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Psicologia e historia de las religiones.

(Apunte final)

 Filosofía de la religión (Ricardo Ferrara).


Se comienza a hablar de una fenomenología que refiere al análisis de las
religiones en base a las similitudes y diferencias para aprender a dialogar entre
ellas, logrando revalorizar las culturas, al dividir semánticamente “fenómeno”
referirá a la historia, a la lingüística y la sociología, es decir, a como se modifica la
historia en torno a la religión vigente, como también sus cambios lingüísticos sobre
su significado y sus intervenciones, por ende, sus reacciones sociales. En torno a
lo religioso estaremos hablando de la manifestación de lo sagrado, ya que esto
sagrado es el elemento y estructura de conciencia que media con la realidad.

Esta fenomenología de la religión se compone por 3 (tres) conceptualizaciones


primordiales en toda religión, lo cual deberá entenderse como la unidad
analógica, ellos son:

 Lo sagrado: Referido al ámbito, al tiempo, espacio, cosmos y la vida


humana, aquella puerta de entrada a lo divino, mediador entre lo divino y lo
profano.
 Lo divino: Como el centro y fin último, siendo personal o impersonal, polo
ultimo de lo sagrado.
 Lo profano: Todo aquello que esta por fuera, siendo neutro, uniforme, de
realidad abstracta.

El termino religión será utilizado como TOI, como termino objetivo intencional, lo
cual se dividirá en dos estudios centrales, el primero referido a un aspecto
hermenéutico, que estudia la evolución de la palabra de la religión que se
nombrara como Quid Nominis, por otro lado se analizara lo eidético, es decir, el
sentido especifico, la esencia de la religión y su historia que se nombrara como
Quid Reí.

En torno al quid Nominis se desarrolló de la siguiente manera:

 En el año 711 a. C. los romanos hablan de religió referido al cumplimiento


estricto del culto.
 En el año 43 a. C. Cicerón habla de Relegere (releer) como la revisión del
cumplimiento.
 Con los primero cristianos buscaran alejarse de los vocablos griegos ya que
suponen superstición, se hablara de religare, en donde interviene el
concepto de piedad y la idea de reunir al hombre con Dios “Quedamos
sujetos a Dios y anudados a él con el vínculo de la piedad”
 San Agustín coincidirá con la terminología anterior, hablara de pelagio o
religare, pero agregando que “eligiéndolo o mejor reeligiéndolo ya que
habíamos perdido por la negligencia”, lo que se relacionara con la libertad,
entendiendo al cuerpo como la cárcel del alma.
 En la edad media, Tomas de Aquino decide unificar los conceptos bajo el
concepto de “ordo ad deum” señalando que la religión no será un practica
tradicional si no un vínculo personal que relaciona al hombre con su
creador, entendida como una religión verdadera, que tendrá como virtud
cardinal la justicia, desde la desigualdad máxima expresada en la
adoración.
 En el renacimiento quedara incluido el término a un concepto general,
entendido como un mismo instinto natural común en todos, que se dividirá
en dos aspectos ya que por un lado se hablara de una disposición natural a
invocar a dios, presente en los gentiles, pero por otro lado se hablara de un
alejamiento a dios por la idolatría necesaria para justificarse.
 Desde David Humé y su crítica a la religión natural por ser reducida a lo
moral y la justicia dejando de lado los sentimientos, hablara de una religión
civil que tendrá una misma estructura que la natural pero en vez de
reducirse a una moral individual, estará al servicio de la moral social y
política.
 Immanuel Kant compartió la idea de la religión natural de carácter ético,
pero ocupándose de esas condiciones éticas, ya que el hombre no es solo
racional si no que lucha con la sensibilidad y para sobreponerse a esta
necesitara de la esperanza que le aporte la religión, se hablara de una
religión ética.

En torno al quid reí, el análisis se dividirá en dos elementos principales:

 La diversidad esencial será en torno a los objetos principales (aquello


divino) y los objetos secundarios (el culto) de cada religión, los objetos
principales fueron/son (Ser supremo, politeísmo, dualismo, monomismo
religioso como ser impersonal, o monoteísmo profético como persona con
desarrollo histórico.
 La unidad analógica referirá a lo anterior mencionado como lo divino, lo
profano y lo sagrado.

Definiciones operacionales de religión:


I. Definición de religión: Conjunto de actos humanos agrupados bajo el
nombre de culto por los que el hombre se relaciona con un término
intencional al que atribuye divinidad de algún modo que adora con
veneración y al que ora por su salvación.
II. El culto: A partir del polo humano, podemos decir que es aquello que
integra a todo el hombre, a la razón, la sensibilidad, la voluntad y el
sentimiento expresados a través de actos que podrán ser cultos interiores
(como la devoción u oración) y los cultos exteriores (como la adoración,
sacrificios, etc.).
III. Lo divino: Partiendo de un polo objetivo intencional de la actitud religiosa,
lo divino será aquello para referirnos a la persona de dios y también a su
principio trascendente impersonal.
IV. Lo sagrado: Es aquello que está cargado de presencia divina pero también
está prohibido al contacto humano, es decir, carácter bifronte debido a que
posee un carácter de mediador entre lo puro (divino, frágil, sacro) y lo
impuro (profano, invasivo). Lo sagrado nos relaciona con lo divino mediante
el rito de sacrificio, es decir, mediante la privación de algo valioso ya que
esto no es una renuncia si no una liberación.
V. Mysterium tremendum el fascinans: Misterio tremendo y fascinante,
doble actitud del que adora con veneración (temor reverencial) y que ora
(esperanza amorosa) por su salvación. Se hablara de numinosidad como
aquello que a través del susto/miedo genera una atracción sobre el deseo
de comunicarse con lo divino y un deseo de parecerse.
VI. Morfología de lo sagrado: Aquellas categorías que articulan el mundo de
lo sagrado:
 Espacio sagrado: Implica una ruptura de nivel (con lo profano) en
donde se busca una transición a un nivel superior, estableciendo un
centro que da sentido u orienta para habitar un cosmos y escapar del
caos. Este espacio posee signos que sirven de ruptura con lo
profano (puerta de iglesias) y el eje central es en torno a la
posibilidad de habitar dicho lugar con posibilidades de comunicarse
con lo divino.
 Tiempo sagrado: El tiempo sagrado y profano se oponen pero se
comunican a través de rito. En el caso del tiempo sagrado este será
reversible, tendrá como eje central el mito que podrá ser
cosmogónicos (tiempo en que los dioses crearon el mundo) y el mito
de origen (creación de aquello sustentable de vida en la tierra), como
también estará el mito escatológico (aniquilar el mundo anterior para
recrearlo) y el mito del eterno retorno. Con el paso del tiempo el
tiempo dejo de ser eje central los mitos teogónicos (sobre el origen
de los dioses) para dar lugar a los mitos ontológicos sobre el origen
del hombre y como el origen de dichos no será el rito si no un
esfuerzo del pensamiento.
 Cosmos sagrado: Referirá a los elementos de la naturaleza que
manifiestan un aspecto sagrado (hierofanias), ellas serán:
Hierofanias celestes (bóveda celeste, cielo como lugar de retiro, para
perfeccionar, antepasados). Hierofanias acuáticas (símbolo de lo
virtual, previo a lo formal que nace de ellas y regresa a ellas, muerte
y vida. Hierofanias terrestres (símbolo de lo materno, de la
fecundación y los alimentos). Hierofanias lunares (por sus fases,
nacimiento, muerte y resurrección, posibilidad de dimensionar ritmos,
cosmobiologia que permite entender el devenir y la sucesión de
contrarios). Hierofanias solares (en torno a valores como la
autonomía, la fuerza, la soberanía e inteligencia, simbolizando lo
masculino. Y las hierofanias humanas (que permitieron entender la
unión entre el hombre y lo natural a través del acto
sexual(hierogamias) y el poder de darle mayor valor a las cosas a
través de lo simbólico, estableciendo rito de iniciación como modo de
reconocimiento de la comunidad)

 Hermenéutica del mito.


La hermenéutica refiere a la interpretación o traducción de teorías y religión se
simbolizara a través del mito, como termino simbólico y plural de la razón, es decir,
las verdades sobre la religión que podrán ser relatos o vivencias.

En torno al mito relatado, como las interpretaciones clásicas de verdad de las


religiones que se reciben 3 (tres) interpretaciones, ellas son:

 La teoría tautegorica: Se habla del mito desde la literalidad, al ser así se


habla de una verdad nula por su contenido irracional e inverosímil aunque
su forma literaria sea agradable.
 La teoría alegórica: Aquí el mito tendrá un doble significado, por su
literalidad y por lo alegórico, es decir, la literalidad habla de un significado
falso pero desde lo alegórico se observa aquella enseñanza oculta.
 La teoría simbólica: En este tipo de mitos la verdad precede de la
intencionalidad doctrinal o cognoscitiva, ya que remite a un sentido
alegórico pero no oculto.

Por otro lado tendremos la interpretación de los mitos vividos, buscando


comprender la intencionalidad que lo anima y el tipo de realidad a la que
remite, desde una concepción moderna, ella posee 3 (tres) interpretaciones
que son:
 Teoría fenomenológica: Entendiendo que el comportamiento mítico
responde a un comportamiento racional, ya que estos son vivientes y
operantes, por ser algo real para una creencia efectiva como a su vez
son estructurales y permanentes por que responden a un nivel
verdadero.
 Teoría psicoanalítica: Ya que todas las expresiones conscientes son
alegorías del inconsciente, el cual puede ser por lo individual o el
colectivo que otorgue sentido.
 Teoría Existencial: Este tipo de teorías señalan que solo a través del
mito y el símbolo podremos conocer su sentido oculto, es decir, a través
de la reflexión sobre el mito en si se logra trascender a la libertad.

 Pluralidad y ambigüedad (David Tracy).


La pluralidad refiere al lenguaje y la ambigüedad es sobre la historia, lo cual en
ambos casos es posible por la cosificación (resistencia).

La interpretación es el significado que se le da a las conversaciones, estas podrán


ser buenas o malas en la medida que tenga capacidad de iluminar los problemas
que descubrimos y para incrementar las posibilidades de una acción adecuada.
Todo acto de interpretación implica al menos 3 (tres) realidades: Fenómeno a
interpretar, alguien que lo interprete y una interacción entre esas dos realidades.

Aquí también entra lo afectivo porque cuando uno conversa se transmiten


emociones y afectos, la cual es independiente a la interpretación que le de cada
sujeto, ya que hay dificultad de interpretar cualquier acontecimiento clásico o
cualquier texto, símbolo, ritual o personalidad con categoría de clásico por
ejemplo, esto sería poder entender el modelo desde su estructura, lo clásico es
importante hermenéuticamente porque representa el ejemplo de lo que buscamos,
un ejemplo a la vez de estabilidad hecha permanencia y de exceso de significado
a través de recepciones siempre cambiantes.

Para que exista una conversación debe existir un cuestionamiento que genere
argumentos, ya que la conversación será el modelo de toda interpretación.
Debemos hablar de la comprensión (aquello singular) para pasar a una
comprensión, es decir, darle un sentido dentro de la conversación con el otro, lo
cual es posible por un cuestionamiento que genere una argumentación. Esta
argumentación es un momento vital dentro de la conversación que aspira a
progresar, estos pueden ser argumentos formales (para discernir entre posiciones
enfrentadas, analizan afirmaciones de coherencia) y argumentos temáticos
(analizan validez de afirmaciones substantivas).
La conversación es un juego con algunas normas estrictas, decir lo que quiere
decir, decirlo de forma precisa como se puede escuchar y respetar, puesto a
corregir o a defender las opiniones propias y si son debatidas con el otro
participante de la conversación. Nos referimos a juego porque toda conversación
solicita salir de si, generar una autoconsciencia, que nos posibilite la
interpretación.

 Introducción al cristianismo (J. Ratzinger)


Se establecen 6 (seis) principios que serán los pilares de la existencia cristiana,
simultáneamente son formulas de la esencia del cristianismo, ellos son:

1. El individuo y el todo: El cristianismo nace del principio de corporeidad


(carácter histórico), debe ser pensado en el plano del todo donde
únicamente tiene sentido, pero al mismo tiempo admite y tiene que admitir
el principio de individual que es su escándalo y que así se nos presenta en
su necesidad y racionalidad más íntima.
2. Principio “para”: Refiere a pasar de ser para sí mismo, siendo para los
demás.
3. Ley del incognito: Refiere a ser para otro escondido, otro que se
representa como lo más pequeño cósmicamente (dios).
4. Ley de lo abundante: La abundancia entendida como el auténtico
fundamento de la historia de la salvación, ya que en el acontecimiento que
dios nos da el universo, también nos da a sí mismo.
5. Lo definitivo: Refiere a que ya que dios es lo más basto y supremo, ya
realizo la definición del hombre, entonces lo definitivo existe en la historia,
es decir, ya existe lo definitivo en el futuro.
6. La esperanza: Refiere a la capacitación para que el espíritu de
responsabilidad, sereno y libremente realice las obras en este mundo y las
ponga al servicio del amor redentor.

 Psicologia de la religión (H. Zolliner).


La psicología y la teología mantienen un dialogo pero se separan por la línea de
demarcación que refiere a la influencia y potencia de dios. Corresponderá a la
psicología mostrar como toda experiencia religiosa lleva siempre una huella de
singularidad personal.

A la psicología resta la tarea de establecer criterios para una religiosidad madura,


incluido un sistema integrados de valores cuyos principios fundamentales son:

 La prohibición del incesto.


 La prohibición del homicidio.
 La tolerancia y el respeto de los derechos ajenos.
 El amor por el prójimo y por sí mismo.

Los aportes de la psicología pueden contribuir a comprender mejor cómo funciona


la religión en las personas y cuáles son los aspectos relevantes. Según la visión
teológica, la gracia divina no actúa independientemente, sino en y mediante la
entera realidad humana, comprendiendo la realidad psíquica del individuo.

La relación entre psicología y religión refiere a que cuanto más se respeten las
especificidad del propio cuadro de referencias (psique del hombre/relación con
Dios) más se multiplican las oportunidades de un fecundo influjo reciproco, en
donde la psicología de la religión se encuentra en el medio.

La psicología de la religión aprenderá a poder describir solo una parte de la


realidad humana en donde un determinismo psíquico contradice la experiencia
ordinaria del hombre y que por ende, ella no debe presumir de sí misma, entonces
esta psicología se analiza como horizonte importante pero no fin último.

La psicología de la religión indaga planeamiento y métodos psicológicos, las


causas y los efectos del contenido de la religión y sus implicancias de tipo
psíquico, cultural y social. La religión está presente en todas las culturas. En la
relación con la transcendencia divina están implicadas variables de naturaleza
física que juegan un rol importante en la vida del hombre y en la imagen que él se
hace de sí mismo. Así los estímulos y respuestas ofrecidas por la psicología de la
religión permiten al creyente actuar con mayor realismo y eficacia.

Procedimientos: en general, en el contexto de la psicología de la religión se


pueden individualizar los siguientes modelos principales de relación entre religión
y psicología: a). La psicología es considerada sierva de la religión o de la teología
(ciencia auxiliar de la cual la teología se sirve cuándo Y cómo quiere), integración
y diálogo objetivo son aquí, obviamente, fuera de discusión; b). Una psicología
religiosa que se pone esencialmente Cómo practicó-pastoral, en cuanto dirigir a
solucionar cuestiones y problemas de cura personales y a la aplicación inmediata
en el ámbito Pastoral, de la catequesis o caritativo. En tal acercamiento, la
frecuente falta de reflexión teórica, lleva qué presupuestos antropológicos
fundamentales de determinadas orientaciones psicológicas, no explícitos pero sí
muy influyentes, sean asumidos acríticamente en la práctica pastoral. A menudo
en contextos pastorales, se usa como argumentó la pretendida neutralidad de
valores de las posiciones psicológicas, hasta el punto que a veces la psicología
asumido el rol de la religión como fuente instituyente de sentido; c). El
acercamiento interdisciplinario según el cual religión y psicología, en cuanta
ciencia autónoma, al acercarse a la realidad se respetan y se intercambian
informaciones. Y el lugar en que se encuentran es para ambas aquel de apertura
de la vida humana a la trascendencia. Aquí la religión puede abrir a la psicología el
último horizonte de sentido al que la psicología por sí sola no es capaz de aspirar,
pero al que puede y debería, sin embargo dirigir su atención para no presumir de
la propia capacidad explicativa y de la propia validez. Por su parte, la psicología
puede ayudar a la religión a desarrollar un sentido crítico de la realidad y a
describir concretamente y con sobriedad algunos aspectos del misterio de la
salvación y sus consecuencias para los hombres.

Objeto de estudio: el hombre en la medida que se relaciona con lo trascendente.


El objeto de investigación de la psicología de la religión remite a la realidad
espiritual de la experiencia vivida, a la cual el sujeto atribuye un significado
religioso.

La ciencia y la visión del mundo: la psicología ha asumido muchas veces la


función desarrollada con precedencia por la religión, sirviendo a muchos como
visión del mundo, es decir, como criterio de orientación personal o para
evaluaciones sociales. Así, a la psicología se le ha conferido una dimensión ético-
religiosa. En efecto, al individuo atomizado y desarraigado de la sociedad de la
información y de la migración, ella ofrece métodos, perspectivas y formas
conceptuales, con las cuales éste puede ordenar la propia interioridad Y definir la
propia relación con el mundo.

 Psicologia y religión (Carl Jung).


Se explica a la psicología como aquella que se ocupa del fenómeno de la
experiencia religiosa como actividad de la psique humana, es decir, de cómo se
manifiestan en la mente del hombre las ideas religiosas, las ideas sobre dios o el
hecho de que no tenga ninguna. Estas ideas son aceptadas por la psicología
como hechos ya que el hombre es quien las tiene quien crea para sí mismo
imágenes.

Los fenómenos religiosos no suponen una mera sublimación, sino una autentica y
legitima función del psiquismo humano. Esta psique es un factor autónomo y sus
manifestaciones religiosas ponen en manifiesto ciertas confesiones pquicas que
en último término obedecen a procesos inconscientes.

1. Jung califica su método de fenomenológico, en el que “trata de sucesos, de


acontecimientos, de experiencias, en resumen, de hechos. Su verdad es un
hecho, no un juicio”, llegando a asegurar que “La psique existe, más aún,
es la existencia misma”.
Respecto a la religión, la psicología, a juicio de Jung, sólo se ocupa de este
fenómeno como actividad de la psique humana, es decir, en el modo como se
manifiestan en la mente del ser humano las ideas religiosas, las ideas que éste
tiene de Dios, o del hecho que no tenga ninguna. Estas ideas son aceptadas por la
psicología como hechos, “pues –afirma Jung– es el hombre quien las tiene y quien
crea para sí mismo imágenes”, si bien no pueda inmiscuirse en el problema de la
realidad absoluta que la fe religiosa les atribuye.

Los fenómenos religiosos no suponen una mera sublimación, sino una auténtica y
legítima función del psiquismo humano. Esta psique es un factor autónomo, y sus
manifestaciones religiosas ponen de manifiesto ciertas confesiones psíquicas que
en último término obedecen a procesos inconscientes. Jung fue siempre un firme
defensor de una psicología “del alma” (que define como una fuerza motriz o vital)

2. Jung introduce la categoría NUMINOSO, tomando la idea de Rudolf Otto,


como una existencia o efecto dinámicos no causados por un acto arbitrario,
sino que, por el contrario, el efecto se apodera y domina al sujeto humano
que siempre, más que su creador, es su víctima. Sea cual fuera su causa lo
numinoso constituye una condición del sujeto, independientemente de su
voluntad. Es el miedo que tienen los sujetos a ese ente.
3. Cuando el autor habla de ÁNIMA, se refiere que desde tiempos
inmemoriales, siempre ha expresado en los mitos del hombre la idea de la
coexistencia de lo masculino y de lo femenino dentro del mismo cuerpo.
Tales intuiciones psicológicas por lo general se hallaban proyectadas en la
forma de la SYZYGIA divina, de la pareja divina, o en la idea de la
naturaleza hermafrodita del CREADOR.

 Experiencia mística y psicoanálisis (C.D. Morano).


La mística forma parte de ese tipo de experiencias que nos remiten a esa deseada
y al mismo tiempo temida ruptura y salida de los limites conscientes de nuestro
Yo, como la sexualidad y la locura.

Definición y tipología de la experiencia mística: Mística remite y cobra sentido


en lo oculto, lo escondido y lo misterioso. La experiencia mística según Zachner se
diferencia entre una mística profana/natural y otra esencialmente religiosa.

 La mística profana posee contenido y significación siempre de carácter


inminente, es una vivencia de paz interior, de luz subjetiva, de iluminación
intelectual, en donde hay pérdida de miedo a la muerte y predomina el
sentimiento de unión con la totalidad de lo real.
Fenomenología de la experiencia mística: Se refiere a 4 (cuatro) elementos
básicos en estos estados de consciencia:

1. Inefabilidad/imposibilidad: De tratar de describir lo que ocurrió en la


vivencia interior.
2. Iluminación intelectual: Iluminación interior que parece desvelar
clarividencia sobre el sentido de la realidad.
3. Transitoriedad: No es un estado, sino una experiencia que dura minutos o
como máximo 1 o 2 horas.
4. Pasividad: Ya que se impone sobre el sujeto adueñándose de él y
dejándolo reducido a un radical estado de quietud.

Dos enfoques psicoanalíticos sobre la experiencia mística:

 Enfoque genético: dimensión materna: Refiere al sentimiento oceánico


(deseo de perderse y diluirse en el todo de la divinidad), regresión a un
estado de fusión primitiva y gozosa en un objeto vivido como totalidad, así
aparece la relación con lo materno para entender este estado de
consciencia, lo cual resulta clave para entender la relación de objeto que
mantiene el místico con su dios.
 Enfoque estructural: función paterna: Refiere a un desgajamiento básico
de esa matriz primera que es el mundo materno. El símbolo paterno
posibilita que la representación del todo tome una figura, un nombre y una
representación singular. Esto se relaciona con los modos de vínculo con los
otros, que se posibilita por esta función, ya que la experiencia mística
necesita la referencia de una palabra tercera (iglesia, espíritus), en donde
reconocer la ausencia posibilita una autentica relación.
 Tensión entre mística e institución: La tensión refiere a la diferencia de
los discursos ya que lo místico se sitúa en el orden de la enunciación, como
relación al/los otro/s. La institución utiliza un lenguaje situación en el orden
de los enunciados, como relación a las cosas.

 El arte de amar (E. Fromm).


El amor, la respuesta al problema de la existencia humana.

Se toman elementos del Judaísmo y del pecado original para explicar la


Separatidad. Este concepto se basa en el individualismo o sentimiento de
separación inicial que lleva a la consciencia de que no pertenecemos a nuestro
alrededor, esto produce angustia por dimensionar al otro como externo, diferente,
generando así un sentimiento de culpabilidad que rompe el estado de unidad. Por
este sentimiento de individualidad el hombre busca suplir por momentos
orgiásticos.

Estos estados orgiásticos surgen por no soportar la ruptura de la unidad


transitoria, el otro método será el trabajo productivo pero también está la opción de
una unión por conformidad donde la culpa se deposita en el otro.

Desde Lacan explicado por el estado del espejo en donde el niño es un sujeto
que tiene amor pasivo ya que lo recibe pero para luego convertirse en activo.

Erich Fromm a partir de esto propone dos tipos de amor:

 Un amor maduro que es aquel amor desinteresado, sin condiciones, con


reciprocidad desinteresada y autentica.
 Un amor inmaduro es aquel interesado, forzado, en donde hay espera
constante.
Antes los 3 (tres) modos de separación que solucionen el problema
existencial, generando un amor simbiótico o dependiente como que será
predominado por sentimientos de celos, rutinas, desinterés por el otro y
envidia (tiene aspectos positivos ya que genera cuidado de recursos para
subsistir)

Las uniones simbióticas se presentaran de forma activa a través del sadismo y


de forma pasiva a través del masoquismo, en donde se busca que el otro se aislé.
Para que sea verdadero amor como maduro, debe compartirse y sintetizarse en 4
(cuatro) elementos:

 El cuidado (protección con acciones).


 Responsabilidad (Asumir las decisiones).
 Respeto (Reconocer al otro como es).
 Conocimiento (Descubrir, conocer, prestar atención).

El verdadero amor es un arte que merece ser conocida la teoría para poder
llevarlo a la práctica que es lo verdaderamente importante. Para poder amar se
debe aprender; el amor es un arte y como todo arte va a requerir una teoría y una
práctica ya que el mismo No es espontáneo. La solución está en conseguir la
Unión interpersonal, un amor Maduro que conserve la individualidad y que se basa
en el respeto y en el deseo de conseguir la propia felicidad con la satisfacción del
otro.

Objetos de amor: el amor no es esencialmente una relación con una persona


específica, es una actitud, una orientación del carácter que determina el tipo de
relación de una persona con el mundo como totalidad, no como un objeto
amoroso. Los objetos amorosos son: el amor fraternal, el amor materno, el amor
erótico, el amor a sí mismo y el amor a Dios.

 El amor fraternal es el principal tipo de amor y del que parten todos los
demás. Es el amor a todos los seres humanos y adquiere su firmeza en el
momento en que se llega a amar a aquél A quién No necesitamos para
conseguir nuestros fines personales.
 En el amor materno se encuentran dos factores importantes: es
incondicional e inculca al niño el amor a la vida. En el proceso de evolución
de este amor debe llegar un momento de separación en que desaparezca
la dependencia del niño respecto de su madre. Si esta madre ama a su hijo
debe de ser tal separación para el bien del niño. (Imagen de la Tierra
prometida) leche (cariño-cuidados) y miel (dulzura).
 El amor erótico posee las cualidades de exclusividad puesto que el deseo
de unión se traduce en una persona concreta. Sin embargo no debe
desechar el amor fraterno puesto que en tal caso el sentimiento de
Separatidad con el resto de la humanidad no sería superado.
 El amor a sí mismo: amarse a sí mismo No es señal de egoísmo ni tampoco
excluye el amor a los demás, ambos están íntimamente ligados. Tiende al
crecimiento y a la felicidad ya que conoce tanto sus capacidades como sus
límites. La persona egoísta además de no amar a los demás es incapaz de
amarse a sí misma.
 El amor a Dios: la necesidad de amar recaen la experiencia de la
Separatidad, cuando ocurre esto se busca un amor trascendente. Al hablar
del Amor adiós se puede Establecer un paralelismo entre éste y el amor
entre padres e hijos, que está muy relacionado con el grado de madurez de
la persona. Así, el amor de Dios en su aspecto a matar no se presenta
como una gracia incondicional, sin embargo en su aspecto paterno el
hombre debe hacerse merecedor de tal amor mediante las buenas obras. El
concepto varía según la sociedad en que haya crecido la persona. En las
sociedades orientales, cuya filosofía está basada en la lógica paradójica, el
conocimiento de Dios y de su amor se logra mediante la vida misma. En
cambio en las sociedades occidentales el amor de Dios es la misma fe en
tal amor, es fundamental una experiencia mental.
 Vivir con sentido, aplicación práctica de la logoterapia
(Alfried Lange).
En la actualidad la búsqueda de sentido radica en la libertad del ser humano por
su condición de inacabado, en la valoración de las diversas cosas y en el cambio
constante de las situaciones. Como se sabe la falta de sentido genera
desesperación, ya que el sentido tiene que ver con el modo de ver la vida del ser
humano, la cual se haya en un entorno físico y social dotada de disposiciones que
uno no eligió, por ende la libertad es condicionada por los límites del otro,
condicionada por las posibilidades históricas de la persona que amplían o limitan.

En el caso de aquellos que no se consideran libres es por vivir una vida de


expectativas debido a la espera del cumplimiento de su deseo, como si esta
actitud inmadura se conservara el deseo infantil frente a los padres de ser
mantenido y alimentado. Se señalara que la vida no llega a la plenitud al cumplirse
los deseos, si no ante 3 (tres) cosas:

 Vivenciar lo que tiene valor en sí, aquello bueno, bello o enriquecedor.


 Modificar y orientar algo hacia mejor en sí mismo y no para mí.
 En caso de no lograr lo anterior, crecer y madurar para no aceptar
pasivamente y modificarse a sí mismo para orientarse hacia lo mejor.

El sentido de la libertad consiste en buscar razones por medio de las cuales se


torna posible decidir, a una verdadera decisión anteceden dos pasos: La
información de la cual hay que apropiarse para conocer la situación y
capturar la valencia contrastando los datos para diferenciar su valor útil de su
valor propio. De estos dos pasos resulta la orientación pertinente como guía
de la decisión.

Se podría concluir que el ser humano es libre de decidirse y no puede sustraerse


realmente de esa libertad. El encargo que va unido al ser libre consiste en
diferenciar y decidir ya que solo así puede abrirse el mejor camino, en la
confrontación con la situación. Se denomina a este camino sentido, por lo que
sentido puede definirse como una posibilidad que se abre ante el trasfondo de la
realidad.

Para entender el sentido existencial debemos entender dos variables que son las
condiciones o posibilidades de la situación concreta y también las capacidades,
propiedades y habilidades de la persona, cuando se consideran ambas hablamos
de una decisión realista. Una decisión tiene sentido solo si a uno le significa algo,
lo cual conformaría al 3er componente. Frankl describe a estas tres variables
como las vías principales hacia el sentido, las cuales son:
1. Valores vivenciales: Se convierten en sentido cuando uno encuentra bellas
en si aquello que se encuentra y las acoge participando activamente y
reproduciendo internamente su ser.
2. Valores creativos: Aquellas situaciones en las que el ser humano con su
acción, con su decisión, con su valiente tenacidad, contribuye a la
conservación de un valor o respaldo de una idea.
3. Valores de actitud: Relacionado con el sufrimiento, ya que este conforma la
esfera más íntima del ser humano pero no debe ser utilizado para
posicionarse como héroe, si no de permanecer en uno mismo, adoptar una
actitud frente al destino que puede ser entregarse a él sin luchar o
arrebatarle la influencia determinante.

 La sabiduría de los padres del desierto (Anselm Grun).


Analisis de nuestros pensamientos y sentimientos como modo de encuentro
consigo mismo, prestándole atención a las pasiones de nuestro corazón,
conocerlas y tratarlas debidamente para conseguir la apatheia, aquel estado de
paz, tranquilidad interior por el acuerdo de las pasiones que permite amar.

La filosofía griega reconoce en el hombre 3 (tres) campos el de los apetitos


(epithymia), el de las emociones (thymos) y el espiritual (nous), estos también
tienen gran parecido con la enseñanza de los 9 (nueve) logismoi de Evagrio, que
son pensamientos acentuados por el sentimiento que pueden dominar al hombre,
de aspecto positivo y negativo (entendidos como vicios o demonios), ellos son:

 Dentro del apetito desde lo negativo se asignan los vicios de glotonería


(comer sin sentido), la lujuria (dar gusto al cuerpo) y la avaricia (como
impulso a la posesión).
 Dentro de lo emocional se asignan los vicios de la melancolía (deseos y
necesidades sin satisfacer), la ira (agresión incontrolada) y la acedia
(incapacidad de vivir el momento presente).
 Dentro de lo espiritual se asignan los vicios de la vanagloria (hacer todo
para ser visto), la envidia (compararse constantemente con otros sobre mi
valoración) y el orgullo (ya que se identifica tanto con su ideal que se
rehúsa a ver la realidad).

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