Está en la página 1de 8

Estado hiperglucemico hiperosmolar

El síndrome hiperglucémico hiperosmolar es una complicación metabólica de la diabetes


mellitus caracterizada por hiperglucemia grave, deshidratación extrema, hiperosmolaridad del
plasma y alteración del nivel de conciencia. Este cuadro se detecta con mayor frecuencia en
pacientes con DM tipo 2, a menudo en circunstancias de estrés fisiológico.
Factores desencadenantes

Infección (del tracto urinario,


neumonía, absceso, dental, en piel,
Falta de insulina exógena (por mala
sepsis, síndromes virales,
adherencia al tratamiento)
enfermedad pélvica inflamatoria,
otitis externa maligna, entre otras).

Algunos fármacos y sustancias


A condiciones médicas
causantes de descompensaciones
subyacentes tales como apendicitis,
metabólicas tales como: cocaína,
pancreatitis, inflamación
alcohol, fármacos
abdominal, trauma, embarazo,
simpaticomiméticos, antipsicóticos
enfermedad cerebrovascular o
atípicos, corticoesteroides y
infarto al miocardio.
diuréticos tiazídicos, entre otros
Manifestaciones clinicas

Sintomas:alteración del estado de conciencia, que Signos: taquicardia, taquipnea, deshidratación


oscila desde la confusión o desorientación hasta el severa (pérdida del turgor de la piel, mucosas
coma, en general como resultado de la deshidratación secas, hipotonía ocular), enrojecimiento facial,
extrema asociada con o sin azoemia prerrenal, frecuente hipotensión.
hiperglucemia e hiperosmolalidad
Dignostico
Glucemia La deficiencia de líquido puede
superar 10 L y el colapso
Osmolaridad Glucemia circulatorio agudo es una causa
sérica habitual de muerte en estos
pacientes.

Las concentraciones de nitrógeno


ureico en sangre y creatininemia
son muy elevadas. El pH arterial
aún no se obtuvieron mediciones suele ser > 7,3, pero en ocasiones
puede aparecer una acidosis
metabólica leve como resultado
de la acumulación de lactato.

Debe evaluarse la cetonuria. La


concentraciones séricas de
potasemia es normal, pero la
electrolitos, nitrógeno ureico en
natremia puede ser baja o alta en
sangre y creatinina, glucosa,
función de las deficiencias de
cetonas y osmolalidad plasmática
volumen.
Diagnostico
Tratamiento
 Solución fisiológica por vía intravenosa
 Corrección de cualquier hipopotasemia
 Insulina por vía intravenosa (siempre que la potasemia sea ≥
3,3 mEq/L [3,3 mmol/L])

1. Hidratar:
Con solución fisiológica al 0,9% (isotónica) a una velocidad de 15 a 20 mL/kg/h, durante las primeras horas.
Después de eso, se debe calcular el sodio corregido. Si el sodio corregido es < 135 mEq/L (135 mmol/L), la
solución salina isotónica debe continuarse a una velocidad de 250 a 500 mL/h. Si el sodio corregido es normal o
elevado, se debe usar solución salina al 0,45% (50% de la solución fisiológica).

Se debe agregar dextrosa una vez que el nivel de glucosa llegue a 250 a 300 mg/dL (13,9 a 16,7 mmol/L). La
velocidad de infusión intravenosa de los líquidos debe ajustarse en función de la tensión arterial, el estado cardíaco
y el balance entre los ingresos y los egresos de líquido.
2. Reducir la hiperglucemia: iniciar la insulinoterapia intravenosa (usar insulina de acción corta).

1) Inicialmente inyectar bolo iv. 0,1 U/kg pc. (4-8 U).

2) Iniciar inmediatamente la perfusión continua iv. a 2-4 U/h


modificando la dosis si es necesario.

3) Disminuir la velocidad de infusión a 1-2 U/h cuando la


glucemia baje al 11,1 mmol/l (200 mg/dl).

La glucemia objetivo oscila entre 250 y 300 mg/dL (13,9 a 16,7 mmol/L). Cuando el paciente se recupera del episodio
agudo, suele poder cambiar la dosis ajustadas de insulina subcutánea.
La reposición de potasio es similar a la descrita para la cetoacidosis diabética: 40 mEq/h en presencia de una
potasemia < 3,3 mEq/L (3,3 mmol/L); entre 20 y 30 mEq/h en presencia de una potasemia de entre 3,3 y 4,9
mEq/L (3,3 y 4,9 mmol/L); y nada si la potasemia es ≥ 5 mEq/L (5 mmol/L)

También podría gustarte