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EDUCAR EN TIEMPOS CRÍTICOS

Eje 2: Bimodalidad, una pedagogía de creación permanente.

ACTIVIDAD:

Escriba un relato de su experiencia en pandemia, donde describa su forma de trabajo y


recursos utilizados. En caso de no haber estado en actividad, releve el de algún/a colega.

Sin dudas el mes de marzo de 2.020 quedará marcado en la memoria de todos y todas, como el mes en
el que se inició el aislamiento social preventivo y obligatorio que se llevó a cabo en el país como
consecuencia de la crisis sanitaria internacional que desencadenó la aparición el virus COVID-19.
Este hecho conocido como pandemia, ocasionada por la aparición de un nuevo coronavirus obligó a
los y las docentes de todo el país (de la noche a la mañana) a sostener y garantizar la educación de miles
de niños y niñas con distintos contextos y realidades. Frente a este panorama, los programas impuestos,
las directivas y las propuestas que se vinieron imponiendo, podemos decir que de alguna manera se
dislocaron. Y frente a la imposibilidad de la educación presencial, cara a cara, fueron los y las docentes de
todo el país quienes tomaron rápidamente cartas en el asunto, y con los mismos desafíos, aunque no con
las mismas posibilidades.
Las instituciones educativas se vieron las caras frente a frente con al uso de herramientas tecnológicas
para crear ambientes de aprendizaje virtual. Improvisados en muchos casos, y llevándonos a replantearse
el modo y la forma en que la escuela puede y tiene que educar en tiempos de crisis.
El modo de enseñanza tradicional se vio, en muchos casos, pausado para dar lugar al uso de nuevas
plataformas digitales y así poder seguir desarrollado los contenidos pedagógicos planteados al inicio del
ciclo lectivo 2.020. La enseñanza se volvió virtual al igual que sus clases, llevando la educación a un nuevo
enfoque. La escuela digital.
Miles de docentes tuvimos que enfrentarnos a desafíos totalmente nuevos, apelando a la
experimentación y originalidad de cada de uno de nosotros. Recurriendo en varios casos al
«ensayo y error». Sobre todo, el armado de las actividades y el uso de plataformas digitales.
El uso de mails y grupo de WhatsApp se hicieron necesarios y más cotidianos posibilitando, en muchos
casos, el contacto con los alumnos y familias.
Comenzaron a circular videollamadas mediante distintas plataformas y celulares que volvieron a
encontrar a profesores, alumnos y alumnas.
Esta nueva cercanía permitió ese «contacto» cálido-humano tan necesario en el aprendizaje como aquel
que se daba todos los días en el aula. Pero, como contrapartida, se fueron vislumbrando muchas
cuestiones como las debilidades materiales de la enseñanza online. El límite elemental es que muchos de
nuestros alumnos no tienen ni la más mínima posibilidad de acceder a una computadora o celular de
calidad y sobre todo a internet.

DOCENTE: MACHADO, ISABEL NOEMI


Siendo factor fundamental el acceso tecnológico e informático de todos los alumnos y alumnas.
Quienes no poseen dispositivos tecnológicos y conectividad quedarán al margen de esta educación
virtual. En este marco los y las docentes nos topamos con algunas preguntas en este nuevo desafío que
trajo la enseñanza virtual, educación a distancia.
Surgieron las siguientes preguntas:
➽ ¿Cómo enseñamos a distancia?
➽ ¿Cómo generamos nuevas propuestas para incentivar a los alumnos y alumnas?
➽ ¿Cómo hacemos para que nadie quede en el camino?

Algunos aportes que planteamos para esta nueva problemática fueron:


 Reinventar las clases.
 Ser creativos, originales, utilizando las tendencias del momento.
 Reconocer que esos objetos culturales nos interesan, nos atrapan y podemos empezar a trabajar
con eso en clase para ver hasta dónde llegamos.
 Generando nuevas situaciones de enseñanzas para captar la atención del alumno y la alumna.
Motivarlos, incentivarlos es parte, también, de esta nueva forma de enseñanza.
 Realizar devoluciones de los trabajos de los alumnos y alumnas mediante una llamada de WhatsApp
o un video para dar sentido a lo que hicieron y motivarlos para las futuras actividades y hacer todo
lo posible para que la información y las actividades le lleguen a todos los niños y niñas.
 Fomentar solidaridad entre las familias para que ningún chico/chica se quede sin acceso a las
actividades que se van planteando.
 Buscar alternativas para aquellas familias que no tienen acceso a internet y por lo tanto no pueden
acceder o realizar las actividades. En muchos de estos casos se puede plantear que, junto con la
entrega del bolsón alimentario, se entregue a las familias un cuadernillo con actividades.
 Realizar un seguimiento de los alumnos y las alumnas. Sobre todo, de aquellos que presentan
dificultades a la hora de entregar el material para su corrección.
Esto no fue fácil, los docentes tuvimos que aprender nuevas estrategias, recursos, herramientas, para dar
significado a los contenidos que debemos priorizar para que nuestros alumnos continúen aprendiendo
desde otro lugar, casi autónomamente.
Estamos en permanente desafío y lo asumimos con responsabilidad y alegría. Estando siempre presentes
a través de un mail, de un mensaje, de una videollamada.
A pesar de que todos estamos afectados a nivel emocional, pasando por situaciones complejas
socioeconómicas, recreamos la oferta educativa, porque no solo reorganizamos aulas virtuales, sino que
nos esforzamos para mantenernos cerca de nuestros alumnos.

DOCENTE: MACHADO, ISABEL NOEMI


Institucionalmente se hace necesario acordar maneras de formalizar un seguimiento, documentar el
proceso que están realizando nuestros alumnos, en este camino de apropiarse de conocimiento a la
distancia. Qué recorrido están transitando, qué intereses estamos generando, cómo han resuelto las
actividades propuestas.
Estamos viviendo en un permanente desafío para que el aprendizaje se sostenga, fortaleciendo
condiciones y aportes, líneas de acción para facilitar la continuidad pedagógica.
La realidad es que las familias no disponen en sus hogares de recursos tecnológicos en condiciones;
menos aún de un espacio físico adecuado y destinado a estudio.
Todos los maestros nos golpeamos la cabeza contra la pared y empezamos a utilizar diferentes
modalidades: para los que viven lejos enviar las actividades por mail a la librería más cercana a sus
domicilios o por mail a cada familia. Aquellas familias sin recursos, les llevamos las fotocopias impresas
desde nuestros hogares para entregarlas junto al bolsón de mercadería y al mismo tiempo comenzamos
a utilizar el tan temido grupo de WhatsApp
En algunos casos la notebook se comparte entre varios hermanitos/as y si tienen conexión a internet son
privilegiados/as. El celular pasó a ser la principal fuente de comunicación descubriendo todas las
capacidades y herramientas que se pueden utilizar con él. Fue ese el medio más rápido y viable para
enviar actividades y mantener un contacto. Pensar que al inicio del ciclo escolar estaba prohibido el uso
del celular, era como el «enemigo de la clase» y ahora pasó a ser la herramienta que
nos permite seguir sosteniendo la escuela. En varias oportunidades realizamos videos grabados desde
un canal que cada maestro armó desde YouTube para enviar a los grupos de WhatsApp y así explicar las
actividades semanales. Los videos tienen una duración de, como máximo, seis minutos, pero llevan
muchos ensayos para que salgan claros y precisos.
Varias familias perdieron el empleo debiendo resolver diferentes problemas como la alimentación, el
control sanitario, cuidado de un familiar enfermo o personas mayores, y en medio de esta situación
continúan dando su apoyo para llevar adelante las actividades de los niño/as a la hora que
pueden y como pueden. También se presentan familias en las que los padres/madres salen a trabajar y
los niños/as no tienen quien los supervise o acompañe para realizar las actividades escolares.
Nuestros niños/as en muchos casos se sienten solos a pesar de estar con sus familias porque lo expresan
de diferentes maneras. Extrañan sus amigos, los espacios de juego y diferentes actividades que se dan
solamente en la escuela. A veces nuestra interacción con los alumno/as se reduce por estar atravesada
por la tecnología y es notable que el intercambio presencial es fundamental para el aprendizaje y en lo
vincular.
Debo mencionar que es fundamental tener espacios de intercambio entre docentes para enriquecer
nuestras clases, mejorarlas y reinventarlas. Esta modalidad de una escuela a distancia, nos permitió seguir

DOCENTE: MACHADO, ISABEL NOEMI


aprendiendo nuevas formas de realizar las clases y actividades. Pero lo cierto es que cada docente buscó
la forma más conveniente para mantener el lazo pedagógico con sus estudiantes.
Por otro lado, debo decir que la estrategia principal es mantener el vínculo con lo/as niño/as, los
maestros son el nexo entre la escuela y las familias; sino continuamos manteniendo la comunicación
nuestro esfuerzo se viene abajo. Los docentes estamos acompañando a nuestros niño/as en esta crisis, lo
que me lleva a pensar cuál es el rol que tenemos que desempeñar en este momento.
Si bien hoy hay un consenso en que la alfabetización no es lo único de lo que debe ocuparse la escuela;
no es ni será fácil, en el contexto de incertidumbre que nos envuelve, definir nuestro rol actual. Además,
tengo claro que ser docente hoy en una escuela pública, donde muchos alumnos/as provienen de barrios
de emergencia, es un desafío, sumado a estar en medio de una crisis mundial no tengo palabras para
definir nuestra tarea, solo que es desbordante.
Quienes nos dedicamos a la educación sabemos que el rol de la escuela no se limita solo a transmitir
conocimientos. Somos docentes porque aspiramos a formar ciudadanos íntegros, críticos, creativos y
solidarios. Al acompañar, contener, actuar solidariamente ante esta crisis sanitaria; los maestros
nos ayudamos de manera recíproca, al transmitir afecto y valores tan necesarios en estos momentos.
Cada uno de nosotros aprendió sobre la marcha apoyándose en su propio sentido común,
en la experiencia y entre compañeros. Cada uno trató de combinar disciplina, proyectos, formación
general y profesional, teoría y práctica en su labor diaria.
Estoy convencida de que es útil contar con más información, y acceder a la experiencia de otros, dar el
lugar al debate y a la reflexión. Esta pandemia nos atraviesa en todas las dimensiones y a los educadores
de hoy nos planteó un desafío único, nos obligó a cuestionarnos una y otra vez qué hacer frente a cada
situación.
Los docentes somos conscientes de que esta crisis sanitaria golpea con especial dureza a los más
vulnerables, los más chicos, nuestro desafío principal es contenerlos y acompañarlos en el día a día desde
nuestro lugar y dejarnos acompañar por ellos. Los tiempos que se avecinan son de construcción colectiva
en lo social y cultural, donde los docentes vamos a redefinir nuestra profesión frente a la realidad que nos
tocó, pero no elegimos. La ansiedad y las diferentes dificultades que enfrentamos todos en estos días,
muchas veces impiden tener rutinas con horarios estrictos; sin embargo, logramos sobrellevar la situación
actual. La escuela sigue, no se detiene a pesar de todo. Cada maestro empuja hacia adelante y enfrenta
los desafíos poniendo el cuerpo hoy más que nunca.

DOCENTE: MACHADO, ISABEL NOEMI

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