Está en la página 1de 28

3º JUZGADO DE TRABAJO - SEDE CENTRAL

EXPEDIENTE : 02092-2022-0-1501-JR-LA-03.
MATERIA : INDEMNIZACION POR DESPIDO ARBITRARIO.
JUEZ : ARAUCO VIVAS, TANIA, TULA.
ESPECIALISTA : DE LA CRUZ GUTIERREZ, DAISY NOELIA .
DEMANDADO : CORPORACIÓN ANDINA S.A.
DEMANDANTE : CARLOS RIVERA DE LA CRUZ.
SUMILLA:
El trabajador que acredite haber sido repuesto al
trabajo tras haberse declarado su despido incausado
en un proceso judicial; y, se configure la concurrencia
de los elementos de la responsabilidad civil tiene
derecho el pago de indemnización por daños y
perjuicios, por los daños acreditados.

Resolución Nro. 03
Huancayo catorce de enero
Del dos mil veintidós.

SENTENCIA N° -2022-3°JTH

I. ANTECEDENTES

Por escrito con fecha de presentación 16 de mayo del dos mil veintidós,
obrante en el sistema informático, don CARLOS RIVERA DE LA CRUZ, en la
vía del Proceso Ordinario Laboral, interponer demanda contra CORPORACIÓN
ANDINA S.A., pretendiendo indemnización por despido arbitrario, pago de
beneficios sociales.

II. ARGUMENTOS DE LA PARTE DEMANDANTE:

De los plasmados en su demanda, y oralizados en audiencia de Juzgamiento


(minuto 00:06:58), son sus principales argumentos los siguientes:
1. Que, ingresó a laborar para la demandada el 09 de enero del 2012 para
desempeñar el cargo de técnico administrativo en el área de logística, con
una remuneración mensual de S/ 1,500.00 soles, vinculo laboral que duró
hasta el 31 de marzo de 2022, fecha en la que fue víctima de un despido
arbitrario.
2. Que, en agosto de 2021 después de la declaración de emergencia
sanitaria, se les ordenó a retornar a sus labores de manera presencial, y la
demandada procedió a entregarnos los equipos de protección laboral, en
los meses de setiembre, octubre y noviembre, sin embargo en los primeros
días del mes de diciembre proceden entregar dicho implementos a los
trabajadores pero menos a la demandante, y al apersonarse a Recursos
humanos esta le señala que si no le entregaron los implementos a la
demandante lo debe adquirir por sus propios medios y que hasta la fecha
no se le hizo entrega dichos implementos.
3. Que, ante el despido del encargado de embarque y desembarque es que se
le asigna las funciones a través de un comunicado. Por lo que tuvo que
extender los horarios laborales y causándole carga laboral, también como
la exposición de contagiarse el COVID 19, lo que constituye acto de
hostilidad. Por lo que consideró terminar el contrato de trabajo 31 de
marzo de 2022 y decidió renunciar a su puesto de trabajo.

III. ARGUMENTOS DE LA PARTE DEMANDADA:

Mediante escrito de fecha 22 de mayo del dos mil veintiuno, el demandado


CORPORACION ANDINA S.A, absuelve la demanda, la cual fue incorporada a
autos en audiencia de Conciliación de fecha 24 de mayo de dos mil veintidós,
el mismo que fue oralizada en la audiencia de juzgamiento (minuto 00:09:31)
bajo los siguientes fundamentos:

1. Que, se encuentra fehacientemente acreditado que no existe documento


alguno que acredite el vinculo laboral, posterior a l 31 de abril de 2022.
2. Que, referente a la actor menciona que entregó antes de renunciar lo cual
no adjunta en los medios probatorios..
3. Que, el actor al señalar que fue un despido indirecto, lo cual no
configuraría los requisitos para el presente proceso. Y que las partes deben
de probar lo que alegan
IV. DE LA EXCEPCION:

SOBRE LA CADUCIDAD EN MATERIA LABORAL:


A. Al respecto, el autor Barassi la define señalando que “consiste en una
desaparición del derecho (o de una facultad) por su falta de ejercicios”, agrega
que su importancia radica “en cuanto constituye una forma de proteger la
certeza de los derechos, es decir, cuando como la prescripción, obedezca al
mera transcurso del tiempo”1. Asimismo, el jurista Albaladejo, refiere que “La
caducidad significa que (…) generalmente una facultad o un llamado del
derecho potestativo, tendentes a modificar una situación jurídica (…) nace con
un plazo de vida, y que, pasado éste, se extingue. Se trata, pues, de que una
facultad o el derecho que sea, es de duración limitada”2. Por su lado, De
Ruggiero especifica que “la ley o la voluntad del particular preestablece un
término fijo dentro del cual una acción puede promoverse de modo que, expirado
el plazo, ya no es ejercitable aquella en modo alguno, y con esto se prescinde de
toda consideración de negligencia en el titular o de imposibilidad en que éste se
halla mirándose únicamente al hecho en el transcurso del término”3. En
consecuencia, se desprende que la caducidad extingue el derecho y la acción, lo
que significa que si bien es cierto el titular del derecho puede intentar la acción,
al haberse extinguido el derecho la Judicatura tiene la potestad de declarar la
caducidad sin haber sido invocada por la parte a quien se le impone el derecho.

B. En ese contexto, en la Primera Disposición Complementaria de la Ley N° 29497


- Nueva Ley Procesal del Trabajo, se establece que: “En lo no previsto en esta
Ley son de aplicación supletoria las normas del Código Procesal Civil”, 4 en
ese sentido es de tener presente que según lo dispuesto en el artículo IX del
Título Preliminar del Código Procesal Civil, “Las normas procesales
contenidas en este Código son de carácter imperativo; siendo así, en el
artículo 427° del Código Procesal Civil, se dispone que: “El juez declarará
improcedente la demanda cuando: (…); 3. Advierta la caducidad del
derecho; (…)”, siendo así, en el artículo 2003° del Código Civil, se dispone que:
“La caducidad extingue el derecho y la acción correspondiente”, así mismo,
en el artículo 2006° de la misma norma, se dispone que: “La caducidad puede
ser declarada de oficio o a petición de parte”, en consecuencia, “la caducidad
es el medio por el cual el transcurso del tiempo extingue el derecho y la acción
correspondiente en razón de la inacción de su titular durante el plazo prefijado
por la ley”5, por lo que “transcurrido el plazo de caducidad el derecho deja de
existir, es decir, el plazo de caducidad puede operar de pleno derecho sin
requerirse de declaración judicial”6.

En este orden de ideas, en ámbito laboral, el Tribunal Constitucional en la sentencia


recaída en el Expediente N° 976-2001-AA/TC, (Caso Eusebio Llanos Huasco),

1
BARASSI, Lodovico, “Institución de Derecho Civil”. Vol. II, Barcelona, Jose M. Bosch, 1955, Pagina 601.
2
ALBALADEJO, Manuel. “Derecho Civil”. Tomo I, vol. II, Barcelona, Librería Bosch, 1980. Página 484.
3
DE RUGGIERO, Roberto, “Institución de Derecho Civil”. Tomo I, Madrid, Instituto Editorial Reus, 1979. Página 339.
4
La supletoriedad es la aplicación en segundo grado de normas distintas a las que regulan principalmente un
determinado supuesto de hecho.
5
TORRES VASQUEZ, Anibal. CÓDIGO CIVIL. Tomo II. Pág. 987 – 988.
6
Idem. Pág. 990.
define el despido incausado y el despido fraudulento como modalidades del despido
arbitrario, sentencia en que se prevé en tales casos los efectos restitutorios
(readmisión en el empleo). En ese extremo el II Pleno Jurisdiccional Supremo en
Materia Laboral, al tratarse sobre el Tratamiento Judicial del Despido Incausado y
Despido Fraudulento: Aspectos Procesales y Sustantivos, (Tema N° 03, en el
numeral 3.2.) se desarrolla: ¿Cuál es el plazo de caducidad y cómo se computa,
para presentar una demanda de reposición por despido incausado o despido
fraudulento?, acordando el Pleno por unanimidad que: “El Plazo de caducidad
para interponer una demanda de reposición por despido incausado o despido
fraudulento es de treinta (30) días hábiles de producido el despido calificado
como inconstitucional, de conformidad con el artículo 36º del Texto Único
Ordenado de la Ley de Productividad y Competitividad Laboral Decreto
V. ACTUACIÓN PROBATORIA:

1. En audiencia de conciliación llevada a cabo el 12 de noviembre de 2021,


con la asistencia de ambas partes procesales, se declara precluida esta
etapa, pues el abogado delegado por la Municipalidad Distrital de El Tambo
no tiene facultades para conciliar; es así que, se pasó a fijar la pretensión
materia de juicio conforme a lo precisado en el Considerando I de la
presente y se señala fecha para la realización de audiencia de juzgamiento.

2. En audiencia de juzgamiento llevada a cabo el 07 de enero 2022, con la


asistencia de ambas partes, se determinó como:

 Hechos que no requieren de actuación probatoria (minuto 00:13:22):


a) La relación laboral de la demandante a favor de la demandada, bajo
los alcances del Decreto Legislativo 276 a plazo indeterminado, el
mismo que ha sido declarado en un proceso judicial.
 Hechos que requieren de actuación probatoria (minuto 00:13:40):

a) Determinar la fecha de despido y la fecha de reposición de la


demandante.
b) Determinar si se han configurado los elementos de la responsabilidad
civil contractual.
c) Determinar si corresponde ordenar el pago de la indemnización de
daños y perjuicios en su componente de Lucro cesante, Daño
emergente, Daño moral y Daño punitivo.
VI. FUNDAMENTOS PREVIOS:

1. El artículo 139° inciso 3 de la Constitución Política del Perú prevé que son
principios y derechos de la función jurisdiccional la observancia del debido
proceso y la tutela jurisdiccional. El Debido Proceso implica que el juzgador
al resolver la controversia que se suscite lo haga con arreglo a Derecho y en
el marco del procedimiento preestablecido aplicando para ello los principios
que inspiran el proceso7. El debido proceso tiene por función asegurar los
derechos fundamentales consagrados en la Constitución. Dando a toda la
persona la posibilidad de recurrir a la Justicia para obtener la Tutela
Jurisdiccional de los derechos individuales, a través de un procedimiento
legal en el que se dé oportunidad razonable y suficiente de ser oído, de
ejercer el derecho de defensa, de producir pruebas y de obtener una
Sentencia que decida la causa dentro de un plazo preestablecido en la Ley
Procesal8. Asimismo, el Título Preliminar del Código Procesal Civil en su
artículo I precisa el Derecho a la Tutela Jurisdiccional Efectiva “Toda
persona tiene derecho a la tutela jurisdiccional efectiva para el ejercicio o
defensa de sus derechos o intereses, con sujeción a un debido proceso”. El
derecho a la Tutela Jurisdiccional Efectiva es inherente a toda persona por
el solo hecho de serlo. Constituye la manifestación concreta de por qué la
función jurisdiccional es, además de un poder, un deber del Estado, en
tanto no puede excusarse de conceder Tutela Jurídica a todo lo que se
solicite; siendo que durante el desarrollo del presente proceso se ha
mantenido y respetado los derechos precisados, no existe vulneración
alguna a los mismos; por lo que corresponde emitir pronunciamiento sobre
el fondo de lo discutido.

2. Que, según el artículo III del Título Preliminar de la Ley N° 29497 - Nueva Ley
Procesal del Trabajo, se sostiene como fundamento de todo proceso laboral, el
hecho que los jueces deben evitar que la desigualdad entre las partes afecte el
desarrollo o resultado del proceso, para cuyo efecto procuran alcanzar la
igualdad real de las partes, privilegian el fondo sobre la forma, interpretan
los requisitos y presupuestos procesales en sentido favorable a la
continuidad del proceso, observan el debido proceso, la tutela
jurisdiccional y el principio de razonabilidad. Los jueces laborales tienen

7
Cas N° 1972-01. Cono Norte, El Peruano, 02 de febrero del 2002, pág. 8342.
8
Cas. N° 3202-2001-La Libertad, El Peruano, 01 de enero del 2002, pág. 8944.
un rol protagónico en el desarrollo e impulso del proceso. Impiden y sancionan
la inconducta contraria a los deberes de veracidad, probidad, lealtad y buena
fe de las partes, sus representantes, sus abogados y terceros.

3. Que, la finalidad del proceso es resolver un conflicto de intereses o eliminar


una incertidumbre jurídica, ambas con relevancia jurídica, a tenor de lo
previsto en el artículo III del Título Preliminar del Código Procesal Civil; dentro
de un debido proceso, como una garantía constitucional, siendo que la carga
de la prueba conforme a lo previsto en el artículo 23.1 de la Ley Procesal del
Trabajo, corresponde a quien afirma hechos que configuran su pretensión, o a
quien los contradice alegando nuevos hechos, sujetos a las siguientes reglas
especiales de distribución de la carga probatoria, sin perjuicio de que por ley
se dispongan otras adicionales 1.Acreditada la prestación personal de
servicios, se presume la existencia de vínculo laboral a plazo indeterminado,
salvo prueba en contrario. 2. Al demandante la existencia de fuente normativa
de los derechos alegados de origen distinto al constitucional ó legal. 3. Incumbe
al demandado que sea señalado como empleador la carga de la prueba de: a) El
pago, el cumplimiento de las normas legales, el cumplimiento de sus
obligaciones contractuales, su extinción o inexigibilidad; b) La existencia de un
motivo razonable distinto al hecho lesivo alegado; c) El estado del vínculo
laboral y la causa del despido. En aquellos casos en que de la demanda y de la
prueba actuada aparezcan indicios que permitan presumir la existencia del
hecho lesivo alegado, el juez debe darlo por cierto, salvo que el demandado
haya aportado elementos suficientes para demostrar que existe justificación
objetiva y razonable de las medidas adoptadas y de su proporcionalidad. Los
indicios pueden ser, entre otros, las circunstancias en las que sucedieron los
hechos materia de la controversia y los antecedentes de la conducta de ambas
partes.

VII. FUNDAMENTOS DE LA DECISIÓN DE FONDO:

4. DETERMINAR SI SE CONFIGURAN LOS ELEMENTOS DE LA


RESPONSABILIDAD CONTRACTUAL CIVIL (ANTIJURICIDAD, FACTOR DE
ATRIBUCIÓN, NEXO DE CAUSALIDAD Y DAÑO)

4.1. En primer lugar, se debe determinar frente a qué tipo de responsabilidad


nos encontramos en el presente caso, con la finalidad de poder definir el
marco normativo aplicable. La diferencia entre los tipos de
responsabilidad regulados por nuestro sistema jurídico, se centra en la
existencia de un contrato y/o una obligación de carácter normativo que
vincula a las partes dentro de una relación jurídica debidamente
determinada como puede ser la relación jurídica de tipo laboral, para el
caso de la RESPONSABILIDAD CONTRACTUAL; y el deber genérico de
no causar daño a otra persona con quien no existe vínculo jurídico
alguno, en el caso de la RESPONSABILIDAD EXTRACONTRACTUAL.
Atendiendo a que el petitorio indemnizatorio se realiza a raíz del despido
realizado en contra de la actora y su posterior reposición a su centro de
labores como consecuencia del proceso judicial ganado seguido en el
Expediente N°01817-2014-0-1501-JR-LA-02, en el cual mediante
sentencia de vista N° 1221-201 se ordenó su reposición en el cargo de
Técnico Administrativa de la Sub Gerencia de Obras Públicas de la
Municipalidad Distrital de El Tambo, por lo que se concluye que la
pretensión materia de análisis obedece a la responsabilidad contractual
(en caso se compruebe la existencia del mismo), el cual se encuentra
enmarcado bajo el TITULO DE INEJECUCION DE OBLIGACIONES EN
EL CODIGO CIVIL, desde el Art. 1314° al 1350°, siendo dicho marco
normativo el aplicable al presente caso.

4.2. Para que pueda existir una responsabilidad civil pasible de


indemnización es necesario la existencia copulativa de sus elementos,
que son:

 El evento dañoso o antijuricidad, que puede ser un hecho ilícito


(típico o atípico) o un hecho abusivo;
 Criterio de imputación o factor atributivo de responsabilidad,
encontramos a la culpa (criterio subjetivo de atribución), el riesgo
(criterio objetivo de atribución) y la garantía (criterio indirecto de
atribución);
 La relación causal, es el nexo que existe entre el evento dañoso y el
daño, determina cuál es la causa; y
 El daño, que puede ser patrimonial (daño emergente o lucro
cesante) o no patrimonial (daño a la persona o daño moral).
Correspondiendo entonces evaluar la existencia en forma conjunta o no
de los elementos mencionados en el presente caso.
4.3. La Antijuricidad. - Una conducta es antijurídica 9 no sólo cuando
contraviene una norma prohibitiva, sino que también cuando la
conducta viola el sistema jurídico en su totalidad en el sentido de
afectar los valores o principios sobre los cuales ha sido construido el
sistema jurídico, en ese sentido, resulta evidente señalar que la
obligación de indemnizar nacerá siempre que se cause un daño como
consecuencia de haber interrumpido absoluta o relativamente una
obligación. En el caso de autos, el comportamiento antijurídico de la
demandada MUNICIPALIDAD DISTRITAL DE EL TAMBO, se ha
expresado en la vulneración del derecho constitucional al trabajo de la
demandante por cuanto:

4.3.1. Si bien la demandada alega que actuó en el ejercicio regular de


su derecho y dentro de su facultad de empleador podía dar término al
contrato que lo vinculaba con la actora, lo es que conforme a la
sentencia de vista N° 1221-201 de fecha 15 de agosto del 2017, expedida
por la segunda instancia, se tiene que en su considerando e) concluyó lo
siguiente: “ Siendo ello así, el demandante solo podía ser despedida por
las causas previstas en el Capítulo V del Decreto Legislativo N° 276, por lo
que la decisión de la demandada de dar por concluida la relación laboral
sin observar el procedimiento de ley, resulta violatoria de los derechos
constitucionales al trabajo y al debido proceso, reconocidos en los artículos
2°, inciso 15, 22° y 139° inciso 3, de la Constitución Política, razón por la
cual la presente demanda resulta amparable; tanto más, porque lo que
hace el órgano jurisdiccional es restituir los derechos fundamentales del
trabajador, que han sido conculcados por la demandada; (...)". Sentencia
que fue impugnada por la demandada, sin embargo, mediante la
Casación N°21965-2017-JUNIN, lo declara improcedente el recurso de
casación. De lo antes vertido, se extrae que la actora fue despedida sin
causa justificada, toda vez que en virtud al derecho que había adquirido

9
En la Casación N° 3168-2015 Lima, La Sala Civil Permanente de la Corte Suprema de la República ha precisado que “ 4.6. Al
respecto, uno de los principales elementos, es el de la antijuricidad de la conducta, la cual consiste en determinar que aquel
comportamiento ha contravenido una norma prohibitiva, y/o violado el sistema jurídico en su totalidad; es decir, solo nacerá la
obligación de indemnizar, cuando se haya causado daño a otro u otros, mediante un proceder que no es amparado por el derecho,
porque se incumple una norma imperativa, los principios del orden público, o las reglas de convivencia social, como las buenas
costumbres; y en el caso de los asuntos contractuales, ésta surgirá del incumplimiento de una conducta pactada de forma previa,
lo cual, es considerado como una conducta típica; supuesto que está regulado en el artículo 1321 del Código Civil; lo que dará
lugar a la obligación legal del resarcimiento. Entonces, cuando se cause daño en el ejercicio regular de un derecho, legítima
defensa o estado de necesidad, no existirá responsabilidad civil, porque estos habrían ocurrido en el ámbito permitido por el
ordenamiento jurídico.”
no podía ser cesada ni despedida por estar amparada por el artículo 1°
de la Ley N° 24041, el cual prescribe que “Los servidores públicos
contratados para labores de naturaleza permanente, que tengan más de
un año ininterrumpido de servicios, no pueden ser cesados ni destituidos
sino por las causas previstas en el Capítulo V del Decreto Legislativo N°
276 y con sujeción al procedimiento establecido en él, sin perjuicio delo
dispuesto en el artículo 15 de la misma ley.”, Por lo que el accionar de la
demandada se puede tipificar como antijurídico conforme a las
sentencias citadas precedentemente.

4.3.2. Por lo tanto, se encuentra constatado una clara transgresión


con intención de perjudicar el derecho constitucional al trabajo de la
demandante por parte de la demandada, con lo que la acción de la
demandada en contra de la actora consistente en despedirla, es contrario
al deber de preservar el contenido esencial del derecho constitucional al
trabajo, en sus dos aspectos, que son el de acceder a un empleo y no
ser despedido sin causa justa y debido procedimiento conforme al
artículo 27° de la Constitución Política del Estado; condición que genera
una clara inejecución de sus obligaciones contractuales laborales al
momento de despedir a la demandante.

4.4. El Factor de Atribución.- En materia de responsabilidad civil


contractual, el factor de atribución viene a ser la culpa leve, culpa
grave o inexcusable y el dolo, lo que significa que el autor de una
conducta antijurídica que ha causado daño responderá únicamente si ha
actuado con culpa o dolo, las cuales se encuentran previstas en los Arts.
1318°, 1319° y 1320° del Código Civil, en ese sentido, siendo el vínculo
laboral regulado por las instituciones jurídicas obligacionales del Código
Civil en forma supletoria se debe de tener en cuenta lo previsto en el
artículo 1314° del Código Civil. En el presente caso de lo actuado fluye
inequívocamente que la demandada ha actuado con dolo, dado que:

4.4.1. Se ha constatado que la actora sufrió un despido incausado,


motivo por el cual posteriormente fue repuesta a su trabajo, toda vez que
conforme a la sentencia de vista N°1221-2017 ya antes citada, se ha
acreditado que la actora fue cesada sin una causa de justificación,
asimismo, en su considerando d) se ha señalado que: “Entonces, la labor
realizada por la demandante fue como Técnica Administrativa, que es una
actividad permanente y al haber superado el tiempo de un año establecido
en el artículo 1 de la Ley 240411, ha adquirido el derecho a la protección
contra el despido arbitrario, teniendo la condición de trabajadora
contratada permanente, dentro del régimen laboral del Decreto Legislativo
Nº 276, más no como nombraba o incorporada a la carrera administrativa,
por lo cual no se requiere haber ingresado por concurso público de mérito
como alega la demandada.", de lo cual, se tiene acreditado el
conocimiento por parte de la demandada de los efectos que ello
conllevaría consigo, puesto que tiene conocimiento de sus obligaciones
laborales, y habiendo proseguido con ese actuar se tiene la manifestación
de voluntad de la misma para realizar el referido acto, máxime si la
demandada cuenta con un área de asesoría legal, por lo cual podemos
advertir una clara transgresión con ánimo perverso e intención de
perjudicar el derecho constitucional al trabajo de la demandante.

4.5. El Nexo Causal. - Se refiere a la relación jurídica de causa a efecto


entre la conducta típica o atípica y el daño producido a la víctima o
mejor dicho en la relación de antecedente – consecuencia, entre la
conducta antijurídica del autor y el daño causado a la víctima, pues
de no existir tal vinculación, dicha conducta no generaría la obligación de
indemnizar, siendo que en materia de responsabilidad derivada de
inejecución de obligaciones nuestro Código Civil se adscribe a la teoría de
la causa inmediata y directa regulada en el artículo 1321° del acotado
Código. Según lo expuesto precedentemente y el análisis de los medios
probatorios, se advierte una relación de causa a efecto entre la
conducta antijurídica atribuida a la demandada y el daño que alega
haber sufrido al demandante, dado que:

4.5.1. El hecho antijurídico atribuible a la demandada, precisado en el


considerando precedente, derivó en un periodo en el que la demandante
dejó de laborar para la Municipalidad Distrital de El Tambo; toda vez que
fue despedida el 06 de marzo del 2015 y repuesta mediante una medida
cautelar el 03 de diciembre de 2019, siendo el periodo que se mantuvo el
despido desde el 06 de marzo del 2015 hasta el 02 de diciembre de
2019. Periodo en el cual no cabe duda que sufrió daños al dejar de
percibir las remuneraciones y beneficios sociales a los que como
trabajadora tenía derecho y las aflicciones propias de la situación, lo cual
no habría sucedido de no haberse dado el acto antijurídico por parte de
la demandada, desarrollado previamente; sin embargo, los daños
alegados no se dan en toda la dimensión pretendida por la
demandante, conforme al análisis que se efectuara en líneas
posteriores.

4.6. El Daño.- El daño viene a ser el elemento más importante de la


responsabilidad civil a tal punto que de no existir o este ha sido resarcido
no existiría ya deber de indemnizar, en clara atención a la siguiente
referencia doctrinal “Siendo este (el daño) el aspecto fundamental, no
único, de la responsabilidad civil contractual o extracontractual, pues se
entiende que en ausencia de daño no hay nada que reparar o indemnizar
y por ende no hay ningún problema de responsabilidad civil. Tan
importante es este aspecto del daño producido, que hay quienes han
preferido denominar con mucho acierto a la responsabilidad civil como
derecho de daños. Pues bien, en sentido amplio se entiende por daño la
lesión a todo derecho subjetivo, en el sentido de interés jurídicamente
protegido del individuo en su vida de relación, que en cuanto protegido por
el ordenamiento jurídico, se convierte justamente en derecho subjetivo, esto
es un derecho en el sentido formal y técnico de la expresión” 10. El daño es
concebido como la lesión a todo derecho subjetivo, es decir es el
menoscabo a los intereses de los individuos en su vida de relación social
que el derecho ha considerado merecedores de tutela legal, pudiendo
dividirse en dos categorías: patrimonial – lucro cesante y daño emergente
- y extrapatrimonial - daño moral y daño a la persona. De los cuales la
demandante ha invocado el Lucro Cesante, Daño Emergente, Daño
Moral y Daño Punitivo, por lo que se procede a evaluar la existencia de
los mismos.

5. DETERMINAR SI CORRESPONDE ORDENAR EL PAGO POR


INDEMNIZACIÓN DE DAÑOS Y PERJUICIOS POR LOS CONCEPTOS DE
LUCRO CESANTE, DAÑO MORAL Y DAÑO PUNITIVO.

Estando a lo desarrollado en los párrafos precedentes corresponde evaluar la


existencia de cada uno de los daños invocados por la recurrente.

10
TABOADA CÓRDOVA, LIZARDO. “ELEMENTOS DE LA RESPONSABILIDAD CIVIL” CITADA. PÁG. 33-34.
5.1. Lucro Cesante.- Es aquella ganancia o renta frustrada dejada de percibir
a causa del acto dañino, en otras palabras, la pérdida de una ganancia
legítima o utilidad económica como consecuencia del daño, el cual no se
habría producido si el evento dañoso no se hubiera verificado 11, lo que
no incluye el gasto realizado para la obtención de dicho beneficio. Es
decir, es lo que se pudo ganar si el evento dañoso no se hubiera
producido.

5.1.1. Por lo que, no hay duda que la conducta antijurídica de la


demandada consistente en un despido arbitrario bajo la modalidad de
incausado a título de dolo, constatada precedentemente, ha frustrado la
ganancia o más precisamente los ingresos que venía percibiendo la parte
demandante por concepto de remuneraciones, al dejarlos de percibir
debido al despido incausado que le originó un periodo en el que dejó de
laborar para la demandada, desde el 06 de marzo del 2015 hasta el 02
de diciembre de 2019, por un total de 4 años, 8 meses y 27 días,
periodo en el cual la actora dejó de percibir los conceptos mencionados;
lo que no habría sucedido si no hubiese sido pasible del acto antijurídico
y atribuible a la parte demandada, esto teniendo presente en que solo se
evalúa en el presente caso el hecho generador del despido y su dimensión
en el daño durante el tiempo en que se mantuvieron los efectos del
despido sin ser variado. Consecuentemente se encuentra probado la
existencia del daño en su vertiente de lucro cesante, el cual,
conforme al segundo párrafo del Art. 1321° del Código Civil debe ser
resarcido por la demandada.

5.1.2. Ahora bien, la parte demandante, conforme se tiene de su escrito


de demanda y de lo oralizado en la audiencia de juzgamiento, pretende el
pago de S/ 25,929.00 soles por el concepto de lucro cesante,
manifestando que al momento de su despido venía percibiendo una
remuneración mensual de S/ 2,010.00 soles. Por su parte, la demanda
sostiene que el empleador está obligado a pagar al trabajador solo por
servicios efectivamente prestados, y habiéndose acreditado que el

11
La Sala Civil Permanente de la Corte Suprema, mediante Casación Nro. 476-2008-AREQUIPA, ha indicado que en el caso de los
procesos de indemnización por daños y perjuicios, “(…) uno de los conceptos indemnizatorios reclamados es el lucro cesante el
mismo que es entendido como una forma de daño patrimonial que consiste en la pérdida de una ganancia legítima o de una utilidad
económica por parte de la víctima o sus familiares como consecuencia del daño, el cual no se habría producido si el evento dañoso
no se hubiera verificado, vale decir, es lo que se ha dejado de ganar y que se habría ganado de no haber sucedido el daño.”
accionante no prestó servicios efectivos, no le corresponde percibir las
remuneraciones dejadas de percibir, más aun estando a que la
accionante durante el periodo en el que se mantuvo su despido de la
Municipalidad Distrital de El Tambo, laboró para el Gobierno Regional de
Junín, conforme a los siguientes medios probatorios: A) Hoja de
inscripción y obtención de RUC en donde se indica que laboró en tal
entidad desde el 23 de diciembre de 2009, y B) Listado de penalidad a
empresas contratistas, ambos presentados en el anexo 1-E y 1-F de la
contestación de la demanda, obrante a páginas 89 y siguientes.

5.1.3. Estando a lo señalado, corresponde tener presente que el


monto indemnizatorio por el presente concepto, en atención a la
Casación N° 229-2005-Lambayeque12 publicada el 01 de octubre del
2012 y la Casación N° 2431-2012-Cusco13, no puede ser equiparada
al pago total de las remuneraciones y beneficios sociales dejados de
percibir, al estar frente a un despido incausado y no a un despido nulo
propiamente dicho, el cual si tendría como consecuencia  el pago de las
remuneraciones devengadas desde la fecha del despido hasta la de su
reposición, así como el depósito de la compensación por tiempo de
servicios generados durante dicho periodo. Tanto más si se tiene
presente que en el Pleno Jurisdiccional Nacional Laboral y Procesal
Laboral del 23 y 24 de mayo del 2019 se acordó por mayoría lo siguiente
“En las pretensiones indemnizatorias derivadas de un despido
inconstitucional, incausado o fraudulento declarados judicialmente como
tales; el daño patrimonial invocado a título de lucro cesante, debe ser
entendido como todos los ingresos dejados de percibir como
consecuencia directa e inmediata del despido y no como las
remuneraciones dejadas de percibir; y cuya existencia real y objetiva
deberán ser acreditadas a fin de determinar la cuantificación que se

12
En ese sentido, la Corte Interoamericana. de Derechos Humanos de fecha treinta y uno de enero del dos mil uno, determino en
el caso de reposición de Magistrados del Tribunal Constitucional Peruano que el estado Peruano debía indemnizar a los
magistrados repuestos en sus labores, tomando como uno de los criterios para el efectivo resarcimiento los salarios y prestaciones
dejadas de percibir, sin perjuicio de todos los daños que se acrediten debidamente y que tuvieran constitución con el hecho
dañoso constituido por la ilegal declaración de excedencia, por lo tanto, no existe sustento legal, nacional ni supranacional para el
pago de remuneraciones por periodo no laborado.
13
Es pertinente precisar que habiéndose acreditado el daño, lo que se manda a pagar es una indemnización tomando como
criterio para el resarcimiento los salarios y prestaciones dejadas de percibir sin considerar el análisis expuesto sobre la naturaleza
del proceso de amparo; por lo que es necesario enfatizar que no se puede calcular el quantum indemnizatorio tomando como
referente el Art. 40 del Texto Único Ordenado del Decreto Legislativo N° 728, Decreto Supremo N° 003-97-TR, ya que el mismo
seria conforme al Art. 24 de la Constitución Política del Estado, que prescribe el derecho a una remuneración equitativa y
suficiente teniendo como correlato la fuerza de trabajo brindada por el trabajador al empleador, (…), lo que no se ha configurado
en el presente caso por parte del trabajador durante el tiempo dejado de laborar.
sustentará en un parámetro temporal referido al tiempo de duración del
cese; un parámetro cuantitativo referido al importe de los ingresos ciertos
que hubiera dejado de percibir; y cualquier otra circunstancia que tuviera
incidencia directa en dicha cuantificación; deduciéndose los ingresos que
hubiese obtenido el demandante por servicios realizados en dicho período
de cese y los gastos que hubiera efectuado en el caso de continuar
laborando, para la obtención de sus remuneraciones”; del cual se deduce
que no se debe confundir el concepto del lucro cesante con las llamadas
remuneraciones caídas del despido nulo, dado que solo corresponderá
como base del cálculo del lucro cesante la remuneración bruta
propiamente dicha, lo que de por si descarta cualquier otro concepto
como los beneficios sociales que se hubieran generado.

5.1.4. Siendo así, es que en aplicación del Art. 1332° del Código Civil el
monto por lucro cesante ha de ser fijado, bajo el reiterado criterio que la
presente magistratura ha emitido en casos semejantes, consistente en la
totalidad de las remuneraciones que la demandante dejó de percibir en el
periodo en que no prestó sus servicios para la demandada por efecto del
despido calificado antijurídico, quedando claro que el periodo
indemnizatorio por lucro cesante se encuentra comprendido desde el 06
de marzo del 2015 hasta el 02 de diciembre de 2019, por un total de
4 años, 8 meses y 27 días, debido a que dicho concepto es el único que
se puede subsumir en forma incuestionable en el concepto de ganancia
directa frustrada por el despido ilegal sufrido, teniendo siempre presente
que estamos frente a un proceso indemnizatorio y no de remuneraciones
caídas.

5.1.5. Estando a lo alegado por la parte demandada, en cuanto sostiene


que la actora laboró para el Gobierno Regional de Junín durante el
periodo que se mantuvo el despido, lo cual acreditaría con la hoja de
inscripción y obtención de RUC en donde se indica que laboró en tal
entidad desde el 23 de diciembre de 2009, y con el listado de penalidad a
empresas contratistas. De lo señalado, se debe precisar que si bien con el
segundo medio probatorio presentado por la demandada se tiene que la
actora laboró bajo un contrato de locación de servicios N° 468-2018-
GRJ/OASA, lo es que la demandada no ha presentado medio probatorio
alguno que acredite el monto de la remuneración que la actora habría
percibido, ni tampoco el periodo laborado a favor del Gobierno Regional
de Junín; en ese sentido, se debe tener presente que para deducir los
ingresos que la actora hubiese obtenido por haber laborado para otro
empleador durante el periodo que no laboró para la Municipalidad
Distrital de El Tambo, no pueden ser establecido de modo subjetivo,
puesto que para efectuar dicha deducción, debe acreditarse el monto a
descontarse, y que este acredite que el daño alegado no se hubiera
configurado dado el monto percibido; lo cual está a cargo de la
demandada, conforme al artículo 23.1° de la Nueva Ley Procesal del
Trabajo – Ley 29497.

5.1.6. Sin perjuicio de lo antes señalado, se debe tener presente que el


derecho al trabajo es un derecho fundamental contenido en nuestra
Carta Magna así como en los tratados internacionales, por lo cual
ninguna persona puede ser privado de ejercer tal derecho, más aun que
al ser el trabajo el medio necesario para la obtención de las ganancias
que procuren su subsistencia, el trabajador depende de su remuneración
para poder vivir con dignidad, dada la naturaleza alimentaria que tiene
este, conforme lo ha señalado el Tribunal Constitucional en el sexto
fundamento de la sentencia en el expediente N° 499-2007-PA/TC “(…)
por consiguiente la remuneración como retribución que recibe el trabajador
en virtud del trabajo o servicio realizado para un empleador, debe ser
entendida como un derecho fundamental. Además de adquirir una
naturaleza alimentaria, tiene una estrecha relación con el derecho
a la vida, acorde con el principio - derecho a la igualdad y la
dignidad, amen que adquiere diversas consecuencias o efectos que serán
de vital importancia para el desarrollo integral de la persona humana.”,
por lo cual, una persona al verse despedida de su puesto de trabajo no
queda imposibilitado de buscar un trabajo que lo sostenga mientras dure
el proceso en el que pretenda su reposición al puesto del cual fue
despojado, sin que de darse ello sirva para desconocerle posteriormente
los daños ocasionados a raíz del despido, como señala el maestro Neves
Mujica14 en relación al derecho al trabajo que “el derecho de quien
carece de empleo a que se le procure uno y el de quien ya lo tiene a no
ser privado de él sin la justificación ni el procedimiento debidos”, así como

14
Neves Mujica, Javier. Introducción al derecho del trabajo. Tercera Edición. Fondo Editorial. Pontificia Universidad
Católica del Perú, Lima, 2016, p. 68.
también se ha establecido en la Declaración Universal de los Derechos
Humanos de 1948, que en el artículo 23.1 señala “Toda persona tiene
derecho al trabajo, a la libre elección de su trabajo, a condiciones
equitativas y satisfactorias de trabajo y a la protección contra el
desempleo”; Por lo que la demandada se encontraba en todo su derecho
de procurarse de un trabajo del cual generar sus ingresos, sin que ello
desmerezca el comportamiento antijurídico de la demandada y lo exima
de la responsabilidad ocasionada por el despido arbitrario.

5.1.7. Ahora bien, respecto al monto pretendido por la demandada, esta


sostiene que al momento de su despido venía percibiendo una
remuneración mensual de S/ 2,010.00 soles, por su parte la demandada,
conforme a su escrito de contestación, señala que en el caso negado de
corresponder este extremo se debería considerar la remuneración mínima
vital del periodo de desvinculación laboral. Por lo que, siendo que el
monto base para realizar el cálculo de la totalidad de las remuneraciones
es la remuneración bruta, la cual, conforme a lo precisado en el
considerando noveno de la sentencia de vista N° 461-2019-LA emitido en
el expediente N° 02371-2018-0-1501-JR-LA-03 consistente en “(…). Por lo
que, para efectos de la cuantificación de este concepto, debe tomarse como
criterio de estimación, el último monto remunerativo percibido hasta antes
del despido, por el tiempo que duró el aquel; (…)”, viene a ser el último
monto remunerativo percibido hasta antes del despido o en su
defecto el monto remunerativo anterior y más cercano a la fecha de
despido. Corresponde precisar que el quantum indemnizatorio por
lucro cesante se calculará en base a la remuneración bruta percibida
en la fecha del despido, por lo cual, de la revisión de los medios
probatorio ofrecidos, se tiene la Boleta de Pago del mes de febrero de
2015 obrantes a pagina 17, (mes inmediato anterior a la fecha de su
despido), en donde figura como el total de sus ingresos la suma de S/
1959.99 soles, la cual viene a ser su última remuneración, por lo tanto
será este el monto que se tomará como referencia a efectos de realizar la
liquidación por lucro cesante.

5.1.8. Por lo expuesto en los párrafos precedentes, conforme al artículo


1332° del Código Civil y estando a que se ha descrito la conducta
antijurídica de la demandada, así como se ha concluido que esta tuvo un
actuar doloso y que el daño que se causó al actor constituyó una
consecuencia inmediata del mismo, está en la obligación de resarcir el
daño ocasionado al actor por el concepto de lucro cesante, debiendo
tomarse como término de referencia para la cuantificación la suma de S/
1959.99 soles ya establecida previamente, por lo cual, multiplicado por
el periodo dejado de laborar consistente en 36 meses y 27 días (4 años,
8 meses y 27 días), nos da el resultado siguiente:

PERIODO REMUNERACIÓN OPERACIÓN MONTO


36 meses S/ 1959.99 1959.99*36 70,559.64
27 días S/ 1959.99 1959.99/30*27 1,764.00
TOTAL 72,323.64

5.1.9. En atención a ello, se concluye que a la demandante le


corresponde ser indemnizada por el concepto de lucro cesante con la
suma de S/ 72,323.64 soles.

5.2. Daño emergente.- Entendido como “(…) el empobrecimiento del


patrimonio, esto es, la pérdida, detrimento o menoscabo patrimonial
(…)”, lo que es conforme con el jurista Juan Espinoza Espinoza 15 que
define al daño emergente como “la perdida que sobreviene en el
patrimonio del sujeto afectado por el incumplimiento de un contrato o por
haber sido perjudicado por un acto ilícito, o como sostiene un sector
autorizado de la Doctrina Italiana, la disminución de la esfera
patrimonial”; a partir del cual se desprende que el presente tipo de daño
en puridad comprende la pérdida del patrimonio sufrido como
consecuencia de la inejecución de la obligación en cuanto a
responsabilidad de tipo contractual se refiere, es decir lo que se perdió
en el patrimonio de uno como consecuencia del acaecimiento del hecho
dañoso ello implica que la parte actora realice desembolsos o egresos de
su propio patrimonio.

5.2.1. En ese sentido, mediante la Casación N° 699-2015-Lima, la Corte


Suprema de la República, expuso lo siguiente:

Décimo Primero.- El demandante en su escrito de demanda, sostiene


que el daño emergente consiste: 1) El pago de honorarios profesionales
del abogado que lo patrocino en el proceso laboral, 2) las deudas
recaídas por servicios públicos, institucionales del sistema financiero y,
otras que no son del Sistema financiero, y 3) la venta forzosa del

15
ESPINOZA ESPINOZA, Juan. “Derecho de la Responsabilidad Civil”.
vehículo de su propiedad. Respecto al primer punto, no obra en autos el
contrato por prestación de servicios profesionales que acredite la suma
pactada ni el recibo de honorarios correspondiente que acredite la suma
pagada o lo adeudado en tal contrato. En cuanto al segundo punto, si
bien es cierto que existieron obligaciones impagas a entidades
financieras que luego de los requerimientos correspondientes se han
judicializado, afectándose lógicamente en algunos casos bienes del
actor, también es cierto que, no existe pérdida patrimonial que se
califique como daño emergente, en razón a que algunas de estas
obligaciones han sido canceladas, además que no obra en autos que
dichos bienes hayan sido objeto de remate judicial. La obligación
alimentaria, que el demandante tendría con su menor hijo, no
constituye daño emergente, puesto que esta deriva de una relación
familiar que necesariamente debe acudirse haya sido o no despedido.
Tampoco constituye daño emergente el pago de pensiones a la
universidad, por tratarse obligaciones familiares. Finalmente, en cuanto
al tercer punto, no obra en autos medios probatorio idóneo que acredite
que el demandante se haya visto forzado a vender el vehículo de su
propiedad; ni se acredita que haya sufrido pérdida de alguno de los
bienes muebles o inmuebles de su patrimonio descrito en la
Declaración Jurada de Bienes y Rentas que obra a fojas trescientos dos.
Siendo así, se puede concluir que tratándose el daño emergente la
pérdida o menoscabo que se produce en el patrimonio de la persona, tal
concepto no se ha acreditado en el presente proceso.

5.2.2. La demandante sustenta la existencia del presente daño en el


hecho de no tener la imposibilidad de costear los gastos de educación de
su hijo que se encuentra estudiando en una universidad, de acuerdo a la
hoja del estado económico general de la universidad; asimismo, aduce
que hizo prestamos de sus familiares para cubrir los mencionados
montos que eran siempre pagados con las remuneraciones que percibía
en su trabajo. En este aspecto, la demandada aduce que, no se inhabilito
a la actora de ninguna forma para poder concurrir en una vida normal , y
es por ello que, no se ha probado fehacientemente haber disminuido el
patrimonio, demostrándose que no hubo carencia en dicho estadio,
asimismo, alega que las deudas contraídas por prestamos no produce
una pérdida patrimonial.

5.2.3. Al respecto, de la hoja de estado económico general de la


Universidad Continental (obrante páginas 29 y 30) se evidencia los gastos
de educación de su hijo, los cuales fueron pagados, sin embargo, los
gastos de índole familiar son un deber que la demandante tiene que
cumplir obligatoriamente tenga o no un vinculo de carácter laboral. De
otro lado, en cuanto al supuesto préstamo de los familiares de la
accionante, no obra en autos documentos que lo acredite a pesar de ser
el deber de la demandante por tener la mejor condición para realizarlo en
este caso en conformidad con el literal c) del numeral 23.3. del Art. 23°
de la NLPT, de igual modo, consideramos que el préstamo no disminuye
el patrimonio, por el contrario lo incrementa.

5.2.3. Otro de los fundamentos de la actora en el aspecto del daño


emergente está referido al contrato los servicios de un abogado defensor
para el proceso de reposición, por lo que desembolso la suma de S/
4,000.00 soles, y que, en el tal proceso no se reconoció el pago de costos
y costas. Por su parte, la demanda menciona que el proceso de
reposición fue un Proceso Contencioso Administrativo, en el cual esta
exonerada la Municipalidad del pago de costos y costas procesales.

5.2.4. Para ello, cabe precisar que, en los Procesos Contenciosos


Administrativos, la entidad pública esta exonerada de pago de costos y
costas, según lo establece el artículo 49° del Texto Único Ordenado de la
Ley N° 27584 (Ley que regula el Proceso Contencioso Administrativo,
aprobado el Decreto Supremo N° 011-2019-JUS), por tanto, es posible
que la demandante no pudo resarcirse de los gastos que incurrió en su
proceso de reposición, empero, conforme lo prescribe el artículo 23.3
literal c) de la Ley N° 29497 (Nueva Ley Procesal del Trabajo 16), no ha
acreditado con el contrato, recibo por honorarios y comprobante de
tributación del abogado que lo defendió, pues en autos no obra
documento alguno referido a este punto, deviniendo en infundado este
pedido por improbado, atendiendo a lo previsto en el artículo 200 del
Código Procesal Civil de aplicación supletoria al presente proceso.

5.2.4. Siendo así, verificándose de los actuados que la accionante no ha


aportado al proceso los medios probatorios que acrediten el daño
emergente, ni que la cuantificación que efectúa provenga de la existencia
de este daño, consideramos que el pago por daño emergente debe ser
desestimado.

5.3. Daño Moral. - Entendida como la lesión a los sentimientos de la víctima


al producir una gran aflicción o dolor, que en materia de inejecución de

16
Artículo 23.3 Cuando corresponda, si el demandante invoca la calidad de trabajador o ex trabajador,
tiene la carga de la prueba de: […] c) La existencia del daño alegado.
obligaciones se encuentra como daño indemnizable en el Art. 1322° del
Código Civil. Sobre el particular el profesor Fernández Sessarego 17 lo
define como “Aquel pasajero sufrimiento, dolor, pena, angustia que sufre
la víctima a consecuencia del evento dañino, y que el victimario debe de
reparar; dicho daño no tiene naturaleza patrimonial, es decir, no es
cuantificable económicamente, por lo tanto el dinero no está destinado a
eliminar el dolor o sufrimiento, el dinero es sólo instrumental, representa
un medio que permite a la víctima disipar, si es posible y en alguna
medida, su dolor mediante el entretenimiento y esparcimiento adecuados a
cada personalidad; en tal sentido, siendo el daño moral uno de carácter no
patrimonial resulta imposible cuantificarlo económicamente, por lo tanto
solamente le corresponderá al Juez, con valoración equitativa, fijar el
monto”.

5.3.1. La parte demandada señala que conforme a la Casación N° 4385-


2015-HUANCAVELICA, se estableció que, si bien todo despido afecta el
ánimo del trabajador, este no es suficiente para concluir que el daño
moral se deriva de la extinción de la relación laboral. Sin embargo,
también existe jurisprudencia como la emitida en la Casación N° 699-
2015 Lima18, que establece que el solo despido sufrido por el trabajador
genera un daño moral, lo que se ve reforzado con lo precisado en el
fundamento 19 de la Casación N° 4977-2012 LA LIBERTAD 19. Por lo que,
al ocurrir dicho hecho en el presente caso conforme a lo desarrollado en
los considerandos precedentes, se da por existente el presente tipo de
daño en la persona de la demandante como una aflicción sufrida al
momento de ser despedida, que solo se puede dar por existente
durante el tiempo en que el despido considerado inconstitucional
mantuvo sus efectos que viene a ser del 21 de mayo del 2015 hasta el 31
de agosto del 2016.

17
FERNÁNDEZ SESSAREGO, Carlos. Nuevas Tendencias del Derecho de las Personas, Primera Edición. Págs. 307 y 308.
18
Décimo Segundo.- Finalmente, en cuanto a la pretensión por daño moral, teniendo en cuenta que éste consiste en el dolor,
angustia, aflicción física o espiritual que sufre la víctima del evento dañoso, en el presente caso, resulta amparable tal concepto
peticionado como indemnización, ya que el hecho mismo de ser despedido sin causa justa produce sufrimiento en el demandante,
quien puede ver un posible deterioro de su imagen ante sus familiares, amigos y la sociedad en general; por lo tanto, corresponde
fijar de manera prudencial el monto indemnizatorio del concepto indicado. Publicado en el Diario Oficial el Peruano el 30 de Junio
del 2016.
19
19. En el caso de autos, el daño moral, también se encuentra acreditado considerando el daño padecido por el demandante, su
repercusión psicológica al haber sufrido la pérdida de su empleo y el tiempo que generalmente tiene que emplear una persona
para reinsertarse en el ámbito laboral; (…). Tomado de: https://legis.pe/tener-derecho-indemnizacion-despido-arbitrario-no-
significa-recibir-pago-remuneraciones-periodo-no-laborado-casacion-4977-2012-la-libertad/.
5.3.2. El criterio citado con anterioridad para dar por existente el
daño moral en el presente caso seguirá siendo el adoptado por la
presente magistratura; aun cuando en el Pleno Jurisdiccional Nacional
Laboral y Procesal Laboral del 23 y 24 de mayo del 2019 se acordó por
mayoría lo siguiente: “En las pretensiones indemnizatorias derivadas de
un despido inconstitucional, incausado, fraudulento o arbitrario declarados
judicialmente como tales; el daño extra patrimonial invocado a título de
daño moral, que comprende además al daño a la persona y otros
similares; no cabe presumir la existencia del daño moral, y su existencia
deberá ser acreditada ya sea con medios probatorios directos o indirectos,
salvo los casos en los que además de vulnerarse el derecho al trabajo,
también se hubieran vulnerado otros derechos fundamentales como el
honor, la dignidad, u otros derechos de la personalidad, en cuyo caso
deberá presumirse el daño moral; sin embargo la cuantificación deberá
sustentarse en la prueba aportada o en la invocación de determinados
parámetros o criterios y sólo en ausencia de ellos podrá acudirse a la
valoración equitativa conforme al artículo 1332° del Código Civil”.

5.3.3. El acuerdo plenario antes glosado nos lleva a concluir que el


respeto a la dignidad del trabajador en una relación laboral, no es más
que la proyección en el ámbito laboral del principio de defensa de la
persona humana y el respeto de su dignidad como fin supremo de la
sociedad y del Estado, por cuanto, si bien el trabajador se encuentra
subordinado y limitado en ciertos derechos (durante la relación laboral),
se mantienen vigentes sus derechos de titularidad inespecíficos que le
son extensivos en su calidad de persona.

5.3.4. En ese entendido lógico, la dignidad del trabajador impide


considerarlo como una simple mercancía u objeto de trabajo, o como un
elemento impersonal de la organización productiva, reconociendo el
ordenamiento jurídico un mínimo inalienable (invulnerable), esto es, que
el trabajador ejerza sus labores con pleno respeto de sus derechos
fundamentales.

5.3.5. Dicho lo anterior, no cabe la posibilidad de hablar de un despido


inconstitucional que no lesione la dignidad del trabajador,
independientemente de la tipología del despido. Ciertamente, habrá casos
en los que se evidencie un mayor grado de lesión a la dignidad del
trabajador, no obstante, todos los despidos involucran una lesión a su
dignidad, debiendo analizarse en cada caso en concreto las
circunstancias del despido que se pretende resarcir.

5.3.6. Ahora bien, el quantum indemnizatorio se ha de fijar al amparo


del Art. 1332° del Código Civil, bajo determinados criterios que han
venido adoptando los órganos jurisdiccionales como:

 El Tiempo laborado antes del despido: La demandante


trabajó desde el 01/06/2008 al 06/03/2015 haciendo un
promedio de 6 años, 9 meses y 5 días.
 Cargo en la institución: La recurrente desempeñó funciones
de almacenera y Técnico Administrativo en la Municipalidad
Distrital de El Tambo.
 Clase y causa del despido: Despido incausado.
 La súper-protección que brinda la Constitución a
20
determinados trabajadores (artículo 23 ): No se presenta en
este caso.
 Edad de la víctima del despido: 41 años, a la fecha del
despido según copia de su Documento Nacional de Identidad
de paginas 15.
 Escarnio público: No alega.
 Contribución del trabajador para el despido: En el presente
caso, el despido fue sin contribución alguna por parte de la
trabajadora.
 Magnitud del menoscabo a la víctima y su familia (carga
familiar): La trabajadora presentó: a) Un Certificado
Psicológico de fecha 09 de setiembre de 2020, obrante a
pagina 31, en el cual se concluyó que “Evaluada presenta
afectación Psicológica y Emocional debido al despido laboral
arbitrario que afecto a su autoestima y sus habilidades
sociales por el estrés vivido. Por lo tanto su salud mental ha
sido afectada en todo este proceso inesperado en su vida.”, b)
La hoja de estado económico general, obrante a pagina 29 y
20
Artículo 23.- El trabajo, en sus diversas modalidades, es objeto de atención prioritaria del
Estado, el cual protege especialmente a la madre, al menor de edad y al impedido que
trabajan. (…)
siguientes, con el cual pretendió acreditar que a la fecha del
despido, su familia fue afectada, pues según la accionante
era la única sustento y que presentó tensión al no contar con
los ingresos mensuales para su alimentación diaria y gastos
de salud, sin embargo, de la revisión de dicho medio
probatorio, se aprecia que su hijo estaba cursando estudios
superiores, asimismo, no obra en autos algún otro
documento que acredite la carga familiar que tenía en ese
entonces la accionante; por lo que, estando a que la
demandante no ha acreditado que su hijo se encontraba
realizando estudios superiores con éxito o se encontrase con
incapacidad física o mental a la fecha de su cese, que haga
que subsista la obligación de proveerle sostenimiento,
conforme al artículo 424° del Código Civil, se concluye que a
la fecha de su despido, la actora no tenía carga familiar.
 Factores atenuantes: No existen, ya que la reposición laboral
fue ordenada por mandato judicial.

5.3.7. Asimismo, esta judicatura tendrá presente el criterio


jurisprudencial expresado en el fundamento 37 de la sentencia recaída en
el Expediente N° 00433-2020-0-1501-JR-LA-02 de la 1ra Sala Laboral
Permanente de Huancayo, veamos:

37. Por ello, en virtud del Principio de predictibilidad, el


Colegiado consideró pertinente establecer, un nuevo elemento
objetivo a la luz del principio de razonabilidad y
proporcionalidad, con la finalidad de cuantificar el daño moral
por despido incausado, fraudulento o con afectación a los
derechos fundamentales, cuyos montos se fijarán partiendo del
tiempo de despido o desvinculación de su centro de labores, los
cuales pueden incrementarse teniendo en cuenta los otros
indicadores ya establecidos, en tal medida corresponde presentar
el cuadro siguiente:

TIEMPO DEJADO DE LABORAR O DESVINCULACIÓN ILÍCITA

Menos de 01 año Se evaluará caso por caso.


De 01 a 03 años S/. 7,000.00
De 03 a 05 años S/. 10,000.00
Mayor de 05 años S/. 15,000.00
5.3.8. Bajo este contexto, teniendo en cuenta los criterios antes
desarrollados, también que, la accionante estuvo separa por 4 años, 8
meses y 27 días, y estando a que la parte demandante no ha aportado
medio probatorio que corrobore el monto de S/ 50 000.00 soles que se
peticiona, estando a que la carga de la prueba corresponde a la parte
demandante conforme al artículo 1331° del Código, le corresponde a la
actora la suma por daño moral la suma de S/ 10 000.00 soles.

5.4. Daño Punitivo.- En el presente punto se procede a evaluar en atención


al acuerdo adoptado en mayoría en el V Pleno Jurisdiccional Supremo en
Materia Laboral y Previsional al resolver el tema referente a la
"INDEMNIZACIÓN Y REMUNERACIONES DEVENGADAS EN LOS CASOS
DE DESPIDO FRAUDULENTO Y DESPIDO INCAUSADO", consistente en
"En los casos de despido incausado y despido fraudulento, el trabajador
tiene derecho a demandar la reposición en el empleo, además podrá
acumular simultáneamente el pago de la indemnización de los daños y
perjuicios sufridos, las que incluyen el daño emergente, lucro cesante y el
daño moral. La indemnización de daños y perjuicios sustituye cualquier
pretensión por remuneraciones devengadas. El juez valorará los medios
probatorios para determinar la existencia del daño, la relación de
causalidad con el despido, el factor subjetivo de atribución de
responsabilidad, y el cálculo de la suma indemnizatoria, según el petitorio y
los hechos; asimismo, en caso se le reconozca al trabajador un monto
indemnizatorio por daños y perjuicios, el juez de oficio ordenará
pagar una suma por daños punitivos, la misma cuyo monto máximo
será equivalente al monto que hubiera correspondido al trabajador aportar
al Sistema Privado de Pensiones, Sistema Nacional de Pensiones o cualquier
otro régimen previsional que corresponda".

5.4.1. En doctrina21 el Daño Punitivo se define como una expresión de


eventuales fórmulas de reparación de equidad que como tal no se limita al
simple resarcimiento del daño sufrido por la víctima, sino que se le
sanciona al dañante como una suma adicional por su conducta,
cumpliendo una función de sanción civil y una secundaria destinada a
obtener un efecto "deterrence"; sirviendo como un instrumento disuasivo

21
Rosas Berastain. Tomada de "LOS DAÑOS PUNITIVOS A PROPÓSITO DEL V PLENO JURISIDICCIONAL SUPREMO LABORAL" de
María José OLAVIRRÍA PARRA y Micaela BRAUL ANAYA , Gaceta Civil y Procesal Civil, Tomo 54, Diciembre - 2017, Gaceta Jurídica
S.A., Págs. 211 al 234.
frente a la intención de los dañantes de reiterar en el futuro sus
conductas, y también como advertencia para los demás funcionarios de la
demandada que se sintieran tentados a imitar dichas conductas. Bajo
cuya lógica es que en el pleno citado precedentemente se estableció
el pago del daño punitivo de oficio a favor de los trabajadores que
hayan sufrido un despido, como bien se desprende de la siguiente
precisión: "El monto correspondiente a daños punitivos se da en tanto
existan circunstancias que hagan al despido particularmente ultrajante,
vejatorio o penoso para la víctima. como ocurriría en el caso del despido
fraudulento o incausado. Los jueces asumen de esta manera el carácter
vejatorio por sí mismo en este tipo de despidos por el cual el dañante
debería asumir una suma por daños punitivos"22.

5.4.2. La demandada sostiene que el daño punitivo vulneraria el


principio de legalidad, al respecto, nuestra Constitución Política en su
artículo 2° consagra el principio de legalidad, de modo que ningún
operador de justicia debe actuar de manera contraria a lo establecido por
ley. Reflejando de ese modo una garantía para la sociedad, siendo que las
leyes que nos rigen deben ser aplicadas conforme a lo expresamente
señalado mediante ley, no pudiendo exceder en su aplicación y por
consiguiente no debe primar la voluntad personal. Sin embargo, es
importante tener presente que si bien nuestro ordenamiento legal no
regula en forma expresa los daños punitivos, empero, la aplicación de
esta institución jurídica se puede realizar por una aplicación
extensiva de los daños morales y en forma accesoria al daño principal
causado y reclamado, por lo que este judicatura, en base a su
discrecionalidad, y a un criterio ya asumido, considera correcta la
aplicación del daño punitivo en los casos señalados en el V Pleno
Jurisdiccional Supremo en Materia Laboral y Previsional.

5.4.3. Asimismo, la demandada insiste en su escrito de contestación


que no existió despido incausado, sino que el cese se dio por la
culminación de sus contratos, tema que ha sido ya zanjado en el proceso
que se siguió en el Expediente N° 01817-2014-0-1501-JR-LA-02, en el
cual mediante la sentencia de vista N°1221-2017 se concluyó que el cese
de la trabajadora fue un despido incausado, el mismo que se encuentra
22
Ídem.
con calidad de cosa juzgada. En cuya razón, se debe hacer notar a la
parte demandada que conforme a lo desarrollado precedentemente su
actitud de despedir al demandante bajo un marco que no le
correspondía si configura una actitud temeraria al haber sido
determinada en la misma el grado del dolo. Con lo que atendiendo al
efecto sancionable y preventivo al causante del daño a efectos de que no
repita su conducta y/o otros repitan la misma, del daño punitivo, por
configurar una clara sanción a un actuar inconstitucional de la
demandada consistente en un despido en perjuicio de la demandante, que
no puede excusarse de ser evidentemente vejatorio de derechos
fundamentales y por lo tanto reprochable, a efectos de impedir que se
vuelva a repetir el actuar antijurídico constatado ya sea en contra de la
demandante u otra persona, lo que no significa una prohibición a la
entidad demandada que bajo su calidad de empleadora pueda hacer uso
de su poder de subordinación en forma adecuada y acorde al marco legal
vigente. No existe impedimento alguno para dar por existente el daño
punitivo en el presente caso, fijar su quantum bajo los criterios
establecidos en el V Pleno Jurisdiccional Supremo en Materia Laboral
y Previsional y ordenar el pago del monto que se establezca a favor de
la demandante por parte de la demandada, con la finalidad de que la
emplazada tenga presente la misma al momento de querer repetir un
actuar que motivo el proceso materia de análisis.

5.4.4. Y siendo así, se debe establecer como monto del daño


punitivo el resultante del no pago de aportaciones al sistema
previsional durante el periodo en el que la demandante no laboró a
favor de la entidad demandada producto del despido constatado
precedentemente, por lo que de la revisión de la Boleta de Pago del mes
de febrero de 2015, obrante a pagina 17, se advierte que en el ítem
“Descuentos” se precisa “S.N.P-ONP (13%)”, monto que era aportado al
sistema previsional, por lo que se tiene la siguiente operación aritmética:

APORTE (13% DE
PERIODO OPERACIÓN MONTO
S/ 1,959.99)
36 meses S/ 254.80 254.80*36 9,172.80
27 días S/ 254.80 254.80/30*27 229.32
TOTAL S/ 9,402.12
5.4.5. Por lo cual, se concluye que a la demandante le corresponde la
indemnización por concepto de daño punitivo la suma de S/ 9,402.12
soles.

5.4.6. CANTIDAD A PAGAR. - En la presente han sido amparados los


siguientes conceptos:

LUCRO CESANTE S/ 72,323.64


DAÑO MORAL S/ 10,000.00
DAÑO PUNITIVO S/ 9,402.12
TOTAL S/ 91,725.76

6. DEL PAGO DE COSTAS Y COSTOS DEL PROCESO E INTERESES


LEGALES:

6.1. De conformidad con el artículo 14° de la Ley N° 29497, la condena de


costos y costas se regula conforme a la norma procesal civil. Asimismo, la
séptima Disposición Complementaria establece que en los procesos laborales
el Estado puede ser condenado al pago de Costos del Proceso. Siendo ello,
y advirtiéndose que la pretensión demandada resulta amparable y que la
parte emplazada viene negando y contradiciendo la demanda sin motivo
justificado; corresponde imponer el pago de los costos procesales de forma
proporcional a lo pretendido y amparado, es decir, los honorarios
profesionales que la demandante ha tenido que asumir.

6.2. En relación a las costas que comprenden las tasas y aranceles


judiciales, deben exonerarse, en atención al artículo 413° del Código Procesal
Civil que es de aplicación supletoria a los procesos judiciales laborales.

6.3. El pago de los intereses legales señalamos que no requiere ser


demandado, conforme a lo señalado por la parte final del artículo 31° de la
Nueva Ley Procesal del Trabajo N° 29497, por lo que la demandada debe
asumir dicho pago, conforme al artículo 1985 de Código Civil de aplicación en
forma extensiva al caso de la responsabilidad contractual, al responder el pago
de los intereses en la responsabilidad contractual y extracontractual de la
misma naturaleza.
VIII. DECISIÓN:

En base a los fundamentos antes expuestos, el Juzgado, impartiendo justicia


a nombre de la Nación DECLARA:

1. INFUNDADA la excepción de PRESCRICION EXTINTIVA, deducida por la


MUNICIPALIDAD DISTRITAL DE EL TAMBO.

2. FUNDADA en parte la demanda interpuesta por ELIZABETH MARÍA


MENDOZA MEDINA contra la MUNICIPALIDAD DISTRITAL DE EL
TAMBO, sobre INDEMNIZACIÓN POR DAÑOS Y PERJUICIOS, En
consecuencia:

a) ORDENO que la demandada MUNICIPALIDAD DISTRITAL DE EL


TAMBO pague a favor de la demandante ANA MARIA CHAMORRO
RODRIGUEZ, la suma ascendente a S/ 91,725.76 soles (NOVENTA Y
UN MIL SETECIENTOS VEINTICINCO CON 76/100 SOLES), por los
conceptos de lucro cesante, daño moral y daño punitivo.

3. INFUNDADA la misma con respecto al concepto de Indemnización por


DAÑO EMERGENTE.

4. CONDENESE ala demandada MUNICIPALIDAD DISTRITAL DE EL TAMBO


al pago de costos del proceso, más el pago de intereses legales, los mismos
que se liquidaran en ejecución de sentencia. EXONERESE a la misma del
pago de costas del proceso.

5. NOTIFIQUESE a las partes por intermedio de la secretaria a cargo del


proceso con las formalidades de Ley, a través de sus casillas electrónicas,
encontrándonos en un periodo de emergencia sanitaria ocasionada por el
Covid-19.-

También podría gustarte