técnicas culinarias que deberías conocer para cocinar de rechupete.

Esferificación, texturizar, deconstruir, aire, espuma, nitrógeno líquido… Sin

darnos cuenta, hemos introducido en nuestro vocabulario infinidad de
técnicas culinarias que eran (y todavía son, en muchos casos)
completamente desconocidas para nosotros, los que no nos dedicamos a la
cocina de manera profesional…

Sin embargo estamos en la era de los realities y concursos gastronómicos;

un momento en el que nos hemos acercado a la cocina con curiosidad y
con ganas. Una época en la que incluso se organizan rutas turísticas para dar
a conocer la tradición de las mesas de nuestros pueblos como uno de sus
principales valores históricos y culturales.

Y es curioso comprobar cómo coinciden en el tiempo la exaltación de la cocina

más tradicional con la WeQWRQ

¿Qué son las técnicas de cocina?

Conocemos como técnicas de cocina al conjunto de procesos que aplicamos
a los alimentos para hacerlos digeribles y sabrosos y prolongar su tiempo de
conservación. Esto implica la limpieza, la preparación previa en frío y la cocción
o cocinado final.

A través de las técnicas culinarias buscamos eliminar los gérmenes de los

alimentos, facilitar su masticación y digestión (los ablandamos), darles un
aspecto más agradable para su consumo y, fundamentalmente, mejorar su
sabor y su olor.

Hay muchos tipos de técnicas de cocina en función del proceso que

apliquemos a cada alimento. Las hay más tradicionales y otras más
innovadoras, porque en la cocina se inventan nuevas técnicas constantemente.

¿Qué es marinar?
Marinar es poner en remojo un alimento, con un líquido que esté
condimentado y sea aromático. Dicho alimento permanece durante un
tiempo marinando antes de ser cocinado. Generalmente, más de 24 horas y
dentro del frigorífico.

Según la RAE, marinar es dar cierta sazón al pescado para conservarlo o

conservar en crudo ciertos alimentos, especialmente pescado, con adobo de
vino, vinagre, hierbas, especias, etc., con el fin de que se ablanden y adquieran
aroma.
¿Cómo marinar salmón?

Una forma fácil de marinar salmón en casa es la siguiente:

1. Retira la espina del salmón y las partes grasas.

2. Haz una mezcla de sal, azúcar y pimienta y pónsela a la parte rosa del salmón.
3. Añade pimienta en grano y varias ramas de eneldo.
4. Pon un lomo contra el otro, dejando la piel hacia el exterior, y envuelve como si
fuera un bocadillo con papel film transparente, dejando los laterales un poco
abiertos. El objetivo es deshidratar el salmón y que escurra el líquido.
5. Coloca el salmón en una fuente con peso encima y mételo 24 horas en la
nevera.
6. Escurre el líquido y dale la vuelta. Vuelve a dejarlo otras 24 horas en la nevera.
7. Retira el film y lava bien el salmón. Después seca con papel de cocina para
que no queden restos en el pescado.
8. Lamina el salmón con cortes finos.
9. Adobar es una técnica de cocina que se utiliza para conservar alimentos
y realzar su sabor. Se usa generalmente en carnes -aunque también
vale para algunos pescados- y consiste en sumergir el alimento en un
recipiente con adobo.
10. El adobo se consigue mezclando limón, vinagre, especias, vinagreta,
comino y ajo. También es posible que, en función del tipo de alimento,
se añada cerveza, vino o aceite. E incluso algún picante.
11. Macerar es una técnica culinaria que tiene por objetivo dar una sazón
diferente y un aroma y sabor más exquisito a los alimentos. Se usa para
aromatizar y ablandar pero también para conservar los alimentos. Se
emplea con las carnes, principalmente, pero también se utiliza a veces
en verduras, frutas y pescados.
12. En este caso, los ingredientes son limón, vino, hierbas aromáticas y
vinagre.
13. ¿Qué es el baño María?
14. Otra de las técnicas de cocina básica más utilizadas es la del baño
María. Se utiliza para calentar un alimento líquido o sólido de forma
uniforme y lenta. Consiste en introducir en un recipiente el alimento, y
meter después éste dentro de una olla, cazo o similar para ponerlo al
fuego.