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GRUPO N° 6
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I. MARCO HISTÓRICO
Las primeras observaciones de la acción capilar, al menos dentro de los registros
occidentales, se remontan a Leonardo da Vinci (1452-1519). En efecto, da Vinci ya había
observado y registrado el ascenso espontáneo de líquidos en capilares humedecidos, como
agujeros estrechos y tapones; de este fenómeno adquirió su nombre: capillus(lat.) = pelo:
los agujeros deben ser tan estrechos como un pelo. (Hernández, 2018). Francis Hauksbee
en 1709 investigó el ascenso de líquidos en capilares y entre platos de vidrio encontró que
el grosor del vidrio no importaba; así que el fenómeno de la humectación se estableció
como un fenómeno superficial. (Salager & Anton, 2005). En 1712, el matemático Brook
Taylor, padre de las llamadas series de Taylor, también condujo un experimento sobre el
efecto producido por la capilaridad en un líquido entre dos placas paralelas de vidrio
formando un pequeño ángulo de cuña. James Jurin en 1718 confirmó independientemente
que la altura alcanzada por un líquido es inversamente proporcional al diámetro del tubo,
enunciado conocido como la ley de Jurin. Se llevó a cabo el establecimiento de los
fundamentos teóricos de la ciencia interfacial con la ecuación de Young-Laplace (Young
1805; Laplace 1806).( Francisco, 2009).
La idea de tensión superficial fue introducida en 1751 por Johann Andreas von Segner,
pero aún en el contexto de los fluidos y su comportamiento con interfaces sólidas y
gaseosas. (Souza, Pauletti & Almeida, 2018). Su punto de vista de que las fuerzas de
atracción diminutas e imperceptibles mantienen la tensión superficial sentó las bases para
el desarrollo posterior de la teoría de la tensión superficial. (Delphi Pages, 2020). El
primero en darle una interpretación científica a la formación de capas de líquidos
atrapadas en la interfase agua/aire fue Benjamin Franklin, quien en una de sus visitas a
Europa observó que la superficie de un estanque de agua estaba casi completamente
cubierta por una sola cucharada de aceite de oliva. En 1774 Franklin escribió una carta a la
Royal Society de Londres en el cual exponía la observación de que la capa de aceite que
cubría la superficie del agua debía ser extremadamente delgada. De esta manera dió inició
la ciencia de las monocapas en la interfase agua/aire. (Valdez, 1997).
Thomson en 1855 descubrió que la tensión superficial no es la misma para líquidos
diferentes. En 1863, Ludwing Wilhelmy desarolla un método focalizado en la medición
de la tensión superficial, denominado placa de Wilhelmy, el cual consiste en un placa de
vidrio o de platino que tiene que poseer una estructura delgada, la cual se encuentra
suspendida de una balanza de tensión que mide el valor de la fuerza necesaria para
arrancar la placa de la superficie del líquido en el cual se sumerge. (Pilotzi, 2015). Carlo
Marangoni en 1871 descubre que si existen diferencias en la tensión superficial en la
superficie libre de un líquido, éste fluye hacia la región con mayor tensión superficial.
Asimismo, elaboró la primera teoría que explica que los flujos debidos a variaciones en la
tensión superficial producidas por gradientes de temperatura y composición. Es por ello
que la convección interfacial causada por dichos gradientes es conocida como
convencción de Marangoni. Luego de 7 años, Gibbs estudió este fenómeno con una mayor
precisión.(Ferrera, 2007).
En el año 1891 a petición del físico John William Strutt, lord Rayleigh, se publica en la
revista Nature con el título de “Tensión superficial” la carta emitida por la científica
Agnes Pockels, en la cual establecía las bases de la investigación cuantitativa de las
películas superficiales. Gracias a sus observaciones, desarrolló un dispositivo que le
permitía medir la tensión superficial de monocapas de sustancias hidrofóbicas, como
aceites y grasas, y anfipáticas, que poseen una parte soluble en agua y otra que rechaza el
agua(tal es el caso de jabones y detergentes). Consistía en una especie de sartén con dos
inserciones, una fija y la otra móvil, que se utilizaba para comprimir una capa de jabón
depositada sobre agua. La inserción móvil se empleaba para comprimir la capa; la presión
iba cambiando de modo suave y se iba registrando hasta llegar a un momento en el que
cambiaba bruscamente, denominado el punto de Pockels. Este dispositivo también tenía
una balanza para medir la tensión superficial y gracias a él . (Almendros, 2017). Agnes
pudo describir el comportamiento general de la tensión superficial con distintas
concentraciones de aceite y las cantidades necesarias para constituir una monocapa de
superficie conocida. (Hernández, 2018). Por su parte, Irving Langmuir desarrolló toda una
teoría del proceso termodinámico de adsorción y de la interacción atractiva entre las
moléculas de la interfase de un líquido y un sólido. De esta manera, en 1917 llega a
publicar “The constitution and fundamental properties of solids and liquids”, dicha
publicación constituyó una de sus más preponderantes contribuciones es por ello que en
1932 le otorgaron el premio Nobel. Debe señalarse además que la teoría de Langmuir se
debió en gran medida a la comprobación de la hipótesis emitida por Rayleigh: “Las
monocapas formadas en la interfase debía de ser del orden molecular”. (Valdez, 1997).
Figura N°01
Fuente: Olmo s.f
P= peso de la gota
k= coeficiente de contracción
r= radio del cubo
g= tensión superficial del líquido
Con la tensión superficial del agua se mide la tensión superficial del líquido problema
y cumple la siguiente relación.
m y
=
m¨ y ¨
Tabla N°01
Fuente: Osmosis 2015
2.2 Capilaridad
La capilaridad es una propiedad física del agua por la que ella puede avanzar a través
de un canal minúsculo (desde unos milímetros hasta micras de tamaño) siempre y
cuando el agua se encuentre en contacto con ambas paredes de este canal y estas
paredes se encuentren suficientemente juntas. Si tenemos un tubo capilar de radio
interno r, en el cual hay un liquido de densidad p, el ascenso capilar h, se establece
cuando la fuerza de tensión superficial sea igual al peso de la columna capilar
T (2 π r )= pg ¿
De acuerdo con Liu (2007) la mayonesa es una emulsión formada por agua y aceite
vegetal donde el emulsionante que permite la combinación de estos dos factores es la
yema de huevo. La yema de huevo posee en su estructura proteínas, entre las que
destacan las lipoproteínas de baja densidad y gránulos insolubles en una solución
acuosa de glicoproteínas llamadas livetinas (Valenzuela 2010).
En la tesis consultada para la realización del presente trabajo, se trabajó con
mayonesas de diferentes formulaciones las cuales se encuentran especificadas en la
tabla N° 01
Tabla N°02
Fuente: Valenzuela 2010
A partir de las formulaciones especificadas anteriormente se realizó un análisis
reológico de la viscosidad para las diferentes mayonesas. Este consistió del uso de
equipo para medir el esfuerzo de la cizalla, material con el cual se homogeniza la
mayonesa, comprado con el tiempo para su homogeneización.
Figura N°03
Fuente: Valenzuela 2010
En la figura N°02 se puede observar que entre mayor cantidad de aceite tengan las
mayonesas en cuestión mayor será el esfuerzo requerido para homogeneizarlas lo que
nos permite deducir que las mayonesas con mayor contenido graso tienen más tensión
superficial, más viscosidad y por ende forman una película interfásica más resistente-
requiere mayor cantidad de fuerza para poderla vencer.
El nuevo diseño inventado por este autor consiste de un par de barreras móviles que
controlan el tamaño de la interfase a medir, una aguja magnética que mide la
capilaridad y la pinza magnética hechas de neodimio la cual permanece a una altura h
de la bandeja con la muestra. Este dispositivo permite medir energía libre a
condiciones estándar en el rango de 10−9❑- 0.01 N/m. Como ejemplo, se obtuvo un
diagrama de fases de presión superficial- temperatura obtenida a partir de
experimentos en lípidos cuya longitud de cadena se encuentra entre 20 y 24 carbonos.
Figura N°05
Fuente: Tajuelo s.f.
Por otro lado, la metodología elaborada por los autores del presente trabajo, se basó en
cinco puntos importantes de los que se da énfasis a continuación:
En referencia con el punto cinco de la metodología, se obtuvo como resultados que los
parámetros de relevancia para el análisis fueron la irradiancia, temperatura ambiental
y velocidad del viento. En cuanto a los resultados finales de temperatura relacionada a
los puntos de análisis del deshidratador, se realizaron cotejos entre los distintos
softwares. Siendo así que, los resultados obtenidos difirieron ello debido a las distintas
formas de función de dichos softwares (Alcarazo, 2020).
A partir de ello, finalmente se realizaron las debidas conclusiones que describen lo
siguiente:
El diseño del deshidratador solar toma en cuenta tres orificios de entrada el cual
permite versatilidad en el control del flujo másico del aire (de entrada), de acuerdo a
las condiciones ambientales que se puedan dar durante su funcionamiento. Es así que
en base a las simulaciones y resultados obtenidos, se visualizaron los efectos del
secado en el fruto (banano) y las temperaturas que se obtuvieron en dicho proceso de
deshidratación (Alcarazo, 2020).
El trabajo realizado por dichos autores tuvo como objetivo determinar la eficiencia del
agua, utilizando un diseño experimental de un bloque con dos tratamientos y sus
respectivas repeticiones, en la que se implementaron los tratamientos con sistemas de
riego por goteo y riego por capilaridad en el cultivo de remolacha.
En relación al presente trabajo, se hace énfasis en los sistemas de riego utilizados, los
cuales basan sus aplicaciones tecnológicas a los mecanismos utilizados que se
emplean en cada método. A continuación se presentan ambos sistemas que sirven de
referencia para tener una idea más clara.
Figura 1
Sistema de riego por capilaridad
Figura 2
Sistema de riego por goteo
Nota. Adaptado de Componentes instalación riego por goteo [Figura], 2018.,
Gestiriego (https://www.gestiriego.com/cl/componentes-instalacion-riego-por-goteo/).
Tabla 1
Donde:
T1 y RT1: riego por capilaridad
T2 Y RT2: riego por goteo
V. REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS