Importancia de la percepción, la cognición, el proceso de atribución,

estereotipos y actitudes en la labor del psicólogo

La psicología es una ciencia que se encarga de el estudio de la psiquis en los seres
humanos, su relación con el entorno, emociones, percepción, procesamiento de
información, etapas por las cuales va pasando el ser humano desde que nace, es
un bebe, niño, adolescente, adulto joven y adulto mayor.
Además, se encarga de identificar las posibles alteraciones que puedan presentar
los individuos. Sin embargo, el psicólogo no se aparta de la realidad de ser un ser
humano, donde se ve influenciado por su forma de afrontar las situaciones, las
formas de percibir, sus creencias, cultura, entre otros.
Por lo tanto, en este texto se busca describir la importancia que tiene la percepción,
la cognición, los procesos de atribución, estereotipos y actitudes dentro del área de
desempeño del psicólogo. Se puede identificar que es de vital importancia ser
consciente de lo anteriormente mencionado, para un mejor abordaje del individuo.
Primeramente, la percepción es aquello que se relaciona con como las personas
ven y comprenden a los demás a través de sus experiencias, emociones, contexto
y entorno. También, en el proceso de percepción podemos ver a los demás a través
de los lentes de nuestros propios rasgos, motivos y deseos. También, se puede
mencionar que la impresión que podemos tener al inicio de conocer a una persona
se irá transformando, mientras se va conociendo.
Es importante resaltar, que el psicólogo necesita tener un buen conocimiento y
hacerse consciente de todos estos puntos, ya que hay diversos factores que influyen
en la percepción de las personas, por ejemplo; cuando tenemos problemas en
nuestro entorno o conflictos sin solucionar. Si el psicólogo no hace consciente esto,
es probable que la percepción al abordar e identificar los conflictos del otro se verán
perjudicados por los factores tales como la motivación, las expectativas que tenga
con respecto a alguien, si esta o no familiarizado con el tema o la persona a abordar,
el valor del estímulo y la experiencia.
Además, es de vital importancia que el psicólogo tenga conocimiento de que la
persona a quien va abordar también puede mostrarse de ciertas maneras, como
congraciado o intimidador, con auto incapacidad o auto presentación favorable, con
objetivos o buscando algún resultando en específico. Por ejemplo, cuando un
paciente se muestra intimidador con el fin de que no te le acerques, que
desencadenes miedo para abordarlo o no brindar alguna información solicitada.
También, el contenido de la información puede alterar la percepción del psicólogo o
del paciente, ya que, al redundar en un tema, al percibir ambigüedad o el contenido
de la información suministrada no concuerda; puede verse afectado el abordaje,
obteniendo el resultado no esperado de la intervención psicológica. Por eso se
recomienda que la información que sea dada, debe ser clara, y preguntar a el
paciente si ha comprendido o no la información suministrada. Como también, el
psicólogo puede realizar la misma pregunta de diferentes formas, en caso de verse
alterada la percepción por el contenido de la información.
Por otro lado, la cognición también es muy importante en el desempeño del
psicólogo en su labor ya que, se necesita conocer como las personas extraen y
organizan la información y le dan sentido a su entorno social, teniendo en
consideración los procesos preconscientes y posconcientes. Donde, los procesos
preconscientes es todo el proceso automático, no es intencional y en los procesos
posconcientes la persona ya tiene consciencia del procesamiento de la información.
Teniendo en cuenta la importancia de la motivación, el afecto y las emociones en la
racionalidad humana, ya que son indispensables para el raciocinio del ser humano,
se puede tomar como estrategia de abordaje estos ámbitos, por ejemplo; qué
motivaciones o emociones pueden estar influyendo en el proceso psíquico del
paciente, para que este pueda tener una mejor evolución.
Ahora bien, en consulta puedo ver como psicóloga las conductas de las personas y
también como persona puedo observar las mías, y es allí donde entra los procesos
de atribución, donde puedo preguntarme, ¿porque hacemos lo que hacemos?,
buscando la causa del comportamiento o actitudes para un mejor conocimiento del
individuo.
Aunado a lo anterior, existen varias teorías de la atribución, donde en la teoría de la
inferencia correspondiente, se tiene en cuenta como en primera instancia a la
observación para el proceso de atribución, para luego tomar una decisión que nos
lleven a comportamientos. Si tenemos como psicólogos esta información, podemos
darnos cuenta desde el inicio de la sesión, los procesos de atribución que se están
dando y si interfiere algún estimulo, el resultado de la conducta será el esperado,
según el inicio de la misma. Por ejemplo; el paciente está en una sesión y observa
algo desagradable, donde se ve en la decisión de colaborar con el psicólogo o no,
teniendo como resultado no colaborar ya que pudo atribuir lo ocurrido como un
hecho que rechaza.
Continuando con lo anterior, el psicólogo puede preguntarse sobre como piensan
en realidad las personas. Existen varias fuentes de error, donde se encuentra el
sesgo de correspondencia, el efecto actor – observador, el sesgo de auto-beneficio
y el de self serving. Los cuales juegan un papel fundamental en el procesamiento
de información de los individuos, cómo estos pueden ver las situaciones, atribuirse
a si mismo los resultados buenos y al exterior los resultados malos o viceversa.
Por otra parte, el psicólogo en su área de trabajo y como ser humano, se ve rodeado
por una sociedad de la cual ha obtenido creencias populares compartidas en un
grupo y esto es definido como los estereotipos, los cuales se pueden ver
relacionados con los prejuicios y la discriminación. Si hacemos relación de este
tema con el rol del psicólogo, podemos darnos cuenta de la magnitud de importancia
que tiene. Ya que, al momento de abordar una persona, se debe tener en cuenta
que ésta presenta una serie de creencias y estereotipos que van a influir en la
percepción de la situación. Por consiguiente, viéndolo de esta manera, se puede
identificar los conceptos necesarios para una técnica de abordaje como la
reestructuración cognitiva.
Además, es muy importante que el psicólogo se conozca a sí mismo y tenga
conocimiento de ésto, puesto que, su observación e intervención también puede ser
influida por los estereotipos y llegar a prejuicios o discriminación. Por eso, es
importante que el psicólogo vaya a terapia, para conocerse y hacer consientes sus
prejuicios y que estos no influyan en su practica laboral. Además, de tener en cuenta
que el conflicto que presente cada paciente, puede verse influenciado por los
prejuicios que alteran la percepción del mismo.
Por otra parte, y relacionado con la importancia de los conocimientos que necesita
obtener el psicólogo para su buen desempeño en su área, se encuentran las
actitudes, las cuales son definidas como evaluaciones que tiene un individuo y son
relativamente estables, son aquellas que la persona hace sobre otra persona, ideas
o cosas y pueden recibir la denominación de objetos de actitud.
Con respecto a lo anteriormente mencionado, es importante tener el conocimiento
de que las actitudes de un individuo pueden ser positivas, neutrales o negativas. Y
que estas actitudes tienen componentes, los cuales son; cognitivo, que hace
referencia a las experiencias o creencias obtenidas a lo largo de la vida, afectivo, el
cual se puede relacionar con los estímulos que percibe el individuo, el priming
afectivo, la meta exposición que hace referencia a que la persona puede tener
actitudes positivas por solo el hecho de que el estimulo sea ya conocido. Y para
finalizar, el componente conductual, donde las personas realizan conductas que le
puedan proporcionar información.
Asimismo, Dentro del componente conductual, se tiene la disonancia cognitiva
donde esta puede alterar el comportamiento de la persona, teniendo en cuenta los
sesgos de búsqueda, donde la persona puede cambiar de conducta buscando
creencias que se adapten la situación actual. También, esta la autopercepción,
donde la persona utiliza sus propias conductas para juzgarse asimismo. Y por
último, la autovalidación, donde la persona valida su conducta a través de sus
pensamientos.
En conclusión, describir la importancia de la percepción, estereotipos, actitudes,
procesos de atribución y otros, puede verse muy extenso, pero en realidad uno va
de la mano con el otro, así podemos darnos cuenta que al tener esta información
presente en el desempeño ejercido como psicólogo, será más eficaz el abordaje, ya
que podrá verse desde una perspectiva más objetiva el motivo de consulta del
paciente, sus conflictos y sus alteraciones. Como resultado, las técnicas o
estrategias a utilizar a la hora del abordaje serán las más indicadas según sea el
caso.

Lcda Daniela Marin Restrepo.

CI: E-84.323.594
Asignatura: Cognición social.