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Traducción especializada en alemán.

Nuria Hidalgo Gracia.

TAREA 10:
Enfermedad mental:
Trastornos mentales, especialmente la melancolía (depresión), ansiedad y ataques de
pánico, y también otros trastornos psicosomáticos que están por encima de la media
frecuentemente se asocian con el dolor. En algunos casos, su causa es en parte
físicamente explicable, aunque solo el estado mental del paciente explican la gravedad
de los síntomas y sobre todo la magnitud de cambios de conducta y personalidad
derivados. En este caso, se habla de secuelas psicológicas del dolor. En cartas
médicas también se habla de “superposición cuántica- espiritual”.
Sin embargo hay otros tipos de dolor crónico, causados por la psique: el médico o el
psicólogo los denominan “trastornos de somatización dolorosa”. Para el propio
paciente, esto es extremadamente doloroso. No tienen relación con la simulación o la
imaginación. Generalmente, estas quejas se vinculan con unos cambios en la zona
dolorida, es decir, los afectados se quejan de manera alterna sobre dolor muscular en
la pierna o en el brazo y en ocasiones el dolor se desplaza por todo el cuerpo. En
muchos casos, los pacientes tienen, de manera justificada , tanto dolor físico como
dolor psicólogico.
Tales condiciones de dolor pueden ser una primera señal de advertencia de una
depresión, que si se identifican de manera temprana se pueden mejorar. Cuando se
ignora tal conexión, no es inusual que en el historial médico del paciente se observen
una gran variedad de análisis corporales y ensayos clínicos superfluos, en los cuales
frecuentemente se observan enfermedades raras, pero casi nunca se encuentran.
Este procedimiento puede ser nocivo para el paciente: el tratamiento incorrecto de una
enfermedad mental, lleva en su lugar a enfermedades raras o “exóticas”, es decir, se
asume que son enfermedades que no son entendibles para la escuela de medicina.
Tales diagnósticos auxiliares pueden ser “síndrome de alergia múltiple”, “reumatismo
de tejidos blandos”, pero también la neuborreolosis o la fibromialgia son mencionados
en el contexto, pero no se aplica el diágnostico. Si estos no se pueden corrobar, los
pacientes confundidos suelen acudir a médicos privados discutibles, los cuales le
suelen corroborar el diagnóstico.
Algunos médicos y pacientes están sucumbidos a un pensamiento en blanco y negro
que no justificable por la ciencia: ellos piensan simplemente que el dolor tiene un
motivo físico o psicológico.
El dolor psicológico no tiene relación con la “pretención” o simulación. La palabra
simulación significa que una persona consciente y deliberadamente finge una
enfermedad, aunque en realidad no tenga ningún sufrimiento. En el caso del dolor
psicológico provocado es al contrario: los afectados a menudo padecen dolores
todavía más intensos que aquellos de los que su causa del dolor está clara. La
incertidumbre es aquí un intensificador del dolor.

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