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Liceo Municipal Antonio Fuentes de Arco

Escuela de Diseño y Artes Visuales


Profesorado de Artes Visuales
Trabajo Práctico n°2

Curso: Segundo año.

Materia: Antropología Sociocultural.

Docente: Gonzalo Roces.

Estudiante: Florencia Gonzalez.

Fecha: Junio, 2022.


1- Teniendo en cuenta el texto de J. Picó, podemos iniciar poniéndonos en contexto: en la
Inglaterra del siglo XIX, con una sociedad capitalista, burguesa y con una concepción
individualista del hombre.
Picó hace referencia a la teoría darwiniana en auge sobre la supervivencia de los más aptos.
Retomando a Marx y su materialismo histórico -tema nombrado en clase por el docente-, él
nos va a decir que no existe cierta “supervivencia de los más aptos”, sino los que demandan
y los que obedecen. Lo cual, como se menciona en el libro de J. Picó, esto encajaba perfecto
para las clases dominantes.
En este contexto, las leyes científicas validaron la supremacía de la raza blanca sobre otras,
quedando justificado el etnocentrismo cultural.
La primera definición de cultura la va a dar Edward Burnett Tylor en 1871, quien estaba
influído por las condiciones históricas de su país en ese momento, un evolucionismo puesto
en debate y una necesidad de saber qué tipo de organización social tenían los pueblos
dominados. Él dice que la cultura o civilización es aquel conjunto que incluye el
conocimiento, las creencias, el arte, la moral, el derecho, el vestido y cualquier otra
capacidad o hábito adquiridos por el hombre como miembro de una sociedad. Esta
definición incluía a los pueblos primitivos, por eso se le conoce como el creador del
concepto de “cultura primitiva”. Tylor además hablaba de la cultura, en singular. ya que a sus
ojos la cultura era algo uniforme en todos los pueblos, sin variaciones. Esta definición de
cultura podría decirse que sigue una línea evolucionista, dejando de lado la parte simbólica
de la cultura.
Otro gran exponente que va a dar su definición de cultura es Bronisław Malinowski, según
él, los seres humanos tienen necesidades orgánicas (biológicas) básicas. Esto va a explicar
por qué las necesidades culturales no son naturales, es decir, que la cultura es un producto
del hombre, por lo tanto, sin hombre no hay cultura.
Las necesidades materiales o culturales tienen imperativos, lo que exige una demanda o
necesidad: la cultura es un medio para alcanzar un fin.
Existen los imperativos instrumentales, de integración y derivados.
Malinowski también identifica a la cultura como una herencia social, lo cultural es aquello
que se transmite socialmente.
Otro autor nombrado por Picó, es Franz Boas, quien va a retomar los aportes de Tylor,
considerando que la cultura es un complejo que incluye todas las manifestaciones del
hombre en cuanto miembro de un grupo social, tanto sus formas de comportamiento como
los productos de su actividad.
Boas plantea que la cultura tiene un carácter adquirido, e insiste en diferenciar la herencia
biológica de la herencia social: la cultura no se adquiere mediante el proceso reproductivo
de la especie humana, sino, por el proceso de aprendizaje.
Otro aporte muy importante que dio Boas es mencionar que la Antropología es una ciencia
histórica, y que su objeto de estudio es las culturas.
2- La categoría de transculturación consiste en un proceso donde dos culturas diferentes
toman contacto o “chocan”, y terminan siendo afectadas mutuamente. Sus elementos se
integran, y el nuevo producto asume una identidad inestable, abierta.
La categoría de hibridez habla del objeto transculturado, quiere decir que no existen
identidades puras, sino que derivan de este choque entre dos culturas.
El autor habla de la importancia que poseen ya que son categorías que conforman a las
culturas y a los objetos culturales, y que estos pueden ser herramientas de control o de
transformación, de cambio, de progreso o de crítica.

3- Prats habla del concepto de Patrimonio cultural entendido como todo aquello que
socialmente se considera digno de conservación, independientemente de si es algo utilitario
o no. El patrimonio cultural es algo simbólico, una creación artificial.
Esta concepción se da a partir del Romanticismo, un movimiento cultural que valida a la
clase social burguesa. Intenta romper con todo lo establecido anteriormente y representa lo
nuevo: el progreso, el liberalismo, el individuo contra el Estado, con una ideología
dominante que lo justifica.
El Romanticisimo fija criterios de legitimación extracultural: la naturaleza, la historia y la
genialidad (ligada a la inspiración creativa y a la figura ideal del “genio”).
El pool patrimonial es conformado por estos criterios de legitimación, y por un conjunto de
bienes hipotéticamente patrimoniables. Son hipotéticos porque requieren de una activación
cultural. Esto se da al delimitar ciertos criterios sobre qué hace que algo sea patrimonio, qué
valores de la cultura evoca o si genera identidad. Este proceso de activación no es algo
neutral. Sin poder no se pueden dar estas activaciones, es decir, sin poder no hay
patrimonio.
El Romanticismo también impulsó los nacionalismos, los pannacionalismos y los
colonialismos. Con los nacionalismos el concepto de patria se vuelve algo hasta sagrado,
está en un lugar de poder, y la empresa capitalista se convierte en un servicio a la patria y
expresa sus valores esenciales (valores de acuerdo con los intereses de las clases
dominantes).
El autor habla del concepto de espectáculo como algo que afecta al patrimonio cultural en la
actualidad, ya que después de la segunda guerra mundial se producen ciertas
transformaciones en la sociedad con respecto al ocio. Varios factores influyen en estas
transformaciones, pero los más destacados son la generalización de las vacaciones pagas, lo
cual favorece al turismo y a un gran desplazamiento de las masas, y la televisión. La
televisión va a cambiar nuestra manera de percibir el mundo, de sentir que tenemos las
noticias al alcance de nuestra mano, y convertimos la realidad en espectáculo.
De esta manera afecta al patrimonio cultural ya que muchas tradiciones, fiestas, procesos y
hasta culturas enteras se han convertido en objeto de consumo, y a su vez tenemos muchos
nuevos bienes culturales patrimonizables.
Bibliografía:

● Apuntes tomados en clase.


● Picó, Josep (1999). "4. La cultura como ciencia: La Antropología", en Cultura y
Modernidad. Seducciones y desengaños de la cultura moderna. Alianza Editorial
S. A. Madrid, España.
● Prats, Llorenç (2000). El concepto de patrimonio cultural. En Cuadernos de
Antropología Social, 11. C.A.B.A: Universidad de Buenos Aires, pp. 115-136.
Serna, J. y Pons, A. (2013). "I. Los preparativos del viaje. Mapa y destinos" en
La historia cultural. Autores, obras, lugares. Ediciones Akal, S. A. Salamanca,
España.
● Vich, Víctor (2014). "1. Sobre cultura, heterogeneidad, diferencia y poder", en
Desculturizar la cultura. La gestión cultural como forma de acción política. Siglo
Veintiuno editores. Bs. As., Argentina.
● Eagleton, Terry (2000). "1. Modelos de cultura", en La idea de la cultura. Una
mirada política sobre los conflictos culturales. Editorial Paidós. Bs. As.,
Argentina.

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