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¿Con qué frecuencia debe cambiarse la visión o misión de una empresa en función
de las actividades de evaluación de estrategias?
-Decisiones estratégicas: “toma de decisiones que, por su relevancia bien económica, bien
social, bien de otra índole tienen una especial importancia para la persona que tiene que
tomar la decisión”.
-Dirección estratégica: “el arte y la ciencia de formular, implementar y evaluar las decisiones a
través de las funciones que permitan a una empresa lograr sus objetivos”.
-Estrategas: todos los individuos que actúan racionalmente son estrategas, toman sus
decisiones de acuerdo a las mejores oportunidades basadas en su experiencia, ahora
bien, “el estratega debe vigilar este proceso de manera continua; debe identificar y
evaluar; decidir y actuar, una y otra vez”
-Objetivos estratégicos: “son un fin deseado, clave para la organización y para la consecución
de metas a largo plazo de la empresa (visión). Su cumplimiento es un elemento de máxima
prioridad para llevar a cabo la estrategia de la organización”.
-Metas: Son los logros que se pretenden alcanzar, el logro de varias metas confiere la
satisfacción de un objetivo.
-Políticas Estratégicas: son aquellas orientaciones o directrices que debe ser divulgada,
entendida y acatada por todos los miembros de la empresa, en ella se contemplan las normas
y responsabilidades de cada área de la organización de acuerdo a su importancia.
Por lo consiguiente se un cambio tenemos a las etapas de las estrategias las cuales son 3:
Respecto a la primera etapa que señala Mintzberg, está vinculada a que quiere lograr la
organización para así fijar la estrategia.
1. VISIÓN:
CARACTERÍSTICAS DE LA VISIÓN:
La visión para cumplir con su rol en el contexto del desarrollo organizacional debe
cumplir con las características siguientes:
INTEGRADORA: Debe reflejar las expectativas de todos los integrantes de la
organización. Requiere la acción de liderazgo y permanente apoyo de toda la
organización.
AMPLIA: Debe ser extensa en función del campo de visualización del futuro
(largo plazo).
REALIZABLE: Debe ser una aspiración posible y medible. No puede ser un sueño
inútil e incalculable. Debe ser un esfuerzo de equipo basado en la experiencia y
conocimiento del quehacer organizacional.
ACTIVA: Debe incluir y promover la acción. No debe ser lírica.
REALISTA: Debe sustentarse en el manejo de la información fidedigna y tener
en cuenta el entorno, la tecnología, cultura organizacional, recursos y
competencia.
ALENTADORA: Debe ser positiva, incentivadora, inspiradora, impulsadora y
motivadora hacia la acción, dirección y éxito institucional.
DIMENSIÓN EN EL TIEMPO: Debe formularse definiendo explícitamente el
horizonte de tiempo que alcanza la visualización.
CONSISTENTE: Debe ser coherente con los principios organizacionales y sus
reales posibilidades.
DIFUNDIDA: Debe ser conocida y comprendida por todos los integrantes de la
organización; así como por su público externo y grupos de referencia.
FLEXIBLE: Debe estar dispuesta a enfrentar retos y ser posible de ajustarse a las
exigencias y dinámica del cambio.
LENGUAJE SENCILLO: Debe redactarse en un lenguaje sencillo, ennoblecedor,
gráfico y metafórico.
RESPONSABILIDAD: Debe ser formulado por los líderes, proyectando los
sueños, esperanzas e incorporando valores e intereses comunes de todos lo
miembros de la organización.
2. MISIÓN:
Viene a ser una declaración duradera de propósitos, que indica la manera como una
institución pretende lograr y consolidar las razones de su existencia. Una misión bien
definida señala las prioridades y la dirección de los negocios de una empresa, identifica
mercados a los cuales se dirige, los clientes que quiere servir y los productos que
quiere ofrecer. Asimismo, determina la contribución de los diferentes agentes en el
logro de propósitos básicos de la empresa y lograr así su visión organizacional.
La misión de la empresa sirve como fundamento para todas las decisiones importantes
que toma el equipo gerencial. Su definición comprende los siguientes grandes
elementos:
Toda organización flexible e inteligente sabe que, cuando su personal "pone su cargo a
disposición" no significa la oportunidad para deshacerse del mismo. La permanencia,
desarrollo y mejoramiento del capital humano de una institución, es una muestra de
su capacidad competitiva.
- Trabajo en Equipo.
- Compromiso con la organización.
- Calidad en el servicio.
- Desarrollo humano (personal y profesional).
- Innovación y creatividad.
- Comunicación.
- Liderazgo, etc.
La planeación estratégica, es aquella que contribuye a la definición de estrategias de la
empresa, basadas generales en las fortalezas y debilidades para determinar que se
quiere ser en el futuro, estableciendo un entramado de objetivos y metas, de la mano
de estrategias adecuadas para alcanzarlos, sin obviar el ambiente externo de la
organización en cual generara una serie de oportunidades y amenazas. En otras
palabras, la planeación estratégica únicamente no constituye el planteamiento de
objetivos y metas, esta debe plasmarse en planes estratégicos asociados a distintos
proyectos, donde se cumplan las etapas de formulación, implementación y evaluación
de las estrategias, siendo este último el más importante, ya que, la evaluación
recurrente del proceso con base a lo programado permitirá rectificar o reacomodar las
acciones para alcanzar los objetivos y metas propuestas. Así las cosas, en el mundo
organizacional la planeación estrategia a través de sus distintas herramientas
representa una guía de acción en el mediano y largo plazo con el fin de alcanzar los
objetivos y metas de la organización teniendo en cuenta todos los recursos asignados
(materiales, financieros, humanos, entre otros); es decir, como llegar a donde se
quiere ir de la manera más óptima.
Los cambios que actualmente vive la economía se encuentran definidos por factores
tales como la globalización, avances científicos-tecnológicos, avance en el desarrollo
de las telecomunicaciones, alta demanda de productos de calidad, cambios de
patrones de consumo, entre otros, los cuales han modificado el comportamiento de las
organizaciones. Las empresas de éxito, medido en el crecimiento de sus operaciones,
sostenible y sustentable al paso de los años, posicionadas en el mercado local, regional
e incluso internacional, cuentan con métodos sistémicos y reflexivos para identificar
quiénes son, en qué creen, hacia dónde van y analizan el entorno de manera
permanente. En un mundo globalizado, en constante cambio y altamente complejo, las
organizaciones necesitan prever y reaccionar con rapidez para continuar siendo
exitosas. Sobre este particular, las organizaciones deben ser progresistas y esto se
logra a través de la mejora continua de sus procesos de forma dinámica y activa,
siempre apuntando a ser cada vez mejores. Si bien existen mecanismos para lograr lo
anterior, tales como la planeación por escenarios y la prospectiva, aún sigue
manteniendo vigencia la planeación estratégica.
La planeación estratégica está asociada a procesos sistemáticos de desarrollo e
implementación de planes y acciones para alcanzar propósitos u objetivos planteados
en el corto, mediano y largo plazo. La planeación estratégica se suele aplicar en
muchos entornos y uno de estos es el que tiene relación con los negocios, que
mediante un proceso reflexivo se establece la direccionalidad de las organizaciones.
Así las cosas, cuando cada fase o paso de un proceso de planeación estratégica, se
lleva a cabo de forma adecuada y participativa los éxitos en términos de resultados no
se hacen esperar. Ahora bien, la problemática surge cuando las empresas carecen del
conocimiento relacionados a métodos, técnicas y/o herramientas de planeación,
siendo incapaces de identificar los focos problemáticos en su entorno, realizar los
análisis correspondientes para determinar las fortalezas y debilidades de la empresa,
así como, las oportunidades con las que cuenta la compañía sin dejar de lado las
amenazas; y que con la información obtenida de las auditorías internas y externas se
pueden elaborar matrices para formular posibles estrategias y planes de acción para
alcanzar sus objetivos.
Es importante destacar, que actualmente para que una compañía sea exitosa es
imperativo que cuente con una línea o dirección estratégica, que le permita desarrollar
en todo su esplendor su potencial, esto mediante planes estratégicos de los cuales
obtendrá beneficios y podrá sobrevivir a través del tiempo en un mercado cada vez
más grande y competitivo. En este sentido, la empresa que alcanzará una posición de
liderazgo será 8 aquella que se inquiete y desarrolle al máximo sus ventajas
competitivas. Tener las capacidades para competir es la clave para conseguir el éxito.
Indicadores cualitativos
Si una empresa tiene un alto nivel de producción, pero también un volumen alto de
unidades defectuosas, no será precisamente un negocio que resulte productivo.
Indicadores cuantitativos
El tiempo que se ha utilizado para llevar para llevar a cabo una tarea y la cantidad
representativa del trabajo realizado. En este sentido hay que decir que el indicador es
aplicable tanto si la empresa fabrica un producto como si ofrece un servicio
personalizado a sus clientes.
El resultado de esta medida cruzando los dos factores será aquello que ayudará a
determinar el nivel de productividad de la empresa. Este tipo de indicador se aplica
también a muchos otros sectores, por lo que solo hay que ajustar el mercado de la
empresa para disfrutar otros sectores, por lo que solo hay que ajustar el mercado de la
empresa para disfrutar del análisis de indicadores que pueden ayudar a obtener un
mejor rendimiento de la compañía y a provechar sus distintos procesos internos sin
sobresaltos.
Desde el sector de las ventas es posible apreciar con facilidad como se aplica el
indicador cuantitativo, dado que representará la cantidad de ventas que se pueden
obtener en un periodo de tiempo sin fijarse en el resto de Factores que se dan cita
durante este tiempo en cuestión. Cuantas más ventas, más beneficios y mejores
resultados se registran para el negocio.
Entender los indicadores cuantitativos y cualitativos es un ejercicio obligatorio. Con el
análisis de cada uno de los datos y la información disponible se pueden iniciar
procesos que ayuden a determinar cuál debería ser la preocupación principal de la
empresa y cómo mejoraría introduciendo cambios en estos indicadores.
1) Entender al cliente:
¿Quién es?
¿Qué desea?