Psicomotricidad Tomo 1

-Dalila Molina de Costalat

La psicomotricidad, como ciencia de la educación neuromuscular, se enfoca en

educar el movimiento al mismo tiempo que pone en juego las funciones de la
inteligencia.

La coordinación general está regida por las vías neuromotrices cerebelosas que
dominan el funcionamiento estático (equilibrio estático) y el cinético (equilibrio y
sinergia de los movimientos automáticos y los no automatizados)

Adquiere su desarrollo definitivo a los quince años y presenta dos aspectos

diferenciados:

Coordinación estática: dada por el equilibrio entre la acción de los grupos

musculares, se establece en función del tono, permite la conservación voluntaria
de las actitudes

Coordinación dinámica: es la puesta en acción simultánea de grupos musculares

diferentes en vista a la ejecución de movimientos voluntarios más o menos
complejos. Esta puede ser general cuando solamente intervienen miembros
inferiores o en simultaneidad con miembros superiores o puede ser manual
cuando se establece por el juego de movimientos de ambas manos.

Coordinación visomotriz: Se da en un movimiento manual o corporal, que

responde a un estímulo visual y se adecua positivamente a él.

Etapas del desarrollo psicomotriz: la primera ( 0 a 7 AÑOS) tiene como

característica principal el progresivo dominio de la actividad motriz voluntaria, que
se logra al disminuir las sincinesias y localizarse el gesto, consiguiendo el control
voluntario del movimiento que se hace cada vez más preciso y correcto, se
adquiere aquí como primer factor la precisión

Segunda etapa: ( 7 a 10 años) : perfeccionamiento gradual de las actividades

iniciadas ,afirmándose la precisión ya adquirida , la mecanización de los
movimientos habituales y aceleración natural de los mismos hasta convertirse en
ágiles . Incorporación del factor de rapidez.

Tercera etapa ( 10 a 14 años) : se adquiere el factor de fuerza muscular, dándole

al movimiento características adultas, adquiere madurez.

En el débil mental estos factores se adquieren en el orden de: 1ro: Precisión en

función del ejercicio 2do fuerza muscular en función del crecimiento y 3ro rapidez
en función de la integración neuromuscular.
Cada tipo de coordinación que se educa tiene una metodología especial y
diferente. Para cada edad motriz existe un plan de reeducación y para cada
desorden.

Para los desórdenes de la coordinación estática –de equilibrio- se recurrirá a

ejercicios de tipo gimnástico, deberán demandar un esfuerzo de atención que
ponga en juego la psiquis, se adaptarán los ejercicios para que cada vez que sea
posible se provoquen asociaciones que estimulen el intelecto, se formen imágenes
mentales que ayuden a la evocación o se proceda por imitaciones diversas.

En cuanto a la coordinación de la dinámica general, se cuenta con un medio

educacional y terapéutico: la rítmica, de carácter musical.

Para las alteraciones dinámicas manuales, se reeduca mediante ejercicios

espaciales que llevaran a obtener la precisión , rapidez y fuerza muscular de los
movimientos de los miembros superiores, especialmente de las manos.