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CLÍNICA QUIRÚRGICA

Dr. Marcelo Figueredo

INTEGRANTES:
- Aline Sena.
- Christian Marín.
- Diego Acosta.
- Mónica Martínez.
- Pamela Benítez.
- Victoria Doria.
HERNIA ABDOMINAL:

Se considera hernia a la protrusión total o parcial de


un órgano a través de un defecto en la pared de la
cavidad que lo contiene.
Una hernia abdominal es un defecto o abertura en la
pared de la cavidad del abdomen que en algunas
ocasiones permite la salida (herniación) de alguna
estructura abdominal (epiplón, útero, intestino,
vejiga, etc.)
PARTES QUE COMPONEN UNA HERNIA:

• Anillo herniario o cuello, saco herniario y


contenido. De las características de este último
depende, en muchos casos, el pronóstico de la
hernia. (ejemplo: contenido intestinal, útero
grávido, vejiga).

Las hernias traumáticas pueden no tener los


componentes antes citados, al menos en sus
inicios. Las hernias abdominales se pueden
clasificar en internas o externas.
La necesidad y la urgencia de reparar una hernia mediante cirugía debe ser determinada por
el estado clínico del paciente, el contenido de la hernia, así como la posibilidad de
incarceración o estrangulamiento del contenido herniado.

Una de las clasificaciones más habituales distingue entre hernias verdaderas y hernias
adquiridas o falsas.

• Hernias verdaderas: son congénitas, y consisten en defectos en el cierre de aberturas


naturales, o simplemente debilidad en los tejidos que forman parte de las estructuras
responsables del cierre. Tienen un revestimiento peritoneal (saco herniario) que cubre
completamente el contenido de la hernia. En la mayoría de los casos son reducibles
(procedimiento diagnóstico) y se reconoce un engrosamiento en la salida a través de la
pared abdominal denominado anillo herniario.

• Hernia adquirida o falsa: suelen ser adquiridas (el paciente no nace con la hernia), no
tienen un saco peritoneal (saco herniario) y se asocian en la mayoría de los casos a
traumatismos o dehiscencia de heridas quirúrgicas.
HERNIAS ABDOMINALES, AFECTAN A LOS
TEJIDOS BLANDOS:
Este tipo de hernia en perros son agujeros en la cavidad abdominal por donde sale toda o una parte de
la víscera abdominal.

Es importante resolverlas mediante cirugía veterinaria ya que puede torsionarse el tejido dentro de la


hernia y convertirse en una urgencia.

 Hernia umbilical en perros: notarás que tu perro tiene este tipo de hernias porque le saldrá una
pelotita en la zona umbilical. Normalmente aparecen en animales jóvenes, aunque también se ven
en adultos.

 Hernia inguinal en perros: aparecen en la zona de la ingle por debilidad de la musculatura de la


pared abdominal. Pueden presentarse a cualquier edad.

 Hernias perineales: aparecen junto al culete. Te darás cuenta de su presencia porque le saldrá un


bulto en uno o los dos laterales del culete, que al palparlo no es especialmente duro y se introduce
hacia el interior.
 Hernias en tórax: este tipo de hernias en perros son peligrosas ya que son en las
que se produce la entrada de vísceras de la cavidad abdominal torácica. Pueden ser
congénitas, desde el nacimiento, o adquiridas por un golpe o un traumatismo severo,
como atropellos, caídas o golpes.

 Hernias diafragmáticas peritoneopericárdicas: son en las que se introduce las


vísceras de cavidad abdominal dentro del pericardio que envuelve al corazón
dificultando su movimiento.

 Hernias diafragmáticas pleutoperitoneales: en ellas el material herniado sale al


espacio pleural comprimiendo los pulmones.

Las dos últimas se manifiestan con dificultad para respirar, intolerancia al ejercicio y
shocks. Son urgencias quirúrgicas importantes que deberán de resolverse lo antes posible.
  T RATA MIE NTO DE H E RNIAS E N PE R ROS:

• En el caso de las hernias que afectan a la locomoción su tratamiento


puede ir desde la intervención quirúrgica, tratamiento fisioterapéutico o
tratamiento médico con analgésicos.
• Dependerá de los síntomas que se presente y característicos de la
hernia.
• En cuanto a las hernias abdominales o diafragmáticas, su resolución
siempre es quirúrgica y en una gran parte de los casos deberá de
intervenirse de forma urgente.
HERNIAS INGUINALES:

Una hernia inguinal  es el resultado de un fallo (debilidad o cierre)


en el anillo inguinal, que permite la salida del contenido
abdominal.
CAUSAS DE LA HERNIA INGUINAL EN PERROS:

• La hernia inguinal en perros se produce cuando la pared del anillo inguinal se ve


deteriorada. Las hernias inguinales en los perros pueden aparecer desde el
nacimiento del animal y ser congénitas. Durante la edad adulta son menos
comunes, aunque no imposibles.
• Además, ciertos momentos o acciones como un embarazo, sufrir un trauma o
aumento de peso pueden ocasionar la aparición de esta enfermedad o el aumento
de tamaño de una hernia ya existente. También hay que tener en cuenta que
algunas razas como Cocker Spaniel, Pequinés, Maltés, Pomerania, Pinscher
miniatura, Collie y Bull Terrier son más propensas a desarrollar hernias.
TRATAMIENTO Y OPERACIÓN:

• Realizar en primer lugar un examen general, tras el análisis se investigará el tamaño y la


cantidad de tejido herniado para conocer el riesgo de la enfermedad y posibles
tratamientos.

• Si la lesión en la pared es considerable, se suele llevar a cabo una cirugía que consiste en
una pequeña incisión abdominal por la que se extrae la hernia inguinal. Si en el proceso
se observa que alguna parte del intestino está dañada, se procede a su eliminación y se
vuelve a recolocar mediante puntos de sutura. Además, en algunos casos se complementa
con injertos o técnicas de colágeno.

• Cada operación se realizará de una manera dependiendo del tamaño y tipo de hernia.
Además, hay que tener en cuenta la fortaleza de la musculatura y los órganos que se han
podido ver afectados. Se buscará en todo momento realizar una operación limpia y sin
dañar nervios ni vasos sanguíneos que puedan complicar la intervención.

• La mayoría de los perros se recupera rápidamente de esta intervención y pueden volver a


llevar una vida y actividad normal sin problemas.
Caso clínico: Hernia abdominal.
• Gatito persa de casi 2 años de edad, se presenta por vomito ya casi de 24 hrs. En su revisión
general se detectan algunas anomalías, para descartar alguna obstrucción se piden estudios de
sangre y también de imagen donde se diagnostica una HERNIA DIAFRAGMÁTICA (ruptura
de la pared muscular que divide la cavidad abdominal de la torácica)

• Se realiza estudio de ultrasonido para confirmar que presenta una HERNIA DE ABDOMEN
PARA TÓRAX en la cual el estómago y bazo se ven comprometidos en cavidad torácica

• Tratamiento quirúrgico: se procede con cirugía correctiva de alto riesgo.

• Se realizo la cirugía del cierre de la hernia diafragmática con éxito. Destacar el trabajo del
servicio de anestesia en este tipo de cirugías donde en todo momento tienen que vigilar de
forma intensiva la respiración del paciente.

• En esta cirugía, al estar comunicada la cavidad torácica y abdominal, en el momento en que se


accede al abdomen se pierde la presión negativa del tórax y los pulmones ya no pueden
expandirse por si mismos de modo que necesitan la ayuda de una ventilación mecánica para
no ahogarse Finalmente con un postoperatorio exitoso mejoro notablemente mente la
capacidad respiratoria.
Hernia abdominal:
HERNIA PERINEAL:

Las hernias perineales se producen por un debilitamiento o una falla completa del
diafragma muscular de la pelvis. Normalmente, el diafragma pélvico permite el
soporte rectal e impide que el contenido abdominal invada el recto. Las mascotas con
hernias perineales durarán una hinchazón junto al recto a uno o ambos lados,
asociada con síntomas de estreñimiento, dificultad para defecar, letargo, dificultad
para orinar y postura alterada la cola.
MANIFESTACIONES CLÍNICAS:

 Estreñimiento.
 Esfuerzo al defecar.
 Dificultad para orinar.
 Incapacidad para orinar.
 Incontinencia urinaria.
 Dolores abdominales.
 Letargo.
 Depresión.
 Anorexia.
 Postura alterada de la cola.
  D IA GN Ó ST IC O:

• Para descubrir una hernia perineal se realizará un examen rectal


minucioso. Esto ayudará a determinar la presencia o ausencia de una lesión
similar a un tumor, una enfermedad de la próstata, los contenidos de la hernia
ya determinar si la enfermedad es unilateral o bilateral. 
• Es posible que se recomiende el uso de imágenes diagnósticas avanzadas
(ecografías y radiografías abdominales) para ayudar a determinar el contenido
de la hernia, la posición y el tamaño de la vejiga, la posición y el tamaño del
colon, una enfermedad de la próstata o la presencia de cáncer.
TRATAMIENTO:
• El tratamiento de la hernia perineal que no es de emergencia, puede consistir en un
tratamiento médico o cirugía electivo. El tratamiento médico está indicado para preparar
a un paciente para la cirugía, pero normalmente no tiene éxito como control permanente
del proceso de la enfermedad. El control médico consistirá en una combinación de
enemas, ablandadores de las heces, tratamiento con líquidos, control de la dieta y
analgésicos. La cirugía pretende reparar el diafragma pélvico y posiblemente suturar el
colon y la vejiga a la pared abdominal para ayudar a evitar la reaparición y el
atrapamiento del colon o la vejiga. La cirugía implica habitualmente la colocación de
suturas para restaurar el diafragma pélvico y la incorporación de un colgajo del músculo
obturador interno para fomentar la reparación. Se recomienda castrar a todos los
pacientes durante el procedimiento quirúrgico para ayudar a reducir el riesgo de
reaparición.
Caso clínico:

• Se presenta a nuestra consulta Yacky, macho entero de 13 años de edad, con abultamiento en el
lado izquierdo del ano, de una semana de evolución.

• Su estado general es bueno, pero tiene problemas para defecar y cambio de carácter debido al
dolor y malestar.

• Se realiza tratamiento conservador a base de dieta rica en fibra, laxantes y enemas. Y


finalmente se fija día para realizar la intervención quirúrgica. La hernia de Yacky comprende el
recto desviado lateralmente, el cual siempre tiene contenido fecal compactado.

• Debido a la avanzada edad del paciente y la escasa musculatura que presenta, se prepara malla
de polipropileno por si no se puede realizar una sutura muscular sometida a tensión.

• Finalmente se realiza una herniorrafía simple suturando el músculo elevador del ano, el
esfínter anal externo y el obturador interno. Ya que la musculatura lo permite y aporta solidez
al defecto herniario.
HERNIA PERINEAL:
MEGACOLON:

• Megacolon es un término usado para


describir un colon muy dilatado,
flácido e incompetente. Esto
generalmente ocurre después del
estreñimiento crónico y la retención
de heces, pero puede ser una
disfunción congénita.
SIGNOS Y SÍNTOMAS:

• Los afectados con megacolon idiopático generalmente tienen entre 5 y 9 años.

Pueden mostrarse los siguientes signos:


• Malestar abdominal, disminución del apetito, letargo, tenesmo (esfuerzo para
defecar)
• Las heces presentes en el colon son grandes y firmes, y son fácilmente
palpables.
D IA G N Ó STI C O:

• El diagnóstico de megacolon se
basa en la historia y el examen
físico, y se confirma con
radiografías del abdomen. El
análisis de diagnóstico también
debe incluir análisis de sangre para
descartar cualquier anomalía
metabólica.
TRATAMIENTO MÉDICO:
• Para el megacolon idiopático, el tratamiento inicial es médico. Deben estar apropiadamente
hidratados (líquidos intravenosos si están deshidratados), luego se debe realizar un enema y se
debe realizar un desobstipado (extracción manual de las heces).

• Esto casi siempre requiere anestesia general, ya que es extremadamente doloroso.

• Después de que se ha eliminado la materia fecal, comienza el tratamiento médico.

• El mejor tratamiento médico incluye una dieta baja en residuos y medicamentos recetados
como lactulosa y cisaprida.
• La lactulosa es un catártico leve (ayuda a la defecación) y es un ablandador de las heces.
Cisaprida estimula la motilidad colónica (propulsión). La dieta baja en residuos ayuda a
estimular las células del colon sin aumento de volumen.
• La mayoría responderán inicialmente a esta terapia, pero algunos finalmente se volverán
refractarios al tratamiento. Cuando la terapia médica ya no es efectiva, se recomienda la cirugía
para extirpar el colon agrandado. 
T RATAM IE NTO QUIRÚ RGIC O:

• La cirugía se conoce como «colectomía subtotal»


(extirpación de la mayoría, pero no de la totalidad del colon),
aunque ocasionalmente se requiere una colectomía total
(extirpación del colon completo).

• Antes de la cirugía, administrar antibióticos, ya que el colon,


que contiene heces, es la parte más cargada de bacterias del
tracto intestinal. Los antibióticos ayudan a prevenir la
infección bacteriana en la cirugía.

• En la colectomía subtotal, todo el colon afectado se reseca


(corta) y los dos extremos restantes se suturan nuevamente.
Si no se elimina una parte afectada del intestino, se puede
formar una nueva área dilatada de intestino, lo que provoca la
recurrencia de los signos clínicos de estreñimiento.
Caso clínico:

• Se presenta a la clínica Bart

• Este felino de 9 meses comienza con dificultad para defecar, luego de 48 hs asisten al
consultorio.

• Tras la inspección se decide medicarlo y mandarlo a casa con dieta y laxante.

• A las 48 hs vuelven, pero bart ahora presenta vómitos y no come

• Realizamos ecografía y rx: se observa Colon dilatado con materia fecal

• Diagnóstico: Megacolon idiopático.

• Frente a esta situación se realiza primero enemas y fluidoterapia, pero si no mejora y como
muchos de estos casos terminan en cirugía procedemos a realizar enema de solución salina
bajo sedación con reducción manual de la materia fecal mediante palpación abdominal

• Post quirúrgico: Dieta especial y antibioticoterapia.


Megacolon:
PROLAPSO RECTAL:

El término prolapso hace referencia al desplazamiento de


cualquier órgano, como el útero, los intestinos u otros tejidos
internos. Con estas definiciones es fácil llegar a la
conclusión de que un prolapso rectal es una condición en la
que el recto sobresale hacia abajo y protruye a través
del ano del perro.
EXISTEN 2 TIPOS DE PROLAPSO
R E C TA L S E G Ú N L A G R AV E D A D D E L
CUADRO:

1. I n c o m p l e t o :   s o l o l a c a p a d e t e j i d o
más interna del recto se escapa por
fuera del ano.
2. C o m p l e t o :   e l t e j i d o r e c t a l a l
completo se escapa a través del ano.
se considera un cuadro bastante más
grave que el incompleto.
SÍNTOMAS DEL PROLAPSO RECTAL EN PERROS:

Los síntomas provocados por esta condición son muy simples y extremadamente visuales:

 Presencia de una especie de tubo carnoso y rosa sobresaliente del ano. Aunque suene
desagradable, la lesión se puede comparar con un “calcetín dado la vuelta”.
 Diarrea o estreñimiento.
 Hinchazón en la zona perianal.
 Sangrado en el tejido rectal.
 Secreciones purulentas y necrosis tisular.
 Lamido en la zona anal.
 Cambios posturales para minimizar el dolor.
DIAGNÓSTICO:

• En primer lugar, será necesario realizar una analítica sanguínea del


animal con el fin de detectar cualquier anormalidad sistémica. Lo más
usual es que todo salga en orden, pues los riñones o el hígado no
suelen estar directamente implicados con el prolapso. Por otro lado, es
posible que un análisis de las heces sí evidencie una infestación
parasítica. 
• Las técnicas más avanzadas (colonoscopia, ultrasonido o rayos X) se
reservan para los casos en los que la sintomatología continúe siendo un
misterio. Estas pruebas ayudarán a detectar cánceres, pólipos,
movimientos de órganos o problemas derivados del parto, por ejemplo.
TRATAMIENTO:
El tratamiento del prolapso rectal en perros dependerá del cuadro general del animal y de la condición
subyacente.

1. Antibióticos o antiparasitarios: si se detectan bacterias o parásitos entéricos en el análisis


coprológico, se recetarán antibacterianos o antiparasitarios de amplio espectro.

2. Recolocación manual: bajo anestesia, se debe recolocar manualmente el recto del can en su sitio. Es
necesario aplicar un par de puntos en el ano para que el tejido no se vuelva a salir, pero no se debe
cerrar la abertura anal por completo en ningún caso.

3. Colopexia: es una intervención algo más invasiva, también bajo anestesia. Se realiza una pequeña
apertura en el abdomen y se fija el recto a la pared abdominal que le corresponde.

4. Resección quirúrgica: si parte del recto se ha podrido, se debe extirpar la sección dañada y luego
recolocar el tejido restante. Sin duda, es la operación más demandante de todas.

La recolocación manual es propensa a fallar, así que la colopexia es el camino a seguir en casi todos los
casos que no sean leves. Si hay otra condición subyacente, habrá que tratarla también.
Caso clínico:
• Se presenta en la clínica “Bully” un pitbull de 1 año de edad que desde cachorro a presentado un prolapso de recto recidivante,
tratado en varias ocasiones mediante la reducción manual del recto y sutura del ano en bolsa de tabaco. Su condición corporal es
2/5 y los continuos problemas gastrointestinales en forma de diarrea crónica (7 meses de evolución) están agravando el problema
• Se puede apreciar la extrema delgadez de “Bully” y su evidente prolapso rectal. Es importante diferenciar un prolapso de recto de
una intususcepción prolapsada de intestino, para ello introducimos un termómetro entre la pared anal exterior y la masa prolapsada,
si no pasa es porque choca contra la mucosa del recto prolapsado descartando de ese modo una intususcepción intestinal.
• Para solucionar el problema se puede actuar de diferentes maneras en función de la viabilidad del tejido prolapsado y de la
frecuencia con que se presente el problema en el animal.

• En este caso la mucosa rectal no presenta lesiones importantes, el compromiso vascular no es severo, ni existen áreas de necrosis,
es decir el tejido es viable y por lo tanto susceptible de su recolocación mediante reducción manual.

• Para reducir el edema podemos utilizar frio o soluciones hipertónicas durante 30 minutos. Luego mediante presión manual
recolocamos la masa prolapsada, y finalmente realizamos una sutura en bolsa de tabaco del ano para evitar recidivas, anudando la
sutura sobre un objeto (jeringa) para evitar el cierre completo del ano.

• En casos en que la mucosa rectal este muy dañada y la reducción manual no sea posible debemos plantearnos la resección del recto
prolapsado y anastomosis termino-terminal del mismo.

• En nuestro caso como el problema ya se había presentado en numerosas ocasiones decidimos hacer una colopexia. La colopexia se
realiza con el fin de crear una fijación estable entre el colon y la pared abdominal, para evitar su desplazamiento caudal y su
prolapso.
Prolapso rectal:
HIPERPLASIA PROSTÁTICA:

La hiperplasia prostática benigna (HPB) es una de las


patologías más frecuentes en perros adultos enteros, y se
estima que a los 9 años el 95% lo presentan. Esta patología
solo afecta a perros macho y a seres humanos.
Esta patología se relaciona con un desequilibrio hormonal a
medida que el animal envejece.
SIGNOS CLÍNICOS:
Los signos clínicos son, o bien consecuencia mecánica del incremento en el
tamaño de la próstata sobre el recto y las estructuras circundantes, o secundarios
a los quistes que se crean:

 Dificultad para defecar: Es el trastorno que se presenta con más frecuencia


debido a que una próstata aumentada puede empujar al recto hacia arriba. No
puede defecar bien, la defecación tarda mucho tiempo, o en ocasiones las
heces presentan un aspecto aplanado.
 Dificultad al orinar: Se observa con mayor frecuencia la presencia de goteo
hemorrágico independiente de la micción, o un aumento del flujo prepucial.
 Infertilidad: Debido a una alteración en la bioquímica del líquido prostático,
que no proporciona el medio adecuado para la supervivencia, nutrición y
motilidad de los espermatozoides.
SÍNTOMAS:

Las enfermedades de próstata, de manera independiente de cuál sea su causa, presentan una
serie de síntomas que se pueden dividir en cuatro grupos:

 Signos urinarios: entre los que se encuentran, de manera más frecuente, el sangrado
por el pene, aunque el animal no orine, además de la orina con sangre, la dificultad o el
dolor al orinar y la incontinencia urinaria.
 Síntomas digestivos: debidos a la presión de la próstata sobre el intestino, de manera
que se origina estreñimiento, dolor al defecar u otros cambios como heces de aspecto
aplastado.
 Signos locomotores: que son menos habituales que los mencionados con anterioridad
y se caracterizan por síntomas como cojera, rigidez al andar debido a la presión de la
próstata sobre los nervios posteriores a la zona de la próstata.
 Síntomas generales: que son muy habituales. De hecho, se presentan en más de la
mitad de los casos síntomas como: fiebre, dolor generalizado, depresión, falta de
apetito, pérdida de peso o vómitos.
DIAGNÓSTICO:

• Historia clínica detallada acerca de la micción y defecación de animal; un


examen físico completo y un examen digital rectal; éste último es el mejor
examen físico de la próstata, siendo importante valorar el tamaño, la forma, la
simetría y la ausencia de dolor. 
• Además, en los casos sospechosos de enfermedad de la próstata, se debe incluir
también un hemograma, un perfil bioquímico y un análisis de orina. 
• La ecografía es el método de diagnóstico idóneo en el caso de anomalías
prostáticas, ya que nos permite visualizar y evaluar su estructura interna, los
cambios en su parénquima, simetría, posición y forma.  Además de utilizarse
para el diagnóstico, se recomienda siempre realizar seguimientos ecográficos tras
la resolución de la HPB.
T R ATA M I E N T O :

• Para perros no destinados a la reproducción, la orquidectomia (castración) es el


tratamiento de elección; es un procedimiento simple, definitivo y carente de
efectos secundarios.
• La involución de la próstata comienza a los pocos días de la intervención, es
evidente a las dos semanas y continua durante un periodo de 2 a 3 meses.
• La disminución del tamaño prostático llegará hasta el 70% con la resolución
definitiva del problema; sin embargo, existen casos en donde el paciente no
puede ser sometido al procedimiento debido a riesgo anestésico,
complicaciones postoperatorias (infecciones) o por decisión del dueño, ya que
tal vez el ejemplar sea un semental o por simple idiosincrasia del dueño.
Cuando el tratamiento es
quirúrgico, hay tres
opciones:

 Castración. Es la alternativa
más frecuente.
 Drenaje de los quistes, para
vaciar su contenido y evitar su
reproducción.

 Cirugía de próstata. Es lo
indicado en el caso de
tumores. Es una operación
complicada y conlleva riesgo
de efectos secundarios, como
la incontinencia urinaria.
Caso clínico:
• Tuman es un Husky de 7 años. Hace unas semanas, su familia comenzó a notar que tenía
algunos problemas al hacer sus necesidades.

• En los últimos días, sus heces eran más pequeñas de lo normal. Además, parecía molesto al
orinar e incluso algunas veces sangraba al hacerlo.

• Sumado a los síntomas físicos, Truman también empezó a tener una actitud apática y desganada.

• Los síntomas de Tuman indicaban que algo no funcionaba bien en su vientre y así fue.

• Rápidamente se le diagnosticó un caso de hiperplasia y quistes en la próstata. Esta alteración


consiste en el aumento de tamaño de la próstata del perro.

• Al crecer, obstaculiza la salida de las heces y comprime la uretra, lo cual dificulta la micción y
la defecación. Además, la rotura de los quistes produce sangrado.

• Esta patología de origen reproductivo es propia de perros sin esterilizar.

• La solución adecuada es la cirugía con esterilización resolutiva. Es una pequeña intervención de


riesgo mínimo y rápida recuperación.
Hiperplasia prostática:
MUCHAS GRACIAS!!

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