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UNIVERSIDAD DE EL SALVADOR

FACULTAD DE: Jurisprudencia y Ciencias Sociales.

LICENCIATURA: Ciencias Jurídicas.

MATERIA: Derecho Procesal 2.

DOCTOR: José Antonio Martínez.

ALUMNO: Andrés Alexander Escobar Velásquez.

DUE: EV17007.

TAREA: Finalización anticipada del proceso.

FECHA DE ENTREGA: Miércoles 28 de Abril del 2021.


Finalización anticipada de la prueba:

1- Renuncia: Art.129 CPCM.

Es un acto del demandante o actor (del que hubiera interpuesto inicialmente la


demanda o del demandado que, al interponer reconvención, es actor en cuanto a
ésta); siendo su efecto, si concurren sus requisitos, la inmediata terminación del
proceso y que se dicte sentencia desestimatoria de la demanda.
Dada su naturaleza de declaración de voluntad, parece que no habría de tener
cabida la posibilidad de renuncia tácita o presunta, sino que siempre debería ser
expresa, clara y terminante.
No obstante, la jurisprudencia española, viene admitiendo la posibilidad de
renuncia tácita siempre que sea inequívoca: La renuncia de derechos ha de ser
expresa, terminante y clara y en el supuesto de pretender deducirse de hechos o
actitudes, cabe destacar que unos y otras no son susceptibles de
interpretaciones plurales; y aunque la renuncia puede ser tácita, no es lícito
deducirla de expresiones equívocas o dudosas.
Por su propia naturaleza y por sus efectos, la renuncia no precisa de aceptación
por la parte demandada.

Su objetivo es el derecho subjetivo público a obtener una resolución judicial de


contenido determinado, de carácter favorable para el titular, siempre que
concurran todos los requisitos necesarios para ello.

REFERENCIA: 71-2019

POR TANTO, con base en las razones expuestas y de conformidad con los
artículos 12 y 13 de la Ley de Procedimientos Constitucionales, esta Sala
RESUELVE:

1. Tiénese a la abogada Olga Yaneth Godínez de Perdomo como apoderada de


los señores RASO y AINS, conocida por AINM, en virtud de haber acreditado en
debida forma su personería. 2. Declárase improcedente la demanda de amparo
presentada por la citada profesional en la calidad indicada, en virtud de: i) haber
dirigido su demanda en contra de un acto de carácter no definitivo,
específicamente la resolución proveída por el Juez Cuarto de lo Civil y Mercantil
de San Salvador (uno) mediante la que determinó la liquidación en el proceso de
ejecución respecto de las obligaciones consignadas en un mutuo hipotecario y un
pagaré a la vista sin protesto, contraídas por sus patrocinados; ii) haber
planteado un asunto de mera legalidad y de simple inconformidad con las
actuaciones que atribuye al mencionado juez y a la Cámara Segunda de lo Civil
de la Primera Sección del Centro, puesto que pretende que esta Sala, con base
en la normativa secundaria y en las circunstancias particulares, determine si el
recurso de apelación cumplía los requisitos para ser admitido por la referida
Cámara y, además, que se revise la cantidad correspondiente al cálculo de los
intereses convencionales establecida por el aludido juez; y iii) no haber
interpuesto el recurso de casación, ya que el proceso ejecutivo mercantil tenía
también como documento base de la pretensión un pagaré a la vista sin protesto
firmado por el señor SO, por lo cual la decisión emitida en segunda instancia
admitía tal medio impugnativo en lo concerniente a lo resuelto respecto del citado
título valor. 3. Tome nota la Secretaría de esta Sala del lugar y medio técnico
señalados por la apoderada de la parte actora para recibir los actos procesales
de comunicación.

2- Desistimiento del proceso: Art.130 CPCM.

Es la declaración por la que el actor anuncia su voluntad de abandonar su


pretensión, dicha declaración tiene por objeto la pretensión procesal y no el
derecho alegado como fundamento: el demandante abandona o desiste del
proceso, pero no abandona ni desiste del ejercicio de los derechos que pueden
corresponderle. Esta es la diferencia fundamental entre el desistimiento y
renuncia del derecho del actor y lo que explica el diferente régimen jurídico entre
una y otra. El desistimiento en términos generales consiste en el acto procesal
mediante el cual se manifiesta el propósito de abandonar la instancia, el derecho
u otro trámite del procedimiento.

El desistimiento no se refiere a los derechos que constituyen el fundamento de la


pretensión; se refiere a la petición de la pretensión. Por lo tanto, el desistimiento
no implica una renuncia al derecho sino un abandono de la posibilidad de que
sea anulado o reformulado un acto procesal.

Es un acto jurídico: Es decir declaraciones de voluntad que producen


determinados efectos jurídicos. Por consiguiente, en principio, deberán reunir los
requisitos establecidos por el derecho para que un acto sea válido.

REFERENCIA: 197-2018

En el caso en estudio el propio demandante ha manifestado su decisión de retirar


su solicitud de tutela constitucional, desistiendo en un estadio inicial del presente
proceso. Si bien la Ley de Procedimientos Constitucionales no regula la figura de
desistimiento en la etapa inicial del proceso, sí lo hace el Código Procesal Civil y
Mercantil, aplicable supletoriamente al amparo en atención al artículo 20 de ese
mismo cuerpo legal siempre y cuando se ajuste a la naturaleza del precepto o
instituto jurídico. La figura del desistimiento se encuentra regulada en el artículo
130 de ese cuerpo normativo, determinándose de dicha norma que un
planteamiento de esa naturaleza debe ser personal, claro, expreso y sin
condiciones. En ese sentido, al haber manifestado el actor con claridad la
decisión de retirar su solicitud de promover, a su favor, este proceso
constitucional es procedente aceptar su desistimiento.

POR TANTO, con base en las razones expuestas y de conformidad con los
artículos 12 de la Ley de Procedimientos Constitucionales y 130 del Código
Procesal Civil y Mercantil, esta Sala RESUELVE:

1. Tiéntese por desistido el proceso de amparo promovido por el abogado José


Gilberto Salgado Arana contra el Juez Primero de lo Civil de San Miguel, hoy
Juez Tercero de Familia de San Miguel. 2. Tome nota la Secretaría de esta Sala
del lugar y medio técnico señalados por el actor para recibir los actos procesales
de comunicación, así como de la persona comisionada para tales efectos.

3- Allanamiento: Art.131CPCM.

El allanamiento es una de las actitudes posibles que el demandado puede asumir


frente a la demanda y consiste en la declaración de someterse a la pretensión de
sentencia solicitada por el actor, es decir, que reconoce que es fundada la
pretensión en su contra. También se entiende que el allanamiento viene a ser un
acto jurídico procesal que importa la sumisión expresa a las pretensiones
formuladas por la parte contraria en la demanda.

Allanarse, significa someterse a lo pedido por la parte actora dando satisfacción


a lo requerido en la demanda, abdicando así de toda oposición en la materia
sobre la que versa el proceso; es decir, equivaldría a una suerte de rendición
incondicional en el ámbito procesal.

No debe confundirse el allanamiento con la admisión expresa de los hechos


incoados por el actor como fundamento de su pretensión. La admisión expresa,
en efecto, solo trae aparejada la consecuencia de revelar al actor de la carga
probatoria respecto de los hechos admitidos, pero no hace desaparecer la litis,
pues esta prosigue tramitándose como una cuestión de puro derecho. El
allanamiento, en cambio, comporta un reconocimiento de la razón que asiste al
actor, por lo tanto, una conformidad con sus alegaciones jurídicas.
El objetivo del allanamiento solamente puede tener por objeto relaciones
jurídicas disponibles, es decir, aquellas que sean transigibles o renunciables y en
general, en aquellas en que no estuviere comprometido el orden público o interés
general; en tales casos, el allanamiento carecerá de efectos y continuará el
proceso según su estado. Este objeto se deduce de lo establecido en el Art.131
inc. 1 CPCM.

El principal efecto del allanamiento, es que el Juez debe dictar sentencia


conforme a aquello que el actor pidió en su demanda y a lo que se allana el 65
demandado (salvo en los supuestos en que el allanamiento contraríe el interés o
el orden público o resulte perjudicial para tercero, caso en el que el Juez debe
rechazarlo y continuar el proceso). Esta conformidad con la pretensión del actor
exime de cualquier actividad probatoria a la parte demandante y de acuerdo con
el principio de congruencia, vincula la actividad decisoria del Tribunal en el
sentido de otorgar, ante la falta de resistencia del demandado, todo lo solicitado
por el actor en su demanda.
REFERENCIA: INC-APEL-17-30-01-17
CAMARA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DE OCCIDENTE: S.A., a las once
horas del día veintiocho de febrero de dos mil diecisiete.
Vistos en apelación la sentencia pronunciada a las quince horas con cincuenta y
siete minutos del día doce de enero de dos mil diecisiete, por el señor J.T. de lo Civil y
M. de esta ciudad, en el Proceso Declarativo Común de Terminación de Contrato,
promovido por la Abogado WENDOLLYN M.D.M., en su calidad de representante
procesal del señor MARIO E.C.C., en contra del señor J.D.J.R., representado
procesalmente por los L.J.A.F. HERRERA Y B.R.G.L., a efecto que se dé por terminado
un contrato de promesa de venta celebrado entre ambas partes materiales.
Ha intervenido en primera instancia, tanto la parte actora como la parte
demandada, a través de sus representantes procesales antes indicados; en esta
instancia, intervino únicamente la parte demandante, a través de su representante antes
mencionada.
RESOLUCION APELADA.
Es la sentencia del proceso antes relacionado, pronunciada a las quince horas
con cincuenta y siete minutos del día doce de enero de dos mil diecisiete, por el señor
J.T. de lo Civil y M. de esta ciudad, cuyo fallo en su parte resolutiva dice: “a NOMBRE
DE LA REPUBLICA DE EL SALVADOR, EL SUSCRITO JUEZ
FALLA:
I)DESESTIMASE LA PRETENSION DE DAR POR TERMINADO EL CONTRATO
DE PROMESA DE VENTA DE VEHICULO, celebrado en esta ciudad, a las doce horas
del día catorce de enero de dos mil quince, ante los oficios notariales del Licenciado
P.H. de la O.F., planteada por el señor MARIO E.C.C., por medio de su presentante
procesal Licenciada W.M.D.M.. II) Condenase al señor M.E.C.C., de generales ya
relacionadas, al pago de las costas procesales de esta instancia. III) Transcurrido el
plazo para interponer el recurso de apelación sin que se haya hecho uso del referido
medio impugnativo, se declarará firme la presente sentencia y se ordenará su archivo,
sin necesidad de notificar dicha resolución por constituir una actuación de mero trámite
que no vulnera ningún derecho.”

4- Comparecencia de las partes: Art.291CPCM

La conciliación es la avenencia que, sin necesidad de juicio de clase alguno,


tiene lugar entre las partes que disienten acerca de sus derechos en un caso
concreto y de las cuales una trata de entablar un pleito contra la otra.

La conciliación además de ser por excelencia un acto previo al proceso, también


se perfila como una forma anticipada de finalización del mismo, por cuanto el
acto de la conciliación es una de las primeras finalidades de la audiencia
preparatoria o, mejor dicho, una de las funciones que en esta fase pueden
cumplirse, inclusive hasta antes de la conclusión de la misma, tal como se prevé
en el art. 292 CPCM. y, en la única audiencia del proceso abreviado según lo
regula el art. 426 de dicho cuerpo legal.

La conciliación no solo opera como un acto previo tendente a evitar el litigio, sino
también como parte de una de las etapas del mismo, evitando de esta manera su
continuación en caso de que la avenencia se concretice, es decir, es una forma
de conciliación intra procesal; situación que es similar en el caso del proceso
abreviado. La conciliación entonces, en términos generales debe entenderse
como “ la actividad desplegada ante un tercero por las partes de un conflicto de
intereses, dirigida a lograr una composición justa del mismo”; y, en sentido
estricto, “como la comparecencia necesaria o facultativa de las partes en
conflicto de intereses, ante una autoridad designada por el Estado, para que en
su presencia traten de solucionar el conflicto que las separa, regulada por el
ordenamiento jurídico que atribuye determinados efectos materiales así como
jurídicos, a lo en ella convenido.”
La conciliación como un acto previo está encomendada de acuerdo a la ley a los
Jueces de paz, debiéndose según las modernas exigencias, tomar en cuenta las
respectivas reglas de competencia, es decir no puede ante cualquier Juez de
Paz promoverse la conciliación como en la actualidad acontece; ahora bien,
lógicamente la conciliación incidental o intra procesal que lleva a la finalización
anticipada del proceso, estará a cargo del Juez que este conociendo del mismo.
REFERENCIA: 139-2014
"Art. 580.- Si el ejecutante no comparece a la audiencia, se decidirá sobre los
motivos de oposición sin escucharle. Si no comparece el ejecutado, se entenderá que
ha desistido de la oposición, y el juez adoptará las medidas pertinentes para continuar
con la ejecución, condenándole a las costas procesales causadas y a indemnizar por
daños y perjuicios al demandante, si éste lo solicitara y los acreditará".
I. 1. A. Inicialmente, los actores explicaron que "[e]n la audiencia preparatoria del
proceso común, tanto la persona demandada como el demandante, en base al
principio de igualdad y al derecho de audiencia, deben y tienen que estar
presentes en el proceso judicial...", ya que, a su juicio, habrá una "... mejor
apreciación por parte del Tribunal del caso en concreto planteado".
Y es que, para los peticionarios, la presencia física de las partes materiales ante
el juez, producirá "... mayor eficacia y certeza al margen del principio de equidad...".
Sin embargo, ante la incomparecencia del demandado, cuestionaron "¿cómo
podrá defenderse de cualquier persona que le demanda aún sin pruebas fehacientes?
quién podrá interpone excepciones?"; por lo tanto, para los actores, el objeto de control
"... infringe el mandato constitucional [del art. 11 Cn.], pues [el art. 291 inc. 3° CPrCM]
excluye el precepto imperativo de que toda sentencia interlocutoria o sentencia dictada
[conforme al precepto constitucional citado]", lo cual implica que "... el juez [...] dicte
sentencia sin oír al demandado en un juicio privándole el derecho a la propiedad".

5- Transacción judicial: Art.132CPCM.


La doctrina procesal se refiere a la transacción, como un contrato por el cual las partes
convienen en resolver un litigio de común acuerdo y en forma definitiva, antes o
después de iniciado el proceso civil. La transacción es un contrato en el cual ambas
partes se hacen concesiones, y es vista como una forma de extinción de obligaciones,
pero a su vez crea nuevas obligaciones, y que, al ser presentada en juicio por
cualquiera de los contratantes, daría por terminado dicho proceso en el estado en que
se encuentre, de ahí que él sostiene que la transacción es una forma anticipada de
terminar el proceso.
La naturaleza jurídica de la resolución que tiene terminado el proceso por transacción
se califica como una sentencia interlocutoria con fuerza de definitiva, porque la ley civil
sustantiva le atribuye la cualidad de cosa juzgada. La actividad judicial frente a este
supuesto se reduce al reconocimiento del instrumento que contiene el contrato de
transacción, siendo introducido al proceso civil por la parte interesada, sin importar
quién de los sujetos procesales lo haga, lo normal es que la presentación del
instrumento sea por parte del demandado; en doctrina se le conoce como
“homologación de la transacción”.
Por lo tanto, la transacción es un negocio jurídico destinado a producir efectos jurídicos;
conviene aclarar entonces que no es un acto procesal, aunque las partes traten solo
con ella de poner término a un proceso que ya habían comenzado. En consecuencia,
los requisitos de la transacción están regidos, así como sus efectos, por las normas del
Código Civil, anotando que produce efectos de cosa juzgada, y ahora se encuentra
también incluida en el Código Procesal Civil y Mercantil, con la denominación de
“transacción judicial”.
REFERENCIA:
No encontré

6- Improponibilidad sobrevenida: Art.127CPCM

Es aquella que permite el rechazo de la demanda sin tener el trámite de ley


completo, para otros es rechazar la demanda una vez admitida ya que al
revisarla detenidamente hay vicio o defectos de fondo o de forma que hacen
imposible continuar con la acción, esto independientemente de que ya se
hubiesen dado alguna audiencia o planteado algún incidente.

En los actos de contestación de la demanda y la reconvención donde el


legitimado pasivo o demandado puede plantear otros actos que hagan
improponible el proceso acaecido en su contra, se entiende que la causa que
hace improponible debe haber sucedido o al menos haberse conocido con
posterioridad a dichos actos de contestación y que desde luego no sean actos
que se basen en los hecho que hayan podido fundar una alegación similar a
tales demandados y resuelta de forma negativa por el juez, con valor de cosa
juzgada a partir de ese momento dentro del proceso.

Ante todo, la presentación de esta alegación no suspende el curso de las


actuaciones, sino que estas continuaran normalmente hasta que se resuelva.
Una vez formulada la alegación por escrito o en el turno de una alegación oral en
audiencia, se abre el plazo de tres días hábiles a las demás partes para que se
pronuncien sobre esta. Si apareciera oposición entonces se convocará a
audiencia oral dentro de diez días siguientes, a no ser que esa fecha coincida
con otra audiencia, con lo cual esa fecha se prolongaría un día más y quedaría
como un incidente.

REFERENCIA: 147-COM-2013

La Jueza Primero de lo Civil y Mercantil de San Salvador, declara ha lugar la


improponibilidad sobrevenida de la demanda de conformidad al Art. 127 CPCM, y
como consecuencia la remitió al Juzgado Tercero de Menor Cuantía de San
Salvador a fin de que pronuncie la sentencia de mérito; por su parte, la Jueza
Tercero de Menor Cuantía de San Salvador, argumenta que al tenor de lo
dispuesto en el Art. 45 CPCM, el proceso tendría que haberse dado por
finalizado e indicado a las partes el juez competente para conocer, y de esa
manera el interesado presenta su demanda ante el tribunal competente.

El presente conflicto tiene origen debido a que la Jueza Primero de lo Civil y M.


de esta ciudad estima que no le corresponde pronunciar la sentencia de mérito
en el proceso, en vista que la sociedad demandada contestó la demanda en
sentido negativo y formuló oposición, manifestando en su escrito que ha
realizado abonos a la deuda reclamada y actualmente tiene pendiente de pagar
la cantidad de un mil seiscientos noventa y ocho dólares con setenta centavos de
dólar de los Estados Unidos de América. Como mecanismo de defensa en el
derecho procesal, el deudor tiene la oportunidad de oponer excepciones que
justifiquen que ha efectuado pagos a una deuda mayor; por ello en la audiencia
de oposición argumenta que el tribunal de conocimiento -Juzgado Primero de lo
Civil y Mercantil de San Salvador- es incompetente objetivamente por la cuantía.
De la demanda se advierte que la cantidad reclamada por el actor asciende a
cinco mil novecientos treinta y seis dólares con diecisiete centavos de dólar de
los Estados Unidos de América, es así que de conformidad al examen liminar de
la demanda -Art. 40 CPCM- el Juzgado Primero de lo Civil y M. de esta ciudad
estimó que efectivamente era competente y admitió la demanda.
En tal sentido, es necesario traer a cuento lo dispuesto en el Art. 94 CPCM, en
cuyo texto dice: "El objeto del proceso quedará establecido conforme a las
partes, la petición y la causa de pedir que figuren en la demanda. La
contestación a la demanda servirá para fijar los términos del debate en relación
con el objeto procesal propuesto por el demandante, sin que éste pueda ser
alterado.[...] Fijado el objeto procesal, las partes no podrán alterarlo, cambiarlo ni
modificarlo posteriormente, sin perjuicio de la facultad de formular alegaciones
complementarias, en los términos previstos en el presente código". De dicha
disposición se advierte que el objeto del proceso queda determinado en la
demanda, y una vez contestada la misma no puede ser alterado, de tal suerte
que no puede cambiarse ni modificarse posteriormente; es decir, no significa que
por el hecho que la parte demandada opuso la excepción de pago parcial la
pretensión se habría modificado en cuanto a la cuantía.
Aunado a lo anterior, consta en el acta de la audiencia de oposición que la Jueza
Primero de lo Civil y M. concluye que efectivamente la parte demandada ha
efectuado abonos a la deuda reclamada; para el caso, si estimare parcialmente
la oposición deberá resolver los accesorios que correspondan, verbigracia la
pérdida de las costas, lo que nada más mencionamos a manera de ejemplo en
virtud que la jueza continúa siendo competente para conocer de la demanda.
En consecuencia, podemos verter un enunciado en el siguiente rumbo, todo juez
que tenga competencia para conocer de un juicio ejecutivo por una determinada
cantidad y se le alegare una excepción de pago parcial, si este la estimare de tal
suerte que se disminuye el monto demandado dicho reclamo deberá ser decidido
en la etapa procesal correspondiente, y en tal evento no perderá la competencia
objetiva para pronunciarse sobre el fondo del asunto.
Otro tanto podemos decir, que esta resolución encuentra asidero además en el
Principio de Economía Procesal en el sentido que en el menor tiempo posible se
resuelve la causa evitando la pérdida de tiempo, esfuerzo y gasto innecesario
para accesar a una pronta justicia.
En conclusión, en el caso particular corresponderá ventilar y dilucidar el proceso
de autos a la Jueza Primero de lo Civil y M. de esta ciudad; lo que así se
determinará.
POR TANTO: De acuerdo con las razones expuestas, disposiciones legales
citadas y arts. 182 at. 2 y 5 de la Constitución y 47 inc. 2° CPCM, a nombre de la
República, esta Corte
RESUELVE:
A) Declárase que es competente para sustanciar y decidir el proceso de que se
ha hecho mérito, la Jueza Primero de lo Civil y M. de esta ciudad; B) Remítanse
los autos a dicha funcionaria, con certificación de esta sentencia, a fin de que
disponga el llamamiento a las partes para que comparezcan a hacer uso de sus
derechos en el término legal correspondiente; C) Comuníquese esta resolución a
la Jueza Tercero de Menor Cuantía de esta ciudad, para los efectos de Ley.
HAGASE SABER.
7- Caducidad de instancia: Art.133CPCM
La caducidad de la instancia en su esencia, se perfila en el mismo sentido ya
conocido, por cuanto, supone la terminación anticipada del proceso por inactividad
de las partes durante el lapso de tiempo previsto por la ley; tiempo que no varía
pues se mantienen los seis meses para la primera instancia y tres meses para la
segunda instancia, tal como se prevé en la disposición legal citada.
El fundamento jurídico de la caducidad de la instancia, sigue radicando entonces, en
el hecho de que la litispendencia no puede prolongarse indefinidamente; y se
mantiene como una figura jurídica creada para el Juez para que se deshaga de
todos los procesos que las partes han dejado en estado de abandono, aunque debe
puntualizarse que hoy serían escasos los supuestos de caducidad por la vigencia
del principio de oficiosidad que fundamenta el nuevo proceso civil y mercantil.
Por ser la caducidad de la instancia una figura mediante la cual se extingue una
situación jurídico-procesal determinada, como consecuencia de la inactividad o falta
de impulso procesal o procedimental, el principio dispositivo o de rogación, adquiere
para su procedencia una especial relevancia; de ahí que una errónea interpretación
y consecuente aplicación de dicho principio, conllevaría a una inadecuada extinción
de la relación jurídica por la vía de la caducidad de la instancia.
REFERENCIA:
III. Ahora bien, se advierte que actualmente ya ha transcurrido el plazo conferido al
peticionario para evacuar las prevenciones formuladas, sin que este lo haya hecho
dentro del término que se le otorgó. En virtud de tal circunstancia, deberá declararse
inadmisible la demanda planteada, de conformidad con lo dispuesto en el artículo 18
de la Ley de Procedimientos Constitucionales, el cual ordena que la falta de
aclaración o corrección de la prevención en el plazo establecido produzca tal
declaratoria. No obstante, es preciso aclarar que el contenido de la presente
resolución no impide que la parte actora pueda formular nuevamente su queja ni que
se analice el fondo de la pretensión incoada, siempre que se cumplan los requisitos
legales y jurisprudenciales para tal efecto. POR TANTO, con base en las razones
expuestas y de conformidad con el artículo 18 de la Ley de Procedimientos
Constitucionales, esta Sala RESUELVE:1. Declárase inadmisible la demanda de
amparo firmada por el señor JRHM contra las actuaciones del Juez Cuarto de lo
Civil y Mercantil (juez 3), en virtud de que no evacuó las prevenciones realizadas en
el plazo otorgado para ello. 2. Notifíquese.
Bibliografía

-Oscar Antonio Canales Cisco “Derecho Procesal Civil Salvadoreño”; (2001); San
Salvador; El Salvador; Centro América; 1ª Edición: Pág. 185.
-Álvarez Julia, Luis; (1992); “Manual de Derecho Procesal”; Segunda Edición; Editorial
ASTREA; Buenos Aires, Argentina
-http://www.csj.gob.sv/
-Argueta Menbreño, Caleb José; Reyes Castro, José Hector y Romero Hernández,
Karen Patricia (2010) La caducidad de la instancia en el Código Procesal Civil y
Mercantil. Bachelor thesis, Universidad de El Salvador.

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