(Diapositiva 1) Sobre Filippo Brunelleschi (1377-15 de abril de 1446) se

ha dicho que fue el que inició el ataque contra la arquitectura gótica, con su

célebre cúpula de la Cattedrale di Santa Maria del Fiore al apartarse

conscientemente de los principios constructivos góticos. (transición 1) A partir

de Brunelleschi, en el campo de la plástica arquitectónica, los nuevos construc-

tores se separaron de los conjuntos complejos y de los planos enrevesados del

gótico para volver a las composiciones simples, a los volúmenes categóricos y a

las superficies netas, tomando como ejemplo el arte romano de la Antigüedad.

En una palabra: se pasa de la verticalidad del gótico a la búsqueda de un

equilibrio apacible y simétrico de formas horizontales.

Tal y como lo narra Vasari en sus Vidas…Brunelleschi se formó como

escultor y orfebre e inició su carrera en el ámbito de la escultura lo cual lo lleva

a participar en el concurso para la realización de las puertas del baptisterio de

Florencia en 1401, certamen que ganaría Lorenzo Ghiberti.

Si bien Brunelleschi realizó varios descubrimientos importantes para su

época su vida y su obra es recordada sobre todo a partir de la construcción de

la famosa cúpula de La iglesia Santa María de las flores, con la que muchos

historiadores afirman se inicia la arquitectura renacentista.

Similar a como lo relata Vasari, Brunelleschi presenta una audaz maqueta

al gobierno de la ciudad en donde mostraba la difícil técnica que conllevaba su

obra. Después de arduas discusiones sobre su proyecto, este es aceptado. La

cúpula fue comenzada en 1420, y terminada por Michelozzo a partir del modelo

dejado por Brunelleschi. (Diapositiva 2) Terminada la cúpula se convirtió en el

asombro de toda la Toscana y de toda Italia. Los procedimientos empleados por

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el arquitecto eran novedosos y la realización de la misma de una gran audacia

técnica. Durante mucho tiempo fue la cúpula más grande de la cristiandad.

(Diapositiva 3) Fue construida sin cimbras, valiéndose tan solo de un ligero

andamio instalado en planos paralelos para facilitar el movimiento de los

operarios. Con el propósito de disminuir el empuje de la enorme bóveda,

Brunelleschi, realizó dos cúpulas, es decir, una interior, algo baja, y otra exterior,

más peraltada. Esta solución, permitió, fundamentalmente, aligerar el peso de

la cubierta y suprimir en su realización todo el inmenso volumen de andamiajes.

(Diapositiva 4) El hospital de los inocentes (1419-1444), Florencia

El Hospital de los inocentes es otra de las obras intereantes de

Brunelleschi- Es considerado uno de los primeros edificios del Renacimiento

florentino. Fue comenzado por Brunelleschi en 1419 y terminado en 1424,

mientras trabajaba en la Cúpula de la Catedral. Fue construido por encargo de

un comerciante rico y desde su creación estuvo destinado al cuidado de los

niños huérfanos. Resulta un ejemplo singular porque estamos ahora ante un

ejemplo muy temprano de arquitectura civil.

En esta obra Brunelleschi le confiere la mayor importancia al pórtico. En el

hospital de los inocentes, la loggia –como también se le conoce- o portal consiste

en anchos arcos de medio punto que sostienen una columnata rematada por

delicados capiteles corintios. En la planta superior aparecen de forma espaciada

ventanas rectangulares de mediano tamaño, adornadas por frontones

triangulares situados justo en el centro de los arcos del pórtico.

Desde el exterior, la línea de los arquitrabes y los capiteles que reciben el

peso de las arcadas que ritman la fachada del pórtico, nos da la sensación,2 de

una perspectiva, es decir, de una línea en fuga hacia el horizonte.

 (Diapositiva 5) La capilla Pazzi (1429-1451), Florencia

Una de las obras más significativas del constructor de la cúpula de Santa

María de las flores, es La Capilla Pazzi, realizada a partir de 1429 y terminada

en 1451, después de su muerte. Esta capilla fue encargada a Brunelleschi por

el rico comerciante Andrea de Pazzi, en homenaje a su familia.

La capilla Pazzi fue erigida en el claustro gótico de La iglesia franciscana

de Santra Cruz, en Florencia. La capilla es de pequeñas dimensiones en la que

la geometría reposa armónicamente sobre la superficie. Brunelleschi acentuó

fuertemente la fachada apoyándose en los motivos de los antiguos arcos de

triunfo romanos. Aquí ensaya y realiza felizmente la yuxtaposición del arco y el

entablamento sobre columnas que fueron muy utilizadas durante todo el

Renacimiento.

El arco encuadra el portal planimétrico, y la ventana redonda sobre la

puerta de ingreso aparece en el mismo centro. De este modo se acentúa la

regularidad de la fachada. En esta fachada existe una frescura que se desprende

de su armonía y delicada limpieza. A grandes rasgos la preocupación del

arquitecto era mantener el principio de la claridad perceptiva de ambos ele-

mentos centrales, a saber, el frente planimétrico y la cúpula.

(Diapositiva 6) El Palacio Pitti, 1458, Florencia

El Palacio Pitti, terminado en 1458 en Florencia, es obra también de Filippo

Brunelleschi. Se dice que fue un encargo de Luca Pitti, un rico mercader que le

pidió al arquitecto que le construyera un palacio mayor que todos los otros
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existentes en la ciudad pensando, sobre todo, en sus rivalidades con los

banqueros Médicis. El edificio es una gran masa rectangular de una desnudez

decorativa absoluta, sin frisos ni adornos en la fachada. Su indudable belleza se

basa en las justas proporciones.

La fachada del Palacio Pitti es, en verdad, un gran bloque cúbico de piedra

rústica, simétrica, que da la impresión de una casa-fortaleza, austera. Dividido

en tres pisos, posee grandes y rústicas ventanas coronadas por arcos que

acentúan la ilusión de profundidad. Tanto los vanos como las formas de las

ventanas tienen un tratamiento uniforme. Los arcos que conforman su estructura

recuerdan los arcos de los acueductos romanos. En ellos debió inspirarse

Brunelleschi.

Conclusiones

Para concluir quisiera dejar sentadas algunas características inmanentes

de la arquitectura renacentista desarrollada por Fillipo Brunelleschi. En primer

lugar, dos fueron las fuentes culturales de la nueva estética arquitectónica: las

ruinas de la arquitectura romana y los textos teóricos sobre el arte de construir

descubiertos en el Renacimiento. Pero si bien las bases para la creación de un

nuevo lenguaje arquitectónico se fueron a buscar a la Antigüedad clásica el arte

renacentista no fue copia servil, sino un punto de apoyo de donde surgió una

arquitectura nueva en correspondencia con el espíritu emanado del nuevo nivel

de desarrollo histórico y social. Fue así como los arquitectos del siglo xv italiano

resucitaron el culto a los órdenes antiguos, pero no como una simple imitación,

sino interpretados libre e individualmente. Y de este modo fue como empezaron

a utilizar en sus obras la columna, que reemplaza al pilar gótico, la pilastra, la

comisa y el capitel de los órdenes clásicos, de los cuales el corintio es el

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preferido.
 El Renacimiento también retoma de la Antigüedad la cúpula, y la convierte

en uno de los elementos distintivos de la arquitectura eclesiástica de la época.

Las ciudades italianas vieron elevarse numerosas cúpulas que se irguieron,

sobre el crucero de las iglesias. De hecho, de la arquitectura renacentista se

dice que inicia y acaba con dos cúpulas: la de Santa Maria del fiore por

Brunelleschi y la del Palacio de San Pedro, en Roma, que diseñó y en parte

construyó Miguel Ángel, respectivamente1.

(Diapositiva 7) Bibliografía

Flamand, Elie-Charles. 1969. El Renacimiento I. Madrid: Aguilar, S.A Ediciones.

Hay, Denys. 1972. La época del Renacimiento. Barcelona: Ed. Labor.

Palenque, Amado. 1989. Las artes plásticas en el Renacimiento. La Habana:

Arte y Literatura.

Vasari, Giorgio. 1996. La vida de los más excelentes pintores, escultores y

arquitectos. Escrito por Giorgio Vasari, pintor aretino. México: UNAM.

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Amado Palenque.