Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Este elemento tiene que ver con las características que debe reunir una
conducta para que se entienda iniciadora de los “actos ejecutivos” respecto
de determinado tipo penal. Se sustenta en la sección del articulado que reza
“el que iniciare la ejecución de un hecho punible...”.
TIPICIDAD
Frente a este elemento son muchas las teorías que se han tejido en aras de
marcar los límites entre los actos ejecutivos y los preparatorios así:
a- Teorías Subjetivas: Estas teorías intentan marcar el límite de los actos
ejecutivos y preparatorios atendiendo a la voluntariedad o intencionalidad
del agente, expresada en lo que comúnmente se ha llamado “Plan del Autor”.
En esta postura general se encuentran dos corrientes, a saber:
· Teoría Subjetiva Extrema: Expone que hacer tal delimitación es imposible en
tanto parten de la realización del injusto con la simple “exteriorización de una
voluntad criminal”. Mediante esta teoría el que compra un arma con la cual se
piensa matar posiblemente en un futuro ya configuraría un homicidio en
grado de tentativa. Evidentemente se parte de un concepto peligrosista
inaceptable en estos momentos, así como de un derecho penal de autor.
TIPICIDAD
• Teoría Subjetiva Limitada: Se intenta marcar un límite entre los dos actos,
mediante la observancia de la opinión del agente respecto del plan criminal, esto
es, cómo ha imaginado el agente que va a comenzar a ejecutar la acción típica. Se
dice que es un punto a tener en cuenta dentro de los criterios de delimitación,
más nunca podría ser el único, porque haríamos depender la tentativa del
arbitrio del delincuente en cuanto a lo que él considera son los actos ejecutivos.
Teorías Objetivas: Estas teorías pretenden marcar el límite entre los actos
preparatorios y ejecutivos acudiendo a criterios objetivos. Así, tenemos dos
vertientes:
· Teoría objetiva Formal: Se marca el límite con la utilización de la descripción típica,
es decir, que se empezarán los actos ejecutivos cuando el agente empiece a realizar la
"acción típica”. Se dice que este criterio es una tautología, a pesar de ser respetuoso
del principio de legalidad, en tanto precisamente lo que se intenta es determinar
cuándo se inicia la acción típica. Por esta incertidumbre y falta de lógica de la teoría
se ha rechazado de plano.
TIPICIDAD
Así, en primer lugar, debemos tener en cuenta el “plan individual del autor”; y en
segundo lugar, si el comportamiento desplegado por el agente como acción típica
está en estrecha relación con aquel plan.
En definitiva, es claro que no puede existir un criterio “matemático” para diferenciar
los actos ejecutivos de los preparatorios, aunque se deben establecer algunas pautas
para que el intérprete sea el que, bajo los criterios de la sana crítica, determine o
deslinde tales actos. Podríamos decir que tales criterios son:
· Establecer en cada caso cuál fue el plan del autor (el arma a utilizar, el lugar, la hora,
la forma de ejecución, el delito, etc.) y sus características personales (competencias,
habilidades, etc)
· Establecer la puesta o no en peligro del bien jurídicamente tutelado por el legislador.
. Determinar la inmediatez temporal de la ejecución, esto es, qué acto ejecutivo sería
aquel que inmediatamente hubiera conducido a la consumación de la conducta
descrita en el tipo penal.
TIPICIDAD
Según lo anterior, lo importante es que el agente haya llegado a los actos ejecutivos
(y no sólo a los preparatorios o ideativos únicamente), conforme al derecho penal de
acto. En este sentido hay que prestar atención al hecho de que la acción del sujeto no
se haya consumado, en la medida que se trataría de un delito perfecto y no de una
tentativa del mismo; así como también cobra importancia que no se trate de un delito
de mera conducta donde un simple acto ejecutivo constituye de por sí el delito
perfecto (esta clase de tipos penales no admiten tentativa: como el porte ilegal de
armas).
3. Idoneidad de la conducta
El comienzo de la ejecución debe darse con "actos idóneos" como lo exige el artículo
27 ibídem. Un acto idóneo es aquel que, según la experiencia, puede ser considerado
apto para producir determinado resultado.
TIPICIDAD
4. Univocidad de la conducta
5. involuntariedad en la no consumación
Es cierto que al momento de estudiar los elementos amplificadores del tipo se debe
hacer referencia específica a la participación criminal de manera única, esto es, todas
aquellas figuras que no se incluyen dentro del concepto de autor; sin embargo,
también es cierto que antes de estudiar este elemento amplificador debemos hacer
lo propio con la autoría, ya que es imposible pensar en un partícipe sin la existencia
de un autor (Principio de Accesoriedad). Leamos entonces un introito a la temática.
Valga decir, que en todo fenómeno criminal o “Conducta Punible” existen diferentes
posibilidades de intervención, dado que como lo dicta uno de los elementos básicos
del Tipo Objetivo (Sujeto Activo), en todo hecho que se repute punible existen uno o
varios individuos que desarrollan la conducta en el sentido exigido por la norma.
.
TIPICIDAD
Pues bien, el Código Penal Colombiano del año 2000 en su artículo 28, afirma la
posibilidad del concurso de personas en la conducta punible, al manifestar
expresamente que pueden concurrir a la realización de la misma los autores y los
partícipes.
Entonces, existirá un instituto fundamental en el Derecho Penal Colombiano que
podríamos llamar “Concurrencia o Intervención” en la conducta punible, que
contendrá a su vez dos formas específicas llamadas “Autoría” y “Participación”.
Si el jurista se detiene por un momento y lee cualquier tipo penal de la parte especial
del código, observará que en cuanto se refiere al sujeto activo, el legislador
solamente contempló la figura de la autoría, esto es, aquellos que ejecutan el verbo
rector del tipo. A modo de ejemplo, el artículo 103 dice “El que matare a otro...”, y no
“El que ayude a matar...” o “El que induzca a otro o lo determine a matar...”; es por
ello que existe la “Participación” como un mecanismo para darle más amplitud al tipo
penal. Esta participación podrá ser (según el artículo 30 C.P) a través de la
Determinación o de la Complicidad.
TIPICIDAD
Por otro lado, en la forma perfecta de intervención o concurrencia (por así llamarla),
consagrada en cada tipo penal con expresiones como “El que...”, “La que...”, “Los
que...”, etc., esto es, la “Autoría”, consagra el artículo 29 C.P varias formas que
denominaremos en este libro de la siguiente manera: Autoría Inmediata, Autoría
Mediata, Coautoría y Autoría por Representación, según la forma en que las personas
se vinculen con la conducta que se quiere punir. Así las cosas, veamos un cuadro que
conglobe esta sección introductoria:
En resumen: Se debe tener en cuenta que para el jurista colombiano, basado en la
existen dos formas de intervenir en una Conducta reputada como Punible: a través de
la Autoría o a través de la Participación.
La primera de ellas como ejecución del verbo rector descrito en el tipo penal, con
formas como la Inmediata, Mediata, Coautoría y por Representación; y, la segunda
(participación), como mecanismo amplificador del tipo, con dos formas específicas
como son la Complicidad y la Determinación.
TIPICIDAD
1. La Autoria
Concepto de autor
Según el artículo 29 autor es “quien realice la conducta punible”. “Realizar” puede
entenderse restrictivamente conforme a los parámetros de la teoría Objetivo-Formal,
que postula la existencia de autor cuando el individuo ejecuta todo el
comportamiento típico, dejando de lado e impunes la coautoría y la autoría mediata.
Por esta circunstancia se ha construido el siguiente concepto: autor es aquella
persona que, reuniendo todos los elementos requeridos (tanto objetivos como
personales), por sí mismo, o utilizando a otro como instrumento, o mediante
actuación funcional conjunta, o por representación de persona natural o jurídica,
según el caso, ejecuta o realiza la conducta punible Debemos entender, y es un
aspecto que debe quedar claro desde este preciso momento, que el acto ejecutivo,
jurídicamente y no causal o materialmente entendido, es aquel que transita por el
ámbito de protección del bien jurídico tutelado, esto es, aquel que se acerca a la
producción del daño o es potencialmente peligroso para aquel.
TIPICIDAD
2 Clases de autoría
De acuerdo con la definición anterior, sustentada en el marco legal del artículo 29
C.P/2000, se puede hablar de cuatro tipos de autoría: La Autoría Inmediata, La
Autoría Mediata, La Coautoría y la Autoría por Representación. Estudiemos
brevemente cada una de ellas
✓ Autoría Inmediata:
Por otro lado, cuando el concepto erigido habla de los elementos personales que
debe reunir el autor, se refiere a aquellos elementos que exige el tipo y que recaen
sobre las características personales del autor.
No todo individuo puede cometer todos los delitos, sino que el legislador ha querido
tipificar y sancionar aquellas conductas al ser ejecutadas por determinadas o
calificadas personas (intraneus). Es el caso del prevaricato por acción (Art. 413 C.P) y
el peculado por apropiación (Art. 397 C.P) que sólo pueden ser realizados por un
servidor público. Otros individuos no calificados por el tipo penal pueden actuar
dentro del acontecer delictivo (extraneus), pero nunca en calidad de autores
inmediatos sino de partícipes.
Nótese así que si “X” actúa determinado por “W” para apropiarse de dineros del
estado, siendo el primero servidor público y el último no; “X” responderá como autor
mediato y “W” como determinador así éste no reúna la calidad de servidor.
TIPICIDAD
En este sentido precisamente se pronuncia el inciso final del artículo 30, que
involucra los principios de legalidad y de tipicidad, cuando establece una rebaja de
pena para aquellas personas que concurran en la realización del hecho sin tener las
calidades especiales exigidas en el tipo penal.
Pasando a otro punto relevante sobre este tema, cabe destacar que sólo se puede
considerar autor inmediato en los delitos de propia mano (así llamados desde
Binding), a aquel que realice íntegramente la acción descrita en el tipo penal. Así, en
el delito de acceso carnal violento, únicamente será autor aquel que accede
materialmente a la víctima, el que yace con aquella o la accede, y los demás
intervinientes (el que la sostiene o amarra, el que la amenaza para que no grite, etc.)
serán siempre partícipes (cómplices o determinadores). En los delitos de propia
mano, a su vez, es en la mayoría de los casos impredicable la coautoría por sus
mismas peculiaridades, derivándose casi siempre en concurso de hechos punibles en
los que cada quien independientemente es autor (Por ejemplo, cuando en el acceso
carnal violento se "rotan" en el acceso y en la función de sujetar o constreñir a la
víctima, los individuos serán autores inmediatos y partícipes respectivamente).
TIPICIDAD
✓ Autoría Mediata:
La autoría mediata es aquella en que el autor, reuniendo todos los elementos del
tipo, a través de otro, ejecuta, la acción o acciones descritas en el tipo.
Esto quiere decir que tras del autor mediato siempre habrá un ejecutor instrumental.
El primero domina el hecho, domina la voluntad del segundo que ejecuta
materialmente el delito. Es lo que algunos tratadistas como Puig Peña y Montes,
refiriéndose al ejecutor material, llaman concurso de acción sin concurso de voluntad.
El que proporciona una cuerda, una escalera o un arma, sin saber el fin a que se
destinan esos objetos, es indudablemente inocente del delito que otro consuma.
Igual circunstancia se presenta cuando se presta una ayuda para la comisión de
un hurto (préstamo de una escalera por ejemplo), y el ejecutor aprovecha las
circunstancias para matar al morador que es un antiguo enemigo, caso en el cual el
cómplice no responderá por el homicidio ya que solo prestó colaboración al hurto sin
conocer la intención además homicida del autor.
TIPICIDAD
Por coacción: En nuestro ordenamiento la autoría mediata por coacción lesiona dos
bienes jurídicos distintos, en cuanto que el autor mediato lo será del delito ejecutado
por el instrumento (homicidio, lesiones, aborto, etc.), así como también lo hará, esta
vez en calidad de autor inmediato, del delito de Constreñimiento para Delinquir
siempre que la pena impuesta por el resultado querido no sea mayor.
El ejecutor instrumental será tratado como autor (aunque no responsable) y el autor
mediato como determinador sancionado según el marco penal del artículo 29 C.P, sin
beneficiarse de las causales de inculpabilidad del ejecutor por el principio de la
accesoriedad limitada adoptada en nuestro estatuto punitivo.
Así las cosas, si se constriñe para matar, el autor mediato responderá sólo por el
homicidio y no por el constreñimiento, ya que el primero está sancionado con
pena mayor; indefectiblemente el constreñimiento para delinquir es un tipo penal de
aplicación subsidiaria.
TIPICIDAD
Por utilización de inimputable: Es el caso del que utiliza a un paranoico para dar
muerte a su enemigo, haciéndole creer al enfermo que se trata de su perseguidor; o
la esposa que lleva a su marido cleptómano a una joyería y le insiste en que se
pruebe varias alhajas, hasta que la voluntad de aquel se vence y termina influenciado
por su trastorno apoderándose de alguna de ellas, que luego la mujer disfrutará.
También podrá presentarse la figura cuando no se aprovecha la condición
preexistente, sino que se le coloca al ejecutor en tal condición (cuando para lesionar a
alguien se embriaga a otra persona que se sabe sufre de una intolerancia alcohólica
tornándose violenta; o sabiendo que un individuo es pirómano, se le pone en
circunstancias tales que le es irresistible prender fuego a una casa que el autor
mediato quiere destruir).
Por utilización de un niño: En este caso el evento de la autoría mediata es indudable,
e incluso en algunos casos de autoría inmediata en los que el niño es un simple
mecanismo. Si se trata de un menor de 16 años ya se estaría en el plano de la
instigación y no de la autoría mediata.
TIPICIDAD
✓ Coautoría
.
TIPICIDAD
A medida que las diversas sociedades del mundo han ido evolucionando en
sus interrelaciones políticas, culturales, económicas y sociales, se ha hecho
necesaria cada vez la existencia de la figura representativa, esto es, actuar a
través o por intermedio de otro; y ese “otro” suelen ser, en la mayoría de los
casos, personas o entes jurídicos y colectivos que se conforman a partir de
ficciones.
TIPICIDAD
LA PARTICIPACIÓN
.
TIPICIDAD
No es suficiente que el determinador haga una “puesta en escena” de la cual una persona
extraiga la idea criminal, provocar una situación que suponga una “tentación” para el autor o lo
excite a la comisión delictiva, ya que las maniobras determinativas deben ser “directamente y
dolosamente dirigidas” a determinar.
Se ha querido diferenciar por la doctrina entre la determinación e instigación así:
4. Que el determinado ejecute la acción descrita en el tipo penal para el cual se le determinó,
sea consumando el hecho o dejándolo en grado de tentativa. Según esto no es posible
responsabilizar a los sujetos (determinador y determinado) si no existe ejecución del autor, esto
es, los actos se quedan en el estadio preparatorio.
TIPICIDAD
2. La Complicidad
La complicidad consiste en colaborarle o ayudar voluntariamente a otra persona para que ejecute la acción
descrita en el tipo penal.
De esta definición también se desprenden varios requisitos, a saber:
1- El nexo existente entre la ayuda y la ejecución de la acción injusta por parte del autor. Si se ayuda para
hurtar y el autor mata, es lógico que se rompe esta conexión exigida para responsabilizar al cómplice, así
como se romperá en los excesos ya explicados.
Al igual que en la determinación, el autor es el que tiene el dominio en la ejecución, y nunca el cómplice.
2- Que en el cómplice concurra la voluntad de ayuda, el dolo de contribuir a la ejecución del delito por parte
de otro (sea directo o eventual), eliminándose de plano la ayuda culposa. Así mismo pensamos que es
improcedente hablar de complicidad (o determinación) en los delitos culposos, aunque algunos autores como
Mezger, Maggiore, Nuñez, Schönke-Schröder, admitan tal posibilidad. Como en la determinación, existe un
doble dolo.
TIPICIDAD
3- Que la acción del cómplice sea eficaz, que en verdad ayude en la ejecución, sea moral o materialmente
(consejos o instrucciones en el primer caso y prestar el arma o vigilar la llegada de las autoridades, en el
segundo. No existe limitación en los medios utilizados para contribuir al delito, pero estos deben ser eficaces).
Esto quiere decir que no toda contribución al delito puede ser considerada como complicidad.
Aquello no significa que la llamada complicidad necesaria pueda llamársele autoría (como hace la Corte
Suprema con el “campanero”), por la entidad de la contribución, porque estaríamos aplicando un concepto
unitario de autor. Es diferente el caso de otras legislaciones, que establecen literalmente en sus articulados
como autor al partícipe necesario, y es procedente la discusión nacida de los límites entre lo que es necesario
y lo que no lo es.
De acuerdo con los lineamientos de nuestro ordenamiento jurídico, el cómplice no “ejecuta” la acción descrita
en el tipo penal, sino que simplemente contribuye, ayuda a tal ejecución.
Por otro lado, la contribución del partícipe puede ser negativa o positiva, activa u omisiva, así como se puede
prestar, antes, durante o después de la comisión del ilícito.
En el último caso (contribución posterior) debe haber un acuerdo previo so pena de incurrir exclusivamente
en el delito de encubrimiento.
Si la cooperación ofrecida o prometida no tiene incidencia en la ejecución del autor (así sea moral), sea
porque no la necesitó o porque solo alcanzó la tentativa, no existe complicidad.
TIPICIDAD
4. Que el autor ejecute la acción descrita en el tipo penal para el cual se le ayudó, sea consumando el hecho o
dejándolo en grado de tentativa. Como se especificó, se permite la complicidad en la tentativa, más no la
tentativa de complicidad, y los problemas del exceso se resolverán conforme se estipuló para la inducción o
determinación. Con estas breves apreciaciones damos por culminado el tema de los dispositivos
amplificadores del tipo.
Estas son las dos formas de ser partícipe en un delito y constituyen el segundo mecanismo amplificador del
tipo, junto con la tentativa.