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UNIVERSIDAD CATÓLICA DE

CUENCA
SEDE AZOGUES
UNIDAD ACADÉMICA DE
SALUD Y BIENESTAR
CARRERA DE MEDICINA
TUBERCULOSIS UROGENITAL

CÁTEDRA:
UROLOGÍA

CATEDRÁTICO:

DR. WALTER ROMERO

REALIZADO POR: WILSON


R. IDROVO C.
CICLO: DÉCIMO “B”
1. INTRODUCCIÓN

La TB (tuberculosis), es una de las patologiá s infectocontagiosas de gran impacto social y


económico que se presenta con mayor incidencia en América Latina, especialmente a los
paiś es en viá s de desarrollo como Ecuador, esta infección se transmite por el aire y su
agente etiológico es la bacteria Mycobacterium tuberculosis. (1)

En la actualidad la TB sigue siendo uno de los principales factores que aumentan la morbi-
mortalidad en el mundo, aunque principalmente es un patógeno pulmonar, esta infecció n
puede afectar en menor incidencia órganos y tejidos distintos del parénquima pulmonar,
recibiendo así el nombre de tuberculosis extrapulmonar, según la Organizació n Mundial de
la Salud (OMS) representa del 20-25% de los casos de enfermedad tuberculosa además
puede confundirse con un amplio espectro de patologiá s, por lo que genera dificultad en su
diagnóstico y oportuno tratamiento. (1)

Entre las formas extrapulmonares, más relevantes tenemos a la tuberculosis genitourinaria o


urogenital reportada del 1-30 % de los casos, la misma que puede comprometer a cualquier
estructura que conforme estos sistemas, entre ellos a los riñones, ovarios, uréteres,
testić ulos, próstata, uretra, vejiga pene e incluso el útero, por lo general el proceso
fisiopatológico en la tuberculosis extrapulmonar son secundarias a la inhalació n de las
microgotas que contienen la bacteria procedente de una persona infectada, estas
micobacterias alcanzan los espacios respiratorios terminales donde pueden ser ingeridas por
los macrófagos alveolares, que se infectan y luego son transportados hasta los ganglios
linfát icos, donde la diseminació n puede hacerse por viá linfohematógena, así las
micobacterias llegan a los ganglios distantes afectando así a los órganos y tejidos aledanõ s
como el estómago, riñones, próstata, epif́ isis de los huesos largos, meninges y piel, cabe
destacar que tanto en la tuberculosis pulmonar como en la extrapulmonar la enfermedad
puede pasar de latente a activa dependiendo del estado inmunológico del paciente. Factores
como la primoinfecció n de TB Pulmonar, malnutrición, diabetes e hipertensió n mal
controladas, el uso crónico de fármacos como glucocorticoides o inmunodeficiencias
influyen en la aparició n de la infecció n. (1)

La tuberculosis urogenital sigue siendo una patolgía poco diagnosticada en el ambito


hospitalario, la presentación inicial es inespecif́ ica, así como la evolució n insidiosa, es a
menudo la causa de un retraso diagnóstico notable.
Las estenosis ureterales son las lesiones más frecuentes en las formas urinarias, mientras
que en las formas genitales lo son el nódulo epididimario en el varón y la salpingitis crónica
en la mujer. (1)
Las pruebas bacteriológicas son las únicas que permiten un diagnóstico de certeza y la
valoració n de la sensibilidad de la cepa a los antituberculosos.
Sin embargo, las lesiones tuberculosas urogenitales, sobre todo las formas genitales de la
mujer son muy a menudo paucibacilares, y las pruebas bacteriológicas podriá n no
demostrar la cepa bacteriana. (1)
Asi,́ en la práctica, el diagnóstico suele ser producto de una serie de argumentos surgidos de
diversos métodos de estudio por imagen (urotomografiá computarizada [uro-TC], ecografiá
pélvica, histerosalpingografiá , resonancia magnét ica [RM]) y exploraciones invasivas.
Las técnicas endoscópicas y la cirugiá son herramientas diagnósticas, a menudo
indispensables, que permiten tomar muestras para estudio histológico y bacteriológico.
Como en otras formas de tuberculosis, el tratamiento principal es farmacológico y consiste
en una tetraterapia (rifampicina, isoniazida, etambutol y pirazinamida) seguida de una
biterapia (rifampicina e isoniazida) con una duración total de 6 meses. (1)
Una intervenció n quirúrgica adicional puede ser necesaria para tratar o limitar la
repercusión de las principales secuelas: insuficiencia renal crónica, trastornos miccionales e
infertilidad. (1)
2. OBJETIVOS

OBJETIVO GENERAL
Desarrollar una investigación detallada sobre la tuberculosis urogenital para poder definirla,
desarrollar fisiopatología, factores etiológicos, factores de riesgo, además de conocer sus
métodos diagnósticos y tratamiento que se debe seguir para el correcto manejo de la misma.

OBJETIVOS ESPECÍFICOS
 Determinar los conceptos básicos de la TB urogenital, además de su fisiopatología
 Describir la patogenia y el agente causal responsable de la clínica en pacientes que
cursan esta enfermedad
 Identificar los métodos diagnósticos más importantes, para así llevar un correcto
manejo y tratamiento de la patología
3. MARCO TEÓRICO

DEFINICIÓN, INCIDENCIA Y FISIOPATOLOGÍA

La tuberculosis genitourinaria se define como una infecció n bacteriana producida por la


micobacteria tuberculosis con mayor incidencia en hombres que en mujeres, el 20% de los
pacientes con tuberculosis pulmonar tienen la posibilidad de desarrollar formas extra
pulmonares, entre ellas encontramos la tuberculosis del aparato genitourinario con una
incidencia del 30 % al 40 %, en los hombres, el sitio de presentación más común es en la
cola del epidid́ imo, fisiopatológicamente esta infección se produce cuando los bacilos
tuberculosos son transportados por viá hemolinfát ica desde el lugar de la infecció n hasta el
tracto urinario que es donde empieza a proliferar y causar el deterioro de las estructuras
genitourinarias, otra viá probable de acceso es la “diseminació n retrógrada desde un tracto
urinario infectado hacia la próstata, seguido por la diseminació n canalicular a las vesić ulas
seminales, conducto deferente y epidid́ imo. (1) (2)

Pasa por tres etapas: exposició n, infecció n y enfermedad, la primera involucra la exposició n
de una persona enferma con tuberculosis pulmonar y una persona sana inmunológicamente
comprometida, la segunda etapa ocurre con la inhalació n de gotitas con M. tuberculosis, la
infecció n inicia con la entrada del bacilo en el cuerpo de una persona sana a través del
tracto respiratorio al inhalar las partić ulas de saliva que contienen micobacterias que una
persona infectada expulsó al aire a través de un estornudo, hablar, expectorar o escupir, el
ser humano es el huésped principal de estas micobacterias, pero no todos desarrollan la
enfermedad a esto le denominamos estado latente y pasa a fase activa dependiendo del
sistema inmunológico de la persona, en la primoinfecció n se puede ser asintomát ico y se
pueden evidenciar ciertas calcificaciones en el tejido pulmonar, ganglios linfát icos o ambos
como única secuela de la infecció n pero si esta infección prosigue, se pasa a la tercera etapa
donde aparece la enfermedad e inicia la sintomatologiá propia de esta enfermedad,
momento donde el huésped se considera altamente infeccioso. (2)
EPIDEMIOLOGÍA

Con casi 10 millones de nuevos casos por año en el mundo y más de 5.000 en Francia, la
tuberculosis es un desafió prioritario de salud pública para la Organizació n Mundial de la
Salud (OMS). Está estrechamente relacionada con la pandemia de la infecció n por el virus
de la inmunodeficiencia humana (VIH) y con el desarrollo de cepas de Mycobacterium
tuberculosis multirresistentes. Sólo el tratamiento de las formas pulmonares, las más
frecuentes y mejor conocidas, ha sido objeto de recomendaciones precisas y consensuadas.
(3)

Sin embargo, las lesiones tuberculosas exclusivamente extrapulmonares representan el 22%


de los casos de tuberculosis diagnosticados en Europa y el 27% en Francia. En Europa y en
América del Norte, la localizació n urogenital es la cuarta en frecuencia, después de las
lesiones ganglionares, pleurales y osteoarticulares. Según el estudio que se considera,
representa entre el 1,3-16,9% de las formas extrapulmonares (excluidas las tuberculosis
diseminadas o miliares tuberculosas) y entre el 1,2-3,6% del conjunto de las tuberculosis.
(3)

La lesió n urogenital suele asociarse a una infecció n tuberculosa diseminada. Asi,́ una lesió n
pulmonar activa se observa en casi el 40% de los pacientes que presentan una tuberculosis
urogenital (TBUG), y una lesió n diseminada extrapulmonar, en el 18% de los pacientes
inmunocompetentes. (3)

PATOGENIA

La tuberculosis es una enfermedad infectocontagiosa cuyo agente etiológico es la


Mycobacterium tuberculosis, sin embargo existen otras micobacterias de la misma familia
que pueden causar la infecció n como: Mycobacterium Bovis, M. Bovis Bcg,
Mycobacterium Africanum, Mycobacterium Microti Y Mycobacterium Canetii, se
transmite principalmente por vía aérea cuando una persona enferma expulsa los bacilos al
aire y estos son inhalados por una persona sana, afectando principalmente al tejido
pulmonar, no todas las personas que han estado en contacto con los bacilos desarrollan la
enfermedad, permaneciendo en una fase latente sin enfermarse ni transmitir la infecció n,
esto dependerá del estado inmunológico de la persona, y de la localización de la TB que
puede ser pulmonar o extrapulmonar. (4)

MANIFESTACIONES CLÍNICAS

Dependen de la estructura que se vea afectada por la infecció n siendo el riñón el principal
órgano afectado, debido a la diseminació n linfohematógena, la afectación del resto de la viá
urinaria y seminal se produce debido a la rotura de los granulomas renales hacia los cálices
renales y el descenso con la orina. Esta infecció n puede ser fácilmente confundida con otras
enfermedades del sistema genital masculino, siendo la hematuria inexplicable,
orquiepididimitis subaguda/crónica, piuria aséptica, disuria, nicturia, abscesos, fiś tulas,
polaquiuria, tumoraciones, infecciones urinarias recurrentes, orina ácida, hematuria
macroscópica y leucocitos en la orina las manifestaciones cliń icas más significativas. La
fiebre, sobre todo, afecta a menos de un 25% de los pacientes. En los pacientes infectados
por el VIH, la lesió n renal rara vez se acompaña de signos funcionales urinarios, pero con
frecuencia se asocia a fiebre y enfermedad diseminada (62%). Una forma particular es la
lesión renal parenquimatosa microscópica crónica con alteración progresiva de la funció n
renal. (4)

FACTORES DE RIESGO

Existen varios factores de riesgo que podriá n incidir en su patogenicidad y estos son los
mismos que producen la tuberculosis pulmonar entre ellos el hacinamiento, condiciones de
vida precarias, malnutrición, sistema inmunológico deprimido, enfermedades respiratorias
preexistentes, infecció n por TB primaria, viajes a áreas endémicas, inmigració n, factores de
riesgo o condiciones de vulnerabilidad (pobreza, alcoholismo, tabaquismo, drogadicció n)
DIAGNÓSTICO DIFERENCIAL
 Cistitis crónica. (4)
 Epididimitis crónica inespecífica. (4)
 Cáncer testicular. (4)
 Cistitis intersticial. (4)
 Nefrocalcinosis. (4)
 Espongiosis medular renal. (4)
 Epididimitis gonocócica. (4)
 Pielonefritis crónica. (4)
 Atrofia renal hidronefrótica de otro origen. (4)

DIAGNÓSTICO

El diagnóstico de esta infecció n es eminentemente bacteriológico pero se dificulta cuando


la infecció n es aislada y no compromete danõ pulmonar por primoinfecció n, los siń tomas
cliń icos son compatibles con una gama de enfermedades del tracto urinario, sin embargo
cuando se sospecha de esta infecció n el diagnóstico se hace a través del aislamiento del
bacilo de Koch, en una muestra histopatológica del aparato genitourinario, liq́ uidos
corporales (orina) o secreciones , la guiá de práctica cliń ica del MSP sobre la Prevenció n,
diagnóstico, tratamiento y control de la tuberculosis recomienda “Investigar siń tomas
generales (fiebre, sudoración nocturna, pérdida de peso) y siń tomas focalizados en algún
órgano o sistema en el que se sospecha la presencia de tuberculosis extrapulmonar, el
criterio cliń ico es fundamental debido a que los pacientes que presentan esta patologiá
generalmente son paucibacilares”. (5)

El diagnóstico definitivo se realiza mediante la biopsia o punción con aguja fina (PAAF),
del órgano afectado riñón, próstata, testić ulo, vesić ulas seminales, en esta muestra se realiza
un cultivo/tipificació n , sin embargo este medio diagnóstico tiene sus limitaciones tanto por
el costo del estudio como por el tiempo de procesamiento de las muestras que oscila entre 6
a 8 semanas, motivo por el cual se prefiere emplear otros métodos diagnósticos como PCR
en tiempo real, determinació n de la enzima adenosindeaminasa (ADA), si la infecció n no
está focalizada, o hay dificultad para obtener muestras microbiológicas, se pueden usar
técnicas de imagen como radiografiá , ecografiá de abdomen, tomografiá axial
computarizada y resonancia magnét ica que ayuden al diagnóstico, ya que por sí solas no
pueden demostrar presencia de las bacterias. (5)

Pruebas microbiológicas

Para aumentar la sensibilidad de la prueba, el examen bacteriológico debe efectuarse con la


primera orina de la mañana durante 3-5 diá s seguidos. En más del 90% de los pacientes se
detectan anomaliá s del sedimento urinario: leucocituria (22-73% de los casos) y hematuria
microscópica (12-61%). Una sobreinfecció n por gérmenes uropatógenos (principalmente
Escherichia coli) afecta a alrededor del 20% de los pacientes. La búsqueda de BAAR en la
orina es un análisis poco sensible (25- 37%) pero especif́ ico (97%), aunque de forma
excepcional puede ser producto de la colonizació n de las viá s urinarias por micobacterias
atiṕ icas. El cultivo especif́ ico en medio de Lowenstein-Jensen o en medio liq́ uido es
positivo en el 5-90% de los pacientes con lesió n renal. (5)

Pruebas de imagen

Para evaluar las alteraciones morfológicas es necesario recurrir a métodos de diagnóstico


por imagen. La urotomografiá computarizada (uro-TC) es hoy la prueba de referencia para
el diagnóstico de las lesiones de las viá s urinarias, aun cuando la urografiá intravenosa
sigue siendo útil si no se dispone de TC. La urorresonancia magnética (uro-RM) es una
prueba sensible pero poco evaluada, por lo que no se recomienda como primera elecció n.
La ecografiá permite la exploración renal y vesical, pero es insuficiente para estudiar los
uréteres: sólo revela anomaliá s en el 59% de las tuberculosis urinarias, al contrario que la
uro-TC, que muestra una lesió n urinaria en casi el 90% de los casos. (5)
TRATAMIENTO

El tratamiento es el mismo que se emplea para la tuberculosis pulmonar sea esta sensible o
resistente, todo tratamiento debe ser dosificado según el peso del paciente y tener un
seguimiento observado en el 100% de los casos, el esquema para TB sensible consta de dos
fases con una duració n de 6 meses donde se administran dosis Isoniacida (H), Rifampicina
(R), Pirazinamida (Z) y Etambutol (E), siguiendo el esquema (2HRZE/4HR). (6)

En la primera fase que dura 2 meses, se administran 50 dosis de HRZE, Diariamente de


lunes a viernes en aquellos casos ambulatorios y durante 7 diá s a la semana en aquellos
pacientes hospitalizados, en la segunda fase que dura 4 meses (consolidació n de 100 dosis)
se administran dosis diarias de Isoniacida (H) y Rifampicina (R), en los casos de
seguimientos recuperados, recaid́ as o fracasos el tratamiento se alarga a 9 meses y se
administran el esquema 9 HRZE en dosis diarias de Isoniacida (H), Rifampicina (R),
Pirazinamida (Z) y Etambutol (E). (6)

Cabe recalcar que el tratamiento antifímico puede resolver la infecció n en el periodo


establecido, no obstante se conoce que el tratamiento farmacológico puede producir
reacciones adversas a los fármacos (RAM) que afectan a los riñones luego del inicio del
tratamiento, motivo por el cual es importante descartar este tipo de lesiones en la
tuberculosis genitourinaria ya que existe un aumento de fibrosis que lleva a la obstrucción
del sistema colector y contracción vesical, lo que empeora la disfunció n renal, en el 50% de
estos casos. A más de tratamiento farmacológico se debe recurrir a técnicas quirúrgicas
reconstructivas para el desbloqueo del sistema colector o el aumento de la capacidad
vesical; o ablativas para la extracción de los tejidos afectados por el bacilo. Entre las
opciones reconstructivas se encuentran la anastomosis ureterocalicial, pieloplastia,
anastomosis ureteroureteral, la reimplantación del uréter, entre otras. (6)

Tratamiento invasivo

Se recurre al tratamiento quirúrgico en el 26-91% de los casos según los estudios. (5) (6)

Tratamiento endoscópico
Las intervenciones endourológicas, como el drenaje de las cavidades renales por
endoprótesis ureteral o nefrostomiá percutánea, pueden efectuarse en la fase precoz de la
enfermedad con el fin de prevenir la disfunció n renal secundaria a las estenosis ureterales.
En un estadio secuelar, estas técnicas, así como la dilatación ureteral, se discuten en caso de
estenosis ureterales escalonadas refractarias al tratamiento médico, pero los resultados son
mediocres. (5) (6)

Tratamiento quirúrgico

Según las recomendaciones europeas, la nefrectomiá se considera de urgencia en las


pionefrosis complicadas con sepsis grave o shock séptico no controlado con la
antibioticoterapia y el tratamiento sintomát ico. A distancia, puede plantearse en caso de:
• Riñón no funcional (con o sin calcificaciones). (5) (6)

• Lesió n renal extensa complicada con hipertensió n arterial u obstrucción distal a la zona de
unió n pieloureteral. (5) (6)

• Coexistencia de una lesión neoplásica renal. Diversas técnicas quirúrgicas son posibles:
cirugiá convencional o laparoscópica, acceso intra o extraperitoneal. La nefroureterectomiá
retroperitoneal laparoscópica sólo se considera en caso de riñón no funcional sin
pionefrosis asociada. Por último, la cirugiá reconstructiva se dirige a las lesiones vesicales
avanzadas y está esencialmente representada por la enterocistoplastia de aumento y la
neovejiga, indicadas en el tratamiento de la esclerosis vesical. (5) (6)
4. CONCLUSIONES

Se determinó los conceptos básicos de la TB urogenital, además de su fisiopatología puesto


a que es una enfermedad infecciosa y es importante conocer su vía de diseminación,
órganos y tejidos a los que ataca y afecta haciendo que los mismos pierda su capacidad
funcional, importante en el correcto manejo de cada paciente individualizando y actuando
de forma oportuna.

Se describió la patogenia y el agente causal responsable de la clínica en pacientes que


cursan esta enfermedad ya que en casos de TB extrapulmonar se debe analizar la presencia
del Mycobacterium bovis como agente causal, los rinõ nes, epidid́ imos o trompas de
Falopio son los más afectados en estos casos, lastimosamente este tipo de infecció n posee
diversas manifestaciones cliń icas que van a depender del órgano afectado y de la gravedad
de su presentación, por lo tanto su diagnóstico es difić il y generalmente puede ser
confundido con varias enfermedades ginecológicas y urológicas retrasando así su
diagnóstico y oportuno tratamiento ocasionando complicaciones letales de rápida
progresión hacia el riñón, en los últimos años se ha producido un aumento del número de
pacientes internados en el área de emergencia con siń tomas urémicos causados por TB
genitourinaria

Se identificó los métodos diagnósticos más importantes, para así llevar un correcto manejo
y tratamiento de la patología debido a que Teniendo en cuenta que la tuberculosis
genitourinaria es una infecció n poco concurrente que altera una de las funciones de
excreció n más importantes del organismo al deteriorar las estructuras genitourinarias,
disminuyendo drásticamente su calidad de vida del paciente, la actuación oportuna del
personal de salud permitirá identificar sus necesidades básicas afectadas y luego en
conjunto con el paciente ir planificando el proceso de atención médico especif́ ico que le
ayudará a restablecer el equilibrio de su salud o mejorar en cierto grado el bienestar
biopsicosocial del paciente y evitar futuras complicaciones.
5. RECOMENDACIONES

Como recomendaciones se puede decir que la tuberculosis extrapulmonar genitourinaria es


una enfermedad infecciosa poco común en el medio hospitalario, por lo tanto su
diagnóstico suele ser tardió , situación que permite complicaciones secundarias graves que
aumentan la comorbilidad de los pacientes puesto que se debería desarrollar un plan de
manejo y cuidados de mayor calidad, para de esta forma obtener resultados favorables para
el tratamiento oportuno y correcta recuperación del paciente a través del educar sobre su
condició n cliń ica y sus cuidados respectivos, mejorar la adherencia al tratamiento, evitar el
abandono y recaid́ as, ya que un paciente con tuberculosis extrapulmonar tiene mayor
́ icos, debido a la diseminació n de la
posibilidad de desarrollar resistencia a los antifim
enfermedad a otros órganos, cuyo tratamiento tendriá que incluir un esquema más agresivo
que no solo implica más recursos en la Salud pública si no mayor afectación en la salud de
los pacientes, situación que puede ser prevenida a través del correcto manejo a traves de
protocoles de primera linea.
6. BIBLIOGRAFÍA

1. Nieto-Rió s JF, Zea-Lopera J, Sánchez-López S, Barrientos-Henao S, Bello-


Márquez DC, Vélez-Hoyos A, et al. Urogenital tuberculosis in a patient with
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http://repositorio.utmachala.edu.ec/bitstream/48000/16476/1/T-
4177_FEIJOO%20ORTIZ%20SAMANTA%20ESTEFANIA.pdf
6. N. Koutlidis, A. Fillion. Tuberculosis urogenita. 2018 [cited 2023 Ene 11].
1(2):12. Available from:
https://www.sciencedirect.com/science/article/abs/pii/S1761331016820022.

CASO CLÍNICO

CASO CLÍNICO DE UROLOGÍA


ANAMNESIS
DATOS DE FILIACIÓN
NOMBRE: NN
EDAD: 48 años
GÉNERO: Masculino
FECHA DE NACIMIENTO: xxxxxxx
ESTADO CIVIL: casado
OCUPACIÓN: NN
INSTRUCCIÓN: Secundaria completa
RESIDENTE: xxxxxxxxxxx
PROCEDENTE: xxxxxxxx
RAZA: Mestiza
RELIGIÓN: xxxxxxxx
NÚMERO DE FICHA CLÍNICA: xxxxxxxxxxxxx
FUENTE: Directa
MOTIVO DE CONSULTA
Cansancio, debilidad muscular, pérdida del apetito
ENFERMEDAD ACTUAL
Paciente de 48 años de sexo masculino, acude a servicio de salud por astenia, adinamia, hiporexia, además
refiere pérdida de peso de 20 libras, presencia de alza térmica no cuantificada sin un predominio de horario,
paciente refiere diaforesis nocturna de un mes de evolución y niega síntomas respiratorios, con presencia de
dolor de abdominal localizado en hipogastrio y dolor en flacos iliacos bilaterales sin irradiación, escala de eva
de 6/10, acompañado de disuria y oliguria sin presencia de antecedentes asociado, hace una semana presenta
episodios de diarrea de escasa cantidad, fétida con moco.
ANTECEDENTES PATOLÓGICOS PERSONALES Y FAMILIARES
Patológicos Personales: No refiere
Patológicos familiares: No refiere
Quirúrgicos: no refiere
Alérgicos: No refiere
HÁBITOS
Hábitos tóxicos: No refiere
Alcohol: No refiere
Drogas: No refiere
Tabaco: No refiere
Hábitos alimenticios: Dieta normoproteíca y 3 veces al día.

REVISIÓN DE APARATOS Y SISTEMAS


Aparato Digestivo: presencia de diarrea hace 5 días antes del ingreso hospitalario, mal estado nutricional
Aparato Respiratorio: Sin alteración aparente.
Aparato Circulatorio: Sin alteración aparente.
Sistema Nervioso: Sin alteración aparente.
Sistema genitourinario: hematuria
EXAMEN FISICO GENERAL
SIGNOS VITALES
Valor Referido Valor Normal
F. Respiratoria x min 20 rpm 12 – 20 rpm
Temperatura 37,5oC 36,2 oC - 37,0 oC
F. Cardiaca 65 Lat/min 60 – 90 (Lat/min)
Sat O2 96% >90%
Presión Arterial 130 Sistólica (mmHg) <120
75 Diastolica (mmHg)< 80
MEDICIONES Y ACTIVIDADES
Talla 165 cm
Peso 48 kg
IMC 17.63 (Bajo)
Numero de comidas 3
Numero de micciones 3
Numero de deposiciones 2
Actividad Física No refiere
EXAMEN GENERAL
Apariencia general: Caquéctico
Biotipo: Ectomorfo
Estado nutricional: Bajo (IMc 17.63 bajo)
Actividad psicomotriz: Conservada
Fascias: Álgica, pálida
EXAMEN FÍSICO DE ÓRGANOS DE LOS SENTIDOS
Ojos: pupilas isocóricas normo reactivas a la luz.
Nariz: Fosas nasales permeables.
Cavidad Bucal: Mucosas orales húmedas.
EXAMEN FÍSICO SEGMENTARIO
Cabeza: Cabeza normo cefálica, sin presencia de edema,
cabello con distribución e implantación normal,
no desprendible a la tracción.
Cuello: Simétrico, sin presencia de adenopatías
palpables, movimientos de rotación, flexión y
extensión normal.
Tórax: Inspección: Simétrico, elasticidad y
expansibilidad conservada.
Palpación: Frémito conservado.
Percusión: Sonido timpánico normal en ambos
campos pulmonares.
Auscultación: Murmullo vesicular conservado,
campos pulmonares ventilados.
Corazón: Normofonético, R1 y R2 sincrónicos con el
pulso.
Genitales: Sin alteración.
Exploración abdominal Abdomen doloroso en hipogastrio y bilateral
en ambas fosas iliacas
EXÁMENES ESPECÍFICOS
Neurológico: Paciente consciente, orientado en tiempo,
espacio y persona. Glasgow 15/15
EXAMENES DE LABORATORIO

Biometría Hemática
Resultados Unidades Valor de referencia
G. blancos 10.300 /mm3 6.000
Linfocitos 300 /mm3 2.500
Polimorfonucleares 9.650 /mm3 4.000-10.000
totales
Hemoglobina 9.3 g/dl 11.50 – 16.00
VCM 74.1 fl 80.0 – 99.0
HCM 23.6 pg 27.0 – 32.0
Plaquetas 100.0 103/ul 150.0 – 400.0
Gases Arteriales
Ph 7.10 7.35-7.45
PO2 82 mmHg 90
PCO2 21 mmHg 40
HCO3 6 Meg/L 25
BIOQUIMICA SANGUINEA
Glucosa 153 Mg/dl 70-100
Creatinina 8.13 Mg/dl 0.7-1.4
Na+ 118 mEq/L 135-145
K+ 6.2 mEq/L 3.5-5.5
Osm. Efectiva sérica 245 Mosm/kg 275-285

Análisis Biometría: Se evidencia anemia microcitica e hipocromica y linfopenia

OTROS EXAMENES DE LABORATORIO


El Examen general de orina (EGO), mostro leucocitos 3+, proteínas 2+ y sangre 3+ con bacterias
abundantes y escasa celulares epiteliales y Urocultivo negativo.
El Examen General de Heces (EGH) se documentan múltiples parásitos (Áscaris lumbricoides, Tricuris
Trichura; Blastocistis ominis; Chilomastix mesnilii); por lo que se ingresa para cobertura antibiótica y
antiparasitaria; y completar estudios dada la sospecha de inmunosupresión y proceso neoplásico de origen
gastrointestinal
Serología por VIH: negativo.
EXÁMENES COMPLEMENTARIOS

RX TORAX

Descripción:
Se realiza Radiografía de tórax en la cual se visualiza múltiples infiltrados micronodulares, no se logra
baciloscopias ya que el paciente no expectora.
ULTRASONIDO (USG):

Descripción:
Se realiza ultrasonido (USG) renal y testicular dado el aumento en la creatinina y el hallazgo al examen físico,
se documentó nefromegalia bilateral con lito en vejiga Y a nivel testicular se visualiza masa con características
de proceso neoplásico en testículo derecho y muestra dilatación del canal espermático, los marcadores
tumorales, se reciben positivos únicamente Ca 125 (76 U/ml) y alfafetoproteina (9.22 u/ml), para el valor de
referencia del laboratorio.
TOMOGRAFÍA TORACOABDOMINAL

Descripción:
Se solicita Tomografía toracoabdominal al servicio de radiología. Se reporta: patrón micronodular en
parénquima pulmonar con nódulos de hasta 0.7 cm, considerar tb Milliar con afectación multisistémica (renal,
ganglionar, testículo derecho) o un proceso neoplásico de origen testicular con metástasis a pulmón, riñón y
sistema ganglionar

EVOLUCIÓN DEL CASO:


Ante la sospecha de infiltración renal, se solicita BAAR de sedimento urinario seriado con resultados
positivos, y la tinción Ziehl Neelsen en orina con resultado positivo.

DIAGNÓSTICO DIFERENCIAL
 Cistitis crónica.
 Epididimitis crónica inespecífica.
 Cistitis intersticial.
 Nefrocalcinosis.
 Espongiosis medular renal.
 Epididimitis gonocócica.
 Pielonefritis crónica.
 Atrofia renal hidronefrótica de otro origen
- DIAGNÓSTICO DEFINITIVO
Tuberculosis Miliar diseminada con afección renal y genitourinaria
TRATAMIENTO
Se decide iniciar el tratamiento antituberculoso donde se administran dosis Isoniacida (H), Rifampicina (R),
Pirazinamida (Z) y Etambutol (E), siguiendo el esquema (2HRZE/4HR), y hemodiálisis en tres ocasiones por
parte del servicio de nefrología, con posterior manejo conservador. Se da el alta médica y seguimiento por
consulta externa de nefrología e infectologia.
DISCUSIÓN Y ANÁLISIS DEL CASO
La tuberculosis constituye la enfermedad infectocontagiosa de índole mundial, con una alta incidencia y
prevalencia que no ha cambiado significativamente durante décadas, esto debido a la emigración externa o
interna desde zonas endémicas, además de la creciente población de seropositivos para el virus de la
inmunodeficiencia humana (VIH) y la aparición de cepas resistentes a múltiples fármacos de
Mycobacterium. De evolución crónica e insidiosa, que ataca principalmente al sistema respiratorio y en
menos frecuencia de forma extrapulmonar se da la afección a nivel Renal y sistema genitourinario.
El caso expuesto previamente corresponde a un paciente seronegativo para el virus de inmunodeficiencia
humana (VIH), pero con un grado de desnutrición avanzada que fue un factor predisponente para el
desarrollo de la enfermedad que se presentó de forma inusual con daño renal demostrado por estudios de
imagen (TAC Abdominal) a pesar de que la tomografía cuenta con baja especificidad y la presencia de
bacilos alcohol acido-resistente en las tinciones especiales. La Tuberculosis renal no tiene un cuadro clínico
clásico; generalmente se presenta con manifestaciones atípicas; como en nuestro caso con sintomatología
urinaria, hiperazoemia que culmino en terapia de restitución renal de emergencia, con posterior recuperación
de la función renal. Sólo el 20 al 30% de los pacientes con tuberculosis genitourinaria tiene antecedentes de
infecciones pulmonares.
A pesar de ello se puede sospechar el diagnóstico cuando existe el antecedente de tuberculosis pulmonar o el
hallazgo de cambios radiográficos sugestivos de diseminación linfohematógena hasta llegar a el riñón a,
luego se extiende hasta la uretra, la vejiga y / o la próstata. La detección microscópica de bacilos alcohol-
ácido resistentes en orina mediante tinciones especiales como la coloración de Ziehl-Neelsen nos confirman
el diagnóstico clínico, siendo este el método diagnostico utilizado en este caso; claro el diagnóstico definitivo
es con los hallazgos histopatológicos o la demostración del bacilo en el cultivo de orina. Cabe mencionar que
el urocultivo fue negativo; pero esto no desestimo la sospecha diagnostica; según la literatura es de alta
especificidad y baja sensibilidad, por lo que suele darse falsos negativos. En nuestro caso los estudios de
imagen tomográficos por ultrasonido proporcionaron orientación clínica descartando causas de infiltración
granulomatosas a nivel renal y genitourinario, principalmente las de etiología infecciosa
CONCLUSIONES:
La tuberculosis es una enfermedad endémica en nuestro país, su forma diseminada, afecta diversos órganos y
sistemas por siembra linfohematógena, entre los factores de riesgo se encuentra el estado de desnutrición que
predispone al desarrollo de la enfermedad, que no cursan con el cuadro clínico usual, nuestro paciente siendo
negativo para VIH, pero con un estado comórbido de desnutrición se presenta con sintomatología
constitucional y genitourinaria con datos clínicos, laboratoriales y de imagen que orientan a la diseminación
difusa del Bacilo M. tuberculosis; Por lo que siempre se debe determinar dentro de los diagnósticos
diferenciales, para con ello brindar una terapia oportuna. La tuberculosis genitourinaria es generalmente
curable con medicamentos antituberculoso, se reserva la resección quirúrgica para pacientes que no responden
al tratamiento. No se logró seguimiento para la obtención de biopsia de la lesión tumoral del testículo derecho;
pero posterior al inicio del tratamiento antifímico según el esquema básico primario de las normas control y
prevención de la tuberculosis, el paciente presento mejoría clínica y descenso de los azoados por lo cual se le
omitió el manejo dialítico.

BIBLIOGRAFÍA BASE PARA EL CASO CLÍNICO:


1. Tovar O, Reyes B, Castillo D, Medina S, Martinez R, Solorzano S, et al.
TUBERCULOSIS MILIAR CON DISEMINACIÓN RENAL Y
GENITOURINARIA: REPORTE DE UN CASO. REV MED HONDUR. 2017;85.
Avaliable from: http://www.bvs.hn/RMH/pdf/2017/pdf/Vol85-3-4-2017-10.pdf
2. N. Koutlidis, A. Fillion. Tuberculosis urogenita. 2018 [cited 2023 Ene 11]. 1(2):12.
Available from:
https://www.sciencedirect.com/science/article/abs/pii/S1761331016820022

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