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Secuelas de COVID-19 más importantes por su frecuencia y gravedad:

- Fatiga (58 %)

- Dolor de cabeza (44 %)

- Pérdida de cabello (25 %)

- Dificultad para respirar (24 %)

- Pérdida del gusto (23 %)

- Pérdida del olfato (21%)

- debilidad muscular

- insomnio

Los síntomas más comunes objetivados son fatiga o debilidad muscular en cerca del 60% e
insomnio y ansiedad cerca del 25%.

Deterioro de la función pulmonar

A nivel pulmonar se espera un deterioro de la función pulmonar en aquellos pacientes con mayor
afectación radiográfica y se ha objetivado hasta un descenso del 30% de la capacidad pulmonar en
algunos pacientes.

- Disnea ( dificultad para respirar )


- Dolor de pecho
- Tos seca

Problemas neurológicos

A nivel Neurológico, una de las alteraciones más frecuentes es la anosmia o perdida de olfato por
afectación directa el virus al sistema nervioso central. Lo normal es recuperarlo entre 2-4 semanas
después de superada la enfermedad; aunque hay paciente en porcentaje bajo que lo mantienen
durante meses. La cefalea que es uno de los síntomas más habituales suele desaparecer en 2
semanas. En un porcentaje bajo, entorno al 3% pueden presentar cefalea crónica durante meses.
Dentro de las secuelas graves neurológicos, hay un porcentaje bajo de pacientes que pueden
presentar Síndrome de Guillain-Barre con dificultad para movilización principalmente de
miembros inferiores.

- Dolor de cabeza ( cefalea )


- Depresión
- Ansiedad
- Niebla mental falta de concentración
- Fatiga
- Trastornos de sueño ( insomnio )
- Mareos
- Sensación de hormigueo
Secuelas dermatológicas

A nivel cutáneo se han objetivado cuadros de urticaria crónica incluso después de pasado y curado
el COVID. Otra alteración que se ha visto con cierta frecuencia pasadas semanas de la infección es
caída de pelo.

Alteración de enzimas cardiacas

A nivel cardiaco es bien sabido que 1/3 de los pacientes presentan alteración de enzimas cardiacas
con posibles cuadros de miocarditis “silentes” con posible disminución de la contractilidad a medio
plazo que todavía no ha sido estudiada.

Enfermedades vasculares: Trombosis

A nivel vascular, la cascada inflamatoria propia de la enfermedad favorece los fenómenos


trombóticos y es sabido que un 30% de los pacientes ingresados va a presentar fenómenos
trombóticos clínicamente objetivados. A la larga se va detectando cuadros de síndrome
postrombótico en miembros inferiores en relación con trombosis venosas profunda previas y
cuadros de hipertensión pulmonar crónica por afectación en arterias pulmonares.

SECUELAS DEL COVID-19 A NIVEL PULMONAR

SECUELAS PULMONARES PARENQUIMATOSAS POST COVID

El síndrome respiratorio agudo severo (SARS) fue una epidemia viral respiratoria

causada por el coronavirus SARS-CoV-1, la primera cepa identificada de la especie de

coronavirus16-17. El SARS tuvo una duración de la enfermedad de 1-2 semanas, y la mayoría

de pacientes se recuperaron, pero hasta un tercio de los pacientes SARS desarrollaron severas

complicaciones pulmonares, con lesión pulmonar aguda y síndrome de distrés respiratorio

aguda (SDRA). La fase aguda del SARS está dominada histológicamente por daño

pulmonar agudo (DAD) con edema, pérdida bronquiolar de células epiteliales ciliadas y

depósito de membranas al- veolares ricas en hialina, lo que dificulta el intercambio de

oxígeno.

Esta fase es seguida por una fase progresiva (semanas 2-5) con deposición de fibrina e

infiltración de células inflamatorias y fibroblastos. En la última fase (semanas 6-8) la fibrosis

pulmonar se consolida con el depósito de colágeno y la proliferación celular de los espacios

intersticiales19-20. La fibrosis se correlacionó con la gravedad y la duración de la

enfermedad19-20. En particular, los pacientes con SARS de mayor edad tenían más riesgo de
fibrosis pulmonar. Solo un estudio identificó signos radiológicos para predecir el desarrollo

de fibrosis. Además, las características radiológicas de la fibrosis a los 3 y 6 meses se

identificaron en un tercio de los casos. El síndrome de coronavirus del síndrome

respiratorio del Medio Oriente (MERS) tuvo presentaciones clínicas similares, aunque las

anomalías radiológicas fueron más comunes (90-100%) que en el SARS. Para ambas

enfermedades, factores de riesgo como la edad y el género masculino se asociaron con más

complicaciones y peor pronóstico de la enfermedad. La enfermedad COVID-19 tiene

también una presentación clínica similar; síntomas agudos (fiebre, tos y disnea), seguido de

neumonía y afectación inflamatoria intersticial bilateral. En aproximadamente un tercio

se desarrolla SDRA, que puede conducir a la muerte del paciente o provocar complicaciones y

lesiones pulmonares de lenta recuperación. En esta recuperación, los pacientes más

jóvenes suelen reparar las anomalías inducidas, pero en los adultos mayores existe un porcentaje
de casos no despreciable que cicatrizan anormalmente en forma de bandas cicatriciales

o fibrosis a las 2-3 semanas .

AFECTACIÓN CLÍNICA SECULAR Y CONSECUENCIAS DEL

CORONAVIRUS

Vía aérea superior:

• Grado residual de anosmia.

• Ageusia.

• tos.

Vía aérea respiratoria inferior:

• Disnea de esfuerzo,

• Tos

• Secreción mucosa

• Dificultad para inspiración profunda

• Dolor torácico

- FIBROSIS PULMONAR

La agresión directa que tiene el virus hacia los pulmones o las consecuencias

inflamatorias de la infección, induce a la formación de un tejido cicatricial en los pulmones


denominado fibrosis pulmonar. Este tejido cicatricial situado en los pulmones es más duro y

carece de esa cualidad elástica que necesitan los pulmones para funcionar correctamente, esto

da como consecuencia que los pacientes pueden tener problemas en el sistema respiratorio.

El sello patológico del síndrome de dificultad respiratoria aguda (SDRA) es el daño

alveolar difuso que provoca, caracterizado por una fase exudativa inflamatoria aguda inicial

seguida de una fase de organización y fibrótica

Estudios previos han destacado que la duración de la enfermedad es un determinante

importante de la fibrosis pulmonar después del SDRA. Este estudio mostró que el 4 % de los

pacientes con una duración de la enfermedad de menos de 1 semana, el 24 % de los pacientes

con una duración de la enfermedad de 1 a 3 semanas y el 61 % pacientes con una duración de

la enfermedad superior a varias semanas desarrollaron fibrosis .

Se sabe que cuando hay el reconocimiento de cuerpos extraños el mecanismo

inmunitario anómalo actúa liberando la conocida tormenta de citocinas que puede conducir a

la iniciación y promoción de la fibrosis pulmonar.

Uno de los factores de riesgo más conocidos es el tiempo de permanencia en la unidad

de cuidados intensivos y el tiempo de ventilación mecánica. Aunque la gravedad de la

enfermedad está fuertemente asociada con la duración de la estancia en la UCI, la ventilación

mecánica está asociada con un riesgo adicional de lesión pulmonar asociada al ventilador

(VILI). La base de estos daños es que los ajustes anormales de presión o volumen conducen a

la liberación de moduladores proinflamatorios, exacerbación de la lesión pulmonar aguda y

aumento de la mortalidad o fibrosis pulmonar en estos pacientes supervivientes, por ende, los

pacientes ancianos que requieren cuidados en la UCI y ventilación mecánica son los de mayor

riesgo para desarrollar fibrosis pulmonar .

La incidencia de fibrosis después de la COVID-19 se hará evidente con el tiempo, pero

los análisis iniciales de los pacientes sobrevivientes del COVID-19 mostraron que los pacientes

recuperados desarrollan anomalías de fibrosis.

- BRONQUIECTASIAS

Se define las bronquiectasias como dilataciones bronquiales con o sin engrosamiento de la pared
bronquial asociado como posibles secuelas de la neumonía. Desde un punto de vista radiológico,
pueden aparecer en pacientes que sufrieron una neumonía grave por COVID-19.

Un estudio reciente que evaluó los cambios radiológicos (medidos por tomografía

computarizada) a los 6 meses en 114 sobrevivientes de neumonía grave por COVID-19

encontró que aproximadamente un tercio de los pacientes desarrollaron cambios fibróticos en

los pulmones, de los cuales el 24 % tenían bronquiectasias. pacientes durante el seguimiento

en comparación con el 7% para la enfermedad aguda .

- EVENTOS TROMBÓTICOS VASCULARES PERIFÉRICOS Y PULMONARES

Los eventos trombóticos pulmonares y vasculares periféricos asociados con la infección

por SARS-CoV2 ocurren con mucha frecuencia.

En el caso de que el paciente sobreviva a la trombosis pulmonar, se desarrollan otras

complicaciones, que pueden permanecer crónicas, principalmente hipertensión pulmonar y

limitación del movimiento, o resolverse espontáneamente después de varios meses de terapia

anticoagulante de mantenimiento .

Aunque estos efectos pulmonares son raros, son muy limitados y requieren control y

manejo especializados. Finalmente, es de particular interés contar con datos de alta calidad para

comprender mejor la relación entre tromboembolismo y COVID-19, lo que se puede lograr a

través de estudios internacionales multicéntricos en el futuro.

El estudio de las similitudes y peculiaridades en la presentación y evolutivo de los

eventos tromboembólicos que se presentan en la infección por coronavirus identificará

estrategias terapéuticas optimizadas para estos pacientes. Ahora está disponible un registro

internacional de pacientes con enfermedad tromboembólica pulmonar (Registro Informático

de Enfermedad Tromboembólica - RIETE), que ha comenzado a incluir datos de pacientes con

COVID-19 .

TRATAMIENTOS PARA LAS SECUELAS DEL COVID-19

TRATAMIENTO FARMACOLÓGICO

La farmacoterapia para las secuelas mas comunes del SARS-CoV2 se basa en

Métodos generales de tratamiento de la fibrosis pulmonar. daño pulmonar que se produce

La fibrosis pulmonar es irreversible y actualmente no existe un tratamiento eficaz


para prevenir la progresión de la enfermedad. Es importante mencionar que previamente se
deben realizar pruebas de función hepática.

Iniciar todos los medicamentos. Estas pruebas deben realizarse después de iniciar el tratamiento.

Repita durante los primeros 6 meses, luego cada 6 meses.

El tratamiento de la primera línea se compone de inmunosupresores, como corticoides,

micofenolato, azatioprina, ciclofosfamida, entre otros. En la segunda línea están

los antifibroticos como la pirfenidona y nintedanib .

Las condiciones comunes asociadas con nintedanib son: la diarrea, las náuseas, los

vómitos y la disfunción hepática también pueden aumentar el riesgo de hemorragia en pacientes

que toman anticoagulantes.

Los efectos secundarios comunes de la pirfenidona son hinchazón, fotosensibilidad,

náuseas, malestar estomacal, dispepsia, anorexia, fatiga y más de tres veces el nivel normal de

transaminasas. Del mismo modo, se prescriben procinéticos, fármacos utilizados para mejorar

el movimiento intestinal, la velocidad de la micción y la función del esfínter, y se dan consejos

dietéticos a los pacientes .

- OTROS DE LOS MEDICAMENTOS PARA EL TRATAMIENTO Y SU ALCANCE

Nirmatrelvir con ritonavir (Paxlovid)

Antiviral

Adultos; niños de 12 años de edad o más

se debe iniciar dentro de los 5 días de la aparición de los síntomas (por vía oral)

Remdesivir (Veklury):

Antiviral

Adultos y niños

se debe iniciar dentro de los 7 días de la aparición de los síntomas

Infusiones intravenosas (IV) en un establecimiento de atención médica por 3 días consecutivos


Bebtelovimab:

anticuerpo monoclonal

Adultos; niños de 12 años de edad o más

se debe iniciar dentro de los 7 días de la aparición de los síntomas

Una inyección IV por única vez

Molnupiravir (Lagevrio):

Antiviral

TRATAMIENTO NO FARMACOLÓGICO

FISIOTERAPIA

La fisioterapia respiratoria es importante para prevenir complicaciones de la infección por Covid-


19, ya que el ejercicio aumenta la fuerza y la resistencia, alivia la dificultad para respirar, previene
la discapacidad física, reduce el estrés y aumenta la flexibilidad del pecho y el cuello.

El inicio de estas actividades se manifiesta en una etapa clínicamente estable, es decir, cuando se
ha superado el peligro para la vida del paciente, y el objetivo es promover el desarrollo de la
fuerza muscular y la recuperación del movimiento. Para mejorar la función pulmonar, los médicos
y fisioterapeutas recomiendan y enseñan las siguientes actividades y ejercicios para ayudarlo a
ponerse en forma.

Estos ejercicios se pueden realizar tanto en una posición recostada, sentada pero erguida

y también de pie, para un mejor resultado es recomendable realizar los ejercicios de forma

diaria y con las repeticiones que el paciente pueda hacer, así mismo si en alguno de estos

ejercicios la persona siente dificultad para respirar, tos o sensación de ahogo es mejor que el

paciente no los realice.

1. Para iniciar el primer ejercicio el paciente tiene que estar sentado y con la espalda

erguida y con las manos sobre el abdomen, luego se procederá a inspirar por la nariz para

después aguantar por 3 o 4 segundos y finalmente expire el aire por boca con los labios

fruncidos lentamente .

2. Para el segundo ejercicio la persona estará en posición decúbito supino, pero con las

piernas flexionadas y con los brazos estarán extendidos en dirección a la cabeza, después
inspirara el aire por la nariz y para expirar el aire los brazos rectos deben descender lentamente.

3. Para el tercer ejercicio la persona puede estar sentada como también en la misma

posición que el segundo ejercicio, pero con los brazos estarán extendidos en posición vertical,

es decir, brazos rectos levantados sobre la cabeza, después retenerá el aire por 3 o 4 segundos

y finalmente expirará el aire y al mismo tiempo descenderá lentamente los brazos haciendo que

se aproximen hacía por costados de su tronco .

Una de las formas más efectivas de reducir la formación de fibrosis en cualquier tejido

es reducir dos procesos sistémicos excesivos que ocurren inicialmente después de una lesión

en el cuerpo, a saber, la inflamación y la oxidación, mientras que una vez que comienza la

cascada, el proceso retrocede, aumentando la inflamación y la oxidación.

Estilo de vida saludable.

La alimentación es un factor primordial para la salud de las personas en general, esta

debe ser balanceada, el consumo de verduras ayuda a fortalecer nuestro sistema inmunológico

y debe consumirse regularmente.

- Los nuevos fármacos que se han desarrollado para variar el curso natural de la

enfermedad y acortar sus efectos destructivos en el parénquima pulmonar son:

- Pentraxin 2: Previene el proceso de fibrosis pulmonar, es decir, el crecimiento

excesivo de células asociadas a las fibras. Los resultados de estos estudios, aunque

preliminares, muestran que los pacientes que recibieron esta terapia combinada

experimentaron una reducción en la función pulmonar en comparación con el

placebo.

- Combinación de nintedanib y pirfenidona: Se está investigando la posibilidad de

que una combinación de los dos medicamentos pueda ayudar. Los ensayos clínicos

realizados hasta el momento no han mostrado efectos adicionales .

- Pamrevlumab : El anticuerpo monoclonal se dirige al factor de crecimiento celular, una proteína


que promueve la formación de tejido fibroso, lo

que conduce a la fibrosis pulmonar. Los estudios han demostrado una seguridad

aceptable, pero se necesitan ensayos clínicos aleatorios para demostrar su eficacia

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