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Catedrático
Lic. Pinto Marín Jorge Filiberto
Curso
Taller de habilidades
Tema
Manejo del estrés
Integrantes
Todos nos sentimos estresados en algún momento u otro. Es una reacción normal
y saludable a un cambio o desafío. Pero el estrés que continúa por más de unas
cuantas semanas puede afectar su salud. Evite que el estrés lo enferme
aprendiendo maneras saludables para manejarlo.
El primer paso para manejar el estrés es reconocer la presencia del estrés en su
vida. Todo el mundo experimenta el estrés de manera diferente. Es posible que se
enoje o esté irritable, que no pueda dormir o que sufra dolores de cabeza o malestar
estomacal. ¿Cuáles son las señales del estrés en usted? Una vez que conozca las
señales que debe buscar podrá comenzar a manejarlo.
Adicionalmente, identifique las situaciones que pueden provocarle estrés. Estas
situaciones se conocen como tensionantes. Sus tensionantes pueden ser la familia,
la escuela, el trabajo, las relaciones, el dinero o los problemas de salud. Una vez
que comprenda de dónde viene su estrés podrá idear maneras con las cuales lidiar
con sus tensionantes.
Evite el aliviar el estrés de maneras poco saludables
Al sentirse estresado, usted puede recurrir a comportamientos poco saludables que
lo ayuden a relajarse. Estos comportamientos pueden incluir:
• Comer en exceso
• Fumar cigarrillos
• Beber alcohol y consumir drogas
• Dormir demasiado o no dormir lo suficiente
• Estos comportamientos pueden ayudarle a sentirse mejor en un principio,
pero pueden hacerle más daño de lo que ayudan. En lugar de ellos, utilice
los consejos que se presentan a continuación para encontrar maneras
saludables de reducir el estrés.
Es importante resaltar que para poder manejar el estrés se tiene que identificar la
causa de donde está proviniendo, Esto tiende a ser muy complejo porque a veces
situaciones que parecen ser menos importantes para nosotros terminan siendo las
causantes del estrés que tenemos. Algunos de dichos causantes son situaciones
tales como: tener muchos problemas, discutir con alguien, pasar por alguna
dificultad económica, cuidar a alguien que tiene una enfermedad grave, tener
enfermedades crónicas, o el fallecimiento de un ser querido. Después de encontrar
cual es el causante del estrés, se puede tratar de manejarlo, para ello tenemos que
considerar los métodos saludables que existen como, por ejemplo: el dormir bien,
hacer ejercicio, ver las cosas con otra perspectiva, entre otras; y así mismo evitar
prácticas negativas tales como: beber alcohol, comer en exceso, dormir demasiado
o muy poco.
Como en muchas de las crisis por las que el cuerpo humano tiende a pasar, El
estrés también se puede prevenir o reducir, esto se puede llevar a cabo planificando
todo lo que queramos realizar o preparándonos para lo peor que puede pasar en
cualquier situación. Si después de haber puesto en práctica cada una de estas
técnicas de prevención para el estrés, empezamos a sufrir estados de ánimo
preocupantes, de enojo, deprimentes, e irritables; entonces quiere decir que algo
estamos haciendo mal, ya que estos son indicadores de que se está pasando por
estrés. Entonces quiere decir que se tiene que evaluar cada una de las cosas que
estamos haciendo, para reestructurarlas y poder crear un nuevo plan de acción.
En conclusión, el estrés es algo a lo que todos estamos propensos a vivir, sin
embargo, no es una situación que no se pueda prevenir, disminuir o incluso llegar a
erradicarla por completo. El estrés no es malo, sino que nos ayuda a dar más de
nosotros para poder llegar a adquirir una capacidad aun mayor a la que ya tenemos,
ya que tenemos metas que queremos alcanzar.