REPÚBLICA BOLIBARIANA DE VENEZUELA

COLEGIO UNIVERSITARIO DE ADMINISTRACIÓN Y MERCADEO

C.U.A.M.

CALABOZO-ESTADO-GUÁRICO

El ser humano y su papel en la sociedad como persona,

como individuo, como ciudadano.

Dianny Johaura López González

26.302.481
El ser humano y su papel en la sociedad como persona, como individuo, como ciudadano.

La sociedad es un conjunto de personas que se relacionan entre sí, y que deben de seguir

determinadas reglas para poder coexistir de manera exitosa, estas personas cumplen con

diferentes roles dependiendo del ángulo en que nos enfoquemos, los seres humanos somos

por naturaleza seres sociales que necesitan poder relacionarse con otros, para Aristóteles

“El que no puede vivir en sociedad, o no necesita nada por su propia suficiencia, no es

miembro de la sociedad, sino una bestia o un Dios.”

El hombre ha sido objeto de estudio desde hace mucho tiempo atrás, el inicio de nuestro

existir el hombre buscaba ayuda para poder alimentarse o reproducirse desde este momento

el hombre comienza a ser un ser social pues existe esta necesidad de contar con otras

personas para poder seguir existiendo y de esta manera no llegar a la extinción de su raza,

entre los pensadores del siglo XX qué aportaron nuevas ideas a la sociología se encuentra

Auguste Comte y Max Weber quién nos enseñó qué el trabajo intelectual debe “llegar al

fondo de los temas” y Karl Marx quien enfatizó la importancia de la economía y el

conflicto social.

Para poder hablar acerca de este tema es necesario conocer el antecedente del papel que

ha jugado el hombre en nuestra sociedad a través de la historia, y la transformación en la

que se ha visto inmiscuido en la época actual, es por ello que primero busco mostrar y tocar

temas que nos permitan profundizar un poco más del cumplimiento del ser humano más

haya de su simple existencia. Los estereotipos en las sociedades tradicionales.

 Históricamente el rol del hombre fue proveer a su mujer y a su familia de un sustento,

sin embargo ya se ha logrado mucho más allá de solamente sustentar a una familia o de una

mujer que nada más sabe encargarse de un hogar, el ser humano logro la creación de la

tecnología por ejemplo un avance en el ingenio  para avanzar junto con la ciencia y así

mismo satisfacer las necesidades de su vida cotidiana facilitando y dándole mayores

comodidades dentro su desarrollo de vida.

Para poder llegar a lograr una expansión de la forma en que observamos al ser humano

es inevitable que también entre en l discusión el punto de vista de nuestras prácticas

morales la respuesta parece tan clara como contundente: nada hay más importante a la hora

de juzgar una conducta que considerar si su objeto es un ser humano o no. No tratamos

igual a los seres humanos que a los que no lo son desde nuestro punto de vista, desde la

óptica de los seres humanos, nada es más importante que ser humano. Juzgamos como un

indudable progreso moral la captación de la importancia de ser humano. Para nosotros, uno

de los mayores avances morales de la humanidad consiste en percatarse de que un hombre

o una mujer es un ser humano y debe tratarse como tal, antes que cualquier otra

consideración, antes que griego o bárbaro, judío o gentil, rico o pobre, listo o tonto, blanco

o negro, enemigo o amigo. Por eso, podemos entender sin demasiadas explicaciones, la

exclamación de Wendell Holmes que llegó a convertirse en uno de los lemas antiesclavistas

fundamentales en la guerra de Secesión Americana: “un hombre es un hombre, es un

hombre”. De este modo, en el plano de nuestras prácticas morales, de lo que los

occidentales del siglo XX consideramos de hecho que es bueno o malo, la propiedad “ser

un ser humano” goza de una importancia fundamental en la valoración moral de la

conducta. Nada hay más importante en ética que el hecho de que algo sea un ser humano.
Ya que hemos indagado un poco en los que podemos denominar una piscina de ideas que

nos llevarán un poco más lejos en el tema a discusión podemos comenzar a traer a la mesa

el concepto de individuo. En el habla coloquial, llamamos a alguien individuo cuando

desconocemos su nombre o condición, o cuando, pese a saberlo, preferimos no

manifestarlo, Como individuo designamos aquello que es individual, que no puede ser

dividido, no se trata de llegar a ser egoístas y no querer compartir todo aquello que

poseamos, sino de nuestra esencia como personas pues cada uno de nosotros necesitamos

lograr y mantener cosas por cuenta propia para poder llegar a una autorrealización para de

esta forma no caer en un vacío inevitable que viene de la mano junto con la frustración de

no llegar a conocernos a nosotros mismos. Este término se usa para referirse al ser humano,

a la persona, considerada como unidad, independiente de las demás.

Las sociedades están formadas por un conjunto de individuos que vive de manera

organizada. Los individuos, en este sentido, son la unidad más pequeña y simple de los

sistemas sociales. Los sistemas sociales, como tales, se basan en la convivencia, la

interacción, la comunicación y la cooperación entre los individuos que la conforman.

No obstante, la relación individuo-sociedad puede llegar a ser problemática, pues en

ocasiones los intereses del individuo no están acordes con los de la sociedad donde viven.

De allí que algunos autores lleguen a sostener que ello se debe a que el hombre no es un ser

social por naturaleza. Sin embargo, esto se contrapone a la afirmación de otros

especialistas, cómo ya lo mencionamos al comienzo de la redacción, pues hay para quienes

la naturaleza del hombre es gregaria, instintivamente social, pues el ser humano no puede

verse realizado en todo su potencial si no es en el seno de una sociedad o de su comunidad.

Según la Filosofía, un individuo es la unicidad de una realidad particular, que no puede ser

separada o dividida. En este sentido, es un ser original y singular, que constituye una
realidad única e irrepetible. El individuo es uno frente a una pluralidad. De allí que el

concepto de individuo se oponga a lo universal. Un hombre, por ejemplo, es un individuo

en relación con el género humano.

Nacemos siendo seres humanos pero al crecer nos podemos llegar a convertir en

monstruos, pues la manera en que actuamos en sociedad significa ser miembro pleno de

una comunidad, tener los mismos derechos que los demás y las mismas oportunidades de

influir en el, llegar a ser ciudadanos respetuosos tanto con nuestros derechos como con

nuestros deberes pues vivimos rodeados de otros individuos y debemos de llegar a

comprender que nuestros derechos en la sociedad terminan en dónde los suyos comienzan.