0 calificaciones0% encontró este documento útil (0 votos)
7 vistas6 páginas
La familia juega un papel fundamental en el desarrollo de la identidad y socialización de sus miembros a través de la interacción y comunicación. La familia influye en la construcción de la subjetividad individual y puede fomentar prejuicios a través de la influencia social. La comunicación no verbal y la percepción social son importantes en las interacciones familiares para comprender los estados emocionales de los demás.
La familia juega un papel fundamental en el desarrollo de la identidad y socialización de sus miembros a través de la interacción y comunicación. La familia influye en la construcción de la subjetividad individual y puede fomentar prejuicios a través de la influencia social. La comunicación no verbal y la percepción social son importantes en las interacciones familiares para comprender los estados emocionales de los demás.
La familia juega un papel fundamental en el desarrollo de la identidad y socialización de sus miembros a través de la interacción y comunicación. La familia influye en la construcción de la subjetividad individual y puede fomentar prejuicios a través de la influencia social. La comunicación no verbal y la percepción social son importantes en las interacciones familiares para comprender los estados emocionales de los demás.
(Contexto; socialización y desarrollo de identidad; influencia social; prejuicio,
estereotipos y discriminación; comunicación y percepción social)
Un aspecto muy importante en la vida de una persona es la familia, ya que esta
es su ambiente primario y fundamental de desarrollo y socialización. Por lo tanto, resulta interesante analizar a la familia desde la perspectiva de la Psicología Social.
Existen múltiples definiciones de “familia”, las cuales tienen diferentes
implicancias. Una de ellas es la propuesta por Minuchin (1974/1997), citado por Wainstein y Wittner (2016), según la cual la familia es un sistema sociocultural abierto en proceso de transformación, que se desarrolla en un proceso constante de adaptación a un contexto cultural cambiante, y que tiene como funciones: apoyar emocionalmente, regular conductas, nutrir y socializar a sus miembros. Además, para dicho autor, la familia es la matriz de la “identidad” organizada y en continuo desarrollo, en la cual el sujeto aprende a diferenciarse. Es decir, las personas desarrollan el sentido de sí mismas y su autoconcepto a partir de la “socialización”, la cual es el proceso de cambio que experimentan como resultado de la interacción social y su influencia; así, los niños participan activamente de la formación de sus identidades a medida que aprenden diversos roles (Wainstein y Wittner, 2016). Entonces, la familia tiene un papel importante en la construcción del “sujeto individual”, ya que un sujeto adquiere individualidad por participar en diversas interacciones familiares, lo que le permite el aprendizaje constante de variados roles que replicará en su vida cotidiana no familiar.
Lo dicho anteriormente se relaciona con la noción de “contexto”, que consiste en
los ambientes ecológicos (sociales, culturales y físicos) en los que las personas están insertas, y que ejercen algún tipo de influencia en su desarrollo (Wainstein y Wittner, 2016). En este sentido, la familia es el ambiente primario y fundamental de desarrollo, ya que las personas no están aisladas de lo que ocurre en sus familias, sino que interactúan con los demás miembros, con sus valores, idiosincrasia, reglas, expectativas, compromisos y obligaciones. Con esto, se relacionaría el proceso de influencia social, ya que la familia la ejerce en sus miembros. Según Hogg y Vaughan (2010), la “influencia social” es el proceso por el que la presencia real o implícita de otra gente influye en las actitudes y la conducta (pensamientos, sentimientos y comportamientos) de un individuo. A su vez, esto se podría relacionar con el prejuicio, ya que la familia puede influir en sus miembros, favoreciendo a que estos desarrollen ciertos prejuicios.
El “prejuicio” consiste en una actitud positiva o negativa hacia un grupo y sus
miembros, que crea o mantiene relaciones jerárquicas y de estatus entre grupos sociales (Dovidio, Hewstone, Glick y Esses, 2010, citados en Etchezahar y Ungaretti, 2019). Según Molero (2007), este constructo está constituido por procesos individuales (procesos cognitivos y afectivos), grupales (carácter compartido; y miembros de otro grupo social como objeto) y societales (leyes y normas de un contexto social). Además, al prejuicio están asociados otros dos fenómenos: estereotipo y discriminación. La discriminación es el comportamiento individual que crea, mantiene y/o refuerza las ventajas de un grupo y sus miembros por sobre otros (Dovidio et al., 2010); es decir, implica negar el tratamiento igualitario hacia una persona o grupo (Allport, 1954, citado por Etchezahar y Ungaretti, 2019). En cuanto al estereotipo, según Dovidio et al. (2010), este es un conjunto de creencias acerca de las características y atributos de un grupo y sus miembros, que influyen en cómo el individuo piensa y actúa frente a un determinado grupo. Además, según el “Modelo del Contenido de los Estereotipos” (Fiske, Cuddy, Glick y Xu, 2002, citados en Etchezahar y Ungaretti, 2019), el contenido de los estereotipos influye de manera directa en las actitudes y comportamientos hacia los grupos sociales. Así, la percepción de dichos grupos se elabora a partir de dos dimensiones: calidez (intenciones de las demás personas hacia uno; comprende rasgos tales como: confianza, sinceridad, amistad, afecto, etc.) y competencia (categorización a partir de la capacidad de los otros para lograr sus intenciones u objetivos; comprende rasgos tales como: eficiencia, seguridad de sí mismo, inteligencia, etc.). A partir del grado de calidez y competencia con que percibimos a un grupo social, surgen cuatro combinaciones, las cuales dan lugar a cuatro respuestas emocionales prototípicas: piedad, envidia, desprecio y admiración (Etchezahar y Ungaretti, 2019). Tales combinaciones son: prejuicio paternalista (competencia baja y calidez alta; se produce a partir de la piedad), prejuicio envidioso (competencia alta y calidez baja; se produce a partir de la envidia), prejuicio despreciativo (competencia baja y calidez baja; se produce a partir del desprecio) y admiración (competencia alta y calidez alta). Por ejemplo, en el video de “SOCIALSAM TV” (2015) se realizó un experimento social para demostrar que la sociedad se guía por prejuicios; para esto, un hombre se caracterizó como un “mendigo”, que pedía un poco de dinero o comida a la gente (0:00 – 2:45). Desafortunadamente, las personas no lo ayudaron, algunas lo ignoraron, e incluso lo trataron de drogadicto, es decir, lo discriminaron; claramente, estas personas tienen un “prejuicio despreciativo” hacia la gente pobre. Se podría pensar que una causa de este prejuicio sería la influencia de la idiosincrasia (negativa hacia dicho grupo) de la familia. Cabe recalcar que una sola persona ayudó al sujeto, dándole unas frutas; en este caso, también se podría pensar en la influencia de los valores y de la idiosincrasia (positiva) de la familia de dicha persona en su actitud.
Por otro lado, Wainstein y Wittner (2016), en el marco de la teoría sistémica,
definen a la familia como un “sistema abierto”, es decir, una estructura con características y funciones emergentes de las “interacciones” de sus miembros entre sí en el seno familiar y con el contexto social en el que están insertos; así, no son importantes los miembros que componen una familia en su individualidad, sino sus interacciones. Esto se podría relacionar con el “primer axioma de la comunicación”, ya que los miembros de una familia, en la medida en que interactúan, siempre se están comunicando.
Watzlawick, Beavin y Jackson (1971), en el marco de la teoría de la
comunicación humana, explican los axiomas metacomunicacionales de la pragmática de la comunicación. Según dichos autores, el primero de estos es “la imposibilidad de no comunicar”, el cual indica que no es posible no comunicarse ya que todo comportamiento o conducta es una forma de comunicación. Es decir, como no existe el “no comportamiento”, tampoco existe la “no comunicación”. Entonces, actividad o inactividad, palabras o silencio, tienen siempre valor de mensaje (unidad comunicacional). Esto quiere decir que no solo existe la comunicación verbal, sino que también las personas interactúan mediante una comunicación no verbal. Según Baron y Byrne (2005), la “comunicación no verbal” es la comunicación entre individuos que no implica el contenido del lenguaje hablado, sino que implica un lenguaje no hablado. Este tipo de comunicación tiene lugar a través de cinco canales básicos: expresiones faciales, contacto visual, contacto físico, movimientos corporales y postura (lenguaje corporal). Además, la comunicación no verbal tiene un papel importante en la “percepción social”, la cual es el proceso a través del cual buscamos conocer y comprender a otras personas (Baron y Byrne, 2005). Es decir, los sujetos nos involucramos en este proceso y dedicamos un gran esfuerzo para intentar descubrir lo que caracteriza a los demás y las razones por las que se comportan (o no) de ciertas maneras. En dicho proceso, la comunicación no verbal es importante ya que si le prestamos una atención cuidadosa, se puede obtener información acerca de las reacciones de los otros. Según DePaulo (1992), citado por Baron y Byrne (2005), las señales no verbales son difíciles de controlar; por esto, cuando las otras personas tratan de ocultar sus estados internos (emociones, sentimientos y estados de ánimo) o de mentir acerca de ellos, a menudo estos se escapan de diversas maneras a través de dichas señales.
Entonces, el proceso de percepción social también se relacionaría con la familia,
ya que sus miembros, a partir de su interacción y comunicación (ya sea verbal o no verbal), buscan conocer y comprender a los demás. Por ejemplo, en el video de “Escenas De Películas!!!!” (2018), donde se muestra una escena de la película “Intensamente”, se puede observar la relación entre la familia, el axioma anteriormente explicado, la comunicación no verbal y el proceso de percepción social (0:30 - 2:37). Riley estaba triste y molesta porque tuvo un pésimo primer día de clases. En la cena, su madre intentó conversar con Riley (familia), pero ella no quería, se mostraba molesta e intentaba simular que no le pasaba nada. Así, su madre intentó comprenderla (percepción social) y se dio cuenta que a Riley le pasaba algo debido a su tono de voz, su sarcasmo y sus pocas palabras, pero también por las señales no verbales que emitió. Riley tenía expresiones faciales y posturas de enfado, desagrado y de miedo, no comía, jugaba sin ganas con los cubiertos y evitaba mirar a sus padres. Es decir, Riley en todo momento está comunicando (primer axioma de la comunicación) ya que, aparte de existir una comunicación verbal, existe una comunicación no verbal, en esta escena donde se observa un proceso de percepción social en una familia. En conclusión, la familia tiene un papel muy importante en la vida de una persona, ya que esta es un contexto que influye en la socialización y el desarrollo de su identidad. Además, la familia ejerce una influencia social en sus miembros favoreciendo, por ejemplo, a que desarrollen ciertos prejuicios, a partir de los estereotipos que forman parte de su idiosincrasia, y a que ejerzan una discriminación hacia ciertos grupos. También, en una familia tiene lugar el proceso de percepción social, a partir de la continua interacción y comunicación (verbal o no verbal) de sus miembros. Estos son solo algunos conceptos y procesos del área de la Psicología Social que tienen lugar en una familia; aún queda mucho por analizar sobre la familia y sus relaciones.
REFERENCIAS:
Allport, G. (1954). The nature of prejudice. Reading, M.A.: Addition-Wesley.
Baron, R. y Byrne, D. (2005). Percepción social: Comprender a los demás. En Psicología Social (pp. 39-80). Madrid: Pearson Educación. Dovidio, J. F., Hewstone, M., Glick, P., & Esses, V. M. (2010). Prejudice, stereotyping, and discrimination: Theoretical and empirical overview. Handbook of prejudice, stereotyping, and discrimination. Thousand Oaks, CA: Sage. Escenas De Peliculas!!!!. (17 de septiembre de 2018). Intensamente Escena De Pelea En La Cena Archivo de Video. Youtube. https://www.youtube.com/watch?v=8lpF9tOHI6s Etchezahar, E. y Ungaretti, J. (2019). Psicología Social del Prejuicio. Ficha de Cátedra. Fiske, S. T., Cuddy, A. J. C., Glick, P., & Xu, J. (2002). A model of (often mixed) stereotype content: Competence and warmth respectively follow from perceived status and competition. Journal of Personality and Social Psychology, 82, 878–902. Hogg, M. y Vaughan, G. (2010). Influencia Social. En Psicología Social (pp. 235-265). Madrid: Panamericana. Minuchin, S. (1974/1997) Familias y Terapia Familiar, Barcelona, Gedisa. Molero Alonso, F. (2007). El estudio del prejuicio en la Psicología social: definición y causas. En F. Morales, M. Moya, E. Gaviria, e I. Cuadrado (Comps.) Psicología Social (pp. 591- 618). Madrid: Mc Graw Hill. SOCIALSAM TV. (22 de agosto de 2015). EXPERIMENTO SOCIAL | MENDIGO VS EJECUTIVO / PREJUICIOS [Video]. Youtube. https://www.youtube.com/watch?v=RQ3YKe7QxuU Wainstein, M. y Wittner, V. (2016). ¿Qué es una familia? En M. Wainstein (Comp.) Escritos de Psicología Social (pp.93- 100). Buenos Aires: JCE Ediciones. Watzlawick, P., Beavin, J. y Jackson, P. (1971). Teoría de la comunicación humana. Buenos Aires: Tiempo Contemporáneo. Cap. 1 y 2.