Contenido: el sonido y sus parámetros (timbre, duración e intensidad)

1) Escuchar sonidos e identificar sus parámetros:

Al comenzar la clase se presentará a los niños un títere o peluche de conejo con la orejas caídas.
Se les mostrará al conejo y se les dirá que estaba durmiendo, pero cuando despertó se encontró con
que sus orejas seguían durmiendo (si se acercan a ellas se podrá escuchar un suave ronquido). Como
tiene las orejas dormidas no puede escuchar nada de lo que se le dice.
Él ama la música y quiere poder escuchar lo que se reproducirá en el aula, por eso les pide a los niños
que dibujen la música.

¿Dibujar la música?

Si, aquí tenemos varios lápices de colores con los que iremos dibujando lo que oímos. Para los
sonidos fuertes usaremos los lápices rojos, azules y violetas. Cuando escuchamos algo más calmado y
bajo haremos líneas amarillas o verdes. Intentaremos prestar atención a lo que oímos, y trataremos de
pintar con las mismos colores cuando nos parece que algo se repite.

Se procederá a encender una melodía y se acompañará a los niños en el proceso sugiriendo o guiando
sus líneas.

1) Participar en ejecuciones vocales y/o instrumentales en contextos musicales en los cuales

se realizan variaciones intencionales desde la intensidad, la altura, la duración y el
timbre.

Procederemos a tomar nuestro instrumento y proponer la siguiente actividad: vamos a tocar una
canción dentro de una cueva, ¿saben lo que sucede en las cuevas? El sonido retumba, hace eco. Yo
cantaré y ustedes repetirán lo mismo. Presten atención porque habrá partes en que se cantará muuy
bajito, otras en que se gritará. En algunas estrofas cantaremos muy agudo como los pajaritos, en otras
seremos osos feroces que cantan grave. En algunas partes cantaremos rápido como las liebres, en otra
lo haremos muy lento como los caracoles.

Para guíar a los niños se usarán gestos que indiquen la manera en que se cantará.
Al cantar grave bajaremos nuestras manos y nos agachamos, cuando cantamos agudo levantamos
nuestras manos. Cuando hay que hacerlo bajito posamos un dedo en nuestros labios, cuando hay que
hacerlo fuerte abriremos nuestras manos. (Los gestos pueden ser reemplazados por cartas que
contengan las figuras mencionadas anteriormente)

2) Proponer variaciones de parámetros del sonido en el contexto de las producciones

musicales áulicas

Finalmente, cuando se logre que los niños identifiquen cada gestó se propondrá que un niño dirija a
los demás, cantando la misma canción prestaremos atención a los gestos del niño, cantando más
grave, más agudo, lento, bajo, rápido, etc.