Dietoterapia:

Definición, objetivos, parámetros nutricionales.

La dietoterapia es una disciplina que se encarga de utilizar la alimentación como
herramienta terapéutica para tratar y prevenir enfermedades.
Los objetivos de la dietoterapia son:

1. Tratar enfermedades
2. Prevenir enfermedades
3. Mejorar la calidad de vida

Los parámetros nutricionales:

1. Energía
2. Macronutrientes
3. Micronutrientes
4. Fibra
5. Agua
Dietas Terapéuticas: clasificación, abreviaturas, consideraciones nutricionales:

Las dietas terapéuticas se utilizan para tratar y controlar enfermedades específicas, y se

adaptan a las necesidades individuales de cada persona.

1. Dieta hipocalórica (HC): Se utiliza para el tratamiento de la obesidad y consiste en

reducir la ingesta de calorías.
2. Dieta hipercalórica (HCE): Se utiliza para el tratamiento de la desnutrición o para
aumentar el peso corporal en casos específicos.
3. Dieta hipoproteica (HP): Se utiliza en enfermedades renales y hepáticas, donde se
necesita reducir la carga de proteínas para disminuir la acumulación de productos de
desecho.
4. Dieta hiperproteica (HPE): Se utiliza en casos de desnutrición o en personas que
necesitan aumentar su masa muscular, como los deportistas.
5. Dieta baja en carbohidratos (LC): Se utiliza en el tratamiento de la diabetes tipo 2 y la
resistencia a la insulina.
6. Dieta sin gluten (SG): Se utiliza en el tratamiento de la enfermedad celíaca y la
sensibilidad al gluten.
7. Dieta sin lactosa (SL): Se utiliza en personas con intolerancia a la lactosa, donde se debe
evitar o limitar la ingesta de productos lácteos que contienen lactosa.

Las dietas terapéuticas

1. Equilibrio nutricional: Asegurarse de que la dieta proporcione todos los nutrientes
necesarios en las cantidades adecuadas para mantener una buena salud.
2. Personalización: Adaptar la dieta a las necesidades individuales de cada persona,
teniendo en cuenta factores como la edad, el sexo, el peso, la actividad física y las
condiciones médicas.
3. Control de porciones: Controlar el tamaño de las porciones para evitar el consumo
excesivo de calorías y nutrientes no deseados.
4. Variedad de alimentos: Incluir una amplia variedad de alimentos para obtener todos los
nutrientes necesarios y evitar deficiencias.
5. Hidratación adecuada: Asegurarse de mantener una buena hidratación bebiendo
suficiente agua y líquidos saludables.
6. Supervisión profesional: Consultar a un dietista o nutricionista para obtener una
evaluación individualizada y recomendaciones específicas.