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Universidad Nacional Experimental De los llanos Occidentales

Ezequiel Zamora “UNELLEZ”

Vicerrectorado de Planificación y Desarrollo Social

Programa de Ciencias de Agro y del Mar

Medicina Veterinaria (PNF)

ALGUNAS APLICACIONES DE LA
BIOTECNOLOGÍA EN NUTRICIÓN DE
RUMIANTES (análisis)

Profesor:

Joalys Ortiz Bachilleres:

Seccion: D-01 Gisel Almario C.I:31.461.182


Dorian Colina C.I:28.487.412
Gabriela Cordero C.I:30.099.848
Ángela Ramos C.I: 30.505.981
Jhonny Montilla C.I: 30.533.160
Victor Valero C.I: 30.609.556
Luis Valencia C.I:30.583.978
Nelsin Quintero C.I: 30.706.505

Barinas, Julio del 2023


Introducción

La biotecnología en la nutrición de rumiantes se basa en el uso de microorganismos para


modificar los patrones de digestión y procesamiento de los alimentos, fundamentalmente de
los rumiantes, basándose en la intervención genética de plantas, modificación genética de
microorganismos y uso de diferentes especies microbianas o sus derivados enzimáticos
para mejorar el valor nutritivo de alimentos haciendo eficiente la producción de leche y
carne.

Los rumiantes son herbívoros cuyo principal alimento son las plantas que contienen
carbohidratos fibrosos, pero en estos existe un déficit que es la presencia de lignina (Una
clase de polímeros orgánicos que forman materiales estructurales en los tejidos de soporte
de las plantas vasculares) y ácidos fenólicos (ejercen efectos tóxicos sobre los
microorganismos del rumen, inhiben el crecimiento de protozoos entodiniomorfos) la cual
hace más complejo el proceso de digestión.

Estos animales no poseen enzimas que puedan digerirlos fácilmente y son los
microorganismos presentes en el rumen (bacterias, protozoarios y hongos), los que al
fermentar el alimento permiten al rumiante digerirlo, por lo cual la biotecnología y
mejoramiento de las plantas forrajeras se utiliza para mejorar la eficiencia de la digestión y
procesamiento de los alimentos por parte de los microorganismos presentes en el ru men.
Biotecnología en Nutrición de Rumiantes: ¿Qué y para qué?

La biotecnología es el uso de sistemas biológicos y organismos vivos o sus derivados para


la creación o modificación de productos o procesos para usos específicos. En el campo de
la nutrición de rumiantes, las herramientas biotecnológicas son diversas y tienen
aplicaciones variadas, como la intervención genética de plantas, la modificación genética
de microorganismos y el uso de diferentes especies microbianas o sus derivados
enzimáticos para mejorar el valor nutritivo de alimentos, especialmente de forrajes. Esto
ayuda a aprovechar recursos alimenticios no convencionales, mejorar la salud y el
rendimiento animal. En general, la biotecnología en la nutrición de rumiantes se enfoca en
mejorar la producción y calidad de los alimentos mediante herramientas biotecnológicas, lo
cual resulta beneficioso para el bienestar animal y para la industria ganadera.

Mejoramiento de plantas forrajeras por biotecnología vegetal

La biotecnología vegetal ha tenido un aporte significativo en el mejoramiento de plantas


forrajeras mediante la obtención de cultivares o líneas genéticamente modificadas con
mejor valor nutritivo, mayor contenido de carbohidratos solubles y proteína, reducción de
sustancias tóxicas y la producción de plantas resistentes a plagas, enfermedades y estrés
hídrico. Todo esto ha sido posible gracias a la modificación de vías metabólicas o a la
inoculación de genes que codifican proteínas específicas para producir las características
deseadas en las plantas. En resumen, la biotecnología vegetal en el mejoramiento de plantas
forrajeras ha brindado importantes beneficios para la producción ganadera al mejorar la
calidad y disponibilidad de alimentos para el ganado.
Reducción de la concentración de lignina y enlaces de ácidos fenólicos
(arabino-xilanos-ester-ferúlico)

La presencia de lignina y ácidos fenólicos en la estructura de la pared celular de los forrajes


ejerce un impacto negativo en el valor nutritivo al limitar la digestión, la cantidad de
nutrientes digestibles y la cantidad de materia seca que puede consumir el animal. El
contenido elevado de lignina y ácidos fenólicos también ejerce efectos tóxicos sobre los
microorganismos del rumen, inhibiendo la digestión de celulosa y limitando el acceso de
las enzimas a los carbohidratos potencialmente digestibles, dificultando la acción de estas
enzimas.

Para reducir este efecto negativo, se han creado líneas de maíz, sorgo y millo perlado
mutantes con menor concentración de lignina y líneas de maíz con menor contenido de
enlaces arabinoxilanos-éster-ferúlico. Además, mediante la modificación de enzimas claves
para los procesos de síntesis, se han producido cultivares de gramíneas y leguminosas con
menor concentración de lignina y enlaces arabinoxilanos-éster-ferúlico. Estas técnicas han
favorecido un importante incremento de los coeficientes de digestibilidad de los forrajes.
En la búsqueda de fuentes alternativas de energía, algunas especies forrajeras están siendo
consideradas para la obtención de biocombustibles, y para mejorar la eficiencia en la
transformación de azúcares en etanol se ha trabajado en la modificación de algunos genes
que codifican enzimas requeridas para la síntesis de lignina, dando origen a líneas que
tienen entre 6.4% y 18.2% menos lignina con respecto al genotipo normal, entre 9% y 16%
de aumento en la digestibilidad de la materia seca, 11% de aumento en la digestibilidad de
la fibra y entre 15.5% y 18.2% más proteína que el control.

El desarrollo de estas técnicas de reducción de la concentración de lignina y enlaces de


ácidos fenólicos en los forrajes es importante debido a la relación entre el contenido de
lignina y ácidos fenólicos con la digestibilidad y el consumo de materia seca
Forrajes transgénicos con mayor concentración de nutrientes
La biotecnología ha permitido la manipulación del metabolismo de fructanos en plantas
transgénicas, lo que ha llevado a la obtención de forrajes mejorados con mayor
concentración de carbohidratos no estructurales y azúcares solubles, nutrientes clave para
los microrganismos del rumen. Además, se han obtenido cultivares transgénicos de
Trifolium subterraneum, Festuca arundinacea, Medicago sativa y Pennisetum purpureum
que presentan mayor concentración y disponibilidad de proteína y aminoácidos, así como
características que favorecen la tolerancia al estrés biótico y abiótico y mayor rendimiento
de biomasa forrajera. Estas mejoras genéticas permiten obtener un alimento de mayor
calidad y cantidad para el ganado.

Forrajes con mayor contenido de taninos


Los taninos son compuestos fenólicos presentes en plantas, especialmente en leguminosas
forrajeras. En concentraciones entre el 1% y el 3% de la MS son beneficiosos, ya que
forman enlaces con las proteínas del alimento, protegiéndolas de la degradación ruminal.
La presencia de taninos en los forrajes también se asocia con menor emisión de metano
entérico, lo que puede contribuir a la mitigación del cambio climático. En este sentido, se
han desarrollado forrajes transgénicos con mayor contenido de taninos, como la alfalfa. Sin
embargo, existe controversia con respecto al uso de alimentos transgénicos en animales, ya
que se desconocen los posibles riesgos para la salud de los animales y los consumidores.
Según la información disponible, se presume que la posibilidad de causar alteraciones es
baja. En resumen, la manipulación de la concentración de taninos en forrajes mediante la
biotecnología podría tener efectos beneficiosos en términos de nutrición animal y
mitigación del cambio climático, pero su uso en la alimentación animal sigue siendo objeto
de debate y análisis.

Se aborda la controversia en torno al uso de forrajes y alimentos transgénicos en animales


rumiantes. Por un lado, se menciona que varios estudios indican que no hay diferencia
significativa en términos de producción de leche y rendimiento de carne entre los animales
alimentados con productos transgénicos y los que consumen alimentos no transgénicos. Sin
embargo, existen preocupaciones sobre los posibles riesgos para los animales y los
consumidores.

Se menciona que hay una baja posibilidad de causar alteraciones en animales y humanos
según la información disponible del Comité de Biotecnología de la Academia Mexicana de
Ciencia. Sin embargo, se destaca que se han encontrado pequeños fragmentos de ADN
transgénico en tejidos animales, lo que puede generar alarma y temor en los consumidores.

Se mencionan los organismos internacionales encargados de regular el uso de alimentos


transgénicos, como la FAO/OMS, la FDA, la OECD, la Academy of Science y la Society
of Toxicology. Se señala que la mayoría de los estudios se han realizado en zonas
templadas, por lo que sería interesante explorar y trabajar en la modificación genética de
plantas forrajeras en el trópico, donde hay una gran diversidad de especies con potencial
para mejorar su valor nutritivo.

Sin embargo, se indica que aún no se comprende completamente el impacto que pueden
tener los forrajes transgénicos en la población y las expectativas que pueden generar. Por lo
tanto, se recomienda tener en cuenta las restricciones y las implicaciones para la salud
animal y humana, respaldadas por evidencia científica.

Modificación del ecosistema ruminal: cambios en la comunidad


microbiana
Se refiere a la modificación del ecosistema ruminal y los cambios en la comunidad
microbiana que esto puede provocar. Se menciona que la degradación de la fibra en el
rumen es deseada para lograr mayor eficiencia, sin embargo, habrá diferentes factores que
influirán en este proceso. Algunos factores dependerán del alimento suministrado, mientras
que otros factores serán intrínsecos al ecosistema ruminal.

En el campo de la nutrición de rumiantes, se han realizado varios estudios enfocados en


encontrar estrategias para aumentar la degradación microbiana de la celulosa y
hemicelulosa en el rumen. Algunas de estas estrategias han demostrado ser exitosas,
mientras que otras han añadido más interrogantes y complejidad.
Una de las estrategias más investigadas es la modificación de la composición y estructura
de la comunidad microbiana presente en el rumen. Esta estrategia tiene varios objetivos,
incluyendo: aumentar la degradación de la fibra, disminuir la tasa de degradación de la
proteína, reducir la incidencia de alteraciones metabólicas, regular los productos de
fermentación microbiana, establecer especies fibrolíticas alterativas y reducir la emisión de
metano.

Modificación genética microorganismos ruminales


En esta parte se hace referencia a la posibilidad de mejorar la degradación de los
carbohidratos estructurales en el rumen a través de la clonación o modificación genética de
los microorganismos ruminales. Se mencionan varios tipos de microorganismos
involucrados en este proceso, como Ruminoccocus albus, Ruminoccocus flavefaciens,
Fibrobacter succinogenes, Butirivibrio fibrisolvens y Neocalimastix patriciarum, y se
señala que estudios in vitro han demostrado que estos microorganismos tienen una mayor
actividad enzimática para degradar la fibra.

Sin embargo, se señala que cuando se transfieren al rumen, estos microorganismos tienen
dificultades para competir con otros microorganismos y sobrevivir por largos períodos de
tiempo, lo que dificulta su establecimiento definitivo en el rumen. Por lo tanto, su
aplicación práctica sigue siendo limitada.

Se mencionan algunas limitaciones principales para el uso de microorganismos ruminales


modificados, como el establecimiento, supervivencia y actividad enzimática en el rumen.
Estas limitaciones se deben a la influencia de diversos factores, como la diversidad de
alimentos consumidos por los rumiantes, las características físico-químicas de la pared
celular de las plantas, la complejidad del ecosistema microbiano y las interacciones entre
diferentes individuos y factores ecológicos desconocidos. También se destaca la dificultad
para mantener cultivos viables de estas nuevas cepas introducidas.
Transferencia de microorganismos
Se habla sobre la transferencia de microorganismos, específicamente de la bacteria
Synergistes jonesi y su participación en el metabolismo de la mimosina en el rumen. Se
menciona que la mimosina es un metabolito tóxico presente en las plantas de Leucaena
leucocephala, una leguminosa forrajera común en regiones tropicales. Los animales que
consumen esta planta y no poseen la bacteria S. Jonesil experimentan alteraciones en su
salud. Sin embargo, la transferencia y establecimiento de esta bacteria en el rumen de
animales no adaptados permite reducir los efectos tóxicos de la mimosina. Se citan dos
referencias, Jones y Megarrity en 1986 y Allison et al. en 1990, como fuentes que respaldan
esta información.

Inclusión de aditivos microbianos/probióticos:


La inclusión de aditivos microbianos o probióticos en la alimentación de animales, como
una alternativa a los antibióticos. El término "probiótico" se refiere a microorganismos
vivos que, cuando se suministran en cantidades adecuadas, benefician la salud de los
individuos. También se utiliza la denominación de "aditivos basados en microorganismos"
o "direct-fed microbial (DFM)" para describir estos productos alimenticios.

El uso de productos microbianos en animales ha sido ampliamente estudiado en las últimas


décadas, especialmente en rumiantes de diferentes edades y estados fisiológicos. Aunque el
modo de acción de estos aditivos no está completamente comprendido, se han encontrado
efectos favorables en la regulación de la fermentación ruminal, el comportamiento
productivo y la salud de los animales.

El uso de probióticos a base de bacterias ácido lácticas en animales pre-rumiantes y en


rumiantes adultos con rumen funcional. En animales pre-rumiantes, el suministro de
probióticos a base de Lactobacillus sp. y levaduras ha demostrado mejorar la salud
intestinal al reducir la población de patógenos como Escherichia coli y Salmonella, reducir
la incidencia de diarrea y la tasa de mortalidad, promover el aumento en el consumo de
alimento y ganancia de peso. Estos efectos benéficos son especialmente relevantes durante
las primeras semanas pos-destete cuando el sistema inmunológico del animal está
debilitado.

Probióticos a base de bacterias ácido lácticas


En rumiantes adultos, el suministro de Lactobacillus ha mostrado beneficios en estabilizar
el pH del rumen al reducir la población de bacterias productoras de ácido láctico o influir
en las bacterias involucradas en su metabolismo. Esto es importante para prevenir la
acidosis ruminal, una de las alteraciones nutricionales más comunes en rumiantes que
consumen raciones con alta proporción de almidón. Sin embargo, los probióticos no
siempre son eficientes en mantener estable el pH del rumen, y esto puede deberse a
diversos factores como el tipo de acidosis que desarrolle el animal, el tipo de
microorganismos en el producto, las condiciones ambientales y otros factores relacionados
con el manejo del programa de alimentación.

En cuanto al efecto de los probióticos en la producción de leche, se han observado


resultados variables. Algunos estudios han demostrado que la inclusión de lactobacillus sp.
induce aumento en la producción de leche, mientras que en el ganado de carne el suministro
de L. acidophilus en mezcla con Propionibacterium freudenreichii ha tenido poco efecto en
la eficiencia alimenticia. En otros casos, la inclusión de Lactobacillus sp. no ha mostrado
ningún beneficio en la producción de leche y características de la canal de vacunos en
confinamiento.

Además de Lactobacillus, otros microorganismos como Bacillus licheniformis, Bacillus


subtilis y Enterococcus faecium también han mostrado beneficios en el consumo de materia
seca, ganancia de peso, eficiencia alimenticia, degradación de la materia seca en rumen y
producción de leche en rumiantes bajo ciertas condiciones experimentales.

Levaduras (Saccharomyces cerevisae)


Se destaca la importancia de los cultivos de levaduras (Saccharomyces cerevisae) como
aditivos microbianos en la dieta de los animales. Se mencionan varios beneficios
observados cuando se incluyen en la alimentación, como la reducción del pH ruminal en
vacas que consumen altos niveles de carbohidratos fermentables, la mejora en el equilibrio
físico y químico del rumen, el aumento en la ingestión y degradación de materia seca, la
incremento en la producción de leche y una mejor condición corporal.

Además, se destacan los efectos positivos en animales en crecimiento, como el aumento en


el consumo de alimento, la ganancia de peso diaria y la eficiencia alimenticia. Sin embargo,
se menciona que en algunos estudios las levaduras no tuvieron efectos significativos en la
producción de leche, la digestibilidad, los parámetros de fermentación ruminal o la
ganancia de peso.

También menciona que no se conocen con certeza los mecanismos por los cuales las
levaduras ejercen sus efectos, pero se proponen algunas hipótesis, como el aumento en la
captación de glucosa, lo que reduciría la disponibilidad de este sustrato para bacterias
productoras de ácido láctico y estabilizaría el pH, y la producción de sustancias solubles
que pueden ser factores de crecimiento microbiano requeridos por los microorganismos del
rumen.

Productos a base de microorganismos ruminales


Se habla sobre los productos a base de microorganismos ruminales, en particular sobre el
uso de la bacteria ruminal Megasphaera elsdenii como probiótico. Se menciona que esta
bacteria tiene la capacidad de utilizar el lactato proveniente del metabolismo microbiano de
la glucosa. Desde hace tres décadas se han realizado estudios para explorar su potencial
aplicación como estrategia para controlar la acumulación de ácido láctico y evitar trastornos
ruminales asociados a bajo pH.

Se destaca la importancia de controlar la acumulación de ácido láctico en hembras lecheras


durante la etapa de transición, ya que el descenso del pH es más acentuado en este periodo.
Por lo tanto, el suministro de M. elsdenii se considera conveniente para estabilizar el pH del
rumen, promover el aumento de la producción de propionato y mejorar el balance
energético.

Se menciona que hay estudios que respaldan estas afirmaciones, citando a autores como
Robinson et al. (1992), Henning et al. (2010), Meissner et al. (2010) y Chen et al. (2019).
Sin embargo, no se proporcionan detalles sobre los resultados específicos de estos estudios
ni sobre la metodología utilizada. Además, no se mencionan posibles limitaciones o efectos
secundarios del uso de M. elsdenii como probiótico en rumiantes.

Productos a base de microorganismos ruminales.

La bacteria ruminal Megasphaera elsdenii, es importante por utilizar el lactato proveniente


del metabolismo microbiano de la glucosa, usado como probiótico. Es utilizada para
controlar la acumulación de ácido láctico y evitar los trastornos ruminales asociados a bajo
pH cuando se suministran raciones con alta proporción de almidón, es decir lo estabiliza. Es
utilizado en:

✓ Hembras lecheras durante su etapa de transición.

✓ Engorde intensivo.

También tenemos otro grupo de bacterias ruminales que también se utilizan como aditivos
microbianos, son: Selenomonas ruminantium, Prevotella bryantii, Ruminococcus
flavefaciens, Blautia obeum y Clostridium butyricum. En general, el uso de probióticos y
aditivos microbianos ha generado distintas opiniones debido a:

– químicas de la pared celular de las plantas.

tiples interacciones.

mantenimiento de cultivos viables, entre otras.


Enzimas de fibrolíticas de origen microbiano: inclusión con el alimento o
tratamiento de forrajes.

Los complejos de enzimas fibrolíticas (celulasas y xilanasas) disponibles a nivel comercial


se obtienen de extractos de fermentación de hongos aeróbicos, principalmente. Las especies
Más utilizadas como fuentes de enzimas en productos comerciales son los hongos aeróbicos
Aspergillus niger, Aspergillus Oryzae, Trichoderma Longibrachiatum, Trichoderma reesei
y Penicilium funicalosum, y las bacterias: Bacillus subtilis y Bacillus lentus.

El uso de enzimas fibrolíticas representa una estrategia alternativa para intervenir en la


dinámica de la población microbiana ruminal, con la finalidad de aumentar la eficiencia
ruminal, producción de leche y ganancia de peso, y una mejor salud animal. Los efectos de
las enzimas fibrolíticas se manifiestan en la reducción de la concentración de fibra
detergente neutro, fibra detergente ácido y aumento del coeficiente de digestibilidad de
forrajes.

Bio-conversión de materiales Lignocelulosicos mediante tratamiento con


hongos aeróbicos.

Este grupo de hongos tienen enzimas que ocasionan cambios físicos y químicos en la
estructura de los carbohidratos complejos, y sustancias recalcitrantes presentes en la pared
celular, permitiendo mejorar la digestibilidad de la materia seca y de las fracciones de fibra
a la vez que aumenta la concentración de proteína en el material como producto del
crecimiento microbiano.

Los procesos de bio–conversión se posicionan como estrategias biotecnológicas con


aplicaciones industriales y para mejorar el valor nutritivo de materiales Lignocelulosicos
destinados a ser alimentos para rumiantes. Sin embargo, el proceso es lento y exigente en el
control de las condiciones físicas y químicas del medio de crecimiento de los hongos.
Biotecnología, ganadería y cambio climático.

La ganadería es una de las actividades más importantes para la humanidad por el aporte de
alimentos. Un punto negativo es que la ganadería queda altamente afectada por el cambio
climático, sobre todo en regiones tropicales por el aumento de temperatura, lo que puede
provocar: estés calórico, impacto negativo en la salud del animal y en su producción.

La biotecnología puede intervenir en los procesos de metanogénesis y metabolismo ruminal


del nitrógeno, y de ese modo, además de reducir emisiones, favorece la máxima eficiencia
alimentaria, resultando con mayores índices de productividad y bienestar animal. La
biotecnología, bioingeniería y bioinformática han generado una mejor caracterización del
microbioma ruminal y de sus complejas interacciones e interrelaciones, entre muchas otras
cosas buenas como podría ser el entendimiento de la dinámica metabólica y la relación con
la emisión de gases de efecto invernadero, lo que tiene un excelente impacto en los sistemas
de producción de rumiantes.
Conclusión

La biotecnología en la nutrición de rumiantes tiene como objetivo mejorar la producción y


calidad de los alimentos mediante herramientas biotecnológicas. Esto se logra mediante el
uso de diversas técnicas como la modificación genética de plantas, la introducción de
microorganismos modificados y el uso de enzimas para mejorar la digestibilidad de los
forrajes.

En el caso del mejoramiento de plantas forrajeras, la biotecnología vegetal ha permitido


obtener cultivares con mayor valor nutritivo, mayor contenido de carbohidratos solubles y
proteína, y menor concentración de sustancias tóxicas. Además, se han desarrollado plantas
resistentes a plagas, enfermedades y estrés hídrico.

Otra área de aplicación es la reducción de la concentración de lignina y ácidos fenólicos en


los forrajes. Estos compuestos limitan la digestión y reducen la disponibilidad de
nutrientes. Mediante la modificación genética de enzimas y vías metabólicas, se han
obtenido plantas con menor concentración de lignina y enlaces de ácidos fenólicos, lo que
mejora la digestibilidad de los forrajes.

Además, la biotecnología ha permitido obtener forrajes transgénicos con mayor


concentración de nutrientes, como carbohidratos no estructurales y azúcares solubles,
proteínas y aminoácidos. Estos forrajes mejorados proporcionan alimentos de mayor
calidad y cantidad para el ganado.

Otra área de aplicación importante es el uso de aditivos microbianos, como probióticos y


enzimas fibrolíticas, para mejorar la fermentación ruminal, el equilibrio químico del rumen
y la eficiencia alimenticia. Estos aditivos pueden ayudar a controlar la acumulación de
ácido láctico en rumiantes que consumen raciones con alta proporción de almidón,
estabilizando el pH y mejorando la salud y la producción animal.

En conclusión, la biotecnología en la nutrición de rumiantes ofrece herramientas para


mejorar la producción y calidad de los alimentos, aprovechar recursos alimenticios no
convencionales y reducir el impacto ambiental de la ganadería.

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