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1.

RECETA DE PIZZA DE LACÓN


CON CHAMPIÑONES Y RÚCULA

Esta Pizza de lacón con champiñones y rúcula es buena


para acostumbrarse a acompañar las pizzas con una buena
cantidad de hojas verdes, que colocamos encima en el momento de
servirla y llevarla a la mesa. El relleno, al utilizar lacón en lugar de
jamón de York tiene ese toque especial que tanto nos gusta.
Ingredientes
Para 2 personas

• Masa para pizza refrigerada o casera 1


• Salsa de tomate cucharadas 2
• Mozzarella fresca una bola que desmenuzaremos con las manos
• Champiñones 4
• Orégano seco
• Aceite de oliva virgen extra
• Rúcula 60 g

Cómo hacer pizza de lacón con


champiñones y rúcula
Dificultad: Fácil

• Tiempo total 20 m
• Elaboración 5 m
• Cocción 15 m
Como tenía que hacer varias pizzas, estuve haciendo masa de pizza
en cantidad, para hacerlas todas. Ya sabéis que hacer una masa de
pizza casera es una tarea fácil y entretenida. Precalentamos el horno
a 220º.

Sobre la base de pizza, extendemos con el dorso de una cuchara las


dos cucharadas de tomate frito, procurando no llegar hasta los
bordes. Añadimos la mozzarella desmenuzándola con las
manos y laminamos los champis, distribuyéndolos en dos círculos
que colocamos en el borde y en la zona central de la pizza.
Completamos con el lacón cocido y añadimos un chorrito de
aceite de oliva y un poco de orégano. Si no encontráis lacón, podéis
hacerla con jamón cocido. Horneamos hasta que la pizza está lista,
durante unos 15 minutos con el horno a tope y calor arriba y abajo.

Mientras se hace la pizza, aliñamos la rúcula con aceite de oliva y


unas gotas de vinagre y escurrimos bien. Cuando la pizza está lista,
la cortamos con el cortapizzzas y la cubrimos con la rúcula aliñada y
llevamos a la mesa inmediatamente para que no se enfríe.

Con qué acompañar la pizza de


lacón con champiñones y rúcula
La pizza de lacón con champiñones y rúcula es estupenda para
tomar en cenas familiares y de amigos, acompañada de refrescos,
cervezas o con un poco de vino rosado bien frío. Si además de la pizza
preparáis unos aperitivos para compartir como éstos, tendréis un
menú perfecto para una noche especial.
2. PIZZA MEXICANA DE CARNE

La segunda opción que os proponemos es una Pizza mexicana de


carne elaborada con una base de tomate y queso cubierta con
carne picada, cebolla y rodajas de aguacate. El toque picante
adecuado lo decides tú añadiendo más o menos Tabasco o chiles
jalapeños.

Espero que mis queridos compañeros de Directo al Paladar México


me disculpen el atrevimiento de haber bautizado así esta pizza
mexicana de carne, cebolla y aguacate, pero es el nombre más
apropiado que se me ha ocurrido para esta receta, dada la
combinación de ingredientes que he utilizado.

Me apetecía mucho probar a introducir el aguacate en crudo para


completar una receta en la que la carne condimentada con chile en
polvo, los pimientos verdes y la cebolla toman el protagonismo y el
resultado ha sido a mi gusto muy agradable.

Ingredientes
Para 2 personas

• Harina de fuerza 400 g


• Leche 150 ml
• Mantequilla 50 g
• Yemas de huevo3
• Sal una pizca
• Levadura seca de panadería un sobre
• Carne picada 200 g
• Pimiento verde italiano medio
• Mozzarella fresca una bola
• Salsa de tomate
• Sal y pimienta al gusto
• Cebolla media
• Aguacate 1

Cómo hacer pizza mexicana de


carne, cebolla y aguacate
Dificultad: Fácil

• Tiempo total 25 m
• Elaboración 10 m
• Cocción 15 m
• Reposo 30 m
Hacemos la base de la pizza mezclando los ingredientes y
amasando hasta formar una bola. Una vez elaborada, dejamos
reposar media hora dentro de la nevera y después la estiramos. Aquí
podéis ver el proceso en vídeo.

Freímos la carne condimentada con sal, especias al gusto -y si


queremos alguna hierba aromática-, lo justo para que pierda el
color de crudo, ya que después se terminará de cocinar en el horno.

Sobre la base de la pizza, extendemos el tomate, cubrimos con la


mozarella y la carne picada, procurando que quede bien repartida.
Añadimos los discos de pimiento verde y unos trozos de cebolla en
juliana y la horneamos a 220º con el horno precalentado.

Mientras se hace, (no tardará más de diez o quince minutos),


cortamos el aguacate por la mitad, sacamos la pulpa y la cortamos
transversalmente formando aritos, que después colocamos sobre
la pizza llevándola a la mesa inmediatamente.
Con qué acompañar la pizza
mexicana de carne, cebolla y
aguacate
Esta pizza mexicana de carne, cebolla y aguacate queda muy rica
ya que lo cremoso del aguacate suaviza el toque picante del chile y
las especias. Os recomiendo tomarla con una cerveza mexicana
para una cena casera en pareja, acompañada de una rica ensalada
casera de setas, nueces y granada.
3. PIZZA DE PERA, JAMÓN Y
GORGONZOLA

Esta Pizza de pera, jamón y gorgonzola es una de mis pizzas


favoritas ya que el toque dulce de la pera encaja muy bien con el
salado del jamón, en contraste con el sabor especial del queso
gorgonzola. Me estoy relamiendo al recordarla.

Después de utilizar estos ingredientes para preparar un magnífico


sándwich y días después preparar con ellos el risotto de pera,
gorgonzola y bacon que tanto nos han gustado, hoy que querido
probar esta misma combinación en formato pizza. Y aquí está el
resultado, una pizza de pera, jamón y gorgonzola que os
recomiendo para este fin de semana, si os apetece sorprender a la
familia.

Si tuviera que quedarme con una de las tres recetas, lo iba a tener
realmente difícil, puesto que lo sencillo del sandwich, la cremosidad
del risotto y el crujiente de la pizza son buenos argumentos. Lo mejor
es que probéis las tres y decidáis vosotros porque es una magnífica
combinación de ingredientes.

Ingredientes
Para 2 personas

• Masa para pizza refrigerada o casera (200 g de harina de trigo, 3 g levadura


fresca de panadería, 3 g de sal, 20 ml de aceite de oliva virgen extra y 125 ml
de agua) 1
• Mozzarella fresca 100 g
• Pera 1
• Jamón de York 3 lonchas
• Queso Gorgonzola 75 g
• Rúcula unas hojas
• Miel de abejas o de palma, (opcional) unas gotas
• Orégano seco (opcional)

Cómo hacer pizza de pera,


jamón y queso gorgonzola
Dificultad: Fácil

• Tiempo total 25 m
• Elaboración 10 m
• Cocción 15 m
• Reposo 30 m
Comenzamos preparando la masa de pizza, amasando los
ingredientes y dejándolos reposar durante 30 minutos en la nevera.
Después estiramos la masa de la pizza con un rodillo y comenzamos
a preparar su relleno.

Como es una pizza con fruta, no vamos a poner tomate sino que la
dejaremos en blanco. Colocamos una pequeña capa de queso
mozarella para que esté más jugosa y sobre ella distribuimos
la pera pelada y cortada en 6 o 7 trozos.

En los espacios entre los pedazos de pera colocamos lonchas de


jamón y junto a cada una ponemos un pegote de queso gorgonzola,
dejando otro buen pegote en la zona central de la pizza.
Mientras, habremos precalentado el horno a 240ºC.

Horneamos la pizza hasta que los bordes de la masa estén bien


tostados y crujientes y los distintos quesos estén burbujeando.
Cinco minutos antes de terminar, barnizamos los trozos de pera con
miel de palma para potenciar su sabor dulce. Antes de servir,
adornamos la pizza con brotes tiernos de rúcula y espolvoreamos
con orégano.
Con qué acompañar la pizza de
pera, jamón y queso gorgonzola
Esta pizza de pera, jamón y queso gorgonzola resulta estupenda
para una cena familiar. Con unos entrantes ligeros y vuestra bebida
favorita, no necesitaréis más para sentiros felices y satisfechos. Ya
lo veréis.
4. PIZZA DE POLLO, QUESO
BRIE Y ARÁNDANOS

La Pizza de pollo, queso brie y arándanos es la reina de los contrastes


ya que el sabor ácido del arándano y la textura cremosa del queso
brie, funcionan estupendamente con el pollo, consiguiendo una
mezcla muy equilibrada.
Me encantan cómo combinan los quesos de pasta blanda con las
mermeladas de frutos rojos, y si habitualmente esta unión forma
parte de mis tablas de quesos, esta vez quise juntar estos dos
ingredientes en una pizza de pollo, queso brie y arándanos. Si os
gustan los sabores dulces y salados, es una pizza que os va a cautivar.
Como siempre, podéis hacer en casa la base de la masa de pizza, muy
recomendable, o bien comprar una en blanco y ponerle vosotros el
relleno encima. Hay masas comerciales de calidad decente que
pueden sacarnos de un apuro cuando no siempre tenemos tiempo.
Ingredientes
Para 4 personas

• Harina de trigo 400 g


• Agua templada 200 ml
• Aceite de oliva virgen extra 50 ml
• Levadura seca de panadería 1 cucharada
• Azúcar 1 cucharadita
• Queso Brie 200 g
• Mermelada de arándanos rojos 180 g
• Pechuga de pollo 200 g
• Cebolleta pequeña 1
• Nueces 30 g
• Aceite de oliva virgen extra
• Sal

Cómo hacer pizza de pollo,


queso brie y arándanos
Dificultad: Media

• Tiempo total 45 m
• Elaboración 20 m
• Cocción 25 m
• Reposo 1 h 15 m
Comenzaremos preparando nuestra masa casera de pizza. Para ello
en un bol echamos el agua templada y el aceite, la levadura seca y el
azúcar. Removemos con unas varillas y dejamos diez minutos para
comprobar que la levadura hace espuma y funciona correctamente.

Entonces vamos añadiendo la harina con la sal y amasando con las


manos hasta lograr una masa elástica y que no se pegue. La dejamos
en un recipiente en un lugar templado una hora para que leve.
Cuando pase el tiempo desgasificamos y la estiramos encima de una
bandeja de horno o piedra de pizza, aún crecerá todavía un poco
mientras que se prepara el relleno. Precalentamos el horno a 220
grados con calor por abajo.

Seguimos picando la cebolleta en rodajas finitas y la pechuga de


pollo en tiras. Colocamos una sartén al fuego y calentamos el aceite
de oliva, sofriendo a fuego lento la cebolleta durante unos minutos,
una vez hecha la retiramos y salteamos el pollo. Salamos la carne.
Pasamos todo para un plato y reservamos.

Extendemos la mermelada de arándanos por la base de la pizza


como si fuese la salsa de tomate clásica. Repartimos encima la
cebolleta, los trozos de queso brie y el pollo. Esparcimos las
nueces en trozos. Horneamos durante 25 minutos.

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5. PIZZA DE BONITO Y
ANCHOAS

Las pizzas de pescado como esta Pizza de bonito y anchoas tienen


algo especial. Su sabor a mar intenso se suaviza con la albahaca y la
mozzarella consiguiendo una pizza inolvidable. Tenéis que probarla.
Si hay un plato del que estoy orgullosa, éste es la pizza. Os comenté
en alguna ocasión que tuve la suerte de tomar pizzas caseras desde
muy pequeña cuando no era para nada común y ni siquiera en el
supermercado había bases, así que mi madre hacía su propia
masa y en casa disfrutábamos de este manjar.

La pizza de bonito y anchoas es una variedad más que sirve de


ejemplo para que veáis la multitud de ingredientes que se pueden
adicionar a esta riquísima receta. Dejo a vuestro gusto el variar
cualquiera de ellos a vuestro antojo.

Ingredientes
Para 1 unidades

• Harina de trigo 300 g


• Sémola de trigo 50 g
• Levadura fresca de panadería 5 g
• Azúcar 10 g
• Sal 5 g
• Aceite de oliva virgen extra 30 ml
• Agua 175 ml
• Bonito del Norte en conserva 200 g
• Anchoas en salazón en lata 1
• Salsa de tomate
• Queso Mozzarella
• Albahaca
• Orégano seco

Cómo hacer pizza de bonito y


anchoas
Dificultad: Fácil

• Tiempo total 30 m
• Elaboración 20 m
• Cocción 10 m
• Reposo 1 h
Empezamos por la masa de la pizza. Mezclamos la harina con la
semolina, el azúcar y la sal. Agregamos la levadura desmenuzada y
poco a poco el aceite de oliva virgen extra y el agua. No añadiremos
todo el agua en una sola vez, si no que iremos mezclando hasta que
veamos que no necesita más, todo dependerá de la absorción de la
harina.

La masa debe quedar blanda y elástica. Formamos una bola, la


colocamos en un cuenco ligeramente engrasado y la dejamos
reposar tapada durante una hora más o menos, o hasta que casi haya
duplicado su volumen.

Estiramos con el rodillo la masa muy fina en forma circular sobre la


mesa de trabajo ligeramente enharinada. Si vemos que la masa se
contrae, esperamos unos minutos para que se relaje y volvemos a
estirarla suavemente. Calentamos el horno con calor solo abajo a
máxima temperatura. En mi caso para este programa alcanza los
275ºC.

Podemos hornear la pizza sobre bandeja, papel o


piedra. Espolvoreamos la bandeja con un poco de harina y
semolina, colocamos la base de pizza encima y cortamos el borde
sobrante. Pinchamos la masa con un tenedor para evitar que suba.

Echamos un poco de salsa de tomate en la base, un poco de albahaca


y por encima esparcimos el bonito desmenuzado. Colocamos las
anchoas y el queso mozzarella en trozos. Espolvoreamos con un
poco de orégano y horneamos hasta que la pizza esté lista.
Con qué acompañar la pizza de
bonito y anchoas
Esta pizza de bonito y anchoas debe tomarse recién salida del
horno, igual que todas, para que los ingredientes estén perfectos y el
queso fundido y en su punto. Si el sabor salado de la anchoa
horneada no os agrada, colocadlas sobre la pizza justo al sacarla del
horno, no antes.
6. PIZZA DE COLORES

Esta Pizza de colores la descubrí en una aplicación del teléfono y


estoy feliz de ese descubrimiento porque siendo muy sencilla es una
de las pizzas que más éxito tiene en casa cada vez que la preparo. A
mis sobrinas les entusiasma.

Dicen que la comida tiene que entrar por los ojos y yo estoy
absolutamente de acuerdo. Por eso cuando he preparado
esta receta de pizza de colores, he intentado que su aspecto fuera
muy apetecible. Tal como ha quedado, estoy casi seguro de que
aunque la cobertura sea sólo a base de verduras, se la comerían
hasta los más carnívoros.

Si hace unos días os enseñé como preparar mi receta de pizza casera


de pollo con salsa barbacoa y champiñones, hoy le toca el turno a
esta fantástica pizza de colores a base de verduras en la que he
utilizado otra fórmula para la base. A ver si os gusta tanto como a mí
y pese a los calores, os animáis a encender el horno.

Ingredientes para 4 personas


• Para la masa: 200 gr de harina de fuerza, 75 ml de leche, 25
gr de mantequilla, 1 yema de huevo, media cucharada de sal
y medio sobre de levadura seca de panadería. También
podéis utilizar una base de pizza fresca de la zona de
refrigerados de las tiendas de alimentación
• Para el relleno: corazones de alcachofas en conserva,
espárragos trigueros, pimientos rojo, amarillo y verde,
cebolleta en crudo y rehogada, aceitunas negras, queso
mozzarella, salsa de tomate frito, orégano, sal, pimienta y
aceite de oliva virgen extra

Cómo hacer una pizza de colores


Preparamos la masa de pizza mezclando los ingredientes. Si queréis,
podéis ver cómo hacerlo en el vídeo que preparó mi compañero
Minue. Ya os he contado otras veces que a mí me gustan las pizzas
muy finas y rectangulares para aprovechar la superficie de la
bandeja del horno, pero hacedlo a vuestro gusto.

Extendemos la masa sobre un papel de hornear o un silpat que


pondremos en la bandeja de horno y lo cubrimos con un par de
cucharadas de tomate frito. Distribuimos la mozzarella sobre el
tomate, como véis en las fotos. Cortamos los pimientos de colores en
trocitos y los colocamos repartiendo bien los colores.
Picamos un trozo de cebolleta en juliana y otro trozo lo cortamos
en brunoise muy finito y lo rehogamos en una sartén. Repartimos
ambas clases de cebolleta. Ponemos unos espárragos verdes con las
puntas hacia el centro de la pizza y rellenamos los huecos con
los corazones de alcachofas cortados en cuartos. En el centro
ponemos un corazón de alcachofa abriéndolo un poco.

Para finalizar, cortamos unas aceitunas negras por la mitad y las


distribuimos con un poco de gracia, espolvoreamos con unas hojas
de orégano, un poco de pimienta negra y completamos la pizza
echando un buen chorro de aceite de oliva. La asamos en el horno
precalentado durante unos 15 minutos a 225º, hasta que los bordes
se vean bien dorados y con aspecto crujiente.

Tiempo de elaboración | 1 hora Dificultad | Media

Degustación
Esta receta de pizza de colores, la debéis preparar para disfrutar en
buena compañía, mientras véis una película de vuestro agrado. Os
aseguro que la combinación peli - pizza es una de las más
placenteras que podréis encontrar. Para llevarla a la mesa, podéis
ponerle unos cogollitos de albahaca pinchados en cada ración, para
que suelten su aroma en el momento.
7. PIZZETAS INDIVIDUALES DE
SALMÓN Y RÚCULA

Las minipizzas o pizzetas individuales me gustan mucho y las suelo


elaborar con bases hechas con obleas de empanadilla por lo que
resultan rápidas y cómodas de hacer en cualqueir momento.
Estas pizzetas individuales de salmón y rúcula tienen una
combinación de ingredientes que me gusta mucho, y son también de
las que más hacemos en casa.
Hoy vamos a preparar una receta sencilla de pizzetas individuales
de salmón y rúcula que me gusta hacer de vez en cuando. La misma
receta os sirve para hacer con otros pescados ahumados o por
ejemplo con jamón ibérico u otros ingredientes que convenga tomar
en crudo y no cocinados en el horno.

Estas pizzas me gustan mucho porque, a diferencia de las


tradicionales, se toman templadas, ya que el salmón ahumado y la
rúcula se montan en la pizza después de haber sido horneada. El
resultado es una pizza de base muy fina y crujiente, idónea para el
aperitivo o para tomar si queréis una cena ligera y original.
Ingredientes
Para 2 personas

• Empanadillas (obleas) 4
• Salmón ahumado 2 lonchas
• Rúcula al gusto
• Salsa de tomate 4 cucharaditas de postre
• Queso Mozzarella aproximadamente 120 g
• Pepinillos en vinagre 2
• Cebollino un poquito
• Pimienta negra molida al gusto

Cómo hacer pizzetas


individuales de salmón y rúcula
Dificultad: Fácil

• Tiempo total 30 m
• Elaboración 30 m
Sobre una bandeja de horno cubierta con un papel de hornear o
un silpat de silicona, distribuimos separadas las obleas de
empanadilla y ponemos en cada una de ellas una cucharadita de
tomate frito, extendiéndolo con el dorso de la misma cuchara.

Sobre el tomate, distribuimos trocitos de queso mozzarella que


cortamos pellizcando, sin cubrir del todo las obleas. Horneamos a
220ºC en horno precalentado, usando el programa de calor arriba
y abajo. Cuando pasen unos 7 minutos, el queso estará burbujeando
y los bordes de las obleas se habrán dorado y comenzarán a
doblarse.
Apagamos el horno y sacamos las pizzas del horno dejando que se
enfríen ligeramente. Sobre cada una de las pizzas recién
horneadas, distribuimos con cuidado media loncha de salmón
ahumado cortado en tiras estrechas, tres hojas de rúcula y cuatro
rodajitas de pepinillo.

Rematamos con un poco de pimienta negra recién molida, un


chorrito de aceite de oliva virgen extra y un poco de cebollino muy
picado. Una vez montadas las pizzas, las servimos inmediatamente.
8. MINI PIZZAS DE JAMÓN
SERRANO Y MERMELADA DE
HIGOS

Seguimos con más pizzitas individuales ya que estas Minipizzas de


jamón serrano y mermelada de higos son imprescindibles. Qué bien
queda el jamón con la mermelada de higos. Qué buena combinación
de sabores. Probadlas y lo comprobaréis.
La mermelada de higos casera es muy versátil en la cocina, ya que se
puede emplear en multitud de platos dulces y salados. Entre estos
últimos os quiero mostrar una receta deliciosa y muy fácil,
las minipizzas de jamón serrano y mermelada de higos, para que
no solo tengáis que utilizar este dulce en las tostadas del desayuno.

Por supuesto que si no habéis preparado la mermelada en casa


podéis hacer estas minipizzas de aperitivo con un envase de
mermelada comprada. Ahora ya hay unas cuantas marcas que han
introducido esta variedad entre sus sabores y no es difícil de
encontrarla en los supermercados.
Ingredientes
Para 6 unidades

• Agua 200 ml
• Aceite de oliva virgen extra 50 ml
• Levadura seca de panadería 1 cucharadita
• Sal 1 cucharadita
• Harina de fuerza 400 g
• Cebolla pequeña 1
• Aceite de oliva virgen extra 5 ml
• Mermelada de higos 100 g
• Jamón serrano 150 g
• Queso ricotta o crema 100 g
• Tomillo fresco
• Pimienta negra molida

Cómo hacer minipizzas de


jamón serrano y mermelada de
higos
Dificultad: Media

• Tiempo total50 m
• Elaboración30 m
• Cocción20 m
• Reposo2 h
En un bol echamos el agua, el aceite y la levadura, removemos hasta
que esta se disuelva. Dejamos reposar 10 minutos hasta que veamos
que ha hecho una ligera espuma. Añadimos la harina y la sal y vamos
amasando hasta lograr una masa elástica y poco pegajosa.
Dejamos reposar en un sitio templado hasta que doble el volumen.
Desgasificamos y la estiramos con un rodillo, cortando seis discos
con un bol pequeño de cocina de unos ocho centímetros de
diámetro. Colocamos en una placa de horno y
dejamos reposar mientras que se prepara el relleno. Precalentamos
el horno con calor por abajo a 200ºC grados.

En una sartén pequeña calentamos el aceite y echamos la cebolla


picadita, pimienta y la sal, cocemos durante 15 minutos a fuego bajo
hasta que quede blanda. Dejamos enfriar un poco.

En cada disco de pizza repartimos en su base un poco de mermelada


de higos, por encima una capa de cebolla y por último distribuimos
el jamón serrano y el queso ricotta o en su defecto crema, en trozos
entre el jamón. Horneamos durante 20 minutos o hasta que
veamos la masa cocida. Adornamos con tomillo fresco.
9. MINIPIZZAS DE BONITO,
JAMÓN COCIDO Y SETAS

Otra variante en tamaño pequeño, estas Minipizzas de bonito, jamón


cocido y setas. Una peculiar combinación de ingredientes que
resulta espléndida al mezclarse en la boca. Haced más cantidad de
la que calculéis porque desaparecen muy rápido.

Que hace 20 años tu madre hiciese pizza puede que fuese común,
pero con masa casera, al menos no lo había visto, así que cada vez
que ella nos sorprendía con la noticia de la pizza para cenar, era una
fiesta. Esta receta de mini pizzas de bonito, jamón cocido y
setas es una variante de la que siempre nos hacía.

Recuerdo acompañarla a la panadería a comprar la levadura


fresca que le daban en trozos, envuelta en papel y dentro de una
bolsita. Mientras mi madre hacía cantidades ingentes de masa yo me
divertía con un trocito en una esquina de la cocina. ¡Qué gustazo!
Ingredientes
Para 2 personas

• Masa para pizza 1


• Bonito del Norte en conserva200 g
• Jamón de York 100 g
• Tomate Cherry 4
• Setas
• Mozzarella fresca
• Salsa de tomate
• Albahaca
• Orégano seco

Cómo hacer mini pizzas de


bonito, jamón cocido y setas
Dificultad: Fácil

• Tiempo total 20 m
• Elaboración 15 m
• Cocción 5m
Encendemos el horno con calor sólo abajo a la máxima temperatura
que tenga nuestro horno para ese programa. Colocamos la base o
mini bases de pizza sobre la bandeja de horno con papel. Sobre cada
base de pizza echamos la salsa de tomate casera, esparciendo con el
dorso de una cuchara.

Espolvoreamos un poco de albahaca. Colocamos encima el resto de


ingredientes troceados: el bonito, el jamón cocido, las setas
troceadas y los tomates cherry limpios y partidos en
cuatro. Cubrimos con trozos de mozzarella y espolvoreamos con
orégano.

Horneamos en el nivel uno del horno, abajo del todo hasta que la
base se dore y los ingredientes están listo. Si hacemos mini pizzas en
menos de cinco minutos estarán horneadas, así que no os despistéis.
Servimos inmediatamente.

Con qué acompañar las mini


pizzas de bonito, jamón cocido y
setas
Estas mini pizzas de bonito, jamón cocido y setas, al igual que
sucede con cualquier otra pizza, debemos tomarlas recién hechas
para que todos los ingredientes estén en su punto exacto y bien
jugosos. Si las acompañamos de ensalada ya tenemos una cena
completa, aunque no conviene abusar por las calorías extras de esta
receta.
10. MINIPIZZAS CAPRESE

Seguimos con pizzas individuales. Las Minipizzas Caprese tienen


solo esos tres ingredientes, mozzarella, tomate y albahaca. Yo no
necesito nada más para disfrutar. ¿Y vosotros?
Si hay una ensalada clásica y deliciosa en la cocina italiana es la
ensalada Caprese. Hace unos días publiqué una versión de
dicha ensalada con melocotón y hoy quiero convertirla en estas mini
pizzas Caprese, que están buenísimas, a pesar de su sencillez.

Para la masa base utilicé una masa de pizza habitual que utilizo
siempre, pero si no os atrevéis podéis utilizar una buena base
comercial, o bien obleas de empanadilla. Aunque no hay color en
el resultado ni en el sabor, son otras opciones que quiero ofrecer.

Ingredientes
Para 2 personas

• Empanadillas (obleas)8
• Tomate Cherry 4
• Tomates perla 4
• Mozzarella fresca 1
• Salsa de tomate 4 cucharadas
• Albahaca fresca
• Harina de trigo para espolvorear

Cómo hacer mini pizzas Caprese


Dificultad: Fácil

• Tiempo total 15 m
• Elaboración 10 m
• Cocción 5 m
Calentamos el horno a máxima temperatura con calor solo abajo,
de solera. Sobre una bandeja apta para horno espolvoreamos un
poco de harina. Encima colocamos las bases de nuestras mini pizzas.
Pinchamos con un tenedor las bases, para evitar que se inflen
durante el horneado.

En la superficie de cada una extendemos salsa de tomate al gusto.


Sobre ella colocamos los tomates cherry y perla, limpios, partidos
por la mitad y repartimos la mozzarella en trozos por toda la
superficie.

Horneamos en el nivel 1, o sea, la posición más baja del horno,


hasta que veamos que la base está ligeramente dorada. Según la
temperatura que alcance vuestro horno, pueden ser muy pocos
minutos, así que cuidado.

Sacamos con cuidado del horno, esperamos un par de minutos y


espolvoreamos con un poco de albahaca fresca, limpia y seca.
Servimos caliente.
Con qué acompañar las mini
pizzas Caprese
Las mini pizzas Caprese deben tomarse calientes, recién salidas del
horno, como cualquier otra pizza. El formato mini es muy cómodo
para fiestas o cumples, pero también es perfecto para utilizar de
forma habitual para servir raciones individuales de una manera
distinta.
11. MINI PIZZAS DE CALABAZA
CON QUESO AZUL Y
SOBRASADA
Las Mini pizzas de calabaza con queso azul y sobrasada son
diferentes a las pizzas tradicionales por sus peculiares ingredientes
pero debéis probarlas porque la combinación de sabores dulces,
salados y todos bien potentes es absolutamente genial. El toque de
orégano les da el punto final de perfección.

Una de las ventajas que tienen las calabazas es que podemos


aprovecharlas todo el año, a pesar de que se asocien al otoño. Y es muy
práctico disponer de su pulpa cocida o asada congelada en porciones, con
la que podemos preparar recetas tan resultonas como estas mini pizzas
de calabaza con queso azul y sobrasada, una combinación de sabores
fantástica.

Podemos emplear masa de pizza casera cortada en porciones o


sencillamente recurrir a alguna masa comercial de calidad.
Empleando puré de calabaza como base en lugar del típico tomate
demostramos que el mundo de las pizzas está lleno de posibilidades.

Ingredientes
Para 2 personas

• Masa para mini pizza 4


• Calabaza mediana 1
• Cebolla dulce 0.5
• Queso azul 50 g
• Sobrasada al gusto
• Mozzarella fresca 0.5
• Aceite de oliva virgen extra
• Tomillo fresco o seco al gusto
• Pimienta negra molida
• Orégano seco al gusto
Cómo hacer mini pizzas de
calabaza con queso azul y
sobrasada
Dificultad: Fácil

• Tiempo total 1 h
• Elaboración 10 m
• Cocción 50 m
Comenzar preparando la calabaza. Se puede cocer o asar en el
horno, hasta que la carne esté bien tierna. Cocinarla con la cebolla y
triturar junto con un poco de aceite y algo de leche, si fuera
demasiado espesa. Tiene que quedar una textura cremosa.
Salpimentar.

Precalentar el horno a 200º C y preparar una bandeja. Estirar las


masas de pizza y cubrir cada una con una capa de calabaza. Repartir
queso azul y sobrasada al gusto. Añadir queso para gratinar y
sazonar con orégano y pimienta negra.

Hornear las mini pizzas hasta que el queso se haya fundido bien al
punto deseado. Retirar con cuidado. Añadir un poco de tomillo
fresco y orégano al gusto antes de servir.
Con qué acompañar las mini
pizzas de calabaza
El tamaño reducido de las mini pizzas de calabaza con queso azul y
sobrasada es ideal para compartirlas a la hora de la cena, o como
parte de un menú informal a la hora de la comida. Incluso se
pueden preparar con masas más pequeñas para servir como
picoteo del tamaño de un bocado.
12. MINIPIZZAS DE JAMÓN Y
ESPÁRRAGOS TRIGUEROS

Las Minipizzas de jamón y espárragos trigueros son una divertida


traslación del clásico plato de espárragos salteados con jamón para
convertirlo en una pizza ideal para el aperitivo gracias a este formato
mini. Tenéis que hacerlas para comprobarlo.
No es que me guste el fútbol especialmente, pero cuando llegan las
competiciones internacionales sí me entusiasma ver algún partido, y
sobre todo, si juega España la cosa se pone más interesante. Como
es habitual que nos juntemos varios para ver los partidos, suelo
hacer estas mini pizzas de jamón y trigueros para amenizar la
jornada futbolera.

Por supuesto el relleno es variable y las pizzas tienen infinitas


combinaciones, pero ésta está entre una de mis preferidas y a mis
invitados también les encanta. La forma de presentarlas así,
individualmente, hace que no perdamos tiempo en repartirla en
trozos. Cada uno se come las mini pizzas que le apetece y, lo mejor
de todo, con lo dedos.
Ingredientes
Para 6 unidades

• Harina de trigo 150 g


• Sémola de trigo o maíz 25 g
• Polenta 25 g
• Levadura fresca de panadería 2.5 g
• Sal 2.5 g
• Aceite de oliva virgen extra 15 ml
• Agua 80 ml
• Salsa de tomate casera, 6 cucharadas
• Orégano seco
• Jamón serrano en lonchas 6
• Bacon ahumado en lonchas 3
• Pavo en lonchas 3
• Queso Mozzarella en lonchas 3
• Queso Cheddar en lonchas 2
• Espárragos trigueros finos 6
• Albahaca

Cómo hacer mini pizzas de


jamón y trigueros
Dificultad: Media

• Tiempo total 40 m
• Elaboración 30 m
• Cocción 10 m
• Reposo 1 h
Para hacer la masa simplemente mezclamos todos los
ingredientes en un cuenco y amasamos un poco hasta que no se nos
pegue en las manos, aunque notaremos la masa jugosa. Puede que
necesitemos un poco más de agua, ajustaremos la cantidad según
sea necesario ya que puede variar según la absorción de la harina.

Tapamos la masa con film transparente y dejamos que repose hasta


que duplique su volumen inicial. Pasado el tiempo, enharinamos un
poco la mesa de trabajo, colocamos la masa y la presionamos
ligeramente con la yema de los dedos estirándola un poco.
Dejamos que repose cinco minutos.

Precalentamos el horno a 200º con calor sólo abajo. Estiramos la


masa con el rodillo hasta dejarla del grosor deseado. Con ayuda de
un aro de emplatar o cortapastas, hacemos las porciones de masa
para hacer las seis mini pizzas. Pinchamos con un tenedor la base de
cada mini pizza, echamos encima una cucharada de tomate, un poco
de orégano, y el jamón, el fiambre de pavo y el bacon picaditos.

Troceamos los quesos y los repartimos por encima, al igual que los
espárragos. Por último adornamos con unas hojas de
albahaca. Horneamos a 200º C en el nivel más bajo del horno,
durante unos diez minutos, dependiendo del tamaño que tengan las
mini pizzas. Sacamos del horno y servimos inmediatamente.
Con qué acompañar las mini
pizzas de jamón y trigueros
Estas mini pizzas de jamón y trigueros deben tomarse recién
salidas del horno para poder disfrutar de la masa bien crujiente. Si
las acompañamos de una cerveza o un refresco bien fresquito, ya
tenemos el mejor aperitivo o cena para ver los partidos.
13. PIZZA BLANCA

¿Estáis cansados de tomar la pizza siempre con tomate? Esta pizza


blanca, todo un clásico italiano, no lleva tomate, ni carne, pero está
llena de sabor y personalidad gracias al conjunto de quesos que
lleva.
¿Estáis cansados de tomar la pizza siempre con tomate? si vuestra
respuesta es sí, hoy os traigo una receta que os puede venir muy bien
para variar vuestro menú, la pizza blanca. Una pizza sin tomate, ni
carne, ni pimientos, pero llena de sabor y personalidad gracias al
conjunto de quesos que lleva.

Os recomiendo que hagáis una masa casera para disfrutar esta


pizza a tope, pues esta versión necesita de una buena base y no
simplemente de una masa precocinada. Aunque pueda parecer
complicado, la masa casera de pizza es muy sencilla y no supone un
gran trabajo, sin embargo mejora mucho el resultado.

Ingredientes
Para 4 personas

• Harina de trigo 400 g


• Agua 200 ml
• Aceite de oliva virgen extra 50 ml
• Levadura seca de panadería cucharadas rasas 1
• Azúcar cucharadita 1
• Sal 8 g
• Queso Mozzarella 200
• Queso ricota 200 g
• Queso de cabra 125 g
• Diente de ajo 2
• Albahaca fresca, al gusto
• Aceite de oliva virgen extra al gusto
• Sal y pimienta al gusto

Cómo hacer pizza blanca


Dificultad: Fácil

• Tiempo total 55 m
• Elaboración 30 m
• Cocción 25 m
• Reposo1 h 15 m
Comenzaremos preparando nuestra masa casera de pizza. Para ello
en un bol echamos el agua templada y el aceite, la levadura seca y el
azúcar. Removemos con unas varillas y dejamos diez minutos para
comprobar que la levadura hace espuma y funciona
correctamente.

Entonces vamos añadiendo la harina con la sal y amasando con las


manos hasta lograr una masa elástica y que no se pegue. La dejamos
en un recipiente en un lugar templado una hora para que leve.
Cuando pase el tiempo desgasificamos y la estiramos encima de una
bandeja de horno o piedra de pizza, aún crecerá todavía un poco
mientras que se prepara el relleno. Precalentamos el horno a 220
grados con calor por abajo.

En un bol ponemos el queso ricotta con el ajo picadito, salamos


ligeramente, y lo aplastamos bien con el ajo para hacer una crema.
Extendemos esta mezcla por encima de la masa de pizza.
Seguidamente desmenuzamos el queso mozzarella por encima,
añadimos pimienta y horneamos durante 30 minutos.

Una vez fuera del horno, desmenuzamos el rulo de cabra y


añadimos la albahaca fresca. Servimos rápidamente.
Con qué acompañar la pizza
blanca
Esta pizza blanca no os va a defraudar, sobre todo a los más
queseros, que no echaran de menos para nada los ingredientes más
clásicos. Acompañadla de una ensalada y tendréis una rica cena.
14. PIZZAS INDIVIDUALES DE
SOBRASADA, MIEL, NUECES Y
PIÑONES

Otra receta de pizza en formato individual: Las Pizzas individuales de


sobrasada, miel, nueces y piñones gustan a todos los niños por el
toque dulzón que aporta la mezcla de sobrasada y miel. De todas
formas, que los niños no se descuiden que los mayores acaban con
ellas en cuanto las prueban...
Tanto me gustaron las pizzetas individuales que hice con obleas de
empanadilla y salmón hace unas semanas que cuando tengo obleas
aprovecho y hago alguna receta similar para toda la familia. En esta
ocasión he horneado unas pizzas individuales de sobrasada, miel,
nueces y piñones que han sido vistas y no vistas.

Recordad que los niños no deben tomar frutos secos hasta que no
estéis seguros de que no tienen alergia a los mismos y en caso de
duda, se pueden eliminar y hacer la misma receta sin ese toque
crujiente tan especial. La receta es muy sencilla y está
impresionantemente buena.
Ingredientes para 3 personas
• 6 obleas de empanadilla
• 1 bola de mozzarella fresca
• 100 g de sobrasada
• 2 cucharadas soperas de miel
• orégano,
• 12 nueces
• una cucharada de piñones

Como hacer pizzas individuales


de sobrasada, miel, nueces y
piñones
Mezclamos la sobrasada fresca con la miel y batimos hasta
obtener una crema más o menos manejable. En una bandeja de
horno, extendemos las obleas de empanadilla, colocándolas sobre
un papel sulfurizado o una lámina de silicona para que no se peguen.

Mientras el horno se precalienta a 200º, repartimos la bola de queso


mozzarella en las obleas, cortándola a pellizcos y colocándolos de
modo anárquico e informal. Los niños pueden divertirse haciendo
esta receta con nosotros.

Con cuidado, rellenamos los huecos con la sobrasada mezclada con


la miel repartiéndola también entre las seis obleas. Una vez
terminada la preparación, horneamos las obleas durante 6
minutos, vigilando para que no se quemen.

Cuando las pizzas individuales están hechas, apagamos el horno y


colocamos las nueces y los piñones, espolvoreando con un poco de
orégano fresco y sirviendo inmediatamente para disfrutarlas
mientras están calientes.
Degustación
Las pizzas individuales de sobrasada, miel, nueces y piñones son
estupendas tanto para tomar como aperitivo como para servir a la
hora de la cena. Como se preparan en un momento, no cuesta nada
darse una alegría con un plato tan rico.
15. PIZZA DE SALMÓN
AHUMADO CON ALCAPARRAS Y
MASCARPONE

El salmón ahumado funciona muy bien en esta clase de recetas y


buena prueba de ello es esta Pizza de salmón ahumado con
alcaparras y mascarpone que os enamorará en cuanto la probéis. El
queso se funde y el salmón extiende su sabor por la superfice de la
pizza y todo se mezcla en cada bocado.

Me encanta cenar de vez en cuando una pizza casera, así que siempre
estoy en busca de nuevos sabores e ingredientes que hagan que cada
vez que la preparo sea distinta a la anterior. Hoy os presento
una pizza de salmón ahumado, alcaparras y mascarpone, que se
escapa de la clásica base con tomate y mozzarella, tan empleada
sobre todo cuando hay pequeños en la casa.
En este caso la masa lleva la misma cobertura que
posteriormente se le añadirá a la superficie, creando así una capa
de queso mascarpone con un toque de ajo que contrasta a la
perfección con el pescado ahumado. Como es difícil explicaros esta
mezcla original de sabores, lo mejor que os decidáis a prepararla
para poder comprobarlo por vosotros mismos. Para mí ahora ya es
una de mis favoritas.

Ingredientes
Para 4 personas

• Harina de fuerza 400 g


• Agua templada 200 ml
• Aceite de oliva virgen extra 50 ml
• Levadura seca de panadería 1 cucharada
• Azúcar 1 cucharadita
• Queso mascarpone 125 g
• Crème fraîche o nata espesa 100 ml
• Queso parmesano 3 cucharadas
• Diente de ajo 1
• Ralladura de limón 0.5
• Perejil 1 cucharada picado
• Cebolla morada en láminas 0.5
• Salmón ahumado 160 g
• Alcaparras 2 cucharadas
• Pimienta negra molida
• Sal

Cómo hacer pizza de salmón


ahumado, alcaparras y
mascarpone
Dificultad: Media

• Tiempo total 45 m
• Elaboración 20 m
• Cocción 25 m
• Reposo 1 h
Comenzaremos preparando nuestra masa casera de pizza. Para ello
en un bol echamos el agua templada y el aceite, la levadura seca y
el azúcar. Removemos con unas varillas y dejamos diez minutos
para comprobar que la levadura hace espuma y funciona
correctamente.

Entonces vamos añadiendo la harina con la sal y amasando con las


manos hasta lograr una masa elástica y que no se pegue. La
dejamos en un recipiente en un lugar templado una hora para que
leve. Cuando pase el tiempo desgasificamos y la estiramos encima
de una bandeja de horno o piedra de pizza, aún crecerá todavía un
poco mientras que se prepara el relleno. Precalentamos el horno a
220ºC con calor por abajo.

En un bol mezclamos el queso mascarpone, el parmesano, la crema


fraiche o nata si no tenemos aquella, el diente de ajo picadito, la
ralladura de limón, el perejil, la sal y la pimienta. Removemos todo
con unas varillas hasta formar una crema suave. Repartimos la
mitad de esta mezcla por encima de la masa.

Picamos la cebolla roja en láminas muy finas y las disponemos


encima del queso. Horneamos durante 25 minutos. Una vez que
sale del horno le colocamos el salmón ahumado en trozos por
encima, las alcaparras y el resto del queso formando pequeños
montones. Servimos muy rápidamente.

Con qué acompañar la pizza de


salmón ahumado
La pizza de salmón ahumado, alcaparras y mascarpone se debe
servir muy caliente, así los ingredientes de la superficie se
calentarán con el calor residual y podremos apreciar todos sus
originales sabores. Según las raciones a las que toquemos,
podremos quedarnos más que satisfechos compartiéndola sin nada
más que una ensalada ligera, o podemos tomarla como parte de una
cena más de picoteo.
16. PIZZA DE POLLO Y BACON
CON CHAMPIÑONES

Esta es una combinación sencilla pero llena de sabor. Pollo, bacon y


setas funcionan tan bien juntos que la Pizza de pollo y bacon con
champiñones siemre gusta a los que la prueban. Si partes de una
buena masa casera, lo tienes todo hecho para triunfar.
Cómo nos gustan las pizzas caseras. Además de que son divertidas
de preparar, cada vez que hacemos pizza tenemos la posibilidad de
utilizar distintos ingredientes consiguiendo un plato diferente cada
vez. En esta ocasión hemos preparado una pizza de pollo y bacon
con champiñones que nos ha gustado mucho.

Es curioso lo bien que combinan los seis ingredientes con que hemos
hecho la cobertura de la pizza. Los champiñones le dan humedad, el
pollo aporta su carne tierna y el bacon su potente sabor y textura
crujiente. Con el tomate y la mozzarella queda superjugoso y los
pocos trocitos de pimiento verde le dan un justo contraste.
Probadla y veréis qué sorpresa os lleváis en cada bocado.
Ingredientes
Para 4 personas

• Masa para pizza 1


• Salsa de tomate 2 cucharadas soperas
• Mozzarella fresca 1 bola
• Pechuga de pollo 1
• Champiñones 6
• Bacon 4 lonchas
• Pimiento verde italiano 0.5
• Orégano seco al gusto

Cómo hacer pizza de pollo y


bacon con champiñones
Dificultad: Media

• Tiempo total 20 m
• Elaboración 10 m
• Cocción 10 m
Preparamos la masa de pizza siguiendo nuestras instrucciones que
nunca fallan. Una vez hecha la base, la estiramos con el rodillo y nos
ponemos a que preparar los ingredientes para cubrir la pizza.
Mientras ponemos a precalentar el horno a 220º C. Cortamos la
pechuga de pollo en trozos de mediano tamaño. Si los hacemo muy
pequeños quedarán resecos y si son demasiado grandes pueden
quedar crudos en su interior. Pensad que sean de tamaño bocado
tirando a grande porque algo merman al asarse.

Sobre la base de pizza, extendemos dos cucharadas de tomate frito


y con el canto de la cuchara lo repartimos bien. A
continuación cortamos la bola de queso mozzarela en 8 o 10
rodajas finas y las repartimos cubriendo más o menos la superficie
de la pizza. En los huecos de la parte exterior ponemos unos aritos
muy finos de pimiento verde.

Rellenamos los huecos de la pizza con los trozos de pollo en crudo


pero salpimentados al gusto. Cortamos unas láminas de champiñón
y terminamos de rellenar la base tal como veis en las imágenes. Las
lonchas de bacon las picamos en trocitos pequeños que esparcimos
en forma de lluvia para que caigan sobre el resto de los
ingredientes.

Un chorrito de aciete de oliva virgen extra sobre nuestra pizza y


la horneamos durante unos 12 minutos, o hasta que la base esté
dorada y los quesos burbujeen. Sacamos del horno, espolvoreamos
con un poco de orégano y la llevamos a la mesa inmediatamente que
las pizzas tienen que llegar bien calientes. Nosotros siempre la
servimos con un poco de aceite picante casero para el que quiera
darle un toque.
Con qué acompañar la pizza de
pollo y bacon con champiñones
Esta pizza de pollo y bacon con champiñones es excelente para
compartir con los amigos o la familia mientras veis una película o
un encuentro deportivo en televisión. Para acompañarla, un clásico
en mi casa es preparar unos aros de cebolla crujientes de aperitivo,
mientras se hace la pizza. Ya veréis como la combinación peli-pizza
sube muchos enteros cuando hagáis vuestras pizzas en casa.
17. PIZZA DE PULPO A FEIRA

Esta divertida Pizza de pulpo a feira es una forma de integrar una


receta tradicional muy nuestra en una receta de la cocina
italoamericana. El resultado es un plato curioso y apetecible que
funciona muy bien en reuniones de amigos.

Un ingrediente no tiene por qué ser cocinado siempre de la misma


forma y si nos atrevemos a cambiar, muchas veces nos llevaremos
sorpresas muy agradables. Tal es el caso de esta receta de pizza de
pulpo a feira que combina el clásico pulpo gallego con la receta de
pizza casera.

Tanto si hacéis la masa vosotros mismos como si utilizáis una masa


precocinada, mejor las refrigeradas que las congeladas en mi
opinión, la sorpresa que daréis a los vuestros será estupenda y
seguro que descubriréis una nueva forma de disfrutar del pulpo.
Ingredientes para 4 personas
• Para hacer la base: 200 gr de harina de fuerza, 50 gr de
copos de puré de patata, 125 ml de agua, 15 ml de aceite
de oliva virgen extra, 3 gr de levadura de panadería
deshidratada, sal
• Para cubrir la pizza: 3 tentáculos de pulpo ya cocido, 2
cucharadas de tomate frito, pimentón de la Vera y una bola
de queso mozzarella

Cómo hacer pizza de pulpo a


feira
Comenzamos preparando la base de la pizza. Como trataba de
emular la receta clásica del pulpo, quería que de alguna
forma estuvieran presentes los cachelos de patatas gallegas. Por
eso retiré 50 gr de harina y los sustituí por la misma cantidad de
copos de patata para que en la masa hubiera algo de patata.

Mezclamos todos los ingredientes y hacemos una bola que dejamos


reposar durante una hora. Entre tanto puedes cocer el pulpo si lo
has comprado crudo. Extendemos la masa en una fuente de hacer
pizza, una piedra de hornear o sobre la bandeja de horno con un
papel de hornear y comenzamos a cubrirla.

Empezamos con los elementos extraños en la receta del pulpo a


feira, es decir, el tomate y el queso. Usamos dos cucharadas de
tomate frito casero bien extendidas y una bola de mozzarella de
búfala que desmigaremos a pellizcos cubriendo toda la superficie de
la pizza.
En lugar de mozzarella podéis usar queso Arzúa Ulloa gallego, pero
he preferido usar mozzarella para que apenas aportase sabor
dejando que el pulpo fuera el protagonista. Cortamos a tijeras los
tentáculos del pulpo cocido y distribuimos las rodajas encima del
queso.

Para terminar, cubrimos con una buena cantidad de pimentón de la


Vera y un hilo de aceite de oliva virgen extra, y cocinamos la pizza en
el horno precalentado a 220º, durante unos 12 minutos o hasta que
la masa tenga un color dorado.

Tiempo de elaboración | 1 hora y media si haces la masa casera


Dificultad | Fácil

Degustación
Esta receta de pizza de pulpo a feira es excelente para cenas con
amigos, ya que además esta forma de comer el pulpo dará mucho
juego y seguro que será fuente de buenas conversaciones sobre
cocina tradicional y sus variaciones. Y más si tenéis a mano un buen
vino de Ribeiro para acompañar.
18. RECETA DE PIZZA
CAPRICHOSA

La Receta de pizza caprichosa es una de las recetas tradicionales de


pizza de Italia y nuestra versión trata de acercarla a nuestra cocina,
para que esté al alcance de todos. Prueba a prepararla y te sentirás
en Italia durante unos minutos.
Los viernes por la noche siempre cenamos pizza, mis hijos lo tienen
muy claro y no dejan pasar ese día sin su cena preferida, de modo
que cuando se levantan por la mañana me lo recuerdan por si se me
olvida. Ayer preparé esta receta de pizza caprichosa.

Preparar pizza es mucho menos complicado de lo que pueda


parecer, y el resultado es muy superior al de las pizzas congeladas
o precocinadas. A mí me encanta variar los ingredientes de la
cobertura, lo cierto es que la masa de pizza esta deliciosa con casi
cualquier cosa.
Ingredientes
Para 3 unidades

• Agua templada 220 g


• Azúcar 1 cucharadita
• Levadura fresca de panadería 20 g
• Harina de fuerza 400 g
• Aceite de oliva virgen extra 30 g
• Sal 1 cucharadita
• Queso Mozzarella rallado 250 g
• Tomate triturado 300 g
• Alcachofa corazones, en cuartos 8
• Champiñones 200 g
• Anchoas en lata 1

Cómo hacer pizza caprichosa


Dificultad: Media

• Tiempo total 1 h
• Elaboración 35 m
• Cocción 25 m
• Reposo 1 h
Empezamos mezclando el agua templada con el azúcar, la levadura
y lo dejamos reposar unos minutos para que fermente. Pasado este
tiempo, la mezcla habrá crecido y tendrá burbujas en la superficie,
eso quiere decir que está lista para ser utilizada. Mientras lavamos,
cortamos y cocemos ligeramente los champiñones en una sartén.

En un bol grande ponemos la harina, el aceite, la sal, la masa de


arranque y amasamos hasta conseguir una mezcla suave y lisa. Le
damos forma de bola, la colocamos en un bol limpio ligeramente
untado con aceite, la cubrimos con un papel film y la dejamos
reposar una hora aproximadamente, hasta que doble su volumen.

Pasado este tiempo, partimos la masa en tantas porciones como


queramos, las estiramos con un rodillo y cubrimos con ellas los
moldes para pizzas, dejando un borde ligeramente más grueso en
la masa.

Distribuímos el tomate sobre la masa, a continuación los corazones


de alcachofa, los champiñones, el queso rallado y las anchoas.
Rociamos las pizzas con aceite de oliva, las espolvoreamos de sal y
las horneamos unos 25 minutos a horno precalentado a 220 ºC.
19. PIZZA DE BERENJENA Y
BACON

Berenjenas y bacon son dos alimentos que combinan bien como


prueba esta Pizza de berenjena y bacon que prácticamente no lleva
nada más que queso, tomate y los mencionados productos. Hacer
que sea una receta mágica es la clave, pero con un ratito de horno, la
receta es infalible.
Con el buen tiempo, todos somos menos formales y cambiamos
mucho nuestros planes, por lo que no es raro que un día no venga
nadie a cenar y otro nos juntemos hermanos, cuñados y sobrinos en
improvisadas fiestas familiares. Para esas ocasiones, me encanta
hacer recetas sencillas como esta pizza de berenjena y bacon que
gustan a todos tengan la edad que tengan, en especial si la hacéis
con una buena masa de pizza casera.

Lo bueno es que con los ingredientes que utilizamos para la


cobertura de la pizza, vamos acostumbrando a los más pequeños
a tomar más hortalizas y a que estas pueden ser parte de sus platos
favoritos, por lo que luego las tomarán también en otras
preparaciones. Y a los mayores, también nos viene muy bien tomar
más verduras, por supuesto.

Ingredientes
Para 3 personas

• Masa de pizza (200 g de harina de trigo, 3 g levadura fresca de panadería, 3 g


de sal, 20 ml de aceite de oliva virgen extra y 125 ml de agua)
• Bacon 150
• Berenjena 1
• Mozzarella fresca una bola
• Tomate triturado 2 cucharadas soperas
• Sal y pimienta al gusto
• Orégano seco al gusto
• Aceite de oliva virgen extra al gusto
Cómo hacer pizza de berenjenas
y bacon
Dificultad: Fácil

• Tiempo total 30 m
• Elaboración 15 m
• Cocción 15 m
Comenzamos preparando la masa de pizza casera, mezclando los
ingredientes y trabajarlos unos minutos. Después la dejamos
reposar 30 minutos en la nevera para después estirarla y formar la
base de nuestra pizza. Mientras reposa la masa, vamos pelando la
berenjena y cortándola en rodajas finas.

Extendemos la base de la pizza y damos a los bordes unos


pliegues para que tenga un aspecto rústico. Extendemos el tomate
con el dorso de una cuchara y vamos repartiendo
la mozzarella cortándola a pellizcos y distribuyéndola por toda la
pizza.

Colocamos los discos de berenjena dando la vuelta a la pizza y


rellenando el centro y rellenamos los huecos disponibles con el
bacon cortado en tiras. Una vez terminada, añadimos un pellizco de
sal, un poco de orégano y un hilo de aceite de oliva.

Horneamos a 230ºC en horno precalentado para que la base quede


bien crujiente y el relleno quede integrado al fundirse el queso y se
vayan dorando los demás ingredientes. Servimos inmediatamente
espolvoreando más orégano por encima.
Con que acompañar la pizza de
berenjenas y bacon
La pizza de berenjenas y bacon es una pizza muy peculiar cuyo
sabor sorprende y agrada a todos. La textura de las berenjenas
asadas es deliciosa y su sabor contrasta muy bien con el del bacon.
Para acompañarla, recomendamos un vino blanco bien frío y de
postre, una porción de tarta de zanahoria o carrot cake.
20. Los bocados enrollados de
pizza

Estos Bocados enrollados de pizza son estupendos para cuando


quieres una pizza para tomar a la hora del aperitivo porque se facilita
mucho su dosificación. En esta receta las hicimos con jamón y queso
pero se pueden hacer con otros ingredientes usando la misma
técnica.
Los invitados siempre agredecen un picoteo cuando vienen de visita,
y las ocasiones informales invitan más a mancharse un poco las
manos, a ser posible con algo cargado de queso y salsas para mojar.
Estos fáciles bocados enrollados de pizza pueden ser ideales para
una ocasión así, fáciles de preparar y que seguro gustarán a todo el
mundo.

Si empleamos una masa de pizza comprada, de las que venden


refrigeradas que sólo hace falta estirar, ahorraremos mucho tiempo,
pero siempre con una marca de calidad. Claro que si podemos,
siempre es mejor emplear una masa casera, procurando que quede
muy finita. El relleno se puede variar al gusto, aunque conviene no
sobrecargarlo para que sea más fácil enrollar y cortar cada bocado.
Ingredientes
Para 15 unidades

• Masa de pizza estirada fina1


• Salsa de tomate casera
• Jamón de York o cocido
• Queso Mozzarella o Emmental rallado
• Orégano seco
• Albahaca
• Pimienta negra molida

Cómo hacer bocados enrollados


de pizza
Dificultad: Fácil

• Tiempo total 30 m
• Elaboración 15 m
• Cocción 15 m
• Reposo 30 m
Precalentar el horno a 220ºC y preparar una bandeja. Cubrir la
superficie de trabajo con papel sulfurizado y espolvorear con un
poco de harina. Colocar encima la masa de pizza y estirar con ayuda
de un rodillo, procurando darle una forma rectangular y dejándola
lo más fina posible.

Cubrir toda la superficie, sin alcanzar los bordes, con salsa de


tomate. Distribuir encima unas lonchas de jamón York y cubrir con
mozzarella u otro queso rallado. Sazonar con orégano, albahaca y un
poco de pimienta negra. Con ayuda del papel de debajo, enrollar
comenzando por uno de los extremos más cortos. Refrigerar 30
minutos.

Cortar porciones con un buen cuchillo, de más o menos 1,5 cm de


grosor. Colocarlos en la bandeja y sazonar con un poco más de
orégano. Hornear durante unos 10-15 minutos, hasta que el queso
esté bien fundido y la masa dorada.
21. PIZZA FIESTA ITALIANA

Por lo bonitos que quedan los ingredientes formando la bandera


con sus colores ordenados, me encanta la receta de la Pizza Fiesta
italiana y os animo a probarla en cuanto tengáis ocasión. Se hace en
un momento con los tomates cherry y su sabor resulta inolvidable.
Cuando os presentábamos la app para móviles How to Pizza para ser
un auténtico maestro pizzaiolo, ya estábamos seguros de que
ibamos a sacar de ella buenas ideas para hornear. Entre otras, he
elegido la receta de la pizza Fiesta italiana, la receta más fácil de
pizza casera que nos llamó la atención desde el primer momento.

Esta pizza aparece entre las llamadas Pizza Party, una categoría que
incluye algunas recetas con gran presentación y un aspecto
delicioso. En la app se llama Pizza Italian Wow, pero la hemos
rebautizado como Pizza Fiesta italiana ya que su presentación
recuerda los colores de la bandera de Italia y es perfecta para una
fiesta de cumpleaños o cualquier otra reunión en la que preparemos
un menú basado en la pizza.
Ingredientes
Para personas

• Masa de pizza 1
• Tomate Cherry 10
• Pesto de albahaca (cucharadas soperas) 3
• Orégano seco al gusto
• Mozzarella fresca 1
• Salsa de tomate (cucharadas soperas) 4
• Aceite de oliva virgen extra un chorrito
• Sal al gusto

Cómo hacer pizza Fiesta italiana


Dificultad: Fácil

• Tiempo total30 m
• Elaboración15 m
• Cocción15 m
Lo primero, necesitamos una masa de pizza para usar como base.
Podemos utilizar una de las que vienen precocinadas o hacerla
nosotros mismos siguiendo nuestros consejos para que salga
perfecta. Una vez tenemos la masa, la extendemos dándole una
forma más o menos cuadrada.

Sobre la base extendemos 4 cucharadas de salsa de tomate frito


casero, que repartimos usando el dorso de la cuchara. Con un
rallador vamos echando virutas de queso mozzarella de búfala
campana sobre el tomate hasta cubrirlo por completo y después,
colocamos en la zona central una franja formada con trozos más
grandes que obtendremos dando pellizcos a la mozzarella.
La franja de la zona de la izquierda, la cubrimos con tres cucharadas
de pesto genovés, que elaboramos con albahaca fresca, ajo, queso
parmesano y piñones. Si nos sobra salsa pesto podemos utilizarla
para hacer salsa mayopesto o para preparar un plato de pasta. Por
último, la franja de la derecha que conforma el color rojo de la
bandera italiana, la realizaremos con los diez tomates cherry que
cortaremos por la mitad y colocaremos con las pepitas hacia arriba.

Espolvoreamos con sal, ponemos un hilo de aceite de oliva virgen


extra y la horneamos a 220º durante unos 10 minutos. Al
servir, ponemos un poco de orégano sobre la zona del pesto para
remarcar su color verde que habrá oscurecido y una flor de albahaca
en la zona central.

Con qué acompañar la pizza


fiesta italiana
Como casi todas las pizzas resulta excelente para una cena informal
o para compartir con amigos mientras se disfruta de un partido de
fútbol por televisión. La pizza Fiesta italiana es genial para estas
ocasiones porque los sabores cambian según del sector de donde se
corten las porciones, a diferencia de las que tienen un único sabor.
Puedes acompañarla con otros platos italianos como esta ensalada
de burrata o el original y refrescante carpaccio de ternera aliñado
con pesto y tendrás un menú redondo.
22. PIZZA DE CRIOLLO, CECINA
Y PIMIENTO

Mezclar el chorizo argentino con la cecina de León y los pimientos de


la Rioja en una pizza puede parecer una combinación
atrevida pero seguro que os convenceréis cuando probéis la Pizza
de criollo, cecina y pimiento de que es todo un acierto.

En casa nos encanta la pizza así que suelo elaborarla de ingredientes


variados o de temporada, o simplemente de los que se me ocurre o
hay en ese momento en la nevera. La pizza de criollo, cecina y
pimiento, justo con esta combinación, es fruto de la casualidad,
como otras veces, pero muy rica, así que os aconsejo que la probéis.

Es muy importante que el ingrediente principal de esta pizza, el


criollo, sea de buena calidad. Nosotros lo compramos en una
carnicería local de mi pueblo en la que los elaboran artesanalmente,
y ¡están buenísimos! Se nota la diferencia mucho de cuando no los
tengo y utilizo otros, así que intentad encontrar un buen producto.
Ingredientes
Para 1 unidades

• Harina de trigo (para la masa) 300 g


• Sémola de trigo (para la masa) 50 g
• Levadura fresca de panadería (para la masa) 5 g
• Azúcar (para la masa) 10 g
• Sal (para la masa) 5 g
• Aceite de oliva virgen extra (para la masa) 30 ml
• Agua (para la masa) 175 ml
• Chorizo criollo fresco 2
• Pimiento morrón en lata 1
• Cecina en lonchas 4
• Salsa de tomate
• Orégano seco
• Albahaca
• Queso Mozzarella

Cómo hacer pizza de criollo,


cecina y pimiento
Dificultad: Fácil

• Tiempo total 20 m
• Elaboración 15 m
• Cocción 5 m
• Reposo 1 h
Para elaborar la masa mezclamos primero la harina con la
semolina, el azúcar y la sal. Agregamos la levadura desmenuzada y
poco a poco el aceite de oliva virgen extra y el agua. No añadiremos
todo el agua en una sola vez, si no que iremos mezclando todo hasta
que veamos que no necesita más, todo dependerá de la absorción de
la harina.

La masa quedará blanda y elástica. Esta es una masa muy sencilla,


no hace falta apenas amasarla, así que no os preocupéis por dejarla
perfecta. Formamos una bola, la colocamos en un cuenco
ligeramente engrasado y la dejamos reposar tapada durante una
hora más o menos, o hasta que casi haya duplicado su volumen.

Pasamos a la mesa ligeramente enharinada y estiramos con el rodillo


muy fina en forma circular. Si vemos que se encoje, esperamos unos
minutos para que se relaje y volvemos a estirarla suavemente.
Calentamos el horno con calor solo abajo a máxima temperatura.
En mi caso para este programa alcanza los 275º.

Ahora tenemos dos opciones, o bien hornear sobre bandeja, papel


o piedra. Espolvoreamos la bandeja, en mi caso, con un poco de
harina y semolina, colocamos la base de pizza encima y cortamos el
borde sobrante. Pinchamos la masa con un tenedor para evitar que
suba.

Echamos un poco de salsa de tomate en la base, un poco de albahaca


y por encima esparcimos la carne del criollo sin piel y
desmenuzada, y la cecina y el pimiento troceados. Agregamos la
mozarella en trozos y espolvoreamos con un poco de orégano.
Horneamos en el nivel 1, o sea, abajo del todo en el horno, hasta que
la base esté ligeramente dorada.

En mi horno a esta temperatura de 275º se hace muy rápido, en


unos cinco minutos más o menos, así que estad atentos para no
quemarla. Sacamos del horno, troceamos y consumimos
inmediatamente.

Con qué acompañar la pizza de


criollo, cecina y pimiento
La pizza de criollo, cecina y pimiento no va a ser una excepción, y
hay que tomarla en cuanto sale del horno. En este caso se podría
acompañar, dados los ingredientes, de vino blanco, por ejemplo.
23. PIZZA AL PESTO ROJO CON
ESPÁRRAGOS Y SALAMI

¿Se os ocurre una mezcla mejor? Espárragos trigueros, pesto rojo de


tomates secos y un buen salami italiano con su sabor potente, hacen
que esta Pizza al pesto rojo con espárragos y salami sea una de las
más sabrosas que habéis probado jamás. Haced la prueba y os
llevaréis una alegría.

Ya os lo dije cuando hicimos la receta de macarrones sicilianos al


pesto rojo: No os importe hacer una mayor cantidad de salsa pesto
porque luego le daremos mucha utilidad en otras recetas. Tal ha sido
el caso de esta deliciosa pizza de pesto rojo, espárragos y
salami que hoy os traigo.

Una sencilla receta que puede veniros bien para una cena familiar, o
para una reunión de amigos junto al televisor mientras disfrutáis
de un partido de fútbol o una buena película. Con este tipo de recetas
rápidas y fáciles de preparar, no tendréis que recurrir a la comida
preparada o de entrega a domicilio y os aseguro que os gustará
muchísimo más.
Ingredientes
Para 6 personas

• Masa para pizza 1 refrigerada o una masa casera


• Pesto rosso 3 cucharadas
• Tomate frito casero 2 cucharadas
• Mozzarella fresca 1 bola
• Champiñones6
• Espárragos trigueros8
• Salami 8 lonchas
• Aceite de oliva virgen extra al gusto
• Orégano seco al gusto
• Pesto rosso Para hacerlo necesitamos 12 tomates secos, 1 manojo de
albahaca, 60 gr de piñones, 2 dientes de ajo, 60 gr de queso parmesano, 75 ml
de aceite de oliva virgen extra, un pellizco de sal

Cómo hacer pizza al pesto rojo


con espárragos y salami
Dificultad: Fácil

• Tiempo total 25 m
• Elaboración 15 m
• Cocción 10 m
Para hacer el pesto trituramos todos los ingredientes con la batidora
tras rehidratar los tomates secos añadiendo el aceite necesario
hasta obtener una textura similar al tomate frito espeso. A
continuación prepararemos la base o masa de la pizza casera o
sacamos de la nevera una base de pizza refrigerada.

A mí me gustan las pizzas rectangulares más fáciles de repartir. Una


vez la masa está bien fina, la colocamos sobre la bandeja del
horno que habremos forrado con papel de hornear o con una
lámina de silicona o silpat.

Colocamos 3 cucharadas de pesto rojo y 2 de tomate frito en un bol,


lo batimos bien con un tenedor, y con esa mezcla cubrimos la base
de la pizza. Seguidamente, vamos pellizcando la bola de queso y
colocando pequeños trocitos de mozzarella bien distribuidos por
toda la superficie.

Mientras se precalienta el horno a 220ºC, ponemos los espárragos de


forma que sean como radios que dividan la pizza en porciones
imaginarias y rellenamos los huecos con láminas de champiñón y
trozos de salami. Un chorreón de aceite de oliva virgen extra y
un pellizco de orégano espolvoreado por encima y la tendremos
lista para meter en el horno.

Tras unos 15 minutos de cocción en la zona central, estará lista para


servir. Recordad que la temperatura y tiempo de cocción no son
iguales en todas las casas, dependiendo del horno que tenga cada
uno pero vigilando un poco os quedará estupendamente.
24. PIZZA DE QUESO DE CABRA,
TOMATES CHERRY Y PISTO

La Pizza de queso de cabra, tomates cherry y pisto sustituye la


clásica passata de la base o tomate triturado por nuestro pisto
tradicional y la mozzarella por queso de cabra. ¿Cómo crees que
estará el resultado?
Hay veces que me encanta hacer pequeñas variaciones en recetas
clásicas para probar qué pasa. Cuando el experimento sale bien y mi
familia queda contenta, entonces lo reproduzco para contároslo y
animaros a probarlo. Ese ha sido el caso de esta pizza de queso de
cabra, tomates cherry y pisto que ha sido todo un éxito.

Podéis hacer cualquier variación sobre ella pero os recomiendo


probarla así. Cambiar el tomate de la base por pisto ha sido todo un
descubrimiento y la mezcla de queso de cabra y mozzarella ha
funcionado muy bien. Esta vez no he añadido jamón, ni setas o
champis, y realmente no ha hecho falta. Hacedme caso.
Ingredientes
Para 4 personas

• Masa de pizza 1
• Mozzarella fresca una bola 200 g
• Pisto o sanfaina dos o tres cucharadas soperas
• Tomate cherry 10 ó 12 cortados por la mitad
• Queso de cabra 100 g
• Aceite de oliva virgen extra un chorrito
• Orégano seco al gusto

Cómo hacer pizza de queso de


cabra, tomates cherry y pisto
Dificultad: Fácil

• Tiempo total 15 m
• Elaboración 5 m
• Cocción 10 m
En esta ocasión he utilizado una base de pizza refrigerada pero si
queréis, podéis hacer vuestra propia masa de pizza sobre la base de
la receta en vídeo que preparó mi compañero Minue para hacerla
casera de verdad. Una vez tengamos la masa, la estiramos sobre la
piedra de hornear o sobre un papel sulfurizado que pondremos en la
bandeja de horno. Yo he usado un molde para hacer pizzas que me
resulta muy práctico pues tiene unos agujeros en la parte inferior y
deja las pizzas con la base muy crujiente.

Precalentamos el horno a 220ºC. Extendemos tres cucharadas


soperas de pisto casero hecho con tomate, pimiento y cebolla, en
lugar de extender una capa clásica de salsa de tomate para variar un
poco sobre las pizzas habituales como cuando hicimos la pizza fiesta
italiana. Una vez extendido, vamos distribuyendo la mozzarella de
búfala dándole pellizcos a la bola de queso y repartiéndolos por toda
la superficie de la pizza.

Colocamos los tomates cherry cortados por la mitad bien


distribuidos tapando los agujeros que veamos libres. Seguimos con
el queso de cabra que cortaremos en rodajas que luego partiremos
en cuartos y las colocaremos en el espacio que haya disponible de
forma que los ingredientes de la pizza queden bien repartidos.

Echamos un hilito de aceite de oliva virgen extra formando una


espiral, espolvoreamos con pimienta negra y con unas hojitas de
orégano y horneamos durante unos 15 minutos con el horno a tope,
hasta que los bordes de nuestra pista están dorados y el queso
burbujee. Servimos bien caliente.
25. PIZZA CARBONARA

Probablemente, la pizza carbonara es la receta más sencilla para


hacer en el horno de tu casa y compartirla con amigos o familia en
esas noches de peli y pizza o cuando nos reunimos unos cuantos
para ver juntos los encuentros deportivos en una cena en grupo.
Probablemente, la pizza carbonara es la receta más sencilla para
hacer en el horno de tu casa y compartirla con amigos o familia en
esas noches de peli y pizza o cuando nos reunimos unos cuantos
para ver juntos los encuentros deportivos en una cena en grupo.

Son ocasiones en las que no buscamos tanto ofrecer a nuestros


invitados platos muy gastronómicos sino que queremos recetas
sencillas, fáciles y rápidas que sean cómodas para
repartir cuando tenemos la atención en el evento por el que nos
hemos reunido. En estas reuniones, la pizza carbonara resulta ideal.

Ingredientes
Para 4 personas

• Masa de pizza casera o refrigerada


• Nata líquida para cocinar 100 ml
• Bacon 200 g
• Queso Mozzarella 1 bola
• Sal una pizca para el bacon
• Champiñones laminados 4
• Pimienta negra molida al gusto
• Queso rallado para pizza (variado) 100 g

Cómo hacer Pizza carbonara


Dificultad: Fácil

• Tiempo total 30 m
• Elaboración 15 m
• Cocción 15 m

La receta de la carbonara que vamos a usar para hacer la pizza no es


la de la receta de la salsa carbonara auténtica, la que se hace sin
nata, sino la que se suele utilizar en las recetas de pizza carbonara de
la mayoría de cadenas de restaurantes y empresas de pizza a
domicilio, es decir la que se elabora con bacon, nata, champiñones
y queso.

Comenzamos preparando la masa de pizza, -podéis usar una


refrigerada si vais con prisa- o amasar la nuestra siguiendo las
indicaciones que os dimos para que no cometáis ningún error al
hacer pizza casera. Para hacer la salsa carbonara, comenzamos
cortando el bacon en tiras muy finas y las salteamos en una sartén
hasta que comiencen a soltar su grasa. Las reservamos que ya se
terminarán de cocinar en el horno. En la grasa que hayan soltado,
salteamos los champiñones laminados vuelta y vuelta,
reservándolos también.
Después añadimos la nata líquida y 50 g de queso rallado en hilos -
cualquier mezcla que nos guste- y la reducimos hasta que empiece a
fundirse el queso. Extendemos la masa o base de la pizza,
ponemos tres o cuatro cucharadas sopera de la salsa de nata y
queso sobre ella y la extendemos bien con el dorso de una cuchara.
Después añadimos la mozzarella desmigada en trocitos, los taquitos
de bacon y champiñones y el resto del queso rallado en hilos.

Añadimos un poco más de la salsa carbonara que hemos elaborado,


-repartiéndolos por toda la superficie de la pizza-, espolvoreamos
con abundante pimienta negra y la horneamos en horno a 230º
durante unos 15 minutos hasta que los bordes de la pizza comiencen
a tostarse.

Con qué acompañar la pizza


carbonara
Para acompañar la pizza carbonara, dada su carga calórica y el
efecto saciante, os recomendamos si acaso comenzar con
un aperitivo ligero y finalizar con un postre muy suave como las
rosas de manzana al horno, que no llevan azúcar. Seguro que todos
quedaréis encantados con este menú para esas noches de peli-
pizza o en las que nos reunimos para animar a nuestro equipo de
fútbol preferido.
26.PIZZA DE SETAS DE CARDO
Y JAMÓN

La Pizza de setas de cardo y jamón es la preferida de mis sobrinas.


Setas tiernas sin sabor fuerte y un buen jamón y no necesitan más
para ser felices. Prueba esta sencilla combinación que queda jugosa
y sabrosa y seguro que te volverás un convencido de la receta.
En casa nos encanta la pizza por eso precisamente no suelo hacerla
mucho ya que de otro modo sería una perdición total para la dieta.
Podemos comernos una pizza crujiente de setas de cardo y
jamón como esta en un abrir y cerrar de ojos.

Con esto no quiero echaros para atrás, al revés, quiero decir que está
buenísima, y si además os gustan las bases finas y crujientes, haced
mi receta porque os encantará. El que la prueba no cambia, así que
no os digo más.
Ingredientes
Para 1 unidades

• Harina de trigo 300 g


• Sémola de trigo 50 g
• Levadura fresca de panadería 5 g
• Azúcar 10 g
• Sal 5 g
• Aceite de oliva virgen extra 30 ml
• Agua 175 ml
• Setas de cardo limpias 100 g
• Jamón serrano 100 g
• Mozzarella fresca 1
• Albahaca
• Orégano seco
• Salsa de tomate

Cómo hacer pizza crujiente de


setas de cardo y jamón
Dificultad: Fácil

• Tiempo total 40 m
• Elaboración 30 m
• Cocción 10 m
• Reposo 1 h
Para elaborar la masa mezclamos primero la harina con la semolina,
el azúcar y la sal. Agregamos la levadura desmenuzada y poco a poco
el aceite de oliva virgen extra y el agua. No añadiremos todo el agua
en una sola vez, si no que iremos mezclando todo hasta que veamos
que no necesita más, todo dependerá de la absorción de la harina.
La masa quedará blanda y elástica. Esta es una masa muy sencilla,
no hace falta apenas amasarla, así que no os preocupéis por dejarla
perfecta. Formamos una bola, la colocamos en un cuenco
ligeramente engrasado y la dejamos reposar tapada durante una
hora más o menos, o hasta que casi haya duplicado su volumen.

Pasamos a la mesa ligeramente enharinada y estiramos con el


rodillo muy fina en forma circular. Si vemos que se encoje,
esperaremos unos minutos para que se relaje y volvemos a estirarla
suavemente. Calentamos el horno con calor solo abajo a máxima
temperatura. En mi caso para este programa alcanza los 275º.

Ahora tenemos dos opciones, o bien hornear sobre bandeja o sobre


papel o piedra, lo dejo a vuestra elección. Espolvoreamos la bandeja,
en mi caso, con un poco de harina y semolina, colocamos la base de
pizza encima y cortamos el borde sobrante. Pinchamos la masa con
un tenedor para evitar que suba.

Echamos n poco de salsa de tomate en la base, un poco de albahaca


y por encima esparcimos láminas finas de seta de cardo y el jamón
troceado. Agregamos la mozzarella en trozos y espolvoreamos con
un poco de orégano. Horneamos en el nivel 1, o sea, abajo del todo,
hasta que la base esté ligeramente dorada.

En mi horno a esta temperatura de 275º se hace muy rápido, en


unos cinco minutos más o menos, así que estad atentos para no
quemarla. Sacamos del horno, troceamos y consumimos
inmediatamente.
Con qué acompañar la pizza
crujiente de setas de cardo y
jamón
La pizza crujiente de setas de cardo y jamón es un clásico en
nuestra casa, y una combinación que a muy poca gente no gusta. No
tengáis miedo a probar con diferentes variaciones de setas ahora
que empieza la temporada y algunas están a buen precio.
27. PIZZA DE PISTO DE
VERDURAS Y JAMÓN SERRANO

La Pizza de pisto de verduras y jamón serrano podría ser la más


española de todas las pizzas ya que sus dos ingredientes principales
son pura marca España. Si añadimos un poco de queso manchego,
ya la podemos llevar a patentar.
Muchos ya sabéis que soy manchego de origen, aunque vivo en
Mallorca. Así que, el pisto forma parte de mi cocina de cada día.
Normalmente en casa lo solemos comer con pan y alguna carne o un
huevo frito pero esta vez se me ocurrió que la pizza de pisto de
verduras y jamón serrano podía ser una forma distinta de comerlo.

El pisto manchego, en principio, sólo tiene como ingredientes


pimiento y tomate. Por eso, la receta dice pisto de verduras que
también es bastante popular en mi tierra. Lo cierto es que, ese pisto
de verduras admite bastantes variantes, yo os traigo la que yo hago.
Ingredientes
Para 2 unidades

• Agua templada (para la masa) 200 g


• Aceite de oliva virgen extra (para la masa) 50 g
• Sal una cucharadita (para la masa)
• Levadura prensada (para la masa) 20 g
• Harina de fuerza (para la masa) 400 g
• Calabacín 300 g
• Pimiento rojo 150 g
• Pimiento verde 150 g
• Cebolla 300 g
• Aceite de oliva virgen extra 100 g
• Tomates en conserva natural triturado 500 g
• Sal
• Pimienta negra molida
• Jamón serrano en tacos
• Queso rallado tipo mozzarella o emmental

Cómo hacer pizza de pisto de


verduras y jamón serrano
Dificultad: Media

• Tiempo total 1 h 20 m
• Elaboración 1 h
• Cocción 20 m
Lo primero que vamos a hacer es la masa de pizza. Para ello,
ponemos en el vaso el agua, el aceite y la sal. Programamos 1
minuto, 37º y velocidad 4. Después añadimos la levadura y
mezclamos 10 segundos, velocidad 4. A continuación, agregamos la
harina de fuerza y programamos 5 minutos a velocidad 5 y, por
último, amasamos 1 minuto, velocidad espiga.

Retirar la masa del vaso de la Thermomix y la ponemos en un bol. Se


tiene que tapar para que fermente hasta duplicar su volumen. El
tiempo de levado dependerá de las condiciones ambientales,
normalmente son unos 30 minutos.

Mientras la masa fermenta, vamos preparando el pisto. Se lavan las


verduras y se trocean programando 4 segundos, velocidad 4.
Luego añadimos el aceite de oliva. Programamos 15 minutos,
temperatura varoma, giro a la izquierda y velocidad cuchara.
Después, agregamos el tomate, la sal y la pimienta, y programamos
20 minutos más con los mismos parámetros que antes.

Precalentamos el horno a 220º C. Sacamos la masa del bol,


desgasificamos con el puño y dividimos en dos partes iguales.
Estiramos cada una de ellas, dándole forma redondeada. Una vez
hecho esto, aplicamos el pisto por encima. Luego los taquitos de
jamón y después espolvoreamos el queso rallado (mozzarella o
emmental). Horneamos unos 20 minutos bajando la temperatura a
200 ºC.

Con qué acompañar la pizza de


pisto de verduras y jamón
serrano
Para degustar la pizza de pisto de verduras y jamón
serrano deberás esperar a que se enfríe ligeramente. Con una
ensalada tendréis una cena perfecta. Además, es una manera ideal
de hacer que los niños coman verduras, camufladas en forma de
pizza. Espero que os guste tanto como nos gustó a nosotros.
28. PIZZA VERDE

En esta pizza verde la combinación de verduras a utilizar es opcional.


Nosotros hemos utilizado brócoli y calabacín, pero espárragos
trigueros, guisantes, habas, espicanas o cualquier otra verdura verde
le van de maravilla.
Aunque las pizzas nos gustan, y las preparamos, durante todo el año,
parece que es en esta época cuando más nos apetece comerlas. Por
eso seguimos innovando y aportando ideas y combinaciones de
ingredientes que nos ayuden a no caer en la rutina. Hoy hemos
querido aligerar este popular bocado con una pizza verde que es,
como todas sus hermanas, muy sencilla y rápida de preparar.

La combinación de verduras a utilizar es opcional. Nosotros hemos


utilizado brócoli y calabacín, pero espárragos trigueros, guisantes,
habas, espicanas o cualquier otra verdura verde le van de maravilla.
Para que nuestra pizza verde sea lo más ligera posible
recomendamos no excederse con los quesos, pero esto puede
resultar complicado para sus fieles amantes. ¿Podréis controlaros?

Ingredientes
Para 3 personas

• Agua 200 ml
• Aceite de oliva virgen extra 50 g
• Levadura prensada a temperatura ambiente 20 g
• Harina de fuerza 380 g
• Sémola de trigo 20 g
• Sal
• Pesto de albahaca 30 g
• Brócoli
• Calabacín
• Queso azul 30 g
• Queso Mozzarella 30 g
• Orégano fresco

Cómo hacer pizza verde


Dificultad: Media

• Tiempo total 23 m
• Elaboración 15 m
• Cocción 8 m
Para preparar la masa en Thermomix, vertemos el agua y el aceite
en el vaso y programamos 1 minuto, 37º a velocidad 4. Añadimos la
levadura prensada, mezclamos 5 segundos a velocidad 4. A
continuación introducimos la harina, la sémola y un pellizco de sal
(una cucharadita rasa) y programamos 1 minuto, vaso cerrado a
velocidad espiga.

Para preparar la masa de forma tradicional, calentamos el agua en


el microondas durante 30 segundos, añadimos la levadura prensada
desmenuzada y dejamos reposar un par de minutos. Colocamos la
harina sobre la encimera, hacemos un hueco en el centro y añadimos
la mezcla anterior y el aceite. Removemos los líquidos al tiempo que
vamos incorporando la harina del exterior. Antes de añadir toda la
harina a la mezcla, incorporamos la sal. Continuamos amasando
durante un minuto o hasta obtener una masa homogénea.

Podemos dejar levar la masa en un recipiente espolvoreado con


harina y cubierto con un trapo limpio durante media hora, pero esto
es opcional. Dividimos la masa en tres y extendemos cada una de
ellas sobre la bandeja de horno forrada con papel sulfurizado o
espolvoreada de harina. Cubrimos la base con el pesto de albahaca
y repartimos pequeños trozos de brócoli, dados de calabacín y queso
mozzarella por la superficie.

Regamos con un chorrito de aceite de oliva virgen extra (opcional),


salpimentamos y cocemos sobre la base del horno, precalentado a
300ºC, durante ocho minutos o hasta que la base esté cocina a
nuestro gusto. Retiramos del honor y repartimos el queso azul y el
orégano fresco por la superficie en el momento de servir.
Con qué acompañar la pizza
verde
Por lo general recomendamos acompañar nuestras pizzas con
ensaladas de hojas verdes y hoy, a pesar de lo redundante que pueda
quedar, hacemos lo mismo. Esta pizza verde se va a ver muy bien
equilibrada si la acompañamos de una ensalada, ya sea de hojas
verdes, de tomate o la que más nos guste. Sin olvidar una cerveza
fresca, claro.
29. PIZZA DE SALAMI,
PEPPERONI E FUNGHI

La pizza de salami, peperoni e funghi hecha con embutido italiano


picante y champiñones es mi receta preferida de pizza. Desde que
encontré este pepperoni en el supermercado de mi barrio, soy un
adicto a su suave picante lleno de sabor.
El otro día, vi que vendían en el supermercado chorizo pepperoni
loncheado y fue tal mi sorpresa y mi alegría que lo compré
inmediatamente y decidí utilizarlo para hacer algunas recetas con él.
Hoy os traigo una receta de pizza pepperoni e funghi, ideal para
una cena en pareja que es una de mis favoritas cuando salgo a
comer a una pizzería, y que por fin voy a poder hacer en casa, ya que
hasta ahora, no había visto este embutido en mi supermercado.

El resultado es una pizza sabrosa, llena de sabor, con el toque


picante del pepperoni y el sabor intenso de los hongos. Está tan
rica que os darán ganas de engañar a vuestra pareja con este truco
para repartir la pizza y quitarle una porción sin que se dé ni cuenta.

Ingredientes
Para 2 personas

• Masa para pizza refrigerada o casera


• Queso Mozzarella 1 bola
• Salsa de tomate 3 cucharadas soperas
• Chorizo pepperoni (picante) 12 rodajas
• Boletus 12 trozos (pueden ser congelados o deshidratados)
• Aceite de oliva virgen extra al gusto
• Orégano seco al gusto

Cómo hacer pizza de pepperoni


e funghi
Dificultad: Fácil

• Tiempo total 20 m
• Elaboración 10 m
• Cocción 10 m
• Reposo 30 m
Para hacer la masa de pizza casera, mezclamos 200 g de harina de
trigo, 3 g levadura fresca de panadería, 3 g de sal, 20 ml de aceite de
oliva virgen extra y 125 ml de agua y los amasamos durante unos
cinco minutos hasta poder formar una bola. Después, ponemos la
masa en un bol, la tapamos con film de cocina y la dejamos
reposar 30 minutos en los que aumentará de tamaño. Mientras
preparamos el horno precalentandolo a 225º. Aquí podéis ver en
detalle todo el proceso. Si lo preferís, podéis también utilizar masa
para pizza preparada que encontraréis en vuestro supermercado
fresca en la zona de refrigerados o también congelada aunque los
resultados no son los mismos obviamente.

Una vez lista la masa de pizza, la estiramos con un rodillo sobre la


encimera enharinada y la ponemos sobre la bandeja de horno con un
papel de hornear o sobre una fuente para hornear pizzas un
cacharro muy práctico si os gusta hacer pizzas caseras.

Extendemos el tomate sobre la pizza con el dorso de una cuchara y


repartimos el queso dando pellizcos a la mozzarella hasta que
tengamos bien cubierta la pizza. Disponemos a continuación los
trozos de pepperoni y preparamos los hongos, dándoles
un pequeño salteado en la sartén para que no humedezcan
demasiado la pizza.

Añadimos un hilo de aceite de oliva y espolvoreamos con un poco de


orégano. Horneamos a 225º en el horno con calor arriba y abajo,
poniendo la pizza en la zona central del horno. Sabremos que la pizza
está lista cuando los bordes -que hemos doblado un poco sobre sí
mismos- estén bien dorados como veis en las imágenes.
Con qué acompañar la pizza de
pepperoni e funghi
Si os gusta el sabor picante del pepperoni, un embutido italiano
similar al chorizo pero más tierno, os va a encantar esta receta de
pizza pepperoni e funghi. Si encontráis en vuestro supermercado
este fantástico ingrediente, vuestros platos de pasta y de pizza van a
alcanzar otra dimensión. Con un rico aperitivo previo, una de estas
pizzas para dos y una buena película en la tele, no necesitáis más
para un estupendo plan en pareja.
30. PIZZA CASERA DE POLLO
CON SALSA BARBACOA

Sustituyendo el clásico tomate de la base de la pizza por un poco


de salsa barbacoa, podemos meter una tremenda inyección de
sabor a la receta de pizza de pollo con champiñones clásica.
Esta Pizza casera de pollo con salsa barbacoa y champiñones es la
que hago para cuando vienen amigos a casa a ver un partido en la
tele.
Me encantan las pizzas caseras, y en especial las que hago con la base
muy fina y crujiente. Tal ha sido el caso de esta pizza casera de pollo
con salsa barbacoa y champiñones, en la que además la
combinación de sabores resultó deliciosa.

Cualquier parecido entre una pizza casera hecha por nosotros


mismos, y la que nos pueden traer a casa si hacemos un pedido, es
pura coincidencia. En serio, os recomiendo preparar esta receta, que
además, estaba lista prácticamente el mismo tiempo que lo que
habría tardado un motorista en traerla a casa.

Con ingredientes de los que todos tenemos en la nevera y un poco


de paciencia, podéis preparar una cena estupenda sin
complicaciones con nuestra receta de pizza casera de pollo y salsa
barbacoa con champiñones.
Con ingredientes de los que todos tenemos en la nevera y un poco
de paciencia, podéis preparar una cena estupenda sin
complicaciones con nuestra receta de pizza casera de pollo y salsa
barbacoa con champiñones.

Ingredientes
Para 3 personas

• Harina de fuerza para la base o masa de pizza 250 g


• Agua para la base o masa de pizza 125 g
• Sal una pizca para la base o masa de pizza
• Levadura seca de panadería para la base o masa de pizza 3 g
• Aceite de oliva virgen extra para la base o masa de pizza 15 ml
• Salsa de tomate para extender en la base
• Pechuga de pollo (filetes) 3
• Salsa Barbacoa al gusto
• Cebolla 1
• Mozzarella fresca una bola
• Champiñones laminados, 50 g

Cómo hacer pizza casera de


pollo a la barbacoa con
champiñones
Dificultad: Media

• Tiempo total 30 m
• Elaboración 20 m
• Cocción 10 m
• Reposo 2 h
Comenzamos con la masa, mezclando los ingredientes durante unos
5 minutos hasta formar una bola. Dejamos reposar hasta que la bola
doble su tamaño, y después, la estiramos sobre la encimera,
procurando que quede bien fina. Los últimos estirones se los damos
ya sobre la bandeja del horno cubierta con un papel de hornear o
un silpat.

Mientras la masa reposa unas dos horas, hacemos la única operación


previa que requiere nuestra pizza, que es preparar el pollo con salsa
barbacoa. Cortamos la pechuga en trozos pequeños de bocado, y
los freímos ligeramente en una sartén. Añadimos una cucharada de
salsa barbacoa y removemos para que todos los trozos se
impregnen. No cocinamos del todo los trozos de pechuga, porque se
terminarán de hacer en el horno.

Precalentamos el horno a 220ºC y repartimos la bola de mozzarella


que habremos troceado debidamente. Disponemos también de
forma equitativa la cebolla cortada en juliana y vamos repartiendo
los trozos de pollo con salsa barbacoa por la superficie de la pizza.
Rematamos colocando los champiñones laminados, de forma
que toda la superficie de la pizza quede cubierta por uno u otro
ingrediente, y lo horneamos durante unos 12 minutos hasta que
veamos bien crujiente y dorada la masa. Servimos inmediatamente

Con qué acompañar la pizza


casera de pollo y salsa barbacoa
La pizza casera de pollo con salsa barbacoa y champiñones es una
deliciosa combinación de ingredientes en la que la potencia de la
salsa BBQ se nota en cada bocado, pero no satura ni empalaga, por
estar compensada con la suavidad de la mozzarella y el sabor de los
champiñones. Con tales ingredientes, gustará a grandes y pequeños,
podéis estar seguros.
31. PIZZA CUATRO ESTACIONES

Una de las variedades de pizza más clásicas en toda pizzería es


la pizza quattro stagioni o pizza cuatro estaciones, una receta
tradicional italiana con base de tomate y queso mozzarella, que se
monta distinguiendo las cuatro partes, en lugar de distribuir todos
los ingredientes repartidos por la pizza. Así en cada uno de las cuatro
porciones, encontramos los ingredientes que se corresponden con
una estación del año.
Una de las variedades de pizza más clásicas en toda pizzería es
la pizza quattro stagioni o pizza cuatro estaciones, una receta
tradicional italiana en la que se incluye una variedad de ingredientes.
Por si no sabéis exactamente cómo prepararla, hoy os enseñamos
la receta de la pizza cuatro estaciones: qué lleva, cómo se hace y
por qué se llama así.

Es una pizza sencilla, con base de tomate y queso mozzarella, que se


monta distinguiendo las cuatro partes, en lugar de distribuir todos
los ingredientes repartidos por la pizza. Así en cada uno de las
cuatro porciones, encontramos los ingredientes que se
corresponden con una estación del año.

La Pizza quattro stagioni se prepara habitualmente con corazones de


alcachofas, tomate, albahaca, champiñones y jamón o salami y
aceitunas negras deshuesadas. Al distribuir los ingredientes, las
alcachofas representarán la primavera, los tomates y la albahaca
el verano, los champiñones portobello el otoño y el jamón o el
salami y las aceitunas, el invierno.

No obstante esta colocación de los ingredientes indicados en las


cuatro secciones de la pizza, cabe utilizar otros productos o usar la
pizza para dar salida a otros ingredientes de la despensa o la
nevera.

Ingredientes
Para 4 personas

• Masa de pizza
• Alcachofa en conserva (corazones) 4
• Aceitunas negras 4
• Salami (rodajas o lonchas) 4
• Champiñones Portobello laminados 4
• Albahaca (hojas) 6
• Mozzarella fresca 1 bola
• Salsa de tomate cucharadas 3
• Orégano seco al gusto

Cómo hacer pizza cuatro


estaciones tradicional
Dificultad: Fácil

• Tiempo total 20 m
• Elaboración 10 m
• Cocción 10 m
Preparamos nuestra masa o base de pizza con estos consejos en
vídeo, para que salga perfecta, o bien utilizamos una base de pizza
comercial refrigerada si tenemos prisa.

Preparamos los ingredientes que vamos a utilizar, laminando los


champiñones y las aceitunas negras, cortando las rodajas del
salami en cuartos y partiendo los corazones de alcachofas en
conserva en mitades o cuartos dependiendo de su tamaño. Mejor es
elegir corazones pequeños, más jugosos.

Distribuimos en la base de pizza la salsa de tomate, la mozzarella


cortada "a pellizcos" y colocamos con cuidado los ingredientes en
los cuatro cuartos de la pizza, respetando el ingrediente de cada
estación, como veis en las imágenes.

Horneamos la pizza cuatro estaciones a 230º en el horno


precalentado, dejando que se cocine hasta que los bordes empiecen
a tostarse e inflarse, indicando que la masa ya está cocida y crujiente.
Espolvoreamos con orégano seco y llevamos a la mesa.
Con qué acompañar la pizza
cuatro estaciones tradicional
Las pizzas son estupendas a la hora de la cena ya que si las tomamos
compartidas no resultan pesadas. Para completar, os
recomendamos acompañar la pizza cuatro estaciones tradicional
con un postre ligero de naranja, chocolate y pistachos, suficiente
para sentirnos bien saciados.

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