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ITER CRIMINIS.

Se trata de analizar las distintas etapas por las cuales pasa un delito, desde
el momento en que el sujeto planifica su ejecución o le surge la idea de delinquir,
hasta que se produce el objetivo perseguido con la ejecución de la conducta
delictiva.

Normalmente esto ocurre en un instante único, que es de relativa rápida


ejecución, pero no siempre es así, y aún cuando lo sea es posible distinguir la
existencia de diversas etapas del delito.

1. Faz Interna:

- ideación
- deliberación
- resolución.

2. Faz Externa:

- actos preparatorios
- actos de ejecución.

1. Faz Interna:

A) Ideación:

Aquí primero delinque el espíritu y luego el cuerpo, es así porque es un


hecho cierto en que la primera etapa comienza con la ideación, que se verifica
cuando nace en el sujeto la posibilidad de ejecutar la conducta punible.

B) Deliberación:

El sujeto analiza los pro y los contra de delinquir.

C) Resolución.

Esto siempre se encuentra en el fuero interno del sujeto, éste resuelve y


decide ejecutar la conducta delictiva, ya en una etapa mas elevada del delito.
Todo esto es impune, pues ocurre en el fuero interno del sujeto y como sabemos,
el pensamiento no delinque.

Esta faz interna, sin embargo, tendrá importancia, si esa resolución delictiva
se manifiesta en forma externa, por ejemplo, cuando se determina la tipicidad en
el dolo, o para la determinación de la culpabilidad.

2. Faz Externa.

En esta etapa, para que sea punible la conducta del sujeto, debe
manifestarlo en el mundo externo y ello lo realiza a través de:

A) Actos preparatorios:

A través de ellos el sujeto comienza a disponer en el mundo externo de los


medios e instrumentos necesarios al efecto, con lo cual ya se proyecta al exterior
su propósito delictivo. Son una base proyectiva hacia la meta, por ejemplo, vender
marihuana.

La regla general es que los actos preparatorios son impunes. Así lo ha


dicho la doctrina, y se desprende del hecho delictivo. Sin embargo es necesario
referirse a situaciones en las cuales esto no es así. Estos casos son:

1. Actos preparatorios especialmente penados por la ley:

La característica de ellos es que si bien la voluntad delictiva se ha


exteriorizado aun, tales actos no importan en la ejecución del delito. Por ejemplo,
comprar un arma para defenderse, para matar a Pedro, o para cazar.

Sin embargo, excepcionalmente, la ley castiga conductas que precisamente


tienen el carácter de preparatoria. Esto dice relación con determinados delitos,
para cautelar en mejor forma el bien jurídico que se pretende tutelar.

Por ejemplo, Art. 445 del C.P. en relación a este artículo se protege el bien
jurídico del productor contra delitos de robo y hurto. La conducta no constituye la
ejecución de esos delitos. No son actos ejecutivos, son sólo preparatorios, pero el
legislador la castiga porque ve un peligro de que ese delito se consume.

2. Proposición.

El Art. 8 del C.P, señala que el sujeto es “generalmente impune”, sólo se


castiga en los casos en que la ley castiga especialmente, de manera que en
general no son punibles.

Por ejemplo, en el Art. 23 se castiga la “proposición y conspiración” para


cometer delitos de este ley. También el Art. 7 de la ley 18.314 de la ley
antiterrorista.

También el Art. 250 y 258 el C. De justicia militar y finalmente el Art. 24 de la


ley de droga.

 Requisitos de la proposición:

3. Que el proponente haya resuelto cometer el hecho.

4. Que se trate de un crimen o simple delito

5. Que el sujeto proponga su ejecución a otra u otras personas

*Esto es suficiente para que haya proposición, independientemente de la


respuesta que de el otro.*

3. Conspiración:

Si el sujeto a quien se propone ejecutar el delito acepta su ejecución, dará


lugar a la conspiración. Por definición ella existe cuando “dos o más personas se
conciertan para la ejecución del crimen o simple delito”.

Si se avanza más allá de esta etapa y finalmente se consuma el delito,


llegamos a las circunstancias de la “participación criminal”.
En la conspiración el requisito fundamental es que haya concierto , que es
algo mas que un simple acuerdo de voluntades.

Concierto, por tanto es :

- planificar la ejecución del delito

- determinar la forma de participación de cada uno de los sujetos.

- Establecer una síntesis, que es la manera en que cada uno de ellos


intervendrá en el hecho.

*Se debe tener en cuenta que el hecho a ejecutar por la conspiración se


trata de un crimen o simple delito. No existe conspiración respecto de faltas, ellas
se castigan sólo consumadas.

La conspiración, normalmente tiene como antecedentes una preposición;


pero no es la regla general en todos los casos, puesto que puede ser que el
concierto previo emane de una conversación en que ninguno de los sujetos tenía
resuelto delinquir.

 Desistimiento en la proposición y en la conspiración.

El Art. 8 en su inc. Final establece una situación en la cual es posible no ser


castigado penalmente por una proposición o conspiración. Para que ello suceda
es necesario que se en las exigencias copulativas que establece el legislador.
1. El desistimiento debe operar antes de comenzar a poner en marcha
la ejecución del crimen o simple delito, o sea, antes de que exista
tentativa de delito.

2. que opere antes de iniciarse el procedimiento judicial contra el


culpable.

3. denunciar ante la autoridad pública sus circunstancias.

B) Actos de Ejecución o Ejecutivos.

Lo lógico es que el delito esté consumado, es decir, que se demuestren


todas las circunstancias del delito penal.

Sin embargo, el legislador reconoce que es posible, y ordinariamente


sucede, que no se demuestre en un caso concreto todas las exigencias típicas, es
decir, el delito que el sujeto quería cometer no concurre con todas sus exigencias,
ya sea:

- porque no se concretó la acción típica o

- porque no se dan los resultados, etc

En este caso la doctrina habla de “formas imperfectas del delito” o “de tipos
subordinados o no autónomos”. Éstas están constituidas por la tentativa y por el
delito frustrado, los cuales tienen como característica común el que en ellos no
concurren todas las exigencias del tipo, razón por la cual, si aplicamos
estrictamente el principio de reserva legal, no sería punible. Pero como no se
cumple tal principio el legislador en la parte general, establece normas en virtud de
las cuales castiga estas formas imperfectas de delito.
¿Por qué se castiga penalmente la tentativa y el delito frustrado?

Para dar fundamento a la sanción de la tentativa del delito frustrado existen


diversas teorías:

 Teoría objetiva clásica.

Según esta teoría al sujeto se le castiga penalmente cuando lesiona o pone


en peligro el bien jurídico protegido. Según ellos, cuando la lesión efectivamente
se produce, existe delito consumado, y se aplica toda la pena señalada por l ley.
Si sólo existe peligro para el bien jurídico protegido sin haber daño, también habrá
castigo, aunque en menor grado, como en el caso en que exista lesión. Si estos o
concurren no se justificará el castigo penal, independientemente del propósito o
voluntad del agente.

- Consecuencias de esta Teoría.

1. subjetivamente los hechos son análogos . Es decir, el dolo es el


mismo para el delito consumado que para el delito frustrado, y
también para la tentativa del delito. El sujeto actúa con el propósito
de lesionar en bien jurídico, consumando el hecho.
2. la pena es distinta. La pena es mayor para el delito consumado,
porque el bien jurídico se ha lesionado, y la pena es menor en la
tentativa y en el delito frustrado, porque sólo ha existido peligro, y
dentro de éstas, la pena es mayor en el delito frustrado que en la
tentativa, porque en él ha existido un peligro mayor.
3. lo que doctrinariamente se denomina Tentativa idónea ,
absolutamente no es punible, porque en ella no existe lesión o
peligro para el bien jurídico protegido.

Tentativa inidónea: significa que la conducta del sujeto no es la apta para


obtener el resultado típico, por ejemplo, la mujer que pretende abortar y realiza
maniobras abortivas, sin estar embarazada o el feto ya había muerto. En este
último caso no existe el objetivo.

 Teoría Subjetiva.

Estos autores ponen énfasis para justificar el castigo penal, o la conducta en sí


misma, en cuanto importa una rebelión en contra del ordenamiento jurídico. Lo
que se castiga es la voluntad contraria a derecho, independientemente de las
consideraciones objetivas.
Desde el momento en que la voluntad delictiva se manifiesta en el mundo externo
se justifica el castigo penal.

- Consecuencias de esto.
1. se castiga la tentativa idónea absolutamente.
2. existe la misma pena.
3. se genera un problema probatorio.

En la práctica no se acoge ninguna de estas dos teorías. Modernamente la


teoría que se aplica es la teoría mixta o ecléctica u objetiva subjetiva.

 Teoría Mixta.

Aquí la tentativa resulta punible considerando la voluntad rebelde del sujeto,


pero sólo cuando ellos se concretiza en la ejecución de actos que provocan una
conmoción en el ordenamiento jurídico. En base a estos fundamentos, el
legislador estableció en la parte general, Art. 7, estos tipos subordinados de
tentativa y frustración.

A estos tipos, tentativa y frustración, se les llama así porque su análisis


debe ejecutarse tomando en consideración el delito consumado.

La doctrina agrega el delito agotado, dicho delito se verifica cuando,


además de concurrir las exigencias típicas, el delincuente obtiene un propósito
perseguido de delinquir.

Por ejemplo, el sujeto mata a su abuela para quedarse con su herencia.


Aquí el delito se consumó al morir ella y se agotó al tomar posesión de la herencia.

TENTATIVA:

La tentativa está definida en el Art. 7 inc. 3° del C.P. Señala que “hay
tentativa cuando el culpable da principio a la ejecución del crimen o simple delito
por hechos directos, pero faltan uno o más para su cumplimiento.

La tentativa se comprende de dos fases:

a) Faz objetiva: exige el principio de ejecución de actos, esto porque se


distingue entre actos preparatorios y actos ejecutivos.

¿cuándo un acto es preparatorio y cuándo es ejecutivo?. Al respecto hay


tres teorías:

1° Teorías Objetivas: el carácter objetivo de un acto debe adoptarse


prescindiendo del propósito del autor, de su representación y del plan ideado
por él. El acto contemplado debe pertenecer al proceso ejecutivo del tipo peal.
De lo que se trata dicen estas teorías es de distinguir a aquel acto que está
dirigido a preparar la acción típica de aquellos que realizan un presupuesto ya
del delito y que por lo tanto son ejecutivos.
Al respecto existen entre estos dos teorías:

 Teoría formal de Beling: para esta teoría hay que distinguir si el acto está
destinado a realizar la periferia del tipo penal o el núcleo. Acto ejecutivo
será aquel que realiza en todo o parte el núcleo del respectivo tipo penal,
por ejemplo, homicidio, el núcleo es matar y será acto ejecutivo cuando se
empiece a matar. Se le critica.

 Teoría pragmática de Carrara o de la univocidad: este autor postula que


hay que distinguir si el acto es equívoco o unívoco. El acto es equívoco
cuando analizado objetivamente puede estar dirigido tanto a realizar el
delito como a una consecuencia jurídicamente irrelevante, por ejemplo,
comprar un pasamontañas o un arma las que pueden tener distintas
finalidades. Si el acto, en cambio, es unívoco será ejecutivo y constitutivo
al menos de tentativa, por ejemplo, echar veneno en un vaso y llevárselo a
la víctima, también sacar el arma y apuntar a la víctima. Este autor
precisando más su teoría en relación a los actos señala que hay que
distinguir entre:
 Absolutamente equívocos: aquellos que aún considerando el
contexto del que forma parte conserva su ambigüedad.
 Relativamente equívocos: será aquel que está acompañado por
condiciones de índole tal que manifiestan, sin duda, su dirección
hacia un delito determinado.

Tiene importancia esta distinción en que los relativamente equívocos


pueden constituir tentativa, por ejemplo, un sujeto anda por la calle con un puñal.
Si le agregamos algunas circunstancias puede constituir un acto relativamente
equívoco y ser ejecutivo, en este caso, si entra el sujeto con el puñal ala casa de
su enemigo y se dirige hacia él.

2° Teorías Subjetivas: La característica fundamental que ellas presentan es que


el carácter ejecutivo del acto dependerán del plan o del propósito trazado por el
autor.

Son teorías que no han hecho escuela porque claramente en nuestro


ordenamiento jurídico no basta la mera voluntad de delinquir sino que se necesita
que ella se traduzca en determinados actos.

3° Teoría objetiva-subjetiva: Postulada por Hans Welzel. Señala que lo


determinante del principio de ejecución o del acto ejecutivo debe hacerse tomando
en consideración la voluntad criminal, pero sólo cuando esto se traduzca o se
concrete en la realización de actos.

 ¿Qué tipo de actos?

Es habitual que al ejecutar un delito existan algunos actos o hechos que


son inmediatamente anteriores a la ejecución delictiva misma y que por lo
tanto, merecen castigo penal porque están cubiertos por la desvalorización que
el comportamiento importa.

Para determinar cuándo existen estos actos inmediatamente previos a la


ejecución de la conducta misma hay que recurrir a un criterio personal, hay que
analizar el plan del autor, pues sólo a través podemos decidir en qué momento
el sujeto ha principiado a la ejecución del delito.

En definitiva, concluye esta teoría, acto ejecutivo es aquel que conforme al


plan del autor significa ponerse de inmediato o directamente a realizar el hecho
delictivo, por ejemplo, el sujeto compra un arma, llama a otro sujeto, le dice
que se reúnan en un determinado lugar y llegando a ese lugar le apunta. El
hecho que le apunte con el arma constituye un principio de ejecución.

En cuanto a la faz subjetiva el sujeto debe actuar con dolo. Por ejemplo, en
el caso de robo, cuando el delincuente apunta con el arma y dice a la otra
persona que entregue las cosas, y en ese momento llega la policía y lo
sorprende. No confundir esta situación con el robo frustrado.

Sólo hay tentativa respecto de crímenes y simples delitos.

¿Es posible la tentativa en los delitos de mera acción?

La doctrina dice que hay que distinguir si el delito respectivo es susceptible


o no de descomponerse en actos. Si la acción típica es una sola, no es posible,
por ejemplo, falso testimonio, conducir en estado de ebriedad, amenaza. Si el
delito si se descompone en actos, sí es dable pensar en una tentativa. Por
ejemplo, violación, robo.
b) Faz subjetiva: la faz subjetiva se satisface con dolo el cual es común tanto
para la tentativa como para el delito frustrado y el consumado. Obviamente
el sujeto actúa con el propósito de consumar. La mayoría de la doctrina
señala que, además, no puede haber tentativa con dolo eventual por dos
razones:

 Razón doctrinaria: la tentativa, por definición, implica una búsqueda


del hecho típico cuya realización constituye el objetivo directo del
sujeto, lo cual resulta incompatible con el dolo eventual.

 Razón de texto: para que exista tentativa el código exige actuar a


través de hechos directos, es decir, a través de actos orientados a
concretar el delito, lo cual no se da en el dolo eventual.

Por estas muchas razones, pensar en una tentativa culposa, negligente o


descuidada es inimaginable.

Si el respectivo tipo penal es portador de elementos subjetivos, distintos del


dolo, ellos también deben concurrir para estar en presencia de una tentativa.

DELITO FRUSTRADO.

Está definido por la ley. Hay crimen o simple delito frustrado cuando el
delincuente pone de su parte todo lo necesario para que el crimen o simple delito
se consume y esto no se verifica por causas independientes de su voluntad. Art. 7
inc.2.

Sólo cabe el delito frustrado en los delitos de resultado externo. En este


caso la acción se ha realizado completamente por el delincuente, por ejemplo,
delincuente apunta y dispara para matar y la víctima tiene un chaleco antibalas.

a) Faz objetiva: el sujeto realiza toda la acción típica. Lo que falta es el


resultado el que no se produce por causas ajenas a su voluntad.

¿Cuándo el sujeto ha realizado toda la acción típica?

 Algunos señalan que cuando se han realizado todos los elementos del tipo
menos el resultado.

 Otros señalan c que cuando, según el plan del sujeto, cuando desde el
punto de vista de su representación, con el conocimiento que tenía al
tiempo de obrar, l acción se encuentra concluida.

b) Faz subjetiva: el delito frustrado exige dolo, dolo de consumar.

DELITO CONSUMADO.

“Es aquel en que se ha realizado todo el hecho típico, esto es, el delito
que cumple todas las exigencias del tipo penal, aplicándose al autor de él la
totalidad de la pena”.

A esta clase de delito se aplica plenamente lo dicho respecto de la


teoría del delito
DELITO AGOTADO.

Este delito sucede cuando se cumple el propósito perseguido por el


sujeto al tiempo de delinquir.

En términos prácticos no hay diferencia entre éste y el delito consumado


y su penalidad es la misma.

Desistimiento de la tentativa y del delito frustrado.

Es posible que quienes han fracasado en la ejecución de un delito, o en


su intento, se abstenga de seguir. Doctrinariamente esto se puede demostrar en la
tentativa de delito o en el delito frustrado.

A) Desistimiento propiamente tal en la tentativa:

“Es la cesación de voluntad de parte del sujeto de realizar la acción que


el sujeto ya ha iniciado”. (Mario Garrido Montt).

Cury, señala que “desiste de tentativa el que abandona la ejecución de


la acción todavía incompleta”.

 Requisitos del desistimiento:

a) Requisitos objetivos: que el sujeto haya realizado la acción típica y


no la haya terminado.

b) Requisitos subjetivos: que el abandono sea voluntario, esto es, que


el sujeto de propia iniciativa cese en su actuar delictivo,
abandonando de modo definitivo la ejecución del hecho. Por
ejemplo, violador que se lleva a la mujer al callejón y se arrepiente
de violarla.

 Efectos del desistimiento propiamente tal:

a) aquí no hay castigo penal, porque no hay dolo y por tanto la


conducta no es típica. Desde el momento en que el sujeto se
arrepiente y abandona la acción, el dolo no se perfecciona.

b) Argumento a fortiori: si el desistimiento del crimen o simple delito


frustrado no es punible, con mayor razón lo será para la
tentativa, que es una etapa de menos gravedad que el delito
frustrado en el iter criminis.

B) Desistimiento del delito frustrado o arrepentimiento

Desisten del delito frustrado quienes habiendo ejecutado toda la


conducta típica, actúan voluntariamente y de manera eficaz evitando la producción
del resultado final.

 Requisitos:

a) ejecución de toda la conducta típica.


b) El sujeto evita la producción del delito.
c) Si no logra evitarlo, no hay desistimiento, a lo mas hay una
atenuante.

Con todo se debe tener en cuenta que el sujeto puede obrar evitando el
resultado típico, actuando por si mismo o por terceros

- Requisito subjetivo: la voluntad del sujeto. Por ejemplo, el que tira a la


abuelita al río y luego se lanza a rescatarla.

 Efectos:

a) No hay castigo penal porque falta el dolo. El sujeto evita de


manera positiva y eficaz que se produzca el resultado típico,
el dolo desaparece. El delito frustrado exige por definición
que el resultado no se produzca, por causas independientes
a la voluntad del sujeto. Luego si se produce la falta del
resultado por causas emanadas de la voluntad del sujeto no
se verifica la descripción legal, y por tanto, no es punible, no
hay castigo. Art. 7.

b) Tanto en la tentativa como en el delito frustrado, debe


tenerse presente que si la parte de la acción ejecutada por
el sujeto es punible por constituir por si misma un delito al
sujeto se le castigará a ese título. Por ejemplo, el que se
introduce en una casa para robar y se arrepiente sin robar
nada, igual ejecuta el delito de “ingreso a la morada ajena”
(inviolabilidad de la morada)

 Casos de desistimiento tardío especialmente legislado.

En principio, si el delito está consumado ya no procede respecto de él el


desistimiento. Sin embargo, excepcionalmente, en la parte especial existen
determinadas situaciones en las cuales se favorece al delincuente que después de
consumado el delito se arrepiente de él.

Por ejemplo, el Art. 456, si le sujeto, antes de ser perseguido devuelve


las cosas, se le aplicará la pena inmediatamente inferior en grado. También el
caso de asociación ilícita, en el caso del que revela a la autoridad la existencia de
la agrupación, sus planes y propósitos.

 Punibilidad de la tentativa y del delito frustrado.

El Art. 50 establece la regla general, la pena señalada por la ley se


aplica al autor de un delito consumado.

Tratándose de la tentativa y del delito frustrado hay que distinguir:

a) Autor de crimen o simple delito frustrado.(Art. 51) Por


ejemplo, en este artículo trata del homicidio calificado
cuya pena es de presidio mayor en grado medio a
presidio perpetuo.
b) Tentativa de crimen o simple delito. (Art. 52).
Exactamente el legislador, en la parte especial, ha
equiparado el castigo para las distintas etapas del iter
criminis, por ejemplo, la ley de drogas, en que se
castiga la conducta desde la tentativa.
Si se trata de una falta tentada o frustrada, no hay castigo penal por
definición.

 Excepciones a la punibilidad de la tentativa y del delito


frustrado.

Art. 494 bis, inciso final del C.P, incorporado por la ley19.950 de 2004,
que aumenta las sanciones de hurto. El hurto frustrado y la tentativa de hurto se
castigan, pero no hay pena. Hay fallos que castigan el hurto, no obstante no existir
pena.

DELITO IMPOSIBLE O TENTATIVA INIDÓNEA.

La doctrina con ello hace referencia a la situación que ocurre cuando, no


obstante existir voluntad delictiva en el sujeto y realización de la conducta
destinada a ejecutar el hecho, estamos en presencia de actos que no son aptos
para conseguir el resultado buscado, o bien, que se realizan cuando el bien
jurídico objeto del ataque es inexistente en la realidad. Por ejemplo, el que entierra
agujas en un mono budú creyendo que matará a alguien; o bien, la mujer que
realiza maniobras abortivas sin estar embarazada.

La pregunta es: ¿son punibles estas conductas?

Si seguimos la teoría subjetiva, sería punible porque ella castiga la


voluntad delictiva.
En el derecho positivo no es punible, por la definición que existe de
tentativa.
PARTICIPACIÓN CRIMINAL

El sujeto activo es aquel que realiza la conducta delictiva del delito


penal. Cuando él es una sola persona no genera problemas; ese sujeto será autor
del hecho punible y a él se aplicará la pena señalada por la ley en el Art. 50.

Sin embargo, es frecuente que el delito sea cometido por varios sujetos.
En este caso hablamos de la participación criminal, que se caracteriza por la
pluralidad de personas, las que pueden ser necesaria o eventual, según si
estamos en presencia de un delito colectivo o individual.

Será necesaria cuando en el hecho punible, por exigencia del tipo penal
respectivo, deben intervenir dos o más personas, sea que uno o todos merezcan
sanción. Este hecho punible puede ser:

- Bilateral, como por ejemplo, el duelo o la sodomía.


- Multilateral, como por ejemplo, la asociación ilícita o la rebelión.

En estos casos de concurso necesario la punibilidad de los sujetos se


resuelve conforme a lo dispuesto en el respectivo tipo penal. Todos serán autores
del respectivo delito en las categorías que el legislador establezca, y su punibilidad
está en la parte especial.

Será eventual cuando en esta situación, al tipo penal le resulte


indiferente cualquiera que sea la clase de delito que se ha cometido, sea que se
cometa por una o más personas.

No es exigencia típica que el delito se cometa por varios sujetos, pero


en los hechos así sucede. La mayoría de los delitos son individuales, siendo estos
tipos de autoría personal.

En estos casos si aplicamos el principio de reserva o legalidad de


manera estricta, resultarían únicamente punibles las conductas en que el sujeto
ejecutara por si mismo el tipo penal. Sin embargo, el Código Penal establece
distintas reglas en la parte general, conforme a las cuales se castiga penalmente
también a quienes no realizan la conducta típica, pero ejecutan acciones que de
una u otra forma están vinculadas a la conducta típica, que perfectamente o
imperfectamente realiza el autor material del delito.

La participación criminal tiene por objeto el estudio de aquellos sujetos


que resultan punibles por la ejecución de un hecho delictivo. Para estos efectos el
Art. 14 distingue entre autores, cómplices y encubridores. Doctrinariamente se
agrega al inductor y al instigador.

En todas estas situaciones lo esencial es la autoría. No puede haber


participación criminal sin que exista uno o varios autores de delito. Lo accesorio a
aquí es la participación del delito en sentido estricto de cómplices, encubridores,
inductores e instigadores.

Es importante conocer, antes de su estudio, los principios de la


participación criminal, que están destinados a reglamentar las relaciones entre los
distintos sujetos.
 Principios de la participación criminal.

1. Principio de la Exterioridad.

Este principio trata de resolver qué parte del iter criminis debe cumplirse
por el autor principal para que sean punibles los demás intervinientes del delito.

El castigo penal en este caso comienza con la tentativa, de manera que


según Cury, la conducta de los demás sujetos sólo es punible si el autor, a lo
menos, ha dado principio a la ejecución del crimen o simple delito; es él el que ha
incurrido en tentativa.

Esto, en relación con el iter criminis, según el cual, en esta fase


comienza el castigo penal. A la misma conclusión se llega con los Art. 15 a 17,
pues suponen que hayan ejecutado el hecho.

Este principio no genera discusión.

1. Principio de la Convergencia.

Este principio trata de resolver qué grado de acuerdo debe existir en los
sujetos para que estemos en presencia de la participación criminal.

Hay consenso doctrinario al señalar que se exige en virtud de él, que el


hecho sea común para los distintos sujetos, y debe ser común tanto objetiva como
subjetivamente.

 Objetivamente. Por cuanto debe existir un vínculo entre cada


partícipe y un solo hecho, que es el mismo en el cual los demás
partícipes toman parte.

 Subjetivamente. El hecho es común cuando todos los sujetos tienen


conciencia de estar participando en él, lo que se traduce en la
existencia entre los diversos sujetos de “un dolo común”, esto es, de
acuerdo a este principio según Cury, la participación criminal exige que
la voluntad de los diversos sujetos en su ejecución se oriente a la
realización del hacho delictivo.

 Consecuencias del principio de la convergencia.

a) no puede haber participación criminal en los delitos


culposos.

b) Tampoco existe participación culposa en el hecho de un


tercero.

c) El exceso de dolo e alguno de los concurrentes no afecta a


los demás partícipes.

d) Lo mismo se aplica a la desviación de dolo. ( si el acuerdo


es lesionar y a uno se le pasa la mano y mata, solo el delito
común el lesionar)

e) La doctrina señala que basta que exista dolo eventual en


este caso, lo que se manifiesta principalmente en el caso de
la desviación o exceso de dolo.
2. Principio de la Accesoriedad.

Trata de resolver qué elementos del delito debe reunir la conducta del
autor principal para que sean punibles o castigados los demás intervinientes del
delito.

Se trata de determinar si la acción del ejecutor necesita ser un delito


perfecto o si es suficiente que se satisfaga sólo algunos de los elementos del
delito.

Subjetivamente se habla de distintos tipos de accesoriedad.

a) principio de la accesoriedad mínima: la conducta del autor ejecutor material


del hecho debe ser típica.

b) principio de la accesoriedad media: la conducta del autor ejecutor material


del hecho debe ser típica y antijurídica.

c) Hiperaccesoriedad: se presenta cuando, además de lo anterior, concurran


las condiciones objetivas de punibilidad y que no concurra una excusa legal
absolutoria.

En nuestro caso se descarta la mínima y la hiperaccesoriedad. La


hiperaccesoriedad se descarta por un argumento de texto, Art. 489, en el que la
excusa legal absolutoria de los parientes y cónyuges en el robo y hurto, sólo
alcanza a esas personas, y no ha terceros que actuaron conjuntamente
cometiendo el mismo delito.

La mayoría de la doctrina señala que el criterio a seguir es el de la


accesoriedad media. Para ellos basta con que la conducta se típica y antijurídica.
Es el elemento principal del delito.

Si los partícipes son varios, significa que sólo a algunos les podamos
reprochar su comportamiento típico y antijurídico. Art. 15, 16, 72, 456 bis n° 5 del
C.P.

El Art. 15 y 16 porque habla de hecho y no de delito, para argumentar la


autoría y la complicidad.

El Art. 72 es claro al decir, que si participan menores y mayores de edad,


estos últimos no se liberan del castigo, es mas, se valió del menor de edad lo que
constituye un agravante, lo mismo señala el Art. 456. n° 5 del C.P.

Etcheberry está de acuerdo con lo anterior, pero para efectos del


encubrimiento debe aplicarse la accesoriedad máxima. Su argumento es el Art.
17, en la parte que señala “crimen o simple delito, culpable”.

Cury señala que se debe distinguir, ya que según él se aplica la


accesoriedad media, porque el Art. 17 sólo pretende excluir las faltas.

18 de octubre.
3. Principio de la Comunicabilidad. (calidades personales del tipo)

Se trata de resolver si se comunica a los demás partícipes aquellos


elementos o calidades personales que integran el tipo penal a quienes no tiene
dicha calidad.
No existe solución legal al problema planteado, lo único que existe es que
las circunstancias modificatorias de responsabilidad penal, atenuante y agravante,
no se comunican según el Art. 64 del C.P. sin embargo, aquí hablamos del tipo
penal, no de aquellas circunstancias de tipo accesorio.

Para Novoa, que sostiene una tesis minoritaria, las calidades personales del
tipo se comunican , sin poder distinguir.

Para Etcheberry, hace la distinción en cuanto a si las calidades personales


están en el núcleo del delito o en la periferia. Para determinar si estas calidades
personales son del núcleo o la periferia hay que hacer una supresión hipotética
mental. Si suprimiendo en forma mental hipotéticamente la conducta deja de ser
delictiva pertenece al núcleo del delito. Por el contrario, si la conducta sigue siendo
hipotéticamente la calidad de la conducta, aunque sea a otro título, sólo integra la
periferia del delito.

En aquellos casos en que la calidad personal integra el núcleo del delito, tal
calidad se comunica a los partícipes. Si forma parte de la periferia no se comunica
a los partícipes.

Cury, por su parte sostiene que no se comunica, la incomunicabilidad


debería llamarse, señala. Esto por dos razones:

 Razón doctrinaria: cada concurrente, partícipe, debe castigarse


según la naturaleza del injusto en que incurre, sin que puedan
materializarse en él circunstancias que no se presentan a su
respecto.

En el caso de la sustracción de caudales públicos el único encargado de


custodiar el bien jurídico protegido que es la fe pública es el funcionario
público, el particular no tiene ninguna obligación.
En el caso de la prevaricación en que el bien jurídico protegido es la
recta administración de justicia el particular no tiene ninguna obligación.

 Razón de texto: el Art. 64 inc. 1° que regula la comunicabilidad de las


circunstancias agravantes y atenuantes, no se comunican, con
mayor razón el criterio será el mismo.

Autoría y participación en sentido estricto.

Los partícipes se clasifican en:

- inductores. Art. 15 n° 2, segunda parte.


- Cómplices. Art. 16.
- Encubridores. Art. 17.

En cuanto a la autoría, la primera interrogante es qué se considera Autor ya


que la ley no lo define al decir en el Art. 15 “se consideran autores”.

Para solucionar esta interrogante han surgido diversas teorías, como por
ejemplo, las teorías objetivas que son muy restrictivas y las teorías subjetivas que
son muy amplias y por lo tanto ambas no sirven. Por último tenemos la teoría del
dominio del acto que es la mas aceptada.
c) teoría subjetiva: para ellos autor es todo aquel que ha puesto una
condición para causar el resultado típico.

Es un concepto muy amplio porque estima conductas de complicidad o


de inducción, el concepto de autor sería un concepto residual que se
obtendría por exclusión, todos serían autores a menos que la ley diga
otra cosa.

d) teoría objetiva: esta es la teoría objetiva formal de Beling, también


llamada del concepto restringido del delito. Para este doctrinario
alemán autor es el que realiza en todo o parte el núcleo del delito.
Esta definición resulta insuficiente para explicar ciertas cuestiones o
casos que pueden darse en la práctica, por ejemplo nunca sería
autor el jefe de una banda delictiva, tampoco lo sería el autor
mediato.

19 de octubre.

e) Teoría objetiva-subjetiva: también llamada teoría del dominio del


acto. Según esta teoría el concepto de autor se obtiene atendiendo
al dominio que ejerce el sujeto sobre la conducción de la acción y no
con arreglo a criterios puramente formales.

Para ellos autor “es quien posee el dominio final del hecho, tanto
objetiva como subjetivamente.” Es decir, es autor de un delito quien
tiene en sus manos las riendas de la conducta, de modo que puede
decidir sobre la consumación o no del hecho típico. Esta noción permite
distinguir las categorías de autoría.

Clasificación de los autores.

Es posible que en la ejecución de un hecho punible entre varios sujetos


pueden existir distintas categorías de autores. Está el autor ejecutor, directo o
material que es el mas natural; pero también doctrinariamente se distingue entre
autor mediato, coautores y autor intelectual.

a) autor ejecutor, directo o material: nos referimos a aquel que


materialmente realiza en todo o parte la conducta descrita por el tipo.

Existe una verdadera presunción en cuanto a que el autor ejecutor tiene


el dominio del acto, aunque sólo sea de una parte de él.

b) autor mediato: es aquel que para ejecutar la conducta típica se


sirve como instrumento de un tercero, al cual utiliza o del cual abusa,
a fin de obtener que dicho tercero ejecute materialmente la conducta
punible.

La esencia del autor mediato consiste en realizar una conducta que


tiene por objeto usar a un tercero de su capacidad de autodeterminarse,
o bien , valerse de tal incapacidad, de manera que, aún cuando este
tercero ejecuta materialmente el delito, él carece de un auténtico
dominio de la conducta. Se habla de “autor detrás del autor”.

¿Qué casos constituyen autoría mediata?


- Roxin, por ejemplo, dice que se está en este caso cuando el sujeto activo
tiene el dominio de la voluntad por coacción. El autor mediato domina la
voluntad del tercero.

- Crear error en e ejecutor o mantener el error ya existente en él, sea error de


tipo o error de prohibición.

- Aquel en que el autor mediato utiliza a un inimputable para que éste ejecute
la conducta típica, por ejemplo, un menor o un demente.

- También postula Roxin, pertenecerían a esta clases aquellas situaciones en


que se domina la voluntad a través de “aparatos organizados de poder” o
“criminalidad organizada”. Esta elaboración doctrinaria la efectuó a
propósito de las dudas planteadas al juzgar a un sujeto perteneciente al
nazismo, el mató pero atendiendo a una ideología, entonces se presenta la
duda de cómo lo juzgamos. Aquí no hay una orden sino que actúa por
voluntad propia, o incluso a veces se actúa por convicción.

Roxin plantea que el que tiene el poder es el culpable porque tiene en sus
manos la voluntad de todos los demás sujetos que están en un plano de
inferioridad.

La objeción a esta tesis es que en estos casos sí existe un sujeto ejecutor.


Roxin responde que ese sujeto es completamente fungible, es irrelevante.

c) coautores: son aquellos que se dividen la ejecución del hecho en


términos tales que cada uno dispone del codominio del mismo, y
pueden decidir en conjunto sobre la consumación. Por ejemplo, tres
amigos que asaltan un banco y dividen el trabajo entre si o bien,
todos pueden participar en todas las acciones.

d) Autor intelectual: es aquel que sin ejecutar directamente la


conducta típica, posee en sus manos las riendas de ella porque lo ha
planificado, la ha organizado, de manera que también puede decidir
sobre su consumación, modificación o interrupción.

Consagración positiva.

Regula esta materia el Código Penal en el Art. 15.

- autor directo: Art. 15 n° 1, primera parte.


- Autor mediato: Art. 15 n° 2, primera parte.
- Coautores: Art. 15 n° 1, segunda parte y Art. 15 n° 3 segunda parte.
- Autor intelectual: Art. 15 n° 3, segunda parte.

Dos cosas previas:

1° Doctrinariamente existió consenso en orden a señalar que nuestro C.P


tiene una noción extensa, amplia de la autoría que incluye muchas situaciones que
técnicamente constituyen participación en sentido estricto y que se elevan a a
categoría de autor para efectos del castigo penal.

Se señaló que las situaciones del Art. 15 constituyen complicidad que se


castigaban como autoría.
Así se decía, por ejemplo, ocurre en el Art. 15n°1 segunda parte, 15n°2
segunda parte y en el Art. 15n°3 . eso justifica que el Art. 15 diga en su inicio “se
considerarán autores”

Esto ya no se considera así desde el punto de vista doctrinario, y se eñala


que ya no es verdad lo anteriormente señalado en orden a que el Código sea
amplio en este aspecto. Casi todas las situaciones del Art. 15 constituyen
genéricamente hipótesis de autoría, salvo el Art. 15n°2, segunda parte que
contempla la inducción, donde se trata de un partícipe que se considera autor para
efectos del castigo penal (opinión de Sergio Yánez).

El Art. 15 contempla tres situaciones:

1° se consideran autores los que toman parte en la ejecución del hecho, sea
de una manera inmediata o directa, sea impidiendo o procurando impedir
que se evite. Se distinguen dos situaciones:

a) Se consideran autores los que toman parte en la ejecución del hecho,


sea de una manera inmediata o directa. Art. 15 n° 1, primera parte. Ésta
es una hipótesis de autoría que no genera inconveniente en cuanto a su
sentido y alcance. Estamos en presencia de una situación de autor directo,
ejecutor o material.

Esta hipótesis, dice Etcheberry, implica que el sujeto realice por si mismo,
total o parcialmente la conducta típica, por actos propios, sin valerse de
intermediarios.

b) Se consideran autores los que toman parte en la ejecución del hecho,


sea impidiendo o procurando impedir que se evite. Art. 15 n° 1,
segunda parte. Aquí hay que considerar la discusión doctrinaria en cuanto
al sentido y alcance de esta expresión, y en cuanto a si ella constituye un
caso de complicidad elevada a la categoría de autoría o constituye
realmente autoría.

Para la doctrina tradicional ésta es una hipótesis de complicidad que el


legislador considera como autoría para efectos del castigo penal. Según ellos, en
esta hipótesis se incluye a aquellos, que al momento de ejecutar la conducta, se
limitan a excluir o apartar a los actores ajenos a la voluntad de los delincuentes
que podrían haber frustrado el hecho.

Según Novoa, el tomar parte en la ejecución del hecho, en esta hipótesis


implica que el sujeto sepa que el hecho está siendo ejecutado por otro u otros, y
que sepa también que con su actuación ayuda, pues impide o pretende impedir
que terceros eviten la ejecución del hecho delictivo. La doctrina tradicional señala
situaciones que a su parecer están incluidas en este Art. como por ejemplo, aquel
que aleja o detiene al que acude en auxilio de la víctima. En este caso sería un
cómplice elevado a la categoría de autor.

También estaría incluido aquí el “sapo” (aquel sujeto que se queda


apostado en un lugar para avisarle a los delincuentes si llega la fuerza pública o
terceros). Ene ste caso también estaría tomando parte en la ejecución del hecho,
quien sabe que el delito está siendo ejecutado por otro.

Por último la doctrina tradicional dice que está incluido aquí aquellos que se
limitan a distraer a la policía con riñas, peleas para permitir la actuación tranquila
de los delincuentes.
Sergio Yánez y Cury, discrepan de este parecer, por cuanto señalan que el
Art. 15 n° 1, segunda parte, no es una situación de complicidad que se considera
como autoría, sino que es una situación que genuinamente importa un caso de
autoría, y específicamente, un caso de co-autoría.

Según Yánez, el sentido y alcance que tradicionalmente se le ha dado al


Art. 15 n° 1 segunda parte, en verdad no es susceptible de incluirse en esta parte
del Art., ello por cuanto, el legislador exige que los sujetos o el sujeto tome parte
en la ejecución del hecho, y eso significa según Yánez, no sólo saber que el hecho
está siendo ejecutado por otros, sino también que el sujeto realice actos
ejecutivos.

El tomar parte en la ejecución del hecho significa realizar un acto ejecutivo.


Con ese razonamiento se concluye que muchos de los casos que tradicionalmente
se incluyen en el Art. 15 n° 1 segunda parte no deben estar ahí, ya que no reúnen
los requisitos. Por ejemplo, según Yánez, el “sapo” no toma parte en la ejecución
del hecho, no realiza acciones ejecutivas.

¿Cuándo entonces aplicamos el Art. 15 n° 1 segunda parte?

Al respecto, dice Yánez, que lo que ha hecho el legislador es plasmar


diferencias muy finas dentro del actuar ejecutivo, que cobra importancia cuando
estamos en presencias de los denominados delitos compuestos o complejos,
que son aquellos integrados por dos o más acciones o verbos rectores. Por
ejemplo, el robo con intimidación. La conducta fundamental es apropiarse de la
cosa ajena, pero además se intimida a la víctima.

A este tipo de delitos resulta aplicable el Art. 15 n°1 segunda parte, en


tanto que aquel sujeto que realiza actos ejecutivos, que sin se r el núcleo del
delito, también lo integran, estarán incluidos en esta parte, pues aquellos toman
parte en la ejecución del hecho impidiendo o procurando impedir que se evite.

2° Se consideran autores los que fuerzan o inducen directamente a otro a


ejecutarlo.

Este artículo no genera polémica desde el punto de vista doctrinario. En la


primera parte en el “forzar” se incluye todas aquellas situaciones constitutivas de
autoría mediata. Según algunos también se incluye aquí las situaciones
constitutivas de vis absoluta.

En la segunda parte “inducen directamente a otro a ejecutar el hecho”:

- Según Novoa y la mayoría de la doctrina, dicen que inducir significa


instigar, persuadir a otro para crear la voluntad de delinquir a través de
cualquier medio de convencimiento.

- Etcheberry, postula que significa hacer nacer en el otro la ejecución del


hecho típico. El inductor se limita a crear en el otro la voluntad de delinquir.
Por ejemplo, el amigo que convence a otro todos los días que plante
marihuana para solucionar un problema económico. Estamos aquí
entonces, según la doctrina frente a un partícipe que se considera autor.

- Según Yánez, es el único caso de partícipe que se considera autor; pero


según la doctrina tradicional, es le segundo caso.
Debe tenerse presente en esta hipótesis que es exigencia común en ambos
casos que la conducta se ejerza directamente a la persona a quien se fuerza o
induce, y no por interpósita persona. Debe estar dirigida a una persona concreta y
determinada, y además, debe estar referida a un hecho concreto.

3° Se consideran autores, los que, concertados para su ejecución, facilitan


los medios con que se lleva a efecto el hecho o lo presencian sin tomar parte
inmediata en él.

La doctrina tradicional los denomina “cómplices o cooperadores”, ello por


cuanto se señala, que en este caso estamos en presencia nuevamente de
cómplices considerados autores para efectos del castigo penal.

Aplicar el Art. 16 es muy difícil. Según Yánez, en el Art. 15 n° 3 también


estamos en presencia de situaciones que genuinamente constituyen autoría, y ello
es así porque lo esencial en este Art. es la existencia de concierto previo entre los
sujetos, lo que les otorga a las personas de esta hipótesis el carácter de
coautores. Esto porque los sujetos han resuelto, en virtud de este concierto,
ejecutar distintas funciones cada uno, de manera que cada aporte completa el de
los demás, dando lugar a un hecho unitario.

Según Yánez, hay una verdadera división de actos, todos son coautores del
hecho.

En lo que sí están de acuerdo todos los autores, es en el sentido y alcance


del Art. 15 n° 3, es decir, quines se incluyen aquí.

Al respecto hay dos hipótesis:

1. Los que concertados para su ejecución facilitan los medios con que
se lleva a efecto el hecho.

2. Los que concertados para su ejecución lo presencian sin tomar parte


inmediata en él.

 Concierto previo:

“Es el acuerdo de voluntades adoptadas previamente para la ejecución


común del hecho”.

Este acuerdo es verbal y expreso, pero también puede surgir de manera


espontánea a través del gesto.

Para Yánez lo que le da el carácter de autoría es el concierto previo. La


doctrina está de acuerdo en señalar que los medios que se facilitan pueden ser de
cualquier naturaleza: materiales o intelectuales. Si el sujeto facilita los medios sin
concierto previo, no se considera autor y estaría en el Art. 16.

Por últimos los medios facilitados deben ser efectivamente utilizados en la


ejecución del hecho. Esto se desprende del Art., “facilitar los medios con que...”

Según Yánez, en este Art. 15 n° 3 también es posible incluir al autor


intelectual.
El Art. 15 n° 3, segunda parte, según Novoa, la mera presencia, mediando
concierto, ha de servir para apoyar al autor directo o inmediato y contribuye a que
cese la resistencia de la víctima.

La comisión redactora señaló que el que con su mera presencia ampara o


autoriza la perpetración del delito, aumenta la fuerza y el poder del delincuente,
con su sola concurrencia, aún sin tomar parte en la ejecución. Debe tenerse
presente que la presencia a que se refiere el precepto es una presencia física en
el lugar del hecho. Sin embargo, también se considera que está presenciando al
sujeto que vigila con una cámara, aún sin estar en el lugar de los hechos.

 Los partícipes.

Según Cury, “son aquellos que intervienen dolosamente en un hecho ajeno,


sin concurrir en la ejecución de la conducta típica, ni contar con el dominio de ella,
realizando actos expresamente descritos en la ley, y que de ordinario revisten un
carácter únicamente preparatorio de colaboración”.

La autoría es la categoría principal, pero los partícipes son una categoría


accesoria o secundaria, es posible que intervengan autores sin partícipes.

Como toda exigencia de la participación criminal se requiere que el partícipe


obre dolosamente. Está en concordancia con el principio de la convergencia que
regula la participación criminal.

El sujeto es partícipe cuando interviene en un hecho ajeno, la conducta está


bajo el control de otro u otros, tanto objetiva como subjetivamente. El partícipe
sólo colabora, sin tener las riendas de la conducta, y para ser castigado a este
título se precisa que el sujeto realice actos expresamente descritos en la ley, son
los aludidos en el Art. 15 n° 2 (inductor), Art. 16 (cómplices), Art. 17
(encubridores). En nuestra legislación son una forma de participación, no obstante,
que en el caso de los encubridores son sujetos que intervienen con posterioridad a
la ejecución del delito. En otras legislaciones es un delito autónomo.

1. Art. 15 n° 2 del C.P, inducción o instigación:

“Es inductor el que de modo directo forma en otro la resolución de cometer


un delito”.
Toda la doctrina está conteste en señalar que el inductor o instigador no es
autor del delito, sino que es un partícipe, por cuanto en esta forma de
participación, el sujeto forma en el otro la voluntad delictiva, siendo el inducido
quien controla la conducta delictiva, tanto objetiva como subjetivamente, razón por
la cual el sujeto no es autor del delito.
El código señala o exige que el inductor obre directamente sobre el
inducido, no a través de terceros, además exige (Art. 15 n° 2 segunda parte) que
el inductor instigue al inducido a ejecutar el hecho delictivo debiendo tratarse
además de un determinado delito.

 Consecuencias:

1. Para que el inductor sea castigado es necesario que el ejecutor, a lo


menos, de principio a la ejecución del hecho. (manifestación del principio de
la exterioridad).

2. Como la instigación se refiere a la ejecución de un hecho típico y


antijurídico, la inducción solo puede estar referida a la autoría.
3. El inductor debe actuar con dolo de consumar, es decir, debe formar en el
otro la resolución delictiva destinada precisamente a cumplir todos los
elementos del tipo penal.

Es importante porque, precisamente en algunas legislaciones (ley de


drogas), existe ciertas instituciones en que la exclusión del tipo penal se basa en
esto, específicamente en la inducción del agente provocador o encubridor.

Para efectos del castigo penal el inductor es considerado autor.

2. Art. 16, complicidad:

“Son cómplices los que, no hallándose comprendidos en el artículo anterior,


cooperan a la ejecución del hecho por actos anteriores o simultáneos”.

Este es un concepto residual. En nuestro ordenamiento jurídico positivo la


característica fundamental de los cómplices es que cooperan en el hecho ajeno
sin que exista concierto previo y por actos anteriores o simultáneos. En caso que
exista concierto previo habría coautoría.

Son hechos anteriores o simultáneos, porque tal situación marca la


diferencia con el encubrimiento en que el sujeto precisamente actúa con
posterioridad ala ejecución del hecho. Como el cómplice es un partícipe se exige
que actúe dolosamente, que sólo coopere en la ejecución del hecho pero que no
tenga el dominio final de la ejecución.

3. Art. 17, encubrimiento:

“Son encubridores los que con conocimiento de la perpetración de un


crimen o simple delito o de los actos ejecutados para llevarlo a cabo, sin haber
tenido participación en él como autores ni como cómplices, intervienen con
posterioridad a su ejecución, de las diversas formas que señala la ley”.

De la definición y del tratamiento legal fluyen los requisitos del


encubrimiento:

a) Los que con conocimiento de la perpetración de un crimen o


simple delito y de los actos ejecutados.

b) No ser autores o cómplices.

c) Intervenir con posterioridad al crimen o simple delito.

d) Acción descrita por la ley.

El autoencubrimiento no es punible. En oras legislaciones el encubrimiento


es un delito autónomo.

En cuanto a las conductas descritas por la ley tenemos:

1. Aprovechamiento. (Art. 17 n° 1)
2. Favorecimiento:
 Real (17 n° 2)
 Personal.
1. Aprovechamiento: de ser patrimonial o pecuniario, no se señala otro tipo
de aprovechamiento.

2. Favorecimiento:
 Real: Art. 17 n° 2. Aquí el encubridor actúa para ocultar el hecho
delictivo y no al delincuente.

 Personal: este además de subdivide en:

- ocasional: Art. 17 n° 3,aquí se quiere evitar que se descubra la persona del


delincuente.

- Habitual: Art. 17 n° 4, aquí se hace excepción a la primera de las


exigencias del encubrimiento. No es necesario que el encubridor sepa el
crimen o simple delito cometido; lo que si debe saber es que los
encubiertos son malhechores y además que obran de esta forma
habitualmente.

Según Cury, en esta hipótesis los malhechores son: “aquellos que hacen
del crimen una actividad constante de un profesional”.

Se habla de crimen o simple delito para excluir el encubrimiento en materia


de faltas ya que, en este caso no es punible.

También en materia de encubrimiento se debe tener presente el Art. 17 inc.


Final.

Punibilidad de Autores, Cómplices y Encubridores.

1. Autores:

A los autores de un delito se impondrá la pena que para éste se hallare


señalada por la ley.

Siempre que la ley designe la pena de un delito, se entiende que la impone


al delito consumado.

A los autores de crimen o simple delito frustrado, se impondrá la pena


inmediatamente inferior en grado a la señalada por la ley para el crimen o simple
delito. Art. 51.

A los autores de tentativa de crimen o simple delito, se impondrá la pena


inferior en dos grados a la que señala la ley para el crimen o simple delito

2. Cómplices:

- Si es un crimen o simple delito consumado: se aplica la pena inferior en


un grado a la que se le aplica al autor. Art. 51.

- Si se trata de un crimen o simple delito frustrado: se impondrá la pena


inferior en dos grados a la que señala la ley para el crimen o simple delito
consumado. Art. 52

- Si se trata de una tentativa de delito: se impondrá la pena inferior en tres


grados a la que señala la ley para el crimen o simple delito. Art. 53.
- Si se trata de el cómplice de una falta: se aplica la pena señalada en el
Art. 498 del C.P, es decir, serán castigados con una pena que no exceda de
la mitad de la que corresponda a los autores.

3. Encubridores:

- Si se trata de crimen o simple delito consumado: se impondrá la pena


inferior en dos grados a la que señala la ley para el crimen o simple delito.
Art. 52

- Si se trata de un crimen o simple delito frustrado: se impondrá la pena


inferior en tres grados a la que señala la ley para el crimen o simple delito.
Art. 53.

- Si se trata de una tentativa de delito: se impondrá la pena inferior en


cuatro grados a la señalada para el crimen o simple delito. Aquí, en caso de
pena inferior se aplican multas; pero si se trata de encubrimiento de faltas,
es impune.

Además hay que tener presente que las disposiciones generales contenidas
en los Art. 51 a 54 inclusive, no tienen lugar en los casos en que el delito frustrado,
la tentativa, la complicidad o el encubrimiento se hallan especialmente penados
por la ley.

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