Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
TALLER GRUPAL EJE2 - Legislacion - PDF
TALLER GRUPAL EJE2 - Legislacion - PDF
Presentado por:
IVON MELISSA BAQUERO OTALORA
KAREN SOFIA BELLO
BLANCA NELLY DIAZ DIAZ
NORIDA XIOMARA CARRILLO AVILA
Presentado a:
ROSA CECILIA ALVARADO ALVAADO
Docente
La corte constitucional ha reconocido el derecho a la salud como un derecho fundamental, que van de la mano
con los derechos a la vida, a la integridad personal y al dignidad humana, es por ello que el derecho a la salud
se forja como algo fundamental, autónomo y su vulnerabilidad puede controvertirse mediante la acción de tutela,
con la finalidad de dar cumplimiento a este, convirtiéndose en una herramienta poderosa como mecanismo
fundamental para la protección de derechos constitucionales.
Si se analiza la jurisprudencia se puede identificar que para que se incurra a la acción de tutela debe existir un
incumplimiento o falla en la atención en salud brindada a los usuarios por parte de las Entidades prestadoras
de Salud la cual impida mejorar su estado físico y/o mental de salud vulnerando así su derecho a la salud.
ANÁLISIS JURISPRUDENCIAL SOBRE EL DERECHO A LA SALUD.
La actividad busca que el equipo de trabajo realice una revisión jurisprudencial frente a los pronunciamientos
que ha tenido la Corte Constitucional en referencia al Derecho a la Salud y responder las siguientes preguntas:
b) Servicio público esencial obligatorio cuya prestación eficiente, universal y solidaria se realiza bajo la
responsabilidad exclusiva del Estado.
En este sentido, se tiene una nueva concepción sobre el acceso a los servicios de salud, pues la inclusión de
las prestaciones es la regla y la exclusión, es la excepción; es así como la ley estatutaria dispone que el Sistema
de Salud debe garantizar el derecho fundamental de la salud mediante la prestación de servicios y tecnologías
estableciendo criterios de exclusión: los servicios que tengan como finalidad un propósito meramente cosmético,
que no exista evidencia científica sobre la seguridad y la efectividad clínica de la prestación, que el uso de la
prestación no esté autorizado por el Ministerio de Salud, que la prestación esté en fase de experimentación o
que deba ser prestado fuera del país.
2. ¿De acuerdo a lo analizado por parte del grupo de trabajo, exponga el concepto actual del derecho a
la salud?
El derecho a la salud se ha establecido en la actualidad como un derecho fundamental, autónomo e
irrenunciable en lo individual y colectivo. Así mismo, es una garantía universal, pues toda persona, sin distinción
tiene el derecho a acceder a este servicio público.
Según la jurisprudencia constitucional, este derecho comprende el disfrute del más alto nivel posible de salud y
a servicios para el tratamiento de las enfermedades y la rehabilitación. Así las cosas, el Estado debe adoptar
políticas públicas que garanticen el acceso y la calidad en la prestación de servicios necesarios para el
desarrollo del servicio a la salud, no sólo como contraposición a la enfermedad, sino también como medio de
prevención.
Así mismo, la Corte Constitucional ha explicado que el derecho a la salud abarca una amplia gama de factores
socioeconómicos que promueven las condiciones por las cuales las personas puedan llevar una vida sana y
hace este derecho extensivo a factores como la alimentación y la nutrición, la vivienda, el acceso a agua limpia
potable y a condiciones sanitarias adecuadas, condiciones de trabajo seguras y sanas y un medio ambiente
sano.
3. ¿Determine en que eventos procede la acción de tutela para la salvaguarda del derecho a la salud?
Los eventos que proceden la acción de tutela para proteger los hechos derivados de la medida de interés para
garantizar el derecho a la salud, si éste es amenazado y violado, o si también amenaza los derechos
fundamentales con los que está directamente relacionado, igualmente para esos hechos donde la salud y la
vida de las personas se encuentren graves y directamente comprometido, la jurisprudencia ha permitido que el
juez de la tutela ampare los mencionados derechos teniendo en cuenta la prevalencia de los de los preceptos
constitucionales.
La acción de tutela procede para garantizar el derecho a la salud cuando:
1. Se encuentre en conexidad con el derecho a la vida o con la integridad física.
2. Cuando se afecte el derecho a la salud a una persona con protección especial: niños, personas de la
tercera edad y personas en estado de discapacidad.
3. El derecho a la salud como derecho constitucional autónomo, se protege por medio de la acción de tutela
por falta de reconocimiento de prestaciones incluidas en los planes obligatorios, siempre que no sea
negada por un criterio estrictamente médico.
4. Por falta de reconocimiento de prestaciones excluidas de los planes obligatorios, en situaciones en que,
pese a la necesidad de garantizarlas de manera urgente, las personas no acceden a ellas a causa de
condiciones económicas.
5. Afectación del derecho a la salud que impida el desarrollo normal de las actividades diarias del individuo,
así como de sus facultades corporales y espirituales.
6. Cuando la falta del medicamento, tratamiento o diagnostico amenace o vulnere los derechos
fundamentales a la vida o la integridad personal del afiliado, no sólo por la existencia inminente de riesgo
de muerte sino también cuando se afecten las condiciones de existencia digna.
5. ¿Qué visión tiene el grupo de trabajo respecto a la interpretación que la Corte Constitucional propone
sobre Consentimiento Informado?
Consideramos que la línea jurisprudencial que trata el tema del consentimiento informado ha realizado una
ponderación de derechos sustentada constitucionalmente y en distintos tratados internacionales. Es así como
la Corte Constitucional ha establecido que el consentimiento informado es un derecho que tiene el paciente
para conocer de manera preferente los procedimientos a los cuales será sometido, así como la medicación a
suministrar para su mejoramiento y los efectos secundarios del tratamiento.
Es así, como este derecho se encuentra ligado directamente con el desarrollo de la autonomía propia y la
titularidad de los derechos a la vida y la integridad personal. Ha entendido la Corte que los individuos al ser
libres y autónomos, les corresponde definir a cerca del cuidado de su salud, y por ende cualquier tratamiento
médico debe contar con su autorización; teniendo como excepción, las emergencias médicas o eventos
similares, en los que debe primar el principio de beneficencia.
Así mismo, ha profundizado la Corte Constitucional en el tema, advirtiendo que el consentimiento además debe
ser informado y cualificado, como deber general de los médicos de permitir que el paciente sea consciente de
los beneficios y riesgos, las alternativas y cualquier implicación correspondiente al procedimiento que se
requiere, que además debe ser cualificado, aprobado y científicamente y no en fase experimental, garantizando
el acceso del paciente a los beneficios de la ciencia de manera igualitaria y equitativa.