Exactamente, esos son los tres puntos clave que se consideran en

el currículo escolar desde el paradigma de la complejidad:

1. ¿Qué enseñar y aprender? Se busca que el currículo escolar

tenga un enfoque más integral, que no solo se centre en la
transmisión de conocimientos, sino también en el desarrollo de
habilidades y competencias que permitan a los estudiantes
enfrentar situaciones complejas en la vida real. Se busca que los
estudiantes sean capaces de aplicar lo que aprenden en situaciones
prácticas y no solo memorizar información.

2. ¿Cómo organizar lo que se enseña y se aprende? Se busca que

el currículo escolar sea un proceso dinámico y en constante
evolución, que se adapte a las necesidades y características de los
estudiantes. Se busca que el currículo sea flexible y se ajuste a las
necesidades de los estudiantes, en lugar de ser una lista rígida de
temas que se deben cubrir.

3. ¿Cómo enseñar y cómo aprender? Se busca que el proceso de

enseñanza y aprendizaje sea más participativo y colaborativo,
fomentando la creatividad y el pensamiento crítico. Se busca que
los estudiantes sean los protagonistas de su propio aprendizaje, y
que los maestros actúen como facilitadores del proceso. Se busca
que los estudiantes aprendan a través de la experimentación y la
reflexión, y no solo a través de la transmisión de información.
Exactamente, el paradigma de la interculturalidad en el currículo
escolar busca reconocer y valorar la diversidad humana, cultural y
lingüística en el proceso educativo. El diseño curricular Nacional
tiene como objetivo avanzar hacia una educación de calidad, que
promueva la inclusión y la equidad.
Se busca una educación intercultural, que reconozca y valore las
diferentes culturas presentes en la sociedad, y que promueva el
diálogo intercultural. Se busca que los estudiantes aprendan a
valorar la diversidad cultural, y a respetar las diferencias.

Además, se busca una educación ambiental que promueva la

sostenibilidad y el cuidado del medio ambiente. Se busca que los
estudiantes aprendan a valorar y cuidar el medio ambiente, y a
desarrollar habilidades y competencias que les permitan enfrentar
los desafíos ambientales actuales y futuros.

La educación intercultural y ambiental se concibe como

transversal al sistema educativo, es decir, que se integra en todas
las áreas curriculares y no se limita a una asignatura específica. Se
busca que la educación intercultural y ambiental sea una parte
integral del proceso educativo, y que se refleje en la forma en que
se enseña y se aprende.
Exactamente, el paradigma de la democracia en el currículo
escolar busca formar ciudadanos capaces de participar
activamente en la sociedad y contribuir al desarrollo de una
sociedad democrática, justa, inclusiva, próspera, tolerante y
forjadora de la cultura de Paz.

El diseño curricular Nacional propone explícitamente una

educación que contribuya a formar una sociedad democrática, en
la que se promuevan los valores de la igualdad, la justicia, la
libertad y la solidaridad. Se busca que los estudiantes aprendan a
participar activamente en la sociedad, a través de la reflexión
crítica, la toma de decisiones informadas y la acción ciudadana.
Además, se busca una educación inclusiva, que valore la
diversidad y promueva la equidad. Se busca que los estudiantes
aprendan a respetar y valorar las diferencias, y a trabajar juntos
para construir una sociedad más justa y tolerante.

Por último, se busca una educación que promueva la cultura de

Paz, en la que se fomente el diálogo, la cooperación y el respeto a
los derechos humanos. Se busca que los estudiantes aprendan a
resolver conflictos de manera pacífica, y a construir relaciones
interpersonales basadas en el respeto y la empatía.

En resumen, el paradigma de la democracia en el currículo escolar

busca formar ciudadanos capaces de participar activamente en la
sociedad y contribuir al desarrollo de una sociedad democrática,
justa, inclusiva, próspera, tolerante y forjadora de la cultura de
Paz.
Dentro del currículum Nacional encontramos al paradigma de la
democracia, teniendo en cuenta consideraciones para avanzar en 1
proceso de democratización de 1 gestión de la escuela centrada en
la autoridad del director a otra que convoca la participación de
todos los objetos educativos a través de sus representantes y en
forma directa cuando es necesario.
Exactamente, dentro del paradigma de la democracia en el
currículo Nacional se busca avanzar en un proceso de
democratización de la gestión de la escuela. Esto implica pasar de
una gestión centrada en la autoridad del director a otra que
convoca la participación de todos los objetos educativos a través
de sus representantes y en forma directa cuando es necesario.

Se busca que la gestión de la escuela sea más participativa y

colaborativa, involucrando a todos los actores educativos en la
toma de decisiones. Se busca que los estudiantes, padres de
familia, docentes y personal administrativo tengan voz y voto en
los procesos de toma de decisiones, y que se fomente el diálogo y
la reflexión crítica.

Además, se busca que la gestión de la escuela sea más

transparente y rendidora de cuentas. Se busca que se promueva la
transparencia en la gestión de los recursos, y que se rindan
cuentas a la comunidad educativa sobre los procesos de toma de
decisiones y los resultados obtenidos.

En resumen, el paradigma de la democracia en el currículo

Nacional busca avanzar en un proceso de democratización de la
gestión de la escuela, promoviendo una gestión más participativa,
colaborativa, transparente y rendidora de cuentas. Se busca
involucrar a todos los actores educativos en la toma de decisiones,
y fomentar el diálogo y la reflexión crítica.
de currículo y métodos a profesionales con sentido crítico y
autonomía, capaces de tomar decisiones y responsabilizarse por
los resultados de su trabajo.
Sí, otra de las consideraciones del paradigma de la democracia en
el currículo escolar es que los docentes pasen de asumirse como
simples aplicadores de currículo y métodos a profesionales con
sentido crítico y autonomía. Se busca que los docentes sean
capaces de tomar decisiones y responsabilizarse por los resultados
de su trabajo.

Se busca que los docentes sean capaces de reflexionar

críticamente sobre su práctica docente, y que sean capaces de
adaptar el currículo y los métodos de enseñanza a las necesidades
y características de los estudiantes. Se busca que los docentes
sean capaces de innovar y experimentar en su práctica docente, y
que sean capaces de evaluar y mejorar continuamente su trabajo.
Además, se busca que los docentes sean capaces de trabajar en
equipo, colaborando con otros docentes y con otros actores
educativos en el proceso de enseñanza y aprendizaje. Se busca
que los docentes sean capaces de aprender de sus colegas y de
otros actores educativos, y que sean capaces de compartir sus
experiencias y conocimientos.

En resumen, el paradigma de la democracia en el currículo escolar

busca que los docentes pasen de asumirse como simples
aplicadores de currículo y métodos a profesionales con sentido
crítico y autonomía. Se busca que los docentes sean capaces de
tomar decisiones y responsabilizarse por los resultados de su
trabajo, y que sean capaces de trabajar en equipo y colaborar con
otros actores educativos.
De entender el currículo como 1 producto acabado a considerarlo
en permanente revisión para atender la diversidad en las aulas, así
como el avance permanente en las distintas ciencias.
Exactamente, otro de los cambios que se busca en el paradigma
de la democracia en el currículo escolar es pasar de entender el
currículo como un producto acabado a considerarlo en
permanente revisión. Se busca que el currículo sea un proceso
dinámico y en constante evolución, que se adapte a las
necesidades y características de los estudiantes, y que tenga en
cuenta el avance permanente en las distintas ciencias.

Se busca que el currículo sea más flexible y adaptable a las

necesidades de los estudiantes, y que se ajuste a las características
de cada contexto educativo. Se busca que el currículo se revise y
actualice de forma periódica, para incorporar los avances en las
distintas ciencias, y para atender la diversidad presente en las
aulas.
Además, se busca que el currículo tenga en cuenta las necesidades
y características de los estudiantes, y que se adapte a sus intereses
y motivaciones. Se busca que el currículo sea más personalizado,
y que se adapte a las necesidades y ritmos de aprendizaje de cada
estudiante.

En resumen, el paradigma de la democracia en el currículo escolar

busca pasar de entender el currículo como un producto acabado a
considerarlo en permanente revisión. Se busca que el currículo
sea más flexible, adaptable y personalizado, y que se ajuste a las
necesidades y características de los estudiantes, y al avance
permanente en las distintas ciencias.
Dentro de las consideraciones también está el trabajo aislado al
trabajo colaborativo en equipo de docentes expuestos a tomar en
cuenta la opinión de directivos, estudiantes y padres de familia.
Sí, otra de las consideraciones del paradigma de la democracia en
el currículo escolar es pasar del trabajo aislado al trabajo
colaborativo en equipo de docentes. Se busca que los docentes
trabajen en equipo, colaborando con otros docentes y con otros
actores educativos en el proceso de enseñanza y aprendizaje.

Se busca que los docentes estén expuestos a tomar en cuenta la

opinión de directivos, estudiantes y padres de familia, y que
trabajen en conjunto para tomar decisiones que beneficien a la
comunidad educativa en su conjunto. Se busca que los docentes
sean capaces de trabajar en equipo, compartiendo experiencias,
conocimientos y recursos, y que sean capaces de aprender de sus
colegas y de otros actores educativos.
Además, se busca que el trabajo colaborativo en equipo de
docentes sea una práctica común y cotidiana en la escuela, y no
solo una actividad puntual. Se busca que los docentes trabajen en
equipo para planificar, implementar y evaluar el proceso
educativo, y que se involucren en la toma de decisiones de
manera activa y participativa.

En resumen, el paradigma de la democracia en el currículo escolar

busca pasar del trabajo aislado al trabajo colaborativo en equipo
de docentes, promoviendo la colaboración y el diálogo entre los
actores educativos. Se busca que los docentes trabajen en
conjunto para tomar decisiones que beneficien a la comunidad
educativa en su conjunto, y que el trabajo colaborativo en equipo
sea una práctica común y cotidiana en la escuela.