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INSTITUTO ESTATAL DE EDUCACIÓN PÚBLICA DE OAXACA.

SUBDIRECCIÓN GENERAL DE SERVICIOS EDUCATIVOS


UNIDAD DE EDUCACIÓN NORMAL Y FORMACIÓN DOCENTE
ESCUELA NORMAL URBANA FEDERAL DEL ISTMO
CLAVE: 20DNL0002Q

LICENCIATURA EN EDUCACIÓN PRIMARIA


CICLO ESCOLAR 2019-2021
SEGUNDO SEMESTRE
GRUPO “A”

TEMA
“REFLEXIÓN ESCRITA SOBRE EL CONCEPTO
DE PRÁCTICA DOCENTE”

PRESENTA
C. JULIO CÉSAR VELÁSQUEZ MARTÍNEZ
CURSO
OBSERVACIÓN Y ANÁLISIS DE LA PRÁCTICA
ESCOLAR
COORDINADOR DEL CURSO
MTRA. GISELA CUETO ZÁRATE

CD. IXTEPEC, OAXACA. 15 DE MAYO, 2020.


Práctica docente

A partir de la puesta en práctica de mi planeación didáctica, la cual me permitió hacer una

introspección acerca de mi intervención realizada con el tema “instructivo” de la materia de

español, obtuve un mayor crecimiento como docente en formación, logrando reorientar mi

práctica docente e identificando implicaciones tanto positivas como negativas. Dicho de otra

manera, se puede concebir a la reflexión de la práctica docente como una herramienta de

cambio en una forma de actuar en nuestras concepciones, en nuestras prácticas rutinarias, en

la forma de desenvolvernos en el aula y el modo de desarrollar los procesos de enseñanza.

La reflexión continua sobre nuestras propias prácticas, y desde una clara toma de posición

crítica, podrá colocarnos en un camino de formación constante, que nos permita realmente

transformarnos en verdaderos maestros, pues de acuerdo con Bazdresh (2000) “la práctica

docente, y la educativa en general, se revela en los hechos como practica intencional y no

solamente técnica: nadie educa a nadie, cada quien se educa a sí mismo, junto con la

comunidad (Freire)”. (p. 13-66)

No obstante, pese a la condición que estamos atravesando actualmente, me fue posible

desarrollar exitosamente mi planeación, gracias a los medios electrónicos y a que logre

contextualizar la clase para darla en un espacio improvisado y utilizando los materiales y

recursos que tenía a la mano. Pero el aplicar la metodología adecuada, me llevo a lo siguiente:

el indagar a través de una investigación minuciosa, como es el contexto en el que se va a

trabajar y que fortalezas y debilidades presenta, es un paso fundamental que se debe de

realizar antes de planear, pues de ello van a depender diversos factores, como las estrategias

y metodologías a utilizar, la forma de tratar los contenidos, el manejo de recursos, entre otros,

ya que todo debe de ir acorde a las necesidades del grupo. En efecto, Bazdresh (2000)
comenta que “ahora se escudriña al maestro, al alumno, al contenido, a la intención, al aula,

al contexto, a las instituciones para encontrar como influyen y constituyen el hecho

educativo” (p. 13-66) y estos son elementos cotidianos de la práctica educativa, por lo tanto

son indispensables para ser tomados siempre en cuenta.

Esta vez, por medio de una entrevista realizada a una docente con más de 5 años de

servicio, me permitió mirar desde otra perspectiva con mayor trayectoria que la mía, el

concepto de práctica docente, dado a que ella considera que la práctica docente no tiene una

única definición ni puede explicarse en pocas palabras, pues trasciende de la concepción

técnica de quien solo se ocupa de aplicar técnicas de enseñanza en el salón de clases, en

donde su función es mediar el encuentro entre el proyecto político educativo, estructurado

como oferta educativa, y sus destinatarios, en una labor que se realiza cara a cara con los

alumnos.

La práctica docente es objetiva e intencional y si quiero mejorar mi práctica docente, debo

de conocer a mis alumnos, actualizarme constantemente para estar a la vanguardia, innovar,

ser creativo, saber que metodología y estrategias aplicar, dominar el programa de estudios

para que no se me complique el diseño de mi planeación didáctica, conocer los momentos e

instrumentos de evaluación y tener siempre en cuenta que la retroalimentación es dar

elementos más sólidos, con la intención de que la información ayude a mejorar el aprendizaje

de los alumnos, que tiene que ver con las orientaciones y recomendaciones que se les puedan

dar a partir de los resultados.

La reflexión de la práctica docente sienta las bases para considerarla como un objeto de

mejora permanente que contribuye a darle sentido y significación a la profesión, pues para

poder efectuar un cambio en las instituciones escolares resulta como menester revisar

constantemente nuestro desempeño en cada clase, por lo tanto es de gran importancia valorar
nuestra practica educativa, para la toma de decisiones y generar espacios para alcanzarla y

tener sobre todo, el compromiso de mejorarla, logrando con ello transformar vidas para una

mejor sociedad.

Referencias

Bibliográficas

Bazdresh, M. (2000). Vivir la educación, transformar la práctica. México: sej, pp. 13-66.

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