Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Los juegos cooperativos son actividades lúdicas en los que participan todas las
personas. No se excluye a nadie. Todas ganan, nadie pierde y, por tanto, no se
ponen penas, prendas ni castigos. No jugamos unos contra otros, sino que todos
los participantes se ayudan para conseguir el mismo objetivo a la vez.
El método socio-afectivo
La utilización de los juegos cooperativos en el ámbito educativo responde al
método socio-afectivo, que conlleva tres fases:
1.º. SENTIR mediante la experimentación vivencial de un juego, una
dinámica o una situación vital.
2.º. REFLEXIONAR sobre las vivencias experimentadas. Después de cada
juego es importante dedicar, en el ámbito escolar, un tiempo a reflexionar
sobre la actividad que se acaba de realizar y su relación con nuestra vida
real.
3.º. ACTUAR. El proceso educativo termina exitosamente cuando las
personas participantes llevan a la vida práctica su nuevo aprendizaje. En el
marco del trabajo docente, se logran los objetivos cuando todas las
personas implicadas en el proceso de aprendizaje llevan a cabo los
objetivos y valores de conducta que se pretendían en cada actividad.
a) La reflexión
El instrumento básico para la reflexión es la pregunta. Se puede encauzar la
reflexión mediante preguntas abiertas a los niños: ¿Tenéis algún comentario?
¿Qué os ha parecido la actividad? ¿Cómo os habéis sentido?
Después se plantean interrogantes sobre los objetivos generales y específicos
del juego: ¿Qué dificultades habéis tenido? ¿Qué inconvenientes? ¿Qué
habéis aprendido?
b) El seguimiento
Basándonos en las reflexiones podemos llegar a conclusiones prácticas para
nuestra vida real. Por ejemplo, una vez finalizada una actividad, si alguien se
queja porque le han golpeado fuerte en el hombro, habrá que tener cuidado al
dar a alguien en un hombro pues, a veces, un niño lo hace con fuerza y a sus
compañeros les molesta (o duele).
Presentación y desarrollo
Los juegos cooperativos se introducirán como una situación vivida o una
experiencia personal, antes de la explicación del juego en sí mismo, con la idea
de crear un ambiente especial en el grupo.
Cuando sea posible, se intentará explicar una por una las normas, a la vez que
se va demostrando su desarrollo con un ejemplo. Puede ser conveniente dar
un ejemplo de la actividad antes de que todo el grupo la lleve a cabo
conjuntamente.