contrario, extintiva,
invalidativa o impeditiva de los hechos: así los clasifica Chiovenda. El autor
tiene la carga de probar los hechos constitutivos: por ejemplo la existencia del
contrato. Si el demandado alega hechos extintivos (el cumplimiento de la
obligación) o impeditivos (incapacidad al momento de contraer la obligación) el
autor debe probar la existencia de los mismos. Esta tesis fue recogida en
términos generales, pero ha recibido criticas, como por ejemplo, si mediante una
pretensión de sentencia meramente declarativa, el actor demanda para que se
declare prescripta la obligación, el tendrá la carga de probar el hecho extintivo
en que se funda su pretensión.

 Los hechos normales o teoría de lo anormal y lo norma: de acuerdo a esta


tesis, se impone la carga a quien alega el hecho anormal, porque el normal se
presume.

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 La carga de la prueba sobre quien pretende innovar: quien quiere cambiar
una situación jurídica debe probar los hechos en que funda tal cambio. Quien
pretende una condena quiere innovar en la situación de libertad de la cual goza
el demandado; por ello tiene que probar la existencia del vínculo jurídico en que
funda su petición; si logra acreditar ello se encuentra en una situación favorable.
Quien alega un hecho contrario a la posición que adquirió su adversario, debe
probar la verdad de ese hecho. Alsina dice que en algunos supuestos la carga de
la prueba corresponde a quien pretende el reconocimiento de una situación
jurídica y no su innovación, y la ejemplifica con la demanda para que se declare
adquirido el dominio por prescripción, en este caso el fin del demandante no es
innovar, sino consolidar su derecho, no obstante tiene la carga de probar la
posesión pacífica e ininterrumpida durante todo el plazo legal.

 Teoría que impone a cada parte la carga de probar los presupuestos o


supuestos de hecho, de la norma jurídica que le es favorable: esta teoría
parte de la base de que es imposible elaborar una regla general fundado en
criterios que solo contemplan la situación procesal de las partes y el que toma
aisladamente el hecho objeto de la prueba (afirmación o negación, normal o
anormal, esencial o innovativo, constitutivo o extintivo e impeditivo). Sino que
se debe basar en un criterio diferente que consiste en considerar la posición que
el hecho ocupa en relación con el fin jurídico perseguido por cada parte y con la
norma legal que la contempla como presupuesto de su aplicación y de tal
premisa se deduce la regla general: quien resulte favorecido por esa norma,
porque consagre el fin jurídico que persigue, soporta la carga de probarlo,
(excepto que por estar admitido o confesado por la otra parte no requiera mas
pruebas, o que esté exenta de esta por gozar de presunción o notoriedad o por
su carácter indefinido).

 La distribución de la carga de la prueba según el efecto jurídico exigido: la


distribución de la carga de la prueba parece establecida principalmente por la
posición ocupada por la parte misma, respecto del efecto jurídico pedido. Un
hecho puede ser constitutivo o extintivo según cuál sea el efecto jurídico
perseguido por las partes. Ejemplo: cuando el actor exige la resolución del
contrato por incumplimiento del demandado, el incumplimiento de la
contraparte representa un hecho constitutivo del efecto jurídico exigido por el
actor.

Hernando Devis Echandía junto a Alvarado Velloso establecen las reglas para la
distribución de la carga de la prueba, criticando las reglas anteriormente enumeradas y
explicadas. Estos autores consideran:

 Contenido de la regla: no se trata de fijar quien debe llevar la prueba, sino quien
asume el riesgo de que falte. Por consiguiente, si el adversario o el juez llevan la
prueba del hecho, queda satisfecha la cabalidad (firmeza) de la carga,
exactamente como si la parte gravada con ella la hubiera suministrado. En
consecuencia, no es correcto decir que la parte gravada con la carga debe
suministrar la prueba o que a ella le corresponde llevarla; es mejor decir que a
esa parte le corresponde el interés de que tal hecho resulte probado o de evitar
que se quede sin prueba y, por consiguiente, el riesgo de que falte.

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 Cual es el criterio correcto: estos autores consideran que el único criterio
aceptable para establecer una regla general de la carga de la prueba, debe
contemplar únicamente el efecto jurídico perseguido por la posición procesal de
las partes en relación con la norma jurídica que lo consagra y debe aplicarse. Lo
fundamental es la posición sustancial de la parte en el proceso, respecto al
efecto jurídico que del hecho debe deducirse, de acuerdo con la norma jurídica
por aplicar que lo contempla como su presupuesto.
Recordemos que solamente los hechos controvertidos permiten que el juez
recurra a la regla de la carga de la prueba, debido a que su admisión por el
adversario los deja suficientemente probados.

 Regla general para su distribución: a cada parte le corresponde la carga de


probar los hechos que sirven de presupuesto a la norma que consagra el efecto
jurídico perseguido por ella, cualquiera que sea su posición procesal. Es decir,
esa parte soporta el riesgo de la falta de tal prueba, el cual se traduce en una
decisión desfavorable.

 Ejemplo para explicar esta regla: para la aplicación de la norma que declara hijo
del marido al habido por su esposa durante el matrimonio, no es presupuesto el
hecho de la paternidad del marido (que se presume), sino los del matrimonio y
los del parto; en cambio la norma que declara a ese hijo ilegitimo, tiene como
presupuesto el hecho de la paternidad de un tercero y los que en ella se
contemplan como impeditivos de la paternidad del marido, como el adulterio de
la esposa o la imposibilidad de relaciones sexuales con aquel. En este caso,
quien invoque el efecto jurídico, lleva la carga de probar los hechos que la
norma que lo consagra tiene como presupuestos.
Otro ejemplo: la carga de probar el nacimiento de una obligación o su extinción
por cumplimiento u otra causa; corresponde a quien lo alega, por ser
presupuesto de la norma que consagra el efecto jurídico perseguido.

La carga de la prueba y la sana crítica. La carga dinámica. La carga dinámica de la


prueba consiste en la movilidad de la misma para adaptarse a los casos particulares.
Ciertos juristas han pregonado a favor de una idea de solidaridad y colaboración de las
partes en la etapa probatoria del proceso, sin sujetarse a reglas rígidas que hagan recaer
todo el peso en una o en otra parte. Esta teoría dinámica, según la cual en cada caso
debe analizarse quien esta en mejor situación para producir la prueba del hecho
controvertido, tiene especial importancia en los juicios de mala praxis profesional. La
jurisprudencia se inclina por mantener, los principios tradicionales en materia
probatoria, salvo los casos expresamente previstos por la ley, como el de los daños
ocasionados con las cosas, (artículo 113 del código civil) quien alega la culpa o
negligencia como fundamento de su pretensión, tiene la carga de probarla.

Valoración de la prueba: esta actividad consiste en reconocer y estimar el mérito de la


prueba. La realizara el juez en el momento de dar la sentencia definitiva. Lo que no
excluye que la valore durante su producción para efectuar una selección e eliminar lo
impertinente. En nuestro derecho positivo existen normas que imponen al juez vigilar el
desarrollo del proceso y juzgar el valor de las pruebas que se ofrecen y que se van
produciendo. El juez puede ordenar medios de prueba que no hayan sido ofrecidos por
las partes. Esa valoración parcial hecha durante el curso del proceso, no obliga al juez
respecto de su apreciación final y, en tal sentido, puede rechazar como elemento de

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convicción una prueba que ha sido admitida, si al sentenciar considera que no debio
serlo.

Sistemas:
 En las pruebas legales es el legislador quien le señala al juez el valor que éste
debe acordar a cada medio probatorio. Ese valor anticipado es impuesto al
magistrado sin que importe el grado de convencimiento que le produjo en el
caso concreto que debe juzgar. En nuestro derecho es prueba legal el
instrumento público, que hace plena fe hasta que sea aguido de falso, por acción
civil o criminal, de la existencia material de los hechos que el oficial público
hubiese anunciado como cumplidos él mismo, o que han pasado en su presencia.
 En la libre convicción, el razonamiento del juez no se apoya necesariamente en
la prueba que le exhibe el proceso ni en los medios de información que pueden
ser fiscalizados por las partes. El magistrado adquiere el convencimiento de la
verdad con la prueba de autos, fuera de la prueba de autos y aun contra la prueba
de autos.
 La sana crítica exige un proceso lógico de razonamiento, debiendo el juez
explicar dicho proceso.

Eschandía explica que solo hay dos formas de apreciar la prueba: fija el valor el
legislador o lo establece libremente el juez.
En la mayoría de nuestros códigos provinciales el legislador ha encomendado a los
jueces apreciar libremente las pruebas, pero siempre sujetos a principios que eviten
arbitrariedad.

La frase sana critica aparece por primera vez en la ley de enjuiciamiento civil española
de 1855, referida a la apreciación de la prueba de testigos.
La sana critica es el sistema que concede al juez la facultad de apreciar libremente la
prueba pero respetando las reglas de la lógica y las máximas de experiencia. La sana
critica esta conformada por criterios de lógica no precisados en la ley, meras directivas
señaladas al juez cuya necesaria observación queda sometida a su prudencia, rectitud y
sabiduría.
La corte suprema de la justicia de la nación decidió que la valoración de la prueba es
una cuestión privativa de los jueces ordinarios, cabe la tacha de arbitrariedad cuando la
sentencia se apartó de las constancias del expediente, o cuando el fallo se fundó en la
falta de demostración de una relación causal que surge manifiesta de los hechos.

Nuestro código procesal mantiene igualmente el sistema de la sana crítica.


Permitiéndole al juzgador que piense y describa su razonamiento de modo tal que
permita al perdedor comprender las razones objetivas y subjetivas que influyeron en su
ánimo al tomar la decisión que le es adversa y además, posibilitar al superior igual
conocimiento para que pueda saber lo mismo y, eventualmente, atender los agravios del
impugnante.

PROCEDIMIENTO PROBATORIO:

Apertura de la causa prueba: contestada la demanda y existiendo algún hecho


controvertido por los interesados (o, en defecto de ello, alguno que no ha sido

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contradicho pero que debe ser de demostración necesaria en función del valor jurídico
en litigio) el juzgador debe ordenar la apertura de causa prueba.

Momentos de la actividad probatoria:


 OFRECIMIENTO: la ley fija un determinado plazo para que cada parte
ofrezca los medios de prueba con los cuales cree que convencerá al juzgador. El
plazo debe ser necesariamente común y ha de correr a partir del día hábil
siguiente al de la fecha en la cual ambos contendientes han consentido el decreto
que ordenó la apertura. La ley debe prever la posibilidad de efectuar
ofrecimiento posterior, sólo cuando se invocan hechos nuevos después de la
apertura de la causa prueba.

 ACEPTACION: no se encuentra habitualmente legislada. En orden a


resguardar la bilateralidad de una audiencia cada uno de los litigantes debe
conocer inicialmente los medios de confirmación de los cuales se valdrá su
contradictor, para tener oportunidad de decir y de hacer lo que fuere respecto de
ello. Todo juez debe sustanciar los ofrecimientos de medios probatorios
confiriendo traslados recíprocos a ambas partes en litigio, para que actúen en
consecuencia a sus respectivos intereses. En caso de no haber oposiciones, el
juez podrá pasar inmediatamente y sin sobresaltos a etapa siguiente.

 ADMISION: ofrecidos los medios confirmatorios y consentidos por ambas


partes o resueltas por el juzgador las oposiciones deducidas, se abre esta etapa,
en la cual dicta resolución admitiéndolas ordenando su producción.
 PRODUCCION: se efectivizan cada medio de prueba presentado. Se cita a las
partes que absolverán posiciones, a los testigos que depondrán y a los peritos
que dictaminarán, se libran oficios y exhortos pidiendo informes y se agregan
los documentos que fueran menester, etc. En caso de que fracase la diligencia
probatoria, el eferente del medio respectivo ha de solicitar la designación de
nueva fecha para la realización de la audiencia que no se efectivizó. Se otorga un
plazo de tres días y otro más idéntico para que el surgimiento lo haga la
contraparte. Si así no se hace, se autoriza a declarar negligente al propio
oferente, con lo cual pierde toda chance posterior de repetir el medio. La ley
otorga en forma paralela al juez la facultad de ordenar por la vía de medidas para
mejor proveer la producción de la prueba fracasada por negligencia.

 ALEGACION: se considera una nueva etapa, una vez cerrada la apertura


prueba, para algunos autores. Esta etapa está conformada por el escrito que
hacen los abogados, en el cual trata de convencer al juez de que su parte ha
justificado completamente los hechos y el derecho que amparan su pretensión, al
tiempo que el contrario no ha hecho lo propio con el suyo, insistiendo en que el
juez sentencie oportunamente en su favor.

Prueba anticipada: puede aceptar la posibilidad de ofrecer, admitir y producir algún


medio de prueba antes de estar trabada la litis o, aún más, antes de deducir la demanda.
Esto ocurre cuando la ley permite probar ciertos hechos como medida cautelar previa a
un juicio. Esto último es bueno y aceptable en tanto no se vulnere el derecho de defensa.
Por ello, siempre y en todo caso debe ser citado adecuada y oportunamente para
concurrir al acto respectivo y, así, poder controlar el desarrollo la parte que puede
resultar perjudicada.

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El artículo 143 del código procesal de Santa Fe establece que la falta de contestación de
la demanda, aun en el juicio de rebeldía, o a la reconvención, implica el reconocimiento
de los hechos articulados por el actor o reconveniente, sin perjuicio de la prueba que
produjere el demandado o reconvenido. Omitida la contestación, se llamara los autos
para sentencia, si correspondiere; decreto que revocará si aquéllos solicitan la apertura a
prueba.

Prueba no prevista expresamente en la ley: será desechada la que sea notoriamente


improcedente o prohibida por la ley. Cuando se ofreciere idóneo y pertinente no
previsto de modo expreso por la ley, el juez establecerá la manera de diligenciarlo
usando el procedimiento determinado para otras pruebas que fuere analógicamente
aplicable.

Suspensión del término: el término prueba no se suspenderá por ninguna articulación o


incidente, salvo acuerdos de partes, o que se invocare fuerza mayor. En este último caso
el juez decidirá por fuerza mayor sin substanciación ni recurso alguno. Si no se hiciere
lugar a la suspensión, se considerar que el termino no ha sido interrumpido por la
solicitud. Si la suspensión se decretare, será necesaria la declaración expresa para que el
término vuelva a correr.

Formación de cuadernos: el actuario formara piezas separadas de cada uno de los


interesados; vencido el término la agregara a los autos y la causa seguirá su curso, sin
esperar el resultado de las diligencias probatorias; pero si ellas vinieran o se produjeran
antes de la sentencia serán tomadas en consideración.

Agregación de prueba después de los escritos ordinarios del pleito: las partes podrán
alegar sobre su mérito, salvo que se hubiese dictado la providencia de autos.

Autos relativos a la prueba: con excepción de lo dispuesto expresamente en contrario,


ningún auto es apelable.

Recurribilidad: se procederá el recurso de nulidad de la sentencia dictada en virtud de


un procedimiento en el que se hubiere negado el despacho de alguna diligencia
probatoria. Dicho recurso se tendrá por no interpuesto si se produce en segunda
instancia la prueba denegada en primera.

Prueba impertinente: es aquel que tiende a lograr convencimiento en el juzgador


acerca de la existencia de un hecho no litigioso.

Prueba improcedente: es aquel medio de prueba prohibido por la ley; ofrecido


extemporaneamente, luego del plazo respectivo; y el que se ofrece como ya producido
sin haberse respetado el control de las partes o sin haber sido ordenado regularmente por
el juez competente en el pleito o el que ha violentado el derecho a la intimidad de la
parte interesada o afecta la libertad, la moral, de los litigantes o de terceros.

Oportunidad para expedirse al juez en uno y otro caso: el juez debe evaluar siempre
la eventual pertinencia probatoria de un medio cualquier, lo que genera que todo juez
investigue en todo expediente si todo medio probatorio ofrecido es o no pertinente.

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Negligencia probatoria: el artículo 148 establece que: ninguna negligencia probatoria
podrá realizarse sin estar consentido el decreto que la ordene, salvo casos de urgencia
previstos… Fracasada una diligencia e prueba se tendrá a su ponente por desistido de la
misma, a menos que expresamente la urgiere dentro de los tres días de la fecha en que
conste en autos su no producción o que la contraparte lo hiciere dentro del mismo plazo
subsiguiente.

La producción de la prueba es la realización de actos procesales necesarios para que los


diversos medios concretos solicitados o decretados de oficio se incorporen o realicen en
el proceso. La ley procesal dispone términos preclusivos para la producción probatoria,
imponiendo a los interesados la carga de procurar que sean diligenciados dentro de los
respectivos plazos. Nace a partir de allí la llamada teoría de la negligencia en la
producción de la prueba.
La negligencia en la prueba consiste en la pérdida del derecho a producirla que tiene el
que la oficio, cuando ha ocasionado una demora injustificada, ya sea por acción u
omisión.
A los interesados les incumbe urgir para que las medidas de prueba sean diligenciadas
oportunamente. La parte contraria a la que ofreció la prueba puede pedir que el tribunal
declare a ésta negligente y, consecuentemente, impida su producción tardía.

Caducidad: junto con el pedido de negligencia en la producción de la prueba, que se


resuelve previa sustanciación, se establecieron una serie de supuestos de caducidad
objetiva por incumplimiento de ciertas cargas que la ley impone a quien la ofreció. Se
trata de casos que no están sujetos a la apreciación judicial y que imponen al juez el
deber de dar por perdido el derecho a producir la prueba de que se trate cuando se
verifican los hechos previstos por la norma. En rigor, siempre la causa de caducidad
será la negligencia e quien propuso la prueba, pero en una hipótesis la desidia es
apreciada libremente por el juez y en otra tasada por la ley. Se denomina a ésta última
caducidad objetiva y aquella caducidad por negligencia.
Principio que rigen en materia de negligencia: entre ellos encontramos:
 Salvo los supuestos de caducidad objetiva en que puede decretarla de oficio, el
juez no puede decretar la pérdida del derecho a producir la prueba por
negligencia si no lo solicita la otra parte.
 El pedido de declaración de negligencia se tramita por vía incidental.
 Para que proceda la declaración de negligencia es necesario que el período de
prueba este vencido.

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Bolilla V
Por: Camila González

PRUEBA DE CONFESIÓN. Art. 157 CPC. Código comentado PEYRANO.


Concepto: La confesión judicial es un medio de prueba establecido para las partes de
un proceso, mediante el cual se efectúan por el ponente, afirmaciones de hechos, en los
cuales la otra parte ha intervenido personalmente o de los que tiene conocimiento, y que
en principio resultan desfavorables a la posición por esta asumida en el pleito, debiendo
reconocerlas o negarlas en forma expresa.

El concepto brindado jurisprudencialmente dice que la prueba de confesión consiste en


la declaración por la cual una persona reconoce como verdadero un hecho susceptible
de producir contra ella consecuencias jurídicas.

Naturaleza jurídica: Se trata de un medio de prueba por el cual ambas partes declaran
sobre la existencia de hechos controvertidos en la litis, personales o de su conocimiento.
El ponente al formular las posiciones y el absolvente al reconocerlas o negarlas.

Recaudos que debe reunir para que sea válida y revista de eficacia probatoria:
° Plena capacidad civil del confesante al momento de declarar.
° La confesión debe tener una causa y objeto lícito. Que sea físicamente posible y
pertinente a los hechos alegados por alguna de las partes.
° Los hechos deben ser personales del confesante.
° Voluntad de declarar los hechos libremente, sin coacción.
° Además las condiciones de modo, tiempo, lugar previstas en la ley, art. 162 CPC. Por
ejemplo notificar al absolvente con una anticipación no menor a tres días al del acto, en
el domicilio real de aquel. En caso de no darse estas condiciones podrá pedirse la
nulidad de la confesión.

Capacidad: Capacidad para obligarse.

Hechos que pueden ser objeto de la prueba de confesión: Las posiciones pueden
versar sobre hechos personales del absolvente, sobre hechos de su conocimiento. No
pueden propender a que el absolvente formule apreciaciones personales.

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Efectos: La doctrina moderna tiende a tratar la prueba confesional como una prueba más
sometiendo su resultado a la valoración del juez en la sentencia. Hay supuestos en los
que se le reconoce carácter de plena prueba. (Art. 166 y 168)

Diferencias entre la confesión, el reconocimiento, la admisión y el allanamiento:


Con la admisión: Mientras que la confesión solo puede referirse a hechos propios,
personales del confesante, con aptitud para perjudicar su situación en el proceso, la
admisión puede materializarse respecto de hechos que son ajenos.
Con el reconocimiento: Con el reconocimiento de una obligación: art 718 CC. Es una
declaración por la cual una persona reconoce que está sometida a una obligación respeto
de otra.
Con el allanamiento: El allanamiento es un modo anormal de extinción del proceso
unilateral, que emana del demandado y que supone un reconocimiento de las
pretensiones. Se puede dar hasta el momento de llamamiento de autos.

Revocabilidad de la confesión o Retractación de la confesión: Sucede cuando lo que


se confiesa no se corresponde con la realidad. Puede ser por ardid, error, dolo, violencia.
El retractarse no produce una nueva confesión, invalida la anterior.

Clases de confesión: La doctrina distingue diversas formas en que la confesión puede


darse:
1) Extrajudicial: siempre constituirá un hecho a probar por cualquiera de los medios
probatorios admisibles. Por ejemplo: la historia clínica confeccionada por el
demandado.
2) Judicial espontánea: siempre será expresa, incorporada al proceso y oportunamente
valorada en la sentencia.
3) Judicial provocada: admite a su vez dos clasificaciones: expresa y ficta. Esta última
como consecuencia de aplicarse los apercibimientos legales por incomparecencia;
negativa a responder o respuestas evasivas.

Además la confesión puede ser:


Simple: el declarante se limita a confesar el hecho que lo perjudica. Por ejemplo: Si, le
debo $1000.
Calificada: el declarante confiesa el hecho pero le asigna una naturaleza jurídica a la
causa esgrimida por quien dice ser su acreedor. Por ejemplo: Si, yo recibí $1000, pero
en donación.
Compleja: el declarante confiesa el hecho, confiesa la causa jurídica alegada por quien
dice ser su acreedor, pero le añade alguna circunstancia relevante para poder resistir al
cumplimiento. Por ejemplo: Si, le debo, pero no esta vencido el plazo. O es cierto, hubo
un contrato de locación pero nada adeudo por tal contrato.
Compuesta: el declarante confiesa el hecho pero lo vincula a otro hecho separado y
diferente a raíz del cual favorece su resistencia al cumplimiento de lo pretendido. Por
ejemplo: Si, me presto $1000, pero el me debe $10.0000.
Divisible o indivisible: Excepción al principio de indivisibilidad.
La prueba de confesión, y la contestación de posiciones o afirmaciones conforman un
acto procesal, del contexto de las contestaciones pueden surgir contradicciones que no
permitan tener por confesado uno o mas hechos controvertidos, debiendo el juez valorar
las contestaciones que implican confesión como aquellas que desvirtúan tal conducta.
En caso de duda se interpreta a favor de quien absuelve.

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La regla de la indivisibilidad de la confesión se aplica cuando no se puede separar de la
declaración, aquello que le resulta desfavorable al confesante de lo que le resulta
favorable. Ello ocurre en las confesiones simples y también en las confesiones
calificadas. En las confesiones complejas, también el absolvente reconoce la posición,
pero alega a continuación la existencia de un hecho modificativo o extintivo
inseparable. Esta confesión es siempre divisible, de manera tal que el confesante tiene la
carga de probar los hechos añadidos por confesión. Por ejemplo: cuando confiesa que
debe, pero que aun no esta vencido el plazo, debe demostrar que el pagaré no está
vencido; o al reconocer que ha existido un contrato pero asegurar que nada adeuda, debe
demostrar que se han pagado las deudas por tal contrato, etc.

Absolución de posiciones. Concepto:


Es la confesión provocada en juicio, bajo juramento y por disposición del juez o a
pedido de la contraria.
Es el medio de prueba que tienen las partes para obtener la confesión de su contraria en
un proceso determinado bajo promesa o juramento de decir la verdad. Roland Arazi.

Ofrecimiento. Oportunidades para proponerla según la clase de juicio: Parte desde


la contestación de la demanda hasta el llamamiento de autos a sentencia. Su producción
dentro de dicho lapso no interrumpirá el curso regular del juicio. La confesión judicial
espontánea se puede hacer valer en cualquier oportunidad y forma dentro del proceso.
Llamados los autos para sentencia recluye la facultad de proponer la prueba confesional
de la contraria, no así la atribución de producir la confesional ofrecida en término.

Absolución de posiciones. Persona jurídica.


Podrán oponerla los representantes legales de las personas jurídicas en función de lo que
prevén los estatutos de esa persona jurídica y las leyes especiales, serían aquellos que
cuentan con facultades suficientes para obligar a su representada y surgiendo de los
instrumentos pertinentes la facultad para realizar actos de administración y disposición.

Jurisprudencialmente en nuestro país se exige que sea el director o gerente de la


persona jurídica.
Sin embargo, el código procesal civil de la nación da la posibilidad de hacer uso de
una opción, que es dentro de los cinco días de notificada la audiencia, a que absuelva
posiciones el representante elegido por el ponente, siempre que:
1) Alegare que aquél no intervino personalmente o no tuvo conocimiento directo de los
hechos.
2) Indicare, en el mismo escrito, el nombre del representante que absolverá posiciones.
3) Dejare constancia que dicho representante ha quedado notificado de la audiencia, a
cuyo efecto éste suscribirá también el escrito.
El juez, sin sustanciación alguna, dispondrá que absuelva posiciones el propuesto.
No habiéndose formulado oportunamente dicha opción o hecha la opción , en su caso, si
el absolvente manifestare en la audiencia que ignora los hechos, se tendrá por confesa a
la parte que representa.
En nuestra provincia se acepta de esta manera, es decir se admite el uso ésta opción,
pero no esta establecido normativamente en el código procesal provincial.

Sujetos a quienes se puede exigir la absolución de posiciones: Art. 158 CPC.

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1) El apoderado con poder especial; pero no será tenido por confeso si declara no contar
con las instrucciones necesarias -> el apoderado especial de la parte puede ser sujeto de
ofrecimiento y obligado a absolver posiciones en tal carácter. Si las posiciones refieren
a hechos anteriores a la vigencia del mandato general, el apoderado podrá excusarse de
responder en virtud a lo dispuesto en el art. 1881 inc 17 del CC.

2) Representantes de las personas jurídicas: Los representantes legales de las personas


jurídicas, que cuenten con facultades suficientes para obligar a su representada y
surgiendo de los instrumentos pertinentes la facultad para realizar actos de
administración y disposición. Jurisprudencialmente en nuestro país se exige que sea el
director o gerente de la persona jurídica. Si bien el oferente tiene derecho a que sea una
y determinada persona física quien lo haga, la misma resulta adecuado dirigirla al
“representante legal con facultad para obligar a dicha parte” ya que si se cita a quien
carece de facultades puede negarse a absolver en el mismo momento de la audiencia
aunque no haya objetado la citación.
3) Representantes de incapaces: Los menores adultos y los emancipados están
facultados para absolver posiciones en los supuestos que tienen capacidad para estar en
juicio. Los representantes de los incapaces deben absolver posiciones por éstos sobre los
hechos en que hayan intervenido personalmente y siempre que continúen ejerciendo la
representación legal del incapaz, ya que de no ser así podrá comparecer como testigo
pero no como absolvente.

4) Personas de derecho público: Art. 159 CPC: “Cuando se tratare de personas de


derecho público, absolverá posiciones el funcionario facultado por la ley para
representarla, en cuyo caso, se le requerirá por oficio fijándole un término prudencial
dentro del que habrá de evacuarlos, con los mismos apercibimientos establecidos para
los obligados a comparecer”
Pliego: Art 160 CPC: “La parte que pidiere la absolución de posiciones deberá
presentarlas por escrito en el momento de ofrecer esta prueba, ya en pliego cerrado,
pidiendo que se reserve su apertura hasta el momento de la audiencia, ya abierto. En
este ultimo caso, a solicitud del ponente, el citado podrá contestarlas por escrito antes
del día designado con los mismos apercibimientos y efectos que si hubieran sido
absueltas en audiencia”.

Ofrecimiento: Debe presentarse al momento de ofrecer la prueba, incluido en el mismo


escrito o separado (en sobre cerrado puede ser y se abrirá al momento de producirse la
audiencia). La omisión de acompañar el pliego al ofrecer la prueba impedirá su
admisión por el Juzgado, hasta tanto se subsane el defecto.

Contenido de las posiciones: Art. 161 CPC: “Cada posición tendrá un solo hecho
concreto, y será susceptible de respuesta afirmativa o negativa. Las partes tendrán no
obstante, el derecho de formular también preguntas relativas a las cuestiones en debate
con la condición de que sean claras y no induzcan a error”.
Esto quiere decir, que las posiciones contenidas en el pliego deben redactarse en forma
clara y contener un solo hecho por cada una, en los que ha intervenido personalmente o
tiene conocimiento el absolvente, y que se encuentran controvertidos, pudiendo ser
susceptibles de respuesta afirmativa o negativa.
Además la parte ponente puede modificar en todo o en parte el pliego presentado,
ampliando las posiciones o bien formulando preguntas al absolvente.

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El absolvente que adopte una actitud remisa, negándose a responder o haciéndolo en
forma ambigua, evasiva, se arriesga a que se lo tenga por confeso, o que constituya una
presunción en su contra, todo ello según la valoración de la sana crítica.

Procedimiento para el examen del absolvente.

Fijación de la audiencia: Art. 162 CPC. Al decretarse la prueba el juez debe fijar fecha
y hora de audiencia, con los apercibimientos legales para el caso que la misma
fracasare, ya sea por incomparecencia injustificada del absolvente, o bien si
compareciendo a la audiencia se negare a declarar. En ese caso, en la sentencia se lo
tendrá por confeso de las posiciones formuladas en el pliego, salvo la prueba en
contrario.
Notificación: Mediante cédula y dirigida al domicilio real y legal.

Obligación de comparecer. Efectos de la inasistencia: El juez, de oficio o a pedido de


parte, podrá disponer las medidas pertinentes para constatar la existencia de las causales
de justificación que se invocan, pudiendo efectivizar los apercibimientos legales en
caso de no acreditarse la justificación invocada.
Si la incomparecencia es injustificada, algunos tribunales sostienen que debe igualmente
producirse la audiencia al solo efecto de la apertura a pliego.

Juez ante el cual debe presentarse: La absolución de posiciones debe prestarse ante el
juez de la causa si el absolvente reside en su jurisdicción, y en caso contrario ante el
juez del mismo grado y fuero que corresponda al domicilio del absolvente.
En el supuesto que el absolvente deba declarar en una jurisdicción distinta la del juez de
la causa, deberá librarse exhorto y oficio mediante el trámite de la ley 22.172, a los
efectos de que el juez exhortado u oficiado tome la audiencia.

Citación: Art. 162 CPC: La citación del absolvente deberá hacerse con una anticipación
no menor a tres días al del acto, en el domicilio real de aquél.

Facultades ampliatorias del ponente y del juez:


durante la audiencia de absolución de posiciones, si esta presente el ponente, el
patrocinante o apoderado del absolvente, podrá a través del juez formular al ponente
preguntas ampliatorias o aclaratorias de los hechos controvertidos en el proceso.
El juez tiene amplias facultades para interrogar a las partes, pese a la aparente limitación
de la norma. El juez no puede formular posiciones dado que importarían un
prejuzgamiento al afirmar esos hechos antes de la sentencia.

Valor de la confesión judicial provocada: Art. 166 CPC: La confesión prestada en


sede judicial, o provocada, como acto voluntario constituye plena prueba, contra el
confesante. Cabe advertir que el ponente también confiesa al formular la posición en la
cual está afirmando la existencia de un hecho relacionado con la litis.

Confesión ficta: (por ausencia injustificada del absolvente o por negativa a responder o
cuando lo hiciera en forma evasiva)
La confesión ficta produce los mismos efectos que la confesión expresa: se tiene por
probados los hechos consignados en las posiciones del pliego.
La principal diferencia en cuanto a sus efectos radica en que la confesión ficta puede ser
desvirtuada con prueba documental fehaciente de fecha anterior, (art. 168 CPC)

76
careciendo de valor absoluto, ya que debe ser apreciada en función de todos los
elementos del juicio que obren en el proceso y las circunstancias de la causa.

La doctrina y los tribunales coinciden en otorgarle a la absolución de posiciones


carácter de plena prueba- Quiere significar que excluye las consecuencias de cualquier
otra prueba cuyas resultas vinieran a contradecir aquella. QUE LA CONFESIÓN
HAGA PLENA PRUEBA SIGNIFICA QUE EL JUEZ NO PODRÁ APARTARSE DE
LOS HECHOS CONFESADOS, AL MOMENTO DE DICTAR SENTENCIA-, sin
formular distinciones acerca de si se trata de una confesión expresa o ficta.
En Santa Fe la confesional ficta tiene la misma fuerza probatoria que la expresa.

Confesión extrajudicial: Siempre constituirá un hecho a probar por cualquiera de los


medios probatorios admisibles. Por ejemplo: la historia clínica confeccionada por el
demandado.

Bolilla VI
Por: Agustín Moreno

PRUEBA DOCUMENTAL E INSTRUMENTAL material y literal.


Documento es toda presentación material destinada e idónea para reproducir una
cierta manifestación del pensamiento.
La prueba documental no se limita a los instrumentos (públicos y privados) sino
que incluye también los demás elementos que sirven para representar hechos (planos,
cuadros, discos, cintas grabadas, películas cinematográficas, etc.).
Hay que destacar el carácter representativo de este medio de prueba. La
representación consiste en un hecho capaz de producir una imagen de otro; ella se puede
lograr mediante cosas (en la prueba documental) o por el relato de personas, sean éstas
las mimas partes (confesional) o terceros (prueba de testigos).

El Código Civil indica los requisitos que deben reunir los instrumentos públicos
y privados, así como su eficacia probatoria. El Código procesal regula el procedimiento
para su presentación en juicio, para establecer su autenticidad, etc.
Los instrumentos son una especie dentro de los documentos.
Los instrumentos públicos y privados pueden ser exigidos por la ley como
requisito formal de determinado acto jurídico. Según la importancia que tiene la forma
legal establecida, los actos formales se clasifican en solemnes y no solemnes; los
primeros son aquellos en los cuales la omisión de las formas no sólo provoca la nulidad
del acto sino que lo destituye de cualquier otro efecto civil, ej. el matrimonio, el
testamento. En los actos formales no solemnes el incumplimiento de las formas puede
ocasionar la nulidad del acto en cuanto tal, pero no impide otro efecto diferente.

- Instrumentos públicos:
Son los realizados con las formalidades que establece la ley y con intervención
de un funcionario autorizado para darles fe pública. Algunos supuestos son:
a) Las escrituras públicas: hechas por escribanos en sus libros de protocolo o por otros
funcionarios con las mismas atribuciones;
b) Escritos incorporados a un expediente judicial: La mera incorporación del escrito al
expediente no hace de él un instrumento público.

77
Son instrumentos públicos las actas judiciales que documentan actuaciones en
las que intervino un juez o un secretario, y redactadas por los oficiales de justicia y
notificadores.
c) Protocolización de instrumento privado: Para que ella convierta al instrumento
privado en público es necesario que haya sido ordenada por juez competente. (la
protocolización de un instrumento privado hecha por el escribano a pedido de partes, da
fecha cierta pero no lo convierte en instrumento público)
d) Partidas: Las actas o partidas de nacimiento, matrimonio y defunción son
instrumentos públicos.
e) Boletas de depósito: Los depósitos en instituciones bancarias se acreditan con las
respectivas boletas; no necesitan autenticación ni prueba informativa complementaria, a
menos que sean argüidos de falsedad.
· Acto irregular: El acto emanado de un oficial público, aunque sea incompetente o que
no tuviere las formas debidas, vale como instrumento privado si está firmado por las
partes, aunque no tenga las condiciones y formalidades requeridas para actos extendidos
en forma privada.

Instrumentos otrogados en el extranjero:

Art. 172: Los documentos públicos otorgados en el extranjero con arreglo a sus leyes y
autenticados en debida forma, producirán la misma prueba que los otorgados en la
República

- Instrumentos privados:
Son documentos ‘literales’ emanados de las partes, sin intervención de otras
personas, salvo los interesados. Estos instrumentos no están sujetos a formalidad
alguna; pueden carecer de fecha o estar fechados en días feriados, escritos en idioma
extranjero; etc. El Código Civil sólo exige 2 requisitos: la firma y el doble ejemplar.
a) La firma:
La firma de las partes es una condición esencial para la existencia de todo acto
bajo forma privada. Ella no puede ser reemplazada por signos ni por las iniciales de los
nombres o apellidos. Pareciera que se exige el nombre completo del firmante pero no es
así en caso de que esas iniciales sean la forma habitual de firmar.
Se dispone que “una firma irregular e incompleta se considerará suficiente
cuando la persona estuviese acostumbrada a firmar de esa manera los actos públicos y
privados”.

b) Impresión digital:
Se ha debatido acerca de la validez de los instrumentos privados cuando, en vez
de la firma, se ha puesto la impresión digital.
Se entiende que el documento con la impresión digital debe asimilarse al que
carece de firma o contiene las iniciales o signos. Habrá que acreditar 2 circunstancias: 1.
la identidad del otorgante; 2. que el documento revela su intención.

c) Documentos firmados a ruego: Es indudable que el documento firmado por un


tercero a petición de la parte interesada constituye un medio de prueba, aunque su
eficacia dependerá de que se acredite no sólo la firma de ese tercero sino también el
mandato recibido para firmar en nombre de otro.

78
d) Firma en blanco: La firma en el instrumento privado generalmente se pone después
de redactado el escrito y como prueba de conformidad con su contenido. Pero puede
suceder que haya sido dado en blanco, antes de la redacción del instrumento; en este
caso, importa un mandato para ser llenado por la persona a quien se ha entregado el
documento. Las cuestiones que se suscitan por el uso del documento en blanco, en
forma distinta de las instrucciones dadas por el firmante, deben ser solucionadas
aplicando las reglas del mandato.
El signatario puede oponerse al contenido del acto probando que las
declaraciones u obligaciones que se encuentran en él no son las que tuvo intención de
hacer o contratar. (esto no es aplicable a terceros de buena fe)

e) Doble ejemplar: Los actos que contengan convenciones bilaterales deben ser
redactados en tantos originales como partes haya con un interés distinto.
Sin embargo, el defecto de redacción en varios ejemplares no anula las
convenciones si por otras pruebas ase demuestra que el acto fue concluido de una
manera definitiva.
f) La fecha en el documento privado: La fecha que aparece en el documento privado no
puede ser opuesta a terceros. El tercero puede tomar como cierta la fecha que indica el
instrumento; es decir que puede aducirla en su favor, pero no puede serle opuesta.

g) Instrumentos privados con firma certificada por escribano: Corresponde asimilar el


instrumento privado con firma certificada por escribano a aquel que ha sido reconocido
judicialmente o debidamente reconocido.
La autenticación de las firmas por escribano no transforma el documento privado
en público pero le otorga el mismo valor entre quienes los han suscripto y sus sucesores.
El ‘acto notarial’ no sólo da autenticidad a las firmas sino que importa para los
firmantes el reconocimiento del cuerpo del instrumento. Por el acto de certificación, el
instrumento privado adquiere fecha cierta.
De ser impugnada la certificación de la firma, ésta debe hacerse por incidente o
querella de falsedad, pues esa certificación constituye en sí misma instrumento público.

h) Documentos completos sin firma: La cibernética ha originado nuevas formas de


contratación que prescinden de la firma del obligado. Así, mediante el uso de tarjetas de
crédito y débito el usuario puede efectuar compras por el sistema de débito automático,
pagar servicios o retirar dinero de cajeros automáticos, dando origen a obligaciones no
instrumentadas en la forma tradicional.
Por el momento sólo cabe estar a las convenciones entre las entidades emisoras
de dichas tarjetas y el usuario que, generalmente, ponen a cargo de éste acreditar la
falsedad de las constancias que surjan de las computadoras de aquellas; prueba que
resulta casi imposible.

i) Libros de comercio: Los libros llevados en forma son admitidos en juicio como
medios de prueba entre comerciantes y para acreditar hechos relativos a su comercio.
Valor probatorio de los libros de comercio: entre comerciantes prueban en favor
de su dueño, cuando fuese llevados en forma legal y con los requisitos establecidos, se
trate de hechos relativos a su comercio y su adversario no presente asientos en contra.;
de haber contradicción en los libros llevados en legal forma por ambas partes, se debe
prescindir de este medio de prueba.

79
Para acreditar actos civiles o contra no comerciantes, los libros sólo pueden
servir como meros indicios a favor de quien los lleva, pero constituyen prueba en contra
de éste.

j) Cartas misivas: El CC dispone: “Las cartas misivas dirigidas a terceros, aunque en


ellas se mencione alguna obligación, no serán admitidas para su reconocimiento”. Esto
reconoce varias excepciones (siempre que se respete la garantía de la inviolabilidad de
la correspondencia epistolar):
· proceso que tramita entre el remitente y el destinatario: aquí la carta puede ser ofrecida
como prueba, mediante su presentación si se trata del destinatario o solicitando su
exhibición si el remitente es quien intenta valerse de ella.
· proceso entre remitente y un tercero: las partes pueden pedir que se intime al
destinatario su presentación en el juicio; el requerido podrá oponerse si la exhibición de
la carta le ocasiona perjuicio. Si el destinatario ha entregado la carta a alguno de los
litigantes, ella puede ser presentada como prueba, pero si la obtuvieron por medios
ilícitos no corresponde su exhibición, puesto que de lo contrario se estaría aprovechando
del resultado de un delito.
· proceso entre el destinatario y un tercero: puede ser presentada la carta o pedirse su
exhibición.
Salvo que se trate de un juicio entre el remitente y el destinatario, deben
excluirse como medio de prueba las cartas confidenciales. Si la carta presentada en el
proceso se considera confidencial, se debe ordenar su desglose; excepto conformidad
expresa entre remitente y destinatario, y siempre que la exhibición no afecte a terceros.

k) Constancia de otro expediente judicial: Son válidas las pruebas producidas en otro
juicio que se tramitó entre las mismas partes, siempre que los litigantes hayan tenido
oportunidad de ejercer todos los medios de impugnación y de verificación que otorga la
ley.

l) Discos y cintas grabadas: Son documentos que se pueden ofrecer como prueba. La
dificultad respecto de su eficacia consiste en establecer su autenticidad, en caso de ser
negada por la persona contra quien se los opone. Es imposible determinar con absoluta
certeza si las voces de los discos y cintas pertenecen a las personas a quienes se les
atribuye; en cuanto a las películas y fotografías, su autenticidad es dejada a la libre
apreciación judicial.
Si bien se le reconoce a la cinta magnetofónica el carácter de un documento, no
se la admitió como medio de prueba cuando la grabación fue obtenida en forma
subrepticia, desconociéndose que se estaba grabando.
Las fotografías pueden ser adulteradas. Por ello, impugnada una fotografía, ella
valdrá según el grado de certeza que den los medios técnicos utilizados para su
autenticación y lo que surja del conjunto de pruebas contrarias o coadyuvantes que se
produzcan por ambas partes.
En todos los casos, estos documentos sirven para orientar el interrogatorio del
juez a las partes y a los testigos, y pueden constituir indicios importantes para formar la
convicción del magistrados, cuando se complementes con otros medios de prueba, con
son la confesional, la testimonial y la pericial.

m) Documento digital: Es la representación digital de actos o hechos, con


independencia del soporte utilizado para su fijación, almacenamiento o archivo. Este
documento también satisface el requerimiento de escritura.

80
- Traslado. Fuerza probatoria:
Ante la presentación de un documento, se deberá dar traslado de la parte
contraria; en el caso de que ésta negase la firma de un instrumento privado o
manifestara desconocer la que se atribuye a otra persona, se deberá proceder a la
comprobación del documento.
El litigante que acompañó el documento deberá, en el mismo acto, ofrecer
pericia caligráfica e indicar los documentos que sirvan para ella, pudiendo además
designar un consultor técnico; ello para la eventualidad de que sea desconocida la
autenticidad del documento. La otra parte, al contestar el traslado que se le confiera,
puede indicar otros documentos indubitados y observar los indicados por el adversario.
A diferencia de los instrumentos públicos, que gozan de presunción de
autenticidad, los privados no la tienen, de modo que carecen de todo valor probatorio
mientras la firma no hay sido reconocida o declarada auténtica por el juez. Si el
documento está firmado por un tercero, la parte contraria a la que lo presentó no tiene la
carga de pronunciarse sobre su autenticidad.
Los sucesores de quien aparece firmando el documento pueden limitarse a
declarar que no saben si la firma es o no de su autor.
Cuando sea imposible la prueba pericial, por ejemplo, si se carece de
documentos indubitados y no puede efectuarse un cuerpo de escritura porque el firmante
ha fallecido o por otra circunstancia, se podrá recurrir a cualquier otro medio de prueba
para acreditar la autenticidad del instrumento, como los testigos.

Los instrumentos públicos hacen plena fe hasta que sean argüidos de falsos.
Respecto a la fuerza probatoria de los instrumentos públicos el CC dispone que:
· “Los instrumentos públicos hacen plena fe, no sólo entre las partes, sino contra
terceros, en cuanto al hecho de haberse ejecutado el acto, de las convenciones,
disposiciones, pagos, reconocimientos, etc. contenidos en ellos”; y
· “Los instrumentos públicos hacen plena fe de las enunciaciones de hechos o actos
jurídicos directamente relativos al acto jurídico que forma el objeto principal, no sólo
entre las partes sino también respecto de terceros”.
El instrumento público hace plena fe hasta que sea argüido de falso.

* Nota: Características de los instrumentos públicos: gozan de autenticidad y fecha


cierta. Los instrumentos privados no.
Aunque se halle reconocido el instrumento privado, su fecha cierta con relación
a los sucesores o terceros será:
1. la de su exhibición en juicio, si allí quedase archivado;
2. la de su reconocimiento ante escribano y 2 testigos que lo firmaren;
3. la de su transcripción en cualquier registro público;
4. la del fallecimiento de la parte o del de la que lo escribió o del que firmó como
testigo.

- Documentos indubitados:
Si los interesados no se hubieran puesto de acuerdo en la elección de
documentos para la pericia, el juez sólo tendrá por indubitados:
1- Las firmas consignadas en los documentos auténticos;
2- Los documentos privados reconocidos en juicio por la persona a quien se atribuya el
que sea objeto de comprobación;

81
3- El impugnado, en la parte en que haya sido reconocido como cierto por el litigante a
quien perjudique;
4- Las firmas registradas en establecimientos bancarios.
El dictamen pericial no vincula al juez, quien puede apartarse de él dando los
fundamentos de su decisión o disponer que se practique otra pericia, o se amplíe la
anterior.

- Redargución de falsedad:
Es el acto tendiente a obtener que se declare la invalidez de un instrumento
público. Tramita por incidente y será parte el oficial público que extendió el
instrumento. [Es la forma de cuestionar todos los instrumentos públicos, menos a la
sentencia]
La falsedad de los instrumentos puede ser:
· Material: A su vez puede ser:
- absoluta, cuando la persona que se indica como interviniente en el acto es ajena a él,
ya sea el oficial público en los instrumentos públicos (o uno de los firmantes en el
instrumento privado -caso de firma falsa);
- relativa: cuando el instrumento ha sido raspado o adulterado.
· Ideológica: se refiere al contenido del instrumento; se da cuando las enunciaciones
hechas en él no son verdaderas.
Puede ser que se ataque la totalidad del documento por negar el interesado que
se trate de un instrumento público, ya sea porque es falsa la firma del oficial público o
por cualquier otra circunstancia. Si formalmente tiene las características de instrumento
público, en principio debe ser atacado mediante demanda o el incidente de falsedad,
porque la ley protege la autenticidad que surge de los signos exteriores del documento.
No obstante, la gravedad de los vicios materiales que ostenta un instrumento público
puede justificar que se lo invalide sin necesidad de deducir el incidente respectivo. Se
trata de una cuestión de hecho sujeta al prudente arbitrio judicial, quien valorará por un
lado, la necesidad de proteger la autenticidad de los instrumentos públicos, y por otro
lado, la economía procesal, evitando la promoción de incidentes notoriamente
innecesarios.

En el caso de los instrumentos privados, la falsedad de ellos, aunque estuviese


reconocida la firma, se puede acreditar por simple prueba en contrario producida en el
proceso que se intenta hacer valer.

- Compulsa:
El Cód. prescribe que: El instrumento público presentado en copia que haya sido
expedida sin citación en los casos en que el Derecho la requiere, necesita para su
eficacia, si fuere impugnada, la compulsa con el original, previa la expresada
formalidad.
Si se tratare de copias cuya matriz hubiere desaparecido, serán reputadas
auténticas, salvo prueba en contrario, aunque hubieran sido expedidas sin citación.
· Trámite de la compulsa:
Los litigantes podrán pedir el cotejo, a su costa, de cualquier copia de
documento público que creyeran inexacta, aun de aquellas que hubieran podido ser
expedidas sin necesidad de citación.
El cotejo se hará por el actuario en el lugar en que se halle el original en
presencia de las partes que asistieren, a cuyo efecto se les notificará por cédula el día y
la hora en que haya de verificarse.

82
- Exhibición:
Hay que ver qué ocurre con respecto a la exhibición de documentos que se
encuentren en poder de una de las partes o de un tercero:
1. En el caso de que el documento se encontrara en poder de una de las partes, se le
intimará su presentación en el plazo que el juez determine (3 días o el que creyere
conveniente). Cuando por otros elementos de juicio resulta manifiestamente verosímil
su existencia y contenido, la negativa a presentarlo, constituirá una presunción en su
contra.
Se impone la ‘carga’ (no es obligación ni deber) de exhibir documentos
esenciales para la solución del litigio, aunque ello perjudique a quien los tiene.
Los documentos cuya presentación se exige pueden ser de propiedad de ambos
litigantes, como cuando se trata del socio o comunero que tiene la documentación de la
sociedad; puede tratarse de un instrumento privado hecho en doble ejemplar, cuando
uno de los litigantes ha perdido el suyo, tal sería el caso de un boleto de compraventa, o
puede ser exclusivo del tenedor, por ej. cuando se intima al locatario la presentación de
los recibos de alquiler.
2. En el caso de que el documento se encontrara en poder de un tercero se le
intimará para que lo presente. Si lo acompañare, podrá solicitar su oportuna devolución
dejando testimonio en el expediente.
El requerido podrá oponerse a su presentación si el documento fuere de su
exclusiva propiedad y la exhibición pudiere ocasionarle perjuicio. Ante la oposición
formal del tenedor del documento no se insistirá en el requerimiento.
No obstante ello, cuando los documentos se hallen en poder de un tercero que no
litiga, su exhibición constituye un deber; y si se resiste podrá ser obligado
compulsivamente a presentarlo. Si el juez considera que la oposición del tercero no es
fundada, podrá ordenar el ‘secuestro’ del documento y hasta considerar la actitud del
requerido como desobediencia. La posibilidad de aplicar sanciones conminatorias a
terceros permite recurrir a ello cuando el requerido no exhibe el documento sin causa
que lo justifique. Responderá por los daños y perjuicios que su resistencia causare.

- Reconocimiento de firma:
Como los documentos privados carecen de valor probatorio por sí mismos, a la
parte que los presenta corresponde acreditar, mediante el reconocimiento o la eventual
comprobación que el documento emana de la parte a quien se atribuye. El CC señala
que : “El instrumento privado reconocido judicialmente por la parte a quien se opone, o
declarado debidamente reconocido tiene el mismo valor que el instrumento público
entre los que lo han suscripto y sus sucesores”.
Toda persona contra quien se presente en juicio un documento privado que le
atribuya tiene la carga procesal de declarar si es o no suya la firma. Esta carga debe
cumplirse toda vez que a aquella parte se confiera traslado de un documento que su
adversario acompañe al juicio, pues el silencio o la respuesta evasiva sobre el punto
importa un reconocimiento tácito de aquél.

- Plazos y oportunidad de ofrecimiento de la prueba en nuestro Código:

Art.184: Ningún documento podrá presentarse después que el juez haya llamado a autos
para resolver, a menos que sea de fecha posterior o que la parte que lo presente afirme
no haber tenido antes conocimiento de él.

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Art. 185: En esos casos de excepción o cuando los documentos hubieren sido
presentados antes del llamamiento de autos pero en tiempo que no fuere posible
comprobar su autenticidad o falsedad, el juez podrá hacer uso, al efecto, de sus
facultades para mejor proveer si la prueba no ocasionare grave retardo o prescindir de
ella en caso contrario.

Art. 186: Los documentos que no hubiesen sido presentados en primera instancia
podrán siempre serlo en segunda, hasta el llamamiento de autos, cargando el litigante
con las costas ocasionadas por la presentación tardía, a menos que acredite que no ha
tenido antes conocimiento de ello.

Bolilla VII
Por: Agustín Carnero

PRUEBA TESTIMONIAL
Son las declaraciones emitidas en el proceso por personas físicas, distintas de las partes
y sin vinculaciones con el órgano judicial, acerca de sus percepciones de hechos
pasados o de lo que han visto u oído sobre esto. (Alsina)
Es un medio de prueba que consiste en una declaración de ciencia y representativa, que
un tercero hace a un juez, con fines procesales, sobre lo que dice saber respecto de
hechos de cualquier naturaleza. (Alvarado Velloso)

Generalidades.
Cuando el testimonio en juicio emana de un tercero estamos en presencia de prueba
testimonial o por testigos. No siempre es posible la constatación de un hecho en forma
directa y cuando la parte a quien se le atribuye, desconoce su existencia, la fe en la
palabra del hombre que ha presenciado el hecho es uno de los pocos recursos que restan
al juez para la averiguación de la verdad. Por eso decían las leyes españolas “testigos
son hombres o mujeres que aducen las partes en juicio para probar las cosas negadas o
dudosas”.
A diferencia de la confesión, en que la parte declara sobre hechos que le son personales,
el testigo depone sobre hechos de terceros y a cuyas consecuencias jurídicas no se halla
vinculada.

Caracteres.
 Es prueba indirecta, en el sentido de que no se identifica con el hecho por
probar, que es su objeto, por lo que el juez llega a conocimiento de este de
manera mediata a través de la narración del testigo del cual lo induce y no por su
propia percepción.
 Es histórica, porque con ella se reconstruyen o se reproducen hechos pasados o
que todavía subsisten, pero cuya existencia data desde antes de producirse el
testimonio.

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 Circunstancial: el testigo ha presenciado el hecho accidentalmente, a diferencia
de otros este era viviente, lo cual tiene la ventaja de que permite un examen
amplio hasta obtener de ella todo lo que puede rendir de útil.
 Se funda en una doble presunción, la de la conformidad del conocimiento del
testigo con la realidad y la de su fundamento moral, es decir que el testigo no se
ha engañado y de que no se trata de engañar al juez.
 El testimonio no es una declaración de voluntad sino una manifestación del
pensamiento, su obligación principal por consiguiente decir toda la verdad y
nada más que la verdad.

Importancia.
El examen de la evolución histórica de la prueba demuestran que en los pueblos
primitivos, cuando el acusado no confesaba el hecho que se le imputaba se recurría en
primer término a los testigos, no solo porque se consideraba la palabra un medio
suficiente de convicción, por la sencillez de las costumbres y las reducidas proporciones
de los grupos sociales, sino porque la escritura no estaba desarrollada y era patrimonio
de unos pocos. Pero cuando la práctica de la escritura se extendió, no tardo en superar
en importancia probatoria a la prueba testimonial, pues traía sobre esta la ventaja de la
permanencia de sus iniciadores sin los peligros de aquellas. No obstante los peligros de
la prueba testimonial el legislador no puede prescindir de ella, pues no solo podría
resultar indispensable cuando la circunstancia no hubieran permitdido la obtención de
otra prueba, principalmente en materia de hechos.

CAPACIDAD.
En primer lugar, no pueden ser testigos, en sentido estricto del concepto, nada más que
las personas físicas porque son las únicas capaces de percibir los hechos por medio de
los sentidos y reproducirlos utilizando la memoria. Respecto de las personas jurídicas,
en la acepción amplia del vocablo solo procede la prueba de informes, ha sido admitida
por la jurisprudencia.
La capacidad se presume generalmente en consideración del testigo. La experiencia
enseña que el niño es por naturaleza imaginativa y propensa a la mentira, ofrece escasas
garantías de veracidad. Fundado en ello, las legislaciones establecen un mínimo de edad
adoptando para el efecto diversas formulas.
Los incapaces absolutos carecen de capacidad para rendir el testimonio; así el demente,
el sordomudo que no puede darse a entender por escrito. En cambio, los incapaces
relativos son generalmente hábiles para testimoniar, en todos los procesos.
La habilidad o aptitud mental o síquica del testigo para el caso concreto o capacidad
concreta.
Articulo 203 código procesal de Santa fe: “Toda persona mayor de catorce años está
obligada a declarar como testigo, so pena de sufrir la sanción establecida en el art. 243
del código penal.
 También pueden ser citadas personas menores de catorce años (art. 158,2)
 La norma consagra tanto el deber de comparecer (cuyas excepciones están
previstas en los art. 214 y 215) como el deber de declarar (cuyas excepciones
están contenidas en los art. 216 y 218)
- Testigos excluidos:
Según el Cód. De la Prov., no podrán ser ofrecidos como testigos contra una de
las partes (consagrando un supuesto de inadmisibilidad de la prueba testimonial):

85
· El cónyuge, aunque esté separado;
· Los parientes y afines en línea recta o en segundo grado de la colateral; y
· Los tutores, curadores o pupilos.
Salvo:
1. Cuando hubieren sido agentes o testigos instrumentales de un acto jurídico y la
declaración versare sobre éste;
2. Cuando la declaración versare sobre su nacimiento, matrimonio, divorcio o defunción
de los miembros de su familia.

REQUISITOS FORMALES DE ADMISIBILIDAD.


Artículo 201: La admisibilidad de la prueba testimonial no puede ser objeto de
controversias; los jueces deberán siempre decretar el examen de los testigos, sea cual
fuere su opinión al respecto
- Citación de los testigos:
Los testigos serán citados con 3 días cuando menos de anticipación o dentro de
un plazo menor en caso de urgencia, por medio de cédula, transcribiéndose en ella la
parte del artículo que se refiere a la obligación de comparecer y a su sanción.
La citación de testigos debe ser notificada por cedula (art 62,6) y con la
antelación que ya está prevista en el art. 92.
La anticipación de 3 días se ha previsto en beneficio del testigo, quien debe
conocer con tiempo su deber de comparecer. (No obstante, si comparece sin estar citado
se le tiene que recibir declaración).
El testigo será citado por el juzgado, salvo cuando la parte que lo propuso
asumiere la carga de hacerlo comparecer a la audiencia.
Los testigos que tengan su domicilio fuera del lugar del asiento del tribunal, pero
dentro de un radio de 70 km., están obligados a comparecer para prestar declaración
ante el tribunal de la causa, si lo solicitare la parte que lo propone y los testigos no
justificaren imposibilidad de concurrir a dicho tribunal. Los testigos que tengan su
domicilio fuera del radio de 70 km. de la sede del tribunal (o dentro pero con justificada
imposibilidad de concurrir) declararán ante el juez de su domicilio. A este fin, en el
escrito de ofrecimiento de prueba, la parte que hubiese presentado testigos que deben
declarar fuera del lugar del juicio acompañará el interrogatorio. La parte contraria podrá
proponer preguntas (en el orden nacional).

NÚMERO.
El mismo art. 200 continúa: “… no se admitirán más de 10 por cada parte en el
juicio ordinario, y de 5 en el sumario, sumarísimo y juicios especiales y ejecutivos; pero
el juez podrá admitir la ampliación si la naturaleza del asusto lo justificare.”
Entonces, siendo el máximo de 10 testigos, si se proponen más, se citará a los 10
primeros, y luego de examinarlos, el juez podrá disponer la recepción de otros
testimonios entre los propuestos si lo estima necesario.
Una vez propuestos los testigos y vencido el término para el ofrecimiento de
prueba no se los puede reemplazar, aunque se trate de personas de la misma profesión.
Además de los ofrecidos por las partes, el juez puede citar a declarar a otros
testigos.

DOMICILIO.
Los testigos que tengan su domicilio fuera del lugar del asiento del tribunal, pero dentro
de un radio de setenta kilómetros, están obligados a comparecer para prestar declaración

86
ante el tribunal de la causa si lo solicitare la parte que los propone y los testigos no
justificaren imposibilidad de concurrir a dicho tribunal.
Dicha imposibilidad debe ser denunciada por el testigo o la parte que lo propuso, con
anticipación suficiente a la fecha de la audiencia fijada para recibirle la declaración, si
las causas son fundadas, debe ordenarse que el testigo declare ante el juez de su
domicilio.
Los testigos que tengan su domicilio fuera del radio de setenta kilómetros de la sede del
tribunal, declararan ante el juez de su domicilio a tal fin en el escrito de ofrecimiento de
prueba, la parte que hubiese presentado testigos que deben declarar fuera del lugar del
juicio acompañara el interrogatorio e indicara el nombre de las personas autorizadas
para el trámite del exhorto u oficio.

EL CONTENIDO DE LAS PREGUNTAS.


El interrogatorio de los testigos debe ser lo suficientemente claro para que lo entiendan
fácilmente, distribuido en diversas preguntas, formuladas del modo más conciso
posible, procurando que cada una comprenda un solo hecho o punto; redactadas en
forma de inquirir sus conocimientos, sin suministrarle todos los detalles, que
precisamente debe exponer de manera espontánea si los conoce, es decir, sin que las
preguntas sean sugestiva o sugerentes. Es una razón más para que el interrogatorio sea
verbal y en audiencia; en el escrito hay que diga si le constan las condiciones de tiempo,
modo y lugar en que ocurrieron los hechos y pudo percibirlos, sin cuya explicación su
testimonio carecerá de eficacia probatoria. Así, es inadmisible preguntar “diga Ud. Si es
cierto que le consta que tal hecho” o “que no le consta”. Si la considera sugestivas, el
juez debe cambiar la pregunta, formulándola correctamente.
Son inaceptables preguntas como las siguientes “diga Ud. Si fulano tuvo relaciones
sexuales con zutana”, o “si le consta que A vivió con B en tal casa”; o “si X trataba
como hijo a Z”; se debe preguntar: “explique que le consta y porque de las relaciones
que existieron entre fulano y zutana”, “en donde vivieron A y B” “como era el trato
entre X y Z”.
Al testigo se le interroga, en primer lugar, sobre su nombre y apellido, su edad su
profesión u ocupación, su domicilio si tiene vínculo de parentesco o de otra clase con
las partes; es lo que se conoce con el nombre de generalidades. Estos detalles son
importantes para apreciar luego la personalidad e imparcialidad del testigo; pero la
omisión de preguntarlos no invalida el testimonio, aun cuando se relaten
espontáneamente.

JURAMENTO.
Art. 209: Los testigo prestaran juramento o afirmación antes de declarar y serán
interrogados, aunque las partes no lo pidan, por la generales de la ley y por su nombre,
edad, estado, profesión y domicilio. También darán siempre la razón de sus dichos, que
deberá serles exigida por el juez en caso que la omitiere.
De las respuestas dadas por el testigo a las preguntas que versen sobre las generales de
la ley surgirán causales de tacha (art. 221) que deben ser deducidas en el mismo acto de
la declaración (art. 222).

RECEPCIÓN
El Cód. de la Prov. establece en el art. 200: “Al ofrecerse la prueba de
testimonial, será necesario expresar el nombre, profesión y domicilio de los testigos y
presentar al mismo tiempo el interrogatorio respectivo…”

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Estos requisitos tienen por objeto permitir la identificación del testigo y así
garantizar el derecho de defensa en juicio y la igualdad de las partes, ya que la contraria
puede oponerse a la prueba o al testimonio de alguno de los testigos propuestos.
No procede la nulidad de la declaración del testigo si, pese a las diferencias de
nombres, no se acreditó que quien declara sea persona distinta de la propuesta.
Se ha resuelto además que la falta de indicación de la calle y el número de la
vivienda de los testigos que comparecieron a declarar no obsta a que aparezcan ellos
adecuadamente individualizados, si se han mencionado el barrio en que viven y se han
consignado otros datos.
El ofrecimiento de la prueba de testigos debe hacerse dentro de los plazos
asignados para cada clase de juicio (salvo caso de aseguramiento de pruebas).
Si la prueba de testigos fuera admisible, el juez mandará recibirla en la audiencia que
señalará para el examen.
El juzgado preverá una audiencia supletoria con carácter de segunda citación, en
fecha próxima para que declaren los testigos que faltaren a aquella.
Al citar al testigo se le notificarán ambas audiencias con la advertencia de que,
en caso de incomparencia a la primera, sin causa justificada, se lo hará comparecer a la
segunda, por medio de la fuerza pública, y se le impondrá una multa.
El Cód. de la provincia prescribe: “El juez procurará en cuanto sea posible, que
el examen de los testigos de una y otra parte tenga lugar en una sola audiencia. Los
testigos permanecerán durante el acto en lugar donde los unos no pueden oír las
declaraciones de los otros, y serán examinados sucesivamente en presencia de ambas
partes, si asistieran”.
Cuando el número de los testigos ofrecidos por las partes permitiese suponer la
imposibilidad de que todos declaren en el mismo día, deberá ‘habilitarse hora’ y, si aun
así fuere imposible completar las declaraciones en un solo acto, se suspenderá el mismo
y se señalarán tantas audiencias como fueren necesarias, sin necesidad de nueva
citación. La exigencia de que se habiliten horas para tomar la declaración fue impuesta a
fin de lograr la concentración de la recepción de la prueba, en la medida de lo posible.
La concentración permite el interrogatorio de oficio y el careo entre los testigos
o entre uno de ellos y las partes. Si se reciben las declaraciones el mismo día y los
testigos permanecen en la sala del juzgado después de haber declarado, es más sencillo
interrogar nuevamente a quien ya declaró o proceder al careo, luego de haber oído los
otros testimonios. “Los testigos permanecerán en el juzgado hasta que concluya la
audiencia, si el juez por razones especiales no dispusiere lo contrario”.

Pero el Cód. de Proc. Prescribe incluso que: “Solicitada y decretada en tiempo la


prueba testimonial, no obsta a su recepción el que haya vencido el término de prueba. Si
perjuicio de la prosecución del procedimiento, los testigos podrán ser examinados hasta
la sentencia cuando no hubiere sido posible hacerlo antes por causa no imputable a la
parte.

a) Interrogatorio:
La parte que ofreció el testigo debe presentar un interrogatorio con las preguntas
que se formularán, firmados por ella y por su letrado patrocinante. Si el proponente se
encuentra en la audiencia podrá ampliar el interrogatorio.
El juez podrá variar, a pedido de parte o de oficio, los términos en que han de ser
formuladas las preguntas.
Al testigo hay que interrogarlo de tal modo que espontáneamente relate lo que
sabe en torno a los hechos controvertidos y conducentes; carece de eficacia el

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interrogatorio que contiene las contestaciones a dar. En tal sentido se decidió que son
ineficaces las declaraciones que se limitan a decir “es cierto” frente a preguntas que
contienen la descripción clara, completa y circunstanciada de los hechos que se intentan
probar. Dicho de otra manera: no corresponde incluir en las preguntas los hechos que el
propio testigo debe relatar.
En primer lugar, serán interrogados, aunque las partes no lo pidan, por las
‘generales de la ley’ y por su nombre, edad, estado, profesión y domicilio. De las
respuestas que versen sobre las “generales de la ley” surgirán las causales de tacha. (Se
le pregunta si tiene algún interés en la causa, en el resultado del juicio, si tiene conexión
con alguna de las partes). Luego se le pide que preste juramento. Y luego se interroga
“Para que diga si sabe y como lo sabe…” (No sólo hay que responder, sino también dar
razón de sus dichos)

b) Preguntas sugestivas:
Al contrario del pliego de posiciones, el interrogatorio de testigos debe evitar
que las contestaciones sean por sí o por no.
Las preguntas no contendrán más de un hecho; serán claras y concretas; no se
formularán las que estén concebidas en términos afirmativos, sugieran la respuesta o
sean ofensivas o vejatorias. No pueden contener expresiones de carácter técnico, salvo
que fueran dirigidas a personas capacitadas.
No obstante, a veces es indispensable cierta sugerencia a fin de que quien
declara pueda responder lo que sabe acerca de los hechos que tienen más interés para la
causa; las sugerencias pueden perseguir la finalidad de encaminar la declaración del
testigo, evitar largas exposiciones que no interesan al proceso, tratar de obtener
referencias sobre hechos que el testigo omite, etc.
Es difícil precisar el grado de sugerencia que puede caber en un interrogatorio,
es necesario vincularlo a cada caso concreto a fin de determinar si el testigo ha
contestado libremente o ha sido influenciado por las preguntas que se le formularon.

c) Repreguntas:
No obstante el interrogatorio presentado por la parte que ofreció el testigo, éste
puede ser interrogado libremente por el juez. También la parte contraria a la que ofreció
el testigo podrá solicitar que se formulen las preguntas conducentes al litigio que
considere pertinentes.

d) Respuestas:
El testigo contestará sin poder leer notas ni apuntes, a menos que por la índole
de la pregunta se lo autorizara.
Deberá siempre dar la razón de su dicho; si no lo hiciere, el juez la exigirá.
La razón del dicho consiste en la explicación de cómo ocurrieron los hechos
sobre los cuales declara el testigo, señalando las circunstancias de tiempo, modo y lugar
que los hagan verosímiles. Comprende también la narración de cómo esos hechos
llegaron a conocimiento del testigo. La omisión de este requisito no incide sobre la
existencia y validez del testimonio sino sobre su eficacia probatoria.

e) Conclusión de Interrogatorio:
De la declaración de los testigos se levantará acta que firmarán el juez, el
actuario y el testigo, si pudiere hacerlo. Cuando el testigo, concluido que sea el
interrogatorio, quisiera aclarar o rectificar sus dichos, le serán recibidas sus
manifestaciones y se dejará nota de ella a continuación.

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f) Careo:
Cuando haya contradicción entre las declaraciones de los testigos o las de ellos
con alguna de las partes, el juez puede decretar el careo.
También procederá el careo cuando, aunque no existan contradicciones, el juez
considere necesaria la confrontación de los testigos entre sí o con las partes, a fin de
esclarecer las respectivas declaraciones.
Es un elemento importante para apreciar la veracidad de los dichos de los
testigos.

g) Falso testimonio:
Si las declaraciones ofreciesen claros indicios de falso testimonio o de cohecho,
el juez podrá decretar la detención de los presuntos culpables, remitiéndolos a
disposición del juez competente.
Aclaraciones del testigo.
Artículo 211: “De la declaración de los testigos se levantara acta que firmara el juez, el
actuario y el testigo, si pudiera hacerlo. Cuando el testigo, concluido que sea el
interrogatorio, quisiere aclarar o rectificar sus dichos, les serán recibidas sus
manifestaciones y se dejara nota de ellas a continuación…”

NEGATIVA DEL TESTIGO A RESPONDER


Artículo 218: “El testigo puede rehusarse a contestar las preguntas que se le hicieren:
1. Si las respuesta debiere comprometer su honor o exponerlo a enjuiciamiento
criminal;
2. Si no pudiere responder sin revelar un secreto científico, artístico o industrial;
dejando a salvo lo establecido en el art. 216

a) _ La norma consagra una excepción al deber de declarar establecido en el art. 203.


b) _ Similar régimen otorga la ley para el caso de absolución de posiciones (art. 164)

TESTIMONIO PRESTADOS FUERA DEL ASIENTO DEL JUZGADO.


Artículo 205: “Cuando los testigos hayan de declarar fuera del lugar del juicio, la parte
adversaria de la que hubiese propuesto podrá pedir la apertura del interrogatorio,
formular pliegos de preguntas y asistir, por si o por representante, a la declaración. Si se
hiciere uso de ese derecho, el juez de la causa examinara los interrogatorios y podrá, de
oficio o a solicitud de parte, modificarlos de acuerdo con las limitaciones establecidas”

INDEMNIZACIÓN DEL TESTIGO


Como el deber jurídico de testimoniar no puede conducir a que el testigo asuma los
gastos que su cumplimiento le traiga, en las legislaciones suele incluirse alguna norma
que les otorga derecho a recibir una remuneración por el tiempo empleado y que le
permite atender al transporte y alojamiento cuando deben viajar a otra ciudad. Esto se
justifica cuando el testigo es pobre o de escasos recursos, y en los procesos civiles y
laborales, debe pagarlos la parte que pide el testimonio. Al testigo llamado
oficiosamente por el juez lo debe remunerar el estado.
Art. 206: “Las partes tendrán derecho a pedir que los testigos que residan dentro de la
jurisdicción del juez de la causa comparezcan ante él, ofreciendo satisfacer las
indemnizaciones que el mismo determine, sin perjuicio de la condenación definitiva en
costas. El tribunal podrá ordenar que se consigne previamente la suma necesaria para el
pago de dicha indemnización”.

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Art. 219: “Si los testigos reclamaren alguna indemnización, lo que podrá hacerlo
verbalmente, el juez la fijara con arreglo a las circunstancia y sin tramite ni recurso
alguna.”

TESTIGO QUE NO HABLA IDIOMA NACIONAL.


Artículo 210:”Si el testigo no hablare el idioma nacional, será examinado con la
intervención de interprete nombrado por el juez.”
El intérprete debe ser designado por el juez de acuerdo con el procedimiento regulado
en el art. 188

TESTIGO ÚNICO.
Durante mucho tiempo rigió el principio “testigo único, testigo nulo). Sin
embargo, actualmente se ha reaccionado contra tal limitación a los poderes de
apreciación del juez.
No debe descalificarse al testigo único o singular; por esa sola circunstancia sus
dichos no quedan descalificados de eficacia probatoria.
No obstante, en alguna oportunidad, la ley exige la declaración de más de 1
testigo para acreditar el hecho.

TESTIGO NECESARIO.
Es el que en principio no podía ser testigo, pero se convierte en necesario en
cuestiones muy particulares. Por ej. Un menos de 13 años se realiza un interrogatorio
sumario y el juez lo valora.

EL TESTIMONIO Y LOS LUGARES.


Artículo 208: “El juez procurara, en cuanto será posible, que el examen de los testigos
de una y otra parte tenga lugar en una sola audiencia.
Los testigos permanecerán durante el acto en lugar donde los unos no puedan oír las
declaraciones de los otros, y serán examinados sucesivamente en presencia de ambas
partes, si asistieren.”
La norma consagra sistema similar al establecido para los absolventes (art. 162)

RECEPCIÓN DEL TESTIMONIO EN EL DOMICILIO.


Artículo 214: “Cuando algún testigo se hallare en la imposibilidad de comparecer al
juzgado, podrá ser examinado en su domicilio. Lo serán asimismo las personas que por
su edad o sexo merezcan consideración.”
La norma consagra una excepción al deber de comparecer establecido en el art. 203

AUDIENCIA
Si la prueba de testigos fuera admisible, el juez mandará recibirla en la audiencia
que señalará para el examen.
El juzgado preverá una audiencia supletoria con carácter de segunda citación, en
fecha próxima para que declaren los testigos que faltaren a aquella.
Al citar al testigo se le notificarán ambas audiencias con la advertencia de que,
en caso de incompetencia a la primera, sin causa justificada, se lo hará comparecer a la
segunda, por medio de la fuerza pública, y se le impondrá una multa.
El Cód. de la provincia prescribe: “El juez procurará en cuanto sea posible, que
el examen de los testigos de una y otra parte tenga lugar en una sola audiencia. Los
testigos permanecerán durante el acto en lugar donde los unos no pueden oír las

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declaraciones de los otros, y serán examinados sucesivamente en presencia de ambas
partes, si asistieran”.
Cuando el número de los testigos ofrecidos por las partes permitiese suponer la
imposibilidad de que todos declaren en el mismo día, deberá ‘habilitarse hora’ y, si aun
así fuere imposible completar las declaraciones en un solo acto, se suspenderá el mismo
y se señalarán tantas audiencias como fueren necesarias, sin necesidad de nueva
citación. La exigencia de que se habiliten horas para tomar la declaración fue impuesta a
fin de lograr la concentración de la recepción de la prueba, en la medida de lo posible.
La concentración permite el interrogatorio de oficio y el careo entre los testigos
o entre uno de ellos y las partes. Si se reciben las declaraciones el mismo día y los
testigos permanecen en la sala del juzgado después de haber declarado, es más sencillo
interrogar nuevamente a quien ya declaró o proceder al careo, luego de haber oído los
otros testimonios. “Los testigos permanecerán en el juzgado hasta que concluya la
audiencia, si el juez por razones especiales no dispusiere lo contrario”.

Pero el Cód. de Proc. Prescribe incluso que: “Solicitada y decretada en tiempo la


prueba testimonial, no obsta a su recepción el que haya vencido el término de prueba. Si
perjuicio de la prosecución del procedimiento, los testigos podrán ser examinados hasta
la sentencia cuando no hubiere sido posible hacerlo antes por causa no imputable a la
parte.

CAREOS
Complemento indispensable del interrogatorio es el careo, cuando aparecen en el
proceso declaraciones de testigo que se contradicen entre sí, sin que por la calidad sea
posible darles preferencia a unos.
Se entiende por careo la confrontación que el juez hace de dos testigos que
declaran hechos contradictorios, en presencia de las partes o al menos previa su
citación. La importancia de esta diligencia es enorme, porque esa confrontación permite
apreciar mejor la sinceridad de los testigos y sirven para que estos precisen sus
recuerdos e incitan en sus versiones o las corrijan.
Artículo 213: “Los testigos cuyas declaraciones sean contradictorias podrán ser
careados entre sí, aunque no medie petición de parte.”

MEDIDAS COMPULSORIAS QUE PUEDEN UTILIZARSE PARA LOGRAR


LA COMPARECENCIA.
La segunda parte del art. 203 reza: “el testigo que no comparece sin excusar su
ausencia con justa causa, podrá ser conducido por la fuerza pública y mantenido en
arresto hasta que preste declaración o manifieste su voluntad de no prestarla. Luego,
será sometido a la justicia criminal.”
La norma consagra tanto el deber de comparecer (cuyas excepciones están
previstas en los arts. 214 y 215) como el deber de declarar (cuyas excepciones están
contenidas en los arts. 216 y 218)

EXCEPCIONES A LA OBLIGACIÓN DE COMPARECER..


Articulo 215 “Prestaran declaración por medio de informes y expresando lo que
lo hacen bajo juramento o afirmación, el presidente de la nación, los gobernadores de
las provincias, sus ministros, los miembros de las cámaras legislativas nacionales o
provinciales y de los tribunales de justicia, los jueces letrados, los prelados eclesiásticos,
los militares de la nación, desde el grado de coronel inclusive en adelante, y los
intendentes municipales.”

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La norma consagra una excepción al deber de comparecer establecido en el art.
203.

EXCEPCIONES A LA OBLIGACIÓN DE DECLARAR.


Los abogados, procuradores, médicos, sacerdotes, farmacéuticos y parteras
podrán rehusarse a prestar declaración sobre hechos que se les hubiere comunicado
confidencialmente en el ejercicio de su profesión o ministerio.”
La norma consagra una excepción a la obligación de declarar establecido en el
art. 203.

IMPROCEDENCIA DEL MEDIO PROBATORIO.


Artículo 217: “No podrán ser presentados como testigos contra una de las partes,
el cónyuge aunque este separado, los parientes y afines en línea recta o en segundo
grado de la colateral y los tutores, curadores o pupilos, salvo:
1. Cuando hubieran sido agentes o testigos instrumentales de un acto
jurídico y la declaración versare sobre este;
2. Cuando la declaración versare sobre su nacimiento, matrimonio, divorcio
o defunción de los miembros de su familia.

La norma consagra un supuesto de inadmisibilidad de la prueba testimonial.

TACHAS
Es un defecto que destruye o disminuye la fe del testigo. Se trata de una impugnación
que se efectúa a su declaración por hallarse aquel en alguna de las causales de la ley.
Son todas las circunstancias que puedan inclinar al testigo o deponer a favor o en contra
de una de las partes y las que hagan presumir razonablemente que no es digno de fe o
que no se encuentra en condiciones de conocer los hechos sobre los que debe declarar.

La ley Nacional contempla la falta de idoneidad subjetiva del testigo, pudiendo


alegarse cualquier causa referida a sus condiciones personales que influyan en el grado
de certeza que los dichos de esos testigos puedan llevar al juez.
No está incluido el ataque a la declaración misma, la “tacha del dicho”, ya que la
falsedad de las declaraciones debe investigarse en el fuero penal. Se sostiene que un
incidente que persiga la “tacha del dicho” podría dar lugar a dilaciones y alterar el orden
del proceso.
La parte interesada puede enervar la declaración mediante la prueba ofrecida por
ella o alegando acerca de las condiciones personales del testigo o, finalmente,
promoviendo la investigación en el fuero penal.

En la Provincia se prescribe respecto de la tacha de testigos:


· Cada parte podrá tachar sus propios testigos o los de la contraria, sin que esto obste a
que se les tome declaración;
· Son causales de tacha: todas las circunstancias que puedan inclinar al testigo a deponer
a favor o en contra de una de las partes y la que hagan presumir razonablemente que no
es digno de fe o que no se encuentra en condiciones de conocer los hechos sobre los que
debe declarar;
· Procedimiento: Las tachas deben deducirse dentro del término de prueba; pero si
surgieran de la propia declaración, deberán serlo en el mismo acto. La prueba será
ofrecida dentro de los 3 días de deducida, y se formará ‘incidente’ por separado que no
interrumpirá el curso regular del juicio. Su apreciación será hecha en la sentencia.

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Artículo 221: “Son causales de tachas todas las circunstancias que puedan inclinar al
testigo a deponer a favor o en contra de una de las partes y las que hagan presumir
razonablemente que no es digno de fe o que no se encuentra en condiciones de conocer
los hechos sobre los que debe declarar.”
La valoración de la prueba testimonial debe efectuarse de acuerdo con lo dispuesto en el
art. 224.
Artículo 222: “Las tachas deben deducirse dentro del término de prueba; pero si
surgieren de la propia declaración, deberán serlo en el mismo acto. La prueba será
ofrecida dentro de los tres días de deducida, y se formara incidente por separado que no
interrumpirá el curso regular del juicio. Su apreciación será hecha en la sentencia.”
Las causales de tacha que surgen del propio ofrecimiento de prueba deben ser deducidos
dentro de los cinco días de conferidos los traslados recíprocos de los medios ofrecidos
(art. 402).

VALORACIÓN DE LA PRUEBA TESTIMONIAL


Corresponde al juez determinar la credibilidad y el grado de eficacia probatoria que le
merezcan los testimonios, de acuerdo con los principios generales de la sana critica y
atendiendo a las condiciones intrínsecas de cada uno y a la calidad, la fama y a la
ilustración de los testigos; para esta critica el numero de testigos solo tiene importancia
secundaria, como complemento de la buena calidad de los testimonios, ya que valen
más pocos buenos que muchos malos, pues como suelen recordar los autores: “los
testimonios se pesan y no se cuentan”.
Artículo 224: “Los jueces apreciaran la prueba testimonial según las reglas de la sana
critica y el crédito que inspiren las condiciones personales de los testigos.”

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Bolilla VIII
Por: Mauro Lanchi

PRUEBA PERICIAL
El conocimiento del litigio que debe tener el Juez para poder dictar sentencia, muchas
veces no puede formarse a través de una apreciación directa de las circunstancias del
caso. Para obviarlo está la prueba testimonial, que permite al Juez un conocimiento
indirecto de las circunstancias del hecho motivo del litigio. Pero en ciertos supuestos, y
especialmente aquellos, en los que se discuten cuestiones técnicas, el Juez debe recurrir
al auxilio de personas especializadas en la materia, llamadas "peritos". Los peritos
realizan una diligencia probatoria que recibe el nombre de "prueba pericial” e informan
sobre su resultado a través de la "pericia". En suma, la prueba pericial tiende a cubrir
una deficiencia técnica del Tribunal, que como es lógico carece de los conocimientos
científicos necesarios para resolver con justicia una situación donde las causas de los
hechos controvertidos, o los- hechos mismos, o sus efectos, dependen de
consideraciones de índole técnica. Cómo podría saber el Juez si una firma es legítima,
sino. recurriendo al dictamen de una persona especializada en la materia ? Cómo podría
determinar los componentes sanguíneos de una persona sin recurrir a un perito ? Sin
embargo, nada le impediría realizar la medición de un fundo. Pero esta operación
también eminentemente técnica, lo obligaría a abandonar el tribunal, por lo menos un
día entero, con el consiguiente perjuicio y retardo en el despachó. Por ello es lógico que
encomiende la operación a un perito agrimensor, persona capacitada para hacerlo en
menor tiempo y con mejores resultados. Bien señala Alsina la función del perito "es el
LENTE a través del cual el Juez percibe ciertos hechos que su visión normal no
alcanza". En consecuencia, la prueba pericial en sí no es una prueba, sino un "medio"
para obtener una prueba ; a través de la pericia se aportan elementos de juicio respecto a
causas o efectos, a la existencia o inexistencia de un hecho. Entonces, la prueba no es la
pericia, sino el hecho mismo. Y la pericia tiene por fin poner el hecho probatorio de
manifiesto. Sin embargo, el Código de Santa Fe la considera una prueba, y la trata
dentro de las pruebas. El ejemplo clásico que demuestra que la prueba pericial no es en
sí misma una prueba, está dado por el supuesto del peritaje sobre libros de comercio. En
este caso, está claro que la prueba la constituye el libro de comercio en sí mismo, y el
perito tan sólo se limita a verificar la existencia y autenticidad de los asientos en los

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cuales las partes fundan sus derechos. De acuerdo a esta consideración no podríamos
considerar a la prueba pericial como una prueba "indirecta", sino "directa", por cuanto
se funda en la experiencia del Tribunal sobre los hechos, que el perito se limita a
ampliar actuando como "lente". sobre cuestiones que escapan a la visión normal del
Juzgador. En definitiva, la prueba pericial es aquella que se lleva a cabo por medio de
peritos, cuyo fin es suplir una deficiencia técnica o imposibilidad física del tribunal, que
determina la existencia o inexistencia del hecho controvertido, o se expide sobre sus
posibles causas y consecuencias, por medio de la pericia.

PERITO
El perito es una persona con conocimientos técnicos especiales sobre determinada
materia, ajena al proceso, que auxilia al Juez en la constatación de hechos y en la
apreciación de sus causas y efectos cuando éste está en la imposibilidad física de
hacerlo, son requeridos los conocimientos especiales que sólo el perito puede tener.
Pueden desempeñarse como peritos tanto las personas físicas, como aquellas de
existencia ideal, aunque este segundo supuesto resulta raro. Pero, especialmente las
"academias" pueden realizar pericias en ciertos supuestos (Alsina). Para caracterizar
concretamente al perito, nos es preciso sintetizar las diferencias con otras personas que
también actúan en el proceso:

I- El perito y el testigo: ambos son extraños al proceso, dictaminan en él, pero : -


mientras el testigo es objeto de un examen, el perito examina por sí mismo y dictamina
sobre ello ; - el conocimiento del litigio del testigo se ha formado antes del proceso, por
circunstancias casuales o no. El conocimiento del perito se forma tras la iniciación del
proceso, y nunca por circunstancias casuales ; - el testigo aplica su memoria en un
intento de reproducir el hecho que presenció. El perito, por el contrario, aplica su
ciencia a su arte para poner de manifiesto el hecho

II - El perito y el intérprete: tanto uno como el otro son ajenos al proceso y lo que es
más importante ambos aplican conocimientos técnicos en su deposición. Pero, mientras
el intérprete se limita simplemente a vertir al idioma nacional lo que escucha o lee en
idioma extranjero, sin emitir alguna opinión personal sobre el contenido de la
traducción, el perito, por el contrario, tiene por función emitir una opinión personal
sobre la cuestión que a su conocimiento se somete.

III - El perito y el mandatario: aun cuando la prueba pericial es propuesta por sólo
una parte, y ella propone también el perito que la realizará, este perito no es de ningún
modo un mandatario de la parte, porq como se trata de un auxiliar del Juez,no puede
nunca admitir órdenes de las partes, y defiende el interés de la justicia y no el de la parte
que lo ha propuesto.

IV - El perito y los árbitros: también los árbitros son ajenos al proceso, pero, pueden o
no tener conocimientos técnicos especiales, mientras el perito es tal en tanto y en cuanto
posee estos conocimientos. Y por otra parte, el laudo arbitral tiene por fin la resolución
de un litigio, mientras la pericia sólo tiene por fin auxiliar al tribunal en el conocimiento
del litigio. Sin embargo, en el juicio pericial parece confundirse al árbitro con el perito,
pero ambos mantienen incluso allí su neta separación.

REQUISITOS

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La Ley Orgánica de los Tribunales establece los requisitos necesarios para ejercer las
funciones de perito en juicio:

1 - Titulo habilitante: expedido por establecimientos ofíciales de la Nación o de las


Provincias.

2 - Mayoridad: al respecto, es discutible si es indispensable contar con 21 años de edad


para ejercer las funciones de perito. Máxime cuando el título habilitante puede ser
habido antes de esa edad, y la ley civil autoriza al menor a ejercer su profesión para la
que cuenta con título habilitante y administrar lo con ella ganado. Para muchos autores
ninguna edad puede ponerse como límite, sino que debe atenderse siempre a la
IDONEIDAD que está certificada por el título expedido por establecimientos oficiales o
reconocidos oficialmente.

3 - Buena conducta: ninguna cuestión puede hacerse con motivo del sexo del perito, y
según lo comentáramos precedentemente, en algunos supuestos las
Corporaciones académicas pueden ser las más indicadas para la realización de una
pericia.
NOMBRAMIENTO
El nombramiento de los peritos en el proceso, puede hacerse de común acuerdo por las
partes, o realizarla el Juez en su defecto.
I - Nombramiento de común acuerdo por las partes: los acuerdos. que realicen las
partes respecto a la designación de los peritos son plenamente válidos, salvo cuando
contradigan las leyes especiales. Por ello, el acuerdo de las partes puede eximir a la
persona designada de reunir los requisitos propios del perito, pero igualmente
desempeñar sus funciones (LO.T.).
Número: el número ordinario de los peritos es de TRES. Pero, las partes, siempre de
común acuerdo, pueden convenir en reducir su número a sólo UNO (art. 186 Cód. Santa
Fe).
Audiencia: decretada por el Juez la prueba pericial, se convoca a las partes a una
audiencia para que nombren los peritos (art. 187 Cód. Santa Fe). En esta audiencia, las
partes proponen el número y nombre de los peritos a designar, y arribados a un acuerdo
el Juez procede a levantar acta de la audiencia determinando el nombramiento de los
peritos.

II - Nombramiento por el Juez: cuando llamadas las partes a la audiencia para


nombrar peritos, éstas no concurren, o concurre sólo una, o concurriendo ambos no se
ponen de acuerdo sobre el nombramiento, el Juez hará el nombramiento de los peritos
de oficio (art. 188 Cód. Santa Fe).
Número: también en este caso, el número normal de peritos es de TRES, pero el Juez
puede reducirlo a UNO atendiendo para ello al poco valor del asunto en cuestión.
Forma: el nombramiento de los peritos por el Juez se hace mediante un sorteo de la lista
de peritos, que se halla integrada por todas aquellas personas que cuentan con título
habilitante en su especialidad y que han solicitado su inscripción (art. 188 Cód. Santa
Fe). Si tal lista no existe en el lugar de asiento del Juzgado, el Juez hará una lista de tres
personas por cada perito que deba dictaminar. Es decir, formará tres listas de tres
personas cuando se deban designar tres peritos, o dos listas de tres personas cuando se
deban designar dos peritos, o una lista de tres personas cuando se deba designar sólo un
perito (art. 188 Cód. Santa Fe). Luego, la suerte decidirá qué persona de cada lista
actuará como perito. Cuando la profesión u oficio del perito que debe actuar no se halla

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reglamentada, o bien no existen en el lugar del proceso, peritos en la materia, la
designación habrá de recaer sobre personas entendidas o prácticas en la materia y las
listas se formarán con estas personas. En este supuesto, antes del sorteo cada parte tiene
el derecho de eliminar un perito de la lista por cada tres (art. 188 Cód. Santa Fe).

PERITOS OFICIALES
La Ley Orgánica de Tribunales contempla la existencia en cada circunscripción judicial
de contadores, calígrafos, químicos, intérprete y traductores que revisten el carácter de
peritos oficiales. Siendo dos las circunscripciones judiciales, con asiento la primera en
Santa Fe, y la segunda en Rosario, 26 cada una de ellas ha establecido un número
específico de peritos oficiales. Para ser perito oficial se requiere el título habilitante,
mayoría de edad, ciudadanía argentina y buenos antecedentes de conducta. La función
de los peritos oficiales es emitir los informes, reconocimientos y traducciones que los
Tribunales les ordenen. La retribución de los peritos oficiales consiste en un sueldo
mensual, no como los peritos comunes, que son retribuidos en cada caso en que actúan.
Por otra parte, los peritos oficiales no pueden participar de los nombramientos de 'oficio
hechos por los Tribunales. Su función es netamente auxiliar de la justicia, estando a
disposición de los Juzgados cuando éstos lo requieran. También pueden las partes, de
común acuerdo, proponer a un perito oficial para la realización de la pericia, cuestión
que corresponde al Juez apreciar y decidir.

RECUSACIÓN Y EXCUSACIÓN
I - Recusación de los peritos:
a) Peritos nombrados de común acuerdo: una vez nombrados los peritos a proposición
de las partes y estando éstas de común acuerdo, pueden ser recusados por cualquiera de
ellas por causas surgidas con posterioridad a su nombramiento (art. 190 Cód. Santa Fe).
b) Peritos nombrados de oficio: los peritos que han sido designados de oficio por el
Juez, tras el respectivo sorteo, son también recusables y por causas anteriores y
posteriores a su nombramiento.
c) Causales de recusación: los peritos deben ser recusados siempre CON CAUSA, y ésta
debe expresarse en la recusación respectiva. Rige para la recusación de peritos, todo lo
dispuesto para la recusación de los magistrados (art. 9 y siguientes Cód. Santa Fe - Art.
190).
II-Excusación los peritos designados en juicio, de común acuerdo por las partes, o
de oficio por el Tribunal: están OBLIGADOS a aceptar el nombramiento si tienen
título en la ciencia, arte o industria de que se trate, o la ejercen profesionalmente (art.
189 Cód. Santa Fe). Sanción: si dentro de los tres días de ser notificados no aceptaren el
cargo o lo rehusaren sin causa debidamente fundada, serán incluidos en la
correspondiente al año siguiente, y pasibles de multa. El auto que ordene esta sanción,
es apelable en relación (art. 189 Cód. Santa Fe).

PERITACIONES
La peritación es el estudio que el perito nombrado realiza sobre la cuestión sometida a
su dictamen, y tras la cual informa al Tribunal por medio de la pericia.

OBJETO
El objeto o contenido de la pericia es el hecho sobre cuya existencia o apreciación debe
expedirse el perito. La peritación recae siempre sobre "hechos", nunca sobre el derecho,
porque la aplicación del derecho queda reservada única y exclusivamente a los órganos
jurisdiccionales que son también los encargados de apreciarlo y valorarlo.

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Hechos sobre los cuales puede recaer la peritación: en principio no hay limitaciones
respecto a los hechos sobre los que ha de recaer la pericia. Puede tratarse de determinar
la composición química de la sangre humana ; la pertenencia de una letra ; la salud
mental de una persona: la veracidad de los asientos en los libros ; la medición de un
fundo, etc. Pero la ley de procedimientos contiene algunas limitaciones en este sentido.
Cuando el Juez decreta el dictamen pericial, debe determinar con precisión LOS
PUNTOS A QUE DEBE CONTRAERSE tal dictamen (art. 187 Cód. Santa Fe). Las
partes, en la audiencia de nombramiento de peritos, pueden pedir que el Juez amplíe las
preguntas, o sea, los puntos sobre los que ha de expedirse el perito, indicando para ella
cuestiones concretas (art. 187 Cód. Santa Fe). En fin, si no hay limitaciones respecto a
los hechos sobre los que puede recaer la pericia, si las hay una vez que tal hecho se ha
determinado, y corresponde al Juez establecer estas limitaciones. Nada impide, que una
pericia recaiga sobre la existencia o inexistencia de alteraciones mentales en una
persona. Pero el Juez puede limitar tal pericia solicitando simplemente que se establezca
si existen tales alteraciones; o bien puede ampliarla más, solicitando la opinión del
perito respecto a la influencia de las alteraciones mentales en la conducta de la persona;
o su apreciación sobre su duración, etc. En su dictamen, el perito habrá de contraerse
necesariamente a contestar sobre estos aspectos, y no sobre otros, ajenos a los que se le
solicita.
El cuerpo humano: en ciertos procesos, la pericia practicada sobre el cuerpo humano
puede constituir un importante medio probatorio. Por ejemplo, la revisación médica del
presunto demente ; o la prueba hematológica en la filiación natural, que permite la
comparación de la sangre del presunto padre e hijo, o la prueba de la virginidad de la
mujer cuando se pretende la nulidad del matrimonio por impotencia del marido. Se
plantea aquí la cuestión de saber si la resistencia de aquel que debe someterse a la
prueba, permitirla obligarlo a hacerlo. La jurisprudencia en general entiende que la
negativa a prestarse a la prueba es legítima. Véase al respecto el art. 196 del Cód. de
Procedimientos Santafesino que contempla el supuesto de la negativa del litigante a
prestar su colaboración con el perito. Pero en estos supuestos tan particulares no podría
usarse de la fuerza para realizar la prueba. Si bien es difícil que el presunto demente no
quiera someterse al interrogatorio o revisación médica, es por el contrario fácil que la
mujer resista ser sometida a revisación para demostrar su virginidad, o el padre evite dar
sangre para la prueba hematológica. En estos casos, sólo podrá deducirse como sanción,
una presunción de la existencia del hecho que la otra parte alega, pero no al forzamiento
de quien debe sufrir la prueba. La solución es muy distinta cuando se trata de pericias
que no recaen sobre el cuerpo humano. Si con la negativa de cooperar no se afecta el
orden público, puede el Juez adoptar la solución de estar a lo alegado por la parte en
contraria respecto al punto en discusión sobre el que iba a recaer la pericia. Pero cuando
el orden público se ve afectado en el asunto de que se trata, el Juez puede ordenar la
realización compulsiva de la prueba, siendo su resolución recurrible

REALIZACIÓN
1 - Término: cuando el objeto del reconocimiento pericial fuere de tal naturaleza que
los peritos puedan dar su dictamen inmediatamente, serán examinados acto continuo, en
audiencia pública y en la forma prevista para los testigos. Cuando el reconocimiento
pericial exige un estudio o examen previo, el Juez señalará el término que considere
suficiente para que los peritos se expidan (art. 192 Cód. Santa Fe).

2 - Actuación: los peritos practicarán unidos la diligencia pericial, si no hubiere razón


especial para lo contrario. Las partes en litigio pueden asistir a la diligencia, por sí

99
mismas o por delegados técnicos, y pueden en su curso hacer todas las observaciones
que crean convenientes. Sin embargo, deben retirarse cuando los peritos pasen a discutir
o deliberar sobre los resultados de la diligencia (art. 193 Cód. Santa Fe).

3 - Dictamen: la pericia debe ser dada por escrito, con copia para cada una de las
partes, dentro del término fijado por el Juez.

4 - Disidencias: cuando los peritos no se ponen de acuerdo respecto al dictamen, deben


presentar tanto dictámenes como opiniones en contrario haya (art. 193 Cód. Santa Fe).

5 - Ampliación: las partes pueden solicitar, o el mismo Tribunal ordenarlo de oficio,


una ampliación del dictamen pericial (art. 193 Cód. Santa Fe).

6 - Obligación de expedirse: los peritos están obligados a dictaminar sobre las


cuestiones sometidas a su conocimiento. Vencido el término acordado sin que el o los
peritos presenten su dictamen (o ampliación) serán reemplazados (art. 194 .Cód. Santa
Fe).
PLAZO Y OPORTUNIDAD DE SU OFRECIMIENTO EN EL CODIGO DE
SANTA FE Veamos cuál es el desarrollo de la prueba pericial en nuestro sistema:

1 - Procedencia: toda prueba puede decretarse a solicitud de parte interesada, que la ha


ofrecido dentro del plazo para hacerlo, y que se producirá dentro del término de prueba.
En la prueba pericial también se cumple este principio: las partes pueden ofrecer
conjuntamente con otra prueba, la prueba pericial. Pero también el Juez, DE OFICIO,
puede solicitar la realización de la prueba pericial CUANDO LO CREA NECESARIO,
y así decretarlo.
Entonces, la prueba pericial tiene dos orígenes: a solicitud de parte, o por decisión del
mismo Juez.

2 - Puntos sobre los que ha de versar la pericia. Audiencia. Nombramiento : Ya se


ha consignado precedentemente que el Juez al decretar la prueba pericial debe concretar
los puntos sobre los que ha de versar, la posibilidad de notificación, las ampliaciones
que pueden sugerir las partes, la audiencia para el nombramiento, y la posibilidad de
nombramiento de oficio. Asimismo, ya se ha tratado lo referente a las recusaciones y
excusaciones de los peritos nombrados.

3 - Notificaciones: los peritos nombrados son notificados de su designación por medio


de cédula, a cuyo pie se transcribe INTEGRAMENTE (en el caso de la Provincia de
Santa Fe) los arts. 189 y 194 del Cód. de Procedimientos (art. 189 Cód. Santa Fe).

4 - Aceptación: los peritos están obligados a aceptar la designación, salvo que pueden
excusarse (art. 189 Cód. Santa Fe). Para tal aceptación, deben comparecer al Juzgado
dentro de los TRES DÍAS de haber sido notificados de su nombramiento, y manifestar
ante el Secretario su deseo de aceptar el cargo, y prestar juramento o afirmación de
desempeñarlo fiel y legalmente (art. 191 Cód. Santa Fe).

5 - Nuevo nombramiento: cuando alguno de los peritos designados no comparece a


aceptar el cargo, es sancionado de acuerdo con el artículo 189 (en la Prov. de Santa Fe).
También puede ocurrir que compareciendo, se excusara de actuar. Es preciso entonces,
designar nuevo perito (art. 191 Cód. Santa Fe). Si los peritos han sido nombrados de

100
común acuerdo, en el supuesto de que sólo uno de ellos ha negado su aceptación, o por
otra causa posteriormente ha cesado en el cargo, queda sin efecto el nombramiento
respecto a TODOS los peritos, en virtud de haber sido todos ellos designados por el
acuerdo de las partes. Pero, si la designación ha sido hecha de oficio por el tribunal, se
procede a reemplazar el no aceptante o cesante, sin remover a los demás peritos (art.
195 Cód. Santa Fe).

6 - Realización de la diligencia - dictamen - ampliaciones: Nombrados los peritos, y


aceptando el cargo por éstos, procederán a dictaminar de acuerdo con las reglas que ha
hemos contemplado.

FUERZA PROBATORIA DEL DICTAMEN PERICIAL


La norma es clara cuando en el art. 199 del Cód. de Santa Fe reza: "El Juez no estará
obligado a seguir el dictamen pericial y deberá apreciar el mérito de la prueba según su
CRITERIO". Es así que en ningún momento tiene el dictamen pericial fuerza
obligatoria para el Tribunal. Este debe apreciar el conjunto de pruebas producidas y en
base a todas ellas dictaminar y sentenciar en el proceso. La prueba pericial en un
sentido, no lo obliga a sentenciar en igual sentido. Es evidentemente una prueba muy
importante y convincente, porque juega por un lado la honestidad de un profesional y
por otro lado, aspectos técnicos que el Juez por desconocer tiene que obviar por medio
del perito. Pero también es muy cierto que resulta una prueba relativa en algunos casos.
Por ejemplo, si de la comparación de la sangre del presunto padre e hijo por medio de
perito químico, resulta que ambos tienen grupos sanguíneos excluyentes, esta pericia
dará al Juez la pauta de que la acción que se intenta no tiene fundamentos, y la fuerza
probatoria será muy grande. Pero nada le impide apartarse de esta conclusión pericial,
por juzgar más convincentes otra pruebas aportadas. En sentido contrario, si el resultado
de la prueba determina la existencia de grupos sanguíneos afines, el Juez no puede
guiarse en mucho por ello, porque bien puede tratarse de una coincidencia fortuita. El
valor de la pericia ha disminuido sensiblemente, aunque el trabajo del perito ha sido
exactamente él mismo. Es que no es la pericia la prueba, sino el hecho sobre el que
versa y que por medio de ella se pone al descubierto.

INSPECCIÓN JUDICIAL
La inspección ocular es el RECONOCIMIENTO JUDICIAL de lugares, cosas o
circunstancias que el tribunal cree pertinente para obtener una mejor información sobre
el litigio. Esta prueba permite al Juez obtener una versión directa de las circunstancias
del litigio. Sus propios sentidos observan, sienten, oyen, gustan, etc., y forman de este
modo su convencimiento en forma directa. La inspección es siempre JUDICIAL. La
realiza el Juez. Si la realiza un perito a encargo del Juez (medición de fundos; revisión
médica del demente o la mujer virgen, etc.) no constituye inspección, sino pericia. Si
sobre los hechos que el Juez no ha observado deponen los que estuvieren presentes, es
testimonio y no inspección ocular, aun en aquel supuesto en que por creerlo conveniente
la declaración de los testigos se halla recibido en un sitio tal que contribuye a la claridad
del testimonio (art. 212 Cód. Santa Fe). Pero, conjuntamente con el testimonio
practicado en este sitio, puede producirse la inspección ocular.

Procedencia: la inspección ocular puede ser solicitada por las partes en su oportunidad.
Pero, también el Juez está autorizado legalmente a ordenar de oficio la realización de la
inspección, cuando lo crea conveniente. Incluso puede disponer la concurrencia de
peritos.

101
Procedimiento: decretada la inspección ocular, se fija en el mismo decreto; día y hora de
realización. Inmediatamente se notifica a las partes por medio de cédulas citándolas a
concurrir al acto. La citación debe hacerse con una anticipación no menor de tres días.
Las partes pueden no concurrir al acto de inspección, y no por ello pierden sus derechos.
Pero, normalmente concurrirán para hacer las observaciones que crean oportunas al Juez
que realiza la inspección. El acto concluye con el levantamiento de un acta de todo lo
actuado, la cual se agrega al expediente.

PRUEBA DE INFORMES
El informe consiste en una declaración escrita proveniente de organismos o entidades
oficiales o privadas donde se contesta el requerimiento judicial sobre una cuestión de
conocimiento de tal entidad. Las partes pueden solicitar del Juez, y éste ordenarlo de
oficio, la prueba de informes. Así, se pedirá u ordenará que un Banco informe sobre la
existencia de fondos depositados a nombre de los litigantes o la fecha de cierre de una
cuenta corriente. O al Registro de la Propiedad se pedirán informes sobre la subsistencia
de dominio a favor de una persona y sobre determinado inmueble ; y al Registro de las
Personas, informe sobre el estado civil de una persona, o su fecha de nacimiento, o
matrimonio, etc. Tal informe se solicita por el Juez mediante un oficio. En tal oficio,
puede además hacerse constar una autorización a determinada persona, sea uno de los
litigantes o uno de los profesionales intervinientes, para intervenir en el
diligenciamiento de tales informes. Así, se agregará al oficio un párrafo que dirá
aproximadamente lo siguiente :"...El señor N.N. o la persona que él designe, se hallan
facultados para intervenir en el diligenciamiento del presente oficio..",-
Los informes, certificados, copias o antecedentes que se expidan por las entidades,
corporaciones o instituciones requeridas deben hacerse con constancia de no servir sino
para e Juicio para el que fueron solicitados (art. 228 Cód. Santa Fe).

PRESUNCIONES
Para tener una idea clara de lo que es una presunción, debemos comenzar por distinguir
la idea de "indicio" de la de presunción propiamente dicha. El indicio es "todo rastro,
vestigio, huella, circunstancia, y en general todo hecho debidamente comprobado
susceptible de llevarnos por vía de inferencia a conocimiento de otro hecho,
desconocido". Quien escapa tras el delito, suministra un indicio, porque es ésta una
circunstancia normal cuando se comete un delito. Esta circunstancia carece en absoluto
de valor por sí sola, pero puede dar origen a un importante antecedente cuando se halla
concatenada con otros acontecimientos. La presunción supone otra cosa totalmente
distinta. Se trata de una doble operación mental, que primero es inductiva, y por ende
parte de una serie de verdades particulares, para llegar a una verdad general, y que luego
resulta deductiva, porque de tal verdad general puede extraer una nueva verdad
particular distinta de las anteriores. Por la primera operación se contemplan diversos
hechos particulares, que por circunstancias análogas se comportan de igual modo, lo
cual nos permite llegar a la formulación de un principio general. Tras ello, y en virtud
de la segunda operación mental, aplicamos este principio general a otros hechos
particulares, y podemos concluir que en iguales circunstancias, tales hechos responderán
al principio general formulado. El indicio es entonces un punto de partida de la
presunción a partir de un hecho que indica o señala la existencia de un principio general,
puede llegarse a tal principio, y luego aplicarlo a otros hechos análogos. En suma, la
presunción es un SILOGISMO:

102
- Su premisa mayor está dada por el principio general. La premisa menor por el
hecho conocido. - Y la consecuencia o conclusión, por el hecho que se desea
conocer. V.gr., un hecho de la naturaleza. Cuando se tiran piedras, éstas terminan por
caer a tierra.
He tirado una piedra y comprobado que efectivamente cae. Conclusión: la piedra que
otra ha tirado, también tiene que haber caído a tierra. En este ejemplo no hay posibilidad
de error alguno: la presunción de que la piedra tirada ha caído a tierra es absoluta,
porque se fundamenta en leyes naturales imposibles de violar o alterar. Pero, en otros
casos, especialmente cuando juegan hechos humanos, la presunción admite una solución
distinta a la que arribamos. Si presumimos que una persona tiene la cosa mueble porque
es propietaria, podemos equivocarnos, porque la podría tener por haberle' hallado o
robado. En suma : "en toda presunción existe un balance de posibilidades", y la
conclusión que se extrae es la normal, pero no "constante", sino "contingente", de forma
tal que puede variar. De allí que el valor probatorio de la presunción dependa casi
absolutamente de la labor del hombre. En efecto, teniendo un indicio, el Juez puede
llegar a establecer una presunción favorable o contraria a una parte a través de un
razonamiento primero inductivo, luego deductivo, pero cuya conclusión puede no ser
exacta. La presunción es un prueba "circunstancial o artificial", resaltando esta
característica de ser obra del hombre. Por otra parte, es netamente indirecta por cuanto
se logra a través de este razonamiento cuyas posibles soluciones son distintas. Véase en
qué circunstancias distintas se encuentra el Juez, cuando tiene un documento en su
mano cuya fuerza probatoria puede determinar directa y simplemente, y cuando tiene
tan sólo un indicio a partir del cual construir una presunción.

CLASES
Las presunciones se dividen en:

I - Judiciales: las presunciones judiciales u "hominis" son aquellas que el Juez


establece por el examen de los indicios, y según su ciencia y conciencia. La ley procesal
Santafesina establece un criterio de valuación de las presunciones a que puede arribar el
Juez. Y tal limitación no pretende de ningún modo cortar la facultad del Juez de
establecer presunciones, sino que, ante los daños que un razonamiento erróneo (o quizás
perfectamente certero pero discordante con la realidad por falta de medios de
apreciación) puede ocasionar, determina cuándo las presunciones hacen prueba de los
hechos. Tres son sus requisitos: GRAVEDAD o NÚMERO o CONEXIÓN con el hecho
que se trata de averiguar.
Concurriendo una de estos tres requisitos, la presunción es prueba cuando es capaz de
producir convencimiento según apreciación que hagan los jueces de acuerdo con las
reglas de la sana crítica (art. 226 Cód. Santa Fe). Véase que de ningún modo se limita la
facultad judicial de establecer presunciones, sino que se exigen determinados requisitos
en tales presunciones, para acordarle fuerza probatoria. La presunción judicial parte de
"indicios". Estos indicios se pueden clasificar en - Próximos o remotos: atendiendo a su
relación más o menos directa con la cuestión. Así, es indicio próximo la relación o trato
familiar en la acción de filiación natural; o es remoto el indicio constituido por una carta
de recomendación en la misma acción.
- Antecedentes: son actos preparatorios del hecho realizado. Por ejemplo, la íntima
amistad entre vendedor y comprador es un indicio de la simulación del contrato, y es
antecedente.

103
- Concomitantes: son los actos que acompañan al hecho. Tal es la declaración de que se
ha pagado el precio antes de realizar la escritura traslativa de dominio en la acción de
simulación contractual.
- Subsiguiente: son aquellos indicios que se producen con posterioridad al hecho con el
que se relacionan. Es el caso de la fuga del presunto culpable. Para que estos indicios,
en cualquiera de sus formas, constituyan el punto de partida de una presunción judicial,
deben ser probados por las partes. Una presunción importa una inversión de la carga de
la prueba. El favorecido nada necesita probar, y el perjudicado debe probar lo contrario
a lo presumido. Como consecuencia, antes de que se llegue a tal presunción, la parte que
la invoca debe necesariamente probar, mediante una prueba directa, los indicios de los
cuales ha de partir la presunción. Formulada por el Juez la presunción, el perjudicado
deberá probar la existencia de contraindicios o bien demostrar que la presunción
formulada no tiene carácter grave ni es seguida por otras haciendo un número
considerable, o bien no tiene conexión con el hecho. De este modo podrá destruir la
presunción formulada.

II - Legales: las presunciones legales son "un ,mandato legislativo en el cual se ordena
tener por establecido un hecho, siempre que otro hecho, indicador del primero, haya
sido comprobado suficientemente" .
El legislador se ha convertido en Juez, y estableciendo una presunción en una norma
legal, obliga a éste a respetarla. Así, fundándose en la experiencia diaria, establece la
presunción de nacimiento dentro del matrimonio, o la presunción de paternidad
legitima. Y basándose en una ficción, establece la presunción de que la ley es conocida
por todos, etc. Las presunciones legales se dividen en dos grandes grupos:

a) Iure et de jure: son aquellas que no admiten prueba en contrario y por tanto obligan
al Juez a aceptar por cierto el hecho que es presumido, una vez que se ha acreditado
suficientemente el hecho que le sirve de indicio. Así, el hijo nacido luego de los ciento
ochenta días de celebrado el matrimonio, y dentro de los trescientos de su disolución,
será siempre un hijo legítimo. Bastará acreditar la fecha de nacimiento en concordancia
con la de celebración o disolución del matrimonio, para que se dé por cierto su
legitimidad.

b) luris tantum: son aquellas que admiten la prueba en contrario, y que por ende
permiten demostrar que la consecuencia es falsa y que no procede del hecho que sirve
de indicio a toda la presunción. Así, la presunción de paternidad legítima puede ser
desvirtuada probando que el marido y la mujer han tenido imposibilidad de acceso
carnal en los primeros ciento veinte días de los trescientos que han precedido al
nacimiento.

SU VALOR PROBATORIO
Ya hemos comentado los requisitos que la ley exige en las presunciones judiciales para
acordarles fuerza probatoria: gravedad, número y conexión con los hechos, que
autorizan a producir el convencimiento según la libre apreciación del Juez. En cuanto a
las presunciones legales iure et de iure, éstas obligan lisa y llanamente al Juez a
considerar cierto el hecho que cae dentro de la presunción, y prohíbe a las partes la
demostración de lo contrario. En las presunciones iuris tantum, la situación es muy
distinta, por cuanto en principio debe estarse a lo que señala la presunción, pero la parte
perjudicada tiene el derecho de demostrar lo contrario, .mediante cualquier medio
probatorio. Según lo señalábamos, tal prueba puede tender a demostrar la existencia de

104
contraindicios que impida al Juzgador considerar absoluta e irrevocable la conclusión de
la presunción, o directamente a probar que tal conclusión es absolutamente errónea,
demostrando otra consecuencia. Así, el presunto padre probará haber estado recluido en
un establecimiento carcelario donde no le fueron permitidas visitas Íntimas de su mujer,
para de este modo demostrar que no es el padre legítimo de la criatura que ha de nacer.

Pruebas Científicas
Las pruebas científicas consisten en que el juez utilice elementos de convicción, que por
ser producto de los avances tecnológicos, están más allá del hombre común.
Las pruebas científicas, comprenden: a) pruebas biológicas cuando el órgano de prueba
es una persona humana, tenga calidad de parte o no, y b) pruebas informáticas o
electrónicas que importa el tratamiento cibernético de la in información dando lugar a la
elaboración del documento electrónico o digital.

Por su parte, la prueba informática “es la que resulta del tratamiento automático de la
información, a través105elaboradores electrónicos, basados en las reglas de la
cibernética”, y el documento electrónico es “un documento gestado con intervención de
un ordenador”.
El documento electrónico, en sentido amplio abarca la modalidad de los soportes
informáticos, al igual que los soportes tecnológicos que reproducen la palabra, imagen y
el sonido, al microfilm y a otros medios técnicos semejantes.
El documento electrónico carece de firma y ello lo diferencia del documento,
instrumento privado y público, cuyo requisito esencial de validez es la firma(art. 1012
C. Civil) Sin embargo, la falta de firma de los documentos electrónicos no los excluye
como elementos de prueba, más si requiere que dichos elementos electrónicos sean
admitidos o reconocidos por la persona a quien se le atribuyen.
En Argentina, en el ámbito del derecho sustantivo, en las distintas ramas se ha regulado
al documento electrónico.
Con relación a esto aparece también la figura de la Firma digital. La ley nacional de
firma Digital, Ley 25.506/2001 y sus modificaciones, en el art. 5 prescribe: Se entiende
por documento digital a la representación digital de actos , o de hechos, con
independencia del soporte utilizado para su fijación, almacenamiento o archivo.
Acá, la propia ley nos da un concepto de documento digital. Lo importante de esta
preceptiva legal tiene como particularidad la amplitud necesaria, que exige el
permanente progreso tecnológico. En efecto, no se regula un soporte único para el
documento electrónico, sino que se abarcan todos los soportes, los cuáles a su vez,
podrán corresponder a fases de fijación, almacenamiento y archivo de loa datos
electrónicos.
También la Ley 25.506 regula la firma digital (art.2) y firma electrónica (art.5).
En el ámbito procesal sea a nivel provincial o nacional, aun no se ha legislado el
documento electrónico en el proceso civil. De ahí que su incorporación al proceso
judicial se realiza por vía de los medios de prueba innominados.
La legislación procesal sobre los soportes informáticos, ópticos, magnéticos, etc.,
debería proyectarse en base a los principios específicos de la prueba: admisibilidad,
libertad y persistencia y, en lo que heca a su ofrecimiento, recepción y valoración.
Inclusive, con respecto al valor probatorio del documento electrónica debemos señalar
que la eficacia de su fuerza de convicción se supedita al sistema de la sana crítica
racional, pudiendo el juez hacerse auxiliar con peritajes de expertos, consultas
científicas o técnicas, etc.

105
Bolilla IX
Por: María Inés Rodriguez y Gisela López

Extinción del proceso

SENTENCIA:

Cuando el juez advierte que no existen hechos controvertidos o que éstos pueden
acreditarse con las constancias que existen en el expediente, declarará la cuestión de
puro derecho y una vez firme, llamará a autos para sentencia.

Cuando hubiere hechos controvertidos, y, por tanto, se hubiere recibido la causa a


prueba, una vez presentados los alegatos o transcurridos los plazos para presentarlos, el
juez llama a “autos para sentencia”.

Desde entonces queda cerrada toda discusión y no se pueden presentar más escritos ni
producirse más pruebas, salvo las que el juez ordene de oficio. Adviértase que una vez
que se llamen los autos para sentencia cesa la carga de impulsar el proceso que pesaba
sobre las partes.Desde que el llamamiento de autos queda firme comienza a correr el
plazo para dictarla.

Concepto:

La actividad que las partes y el juez desarrollan en el proceso tienden a un fin


común, la definición de la litis mediante la declaración de la existencia o inexistencia de
una voluntad de la ley que garantice un bien al actor, o que garantice un bien al
demandado. . El acto por el cual el juez formula esa declaración, es la sentencia; en ella
se resume la función jurisdiccional y por ella se justifica el proceso.

Puede definirse en sentido estricto como: Acto jurídico procesal mediante el


cual el juez dirime las controversias. O como: Acto jurídico procesal emanado del juez

106
por el cuales e pone fin a la cuestión litigiosa, resolviéndola. Se entiende aquí como
‘sentencia definitiva’ en el sentido de que concluye la instancia (aunque puede no poner
fin al proceso, ya que la sentencia puede ser objeto de recursos y sólo pone fin al litigio
cuando pasa en autoridad de cosa juzgada).

En sentido amplio: incluye todos y cada uno de los decretos, autos y resoluciones que
dicta el juez durante el proceso. Incluye:

· sentencia propiamente dicha o en sentido estricto;

· Autos interlocutorios: todo el que dicte el juez durante el proceso que no sea la
sentencia definitiva.

Clases:

- Definitivas: son las que ponen fin al litigio. Sus efectos son extraprocesales, impiden
la reapertura de la litis en otro juicio mediante la excepción de la cosa juzgada, y
constituyen el fundamento del proceso de ejecución. Pueden ser de distintas clases:
según que admitan o rechacen la demanda, llamándose estimatorias a las primera y
desestimatorias o absolutorias a las segundas. Las estimatorias se clasifican, a su vez,
según la naturaleza de la acción deducida en:

· Declarativas: el pronunciamiento judicial se limita a establecer una cuestión de hecho


o de derecho. Son las que ponen fin a un conflicto ratificando la existencia de un
derecho o estado jurídico. Aun cuando toda sentencia contiene una declaración de
certeza, la declarativa agota su objetivo con la declaración contenida en ella.

· Condenatorias: acepta en todo o en parte las pretensiones del actor manifestadas en la


demanda, o las del acusador expuestas en la querella, lo cual se traduce en una
prestación en el orden civil o en una pena en el orden penal.

En el orden civil, impone el cumplimiento de una prestación que puede ser dar, de hacer
o de no hacer. Constituye el tipo de sentencias más frecuentes.

En suma, contiene una previa declaración sobre el derecho del actor o reconvincente, y
luego el mandato para el cumplimiento del derecho reconocido. Se crea de esta manera
un título ejecutorio y en caso de incumplimiento por parte del condenado se puede pedir
la ejecución forzada.

· Ejecutivas: ejecutan los derechos jurídicamente declarados, ej. pago de un pagaré.

· Constitutivas: aquellas que además de declarar el derecho o la obligación que


corresponde a una de las partes, crean una situación jurídica nueva, o modifican o
extinguen la situación que ya existía. Tal lo que sucede en los juicios de adopción,
divorcio.

- Interlocutorias: son las que se dictan durante la tramitación del proceso y hacen
posible su desarrollo, preparándolo para la sentencia, por lo que sus efectos se limitan al
proceso en que han sido dictadas. Deciden cuestiones incidentales o accesorias,

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(dependen del juicio principal, no puede existir por sí solo), como la capacidad de las
partes o la incompetencia del juez. Pueden ser de 3 clases:

· las que deciden incidentes con fuerza de definitiva (ej. una excepción dilatoria,
presupuestos procesales, capacidad) [interlocutorias]

· las que causan gravamen irreparable; es decir que no puede ser resuelto más adelante
en la sentencia definitiva (ej. el que se haya levantado el embargo de un bien y
trasladado a otro que ocasione perjuicio). [interlocutorias simples]

· las que no causan un gravamen irreparable: no requieren sustanciación, sólo tienden


al desarrollo del proceso u ordenan acto de mera ejecución (la apertura de la causa a
prueba, citación del demandado) [interlocutorias simples]

Las providencias simples y las sentencias interlocutorias, junto con la sentencia


definitiva, completan las resoluciones judiciales.

a) Providencias simples: Son las que dicta el juez a efectos de impulsar el


procedimiento. No resuelven ningún litigio, hacen avanzar el trámite hacia la sentencia.
No son fundadas (salvo las que causan gravamen irreparable: el juez debe fundarlas,
porque suponen un pronunciamiento contrario a una pretensión).

b) Sentencias interlocutorias: Son las sentencias que el juez dicta durante el proceso,
decidiendo cuestiones accidentales o accesorias. Si bien las cuestiones sobre el fondo de
la cuestión se resuelven en la sentencia definitiva, en muchas oportunidades las
decisiones interlocutorias ponen fin al proceso, como por ej. la que decida la caducidad
de la instancia a pedido de parte.

Las sentencias interlocutorias resuelven una cuestión procesal, resuelven un


incidente que permite continuar con el procedimiento. Se diferencian de las definitivas
en cuanto a la norma que aplican; estas deciden una cuestión sustancial y ponen fin al
litigio.

- Así mismo hay que distinguir entre sentencias de primera y de segunda instancia,
cuyas formalidades están sometidas a reglas especiales.

El proceso de formación de sentencia:

Formalidades intrínsecas:

1- AUTOS Y VISTOS: significa “visto el expediente”. En ellos se individualiza el


proceso: contiene la carátula con el nombre del juicio, número respectivo de entrada al
juzgado (folio y año), e individualización del tribunal o juzgado ante quien se tramita la
causa.

2- Exposición de los hechos: En esta primera parte de la sentencia, llamada


RESULTANDOS porque se consigna en ella lo que resulta de los autos, el juez hace un
resumen objetivo y sintético de la demanda y contestación (medios de ataque y de
defensa), así como de los trámites del expediente hasta el llamamiento de los autos.
Sirve para determinar la congruencia de la sentencia, ya que la decisión se la deberá dar

108
respecto de las cuestiones debatidas en el proceso. Pueden aquí establecerse los
siguientes elementos:

a) Designación de las partes: Son partes, el que promueve la acción y aquel contra
quien se deduce, tiene por finalidad individualizar a quienes intervinieron en el proceso
para establecer los límites subjetivos de la sentencia.

Si las partes actúan por representantes, se hará contar esta circunstancia; si se


tratase de representante legal, se lo mencionará en la misma forma que la parte, pero si
fuese representante convencional será suficiente hacer constar que ella actúa por
apoderado.

b) Consignación de los hechos: El juez hará un resumen de lo hechos expuestos por el


actor en su demanda y por el demandado en su contestación. No es necesario que se
refiera a ellos detalladamente, ni que tome en cuenta todos los que las partes expongan,
sino en cuanto tengan importancia con relación al objeto de litigio.

c) Objeto de litigio: Es indispensable establecer el objeto de la demanda, porque


constituye uno de los elementos de la cosa juzgada y a él debe referirse expresamente la
sentencia. El objeto de la acción se resume en la pretensión jurídica del actor.

d) Causa de la demanda: A ella tendrá que referirse expresamente la sentencia, pues


constituye un elemento de la cosa juzgada.

e) Relación de los trámites del juicio: El juez hará mención de los trámites e incidencias
del proceso, pero la omisión de alguna circunstancia, que no influya en la decisión, no
afecta la validez de la sentencia.

3- Aplicación del derecho: En esta segunda parte de la sentencia, llamada


CONSIDERANDOS (considera por separado las cuestiones referidas anteriormente),
que tiene por objeto la motivación (fundamentación) de la sentencia, el juez aplica el
derecho, operación que comprende tres partes:

a) La reconstrucción de los hechos: el juez actúa como lo hace un historiador; lo cual le


permite comprobar la existencia o inexistencia de los hechos alegados por el actor y el
demandado. Pero se halla sujeto a dos restricciones: en primer lugar, sólo puede tomar
en cuenta los hechos alegados por las partes; en segundo lugar, únicamente puede
referirse a la prueba rendida en los autos, sea por iniciativa de las partes o de oficio. La
falta de examen de la prueba es causa de nulidad, pero el juez no está obligado a
referirse minuciosamente a toda la prueba producida; puede omitir el examen de
aquellas que conceptúe innecesarias para su fallo o las que repute ineficaces, pero no
puede prescindir de un hecho fundamental para la decisión.

b) La determinación de la norma aplicable: Establecidos los hechos, el juez procede a


valorar su significación jurídica. Comienza por ubicarlos dentro de los tipos que la ley
considera, lo que conduce a la calificación de la acción y a la determinación de la norma
aplicable. El juez actúa con independencia de las partes.

c) El examen de los requisitos para la procedencia de la acción: Establecidos los


hechos y determinada la norma que rige la cuestión en litigio, el juez resolverá sobre la

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procedencia o improcedencia de la acción deducida. El acogimiento de la demanda en la
sentencia está supeditado a la concurrencia de las condiciones exigidas para la
admisibilidad de la acción: derecho, calidad e interés.

. En primer lugar, es necesario que la situación concreta que la demanda plantea esté
amparada por la norma legal, que los hechos comprobados coincidan con los supuestos
de la misma.

. La calidad es la conformidad entre el sujeto que deduce la demanda y aquel a quien la


norma ampara (legitimación activa); y la conformidad entre el sujeto a quien se
demanda y aquel contra el cual la norma ampara (legitimación pasiva). Es decir, que la
demanda no prosperará si el actor no es el acreedor o el demandado no es el deudor.

. Es necesario tener interés en el pronunciamiento, porque sólo con esta condición se


pone en juego la actividad jurisdiccional: sin interés no hay acción.

4- Fundamentación del derecho: La decisión del juez debe fundarse en la ley vigente,
aplicando la norma jurídica que corresponda con independencia de la invocada por las
partes.

5- Decisión: La parte dispositiva debe ser una derivación lógica de la motivación, ello
constituye una de las garantías del debido proceso que consagra la CN.

Es en esta parte, llamada DISPOSITIVA, donde el juez pronuncia su FALLO y es ella


la que produce los efectos de la cosa juzgada. La sentencia definitiva debe contener
decisión expresa, positiva y precisa, con arreglo a las acciones deducidas en juicio,
declarando el derecho de los litigantes, y condenando o absolviendo de la demanda (y
reconvención en su caso) en el todo o en parte.

Resuelve sobre el fondo de la cuestión, y también sobre las cuestiones accesorias


(costas).

El juez no puede dejar de fallar por insuficiencia u oscuridad de la ley. Es nula la


sentencia que deje a salvo los derechos del actor para hacerlos valer en otro juicio sobre
la misma cuestión, o que resuelva en forma condicional o de un modo parcial, o también
que no contenga un pronunciamiento, salvo ciertos casos.

No debe dejar lugar a dudas, porque ello suscitaría nuevas discusiones. En caso de
silencio u obscuridad de la sentencia, las partes deben interponer el recurso de
aclaratoria.

Cuando hayan sido varios los puntos litigiosos, se hará con la debida separación el
pronunciamiento correspondiente a cada uno de ellos. Pero no es necesario que haya
pronunciamiento expreso cuando del conjunto de la sentencia resulta que se ha tenido
en cuenta cada una de ellas.

- Términos:

· Para el cumplimiento: El plazo para el cumplimiento lo fijará el juez, teniendo en


cuenta las circunstancias del caso, en las sentencias de condena que son las únicas

110
susceptibles de ejecución. En algunos supuestos está fijado por la ley, pero en general lo
determina en juez. En caso de que la sentencia no fije plazo para su cumplimiento, ella
no es nula sino que se entiende que es de cumplimiento inmediato.

En algunos supuestos, el cumplimiento puede quedar sujeto a condición, como cuando


se condena a escriturar previo pago del precio debido por el adquirente; en tal caso, para
pedirse la ejecución, se debe depositar el saldo del precio a la orden del juez.

· Para dictar la sentencia: Desde que el llamamiento de autos para sentencia queda
firme comienza a correr el plazo para dictarla:

. En los procesos ordinarios es de: 30 días;

. En los sumarios: 10 días;

. Sumarísimos: 3 días.

La sentencia se notifica por cédula.Cuando el juez se niega a dictar la sentencia o no la


dicta en su debido tiempo, procede la: Queja por retardo de justicia.

Formalidades extrínsecas:

Para su validez se exige el cumplimiento de ciertos requisitos, de los cuales depende su


eficacia y su fuerza probatoria:

 Lugar y fecha: El lugar se requiere para la comprobación de la competencia


territorial. La fecha, porque las actuaciones judiciales sólo pueden practicarse en
días y horas hábiles, bajo pena de nulidad; la indicación de la fecha permite
establecer si fue pronunciada en día hábil y si lo fue dentro del plazo que la ley
le fija para el efecto. La fecha debe ser completa, consignando mes y año,
expresada en letras y no en números, debiendo corresponder al día en que se
firmó la sentencia.
 Idioma: La sentencia sólo puede ser redactada en idioma nacional; pero ello no
obsta a que puedan hacerse citas o transcripciones en idioma extranjero, con el
objeto de precisar sus fundamentos.

 Escritura: Como toda resolución que el juez dicta, la sentencia debe


pronunciarse en los mismos autos, transcribiéndosela luego en un libro especial.
Debe ser escrita a máquina, en tinta negra, pudiendo extenderse en papel común
con cargo de reposición. (No existen sentencias orales, sí pueden ser leídas en
juicio oral).

 Firma: La sentencia definitiva debe ser firmada con firma entera del juez o
miembros del tribunal. La firma del juez es requisito esencial para que un
pronunciamiento judicial exista como tal.

 Doble ejemplar: el original se protocoliza y archiva, la copia se agrega al


expediente.

ART. 244 C.P.C.C.: La sentencia debe contener, bajo pena de nulidad:

111
1. El lugar y fecha en que se dicte;
2. El nombre y apellido de las partes;

3. La exposición sumaria de los puntos de hecho y de Derecho en la primera


instancia;

4. Los motivos de hecho y de Derecho, con referencia a la acción deducida y


derechos controvertidos;

5. La admisión o el rechazo, en todo o en parte, de la demanda, y, en su caso, de la


reconvención;

6. La firma del juez o miembros del tribunal.

Requisitos exigidos por el C.P.C.C. Art. 243: (hechos que constituyen la litis)

Los hechos constitutivos de la litis son los que proceden jurídicamente de la demanda y
su contestación y de las peticiones formuladas en ella, sea cual fuere la calificación que
se les hubiese dado.

Fijación de importes acordados en la sentencia (casos donde no es posible


precisarlos)

Art. 245 C.P.C.C.: La sentencia fijará cuales son los importes a pagar y cual es su
cantidad, o fijará la base sobre la cuales deberán calcularse. De no ser posible
determinarlos, dispondrá el nombramiento de árbitros o establecerá prudencialmente su
monto.

La sentencia de segunda instancia: Art. 246 C.P.C.C.: no podrá recaer sobre puntos
que no hubiesen sido sometidos a juicio en primera instancia, a no ser:

1. Sobre excepciones nacidas después de la sentencia;


2. Sobre daños, perjuicios, intereses u otras prestaciones accesorias debidas con
posterioridad a la sentencia de primera instancia;

3. Sobre prescripción de acuerdo a lo dispuesto por el Código Civil.

En todos los casos, podrá decidir sobre los puntos omitidos en la de primera
instancia, háyase pedido o no aclaratoria, siempre que se trate de cuestiones a las que a
quo no pudo entrar a causa de la decisión dada a un articulo previo o que se trate de una
sustanciada y omitida en la sentencia sin fundamento aparente, y que se pida el
pronunciamiento, al expresar o contestarse agravios. En este ultimo caso, se dará
traslado por tres días a la otra parte.

Sentencia dictada por juez legalmente recusado (sanción):

Art. 247 C.P.C.C.: la sentencia será nula cuando hubiere sido dictada por juez
legalmente recusado. Si la nulidad de produjera en segunda instancia, será declarada por
el mismo tribunal.

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Efectos de la notificación de la sentencia:

Art. 248 C.P.C.C.: Pronunciada y notificada la sentencia, concluye la jurisdicción del


juez respecto del pleito, con excepción de los incidentes seguidos. Pero, podrá corregir
cualquier error material, aclarar algún concepto oscuro o suplir cualquier omisión,
siempre que se lo solicite dentro de los tres días de la notificación respectiva.

Alcances de la sentencia sobre relaciones civiles:

Art. 249 C.P.C.C.: La sentencia sobre relaciones civiles no afecta sino a los litigantes y
sus herederos y a los que sucedan en el derecho litigado durante el pleito o después de
fenecido.

Alcance de la sentencia de filiación: La sentencia sobre filiación dictada el pleito entre


padre e hijo aprovechará o perjudicará a los demás parientes aunque no hubieren
tomado parte en el juicio.

COSA JUZGADA: Concepto:

El fin que las partes persiguen en el proceso no es otro que el de obtener del juez una
declaración por la cual se decida definitivamente la cuestión litigiosa, de manera que no
sólo no pueda ser discutida de nuevo en el mismo proceso, sino en ningún otro futuro; y
que, en caso de contener una condena, pueda ser ejecutada sin nuevas revisiones. Este
efecto de la sentencia, sin duda alguna es el más importante, es el que se designa con el
nombre de cosa juzgada, que significa “juicio dado sobre la litis”, y que se traduce en
dos consecuencias prácticas: 1º) La parte condenada o cuya demanda ha sido rechazada,
no puede en una nueva instancia discutir la cuestión ya decidida (efecto negativo). 2º)
La parte cuyo derecho ha sido reconocido por una sentencia, puede obrar en justicia sin
que a ningún juez le sea permitido rehusarse a tener en cuenta esa decisión (efecto
positivo).La cosa juzgada es el efecto más importante de la sentencia.

Caracteres: Dictada la sentencia en un juicio y agotadas las vías recursivas, ella se


convierte en impugnable e inmutable. El carácter de ‘impugnable’ lo adquiere cuando
contra ella no procede ningún recurso. El de inmutable cuando al resolverse
definitivamente la contienda judicial, el pronunciamiento lo hace de modo tal que el
litigio no pueda ser planteado nuevamente ante el mismo juez ni ante ningún otro.
Ambos caracteres permiten afirmar que la sentencia adquirió autoridad de cosa juzgada.

Para Arazi la cosa juzgada no constituye un efecto sino una cualidad de la sentencia que
se agrega a ella para aumentar su estabilidad. Ello significa que puede haber sentencias
firmes que carezcan de esa cualidad.

- Requisitos: Son 2 los requisitos fundamentales para que una decisión judicial adquiera
autoridad de cosa juzgada: a) que se haya dictado en un proceso contradictorio y de
conocimiento, y b) que la sentencia tenga carácter final (que se ha consentido la
decisión o se han agotado los recursos que autoriza el ordenamiento).

Clases:

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· Cosa Juzgada Formal: Se refiere a la imposibilidad de reabrir la discusión en el
mismo proceso, sea porque las partes han consentido el pronunciamiento de primera
instancia, sea por haberse agotado los recursos ordinarios y extraordinarios cuando ellos
procedan; pero sin que obste a su revisión en un juicio posterior. [Entonces es:
irrecurrible, puede ejecutarse, pero puede ser modificada en un proceso posterior].

Por ejemplo: la sentencia dictada en juicio ejecutivo tiene fuerza de cosa juzgada formal
y permite su ejecución, pero carece de fuerza de cosa juzgada material, porque queda a
salvo al vencido el derecho a promover juicio ordinario para obtener su modificación
(ej.: hipoteca); por el contrario, la sentencia dictada en juicio ordinario produce cosa
juzgada material, porque supone la inadmisibilidad de todo recurso, y tiene como
consecuencia la imposibilidad de modificar la decisión.

· Cosa Juzgada Material: Se produce cuando a la irrecurribilidad de la sentencia se


agrega la inmutabilidad de la decisión. Entonces, ninguna autoridad podrá modificar lo
resuelto definitivamente. Puede así haber cosa juzgada formal sin cosa juzgada material,
pero no a la inversa, porque la cosa juzgada material tiene como presupuesto a la cosa
juzgada formal. La cosa juzgada material se refiere al contenido de la sentencia, y sus
caracteres son la irrecurribilidad, la inmutabilidad y la coercibilidad [o ejecutabilidad,
legítima: ya que se utiliza la fuerza, física o psicológica, como consecuencia de una
disposición del Estado.

Queja por retardada justicia:

Art. 109 C.P.C.C.: Vencido el plazo en que debe dictarse resolución, el interesado
deberá pedir ‘pronto despacho’. Si no la obtuviese dentro del término de 10 días,
procederá la queja ante el superior inmediato. Este requerirá informes al juez con la
brevedad posible, fijándole un plazo, y sin más trámite declarará si procede o no la
queja. En el primer caso, impondrá al magistrado una multa.

Art. 110: Cuando el retardo se refiera a sentencia definitiva o interlocutoria, presentado


el pedido de pronto despacho, los jueces tendrán para fallar un término igual al que
debió observarse (30 días más para el juicio ordinario). Si no lo hicieran, cualquiera de
las partes podrá solicitar que la sentencia sea pronunciada por un conjuez, cuya
designación se efectuará de inmediato. El pedido pronunciará ipso facto la pérdida de la
potestad del juez para dictar el pronunciamiento. Si éste entendiera no haber vencido el
plazo, elevará autos al superior que resolverá sin trámite alguno.

Es un recurso especial mediante el cual el interesado obtiene una intimación contra el


juez remiso para que pronuncie su sentencia dentro de un término breve, bajo
apercibimiento de incurrir en multa.

Cuando transcurridos los términos legales para pronunciar sentencia el juez de primera
instancia no la hubiese expedido, podrá ser requerido mediante respectivo pedimento
por cualquiera de los interesados en el juicio. Este es un requisito previo, sin cuyo

114
cumplimiento no sería procedente la presentación de la queja., pues su objeto es dejar
constada la morosidad.

Medidas para mejor proveer:

Concepto: Son medidas que adopta el juez según su criterio para “fallar mejor” [quizá
cuando la prueba aportada a autos por las partes no halla sido suficiente para formar su
convicción].

Los jueces están facultados para ordenar de oficio las diligencias necesarias para
esclarecer la verdad de los hechos controvertidos, respetando el derecho de defensa de
las partes

Art. 20 C.P.C.C.: señala que los jueces pueden “para mejor proveer, ordenar que se
practique cualquier diligencia que estimen conducente y que no sea prohibida por el
Derecho, y prescindir de la lista de peritos cuando fueren necesarios conocimientos
especiales dentro de determinada profesión”.

No obstante, los poderes de iniciativa probatoria no autorizan la producción de


diligencias probatorias que sean ajenas a los hechos controvertidos en el caso concreto,
y porque los poderes del juez no están destinados a excluir la actividad de las partes,
sobre quienes continua pesando la carga de la prueba.

La iniciativa judicial en materia probatoria reviste carácter complementario con respecto


a aquella carga, y su objetivo consiste en eliminar las dudas con que pueda tropezar la
apreciación del juez en los casos en que la prueba producida por las partes no sea lo
suficientemente esclarecedora.

La facultad instructoras de los jueces no pueden ejercerse para cumplir la omisión o la


negligencia de las partes, pues ello implicaría una manifiesta alteración del principio de
igualdad procesal.
Modos Anormales De Extinción Del Proceso:
El proceso puede extinguirse por medios anormales. Sustitutos que surgen del derecho
procesal pero no es que se termina con una sentencia que es lo que primero se busca o
es querido por las partes.

Caducidad:
Art.232- Caducará el proceso si no se insta su curso durante un año. En los
procesos que tramitan por antes justicia de circuito el término será de seis meses.
Este término corre durante los días inhábiles y empieza a contarse desde la última
actuación a diligencia judicial destinada a impulsar el procedimiento, pero no
correrá mientras los autos estuviere pendientes de resolución judicial.

Concepto: La caducidad de la instancia es el modo anormal de conclusión del proceso


generado por el hecho consistente en la inacción absoluta tanto de las partes cuando del
órgano judicial (o de los auxiliares de unos y otros) durante el transcurso de
determinados plazos previstos en la ley.

Fundamento del instituto: Las distintas respuestas que se le ha dado a la caducidad,


puede clasificarse en a) Subjetivas (que entienden que el instituto se basa en la

115
presunción tácita de abandono de la instancia por la parte); b) Objetivas: (la sola
inactividad procesal produce la caducidad); c)del interés público (interesado en evitar la
prolongación sine die (sin fecha) de los juicios); y Mixtas (que consideras que la
caducidad opera en ese trípode de razones). Con criterio empírico y funcional, señala
Falcón que son las doctrinas mixtas las que resultan más apropiadas en la medida que
consideran de modo dinámico la institución. Ello es así porque las razones aplicables al
caso concreto varían entre los campos mencionados.

Opera como consecuencia de la surge de cuatro elementos, 1) Inactividad de las partes.


2) Transcurso del plazo legal previamente establecido. 3) Instancia abierta. Y 4)
Declaración del juez.
Inactividad de las partes: es la no realización de actos impulsivos idóneos que hacen
que el proceso avance.
Transcurso del plazo legal establecido: La regla genérica establecida en la norma es
un año incluida la feria judicial en los juicios que se tramitan ante la justicia de distrito y
seis meses ante la justicia de 1ra instancia de circuito. Cabe agregar situaciones
específicas agregadas por el código para que se produzca la caducidad del proceso:

a) en juicio oral, ella se produce por inasistencia injustificada de ambas partes a la


audiencia de vista de causa (Art. 559)
b) en caso de paralización del proceso por infracción a las leyes fiscales, rige el artículo
242.
c) en el arraigo si el actor no constituye caución: 90 días (incluidos días inhábiles)

Computo del plazo: El plazo comienza a correr el día siguiente (hábil o no) al del
último acto impulsa torio. Lo que determina el comienzo del transcurso del plazo es la
realización del acto de impulso y no la fecha de notificación ni la de su consentimiento.
El plazo de caducidad se cumple a la medianoche de su cumplimiento pero cabe agregar
el día de gracia establecido en el Art.70 (día posterior al día del vencimiento del plazo)
que también resulta aplicable al plazo de perención.
Que exista instancia abierta refiere a que haya un proceso iniciado.
La finalidad de la caducidad de la caducidad de la instancia es doble: por un lado
descargar a los tribunales de aquellos juicios que las parten han demostrado desinterés
en continuarlos y por otro lado estimular la actividad de los litigantes para que los
procesos puedan terminar dentro de los plazos razonables.

Art.233- Es obligación del secretario dar cuenta al tribunal luego que transcurra
el plazo señalado. Este previa vista fiscal, tendrá por extinguido el proceso.
Los litigantes podrán también pedir la declaración de caducidad por vía de acción
o de excepción antes de consentir ningún trámite del procedimiento.
En el caso del primer apartado, procederán los recursos de reposición y apelación
en subsidio si el auto fuere de primera instancia, y solo de reposición si fuere de
segunda.
Cuando sea alegada por una de las partes, el tribunal oirá a la contraria y al fiscal,
mediante vistas por tres días y procederá a resolver.

Los sistemas de caducidad de la instancia: Señala Falcón que existen cuatro variables
posible para la caducidad de instancia: producción de pleno derecho , producción de
declaración judicial, producción de oficio o a pedido de parte. A su vez estos sistemas
pueden hallarse combinados. 1) La caducidad de instancia opera de pleno derecho

116
cuando el mero cumplimiento del plazo extingue el procedimiento. En este caso la
caducidad de la instancia puede hacerse efectiva a- sin la necesidad de declaración
judicial, el proceso se encuentra agotado y cualquier actividad producida carece de
valor. B- Con la necesaria declaración judicial , que tiene como fin de comprobar el
cumplimiento del plazo cuyos efectos pueden ser retroactivos (es lo corriente en las
resoluciones declarativas)o producirse a partir de la resolución.
En este caso la perención puede dictarse de oficio, a pedido de parte o a pedido de parte
y oficio.
2) La caducidad de instancia no opera de pleno derecho. En este supuesto siempre es
necesaria una resolución cuyo carácter es constitutivo, ya que desde ella se opera el
nacimiento de la caducidad.

a- Declaración de oficio: Es cuando el secretario de juzgado advierte que ha


transcurrido el plazo legal y da cuenta al juez para que lo cauque, esto en la practica
generalmente no se da. La particularidad reside en la circunstancia que la caducidad
debe tenerse por operada, no desde el vencimiento del plazo correspondiente, sino a
partir de que el órgano judicial la declara por lo cual la resolución reviste carácter
constitutivo.

b- A pedido de parte: Puede pedir cualquiera de los litigantes la declaración de


caducidad por via de acción o a través del planteo de una vía incidental en el caso de
que una de las partes advierte que ha caducado y pretende impulsar el proceso, la
contraria notificada del acto impulsa torio tiene tres días para oponer excepción de
caducidad.
Art. 235- La perención es indivisible cualquiera sea la naturaleza.

Efectos (en la primera instancia y luego de notificada la sentencia).

Art. 236- Cuando la caducidad se produjere antes de la sentencia de primera


instancia o antes de su notificación a las partes, no se extinguirá la acción, que
podrá ejercerse en nueva demanda. Cumplida la notificación, la perención dará
fuerza de cosa juzgada al fallo transcurrido, aun cuando no se hubiera elevado al
expediente.
La caducidad será resuelta, en todos los casos, por el tribunal que radiquen los
autos.
a) Si el proceso caduca antes de dictarse la sentencia de primera instancia, el efecto
alcanza al proceso, quedando subsistente la acción.
b) Si el proceso caduca después de dictada la sentencia de primera instancia, pero antes
de notificarse a las partes, el efecto es el mismo que el anterior, pues por falta de
notificación la sentencia no advino en acto completo.
c) Si el proceso caduca después de notificada la primera instancia, el efecto es la fuerza
de cosa juzgad alcanzada por el pronunciamiento del a quo.
d) Si el proceso caduca después de dictada la sentencia de segunda instancia, la norma
en estudio no brinda una solución expresa, circunstancia que obliga a realizar una
hermenéutica integradora. En un antiguo y esclarecedor fallo, se señala que en algunas
legislaciones extranjeras contemplan dos hipótesis: 1- si la caducidad se produce en
segunda instancia , después de confirmarse el pronunciamiento en recurso, éste adquiere
fuerza de cosa juzgada. B- si ella se produce en segunda instancia, después que la

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sentencia pronunciada en esa sede ha modificado los efectos del fallo anterior, éste no
alcanza autoridad de cosa juzgada.

Pruebas del juicio perimido (su utilización en un nuevo proceso)

Art.237- No obstante la perención, las partes podrán usar en el nuevo juicio que
promovieren las pruebas producidas en el primero.
La norma local consagra la idea de que la caducidad de la instancia no tiene por efecto
perjudicar las pruebas producidas en el proceso en que ella se declara y, por ende,
pueden hacerse valer en el nuevo que se instaure. Dada la amplitud de la fórmula
empleada, el concepto de prueba debe interpretarse en sentido lato, como comprensivo
de todas las consecuencias de un expediente que puedan revestir valor probatorio.

Procesos que no caducan:

Art.238- Las disposiciones de este título no son aplicables a la ejecución de


sentencia, incluido el juicio arbitral cuando se lo usa a este fin, ni a los actos de
jurisdicción voluntaria y juicios universales.
La norma no sólo es aplicable al juicio arbitral cuando se lo utiliza a ese fin -supuesto
expresamente contemplado- sino que también al trámite correspondiente al
cumplimiento de las sentencias de remate dictadas en juicio ejecutivo y apremio.
Otra salvedad en los actos de jurisdicción voluntaria y en los procesos universales, una
interpretación adecuada de la norma conduce a sostener que, en ambos casos, debe
entenderse que no perimen las actuaciones propias de estos procesos, pero que están
sujetos a caducidad todos los incidentes contenciosos que se promovieren en ellos.

Paralización por fuerza mayor y perención:


Art.239- En ningún caso, se decretará la perención cuando se hubiera paralizado
por fuerza mayor o disposición de la ley.
Fuerza mayor: son situaciones de hecho que determinan que las partes se encuentran
imposibilitadas o inhabilitadas efectivamente para activar la marcha del proceso. Puede
haber mediado resolución judicial declarando la suspensión; o no. (en oportunidad de
pronunciarse el juez sobre la caducidad de la instancia , deberá reconocer a esas
circunstancias la eficacia suspensivas su ellas han sido alegadas y probada por parte
interesada)
Por disposición de ley: cuando no se haya dictado resolución alguna que dispusiera
paralización pues esta deriva directamente de la ley.
Art.240- La perención tiene lugar también en los incidentes, excepto en el de
perención. Perimido el principal quedan perimidos los incidentes.

Las costas en del juicio principal del incidente de perención:


Art.241-las costas del juicio perimido serán en el orden causado si fuere en la
primera instancia. Si la perención se produjere en segunda, las costas de ésta serán
a cargo del recurrente.
Solo pueden ser objeto de distribución, las costas del incidente de pereción producida;
las del juicio perimido en primera instancia deben correr por su orden.

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Resulta la caducidad de la instancia, las costas del principal son por el orden causado y
las del incidente a cargo del vencido -si hay oposición- o por su orden si hay
aquiescencia.
El auto que declara la perención sobre costas debe tener una doble decisión sobre
costas: Las relativas al juicio principal, que se imponen en el orden causado( Art.241
CPC) y la restante vinculada al incidente de caducidad , para el cual rige el principio
general del Art.251 CPC.
Cuando se opera la caducidad del recurso de apelación interpuesto en el juzgado de
origen, también se aplica la norma del Art.241CPC, en segunda parte, a tenor del
Art.128 CPL.

Caducidad por infracción a las leyes fiscales:


Art.242- Cuando por infracción a las leyes fiscales deban paralizarse los
procedimiento y el deudor de la obligación tributaria fuere el actor, se producirá la
perención di trascurridos noventa días, incluidos los días inhábiles, no se hubiere
satisfecho el impuesto y la multa.
En segunda instancia, si el infractor fuere el apelante, se le considerará como actor
a estos efectos, y la paralización durante el tiempo establecido tendrá como
consecuencia la deserción del recurso.
Según dispone el código fiscal no hace falta incumplir el pago de una deuda fiscal para
consumar la infracción. Para ejecutar la pena fiscal no basta el simple proveído de
repongase, es necesario una intimación que debe ser formal -personal ya que para la
conformación d ela infracción es necesario que se haya dado cumplimiento estricto a las
formas o pasos para su terminación, no limitandose al mero hecho de la practica de una
liquidación por el actuario.
La intimación personal formal (ad solemnitatem) cumple una doble función esencial:
determina el tiempo concreto de la consumación de la infracción y al mismo tiempo fija
el plazo para el computo inicial de la caducidad especial. Sin esa intimación no hay
infracción y tampoco principio del término de caducidad.
Las infracciones fiscales son de naturaleza penal especial.

Desistimiento:
Art.239- En cualquier estado del juicio, podrán las partes desistir de sus acciones o
excepciones.
Si el desistimiento fuera del proceso y no de la acción, el juez no lo tendrá por
producido sin el consentimiento de la contraparte.
El desistimiento de la acción la extingue definitivamente. Las costas serán a cargo
de la parte que desista. No se admitirá el desistimiento sin la justificación del pago
de aquéllas.

Concepto: El desistimiento es el medio o modo anormal de extinción del proceso que


opera como consecuencia de la renuncia a la prosecución del mismo por parte del sujeto
activo de la relación jurídica procesal.
En principio es un medio o modo unilateral de extinción del proceso.

Hay dos formas de desistimiento (clases): por un lado encontramos el desistimiento


del proceso y por otro el desistimiento de la acción. Ambos se pueden dar hasta el
llamamiento de autos. En el desistimiento del proceso si se da luego de enviar la
demanda al demandado requerirá el consentimiento del demandado para que el
desistimiento opere.

119
Desistimiento del derecho o acción: cualquiera sea el momento que se de no requiere no
requiere conformidad del demandado.
Cuando el actor desiste del proceso le da la posibilidad al actor de promover un nuevo
proceso siempre y cuando el derecho no hubiera prescripto.

Costas: El que desiste siempre se hace cargo de las costas. La ley local para la admisión
del desistimiento la justificación del pago de las costas. Dicha condición a la que se
sujetan los efectos del desistimiento se justifica como modo de garantizar el pago de los
gastos de aquél que fuera molestado con un proceso que luego se abandona.
Se necesita para poder iniciar un nuevo proceso: la declaración anterior del juez del
estado de desistimiento.
La diferencia entre el desistimiento del proceso y del derecho o acción esta que cuando
el actor renuncia a la acción lo que hace en definitiva es renunciar a la pretensión no
pudiendo en el futuro reiniciar de nuevo el proceso.
En segunda instancia puede desistir el apelante. Esto tiene como consecuencia la
confirmación del fallo de primera instancia. Para desistir no se necesita conformidad del
apelado siempre se da de manera unilateral.

Allanamiento:

Art.230- El demandado podrá allanarse a la demanda , reconociendo sus


fundamentos. En tal supuesto, el tribunal dictará sentencia conforme a derecho sin
más trámite si no hubiesen cuestiones sobre costas; de lo contrario, la pronunciará
después de sustanciado por el juicio sumadísimo, la incidencia relativa a éstas. Si
estuviere interesado el orden público o la sentencia a dictarse pudiere afectar a
terceros, el tribunal podrá disponer la apertura a prueba y la prosecución de la
causa hasta el fallo.
El allanamiento de un litisconsorte no afecta a los demás y a la sentencia que acoja
la demanda sólo alcanzará al allanado.
Concepto: El allanamiento a la demanda importa un acto jurídico por medio del cual se
extingue unilateralmente el proceso y se manifiesta generalmente con el reconocimiento
o admisión del derecho o postulaciones invocadas por el accionante. Importa, en
términos generales, la conformidad con las pretensiones deducidas por la parte contraria
y, en definitiva, la renuncia al derecho de aposición o al ejercicio del derecho de
defensa.
Debe señalarse que el allanamiento se produce por el sujeto contra quien se ejercita
alguna pretensión. Por tanto, puede provenir tanto del demandado cuanto del actor ante
una demanda reconvencional, o frente al ejercicio de una defensa o excepción.

Requisitos:
1) Específicos:
A-Manifestación voluntaria, expresa y categórica del allanado. La mayoría de la
doctrina no acepta el allanamiento tácito este es el que se infiere de la conducta que
adopta el demandado en relación al reclamo del accionante. La intención de allanarse no
se presumen y la interpretación de los actos tendentes a tenerlo configurado debe ser
restrictiva.
B- Total: el allanamiento debe ser una manifestación de voluntad del que se allana en
el sentido de comprender la totalidad o la integridad de la pretensión actora.
C-Por escrito o mediante acta judicial.

120
D-Formulada en forma incondicional: esto es independiente del cumplimiento de
condición alguna.
E-Conocimiento del adversario: respecto sus modalidades y alcances sin necesidad de
aceptación, salvo para resolver lo ateniente a la eximición de costas del que se allana.
F-No afectación del orden público o de los intereses de terceros: Para que el
allanamiento sea eficaz debe versar sobre derechos que no comprometan el orden
público o derechos de terceros. De ser así, el juez debe continuar con el proceso según
su estado hasta la sentencia definitiva.

2)Accesorios:
A- El allanamiento en juicio ejecutivo requiere para ser eficaz y eximir de costas,
además de los recaudos específicos, que al momento en que se lo formula se consigne
en pago total de la deuda reclamada y que dicha consignación sea aceptada por el
accionante o admitida judicialmente.
B- la eximición de costas del allanado opera cuando el allanamiento se formula en
tiempo oportuno (esto es, dentro del plazo para contestar la demanda u oponer
excepciones en juicio ejecutivo) y en formal total e incondicional, es decir, respecto de
todas las pretensiones del accionante de modo tal que resulte innecesaria la prosecución
del proceso.

Oportunidad: El allanamiento puede ser formulado a partir de la existencia de una


relación procesal, más propiamente dicho luego de corrido el traslado de la demandado
de la reconvención, en su caso. Si bien es cierto que la ley no determina una
oportunidad procesal para que pueda efectuarse el allanamiento, ya que puede
efectuarse en cualquier estado de la causa antes de dictarse sentencia . Por otra parte, la
jurisprudencia considera que el allanamiento puede ser formulado en cualquier
momento del proceso , aún con posterioridad al dictado de la sentencia. En el supuesto,
si el demandado hubiere deducido recurso contra la decisión que le resultó desfavorable,
importará en rigor una renuncia o desistimiento al recurso.

Efectos: producido y puesto en conocimiento de la contraria el allanamiento,


corresponde el inmediato dictado de la sentencia que disponga los efectos queridos por
el accionante. El allanamiento no tiene no tiene por si mismo fuerza decisoria por lo
tanto necesita del dictado de un pronunciamiento que establezca la certeza de la
pretensión formulada y, eventualmente, la condena, confirme al derecho
correspondiente.
En consecuencia el allanamiento elimina el estado de controversia existente entre las
partes pero de ningún modo, extingue la pretensión incoada.

Costas: quien se allana a las pretensiones formuladas por el actor, corresponde que se
impongan a este las costas del proceso. El código contempla una excepción al principio
del vencimiento objetivo, se trata del allanamiento formulado en tiempo oportuno
(cuando el reconocimiento como fundada de las pretensiones del adversario se efectúa
dentro del término legal para contestar la demanda u oponer excepciones) y en forma
total, expresa e incondicionada, apareja la eximición la eximición de costas para quien
se allana y, consecuentemente te imponen por su orden.
Allanamiento y litis consorcio: determina el art.230que el allanamiento de un
litisconsorte no afecta a los demás y la sentencia que acoja la demanda sólo alcanzará al
allanado.

121
A- Litisconsorte facultativo: en estos casos sí el allanamiento de uno de los
litisconsortes no afecta a los demás, dado que estos actúan de manera independiente.
Si el litisconsorte no allanado resulta a postre vencedor, no podrá ser demandado por el
litisconsorte allanado para que contribuya proporcionalmente a lo pagado por él.
Contrariamente , si el litisconsorte no allanado es vencido, puede ser sujeto pasivo de la
acción de contribución por el litisconsorte que se allanó oportunamente.

B- Litisconsorte necesario: Atento a la inescindibilidad de esta figura. El allanamiento


de alguno de los litisconsortes carece de efectos sobre los restantes y no impide la
prosecución del juicio, incluso contra aquél ya que la relación sustancial pasiva es una
sola, aunque exista pluralidad de sujetos.
En consecuencia la sentencia que rechace la pretensión actora tiene iguales efectos para
todos los codemandados, aun para el allanado, en cambio, si la sentencia es favorable a
pretensión del demandante, el litisconsorte que se allanó oportunamente puede verse
favorecido en cuanto a la imposición de costas.

Transacción:
Art.231- no se dará curso a la transacción sin la justificación del pago de las costas
o el afianzamiento de éstas.

Concepto: la transacción resulta ser un modo anormal de extinción del proceso en


virtud del cual, las partes satisfacen sus pretensiones mediante concesiones recíprocas
respecto de los derechos controvertidos.

Clases: la transacción puede ser judicial o extrajudicial. La judicial se celebra durante


el curso de un proceso, tal como contempla el art 832. Del código civil al referir a
obligaciones litigiosas. La extrajudicial se verifica antes de que s entable una litis
judicial, pero vinculada a la existencia de obligaciones dudosas entre dos o mas
personas (art.232Cód. Civil)

Caracteres:
1) Generales:
a- bilateral: asume el carácter bilateral toda vez que para su formación requiere la
concurrencia de la voluntad de dos o mas personas.
b- Oneroso: dada la interdependencia de concesiones efectuadas por las partes , resulta
un acto a título oneroso.
c- concensual: la transacción, como acto bilateral, se perfecciona con el consentimiento
de sus otorgantes.
2) Especiales:
a- Interpretación restrictiva.
b- Indivisible: conforme suurge del artículo 834 del código civil, las diferentes cláusulas
de una transacción son indivisibles y cualquiera de ellas que fuese nula, o que se
anulase, deja sin efecto todo el acto de la transacción.
c- Declarativa: La transacción asume carácter declarativo toda vez que por su
intermedio no se transmiten sino que se declaran o reconocen derechos que hacen objeto
de las diferencias sobre las que ella interviene. Significa que la finalidad de la
transacción no radica en otra cosa que reconocer aquellos derechos que se pretendían,
poniéndolos a cubierto de una impugnación o controversia.

Requisitos:

122
1) Sustanciales.
a- Existencia de obligaciones litigiosas o dudosas.
b- Concesiones recíprocas de las partes interesadas: Esa reciprocidad de sacrificios
impone la necesidad de que los intervinientes en la transacción expresen su
consentimiento total respecto de los temas comprendidos en el acuerdo.

2)Formales: (forma escrita)La transacción sobre derechos litigiosos exige la


presentación de las partes ante el juez del respectivo documento, público o privado, en
el que conste los términos del acuerdo al que arriban. El incumplimiento de tales
formalidades importa la nulidad absoluta del acto. (art 1044, código civil)
Efectos: La transacción extingue los derechos y obligaciones que las partes hubiesen
renunciado y tiene para con ellas autoridad de cosa juzgada(art 850, código civil).
Como modo anormal de culminación de un proceso, sustitutivo de la sentencia, a partir
de su incorporación a los autos, la transacción importa para las partes intervinientes, sus
sucesores y sustitutos la finalización de la litis con carácter de cosa juzgada material.
Dicho acto jurídico vincula y produce efectos exclusivamente respecto de los que han
intervenido en su suscripción, mas no puede ser opuesto a terceros ajenos al pleito.
Cabe señalar que le compete al juez de la causa examinar capacidad y la personería de
quienes intervinieron en el acto, como la transigibilidad de los derechos que se trata
conforme a lo que ha sido contemplada en las normas civiles correspondientes. Se
justifica entonces que procesalmente te disponga a la homologación judicial del acta de
transacción, luego de haberse efectuado la verificación de los recaudos impuestos por la
ley de fondo.

Homologación: la homologación de la transacción, subrogado o equivalente de la


sentencia a través de la cual se pone fin a la litis trabada en relación a los derechos
judicialmente controvertidos o contestados, se equipara a un verdadero título
ejecutorio. Es decir que la homologación judicial otorga a la transacción la aptitud para
ser realizada por vía de la ejecución. La jurisprudencia santafesina sostiene al respecto
que los efectos de una transacción no precisan, entre las partes, de otra formalidad que
la presentación en el tribunal para realizarse, aun antes del pago de impuestos y aportes,
previos a su homologación. Mediante la intervención judicial en el acto homologatorio
es, por su naturaleza un sometimiento jurisdiccional voluntario, que tiene por objeto
otorgar un acuerdo conciliatorio, transaccional o extrajudicial de las partes, el efecto
propio de una sentencia y que hace adquirir a dicho acuerdo el carácter de verdadero
título ejecutorio.

123
Bolilla X
Por: María Pilar Pérez

RECURSOS
Los medios de impugnación.
Los recursos constituyen una especie entre los distintos medios de impugnación que
tiene el litigante para obtener que se corrijan errores, vicios o defectos en que pudieron
haber incurrido el juez o sus auxiliares.
En sus resoluciones, el juez pudo de dos maneras haber incurrido en un error de
juzgamiento, aplicando en ella una ley inaplicable, o aplicando mal o dejando de aplicar
la ley que corresponde (error in iudicando), o bien apartándose de las formas
establecidas en la ley para la resolución (error in procedendo); en ambos supuestos, la
reparación del agravio se obtiene mediante recursos que, en el caso de transgresión de
las formas de las providencias, será el de nulidad.
Pero estos recursos son costosos por la pérdida de tiempo que suponen, por la
imposibilidad de reproducir a veces el acto declarado nulo, y por la intervención de un
tribunal distinto en la apelación. Es en consideración de estas circunstancias por lo que
la ley autoriza otros recursos, los cuales permiten al juez que dictó la providencia
enmendar su propio error (reposición), o fijar el alcance de su pronunciamiento

124
(aclaratoria), o prevenir una injusticia (rescisión), o repararla (revisión). Además la
violación de una garantía constitucional puede fundar un recurso para obtener su
reconocimiento (inconstitucionalidad).

Acepción amplia y estricta.


La doctrina procesal moderna emplea la expresión genérica de medios de impugnación,
distinguiéndolos según el objeto y tribunal que conoce de los mismos. Todos
presuponen un perjuicio y en todos los casos se busca su reparación; pero en algunos de
ellos el perjuicio se produce por errores que puede remediar el mismo órgano
jurisdiccional que pronunció la sentencia, mientras que en otros, no obstante su forma
correcta, el recurrente se considera agraviado y busca reparación en otro tribunal
superior. Para el primer caso se reserva el nombre de remedios y para el segundo de
recursos; aquéllos tiene por objeto reparar una anomalía y éstos renovar el proceso.

Concepto de recurso.
Alsina: Recursos son los medios que la ley concede a las partes para obtener que una
providencia judicial sea modificada o dejada sin efecto. Su fundamento reside en una
aspiración de justicia, porque el principio de inmutabilidad de la sentencia, que
constituye a su vez el fundamento de la cosa juzgada, derivado de la necesidad de
certeza para la estabilidad de una sentencia injusta, y los recursos no son otra cosa, que
el modo de fiscalizar la justicia de los resuelto.
La consecuencia inicial de la interposición de un recurso es impedir que la sentencia
produzca sus efectos normales. De ahí la necesidad de establecer un límite en el tiempo
para su ejercicio, pues, en caso contrario, ni las interlocutorias adquirirían carácter
preclusivo, ni las definitivas el de cosa juzgada; es decir que el avance del proceso no
sería posible, ni la litis lograría solución definitiva. El vencimiento del término produce
por eso la caducidad del derecho a interponer los recursos, y en cambio, su interposición
en tiempo produce la suspensión de los efectos de la sentencia.

Arazi: Los recursos son medios de impugnación que la ley concede a quien se considera
perjudicado por una resolución judicial para requerir, dentro de un plazo determinado,
que, en el mismo proceso, el órgano que la dictó u otro distinto la modifique o la deje
sin efecto.
El legislador debió armonizar dos valores que, a veces, se contradicen; por un lado, la
necesidad de lograr que las resoluciones sean lo más justas posible y, por otro, la
celeridad procesal. La mayor cantidad de vías recursivas supone que, en definitiva, se
lograrán providencias más perfectas, ya que ellas han sido analizadas en varias
oportunidades, pero un exceso de recursos alargaría demasiado los procesos. Por ello,
en los juicios sumarios y sumarísimos se ha limitado considerablemente la apelación,
dado que en ellos se privilegia la celeridad, en mérito a la índole de las cuestiones que
tramitan por esos procedimientos.

Palacio: Los recursos son aquellos actos procesales en cuya virtud quien se considera
agraviado por una resolución judicial pide, en el mismo proceso y dentro de
determinados plazos computados desde la notificación de aquélla, que un órgano
superior de grado al que la dictó, o en su caso éste mismo, la reforme, modifique,
amplíe o anule.

Etapas ordinarias en que se divide el trámite en segunda instancia.

125
Según hemos visto, el recurso de apelación puede concederse libremente o en relación.
En el primer caso, la discusión se reabre ante el tribunal superior sobre los puntos que
hubiesen so materia del recurso, pudiendo, en determinadas circunstancias, solicitarse la
apertura de la causa a prueba; cuando el recurso se concede en relación, el tribunal falla
teniendo a la vista únicamente la constancia de las actuaciones producidas en primera
instancia, o las copias de las mismas cuando se hubiese concedido al solo efecto
devolutivo.

ACLARATORIA.
Concepto.
Arazi: Por medio de la aclaratoria, el mismo juez o tribunal que dictó una resolución
puede subsanar las deficiencias materiales que ésta contenga, corregir errores de
redacción o integrarla, de conformidad con las peticiones oportunamente formuladas.
El juez o tribunal puede, a pedido de parte o de oficio, aclarar conceptos oscuro o suplir
cualquier omisión. Siempre que la enmienda, aclaración o agregado no altere lo
sustancial de la decisión (arts. 166 incs. 1 y 2, y 36 inc. 3, CPN).
Alsina: Una vez pronunciada y notificada la sentencia, concluye la jurisdicción del juez
respecto del pleito y no puede hacer en ella variación o modificación alguna. Puede, sin
embargo, si se le pidiere por alguna de las partes dentro del día siguiente a la
notificación, corregir cualquier error material, aclarar algún concepto oscuro sin alterara
lo substancial de la decisión, y suplir cualquier omisión en que hubiese incurrido sobre
algunas de las pretensiones deducidas y discutidas en el litigio.

Su naturaleza jurídica.
El Código Procesal Civil y Comercial de Santa Fe no legisla la aclaratoria dentro del
título dedicado a las impugnaciones sino en el título de constitución y desarrollo de l
proceso al tratar la sección de informes. En consecuencia, se discute si se trata de un
recurso o de un incidente en el proceso de formación de la sentencia.
Cuando la aclaratoria se hace do oficio, es evidente que no podemos hablar de “recurso”
ya que, como hemos visto este es un medio de impugnación concedido a las partes. La
duda surge cuando es el litigante quien la solicita.
Quienes se oponen a considerar a la aclaratoria como un verdadero recurso argumentan
que mediante ella no se obtiene un nuevo acto de voluntad del juez; sin embargo,
nuestro sistema se caracteriza por su amplitud, ya que, además de corregir errores
materiales y aclara puntos oscuros, el juez decide sobre pretensiones omitidas, si bien es
cierto que en ningún caso se podrá modificar lo sustancial de la decisión anterior. De
todos modos no parece demasiado importante la denominación porque en definitiva
constituye una manera para que las partes obtengan que se subsanen ciertas anomalías
de una resolución judicial.

Resoluciones que pueden ser objeto de la aclaratoria. Finalidad o alcance de la


aclaratoria.
La finalidad del recurso de aclaratoria es el de impugnar por afirmadas razones de
ilegitimidad y los diferentes supuestos.
Procede no sólo respecto de la sentencia definitiva sino de toda resolución judicial,
puesto que, como dijimos, mediante la aclaratoria se logra la economía procesal que el
juez tiene el deber de procurar. Se puede pedir en los siguientes casos: a)Para corregir
errores materiales; deben tratarse, como se ha dicho con acierto, de errores en la
expresión en lugar de errores en la formación de la idea; se incluyen defectos de
cálculos, consignación equivocada del nombre de las partes o de la ubicación del bien

126
objeto del proceso, etc. b) A fin de aclarar conceptos oscuros, es decir, cuando la
sentencia carece de precisión o hay contradicción entre los considerandos y la parte
dispositiva; por vía de aclaratoria no es posible renovar el debate sobre cuestiones que el
juez ha resuelto con claridad. c) Con el objeto de pedir que el juez o tribunal s expida
sobre temas oportunamente propuestos y omitidos en la sentencia, ya que ésta debe
contener la decisión expresa, positiva y precisa de conformidad con las pretensiones
deducidas en el juicio. En este supuesto, si no se hubiese pedido aclaratoria, igualmente
el tribunal de alzada podrá decidir sobre los puntos omitidos.

Efectos que produce sobre el plazo para interponer otros recursos.


La terminología “recurso de aclaratoria” o “aclaratoria” es impropia, y el recurso
inadmisible respecto de una providencia; también es inadmisible la llamada “aclaratoria
de aclaratoria”.
Se concibe, en cambio, la aclaratoria respecto a los fundamentos del auto de sentencia.
La interposición del recurso no suspende el plazo para la deducción de otras
impugnaciones aun cuando el auto aclaratorio se limite a integrar la decisión en crisis,
por ejemplo disponiendo un pronunciamiento sobre costas que antes había omitido,
pues dicho silencio ya causa agravio y se debió, amén de imprecar aclaración, apelar ad
eventum.

Parte de la resolución judicial susceptible de ser aclarada. Plazo para deducirla. Juez
del recurso.
En realidad la “jurisdicción” del juez no concluye con su sentencia notificada, sólo se
suspende, pues a la postre ha de reasumirla en el proceso de ejecución del fallo. Y si esa
contingencia no se genera, son muchas las excepciones a la susodicha “pérdida” de la
competencia. En síntesis, la resolución compone el litigio suscitado entre las partes, lo
que fue objeto del juicio ahora pasó a ser el objeto de la sentencia, obligatoria para los
litigantes (sin perjuicio del derecho a la impugnación) y para el juez. En el trance, el fin
inmanente del proceso fue la obtención de la cosa juzgada, y el fin trascendente la
realización de la ley.
Como consecuencia de la norma, si la sentencia es definitiva y se achacan vicios del
procedimiento, corresponde el recurso de nulidad y no la invalidación mediante la vía
incidental. Respecto de la actualización de la prestación adeudada (vg. Ley 24.283: no
puede ser superior al valor al momento del pago) y a la acción de revocatoria de la cosa
juzgada fraudulenta, son variadas las hipótesis en cuanto al tribunal competente,
trámites y prescriptibilidad.
Aunque se haya dictado y notificado el fallo, la instancia (como el grado de
conocimiento judicial) puede corregir en cualquier tiempo el error numérico. También y
si la parte lo solicita dentro de los tres días de notificación del caso, podrá “corregir
cualquier error material, aclarar algún concepto oscuro o suplir cualquier omisión”.

+
REPOSICIÓN O REVOCATORIA.
Concepto.
La revocatoria o reposición es el recurso que tiene por finalidad que el mismo órgano
que dictó la resolución que se impugna reconsidere su contenido sustituyéndolo, total o
parcialmente, por otro diferente (Arazi)
El recurso de reconsideración es un acto procesal que abre un procedimiento recursivo
autónomo, a través del cual un sujeto procesal legitimado postula a través de nuevos
argumentos el reexamen de la parte dispositiva de una resolución judicial en la misma

127
instancia en que se produjo el supuesto error o vicio en el juicio o en el procedimiento
(Código Procesal Civil y Comercial de la Provincia de Santa Fe - Tomo 3 B - Director:
Jorge W. Peyrano; Coordinador General: Marcos L. Peyrano - Autor del Concepto:
Vargas, Abraham Luis).

1. Es un acto procesal: Para llegar a esta configuración tenemos en cuenta


fundamentalmente la estructura del “recurso” como acto, que es idéntica a la
estructura de todo acto procesal en cuanto a sujeto, objeto, y requisitos de
actividad (lugar, tiempo y forma).
Además, con esta conceptualización dejamos de lado las polémicas sobre si los
“recursos” son “medios de impugnación” o “medios de gravamen”, al tiempo que nos
parece congruo conceptualizar a un recurso con su sinónimo.

2. Que abre a un procedimiento recursivo autónomo: Compartimos aquí las


enseñanzas de Morello, Berizonce y Lucas Sosa en cuanto a que con cada
recurso “se autoabastece procedimiento nuevo e independiente”.
Pero además, hay que distinguir frente al procedimiento de impugnación el
procedimiento impugnado, supuesto particularmente frecuente en los casos de un
recurso de reposición por vicios in procedendo anteriores al dictado de la resolución
impugnada.
Finalmente, no hay que olvidar la distinción propuesta por Carnelutti entre
procedimientos de reparación (que no exigen un órgano distinto del que ha pronunciado
la sentencia impugnada, porque, elimina la anomalía del procedimiento impugnado, el
mismo juez está en situación de corregir su propio error) y procedimientos de reexamen
(donde es conveniente, aunque no necesaria, la diversidad del órgano). Por eso -decía el
maestro- “en el procedimiento de reexamen hay diferencia y en el procedimiento de
reparación identidad de sedes en relación con el procedimiento impugnado”.

3. A través del cual un sujeto procesal: Con este marco subjetivo abarcamos los
recursos que pueden interponer no solo las partes, sino también los letrados por
su propio derecho, o los terceros, o los terceristas, o un sujeto eventual - a quien
se impone alguna sanción, como es el caso del Informante-.
4. Legitimado: La legitimación en todos los recursos deviene del agravio que,
como se sabe debe ser cierto, concreto, jurídico y actual.
5. Postula a través de nuevos argumentos: Esto es central, pues, de no postularse
argumentación o de hacerlo con los “mismos argumentos” que no fueron
atendidos en la resolución cuestionada, lo que corresponde es el “rechazo in
límine” del acto procesal viciado en su sustancia y que no puede tener el
andamiaje correspondiente a los recursos pues no cumple con los requisitos de
“forma de actividad”, en particular, el “modo” o fundamentación.
6. El reexamen de la parte dispositiva de una resolución judicial: Como
sostendremos más adelante, el juez no utiliza la facultad de imperio -y por eso
esta mal dicho que revoca “por contrario imperio”- sino que hace uso del
iudicium que es propio de la función jurisdiccional que desarrolla.
A partir de allí, lo que debe hacer es “reconsiderar” la cuestión a partir de los “nuevos
argumentos” planteados por la parte agraviada.

128
Esto de “nuevos argumentos” también se da cuando el juez dicta una providencia de
“oficio” ya que, en este caso, son “nuevos” porque el juez no tuvo en cuenta la opinión
del agraviado antes de emitir se resolución ahora cuestionada.
Nótese que no decimos “dictadas sin substanciación” porque se verá luego que si bien la
regla es esa, hay reposiciones que se admiten aunque haya habido “substanciación”, en
homenaje al principio de economía procesal o a la garantía del debido proceso (v.gr.
reposición contra sentencias de segunda instancia y de la Corte Suprema de Justicia de
la Nación).
Por su parte, cuando se alude a la parte dispositiva de una resolución judicial,
evaluamos la consabida doctrina y jurisprudencia que indica que sólo caben agravios
respecto del conocido “resuelvo” y no, de los argumentos vertidos en los considerandos.
En el caso del recurso de reconsideración, aunque la resolución impugnada sea una
providencia simple (pues en los autos y sentencias no hay problemas con lo sostenido),
igualmente pueden distinguirse los “argumentos” (salvo que sea inmotivada, con lo cual
es nula por falta de motivación) de lo “que se ordena o dispone”.
Claro que, para descubrir y atacar el vicio in indicando necesariamente habrá que
argumentar en torno al defecto lógico de la resolución, a partir de premisas que de modo
alguno podrían dar lugar a la conclusión cuestionada o, viceversa.
Lo que nosotros afirmamos es que lo que se ataca es la parte dispositiva que es la que
provoca agravio, aunque, para ello sea necesario referirse a la motivación de la
providencia, auto o sentencia.

7. En la misma instancia en que se produjo el supuesto error: Al hablar de la


“misma instancia” soslayamos las paradojas configuradas por los “recursos de
reposición” que se interponen ante el juez delegado pero que son resueltos por el
juez delegante o principal; también los supuestos en que el recurso de
revocatoria es interpuesto contra una providencia simple suscripta por el
Secretario y que solo puede ser tratada por el magistrado y, finalmente, aquellas
otras en que la reposición se articula contra los decretos del Presidente o Juez de
Trámite de un Tribunal Colegiado y, al recurso de “revocatoria” lo resuelve “en
pleno” la composición íntegra del Tribunal o de la cámara de Apelaciones o de
la Corte Suprema de Justicia que corresponda, existiendo pues “identidad de
oficio, pero no identidad de juez” en los términos de Carnelutti.
No hay que confundirse y asimilar el lugar donde se “corrige el error” con aquellos en
los que se puede “acusar”.
En efecto, como se ha dicho con propiedad el recurso de reposición “procede en todas
las instancias”.

8. O vicio en el juicio o en el procedimiento: En este ítem, señalamos que pueden


atacarse mediante este recurso, vicios in indicando e in procedendo, opciones
que en algunos casos se olvida en doctrina y, que en otros, directamente se niega
ya que se sostiene que “el recurso de reposición tiene por objeto…la revocación,
en todo o en parte de un pronunciamiento que se considera injusto,
independientemente de la nulidad de la providencia misma por una omisión de
forma, cuyo medio de alegación es el recurso de nulidad. Si la providencia,
además de injusta, fuese nula, bastará alegar esta última circunstancia, pues la
reposición supone una providencia válida, y por eso su interposición importa la
renuncia del recurso de nulidad”.
Denominaciones. Fundamento.

129
Peyrano dice que la denominación correcta es la de “recurso de reconsideración” pues,
las demás compulsadas adolecen de distintos defectos que hacen impropio su uso, no
obstante lo cual, aceptamos que la generalmente utilizada es la de “recurso de
reposición” porque así ha sido plasmada en la mayoría de los códigos Procesales del
país y en los Anteproyectos del Reforma del Código Procesal de la Nación.
1. Revocatoria: Etimológicamente proviene de “re” -denota un espacio recorrido,
ya en sentido inverso, ya en el mismo sentido- y “vocare” -llamar-.
El Código Procesal Civil de Santa fe, muchas veces dice indistintamente “reposición o
revocatoria” igual que lo hacia el viejo Código de Procedimientos Civiles de Capital
Federal -Ley Nº 14.237- y aun hoy algunos artículos del Código Procesal Civil y
Comercial de la Nación -aunque no en el 238 donde se refiere a “reposición”-.
Julio Chiappini critica el término “revocatoria” porque es un solecismo y no es castizo
como lo es reposición. Hitters por su parte y en el mismo sentido, sostiene que la
“revocación” siempre la lleva a cabo un órgano superior.
Vargas dice, no vacilamos en criticar la denominación “revocatoria” ya que entendemos
que nominar así un recurso implica la posibilidad de confundirlo con la acción
revocatoria o pauliana (propia del Derecho Civil -artículos 961 a 972 del Código Civil-)
o a la acción revocatoria del Procedimiento Falencial (inoponibilidad de ciertos actos
celebrados entre el fallecido y un tercero durante el período de sospecha, para con los
acreedores de la masa concursal -artículos 118, 119 y 120 de la Ley 24.522).
Incluso, dentro del mismo trámite procesal de ciertos juicios, existen recursos
“especiales” (y que no son reposición sino algo “sui generis”) como ser la revocatoria
con respecto a las decisiones de los Presidentes de los Tribunales Pluripersonales o
Colegiados (v.gr. CPCCNac -art. 273- y CPCBsAs -art. 268-).

2. Reposición: Etimológicamente deriva de “re” -denota un espacio recorrido, ya


en sentido inverso, ya en el mismo sentido- “ponere” -poner-.
Alcalá Zamora y Castillo dice que “reponer” significa poner una cosa donde estaba y el
efecto del recurso no es ése, sino revocar, dejar sin efecto una resolución.
Por nuestra parte, no solo concordamos con el maestro español, sino que además
aseveramos aquí que la denominación criticada (reposición) no se adecua a la
“reconsideración parcial” donde lo que se “deja sin efecto” o se “revoca” o se “anula”
es solo una parte del proveído.
Por lo demás del iudicium rescindens se da aquí también y de proceder el iudicium
resccissorium con lo cual “la cosa a veces no se deja como estaba”, esto es con la
“expectativa” de as partes respecto de alguna resolución o trámite a seguir en el proceso
(en los términos de la Teoría de Goldsmicht).
3. Reconsideración: Palabra compuesta que deviene de “re” -denota un espacio
recorrido, ya en sentido inverso, ya en el mismo sentido- y “considerare”
-considerar, pensar, meditar, reflexionar una cosa con cuidado-.
Claro que decimos que aceptamos esta denominación “con reservas” ya que, una cosa
son las características del acto intelectivo del juez y otra los efectos de tal operación -ej.
reconsiderar es lo que hace el juez cuando se alza el agraviado y le expone sus quejas,
pero luego “revoca” total o parcialmente su fallo-.
4. Otras denominaciones: 1) Suplica: así se lo conocía en el viejo régimen
colonial, y hoy persiste en el Código Procesal de Cuba.

130
3) Reforma: que proviene de “re” y “formare” -formar-. Así propone que se llame
Jimenez Asenjo puesto que el recurso de marras no sólo tiende a reponer la
situación procesal del estado originario, sino que puede limitarse a modificar
solamente parte de la resolución y no reponerla íntegramente; por consiguiente
-concluye- más que de reponer, de lo que se trata es de “reformar”.

Decisiones judiciales que pueden dar lugar a este recurso. Finalidad del recurso.
El recurso de reposición puede interponerse en diligencia (art. 32 CPCSF) cuando no
requiere tramitación y cunado se utiliza para impugnar, ante el juez, una providencia
dictada por el secretario (art. 49 CPCSF); en caso de exigir una sustanciación, debe
presentarse por escrito (art. 32CPCSF) y con copia (art. 35CPCSF).

La reposición es admisible: 1. En materia de prueba (art. 156), salvo caso de


denegatoria de apertura a prueba (art. 145) y respecto de pericia compulsiva (art. 196),
que también son apelables; 2. En materia puramente procedimental (art. 326); 3.
Respecto de la forma como ha de tramitar un asunto (art. 388); 4. En todos los casos en
los cuales CPC establece la inapelabilidad de una decisión judicial: salvo los supuestos
del art. 440, tales son los arts. 42 (decisión que fija plazo para acreditar la personería
invocada); 394 (auto que despacha diligencias preparatorias de juicio ordinario); 414
(toda decisión dicta durante el trámite de juicio sumarísimo) y 574 (toda resolución de
trámite de los jueces de paz legos).
También es admisible la revocatoria (juega el art. 347) cuando la ley refiere sólo a la
posibilidad de apelar, cual el caso de los arts. 264 (ejecución de medidas precautorias);
296 (ídem respecto de depósito de personas); 618 (auto que designa administrador); 622
y 623 (decisión que ordena la venta de bienes de herencia); 625 (auto que deja cesante
al administrador de la herencia); 668 (decisiones recaídas en actos de jurisdicción
voluntaria).

No es admisible, en cambio, en los supuestos en los cuales CPC establece la


irrecurribilidad de una decisión judicial, tal como la que: 1. Ordena devolver un escrito
a quien lo presentó por no subsanar defectos que obstan a su admisibilidad (art. 33) y
por no acompañar copias (art. 35); 2. Acuerda la habilitación de día u hora inhábil (art.
55); 3. Fija plazo para la entrega y devolución de expedientes (art. 56); 4. Ordena la
reconstrucción de un expediente (art. 59); 5. Decide sobre la queja de retardada justicia
o impone multas u otras sanciones por causa de morosidad (art. 120); 6. Suspende el
plazo a prueba cuando se invoco fuerza mayor (art. 149); 7. Decide acerca de la
negativa a responder por parte del absolvente (art. 164); 8. Ordena la detención de un
testigo y la remisión de los antecedentes a la justicia penal (art. 225); 9. Aprueba las
cuentas en caso de aplicación de astreintes (art. 265); 10. Decide acerca de la oposición
del inventario en caso de depósito de cosas (art. 298); 11. Ordena la acumulación de
autos (art. 341); 12. Dispone el arresto del depositario de bienes embargados y la
remisión de los antecedentes a la justicia penal (art. 468); 13. Amplía la ejecución por
cuotas adeudadas y vendidas después de la sentencia de remate (art. 479); 14. Aprueba o
rechaza la operación de división de bienes hecha extrajudicialmente (art. 539); 15.
Designa representante al ausente para el inventario y avalúo en juicio sucesorio (art.
600); 16. Aprueba las operaciones de inventario y avalúo cuando no medió oposición
(art 606); 17. Decide acerca de reclamaciones sobre avalúo en juicio sucesorio (art 608);
18. Aprueba la cuenta particionaria en juicio sucesorio sin que mediara oposición (art
611), salvo caso que afecte a incapaces; 19. Decide cualquier problema relativo a la
administración en juicio sucesorio (art 624).

131
Respecto de tercero ajeno a la relación litigiosa, el recurso de reposición es admisible en
los caso del art 175 (auto que ordena la exhibición compulsiva de documentos); 189
(auto que ordena la eliminación de un perito en la lista de nombramientos); 194 (auto
que ordena la exclusión de un perito); 394 (auto que despacha medidas preparatorias
contra un tercero que no será parte en el litigio) y 498 (auto que resuelve la
impugnación de comprador en subasta). Es inadmisible, en cambio, en el caso de los
arts. 324 (tercero que gestiona el levantamiento liso y llano del embargo trabado sobre
sus bienes); 225 (auto que ordena la detención del testigo que ofrece indicios de falso
testimonio) y 468 (auto que ordena la detención del depositario judicial que no entrega
los bienes depositados).
En todos los casos en los cuales CPC hace referencia específica al recurso de
reposición, debe entenderse que su admisibilidad está limitada a los supuestos en que la
providencia respectiva se ha dictado de oficio (ver arts 141, 233, 255 y 257).
En el supuesto de providencia dictada sin sustanciación previa, que encuadra en alguno
de los casos de procedencia del recurso de apelación (art. 347); caso contrario, se causa
ejecutoria (art. 108).
La finalidad de este recurso es la impugnación por afirmadas razones de injusticia y/o
ilegitimidad.

Juez. Plazo para deducirlo.


El juez al que le corresponde decidir sobre la admisibilidad y fundabilidad de este
recurso es al mismo juez que atiende en el proceso.
El plazo para la deducción del recurso es improrrogable y perentorio (art. 70) y, por
estar en el plano vertical del proceso, no puede ser suspendido por convenio de partes,
salvo acuerdo acerca de suspensión del proceso. El plazo de tres días se halla
modificado en el art. 575 (otorga seis dias para recurrir ante la justicia comunal).
La sustanciación se efectúa confiriendo al juez un traslado (art. 87) por tres días (art. 89)
El trámite sumario que establece la norma no rige en el caso del artículo 141, que remite
al procedimiento de los incidentes (sumarísimo, art. 387)
Los plazos para resolver la revocatoria dependerán del trámite que se le imprimió al
procedimiento recursivo.
Es claro que si se sustanció, corresponderá una interlocutoria como forma de resolución
(artículo 161 del CPCN) con fundamentos y costas.
Por lo tanto, la decisión deberá expedirse dentro de los 10 o 15 días de quedar a
despacho (según sea tribunal unipersonal o pluripersonal).
Substanciada en audiencia, debe resolverse de inmediato (en el acto).
Si no hay substanciación, el juez decide mediante providencia simple, en cuyo caso el
plazo es de 3 días “de presentada la petición” dice el artículo 34 inc.3º, apartado a) del
CPCCN.

En Santa Fe, el plazo genérico es de 5 días (artículo 105 del CPCCSF) que corren: a) a
partir de la fecha en que se presentó el recurso, si el mismo no se tramita (ver sin
embargo el artículo 51); b) desde la fecha en que se contestó el traslado, si se sustancia
la revocatoria sin apertura a prueba; c) desde que queda consentido el llamamiento de
autos, en el caso que el juez haya sustanciado el recurso por el juicio sumario (esto
sostiene Alvarado Velloso, sin embargo, el artículo 412 del juicio sumario dice 10 días).

Fundamentación del recurso.

132
Esta vía recursiva está prevista para evitar el dispendio procesal que implica la revisión
por un nuevo órgano jurisdiccional, distinto del interviniente, en cuestiones que no han
sido objeto de análisis detenido, puesto que su admisibilidad se reserva exclusivamente
para impugnar las providencias dictadas sin previa sustanciación (Arazi).
Coinciden la mayoría de los doctrinarios, en que la reposición se fundamente en el
principio de economía procesal, pues -dicen- resulta mucho más sencillo y rápido, y
ofrece menos dificultad para los justiciables y el servicio de justicia en general, que la
decisión la haga el mismo juez, sin que el expediente vaya a la Alzada, con pérdida de
tiempo, esfuerzos y gastos.

Hitters agrega un nuevo argumento, diciendo que “el basamento del contrario imperio
está dado en el imperio mismo, pues “quien puede lo más, puede lo menos” o sea que si
el judex está habilitado para dictar el auto, con más razón para enmendarlo en caso de
error.

Parody cite que López Moreno –español- insinuaba que el recurso en vista es
generalmente ineficaz, pues “los jueces se niegan a confesar un error cometido o se
muestran remisos –tal vez por comodidad, indolencia o ignorancia- a efectuar un nuevo
estudio del problema planteado, además de que sólo sirve para que los litigantes de mala
fe promuevan incidentes tras incidentes”, opinión con la que concuerdan Alcalá Zamora
y Levene, los Ghirardi y, cierta manera Carrió.

Nuestro punto de vista nos indica que, en este caso, más que de principios hay que
hablar de valores.
En esa tónica, entendemos que el valor “justicia” se ve avasallado si no se reforma algo
“nulo” o “injusto”.
Es que sin perjuicio de los principios de preclusión que avalan al valor “seguridad”, no
puede tolerarse que el proceso sirva de producción de actos procesales anormales que
queden subsanados por el consentimiento (expreso o presunto) de las partes, en lo cual
triunfa la dosis individualista del proceso sobre la publicística.
Por eso, en lugar de “fundamentos” como indica la mayoría de los autores (vgr. Palacio,
Alvarado Velloso, Colombo, Alsina), es mejor decir “finalidad” (como lo hace Hitters),
o incluso “ratio juris” (Peyrano).
Además, no se concibe que el recurso de reposición tenga fundamentos o finalidades
distintas a la de los recursos en general (dentro de los cuales es una especie).

Trámite.
Rechazo “in limine”: el artículo 345, 2do párrafo, del Código Procesal Civil de Santa
Fe establece que si el recurso fuere “notoriamente infundado” el juez podrá desecharlo
sin ningún trámite.
A nivel nacional, el Código Procesal Civil y Comercial de la Nación en su artículo 239
dice que si el recurso “fuere manifiestamente inadmisible…el Juez o Tribunal podrá
rechazarlo sin ningún trámite”.
Al respecto pero por los mismos fundamentos de la improponibilidad objetiva de la
demanda y por las facultades de saneamiento del Juez, con más la violación al principio
de la buena fe, lealtad y probidad, la doctrina y la jurisprudencia admiten el rechazo in
limine.
En síntesis, si se lo interpone sin los requisitos comunes (es decir no se trata de una
resolución recurrible por ese medio, sino se satisfacen las exigencias de lugar, tiempo y
forma -que incluye la fundamentación y por eso el Código Procesal Civil y Comercial

133
de Santa Fe habla de “notoriamente infundado” o el nacional con mayor propiedad de
“manifiestamente inadmisible”) el juez al efectuar el “juicio de admisibilidad” lo
rechaza sin más trámite.
Según Peyrano al rechazo in límine hay algunas “reglas” que lo gobiernan: 1. En la
duda se debe estar por su sustanciación; 2. La falta de declaración de admisibilidad no
obsta a su declaración ulterior; 3. Constituyen causas válidas del mismo:
extemporaneidad, carencia de legitimación y falta de fundamentación.

Efecto de la interposición: Para Peyrano en el sistema santafesino no tiene efectos


suspensivos. Ello así por el paralelismo con el incidente de nulidad, y siendo que el
artículo 326 del código Procesal Civil y Comercial de Santa Fe ha dado calidad no
suspensiva a los incidentes. Por eso se prevé que tramiten por cuerda separada. Incluso
así se dice expresamente en materia de prueba.

Juicio de admisibilidad inicial: A tenor de lo previsto en el artículo 239 del Código


Procesal Civil y Comercial de la Nación el juez verifica el lugar, tiempo y forma del
recurso. Lo propio ocurre con el artículo 345 del Código Procesal Civil y Comercial de
Santa Fe.
Ahora bien, ambos códigos dicen podrá, lo cual es impropio pues debería decir deberá
(cfr. Rivas; vgr. si es extemporáneo, o infundado, o verbal debiendo ser por escrito, etc.)

Substanciación:
Providencias dictadas de oficio o a pedido de la misma parte que recurre: Tanto en el
orden nacional (artículo 240 del CPCCN) como provincial (artículo 345 del CPCCSF),
se resuelve sin substanciación.

Providencias dictadas a pedido de la otra parte (recurrida): Se decide previo traslado


(artículo 345 del CPCCSF) con copia (artículo 87 del CPCCSF) que se notifica por
cédula (artículo 62 inciso 2 del CPCCSF) por tres días (artículo 89 del CPCCSF) más el
de gracia (artículo 70 del CPCCSF):
Claro que, en el caso de la interposición en Audiencia, así como es “inmediata” su
deducción, también lo es el traslado a la contraparte y su contestación, debiendo
resolver el Tribunal “en el acto”.
En este caso, la jurisprudencia ha entendido que mientras se sustancia y decide la
revocatoria en Audiencia, la misma queda “suspendida”.

Incontestación del traslado: Peyrano sostiene que la diferencia esencial entre


“traslados” y “vistas” (generalmente confundidas en todos los códigos) es que mientras
los primeros generan una carga procesal, las segundas originan un deber (vgr. el del
Funcionario que debe si o si contestar).
Por lo tanto, si no se contesta el traslado se perdió la chance de ser oído y el pedido de
la contraparte será resuelto sin que el juez conozca su criterio.

Conversión del trámite (sumarización o incidente): El artículo 345, tercer párrafo, del
Código Procesal Civil y Comercial de Santa Fe prevé que “Si la resolución dependiere
de hechos controvertidos que no consten en autos, el juez podrá dar a la revocatoria el
trámite de juicio sumario”.
Como se ve, ambos dispositivos consagran una facultad potestativa del juez. Sin
embargo, Peyrano y Alvarado Velloso sostienen su hay hechos controvertidos y se duda

134
si dar o no oportunidad de producir prueba, debe imprimirse el trámite de estos
artículos.

Resolución.
Si el procedimiento recursivo autónomo generado por el acto procesal de mención
(recurso de reposición) no fue sustanciado, su resolución puede ser conformada
mediante una “providencia simple”.
Claro que, dicha providencia deberá estar convenientemente “motivada” a pesar de que
tal requisito no sea exigible formalmente por los Códigos adjetivos para este tipo de
resoluciones -vgr. art. 160 del CPCCN-.
Es que, como adecuadamente a dicho la jurisprudencia “si el recurso de reposición
previo a los que abrieron la alzada, se provee con un lacónico y ritual no ha lugar
-fórmula también empleada antes de resolver la decisión impugnada-, tales
pronunciamientos no se compadecen con la clara norma del artículo 95 de la
Constitución de sana Fe que, en cláusula directamente operativa, informa a los jueces
del deber de motivar sus sentencias, debiendo entenderse por tales todas las decisiones
que emitan, tanto sea definitivas como interlocutorias simples”.
Si el procedimiento recursivo antes citado fue sustanciado (sea con el traslado de rigor
o, aún más, cuando se ha “sumarizado” o “incidentazo”), corresponderá el dictado de un
“auto interlocutorio” que, por definición y además por exigencia legal (artículo 161 del
CPCCN) deberá llevar “1) Los fundamentos; 2) La decisión expresa, positiva y precisa
de las cuestiones planteadas; 3) El pronunciamiento sobre costas”.

Efectos de la resolución y recursos que caben contra la misma.


Si solamente se hubiera deducido reposición: La resolución que recaiga resultará
inapelable; ello por más que la reposición hubiere sido sustanciada y materia de una
interlocutoria.
La norma indica que la resolución que se imponga respecto del recurso de reposición
“hará ejecutoria”, esto es, que quedará “firme” con lo cual el desestimado aquel remedio
el impugnante carece de la facultad de apelar contra a respectiva resolución.
Cuando la revocatoria prospera: La “otra parte” podrá apelar en su caso, no pudiendo
deducir a su vez revocatoria, porque vendría a atacar una interlocutoria.
Es conveniente aclarar que el recurso de apelación interpuesto por la parte contraria a la
que dedujo el recurso de reposición debe sustanciarse de acuerdo con el procedimiento
previsto.
Si se interpuso revocatoria con apelación en subsidio: Desestimados sendos recursos
corresponde plantear la queja o recurso directo por denegación del recurso de apelación.
Tampoco cabe “revocatoria de revocatoria”.
A su turno, contra el auto que rechaza la reposición no cuadra la deducción de recursos
extraordinarios (ej. de inconstitucionalidad) de inaplicabilidad de la ley, extraordinario
federal, etc. Por cuanto no hay “sentencia definitiva”), salvo algún raro caso especial.
Acerca de la “revocatoria de revocatoria”: A pesar de que por aplicación de los
principios generales de la materia (en particular, los de preclusión por consumación y el
de unicidad) sería inadmisible que el agraviado por una resolución judicial que deduce
contra ella un recurso de reposición, ataque por el mismo medio el decisorio de su
primigenio recurso, ha sido necesario que la doctrina y la jurisprudencia se encarguen
de remarcarlos pues, se sabe que los letrados litigantes son proclives a “pedir” que
“total…algún tiro puede pegar en el blanco”.
Ya Couture e Ibañez Frocham habían advertido que contra el auto que resuelve el
recurso de revocatoria no procede una nueva revocatoria.

135
Empero, hay una posibilidad de “revocatoria de revocatoria” y es aquella dad en el
supuesto que en el auto que decide una reposición “se traten puntos no contenidos en el
anterior, es decir, puntos nuevos, pues entonces sí es posible solicitar nueva reposición,
pero sólo en cuanto a esos puntos nuevos se refiere”.
También hay que receptar otra contingencia: que no haya mediado sustanciación en el
procedimiento recursivo y, que la resolución nueva sea modificatoria de la anterior. En
ese caso, la parte contraria podrá interponer un nuevo recurso de reposición.

Bolilla XI
Por: Carolina Acosta
Recurso de Apelación

El recurso de apelación es el acto procesal de carácter ordinario, que tiende a subsanar


cualquier error de juicio o juzgamiento, producido al aplicar la ley o al valorar los
aspectos de hecho y prueba de la causa.
Es el más usual de los recursos ordinarios, es el remedio procesal tendiente a obtener
que un tribunal jerárquicamente superior, generalmente colegiado, revoque o modifique
una resolución judicial que se estime errónea en la interpretación o aplicación del
derecho, o en la apreciación de los hechos o de la prueba.
Este recurso supone la doble instancia, pero no significa una revisión de la instancia
anterior, por cuanto el tribunal de apelación debe limitarse a examinar la decisión
impugnada sobre la base del material reunido en primera instancia. Lo cual no impide,
que la ley prevenga en forma excepcional la aportación de nuevos elementos de juicio
ante los tribunales de alzada o la producción de prueba rechazada por el juez inferior.
En cuanto a las resoluciones que son susceptibles del recurso de apelación el Cod. Proc.
Civil y Comercial de Santa Fe dispone:

136
ARTÍCULO 346º.- El recurso de apelación, salvo lo dispuesto en casos especiales,
procederá solamente:

1°) De las sentencias definitivas sobre lo principal en toda clase de juicios y actos de
jurisdicción voluntaria.

2°) De los autos que resuelvan incidentes siempre que causen un gravamen que no
puede ser reparado por la sentencia definitiva.
3°) De los autos y providencias que importen la paralización del juicio o incidente
(Código comentado de Alvarado Velloso).

A nivel nacional el art. 242 CPN trata sobre la procedencia.


Constituye presupuesto inexcusable del recurso, que la decisión o sentencia cause
agravio al litigante que lo deduce, debiendo entenderse por agravio la insatisfacción,
total o parcial, de cualquiera de las pretensiones (principales o accesorias) planteadas en
el litigio, o el rechazo de las defensas opuestas. Es necesario determinar la existencia de
agravio en cada caso concreto basándose en la disposición de la sentencia.

ARTÍCULO 348º.- Para que proceda la apelación, se requiere que el agravio que se
pretenda reparar exceda de quinientos pesos cuando la resolución hubiere sido dictada
por jueces legos o departamentales, y dos mil cuando por jueces letrados.

Este art. fue derogado y suplantado por la Ley Orgánica del Poder Judicial, en su art. 43
que expresa “en todos los casos, para la admisibilidad de la respectiva impugnación se
requiere que el agravio exceda de una cantidad equivalente a diez unidades jus a la
fecha de
dictarse el pronunciamiento recurrido. En los litigios que versan sobre pago por
consignación, el agravio se computa exclusivamente sobre el monto de la demanda
originaria”.
Pero no rige respecto de las cámaras de apelación en lo laboral ni de las cámaras de
circuito (art. 53 LOPJ); ni para la estimación del agravio (ver art. 349).
Tampoco rige en materia de honorarios de abogados y procuradores, caso en que,
además en el mismo acto de interposición se puede fundamentar el recurso.

Para los casos en que el tribunal que ha de conocer del recurso tuviere su asiento en
distinta localidad, se impone a las partes la carga de constituir domicilio en dicha
localidad.

ARTÍCULO 349º.- La estimación del agravio se hará por la diferencia entre las
pretensiones del recurrente y la resolución apelada. En caso de duda o cuando el agravio
no fuere apreciable en dinero, será siempre procedente. (Ver también art. 350 y 351)

En cuanto a los sujetos, en principio solo las partes gozan de legitimación para apelar.
También los representantes del ministerio Público con respecto a las resoluciones
dictadas en los procesos que les corresponde intervenir. Los terceros sólo en la
excepción de que se incorporen al proceso mediante alguna de las formas de
intervención (voluntaria o forzosa), pero en esos casos son también partes.

El plazo para interponer el recurso de apelación, no habiendo disposición en contrario,


es de 5 días. En los casos de procesos sumarísimos se reduce a 3 días.

137
El plazo tiene como característica, es perentorio, es decir, producido su vencimiento sin
haberse interpuesto el recurso, la sentencia queda firme. Es individual, corre
separadamente para cada parte y desde el día siguiente a aquel en que tuvo lugar la
notificación.

ARTÍCULO 352º.- La apelación será interpuesta dentro de cinco días de la


notificación.
Cuando la sede del tribunal de apelación no se ubicare en el mismo lugar que la del
tribunal a que, las partes deberán constituir nuevo domicilio legal en el lugar asiento del
primero; la apelante, al deducir el recurso y la apelada, ante el mismo juez de primera
instancia, dentro de tres días de notificársele la concesión del recurso. En caso de
omisión, las notificaciones de la segunda instancia se efectuarán en la forma prescripta
para el rebelde sin representación.

Se debe interponer ante el juez que emitió la decisión que se impugna, salvo el supuesto
especial del art. 205. El plazo de 5 días se duplica en el caso art. 575.
Si el juez denegare la apelación, el apelante podrá recurrir directamente ante el superior
pidiendo la concesión del recurso.
El recurrente interpondrá la queja dentro de tres días si el superior recibiese en el lugar
del juicio o dentro de diez días en caso contrario, acompañando copia de las
resoluciones apeladas y su notificación del escrito de apelación (ver art. 358).

Se puede interponer por escrito o verbalmente, haciéndose constar por diligencia que el
secretario administrativo asentará en el expediente. Es necesario diferenciar este acto de
interposición del recurso de la instancia de fundamentación de agravios, que se realiza
sólo ante el tribunal de alzada, y donde se expresan los motivos en virtud de los cuales
procede, a juicio del apelante, revocar o modificar la resolución.

En apelación de auto no substanciado, solo procede el recurso de apelación si precedió


el de reposición, y la decisión de este último causará ejecutoria si no se interpuso en
término y antes de resuelto aquél el recurso de apelación. El juez tramitará la reposición
y, de no admitir la revocatoria, proveerá lo que corresponda sobre el recurso de
apelación (art. 353, 354)

La apelación puede concederse de dos formas: libremente (art. 363 y ss.) o en relación
(art. 377), restringida o limitada y, en uno y otro caso, con efecto suspensivo o
devolutivo.

ARTÍCULO 351º.- El recurso de la sentencia definitiva en el juicio ordinario será


concedido libremente, y sólo en relación, en los demás casos. Procederá siempre en
efecto suspensivo, a menos que la ley disponga que lo sea en el devolutivo. En caso de
no expresarlo la resolución, se entenderá concedido en el primer efecto.

Cuando el recurso se concibe libremente existe la posibilidad de que, en segunda


instancia, las partes aleguen hechos nuevos posteriores. Si ha sido concedido en relación
no procede la apertura a prueba ni la alegación de nuevos hechos.
Las sentencias con motivo de apelación libre se dictan mediante el voto individual de
los integrantes del tribunal, mientras que las dictadas a raíz de un recurso en relación
deben ser en forma impersonal.

138
Cuando procede la apelación en relación sin efecto diferido el recurso debe sustanciarse
en primera instancia, mientras que la sustanciación de apelación libre procede en
cámara.
El recurso de apelación debe ser concedido libremente sólo cuando se trata de
sentencias definitivas dictadas en juicios ordinarios.

Artículo 355°.- Salvo lo dispuesto por casos especiales, el auto por el que se conceda
un recurso no será recurrible, y sólo podrá ser revocado o reformado en cuanto al modo
o efecto en que haya sido concedido, por el superior. La reclamación se interpondrá
dentro de tres días de notificado el primer decreto de trámite. El incidente será resuelto
previa audiencia y en el mismo día, hayan o no asistido los interesados.

La interposición del recurso de apelación tiene 2 efectos: a) suspende la ejecución de la


providencia recurrida, y b) abre la segunda o ulterior instancia para que dicha
providencia pueda ser revisada por el tribunal superior. Al primero se lo denomina
efecto suspensivo; al segundo devolutivo, porque se considera que se devolvía la
jurisdicción al tribunal superior, que la había delegado en el inferior; se advierte que en
la actualidad ello es totalmente inexacto, puesto que todos los jueces tienen jurisdicción
propia derivada de las normas constitucionales y no la ejercen por delegación. En este
último, se cumplen los efectos de la resolución apelada, aunque se haya interpuesto el
recurso, no se espera la resolución, y en caso de resolución en contra, se devuelven los
efectos (ej. juicio de alimentos).

Procederá siempre en efecto suspensivo, a menos que la ley disponga que lo sea en
devolutivo (no suspensivo). En ciertos supuestos excepcionales, la interposición del
recurso de apelación carece del efecto suspensivo y la providencia recurrida puede ser
ejecutada a pesar del recurso. Se dice entonces que se concede ‘al solo efecto
devolutivo’ o ‘en un solo efecto’. Razones de urgencia o de necesidad imponen esta
solución; están referidas a providencias taxativamente enumeradas (ej. medidas
precautorias). En estos casos, la validez de la ejecución queda sujeta a lo que se resuelva
en la alzada.
El legislador ha previsto casos de concesión de la apelación con efecto diferido; ello
significa que, a pesar de otorgarse el recurso, se posterga la elevación del expediente
hasta el momento en que se dicta y recurre la sentencia definitiva. Es decir que, por
razones de economía procesal, para no demorar la finalización del expediente, éste
continúa su trámite, quedando pendiente la consideración de la apelación para la
ocasión en que se lo eleve a fin de entender de los recursos contra la sentencia.
El procedimiento ante los tribunales difiere según que el recurso de apelación se haya
concedido en relación o libremente. Si se concedió el recurso, el juez eleva el
expediente a la Cámara; cuando llega, ésta dicta un decreto de recibo. Se corre traslado
al apelante para que exprese agravios (10 días en el modo libre y 5 en el modo en
relación).

Expresados los agravios, se corre traslado al apelado para que conteste. Puede adherirse
a la apelación, expresando agravios en el mismo acto, en este caso se correrá traslado a
la contraria. Contestados los agravios, quedará conclusa la instancia y se llamará autos
para sentencia, salvo que las partes en los mismos escritos pidieren la apertura de la
causa a prueba, que si el tribunal lo acuerda el plazo es de 20 días en el modo libre y 10
días en el modo en relación –dentro de los cuales los primero 5 y 3 días son para
ofrecer, respectivamente). Se podrán abrir la causa a prueba si se dieren los siguientes

139
hechos: que se alegue un hecho nuevo; que alguna prueba ofrecida en primera instancia,
sin culpa de la parte, no se hubiere producido; cuando consten hechos de difícil
demostración. Agregadas las pruebas se corre traslado a las partes para que aleguen.
Producidos los alegatos se llama a autos para sentencia.

Recurso Directo, de Queja o de Hecho


Si bien el juez primera instancia (o la cámara en el supuesto del recurso ante la CSJN)
se halla facultado para denegar la apelación (por haberse interpuesto fuera de plazo o
forma, por ser irrecurrible la resolución, no ser sujeto legitimado o el agravio menor a
10 unidades jus) el juicio definitivo sobre la admisibilidad incumbe, por al tribunal
superior, porque de otro modo quedaría en manos de los jueces inferiores frustrar la
vigencia del sistema admitido por la ley.
Se llama recurso de queja o directo o de hecho porque el apelante damnificado debe
deducirse directamente ante el tribunal de alzada y tiene por objeto que éste, mediante
revisión del juicio de admisibilidad formulado por el juez inferior, revoque la
resolución denegatoria del recurso y lo declare admisible y disponga sustanciarlo.

ARTÍCULO 356º.- Si el juez denegare la apelación, el apelante podrá recurrir


directamente ante el superior pidiendo la concesión del recurso.

Plazo: El recurrente interpondrá la queja dentro de tres días si el superior recibiese en el


lugar del juicio o dentro de diez días en caso contrario, acompañando copia de las
resoluciones apeladas y su notificación del escrito de apelación y su cargo del auto en
que se le hubiere negado el recurso y su notificación.

Obligación del actuario: ARTÍCULO 357º.- El actuario dará al recurrente las copias
el mismo día que le notifique la denegación, pudiendo expedirlas en papel común, con
cargo de reposición oportuna.
En caso de no darse las copias, el apelante cumplirá con presentarse ante el superior
dentro del término debido, interponiendo la queja y dando cuenta de la falta del
actuario.

ARTÍCULO 358º.- Presentada la queja, el superior decidirá, sin substanciación alguna,


si el recurso ha sido bien o mal denegado y el efecto y modo de su otorgamiento.
En el primer caso remitirá las copias al inferior; en el segundo, mandará que se eleven
los autos, para tramitar el recurso, otorgando un modo y un efecto.

El recurso de queja es un juicio autónomo donde se cuestiona el juicio de admisibilidad


de la apelación denegada. Se trata de conmover al tribunal de que los requisitos del
juicio de admisibilidad están cumplidos, de allí la importancia de presentarse en tiempo
y forma el recurso de apelación.

Los plazos también se duplican si los tribunales de instancia superior e inferior tuvieran
asiento en localidades distintas de la provincia. (Ver también art. 359).

140
Recurso de Nulidad

El recurso de nulidad es el medio de impugnación a través del cual se pueden invalidar


las providencias judiciales que no cumplen con los requisitos formales enunciados por
la ley. Se trata de reparar vicios de estructura de la respectiva resolución. Quedan
excluidos los vicios de procedimiento que precedieron a la providencia recurrida (que
den ser atacados mediante incidente de nulidad) como los errores de juzgamiento de
hecho y de derecho de la resolución (materia propia de la apelación).

ARTÍCULO 360º.- El recurso de nulidad procede contra las resoluciones pronunciadas


con violación u omisión de las formas prescriptas en este Código bajo esa penalidad o
que asuman carácter substancial.

ARTÍCULO 361º.- Sin perjuicio de lo dispuesto en los artículos 124 y siguientes, sólo
son susceptibles del recurso de nulidad las resoluciones de que puedan interponerse el
de apelación. Ambos se deducirán en el mismo término y se substanciarán por los
mismos trámites. Cada uno lleva implícito el otro, pero el superior no se pronunciará
sobre el no deducido, a no ser que el recurrente lo solicite en el curso de la instancia.
El recurso de apelación comprende el de nulidad por defectos de la sentencia. Es decir
que el segundo queda incluido en el primero. Por ellos los requisitos son los que
corresponden a la apelación, tanto en lo que atañe a la legitimación de las partes para
recurrir como a las providencias susceptibles de ser recurridas.

141
Si el recurso fue concedido en relación, o en la expresión de agravios, si lo fue
libremente, el apelante debe señalar los agravios referidos a la nulidad, no sólo en
cuanto al incumplimiento de los requisitos formales en la estructura de la sentencia sino
también respecto del interés en el recurso; así, si la sentencia le otorgó todo lo que
pedía, el recurso es inadmisible. Si la cámara hace lugar a la nulidad, dicta un nuevo
pronunciamiento.
A diferencia con la apelación, la nulidad es irrenunciable. Tiene por objeto 2
situaciones:
- Cuando el vicio se encuentra la propia sentencia que se ataca, mediante este
recurso se pide la nulidad y que se resuelva correctamente.
- Cuando el vicio se encuentra en el procedimiento previo, la cámara no dicta una
nueva sentencia, sino que devuelve los autos al juez inferior para que se tramite
la causa desde el momento en que se declaro la nulidad.
ARTÍCULO 362º.- Si el procedimiento estuviese arreglado a Derecho y la nulidad
proviniese de la forma o contenido de la resolución, el tribunal de apelación así lo
declarará y dictará la que corresponda. Si la nulidad proviniese de vicio en el
procedimiento, se declarará nulo lo obrado que se relacione con la actuación nula o que
sea su consecuencia y se remitirán los autos al juzgado que corresponda para que
tramite la causa y dicte la resolución.

Recurso extraordinario provincial

ARTÍCULO 564º.- Contra la sentencia definitiva pronunciada por el tribunal colegiado,


las partes y, en su caso, el ministerio público podrá interponer ante aquél recurso de
apelación extraordinario, que se sustanciará ante la sala del Superior Tribunal que
corresponda, en los casos siguientes:
1°) Inobservancia manifiesta de las formas sustanciales prescriptas para el trámite o
decisión de la causa.
2°) Violación de la ley o doctrina legal.

142
El art. 42 de la LOPJ regula el recurso de apelación extraordinaria del que tratan los
artículos 564-567 (en parte), derogándolos y estableciendo con claridad las nuevas
causales de procedencia de este medio de impugnación.
“Sin perjuicio de lo dispuesto en el Artículo 32, cada Cámara es alzada de los
Tribunales Colegiados respecto del recurso de apelación extraordinario, que se
interpone dentro del plazo de diez días contra sus sentencias definitivas, o con fuerza de
tales, que han incurrido en:

1) apartamiento de las formas sustanciales estatuidas para el trámite o la decisión del


litigio, siempre que ello influya directamente en el derecho de defensa y en tanto no
medie consentimiento del impugnante;

2) apartamiento en la sentencia de la regla de congruencia procesal, que opera cuando el


pronunciamiento versa sobre cosa no pretendida o persona no demandada, o que
adjudica más de lo pretendido, o que no contiene declaración expresa acerca de
pretensión oportunamente deducida o contiene motivación y/o disposiciones
contradictorias entre sí;

3) apartamiento manifiesto del texto expreso de la ley;

4) apartamiento relevante de la interpretación que a idéntica cuestión de derecho haya


dado
1 Sala de la Cámara de Apelación de la respectiva Circunscripción Judicial, lo cual debe
demostrarse fehacientemente en el acto de interposición del recurso o en el plazo
adicional de veinte días posteriores, que el Tribunal Colegiado concederá ante el solo
pedimento de la parte;

5) desconocimiento del principio de seguridad jurídica, por violación de la


litispendencia o de la cosa juzgada.

ARTICULO 43 (LOPJ).- En todos los casos, para la admisibilidad de la respectiva


impugnación se requiere que el agravio exceda de una cantidad equivalente a diez
unidades jus a la fecha de dictarse el pronunciamiento recurrido.
En los litigios que versan sobre pago por consignación, el agravio se computa
exclusivamente sobre el monto de la demanda originaria.

El recurso no puede ser deducido en diligencia: ARTÍCULO 567º.- El recurso deberá


deducirse por escrito, dentro del término de diez días, citando concretamente las formas
transgredidas, las disposiciones legales violadas o erróneamente aplicadas, y además,
expresando cuál es el pronunciamiento que se pretende. Cada motivo se indicará
separadamente. Si el recurso se fundare en el caso previsto en el inciso 1°) del artículo
precedente, el recurrente acompañará copia autorizada de la resolución anterior que
invoque; en este caso, el plazo para deducirlo será de treinta días.

El juicio de admisibilidad del recurso de apelación extraordinaria compete al tribunal


colegiado y no al juez de trámite (ver art. 568).
El recurso no tiene trámite en la alzada y en razón de que un recurso extraordinario no
puede ser mejorado después de su interposición por la preclusión respectiva, debe
entenderse que la presentación del memorial refiere solo a la parte apelada. En caso de
presentarse y resultar ganadora se imponen costas conforme al art. 251.

143
Vencido el plazo, la causa quedará conclusa para sentencia; que se dictará dentro de los
veinte días siguientes.
Cuando la sala estimare que la sentencia impugnada ha violado o aplicado falsa o
erróneamente la ley o doctrina legal, declarará procedente el recurso, casará la sentencia
y resolverá el caso conforme con la ley y la doctrina.
Si considerare procedente el recurso por inobservancia manifiesta de las formas legales,
declarará la nulidad y dispondrá que los respectivos subrogantes del tribunal que la
consumó sustancien el proceso y dicten sentencia según corresponda (ver art.569 y
570).

144
Bibliografía
- Palacios Enrique, Manual de Derecho Procesal Civil (2003).
- Alvarado Velloso, Introducción al estudio del Derecho Procesal (2004).
- Código Procesal Civil y Comercial de la Provincia de Santa Fe.
- Ley Orgánica del Poder Judicial de la Provincia de Santa Fe.

145
Bolilla XII
Por: Ezequiel Tonelli y Bruno Tallarico

1- Proceso Ejecutivo.
El Código, en el Capítulo de “Procesos de Ejecución” distingue: el juicio
ejecutivo (proceso ejecutivo propiamente dicho) de juicios especiales que son ejecutivos
pero de carácter especial (son procesos tendiente a la ejecución de sentencias, como:
juicio de apremio, ejecución hipotecaria)-.

- Estructura:
En proceso ejecutivo, el conocimiento de los hechos está suplido por el título (ya
sea la sentencia consentida o ejecutoriada o un título al cual la ley reconoce ese efecto –
cheque, pagaré, etc.).
El ‘Proceso ejecutivo’, que es el que se inicia sobre la base de un título ejecutivo
extrajudicial al que la ley le otorga fuerza ejecutiva, consta de 3 etapas:
1) Demanda, intimación de pago, embargo y citación para oponer excepciones. En esta
primera etapa actúa sólo el acreedor, aunque el juez puede llamar al deudor para
completar el título (lo que se denomina ‘preparación de la vía ejecutiva’).
2) Oposición de excepciones. Contestación de ellas y prueba. Sentencia de trance y
remate. Recursos contra la sentencia. En esta segunda etapa se da intervención al
deudor para que haga valer sus derechos.
3) Ejecución de sentencia de remate. En rigor, en esta etapa se inicia la verdadera
ejecución, procediéndose a la subasta de los bienes embargados, en su caso, o al pago
directo al acreedor del capital, intereses y costas, si lo embargado fuera dinero.

- Concepto.
La característica esencial de este tipo de juicios es que se restringe el derecho de
defensa del demandado (porque la deuda está presumida, a diferencia del juicio
ordinario donde hay amplitud de debate). Hay una desigualdad entre las partes (a
diferencia de lo que sucede en los juicios de conocimiento que están en un pie de
igualdad), ya que una -el actor- tiene un derecho reconocido (porque hubo un proceso
declarativo previo y porque tiene un título ejecutivo); el proceso ejecutivo busca la
realización de este derecho reconocido pero insatisfecho. Aquí no se discute el derecho,
que ya está reconocido, sino la posibilidad de ejecutarlo.
El juicio ejecutivo es un proceso que tiene como base un título extrajudicial al
que la ley otorga una cualidad especial para que su tenedor pueda reclamar el crédito
que emana de él sin necesidad de transitar todas las etapas del proceso de conocimiento.
Se considera ‘título ejecutivo extrajudicial’ a ciertos documentos de los cuales
surge con certeza la existencia de un crédito. Se incluyen instrumentos que, junto con la
sentencia, vienen revestidos de una fuerte presunción de legitimidad.
Se permite una etapa de conocimiento abreviada para discutir algunas
excepciones en el juicio ejecutivo, reservándose otras para el juicio de conocimiento
posterior. La oposición de excepciones es el único medio que tiene el demandado para
oponerse al progreso de la ejecución.
Al decir de Morello, este proceso ejecutivo solamente tiene de tal el nombre, ya
que se trata de un proceso de conocimiento abreviado. La oposición de excepciones por
el ejecutado dilata considerablemente la ejecución y, en rigor, en nuestro ordenamiento,
la función ejecutiva o de apremio recién comienza cuando se ejecuta la sentencia de
remate, no el título ejecutivo.

146
El juicio ejecutivo admite un eventual juicio de conocimiento posterior. Ese
juicio tiene su razón de ser en las limitadas excepciones que se permiten oponer en el
ejecutivo. Todas las defensas que no se refieran directamente al título base de la
ejecución deben preservarse para el juicio de conocimiento posterior. Así, por ejemplo,
si se firmó un pagaré que se entregó para abonar determinado producto, el que lo
suscribió no podrá alegar en el juicio ejecutivo que dicho producto tenía defectos de
fabricación; debe abonar la cantidad consignada en el pagaré y luego pedir la
devolución de lo pagado en un juicio posterior donde podrá discutir la causa de la
obligación que dio origen al documento.
En el juicio de conocimiento posterior al ejecutivo no pueden discutirse los
temas que pudieron ser tratados en éste. El juicio de conocimiento está limitado a
resolver las cuestiones que se encuentren vedadas en el ejecutivo.

- Títulos ejecutivos:
Se puede proceder ejecutivamente cuando: se demande por obligaciones
exigibles de dar cantidades líquidas de dinero, cosas o valores o de dar cosas muebles
ciertas y determinadas o por obligación de otorgar escritura pública, siempre que la
acción se deduzca en virtud de un título que trae aparejada ejecución. El mismo Código
de procedimientos hace una enunciación no taxativa de los títulos que traen aparejada
ejecución:
1. Los instrumentos públicos y los privados reconocidos judicialmente. Hay algunos
documentos privados que no necesitan reconocimiento, porque tienen fuerza ejecutoria
por ley; por ej. el pagaré otorgado sin protesto (sin en cambio fue librado con protesto,
habrá que realizar una intimación formal de manera previa –constituirlo en mora).
2. Los créditos procedentes de alquileres.
3. Los demás títulos a que las leyes diesen fuerza ejecutiva y no tuvieran determinado
un procedimiento especial.
El Código establece expresamente que la confesión hecha en los juicios
declarativos absolviendo posiciones o de otro modo no constituye título ejecutivo.

Cabe destacar que las obligaciones respecto de las cuales se puede proceder
ejecutivamente (las que constan en los títulos ejecutivos) deben ser exigibles (es decir,
no puedo adelantarme antes que venza el plazo). Las cantidades deben ser líquidas o
determinadas, todo lo que es ilíquido o indeterminado no es objeto de juicio ejecutivo.
No procederá la vía ejecutiva cuando la obligación esté sujeta a condición o
prestación, mientras no se haya cumplido la condición o satisfecho la prestación.

El título es la base del juicio ejecutivo, ya que en el proceso sólo se debe decidir
sus bondades para que el actor pueda proceder por esa vía. El título es independiente de
la causa que lo originó; los requisitos de admisibilidad y procedibilidad de la demanda
ejecutiva se deben determinar sobre la base de las constancias de dicho título, con
independencia del negocio que le dio nacimiento. Así por ej. si con motivo de una
compraventa el adquirente pagó con un cheque, el tenedor procederá ejecutivamente sin
importar si el vendedor cumplió o no las obligaciones del contrato. Incluso, la
legitimación de las partes debe surgir del título en que se funda la demanda ejecutiva,
sin que importe quienes son los verdaderos titulares de la relación sustancial; en el
ejemplo anterior, el vendedor pudo haber endosado el cheque a favor de otra persona y
es ésta quien está legitimada para reclamar su pago.
Cabe señalar que no siempre el título es un instrumento. Se enuncia entre los
títulos que traen aparejada ejecución al crédito por alquileres; y para ellos se prepara la

147
vía ejecutiva aun cuando no haya ningún documento del que surja el crédito del actor ya
que puede tratarse de una locación sin contrato escrito.

También cabe señalar que no todo título trae aparejada ejecución. Hay 5
requisitos para analizar si es título que trae o no aparejada ejecución:
1- El título debe contener quién es el deudor o ejecutado y quién es el acreedor o
ejecutante (o librador y beneficiario, si se trata de un pagaré, por ej.);
2- Qué es lo que se debe (objeto cierto, determinado y suma líquida si la deuda es
dineraria);
3- La exigibilidad de la deuda;
4- Carácter ejecutivo: otorgado por la ley o convención de las partes (hechas en los
contratos que forman para ellas una regla a la cual deben someterse como a la ley
misma.
5- No debe surgir del título que su causa es ilícita.

- La demanda ejecutiva:
No se enuncian concretamente los requisitos de la demanda ejecutiva; sin
embargo puedo citarse uno ineludible y es que se acompañe el título ejecutivo, sin el
cual no hay ejecución. No es necesario explicar detalladamente los hechos como en el
proceso de conocimiento; basta con mencionar la relación jurídica y agregar el título, ya
que en esta clase de juicio la única discusión posible es la que se vincula con las
bondades de dicho título para proceder ejecutivamente.
Si el título no es completo, la ley prevé la preparación de la vía ejecutiva para
integrarlo debidamente. Entonces, hay títulos que son perfectos y que por sí traen
aparejada la ejecución; y otro que no son perfectos y para que puedan ejecutarse hay
que preparar la vía (se pide el reconocimiento judicial).

- FASE PREPARATORIA:
En ciertos supuestos, el título por sí solo no es hábil para iniciar la demanda
ejecutiva; es necesario complementarlo con alguna medida preparatoria.
Al incoar la demanda preparatoria, el actor puede solicitar:
1) Que el deudor (el ejecutado) reconozca la firma cuando el documento sea privado.
2) En caso de cobro de alquileres:
a. que el locatario confiese su calidad de tal (si no hay contrato escrito; o reconozca su
firma si hay contrato escrito en instrumento privado) y que adeuda los alquileres por el
término expresado por el actor, el precio convenido y que exhiba el último recibo;
b. quedará igualmente preparada la vía ejecutiva cuando el locatario confiese su calidad
de tal, por el tiempo expresado en la demanda y no exhiba recibos que sean reconocidos
por el actor y que justifiquen el pago de los alquileres demandados.
Hay que tener en cuenta que cuando las medidas se dirigen contra los herederos,
éstos pueden limitarse a declarar que ignoran los hechos –con lo cual fracasan las
medidas preparatorias- a menos que se trate de fincas ocupadas por ellos mismos.
3) Que el deudor reconozca haberse cumplido las obligaciones pactadas a su favor,
cuando el título consista en un contrato bilateral.
4) Que el deudor reconozca el cumplimiento de la condición cuando la deuda sea
condicional.
5) También podría ocurrir que el actor solicite que el juez señale plazo dentro del cual
debe hacerse el pago si el acto constitutivo de la obligación no lo designare o si
autorizara al deudor para verificarlo cuando pudiera o tuviese medios de hacerlo. Para la
fijación del plazo, el juez debe convocar a las partes a una audiencia.

148
En todos esos casos, el juez debe ordenar el emplazamiento del demandado, para
el reconocimiento del documento o la confesión de los hechos preparatorios del juicio
ejecutivo, a fin de que comparezca ante el tribunal citante: a) dentro de un plazo no
mayor de 10 días, contados desde el siguiente al del recibo de la notificación, o bien b)
en la fecha y hora en que se haya decretado la audiencia del caso si la hubiere solicitado
expresamente el actor; bajo apercibimiento de darle por reconocida la firma o de tenerlo
por confeso, según el caso; o bien de señalar el plazo sin oír al deudor si se trata del
supuesto en que se solicita al juez fijar el plazo en el cual debe hacerse el pago.
Efectuada la notificación puede ocurrir que el demandado:

A· Comparezca: en tal caso puede suceder que en la audiencia respectiva (para cuya
asistencia no requiere patrocinio letrado):
· reconozca el documento o confiese los hechos invocados por el actor. En este caso, a
partir del día siguiente al de la audiencia, el actor tiene 15 días hábiles para deducir su
demanda ejecutiva, bajo apercibimiento de caducar de pleno derecho las medidas
preparatorias realizadas.
· desconozca el documento o niegue los hechos invocados por el actor. En este caso, las
medidas preparatorias han fracasado; por ello, el juez debe desestimar la pretensión y el
actor no podrá demandar ejecutivamente, restándole sólo la posibilidad de incoar juicio
declarativo en el mismo juzgado.
· se niegue a declarar: En este caso el juez debe hacer efectivo el apercibimiento
decretado.

B· No comparezca: en tal caso, puede suceder:


· que excuse su inasistencia por causa justificada antes de la realización de la audiencia.
Si el juez acepta la excusa, convoca a una nueva audiencia.
· si no acepta la excusa, o el demandado no excusa su inasistencia (lo mismo que si
comparece y se niega a declarar), el juez debe hacer efectivo el apercibimiento
decretado y tener por preparada la vía ejecutoria. Luego de ello el demandado puede:
- consentir la resolución judicial, o
- deducir recurso de revocatoria: si lo acepta, procede a efectuar una nueva citación y
recomienza el trámite. Si lo rechaza, a partir de la notificación de esto, o bien si ha
consentido la resolución, a partir del día siguiente al que el auto adquiere efecto
ejecutorio, el actor tiene 15 días hábiles para deducir su demanda ejecutiva, bajo
apercibimiento de caducar de pleno derecho las medidas preparatorias realizadas.

2- Trámite del juicio ejecutivo:

- FASE CAUTELAR:
Para que un acreedor pueda reclamar ejecutivamente su acreencia, se requiere
que al demandar, presente título que traiga aparejada ejecución. Presentada la demanda,
puede ocurrir que el juez en tienda:
1) Que el título acompañado no trae aparejada ejecución: en tal caso no debe admitir
la demanda y, por consiguiente, ordena el archivo de lo actuado; o bien

2) Que el título acompañado trae aparejada ejecución: en este caso, libra


mandamiento de embargo por la cantidad líquida que resulte del título, más una suma
prudente estimada para responder a intereses devengados y a devengar y las costas que
resulten del proceso (dejando la cantidad ilíquida, si la hubiese, para que el actor la

149
demande en el juicio que corresponda). El mandamiento debe contener, también, la
orden de allanamiento de domicilio y autorización para solicitar la fuerza pública en
caso que sea necesario.
Cuando la prestación adeudada consiste en:
1- Dar cosas: El mandamiento debe expresar el valor equivalente de ellas,
computándose en dinero. Para efectuar esta tarea, debe tenerse en cuenta:
a) si hay precio pactado en la obligación: se toma como base dicho precio.
b) si no hay precio pactado en la obligación: debe efectuarse una previa estimación del
precio medio que la especie tenía al vencimiento de la obligación. Para ello, el actor
debe acreditarlo con:
· certificado de la Bolsa de Comercio; o en su defecto con
· información sumaria de testigos que puede efectuar juntamente con la demanda,
firmándola ellos en forma conjunta y ratificando sus firmas ante el juez. El
procedimiento se efectúa si citación del deudor.

2- Dar cantidades de valores: El mandamiento debe expresar su valor equivalente en


dinero, efectuándose el cómputo según el precio de cotización al día del vencimiento de
la obligación. El actor de acreditarlo en la forma precedentemente expresada
(certificado de la Bolsa de Comercio; o en su defecto, información sumaria de testigos).

3- Dar cantidad de dinero: El mandamiento debe ordenar el embargo por la suma


reclamada.

4- Suscribir escritura pública: El mandamiento debe contener una intimación al deudor


para que la otorgue en el plazo de 10 días, bajo apercibimiento de suscribirla el juez en
su nombre. Y si la escrituración versare sobre un inmueble se deberá, además, ordenar
el embargo de él.

El mandamiento de embargo debe ser entregado en el día por el secretario al


oficial de justicia, quien dentro de los 2 días de recibido y bajo pena de multa por
retardo sin causa justificada, debe concurrir al domicilio del deudor a fin de practicar la
diligencia. Puede ocurrir que:
1) No lo encuentre: debe buscarlo por segunda vez a la tercera hora siguiente y practicar
la diligencia aunque no lo encuentre;
2) Lo encuentre: y practique la diligencia.
Al practicar la diligencia, el oficial de justicia debe ‘exigir al deudor el pago’ de
la deuda (intimación de pago). Puede ocurrir que el deudo:

A) Pague:
1. Si se trata de cosas ciertas y determinadas, el acreedor debe concurrir al acto para
recibirlas. Puede:
A· aceptarlas, de lo cual se deja constancia en acta y el proceso ha terminado (si no
quedan otras cuestiones pendientes como las costas).
B· o bien puede rehusarlas, por no ser de la calidad convenida. En este último caso, se
traba embargo sobre ellas, como igualmente sobre los demás bienes denunciados, hasta
cubrir el valor fijado en el mandamiento. Trabado el embargo el juez debe convocar a
las partes a audiencia, y previo dictamen pericial solicitado por los interesados o
decretado de oficio, si fuere necesario, resolverá sobre el pago. El auto que declare la
validez del pago es apelable; y el que lo declara inválido debe mandar llevar adelante la
ejecución y tiene los efectos de la sentencia de remate.

150
2. Si se trata de dinero: el oficial de justicia debe recibirlo, otorgando el comprobante
respectivo al deudor, y depositarlo a la brevedad en cuenta especial a la orden del
juzgado en el Banco Provincial de Santa Fe.

B) No pague: el oficial de justicia procede en el acto a embargar bienes suficientes, que


pueden ser denunciados por el embargante:
1. Si no hay bienes para embargar o los que hay no resultan suficientes, el juez –a
pedido del acreedor- puede ordenar la inhibición general del deudor, oficiando al efecto
al Registro General.
2. Si hay bienes para embargar, y ellos consisten en:
A· bienes inmuebles o muebles registrables, el juez debe ordenar la anotación en el
Registro correspondiente, con indicación del domicilio del actor.

B· bienes muebles que pertenecen a establecimientos industriales, fábricas o cualquier


otra instalación que los necesite para su funcionamiento, no pueden ser sacados del
lugar donde se hallan, ni distraerse del destino que tienen. De modo tal que el tenedor
debe ser constituido en depositario, sin perjuicio del derecho que tiene el acreedor de
proponer un interventor que vigile la conservación de los bienes embargados y el
depósito y traslación de ellos, si la intervención no es suficiente para su seguridad.

C· fuera de ese caso tratándose de bienes muebles o bien, si los bienes a embargar
consisten en dinero, corresponde determinar si se encuentran en poder:
a· Del deudor, y que el oficial de justicia:
· pueda percibir de inmediato: el oficial de justicia debe recibirlo, otorgando el
comprobante respectivo al deudor, y depositarlo a la brevedad en cuenta especial a la
orden del juzgado en el Banco Provincial de Santa Fe; o
· no pueda percibir en el acto, por estar sujeto a un ingreso futuro, por tratarse de
honorario que recibe el interesado como afiliado de un fondo común que efectúan
instituciones constituidas por profesionales (en este caso se oficia a la entidad para que
trabe el embargo hasta un 25% del monto a distribuir y) o por tratarse por ejemplo de
un comercio en funcionamiento (el juez puede designar un interventor recaudador, que
haga efectivo el embargo en la medida, forma y oportunidad que determine).
b· De terceros, por constituir créditos del ejecutado. En este caso, el oficial de justicia o
el actuario notificará el embargo a los tenedores de los bienes o bien a los que deben
hacer el pago. En el primer caso puede ocurrir que el tercero: acepte la propiedad del
bien atribuido al deudor en cuyo caso se traba embargo ejecutivo; o bien, niegue la
propiedad del bien atribuido al deudor, y en este caso, el embargo sólo puede trabarse
bajo fianza que el acreedor habrá de constituir ante el actuario con carácter preventivo a
los fines de la acción que el embargante prometa entablar contra él.

Al efectuar el embargo, el oficial de justicia debe levantar por duplicado acta de


cuanto actúe, la firma con todos los intervinientes en la diligencia (testigo, depositario,
acreedor, deudor). El original se agrega a los autos y el duplicado se entrega al actuario
para que lo archive en un registro que debe llevar personalmente, por orden cronológico
y numerado en todas sus hojas, y con un índice alfabético de acuerdo con el apellido y
nombre del actor.
En el acto del embargo, cuando se trabe sobre bienes que no sean dinero
entregados al oficial de justicia, éste debe designar depositario de ellos a persona
solvente, quien previo juramento y constitución de domicilio será investido de su cargo
con la prevención de que se encuentra obligado a entregarlos dentro del plazo

151
prudencial que el juez designa en cada caso, sin que le sea lícito eludir la entrega
invocando el derecho de retención, y de que en caso de no acatar la intimación en tal
sentido, el juez podrá ordenar sin recurso alguno su arresto y remitir los antecedentes a
la justicia penal, a efectos de investigas la comisión de delito.

El oficial de justicia devuelve lo actuado al juzgado de origen. En caso de que:


· resulte excesivo el embargo trabado: atendiendo que debe limitarse a los bienes
necesarios para cubrir la deuda y las costas, el deudor tiene derecho de pedir la
reducción, alegándolo como excepción o como revocatoria que no suspende el curso del
juicio.
· resulte insuficiente el embargo trabado: el acreedor puede pedir y el juez debe decretar
su ampliación, sin sustanciación ni recurso alguno.
· resulte inconveniente para el embargado la subsistencia del embargo sobre
determinado bien: puede pedir la sustitución, con la conformidad del acreedor. El juez
debe tener en cuenta que no puede sustituirse el embargo sobre un bien de fácil e
inmediata realización por otro que demande mayor esfuerzo o tiempo al acreedor para
ver realizado si crédito.
· que el embargo se haya trabado sobre bienes muebles que pueden deteriorarse o sean
de difícil o costosa conservación: cualquiera de las partes puede solicitar su venta en
remate público, bajo fianza de responder por los perjuicios a que hubiere lugar si el
peticionante fuese el actor.
· que se temiese menoscabo en los bienes embargados o hubiere peligro de que fueren
llevado a lugares donde su localización o recuperación resultare dificultosa: el juez
puede –previa comprobación del estado y uso de los mismos- cambiar el depositario o
designar originariamente otro que su dueño o poseedor.
Toda resolución que recaiga en materia de embargo, es apelable en relación y en
efecto devolutivo.

* Nota: En el juicio ejecutivo el embargo no es un requisito ineludible, ya que el


ejecutante puede renunciar a él o bien, si desconoce bienes del deudor o éstos fuesen
insuficientes, puede pedir la inhibición general para impedir que venda o grave sus
bienes.
Hay bienes sobre los cuales no se puede trabar embargo, por ej.: el lecho
cotidiano del deudor, de su mujer y de sus hijos; su ropa; los utensilio necesarios para
preparar el sustento; los enseres necesarios para la profesión, arte u oficio que ejerza;
los créditos por pensiones alimentarias; los honorarios profesionales sino hasta un 25%
de su monto; entre otros exceptuados por la ley.

- FASE CONTENCIOSA:
Presentada la demanda, el secretario debe darle cargo y, en su caso, entregar al
interesado recibo en papel común del escrito presentado; hecho ello y guardados los
documentos acompañados, debe poner al despacho del juez, al día siguiente, el escrito
respectivo, a fin de que éste lo provea en el mismo día. Puede ocurrir que el juez:

1) No admita la demanda, por no haber sido deducida con las prescripciones


correspondientes (las del 130 + título ejecutivo), en cuyo caso debe:
a. indicar al actor el defecto que contiene; u
b. ordenar que el actor aclare cualquier punto para hacer posible su admisión.
En estos casos puede ocurrir que el interesado:

152
· no cumplimente los recaudos exigidos dentro del plazo otorgado por el juez. En tal
caso éste debe hacer efectivo el apercibimiento que de que se tendrá por no presentado
el escrito; o bien que
· cumplimente los recaudos exigidos.

2) Tanto en este último caso de que cumplimente los recaudos, así como de haber
Admitido la demanda, el juez ordena: librar mandamiento de embargo y citar al
demandado para que comparezca a estar a derecho dentro del plazo que corresponda
con el apercibimiento de ser declarado rebelde y seguirse el juicio sin su representación.
Efectuada la notificación, puede suceder que el demandado:

1- No comparezca: En este caso, el actor debe solicitar la declaración de rebeldía.


2- Comparezca.
Trabado el embargo, o sin éste si lo solicitare el ejecutante, y notificado el auto
de la rebeldía o habiendo comparecido en su caso, el juez debe ‘citar de remate’ al
deudor, con la prevención de que si no opone excepción legítima dentro de los 3 días se
llevará adelante la ejecución.
Puede ocurrir que el ejecutado:
A) No oponga excepción alguna;
B) Oponga excepción no autorizada en la ley.
* En estos 2 primeros casos, transcurridos 3 días sin que oponga excepción
legítima, el juez debe dictar sentencia dentro de los 3 días subsiguientes. Cuando el
demandado fue citado en persona y no opuso excepciones, la sentencia es irrecurrible.
C) También puede ocurrir que el demandado por suscripción de escritura pública,
dentro de los 10 días de haber sido intimado a suscribirla, oponga excepción legítima
D) Que oponga simultáneamente en un solo escrito excepciones de: 1) Incompetencia;
2) Falta de personalidad en el actor o de personería en su procurador; 3) Defecto legal
en el modo de proponer la demanda; 4) Falsedad material e inhabilitación de título; 5)
Prescripción; 6) Pago, quita, espera, remisión, novación, transacción o compromiso,
documentados; 7) Nulidad de la ejecución; 8) Caducidad del derecho; 9) Compensación
del crédito líquido.
* En estos dos últimos casos, opuestas las excepciones, el juez debe conferir
traslado al ejecutante por 6 días. El ejecutante puede:
· Aceptarlas: reconociendo las razones de hecho alegadas por el excepcionante. El juez
debe dictar sentencia dentro de los 10 días siguientes.
· Contestarlas: en cuyo caso el juez debe abrir la ‘causa a prueba’ por un plazo no
mayor de 20 días (debe ofrecerse dentro de los primeros 5). Vencido el plazo
probatorio, el juez debe conferir traslado a cada parte por 3 días para alegar. Presentados
los alegatos o vencido el término para hacerlo, el juez llama a autos para sentencia.
Consentido el llamamiento de autos, el juez debe dictar sentencia dentro de los 10 días
siguientes.

La sentencia puede ordenar:


1. La nulidad del procedimiento: cuando se han violado las normas que garantizan el
debido proceso. (La anulación del procedimiento ejecutivo no implica la necesidad de
levantar el embargo, el que se mantendrá con carácter preventivo y caducará si dentro
de los 15 días de ejecutoriada la sentencia no se reinicia la acción).
2. El rechazo de la ejecución: cuando carece de ejecutividad el título fundante de la
demanda o cuando se ha probado el hecho fundante de una excepción legítima.
3. Llevar adelante la ejecución: en todo o en parte.

153
4. La fijación del plazo dentro del cual debe firmarse la escritura pública: con
apercibimiento de hacerlo el juez en nombre del deudor.
Y la sentencia de notificarse:
· Por cédula: en el domicilio constituido cuando el demandado compareció, o siendo
rebelde tiene el domicilio conocido;
· Por edictos: publicados 2 días en el Boletín oficial y en un diario de la localidad que el
juez designe (de mayor tirada) cuando el rebelde no tiene domicilio conocido.
La sentencia (igual que los autos y resoluciones que la ley declare y los que
importen la paralización del juicio) es apelable en relación y con efecto suspensivo, a
menos que el actor preste fianza suficiente para responder al resultado del pleito. En
segunda instancia no hay apertura a prueba, pero pueden presentarse documentos
públicos y privados y ponerse posiciones.
Cualquiera sea la sentencia, tanto el actor como el demandado tienen el derecho
de promover el juicio declarativo que corresponda. En éste, no está permitido discutir
las excepciones procesales relativas al anterior; tampoco, cualquier defensa o excepción
admisibles en el juicio ejecutivo. El juicio ordinario debe deducirse dentro del plazo de
4 meses de ejecutoriada la sentencia de remate, bajo apercibimiento de imponer las
costas al accionante, aunque resultare vencedor.

* Nota: Ampliación de la ejecución: El monto reclamado en el juicio ejecutivo puede


ampliarse antes o después de la sentencia, cuando venciese algún nuevo plazo de la
obligación.
Debe tratarse de cuotas de la misma obligación, y no procede cuando se ejecuta
cheques, pagarés u otros documentos autónomos, salvo que pueda demostrarse que
todos tienen la misma causa con vencimientos escalonados (esta restricción no opera
cuando la ampliación se efectúa con anterioridad a la intimación de pago, ya que
entonces se trata de modificación de la demanda antes de que tome conocimiento de ella
el demandado).
· antes de la sentencia: durante el juicio podrá ampliarse la ejecución por su importe y se
consideran de la ampliación los trámites que le hayan precedido.
· posterior a la sentencia: las cuotas que vencieren después de la sentencia de remate
serán objeto de demandas especiales, las que se sustanciarán mediante una intimación al
deudor para que exhiba los recibos correspondientes dentro del 3er día, bajo
apercibimiento de considerarse ampliada la sentencia a las nuevas porciones.

- FASE DE CUMPLIMIENTO.
Ejecutoriada la sentencia de remate que ordena llevar adelante la ejecución, o
pendiente de apelación pero prestada fianza para ejecutarla, el actor –o el actuario a su
pedido- debe practicar la planilla de liquidación de la deuda, incluyendo el capital
reclamado, sus intereses, costas y costos del proceso.
El secretario debe ponerla de manifiesto en la oficina por el plazo de 3 días, bajo
apercibimiento de ser aprobada judicialmente en coso de no ser impugnada por los
interesados. Puede ser que:
1) Se impugne: El juez debe conferir traslado a la contraparte por el plazo de 3 días a
fin de que conteste. Cualquiera fuese la posición adoptada por esta parte, una vez
contestado el traslado o vencido el plazo para hacerlo, el juez la aprueba (tal como se
propiciara o mediante la reforma propiciada por el impugnante) mediante auto
interlocutorio.
2) No se impugne: El juez debe aprobarla, mediante auto interlocutorio.

154
La sentencia interlocutoria es irrecurrible. Su notificación, por tanto, sirve de
intimación suficiente para que el ejecutado cumplimente lo ordenado en la sentencia. En
caso de no hacerlo, el actor puede intentar se lo constriña judicialmente, salvo que se
trate de créditos y acciones litigiosas o que pertenezcan al heredero de una sucesión o al
cónyuge sobreviviente, respecto de los gananciales, que no pueden vender
forzadamente. Al efecto, deben tenerse en cuenta los siguientes supuestos:
A- Si no hay bienes embargados ni posibilidad de embargarlos: El juez debe decretar, a
pedido de parte, la inhibición general del ejecutado, oficiando al Registro general.

B- Si hay bienes embargados, y se trata de:


a) Títulos, acciones y bienes cotizados en las bolsas de Capital Federal, Rosario o
Santa Fe, el acreedor puede solicitar:
· que se le den en pago al precio de la cotización correspondiente al día de la sentencia.
Tratándose de una opción legal a favor del acreedor, el juez debe entregarle los títulos,
etc. previo control del pago del sellado adeudado por tasa de justicia, de honorarios y
aportes a la Caja Forense y Caja de Jubilaciones adeudados por el letrado del ejecutante.
· que se vendan por un corredor de bolsa que debe designar el juez, si no ha mediado
acuerdo de partes. Aceptado el cargo y efectuada la venta debe depositar su producido a
la orden del juzgado en cuenta especial del Banco Provincial de Santa Fe.

b) Cosas ciertas y determinadas: El juez, a pedido de parte, libra mandamiento para


desapoderar de ellas al obligado. El acreedor debe concurrir al acto para recibir las
cosas. Puede ocurrir que:
· las acepte: termina el pleito.
· las rechace: por no coincidir en sus características con las del bien embargado
conforme con la descripción que de él se efectuara en el mandamiento oportunamente
diligenciado o, en su defecto, por no coincidir con la descripción que se realizara en la
sentencia. El juez convoca a una audiencia y, previo dictamen pericial, de ser necesario,
resuelve sobre el pago. Si se declara su insuficiencia, se traba embargo sobre otros
bienes, Una vez embargados se procede a su remate, según la naturaleza del bien.

c) Dinero en efectivo depositado en el expediente;

d) Honorarios, sueldos, pensiones o créditos realizables en el acto:


En estos dos casos, el juez, a pedido del interesado, debe disponer se libre ‘orden
de pago’ por el importe que arroja la planilla de liquidación aprobada en autos.
En caso de quedar un remanente de dinero, debe ser puesto a disposición del
ejecutado. A su pedido, se libra orden de pago a su favor.
Y, sin perjuicio de la percepción del dinero que ya se encuentra depositado, en
caso de no cubrir el importe de la planilla aprobada en autos, el juez, a pedido de parte,
deberá oficiar a la institución o persona sobre la cual se hiciera efectivo el embargo a fin
de que continúe efectuando depósitos en autos, hasta cubrir el total (teniendo en cuenta
el máximo legal a descontar).

e) Créditos, acciones, fondos públicos, muebles o semovientes;

f) Inmuebles:
En estos 2 últimos casos, se procede a su venta en pública ‘subasta’, sin
necesidad de efectuar tasación previa. A tal fin, el juez debe designar un martillero que

155
puede ser propuesto por el actor. De la propuesta efectuada, el juez debe conferir
traslado al ejecutado por el plazo de 3 días. Puede ocurrir que el interesado:
· Conteste: aceptando la propuesta, caso en el que el juez debe efectuar la designación
del caso; u oponiéndose a la propuesta, caso en que el juez debe efectuar la designación
por sorteo de la lista respectiva.
· No conteste: como el silencio implica asentimiento cuando hay obligación legal de
expedirse, y ella existe implícita en todo traslado, el juez debe designar al propuesto.
En caso de tratarse de un juicio seguido en rebeldía, el martillero debe
necesariamente ser sorteado de la lista respectiva.
Notificado el martillero designado en autos, debe aceptar el cargo ante el juez,
prestando juramento o promesa de fiel desempeño y constituyendo domicilio en el acta
que, al efecto, debe levantar el secretario. Puede ocurrir que:
* No lo acepte por causa debidamente justificada: se procede a efectuar una nueva
designación;
* Lo acepte. Su actuación es diferente si se trata de:

1- Bienes Muebles: En este caso, el martillero actuante debe solicitar ser puesto en
posesión de los bienes embargados; a tal fin, el juez debe ordenar el secuestro de ellos,
librando mandamiento al oficial de justicia, quien procederá con los recaudos propios de
toda su actuación. Puede ocurrir que:
- No le sean entregados los bienes: Debe informar al juez y, sino existe otro bien para
subastar, concluye su función, pudiendo solicitar se regule su retribución, salvo que
haya otros bienes sobre los cuales trabar embargo;
- Le sean entregados lo bienes: El martillero debe solicitar al Registro de Crédito
Prendario que informe si ellos se encuentran prendados o intimar al deudor a que
efectúe la denuncia respectiva. Si informa que están prendados, debe citarse a los
acreedores, con anticipación no menor de 10 días al remate, a fin de que tomen la
intervención a que tengan derecho en la medida de su interés legítimo.

2- Bienes Inmuebles y Muebles Registrables: En tal caso, el martillero debe solicitar:


a. Si se trata de inmuebles:
- a la Dirección General de Rentas que dentro del plazo de 3 días informe sobre la
valuación que los bienes tiene a los efectos del pago del impuesto inmobiliario, lo que
servirá de base para la subasta. A falta de esa valuación, el juez debe oficiar a la
Dirección General de Rentas para que efectúe el empadronamiento y avalúo del bien a
rematar;
- a las oficinas públicas nacionales, provinciales y municipales, un informe sobre los
impuestos, contribuciones de mejoras, tasas, etc. que adeuda el inmueble;
- al Registro General, que emita un informe acerca de la inscripción del dominio y los
gravámenes y embargos que reconozcan los bienes, y acerca de las inhibiciones
anotadas a nombre del deudor;
- al juez de la causa, que libre mandamiento al oficial de justicia para que constate el
estado de ocupación del inmueble.
b. Si se trata de automotores:
- al Registro Nacional de la Propiedad automotor, informe quién es el titular del bien, si
registra embargo y si se adeuda algo;
- al Registro de Crédito Prendario, informe si registra prenda y, en su casi, datos del
acreedor y monto de la deuda;
- a la municipalidad o Comuna que corresponda, informe si se registra multas o deudas
de cualquier origen;

156
- a la jefatura de policía que corresponde, informe si ha sido o no robado.
Por otra parte, el juez debe ordenar al ejecutado que dentro del plazo de 6 días,
presente los títulos de propiedad, bajo apercibimiento de sacarse copias a su costa de los
protocolos públicos, para ser puestos de manifiesto en la oficina durante los anuncios
del remate.

Obtenidos los informes y practicadas las diligencias que el ejecutante puede


solicitar para subsanar defectos que presenten los títulos, en el caso de inmuebles o
muebles registrables, o bien habiéndose informado si están o no prendados en el caso de
los muebles: el martillero debe proponer fecha, hora y lugar para la realización de la
SUBASTA, teniendo en cuenta que el día debe ser hábil, la hora entre las 8 y las 20 y el
lugar dentro de la ciudad donde se encuentren los bienes, puede ser el sitio donde se
hallan ubicados o depositados, la oficina del martillero y las puertas del tribunal,
pudiendo disponer el juez que se realice en otro sitio o lugar, si existe alguna razón que
lo justifique.
Pronunciada la correspondiente decisión judicial al respecto –que debe ordenar
la subasta con mención expresa de los bienes a rematar- además de la notificación por
cédula a las partes en los domicilios constituidos y en los domicilios reales de los
acreedores hipotecarios que surjan de los informes obtenidos, citándolos con una
anticipación no menor de 10 días al remate, debe anunciarse la subasta por edictos que
se publican: de 2 a 5 veces, según la importancia de los bienes cuando se trata de
muebles; 3 veces en 5 días cuando se trata de inmuebles; 3 veces con anticipación
menor de 3 días cuando se trate de bienes prendados.

Puede suceder que la decisión judicial que ordena la subasta sea: impugnada por
parte interesada, y si en definitiva se ordena la subasta, o bien si ha sido consentida la
decisión judicial que la ordena, antes de iniciado el acto del remate, puede ocurrir que:
 el ejecutado o un tercero por cuenta de él libere los bienes a subastar, pagando el
monto adeudado por capital, intereses y costas;
 el ejecutado no libere los bienes a subastar mediante el pago de lo adeudado. Es este
caso se procede a rematarlos.

El remate judicial se efectúa, bajo pena de nulidad, ante el actuario o juez de paz
lego del juzgado de paz departamental, que se designa al efecto, cuando el lugar de la
subasta se encuentre fuera de la ciudad donde tiene el asiento el juzgado que la ordenó.
Comenzado el acto, el martillero actuante, debe dar lectura de los edictos
publicados, especificando con puntualidad las calidades buenas o malas, el peso y las
medidas de las especies en venta. Inmediatamente se pone en venta el bien:

+ Si se trata de un bien mueble: el remate es al mejor postor y sin base, salvo que se
trate de ejecución de prenda, en cuyo caso la base es el monto del crédito prendario. La
circunstancia de que no haya basa hace imposible que no haya postores, pues la especie
se adjudicará cualquiera fuere el monto del precio ofrecido. Tratándose de bienes
muebles que salen a subasta con base, el procedimiento se torna similar al remate de
bien inmueble.
Efectuada la venta, el martillero debe exigir al comprador el precio obtenido o,
cuando menos, un 10% de él. A falta de esa entrega, el remate debe continuar a partir de
la penúltima postura, para lo cual no debe permitir que se retiren del recinto los dos
últimos postores hasta tanto el acto haya quedado perfeccionado.

157
+ Si se trata de inmuebles: la base de la venta es el avalúo de la finca para el pago del
impuesto inmobiliario o, en caso de ejecución hipotecaria o división de condominio,
puede haber pactada contractualmente una base mayor.
Puede ocurrir que iniciada la venta no haya postores, en cuyo caso el actor puede
pedir una nueva subasta y la base se reduce en un 25%. Si en la nueva subasta tampoco
hay postores, el juez ordena una nueva sin base.
Adjudicado el bien, el martillero debe exigir el 10 % del precio. A falta de esa
entrega debe continuar el remate a partir de la última postura. Inmediatamente de
realizada la subasta debe labrarse acta firmada por el martillero y

Durante la subasta, el martillero no puede admitir posturas por signos, ni


anunciar puja alguna sin que el mayor postor la haya expresado en voz clara e
inteligible.
Inmediatamente de realizada la subasta, el funcionario que preside el acto debe
levantar acta de todo lo actuado, que luego firma con el martillero.

Sin necesidad de requerimiento alguno, dentro de los 5 días hábiles posteriores


al acto el martillero debe rendir cuentas de su cometido, acompañando la boleta de
consignación a la orden del juzgado en cuenta especial del Banco Provincial de Santa
Fe, por los importes que correspondan. Efectuado ello se ponen los autos de manifiesto
en la oficina por 4 días para que sean examinados por los interesados. Puede ocurrir
que:
1- El remate no sea impugnado: en cuyo caso el juez debe aprobarlo;
2- Sea impugnado: Si la impugnación es deducida por el comprador, ni puede
formularlas sin depositar el importe total del precio, con el cual el juez no puede
efectuar pago alguno mientras penda la reclamación.
Tramitada la impugnación, el juez dicta el auto que corresponda sobre el mérito
del remate.
Ejecutoriado el auto aprobatorio, se manda que el adjudicatario de los bienes
consigne el precio adeudado a la orden del juzgado, en cuenta especial del Banco
Provincial de Santa Fe. Al mismo tiempo dispone que se efectúe la liquidación
definitiva del capital, intereses y costas.
Puede ocurrir que el comprador:
a. No pague lo adeudado: Si por culpa del comprado no tiene efecto la venta, se procede
a un nuevo remate. Aquel es responsable, por la vía ejecutiva, de la disminución del
precio, de los intereses acrecidos y de las costas causadas por tal motivo. Se ordena la
realización de una nueva subasta.
b. Pague lo adeudado: Practicada la planilla de liquidación, se pone de manifiesto en la
oficina por 3 días. Aprobada la planilla, previo control del pago del sellado adeudado
por tasa de justicia, honorarios y aportes de Caja Forense y Caja de Jubilaciones
adeudados por el letrado del ejecutante, dispone librar orden de pago a éste por el
importe de la planilla de liquidación aprobada en autos.
En caso de haber otros acreedores de preferencia, se deposita el importe se sus
crédito en el Banco Provincial y el resto es aplicado al pago del ejecutante.

3- Juicio de apremio.

Procederá el juicio de apremio, sin perjuicio de lo dispuesto por leyes especiales,


contra los condenados por sentencia a pagar sumas de dinero y los deudores de costas
judiciales. Se substanciará como ‘incidente’ del juicio en que se haya dictado la

158
sentencia o producido las costas. Presentada la demanda, que debe integrarse con la
sentencia, auto o liquidación aprobada, original o en copia, se le dará en lo pertinente el
trámite (del juicio ejecutivo) indicado por los artículos 452 (que señala: Si el juez
encontrare que el título en que se funda la demanda trae aparejada ejecución, librará
mandamiento de embargo por la cantidad líquida que de él resulte, intereses y costas…)
y 473 (Trabado el embargo y comparecido el demandado o notificada la rebeldía en su
caso, se citará al deudor de remate, con prevención de que si no opone dentro de tres
días excepción legítima se llevará adelante la ejecución…).

En el juicio de apremio sólo procederán las excepciones procesales y las de


falsedad material o inhabilidad del título y de extinción de la obligación. Dichas
excepciones sólo podrán fundarse en hechos posteriores al título, excepto en el caso de
honorarios regulados en juicio y probarse por documento público o privado o por
confesión. A las excepciones se dará el trámite del juicio sumarísimo. El plazo para
contestarlas será de 3 días.

La sentencia sólo es recurrible por el actor, rigiendo a su respecto lo que


establece el artículo 483 (“Cualquiera sea la sentencia, tanto el actor como el
demandado tendrán derecho de promover el juicio declarativo que corresponda…”).

4- Ejecución hipotecaria.
En las ejecuciones especiales, entre las que encontramos la ‘ejecución
hipotecaria’, se previó un procedimiento aun más acelerado que el del juicio ejecutivo
común, atendiendo al origen de la deuda.
La hipoteca es un derecho real otorgado en garantía de un crédito en dinero,
sobre bienes inmuebles que continúan en poder del deudor. La hipoteca confiere 2
derechos: 1. el de perseguir la cosa, sea quien fuera el que la tenga, y 2. el de
preferencia, en el sentido de que el acreedor hipotecario cobrará sobre el precio de la
subasta el bien hipotecado antes que ningún otro de ese mismo deudor.
Es un derecho accesorio, ya que garantiza una deuda dineraria; debe hacerse por
escritura pública y consignar:
· nombre, apellido y domicilio del deudor y acreedor; si se trata de personas jurídicas,
su denominación legal y el lugar del establecimiento;
· fecha y naturaleza del contrato a que accede y el archivo en que se encuentra;
· situación de la finca y sus linderos;
· cantidad cierta de la deuda.
El título ejecutivo es el testimonio de la escritura pública con la cual se
constituyó la hipoteca, en tanto surja de ella una obligación en dinero líquida y exigible.
En materia hipotecaria, las excepciones tienen un régimen que tiende a
resguardar la celeridad de este tipo de procesos. Hay una concreta restricción a la
posibilidad de deducirlas. Las excepciones admitidas son las del juicio de apremio: las
procesales y la de falsedad material o inhabilidad de título.

Promovida la demanda, que debe entablarse con escritura pública que acredite
una obligación exigible y líquida garantida con hipoteca, se pedirá al Registro General
que informe:
a) si no se ha extinguido el crédito o caducado la inscripción de la hipoteca,
b) si existen terceros adquirentes u otros acreedores hipotecarios, y embargos,
inhibiciones u otros gravámenes;

159
Se decretará el embargo del inmueble, y podrá ordenarse igualmente el embargo
de los bienes considerados como accesorios de la hipoteca, así como la comprobación
de la existencia de mejoras y estado de la finca.
Evacuados los informes, se publicarán edictos por 5 veces en 5 días citando: al
deudor y terceros adquirentes si los hubiere, a sus sucesores o administrador provisorio
de la herencia o al representante legítimo respectivo en caso de concurso, quiebra o
incapacidad, a fin de que, dentro de 5 días contados desde la última publicación:
1- Se presenten y paguen el importe del crédito, intereses y costas prudencialmente
estimadas;
2- Se presenten y opongan excepción legítima,
3- No se presenten: se dicta la sentencia en rebeldía. Si los interesados no se
presentaren, se dará intervención al defensor general en representación de los incapaces
o ausentes que pudieran existir.
En el mismo edicto se hará saber la iniciación del juicio a los otros acreedores
hipotecarios.
Si se oponen excepciones, se correrá traslado al ejecutante por 3 días. A las
excepciones se dará el procedimiento del juicio sumarísimo, y no se admitirá otra
prueba que la de confesión y la documental. La sentencia deberá contener, en su caso,
además de los requisitos corrientes, la orden de venta y la designación del martillero
propuesto por el ejecutante.
El remate se efectuará conforme con las normas respectivas del juicio ejecutivo.

5- Ejecución de prenda con registro:


Esta es otra de las ejecuciones especiales. La ejecución de prenda con registro
tiene como base el contrato de prenda con registro, que es aquel mediante el cual se
afectan en garantía del pago de una suma de dinero o de cualquier obligación a la cual
se atribuya un valor dinerario bienes muebles o semovientes, que permanecen en poder
del deudor.
La inscripción registral es de la esencia de este instituto, de lo cual deviene su
similitud con la hipoteca; sólo que la prenda afecta a los muebles y no a los inmuebles
como ocurre con aquella.
Es indispensable para promover esta ejecución contar con el certificado de
prenda, que no es otra cosa que el contrato prendario debidamente inscripto en el
registro respectivo.

[La demanda se presenta junto con el certificado de prenda con registro. El juez
cita de remate al deudor, el que tiene 3 días para oponer excepciones (procesales,
renuncia del crédito o pago). El juez puede rechazarla o bien ordenar la venta. El
demandado tiene 2 días desde la notificación para apela o bien le queda el juicio
declarativo.] (apunte de julio no figura en el código)

6- Ejecución de sentencia: Argentina y extranjera.


La “Ejecución de sentencia” es un procedimiento que tiende al cumplimiento de
una sentencia de condena (de las que venía hablando).
Cuando una sentencia ha pasado en autoridad de cosa juzgada, comienza a
asomar el perfil coercitivo del Estado en su uso monopólico de la fuerza, ya que si el
deudor no cumple con su obligación declarada en la condena, el acreedor puede iniciar
la ‘ejecución procesal forzada’ de su crédito.
Los requisitos que se requieren para ejecutar una sentencia son:
1) Sentencia firme;

160
2) Plazo de cumplimiento vencido;
3) Instancia de parte.

- Dictadas por los tribunales argentinos:


El Código de procedimiento dispone al respecto:
No podrá negarse la ejecución de sentencias dictadas fuera de la provincia por
razón de incompetencia del juez o tribunal que las hubiere pronunciado sino cuando
invadiesen la jurisdicción de los tribunales de la provincia.
Si la sentencia contuviere condenación al pago de cantidad líquida o que pueda
liquidarse por simples operaciones aritméticas sobre bases que ella misma determine, se
procederá a su cumplimiento por los trámites del apremio.
Si la sentencia fuere de condena a dar o restituir cosa cierta, mueble o inmueble,
se librará mandamiento para desapoderar de ella al obligado o se ordenará, en su caso,
el lanzamiento correspondiente.
Si la sentencia hubiera condenado a no hacer alguna cosa y el obligado la
quebrantase, el acreedor podrá pedir que se repongan las cosas al estado anterior, si
fuese posible, a costas del obligado; o que se le indemnicen los daños y perjuicios,
substanciándose este pedido por el trámite de los incidentes.
Podrán los jueces imponer sanciones pecuniarias compulsivas y progresivas
encaminadas a que los litigantes las cumplan.
Además de la aplicación de astreintes cuando el juez lo estimare oportuno, en
caso que se condenare a hacer alguna cosa u otorgar una escritura pública y el ejecutado
no lo hiciera en el plazo señalado en la sentencia, el juez ordenará, a opción del
ejecutante, que se haga a costa del deudor o se otorgue la escritura por el mismo juez a
nombre del obligado o que éste pague los daños y perjuicios.

- Dictadas por los tribunales extranjeros:


Las sentencias dictadas en país extranjero, cuando no medien tratados referentes
a su cumplimiento en la República, se harán efectivas si reúnen las condiciones
siguientes:
1ro. Que no invadan la jurisdicción de los tribunales del país.
2do. Que no hayan sido dictadas en rebeldía si el demandado tenía su domicilio en la
República.
3ro. Que sean lícitas según las leyes de la República y que no afecten el orden público.
4to. Que la ejecutoria reúna los requisitos necesarios para ser considerada como tal en la
nación en que haya sido dictada.
5to. Que se presente en las condiciones de autenticidad exigidas por las leyes
nacionales.
Si en la nación en que se hubiere dictado la sentencia, se exigiese para dar efecto
a las pronunciadas en la República otras condiciones además de las expresadas, se
considerará que ellas son también exigidas, y si allí no se diere cumplimiento a las
sentencias de los tribunales argentinos, dicha sentencia no tendrá fuerza en la provincia.
La ejecución será promovida acompañándose copia auténtica en lo pertinente de las
leyes extranjeras que acrediten los extremos anteriores y previa traducción al idioma
nacional, en su caso con audiencia del demandado, se substanciará por el trámite del
juicio sumario.

161
Bolilla XIII
Por: Josefina Perotti

La acumulación procesal y la comparación de pretensiones procesales:


Dice Lino Palacio que: " La pretensión es el acto procesal, en cuya virtud se
reclamante el órgano judicial o eventualmente arbitral y frente a una persona
distinta, la resolución de un conflicto suscitado entre dicha persona y el autor de la
reclamación".

Se puede observar que Palacio centra el concepto de pretensión en la controversia.


El pedido del derecho que se nos ha privado, o se nos ha lesionado, o el reclamo por una
conducta ilícita o indebida, ante un órgano de la jurisdicción, con el objeto de satisfacer
el mismo, lo llamaremos pretensión. Pero esta pretensión tiene además del concepto de:
reclamar la declaración de un interés legítimo sin que haya contraparte; el de pedir el
rechazo del ataque improcedente.
La acción y la pretensión se canalizan, en el proceso civil, por medio de un acto formal
de petición, esto es la demanda y eventualmente su contestación.

Elementos de la pretensión: (L. Palacio)

La pretensión se halla integrada por un elemento subjetivo (sujetos) y por dos elementos
objetivos (objeto y causa) .

Sujetos: toda pretensión consta de tres sujetos: la persona que la formula, la persona
frente a quien se formula y la persona ante quien se formula. Las dos primeras son los
sujetos activo y pasivo de la pretensión, y la tercera está representada por un órgano que
reviste el carácter de destinatario de la pretensión y tiene el deber de satisfacerla, ya sea
tomándola o rechazándola.

Objeto: es el efecto jurídico que mediante ella se persigue y puede ser considerado
desde dos aspectos: el inmediato y el mediato.
el primero es la clase de pronunciamiento que se reclama (condena, declaración,
ejecución, etc.), y el segundo el bien de la vida sobre el cual debe recaer el
pronunciamiento pedido ( por ej.: la relación jurídica cuya existencia o inexistencia
debe declararse, etc.).
Es obtener de la autoridad (juez o árbitro) una resolución con contenido favorable a la
petición hecha en la demanda.

Causa: fundamento o titulo de la pretensión consiste en la invocación de una concreta


situación de hecho a la cual el actor asigna una determinada consecuencia jurídica
Esta concepción se descompone en dos sub elementos cuando se la analiza respecto de
la pretensión procesal: el primero de ellos, está constituido por el hecho invocado en la
demanda; y el segundo, es la imputación jurídica que el actor efectúa al demandado
con motivo de aquel hecho.

162
Preguntas Pretensión

¿Entre quienes? (sujetos) Actor y demandado

Lograr la emisión de una sentencia (objeto del proceso)


¿Para qué? (objeto)
favorable al interés del pretendiente

Hecho que origina el conflicto en el plano de la realidad


social cuya existencia se afirma en la demanda (plano
jurídico del proceso) mas la imputación jurídica que el
¿Por qué? (causa)
pretendiente hace contra aquel respecto de quien se
pretende, a base del hecho con trascendencia en el
derecho

La comparación de pretensiones procesales y sus efectos.


Cuatro premisas básicas corresponden afirmar antes que todo:
 Por razones que hacen a la convivencia pacífica y armoniosa de los integrantes
de una comunidad, es menester que una vez resuelta por la autoridad una pretensión
litigiosa, su decisión sea definitiva, impidiéndose así reabrir útilmente la discusión que
la origino.
 De mismo modo, no resulta bueno para el mantenimiento de la paz social la
coexistencia de dos demandas con base en la misma exacta pretensión, pues podría
ocurrir eventualmente que ellas obtuvieran sendas decisiones contradictorias, con la
consiguiente creación de un verdadero caos jurídico.
 Por similares razones, siempre que una misma causa pretendo sea el sustento de
dos o más pretensiones (concurrentes o antagónicas), deben ser necesariamente
tramitadas y decididas en un solo procedimiento.
 Finalmente, en otras ocasiones y aunque no de modo necesario, resulta
conveniente tramitar en un mismo y único procedimiento varios procesos originados
por pretensiones que se encuentran estrechamente vinculadas entre sí.
Las tres primeras premisas son el fundamento de la seguridad jurídica. La última
constituye la economía y celeridad en los trámites.
Del principio de seguridad se sigue que no puede admitirse la existencia
contemporánea o sucesiva de dos litigios con la misma exacta pretensión y que no
pueden emitirse decisiones diferentes acerca de una misma exacta pretensión o de
pretensiones antagónicas.
De los principios de economía y celeridad se extrae la conveniencia de tramitar
simultáneamente diversas pretensiones.

163
Diferentes casos:

 Indiferencia de pretensiones: Supóngase que Pedro reclama a Diego la


restitución de un dinero entregado en mutuo. Si se compara esta pretensión con
otra en la cual Juan pretende que Pablo le devuelva la finca que le entregara en
comodato, cabe concluir que entre ambas pretensiones no existe elemento
alguno en común: son distintos los sujetos (Pedro Diego por un lado; Juan y
Pablo por el otro), los objetos pretendidos y la causa (los hechos y las
imputaciones jurídicas).

Estas dos pretensiones son indiferentes e independientes y para nada sirven a los
efectos de esta explicación.

 Identidad de pretensiones: El mismo Pedro reclama del mismo Diego la


restitución del mismo dinero dado en el mismo mutuo.

Esta simple compulsa por virtud de la cual se advierte que coinciden perfecta y
acabadamente todos y cada uno de los elementos conocidos, permite decir que
las pretensiones comparadas son idénticas.

 Conexidad de pretensiones: Toda vez que al comparar pretensiones litigiosas


coincidan por lo menos uno y como máximo dos de los elementos tradicionales,
se dice que media entre ellas una relación de conexidad que puede ser subjetiva,
objetiva, causal, subjetivo-causal y objetivo-causal.
 Conexidad subjetiva: Supóngase que Pedro reclama a Diego la restitución de
un dinero dado en mutuo y que, contemporáneamente, el mismo Pedro reclama
al mismo Diego la devolución de una cosa entregada en comodato.

Enfrentando una pretensión con la otra, se advierte que coinciden exactamente


los sujetos, en tanto que difieren los restantes elementos: objeto y causa. Este
fenómeno en el cual coinciden solo dos sujetos ubicados en la misma posición y
no los restantes elementos, recibe la denominación de Conexidad subjetiva.

 Conexidad objetiva: Supóngase que Pedro reclama a Diego la restitución de la


posesión de una finca usurpada y, al mismo tiempo, Juan reclama al mismo
Diego la misma finca, que le compro.

Colocando nuevamente una pretensión frente a otra, se puede ver que no


coinciden los sujetos, pero si el objeto pretendido.

Este fenómeno en el cual coinciden exactamente el objeto pretendido y no los


sujetos ni la causa, recibe la denominación de conexidad subjetiva.

Este tipo de conexidad puede presentarse por identidad del objeto y por
incompatibilidad del objeto.

164
 Conexidad causal: Supóngase que en un mismo acto, Juan y Diego obtienen de
Pedro un préstamo de dinero, comprometiéndose ambos a devolverlo por partes
iguales. A base de ello, y por falta de pago, Pedro reclama a Juan la restitución
de su parte y, al mismo tiempo, el mismo Pedro reclama a Diego la restitución
de la suya.

Comparando ambas pretensiones se advierte que Pedro está en la posición actora


en ambas pretensiones, en tanto que son distintos los demandados.

Este fenómeno en el cual coinciden solo la causa, y no los sujetos ni el objeto,


recibe el nombre de conexidad causal.

 Conexidad mixta objetivo-causal: Supóngase que Pedro reclama ser


considerado hijo del matrimonio formado por Diego y Maria, por haber sido
concebido y nacido luego del casamiento de ellos; para esto, deduce sendas
pretensiones por separado. En razón de que se pretende filiación matrimonial y
no otra, la relación jurídica afirmada en las respectivas demandas es
inescindible: debe darse necesariamente respecto de Diego y de Maria, y no
respecto de cualquiera de ellos en forma individual.

Si se comparan ambas pretensiones, se puede ver que el elemento subjetivo no


es idéntico; aunque el actor sea el mismo en las dos pretensiones, son distintos
los demandados. Pero también se ve que el objeto y la causa de ambas
pretensiones son idénticos.

Este fenómeno muestra una conexidad mixta objetivo-causal y se presenta en


todo supuesto de relación jurídica inescindible.

 Conexidad mixta subjetivo-causal: Supóngase que Pedro reclama a Diego el


cumplimiento de un contrato; contemporáneamente, el mismo Diego pretende
respecto del mismo Pedro que se declare la nulidad de mismo contrato.

Comparando las pretensiones se ve que los sujetos son las mismas exactas
personas, pero que se hallan en posiciones procesales invertidas. Que los
objetos son diferentes pero que la causa es la misma.

Afinidad de pretensiones: Supóngase que Pedro, dependiente de Diego, ocasiona un


daño a Juan en una accidente de tránsito. Por tal razón, Juan pretende que Pedro le
indemnice los gastos efectivamente abonados para lograr su curación y,
contemporáneamente, que Diego le indemnice el daño moral sufrido.

Comparando ambas pretensiones se advierte que los sujetos no son idénticos y que los
objetos pretendidos son diferentes. Pero también se ve que si el hecho causante del daño
es el mismo, no lo es la imputación jurídica que sustenta cada pretensión: aunque los
sujetos no son idénticos, siempre hay un sujeto en común en las diferentes
pretensiones. Además es idéntico el hecho que fundamenta la pretensión, pero es
distinta la imputación jurídica que se hace a cada uno de los demandados.

165
Acumulación procesal:
La acumulación de procesos consiste en reunir dos o mas procesos en tramite, con el
objeto de que todos ellos constituyan un solo juicio y sean terminados por una sola
sentencia. La institución se funda en las siguientes razones:
1. Evitar el dictado de decisiones contradictorias(a que puede conducir la sustanciación
de pretensiones conexas en procesos distintos).
2. Posibilidad que las sentencias puedan efectivamente ejecutarse, es decir, sean útiles.
3.Cumplir con el Principio de Economía procesal.

Clases: (L. Palacio) la acumulación de pretensiones puede ser dentro de un mismo


proceso puede ser originaria o sucesiva, según que, respectivamente las pretensiones se
propongan conjuntamente desde el comienzo del proceso que, durante el transcurso de
este, a la pretensión originaria se agreguen o incorporen otra u otras.
Dentro de la sucesiva se debe distinguir la acumulación por inserción, de la
acumulación por reunión. La primera se opera cuando una nueva pretensión se
incorpora dentro de un proceso ya pendiente para la satisfacción de otra.
La segunda tiene lugar cuando, existiendo diversas pretensiones que se han hecho valer
en otros tantos procesos, estos se funden en uno solo.

o Acumulación originaria de pretensiones: según se atienda a la pluralidad de


pretensiones, además, a la pluralidad de sujetos activos o pasivos que las
interponen, o frente a quienes se interponen, cabe distinguir entre dos clases de
acumulación originaria de pretensiones: la objetiva y la subjetiva.
La acumulación objetiva es la reunión, en una misma demanda, de las distintas
pretensiones que el actor tenga frente al demandado, realizada con el fin de que sean
sustanciadas y decididas en un proceso único. Su admisibilidad no se halla supeditada al
requisito de que medie entre las pretensiones acumuladas un vínculo de conexión por la
causa o por el objeto, por cuanto la institución responde principalmente a razones de
economía de tiempo, actividad y gastos.
La acumulación subjetiva tiene lugar toda vez que, entre mas de un actor o
demandado( acumulación activa y pasiva, respectivamente), o entre mas de un actor y
mas de un demandado( acumulación mixta) se sustancian, en un mismo proceso,
pretensiones conexas por la causa o por el objeto.
Se halla justificada por razones de economía procesal y particularmente por la necesidad
de conjurar el riesgo de decisiones contradictorias y el consiguiente escándalo jurídico
que fácilmente puede originar el tratamiento autónomo de pretensiones vinculadas por
el mencionado tipo de conexión. Esta procede siempre que las distintas pretensiones
sean conexas en virtud de la causa, del objeto, o de ambos elementos a la vez.

o Acumulación sucesiva por inserción de pretensiones:


Este tipo de acumulación tiene lugar cuando una pretensión se incorpora dentro de un
proceso ya pendiente para la satisfacción de otra.
La inserción de la nueva pretensión puede provenir del primitivo actor, del primitivo
demandado, o de un tercero, según se trate de la ampliación de demanda, de la
reconvención, o de la intervención excluyente y de la tercería.
La ampliación de la demanda se configura cuando el actor, en lugar de acumular todas
las pretensiones que tiene frente a al demandado en la demanda inicial, lo hace en un
momento procesal posterior, cuyo limite esta dado por la notificación de la demanda.

166
Cumplido este acto, el actor pierde la facultad de proponer nuevas pretensiones dentro
de un mismo proceso.
La reconvención es la pretensión procesal que puede deducir el demandado frente al
actor. Solo puede plantearse en el mismo escrito de contestación a la demanda y no
haciéndolo entonces, no podrá deducirla después, salvo su derecho para hacer valer su
pretensión en otro juicio.
Intervención excluyente y tercería, la nueva pretensión proviene de terceros, o sea de
personas ajenas a las partes originarias, las cuales vienen a convertirse en sujetos
pasivos de aquella.

Acumulación sucesiva por reunión de de pretensiones (acumulación de procesos):


Consiste en la reunión material de dos o mas procesos, que, en razón de tener por objeto
pretensiones conexas, no pueden ser sustanciados separadamente sin riesgo de conducir
al pronunciamientote decisiones contradictorias, e incluso de cumplimiento imposible
por efecto de la cosa juzgada.
En su base existe, una pluralidad de pretensiones, las cuales, al acumularse,
determinanla unión material de los distintos procesos en los que aquellas se hicieron
valer.

PROCEDENCIA DE LA ACUMULACIÓN DE PROCESOS.


De acuerdo con nuestra legislación procesal la acumulación de procesos corresponderá
cuando:
1. Sea admisible la acumulación subjetiva de pretensiones, siempre que las mismas sean
conexas por la causa, por el objeto o por ambos elementos a la vez.
2. Cuando siendo el actor, titular de diversas pretensiones conexas frente al demandado,
aquellas se hayan hecho valer en otros tantos procesos, sin haber tenido lugar, su
acumulación objetiva.
3. Cuando el demandado, en lugar de deducir reconvención en el mismo proceso,
deduce, en otro proceso, una pretensión conexa a la interpuesta por el actor frente a el.

ADMISIBILIDAD DE LA ACUMULACIÓN DE PROCESOS.


1. Unidad de instancias: todos los procesos, cuya acumulación se pretende, deben
encontrarse en la misma instancia, vales decir, pueden acumularse en cualquier
instancia (primera, segunda), pero no será posible si estuvieren en instancias distintas.

2. Unidad de competencia: la acumulación de procesos no puede alterar la regla de la


competencia en razón d la materia, porque la misma se funda en consideraciones de
orden publico, que no pueden ser soslayadas ni por las partes, aunque exista acuerdo, ni
por el juez.

3. Unidad de tramites: que pueda suscitarse por los mismos tramites, auque pueden
acumularse dos o mas procesos de conocimiento, o dos o mas procesos de ejecución
sujetos a distintos tramites, cuando su acumulación resulte indispensable como
consecuencia de los efectos de la cosa juzgada que la sentencia a dictar en uno de ellos
puede producir en el otro u otros. En tal caso el juez debe determinar el procedimiento
que corresponde imprimir al juicio acumulado. la unidad de tramites se exige, por
obvias razones de orden procesal, como condición para la debida substanciación de los
procesos acumulados.

167
4. que el estado de las causas permita su sustanciación conjunta sin producir
demora perjudicial e injustificada en el tramite del o de los que estuvieren mas
avanzados.

REGLA:. En principio, la acumulación debe producirse sobre el expediente en que


primero se hubiese notificado la demanda. Excepcionalmente, cuando no pueda
establecerse cual es el proceso mas avanzado o se encontraren en la misma etapa
procesal, la acumulación se hará sobre el proceso mas antiguo, debiendo entenderse por
tal aquel que fue primeramente notificado, porque desde ese momento quedo trabada la
relación procesal. En el caso de jueces de distintas competencias por razona del valor o
monto. Ej. Jueces de paz, jueces de menor cuantía, jueces de primera instancia, la
acumulación se hará sobre el de mayor cuantía.

MODOS:
la acumulación de procesos puede disponerse:

A- A petición de parte: cuando es a pedido de parte, la vías serán.


(1). Excepción de litispendencia, para que proceda esta deben concurrir las tres
identidades, sujeto, objeto y causa. La excepción debe deducirse dentro del plazo para
contestar la demanda o reconvención si se trata de un proceso de conocimiento
ordinario; si es de conocimiento sumario se opondrá conjuntamente con la contención,
resolviéndose con carácter previo; y si es en un juicio ejecutivo dentro del plazo de la
citación para oponer excepciones.

(2). Incidente, el incidente de acumulación de procesos se podrá plantear después de


vencido el plazo para deducir la excepción de litispendencia o cuando, aunque no se
reúnan las tres identidades, la acumulación fuere posible fundad en la convexidad de los
procesos. Podrá deducirse en cualquier instancia o etapa del proceso, pero solo hasta el
momento en que la causa quede en estado de sentencia. La norma procesal concede al
interesado en obtener la acumulación de los procesos la opción para deducir el
respectivo incidente ante: * El juez que estime debe conocer en definitiva. * El juez que
debe remitir el expediente.

B- De oficio: cuando la acumulación se produce mediante resolución del órgano judicial


al efecto, en cuyo caso se aplican, en lo pertinente, las mismas reglas anteriormente
mencionadas.

EFECTOS.
1) Suspensión del tramite del proceso mas avanzado: decretada la acumulación, que en
principio debe darse sobre el proceso mas avanzado, se suspenderá la tramitación de
este hasta que el otro (u otros) proceso se encuentre en la misma etapa procesal.
2) Sustanciación separada: cuando el tramite conjunto resulte dificultoso por la
naturaleza de las cuestiones planteadas, el juez podrá disponer, sin admitirse recurso
alguno, la sustanciación separada de los procesos. En esta caso, se suspenderá la
tramitación del proceso mas avanzado cuando este se encuentre en estado de dictar
sentencia, a los efectos de que el otro ( u otros) proceso llegue a dicha etapa.
3) Sentencia única (unidad de pronunciamiento): como efecto fundamental de la
acumulación de procesos debe dictarse una sentencia única, la cual debe resolver la
totalidad de las cuestiones que se hayan planteado en los procesos acumulados.

168
Litisconsorcio: ( R. Arazi)
CONCEPTO:en un juicio pueden una o varias personas reclamar la satisfacción de una
pretensión a otra u otras. Cuando son varios los peticionarios o aquellos frente a quienes
se peticiona, se forma lo que se ha dado en llamar un “litisconsorcio”.

CLASIFICACION: (L. Palacio) Según que la pluralidad de sujetos consista en la


actuación de varios actores frente a un demandado, de un actor frente a varios
demandados, o de varios actores frente a varios demandados, el litisconsorcio se
denomina, activo, pasivo o mixto.

El litisconsorcio es facultativo cuando su formación obedece a la libre y espontánea


voluntad de las partes, y es necesario cuando lo impone la ley o la misma naturaleza de
la relación o situación jurídica que constituye la causa de la pretensión.
Puede también ser el litisconsorcio originario o sucesivo, según que la pluralidad de
litigantes aparezca desde el comienzo del proceso( acumulación subjetiva de
pretensiones) o se verifique durante su desarrollo posterior( integración de litis,
intervención adhesiva litisconsorcial, etc) .

Litisconsorcio necesario: es necesario cuando la sentencia solo puede dictarse


útilmente frente a todos los participes de la relación jurídica sustancial controvertida en
el proceso, de modo tal que la eficacia de este se halla subordinada a la citación de esas
personas. Art 89 CPN “cuando la sentencia no pudiere pronunciarse útilmente mas que
con respecto a varias partes, estas habrán de demandar o ser demandadas en un mismo
proceso. Tal seria el caso de un acreedor que demandara la nulidad de una compraventa
hecha por su deudor insolvente a un tercero, alegando que el acto fue simulado para
perjudicar sus derechos; necesariamente, deberá demandar al deudor y al que aparece
como comprador.
Del mismo modo por ejemplo, si un condómino demanda la división del condominio
tendrá que demandar a todos los restantes condóminos.
En el litisconsorcio necesario existe una pretensión única que solo puede ser ejercida
por (o contra) varias personas, y no solo por (o contra) alguno de ellos.

EFECTOS:
1. Los actos de impulso procesal efectuados por un litisconsorte benefician a los
restantes.
2. Las recursos interpuestos por uno de los litisconsortes aprovechan o perjudican a
los demás.
3. Los actos de disposición efectuados por uno de los litisconsortes (por Ej.:
desistimiento, allanamiento, etc) no producen sus efectos normales hasta que los
restantes litisconsortes tomen igual actitud.
4. el contenido de la sentencia debe ser el mismo para todos los litisconsortes.
5. con relación a los hechos, basta que uno solo de los litisconsortes niegue un
hecho reconocido por los demás para que sea necesaria su comprobación, pues
de lo contrario no podrá admitírselo frente a ninguno.

Litisconsorcio facultativo: es el que depende de la libre y espontánea voluntad de las


partes, y su formación puede obedecer. 1) a la existencia de un vinculo de conexión
entre distintas pretensiones (“podrán varias partes demandar o ser demandadas en un
mismo proceso cuando las pretensiones sean conexas por el titulo, o por el objeto, o por
ambos elementos a la vez”); 2) a la adhesión que un tercero puede formular respecto de

169
una pretensión ya deducida, o de la oposición a ella, en el supuesto en que, hubiese
estado legitimado para demandar o ser demandado en el juicio en el que la pretensión se
hizo valer.

Pero ya sea que existan varias pretensiones conexas, o una sola pretensión a la que
posteriormente adhiera un tercero, la característica de este tipo de litisconsorcio reside
en la circunstancia de que cada uno de los litisconsortes goza de legitimación procesal
independiente, razón por la cual tanto el resultado del proceso como el contenido de la
sentencia pueden ser distintos con respecto a cada uno de ellos.

El fundamento es evitar sentencias contradictorias y una actividad jurisdiccional


innecesaria. Por Ej. , todas las victimas de un accidente de transito pueden demandar en
un mismo proceso al autor del daño o también hacerlo cada una separadamente.

EFECTOS:
1) Cualquier acto suspensivo del procedimiento comprende a todos los demás y los
actos de impulso procesal realizados por uno de los litisconsortes benefician a
todos.
2) Los recursos interpuestos por un litisconsorte no benefician a los demás.
3) El proceso puede terminar para algunos litisconsortes y continuar para los restantes.
4) Cada uno puede oponer defensas personales.

Intervención de terceros: (R. Arazi)


En el proceso, en principio intervienen 2 partes: actor y demandado.
Pero muchas veces, durante el desarrollo de la litis, se incorporan a ella, ya sea en forma
espontánea o provocada, personas distintas de las partes originarias, a fin de hacer valer
derechos o intereses propios, pero siempre vinculados con la pretensión de una de las
partes originarias. [Tienen un interés jurídicamente relevante dentro del proceso, ya que
en virtud del proceso que se está desarrollando ven afectado sus derechos.]
Estos terceros no deben confundirse con aquellos otros totalmente desinteresados del
resultado del proceso, tal el caso de los testigos y peritos, y, en otro orden, con los
terceristas. Éstos últimos son quienes se ven afectados por un embargo decretado en un
proceso, ya sea porque el bien cautelado es de su propiedad (tercería de dominio) o
porque pretenden que con el producido de la subasta dicho bien se les pague primero a
ellos por tener un derecho preferente (tercería de mejor derecho).
El tercerista, a diferencia del tercero, carece de interés en el resultado del proceso donde
se ordenó el embargo (no tiene interés jurídico en la sentencia); su interés se encuentra
limitado a las consecuencias de tal embargo.
La intervención de terceros interesados en el resultado de un pleito en el cual no son
parte es consecuencia de los efectos de las sentencias judiciales. Éstas tienen:
· Un efecto directo: que interesa sólo a quienes fueron partes en el juicio;
· Un efecto reflejo: al incidir en otra relación jurídica distinta de la debatida en el
proceso;
· Un efecto indirecto: Finalmente, la sentencia, sin afectar otra relación jurídica, puede
incidir en el ejercicio de un derecho del cual es titular un tercero.
Un ejemplo sería: en una donación con cargo a favor de un tercero. Si el donante inicia
un juicio contra el donatario por nulidad de la donación, lo que se decida en ese juicio
puede afectar el derecho del beneficiario del cargo impuesto; es decir que, el derecho
del beneficiario está sujeto a lo que se resuelva en el respecto de la donación (efecto
reflejo). Ahora bien, en el mismo ejemplo, podría ser que un acreedor del donatario

170
viese peligrar la percepción de su crédito por la insolvencia de éste en caso de perder el
pleito (efecto indirecto). Se advierte, entonces, que no es totalmente cierto el principio
según el cual la sentencia no puede afectar a terceros que no fueron parte en el juicio.
Es decir que, al tercero que interviene en un proceso le importa la sentencia, le interesa
que gane uno u otro, porque los efectos de esa sentencia lo van a alcanzar.

Los terceros interesados pueden intervenir de diferentes formas, lo que origina las
siguientes clases de intervención (el tercero deja de ser tal para convertirse en parte
procesal):

1) Intervención voluntaria o espontánea: Esta puede ser:


a) Intervención excluyente: Exige conexidad por el objeto. En este caso, el tercero alega
un interés incompatible con el de las partes en el litigio. Por ejemplo: en el juicio entre
A y B, que discuten la propiedad de una cosa, C pretende que se dicte sentencia
declarando que dicha cosa le pertenece.
El Código de la Provincia expresa: “Quien pretenda, total o parcialmente, la cosa o el
derecho sobre que verse la litis de un proceso ya trabado entre otros puede intervenir en
éste, con carácter de parte y de acuerdo con lo establecido para la intervención
excluyente en el juicio declarativo”. Este tipo de intervención, admitida en nuestro
Código provincial, no fue incluida en el Código de Procesal de la Nación (por
considerar que puede ser fuente de situaciones complejas, que pueden ser obviadas
mediante la ‘acumulación de procesos’).

b) Intervención Litisconsorcial o Coadyuvante o Adhesiva autónoma: Exige conexidad


por el título o la causa. Se produce cuando un tercero que hubiese estado legitimado
para demandar o ser demandado en el juicio, interviene en un proceso ajeno
adhiriéndose al co-legitimado que demando o que fue demandado. Ej. Caso del
coacreedor o del codeudor solidario en el juicio en que son parte otro acreedor u otro
deudor.
En este supuesto son aplicables los conceptos de litisconsorcio “cuasinecesario” o
“cuasivoluntario”: el coacreedor que no demandó originariamente o el codeudor que no
fue demandado, se presenta y asumen el rol que podían haber tomado desde el inicio; se
transforman así en partes.
Si el tercero es un legitimado activo o pasivo, las partes principales no pueden oponerse
a su intervención: en caso de que el tercero adhiera al demandado, el actor debe acceder
a su intervención aun cuando no desee demandarlo. El ingreso al proceso deriva del
derecho de evitar una acción de regreso o de contribución que pueda ejercitar el
demandado vencido.

c) Intervención Coadyuvante simple o Adhesiva simple (o intervención asistente): No


exige conexidad sino dependencia de una relación jurídica a otra. En esta hipótesis, el
tercero interviniente debe acreditar la sentencia puede afectar su interés propio. Quien
pretende intervenir es ajeno a la relación sustancial que se ventila en el juicio pero la
decisión puede afectarlo. Por lo que puede intervenir cuando constituya condición
favorable de su derecho la sentencia que se dicte en pro del litigante a que coadyuve.
Por Ej.: el acreedor ante el juicio en el que interviene su deudor, demostrando que en la
eventualidad de que éste sea vencido, su posterior insolvencia le impedirá la percepción
del crédito. La doctrina no es unánime acerca de si este interés de mero hecho autoriza
la intervención. Pero la ley faculta al acreedor a intervenir como adherente simple en el
juicio en que interviene su deudor, al legislar sobre la acción subrogatoria.

171
En cuanto a las facultades del adherente simple: Su participación será accesoria y
subordinada a la de la parte a que apoye. Con la limitación establecida, tendrá todos los
poderes y facultades de una parte.

d) Intervención sustitúyente: sólo se admite en nuestro régimen legal de la Provincia


para el caso de que el tenedor haya sido demandado en carácter de poseedor. En tal
caso, denunciando quién es el verdadero poseedor, es sustituido por éste, sólo si
comparece a hacerse cargo del pleito (Art.535). [No se admite, por excepción se admite
éste solo caso].

2) Intervención Provocada o Necesaria: Se prefieren éstas denominaciones a la de


“obligada” ya que, en realidad, el tercero no tiene “obligación” de intervenir cuando es
citado a pedido de parte o de oficio por juez; lo hará si quiere y piensa que lo que se
debate en el proceso puede afectarlo.
Cuando se origina en una de las partes se denomina “provocada”, y si se origina en la
ley se denomina “necesaria o forzosa”.
Sucede que en estos casos, la incorporación a un proceso pendiente no se hace
espontáneamente sino respondiendo a una citación judicial, ordenada de oficio en el
caso del litisconsorcio necesario, o a pedido de partes en el mismo caso o cuando medie
conexidad entre la relación controvertida en el proceso y otra relación existente entre el
tercero y la parte que pide que se lo cite. Además de los casos que especialmente prevea
el Código.
La citación deberá pedirse al entablar la demanda o antes de oponer excepciones o al
contestarlas y el emplazamiento se realizará en la forma ordinaria. Cuando el
llamamiento se funde en la necesidad del litisconsorcio, el tercero podrá oponerse a su
intervención, en cuyo caso el incidente paralizará el procedimiento principal hasta que
sea resuelto aquél.
Ejemplo:
· ‘Denuncia de litis’: en esta hipótesis, quien pide la citación del tercero no hace valer
una pretensión, sino simplemente denuncia que la hará valer en el futuro, mediante una
acción regresiva o de contribución. El tercero citado intervendrá como adherente simple
o como litisconsorte de la parte a la que adhiere, esto ultimo solo si esta legitimado para
demandar o ser demandado.
El llamante tiene la posibilidad de repetir luego de un tercero lo que debe pagar con
motivo del pleito; la citación se efectúa con la única finalidad de evitar, en el pleito
futuro de repetición, la deducción por el tercero de la excepción negligente o de defensa
defectuosa.

· ‘Citación en garantía’: aquí también es solo el demandado quien puede requerirla,


citando a quien tiene la obligación de restituirme total o parcialmente lo que deba
entregar como consecuencia de la eventual condena que recaiga en el proceso donde se
hace la citación. En este supuesto, el demandado no se limita a denunciar que en el
futuro hará valer una pretensión contra el citado, sino que ejercita directamente la
acción regresiva para que se resuelva en ese proceso. El llamante tiene la posibilidad de
que el tercero llamado asuma en el propio pleito al cual es citado el pago de la acreencia
reclamada; la citación se efectúa con la finalidad de que el llamante se desvincule del
resultado final del pleito.

172
Citación en garantía de la ley 17.418:
En nuestro derecho la citación en garantía solo esta autorizada en el caso del seguro (Art
118 de la ley 17.418); en los demás supuestos, el demandado no esta facultado a oponer
una nueva pretensión a la del actor, salvo que lo haga contra este y siempre que se
reúnan los requisitos previstos para la admisibilidad de la reconvención.
En el llamamiento en garantía, el garante (en nuestro derecho solamente una compañía
aseguradora) es demasiado con relación a la pretensión del demandado originario, en
rigor se trataría de una acumulación, deduciéndose la segunda pretensión, para la
eventualidad de que el demandado originario sea vencido. Siendo el citado un verdadero
demandado, en caso de incomparecencia se declarara su rebeldía a pedido del citante.
Se ha producido cierto desconcierto en la doctrina y la jurisprudencia en merito a los
términos del Art 118 de la ley que impropiamente califica como citación de garantía a la
que hace el damnificado a la aseguradora: ésta debe garantizar al asegurado por el
contrato del seguro pero no tiene que “garantizar” al damnificado; en todo caso otra será
la naturaleza de la obligación entre la aseguradora del autor del daño y la victima de
este.
La Doctrina ha dicho con propiedad que la ley consagra una acción directa del
damnificado contra la aseguradora de su agresor, hasta los límites del seguro. La
segunda responde ante el primero porque así lo dispone la ley que además le acuerda la
acción para hacer efectiva esa obligación pesar de que dicha acción es directa, no es
autónoma puesto que no se puede demandar solo a la aseguradora; hay que traerla al
proceso junto con el asegurado.
La aseguradora puede intervenir de diversas maneras en el juicio entre la victima y el
autor del daño (asegurado), a saber: a) en forma voluntaria, sino es citada para prevenir
una acción regresiva de su asegurado, aun cuando ella seria improbable en merito a las
cláusulas del contrato de seguro que impone la denuncia oportuna del siniestro y del
proceso judicial.
b) como demandada del actor, o del demandado en el caso de que este ejerza la acción
regresiva en ese mismo momento mediante la citación en garantía y la aseguradora
cuestione la vigencia del seguro.

Cabe destacar que, rara vez el actor estará en condiciones de citar a alguien como
tercero; la institución está pensada para el demandado, a que el primero puede elegir a
quien habrá de demandar (salvo que exista un litisconsorcio necesario).

Intervención en juicio declarativo


Se trata del ‘procedimiento’ de los casos de intervención voluntaria:
El pedido de intervención se formulará por escrito, con los requisitos de la demanda
(Art. 130), en lo pertinente. Con éste se presentarán los documentos y demás pruebas de
los hechos que funden la solicitud. Se correrá traslado a las partes y, si hubiere
oposición, se substanciará en una sola audiencia y el fallo se dictará dentro de los 5 días
siguientes.

a) Cuando la intervención fuere coadyuvante: se tramitará unida a la acción o


excepción a que coadyuvare, sin que pueda retrogradar ni suspender el curso de la
causa.

b) Si la intervención fuere excluyente: y la causa pendiere en


· primera instancia: se suspenderá el procedimiento de ésta; se tramitará aquélla en la
forma que corresponda, hasta quedar en el mismo estado; de allí, continuarán ambas por

173
el mismo trámite y se resolverán en una sola sentencia.
· si la causa estuviere en segunda instancia: la intervención se tramitará en pieza
separada con ambos litigantes, sin suspenderse el curso de aquélla; pero no se dictará
sentencia hasta que el estado de la intervención permita pronunciar una sola.
Citación de evicción:
Habrá evicción, en virtud de una sentencia y por causa anterior o contemporánea a la
adquisición, si el adquirente por titulo oneroso fue privado en todo, o en parte del
derecho que adquirió, o sufriese una turbación de derecho en la propiedad, goce, o
posesión de la cosa.
La citación de evicción puede ser pedida tanto por el actor como por el demandado: el
primero debe hacerlo al deducir la demanda y el segundo dentro del plazo fijado para la
contestación de la demanda.
No constituye una demanda sino simplemente un aviso que se formula al citado a fin de
que, si así lo desea, tome intervención en el proceso. Por lo tanto la incomparecencia del
citado no autoriza a constituirlo en rebeldía, pero la citación basta para someterlo a las
consecuencias de una eventual sentencia condenatoria.
La citación solicitada oportunamente suspende el curso del proceso durante el plazo que
el juez fije.
Si el citado no comparece, o habiendo comparecido se resiste a asumir la defensa, el
juicio debe proseguir con quien pidió la citación.

Intervención de terceros en el cpcc de Santa Fe:


(Alvarado velloso)
LAS CLASES DE INTERVENCIÓN DE TERCEROS
Existen dos claros criterios diferenciadores acerca del tema: el primero atiende al origen
de la intervención; el segundo, a la actuación que cumple el tercero una vez que se ha
introducido al proceso.

DE ACUERDO CON SU ORIGEN:


La concurrencia de un tercero interesado a un pleito pendiente puede tener origen en:
1) la voluntad del propio ternero: recibe el nombre de intervención voluntaria;
2) la voluntad de alguna de las panas originarias, que opera aun en contra de la
voluntad del tercero: recibe el nombre de intervención provocada (también se la conoce
como obligada, coactiva o forzosa);
3) la voluntad (en rigor, disposición) de la ley, que opera por medio del juez y aun
contra la voluntad de las partes originarias y del propio tercero: recibe la denominación
de intervención necesaria (se la conoce también con las restantes designaciones de la
intervención provocada y como integración necesaria del litigio).

 INTERVENCIÓN VOLUNTARIA DE TERCEROS


Este tipo de intervención se configura mediante la inserción espontánea de un tercero a
un proceso que se encuentra pendiente, y en el cual puede actuar en alguna de las
formas, según el tipo de interés que ostente respecto de la relación litigiosa.
 INTERVENCIÓN PROVOCADA DE TERCEROS
Este tipo de intervención se configura cuando alguna de las partes originarias (o
sucesivas) de un proceso pendiente decide convocar (citar) a éste a un tercero por
considerar que la relación litigiosa entre el actor y demandado:
1) es el presupuesto de hecho de otra relación jurídica que une a uno de ellos (citante)
con el tercero (citado);

174
2) es la misma e idéntica relación que une al citado con la contraparte del citante, quien
se halla en el pleito por estar legitimado para asumir el papel de parte procesal aun en el
supuesto de no ser el responsable primario e inmediato de la obligación reclamada;
3) es de naturaleza tal que debe ser asumida por el tercero por ser el verdadero
responsable de la obligación que se demanda o por haberla garantizado, aun en el
supuesto de que él carezca de relación propia con el contrario de la parte citante;
4) es incompatible con la relación que el tercero tiene con alguna de las partes
originarias (luego ejemplificaré todos estos supuestos).
Las leyes, la doctrina y la jurisprudencia unifican a este tipo de intervención con la que
he denominado necesaria, bajo la designación de intervención coactiva u obligada.
Para Alvarado Velloso, ello no es conveniente en razón de que constituyen tipos de
intervención claramente diferenciados.
El fenómeno de que se trata: por lo pronto, el tercero no está obligadoa comparecer, de
donde resulta que no puede ser coaccionado al efecto. Se trata, simplemente, de una
carga procesal generada por virtud de la citación, cuyo incumplimiento le hará sufrir
los efectos contrarios a su interés de acuerdo con el caso de que se trate.
A su turno, la palabra forzosa, en cuanto es equipolente a coactiva, resulta inexacta por
las razones recién aludidas; y en cuanto a su parecido con la voz necesaria, también está
mal utilizada cuando se denomina con ella el supuesto de intervención provocada (que
no es necesaria).Una intervención es provocada cuando ella no depende de la voluntad
del tercero ni de la ley sino sólo de la de una de las partes originarias.
Los MEDIOS PARA PROVOCAR LA INTERVENCIÓN DE UN TERCERO:
En orden a los posibles orígenes de este tipo de intervención y a la finalidad tenida en
cuenta por quien la provoca, la doctrina mayoritaria acepta -aunque confusamente- la
existencia de dos medios: la denuncia del litigio (o denuncia de litis o litisdenuntiatio) y
la citación en garantía (o llamada en garantía), aunque a veces se da a uno los efectos
del otro y viceversa.
En general, los distintos códigos no regulan estos medios y cuando Alguno se refiere al
tema también lo hace en forma que imprime toda suerte de dudas al intérprete, lo cual
ha generado una jurisprudencia Errática que hace casi imposible lograr una adecuada
sistematización de su contenido.

LOS CASOS DE INTERVENCIÓN PROVOCADA EN ORDEN A LA


FINALIDAD QUERIDA POR LA PARTE ORIGINARIA CITANTE:
El distinto origen que pueden ostentar las posibles vinculaciones que muestra una parte
originaria con el tercero a quien decide citar al pleito pendiente, permite afirmar que la
provocación se efectúa en orden a lograr alguna de las siguientes finalidades:
1) evitar la deducción por el tercero de ciertas defensas en el juicio que eventualmente
incoará contra él;
2) lograr que el tercero asuma la defensa del citante en el pleito pendiente y que
eventualmente se haga cargo de las condenaciones que contenga la sentencia que allí se
emita;
3) lograr que el tercero sustituya al citante en el pleito pendiente;
4) lograr la deducción de la demanda que el citante teme potencialmente del tercero.

 INTERVENCIÓN NECESARIA DE TERCEROS

175
Este tipo de intervención se configura, esencialmente, cuando en un proceso pendiente
no actúan como partes originarias todos los sujetos que deben demandar o ser
demandados en orden a la legitimación imprescindible para lograr una
heterocomposición útil del litigio (para explicarlo mejor: no obstante ser partes del
conflicto, no son parles del litigio).
El caso supone la existencia de una relación jurídica material inescindible, que como tal
sólo puede ser decidida judicialmente con la presencia de todos los interesados ya que,
de lo contrario, la sentencia a dictar sería de cumplimiento imposible.
Este supuesto de intervención se diferencia claramente de la voluntaria y de la
provocada, pues el pleito que versa sobre relación jurídica inescindible no puede ser
sustanciado ni resuelto sin la citación del tercero que, debiendo haber sido actor o
demandado originario, no lo fue.
De ahí que la citación sea forzosa para el tercero y para las partes originarias y que el
juez deba efectuarla de oficio a fin de lograr una correcta integración de la relación
litigiosa.
Sin perjuicio de lo expuesto, cabe acotar para finalizar que algunas leyes ordenan este
tipo de intervención respecto de ciertas relaciones jurídicas materiales escindibles (por
ejemplo, caso de la llamada acción subrogatoria.

De acuerdo con la actuación que cumple el tercero:


 INTERVENCIÓN EXCLUYENTE DE TERCEROS
Este tipo de intervención, también denominada principal o agresiva, tiene lugar cuando
un tercero se incorpora a un proceso pendiente a fin de interponer, frente a las partes
originarias, una pretensión incompatible con la ya litigiosa, reclamando para sí total o
parcialmente la cosa o el derecho sobre el cual se litiga.
Su origen puede ser voluntario o provocado. Ejemplo del primero se encuentra en la
pretensión de reivindicación de una cosa cuya propiedad está en litigio; ejemplo del
segundo, en el proceso relativo al cobro de una suma de dinero, en el cual el tercero
invoca la titularidad del respectivo crédito (caso previsto en el art. 757, inc. 40 del Cód.
Civil argentino).

Algunos códigos procesales regulan adecuadamente este tipo de intervención. Otros, en


cambio, han omitido toda norma al respecto, estableciendo como solución al problema
de la incompatibilidad de pretensiones la vía de la acumulación de procesos en un
mismo procedimiento.
En razón de que este tipo de intervención constituye un supuesto de acumulación
sucesiva de procesos por la inserción de la pretensión de un tercero frente a las partes
originarias de un proceso pendiente, por hallarse con una de ellas en una relación
conexa por incompatibilidad de pretensiones respecto de un mismo objeto, sus
características son las siguientes:
1) la mera presentación de la demanda por el tercero implica la coexistencia de tres
pretensiones litigiosas: la ya pendiente entre las partes originarias, la del tercero contra
el actor y la del mismo tercero contra el demandado, ambos del pleito original;
2) como consecuencia de ser éste un conjunto de tres litigios con tres partes
encontradas, razones de economía y celeridad procesal indican la conveniencia (nunca
la necesidad) de dictar un pronunciamiento judicial único respecto de las tres relaciones;
y
3) como última característica, afirma la doctrina generalizada que, ante una intervención
excluyente, las partes originarias se colocan automáticamente en una relación

176
litisconsorcial. Aunque antes de ahora he sostenido tal criterio, un renovado planteo del
tema hace que hoy crea que aquél no es exacto.
Por lo pronto, para que exista una relación litisconsorcial es imprescindible que entre
diversas pretensiones se presente una conexidad del hecho causal (lo cual acaece en los
supuestos de conexidad causal, de conexidad mixta objetivo-causal y de afinidad), cosa
que obviamente no ocurre en el caso tratado, donde sólo se advierte la existencia de una
conexidad objetiva.
Además, por simple razonamiento lógico —y sin que ello implique una regla absoluta
en los hechos— la relación litisconsorcial supone una coordinación de intereses entre
los distintos litisconsortes, cosa que tampoco se presenta aquí toda vez que las parles
originarias actúan con intereses contrapuestos antes, durante y después de la
intervención: siempre son partes contrarias.
Por último, si no se acepta esto y se insiste caprichosamente en que son litisconsortes
frente a un tercero que los ataca, queda un problema sin posibilidad de solución. Y es
que si en pleito propuesto por el tercero, una de las partes antagónicas originarías (en
relación litisconsorcial con su contraria) desea provocar la declaración de la otra, no se
puede saber cuál es el medio apto para ello: la absolución de posiciones o el testimonio.
Y ello es así porque las posiciones sólo se admiten entre partes contrarias y, por tanto,
serian inadmisibles entre quienes militan en el mismo bando procesal.

 LA INTERVENCIÓN COADYUVANTE DE TERCEROS


Este tipo de intervención -denominada también intervención coadyuvante
litisconsorcial o adhesiva autónoma- es la que cabe al tercero cuando ingresa al proceso
pendiente con el objeto de hacer valer un derecho propio frente a una de las partes
originarias, adhiriendo simultáneamente a la calidad (actora o demandada) de la otra.
Puede tener origen voluntario o provocado por el actor o por el demandado y siempre
por existir en el caso un grado de afectación inmediata directa por identidad del hecho
causal.
Ejemplos de esta clase de intervención pueden verse: en el caso del codeudor solidario
no demandado que se introduce al proceso; en el del coacreedor que no demandó; en el
del pariente de un cónyuge con derecho a oponerse al matrimonio, que interviene en el
proceso incoado por otro pariente tendiente a obtener la nulidad de aquél.

Las características de este tipo de intervención son las siguientes:


1) la mera inserción en el proceso pendiente otorga al tercero, sin lugar a dudas, la
calidad de parte (sucesiva) autónoma que actúa en coordinación de intereses con
aquella a quien coadyuva. Y como consecuencia de la conexión del hecho causal que
siempre existe en este tipo de intervención, coadyuvante y coadyuvado se colocan
automáticamente en relación litisconsorcial teniendo corno efecto principal el que la
sentencia que se dicte sea igual en cuanto al hecho causal respecto de todos los
litisconsortes;
2) la presencia del tercero en el pleito pendiente origina la existencia de dos relaciones
litigiosas ( la del actor con el demandado originario y la del mismo actor con el tercero
coadyuvante que asume la condición de demandado sucesivo), razón por la cual -y esto
no es pacífico en la doctrina ni en la jurisprudencia- la sentencia que se dicte acerca de
aquéllas debe mencionarlo en forma expresa, absolviéndolo o condenándolo si ostenta
el carácter de demandado y acogiendo o rechazando su pretensión si adopta el carácter
de demandante.

 LA INTERVENCIÓN ASISTENTE DE TERCEROS

177
Este tipo de intervención -denominada también intervención adhesiva simple- se
verifica cuando un tercero, en razón de tener un interés jurídico inmediato indirecto en
el resultado de la relación litigiosa (por ser su propia relación dependiente o
condicionada por aquélla) se inserta en un proceso pendiente en apoyo de una de las
partes y sin pretensión propia contra la otra.
Esto ocurre por cuanto la relación que une a los litigantes originarios es condicionante
(o primaria) respecto de la relación que alguno de ellos tiene con el tercero, la cual es
condicionada (o secundaría), nunca accesoria.
De tal modo, el presupuesto de hecho de la justiciabilidad de la relación condicionada es
el resultado al cual se arriba en la solución de la relación condicionante. Un claro
ejemplo de ello puede verse en la relación acreedor-deudor-fiador simple: la obligación
de éste sólo será exigible luego de que sea declarada la responsabilidad del deudor y de
que se hayan excutido sus bienes. Recién ahora —y no antes— se da la condición
necesaria para que pueda operar en forma directa la relación secundaria acreedor-fiador.
para distinguir cabalmente las intervenciones coadyuvante (llamada casi siempre por la
ley adhesiva autónoma) y asistente (siempre denominada adhesiva simple), deba
formularse una regla que me parece sencilla: en cualquier caso justiciable en el cual
intenta insertarse un tercero, debe analizarse su propia legitimación: si pudo ser actor o
demandado originario y no lo fue, su intervención será coadyuvante, ya que ostenta un
derecho propio para defender en el proceso pendiente; por lo contrario, si no pudo ser
actor o demandado originario (pues su relación es secundaria y no primaria) su
intervención será asistente, ya que no ostenta un derecho sino un simple interés jurídico
para defender en el pleito, intentando mejorar su eventual derecho. Como es obvio, estas
distintas legitimaciones deben ser extraídas de la normativa de fondo y no de la
procesal.
A la intervención asistente puede llegarse de dos formas: por inserción voluntaria del
tercero y por provocación (por el medio técnico denominado denuncia del litigio, que
sólo puede efectuar el actor (y nunca el demandado).

 LA INTERVENCIÓN SUSTIUYENTE DE TERCEROS


Este tipo de intervención tiene lugar cuando el tercero concurre al proceso porque se
halla vinculado con alguna de las partes originarias por medio de una relación que: 1) lo
legitima para demandar a nombre propio a base del derecho no ejercido por su titular o,
2) que lo legitima para asumir en forma personal el carácter de demandado sucesivo o
principal por adeudarle al demandado originario una garantía legal o convencional. En
otras palabras: la asunción por el tercero del carácter de parte procesal desplaza
(extromite) al legitimado originario que, así, es sustituido por aquél.
Ejemplo del primer caso es la llamada acción subrogatoria; del segundo, la citación de
evicción.
Las características de este tipo de intervención difieren en uno y otro caso:
1) en el primero: la sustitución es siempre voluntaria y se refiere exclusivamente a la
calidad de actor (nunca a la de demandado) a efecto de incoar y, en su caso, continuar el
desarrollo del proceso. A tal fin, es la parte originaria y, como tal ostenta todas las
facultades y la autonomía propia de ella, salvo que acaezca la siguiente característica:
operada la sustitución (es decir, el sustituyente-actor demanda al deudor de su deudor
ante la inercia de aquél) siempre es facultad legal del sustituido (deudor del actor)
reemplazar a la persona del sustituyente, asumiendo personalmente la calidad de actor
en el proceso ya pendiente. Sin embargo, el reemplazo no es total ya que la parte
sustituyente no debe alejarse necesariamente del pleito —aunque puede extromitirse,

178
cosa que no le conviene— en el cual puede permanecer pero en otro carácter: el de
asistente.
2) en el segundo: la sustitución puede ser voluntaria o provocada sólo por el
demandado y se refiere exclusivamente a la calidad de éste (nunca a la del actor) a
efecto de continuar el desarrollo del proceso (nunca de incoarlo) con todas las
facultades y la autonomía de aquélla;
Tercerías:
Concepto: pretensión en cuya virtud una persona distinta a las partes intervinientes es
un determinado proceso, reclama el levantamiento de un embargo trabado en dicho
proceso sobre un bien de su propiedad, o el pago preferencial de un crédito con el
producido de la venta de un bien embargado.
Tercería en juicio ejecutivo:
Los casos de intervención de terceros difieren de los de tercerías en que: en aquellos, el
tercero interviene en la discusión de la relación litigiosa; en éstos no: sólo se limita a
pretender el desembargo de una cosa o a percibir su crédito en forma preferencial.
El presupuesto es, entonces, un bien cautelado; la traba de un embargo es requisito
esencial para que pueda deducirse una tercería (no es suficiente que se lo haya ordenado
si no ha sido efectivamente trabado). Por eso nuestro Código de procedimientos habla
de “Tercerías en juicio ejecutivo”, porque supone que para que exista una tercería tiene
que haber un bien cautelado; pero puede darse tanto en juicios de conocimiento como
ejecutivos. Pueden deducirse en todo tipo de juicio donde se haya trabado un embargo.
De allí las 2 clases de tercerías:
1) De Dominio: Esta se funda en la propiedad de los bienes embargado, a fin de obtener
el levantamiento del embargo indebidamente trabado; se trata del ejercicio de la acción
reivindicatoria por encontrarse afectados los derechos del dueño. Dicho de otro modo:
la tercería de dominio tiene por objeto la protección de un derecho real invocado por su
titular, siempre que la integridad de ese derecho se encuentre afectada como
consecuencia de un embargo. Incumbe al tercerista la carga de acreditar
fehacientemente la titularidad de dominio que invoca o la posesión de la cosa
embargada.
2) De mejor derecho: En esta, el tercerista pretende que su crédito se declare de pago
preferente y, por lo tanto, que con el producto de la venta del bien embargado se le
abone antes que al embargante.

- Trámite:
El Código prescribe que: Las tercerías que se deduzcan en juicio ejecutivo, se
substanciarán en piezas separadas, con el ejecutante y el ejecutado, por el ‘trámite del
juicio declarativo’ que corresponda, sin suspenderse el juicio ejecutivo.
· Si la tercería fuese de dominio o de posesión: se suspenderá la ejecución de la
sentencia de remate hasta que aquélla se resuelva siempre que los recaudos
acompañados por el tercerista justifiquen prima facie el derecho invocado (verosimilitud
del derecho) o se preste fianza bastante para responder de los perjuicios que la
suspensión irrogue.
La tercería de dominio deberá iniciarse dentro de los 15 días de la traba del
embargo o desde que el interesado tuvo noticia de ella o desde que se rechazó el pedido
de levantamiento liso y llano del embargo so pena de abonar las costas por su
presentación tardía. No se refiere esto a las costas totales del juicio de tercería, sino
solo a las ocasionadas por su presentación tardía.

179
· Si la tercería fuese de mejor derecho: se ejecutará la sentencia hasta la realización de
los bienes embargados, y se suspenderá el pago mientras aquélla se decida, aunque éste
se solicite bajo la responsabilidad de los acreedores o con fianza.
El tercerista de mejor derecho es parte en las actuaciones relativas al remate de
los bienes.
En uno y otro caso, si la tercería se tramitare ante un juez de mayor jurisdicción
(referido a la competencia por valor) que el del juicio principal, la suspensión se
ordenará por oficio.
* Nota: A estos efectos, el secuestro debe asimilarse al embargo.

- Levantamiento del embargo sin tercería:


El Cód. Prescribe que: El tercero perjudicado por un embargo tendrá derecho a
requerir su “levantamiento liso y llano” comprobando de inmediato su posesión actual.
Esta gestión se resolverá previo traslado al embargante. La decisión será irrecurrible
para el tercero y no afectará su derecho a deducir la tercería pertinente.
Se trata de una autorización a un ‘procedimiento previo’ a la deducción de
tercerías, optativo para el tercerista, que se sustancia mediante un simple traslado.

El tercero puede pedir el levantamiento del embargo sin promover tercería,


acompañando el título de dominio u ofreciendo información sumaria sobre su posesión,
según la naturaleza de los bienes. Es decir que, quien pudiera probar ser el titular de la
cosa, podrá pedir al juez que directamente se expida desafectando la cosa.
Es que cuando el derecho del peticionario sea tan evidente que baste con exhibir
sus títulos para que quede acreditado sin lugar a dudas, resulta contrario a elementales
normas de economía imponerle la carga de deducir la tercería.
Se sustancia únicamente mediante un simple traslado al embargante. En la
mayoría de los casos el embargante, ante el traslado que se le da de la presentación del
tercero, presta su conformidad para el levantamiento del embargo.
El levantamiento de embargo sin tercería no es susceptible de apertura a prueba,
ya que sólo será viable cuando se acompañen con la petición elementos de certeza en
cuanto al dominio invocado.
La resolución que recaiga en el pedido de levantamiento sin tercería sólo es
recurrible cuando hace lugar al desembargo. Si lo deniega, es irrecurrible; pero el
interesado puede deducir directamente la tercería (dentro de los 15 días).
Acción subrogatoria:
El CC, después de consagrar el principio de que los contratos no perjudican ni
aprovechan a terceros, dispone que: “Sin embargo, los acreedores pueden ejercer todos
los derechos y acciones de su deudor, con excepción de los que sean inherente a su
persona”. Esta facultad se conoce como: acción indirecta, oblicua o subrogatoria.
El Cód de procedimientos de la Prov. establece que la acción indirecta se substanciará
por el trámite que corresponda a la naturaleza y valor de las obligaciones que se
atribuyan al demandado.
El acreedor que promueve una demanda en nombre de su deudor tiene una legitimación
subordinada a la actuación de éste; por ello, el deudor será citado y emplazado al mismo
tiempo que el demandado, y antes de correr traslado de la demanda al demandado, el
deudor podrá:
1) Si comparece: su le corre traslado durante un término en el cual, sin perjuicio de las
defensas de fondo, podrá:

180
· formular oposición manifestando haber ya iniciado la misma acción (es decir: que ya
interpuso la demanda), en cuyo caso el artículo se substanciará y decidirá como las
excepciones dilatorias; o
· ejercer la acción personalmente mediante la presentación de la respectiva demanda (es
decir: interponer la demanda). En este caso, se le considerará como actor, y se seguirá el
juicio con el demandado.
En estos casos, el acreedor continuará interviniendo en la forma prescripta para los
terceros coadyuvantes.
2) Si comparece pero no hace uso de ninguno de esos derechos: se le dará en lo
sucesivo la participación que corresponde a los terceros coadyuvantes.
3) Si no comparece: se seguirá el juicio sin su intervención.
En estos 2 últimos casos, queda obligado a: absolver posiciones, reconocer documentos
y prestar la colaboración necesaria, con los mismos efectos y apercibimientos que las
partes. La sentencia que se dicte hará cosa juzgada a favor o en su contra de todos los
que hayan intervenido.
Para su ejercicio deben cumplirse los siguientes requisitos:
a. Insolvencia del deudor: pues si es solvente la acción subrogatoria es improcedente
porque quien la intente carecerá de interés para hacerlo;
b. Inacción o negligencia del deudor en el ejercicio del derecho;
c. Calidad de acreedor en el subrogante y que el crédito invocado sea cierto y exigible;
d. Que el deudor no haya sido declarado en quiebra, porque en tal caso, las acciones
debe iniciarlas el síndico.
Mediante el ejercicio de la acción subrogatoria, el acreedor no cobra
directamente su crédito; en caso de vencer en el juicio ello sólo importará incorporar
bienes al patrimonio de su deudor para luego poder ejercer sus acciones contra éste.
Citación de saneamiento.
En la Sección “Citación de Saneamiento” el Código regula el procedimiento de
la intervención provocada.
Tanto el demandante como el demandado podrán solicitar la citación de saneamiento. El
demandante podrá hacerlo al entablar la demanda o antes de deducirla; y el demandado,
dentro del término para contestarla.
El decreto que ordene la citación se dictará sin ningún trámite y será notificado. La no el
término ni la tramitación de las excepciones dilatorias.
Si el citado no compareciere o si compareciendo se resistiera a tomar la defensa de la
causa, se la seguirá con el que pidió la citación, salvo los derechos de éste contra aquél.
Las dos partes, no obstante la continuación del juicio, podrán seguir haciendo las
gestiones necesarias para el comparendo del citado.
Si éste compareciere tomará la causa en el estado en que la encuentre. El citado podrá
oponer en la contestación las excepciones dilatorias que no hubieren sido puestas como
artículo previo.
Si el citado pretendiere citar a su vez a su causante, podrá hacerlo dentro de los 5 días
siguientes al de su comparendo, sin perjuicio de la obligación de seguir la causa por si
mismo. En las mismas condiciones podrá cada uno de los causantes hacer citar a su
causante respectivo.
Será ineficaz la citación que se hiciere sin la antelación necesaria para que el citado
pueda comparecer antes de la sentencia de primera instancia.
Es lícito solicitar a la vez la citación de 2 o más de los causantes en la cosa litigiosa.
Alcance de la sentencia: en todos los supuestos después de la intervención del tercero,
o de su citación en su caso, la sentencia dictada obliga a los terceros como a los
principales.

181
Bolilla XIV
Por: Juan Manuel Carbone y Maria Cecilia Borda Arcati.

MEDIDAS CAUTELARES
CONCEPTO, DENOMINACION Y FINALIDAD.
Las medidas cautelares o precautorias son aquellas que se ordenan con el fin de asegurar
el derecho de alguna de las partes y la eficacia de la sentencia definitiva.
A veces, se dan situaciones que pueden poner en peligro el derecho de las partes o la
eficacia de la sentencia que se dicte, tal el caso de: la desaparición de pruebas
indispensables para el juicio; la desaparición de bienes; la disminución patrimonial del
deudor; el peligro de daño para bienes o personas; etc.
Para evitar estos peligros, se instituyen medidas cautelares, tales como el embargo
preventivo, el secuestro de bienes, la prohibición de innovar y otras.
También pueden definirse diciendo: Son actos procesales (siempre se producen dentro
de un proceso) emanados del órgano jurisdiccional (no existen cautelares que no
emanen de un juez) adoptados ‘antes o durante’ el transcurso de un proceso de cualquier
tipo (funcionan para cualquier juicio), a pedido de parte interesada o de oficio (por ej.
en los procesos de familia se dictan de oficio), tendientes a asegurar pruebas o bienes o
a mantener situaciones de hecho, o para seguridad de las personas, o para satisfacción
de las necesidades más urgentes.
Si se adopta antes: hay un plazo de 15 días para interponer la demanda, caso contrario la
medida caduca. Incluso puede adoptarse luego de dictada la sentencia, para evitar el
menoscabo del derecho hasta que ésta se ejecute.
Según sea el aspecto que se intenta destacar, se ha denominado ‘pretensión
cautelar’ o conservativa (resaltando la petición de la parte que las solicita);
procedimiento cautelar (sobre la base de la forma de tramitarlas) y sentencia cautelar
(teniendo en cuenta la resolución que se dicta).
Puede hablarse indistintamente de “cautelares” o “precautorias”, ya que tanto
una voz como la otra denotan la idea de prevención; significan prevenir un daño
prevenir un daño, evitarlo. El peticionario intenta precaverse ante la posibilidad de que
la sentencia a dictarse en un futuro sea de imposible cumplimiento.
Para las medidas cautelares en general es competente el juez a quien corresponde el
conocimiento del pleito principal.
La decisión que recae sobre las medidas es apelable (sólo en efecto devolutivo si
las ordena), previa deducción de revocatoria.

CARACTERES.
a) Se ordenan sin oír previamente a la otra parte (“inaudita altera pars”): Se
decretan sin traslado a la otra parte, la cual no se va a poder enterar a priori de las

182
medidas. El juez funda su decisión en los hechos que afirma y acredita el peticionario.
Por ello, y a fin de preservar la igualdad de los litigantes, se exige de aquel una
“contracautela”.
No es bilateral: Efectivizada la medida, hay que notificar a la otra parte. Es por
esto que la bilateralidad no está eliminada, sino sólo postergada para una vez que se
cumpla la medida ordenada. El perjudicado por ella podrá, entonces, pedir la revisión
mediante los recursos correspondientes.

b) Son Provisionales: sólo se mantendrán mientras cumplan con su función de


aseguramiento. Una vez ordenadas, el juez, al oír a la contraria, puede revocar su
decisión; lo mismo puede hacer la Cámara de Apelaciones si el afectado recurre por
apelación.
c) Son mutables: Puede ser modificada la medida o dejada sin efecto en cualquier
momento del proceso si cambian las circunstancias que se tuvieron en cuenta al
decretarla.

d) Son Temporales: tienen una duración limitada al proceso principal.

e) Son Variables: Pueden ser modificadas, sustituidas o alzadas si cambian los


presupuestos que justificaron su adopción.

f) Son accesorias: En principio, no tienen un fin en sí mismas. Su existencia depende


de las contingencias del proceso principal.
Si fueron ordenadas y hechas efectivas antes del proceso principal y se trata de
obligaciones exigibles, la demanda debe interponerse dentro del plazo de 15 días a
contar desde su traba, caso contrario se produce la caducidad de pleno derecho de las
medidas cautelares.

CLASIFICACION.
Existen distintos criterios para clasificar las medidas cautelares:
1) Según la forma en que estén legisladas: Nominadas o Genéricas.

2) Según la forma de tramitarse:


· Dentro del proceso principal;
· Autónomamente: antes o después de iniciado el proceso principal.

3) Según la finalidad que persiguen:


· De aseguramiento de la futura ejecución forzada (ej. embargo preventivo, secuestro);
· Resoluciones dictadas interinamente para evitar daños irreparables por el transcurso
del tiempo (ej. protección de personas).

4) Según sus efectos sobre la situación planteada, se habla de:


· Proceso cautelar conservativo: cuando la medida tiende al mantenimiento del estado
de hecho; y de
· Proceso cautelar innovativo: cuando el litigio es provisionalmente arreglado mediante
la alteración y no mediante el mantenimiento del estado de hecho.

5) Según lo se intenta proteger:


Las medidas cautelares autorizadas por el Código de Procedimientos son:

183
1) Medidas para asegurar bienes. Todo aquel que inicie un juicio relativo a bienes
inmuebles, podrá pedir que se inscriban como litigiosos en el registro general, dando
fianza bastante por los daños que pudiere causar. (Ej: embargo preventivo, secuestro,
prohibición de innovar, prohibición de contratar, anotación de litis, intervención y
administración judicial). (Art.276)

2) Medidas para asegurar elementos probatorios. Sin perjuicio de las medidas


autorizadas por el art.390, los que sean o vayan a ser partes en un proceso y tengan
motivo para temer que la producción de las pruebas que le sean necesarias se haga
difícil o imposible por el transcurso del tiempo pueden solicitar el aseguramiento de
dichas pruebas (art. 272)
.
3) Medidas para asegurar personas (Ver art. 291). De la nomina de requisitos
genéricos de todas las medidas cautelares, el deposito de personas solo requiere la
existencia de peligro en la demora. (Ej.: guarda de una persona o satisfacción de sus
necesidades urgentes).

4) Deposito de cosas. Siempre que una persona tenga interés en depositar judicialmente
una cosa por cuenta de un tercero, el juez lo ordenará, bajo inventario y en persona de
responsabilidad, con citación del tercero si estuviese en el lugar del juicio o del agente
fiscal, en su defecto. El inventario será hecho por el actuario o por perito nombrado por
el juez y expresará la calidad y el estado de los objetos depositados. Si el solicitante no
estuviere conforme, el juez, previo un reconocimiento o las diligencias que estimare
oportunas, hará la declaración correspondiente, sin lugar a recurso alguno. (Art. 298)

El Código Procesal legisla sobre las siguientes medidas cautelares:

1) Embargo preventivo (art. 277/287) y ejecutivo (art. 452/456)


2) Secuestro (art.288)
3) Intervención judicial (art.465/467)
4) Inhibición general de bienes (art. 290)
5) Deposito de cosas (art.298)
6) Exhibición y eventual secuestro de la cosa mueble sobre la cual versara el pleito
(art.390,3)
7) Arraigo (art.329)
8) Anotación de bien inmueble como litigioso (art.276)
9) Fijación de cuota provisoria de alimentos y litisexpensas (art.531)
10) Autorización de servidumbre predial cuyo ejercicio fuere urgente (art.391)
11) Designación de administrador en juicio sucesorio (art. 594)
12) Prohibición de innovar (art.289)

Las medidas cautelares genéricas o "innominadas" son aquellas que se pueden solicitar
al juez cuando las medidas cautelares contempladas en la ley, no fuesen lo
suficientemente aptas para asegurar el cumplimiento de la sentencia. Ej: restitución de
una cosa de inmediato; clausura de un lugar; medidas de seguridad edilicia, por temor a
que de un edificio u otra cosa derive un daño; suspensión de la inscripción de una
declaratoria de herederos, etc.

PRESUPUESTOS DE LAS MEDIDAS CAUTELARES.

184
1) Que exista una situación tutelable, en función de la pretensión que se está
ejercitando en el proceso.

2) Verosimilitud del derecho. El derecho que el solicitante de la medida invoca debe


ser verosímil. No es necesaria una prueba terminante (porque ello implicaría mucha
demora), basta que a primera vista parezca que el solicitante tiene derecho (apariencia
de buen derecho), lo cual generalmente se logra ofreciendo la declaración de varios
testigos.

3) Temor fundado o peligro en la demora. Debe existir temor fundado de que el


derecho del solicitante pueda sufrir un perjuicio inminente e irreparable si no se ordena
la medida cautelar de inmediato. Ej: existe temor fundado si el deudor está demente, o si
está ocultando bienes para insolventarse.

4) Contracautela del que solicita la medida. Dado que las medidas cautelares se
decretan sin que el solicitante pruebe plenamente su derecho (basta la verosimilitud) sin
la intervención de la otra parte (inaudita parte), puede suceder que el solicitante haya
pedido la medida indebidamente, es decir, sin derecho. Por ello, el Código establece que
quien pida la medida debe dar caución (fianza) para responder por las costas, daños y
perjuicios que pudiese ocasionar a la otra parte. La calidad y monto de la caución queda
a criterio del juez, y podrá ser: a) Real (dinero, valores, bienes; b) Personal (alguien -de
acreditada responsabilidad económica o un banco- saldrá de fiador); c) Juratoria (el
solicitante jura hacerse responsable).
Si se prueba sumariamente que la caución es insuficiente se puede pedir que ella se
mejore. No se le exige caución a la Nación, las provincias, sus reparticiones, las
municipalidades, las persona que justifiquen ser reconocidamente abonadas, ni a los que
actuaren con "beneficio de litigar sin gastos".

Criterio-del-juez
El juez debe obrar con prudencia pero rápidamente y con un criterio realista.

EL PROCEDIMIENTO CAUTELAR:

Oportunidad para pedirlas. Las medidas cautelares pueden solicitarse antes o después
de deducida la demanda, a menos que de la ley resulte que debe entablarse previamente
(art. 195).

Contenido del escrito. El escrito en el que se solicite la medida cautelar deberá


expresar:
a) el derecho que se pretende asegurar (Ej.: crédito contra el deudor);
b) la medida cautelar que se pide (Ej.: embargo preventivo);
c) la disposición de la ley en que se funde (Ej.: en los arts. 63 y 212 inc.1);
d) el cumplimiento de los requisitos que corresponden, en particular, de la medida
requerida.

RECURSOS CONTRA LAS MEDIDAS CAUTELARES.


La resolución que admite o deniega una medida cautelar puede ser objeto del recurso de
reposición y de apelación.
La apelación tiene efecto devolutivo, o sea, que la interposición del recurso no suspende
el cumplimiento de la medida cautelar.

185
JUEZ COMPETENTE.
Será juez competente "el que deba conocer en el proceso principal". Si un juez no es
competente debe abstenerse de dictar una medida precautoria. Sin embargo, si un juez
incompetente ordena una medida cautelar ella igual será válida (si reunió todos sus
requisitos), pero no prorrogará su competencia. El juez que decretó la medida,
inmediatamente después de requerido remitirá las actuaciones al que sea competente
(conf. art. 196). Concordante con esto, si se declara la incompetencia en un juicio
ejecutivo, el embargo trabado se mantiene, con carácter preventivo, durante 15 días
(conf. art. 546).

FACULTADES DEL JUEZ RESPECTO DE LA MEDIDAS CAUTELARES.


En general, las facultades que se conceden al juez respecto de las medidas cautelares
tienden a evitar perjuicios innecesarios para el titular de lo bienes. Así, según, los casos,
el juez podrá cambiar la medida pedida por otra, podrá limitarla, podrá ordenar la venta
de los bienes cuando sean de difícil o costosa conservación, etc. (conf. arts. 205 y 206).

CAUCIONES:
Caución significa generalmente cualquiera obligación que se contrae para la seguridad
de otra obligación propia o ajena. Son especies de caución la fianza, la hipoteca y la
prenda.

TUTELAS DIFERENCIADAS:Las tutelas diferencias aluden a técnicas procesales y


orgánico -funcionales que se justifican como mecanismos de protección determinados
por el derecho involucrado (o por los particulares de la pretensión esgrimida). Los
procesos calificados como de tutelas diferenciadas se orientan a prescindir de la
consabida lentitud y disfuncionalidad del proceso ordinario teniendo por finalidad la
tutela judicial efectiva de los derechos. Se trata de una alternativa excepcional que no
implica el abandono del proceso ordinario. Se coincidió en que sus rasgos
caracterizantes son, entre otros, los siguientes:

a) Rol activo del juez en orden a la dirección del proceso;


b) Flexibilización de la regla de la congruencia; y
c) Determinación del tipo de proceso como atribución
judicial.

TUTELA ANTICIPADA:La tutela anticipada es una de las tutelas diferenciada “de


urgencia” que, con base en una cognición sumaria y llenado los requisitos de
procedencia, satisface anticipadamente al requirente su pretensión, otorgándole una
atribución o utilidad que pudiera probablemente obtener en la sentencia futura con
autoridad de cosa juzgada material. Anticipación significa coincidencia total o parcial
con lo pretendido en la demanda, vale decir: identidad objetiva.

La tutela susceptible de ser anticipada es aquella constitutiva del pedido formulado en


inicio, que puede ser anticipada en todo o en parte y aquí hay una absoluta identidad
entre la tutela pasible de anticipación y el pedido efectuado por el actor, y no puede el
juez pronunciarse ni ultra ni extra petita. Como consecuencia de ello y por aplicación
del principio de congruencia que vincula necesariamente el contenido del pedido y la
sentencia –de observancia imprescindible para la anticipación de tutela-, hace que no

186
proceda su reemplazo por una tutela diferente a la pedida, lo cual implica que no rige a
su respecto la condición de medidas mutables o flexibles.

Cabe también señalar que esta medida no se decreta “inaudita parte”, sino, por el
contrario, luego de trabada la litis.

Por último debe destacarse que para decretarlas se requiere que haya apariencia de daño
irreparable o de difícil reparación y habrá también probabilidad de ineficacia de la
sentencia final. Es decir que, a diferencia de las cautelares típicas, no requiere sólo un
grado de apariencia, ni tampoco el grado de certeza como sucede en la sentencia
definitiva, sino que es menester un estado de conocimiento intermedio que se ha dado
en llamar “certeza provisional”.

MEDIDAS AUTOSATISFACTIVAS Y LAS CAUTELARES.

Peyrano las conceptualiza como "soluciones jurisdiccionales urgentes, autónomas,


despachables "inaudita et altera pars" y mediando una fuerte probabilidad de que los
planteos formulados sean atendibles. Las mismas importan una satisfacción definitiva
de los requerimientos de los postulantes, motivos por el cual se sostiene que son
autónomas, no dependiendo su vigencia y mantenimiento de la interposición coetánea o
ulterior de una pretensión principal" como si requieren las medidas cautelares.

Las medidas autosatisfactivas tiene muchos puntos de conexión con las medidas
cautelares pero que es menester separarlas para determinar que son institutos procesales
diferentes.

Las medidas cautelares son instrumentales, provisionales, mutables o flexibles, se


disponen inaudita parte (sin substanciación), el conocimiento para decretarlas es en
grado de apariencia –no de certeza-, producen efectos de cosa juzgada material, no
causan instancia, su acogimiento no configura prejuzgamiento, no tiene incidencia
directa sobre la relación procesal, son de ejecutabilidad inmediata y reviste carácter
urgente.

EMBARGO:

Embargo Preventivo: El embargo es la medida cautelar en virtud de la cual se grava


una cosa de manera tal que los terceros puedan saber que está afectada al juicio. Puede
recaer sobre muebles o inmuebles.
El embargo puede ser:
· ‘preventivo’: cuando su fin es asegurar los bienes durante la tramitación del juicio.
Procura prevenir un daño y se anticipa al reconocimiento del derecho que asegura;
· ‘ejecutivo’: se otorga al acreedor de una obligación documentada en un título que trae
aparejada ejecución;
· ‘ejecutorio’: se decreta en el trámite de cumplimiento de una sentencia firme. Tanto el
embargo preventivo como el ejecutivo pueden transformase en ejecutorio, una vez que
se reconozca el derecho del actor mediante el pronunciamiento de la sentencia definitiva
en el juicio de conocimiento, o cuando debe cumplirse la sentencia que manda llevar
adelante la ejecución.

187
En el embargo preventivo, se afectan uno o varios bienes de quien es o vaya a
ser demandado en un proceso a fin de asegurar la eficacia de la sentencia que en tales
procesos se dicten. Arazi define al ‘embargo preventivo’ diciendo que: constituye la
individualización y afectación de determinados bienes a un proceso, de conformidad
con una decisión judicial. Presupone la existencia de un crédito, cuyo pago se ha
reclamado judicialmente (es un juicio relativo a derechos patrimoniales).

Venta de bienes embargados: El Código Civil permite la enajenación de bienes


embargados siempre que se oculte la existencia de la medida. Pero esa enajenación no
puede ocasionarle perjuicio al embargante; la cautela sigue como gravamen al tercer
adquirente de la cosa afectada, quien sufre los efectos del embargo.

Oportunidad para interponer el embargo preventivo: En cualquier estado de la causa y


aún antes de la demanda podrá el acreedor pedir el embargo preventivo de bienes del
deudor con la sola condición de prestar fianza para cubrir los daños si resultase que fue
solicitado sin derecho. Deberá justificarse la solvencia del fiador propuesto.
Pero: Todos aquellos a quienes las leyes de fondo acuerdan privilegio sobre
ciertos bienes pueden pedir sobre ellos el embargo preventivo sin necesidad de fianza,
acreditando sumariamente su calidad de tales respecto de la persona contra quien se
solicita y justificando, además, que los bienes de que se trata están afectados al
privilegio. Procederá, igualmente, el embargo preventivo sin necesidad de fianza en
favor del tenedor de una letra de cambio extraviada o perdida, fijando el juez según las
circunstancias el plazo que debe durar.
No obstante esos casos, hay otros que además de contracautela se requiere:
· Si se pidiese el embargo para hacer efectivo el cumplimiento de un contrato bilateral,
el solicitante deberá, además, acreditar que ya lo ha cumplido por su parte o prestar
fianza de que lo cumplirá.
· Si el embargo se pide en virtud de deuda sujeta a condición o pendiente de plazo, el
que lo solicite deberá acreditar sumariamente que el deudor trata de enajenar, ocultar o
transportar sus bienes o que ha disminuido notablemente su responsabilidad después de
contraída la obligación.
Cabe señalar que: Podrán pedir embargo preventivo, acreditando su carácter, el
cónyuge, el coheredero, el comunero y el socio, sobre los bienes gananciales, de la
sociedad, de la herencia o del condominio.

Procedimiento: Con excepción de la intimación previa de pago, que no procede en el


embargo preventivo, se aplica a este lo dispuesto en el juicio ejecutivo.
En todos los casos, después de trabado el embargo se hará saber al embargado.
El ‘acta de embargo’ que confeccionen los oficiales de justicia deberán
preferentemente tener en cuenta las características del bien que se embarga,
numeración, marca, estado, tamaño aproximado en caso de muebles y número de serie
cuando se trate de motores.

Cuando el embargo se trabe sobre bienes que pueden deteriorarse o que sean de
difícil o costosa conservación, puede peticionarse su venta en remate público.
El embargo preventivo debe limitarse a los bienes necesarios para cubrir la deuda, sus
intereses y costas estimadas provisoriamente. Puede ampliarse: en caso de interposición
de tercería y cuando los bienes embargados resulten insuficientes.
Y en caso de no conocerse bienes libres del deudor para trabar embargo sobre
ellos o éstos no alcanzan, procede la ‘inhibición general de bienes’.

188
Por regla, la competencia le corresponde al juez del proceso principal. Pero, en casos de
urgencia, podrá ser decretado el embargo preventivo por juez incompetente siempre que
por razón de la cantidad no se excediera de su competencia.
En todos los casos en que el embargo no recaiga sobre bienes en que las leyes acuerden
privilegio especiales, podrá ser sustituido, a solicitud del deudor o del tercerista, por
fianza equivalente al capital demandado, intereses y costas provisoriamente estimados.
La incidencia se substanciará por el trámite del juicio sumarísimo.

Prioridad del primer embargante: El embargo tiene un orden de prelación (hay que
llegar primero). No se crea un privilegio a favor del primer embargante sino,
simplemente, se confiere una prioridad (que cesa en caso de concurso o quiebra del
deudor o de concurrir con un acreedor con privilegio especial).

Bienes inembargables: Cabe tener en cuenta que hay ciertos bienes que son
inembargables tales como: el lecho cotidiano del deudor, de su mujer y de sus hijos; su
ropa; los utensilio necesarios para preparar el sustento; los enseres necesarios para la
profesión, arte u oficio que ejerza; los créditos por pensiones alimentarias; los
honorarios profesionales sino hasta un 25% de su monto; entre otros exceptuados por la
ley.

Caducidad del embargo: El embargo caduca cuando ha sido decretado antes de la


demanda y ella no se promueve dentro de los 15 días hábiles desde que se trabó o desde
que la obligación se hizo exigible. Además cuando el embargo es ejecutivo y se anula la
ejecución, se mantiene con carácter preventivo y caduca si en 15 días no se reinicia la
demanda.

ANOTACION DE LITIS.
“Todo aquel que inicie un juicio relativo a bienes inmuebles, podrá pedir que se
inscriban como litigiosos en el Registro General, dando fianza bastante por los daños
que pudiere causar”. En el caso de ‘anotación del litigio’ se debe prestar contracautela.
Según Alvarado Velloso, en su Código comentado: La anotación de litis se prevé
específicamente para el juicio en rebeldía y para el desalojo. [Arazi señala que se aplica
en todo tipo de proceso que pueda modificar una inscripción en el registro]
Tiene por objeto dar publicidad a terceros sobre la litigiosidad de un bien determinado
(sobre el cual está versando el juicio). Recae sobre bienes inmuebles. (Recamán)
Arazi señala que se trata de una medida que tiene por objeto dar publicidad al litigio a
fin de que los terceros no puedan alegar buena fe en el caso de que se modificara una
inscripción en el registro, a consecuencia de lo decidido en la sentencia.
La medida no impide la disponibilidad del bien; sólo tiene por objeto dar a publicidad la
existencia del proceso.

INHIBICION GENERAL DE BIENES.


De no conocerse bienes libres al deudor, podrá solicitarse contra él, inhibición general;
que quedará sin efecto si presentare bienes o diere caución bastante.
Se requieren los 3 presupuestos generales y aparece un 4to: la exigencia específica en el
caso es que el acreedor no conozca bienes libres para embargar o que éstos resulten
insuficientes para garantizar la acreencia.
Por esta medida, el propietario no puede disponer (vender) de sus bienes registrables
(inmuebles o muebles registrables). El deudor no puede enajenar los bienes que tienen

189
inscriptos en los respectivos registros en el momento de anotarse la medida ni los que
adquiera en lo sucesivo.
Rige supletoriamente respecto del embargo, cuando siendo éste pertinente no se
conocen bienes del deudor o éstos no cubren el crédito reclamado. También pueden
coexistir ambas medidas cuando el embargo es insuficiente.

SECUESTRO.
Consiste en desapoderar al deudor de la cosa. Requiere los 3 presupuestos ordinarios
más la justificación del secuestro: demostrar que si la cosa sigue en poder del deudor
tendría la amenaza seria de perderse.

Arazi señala que: Secuestro es el depósito, generalmente en manos de un tercero,


de una cosa litigiosa con el fin de evitar el peligro de su deterioro o alteración.
Constituye una medida más enérgica que el embargo preventivo, ya que en éste
el bien normalmente queda en poder del deudor, quien puede utilizarlo; en cambio, la
cosa secuestrada no puede ser usada y excepcionalmente queda en manos del deudor.

Otra diferencia con el embargo es que: el secuestro recae sobre bienes muebles o
semovientes motivo del litigio; en cambio, el embargo procede contra cualquier bien,
mueble o inmueble, para asegurar el cumplimiento de una obligación.
Y aun cuando en el embargo preventivo se designe depositario a un tercero,
queda subsistente la diferencia conceptual entre esta medida cautelar y el secuestro: la
primera tiende a garantizar el cumplimiento de una obligación cuyo objeto puede ser
distinto de la cosa embargada; la segunda consiste en el desapoderamiento de una cosa
determinada que constituye el objeto del pleito.
Se emplea el término secuestro en sentido amplio: para designar el
desapoderamiento de una cosa a fin de ponerla en custodia judicial, e incluso como
medida complementaria del embargo (siempre que hay secuestro hay embargo, pero no
siempre que va el embargo va el secuestro). El Código de procedimientos prescribe al
respecto: Procederá el secuestro de los bienes muebles o semovientes motivos del
litigio:

· Cuando el embargo preventivo no bastare para asegurar el derecho invocado por el


solicitante, siempre que se presenten documentos que hagan verosímil el derecho cuya
efectividad se quiere garantizar;
· Asimismo, procederá, con igual condición, toda vez que sea indispensable proveer a la
guarda o conservación de cosas para asegurar el resultado de la sentencia definitiva.
La medida se cumplirá desapoderándose al ‘supuesto’ deudor.

Prohibición de innovar: “En cualquier estado del proceso anterior a la sentencia


definitiva, a petición de parte, y si a juicio del tribunal la medida fuere necesaria, podrá
ordenarse la prohibición de innovar en lo que sea materia del pleito a todos los
litigantes”. Además de exigirse los requisitos comunes y la existencia de un proceso
pendiente (si la medida aparece referida a un juicio futuro debe ser denegada), el
requisito específico en este caso es que no se haya innovado ya en lo que es materia del
pleito. De haber ya cambiado el estado de cosas en el ínterin y siendo necesario volver a
la situación de hecho anterior, procede la ‘medida innovativa’.

190
La ‘prohibición de innovar’ tiene como objetivo evitar que se modifique una situación
de hecho existente al momento de la demanda.
Se prohíbe que se modifique la situación actual de estado de cosas; se ordena a una de
las partes que se abstenga de alterar la situación existente.
Arizi señala que: la prohibición de innovar se decreta para impedir un cambio en la
situación de hecho o de derecho, mientras dure el proceso y con miras a la eventual
sentencia a dictarse.

* Nota: El CP reprime con prisión al que durante en curso de un proceso, o después de


una sentencia condenatoria, maliciosamente destruyere, inutilizare, dañare ocultare o
hiciere desaparecer bienes de su patrimonio, o fraudulentamente disminuyere su valor, y
de esa manera frustrare el cumplimiento de las correspondientes obligaciones civiles.

Medida cautelar innovativa: Es al revés de la anterior.


Existen supuestos en que el juez debe pronunciarse urgentemente y antes de la
sentencia definitiva, ordenando el cumplimiento inmediato de su mandato a fin de
impedir un gravamen irreparable. (se adelanta).
Aquí el requisito específico es demostrar que puede existir un daño irreparable, incluso
no susceptible de indemnización.
Mediante esta medida se ordena variar el estado de hecho existente al momento de
iniciarse el juicio, es decir, se retrotraen las cosas al estado anterior al acto o hecho
cuestionado en el proceso, y ello sin perjuicio de continuar el trámite hasta la sentencia
definitiva.
Esto es cuando el peligro está en mantener la situación de hecho o de derecho
existente, y para evitar el daño se debe innovar.
La prohibición de innovar procura mantener el estado de cosas existente en el
momento de la demanda; ésta, precisamente modifica ese estado de cosas. Por ej.:
reincorporación de un alumno expulsado de un establecimiento educacional mientras se
tramita el juicio por nulidad de la expulsión.

Prohibición de contratar: Constituye una modalidad de la ‘prohibición de innovar’.


Se ordena a una de las partes se abstenga de celebrar contratos determinados
sobre los bienes de parte o que han sido objeto de embargo, acordando a esa orden la
correspondiente publicidad.
Las fuentes son:
1. La ley: Así, el CC establece que uno solo de los cónyuges no puede disponer o gravar
los bienes gananciales cuando se trate de inmuebles o muebles registrales;
2. El contrato: Por ej. son cláusulas comunes a los contratos de mutuo hipotecario las
que prohíben alquilar el bien hipotecado.
3. El acto jurisdiccional: en los casos en que se deba asegurar la ejecución de una
sentencia.

- Anticipo cautelar de sentencia: (no la prevé el Código sino una ley)


Por ejemplo: un hombre pierde un brazo en un accidente de trabajo. Hay que
operarlo de urgencia, la aseguradora se hace cargo, no se puede esperar la sentencia.

- Medidas cautelares genéricas:


La medida cautelar genérica o innominada es la que puede dictar el juez
atendiendo a las necesidades del caso, si no existe una ley específica que satisfaga las
necesidades de aseguramiento. Se ha señalado que corresponde dictarla cuando resulten

191
insuficientes o excesivas –según el caso- las medidas precautorias contempladas
expresamente.
Para su procedencia deben concurrir los presupuestos generales comunes a todas
la medidas cautelares. Por ejemplo puede citarse:
· prohibición de acceso al negocio a socios cuya exclusión se pide;
· prohibición de salir del país;
· cesación de ruidos molestos; etc.

* Nota: Procesos urgentes: La categoría de ‘procesos urgentes’ es más amplia que la de


‘proceso cautelar’, ya que comprende también las denominadas ‘medidas
autosatisfactivas’ y las ‘resoluciones anticipatorias’.
Las medidas autosatisfactivas se pueden dictar sin audiencia de la parte contraria
o bien con un trámite muy abreviado, quedando concluido el proceso en cuanto a su
objeto principal, sin perjuicio de que éste pueda ser continuado o iniciarse otro para
reclamar daños y perjuicios si se demuestra la falta de derecho de quien la obtuvo. Tal
sería el caso de que el juez autorice una transfusión de sangre a un menor ante la
oposición de sus padres cuando exista una urgencia y peligre la vida del menor.
Estas tienen de común con las cautelares que se fundan en un derecho verosímil
y que existe peligro en la demora, pero tienen efectos distintos, pues no son accesorias
de un proceso principal, y el cumplimiento de la medida agota la pretensión de
peticionario.

PROTECCION DE PERSONAS.
Es la medida que se lleva a cabo mediante la disposición judicial de su guarda o
internación, cuando las personas se encuentran expuestas a peligros o amenazas a su
integridad física o moral, su adecuada educación o libertad para determinarse; y estas
circunstancias puedan incidir en la efectividad de la sentencia.
Tiene por objeto la medida sustraer a una persona del lugar donde se halla, por
temer allí la existencia de violencia moral o física sobre ella, para ponerla en un lugar
donde pueda manifestar libremente su voluntad.
Podrá decretarse el depósito (la guarda):
1) De la mujer que haya intentado o se proponga intentar o contra quien se haya
deducido demanda de divorcio, de nulidad de matrimonio o querella de adulterio;
2) De la mujer menor de edad que hubiere de contraer matrimonio contra la voluntad de
sus padres, tutores o curadores;
3) De los incapaces que sean maltratados por sus padres, tutores o curadores o inducidos
por los mismos a actos reprobados por las leyes o la moral;
4) De los incapaces sin representantes legales o abandonados;
5) De los incapaces que estén en pleito con sus representantes legales o respecto de los
que se controvierta la patria potestad, tutela o curatela o sus efectos.
El depósito de personas requiere la existencia de peligro en la demora.

· Respecto de la mujer casada.


- Procedimiento: El depósito de la mujer casada o que pretenda contraer matrimonio
puede ser solicitado por: ella misma o por otra persona, a su pedido.
Presentada la solicitud, el juez acompañado del actuario, se trasladará al domicilio de la
mujer y sin que el marido, los padres o tutores estén presentes, la interrogará sobre si
ratifica o no la solicitud. Hecha la ratificación e informado el juez de los hechos,
decretará el depósito, procurando el acuerdo de la mujer y el marido, padre o tutor,
respecto de la casa en que deba aquél verificarse.

192
Cuando no fuere posible proceder en la forma expresada, el juez arbitrará el
procedimiento a seguir.
- Caducidad de la medida cuando se ha decretado antes de la demanda: Si la mujer
casada no acreditase dentro de 30 días (hábiles) desde que se formalizó el depósito,
haber intentado la acción correspondiente, quedará sin efecto el depósito hecho a su
instancia.

· Respecto de los incapaces:


- Procedimiento: El depósito de los incapaces podrá ser solicitado por cualquier persona
y aun decretado de oficio cuando al juez le constare la necesidad de verificarlo. Se hará
siempre con intervención del ministerio del ramo (el defensor general y, eventualmente,
el Ministerio de menores, incapaces y ausentes).
- Deber judicial de resguardar sus bienes: En caso de incapaces huérfanos o
abandonados, el juez tomará las medidas necesarias para la seguridad de los bienes,
mientras se les provee representantes legales.
La guarda de menores se limita a los casos de gravedad, en los que ellos estén
expuestos a riesgos físicos o morales acreditados prima facie.

Verificado el depósito, el juez ordenará que se entreguen a la persona depositada la ropa


y muebles de su uso personal y que se le provean los alimentos necesarios y las
litisexpensas, en su caso.
- Apelabilidad del depósito: El auto que recayere sobre el depósito será apelable y si se
hiciere lugar a él, sólo en efecto devolutivo.

Nota: El CC prevé la internación por parte de las autoridades policiales, dando


inmediata cuenta al juez, de las personas que por padecer enfermedades mentales o se
alcohólicas crónicas o toxicómanas pudieran dañar su salud o la de terceros o afectaren
la tranquilidad pública.

DEPÓSITO DE COSAS.
Es una medida cautelar asegurativa de bienes.
El depósito se hace a la orden de juez, por cuenta de un tercero. Cuando se trata
de cosas, es preciso hacer un inventario.
El Cód. prescribe a este respecto:
· Siempre que una persona tenga interés en depositar judicialmente una cosa por cuenta
de un tercero, el juez lo ordenará, bajo inventario y en persona de responsabilidad, con
citación del tercero si estuviese en el lugar del juicio o del agente fiscal, en su defecto.
El inventario será hecho por el actuario o por perito nombrado por el juez y expresará la
calidad y el estado de los objetos depositados.
Si el solicitante no estuviere conforme, el juez, previo un reconocimiento o las
diligencias que estimare oportunas, hará la declaración correspondiente, sin lugar a
recurso alguno.
· Cuando haya de venderse parte de los bienes para atender a los gastos del depósito, la
venta se hará en la forma prescripta para el juicio ejecutivo (subasta).
· Siempre que la persona que deba entregar mercaderías o que deba recibirlas quiera
hacer constar el estado en que se encuentran, el juez, personalmente o por peritos, sin
más trámite, practicará la inspección.

MEDIDAS DE ASEGURAMIENTO DE PRUEBAS.


Su finalidad es asegurar y conservar medios de prueba.

193
Sin perjuicio de las medidas preparatorias autorizadas, los que sean o vayan a ser partes
en un proceso y tengan motivos para temer que la producción de las pruebas que les
sean necesarias se haga difícil o imposible por el transcurso del tiempo, pueden solicitar
el aseguramiento de dichas pruebas.
Igualmente, cuando, por cualquier circunstancia, alguna persona se halle en peligro de
perder su derecho, si no se admite la verificación de un hecho, podrá producir sumaria
información de testigos, prueba pericial y, cuando existiere urgencia de comprobar el
estado de lugares o de cosas o la calidad de estas últimas, también, solicitar una
inspección judicial; todo con citación de la persona a quien haya de oponerse o del
ministerio fiscal en caso de no ser posible el comparendo de aquélla con la urgencia del
caso.
Producida la prueba, en un término prudencial que señalará el juez, se dará traslado a la
parte que hubiere sido citada o al agente fiscal para que manifieste si tienen algo que
observar. Evacuada la vista y producida la prueba de tachas, se archivará el expediente
sin dictarse auto alguno sobre su mérito.
Se ha discutido en doctrina si la “prueba anticipada” constituye o no una medida
cautelar, ya que no participa de sus caracteres. La medida cautelar se decreta inaudita
altera pars; en cambio, la prueba anticipada, como regla general, se practica con citación
de la parte contraria, salvo que resulte imposible por razón de urgencia, en cuyo caso
intervendrá el ministerio fiscal. Sin embargo nuestro Código admite el aseguramiento de
prueba como medida cautelar.

194
Bolilla XV
Por: Marianela Cóggiola

JUICIO DE DESALOJO:
Concepto acerca de la naturaleza de este juicio.
Es uno de los procesos especiales.
El proceso de desalojo es un modo de actuación de la vida jurídica para proteger el
derecho de propiedad.
Palacio considera que la pretensión de desalojo es aquella que tiene por objeto recuperar
el uso y goce de un bien inmueble que se encuentre ocupado por quien carece de título
para ello, sea por tener una obligación exigible de restituirlo o por revestir el carácter de
simple intruso aunque sin pretensiones a la posesión.
Busca asegurar la libre disposición de los bienes detentados, retenidos sin derecho
alguno y contra la voluntad de su título legítimo.
Ese es su único objeto, pues ni el cobro de alquileres ni el deterioro o mejoras serán
materia del juicio de desalojo.
No siempre es posible tratar todo lo referido a la ocupación en este proceso. El desalojo
puede darse por: a) vencimiento del contrato; b) cambio de destino del inmueble; c)
falta de pago.
La especialidad del juicio de desalojo determina la inadmisibilidad de la acumulación de
otras pretensiones en el mismo proceso.
La titularidad de dicha pretensión corresponde no sólo al propietario, sino también al
poseedor a título de dueño, al usufructuario, al usuario, y, en general, a todo aquel que
tenga un derecho de uso y goce del bien mueble o inmueble.

Contra quienes procede.


El art. 517 del Código de Procedimiento Civil y Comercial prescribe que el juicio de
desalojo procede contra el locatario, sublocatario, tenedor precario, intruso o cualquier
otro ocupante o tenedor cuya obligación de restituir o entregar sea exigible. En los casos
que la acción de desalojo se dirija contra intruso(s), en cualquier estado del juicio luego
de trabada la litis y a pedido del actor, el juez podrá disponer la inmediata entrega del
inmueble si el derecho invocado fuere verosímil y previa fianza por los eventuales
daños y perjuicios que se puedan ocasionar.
Debe tenerse en cuenta que no procede la acción de desalojo contra los poseedores, ni
contra los que ocupan el bien a consecuencia de un contrato vigente de compraventa,
deposito, mandato, etc.
El fiador o garante del contrato de locación no reviste carácter de parte en el proceso de
desalojo ya que no es el destinatario de la pretensión. Sin embargo el fiador puede
participar como tercero coadyuvante subordinado en el proceso entablado por el
acreedor contra el deudor que afianzó.
Peyrano ubica al agregado al art. 517 como una resolución anticipatoria, dentro del
mismo proceso principal se postula y se obtiene la resolución anticipatoria.

195
Dicha resolución en vez de asegurar la futura realización de un derecho, realiza ya
mismo el derecho material sometido a juicio y antes de que éste finalice.

Oportunidad para promover la demanda:


ARTICULO 518. Puede promoverse antes de vencido el término de la ocupación; pero
la sentencia sólo podrá cumplirse al vencimiento de dicho término. Se sustanciará por el
procedimiento del juicio sumario, con las modificaciones contenidas en este Título. Si el
demandado se allanare en tiempo, las costas correrán por cuenta del actor.
El legislador ha determinado para este tipo de juicio el procedimiento sumario, con las
modificaciones contenidas en los arts. 408 y sgtes.
Pero para el caso de que el desalojo estuviere fundado únicamente en la causal de falta
de pago, se sustanciara por el trámite sumarísimo.
Prevé este artículo, en caso de condena a futuro, posibilitando la promoción del juicio
antes de vencido el término de la ocupación, aclarando que la sentencia solo podrá
cumplirse al vencimiento de dicho termino, y estipulando que si el demandado se
allanare en tiempo, las costas correrán por cuenta del actor.
Debe tenerse presente que en este proceso de naturaleza especial, las excepciones
procesales deben ser opuestas en la estación oportuna y se resolverán en la sentencia, o
sea que no pueden oponerse en él excepciones dilatorias en forma de previo y especial
pronunciamiento.

Domicilio legal del demandado:


ARTICULO 519. Si el demandado no tuviese su domicilio en el lugar del juicio se
tendrá por tal la misma finca cuando hubiere en ella algún edificio.
De haber domicilio constituido en el contrato, allí se debe notificar la demanda de
desalojo, de lo contrario, se notificará en el que el actor denuncie como del demandado,
pero si éste no tuviere su domicilio en el lugar del juicio y en la finca locada existiere
algún edificio, se tendrá por tal la misma finca.
De hecho, si no existe edificio, se debe notificar en el domicilio real del accionado, aun
cuando no pertenezca a la jurisdicción del juez interviniente.
Cabe acotar además, que en materia de notificaciones en general, deberá estarse a lo
dispuesto en los arts. 60 a 69 del CPC y para el caso de desalojo por falta de pago el
trámite sumarísimo, y conforme lo dispone el art. 413 CPC, inc. 2), con la cédula y
emplazamiento se deberá entregar copia de la demanda.

Denuncia de la existencia de subinquilinos o terceros ocupantes:


ARTICULO 520. En la demanda y en la contestación, deben las partes expresar si
existen o no subinquilinos o terceros ocupantes. En el primer caso, serán notificados
dentro de dos días de la iniciación del juicio. En el segundo o cuando no se haga
manifestación alguna, el actor podrá pedir que se fije en lugar visible dentro de la casa
una cédula con transcripción de los artículos 239 y 255 del Código Penal, haciendo
saber la iniciación del juicio a los subinquilinos o terceros ocupantes que pudieran
existir, a fin de que la sentencia tenga efecto contra ellos.
Dado que según lo dispone el art. 249 CPC las sentencias sobre relaciones civiles solo
afecta a los litigantes y sus herederos y a los que sucedan en el derecho litigado durante
el pleito o después de fenecido, al establecer el art. 520 la posibilidad de hacer extensiva
la sentencia de desalojo a terceros, estaríamos frente a una excepción al principio
general.
De hecho si no se denuncia existencia y domicilio de subinquilinos, la notificación a los
que pudieran existir o a terceros posibles ocupantes debe hacerse en la finca objeto de

196
desalojo, habiéndose resuelto que la sentencia no tendrá efecto contra los subinquilinos,
si la cédula notificatoria de la existencia del juicio fue fijada en el domicilio real del
demandado y no en el inmueble objeto del desahucio.
Cabe agregar que a los subinquilinos o terceros ocupantes debe dárseles el carácter de
parte en el pleito y su relación con el inquilino es de un litisconsorcio pasivo, facultativo
y no necesario.

La inscripción del bien como litigioso:


ARTICULO 521. La primera notificación al demandado, a los subinquilinos y a los
terceros ocupantes servirá de intimación bastante para que desde ella empiece a contarse
el plazo en que debe efectuarse el desalojo. El actor podrá pedir que se inscriba como
litigioso, en el Registro de Embargos, el predio objeto del juicio, a fin de que la
sentencia se ejecute también contra los ocupantes posteriores a la anotación. La
inscripción deberá hacerse conocer por medios de edictos que se publicarán tres días.

La primera parte del artículo refiere a que el plazo para el desalojo se cuenta desde la
notificación de la demanda, sirviendo dicha notificación de intimación suficiente para
que desde su fecha se comience a computar la tenencia ilegitima del demandado a
desalojar.

También contempla esta norma la posibilidad de la sentencia de desahucio tenga efectos


contra ocupantes posteriores, lo cual también resulta una excepción a la regla del art.
249.

Para ello expresa que el actor podrá pedir la inscripción del predio como litigioso. Esta
inscripción debe reunir los requisitos previstos en el art. 276 CPC, debiendo tenerse en
cuenta que a partir de la modificación del art. 67 CPC, la publicación de edictos solo se
hará en el Boletín Oficial, y con los requisitos especificados en el mismo.

La finalidad de la inscripción litigiosa es solo dar publicidad al litigio, para evitar que
terceros puedan, por ejemplo, ocupar el inmueble, amparándose en la presunción de
buena fe.

El traslado de la demanda (Apercibimiento bajo el cual se corre). Institutos que no


proceden en el desalojo. Pruebas.
EL art. 522 prescribe que el traslado de la demanda se correrá con el apercibimiento de
que si no se contesta se tendrá por cierto los hechos expuestos en ella y se llamarán los
autos sin más trámite. No procede en este juicio la excepción de arraigo, la
representación del rebelde ni el recurso de rescisión. Cuando la demanda se funde en la
falta de pago de alquileres o en el vencimiento del término convenido, no se admitirá
otra prueba que la confesión de parte, el recibo auténtico en que conste que los
alquileres fueron pagados o el documento de igual clase que justifique el no
vencimiento de dicho término.
Tratándose de un juicio sumario, el traslado de la demanda se correrá por el termino de
cinco días y con apercibimientos idénticos a los contenidos en el art. 143 CPC, o sea
que si no se la contesta se tendrán por ciertos los dichos de la demanda y se llamaran
autos sin más trámite.
Si esto ocurre, y se dicta el decreto que llama los autos para sentencia, el demandado
puede pedir su revocatoria y la apertura de la causa a prueba.

197
Por la especial naturaleza del juicio, la norma señala expresamente que en él no
proceden ni la excepción de arraigo, ni la representación del rebelde ni el recurso de
rescisión.
Contestada la demanda, se abre la causa a prueba.
Por tratarse de un proceso especial, y en materia de prueba de testigos, no habrán de
admitirse más de cinco testigos por parte, pudiendo el juez admitir la ampliación, si la
naturaleza del asunto lo justificare.
Cuando la demanda se funde en la falta de pago de alquileres o en el vencimiento del
término convenido, no se admitirá otra prueba que la confesión de parte, el recibo
auténtico en que conste que los alquileres fueron pagados o el documento de igual clase
que justifique el no vencimiento de dicho término.

Cabe recordar que el art. 145 CPC establece que el juez puede rechazar la prueba que
sea “notoriamente improcedente o prohibida por la ley”, pero agrega que no puede
pronunciarse sobre la pertinencia de la misma antes de la sentencia.
Esta limitación de los medios de prueba no vulnera la garantía de defensa en juicio,
puesto que los hechos controvertidos en estos procesos pueden ser debidamente
acreditados con la prueba admisible.
Para el caso de desalojo por la causal de falta de pago, debe tenerse presente lo
dispuesto en el art. 5 de la ley 23091, que prevé que previo a la demanda de desalojo por
falta de pago de alquileres, el locador deberá intimar fehacientemente el pago de la
cantidad debida, otorgando para ello un plazo que nunca podrá ser inferior a 10 días
corridos contados a partir de la recepción de la intimación, consignando el lugar de
pago.
Vencido el término de prueba se llama autos para sentencia.

Sentencia. Recursos:
ARTICULO 523. La sentencia se dictará siempre dentro de tres días del llamamiento
de los autos y será apelable. El recurso se concederá en efecto devolutivo si el actor
afianzare los perjuicios que se causaren en caso que la sentencia fuere revocada.
El legislador haciendo una excepción al art. 351 CPC, permite al actor pedir que en caso
de apelarse la sentencia se conceda la misma con efecto devolutivo afianzando los
perjuicios que pudieren causarse en caso de que finalmente la sentencia fuere revocada.
De haberse concedido ya la apelación, puede pedir también revocatoria de dicho decreto
y el cambio de efecto de la concesión del recurso, lo cual resolverá el juez en primer
grado.
Respecto de la fianza, la misma debe ser prestada por un tercero, y de ser impuesta por
la ley o por los jueces, el fiador debe estar domiciliado en el lugar de cumplimiento de
la obligación principal y ser abonado, o por tener bienes raíces conocidos o por gozar
en el lugar de un crédito indiscutible de fortuna. El monto por el cual debe prestarse
caución es fijado por el juez el cual también es quien la habrá de evaluar.

Plazo para desocupar (como se cuentan los días):


ARTICULO 524. El juez podrá, según las circunstancias, acordar para el desalojo un
término que no exceda de quince días, computándose los inhábiles, si el demandado no
tuviere derecho a otro mayor. Vencido, se procederá al lanzamiento sin recurso alguno,
a petición de parte y a costa del ocupante.
Resulta clara la norma respecto de que el término de quince días es el máximo que
puede otorgar el juez, pudiendo, según las circunstancias, otorgar uno menor, todo ello
salvo que el demandado tuviere derecho a otro mayor. También que se trata de días

198
corridos, y que vencido dicho plazo y a petición de parte, se procederá al lanzamiento,
el cual resulta irrecurrible.

Cabe acotar asimismo que para el caso previsto en el art. 518 CPC que dispone la
posibilidad del desalojo anticipado cuando se invoca la causal de vencimiento del plazo
no se aplica el plazo de quince días, sino que el lanzamiento puede efectivizarse al día
siguiente de vencido el plazo contractual.

Rubros que no pueden reclamarse. Casos en que el demandado invoca el derecho


de retención:
ARTICULO 525. Ni el cobro de alquileres ni el deterioro o mejoras serán materia del
juicio de desalojo. El lanzamiento se verificará sin perjuicio de las acciones que por
cualquier concepto el desalojado pudiera hacer valer en juicio distinto contra el
demandante; pero si el demandado hubiese invocado el derecho de retención, el
lanzamiento no tendrá lugar sin que el demandante pague o afiance el importe
correspondiente.
La acumulación de pretensiones no es aplicable al juicio de desalojo, por la especial
naturaleza del mismo.
En cuanto a la acumulación de autos, se ha resuelto a este respecto que no procede
acumular a un desalojo iniciado por vencimiento del contrato, un juicio por
consignación en pago y en cambio que si procede la acumulación de autos entre una
demanda de desalojo por falta de pago y una por consignación de alquileres.

Efectos de la sentencia de desalojo en juicio posesorio o de dominio:


ARTICULO 526. El resultado del juicio de desalojo no podrá hacerse valer en contra
de los derechos de posesión o dominio que las partes invocaren en otro juicio.
El objeto del juicio de desalojo es el recupero de la tenencia de un bien, mueble o
inmueble, por ello es que no prejuzga acerca de los derechos de posesión o dominio que
las partes pueden alegar en otro juicio.
En consecuencia, si la demandada invoca ser poseedora, ello no resulta suficiente para
que el desalojo sea desestimado, salvo que existiera iniciado con anterioridad juicio de
usucapión, o que se hubiese demostrado por testimonios serios que al tiempo de la
demanda o con anterioridad se hubieran realizado actos posesorios.
El proceso de desalojo debe permitir la producción del material probatorio suficiente
para acreditar la verosimilitud de la defensa, naturalmente la sentencia no resuelve
definitivamente sobre los derechos de posesión o dominio invocados, por eso es un
proceso especial.

Opción al actor cuando desaloja por falta de pago:


Para el caso de que el desalojo estuviere fundado únicamente en la causal de falta de
pago, el articulo 387 inc. C) 2) señala su sustanciación por el trámite sumarísimo (art.
413 CPC).

JUICIO DE RENDICION DE CUENTAS:


Concepto.
Todo el que haya administrado bienes o negocios, total o parcialmente ajenos debe
rendir cuentas de su cometido, o más ampliamente todo aquel que actúe en interés
ajeno, aunque lo haga en nombre propio y por cuenta propia. Debe suministrar a éste un
detalle circunstanciado y documentado acerca de las operaciones realizadas,
estableciendo, eventualmente, el saldo deudor o acreedor resultante en contra o a favor

199
del administrador o gestor. Tal obligación pesa, entre otros, sobre los tutores, curadores,
administradores de sociedades con posterioridad a la extinción de éstas, mandatarios,
gestores de negocios ajenos, comisionistas, etcétera.
Constituye la forma legalmente prevista para acreditar la adecuada gestión de bienes
ajenos. Para Segovia la rendición de cuentas es el coronamiento de la administración.
La obligación recae, por lo tanto, sobre quienes han realizado actos de gestión o
administración respecto de bienes que no les pertenecen exclusivamente, siendo
indiferente que hayan existido pérdidas o que el capital se haya consumido, pues aquélla
no está supeditada a la existencia de superávit o ganancias.
No constituye rendición de cuentas la sola entrega de lo recibido como consecuencia del
mandato, ni tampoco lo es solamente el pagar una suma de dinero a la parte que tiene
derecho a solicitarla.

Clases:
La rendición de cuentas puede ser extrajudicial o judicial, según que, respectivamente,
se efectúe fuera de juicio o constituya el objeto de una pretensión procesal fundada en la
negativa u omisión del obligado a rendirlas o en la negativa del dueño de los bienes a
recibirla. En este último caso se origina el juicio de rendición de cuentas, o bien, por vía
incidental, cuando el obligado a rendir cuentas debe hacerlo a causa de la ejecución de
un cargo discernido judicialmente (Ej: el martillero que realiza la subasta, el síndico de
un concurso.)

Sustanciación (Etapas y trámites). Sentencia que obliga a rendir cuentas. Trámite


ulterior.
En el juicio de rendición de cuentas pueden diferenciarse dos etapas y eventualmente
tres, que determinan decisiones judiciales propias a cada una de ellas.
La primera de carácter declarativo, tiene un objeto y fin específico, se discute la
existencia de la obligación de rendir cuentas y si se declara procedente la pretensión, la
sentencia condena al demandado a rendirlas, el único objeto de la primera etapa del
procedimiento es obtener la declaración de si el demandado está o no obligado a rendir
las cuentas que el actor reclama. La segunda, versará sobre las cuentas en sí misma,
correspondiendo a esta etapa la discusión y el relativo pronunciamiento sobre la
aceptación o no de las cuentas rendidas. Por ultimo puede presentarse una tercera etapa
tendiente al cobro del saldo eventualmente acreedor que arroje la rendición de cuentas.
El juicio declarativo de rendición de cuentas es distinto del que versa sobre las cuentas
mismas; es previo a la obligación de rendirlas, de modo que es inoficioso en esta etapa
entrar a discutir otras cuestiones fuera de la propia obligación de rendirla.
También en materia de costas corresponde distinguir las dos o eventualmente tres etapas
en el debate judicial de la rendición de cuentas. La primera desde la demanda
solicitando la rendición hasta la sentencia que condene al demandado respecto de su
obligación de rendirlas, la segunda desde el escrito de impugnación de las cuentas en
adelante y la eventualmente tercera tendiente al cobro del saldo si hubiera. Distinción
que tiene su importancia porque puede ser distinta la significación económica de las
distintas etapas procesales.
Podría bien suceder también que el demandado condenado en costas en la primera etapa
no lo fuera en la segunda si las impugnaciones del actor a las cuentas rendidas no
tuvieran éxito.

PRIMERA ETAPA, TRÁMITE: El proceso de rendición de cuentas se sigue por el


trámite de juicio sumarísimo (Art. 527 C.P.C y C. Sta. Fe). Es un proceso que tiene un

200
fin específico y un trámite especial, a través del cual la ley busca un procedimiento
rápido de concluir el trámite de rendir y arreglar cuentas.
Nada obsta sin embargo que el actor «oyente» opte por el trámite más amplio,
inclinándose por el juicio declarativo ordinario (si opta por éste no se aplican las
exclusiones del art. 415 C.P.C y C Sta. Fe y por ende cabe oponérsele la excepción de
arraigo) o sumario.
Es fundamental en esta etapa que el autor demuestre la existencia de la negociación
común o de la relación o situación jurídica de la que surge la obligación del demandado
de rendir cuentas.
a) Petición: La petición del actor tiende a la declaración por el Tribunal de la obligación
de rendir cuentas por el demandado, y a eso limitadamente a rendir cuentas debe ser
condenado el demandado.
Si bien la demanda por rendición de cuentas lleva anexa la pretensión de cobrar el saldo
que pudiera resultar favorable a la parte actora, y la notificación de la demanda
constituye interpelación apropiada para poner en mora al deudor, sin embargo en esta
etapa no debe discutirse y menos aún la sentencia condenar al pago de suma alguna,
pues ello si fuera el caso, constituirá la pretensión concreta de la tercera etapa por la que
se perseguirá el cobro del saldo liquido de las cuentas rendidas con el consiguiente
nuevo pronunciamiento del Tribunal.

b) Acumulación de acciones: Si bien el proceso tiene un trámite específico, nada impide


acumular el pedido de rendición de cuentas a otras acciones siempre que, no se
excluyan entre sí y se sustancien por el mismo trámite, teniendo presente que el actor
podrá siempre optar por el más amplio (Art. 388 C.P.C y C.) Por ej: división de
condominio y rendición de cuentas, remoción de administrador y rendición de cuentas.

c) Reconvención: La reconvención exige conexión con la demanda no pudiendo además


alterar ni el procedimiento ni la competencia determinada por la primera.
Por tanto este trámite especial limita el derecho de reconvención del demandado quien
no puede introducir por esta vía una acción ajena al fin de este proceso y tramite; en este
sentido se ha negado la posibilidad de reconvenir por disolución de sociedades.
Tampoco se ha admitido introducir por vía de reconvención una demanda de rendición
de cuentas en juicio donde se admite el condominio y acepta la división.

d) Traslado de la demanda: Como es habitual, el traslado de la demanda se le notificara


al demandado con el apercibimiento de que “si no la contesta se dictara sin más trámite
y conforme a derecho la sentencia que corresponde”; omisión que implicará el
reconocimiento de los hechos articulados por el actor y por ende de los presupuestos
facticos para la procedencia de la obligación de rendir cuentas.
A diferencia de nuestra ley procesal, el Código Procesal Civil y Comercial de la Nación
estructura esta etapa diferentemente por cuanto dispone que el traslado de la demanda se
hará bajo apercibimiento de que “si el demandado no la contestare o admitiera la
obligación y no la rindiera dentro del plazo que el Juez fije al conferir dicho traslado, se
tendrán por aprobados los que presente el actor.”

e) Allanamiento: Si el demandado se allana a la demanda, significara que reconoce su


obligación de rendir cuentas. Previo traslado a la actora, el Tribunal dictará sentencia
conforme a derecho sin más trámite si no hubiera cuestión sobre costas, la que en tal
caso se pronunciará después de tramitarse la incidencia sobre aquellas de acuerdo al
procedimiento del juicio sumarísimo (art. 230 C.P.C. y C.).

201
La sentencia fijará el plazo para rendirlas dentro de los términos y con los
apercibimientos del art. 527 2° párrafo del C. P. C. y C.
Se ha entendido, por la Cám. Nac. Civil sala C por razones de economía procesal, que
cuando la parte demandada no desconoce su obligación de rendir cuentas y las rinde ello
importa un allanamiento no resultando necesaria una sentencia que declare
específicamente tal obligación.
De las cuentas presentadas se debe dar traslado al actor y el litigio se traba si hay
impugnación que se considerará como una demanda.
El allanamiento del demandado en esta primera etapa lo eximirá de costas, si no hubiera
incurrido en mora o culpa (art. 251 inc. 1°C. P. C y C) debiendo imponerse en tal caso
las costas en el orden causado.

f) Sentencia. Término para rendir cuentas: Si el demandado de allana o la sentencia es


condenatoria luego de haberse debatido la obligación de rendir cuentas, ella contendrá
la fijación de un plazo, que el código deja a criterio del Tribunal entre un mínimo de 10
días y un máximo de 30 días, que se contarán como hábiles judiciales y comenzarán a
correr firme que quede la misma.
A los fines de la fijación del plazo el juez deberá tener en cuenta la complejidad
probable de las cuentas, la duración de la gestión o del negocio, la mayor o menor
documentación que deberá respaldar las mismas, etc.
Sentencia. Apercibimientos: El art. 527 del C. P. C. y C. dispone que la sentencia
contendrá el apercibimiento de que si el demandado no rindiera cuentas en el término
fijado, se tendrán por exactas las que presente el actor dentro de los 15 días siguientes.
Se trata de una carga procesal.

SEGUNDA ETAPA. PRESENTACION DE LAS CUENTAS. IMPUGNACION :


ARTICULO 528. Si el requerido rindiese las cuentas, éstas serán pasadas en traslado
por diez días al actor, y si dentro de ese término no las impugnase, el juez las aprobará
sin más trámite y sin recurso. Si las observase, el escrito respectivo, se tendrá como
demanda y se substanciará por el trámite que corresponda, de acuerdo con las
diferencias que surjan de la impugnación.
Si el demandado da cumplimiento a la sentencia y presenta las cuentas, éstas serán
pasadas en traslado por diez días al actor. Dentro de ese plazo el actor debe hacer las
impugnaciones que estime pertinentes.
Si el actor no hace impugnaciones u observaciones la ley manda al magistrado
aprobarlas: El Juez las aprobará sin más trámite y sin recurso.
Si por el contrario lo hace, comienza la segunda parte del conflicto, de las cuentas en sí
mismas, el escrito se tendrá como demanda.
La impugnación creo una nueva vía procesal, que no es incidental y que podrá
tramitarse por el procedimiento ordinario, sumario o sumarísimo, según corresponda.
Las observaciones o impugnaciones del oyente deben ser precisas, concretas y
categóricas, los reparos genéricos no pueden ser considerados.
Las observaciones o impugnaciones pueden ser hechas: a) Por estimarlas inexactas, b)
Por considerarlas insuficientes.

Facultades del juez:


ARTICULO 529. El juez podrá en la sentencia admitir como justificadas aquellas
partidas de que no se acostumbre pedir recibos y sean razonables y verosímiles.

202
Justificación de partidas no documentadas: El artículo constituye una excepción al
principio general de que las cuentas deben ser documentadas de manera de acreditar
cada una de las partidas del debe y del haber.
La norma deja a criterio del juez de acuerdo a las particularidades del caso justificar o
no aquellas partidas de las que no se han acompañado documentación brindándole dos
pautas flexibles de merituación: 1- que no se acostumbre a pedir recibos; 2- que sean
razonables y verosímiles. La razonabilidad debe referirse tanto a los aspectos
cualitativos y cuantitativos de las partidas a justificar.
Sin embargo como excepción al principio general debe interpretarse restrictivamente
habiéndose incluso afirmado la necesidad de que las partidas que se quieren justificar
debe estar acreditada por otros medios de prueba.

Saldos reconocidos por el obligado (acción del actor).


ARTICULO 530. Todo saldo reconocido por el obligado confiere al actor acción
ejecutiva, sin que ello importe la exactitud de la cuenta objeto del juicio.

TERCERA ETAPA. ACCION EJECUTIVA.


Importa una ejecución anticipada de los saldos líquidos reconocidos por el cuentadante,
dejando en claro la norma que ello, no significa la exactitud de la cuenta objeto del
juicio, la que podrá seguir siendo objeto de debate y que en definitiva podrá arrojar
inclusive un saldo mayor que el reconocido.
En nuestro Código Procesal se reserva el papel de actor para el requirente “oyente”
pensando que el “obligado” es el cuentadante. Bien podría suceder que las cuentas
arrojen un saldo acreedor para el cuentadante como así también que este instando
extrajudicialmente la aprobación de las cuentas en forma infructuosa deba demandar
judicialmente la satisfacción de su pretensión.

ALIMENTOS Y LITIS EXPENSAS:


Concepto:

ALIMENTOS: El juicio de alimentos es aquel que tiende a satisfacer una pretensión


fundada en la existencia de una obligación alimentaria. Dicha obligación se encuentra
instituida en el Cód. Civ. y tiene su fundamento en el vínculo de solidaridad que se
supone existente entre los integrantes del núcleo familiar. Como regla, pues, dicha
obligación deriva del matrimonio o del parentesco, aunque en casos excepcionales,
puede reconocer otro origen.
De acuerdo con lo prescripto en el art. 372 Cód. Civ. la prestación de alimentos
comprende lo necesario para la subsistencia, habitación y vestuario correspondiente a la
condición del que la recibe, y también de lo necesario para la asistencia en las
enfermedades.

Se deben alimentos entre sí las siguientes personas: 1°) Los cónyuges (Cód. Civ., art.
198); 2°) Los parientes por consanguinidad (los ascendientes y descendientes y los
hermanos y medio hermanos [Cód. Civ., art. 3671). 3°) Los parientes afines vinculados
en primer grado (Cód. Civ., art. 368). Fuera de estos casos en que la obligación
alimentaria nace del matrimonio o del parentesco, aquélla existe también en cabeza del
donatario y a favor del donante, cuando la donación ha sido sin cargo y este último
careciera de medios de subsistencia (Cód. Civ., art. 1837), así como en la hipótesis del
legado de alimentos (id., art. 3790).

203
Quien reclama el cumplimiento de la obligación alimentaria nacida del matrimonio o
del parentesco debe acreditar: 1°) El vínculo; 2°) La necesidad, es decir, la falta de
medios para procurarse los alimentos y la imposibilidad de adquirirlos con su trabajo;
3°) El caudal económico del obligado.

El vínculo debe justificarse mediante las correspondientes partidas que prueben el


matrimonio o el parentesco. En el caso de que la pretensión se dirija contra un pariente
alterando el orden de prelación fijado por la ley, es preciso acreditar, también, la
imposibilidad en que se encuentran de prestar alimentos aquél o aquéllos que lo
preceden.
El CC establece directivas sobre el procedimiento en el juicio de alimentos, que tienden
a asegurar su celeridad y el efectivo cobro de la prestación por parte del alimentado.
Respetando estas directivas, los ordenamientos procesales de cada provincia organizan,
en concreto, el juicio de alimentos.

LITISEXPENSAS: Las litisexpensas consisten en la suma de dinero que el beneficiario


de los alimentos tiene derecho a solicitar a quien deba suministrárselos, con el objeto de
atender los gastos de un juicio determinado, como puede ser, por ejemplo, el de
divorcio.
El derecho de solicitar las litisexpensas nace de lo dispuesto en los arts. 375 y 1295 del
Cód. Civ. Tiene carácter provisional —razón por la cual procede su aplicación cuando
resulte que los gastos superen a los calculados— y su obtención se halla sujeta al
cumplimiento de los recaudos establecidos con respecto a los alimentos. En los juicios
de divorcio, se ha decidido que corresponde la paralización de los procedimientos hasta
que se verifique el pago de la suma fijada en concepto de litisexpensas. Dicha suma, por
otra parte, debe cubrir los gastos ordinarios del juicio, con exclusión de los honorarios
profesionales.
La demanda por litisexpensas se sustancia de acuerdo con las normas que rigen en el
juicio de alimentos.

Trámite que corresponde imprimirles: El artículo 531 del Código procesal señala que
el juicio de alimentos y litisexpensas se sustanciara por el trámite de juicio oral.

Tribunal competente: En la 1° y 2°Circunscripcion Judicial conforme art. 7 inc. 2 de


la Ley 10160, es decir donde existen los Tribunales Colegiados de Familia (2 en Santa
Fe y 3 en Rosario) éstos resultan competentes.
En Santa Fe, a los tribunales colegiados de familia les compete, en forma originaria y
exclusiva, conocer por vía del juicio oral de toda pretensión autónoma de alimentos y
litisexpensas.
Para el resto de los tribunales de la provincia que no tengan su asiento en las ciudades
mencionadas, se aplican las normas del procedimiento sumarísimo (art. 696 CPCCSF)

Facultades otorgadas al juez respecto a alimentos y expensas. Recurribilidad:


Desde la iniciación de la causa, el juez del trámite podrá, según su prudente arbitrio y
las circunstancias especiales del caso, fijar con carácter provisorio las expensas del
juicio y una cuota alimentaria que regirá hasta la sentencia. Ninguna de las dos causan
estado, y la provisoria será recurrible ante el tribunal, con efecto devolutivo

Forma de la prestación. Carácter de la sentencia. Caducidad de los alimentos


provisorios.

204
El artículo 532 indica que la prestación de alimentos se hará por mensualidades
anticipadas. El juez del trámite podrá exigir el depósito de varias y ordenar las demás
medidas que las circunstancias aconsejen para hacer efectivo el cumplimiento de la
obligación.
La fijación de cuota provisional opera como medida cautelar asegurativa de derechos
(se fija la cuota alimentaria siempre que exista prima facie acreditada la verosimilitud
del derecho del actor). Debe efectuarse siempre por el juez de trámite (en juicio oral)
por la vía del juicio sumarísimo incidental. Éstos deberán prestarse hasta el dictado de la
sentencia.
Cuando se reclame la prestación de alimentos como previa a la iniciación de un juicio
de divorcio, de acuerdo con la Ley de Matrimonio Civil, la resolución provisoria que lo
establezca caducará si no se interpone la demanda dentro de los 15 de notificada
aquélla.
El pago de la cuota debe ser en dinero. Sin embargo las partes podrían acordar el pago
en especie, o bien parte en especie y parte en dinero.
Si la parte vencida no hace efectivo el pago, se procederá al embargo y se decretará la
venta de los bienes necesarios para cubrir el importe de la deuda.

DIVISION DE COSAS COMUNES:


Uno de los medios de conclusión del condominio se halla configurado por la división o
partición, la cual consiste en transformar el derecho inmaterial del condómino en una
fracción material, equivalente a su interés dentro de la cosa.
La pretensión tendiente a la división de la cosa común puede ser deducida por todo
copropietario y en cualquier tiempo, y su admisibilidad está condicionada, básicamente,
a la concurrencia de dos requisitos: 1°) La existencia de una copropiedad debidamente
reconocida: 2°) La inexistencia de cláusulas de indivisión dentro de los límites fijados
por la ley (Cód. Civ., art. 2693) o de normas legales que la establezcan (v.gr.. Cód. Civ.,
arts. 2710 a 2716).

Corresponde señalar, asimismo, que la división del condominio debe necesariamente


hacerse con intervención judicial en el supuesto de que existan menores o incapaces
interesados (Cód. Civ., art. 3465, inc. 1) b) cuando terceros fundándose en un interés
jurídico se opongan a la partición privada; c) cuando los herederos o condóminos
mayores y presentes no se pongan de acuerdo para hacer la división privadamente.
La división se la puede aplicar también a otros supuestos en que se verifique una
comunidad sobre propiedad no sometida a indivisión forzosa (ej. patente registrada).
El proceso de división de la cosa común tiene que ser iniciado por el titular del derecho
real de condominio contra los otros titulares del mismo derecho.
La división del condominio supone el dominio de la cosa común y, por ello, no puede
exigirlo quien no tiene el bien a su nombre.
Todos los condóminos deben ser citados al proceso, por tratarse de un litisconsorcio
necesario.

En cuanto a la forma de división, esta tiene que ser hecha en especie, si existe
posibilidad de dividir y adjudicar los bienes de esa manera (a menos que resulte
antieconómico). No pueden ser autorizados los actos de división de inmuebles si como
consecuencia de ellos surgen parcelas cuyas superficies no representan por lo menos
una unidad económica. Si la división en especie es jurídica o materialmente imposible,
se debe ordenar la venta en subasta pública. La venta particular sólo procede si existe
conformidad de todos los condóminos.

205
Durante el curso del proceso puede discutirse no sólo la admisibilidad de la división
sino también la forma de llevarla a cabo (división en especie o por venta en remate
público), a cuyo efecto corresponde estar a la decisión adoptada en forma unánime por
los condóminos (Cód. Civ., arts. 2698 y 3462), con la limitación prevista en el art. 2326
del mismo código, según el cual no procede la división de las cosas (en especie) cuando
ello convierta en antieconómico su uso y aprovechamiento.

Trámite a imprimirle: Entablada la demanda, se substanciará y resolverá por el trámite


del juicio sumario (art. 537 CPCCSF).

Competencia: Es juez competente para entender en la pretensión el del lugar donde


está situada la cosa que se pretende dividir.

Recaudo especial que debe satisfacer la sentencia: La sentencia deberá contener,


además de los requisitos generales, decisión expresa sobre la forma de división, de
acuerdo con la naturaleza de la cosa.
El juicio de división de condominio comprende dos estadios, el primero de los cuales
termina con la sentencia que lo declara disuelto cuando ésta no contiene, por no ser
posible aún, la forma de la partición; el segundo, se inicia con la designación de la
audiencia para la designación de peritos y para convenir la forma de división.

Ejecución de la demanda de división: Art. 538: Ejecutoriada la sentencia, se


convocará a la partes para el nombramiento de un perito tasador y partidor o martillero,
según corresponda. Para su designación y procedimientos ulteriores, se aplicarán las
disposiciones relativas a la división de la herencia en el primer caso o las del juicio
ejecutivo, en el segundo.
De acuerdo a lo dispuesto en el presente artículo se infiere que luego de ejecutoriada la
sentencia a que se hace referencia en el artículo anterior, de la misma resultará si la
división debe efectuarse en especie, o bien si la cosa debe venderse y procederse a la
partición de su producido.
Si la sentencia no ha establecido la forma de la división, una vez ejecutoriada aquélla el
juez debe citar a las partes a una audiencia con el objeto de que convengan lo necesario
al respecto. Si se llega a un acuerdo, en el mismo acto podrán las partes proponer, por
mayoría, la designación de un perito tasador, partidor o martillero.

En el supuesto de que la sentencia contenga pronunciamiento acerca de la forma de


división, la audiencia debe fijarse al solo efecto de la designación de los peritos.
Con relación a los trámites posteriores a la designación, corresponde aplicar las
disposiciones relativas a la división de herencia, en el caso de haberse designado tasador
y partidor, o las del juicio ejecutivo, si se hubiese dispuesto la venta de los bienes.
Ahora bien, si la mencionada sentencia pasada en autoridad de cosa juzgada hubiera
dispuesto que la división de la cosa común deba efectuarse en especie, deberá
procederse a la designación de un perito tasador y partidor, a fin de que proceda a
efectuar dicha partición en la forma disciplinada para las sucesiones, conforme a la
remisión efectuada por el artículo 2698, C.C.
A los fines de la división del condominio, la subasta pública es la última solución.
Debiendo observarse en los trámites posteriores a la referida sentencia ejecutoriada, las
normas de la división de la herencia; si la misma hubiere ordenado la división en

206
especie, forzoso será aplicar los arts. 599 a 608 del CPC de Sta Fe, como así lo
prescripto por los arts. 609 a 616.
Si de la sentencia ejecutoriada puede desprenderse que deba venderse la cosa a los fines
de partir su producido, el art. 538 dispone en su parte final que en este supuesto
resultarán de aplicación las disposiciones relativas al juicio ejecutivo. Como se trata de
un remate judicial, naturalmente el mismo deberá efectuarse de acuerdo a lo dispuesto
por los arts. 488 a 506 del C.P.C

División extrajudicial: conforme al art. 539 Si se presentare una división de bienes


hecha extrajudicialmente y se pidiere su aprobación, el juez, previa las citaciones
necesarias, las pondrá de manifiesto en la oficina por un término de seis a doce días y
resolverá aprobándolas o rechazándolas, sin recurso alguno.
Cuando se conviene y determina una división de bienes se concurre directamente al
escribano para que extienda la escritura correspondiente, la cual, firmada, es de
cumplimiento ineludible. Ir a buscar una aprobación a dichas divisiones es simplemente
una medida de seguridad, pues dicha aprobación importará atribuir a la resolución el
valor de cosa juzgada a la división.
Resulta aplicable a la división de cosas comunes el art. 3462 CC que dispone: “si todos
los herederos están presentes y son capaces, la partición puede hacerse en la forma y por
el acto que por unanimidad juzguen convenientes”.

ACCIONES POSESORIAS Y DE DESPOJO:


Concepto y clases:
Denominase interdictos a aquellas pretensiones que nacen con motivo de la
perturbación o despojo de la posesión o tenencia de un bien mueble o inmueble, o de
una obra nueva que afectare a un inmueble, y cuya finalidad consiste en obtener una
decisión judicial que ampare o restituya la posesión o la tenencia u ordene la suspensión
definitiva o destrucción de la obra.
El mismo origen y finalidad tienen las pretensiones posesorias, con la diferencia de que
sólo se acuerdan al poseedor que reúna los requisitos establecidos en los arts. 2473 y
2478 a 2481 Cód. Civ.

La posesión está protegida por diversas disposiciones de los Códigos Civil, Penal,
Procesal, que tienen que analizarse en conjunto a fin de evitar contradicciones.
La protección judicial se ejerce por medio de los interdictos y de las acciones
posesorias, y ante la autoridad constituida, de manera que hay que recurrir a la justicia,
seguir un procedimiento, y esperar la sentencia.
En las acciones posesorias e interdictos sólo se discute la posesión actual, sin que se
controvierta el dominio. La posesión nada tiene de común con el derecho de poseer, y
será inútil la prueba en las acciones posesorias del derecho de poseer. Es decir,
defienden la posesión en sí, no el derecho a poseer.

Hay 3 acciones posesorias que tramitan por juicio sumario:


a- Acción de despojo: destinada a hacer recuperar una posesión perdida. Corresponde a
todo poseedor o tenedor contra el despojante (sucesores o cómplices) aunque fuere el
dueño del bien; [tienden a evitar la justicia por mano propia: quien se considera con
derecho al bien, debe requerirlo en justicia]
Hay despojo siempre que una persona ha sido privada de la cosa por violencia o
clandestinidad o abuso de confianza; ya que en todos esos casos el poseedor ha sido
privado de la posesión por medios ilegítimos.

207
Al actor le basta con probar la posesión y el despojo.
“Juzgada la acción, el demandado debe ser condenado a restituir el inmueble con todos
sus accesorios, con indemnización al poseedor de todas las pérdidas e intereses y de los
gastos causados en el juicio, hasta la total ejecución de las sentencias”. El texto se
refiere exclusivamente a los inmuebles, porque en el sistema del Código Civil los
muebles no estaban protegidos por las acciones posesorias, después de la reforma de la
ley 17.711, ellos también está cubiertos por acciones.
b- Acción de manutención de la posesión: se acuerda para ser mantenido en ella,
cuando el poseedor en lugar de haber sido privado de su posesión, ha sido simplemente
turbado en la misma;

c- Acción de obra nueva: cuando por medio de una obra que se comenzare a hacer en
terrenos que no fueran del poseedor, se turba la posesión de éste.
Al lado de las acciones posesorias, se encuentran en los Códigos procesales, los
interdictos. Ellos consisten en juicios sometidos a un procedimiento especial, de
sumarísimo, en los cuales se discute exclusivamente la posesión. Ellos pueden tener
alguno de los siguientes objetos:

1- Adquirir la posesión: El denominado interdicto de adquirir, en tanto no tiene por


objeto proteger la posesión o la tenencia, sino, por el contrario, conseguir la investidura
en una posesión o tenencia que nunca se tuvo, no configura, en realidad, un verdadero
interdicto. Por otra parte, a diferencia de lo que ocurre con los restantes interdictos, la
procedencia del interdicto de adquirir se halla supeditada a la demostración, por parte
del peticionario, de su título o derecho a la posesión o a la tenencia.

2- Retenerla, en caso de ser turbado en ella: El interdicto de retener es la pretensión


procesal mediante la cual quien ejerce la posesión o tenencia de una cosa mueble o
inmueble, reclama el amparo judicial frente a actos que implican una perturbación
potencial o efectiva de aquellas situaciones.

3- Recobrarla, en caso de haberla perdido (se usa para los casos de despojo): El
interdicto de recobrar, denominado también interdicto de despojo, es la pretensión
procesal mediante la cual quien ejerce la posesión o tenencia de una cosa mueble o
inmueble de la que ha sido total o parcialmente despojado, reclama judicialmente la
restitución de esa posesión o tenencia.

4- Impedir la prosecución de trabajos que puedan turbar la posesión: Interdicto de


obra nueva: Es la pretensión procesal en cuya virtud el poseedor o tenedor de un
inmueble que es turbado en su posesión o tenencia por una obra nueva que afectare a
ese bien, reclama que la obra se suspenda durante la tramitación del proceso y se ordene
destruir en la sentencia.

No hay ya diferencias en lo que atañe a los recaudos de fondo entre acción e interdicto.
Sin embargo, el Cód. Procesal de la Nación dispone que la primera tramita por vía
sumaria y el segundo por vía sumarísima. Desaparecidas esas diferencias, no se justifica
ya la diversidad de procedimiento. Pero lo cierto es que la doble vía está consagrada en
el Código Procesal, lo que significa que las partes pueden optar por una u otra.
Cualquiera de esas vías que se adopte, el actor vencido no tendrá ya otro recurso que el
petitorio (acción reivindicatoria).

208
Con el tiempo, las acciones fueron reemplazadas por los interdictos, ya que no se debía
probar ni la anualidad ni la falta de vicios; el papel de las acciones posesorias
propiamente dichas (excluida la de despojo, que casi se identifica con los interdictos) se
fue haciendo muy modesto. Pero hay que recordar que el proceso sumario da más
garantías que el sumarísimo, ya que da más probabilidades de probar el derecho que se
invoca. Además, ya no se exige la anualidad o falta de vicios para ejercer las acciones
posesorias.
A diferencia del Código de Procedimiento Civil y Comercial de la Nación, el Código
santafesino no distingue entre interdictos y acciones posesorias.

Trámite: Art. 534: toda acción posesoria o de despojo, deducida conforme con los
derechos conferidos por el Código Civil, seguirá el procedimiento de juicio oral.
En los asientos judiciales de Santa Fe y Rosario los juicios posesorios y de despojo
tramitan por la vía del juicio oral ante los tribunales colegiados de responsabilidad
extracontractual; en los demás asientos, por vía del juicio sumarísimo.

Sentencia y Recurso:
ARTICULO 536. La sentencia será dictada con el alcance consignado en la ley de
fondo. Será apelable en relación y sólo en efecto devolutivo, salvo el caso de obra nueva
en el que el recurso procederá en efecto suspensivo.
Ésta regla es aplicable en los asientos judiciales en los que, por no existir tribunales de
juicio oral, estas cuestiones se elucidan mediante trámite sumarísimo.
Si bien nada obsta a la aplicación de éste artículo en lo relativo al modo y efectos del
recurso, en los Distritos Rosario y Santa Fe en materia de condiciones, causales de
interposición y tramite debe estarse a lo normado para el Recurso de Apelación
Extraordinario por los arts. 564 y ss. CPC y 42 y 43 ley 10160, resultando aplicable lo
dispuesto por el art. 536 en los demás Distritos judiciales.
La sentencia que se dicta en los juicios posesorios y de despojo no hace cosa juzgada
material.

Intervención sustitutiva: Si el demandado declinara su intervención en el juicio y


pretendiera substituirla por la de la persona en cuyo interés ha obrado, la demanda podrá
dirigirse contra ésta, pero si no compareciere o negase su calidad de poseedor, se
seguirá el juicio contra el primer demandado.
Se trata de un caso de intervención sustitutiva. Supone que un tenedor ha sido
demandado en carácter de poseedor. En tal caso, denunciando quién es el verdadero
poseedor, es sustituido por éste sólo si comparece a hacerse cargo del pleito.

209
Bolilla XVI
Por: Walter Estrade

INCIDENTES
CONCEPTO:
Todas las cuestiones contenciosas que pueden surgir durante el desarrollo
del proceso y guarden algún grado de conexidad con la pretensión o petición que
constituye el objeto de aquel. ALSINA
Planteo de toda pretensión meramente procesal que tiene relación directa e
inmediata con el asunto principal y que interfiere de alguna manera (evitando,
suspendiendo o interrumpiendo) la estructura lógica del desarrollo normal de la serie
procedimental. ALVARADO VELLOSO
Toda cuestión que tuviera relación con el objeto principal del pleito y no se
hallare sometida a un procedimiento especial. ROLAND ARAZI

CLASIFICACION:
Pueden ser:
Genéricos, indeterminados o innominados son: Los que no tienen una regulación
específica y se encuentran sujetos a un mismo trámite que la ley establece sin
consideración a la materia sobre la cual versan.
Ejemplos:
Son los que no tienen tramitación propia previamente definida en la ley, el de
suspensión de la serie procedimental por cualquier motivo que no sea la argucion de una
excepción previa, el de fijación de viáticos a un testigo, para que se desplace hasta la
sede del juzgado donde debe declarar, el de tacha al valor de la declaración de un
testigo, el de separación de defensores de oficio, todos los de libertad y rehabilitación en
materia penal, así como, los que interrumpen definitivamente el proceso penal
( amnistía, muerte del acusado, perdón o consentimiento del ofendido)

Determinados, nominados o específicos son: Aquellas cuestiones que han sido objeto
de una específica reglamentación legal, en cuanto al modo en el que deben sustanciarse.
Ejemplos:
Pueden estar previstos o contenidos en la ley, (habitualmente se efectúan dentro del
mismo expediente en el cual tramita la pretensión principal o al lado de él, por cuerda
separada o excepcionalmente ante otro juez) algunos con tramitación propia (arraigo, art
329; declaratoria de pobreza, art 332; acumulación de autos, art 340) y los demás, salvo
disposición en contrario de la ley ( tachas, art 222) tramitan por la vía del juicio
sumarísimo, art 413; cuando la cuestión requiere de pruebas, art 387,3 o por la del
simple traslado, art 89, en caso contrario.
Características comunes a todos ellos son:
a) Valen y se explican solo dentro del proceso y en función de la sentencia que las
partes procuran obtener. En otras palabras, jamás los alcanzan el efecto propio
del caso juzgado,

210
b) Provienen siempre de una actividad (jamás de una inactividad) extraña a la
bilateralidad del instar principal y constituyen en sí mismo una instancia que,
como tal, requiere su propia y necesaria bilateralidad.
Finalmente, las pretensiones incidentales pueden surgir tanto respecto de la afirmada
relación sustancial que ampara a la pretensión como de la relación propiamente dicha.
Desde el punto de vista de su gravitación en el trámite del proceso principal, los
incidentes pueden ser suspensivos o no suspensivos. La regla general es que los
incidentes no suspenden la prosecución del proceso principal, salvo que aquel disponga
lo contrario o que así lo resuelva el juez cuando lo considere indispensable por la
naturaleza de la cuestión planteada.
Además, es necesario distinguir el incidente del llamado juicio incidental, que es el que
tramita conexo a uno principal, pero que, en rigor, constituye un proceso autónomo,
como seria las tercerías, que en nada afectan el objeto del principal y tienen una
finalidad totalmente independiente de este.

Caracteres:
a) Conexo: La cuestión incidental debe tener relación con el objeto principal del
pleito, en rigor, no siempre la finalidad del incidente se relaciona con ese objeto,
sino, con el proceso donde se promueve, ya que en general, por esta vía se
resuelven cuestiones procesales y no de fondo,
b) Accesorio: El incidente constituye un trámite accesorio del proceso principal y,
por ello, su suerte está ligada a la de este; pero precisamente, este carácter
determina que el incidente puede finalizar por un modo anormal, como la
caducidad de la instancia, sin que se vea afectado el principal.

TRIBUNAL COMPETENTE
Es competente el Juez que interviene en el proceso principal (obedece a una razón de
conexidad) este tiene la facultad de conocer de todos sus incidentes, como por ejemplo:
El cobro de las costas, el cumplimiento de la transacción, de la ejecución de la
sentencia, del recurso de rescisión, de las demandas por repetición y del cumplimiento
de las obligaciones otorgadas en garantía o emergentes de la evicción o nacidas por
motivo del proceso (art 5 inciso 9)

LEGITIMADOS PARA SU PROMOCION


Fiscales, Defensores, Síndicos, Partes

CONCENTRACION DE INCIDENTES
Por aplicación de los sistemas de eventualidad, concentración y celeridad, todos los
incidentes que pudieran paralizar el proceso y cuyas causas existiesen simultáneamente
y fuesen conocidas por quien las promueve, deberán ser articulados en un mismo
escrito, siempre que sea posible su tramitación conjunta. De no cumplirse con este
recaudo, los que se entablaran con posterioridad, serán desestimados “in limine”, se
evita de esa manera que el trámite del proceso se paralice en varias oportunidades.
Art. 327 “Todos los incidentes que deban paralizar el juicio y cuyas causas existan
simultáneamente han de promoverse a la vez; no serán admitidos los que se articulen
con posterioridad”.
A) La norma consagra la regla procesal de la eventualidad con efecto preclusión
para la promoción de incidentes.

211
B) Salvo en el periodo de prueba (art 149) los incidentes que paralizan el
procedimiento son: arraigo opuesto como articulo previo (art 329); declaratoria
de pobreza incoada antes o simultáneamente con la demanda (art 333);
acumulación de autos, respecto de ambos pleitos que se intentan acumular (art
341); rescisión, respecto de la ejecución de la sentencia (art 85); caducidad de
instancia y excepciones dilatorias en general ( ver concordancias del art 139);
además, intervención excluyente de tercero en primera instancia, respecto de la
causa principal (art 307); citación de saneamiento impetrada oportunamente,
salvo tramitación de excepciones dilatorias (art 310); tercería de dominio y de
posesión, respecto de la ejecución de la sentencia (art 321); tercería de mejor
derecho, respecto de la realización de los bienes embargados (art 321)

TRAMITE
REQUISITOS DE ADMISIBILIDAD
Los requisitos son formales y de contenido

Formales son: Los referidos a la redacción de todo escrito judicial, a la firma de


letrado, a la agregación de copias etc.

De contenido son: El escrito en el que se plantea el incidente debe estar debidamente


fundado y ofrecerse toda la prueba de la intenta valerse el incidentista.
Presentado el incidente en la forma referida, el juez, por resolución fundada, puede
rechazarlo “in limine” si fuese manifiestamente improcedente; esta resolución será
apelable con efecto devolutivo.
Si el juez resuelve admitir el incidente, dará traslado a la otra parte; este se notificara
personalmente o por cedula dentro de los días de dictada la providencia que lo
ordenare.
El responde se rige por las mismas reglas que la contestación d la demanda, debiendo
ser ofrecida la prueba en esa oportunidad.
Si hubiere de producirse prueba que requiera audiencia, el juez la señalara dentro de una
fecha que no exceda de días desde que se hubiera contestado el traslado o vencido el
plazo para hacerlo; citara a los testigos de las partes no puedan hacer comparecer y
adoptara las medidas necesarias para el diligenciamiento de la que no pueda recibirse en
dicha ausencia. La audiencia de prueba tiene por fin concentrar en un solo acto la
producción de los distintos medios ofrecidos (posiciones, testimonios y explicaciones al
perito). Asimismo, aplicaran los principios generales de la citación por cedula a las
partes y a los terceros. Si la prueba no pudo ser agregada con carácter previo a la
audiencia, se incorporara posteriormente, incluso ante la alzada, de mediar recurso.
Existen diversas limitaciones probatorias; por ejemplo cuando procediese la prueba
pericial, se llevara a cabo por un solo perito designado de oficio, no admitiéndose la
intervención de consultores técnicos; no podrán proponerse más de cinco (5) testigos
por cada parte, y las declaraciones no podrán recibirse fuera de la jurisdicción,
cualquiera fuera el domicilio de aquellos.
Todas estas medidas son consecuencias de la naturaleza del incidente. La celeridad del
trámite impide la declaración testimonial fuera de la jurisdicción del tribunal. Aquello
supone que las declaraciones no pueden recibirse por vía de delegación, circunstancia
que obliga al testigo a trasladarse a la secretaria actuaria, a fin de declarar.
Contestado el traslado o vencido el plazo, si ninguna de las partes hubiese ofrecido
prueba o no se ordenase de oficio o recibida la prueba, en su caso, el juez, sin más
trámite dictara resolución.

212
Las resoluciones pronunciadas durante el trámite son irrecurribles. Independientemente
de ellos, la cámara podrá revisar tanto el procedimiento seguido por el juez recurrido
como el acierto de la resolución que puso término al incidente, cuando trate el recurso
de apelación contra esta.
Tratándose de la decisión recaída sobre el incidente, cabe distinguir la naturaleza del
proceso principal donde se tramito, a saber: a) juicio ordinario, la resolución es
apelable; b) juicio sumario, solo es apelable si la decisión le pone fin al proceso o
impide su continuación o se trata de algún supuesto previsto en el artículo ; c)
sumarísimo, la interlocutoria es inapelable, salvo que se trate de una providencia que
decrete o deniegue medidas precautorias y de ( proceso de ejecución, la resolución es
apelable con efecto diferido en los casos previstos en los artículos .
El artículo 326 define a los incidentes que se sustanciaran acerca o sobre el
procedimiento.

Art 326“No se admitirán sobre el procedimiento otros incidentes que la reposición o la


nulidad.
Se seguirán en pieza separada, a menos que por disposición de la ley deban paralizar el
principal el principal o que, por su naturaleza, exijan una resolución previa. En este
último caso, si la prioridad se refiere únicamente a la sentencia, el proceso principal
seguirá su curso, pero no se pronunciara el fallo hasta que el incidente fuera resuelto
definitivamente.
a) La voz incidente de reposición debe entenderse como recurso de reposición art
344,
b) El incidente de nulidad no procede contra resoluciones judiciales art. 360,
Sino, contra actuaciones ilegitimas provocadas por las partes o por los sujetos
procesales que no son partes y funcionarios que no son el juez.
Y es que, como todo sujeto que interviene en el proceso puede ser causante de
nulidad, cabe distinguir en función de ello la forma o medio de impugnación:

1) Si la nulidad es provocada por la parte procesal (actor- demandado-tercero


convertido en parte-ministerio público, cuando actúa como parte), dicha
impugnación se hace exclusivamente por vía de acción o de excepción. En este
caso, la decisión corresponde al juez de la causa;
2) Si la nulidad es provocada por quien no es parte procesal ni juez (secretario-
oficial de justicia-notificador-perito-testigo-etc.) la impugnación se hace
exclusivamente por vía de incidente en cuya tramitación intervienen solo las
partes en litigio. En este caso, la decisión corresponde al juez de la causa;
3) Si la nulidad es producida por el juez, la impugnación se hace exclusivamente
por vía de recurso de reposición (en la misma instancia) y por el recurso de
nulidad (art. 360, ver concordancias) que procede siempre que sea admisible el
de apelación (art. 361, ver sus concordancias, punto C), sin perjuicio de lo
dispuesto en el artículo 156.
En este caso, la decisión corresponde al superior del juez de la causa (nunca a el
mismo, salvo caso del art. 247, cuando la nulidad se produce en segundo grado de
conocimiento). Para todos los supuestos, los requisitos de la declaración de nulidad
están previstos en los art. 124 y ss. Respecto del recurso de nulidad ver art. 360 y ss.
Ver también cuadro n° 17 de Concordancias explicadas del código procesal civil y
comercial de la Provincia de Santa Fe. De Alvarado Velloso.
Los plazos para resolver están fijados en el art. 105 (dentro de los 5 días)

213
c) Los jueces no son recusables en los incidentes, salvo los supuestos previstos en
el art. 17,7
d) En materia de incidentes rige la regla procesal de la eventualidad (art. 327) y su
promoción está condicionada a la no existencia de duda por costas devengadas
en incidente anterior ( art. 328)
e) Ver el trámite de juicio sumarísimo en el esquema n° 8 de Alvarado Velloso.
CONDENADO EN COSTAS
En cuanto a las costas, deben aplicarse a la parte que resulte vencida en el incidente,
pudiéndosela eximir de esa responsabilidad cuando el juez encuentre mérito para ello y
lo exprese en su pronunciamiento.
ART. 328 “El condenado en las costas de un incidente no podrá promover otro si no
justifica el pago de aquellas. La parte vencedora tendrá derecho a pedir también la
paralización de los tramites del principal mientras no se efectúe el pago”.
La norma consagra una defensa temporaria que paraliza el derecho de acción y que
opera procesalmente como excepción previa (ver concordancias del art. 139).
Para la admisión de la promoción de un nuevo incidente, según lo dispone el art. Citado,
el peticionario debe depositar previamente el importe de las costas a que hubiere sido
condenado; si se lo inicio sin cumplirse con estos requisitos, corresponde intimar el
depósito y no ser rechazado in limine; solo el incumplimiento a la intimación originara
tal rechazo. Siendo un requisito de admisibilidad, corresponde exigirlo de oficio.

DECLARATORIA DE POBREZA
FUNDAMENTO DE SU ADMISION
El fundamento es el principio de igualdad entendido como el acceso real a los órganos
jurisdiccionales de todos los miembros de la comunidad, sin que la situación
patrimonial sea un impedimento.
Tiene raigambre constitucional art. 16, 18, 75 inc.22 C.N. y el Pacto de San José de
Costa Rica y en la constitución Provincial, haciendo que nuestras Leyes procesales
establezcan un sistema para que todos los habitantes tengan un efectivo acceso a la
justicia.
Esta exención provisional de las costas procesales a favor de una parte carente de
recursos para su defensa en juicio y la utilización de los órganos jurisdiccionales. El
beneficio de litigar sin gastos denominado “declaración de pobreza” en nuestro código
procesal exime al actor “no pudiente” de prestar fianza o caución real suficiente, según
el art. 330,3

QUIENES PUEDEN SER DECLARADOS POBRES


El art 332 describe: “Sera considerado pobre el que acredite no poseer bienes por
mayor valor de $15.000 ni renta mensual que exceda de $2000 y el que por cargas de
familia u otras circunstancias no pueda sufragar los gastos de su defensa, siempre que
esa situación no haya sido creada por actos que verosímilmente lleven a presumir el
propósito de eludir las responsabilidades emergentes del proceso.
En la estimación del valor de los bienes, no serán incluidos los muebles y enseres que
las leyes declaran inembargables”.

OPORTUNIDAD DE SU PLATEAMIENTO
El art. 333 dice: La solicitud podrá formularse en cualquier estado del proceso. Si lo
fuera antes o simultáneamente con la demanda, suspende el curso de esta; en caso
contrario proseguirán los procesamientos.

214
Se sustanciara por el trámite del juicio sumarísimo, con el litigante contrario o que haya
de serlo y con el agente fiscal. La sentencia que declare la pobreza solo será apelable en
efecto devolutivo.
Si el demandado no se hubiera opuesto a las pretensiones del peticionario, el juez
establecerá las costas en el orden causado.

TRAMITE
El trámite sumarísimo está regulado en el art. 413 y ss. del CPC.
Art.413 En los juicios declarativos generales cuya cuantía no exceda de la fijada para la
competencia por valor de la justicia de paz departamental, en los juicios cuyo monto no
exceda de $10.000 y en los demás casos en que corresponda el tramite sumarísimo, el
proceso se ajustara a las normas siguientes:
1) Con la demanda, el actor ofrecerá toda la prueba de que pretenda valerse.
Acompañará los documentos que obraren en su poder; sino los tuviere, los
individualizara indicando su contenido y el lugar donde se encuentre;

2) El demandado será emplazado para que conteste la demanda dentro del término
de 10 días, o de 3 si se tratare de incidente. Con la cedula de emplazamiento se
le entregara copia de la demanda, bajo apercibimiento de que sino la contesta se
dictara sin más trámite y conforme a derecho la sentencia que corresponda. Esta
será notificada en la forma ordinaria o, en su caso, de acuerdo con el art. 77. Si
el domicilio del demandado no fuere conocido se lo emplazara únicamente a
estar a derecho;

3) En el escrito de responde, deberá el demandado oponer todas sus defensas y


excepciones y ajustarse en cuanto a la prueba, a los mismos requisitos previstos
para el actor;

4) Fuera de los momentos indicados, no se admitirán ninguna otra prueba, como


tampoco la de confesión o documental. El actor podrá, sin embargo, proponer la
que fuere pertinente y relativa a los hechos nuevos que adujere el demandado en
su respuesta, dentro de 3 días de notificada esta;

5) Contestada la demanda, el juez fijara una audiencia para la vista de la causa,


dentro de 30 días, plazo que solo podrá ampliarse en el caso del art. 403, siempre
que se lo solicite en los escritos constitutivos del proceso. En aquel decreto se
dispondrá las medidas conducentes a recibir antes de la audiencia toda la prueba
admitida. A las partes incumbe urgir los trámites pertinentes para que aquella se
produzca en su oportunidad;

6) En la audiencia de vista de causa las partes informaran sobre el mérito de la


prueba. A este fin, el juez concederá la palabra al actor y al demandado,
respectivamente o a sus procuradores, representantes legales o patrocinantes. La
exposición de cada parte no podrán durar más de 20 minutos. La sentencia será
dictada en la misma audiencia o dentro de 5 días;

7) Cuando después de dictada la sentencia se produjere prueba pericial o de


informes, ofrecida en tiempo, se agregara a los autos y se tendrá como prueba de
segunda instancia, sin necesidad de nuevo ofrecimiento.

215
RECURSOS
De apelación legislado en el art. 346 2° párrafo
Art 346 El recurso de apelación, salvo lo dispuesto en casos especiales, procederá
solamente:
2° párrafo: De los autos que resuelvan incidentes siempre que causen un gravamen que
no pueda ser reparado por la sentencia definitiva;

COSAS EFECTOS DEL PEDIDO EFECTUADO DURANTE EL TRÁMITE


Art. 334 Durante el trámite de la pobreza, cuando esta hubiera paralizado el
procedimiento del principal, el peticionante será considerado pobre al solo efecto de
solicitar medidas urgentes o de seguridad o formular pedidos que deban interrumpir la
prescripción o la perención de instancia.
Ver concordancias art. 332 punto f de ALVARADO VELLOSO

ALCANCE DE LA SENTENCIA QUE SE DICTE


ART 335 La declaratoria de pobreza aprovecha tan solo a la defensa de los derechos
pertenecientes al pobre, sea originariamente o por herencia.
El beneficio de pobreza comprende el derecho de actuar en juicio libre de todo
impuesto, tasa o contribución de carácter fiscal, como también obtener sin cargo
testimonios o copias de instrumentos públicos y publicaciones de edictos en el boletín
oficial cuando fuere menester.
a) El derecho de actuar sin el pago de impuestos o tasas judiciales se acuerdan
conforme lo dispuesto en el art. 34, salvo lo regulado en los art. 336 y 337.
b) La declaratoria de pobreza firme hace improcedente el arraigo del juicio (art.
330,3)
c) En caso de diligenciamiento de exhortos, la declaración de pobreza tiene el
efecto previsto en el art. 104, salvo lo dispuesto en el art.336.
EFECTOS DE ELLA
PAGOS DE LAS COSTAS
Está regulado en los art 336 y 337 CPC
Art. 336 El declarado pobre no estará exento del pago de las costas en que hubiera sido
condenado si tiene bienes con que hacerlo.
La vivienda del trabajador o sus causahabientes no podrá ser afectada al pago de las
costas en caso alguno. Agregado por el art 5 de la LP 11.025
a) La norma alcanza a todos los supuestos previstos en el art 260, y concordantes
(art 250)
Art. 337 Si el declarado pobre venciere en el pleito, deberá pagar las costas causadas en
su defensa hasta la concurrencia de la tercera parte de los valores que reciba.

SOLICITUD DE NUEVA POBREZA


Art. 338 No se podrá iniciar nueva solicitud de declaratoria de pobreza sin reponer el
sellado de la anterior rechazada y del principal y sin invocar motivos posteriores.
Esta norma y la contenida en el art. 339 establecen los efectos de cosa juzgada formal
de la declaratoria de pobreza.
Art. 339 A pedido de parte y por los mismos tramites, podrá declararse caduca la
pobreza si su titular dejare de reunir los requisitos del art. 332.

216
Bolilla XVII
Por: Matias Pautasso

ACTOS DE JURISDICCIÓN VOLUNTARIA

1- Actos de jurisdicción voluntaria:


En ocasiones, a pesar de no existir conflicto alguno por resolver, el legislador impone
que ciertos trámites se realicen ante los jueces. Ello obedece a razones de política
legislativa: el legislador, por motivos programáticos, prefiere que a esos trámites los
efectúen los jueces y no organismos administrativos tales como: rectificación de
partidas, venias supletorias para realizar ciertos actos; etc.
Se denomina voluntario al procedimiento mediante el cual los sujetos -llamados
peticionarios o solicitantes- requieren de los órganos judiciales la emisión de un
pronunciamiento que constituya, integre o acuerde eficacia a determinado estado o
relación jurídica privada, verifique las formalidades legales del acto y le de autenticidad.
Por ejemplo: a partir del nacimiento de un hijo, el padre tiene cierto plazo para efectuar
por el mismo la respectiva anotación en el Registro de las Personas, pero después de su
vencimiento, ya no puede lograr por si tal inscripción, sino que requiere que la orden del
caso la emita un juez. A tal efecto, debe realizar un acto de jurisdicción voluntario.

El ejemplo dado muestra un simple procedimiento administrativo que vincula


exclusivamente a dos sujetos -quien insta y la autoridad- y no un verdadero proceso
como fenómeno jurídico único que relaciona a tres personas.
En otras palabras: de acuerdo con lo afirmado antes parece obvio aceptar que no todas
las tareas que cumplen los jueces ostentan el carácter jurisdiccional, del mismo modo
que no todas las que realiza el Poder Legislativo se concretan exclusivamente en la
sanción de la ley. Ambos pueden realizar y realizan actividad administrativa. Y esta es
la esencia de la mayoría de estos actos en estudio, que generan simples procedimientos.

Se prefiere llamar a estos procedimientos "no contenciosos" o "no jurisdiccionales"


en vez de “voluntarios” o simplemente, peticiones judiciales no jurisdiccionales. Esto
por dos razones:
1) Porque no se trata de una actividad jurisdiccional ya que ésta supone la existencia
de un conflicto actual o eventual y en estos casos no hay conflicto alguno que resolver
sino simples peticiones hechas a los magistrados judiciales.

2) El término “voluntaria” hace pensar, por oposición, en una jurisdicción obligada, lo


cual no es exacto, dado que en términos generales, ninguna persona se encuentra
obligada a reclamar sus derechos a la jurisdicción.
El procedimiento no contencioso se caracteriza porque no existe conflicto que deba
resolver el juez; por lo tanto no se presentan “partes”, en sentido estricto, sino
peticionarios o solicitantes. Es una declaración de voluntad petitoria, ya que persigue

217
una decisión en relación con el sujeto o los sujetos que reclaman el ejercicio de la
actividad judicial en el caso concreto.
Además, el juez cuando lo resuelve, emite una declaración basada en los elementos
aportados por el peticionario en forma unilateral, por lo tanto, la declaración no produce
efectos de cosa juzgada respecto de terceros que resulte eventualmente afectados por
ella.
Nada obsta para que, por medio de una ley, dichos trámites se efectúen ante
organismos administrativos y no ante jueces, ya que no es función jurisdiccional. Es
distinto el caso de la actividad propiamente jurisdiccional que es de competencia
exclusiva y excluyente del Poder Judicial.

Fundamentos:
Para justificar la circunstancia de que se encargue a los tribunales de justicia el
desarrollo de esta actividad, se dan fundamentalmente tres razones:
1. Razón histórica: Se dice que el hecho de que los tribunales desarrollen esta actividad
es una tradición jurídica que deriva del derecho romano. En Roma no existía
separación entre las distintas funciones del Estado, de manera que los magistrados
conocían no sólo de los asuntos jurisdiccionales propiamente tales, sino que también
de muchos otros que era necesario rodear de cierta autenticidad.
2. Razón de conveniencia social: Se dice que es conveniente encargar a los tribunales
de justicia el desempeño de esta actividad para asegurar con eficacia la
comprobación de los antecedentes de hecho y de derecho que los interesados
esgriman en apoyo de sus peticiones.
3. Razón de conveniencia procesal: Los asuntos voluntarios pueden transformarse en
contenciosos concurriendo determinadas condiciones. Y por ello, resulta más
conveniente entregar el conocimiento de los negocios voluntarios al mismo órgano
que debería conocer del negocio contencioso, en caso de operar la transformación.
Características:
1. Los tribunales no pueden ejercerla, sino en aquellos casos en que una ley expresa así
lo disponga.
2. En los asuntos que son objeto de esta actividad no se promueve contienda entre
partes, es decir, no existe alguien que pretenda algo en contra de otro.
3. En esos mismos asuntos no existen partes, solo hay uno, que recibe el nombre de
interesado.
4. Las sentencias que se pronuncian en los asuntos que son materia de esta actividad,
sólo producen cosa juzgada en determinadas condiciones.
5. En los asuntos no contenciosos no tiene influencia el fuero del interesado, para
determinar el tribunal absolutamente competente. Dándose ciertos requisitos, los
asuntos voluntarios pueden transformarse en contenciosos.
Finalidad:
Los actos no contenciosos son muy numerosos, y cada uno de ellos persigue una
finalidad distinta, de manera que no es posible establecer un objetivo único.

218
Pero, sistematizando la finalidad perseguida por los diversos actos voluntarios,
pueden señalarse como finalidades de esta actividad de los tribunales, las sgtes.:
1) Proteger los intereses de incapaces, velando porque ellos actúen en la vida
jurídica con la debida garantía. Ej. nombramiento de tutores y curadores.
2) Completar la capacidad de ciertas personas, para que puedan actuar
eficazmente en la vida jurídica. Ej. autorización judicial para enajenar,
cuando se trata de los bienes de ciertos incapaces.
3) Declarar solemnemente un derecho que le corresponde al interesado. Ej.
dación de la posesión efectiva de la herencia.
4) Autentificar determinados actos de particulares. Publicación y
protocolización de testamentos; apertura de los mismos.
5) Constituir estados jurídicos nuevos. Ej. adopción en ciertos casos.
6) Evitar fraude a terceros. Ej., insinuación de donaciones.

Principios generales de la tramitación:


En el CPC los artículos 667 y 668 establecen al respecto que:
1.- “Los actos de jurisdicción voluntaria que no estuvieren legislados en el
Código se substanciarán en lo pertinente por el trámite del juicio sumario, con
intervención fiscal o de la persona cuyos intereses pudieren ser afectados siempre que se
encontrare en el lugar y pudiere ser habida”.
El agente fiscal interviene en los actos de jurisdicción voluntaria.
Cuando se trata de actos de jurisdicción voluntaria, la demanda debe ajustarse en lo
pertinente a los requisitos del art. 130, las audiencias pueden ser cometidas al actuario
siempre que exista acuerdo de partes y no se aplica el instituto de la caducidad de
instancia.

ARTICULO 130. (Texto cfr. Ley 13.151) La demanda será deducida por escrito y
expresará:
1) el nombre, domicilio real y legal, nacionalidad, estado civil, profesión u oficio del
demandante;
2) el nombre y domicilio del demandado, si se conocieren;
3) la designación precisa de lo que se demanda y su apreciación pecuniaria. Cuando no
fuere posible fijarla con exactitud, se suministrarán los antecedentes que puedan
contribuir a su determinación aproximada;
4) las cuestiones de hecho y de derecho, separadamente. Las primeras serán numeradas
y expuestas en forma clara y sintética, omitiéndose toda glosa o comentario, los que se
podrán hacer en la parte general del escrito;
5) la petición en términos claros y precisos.
En su caso, el escrito de demanda será acompañado del acta de finalización del
procedimiento de mediación prejudicial obligatoria.

ARTICULO 131. Los jueces no darán curso a las demandas que no se deduzcan de
acuerdo con las prescripciones establecidas, indicando el defecto que contengan.
Podrán, también, ordenar que el actor aclare cualquier punto para hacer posible su
admisión.

219
Art. 17 inc. 6) En los juicios y actos de jurisdicción voluntaria, a no ser con
causa o que se trabe contienda, debiendo en este caso deducirse la recusación dentro de
los tres días de planteada la controversia.
En los actos de jurisdicción voluntaria relativos a un incapaz y siempre que éste
demande o sea demandado, es promiscuamente representado por el ministerio de
menores, como parte legitima y esencial y bajo sanción de nulidad.

Competencia:
Es competente el juez del domicilio de la persona en cuyo interés se promoviere, Juez
de Primera Instancia de Distrito en lo Civil y Comercial.
2.- “En los actos de jurisdicción voluntaria, procederá el recurso de apelación y
sólo en efecto devolutivo si la demora hubiere de irrogar perjuicio al solicitante”.
La determinación del efecto es privativa del juez, quien debe apreciar con prudencia las
circunstancias del caso.

Examen de los libros sociales:


El derecho acordado a los socios para examinar los libros de la sociedad se llevará a
efecto sin trámite alguno (salvo obviamente acreditar el carácter de socio) articulo 669
CPC de la provincia.
El principio general en materia de examen de libros por parte de los socios, es que
éstos tienen el derecho a examinar el estado de los negocios sociales y exigir a ese fin la
presentación de la documentación. La oposición o resistencia del ejercicio de ese
derecho autoriza al socio requirente a recurrir judicialmente para que este derecho se
haga efectivo.

Venta de mercancías por cuenta del comprador:

En los casos en que la ley autoriza al vencedor la venta de las mercaderías en remate
público por cuenta del comprador, el juez la decretará con citación de éste si estuviere
en el lugar del juicio, o del agente fiscal en su defecto sin determinar si la venta se hace
o no por cuenta del comprador.

El CPC de la Nación Capítulo VI - Reconocimiento. Adquisición y Venta de


Mercaderías

Artículo 782 - Reconocimiento de mercaderías. Cuando el comprador se resistiese a


recibir las mercaderías compradas, sosteniendo que su calidad no es la estipulada, si no
se optare por el procedimiento establecido en el Artículo 773, el juez decretará, sin otra
sustanciación, a solicitud del vendedor o de aquél, su reconocimiento por uno o tres
peritos, según el caso, que designará de oficio. Para el acto de reconocimiento y al solo
efecto de controlarlo y formular las protestas escritas que considere pertinentes, citará la
otra parte, si se encontrare en el lugar, o al defensor de ausentes, en su caso, con la
habilitación de día y hora.

Igual procedimiento se seguirá siempre que la persona que deba entregar o recibir
mercaderías, quisiera hace constar su calidad o el estado en que se encontraren.

Artículo 783 - Adquisición de mercaderías por cuenta del vendedor. Cuando la ley
faculta al comprador para adquirir mercaderías por cuenta del vendedor, la autorización
de éste, quien podrá alegar sus defensas dentro de tres días.

220
Si el vendedor no compareciere o no se opusiere, el tribunal acordará la autorización.
Formulada oposición, el tribunal resolverá previa información verbal.

La resolución será irrecurrible y no causara instancia.

Artículo 784 - Venta de mercaderías por cuenta del comprador. Cuando la ley
autoriza al vendedor a efectuar la venta de mercaderías por cuenta del comprador, el
tribunal decretara el remate público con citación de aquél, si se encontrare en el lugar, o
del defensor de ausentes, en su caso, sin determinar si la venta es o no por cuenta del
comprador.

Protocolización:

La protocolización es la de incorporar al protocolo notarial una escritura matriz u otro


documento que requiera esta formalidad. Esto a los fines de darle: autenticidad, fecha
cierta, y los efectos de todo instrumento público.
El protocolo es un libro de registro. Está constituido por una serie de pliegos de papel
sellado, los que llevan una numeración propia y deben estar rubricados por el colegio de
escribanos.
1) Instrumentos públicos:
La solicitud se substanciará con intervención del agente fiscal. Igual trámite se dará a
todo pedido de protocolización de cualquier instrumento respecto de la que se requiera
autorización judicial.

2) Testamento cerrado:
Testamento es un acto escrito, celebrado con las solemnidades de la ley, por el cual
una persona dispone del todo o parte de sus bienes para después de su muerte.
Habrá “testamento cerrado” cuando el testador entregue al escribano un pliego
conteniendo las disposiciones testamentarias dentro de un sobre cerrado, y
manifestando, en presencia de testigos, que lo escrito en el pliego es su testamento.
Debe estar firmado por el testador, pero no se exige que esté escrito por él. El sobre
debe estar firmado y fechado por el testador, el escribano y los testigos.
Todo el que tenga interés en un testamento cerrado puede presentarlo o pedir su
exhibición, comprobando la muerte del testador.
Presentado el testamento, el juez levantará acta que exprese el estado material en que
se encuentre, la que podrá ser suscripta por los interesados que asistieren.
Extendida esta diligencia, el juez citará al agente fiscal, al escribano y testigos a una
audiencia para la apertura del testamento. Se citará igualmente a los herederos que se
hallen presentes o que tengan domicilio conocido.
En la audiencia, se procederá a recibir declaración a los testigos y al escribano sobré
la autenticidad de sus firmas, la del testador y sobre si el testamento está cerrado como
lo estaba cuando él lo entregó.
Si no pudieren comparecer todos los testigos, por muerte o ausencia fuera de la
Provincia, bastará el reconocimiento de la mayor parte de ellos y del escribano. Si por
iguales causas, no pudieren comparecer el escribano o los testigos, el juez admitirá la
prueba pericial.
Acreditada la autenticidad por información bastante o prueba pericial, en su caso, se
dictará el auto de apertura y de protocolización del testamento.

221
Ejecutoriado el auto de apertura, se abrirá el testamento conservando íntegra la
cubierta, se rubricará por el juez el principio y el fin de cada página y se dará lectura a
los interesados.

3) Testamentos ológrafos:
Testamento ológrafo es que ha sido escrito, en su totalidad, fechado y firmado por la
mano misma del testador.
Presentado el testamento ológrafo (y la partida de defunción), el juez rubricará
(firmará) el principio y el fin de cada página y designará audiencia para la
comprobación de la letra y firma del testador. Si estuviere cerrado, se procederá a su
apertura.
Serán citados a la audiencia, el agente fiscal, los herederos ab intestato que se hallaren
presentes y con domicilio conocido, los herederos instituidos y el defensor respectivo si
hubiere incapaces o ausentes.
Acreditada la autenticidad de la letra y firma, se dictará auto mandando protocolizar
el testamento.

4) Testamentos especiales:
Las formas especiales de testar son aquellas que pueden utilizarse en situaciones
excepcionales. Tiene la misma eficacia que los ordinarios pero, la característica
fundamental del testamento especial es que su validez se encuentra sujeta a un período
de tiempo, vencido dicho período se produce la caducidad del testamento (ej. testamento
militar, testamento marítimo).
Todo testamento que no sea cerrado u ológrafo hecho fuera de los protocolos
públicos en forma autorizada por la ley será protocolizado previa vista al agente fiscal.

Reposición de Escrituras Públicas:


Razones de seguridad jurídica imponen estas cuestiones.
Son escrituras públicas aquellos instrumentos públicos otorgados por los escribanos
públicos, en sus libros de protocolo, o por otros funcionarios con las mismas
atribuciones (como podría ser por ej. un juez de paz en caso de que no haya escribano
público en el lugar), y las copias de esos libros.
El escribano puede dar, a la parte que lo pidiese, copia autorizada de la escritura que
hubiere otorgado. Las partes tienen derecho de reclamar testimonio o copia de la
escritura matriz que el escribano extiende en su protocolo todas las veces que lo deseen.
Aunque tratándose de escrituras que tienen una obligación de dar o hacer, se requiere
autorización judicial.
La segunda copia de las escrituras públicas en los casos que su obtención requiera
autorización judicial, se otorgará con citación de los que hubieren participado en ella o
del agente fiscal, en su defecto. Si se dedujere oposición, se seguirá el trámite del juicio
sumario.
Las partes son los otorgantes y eventualmente, los sucesores universales o singulares.
Si está ausente alguno de los que participaron en la escritura, el agente fiscal estará
presente al momento de sacar dicha copia.
Las copias expedidas por la vía judicial deberán tener los mismos requisitos que las
dadas por escribano., la cláusula de suscripción y la nota marginal que consigne su
expedición.
La reposición de títulos por medio de la prueba sobre su contenido, en los casos en
que no sea posible obtener segunda copia se substanciará con intervención del

222
Ministerio Fiscal, en la misma forma que la reposición por medio de la segunda copia.
E1 título supletorio será protocolizado.

Declaración y cesación de incapacidad, artículos 682-686 CPC


Si bien hay supuestos de "incapacidad que no necesitan de declaración judicial, como
el caso de las personas por nacer y los menores, se requiere un pronunciamiento judicial
para declarar incapaz a una persona por demencia o sordomudez si el afectado no sabe
darse a entender por escrito.

Declaración:
La capacidad es la aptitud jurídica para adquirir derechos y contraer
obligaciones.
La declaración de incapacidad deberá solicitarse por parte legítima, y se
substanciará por el trámite de juicio sumario, ante los tribunales colegiados de familia.
Presentada la solicitud, el juez nombrará un curador provisorio para que
represente al incapaz en el juicio (curador ad litem). Todas las actuaciones se harán con
intervención del defensor general y del peticionario.
Si la incapacidad fuera notoria o el juez tuviese conocimiento de ella, se
mandarán entregar bajo inventario los bienes del incapaz a un curador provisorio, que
“podrá” ser (o no) el mismo que se hubiere nombrado para el juicio y se decretará la
inhibición general del presunto incapaz. Este curador no es indispensable (curador ad
bona), solo se nombra si hay bienes (el ad litem sí es indispensable).
Es esencial en este procedimiento, el informe pericial de 3 facultativos si los
hubiere en el lugar. Si el presunto incapaz estuviere recluido en un establecimiento
oficial, el informe podrá ser producido por médicos del mismo.
El dictamen de los peritos psiquiátricos deberá contener el diagnóstico; fecha
aproximada en que la enfermedad se manifestó; si sería mejor o peor internarlo.
El juez, siempre que fuere posible, deberá tomar conocimiento directo y personal
del presunto incapaz si éste pretendiere ser oído, será admitido como parte (puede
ofrecer pruebas que hagan a la defensa de su capacidad).
Para declarar incapaz a una persona por demencia es necesario que, por causa de
enfermedad mental, no tenga aptitud para dirigir su persona o administrar sus bienes.
Declarada la incapacidad, se nombrará curador definitivo.
Las costas serán siempre a cargo del insano cuando resulte que el denunciante no
ha procedido, en la denuncia y en su actuación procesal ulterior, si la asumiere, con
temeridad o imprudencia. Lo mismo se resolverá cuando el proceso no llegue a su
término por motivo imputable al denunciante.

Cesación: La cesación de la incapacidad se obtendrá por los mismos trámites y


previo el nombramiento de curador provisorio que represente al incapaz, salvo que la
petición se formule por el curador definitivo. Rige en lo pertinente lo dispuesto para la
declaración.

Recursos: La sentencia sobra incapacidad o su cesación es apelable. Cuando


declare la incapacidad lo será sólo en efecto devolutivo.

* Nota: La declaración de demencia deberá hacerse a solicitud de parte legitimada,


nunca de oficio. Las partes legitimadas para pedir la declaración de demencia son:
 el esposo o esposa no separados personalmente o divorciados;

223
 los parientes del demente;

 el ministerio de menores;

 el respectivo cónsul, si el demente es extranjero:

 cualquier persona del pueblo si el demente es furioso o incomoda a sus vecinos.


Pueden pedir la declaración de sordomudez las mismas personas que pueden solicitar
la declaración de demencia.

Tutela. Curatela y Suspensión de la Patria Potestad, artículos 687-688 CPC.


Cúratela: es la representación de los incapaces interdictos mayores de edad.

Tutela: es el derecho que la ley confiere para gobernar la persona y bienes del menor
de edad, que no está sujeto a patria potestad (ya sea por no tener padres o por la
suspensión temporal o permanente de su ejercicio), y para representarlo en todos los
actos de la vida civil. Para ejercer las funciones de tutor, cualquiera sea la categoría de
la tutela (testamentaria, legal, dativa, especial), el cargo debe ser discernido por el juez
competente, quien autorizará al tutor nombrado o confirmado. Las normas sobre la
tutela se aplican a la cúratela.

El cargo de tutor debe ser discernido por el juez, quien ejerce el control, no sólo de la
legitimidad o validez formal del acto sino también del mérito, evaluando si el nombrado
es apto o no para representar al menor.

El discernimiento es el acto jurisdiccional por el cual el tutor queda investido


jurídicamente de su calidad de tal.

El nombramiento de tutor o curador y la confirmación del que hubieren efectuado los


padres, se hará a solicitud del ministerio de incapaces o con su intervención, sin forma
de juicio, a menos que alguien pretendiere tener derecho a ser nombrado: en este caso se
substanciará su pretensión enjuicio sumarísimo.
Si el menor fuese mayor de 14 años, el juez deberá oírlo respecto a la elección de
tutor.
El auto que recayere será apelable.
Confirmado o hecho el nombramiento, se procederá al discernimiento del cargo,
levantándose acta en que conste el juramento o promesa de desempeñarlo fiel y
legalmente y la autorización judicial para ejercerlo. El acta debe estar autorizada por el
actuario (secretario del juzgado que da fe de ciertos actos y autoriza con su firma
determinadas actuaciones).

 Nota: Extendida el acta, el tutor está facultado legalmente para actuar, pero
deberá además inscribirse en el Registro Público de incapaces para que sus actos
produzcan efectos respecto de terceros.

Suspensión de la patria potestad:


Se substanciarán por el trámite del juicio sumarísimo, ante el tribunal colegiado de
familia, la suspensión o limitación de la patria potestad y la remoción de tutores y
curadores, con intervención de la parte que la hubiere solicitado y del defensor general.

224
Autorización para contraer matrimonio, artículos 689-691 CPC.
El procedimiento para obtener la autorización judicial para contraer matrimonio
puede promoverse con 2 fines distintos:
1.Licencia o dispensa judicial: es suplir la falta de padres o representantes legales cuyo
asentimiento se requiere para celebrar el acto. Este es un procedimiento no contencioso.
2.Juicio de disenso: para resolver la oposición formulada a la celebración del
matrimonio, el cual tiene carácter contencioso, porque quienes tienen la facultad de
conceder dicha autorización se nieguen a otorgarla (por ej. por inmadurez del menor o
conducta desordenada de la persona que pretende casarse con el menor)
La autorización para contraer matrimonio se acordará en el juicio verbal, privado y
meramente informativo, ante los tribunales colegiados de familia, con intervención de la
persona que deba prestar la autorización y del defensor general.
La licencia judicial para el matrimonio de los menores o incapaces sin padres, tutores
o curadores será solicitada y substanciada en la misma forma, con audiencia de los
ministerios públicos.
El auto que recayere será apelable y el superior pedirá al juez un informe verbal sobre
las razones que haya tenido para resolver.

* Nota: En caso de tratarse de una mujer menor de edad que hubiere de contraer
matrimonio contra la voluntad de sus padres, progenitores o curadores, puede decretarse
el depósito de la misma.

Declaración de simple ausencia y con presunción de fallecimiento, articulo 692


CPC.
La declaración de simple ausencia se substanciara por el procedimiento del juicio
sumarísimo y la de ausencia con presunción de fallecimiento por el sumario, con
sujeción a los términos y normas del Código Civil y leyes especiales.
En ambos casos, el cargo de curador de los bienes y el de defensor del ausente podrá
recaer en la misma persona.

Pero el ausente no es un incapaz, él no obra por sí mismo justamente porque está


ausente.

- Simple ausencia: Tiene como requisitos: la ausencia de la persona de su domicilio


más la falta de noticias sobre su existencia; bienes abandonados y falta de apoderado.
Se procura adoptar medidas para proteger los bienes del ausente mediante la
designación de un curador a sus bienes. A lo cual se llega mediante la declaración de
ausencia.
Pueden denunciar la ausencia:
a) Toda persona que tiene un interés legitimo respecto de los bienes del ausente:
herederos, acreedores, etc.;
b) Ministerio Público en representación de un incapaz, como ser los hijos
menores del ausente.
Se publica un edicto durante 5 días citando al ausente. Si no aparece se declara la
simple ausencia y se nombra curador a los bienes, quien sólo administra, no puede
disponer salvo caso de urgencia con autorización judicial. Son preferidos para designar
como curador el cónyuge; los hijos; el padre o la madre; hermanos o tíos.

225
Bolilla XVIII
Por: Milagros Graells y Susana Pino

JUICIO SUCESORIO
Se denomina proceso sucesorio al proceso judicial encaminado a asegurar la
transmisión de la herencia del causante a favor de la persona o personas llamadas por la
ley o por el testamento.
-determinar la tasa transmitida en su aspecto activo y pasivo
-Tomar medidas cautelares
-Proveer el régimen de administración, liquidación y partición de esa masa en caso de
indivisión.
Se trata de un proceso de jurisdicción voluntaria, pero puede ocurrir que se convierta en
contenciosa, si concurren sucesores que invocan derecho que se excluyan
recíprocamente. O aunque sean concurrentes, desistir sobre los actos de administración.

Clases de procesos sucesorios:


Sucesión legítima (ab intestado o intestado) que tiene lugar cuando la sucesión se
detiene por voluntad de la ley, y la sucesión testamentaria que ruega cuando lo es por
voluntad del hombre manifestado en testamento valido.
La ley puede intervenir de dos maneras:
1)- tiene lugar cuando existe determinada categoría de herederos que reciben al nombre
de forzosos o legitimarios, los que no pueden ser privados de una determinada porción
de la herencia o de los bienes.

2)-ocurre cuando el causante no ha expresado su voluntad mediante un testamento y


entones la ley interpreta cual hubiere sido ella y elige en primer lugar a la línea
descendiente, luego a la ascendiente y por último a la colateral.
Los herederos testamentarios: no gozan del derecho
Algunos herederos ab intestado como los forzosos si la tiene.

INTESTATA: cuando no hay testamento o cuando habiéndolo no hay en él,


institución de herederos.
La regla se extiende a los casos en que el testamento es invalido, los herederos
instituidos son incapaces de serlo, repudian la herencia o son declarados indignos, o
cuando exista un testamento en que se instituye al menos un heredero.

SUCESIÓN MIXTA: la presencia imperativa de la ley en protección a los


herederos forzosos nos colocarían frente a una sucesión ab intestato y por el o no nos
encontramos con una sucesión testamentaria.

Competencia
El juez del último domicilio del causante es el competente para entender en su secesión,
este principio se mantiene aunque exista un solo heredero en nuestra provincia su
conocimiento corresponde a la justicia de 1° instancia de distrito civil y comercial.
En primer término para ciertas personas debe estarse a su domicilio legal para la fijación
de competencia sucesoria.

226
Luego tenemos la hipótesis más frecuente de personas que solo tienen domicilio real.
Generalmente en las partidas de defunción consta el último domicilio del difunto, pero
como esta prueba el derecho y el lugar en que ocurrió, pero no el domicilio que tenía el
causante, tal constancia es solo una presunción que admite prueba en contrario sin
necesidad de impugnar el documento.

Es necesario comprobar el último domicilio, al fallecer el causante en otra parte, aun en


el extranjero, proveyendo información sumaria ante el juez a quien la parte considera
competente y valerse de todo género de pruebas.
Por último si la prueba del domicilio del causante es dudosa o contradictoria se admite
que la competencia se determine por el domicilio de los únicos herederos presentados, si
no hay otros que la contradigan o si forman la mayoría de ellos, pero si la duda versa
sobre cuál fue el ultimo domicilio real, se debe tener como tal el lugar donde falleció.

Casos especiales:
Sucesiones vinculadas: nos encontramos ante juicios sucesorios de dos personas cuya
relación es de orden patrimonial, pues existe identidad aunque sea parcial de mora
hereditaria y en donde la partición aún no se ha efectuado, pensándose entonces que
además de manifiestas razones de conexidad, importantes motivos de economía
procesal, aconsejan su acumulación ya que resulta conveniente que un mismo juez
entienda en la división y liquidación de un patrimonio común.
La vinculación o conexidad es patrimonial y no de parentesco, la sucesión del heredero
testamentario puede acumularse a la del causante si es el único patrimonio que se
denuncia o la mayoría de los bienes son los que recibe esta. Pero esta prórroga la
aceptamos en razón del turno, más no si se pretende hacerlo con la territorial ya que la
prorroga expresa o implícita que se admite de esta, lo es cuando se litiga en base a
derechos transigibles por hallarse en juego intereses meramente privados y no cuando
afecten el interés o el orden público.

Iniciación simultaneas ante distintos jueces: con frecuencia ocurre que la sucesión de
una persona es iniciada en forma más o menos simultanea por distintos interesados ante
diferentes jueces de la misma jurisdicción, se hace necesario disponer la acumulación de
autos como regla debe estarse al que primero si inicio.
El registro de procesos universales crea un mecanismo orientado a conocer a iniciación
de la sucesión y evitar así la sustanciación de procesos sucesorios relativos al mismo
causante.
Es necesaria la presentación ante el mismo, por duplicado y dentro de 3 o 10 días de
iniciado el proceso, de un formulario en que consten los datos indispensables para la
individualización del difunto y el juzgado donde aquel radica; el registro devuelve a los
interesados uno de los ejemplares, en el que certifica si existe o no otro proceso similar
respecto al mismo causante, debiendo ese ejemplar ser agregado a la causa, sino se
cumplen estas diligencias, el juez de oficio debe intimar su cumplimiento por el termino
de dos(2) días, bajo apercibimiento de tener al interesado por desistido y ordenar el
archivo de las actuaciones.

Caso en el que el ultimo domicilio del causante sea en el extranjero y existan bienes en
nuestro país si aquí quedan bienes que deben estar sujetos a la ley nacional será
competente el juez argentino donde se encuentren y si los hay en varias jurisdicciones
cualquiera de ellos a la elección de quien inicie el juicio y si se hubieran iniciado en dos
o más lugares la acumulación se hará sobre el primero que previno.

227
Nuestra ley adopta el sistema de unidad, estableciendo que el derecho de sucesión al
patrimonio del difunto se rige por la ley de su último domicilio, sean nacionales o
extranjeros, ello supone, un solo proceso sucesorio el que ejerce fuero de atracción
sobre las acciones.

Excepciones
-los bienes inmuebles situados en la Republica los que son regidos por nuestras leyes,
solemnidades, capacidad y modos de transmisión, tanto puede ser adquirido, transferido
o perdido por la legislación argentina.

-los bienes muebles con situación permanente también son regidos por la ley de su
Nación, muebles registrables, semovientes, los depósitos bancarios, títulos, acciones.
En caso de división de una misma sucesión entre herederos extranjeros y argentinos, o
extranjeros domiciliados en el estado, estos últimos tomaron de los bienes situados en la
republica una porción igual al valor de los bienes situados en país extranjero de que
ellos fuesen excluidos por cualquier titulo, en virtud de las leyes o costumbres locales,
la norma que protege a los herederos argentinos, entes o no domiciliados en el país y a
los extranjeros aquí domiciliados, frente a los herederos extranjeros que concurran con
ellos, contra las exclusiones de que pueden ser víctimas en otros países, estableciendo
un régimen de igualdad y defensa de la legítima que importa una excepción o
legitimación al principio de la unidad sucesoria que persigue la rectificación de la
partición que vulnere dichos extremos en perjuicio de aquellos.

-Tratados de Montevideo (Argentina, Bolivia, Uruguay, Perú, Paraguay) los juicios a


que dé lugar la sucesión por causa de muerte, se seguirán ante los jueces de los lugares
en que se hallen situados los bienes hereditarios.
La pluralidad de sucesiones, hay absoluta independencia entre los bienes de un lugar y
los de otra jurisdicción.

MEDIDAS PREVENTIVAS
La justicia debe tomar medidas conservatorias sobre los bienes de una sucesión:
-cuando lo solicite alguna persona, invocando su calidad de albacea, heredero, legatario
o acreedor.
- de oficio cuando no hubiere herederos conocidos o cuando todos ellos estuvieren
ausentes.
- cuando lo solicite el ministerio publico.
-cuando lo solicite el concejo general de educación, espontáneamente o por denuncia de
terceros, con la especificación de tratarse de herencia vacante.
-cuando lo soliciten los cónsules.
Tienden a individualizar y conservar el asiento sucesorio, como así mismo a tratar que
las actividades o negocios del causante no se interrumpan, se toman inaudita parte, y
como son simplemente precautorias, no prejuzgan sobre la propiedad de los bienes
sobre las que recaen. No corresponde su dictado si no es verosímil la propiedad del
muerto sobre los bienes en cuestión sin perjuicio de que ella se discuta en proceso
contencioso, tampoco cuando los bienes se encuentran en poder de un tercero, situación
en que los herederos tendrán que entablar las alusiones pertinentes para su restitución y
recaen en el correspondiente juicio pedir medidas precautorias.
Pueden consistir en el inventario provisional de los bienes relictos, designación de
peritos contadores para establecer el patrimonio real del causante a la época del deceso
y su devolución posterior, balance en el comercio en que era propietario, o socio, pedido

228
de informe tendiente a determinar la participación que pudiere corresponderle de una
sociedad, deposito de bienes, papeles y dinero, sellado de lugares o muebles donde
hubiere papeles o bienes.
El dueño de la causa en que ocurra el fallecimiento, o si como cualquier otra persona en
cuya compañía hubiere vivido el causante tendrán obligación de dar aviso de la muerte,
en el mismo día, al juez de primera instancia o si no lo hubiere en el lugar al de paz,
siempre que no existieran herederos en el lugar o que el causante haya muero sin dejar
sucesores, bajo pena de responder por los perjuicios que la omisión causare.
El juez procederá a sellar todos los lugares, o muebles sonde hubiera papeles o bienes;
nombrará depositario al cónyuge que viviera en compañía del causante, a los parientes
más próximos, o el albacea y tomara las medidas que juzgue oportuno, levantando acto
de todo lo obrado.
Si se promoviera declaratoria de herederos, se levantaran los sellos para practicar el
inventario, las medidas de seguridad se levantaran según o no correspondan.

Fuero de atracción
El juez del sucesorio no se limita a este, sino que su conocimiento se extiende a
cuestiones vinculadas con la transmisión, donde aparece el fuero de atracción, que
encuentra su sustento en la ley y es una virtualidad que tiene el juicio sucesorio de atraer
para ser resueltos por un mismo juez acciones referidas a los bienes que componen el
acervo hereditario o al título de ellos, dicho fuero concierne el orden público no puede
dejarse de lado la voluntad de los particulares y es posible que sea declarado de oficio
por el juez.

Este fuero funciona “pasivamente”, cuando la sucesión es demandada, en cambio es


activamente cuando por ejercer los herederos acciones pertenecientes al derecho se
aplican las reglas normales de la competencia.
Comienza desde que se promueve el juicio de declaratoria de herederos, y termina al
ponerle fin al estado de indivisión con la partición total e inscripción de las respectivas
hijuelas en el registro o se haya operado sucesorio de la partición.

-Acciones comprendidas:
° las demandas concernientes a los bienes hereditarios, cuando son interpuestas por
alguno de los sucesores universales contra sus coherederos.
° las demandas relativas a la garantía de los lotes entre los coparticipes y las que
tiendan a la reforma o nulidad de la partición.
° las demandas relativas a la ejecución de las disposiciones del testador, aunque sean a
título particular como sobre la entrega de los legados.
° Las acciones personales de los acreedores del difunto, antes de la división de la
herencia (gastos de ultima enfermedad, entierro, honorarios etc.)

-Acciones excluidas:
° La acción de reivindicación.
° La acción de división del condómino.
° Usucapión.
° Interdictos.
° La que por su carácter real correspondan al juez del lugar de la situación del bien.

-Sucesión concursada:

229
En primer lugar, nos hallamos frente a quien fallece cuando ya se encuentra concursado,
la muerte del fallido no afecta el tramite ni los efectos del concurso, los herederos
sustituyen al causante, debiendo unificar personería, en el juicio sucesorio no se realiza
tramite sobre los bienes objeto del desapoderamiento y se decide sobre la persona que
represente a los herederos en la quiebra.
Luego, tiene lugar cuando abierta la sucesión, esta cae en insolvencia y lo encontramos
en la misma ley cuando permite la declaración del concurso del patrimonio del
fallecido, mientras se mantenga separado del patrimonio de los sucesores.

Declaratoria de herederos y posesión de la herencia


Nuestro Código de procedimiento divide en 2 etapas perfectamente diferenciadas.

La 1° es declaratoria de herederos, trámite previo e independiente el juicio sucesorio


que tienden a comprobar quienes tienen vocación sucesoria.

La 2°constituida por el juicio sucesorio propiamente dicho, el que ha sido dividido en


el inventario, avalúo y partición, tiende a la determinación de los bienes que componen
la sucesión y cuál es su valor para luego distribuirlos entre los herederos o beneficiarios;
y culmina con la adjudicación de los sucesores que los que le corresponde la inscripción
de las hijuelas en los registros respectivos y la expedición de los testimonios que le
sirvan de titulo.
Al juicio de sucesión debe preceder siempre la declaratoria de herederos son partes
legítimas para promoverlo:
-El conyugue, los herederos o legatarios.
-El albacea
-Los acreedores de los herederos o de la sucesión
-El concejo de educación
- Todos los que tengan en la sucesión algún derecho declarado por las leyes.
Pueden hacerlo los sucesores de los herederos o de la sucesión mientras que en el juicio
sucesorio solo es permitido iniciarlo los acreedores de los herederos si estos no lo
hacen.

El concejo de educación puede intentarlo cuando se haya reputado vacante la herencia,


pueden solicitar la declaratoria todos los que tengan en la sucesión algún derecho
declarado por las leyes. Mientras el concejo, cesa su intervención con el dictado de la
declaratoria de herederos, salvo la posibilidad de continuar cuando la herencia haya sido
reputada vacante reconociéndole que promueva juicio sucesorio y todo lo atinente a la
declaración de vacancia de aquella, para que el producido de la venta de los bienes
sucesorios salvo que aquellos pasen al fisco.
Si la providencia inicial denegare la apertura del proceso cabe la impugnación mediante
recurso de reposición y apelación subsidiaria, o directamente por este si la cuestión haya
sido sustanciada o se cause un gravamen irreparable.

El derecho de los acreedores, el concejo de educación y del albacea consular, solo podrá
ejercerse después de 60 días del fallecimiento del causante si antes no hubieren los otros
interesados promovido las gestiones pertinentes, exceptuándose los acreedores a quienes
se les diere fianza suficiente por el importe de sus créditos o que tuvieren estos
asegurados con hipotecas y otras garantías reales como también a los legatarios de la
cosa o cantidad determinada y a los cesionarios de cantidad si se les hiciere entrega de
la cosa o cantidad o se les diere garantía suficiente de entregársela.

230
Los verdaderos y principales interesados en lo sucesorio son los herederos y legatarios,
de ahí que el derecho de solicitar la declaratoria de herederos otorgado a los acreedores,
el concejo de educación y el albacea deba primeramente, ante la falta de diligencia de
aquellos respetar el paso del término de los sesenta (60) días.
La intervención de los acreedores y del concejo de educación cesaría tan pronto como
se presenten los herederos que acrediten, su carácter pero conservaran el derecho de
elegir los procedimientos cuando los herederos omitan hacerlo en el término de veinte
(20) días.

Los acreedores pueden solicitar que se levante inventario provisorio de los bienes
relictos y que se fije un término a los herederos para que acepten o repudien la herencia.
A razón de la ley de fundo prevee que los terceros interesados pueden exigirle que se
pronuncie en un término que no supere los treinta (30) días. 1° ocho (8) días de luto y
llanto y puede ser hecha judicial y extrajudicial.

No debe olvidarse la vigencia de los demás medios que la ley de fondo otorga a ambos
acreedores, así entre los acreedores de la sucesión, el régimen de pago, la imposibilita al
heredero de cumplir las obligaciones que gravan la persona y patrimonio del difunto y
las que nacen de la transmisión del a misma.
El acreedor del causante puede presentarse en el proceso sucesorio requiriendo que su
crédito sea declarado judicialmente de legitimo abono, lo que ocurrirá si corrido el
traslado a los herederos todos ellos, siendo capaces le prestan conformidad,
correspondiendo su pago, pero no la imposición de costas por no haber existido
controversia o parte vencida.

Si el pago no se efectiviza la única virtualidad de la resolución que admite al crédito


como de legitimo abono es darle a su titular el rango de acreedor reconocido.
Por el contrario basta que algún heredero desconozca el crédito o guarde silencio, no
pudiendo peticionarse la apertura a prueba del simple procedimiento que había
instaurado.
Los acreedores personales de los herederos pueden embargar su parte en los créditos
hereditarios y pedir que se obligue a los deudores a su pago, demandar la revocación de
la renuncia efectiva por su deudor y subrogarse en sus derechos sucesorios hasta la
concurrencia de lo que le es debido.
Las costas causadas a instancia de los acreedores, ya sea en la iniciación o en la
prosecución de los tramites, no podrán ser declaradas a cargo de la masa sino cuando,
por resolución firme se reconozca la legitimidad de sus créditos.

El heredero condicional o el que se presente con posterioridad a la declaración de


herederos y antes de aprobarse la partición podrá ejercer todas las medidas
conservatorias de sus derechos y pedir que se reserve la parte que le correspondería en
caso de cumplirse la condición o de reconocerse su derecho hereditario. Estos no
pueden pedir la partición hasta que ella se cumpla, pero pueden hacerlo los otros
coherederos asegurando el derecho del heredero condicional, solamente puede referirse
a la condición suspensiva. En el caso de una condición resolutoria, el heredero tiene un
derecho actual y no hay razón para no reconocerle su derecho a pedir la partición para
lograr que se le entregue lo que le corresponde, sin perjuicio que también será
provisoria hasta tanto ocurra la condición o se sepa que no puede ocurrir.

Ambos están autorizados a:

231
-interrumpir prescripciones
-reinscribir la hipoteca
-pedir la separación de patrimonios
-anotación preventiva del derecho en los registros de publicidad
-en caso de excepciones ejercitar la acción pauliana
-obrar contra los detentores de las cosas.

La declaración de herederos contiene la posesión de la herencia en favor de los que no


la hubieren adquirido en virtud de la ley.

Se puede decir que la posesión de la herencia que concede el auto de declaratoria de


herederos o aquellos sucesores que no la adquieren ministerio legis desde la muerte del
causante, no es otra cosa que la investidura de la calidad de herederos con cuyo auxilio
pueden ejercerse los derechos correspondientes a tal carácter. Posesión hereditaria el
reconocimiento de la calidad de herederos, el que a veces hace la ley de pleno derecho
sin ninguna formalidad o intervención de los jueces, y otras exige una declaración del
magistrado, todos los herederos necesitan del reconocimiento en la práctica, sobre todo
después de la creación del registro de propiedad en el que es necesario inscribir toda
transmisión de dominio, sea inmuebles o muebles registrables, también se la debe tener
en cuenta cuando se la Persia por los herederos el cobro de un crédito divisible que tenía
el causante , la declaratoria permite conocer al demandado no solo la calidad sino
también la cantidad de herederos, evitando así no caer en la eventualidad de pagar mal.

Quienes tienen la posesión hereditaria de pleno derecho solo necesitan comprobar el


vínculo para iniciar acciones judiciales, mientras que los otros antes del otorgamiento de
la posesión judicial no podría demandar ni ser demandados por cuestiones de sucesión.
La declaratoria de herederos debe solicitarse comprobando la muerte del autor y
acompañando los documentos relativos al título que invoca u ofreciendo justificarlos en
la oportunidad correspondiente.

No son validas las actuaciones promovidas en el juicio sucesorio por quien no está
investido, ni sustancial ni formalmente para ello, en virtud de un derecho dependiente
de la sucesión los herederos no deben necesariamente respetar los nueves (9) días de
luto y llanto para promover el proceso.

Presentada la solicitud, se llamara por edictos que se publicaran cinco (5) veces en diez
(10) días, a todos los que se creyere con derecho a la herencia, sin perjuicio de hacerse
las actuaciones directas a los que tuvieran domicilio conocido.
La citación se hace a herederos, legatarios y acreedores y la notificación se efectuar en
el boletín oficial.

Cuando el causante tuviera diversos nombres, los edictos deben publicarse por todos
ellos separados por la preposición adversativa son nulas las notificaciones efectuadas
por edictos si se conoció el domicilio. Quien invoque mala fe del poseedor de la
herencia deberá probar que conoció que existían herederos de igual o mejor derecho.
Si el que aspira a la herencia sabe que hay otro pariente más próximo que ignora la
apertura de la sucesión, antes de tomar posesión de los bienes hereditarios, debe
hacérselo saber porqué la inacción como heredero del pariente más próximo se debe a
un vicio de la voluntad, la ignorancia de la muerte del causante que excluye la conducta
voluntaria de no presentarse, si el heredero con mejor derecho a pesar de haber sido

232
notificado , se mantiene inactivo, el otro puede tomar la posesión de la herencia sin
incurrir en mala fe, basta que acredite la inacción de este, entonces será de buena fe.
Para que se dicte la declaratoria de herederos, con su invocación y prueba del título.

Cuando se presenta un cónyuge sin hijos que concurre a la herencia con los ascendientes
del pre-muerto, lo cual invoca un titulo suficiente para obtener la declaratoria.
La ausencia o inacción de ellos no perjudica la marcha del juicio si suspende la
declaratoria, tampoco es necesario un nombramiento y actuación del defensor de
ausentes para resguardar los derechos de posibles herederos, denunciados, con
domicilios conocidos o ignorados.

Vencido el término, si las partes lo pidieren se decretara la apertura a prueba por veinte
(20) días, Clausurado este las partes podrán informar dentro de diez (10) días,
transcurridos los cuales se llamara a autos y se dictara resolución dentro de los diez (10)
días siguientes. El ministerio fiscal es parte de este procedimiento si antes de la
declaratoria de herederos se presentaran nuevos pretendientes, serán oídos en la misma
forma, sin retrotraerse en ningún caso los procedimientos. Podrá ampliarse aquella
siempre que lo soliciten todos los herederos declarados o se haya omitido a herederos
cuyo carácter se encuentre justificado.

Quien afirma gozar de una vocación hereditaria le basta con probar su propio título a la
herencia, en principio procede a declarar heredero a quien ha manifestado su voluntad
de ser incluido en el auto respectivo de la declaratoria de herederos, salvo la
circunstancia que se hayan ocultado o sustraído bienes de la sucesión a nadie se le
impone la calidad de herederos.

Quienes se presenten tardíamente, pero antes del dictado de la declaratoria de herederos,


traigan todas las pruebas o entorpezcan la tramitación de quienes fueron diligentes.
La posibilidad de ampliación de la declaratoria de herederos ya dictada: que ello se
deba a la presentación ulterior de algún pretendiente a la herencia o que sea en virtud de
la omisión en la misma de alguno presentado antes y cuyo carácter se encuentra
justificado.

Siempre que durante el trámite de la declaratoria de herederos sea necesario el


nombramiento de administrador, el juez lo hará a pedido de parte o de oficio y con
carácter provisorio, se prefiera en lo posible al conyugue o al heredero que haya
acreditado prima face su calidad y sea más apto y ofrezca mayores garantías si nadie
estuviera en esas condiciones, el nombramiento reconocerá en un abogado de la lista. El
incidente correrá por separado sin suspender el principal y la resolución que se dicte
será apelable en efecto devolutivo. El administrador así designado continuara en
ejercicio del cargo hasta que se nombre uno definitivo a los herederos declarados
resuelvan su cese.

El nombramiento del administrador provisorio presupone la fijación de una audiencia


por parte del juez ante la solicitud formulada por un peticionario legitimo que acredita el
peligro en la demora ella puede obviarse en la hipótesis en que todos los herederos
presentados pidan por escrito la designación de determinada persona. Las facultades del
administrador provisorio son las mismas reconocidas al administrador definitivo. El
administrador provisorio será rectificado por los herederos declarados transformándose
en definitivo.

233
La declaratoria de herederos no tiene sino efectos patrimoniales no prejuzga acerca de
los vínculos de familia, ni causa estado, se entiende siempre sin perjuicio de terceros y
de la vía ordinaria que podrán entablar el pretendiente no declarado o el concejo de
educación en su caso.

No hacen cosa juzgada material entre las parte, pero en cambio tiene validez, respecto
de terceros, por más que la declaratoria de herederos no cause estado y se dicta siempre
en cuanto por derecho hubiere lugar, declara a quienes han demostrado poseer vocación
hereditaria respecto a determinadas sucesiones, no hace cosa juzgada entre los
coherederos, al no implicar una controversia judicial entre los pretendientes a la
herencia, no se les puede imponer a los interesados hacer un examen minucioso de los
documentos que prueban vocación hereditaria, de manera que si luego descubran la
falsedad están habilitados para probarla en juicio contencioso.

Pero si en el sucesorio los herederos han aceptado el carácter hereditario de otro,


concluyendo en una situación dudosa, mas tarde no podrán impugnar la declaratoria.
Siempre es procedente la acción ordinaria de petición de herencia la declaratoria de
herederos no se suspende porque alguno de los pretendientes a la herencia deba
justificar su titulo en juicio ordinario por que se formulen oposiciones a quienes
presenten un titulo suficiente, se declara en favor de los que hayan justificado en forma
el llamamiento constituyendo la declaratoria de herederos, una sentencia es factible si
impugnación por los medios que la ley establece.

-apelación en relación
-nulidad: falta de publicación de edictos

Mediante incidente de nulidad pueden atacarse todos los actos que no son decisorios o
que no importan una resolución, los cuales son impugnables por vía de recurso.
-reposición: si se desea atacar una resolución judicial dictada sin sustanciación, ya sea
aquella validez o no, el único recurso que procede es el de reposición, no siendo
admisible el recurso de nulidad deducido ante el mismo juez que dicto la resolución
recurrida.
Cuando se trata de errores materiales u omisiones, cabe el recurso de aclaratoria.
La justificación del título que se invoca se hará exclusivamente con la prueba
preexistente que por sí mismos acrediten el parentesco invocado, la supletoria
correspondiente o el reconocimiento de los coherederos, las declaratorias de herederos,
en original o en copia legalmente presentada y con informe del Registro General acerca
de su subsistencia, constituirá prueba suficiente a tales efectos cualquier otra pretensión
hereditaria fundada en distintas pruebas se tendrá como acción de petición de herencia o
la que por derecho corresponda y correrá por separado según el trámite del juicio
ordinario.

El carácter de heredero se acredita por la prueba preexistente como las partidas, la


libreta de familia y las partidas parroquiales.

Siendo factible la sesión de derechos hereditarios, el cesionario puede perseguir el


dictado de la declaratoria de herederos, dado que el cedente solo se desprende total o
parcialmente del aspecto patrimonial que le corresponda en la sucesión y no de su titulo
o condición de heredero, habrá que justificar este extremo y la parte resolutiva del
pronunciamiento deberá incluyéndolo como tal y para publicidad de la transmisión en

234
favor del cesionario, se lo inscribe en el Registro. La prueba preexistente debe ser,
traducida por perito inscripto y legalizada.

La prueba supletoria del parentesco puede realizarse en los autos sucesivos y aprobarse
al solo efecto de dictar declaratoria de las partidas por inexistencia de registros públicos,
no constaren ellos los asientos o no estar llevados en debida forma o cando la situación
interna o las relaciones diplomáticas con el país donde se entendieron las partidas hacen
imposible obtener testimonios autentificados. La admisión legal de la prueba supletoria
abre la posibilidad de todos los medios de prueba. Incluye el reconocimiento de los
coherederos, se da cuando algún pretendiente a la herencia no puede justificar su titulo y
los demás lo reconocen. Para ser idóneo debe ser voluntario, claro o inequívoca, el
reconocimiento de coherederos produce efectos patrimoniales, no otorga un titulo
constitutivo de estado de familia ni tampoco acredita parentesco.
Dada la repercusión patrimonial negativa que tiene el reconocimiento de coheredero en
el caudal hereditario de quien lo ha efectuado.

Si la demanda hubiere de dirigirse contra una persona fallecida o si el demandado


muriere durante el procedimiento, se emplaza por edictos en la forma ordinaria a los
herederos, en caso que no comparecieren en termino, se nombrara un curador, que
tendrá la doble función del curador ad hoc de la herencia y en su caso, de defensor de
los herederos rebeldes y con lo cual se entenderá la demandas o el procedimiento.

Juicio sucesorio
Dictada la declaratoria de herederos, comienza el juicio sucesorio que pueden
promoverlo:
<El conyugue, los herederos y legatarios.
<El albacea
<Los acreedores de los herederos si estos no lo hicieren.
<El concejo de educación, cuando se haya reputado vacante la herencia
El objeto del juicio es la determinación del haber dejado por el causante y su ulterior
distribución entre los herederos o beneficiarios, comprendiendo las etapas de inventario,
avaluo y partición.

A)-INVENTARIO Y AVALUO
El inventario es una operación mediante la cual se determinan los bienes que
constituyen el acervo sucesorio y las deudas que lo gravan, haciéndose la enumeración y
descripción de ellos, resulta innecesario cuando se persigue la distribución entre los
herederos de dinero en efectivo títulos de renta, acciones o cuotas de partición
societaria, u otros bienes similares cuya división puede practicase sobre la base de una
simple operación aritmética que no requiere ni conocimientos especiales.
-Formas:
Inventario privado y judicial si todos los herederos son mayores de edad y están
conformes, pueden hacer el inventario extrajudicialmente y presentarlo a los autos bajo
la forma de una denuncia de bienes basta que un heredero lo pida para que el inventario
deba hacerse judicialmente dentro del proceso sucesorio.
Cuando hay menores, si están representados por sus padres y estos no tienen interés en
la herencia, es igualmente factible el inventario privado y si están asistidos por sus
padres también sería posible que el inventario asuma la forma de una simple denuncia
de bienes presentadas al juez de la sucesión.

235
Habiendo incapaces, el inventario sebe ser judicial, Al albacea se le impone la
confección del inventario de los bienes sucesorios y el testador no lo puede dispensar en
la obligación.
El inventario y avaluo debe hacerse judicialmente:
1)- cuando la herencia hubiere sido aceptada con beneficio de inventario o hubiere el
heredero pedido termino para hacerlo y deliberar.
2)- cuando se hubiere nombrado por el juez, curador o administrador de la herencia.
3)- cuando lo soliciten los acreedores de la herencia o de los herederos en defecto de
estos.
4)- siempre que la división de la herencia deba hacerse judicialmente.

Aceptación con beneficio de inventario


El inventario debe ser hecho ante un escribano y dos testigos, con citación de los
legatarios y acreedores que se hubiesen presentado, la intimación para inventarios debe
ser hecha judicialmente. La aplicación de las normas procesales en cuanto a la
designación del escribano por un juez de quien es un delegado la citación de herederos,
legatarios, acreedores, realización y aprobación judicial del inventario. El inventario se
levanta en papel simple o de actuación notarial, pero no en protocolo ya que es un acto
que nada tiene que ver con las escrituras, que allí se extienden, y aunque se realice con
intervención de un escribano sin registro o ni siquiera autorizado, porque basta que
ostenté el titulo constituirá un instrumento publico el inventario que se practique con la
intervención del actuario. Los herederos intimados que solamente se limitaron a efectuar
esa denuncia de bienes, se hacen posibles de la sanción de la pérdida del beneficio de
inventario.
Solicitando el inventario y completada la personalidad de los incapaces por el tramite
que corresponda, el juez nombrara defensor a los herederos que no hubieren
comparecido siempre que no hayan sido citados personalmente o por cedula, y fijara día
y hora para que concurran a hacer el nombramiento de un perito que practique
inventario y avaluo.

El perito será designado de común acuerdo, o en su defecto el juez nombrara a quien


cuente con la conformidad de la mayoría de los interesados que asistieren con derecho a
no menos de la mitad de la herencia, incluidos los bienes gananciales.

No será necesaria la conformidad de la mayoría cuando los interesados en minoría


numérica representen más de la mitad del patrimonio de la sucesión. No reuniéndose las
condiciones expresadas, el perito será nombrado por sorteo del a lista de abogados.
Cuando hubiere acuerdo unánime de partes, el perito inventariador y tasador podrá ser
procurador.

Cuando mediare acuerdo de partes o los interesados constituyeran la mayoría según los
pactos previstos, en el artículo anterior, el nombramiento de perito podrá proponerse
directamente prescindiendo de la audiencia.
Forma de designación: salvo que exista común acuerdo, el nombramiento del
inventariador y tasador, está en manos de la mayoría de los sucesores presentes en el
acto y con derecho no menos del 50%.

De los bienes hereditarios o de los que si bien en minoría numérico, representen más de
la mitad de dichos patrimonio incluidos los bienes gananciales.

236
Quienes lo designan: entre los interesados que concurren al nombramiento del perito
debe incluirse a los legatarios de parte alícuota, en caso de negligencia entre los
interesados, a través de la acción oblicuo o sus acreedores personales y al cesionario de
derechos hereditarios.

Quien puede serlo: el perito inventariador y tasador, al igual que el partidor, sea que su
designación se verifique por acuerdo de partes en alguna de las maneras dichas o que
sea sorteado de la lista por no reunirse tal acuerdo, debe ser un abogado. Pero también
es posible que si existe acuerdo unánime de las partes ejerza las funciones.
Inventariador y tasador un procurador, pero este no puede ser perito partidor.

Numero de peritos: se habla de perito en plural y sin limitar su número, y en la práctica


es la designación de varios cuando su propuestas de común acuerdo por todos los
sucesores universales inventario, avaluo y partición por más de un perito deben
practicarse y presentarse conjuntamente bajo pena de nulidad y los honorarios se
regulan en conjunto.

Carácter del perito: delegado del juez para efectuar la tarea encomendada, quedando
su labor sometido a la revisión del juez siempre que haya controversia entre las partes.

Aceptación del cargo: el perito inventariador y tasador, paridos deben aceptar el cargo
ante el actuario bajo juramento o afirmación de desempeñarlo legalmente, la aceptación
es un registro esencial para la validez de la pericia.

Remoción y recusación: remoción se aplican las disposiciones referidos al


administrador de la herencia, recusación (perito partidor).
Cuando un mismo perito sea designado para el inventario, avaluo y partición, dichas
operaciones podrán presentarse conjuntamente al tribunal.
El perito procederá a practicar y presentar al juzgado las operaciones de inventario y
avaluo, dentro del plazo que el juez le fije, a pedido de parte y donde aviso al albacea, a
los legatarios de parte alícuota y a los acreedores que se hubieran apersonado, cuando
sin causa justificada, son se presentasen las operaciones, dentro del plazo si alguna parte
así lo solicitare, sin perjuicio de las demás responsabilidades que su retardo le derivaren.
La citación es a fin de hacerle conocer a los interesados el lugar y el momento en que se
realizaran las diligencias, pero si pese a ellos algunos o todos los citados no concurren,
ni el acto se suspende ni está afectando su validez, no hay un plazo para que el perito
cumpla sus funciones, salvo que el juez lo fije a pedido de parte.
El inventario contendrá la declaración del tenedor de los bienes, hecha ante el perito, de
que no ha ocultado ni existen otros en su poder perteneciente a la sucesión, especificar
con claridad y precisión los bienes inventariados y su tasación y será firmado por el
perito y los interesados que quisieran hacerlo.
El juez podrá ordenar la asistencia del actuario cuando se invoque causa que la
justifique.

Inventario: en la confección del inventario, el perito debe entenderse con el tenedor de


los bienes, ya que por lo general existe una persona encargada de hacer la denuncia de
los bienes.
Debe inventariar los bienes que estén en poder de la sucesión o que terceros tenga en su
nombre, especificar con claridad y precisión los bienes inventariados y su tasación, si
los créditos se dividen de pleno derecho entre los herederos en proporción a su parte

237
hereditaria desde la apertura de la sucesión y por tanto no integran la masa partible, en
lo práctico la exclusión es exacta si han de tenerse en cuenta en el acto particionario e
incluso pueden adjudicar por entero a uno de los herederos.
En caso de existir bienes gananciales, en la masa hereditaria se computara la mitad
correspondiente cujus y la otra mitad integra la masa post-comunitaria perteneciente al
conyugue supérstite por disolución de la sociedad conyugal.

La masa hereditaria ha de deducirse las deudas y cargas de la sucesión, las primeras son
las obligaciones contraídas por el causante que se transmiten a los herederos, las
segundas nacen con posterioridad a su muerte y que se origina como una conferencia
de la apertura de la sucesión. El inventario debe contener una descripción exacta y
detallada de todos los bienes que componen la herencia abarcando el activo y el pasivo,
bienes muebles que no deben confundirse unos con otros, los semovientes se
individualiza la especie, edad, grado, cereales, peso especifico también se especificaran
los instrumentos públicos o privados, si hubieran créditos garantizado en hipotecas se
individualizaran los testimonios de las escrituras, títulos, números y series. Y los
inmuebles, datos de inscripción, dominio, extensión, clases. El acta deberá ser firmada
por el perito, en cada una de las hojas que componen el inventario.

AVALUO: es una operación complementaria del inventario de los bienes hereditarios


mediante la cual se determina el valor de cada uno de ellos son practicados por un
perito, el tiempo del avaluo vendrá determinado por el inventario, atribuyendo valores a
cada uno de los bienes, ambas operaciones se presentan junas al juez de la sucesión.
Practicadas las operaciones de inventario y avaluo se pondrán en manifiesto por un
término de seis a doce días, si transcurriere el plazo sin que hiciere oposición, el juez la
aprobara sin más trámite y sin recuso alguno.
El manifiesto de las operaciones de inventario y avaluo debe notificarse a los
interesados por cedula y su termino de seis a doce días es un plazo común.
Si se dedujeren reclamaciones sobre inclusión o exclusión de bienes, se substanciaran
en pieza reparada y por el tramite que corresponda según la naturaleza de la demanda,
sin perjuicio de aprobarse el inventario en la parte no observada.

1)- la impugnación fundada en estas últimas causas se ha de tramitar por vía incidental,
y recluye en caso de no deducírsela dentro del término de manifiesto inclusión o
exclusión de bienes, puede ser planteada después de aprobado el inventario ya que este
no prejuzga sobre la propiedad de bienes.

2)- la resolución que se dicte en cualquiera de las 2 posibilidades o razones de


impugnación del inventario por falta de cumplimiento de las formalidades legales,
deben practicarse nuevamente la diligencia, pero si solo ordena la exclusión de algún
bien esta no perjudica al resto.

3)- la aprobación de inventario en la parte no observada supone la continuación del


juicio sucesorio y la realización del a partición con respecto a los bienes no discutidos.
Si las reclamaciones versaren sobre el avaluo, se convocaría a los interesados y al perito
a una audiencia, y el juez resolverá sin más trámite y sin recurso, pudiendo nombrar de
oficio un nuevo perito para que haga la retasa así como dictar cualquier otra medida
para mejor proveer, si los que dedujeran la posición no asistieren a la audiencia, se les
dará por desistidos y serán a su cargo las costas causadas, en caso de inasistencia del
perito, este perderá el derecho a honorarios por los trabajos que hubiere practicado.

238
RETASA: designar un nuevo perito para que haga una retasa particular o general de los
bienes, el perito está expuesto a equivocarse, si el nuevo perito coincide en los valores
dados por el anterior, los honorarios del perito deberán ser a cargo el impugnante
porque lo ocurrido demuestra su falta de razón, por el contrario si surge que la
valoración inicial no se ajustaba a los valores reales los honorarios del nuevo perito han
de pesar sobre toda la masa.

LICITACIÓN: los interesados podrán determinar si las licitaciones se hará en forma


privada o judicial, deberá manifestar al juez de la sucesión su voluntad de licitar uno,
alguno o todos los bienes indivisoríos entre ellos, las bases con que la misma tendrá
lugar y la designación de una audiencia para que se efectivice en la práctica acompañar
el pedido con las ofertas de los participantes en sobre cerrado y agregando que el bien o
bienes en cuestión será adjudicado a quien ofrezca mas, pero pagando el precio de quien
ofreció menor, se alcanzara así un precio justo.

239
Bolilla XIX
Por: Alicia Molina

Proceso Laboral

El Derecho Procesal Laboral es un medio para cumplir con los Derechos Sustanciales o
de Fondo reconocidos por el Derecho Laboral.
El reclamo se puede sustanciar por un procedimiento breve para alcanzar una sentencia
rápida, es gratuito para el trabajador, el juez impulsa de oficio el procedimiento para
nivelar la situación de desigualdad entre trabajador y empleador aplicando In dubio pro
operario, en la interpretación o alcance de la ley prevalecerá la más favorable al
trabajador y es indisponible para las partes en función del principio de
irrenunciabilidad.

Regulado por Ley 7945 Código Procesal Laboral de la Provincia de Santa Fe

Competencia del Tribunal Laboral


La Organización y la Jurisdicción de los Tribunales del Trabajo, como organismos
especializados del Poder Judicial de la Provincia se regirán por las disposiciones de la
Ley Orgánica del Poder Judicial (Ley 10.160) complementado con lo establecido en el
Código Procesal Laboral de la Provincia de Santa Fe (CPLPSF) (Art. 1)
Tanto a Nivel Nacional como a Nivel Provincial la Competencia es Material y
Territorial e Improrrogable.

Competencia por razón de la materia (Art. 2) (materia sobre la cual versa la


pretensión):
a) los litigios entre trabajadores y empleadores por conflictos individuales de derecho
derivados del contrato de trabajo o de una relación laboral, o de aprendizaje, becas y
pasantías, aunque la pretensión se funde en disposiciones de derecho común;

b) los desalojos que se promuevan para la restitución de inmuebles, o parte de ellos,


cuando su ocupación se hubiere acordado o concedido con motivo o como accesorio de
una relación laboral, aunque no corresponda asignarle carácter remuneratorio según la
legislación de fondo;

c) las demandas de restitución de muebles y efectos de una de las partes, bajo las
mismas condiciones que el inciso anterior;

d) las tercerías, en juicios de su competencia;

e) las acciones que promuevan las asociaciones sindicales por cobro de la cuota
societaria, contribuciones convencionales o en querellas por práctica desleal;

f) las pretensiones promovidas por los trabajadores o sus derechohabientes para la


reparación del daño ocasionado por los accidentes y enfermedades laborales, contra
empleadores y aseguradores;

g) las demás causas contenciosas en que se ejerciten acciones fundadas en normas


internacionales, estatales o profesionales de Derecho del Trabajo y la Seguridad Social

240
y para los que la Constitución Nacional o la Constitución Provincial, o una ley de esta
Provincia, no hubieren establecido una competencia especial;

h) las causas que se promuevan para obtener la declaración de un derecho laboral,


cuando el estado de incertidumbre respecto de una relación jurídica individual, de sus
modalidades o de su interpretación, cause o pudiera causar un perjuicio a quien tenga
interés legítimo en determinarlo;

i) la repetición de los fondos depositados con motivo de multas aplicadas por la


administración laboral, cuando hubieren sido revocadas o reducidas mediante el recurso
previsto en el Artículo 3;

j) la homologación de los acuerdos que empleadores y trabajadores celebren con motivo


de una relación laboral y las controversias que se deriven de los mismos; y,

k) toda acción fundada en las garantías constitucionales de libertad sindical y trato


igualitario en el trabajo.

Competencia territorial (Art 7): Será competente a elección del trabajador


demandante:
El juez del lugar del trabajo; el del domicilio del demandado o el del lugar de la
celebración del contrato.
El que no tuviere domicilio fijo podrá ser demandado en el lugar de su última
residencia.

Demanda que fuera promovida por el empleador, será competente el juez laboral del
domicilio del trabajador.

Causas promovidas por asociaciones profesionales por cobro de cuota sindical y


contribuciones convencionales, será competente el juez del domicilio del demandado.

Acciones derivadas de accidentes de trabajo, enfermedades profesionales o inculpables


promovidas por un agente público, será competente el juez del lugar donde preste
servicios.

Competencia para Medidas Cautelares (Art. 141):


En caso de urgencia las Medidas Cautelares podrán pedirse ante cualquier juez con
competencia en materia laboral.
Todo lo que no está especialmente regulado en la Ley 7945 se tramitará de acuerdo a lo
preceptuado en el Código Procesal Civil y Comercial (CPCC Art. 272-300).

Medidas Previas y Cautelares


Embargo preventivo. Asistencia médica. Sustitución
Se pedirán expresando claramente el motivo por el cual se solicitan y las acciones que
se proponen deducir, el juez accederá siempre y sin sustanciación alguna, a no ser que
las considere notoriamente improcedente.
Antes de entablada la demanda o en el curso del juicio, el juez, a petición de parte,
según el mérito que arrojen los autos, podrá decretar embargo preventivo en bienes del
demandado y también disponer que éste proporcione a su cargo la asistencia médica y

241
farmacéutica requeridas por la víctima del accidente de trabajo o enfermedad
profesional en las condiciones previstas por la ley
Especialmente podrá decretarse a petición de parte, sin fianza, embargo preventivo
sobre bienes del deudor, en algunos casos:
*) cuando se justifique sumariamente que el deudor trata de enajenar, ocultar o
transportar bienes o que por cualquier causa, se hubiera disminuido notablemente su
responsabilidad patrimonial, en forma que perjudique los intereses del acreedor y
siempre que el derecho del peticionante surja verosímilmente de los extremos probados;

*) cuando exista sentencia favorable o confesiones expresas o fictas de hechos que


hagan presumir el derecho alegado;

*) cuando la existencia del crédito esté justificada con instrumento público o privado
atribuido al deudor, si la firma fuera reconocida o declarada auténtica;

*) en los supuestos en que, conforme las leyes de fondo, los trabajadores tengan
privilegio especial sobre los bienes.
En los supuestos de embargos preventivos ordenados, antes del dictado de la sentencia
de mérito, sobre fondos, recaudaciones, cuentas corrientes o cualquier otra modalidad
que conlleve la inmovilización de dinero, la regla será la sustitución de la cautelar,
conforme valoración que efectuará el juez o tribunal acerca de la suficiencia del bien
ofrecido. En caso de apelación, será otorgada con efecto devolutivo si ordena la
sustitución. En caso de allanamiento tempestivo del peticionante al pedido de
sustitución, las costas serán impuestas en el orden causado.

Caducidad de las Medidas Previas y Cautelares (CPCC Art .286, 390 y 394)
No está específicamente regulado en el CPLPSF, se aplica el Art.145 Remisión al
CPCC en forma supletoria.
Si el embargo hubiere sido decretado antes de la demanda, caducará automáticamente si
no se inicia la acción dentro de los quince (15) días desde que se trabó o desde que la
obligación fuere exigible.

Demanda (Art. 39CPLPSF)


La demanda.- La demanda deberá interponerse por escrito y expresará:

a) el nombre; domicilio real y procesal; nacionalidad; edad; estado civil y profesión del
demandante; número de identificación tributaria, si lo tuviere;
b) el nombre y domicilio del demandado, si se conocieren, o los datos que permitieren
su identificación, incluido el número de identificación tributaria;
c) el objeto de la acción, designando en forma clara, sucinta y separada los hechos y el
derecho en que se funda;
d) el monto discriminado de lo reclamado. Cuando no fuere posible precisarlo, podrá
diferirse su cálculo a la prueba pericial o a la estimación judicial. En tal caso, deberán
indicarse los rubros que componen la demanda y las pautas necesarias para liquidarlos,
expuestos de modo tal que el demandado pueda cuestionar o aceptar concretamente
dichos extremos. El juez, en la sentencia, podrá considerar como no demandados los
rubros que, siendo posible, no se hayan propuesto con los requisitos indicados y su
cálculo o estimación no surgiera de la prueba rendida;
e) el ofrecimiento de la prueba confesional y documental de que intente valerse.
Acompañará los documentos que obran en su poder, con copias para agregar al

242
expediente y para el traslado a cada uno de los demandados, salvo que se trate de
documentos cuya reproducción fuese dificultosa por su número o por otra razón
atendible, siempre que así lo resolviere el juez, a pedido formulado en el mismo escrito.
En tal caso, el juez arbitrará las medidas necesarias para obviar a la otra u otras partes
los inconvenientes derivados de la falta de copias. Individualizará los documentos que
no tuviere, indicando el lugar en que se hallen, la persona física o jurídica u organismo
en cuyo poder se encuentren, a los efectos de su exhibición o remisión de copias
autenticadas;
f) el ofrecimiento de todo otro medio de prueba que se pretenda producir antes de la
audiencia del Artículo 51. La absolución de posiciones, el reconocimiento de
documental por parte del actor y la prueba testimonial serán producidas en la etapa
procesal oportuna. En ningún caso la no producción total o parcial de estas pruebas
provocará la suspensión o postergación de la audiencia del Artículo 51 ni la ampliación
del término de pruebas previsto por este Código;
g) la petición en términos claros y precisos.

Particularidades
Con la demanda se acompañaran copias de la misma y de los documentos presentados.
El demandante puede acumular todas las pretensiones que tenga contra el demandado
siempre que sean competencia de la justicia del trabajo, no sean excluyentes entre sí,
puedan suscitarse por los mismos trámites o en el caso de que sean varios, las acciones
sean conexas por el objeto por los hechos o por la causa. (Art. 40 CPLPSF)
El juez puede denegar la acumulación o disponer la separación total o parcial de las
acciones cuando lo estime conveniente para la unidad del proceso. Ambas disposiciones
son inapelables (Art 42 CPLSF).

Incompetencia de oficio: Recibida la demanda el juez examinará su competencia,


cuando se considere incompetente se declarará de oficio.
Si la demanda tuviese defectos de forma, omisiones o imprecisiones, se intimará al actor
para que los subsane en el plazo de tres (3) días, bajo apercibimiento de tenerla por no
presentada (Art.43 CPLSF).

Emplazamiento: Admitida la demanda se emplazará al demandado con entrega de


copias de ella y de los documentos acompañados, para que comparezca y la conteste
dentro de diez (10) días, con apercibimiento de que si no lo hiciere se tendrán por
ciertos los hechos vertidos en ella, salvo prueba en contrario (el plazo se puede extender
en el caso que el demandado se domiciliare fuera del asiento del juzgado hasta veinte
(20) días dentro de la provincia, hasta treinta (30) días dentro del país, cuarenta (40)
días en el extranjero (Art.44 CPLSF).
En el caso de que el actor no pudiera establecer el domicilio del demandado o lo
desconociere, se hará la citación solo para estar a derecho con apercibimiento de
rebeldía, por edictos que se publicarán sin cargo por tres (3) días consecutivos en el
Boletín Oficial de la Provincia, si comparece, se le corre traslado por cinco (5) días. Si
no comparece, se le designará un defensor ad-hoc con un plazo de cinco (5) días para
conteste bajo el mismo apercibimiento (Art.45 CPLSF).

Citación por Edictos: Si el actor no pudiere establecer el domicilio del demandado, se


hará la citación solo para estar a derecho con apercibimiento de rebeldía por tres (3) días
consecutivos en el Boletín Oficial de la Provincia. Si comparece se le corre traslado,
sino se le designará un defensor ad-hoc.

243
Nulidad: Si el actor denuncia un domicilio inexacto, teniendo oportunidad de conocerlo
y expresa ignorarlo, con la prueba de tales hechos se anulará lo actuado a partir de la
citación, con costas al actor (Art.46 CPLSF).

Contestación: La demanda será contestada por escrito con los siguientes requisitos:
a) nombre; estado civil; nacionalidad; número de identificación tributaria; edad y
domicilio real y procesal del demandado, acompañándose, en su caso, los documentos
habilitantes de la representación que invoca;
b) reconocimiento o negativa expresa de cada hecho expuesto en la demanda. El
silencio, las respuestas evasivas o las negativas genéricas podrán considerarse en la
sentencia como reconocimiento de los hechos a que refieran. Se entenderá que incurre
en negativa genérica, con iguales consecuencias, cuando omita su propia versión sobre
la realidad de los hechos que no pueda ignorar o que estuviere obligada a documentar;
c) reconocimiento o negativa expresa de la autenticidad de los documentos privados que
se le atribuyen, bajo apercibimiento de tenerlos por auténticos.
d) todas las excepciones formales y de fondo, acompañando u ofreciendo las pruebas
pertinentes;
e) el ofrecimiento de prueba confesional y documental, acompañando los documentos
que obran en su poder. Si no los tuviere los individualizará, indicando en lo posible su
contenido y el lugar donde se hallaren o personas físicas o jurídicas en cuyo poder se
encontraren,
f) el ofrecimiento de todo otro medio de prueba que se pretenda producir antes de la
audiencia del Artículo 51, salvo la testimonial y la absolución de posiciones. Se hará
saber del mismo al actor para que en el término de tres días pueda expresar su adhesión
y/o ampliación de los puntos sobre la que versará. En ningún caso la no producción total
o parcial de estas pruebas provocará la suspensión o postergación de la audiencia del
Artículo 51 ni la ampliación del término de pruebas previsto en el Código;
g) la reconvención, si correspondiere; y,
h) la petición en términos claros y precisos (Art.47 CPLSF).

Trámite de Excepciones
Opuestas excepciones, se correrá traslado a la contraria para que las conteste dentro del
término de diez (10) días y, en su caso, ofrezca y acompañe las pruebas pertinentes.
Contestado el traslado el juez resolverá de modo inmediato las de defecto legal, falta de
personería, litispendencia y cosa juzgada judicial, como así también las demás
excepciones que fueren articuladas como de puro derecho o que pudieren resolverse con
las constancias ya incorporadas a la causa. Las demás excepciones serán resueltas en la
sentencia definitiva y podrán ser contestadas hasta el día de la celebración de la
audiencia del Artículo 51(Art.47 bis CPLSF).

Audiencia Art. 51 Desarrollo y trámite


Contestada la demanda o vencido el plazo para hacerlo, el juez fija de oficio una
Audiencia a realizarse en un plazo no mayor a treinta (30) días.
Las partes deben comparecer personalmente. Se las notifica con una anticipación no
menor a tres (3) días en el domicilio legal y real, con apercibimiento de multa por la
inasistencia injustificada.
Las personas jurídicas pueden ser representadas por los directores, socios, gerentes o
empleados superiores con poder suficiente, a fin de asegurar el cumplimiento del
objetivo de la audiencia.

244
En casos excepcionales de imposibilidad material de concurrir, las personas físicas
deberán hacerse representar en la conciliación por apoderado especial con instrucciones
y mandato suficiente.
El juez celebra la audiencia personalmente, bajo sanción de nulidad:

I. - Conciliación:
a) El juez intentará conciliar a las partes, no significando prejuzgamiento las
apreciaciones que pudiere formular en las tratativas correspondientes.
b) La conciliación podrá promoverse en forma total o parcial respecto de las
pretensiones deducidas y estará dirigida hacia los siguientes fines:
1. Lograr el acuerdo de las partes. Si ello se consigue, se concretarán las bases del
acuerdo de manera que no afecten los derechos irrenunciables establecidos por las leyes.
2. Simplificar las cuestiones litigiosas.
3. Aclarar errores materiales.
4. Reducir la actividad probatoria en relación a los hechos, tendiendo a la economía del
proceso.
c) Obtenido un acuerdo entre las partes sobre cualquiera de los aspectos señalados, se
hará constar en el acta de la audiencia, debiendo ser homologado por el juez en
resolución fundada.
La homologación producirá el efecto de cosa juzgada.
II.- Continuación del Debate:
a) Si la conciliación hubiera sido parcial el trámite proseguirá respecto de los puntos no
avenidos, sin perjuicio del procedimiento de pronto pago que establece este Código.
b) Si no hubiere conciliación, continuará el procedimiento del juicio en la misma
audiencia.

III.- Cuestión de Puro Derecho: Si la cuestión fuere de puro derecho, así se declarará
por decisión inapelable, sin perjuicio de los recursos que correspondan contra la
sentencia. En estos casos, las partes podrán alegar oralmente en el mismo acto, de cuyo
contenido quedará constancia en acta, o presentar un memorial escrito dentro de los
cinco días. La sentencia se dictará dentro de los diez días siguientes a la celebración de
la audiencia o, en su caso, de la presentación del memorial o de vencido el plazo para su
presentación.

IV.- Actividad Probatoria: La prueba que hubiere sido ofrecida para su producción
anticipada, de acuerdo a la facultad de los incisos f) de los Artículos 39 y 47, deberá
proveerse en ocasión de la demanda o contestación. Sin perjuicio de ello, podrá
ofrecerse, reiterarse o ampliarse su contenido en esta oportunidad.
Cuando hubiere hechos controvertidos o de demostración necesaria en la cuestión
principal, el término de producción de la prueba será de cuarenta (40) días. Se recibirá
la confesional de ambas partes y el reconocimiento de documental por parte del actor.
Las partes ofrecerán de inmediato y por su orden toda la prueba de que intenten valerse
y que no corresponda ofrecer o no haya sido ofrecida en la demanda, en la contestación
y en la reconvención y su contestación. El juez proveerá en el mismo acto. Cuando
alguna diligencia hubiere de realizarse fuera de la Provincia o la naturaleza de la
cuestión en debate lo justificara, el juez, por resolución fundada podrá ampliar el plazo
hasta un máximo de veinte días más.

Incomparecencia (Art. 52 CPLSF)


Regla General:

245
La incomparecencia de una o ambas partes a la audiencia de trámite no suspenderá, en
ningún caso, la realización de la misma, salvo acuerdo en sentido contrario presentado
hasta el día anterior al fijado para su realización. No se podrá suspender la audiencia por
este motivo más de una vez.

Apoderados:

La ausencia de una de la parte dispensa a su apoderado de concurrir a la audiencia, mi


de realizar actos procesales, salvo acuerdo contemplado en el párrafo anterior.
Justificación de ausencia:
Para el caso de una o ambas partes justificaran su inasistencia a la audiencia hasta el
tercer día hábil posterior a su realización, el juez fijará una nueva fecha de audiencia
dentro del período de prueba, al efecto de la conciliación y en el caso de haber ofrecido
como prueba la confesional para rendir la misma.
El trámite de la audiencia se contemplará en un solo acto, salvo lo estipulado en el
párrafo anterior respecto a la absolución de posiciones. (Art. 53 CPLSF)

Falta de contestación de la demanda o de la reconvención (Art. 54 CPLSF)


El demandado que no contesto la demanda, o el actor que no contesto la reconvención,
pueden comparecer a la audiencia de trámite y ofrecer pruebas, excepto confesional y
documental, salvo lo que prescribe este Código para la presentación tardía de
documentos.
Si el demandado no contestó la demanda y no comparece a la audiencia, se dictará
sentencia sin más trámite, salvo los hechos de comprobación necesaria.

Nuevas tratativas conciliatorias (Art. 56 CPLSF)


Sin perjuicio de lo dispuesto por el Artículo 51, y hasta el llamamiento de autos, el juez
o tribunal podrá convocar personalmente a las partes a una audiencia de conciliación.
Esta medida no interrumpirá ni suspenderá el trámite de la causa ni el plazo para dictar
sentencia.
Dichas tratativas podrán disponerse una sola vez, salvo acuerdo de partes, y la audiencia
deberá ser fijada dentro del término de treinta días desde la fecha que la ordene.

Llamamiento de autos (Art. 57 CPLSF)


Recepcionada íntegramente la prueba o vencido el término respectivo, el juez de oficio
deberá llamar autos para sentencia, quedando el expediente en secretaría por el término
de cinco días, durante los cuales las partes podrán alegar. Vencido ese término se dictará
sentencia dentro de los diez días posteriores. Sentencia ultra petita

La Caducidad en el Proceso Laboral


El procedimiento será impulsado de oficio. El secretario está obligado a revisar los
expedientes para impedir la paralización de los trámites y para que se cumplan las
diligencias y medidas ordenadas. (Art. 36 CPLSF)
Pasado un año sin que se impulse el proceso, el juez deberá intimar a las partes a sus
domicilios real y legal, para que en un plazo de 10 días, manifiesten si tienen interés en
la prosecución de la causa.
Vencido este plazo sin que se exprese interés, se declarará la caducidad de la Instancia.
Este procedimiento solo será utilizado una vez en el proceso.
El término de caducidad, corre durante los días inhábiles, empieza a contar desde la
última actuación, pero no correrá mientras los autos estén pendientes de resolución

246
judicial, ni tampoco durante el tiempo que demande la reconstrucción del expediente.
(Art. 37 CPLSF)

Interposición de Recursos
Recurso de Reposición (Art. 105, 106, 107 CPLSF)
Tendrá lugar dentro de los tres (3) días solamente contra las providencias, decretos o
autos dictados sin sustanciación, trajeren o no gravamen irreparable, a fin de que el juez
que las dictó, las revoque.

Recurso de Apelación (Art. 108, 109, 110, 111CPLSF)


Procede contra:
Sentencia definitiva sobre lo principal en toda clase de juicio.
Las resoluciones que acojan y que rechacen excepciones.
Los demás autos que causen un gravamen que no puedan ser reparados por la sentencia
definitiva.
Interposición:
Dentro de los cinco (5) días de la notificación, ante el juez de 1era. Instancia que lo
eleva a Cámara debiendo el apelante claramente especificar si la impugnación es total o
parcial precisando los puntos o rubros del fallo que se recurren (ante el incumplimiento
se tendrá por no presentado el recurso)
El apelante puede desistir de los recursos interpuestos, si se formaliza antes de expresar
agravios, no generará costas

Recurso de Nulidad (Art. 112, 113, 114 CPLSF)


Procede contra las sentencias definitivas y autos posteriores pronunciados en violación
u omisión de las formas y solemnidades que prescriben las leyes y que asuman el
carácter de sustanciales.
Se interpone conjuntamente con el Recurso de Apelación, en el mismo plazo y se
sustanciará por el mismo trámite. La interposición de uno u otro llevará implícito el del
otro, deberán sostenerse de manera autónoma ante la Alzada.
Si la nulidad proviene de la forma y contenido de la Resolución, el Tribunal de
Apelación así lo declarará y dictará la que corresponda.
Si la nulidad proviene de un vicio en el procedimiento, se declarará nulo lo obrado que
se relacione con la actuación nula o que sea su consecuencia y se remitirán los autos al
juzgado que por orden de nominación corresponda para que tramite la causa y dicte
Resolución.

Recurso de Directo (Art. 115 CPLSF)


Dentro de los cinco (5) días posteriores a la notificación de la denegatoria de los
Recursos de Apelación y Nulidad podrá acudir directamente ante el Tribunal de Alzada,
éste decidirá sin sustanciación alguna si el recurso ha sido bien o mal denegado y la
forma o modo de su otorgamiento.

Recursos Especiales y Extraordinarios (Art. 116 CPLSF)


Regulados en leyes particulares, se sustanciarán por los términos previstos en las
mismas.

247
Particularidades de la Prueba
Se admitirán como medios de prueba los siguientes: confesional, documental,
testimonial, instrumental, pericial, informativa, inspección judicial y las presunciones
o indicios.
No se admitirán pruebas que sean manifiestamente improcedentes, superfluas o
meramente dilatorias, cuya producción podrá denegar de oficio el juez, mediante
resolución fundada.
Cuando se ofreciere algún otro medio de prueba idóneo o pertinente no previsto de
modo expreso, el juez valorará fundadamente y sin recurso alguno su admisibilidad y,
en su caso, la forma y modo de diligenciarlo, estableciendo el procedimiento a seguir
conforme las circunstancias del caso. (Art. 58 CPLSF)

Admisibilidad y pertinencia.- Recurribilidad


La prueba deberá recaer sobre hechos controvertidos o de demostración necesaria,
debiendo cada parte probar los presupuestos de hecho de la posición que sustenta en el
supuesto de que fuera controvertida, sin perjuicio de las presunciones establecidas a
favor del trabajador tanto en las leyes de fondo como de forma, en estatutos especiales,
convenios colectivos de trabajo o normas de policía laboral.
Ningún auto o decreto relativo a la prueba es apelable. (Art. 59 CPLSF)

Término.- El término de prueba no se suspenderá por ninguna articulación o incidente,


salvo fuerza mayor que el juez declarará sin sustanciación ni recurso alguno.
Las pruebas que se incorporaren al proceso después del vencimiento del término para
alegar serán tomadas en consideración. (Art. 60 CPLSF)

Pruebas de oficio.- En cualquier estado o instancia del proceso el juez o tribunal podrá
decretar de oficio las medidas de prueba que estime convenientes. (Art. 61 CPLSF)

Alegatos
Llamamiento de autos. Alegatos Facultativos. Recepcionada íntegramente la prueba o
vencido el término respectivo, el juez de oficio deberá llamar autos para sentencia,
quedando el expediente en secretaría por el término de (5) cinco días, durante los
cuales las partes podrán alegar. Vencido ese término se dictará sentencia dentro de los
diez días posteriores. (Art. 57 CPLSF)

Ejecución de Sentencia
Consentida o ejecutoriada la sentencia, el mismo juez que ha entendido originariamente
en la controversia, previa liquidación íntegra y detallada, aprobada, de capital, intereses
y costas, ordenará su ejecución intimando el pago al deudor

Impugnación a la planilla practicada, la misma deberá incluir, además de sus


fundamentos, una liquidación alternativa de la deuda conforme al criterio del
impugnante. En caso de incumplimiento de estos recaudos, el juez o tribunal deberá
considerar como no presentada la impugnación, sin perjuicio de ponderar la conducta
del impugnante como abusiva.
En todos los casos, el juez resolverá conforme las pautas de la sentencia.
La resolución que se dicte será apelable. Elevados los autos, el tribunal de alzada dictará
resolución sin más trámite, pudiendo las partes presentar un memorial facultativo dentro
de los cinco días de radicación de la causa. (Art. 139 CPLSF)

248
No efectuado el pago dentro de los tres (3) días, se trabará embargo en bienes del
deudor, cumpliendo lo establecido para sentencia de remate, debiendo designarse
martillero según normativo CPCC (Art. 140).

249
Bolilla XX
Por: Florencia Primo

Juicio Oral
Sabido es que dentro de la reforma procesal habida en el año 1962 en el enjuiciamiento
civil, uno de los hitos más relevantes (por lo novedoso o progresista) fue la instauración
del juicio oral, en realidad, mal llamado juicio oral ya que es eminentemente escrito. La
oralidad difícilmente puede darse en forma pura, siendo inexorable, por razones de
seguridad jurídica, es por ello que se combina con el método escritural aplicado a las
etapas constitutivas de la traba de la Litis (demanda, contestación, articulación y
decisión de excepciones dilatorias), así como las inherentes a la ejecución de la
sentencia.
La palabra hablada cobra preeminencia sobre la escrita dentro de la etapa sustancial de
trámite, cual es la producción de las pruebas y el alegato de mérito sobre las mismas.

Competencia.
El art 541 del CPCyC expresa “Las disposiciones que seguidamente se establecen, se
aplicarán a los procesos de divorcio, filiación, alimentos, responsabilidad por
hechos ilícitos, acciones posesorias y de despojo.”
Los tribunales colegiados de instancia única tienen asignada competencia en
responsabilidad civil por hechos ilícitos y acciones posesorias y de despojo
(denominadas legalmente <<De Responsabilidad Extracontractual>>), y los <<De
Familia>>. De modo tal, que la competencia material de los tribunales de Juicio Oral
además de lo que enuncia el art 541, se extiende a litisexpensas, nulidad de matrimonio,
tenencia, régimen de visita, adopción, impugnación de la paternidad, disolución y
liquidación de la sociedad conyugal, insania, inhabilitación judicial, suspensión,
limitación y perdida de la patria potestad, tutela, curatela, y venia para contraer
matrimonio.

En cuanto a la competencia por territorio, si la materia es Familia la va a determinar el


último domicilio de la sociedad conyugal, que en caso de estar fijado en la
circunscripción de Santa Fe o Rosario recae en los tribunales colegiados.
En materia extracontractual se deberá tener en cuenta el lugar del hecho, pero a su vez
juega la competencia por monto, es decir, que tendrá que superar las quince (15)
unidades IUS para que sea competente el tribunal colegiado, si no se alcanza el monto
corresponderá ir a circuito.
En Rosario hay nueve tribunales colegiados, en Santa Fe hay cinco, de los cuales el 1 y
4 corresponden a responsabilidad extracontractual; 2,3 y a 5 a familia.

Composición del tribunal


A continuación el art 542 dispone “Tendrá competencia para conocer y decidir en
las causas mencionadas en el artículo anterior, un tribunal colegiado compuesto de
tres jueces, conforme con las prescripciones de la Ley Orgánica de los Tribunales.”
Y el art 543 “El órgano jurisdiccional indicado distribuirá los asuntos por orden de
entrada a cada uno de sus miembros. El designado actuará como juez del trámite,
presidirá la audiencia de vista de causa y realizará todas las diligencias que no
correspondan al tribunal en pleno. Asimismo, con revocatoria ante el tribunal,
dispondrá las medidas cautelares, preparatorias y de urgencia que le fueran
solicitadas.”

250
El juez de tramite o juez instructor, tiene dentro de la esfera de sus facultades (mas allá
de las que como director del proceso son inherentes a todos magistrado en un órgano
unipersonal) el de resolver las cuestiones vinculadas a medidas cautelares, preparatorias
e incidentales que pongan no fin al proceso, presidir la audiencia de vista de causa,
elaborar el proyecto de sentencia al pleno (salvo opinión disidente o minoritaria de su
parte en cuyo caso aquel será redactado por alguno de sus colegas integrantes de la
mayoría), llevar adelante la etapa de ejecución de la sentencia.
Es en el primer decreto en el cual se informa como se conformara el tribunal y quien
será el juez de trámite.

Cada tribunal, cuanta a su vez, con tres secretarias. Dos de ellas son de trámite, las que
alternan (en turnos internos) en la tramitación de la etapa escrita del proceso. La
secretaria de audiencia, órgano propio y singular de los tribunales colegiados, es la
encargada de la etapa nuclear del proceso, vale decir, la oral, rendida en la vista de
causa. De lo actuado se labra un acta sucinta que se incorpora al expediente, y que en
caso de que se dicte sentencia en el mismo acto sirve como encabezamiento del acto
decisorio.

Tramite del proceso

El trámite del juicio oral se caracteriza debido a que la etapa de postulación y de prueba
se da de manera conjunta, es decir, con la demanda y la contestación debe ofrecerse
toda la prueba de la que intente valerse.

Como todo proceso se inicia con la interposición de la demanda, en cuanto a esta el art
545 indica “La demanda se deducirá por escrito. El actor observará los requisitos
exigidos por el artículo 130 y además deberá:
1ro. Ofrecer toda la prueba de que habrá de valerse;
2do. Acompañar los interrogatorios, pliegos de posiciones, puntos a evacuar por
peritos, documentos que obren en su poder, que de no poseerlos, procurará
individualizar en su contenido expresando además, el lugar donde se encuentren.”
La concentración inherente a la oralidad hacen que se identifiquen en un mismo
momento procesal dos etapas estructurales que en el trámite escrito están
temporalmente diferenciadas: la radicación de la demanda y el ofrecimiento de prueba,
el que debe integrarse con los pliegos, interrogatorios, propuestas de puntos periciales y
documentos con que se cuente.
Una relevante controversia se plantea respecto a los efectos de la omisión del
ofrecimiento de prueba en el acto de radicación del escrito introductivo de la instancia,
lo que tiene que ver con el carácter que a la prueba se le asignen dicho estadio procesal:
requisito de la demanda o un elemento autónomo temporalmente integrado a aquella. Si
se lo interpreta como un requisito de la demanda, su ausencia de ofrecimiento permite al
juez fijar un plazo no superior a diez (10) días para que se subsane la omisión (art 547).
Peyrano considera que la ausencia de ofrecimiento de prueba deja a la demanda como
una pura expresión de deseo sin viabilidad previsible, que tal carencia no habilita
válidamente la aplicación del art 547 ya que la prueba no es un requisito de la demanda,
sino un estadio anexado temporalmente a él por razones de concentración y celeridad.
Por lo tanto si la demanda no ofrece pruebas y así es notificada, perderá la parte actora
su derecho a acreditar en juicio sus postulaciones.

251
Art 546: “Una vez notificada, la demanda limita definitivamente las pretensiones
del actor de acuerdo con los hechos expuestos en ella y también respecto de los
medios de prueba. Se admitirán, sin embargo, documentos de fecha posterior,
siempre que el estado del juicio lo permita, en cuyo caso se dará traslado a la parte
contraria.”
Art 547: “El actor deberá subsanar los errores, defectos u omisiones que contenga
la demanda, dentro del plazo que el tribunal le fije y que no podrá exceder de diez
días. En caso contrario, se tendrá por no presentada.”
Una vez cumplido con los recaudos establecidos para la demanda y aceptada está, el art
548 prescribe: “Aceptada la demanda, se conferirá traslado al demandado, con
entrega de copias, emplazándolo para que comparezca a estar a Derecho y a
contestar la demanda en el término de veinte días, con los apercibimientos de ley.
Si el domicilio del demandado no fuere conocido, se le emplazará solamente a estar
a Derecho.”

El emplazamiento a estar a derecho y contestar la demanda se da de manera conjunta


por el plazo de veinte (20) días, aunque genere consecuencias jurídicas distintas en su
no acatamiento; si no se cumple con el emplazamiento se lo declara en rebeldía, si no
contesta la demanda, se tienen por cierto los hechos alegados y por reconocida la
documentación. Solo se emplaza a estar a derecho sin que conteste la demanda solo si
no sabe el domicilio del demandado o no sabe su nombre. Luego de comparecido o no,
se corre traslado para contestar la demanda.
Un recaudo formal singular de la etapa instructoria en el proceso oral lo configura el
modo en el cual debe notificarse la demanda, que implica, que con la cédula por la cual
se notifica de la misma se acompañen copias de la demanda, así como de la
documentación aneja a él.

Alternativas del demandado:


El demandado al contestar la demanda, cumpliendo con lo que prescribe el art 142 y
ofreciendo la prueba de la cual intente valerse, tiene la posibilidad de reconvenir.
Posibilidad que procede siempre que haya conexidad entre las acciones, tramiten ante el
mismo fuero y en la misma instancia.
La reconvención debe hacerse en el mismo acto de contestación de la demanda, en este
caso se le corre traslado de la demanda al actor reconvenido, que deberá contestarla en
el plazo de diez (10) días, así lo establece el art 549: “El demandado contestará la
demanda en la forma exigida por el artículo 142, debiendo ofrecer la prueba de
acuerdo con lo prescripto en el artículo 545. En el mismo escrito podrá reconvenir,
en cuyo caso se correrá traslado al actor, que deberá evacuarlo dentro de los diez
días.”

Por su parte el art 550 expresa: “El actor o el reconviniente podrá, dentro de los
cinco días de contestada la demanda o la reconvención, ofrecer nuevas pruebas, al
solo efecto de desvirtuar los hechos nuevos invocados por el demandado o el
reconvenido.”
Esto implica que si el demandado al contestar la demanda menciona nuevos hechos el
actor tendrá cinco (5) días para ofrecer nuevas pruebas inherentes a ellos y en paralelo,
si tales hechos surgieren de la contestación de la reconvención, será el demandado
reconviniente quien cuente con tal ampliación.
En cuando a “hecho nuevo” la doctrina considera que son acontecimientos
sobrevinientes a la contestación de la demanda que tienen proyecciones sobre los

252
derechos invocados por las partes. Son extremos fácticos que van más allá de la
negativa de los hechos relatados en la demanda, y que implica aseveraciones propias
que requieren soporte probatorio.

Si la demanda o la reconvención no es contestada el tribunal sin más trámite, procede a


dictar sentencia, art 551: “Si el demandado o el reconvenido no contestaren la
demanda o la reconvención, el tribunal, a petición de parte, procederá a dictar
sentencia sin otro trámite, si correspondiere legalmente.” La incontestación de la
demanda o de la reconveción produce una presunción de veracidad de los hechos
relatados por el proponente.
Pero es sabido que esa credibilidad presunta de los hechos tiene límites lógicos:
 Los casos en los que se encuentra comprometido el orden público, tal como
sucede en aspectos inherentes al derecho de familia, o que lo se vaya a resolver
pueda afectar a terceros.
 Los casos en los que el Tribunal considere que se está desvirtuando la realidad
histórica de lo acontecido, supuesto en el cual el juez de trámite, por auto
fundado, deberá así disponerlo para continuar con la tramitación de la causa.

Otras de las alternativas que tiene el demandado es que dentro del plazo de nueve (9)
días para contestar la demanda puede oponer excepciones de pleno y especial
pronunciamiento (aquellas que suspenden el trámite del proceso hasta tanto no se
resuelvan), que son las enumeradas en el art 139 y además litispendencia y cosa
juzgada, debiendo acompañarse la prueba que la justifique, art 552: “Dentro de los
nueve días de la notificación de la demanda, podrá el demandado o el reconvenido
oponer, en un mismo escrito y simultáneamente, las excepciones enumeradas en el
artículo 139, como asimismo las de litispendencia y cosa juzgada, que podrán
también declararse de oficio según el artículo 141. Indicará en el mismo acto, la
prueba que la justifique, y si se tratare de las que se mencionan en último término,
acompañará copia autorizada de la demanda del juicio pendiente o testimonio
auténtico de la sentencia.”

Planteada alguna de las excepciones debe correrse traslado a la parte actora para que la
conteste por el plazo de cinco (5) días, ofreciendo la prueba que considere pertinente.
Si la excepción planteada surge de las constancias de auto, es decir, no es necesario
producir pruebas, el juez de trámite puede directamente resolver; en caso contrario, esto
es, deber producir pruebas, el juez fijará una audiencia dentro del término de diez (10)
días, art 553 “De las excepciones opuestas, se dará traslado a la parte contraria por
el término de cinco días para que las conteste. En la respuesta se deberá ofrecer, en
su caso, la prueba pertinente. Vencido el plazo, el juez del trámite, si lo estimare
necesario, fijará audiencia para recibir la prueba dentro de los diez días, y en su
defecto, procederá a dictar resolución, que será recurrible ante el Tribunal, en el
plazo de tres días.”

Producida la prueba el juez de trámite tiene cinco (5) días para expedirse, igual plazo
que comenzará a correr si no fuera menester convocar a la audiencia incidental y la
cuestión pasara directamente a resolución luego de contestado el traslado.
El auto que resuelve el incidente una vez que resulte ejecutoriado, comenzará el plazo
de diez (10) días automáticamente para que conteste la demanda, art 554: “La oposición
de excepciones suspenderá el término para contestar la demanda, el que volverá a

253
correr, automáticamente ejecutoriado que sea el auto que las resuelva. En este
supuesto, el plazo para la contestación será de diez días.” Lo que se busca es
agilizar el trámite del proceso oral, pero a interpretación de la doctrina genera una
situación de indefensión ya que modifica el criterio del código en el cual, el traslado de
la demanda debe ser notificado por cédula. Esta cuestión fue resuelta pretorianamente,
estableciendo que el nuevo traslado no corre automáticamente sino que debe ser
notificado por cédula (es lo que ocurre en la práctica)

Audiencia o vista de causa

Incuestionablemente, la audiencia de vista de causa conforma el corazón de la oralidad,


en tanto corporiza el momento más relevante del proceso, cual es aquel en el que se
producirán las pruebas ante el colegio pleno y se hará, siempre oralmente, mérito de las
mismas a través de los alegatos.
El acto de convocatoria a la audiencia de vista de causa es la culminación de la etapa
escritural instructoria, mediante el cual es juez de trámite, resueltas las cuestiones
previas que pudieran habido articularse y admitido el contexto probatorio, “reintegra” la
competencia material del proceso al colegio (que si bien en realidad nunca dejo de
tenerla, la delegó en él por mandato legal) para que, bajo su presidencia, se aboque al
conocimiento de lo actuado en dicha audiencia.

Art 555: “Presentadas la demanda y la contestación, resueltas las incidencias


producidas y vencido, en su caso, el plazo para ofrecer contraprueba, el juez del
trámite dictará resolución convocando a las partes a una audiencia dentro de los
treinta días, en la que se substanciará la causa con recepción de la prueba y debate
sobre su mérito. La audiencia será pública, a menos que el tribunal considere que
por la índole del asunto deba celebrarse en privado.”
Si bien el código expresa que la audiencia debe hacerse en el plazo de treinta (30) días,
el mismo ha sido elastizado en la práctica.

Art 556: “La resolución que convoque a la audiencia deberá ordenar:


1ro. La citación de las partes a concurrir a la misma, con apercibimiento de la
sanción prevista en el artículo 559;
2do. Se produzcan previamente todas las diligencias de prueba que no pudieren
practicarse en la audiencia, a cuyo fin, se fijará un plazo que no excederá de veinte
días. Con tal objeto, se notificará a los testigos y se mandará recibir las
deposiciones de los que no residan en el lugar del juicio; se solicitarán los informes,
testimonios o documentos existentes en otras oficinas; se practicarán las
inspecciones o reconocimientos judiciales, y se dispondrá que los peritos, sin
perjuicio de su concurrencia a la vista de causa, anticipen su dictamen por escrito;
3ro. Se reciban las demás pruebas pertinentes y todas aquéllas que a juicio del
juez puedan contribuir a esclarecer la verdad.”

El juez de trámite fija el día y hora de celebración de la audiencia que contiene


básicamente dos facetas dispositivas: ante todo, el anoticiamiento y la consecuente
citación de las partes a comparecer a dicho acto procesal, requerimiento que lejos de ser
facultativos para ellas, se hace bajo los expresos apercibimientos que su
incomparecencia, individual o colectiva, acarreará según la previsión del art 559.
Paralelamente a dicha convocatoria, el director del proceso diferencia las pruebas que
por su naturaleza deben producirse antes de la audiencia de vista de causa de aquellas

254
otras que requieren ser ventiladas en su decurso. Los medios probatorios a rendirse
anticipadamente a la audiencia son: informativas, documentales, testimoniales a
rendirse en otra jurisdicción, inspecciones o reconocimientos judiciales. Deberán
producirse en la audiencia: la testimonial, confesional, reconocimiento de la
documental, citación a los peritos para que de manera verbal y actuada amplíen o
aclaren lo que haya sido objeto del informe.

En el art siguiente la norma aborda en problema que se suscita cuando al día de


realizarse la audiencia, no se han producido las pruebas que integran el acero ofrecido
por las partes, art 557: “Sin perjuicio de las facultades del órgano jurisdiccional,
incumbe a las partes urgir el trámite de todas las medidas de prueba, de tal
manera que queden enteramente diligenciadas para el día de la audiencia. Si la
demora u omisión se debiere a las autoridades comisionadas a ese fin, podrán
solicitar se practiquen antes de finalizada la vista, lo que resolverá el tribunal sin
recurso alguno.”
La circunstancia puede obedecer a un doble orden de razones: o bien la parte
proponente de la prueba ha omitido actuar con la debida diligencia para instar su
producción en tiempo (antes de la vista de causa), incumpliendo con una carga procesal,
o bien obedecer a circunstancias inherentes a la autoridad comisionada (por exhorto, por
oficio o mediante la vía de comunicación que fuera pertinente al caso), las que
adquieren el rango de fuerza mayor para el litigante diligente.
En el primer supuesto el apercibimiento será la pérdida del medio probatorio no
producido; en el segundo si la diligencia comisionada fuere recibida antes de finalizada
la audiencia, la parte proponente podrá solicitar su incorporación al expediente; y no
siendo así le quedará la alternativa de requerir una postergación de la audiencia, sin
perjuicio de abrir el acto y recibir los otros medios probatorios que estén en condiciones
de ser producidos.

A continuación el código regula las consecuencias jurídicas de la no concurrencia de las


partes a la audiencia sin ser debidamente justificada. Si la parte que no concurre es el
actor, se le tiene por desistida la demanda y se lo condena en costas, mediante una
ficción legal el codificador considera que no tiene intención de impulsar el proceso,
toma la no concurrencia como un desistimiento, una renuncia a seguir con el mismo. Si
el que no concurre es el demandado pero contesto la demanda, solo se produce la prueba
del actor y si no concurren ambas partes caduca el proceso y las costas son por su orden,
es decir, cada parte se hace cargo de sus costas. Art 559: “Si el actor, sin causa
debidamente justificada con anterioridad a la iniciación del acto, no concurriese a
la audiencia, se lo tendrá por desistido de la demanda y se pondrán a su cargo las
costas causadas. Si no lo hiciere el demandado, para el caso de que hubiere
contestado la demanda, la recepción de las pruebas se limitará a las del actor. Si
fueren ambas partes las inasistentes, se declarará caduco el proceso y se
impondrán las costas por su orden.”
Si las partes concurren a la audiencia el art 560 prescribe: “Abierto el acto, se ajustará
a las prescripciones siguientes:

1ro. Se dará lectura de las actuaciones y diligencias cumplidas de conformidad


con el artículo 566, inc. 2do.).

2do. Se recibirá la prueba ofrecida por las partes en cumplimiento de lo


dispuesto en el artículo 566 inc. 3ro.).

255
3ro. Las partes tendrán intervención en la producción de las pruebas pudiendo
hacer, con permiso del juez, todas las indicaciones que estimen conducentes a un
mayor esclarecimiento, salvo que sean de manifiesta improcedencia o que se
advierta un propósito de obstrucción.

4to. Producida la prueba ofrecida por las partes y la que el tribunal hubiera
dispuesto recibir en ese acto, el presidente concederá la palabra por su orden al
ministerio público, si tuviere intervención, y a las partes, para que aleguen sobre
su mérito. La exposición no podrá ser substituida por escritos y no excederá de
treinta minutos;

5to. Terminado el debate, el tribunal pasará a deliberar, en forma secreta y


resolverá por mayoría de votos. La sentencia será redactada por el presidente, a
menos que esté en desacuerdo con la mayoría, en cuyo caso lo hará otro
magistrado. Vuelto a la sala, se dará lectura del fallo y quedará así notificado a los
litigantes;

6to. Si en el acto de la deliberación se estimare conveniente, por la complejidad


de las cuestiones, diferir el pronunciamiento, la sentencia se dictará por escrito
dentro de los cinco días posteriores y se notificará a las partes, por cédula;

7mo. La decisión dictada será irrecurrible respecto de las cuestiones de hecho;


solamente procederá la apelación extraordinaria en los casos previstos en el
artículo 564.”

El mecanismo del dictado de la sentencia que dispone el inc 5 es el ideal en la


conformación del sistema, pero en la realidad el mismo se ve desvirtuado en la mayor
parte de los casos por un doble condicionante fáctico: la creciente complejidad de los
procesos y el constante aumento del volumen de causas ingresadas, que condicionan a la
fijación de más de un audiencia por día. Por las mismas razones, el plazo de cinco días
del inc 6 deviene difícil de observar.
En orden a estructura de la sentencia, la deliberación previa requiere que la formulación
sea impersonal, sin perjuicio de que si unos de los miembros del colegio tiene un
postura disidente, deje sentada la misma al final.

En cuanto a la audiencia, lo deseable es que la misma se realice íntegramente en el día y


a partir de la hora en que ha sido convocada, y su desarrollo continúe hasta que
concluya el tramite de las cuestiones debatidas. Si la extensión de las mismas lo
justificare se podrá pasar a un cuarto intermedio para continuar con ella apenas el
problema sea subsanado. Art 562: “La audiencia no terminará hasta que se hayan
ventilado las cuestiones propuestas. Sin embargo el tribunal podrá suspenderla
cuando así lo exija la falta material de tiempo o la necesidad de esperar algún
elemento de juicio que se considere indispensable. En estos casos, continuará al día
siguiente o el primero hábil después de removido el obstáculo que demandó su
suspensión.”

Las causales más frecuentes de suspensión son:


a) Solicitud de ambas partes.
b) Incomparecencia de testigos, que normalmente determina la apertura del acto.

256
c) Fuerza mayor, derivada de la ausencia imprevista de alguno de los miembros del
tribunal, y si no pudiera conseguirse integrarlo con un juez de otro tribunal para
la hora de la audiencia.
d) No devolución en tiempo del expediente por alguna de las partes, no mediando
requerimiento previo en tal sentido de la contraria interesada, que imposibilite al
tribunal tomar conocimiento integral del mismo antes de la audiencia.
e) El despacho de medidas para mejor proveer que disponga el tribunal de oficio.

El código a su vez contempla facultades coercitivas a los fines de poder dar


cumplimiento a la audiencia, art 563: “El tribunal podrá disponer la conducción
inmediata por la fuerza pública de testigos, peritos y funcionarios u otros
auxiliares, cuya presencia fuera necesaria y que citados en forma no hubieran
concurrido sin causa justificada, invocada y probada antes de la hora de la
audiencia.”

Por su parte el Art 561 dispone: “El secretario levantará acto de lo substancial,
consignando el nombre de los comparecientes, de los peritos, testigos y de sus datos
personales. En igual forma procederá respecto de las demás pruebas. A pedido de
alguna de las partes, podrá dejarse nota también de cualquier circunstancia
especial, siempre que el juez lo considerara pertinente.”

Recurso de apelación extraordinario (RAE)

El RAE es un recurso ordinario para el tramite un proceso especial, que es el juicio oral.
Se lleva a cabo como un medio para impugnar las sentencias definitivas o sentencias
con fuerza definitiva del juicio oral.
Está regulado en el CPCyC en los art 564 al 570, sin embargo, los art 564, 565, 566
fueron derogados en su totalidad por el art 42 de la ley 10.160, como así también el art
567 en forma parcial.

El RAE es un recurso que procede contra: las sentencias definitivas o contra sentencias
con fuerza de definitiva (Ejemplo: aquella sentencia dictada por no haber concurrido
ninguna de las partes a la audiencia y considerarse caduco el proceso). Estando
legitimados para interponerlo las partes o el Ministerio Público.

Forma y plazo: el recurso debe interponerse por escrito y de manera fundada, dentro
del plazo de diez (10) días de notificada la sentencia, el plazo puede ampliarse a treinta
(30) días cuando lo que se ataque sea la violación de un precedente, sin embargo no
suele utilizarse en la practica la ampliación del plazo, debido a que el sistema se ha
informatizado y basta con la mera cita del fallo, no requiriéndose copia del precedente.
Se interpone ante el mismo tribunal que dicto el fallo, quien será el que realiza el juicio
de admisibilidad. El juicio de procedencia o fundabilidad le corresponde a la Cámara de
Apelación en lo Civil y Comercial.
El tribunal de instancia única al llevar a cabo el juicio de admisibilidad no solo controla
que el recurso se haya interpuesto en tiempo y forma, sino que además, verifica que se
trate de algunos de los supuestos contemplados en el art 42 de la ley 10.160, a saber:

1) Apartamiento de las formas sustanciales estatuidas para el trámite o la


decisión del litigio, siempre que ello influya directamente en el derecho de
defensa y en tanto no medie consentimiento del impugnante: Debe violarse las

257
formas del juicio oral, pero a su vez, esa violación debe afectar el derecho de
defensa y no debe haber sido consentida por la parte agraviada. Es lo que se
denomina “error in procedendo”.

2) Apartamiento de la sentencia de la regla de congruencia procesal, que opera


cuando el pronunciamiento versa sobre una cosa no pretendida o persona no
demandada, q que adjudica más de lo pretendido, o que no contiene
declaración expresa acerca de pretensión oportunamente deducida o contiene
motivación y/o disposiciones contradictorias entre sí.

3) Apartamiento manifiesto del texto expreso de la ley: se da cuando la ley que se


aplica no está vigente o fue derogada.

4) Apartamiento relevante de la interpretación que a idéntica cuestión de


derecho haya dado una Sala de cámara de Apelaciones de la respectiva
circunscripción Judicial, lo cual debe demostrarse fehacientemente en el acto
de interposición del recurso o en el plazo adicional de veinte (20) días
posteriores, que el tribunal colegiado concederá ante el solo pedimento de la
parte: el tribunal de instancia única se aparta de la interpretación de un caso
análogo llevada a cabo por la Sala superior. En cuanto a la palabra “relevante”
quiere significar, por un lado, decisivo para la causa, y por el otro, que de forma
abierta e inequívoca la resolución del “a quo” venga a contradecir un decisorio
similar del Tribunal “ad quem”.

5) Desconocimiento del principio de seguridad jurídica, por violación de la


litispendencia o de la cosa juzgada: hace referencia a la necesidad de que ellas
hubieran sido articuladas como excepción y el tribunal las hubiera rechazado,
siguiendo con el proceso.

Por su parte el art 43 de la ley 10.160 incorpora una relevante restricción al acceso al
RAE en cuanto estatuye: “En todos los casos, para la admisibilidad de la respectiva
impugnación se requiere que el agravio exceda de una cantidad equivalente a diez
unidades jus a la fecha de dictarse el pronunciamiento recurrido.”

En cuanto al trámite del recurso el art 568 del CPCyC expresa: “El tribunal colegiado
se pronunciará dentro de los cinco días de presentado el recurso, concediéndolo si
se dan los presupuestos exigidos en los artículos anteriores. Si se lo denegare, el
interesado podrá ocurrir directamente ante la sala que corresponda, observando
las reglas establecidas en los artículos 356, 357 y 358.” Si el recurso es denegado, el
código da la posibilidad de poder interponer el recurso de queja o directo.

En caso de concederse el recurso, las partes pueden dentro del plazo de quince (15) días
de la notificación de la providencia que concedió el recurso, presentar ante la sala un
memorial ampliatorio, en el cual se profundiza cuestiones ya planteadas en el recurso.
Presentado el memorial o vencido el plazo para hacerlo se llama a autos para sentencia
(art 569: “Concedido el recurso, se elevarán los autos. Las partes podrán, dentro
del término de quince días de notificada la providencia que acuerda el recurso,
presentar ante la sala un memorial. Vencido el plazo, la causa quedará conclusa
para sentencia; que se dictará dentro de los veinte días siguientes”.)

258
Según cual fuere el vicio imputado a la sentencia del tribunal colegiado, variarán los
efectos del RAE en la alzada, art 570: “Cuando la sala estimare que la sentencia
impugnada ha violado o aplicado falsa o erróneamente la ley o doctrina legal,
declarará procedente el recurso, casará la sentencia y resolverá el caso conforme
con la ley y la doctrina cuya aplicación se declare. Si considerare procedente el
recurso por inobservancia manifiesta de las formas legales, declarará la nulidad y
dispondrá que los respectivos subrogantes del tribunal que la consumó substancien
el proceso y dicten sentencia según corresponda.”

259
Bolilla XXI
Por: Alejandra Nieto

PROCESOS CON PRETENSIONES COLECTIVAS.

CODIGO MODELO DE PROCESOS COLECTIVOS PARA IBEROAMERICA

Los mecanismos de tutela colectiva se presentan como sistemas que brindan la


posibilidad de dar respuesta en un solo proceso judicial con valor de cosa juzgada, a un
conflicto grupal en el que, por su objeto indivisible o por la sumatoria de derechos
subjetivos con una base común, existe un número plural de necesidades insatisfechas.

La idea de un Código Modelo de Procesos Colectivos para Iberoamérica, surgió


en Roma en el año 2002, en el VII Seminario Inernacional co–organizado por el Centro
de Studi Italo-Latino Americano. La propuesta fue la de un Código que pudiese servir
no sólo como receptor de principios, sino también como modelo concreto para inspirar
las reformas, de modo de tornar homogénea la defensa de los intereses y derechos
transindividuales en países de cultura jurídica común, donde se prioriza que el
legitimado extraordinario actúa en un proceso colectivo con la calidad de adecuado
representante de la clase, ejerciendo una defensa vigorosa de todos los intereses de sus
miembros, como si ellos mismos hubieran estado presentes o asumiendo, que de haber
ejercido directamente la defensa, no podrían haberlo hecho de mejor modo.

Como su propio nombre lo dice debe ser sólo un modelo, a ser adaptado a las
particularidades locales, que serán tomadas en consideración en la actividad legislativa
de cada país; pero debe ser, un modelo plenamente operativo, al mismo tiempo.

El Proyecto acabó perdiendo las características de modelo nacional, para


adquirir efectivamente las de un verdadero sistema iberoamericano de procesos
colectivos celosos de las normas constitucionales y legales ya existentes en los diversos
países que componen nuestra comunidad.

El proceso tradicional no se adecua a la defensa de los derechos e intereses


transindividuales, cuyas características los colocan a mitad camino entre el interés
público y el privado, siendo propios de una sociedad globalizada y resultado de
conflictos de masa. Es clara la dimensión social del reconocimiento y tutela de los
derechos e intereses transindividuales, que son aquellos que teniendo por titulares a una
pluralidad de individuos, recaen sobre un objeto común de naturaleza indivisible y
derivan de una causa única, razón por la cual sería conveniente aplicarles el mismo
tratamiento jurídico, por ser comunes a una colectividad de personas, y solamente a
éstas.

Aquí se insertan los intereses de los consumidores, a la protección del ambiente,


de los usuarios de servicios públicos, de los inversores, de los beneficiarios de la
Previsión Social y de todos aquellos que integran una comunidad compartiendo sus
necesidades y anhelos.

La teoría de las libertades públicas forjó una nueva generación de derechos


fundamentales. A los derechos clásicos de primera generación; los derechos políticos,
los de segunda generación; de carácter económico – social, se le incorpora una tercera

260
generación; de derechos fundamentales, representados por los derechos de solidaridad,
resultantes de los referidos intereses sociales.

En los sistemas del common law, la tutela de los intereses o derechos


transindividuales es tradicional, el instituto de las class actions, del sistema
norteamericano, fue ampliándose adquiriendo un papel fundamental y central en el
ordenamiento. Brasil, con un sistema de civil law, tuvo la primacía de introducir en su
ordenamiento la tutela de los intereses difusos y colectivos, de naturaleza indivisible.

En nuestro país, primero la jurisprudencia y después el Código Civil y


Comercial de la Nación de 1993, siguieron el Código Modelo Iberoamericano, hasta que
la reforma de 1994, contempló en el art. 43, los llamados “derechos de incidencia
colectiva”, para cuya tutela prevé el amparo y la legitimación amplia para el ejercicio de
su defensa.

El Código Modelo de Proceso Civil para Iberoamérica recogió la idea brasileña


de la tutela jurisdiccional de los intereses difusos, con algunas modificaciones en
relación a la legitimación , que incluye a cualquier interesado y al control sobre la
representatividad adecuada. En relación a la cosa juzgada, la eficacia erga omnes fue
igualmente adoptada. Fue mas allá de los intereses difusos y colectivos, creando la
categoría de los llamados intereses individuales homogéneos, que abrieron camino a las
acciones reparadoras de los perjuicios individualmente sufridos.

El Código se compone de VII capítulos.

El Capítulo I, conceptúa los intereses o derechos transindividuales, según las


categorías de difusos e individuales homogéneos. La legitimación es la más abierta
posible, es concurrente y autónoma, admitiendo el litisconsorcio de los colegitimados.
También se prevé el compromiso administrativo de ajustamiento de conducta, a cargo
de los legitimados, capaz de evitar o abreviar el proceso, la formación inmediata del
título ejecutivo.

El Capítulo II, trata de los proveimientos jurisdiccionales que se pueden obtener


por el ejercicio de la acción colectiva, que debe conducir a una respuesta jurisdiccional
capaz de satisfacer los derechos transindividuales violados o amenazados, prevé la
tutela anticipada y su posible estabilización, destino de la indemnización para la
recuperación del bien dañado, acción condenatoria a la reparación de los daños, régimen
de multas o mandamientos judiciales aptos a la obtención de un resultado práctico
equivalente al cumplimiento de la obligación de hacer o no hacer.

El Capítulo III, trata de reglas procesales aplicables en general, la competencia,


que corresponde al juez donde hubiere ocurrido o pudiera ocurrir el daño si el ámbito es
local, y en el orden nacional, el juez de la Capital; el pedido y las causas de pedir; la
tentativa de conciliación y de otras formas de auto y heterocomposición, preservada la
indisponibilidad del bien jurídico colectivo. El proceso se desenvuelve por audiencias,
ejerciendo el juez varios poderes de control y dirección, inclusive pudiendo decidir
luego la demanda por el mérito, cuando no hubiere necesidad de prueba. La
distribución de la carga de la prueba, sobre las costas, emolumentos y honorarios, tanto
del perito como de los abogados. Sobre los efectos de la apelación, en principio es
meramente devolutiva y de la ejecución provisoria.

261
El Capítulo IV, versa sobre la acciones colectivas en defensa de intereses
individuales homogéneos y sobre la acción colectiva reparadora de los daños
individualmente sufridos, promovida por los legitimados sin necesidad de indicación de
la identidad de las víctimas, Se da conocimiento del enjuiciamiento de la acción a los
posibles interesados, para que puedan intervenir en el proceso, si lo desean, siéndoles
vedado discutir sus pretensiones individuales en el proceso colectivo de conocimiento.
Se presta especial atención a la notificaciones y en caso de acogimiento del pedido, la
sentencia podrá ser genérica, declarando la existencia del daño general y condenando al
vencido a la obligación de indemnizar a todas las víctimas y sus sucesores –los que
hasta ese momento no están identificados. A éstos corresponde probar en la liquidación
de la sentencia su daño personal, el nexo causal en el daño global, y cuantificar el
perjuicio individualmente sufrido. También se prevé la posibilidad de que el juez, en la
sentencia condenatoria, fije las indemnizaciones individuales, cuando fuera posible. Se
prescribe que transcurrido un año sin la comparecencia de interesados en número
compatible con la gravedad del daño, habrá ejecución colectiva de la indemnización
debida a título de daños causados, teniendo cuidado que sean vertidos con destino al
Fondo de los Derechos Difusos e Individuales Homogéneos. Tanto la gestión como su
actividad, serán controladas por el juez.

El Capítulo V trata la conexión, la litispendencia, y la cosa juzgada. La


conexión y la litispendencia tienen reglas claras, incluyendo las relaciones entre las
acciones colectivas o entre una acción colectiva y las acciones individuales. Está
prevista que la posibilidad de transformar varias acciones individuales en una acción
colectiva. Para los intereses difusos, el régimen de la cosa juzgada es siempre la
eficacia de la sentencia erga omnes.

La demanda puede ser repetida si la misma fue improcedente por insuficiencia


de pruebas, incluso con nuevas pruebas. El Código en este último supuesto admite una
nueva acción con base en pruebas nuevas, en el plazo de 2 (dos) años contados desde el
conocimiento de la prueba nueva sobreviniente al proceso colectivo.

El Capítulo VI, introduce la acción colectiva pasiva o la llamada defensa de la


acción de clase, acción que no es propuesta por la clase sino contra ella. El Código
exige que se trate de una colectividad organizada de personas, o que el grupo tenga
representante adecuado y que el bien jurídico a ser tutelado sea transindividual y de
relevancia social. La cosa juzgada alcanzará sin excepciones a los miembros de la
categoría. Si la acción se promueve contra un sindicato, la cosa juzgada positiva,
alcanzará sin excepciones, a los miembros de la categoría.

El Capítulo VII trata de las disposiciones finales, contemplando una


recomendación al intérprete y determinando la aplicación subsidiaria de los diversos
Códigos de Proceso Civil y legislaciones pertinentes, en lo que no fueren incompatibles.

ACCIONES DE CLASES
La irrupción de pretensiones basadas en la afirmación de conflictos que exceden
el tradicional esquema “Juan vs Pedro”, es uno de los datos mas perturbadores para la
juridicidad. Allá por la década del 70 del siglo pasado, es que el derecho pone su mira
en la existencia de pretensiones que involucraban a un número muy significativo de
personas.

262
Una acción colectiva o acción de clases, es la acción promovida por un
representante (legitimado colectivamente), para proteger el derecho que pertenece a un
grupo de personas (objeto del litigio) y cuya tenencia obligará al grupo como un todo
(cosa juzgada).

Este tipo de ordenamiento ha consagrado la configuración en el que la


legitimación se otorga a un grupo o clase, pese a carecer de toda personalidad jurídica.
La naturaleza representativa de la parte que demanda o es demandada se manifiesta en
dos axiomas básicos:
C) La representación adecuada
D) La protección de los ausentes

En nuestro país, el art 43. 2do párrafo de la Constitución Nacional dispone que
podrá interponer el amparo contra cualquier forma de discriminación; y en lo relativo a
los derechos que protegen al ambiente; a la competencia; al usuario y al consumidor, así
como los derechos de incidencia colectiva en general, el afectado, el defensor del
pueblo y las asociaciones que propenda a esos fines. Se consagra el género de los
derechos e incidencia colectiva en general en cabeza de 3 (tres) tipos de sujetos
específicos.

En los derechos colectivos la tutela recae sobre un bien colectivo y en la acción


instaurada, lo que prevalece es la atinente a la incidencia colectiva del derecho. A veces,
la entidad económica del derecho de un titular es mínima, pero el conjunto del daño
causado a todos los que vieron alterados sus derechos, resulta considerable. Para
remediar esta situación, las acciones de clases, proporcionan soluciones posibles.

Es de suma importancia caracterizar el objeto de la tutela; un bien es un bien


colectivo cuando conceptual, fáctica o jurídicamente, es imposible dividirlo en partes y
otorgárselas a los individuos.

Elementos

4) una pluralidad de sujetos que disfrutan de un bien


5) una relación existente entre varios sujetos y un objeto por el que se pretende
evitar algún perjuicio u obtener algún beneficio.
6) Un bien cuyo disfrute es colectivo pero que es insusceptible de apropiación
individual.
7) Un bien susceptible de apropiación exclusiva pero que convive en una situación
de identidad fáctica que produce una sumatoria de bienes idénticos.

Estas acciones comprenden el medio ambiente, la preservación del patrimonio


natural y cultural, los derechos de usuarios y consumidores, el trato antidiscriminatorio,
la competencia, la información, la salud, la libertad, etc.

La doctrina procesal define los derechos individuales homogéneos como el


conjunto de derechos subjetivos individuales provenientes de un origen común, cuando
predominan esas cuestiones comunes atendiendo a la representatividad del legitimado.
Los legitimados pueden proponer en nombre propio y en el interés de todos los
miembros, acción de responsabilidad civil por los daños individualmente sufridos.

263
La solución del litigio es la misma para todos, las sentencias tienen efectos entre
las partes, debiendo la indivisibilidad del objeto del proceso, por lo que los límites de la
cosa juzgada se extienden incluso a quienes no han sido partes en el proceso, como
modo de asegurar la defensa en juicio.

El caso Halabi marca un hito de honda gravitación en la jurisprudencia de la


CSJN , donde el el Dr. Halabi, letrado en causa propia, promovió la acción de amparo
persiguiendo la declaración de inconstitucionalidad de la ley 25873 que imponía a los
prestadores de los servicios de telecomunicaciones la captación y derivación de las
comunicaciones que transmiten para su observación remota a requerimiento del Poder
Judicial o del Ministerio Público, porque vulneran los art. 18 y 19 de la CN al constituir
una intromisión en la esfera de su privacidad e intimidad, como usuario y como
abogado.

La acción colectiva a partir de este leading case requiere 3 (tres) situaciones


básicas:
c) gran número de actores
d) que la pérdida sufrida por cada uno sea relativamente pequeña que desaliente la
pretensión judicial
e) que los costos para su reclamo sean relativamente altos.

JUSTICIA COMUNITARIA y DE PEQUEÑAS CAUSAS

Ley Pcial. 13178/ 2011

Con la sanción de esta ley el PE se propone reorganizar la justicia local y


disminuir la carga jurisdiccional de los juzgados de primera instancia y de circuito.

El servicio de justicia se encuentra sobrecargado, debido fundamentalmente a la


acumulación de causa y la mora procesal que ocasionan un excesivo retardo en la
solución de cuestiones planteadas. Provocando desconfianza en el sistema y fomentando
la utilización de medios anormales de solución de conflictos.

Se pretende garantizar a la ciudadanía el derecho de acceso a la justicia que


involucra tanto la posibilidad de litigar, como la efectiva y concreta solución a la
controversia.

Características
Se transforma la justicia comunal en justicia comunitaria, procurando optimizar
el funcionamiento de la estructura judicial existente, se les asigna a los ya existentes una
nueva denominación, competencias y un proceso especial que implica elevar la
competencia cuantitativa de los juzgados de circuitos a cien (100) unidades jus.

Requisitos
Juez comunitario, deberá tener título de abogado o procurador. La elección de
candidatos debe recaer en personas técnicamente idóneas para ocupar el cargo. Previo
concurso que la norma dispone. La evaluación de los mismos se llevará a cabo por un
Consejo Consultivo, que actuará como asesor del PE. La convocatoria al concurso se

264
hace a través de publicaciones en el Boletín Oficial, durante 3 (tres) días, página web de
la Provincia, y diario de amplia circulación en el territorio provincial.

Por cada llamado a concurso los postulantes sólo podrán inscribirse para
concursos simultáneamente hasta en un máximo de 3 (tres) cargos vacantes.

En el formulario deberá consignar de modo claro y preciso el juzgado


comunitario de las pequeñas causas, la localidad y circunscripción judicial a la que
pertenecen los cargos a los que aspira y el orden de preferencia entre ellos.

Competencia
Los juzgados comunitarios tienen competencia para entender en conflictos
cotidianos que requieren una rápida solución, por ejemplo: cuestiones de naturaleza
civil o comercial, causas relacionadas derivadas de la relación de consumo,
controversias de vecindad, régimen de propiedad horizontal y asuntos laborales hasta el
límite cuantitativo de cuarenta y seis (46) jus.

Los jueces comunitarios también son competentes para entender en los asuntos
que se relacionan con los contratos agrarios, donde los usos y costumbres locales
asumen un rol fundamental al momento de decidir.

Asimismo pueden recepcionar las presentaciones sobre violencia familiar y


disponer determinadas medidas urgentes al efecto de dar respuesta inmediata a
situaciones generadas en el grupo familiar de los residentes dentro de su jurisdicción.

Fundamento
Es un procedimiento abreviado, basado en los principios de oralidad,
simplicidad, celeridad, economía, inmediatez. Que permitirán a la población obtener
una protección efectiva de sus derechos sustantivos, disminución de barreras de
distancia, económicas, de tiempos de espera, contribuyendo además a cambiar la
percepción que se tiene de la justicia.

Este procedimiento estará precedido por una instancia de mediación, en la


medida de lo posible, a los efectos de garantizarla en los lugares donde existan centros
de mediación comunitaria, propendiéndose, de esta forma, a la solución de los
conflictos interpersonales de manera no adversarial.

Por otra parte el contacto directo con el juez permitirá que pueda ejercer una
labor educativa e informativa en la población, contribuyendo con el correr del tiempo a
disminuir la litigiosidad.

Consideraciones generales

Registro de postulantes
Se conformará un legajo por cada postulante, un registro de postulantes, una
base de datos con la totalidad de la información suministrada por los mismos.

Éstos podrán remitirse al mismo legajo a los fines de consultar sus antecedentes
en caso de presentarse a nuevos concurso, pudiendo ampliar y actualizar los que
considere pertinentes

265
Número mínimo
Si el número de postulantes resulta inferior a tres (3) por vacante a concursar, se
amplía de convocatoria por el plazo de 10 días, publicándose en idéntica forma que la
original. Vencido el plazo se abrirá con los postulantes que resultaren inscriptos.

Declaración jurada
Todo el contenido de la presentacion tendrá carácter de declaración jurada y
cualquier inexactitud o irregularidad grave o maliciosa que se compruebe dará lugar a la
exclusión del concursante, sin perjuicio de las demás consecuencias a las que pudiera
dar lugar su conducta.

Inscripciones – Recusaciones y Excusaciones


El Consejo Consultivo no dará curso a las inscripciones que no cumplan a la
fecha de cierre de las mismas con los requisitos exigidos. Tampoco se efectivizan si el
postulante tiene condena penal firme por delito doloso, si estuviere inhabilitado para
ejercer cargos públicos; con suspensión de la matricula profesional, etc.

Podrán ser los miembros del Consejo, ser recusados conforme a las causales
previstas en el art. 10 CPCyC Sta Fe. No procederá la recusación sin mención de causa.
La recusación podrá plantearse dentro de los 3 (tres) días contados desde el vencimiento
del plazo de inscripción.

En ese mismo plazo deberá plantearse la excusación.

La resolución del Consejo Consultivo será irrecurrible.

Reglas de procedimiento
El procedimiento de selección será público garantizará la transparencia y
celeridad del proceso, consta de 3 (tres) etapas: evaluación de antecedentes, prueba de
oposición y entrevista personal.

Concluida la entrevista y evaluada la motivación personal y vocación para el


cargo, la capacidad de gestión, condiciones personales para asumir responsabilidades y
resolverlas adecuadamente, el Consejo Consultivo confecciona un informe con los
puntajes definitivos de cada postulante y el orden de mérito de los mismos. En el
informe se fundamentará la decisión adoptada.

Los postulantes podrán recurrirlo dentro de los 3 (tres) días de la notificación.


Ninguno de los trámites ni la sustanciación de los recursos suspenden los términos para
recurrir ni el desarrollo de los concursos, salvo decisión del Presidente del Consejo.

Se confecciona una terna según el orden de mérito, con aquellos que hubiesen
obtenido al menos 60 puntos. Ésta se publica durante 3 (tres) días en el Boletín Oficial ,
en el sitio Web de la Provincia, en un diario de amplia circulación en el territorio
provincial y en otro de la circunscripción judicial a cubrir. Simultáneamente se
publican en el sitio web oficial de la Provincia los antecedentes completos de los
aspirantes.

266
Declaración de Bienes
Las personas incluidas en la publicación oficial deberán presentar una
declaración jurada con la nómina de todos los bienes propios, los de su cónyuge o los
del conviviente, los que integren la sociedad conyugal y los de sus hijos menores, todos
ellos individualizados y con una estimación aproximada de su valor.

Observaciones
Los habitantes de la provincia en general, organizaciones no gubernamentales,
colegios y asociaciones profesionales y entidades académicas y de derechos humanos
con sede en la provincia, podrán en el plazo de 20 días corridos, contados a partir de la
publicación de la lista de postulantes admitidos en el concurso, pueden presentar ante la
Dirección del Consejo de la Magistratura y Jueces Comunales, por escrito y de modo
fundado y documentado, posturas, observaciones y circunstancias que consideren de
interés respecto a las personas inscriptas para cubrir la vacantes. No se tienen en
cuentas las observaciones irrelevantes desde la perspectiva de la valoración de las
aptitudes morales, trayectoria, compromiso con la defensa de los derechos humanos y
valores democráticos o aquellos que se funden en cualquier tipo de discriminación
respecto de dichas personas.

Luego de la publicación prevista, el Consejo Consultivo eleva al Poder Ejecutivo


la terna para la cobertura de los cargos concursados.

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