Está en la página 1de 2

GUIÓN DE PODCAST

Introducción:
¡Hola! Les saluda Wilder David Martínez López estudiante que cursa el 5to grado “H”, en la I.E
Karl Weiss, y estás escuchando “La voz Karweissina”.
En esta oportunidad hablaremos sobre las afectaciones que causó la pandemia en nuestra salud
emocional, física y espiritual, lo que nos permitirá brindar distintas recomendaciones para su
cuidado y así poder conllevar una vida de armonía con los demás.
Durante los 2 años de pandemia hemos vivido situaciones que fueron amenazantes o peligrosas para
nuestra vida y la de nuestra familia, incluso pérdidas humanas que nos produjo tristeza, miedo y
ansiedad, así como sentimientos de enojo y frustración al sentirnos débiles e indefensos.
El año 2020, 2021, y aun el 2022 representa para el mundo momentos que han resquebrajado la
salud emocional, física y espiritual de las personas. La salud emocional es el manejo responsable de
los sentimientos, pensamientos y comportamientos, pero para lograr ello debemos tomar en cuenta
las estrategias de autorregulación emocional. Para la salud física, debe entenderse como el óptimo
funcionamiento fisiológico del organismo, debe tomarse en cuenta el ejercicio físico o deporte y
una buena alimentación. Como último la salud espiritual que implica la reflexión de nuestras
creencias.
Desarrollo:
Cuidar de nuestra salud significa que todos los peruanos y peruanas debemos optar por hábitos
saludables siendo una práctica diaria y no solo ocasional, además de la constancia, necesitamos
tener una actitud positiva, desarrollar una inteligencia emocional y tener una autoestima alto, ya que
para tener una vida saludable también necesitamos estar bien emocionalmente.
Lamentablemente nuestra salud en estos tiempos de pandemia se habido afectada por diversos
episodios que deja a su paso. La pérdida de algún ser querido, temores de contagio, incertidumbre a
lo que pueda venir, entre otras preocupaciones, están provocando la afectación de nuestro bienestar
emocional, psicológico y social.
La pandemia de la COVID-19 hace que muchos de nosotros permanezcamos en casa y estemos
sentados mucho más tiempo de lo habitual. A muchos nos resulta difícil seguir practicando la
actividad física acostumbrada. La situación es aún más preocupante para quienes no suelen hacer
demasiado ejercicio.
La salud física no basta para que una persona se sienta bien de manera integral; las personas
también requieren de salud espiritual. Esta hace referencia al yo interior y cómo este se proyecta
con los seres que nos rodean cercanamente, con las demás personas de nuestra comunidad y, sobre
todo, en nuestra relación con Dios.
Ante esta situación voy a presentar algunas recomendaciones que contribuyan al bienestar de
nuestra salud emocional, física y espiritual:
➢ La respiración. Aumentar la capacidad respiratoria es el primer paso para alcanzar un
estado de relajación y preparar al cuerpo para el cambio.
➢ Relajación muscular. Esta estrategia trata de eliminar la tensión muscular que es una de
las manifestaciones fisiológicas más habituales de la activación emocional.
➢ Pensamiento positivo. Esta estrategia consiste en sustituir los pensamientos negativos por
positivos, mejorando el estado emocional.
➢ La meditación. Se dice que, a nivel físico, la meditación disminuye la presión sanguínea,
mejora el sistema inmunológico y aumenta la producción de serotonina, mejorando el
humor y el comportamiento.
➢ Resiliencia. Esto se logra mediante una combinación de factores que te permiten afrontar y
superar los problemas y las adversidades de la vida, y construir sobre ellos, saliendo incluso
fortalecidos.
➢ Seguir una dieta sana y equilibrada. Mantener una dieta saludable es la clave a la hora de
cuidar la salud. Se deben evitar los azúcares refinados y todos aquellos productos
excesivamente dulces, así como las grasas saturadas y las grasas trans.
➢ Actividad física de manera regular. El ejercicio moderado fortalece el corazón, mejora la
circulación y ayuda a eliminar toxinas entre otros beneficios. Es importante practicar
ejercicio de manera regular y acorde con la edad.
➢ Mantener una buena higiene. Es importante lavarse las manos, más aún ahora por la
Covid-19, mantener una higiene bucal y un aseo adecuado.
➢ Crear un buen ambiente en nuestro alrededor. Las relaciones sociables saludables
también son salud, contribuyendo a mejorar de forma exponencial nuestro bienestar.
➢ Oración y lectura de la biblia. Nuestro cuerpo es templo del espíritu Santo y por tanto
debemos cuidarlo.
Despedida:
Con todo lo mencionado, estoy seguro que tú tomarás la decisión correcta para cuidar tu salud y no
olvides tomar en cuenta las recomendaciones dadas, ya que estas tienen como objetivo preservar la
salud emocional, física y espiritual.
Finalmente te invito a compartir esta información con tus amigos o familiares, para que puedan
mejorar sus estilos de vida.
Recuerda que ¡Nunca es tarde para cambiar tu estilo de vida!
Gracias por permitirme llegar a ti y nos estaremos encontrando en nuestro próximo podcast, saludos
y hasta la próxima, chao, chao.

También podría gustarte