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¿Cómo nos protege nuestro coche? Los fabricantes de automóviles han trabajado
durante años para conseguir mejorar sus vehículos en materia de seguridad vial.
Actualmente, la seguridad activa y la seguridad pasiva funcionan en los vehículos con
el fin de proteger la vida del conductor.
Desde CEA te informamos sobre los elementos principales que componen tanto la
seguridad activa como la pasiva, para que tu viaje sea más seguro:
1.SEGURIDAD ACTIVA
El sistema de frenado
El sistema de dirección
Garantiza la correcta maniobra del vehículo. Los sistemas de dirección de los coches
actuales se endurecen a altas velocidades para evitar posibles accidentes.
El sistema de suspensión
La iluminación
Hasta hace pocos años la luz que emitían los faros era muy débil y no era blanca.
Recientes investigaciones han resuelto estos inconvenientes. Lo importante es ser
vistos y ver bien.
2.SEGURIDAD PASIVA
Son los elementos que reducen al mínimo los daños que se pueden producir cuando
el accidente es inevitable.
Los Airbags
Chasis y Carrocería
Cristales
El compuesto del cristal parabrisas está preparado para que, en caso de accidente, no
salten astillas que puedan dañar a los pasajeros del vehículo. Las ventanillas laterales
son más débiles y se pueden romper. Es la salida más cómoda si en caso de vuelco
las puertas se quedan bloqueadas.
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Reposacabezas
El pasajero, en caso de colisión, recibe una fuerza cinética entre 3.000 y 4.000 kilos a
la que se opondrá aproximadamente con 150 kilos (50 con los brazos y 100 con las
piernas) si no llevase cinturón de seguridad.
Climatización en vehículos
La palabra Climatización se refiere al conjunto de sistemas que permiten obtener en el interior del vehículo unas
condiciones de temperatura, humedad y ventilación óptimas tales que permitan al conductor concentrarse en la
conducción con la máxima confortabilidad, es decir es un medio esencial de seguridad preventiva ; al mismo tiempo
haciendo el trayecto lo más confortable posible a los acompañantes.
Historia[editar]
En una primera época los vehículos automóviles carecían de cualquier protección contra la intemperie para sus
ocupantes, eran totalmente abiertos, restringiendo su uso en épocas invernales y obligando a llevar unas prendas
características de abrigo, gorros, gafas, guantes, etc. La visibilidad era prioritaria en aquellos primeros momentos
(principios de siglo XX). Posteriormente al irse controlando la técnica de conducción y las normas de circulación se
adoptaron capotas plegables o incluso fijas a imagen y semejanza de los carruajes de caballos. Hacia los años 20 y
30 la carrocería cerrada se fue haciendo cada vez más popular, aunque los modelos descapotables tanto de 2
como de 4 puertas seguían teniendo una enorme aceptación, lo mismo en las gamas más humildes de vehículos
(Ford T) como en las de máximo lujo (Duesenberg J), esto para citar dos modelos americanos, otro tanto ocurría en
Europa.
1. Evaporación del medio, a una presión de unos 2- 3 bar y unos 4- 5 °C en un intercambiador de calor
llamado evaporador, integrado en el módulo o caja climatizadora del habitáculo : en esta fase el calor
extraído del interior se emplea para el cambio de estado, de fase líquida a fase gaseosa del medio
refrigerante, con gran absorción de calor.
2. Compresión adiabática (sin aporte ni pérdida de calor del exterior ) del vapor en un compresor mecánico
arrastrado por el motor mediante correa . En esta fase la elevación de presión (hasta 10 a 20 bares según
el régimen del motor) sirve para llevar el medio refrigerante a un nivel de temperatura superior a la del
exterior.
3. Condensación en el condensador, situado en la parte delantera del vehículo delante del radiador con objeto
de liberar el calor absorbido del habitáculo, más el equivalente calórico del trabajo de compresión según
del segundo principio de la termodinámica. Este calor pasa todo al circuito de refrigeración del vehículo. En
esta fase el medio refrigerante cambia de estado de gaseoso a líquido debido a la gran liberación de calor.
Esta fase se lleva a cabo a la temperatura de 50 - 60 °C debida a la presión obtenida en la fase anterior. El
medio sale en forma líquida.
4. Expansión del medio refrigerante en la válvula de expansión, de modo instantáneo y de modo adiabático,
situada a la entrada del evaporador, en el cual retorna el medio refrigerante a estado semigaseoso,
favoreciendo la evaporación según se describió en la fase 1- . Al pasar por la válvula el descenso de
presión instantáneo hace bajar la temperatura al valor indicado en el punto 1-
LOS VIDRIOS: SEGURIDAD ACTIVA Y PASIVA EN
SU CARRO
'Ahí donde lo ve', al vidrio es de los elementos menos frágiles del vehículo, si se tiene en cuenta
que está compuesto de un material de alta dureza, transparencia, tenacidad a la tracción y fragilidad
a la punción, pues lo componen, en un alto porcentaje, sílice y carbonato de potasio, entre otros
elementos.
"En la industria automotriz es muy común, pues cumple con funciones de aislante de térmico,
protección contra impactos, parabrisas e incremento de rigidez de la estructura del vehículo", dice
un documento del Centro de Experimentación y Seguridad Vial (Cesvi Colombia).
Por todo esto el vidrio de los vehículos debe ser a la vez duro y frágil; sencillo y complejo;
resistente y volátil. Es el que actúa como elemento de seguridad pasiva y activa, además de sus
calidades relacionadas con el confort y hasta de tendencia de diseño.
"Los vidrios en el automóvil han ocupado mayor o menor espacio en la carrocería, al vaivén de la
moda. Hay que recordar los modelos de los años 80, por ejemplo, cuyas ventanas se ven hoy día
desproporcionadas frente a los modelos del momento", anota el estudio de Cesvi.
Pero sea cual sea la tendencia del momento, lo cierto es que los vidrios de los vehículos pueden ser
laminados o templados, de acuerdo al sitio que ocupen en la carrocería y a la función que le sea
encomendada.
El vidrio laminado
También conocido como 'estratificado', está compuesto por una o varias capas de vidrio, que son
pegadas entre sí mediante un proceso de presión y calor e intercaladas con finas láminas de
plástico.
Ese plástico, aunque delgado, es muy resistente, conserva la transparencia requerida y retiene los
trozos rotos cuando se estalla en un impacto, evitando así que salgan volando y corten a los
ocupantes.
También detiene los 'objetos voladores', como piedras o ramas que impactan contra él durante la
marcha y lo fisuran. Es por ello que los panorámicos son fabricados a partir de esta técnica.
El vidrio templado
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Es importante decir que estos elementos hacen parte integral de la carrocería, de ahí que los
fabricantes son especialmente cuidadosos con la rigidez de la unión entre ellos y el marco.
Para lograrlo, utilizan un adhesivo especial de un material llamado uretano, que permite una
combinación ideal entre elasticidad y rigidez, transforma la energía de los impactos y evita que ésta
se traslade a los ocupantes.
TENGA EN CUENTA...
*Adquiera solo vidrios de marca reconocida y con las normas de seguridad respectivas.
*Aunque las películas de seguridad sirven efectivamente para evitar el hurto de objetos, no sirven
como seguridad pasiva del vehículo.
*El vidrio delantero o panorámico debe ser siempre laminado, a diferencia de los demás.
Más conocidos como airbag, su nombre viene del inglés y significa 'bolsa de aire'. Se trata de
un sistema de seguridad pasiva y lleva años instalándose en los vehículos, aunque fue
Mercedes-Benz el fabricante que patentó el sistema en el año 1971, el día 23 de octubre, y
después de haber estado cinco años desarrollando la tecnología y llevando a cabo las
correspondientes pruebas. Los airbag se instalaron por primera vez en el año 1981 en un
vehículo y, efectivamente, el primer paso lo dio Mercedes con su Mercedes Clase S, para más
adelante hacer lo propio en el Clase E. Este es el origen del airbag, pero ¿qué es un airbag,
exactamente, y cómo funciona?
Aunque se conocen como airbag, que es la propia bolsa de aire, en realidad son todo un
sistema de seguridad pasiva compuesto por varios detectores de impacto, tantos dispositivos
de inflado como airbag tenga el vehículo y las propias bolsas de nylon. Estas bolsas son
únicamente una parte del sistema de seguridad en su conjunto y se llenan de nitrógeno como
resultado de una reacción química perfectamente estudiada para su funcionamiento.
Los airbag del vehículo entran en funcionamiento en caso de colisión, siempre y cuando la
aceleración sea mayor que 3G, y para amortiguar con estas bolsas de nylon el impacto de los
ocupantes del vehículo contra las ventanas laterales, el parabrisas, el panel de instrumentos y
el volante. Apenas tardan 30 ó 40 ms en inflarse, a una velocidad cercana a los 300 km/h, y
se desinflan en unas décimas de segundo, pero de forma más lenta.
Su funcionamiento se basa en una unidad de control, un sistema informático que se encarga
de controlar sensores como acelerómetros, sensores de impacto y presión, de velocidad de
las ruedas y de ocupación de los asientos. Si se superan los umbrales prefijados de los
sensores, la unidad de control manda la 'orden' de inflado que provoca que se genere gas
propelente para el inflado de las bolsas. Al inflarse las bolsas, microperforadas en zonas
específicas, se amortigua el impacto y la presión del cuerpo del ocupante del vehículo, contra
la bolsa de nylon, obliga a que el gas de su interior escape del mismo de forma lenta. El
inflado de los airbag se produce por la liberación de nitrógeno.
CÓMO FUNCIONA EL ABS Y PARA QUÉ SIRVE
Desarrollado para garantizar una mayor seguridad en los aterrizajes de los aviones, el ABS
fue el primer sistema de seguridad electrónico integrado en el automóvil y la base sobre la
que se desarrollaron más adelante sistemas como el control de tracción o el control de
estabilidad.
El sistema de frenos antibloqueo, esto es lo que significan estas tres letras, es uno de los elementos
de seguridad activa del automóvil que más accidentes ha evitado. Su principal misión es que
podamos mantener el control sobre la trayectoria del vehículo a la vez que aplicamos la máxima
presión de freno. ¿Cómo funciona el ABS y para qué sirve? Bueno, sirve para que podamos
frenar y cambiar de trayectoria a la vez, evitando que se bloqueen las ruedas, y lo hace como te
contamos a continuación.
La finalidad principal del equipo de frenos de un vehículo es reducir la velocidad a la que se desplaza y, por lo
tanto, hacer que las ruedas dejen de dar vueltas. Sin embargo, debido a la inercia es posible que nuestro coche
siga en movimiento aunque las ruedas estén completamente paradas. Esto tiene un inconveniente muy
importante y es que si las ruedas no giran, pero el coche sigue moviéndose, lo hace sin control sobre la trayectoria
que queramos realizar.
Si en una frenada bloqueamos las ruedas delanteras, no tendremos gobierno sobre la dirección. Por más que
giremos el volante a un lado o a otro, no seremos capaces de dirigirnos hacia donde queramos (esquivar el peatón
que nos sorprende, el coche que se salta el cruce, etc.). El vehículo seguirá la trayectoria que la inercia le marque
en ese momento. Puede continuar recto, girar hacia el lado donde el asfalto esté en mejores condiciones, hacia el
interior del peralte de la curva, etc.…
Quedarnos sin dirección es una de las mayores pesadillas que nos pueden sorprender mientras
conducimos. Para evitar este inconveniente y así aumentar la seguridad activa de los automóviles,
se empezaron a desarrollar distintos sistemas anti bloqueo para garantizar que pudiéramos
dirigir nosotros la trayectoria de nuestro coche.
En los años 60 eran meramente mecánicos, desde finales de los 70 y durante todos los 80 se
desarrollaron los sistemas electrónicos, de forma que a partir de los años 90 ya la mayoría de los
automóviles lo instalaban de serie. Afortunadamente, hoy en día todos los coches que se matriculen
deben instalarlo y cada vez son menos los vehículos que ruedan por nuestras carreteras sin ABS.
8 fotos El sensor capta las marcas de una corona dentada montada en el eje o bien las polaridades
de un rodamiento especial.
Bien, la idea es muy sencilla. Cuando pisamos el pedal del freno, lo que hacemos es empujar un
líquido. Como éstos no se comprimen, transmitimos esa presión a los frenos de las ruedas. Si las
ruedas se bloquean, basta con levantar un poco el pie del freno para que vuelvan a girar.
Ya tenemos el principio de funcionamiento: quitarle presión al líquido que comprimimos con el pedal,
aunque el conductor no levante el pie. Para ello, se intercalan unos grifos en el circuito de frenos
(electroválvulas) que al recibir una señal eléctrica desde la centralita del ABS, abren el paso de
líquido a un canal distinto del de la rueda, de forma que el freno de esa rueda se libera.
Hemos nombrado a dos elementos del ABS: La centralita, que es el cerebro del sistema, y las
electroválvulas, que son las que abriéndose y cerrándose aprietan o aflojan la presión del
freno en cada rueda. La unidad de mando tiene que saber cuándo debe abrir o cerrar las válvulas
y, para tomar esa decisión, necesita que unos sensores le digan si las ruedas están girando o no. Ya
tenemos todos los componentes del sistema ABS, que son:
1. Unidad de mando.
2. Electroválvulas (suelen ir montadas en una unidad compacta llamada grupo hidráulico).
3. Sensores de giro en las ruedas.
Lo mejor de todo es que además, el ABS es la base de muchos otros sistemas que se sirven de sus
sensores para tomar decisiones. Añadiendo elementos como en un mecano, podemos convertir el
ABS en un control de tracción, control de estabilidad, etc