TEMA 5.

La evaluación

El tema elegido ha sido “La evaluación de los procesos de aprendizaje del

alumnado de Educación Primaria. Características, estrategias, técnicas e
instrumentos de evaluación. Promoción y planes específicos de refuerzo” ya que tal
como establece Bermejo y Ballesteros (2017), tradicionalmente la evaluación se ha
encaminado a valorar el grado de aprendizaje al final de un proceso educativo, sin
embargo, actualmente, la evaluación es continua y formativa y se dirige a valorar de
forma continua cómo se está produciendo el proceso de enseñanza-aprendizaje, con el
propósito de su mejora constante.
Esta perspectiva de evaluación se puede ver en la Orden Foral 72/2014, de 22 de
agosto, del consejero de educación, por la que se regula la evaluación y promoción del
alumnado que cursa la educación primaria en los centros públicos, privados y privados
concertados de la Comunidad Foral de Navarra; ya que, en el artículo 2 se establece que
Esta evaluación será global en cuanto que se referirá a las competencias y los objetivos
de la etapa y tendrá en cuenta su progreso, tanto en cada una de las áreas como en el
conjunto de ellas. Será continua en cuanto que estará inmersa en el proceso de
enseñanza y aprendizaje del alumnado e integrada en el quehacer diario del aula.

Lo regulado a nivel autonómico se basa en lo marcado en el Real Decreto

126/2014, de 28 de febrero, por el que se establece el currículo básico de la Educación
Primaria que a su vez está sustentado en las actuales leyes educativas: la Ley Orgánica
2/2003, de 3 de mayo, de Educación (LOE) y la Ley Orgánica 3/2020, de 29 de
diciembre, por la que se modifica la Ley Orgánica 2/2006, de 3 de mayo, de Educación
(LOMLOE).

Por todo lo mencionado, durante este tema se va a tratar la evaluación de los

procesos de aprendizaje del alumnado delimitando el concepto y respondiendo a las
preguntas qué, cómo y cuándo evaluar. Continuará con las estrategias, técnicas e
instrumentos de evaluación y finalizará con la promoción y los planes específicos de
refuerzo que se aplican, así como con una aplicación didáctica, las conclusiones y
bibliografía empleada.

Tras esta breve introducción, comenzamos con la evaluación de los procesos de

aprendizaje del alumnado de Educación Primaria, delimitando el concepto de
evaluación. Según Sanmartí (2021), evaluar es un proceso que conlleva:

1. Recoger datos a partir de diversidad de trabajos, observaciones, preguntas…

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2. Analizarlos, utilizando tablas de criterios, rúbricas… que permitan reconocer

las causas de los obstáculos que deben superar los discentes.
3. Tomar decisiones:
a. Para regular el proceso de enseñanza y aprendizaje. Si es el docente
quien hace las propuestas al alumnado sobre qué debe hacer para mejorar,
hablamos de evaluación formativa. Si las decisiones las toma el discente,
hablamos de una evaluación formadora y permite que sea consciente de sus
propias capacidades y limitaciones.
b. Para valorar el nivel de los aprendizajes alcanzados por cada
estudiante al final del proceso. Esta es la evaluación calificadora o
acreditativa.

En cualquier caso, toda evaluación implica tomar decisiones sobre el qué, cómo
y cuándo evaluar el proceso de enseñanza-aprendizaje.

Respecto al qué evaluar el Real Decreto 984/2021, de 16 de noviembre, por el

que se regulan la evaluación y la promoción en la Educación Primaria; establece en el
artículo 3 que los referentes de la evaluación serán los diferentes elementos del
currículo, teniendo en cuenta que los estándares de aprendizaje evaluables tienen
carácter meramente orientativo.

Por su parte, la Orden Foral 72/2014, en el artículo 2, sobre las características

generales de la evaluación, establece que, en la valoración de los aprendizajes logrados,
se tendrán en cuenta las competencias que establece el Decreto Foral 60/2014 y los
objetivos de esta etapa como referentes más generales, así como el trabajo y el esfuerzo
realizado por el alumnado.

Finalmente, el profesorado evaluará también los procesos de enseñanza y su

propia práctica docente, para lo que establecerá indicadores de logro en las
programaciones docentes, como, por ejemplo: resultados obtenidos por el alumnado, la
adecuación de la metodología, las medidas aplicadas al alumnado con dificultades de
aprendizaje y el resultado obtenido, el clima de convivencia, la coordinación entre el
profesorado y la relación con las familias.

Atendiendo al cómo evaluar, la evaluación se apoya en la recogida de

información, y para ello, el docente empleará técnicas e instrumentos de evaluación que
veremos más adelante.
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Para desarrollar cuándo evaluar seguiremos lo establecido en la Orden Foral

72/2014, en sus artículos 4 y 5 relativos a la evaluación inicial, continua y final.

- La evaluación inicial: es la evaluación del punto de partida de cada escolar. El

objetivo es obtener datos acerca de las capacidades básicas y la competencia curricular
con que el alumnado inicia los nuevos aprendizajes. Debe realizarse durante el primer
mes de curso para conocer las características del alumnado y planificar la intervención.

- La evaluación continua: es el seguimiento de cómo cada discente se sitúa en la

actividad escolar en cuanto al ritmo de aprendizaje, grado de interacción, las
dificultades y avances… por lo que es el momento de establecer las medidas
adaptativas, curriculares y/u organizativas necesarias.

En esta evaluación se distinguen tres sesiones de evaluación de carácter

trimestral y en ellas se valora el proceso de aprendizaje, se analizan los resultados
académicos y el grupo en general, y se toman las correspondientes decisiones.

- La evaluación final. Se trata de la sesión de evaluación final y sirve para

valorar y calificar al alumnado y decidir sobre la promoción al curso o etapa siguiente.
Todo esto queda registrado en el Acta de evaluación final y por lo tanto en el expediente
académico.

Por otro lado, también se deben atender otros tipos de evaluación como:

 Según su extensión: puede ser global si abarca distintas dimensiones del

desarrollo personal del alumnado o parcial si pretende solo el estudio de determinados
componentes.
 Según el criterio de comparación: encontramos la criterial, cuando el criterio
de comparación es el propio sujeto u objetivos previamente fijados o normativa si el
referente de comparación es el nivel general de un grupo.
 Según el agente evaluador: distinguimos interna si está llevada a cabo por los
integrantes del grupo o centro; o externa llevada a cabo por personas no integrantes del
centro, como, por ejemplo, la evaluación diagnóstica al término de cuarto curso. En este
tipo de evaluación, según se establece en el artículo 144. Evaluaciones de diagnóstico
de la LOMLOE, en cuarto curso todos los centros docentes deben realizar una
evaluación para comprobar al menos el grado de dominio de la competencia en
comunicación lingüística y de la competencia matemática.
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Además, según la resolución 250/2021, de 15 de junio, del Director General de

Educación, por la que se aprueban las instrucciones que van a regular durante el curso
2021-2022, la organización y el funcionamiento de los centros públicos de Educación
Infantil, E. Primaria, ESO y Bachillerato en Navarra, en su artículo 4. Evaluaciones
diagnósticas, la evaluación en cuarto curso tiene carácter formativo y orientador para los
centros, por ello, todos los ciclos deben realizar un análisis de los resultados y recoger
las propuestas de mejora que se incluirán tanto en el Plan Bienal de Mejora del Centro
como en los Planes de trabajo anuales de los ciclos.

Tras este primer epígrafe, pasamos ahora a ver las características, estrategias,
técnicas e instrumentos de evaluación

Comenzando con las características, según establece en su artículo 2 la Orden

Foral 72/2014, la evaluación debe ser GLOBAL en cuanto a que se refiere a
competencias y objetivos de etapa, CONTINUA ya que se encuentra inmersa en el
proceso de enseñanza aprendizaje del alumnado e integrada en el quehacer diario del
aula y FORMATIVA debido a que debe posibilitar medidas de apoyo y refuerzo, de
recuperación, así como de adaptación y enriquecimiento curriculares para todo el
alumnado que lo necesite.

Además de las expuestas anteriormente, la evaluación también es:

- Contextual, ya que tiene en cuenta las particularidades del contexto.

- Participativa y democrática, por integrar a los distintos agentes en el proceso.
- Técnica, objetiva e imparcial para lo que emplea diversos métodos e
instrumentos objetivos.
- Clara y precisa, dejando claros los aprendizajes básicos y la forma de
constatarlos.
- Compartida, ya que la valoración se lleva a cabo en equipo, de forma
coordinada.

Por otro lado, las estrategias son el conjunto de técnicas e instrumentos que el
docente emplea para valorar el proceso de aprendizaje del alumnado. Distinguimos:

En primer lugar, y según el anexo I, de la Orden Foral 72/2014 se encuentran los

instrumentos que tienen el carácter de documentos oficiales, nos referimos al
expediente académico, al acta de evaluación de final de curso, al informe de
evaluación para remitir a las familias, al historial académico y al informe personal por
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traslado. De todos ellos, el expediente académico engloba la información de

identificación, de escolarización, la académica, de Necesidades Específicas de Apoyo
Educativo (NEAE) y otros datos necesarios que permiten el desarrollo del proceso de
aprendizaje y garantizan la administración y movilidad del alumnado. A partir de él se
pueden extraer los datos necesarios para el resto de documentos.

En segundo lugar, en el aula se aplican:

- La observación. Es una técnica que permite evaluar los procesos de

aprendizaje en el momento que se producen. Para ello se emplean el registro anecdótico
informe que describe hechos, sucesos o situaciones concretas espontáneas del aula; las
listas de control en las que se anota si una conducta, aparece o no en el alumno; las
escalas de observación que engloba un listado de rasgos en los que se gradúa el nivel de
consecución y los diarios de clase registros individuales donde cada discente plasma su
experiencia personal en las diferentes actividades que ha realizado.
- Las técnicas de desempeño. Requieren que el discente realice una tarea
que demuestre su aprendizaje, como, por ejemplo; el cuaderno de los estudiantes, que
permiten hacer un seguimiento del desempeño del alumnado, los organizadores
gráficos que son representaciones visuales que permiten representar los conocimientos
sobre los conceptos y las relaciones existentes y la exposición, presentación de
información ante un grupo.
- Las técnicas de análisis de desempeño. En ellas se recoge información
para examinar los aciertos y desaciertos y así mejorar el aprendizaje y la intervención.
Emplean instrumentos como el portafolio colección organizada de trabajos y
documentos seleccionados por el alumno que muestran el logro de los aprendizajes y de
sus avances; la rúbrica, que permite ubicar el grado de desarrollo de conocimientos,
habilidades y actitudes en una escala determinada; y la lista de cotejo, lista de palabras,
frases u oraciones que señalan con precisión las tareas, acciones, procesos y actitudes
que se desean evaluar.
- Las técnicas de interrogatorio. En ellas se solicita información al
estudiante para poder valorar el nivel de logro del aprendizaje. Emplean instrumentos
como.
o El debate que es una discusión estructurada sobre un tema con el
propósito de presentar posturas a favor y en contra y llegar a conclusiones.
 TEMA 5. La evaluación

o El ensayo o producción escrita cuyo propósito es exponer las ideas del

discente en torno a un tema.
o Las pruebas escritas que se construyen a partir de un conjunto de
preguntas que constituyen una muestra representativa de los contenidos a
evaluar.
o El cuestionario, instrumento que integra preguntas abiertas o cerradas
previamente estructuradas sobre una temática específica.
o La autoevaluación y la coevaluación que permiten conocer las
valoraciones que tienen los discentes sobre el proceso de aprendizaje.

Para finalizar el tema, pasamos a la promoción y los planes específicos de

refuerzo.

Según el artículo 9, relativo a la promoción, del Real Decreto 984/2021, El

equipo docente adoptará las decisiones sobre la promoción del alumnado de manera
colegiada, tomando en referencia el criterio del tutor o la tutora.

En cualquier caso, las decisiones sobre la promoción se adoptarán al finalizar

segundo, cuarto y sexto, siendo ésta automática en el resto de cursos de la etapa. Así, los
tutores/as de segundo y cuarto emitirán, al finalizar el curso, un informe sobre el grado
de adquisición de las competencias de cada discente, indicando en su caso las medidas
de refuerzo que se deben contemplar en el ciclo siguiente.

Si tras haber aplicado medidas ordinarias para atender a los discentes, el equipo
docente considera que la permanencia un año más en el mismo curso es la medida más
adecuada para favorecer su desarrollo, ésta se puede aplicar de manera excepcional y
solo por una vez en toda la etapa y supone la organización de un plan específico de
refuerzo para alcanzar las competencias correspondientes.

Con el fin de garantizar la continuidad del proceso educativo, cada escolar

dispondrá, al finalizar la etapa, de un informe elaborado por su tutor/a sobre su
evolución y el grado de adquisición de las competencias desarrolladas. En el caso de
alumnado con necesidades educativas especiales (NEE), el informe deberá reflejar las
adaptaciones y medidas adoptadas.

Para abordar ahora los planes específicos de refuerzo, vamos a acudir a la

Orden Foral 72/2014, al artículo 11. Atención a la diversidad. En él se distinguen las
siguientes medidas:
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Para el alumnado que está en condiciones de cursar el currículo ordinario

pero que, por diferentes circunstancias, necesita una atención educativa diferente a la
ordinaria para continuar su proceso de aprendizaje se aplicará El apoyo o refuerzo
educativo en un área. Los referentes de su evaluación y promoción serán los criterios
de evaluación y estándares de aprendizaje evaluables establecidos para el curso en el
que está escolarizado y la calificación irá acompañada de las siglas RE (Refuerzo
educativo).

Con carácter general, el alumnado que se incorpore tarde al sistema

educativo debe estar escolarizado en el curso que le corresponde por edad, sin embargo,
si presentan un desfase de dos años o más, se tienen que escolarizar en un curso
inferior y recibir refuerzo o un plan de recuperación. También, se podrán desarrollar los
programas del Plan PROA (Programas de Refuerzo, Orientación y Apoyo) para
establecer mecanismos de compensación y contar con más recursos en el proceso
educativo. Están destinados a alumnos de 5º y 6º de primaria que presentan dificultades
relacionadas con el retraso en maduración personal, una pobre integración, ausencia de
hábitos de trabajo y retraso en el proceso de aprendizaje de las áreas instrumentales
básicas.

Para el alumnado que presenta dificultades en su expresión oral, se

establecerán medidas de flexibilización y alternativas metodológicas en la enseñanza
y evaluación de la lengua extranjera.

Finalmente, la escolarización del alumnado con NEE en la etapa de

Educación Primaria, en centros ordinarios, podrá prolongarse un año más, siempre que
ello favorezca su integración socioeducativa.

Además, según establece la Resolución 250/2021, en el artículo 16. Evaluación

de primaria, para el alumnado con NEE se podrán establecer las adaptaciones
curriculares significativas, buscando el máximo desarrollo de los objetivos y
competencias. Los referentes de su evaluación y promoción serán los criterios de
evaluación y estándares de aprendizaje evaluables establecidos en dicha adaptación
curricular y las calificaciones irán acompañadas de las siglas ACS (Adaptación
curricular significativa).

Además, para atender al alumnado de altas capacidades, se realizarán los

programas de enriquecimiento curricular que incluirán objetivos y competencias de
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cursos superiores y la ampliación de contenidos entre otros aspectos y las calificaciones

irán acompañadas de las siglas RE-EC.

Asimismo, en el caso de las adaptaciones curriculares de acceso del

alumnado con NEAE por necesitar recu rsos materiales diferentes a los comunes,
las calificaciones irán acompañadas de las siglas RE-ACA.

En cuanto a la aplicación didáctica, en 5º de primaria, en ciencias sociales han

inventado, en grupos, una ruta por el mundo y deben hallar las coordenadas geográficas
de los sitios, los kilómetros usando las escalas y los diferentes usos horarios. Para
valorar todo, en el proceso se ha empleado la escala de observación, y al final una
rúbrica. Antes de empezar el trabajo, se les ha entregado esa rúbrica con todos los
aspectos a valorar, para que trabajen sabiendo qué tienen que tener en cuenta y para que
al final valoren el proceso. Además, al acabar, los discentes deben hacer una
autoevaluación sobre unos ítems organizados en diana en función del grado de
consecución.

Finalmente, presentamos unas breves conclusiones finales.

Como se ha podido ver, la evaluación para el aprendizaje no es un camino

fácil. En el trayecto los docentes tienen que resolver numerosas tensiones como “lo que
hay que aprender”, que responde a unos contenidos concretos y un curriculum
establecido, unos procesos que buscan desarrollar competencias como aprender a
aprender o la autonomía del aprendiz o el reto de desarrollar una evaluación encaminada
a mejorar el proceso de aprendizaje. Además, la evaluación formativa implica detectar
las necesidades educativas del alumnado y así reajustar el proceso educativo de acuerdo
a ellas.

Todo lo mencionado supone un esfuerzo tanto por el docente como por el

alumnado, un esfuerzo que conlleva al aprendizaje, porque al final el objetivo de la
evaluación es aprender y, por tanto, evaluar es aprender.

Bibliografía

BERMEJO, B. Y BALLESTEROS, B. (2017). Manual de didáctica general para

maestros de Educación Infantil y de Primaria. Pirámide.
 TEMA 5. La evaluación

SANMARTÍ PUIG, N. (2021). Evaluar y aprender: un único proceso. Octaedro

Editorial.

Legislación nacional

El sistema educativo español está regulado actualmente por la Ley Orgánica, 2/2006, de
3 de mayo, de Educación (LOE), que fue modificada por la Ley Orgánica 8/2013
de 9 de diciembre (LOMCE) y los cambios introducidos por la nueva Ley
Orgánica 3/2020 de 29 de diciembre (LOMLOE).

Real Decreto 984/2021, de 16 de noviembre, por el que se regulan la evaluación y la

promoción en la Educación Primaria, así como la evaluación, la promoción y la
titulación en la Educación Secundaria Obligatoria, el Bachillerato y la Formación
Profesional.

Legislación autonómica

Decreto foral 60/2014 del 16 de julio, por el que se establece el currículo de las
enseñanzas de educación primaria en la comunidad foral de Navarra.

Decreto Foral 72/2014 del 22 de agosto del Consejero de Educación por la que se regula
la evaluación y promoción del alumnado que cursa educación primaria en los
centros públicos, privados y privados concertados en la Comunidad Foral de
Navarra.

Resolución 250/2021, de 15 de junio, del Director General de Educación, por la que se

aprueban las instrucciones que van a regular durante el curso 2021-2022, la
organización y el funcionamiento de los centros públicos de Educación Infantil, E.
Primaria, ESO y Bachillerato en el ámbito territorial de la Comunidad Foral de
Navarra