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TEMA - 5

LA SESIÓN
La sesión es la aplicación de las intenciones planificadas en la programación,
se caracteriza por la ejecución de las actuaciones programadas. Así, todas las
actividades que configuran una programación se llevan a la práctica mediante las
sesiones. Programar la sesión antes de su puesta en práctica es fundamental
para que los objetivos, sean del tipo que sean, se lleven a cabo.

Un educador o entrenador debe diseñar y seleccionar las actividades que le


permitirán alcanzar las metas propuestas, para ello deberán ordenarse de forma
coherente para llevarlas a cabo durante la sesión. Así, atendiendo a los objetivos
perseguidos en la sesiones podemos diferenciar diversos tipos de sesión:
• Sesiones de aprendizaje: Son aquellas sesiones que buscan conocer o
descubrir nuevos elementos técnicos (mediante el aprendizaje motor),
o bien perfeccionar técnicas ya aprendidas, pero que aún no se
dominan.
• Sesiones de acondicionamiento físico: Son sesiones en las que la
carga física es el elemento principal, y buscan el desarrollo de una o
varias capacidades físicas. Estas a su vez, y en función de la carga de
trabajo pueden ser:
- Sesiones de mantenimiento.
- Sesiones de desarrollo.
- Sesiones de recuperación.
• Sesiones de animación, lúdicas o de recreo: Este tipo de sesiones no
tienen una finalidad de aprendizaje específica por parte del alumnado,
sino que tienen un fin lúdico, proponiendo vivencias de actividad física
motivantes y que buscan la diversión.
• Sesiones de evaluación: Son sesiones para aplicar lo aprendido en las
sesiones anteriores, y sirven para comprobar el grado de asimilación
de los conocimientos adquiridos. Es donde culminan los aprendizajes,.
En el ámbito recreativo, de iniciación deportiva y en deporte escolar, la
competición nunca debe ser la finalidad principal, sino una actividad más, que
sirve como medio para alcanzar otros objetivos educativos.
Sin embargo en el deporte federado la sesiones de entrenamiento estarán
íntimamente relacionadas con factores de rendimiento a nivel físico, técnico y
táctico. Su orientación estará marcada por la competición y los resultados de cada
fin de semana.
1. LA ESTRUCTURA DE LA SESIÓN:
Una sesión se puede estructurar en partes o fases bien diferenciadas, que en
parte vendrán determinadas por la duración de las sesiones. Así, la duración de
las sesiones puede variar desde los 30 minutos la más cortas, a las 2 horas.
A la hora de estructurar la sesión también es importante tener en cuenta a
que personas va dirigida y el tipo de sesión que se va a realizar.
Por ejemplo: una sesión destinada a personas con baja condición física (niños
pequeños, personas mayores, etc.), tendrá una duración menor. Sin embargo, las
sesiones de entrenamiento para deportistas de cierto nivel tendrán una duración
mucho más larga.
Existen diversas propuestas para estructurar una sesión. Sin embargo, una de
las más utilizadas es la siguiente:
a) Fase de información:
Una sesión debe iniciarse explicando los objetivos que se quieren
conseguir para tratar de motivar a los participantes. Esta fase debe ser
breve, concreta y precisa, con un lenguaje claro y adaptado al nivel de
comprensión de los usuarios.

b) Calentamiento o fase de adaptación:


El objetivo de las actividades que se realizan en esta fase es que el
cuerpo se adapte al esfuerzo físico al que va a ser sometido durante la
sesión. Así, durante el calentamiento:
• Se incrementará la frecuencia cardiaca y respiratoria,
• Se aumenta la temperatura muscular para mejorar su
rendimiento y evitar lesiones.
• Se produce una vasodilatación a nivel muscular para
cubrir las necesidades de oxígeno y nutrientes que van a
exigir los músculos durante el ejercicio.
• Se incrementa la producción de líquido sinovial para
proteger las articulaciones.
Podemos diferenciar dos tipos de calentamiento:
- Calentamiento general: Que afecta a todas las articulaciones
y a los principales grupos musculares del cuerpo. Sirve para
la realización de cualquier actividad.
- Calentamiento específico: Se realiza cuando se finaliza el
calentamiento general, y sus ejercicios están dirigidos a la
práctica de un deporte concreto. Así por ejemplo, si vamos a
realizar una sesión de pliometría, el calentamiento específico
se centrará en preparar nuestras piernas para realizar
multisaltos.
c) Parte principal o fase de logro de objetivos:
En ella se realizan las actividades destinadas a conseguir los
objetivos planteados para la sesión. Según sean los objetivos, las
actividades podrán ser:
• Actividades técnicas: Cuando se trabajan los fundamentos
técnicos de un deporte.
• Actividades tácticas: Cuando se trabajan sistemas de juego
y estrategias tanto individuales como colectivas.
• Actividades de condición física: Destinadas a mejorar las
capacidades físicas y el rendimiento deportivo.
• Actividades lúdicas: El juego es el componente principal en
este tipo de actividades, (juegos, partidos, situaciones de
2X2, etc.).
• Actividades recreativas: Son actividades globales con una
finalidad socioeducativa (juegos cooperativos, actividades en
el medio natural, etc.).
De todas estas posibilidades, el educador deberá seleccionar el
tipo de actividades que le permitan alcanzar los objetivos de la sesión,
así como los objetivos programados. La dificultad de los ejercicios debe
incrementarse a medida que avanza la sesión.

d) Vuelta a la calma o fase de readaptación:


El objetivo de esta fase es pasar de una situación práctica de alta
intensidad, a una situación de reposo de forma progresiva. Para ello
disponemos de dos tipos de actividades:
- Tareas de distención: Que pueden ser ejercicios de
intensidad media o baja (penaltis, tiros libres, etc.), o juegos
de poco requerimiento físico.
- Estiramientos: Estos son muy importantes para recuperar la
elasticidad y relajar los músculos.
e) Fase de análisis:
En ocasiones, justo antes de finalizar la sesión, conviene que el
educador o entrenador hable con los deportistas para reflexionar y
tomar conciencia de lo que ha pasado durante la sesión. Este análisis
puede orientarse de formas diversas:
- Como una valoración sobre el trabajo que se ha realizado,
incidiendo en los logros conseguidos y en los que quedan por
conseguir.
- Como enlace entre una sesión y la siguiente, relacionando el
trabajo que se acaba de realizar con los objetivos de las
próximas sesiones.
- Como dinámica de grupo, buscando la implicación de los
deportistas en otras tareas (recoger material, ordenar almacén,
etc.), también se pueden tratar temas relacionados con la
educación en valores.

2. MODELO DE SESIÓN:
La planificación de una sesión debe recogerse en una ficha donde el
profesional debe plasmar todos los aspectos relevantes de lo que se va a realizar
durante la sesión. Así como todos los elementos necesarios para impartirla con
eficacia:
- Duración.
- Objetivos a conseguir con la sesión.
- Contenidos de desarrollar durante la sesión.
- Relación entre cada una de las actividades.
- Metodología de enseñanza.
- Materiales necesarios para su ejecución.
- Instalación en la que se va a realizar.
- Sistema de evaluación de la sesión.

El objetivo de esta ficha es disponer de un documento con utilidad práctica, en


el que se describan cada una de las actividades que se van a realizar de forma
breve y precisa, para que el entrenador/monitor/educador pueda seguir la
sesión con solo echar un vistazo. Los dibujos o gráficos son muy útiles para esto.
Técnico Superior en Nº SESIÓN:
METODOLOGÍA DE LA ENSEÑANZA DE
Enseñanza y Animación
Sociodeportiva ACTIVIDADES FÍSICO-DEPORTIVAS (1º) DURACIÓN:

OBJETIVOS DE LA SESIÓN

CONTENIDOS DE LA SESIÓN

REPRESENTACIÓN
ACTIVIDADES – TAREAS TIEMPO
GRÁFICA
Calentamiento:

Parte Principal:

Vuelta a la calma:

METODOLOGÍA

ORGANIZACIÓN

INSTALACIONES Y
MATERIALES

EVALUACIÓN DE
LA SESIÓN
3. DIRIGIR UNA SESIÓN:
La sesión es la parte visible de la programación, por lo que el técnico deberá
cuidar todos los detalles en su aplicación. Para preparar el desarrollo de una
sesión de forma eficiente debemos tener en cuenta los siguientes principios:

a) Motivar a los participantes: La motivación es la fuerza que impulsa a


una persona a realizar una determinada actividad, ya sea intelectual,
física, etc. La motivación es diferente en cada individuo, porque está
muy ligada a aspectos de la personalidad como son: la necesidad, el
interés y el deseo.
Así, un buen técnico deportivo deberá conocer las necesidades y
motivaciones que impulsan a cada uno de sus pupilos a la práctica
deportiva. Esta información le ayudará a mejorar sus intervenciones y
evitar el abandono.
b) Explicar con precisión: Iniciar una actividad y darse cuenta de que
hay personas que no han entendido lo que tienen que hacer es muy
frustrante, por lo que debemos asegurarnos de que la información ha
llegado a todos los participantes.
Para explicar de forma adecuada se deben dar instrucciones
breves y claras, explicando los objetivos de la sesión al inicio de la
sesión, así como la mecánica a seguir para el desarrollo de la sesión:
(movimientos, posiciones, materiales,...).
En ocasiones será necesario realizar una demostración, mostrar
una representación gráfica, o repetir la explicación de otra manera si se
percibe que no ha quedado claro.
c) Proponer un esfuerzo progresivo durante la sesión: Aumentar la
intensidad del esfuerzo de forma progresiva hasta alcanzar el
rendimiento previsto, aporta coherencia a una sesión.
Cuando la carga física de una sesión es suficiente y adecuada para
estimular la adaptación del organismo, la persona que sufre esa carga
mejora su condición física.
d) Alternar periodos de esfuerzo y descanso: Es necesario estresar o
sobrecargar el organismo para generar adaptaciones, pero también es
necesario planificar los tiempos de descanso para que el cuerpo se
recupere y podamos aplicarle otra carga de entrenamiento.
Saber aplicar adecuadamente los periodos de carga y descanso es
la clave para alcanzar un rendimiento óptimo, mientras que aplicarlo
mal conduce a situaciones de rendimiento bajo o nulo.
e) Optimizar el tiempo disponible: Entre los aspectos más importantes
para la gestión de una sesión está el control del tiempo, que en muchas
ocasiones no coincide con el tiempo programado.
La continuidad en las tareas aportan dinamismo y mayores dosis
de concentración. Por lo tanto, debemos evitar los tiempos de
inactividad, las colas, etc.
En caso de que sean necesarios largos tiempos de espera, se
pueden incorporar tareas adicionales para los inactivos.
Existen una serie de actuaciones profesionales que favorecen las
pérdidas de tiempo, que son:
- Pasar lista.
- Cambiar constantemente de actividad.
- Realizar juegos de eliminación.
- Las explicaciones largas.
- La falta de organización.
f) Atender al trabajo individual: Tanto en las sesiones individuales
como en las de grupo, se debe prestar atención a las necesidades de
cada participante. El técnico deberá prestar atención para detectar las
necesidades específicas de cada individuo utilizando alguna de estas
estrategias:
- Animando: En ocasiones es necesario animar al grupo para
mantener el ritmo y la intensidad de las actividades.
- Corrigiendo: Se deben hacer correcciones de ejercicios, no de
personas. Prestando más atención a los aspectos que se
deben mejorar, que a corregir malas ejecuciones.
- Reforzando: Es muy importante conocer el carácter de cada
individuo para aplicar estos refuerzos con eficacia. A una
persona extrovertida y segura de sí misma, puede bastarle con
una palmadita. Sin embargo, una persona tímida y con el
autoconcepto bajo hay que mostrarle nuestra satisfacción de
forma clara.
- Proponiendo: Cuando un ejercicio se domina, ejecutándolo con
soltura, se pueden proponer variantes para enriquecer los
aprendizajes.
4. LA COMPETICIÓN DEPORTIVA:
La competición deportiva posee unas características especiales que exceden
el marco de la sesión, y por tanto es necesario tratarla de una manera especial,
tanto en su planificación como en su organización.
La competición es una actividad global con una fuerte capacidad de motivar, y
con una gran exigencia. Integra por tanto, todos los factores que influyen en el
aprendizaje y en el entrenamiento.
La forma de plantear una competición dependerá de los objetivos perseguidos
y de otros factores como:
- La edad de los deportistas.
- La categoría competitiva: deporte de base, senior o de élite.
- La filosofía de la entidad deportiva: educativa, utilitaria,
recreativa o competitiva.
Así por ejemplo, es evidente que loa objetivos competitivos en el deporte de
base serán muy diferentes a los objetivos del deporte de élite. En el deporte de
base el objetivo principal debe ser la diversión, mientras que en la élite es el
resultado (ganar).

CATEGORÍA COMPETITIVA
OBJETIVOS
DEPORTE BASE ÉLITE

• Ganar.
• Divertirse.
GENERALES • Aprovechar lo mejor de cada
• Enseñar - aprender.
jugador.

• Utilizar fundamentalmente lo que


el jugador domina.
• Utilizar todas las técnicas y • Conocer y aprovechar los puntos
INDIVIDUALES tácticas aprendidas, aunque fuertes de cada jugador.
salgan mal. • Descubrir y aprovechar los
puntos débiles de los jugadores
contrarios.

• Analizar y conocer las acciones


más repetidas del rival, y buscar
la manera de contrarrestarlas.
• Aprovechar los puntos fuertes de
• Plantear el partido de forma que
nuestro equipo.
COLECTIVOS todos los jugadores participen y
• Aprovechar los puntos débiles
tengan su papel.
del equipo contrario.
• Diseñar varias alternativas para
cambiar de planteamiento si el
plan inicial sale mal.

• Aprovechar las posibilidades del


• Olvidarse del árbitro y centrarse
ARBITRAJE reglamento al máximo que nos
en el juego.
permita el árbitro.
La competición deportiva tiene muchos aspectos positivos, pero también tiene
algunos condicionantes que pueden influenciar el desarrollo correcto de los niños.
Algunos de estos condicionantes son:
- El exceso de presión sobre los jóvenes talentos para conseguir la
excelencia.
- El incremento de actitudes violentas motivadas por el contexto
competitivo.
- El abuso de los valores competitivos puede convertir el placer de
jugar en un trabajo, que implica pérdida de motivación y en último
término el abandono de la práctica deportiva.

Para facilitar el logro de los objetivos competitivos durante un partido,


debemos seguir una serie de orientaciones metodológicas.

 Motivación: Es un aspecto esencial en cualquier práctica deportiva. La


propia competición es un elemento motivante en sí mismo, siempre que el
contrincante tenga un nivel similar. Si el nivel del rival es muy inferior o
muy superior suele provocar pérdidas de motivación.

 Comportamiento competitivo: Se deben exigir y fomentar actitudes de


respeto al reglamento, al árbitro y a los rivales, ("fair play").
En los deportes colectivos también es importante fomentar la buena
relación entre compañeros, donde a veces surgen conflictos por la
competencia entre ellos.
Es importante tener en cuenta que el contexto competitivo genera un
nivel de tensión superior a otras actividades deportivas o entrenamientos,
donde es más difícil controlar las emociones.

 Relativizar los resultados: A pesar de que el deseo de ganar es lo que


da sentido a una competición, en iniciación deportiva se debe priorizar el
proceso de formación sobre el resultado. Así, en ocasiones se pierde un
partido, pero se ha hecho un trabajo magnífico.
También pueden marcarse otros objetivos y valorarlos tanto como el
resultado de la competición.
Por ejemplo: superar la propia marca personal, conseguir un resultado
digno, etc.
El exceso de presión derivado de priorizar el resultado obstaculiza el
rendimiento del deportista en momentos decisivos por el miedo a fallar.
Por ejemplo: un tiro libre con tiempo terminado que decide un partido, un
penalti en los momentos finales de un partido, etc.

 Comunicación con el equipo: El dialogo constante entre el entrenador y


sus jugadores aportan confianza y también información muy útil para
superar los momentos de dificultad.
En momentos de exceso de tensión competitiva es mejor no hacer
correcciones personales, y dejarlas para otro momento más relajado.

 Recurso para la evaluación: La competición es una herramienta ideal


para evaluar el nivel alcanzado por los jugadores y su progreso real.
También permite apreciar en un entorno de juego real como se han
asimilado los aprendizajes.

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