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JUSTICIA PARA TODOS.

La película en cuestión gira en torno a los tribunales de justicia de Estado Unidos a fines
de los años 70, poniendo de manifiesto la corrupción del sistema judicial.
En ella se pueden identificar: la violencia entre abogados y jueces, incumplimiento en
cuanto a la relación abogado-cliente, no comparecencia personal a audiencia, la
realización de promesas imposibles a los clientes, la influencia de los problemas
personales en el ejercicio de la profesión o el ejercicio negligente de ésta.
El filme, realizado en el año 1979, trata sobre Arthur Kirkland, un reconocido abogado
de la Ciudad de Baltimore en Estados Unidos que tiene problemas con el Juez Henry T.
Fleming, ya que le negó la libertad a Jeff McCullaugh, porque hubo un atraso con las
pruebas de su inocencia, y fue injustamente acusado de un crimen que no cometió, esto
genera un conflicto entre Arthur y el Juez, cabe destacar que Jeff muere cuando es
llevado a prisión, ya que en un arrebato de locura debido al estrés que le genera estar
encarcelado injustamente, más las promesas imposibles que le hacía Arthur sobre
ponerlo en libertad rápido, toma de rehén a dos oficiales, y muere en un enfrentamiento.
Otro caso importante que tiene que ver con el hecho de no hacer promesas imposibles a
los clientes, es cuando Arthur le había asegurado a su cliente Ralph Agee, que saldría en
libertad condicional, al cual durante su detención se le trato muy mal, violentando su
dignidad ya que era un hombre transexual, en el juicio el no pudo estar prestante, así
que mando a un amigo para que lo remplazara y representara a Ralph, ya que según
Arthur solo era para la revisión del informe para su libertad condicional pesto que el
primero se lo habían rechazado y solo debía presentar el nuevo con las correcciones, el
amigo que remplazó a Arthur en el juicio no estaba familiarizado con el informe y no lo
presentó cuando el juez le pregunto sobre él, Ralph fue condenado a 3 años de prisión, y
se suicidó media hora después ahorcándose en su celda.
En la película todo da un giro inesperado cuando el Juez Fleming es acusado de violar y
maltratar a una mujer, ante lo cual contrata los servicios profesionales de Arthur, y se
preguntarán porque el juez escogió a Arthur para que se encargue de su defensa cuando
no es ningún secreto para nadie que no se llevan muy bien, y la respuesta es que, como
todos conocen la antipatía que existe entre ellos, nadie va a dudar de su inocencia si él
lo defiende.
Obviamente Arthur en un principio se niega a llevar su caso, pero se ve enfrentado a
chantajes donde se le pide que reconsidere su postura, porque podría ser expulsado de
la abogacía acusado por violación de secreto profesional, ya que en el pasado él había
alertado a la policía sobre un cliente que era potencialmente peligroso, además que se ve
enfrentado al Comité de Ética de la ciudad que está tratando de indagar en las malas
prácticas en que incurren los abogados, donde según el pensamiento de Arthur muchas
veces son más corruptos los mismos jueces, lo que se puede apreciar durante toda la
película. Por lo mismo, y ante la amenaza de del Comité, Arthur se ve obligado a
aceptar, ante lo cual pone la condición que el Juez se someta a la prueba del polígrafo
para ver si realmente dice la verdad cuando dice que es inocente, la cual el Juez logra
pasar.
Con el caso prácticamente ganado, en cuanto a pruebas y argumentos a favor de Arthur
le llegan unas fotos de contenido sexual del Juez Fleming, y cuando lo encara por ellas,
le confiesa la verdad: que él es culpable, y es en este punto donde podemos apreciar la
corrupción en los sistemas justicia, ya que Arthur le pregunta cómo pudo pasar la
prueba del polígrafo, a lo que él responde que todo se puede arreglar si conoces a la
gente correcta.
Transcurren los días y al momento del juicio, Arthur confundido, comienza su alegato
para destrozar la acusación hacia el Juez, mostrando que no existen pruebas en su contra
y que a fin de cuentas lo que le interesa a los acusadores es mostrarse y aparecer en la
prensa; sin embargo, al final del alegato, cuando ya creíamos que había argumentado
todo a favor para que el Juez fuera declarado inocente, Arthur mismo le exclama al
jurado que su cliente es culpable, que se lo confesó y que debería ir a la cárcel por ello,
es decir que se retracta de todo lo que dijo antes, en esta parte se entiende que él lo hizo
porque era un hombre honesto, pero eso no lo exonera nuevamente de la violación al
secreto profesional, ya que aunque el juez si era culpable y se lo confesó, él era su
abogado así que no podía revelarlo, de hecho también en nuestro sistema jurídico,
específicamente en el artículo 23 del código de ética lo establece.

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