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República Bolivariana de Venezuela

Ministerio del Poder Popular para la Educación Universitaria

Universidad Nacional Experimental de los Llanos Centrales "Rómulo Gallegos"

Área: Ciencias de la Salud

Programa de Medicina

Unidad Curricular: Parasitología

Balantidiasis
(Balantidium Coli)

Integrantes:
-Mendoza Anyle C.I: 28.253.786
-Rivas Antonella C.I: 27.699.776
-Ruiz Jorge C.I: 28.174.082
-Yánez Gabriel C.I: 28.112.064

3er año Sección 3

Grupo 2

Julio 2021
Balantidiasis:

En 1857 el médico suizo Malmsten lo describió por primera vez tras


encontrarlo en las heces disentéricas de dos pacientes, lo clasificó dentro del
grupo de Paramecium otorgándole el nombre de Paramecium coli. En 1861
Rudolf Leuckart, naturalista alemán y fundador de la parasitología moderna,
describió un microorganismo con una morfología similar que estaba presente en
el intestino de cerdos. Poco después, en 1862, el médico suizo Stein clasificó a
los dos microorganismos, tanto al observado en heces humanas como al de
origen porcino, dentro del mismo género: Balantidium (del griego balanto,
“bolsa”), y desde entonces se denomina Balantidium coli.

La especie que fue encontrada en cerdos (Balantidium suis) es idéntica a la


encontrada en humanos Balantidium coli, aunque también se han encontrado
infectando otros organismos mamíferos como ratas, chimpancés, orangutanes
y, de manera poco frecuente, en perros y gatos; no obstante, cabe mencionar
que se han encontrado otros huéspedes infectados con diversas especies de
Balantidium: cobayos (Balantidium caviae), cucarachas (Balantidium blattarum),
peces, pájaros y anfibios. De hecho, se han descrito hasta 50 especies.

Ahora bien, la balantidiasis es una infección producida por el protozoario


ciliado Balantidium coli, capaz de infectar, además de humanos, a cerdos,
primates y otros animales. A pesar de que es cosmopolita, no está bien definida
su prevalencia, aunque se ha asociado a la presencia de animales.

Agente Causal:

Su agente causal es la Balantidium coli que es el protozoario más grande que


produce enfermedad a humanos. Desde el punto de vista taxonómico se ha
clasificado con base en datos morfológicos, tipo de huéspedes y polimorfismo,
de acuerdo con el ambiente en que se desarrolla; sin embargo, hoy día se cree
que los microorganismos se clasificarán realizando estudios moleculares
basados en secuencias de genes de la pequeña subunidad del mar y
espaciadores transcritos.
Morfología:

El trofozoíto es de forma ovalada, con una longitud promedio de 50 µ a 200


µ, y 40 µ a 50 µ de ancho. Está rodeado de cilias que le permiten desplazamiento
rápido. Posee en la parte anterior una boca o citostoma con cilias largas que le
sirve para obtener alimento, el cual pasa a vacuolas digestivas. Los residuos
alimenticios son eliminados por vacuolas contráctiles a través de una apertura
en el extremo posterior, llamada citopigio. Tiene dos núcleos: Uno mayor
arriñonado, llamado macronúcleo; el otro redondo y pequeño, generalmente
cerca de la concavidad del anterior, llamado micronúcleo.

En el citoplasma se encuentran dos vacuolas contráctiles encargadas de


regular la presión osmótica del parásito. La reproducción se hace por división
binaria y también por gemación y conjugación; esta última consiste en la unión
temporal de dos células para cambiar material nuclear.

El quiste es más redondeado, con un diámetro de 40 µ a 60 µ, con doble


membrana gruesa, a través de la cual puede observarse el parásito, a veces con
algún movimiento. En el interior resalta el macronúcleo. el quiste es eliminado al
exterior, resiste el medio ambiente y es infectante por vía oral, a diferencia del
trofozoíto que no es infectante por esta vía y se destruye al salir del organismo.

Balantidium coli. Quiste en una preparación en fresco, se nota el macronúcleo


como una masa pálida a la derecha. (La barra de la foto mide 10 micras).
(Cortesía: OMS).
Balantidium coli. Trofozoíto obtenido de MIF. El citostomo es visible en la parte
superior, en el interior se observa el macronúcleo con mayor coloración. Las
cilias se observan en la periferia. (La barra de la foto mide 10 micras).
(Cortesía: OMS).

Taxonomía:

Dominio: Eukarya

Reino: Protista

Phylum: Ciliophora

Clase: Litostomatea

Orden: Vestibuliferida

Familia: Balantidiidae

Género: Balantidium

Especie: Balantidium coli

Ciclo Biológico

Los quistes de balantidum, se adquieren atreves de los alimentos, agua,


manos infectadas o contaminadas, fómites, las heces humanas y de cerdo. A su
paso por el estómago e instentino delgado y ya como trofozoito el instentino
grueso, ahí se reproducen por fusión binaria transversal. También algunos
trofozoitos invaden la pared del colon y originan una ulceras en forma de concha,
igual pueden llegar al peritoneo y a los ganglios mesentéricos. Cuando las
condiciones cambian en el instentino al disminuir la cantidad de líquido y
electrolitos, el parasito inicia un enquistamiento para asi ser eliminado en la
evacuaciones y volver al medio ambiente.

Patología
En una infección parasitaria intestinal producida por un protozoo ciliado
denominado balatidium coli, el cual es el parasito más frecuente en el instentino
grueso del cerdo. El quiste de B.Coli se transmite atreves de la vía oral- fecal de
persona a persona igualmente por contacto con cerdos infectados y también por
el consumo de agua o elementos infectados con materia fecal. Una vez dentro
del organismo al balantidium produce una enzima llamada hialuronidasa, que
destruye el ácido hialuronico que mantiene unidas a las células epiteliales. Por
tanto cuando invade al instentino delgado o el tejido genera ulceras proteolíticas,
que dan lugar a ulceras en forma de concha en el instentino, ingiriendo eritrocitos
y bacterias.

Manifestaciones clínicas

Existen algunos factores que favorecen la infección por Balantidium coli,


como son el estado nutricional del paciente, aclorhidria, alcoholismo o cualquier
enfermedad crónica, así como la flora bacteriana intestinal y la carga parasitaria.
El periodo de incubación varía de días a semanas; según Swartzwelder, en la
balantidiasis existen tres formas clínicas

1. Asintomática: Se reconoce con más frecuencia en pacientes


psiquiátricos y hospitales.

2. Crónica: La diarrea alterna con estreñimiento y las heces muestran moco


sin sangre; hay náuseas, vómito, anorexia, cefalea y astenia.

3. Aguda: Se identifican disentería y múltiples deposiciones de sangre y


pus, acompañadas de náuseas, dolor abdominal, tenesmo y pérdida de peso,
pujo, úlceras, fiebres, malestar general, deshidratación y postración. En forma
fulminante ocurren deshidratación, deterioro del estado general y la muerte. En
los lugares donde existe más balantidiasis predominan las formas asintomática
y crónica.

Se presenta un buen número de casos asintomáticos o con pocas


manifestaciones clínicas, tal como dolor cólico y diarrea. En casos crónicos,
estos síntomas son más intensos y frecuentes y se pueden alternar con
deposiciones mucosas y sanguinolentas. En las formas agudas se produce un
cuadro disentérico similar al de amibiasis, con abundantes trofozoítos en las
materias fecales. Hay rectitis con pujo, tenesmo y la clásica deposición
disentérica muy frecuente, con abundante moco y sangre, acompañada de dolor
cólico en retortijón. Puede haber síntomas generales asociados, como vómito,
enflaquecimiento, debilidad y deshidratación. En los pocos casos que dan origen
a perforación intestinal, se observa, igual que en la perforación amibiana un
cuadro de peritonitis acompañado de fiebre y síntomas generales graves,
siempre de mal pronóstico.

En ocasiones se informa abdomen agudo quirúrgico por perforación o


apendicitis aguda que produce la muerte del paciente. También se ha reportado
colitis crónica y poliposis inflamatoria de recto y sigmoides, así como una masa
intra pulmonar. El patógeno ha sido aislado de las vías urinarias de pacientes
que padecían uretritis, cistitis y pielonefritis, e infectados por citología cérvico-
vaginal. La invasión a genitales femeninos origina flujo vaginal necrótico y da
origen a ulceraciones. Cabe mencionar que B. coli puede encontrarse en sitios
extraintestinales como el apéndice, y en raras ocasiones en el hígado y el tracto
genitourinario, produciendo infecciones en vagina, útero y vejiga, así como en la
extensión directa del área rectovaginal. Las infecciones de los pulmones pueden
llegar a producir necrosis.

Diagnóstico

Tiene una morfología que permite su fácil identificación, ya que es de gran


tamaño y además presenta una movilidad en espiral característica suya;
asimismo, en preparaciones en fresco son fácilmente identificables con una baja
resolución del microscopio (x 100). La colecta de estas muestras se lleva a cabo
a partir de heces diarreicas, las cuales quizá contengan a los trofozoítos, aunque
dicha recolección debe realizarse por varios días, ya que la excreción del
parásito puede ser errática, y si las heces son sólidas o semisólidas, suele
encontrarse a los quistes.

Requiere un diagnóstico clínico diferencial con entidades que produzcan


colitis o disentería, principalmente amibiasis, tricocefalosis aguda, disentería
bacilar y colitis ulcerativa. El diagnóstico se comprueba por el examen de
materias fecales, al observar los trofozoítos móviles al examen directo,
principalmente en heces diarreicas, o los quistes en las materias fecales no
diarreicas, en exámenes directos o por concentración. La rectosigmoidoscopia
permite observar las lesiones y obtener muestra para examen parasitológico.
Este parásito crece bien en los medios de cultivo utilizados para E. histolytica, lo
cual puede tener utilidad para completar el diagnóstico. Las coloraciones,
principalmente la de hematoxilina férrica, sirven para hacer un estudio
morfológico más detallado. No se emplean reacciones serológicas para el
diagnóstico.

 Epidemiología

La prevalencia de la balantidiasis es alta, especialmente en áreas donde los


seres humanos conviven con cerdos. Las personas afectadas por la balantidiasis
son: ganaderos, porcicultored, tablajeros y carniceros. La presencia de esta
zoonosis está condicionada por malas condiciones de salubridad, carencia de
servicios básicos (agua, desagüe) y crianza de cerdos en lugares no apropiados.
También el hombre puede actuar como diseminador de la infección, y las
epidemias presentan en lugares donde la higiene es deficiente, como hospitales
psiquiátricos públicos, asilos y orfanatorios. La mortalidad aumenta de acuerdo
con el sistema inmune del hospedero, al igual que su diseminación hacia
peritoneo o pulmón en pacientes con SIDA. Esta parasitosis se considera una
infección oportunista, pues la aclorhidria y el alcoholismo son factores que
contribuyen a la infección.

Medidas de Prevención

Como otras enfermedades transmitidas por contaminación fecal, es muy


importante implementar prácticas de higiene personal y la educación para la
salud, con el fin de controlar el fecalismo al aire libre. Debido a que es
considerada una zoonosis, es importante desinfectar los lugares donde se
encuentran los cerdos, así como evitar que estos animales coman y vivan fuera
de las granjas porcícolas. Para aquellas personas que se dediquen a trabajar
con productos cárnicos, es muy importante lavarse las manos al destazar y
manejar animales enfermos. Para los portadores asintomáticos, es necesario el
tratamiento profiláctico, especialmente si son preparadores de alimentos.

 Tratamiento

Se puede utilizar tetraciclina, 500 mg, 4 veces por día durante 10 días (está
contraindicado para embarazadas, niños y jóvenes). También metronidazol, 750
mg, 3 veces por día durante 5 días. Otro tratamiento sería iodoquinol, 640 mg,
tres veces al día durante 20 días.

Tetraciclinas:
 Dosis en Niño: 25 a 50 mg/kg x VO dividido en 4 administraciones;
no exceder de 3 g/día.
 Dosis en Adulto: 500 mg x día x 10 días VO.
 Consideraciones Especiales: Durante el tratamiento, puede
presentarse náusea, diarrea o fotosensibilidad; con menor
frecuencia, puede ocurrir anorexia, cólicos abdominales, prurito,
vómito, dermatitis exfoliativa y pigmentación de uñas, entre otros.
Debe administrarse en ayunas y no consumir productos lácteos.
Además, se debe evitar la exposición prolongada a la luz solar y a
las camas de bronceado. Contraindicado en niños de 8 años o
menores. Tiene múltiples interacciones farmacológicas. Fármaco
Categoría D para embarazo.
Metronidazol:
 Dosis en Niños: 35 a 50 mg/kg x día x VO, dividido en 3
administraciones x 7 a 10 días.
 Dosis en Adultos: 750 mg cada 8 h VO x 5 días.
 Consideraciones Especiales: Con este fármaco menos de 10%
de los pacientes presentan sabor metálico, mareos, cefalea,
anorexia, candidiasis, diarrea, náusea o vómito. Con menor
frecuencia se observa urticaria, eritema neutropenia reversible,
ataxia, confusión, trastornos visuales reversibles, convulsiones o
inestabilidad emocional. Interacciones farmacológicas múltiples;
con etanol produce psicosis aguda y confusión, potencia efecto de
anticoagulantes cumarínicos; con antiepilépticos puede ocurrir
inducción enzimática. Queda a consideración del médico el
abordaje del tratamiento según sea el caso. Fármaco Categoría B,
por lo que su uso durante el primer trimestre de embarazo y
lactancia es controversial.
Lodoquinol:
 Dosis en Niños: 30 a 40 mg/kg x día dividido en 3
administraciones VO x 20 días. No exceder de 1.95 g/día.
Administrar con alimento.
 Dosis en Adultos: 650 mg cada 8 h VO x 20 días. Administrar con
alimento.
 Consideraciones Especiales: Con este fármaco rara vez se
presentan efectos adversos a la dosis y al tiempo de tratamiento
recomendado. Sin embargo, durante su uso puede ocurrir dolor
abdominal, diarrea, vómito, cefalea, fiebre, mareo, exantema,
urticaria o edema. Con menor frecuencia, puede presentarse
agrandamiento de la glándula tiroides y alteraciones en la visión,
caracterizada por neuropatía mieloóptica subaguda. Fármaco
Categoría C, por lo que se tiene que ponderar su uso durante el
embarazo. Precaución en pacientes con enfermedad tiroidea;
alteración en los resultados de las pruebas de tiroides hasta 6
meses después de la descontinuación del medicamento.
Referencias Bibliográficas:

 Atlas Comentado de Protozoología // Juan Manuel Unzaga y María Lorena


Zonta (coordinadores) Universidad Nacional de La Plata – Editorial de la
Universidad de La Plata 47 N.º 380 / La Plata B1900AJP / Buenos Aires,
Argentina
 Parasitología médica 4ª edición// Marco Antonio Becerril Flores
 Parasitosis humanas Incluye animales venenosos y ponzoñosos 5ª
edición (2014) // David Botero & Marcos Restrepo
 Parasitosis Humana Botero 5ta Edición. Autores: David Botero, Marcos
Restrepo.
 Manual De Parasitología Medica 4ta Edición.
 Parasitología Médica- Manual Moderno. Elba G. Rodríguez Pérez

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