La hepatitis B (VHB) es el tipo más grave de los cinco que
existen de este padecimiento, ya que puede causar infecciones
de por vida que pongan a las víctimas en alto riesgo de muerte causada por cirrosis hepática y cáncer al hígado; estas dos últimas enfermedades son la causa de fallecimiento de cerca de un millón de personas al año. Las infecciones crónicas del VHB son muy comunes en los países en vías de desarrollo, donde la mayoría de las personas que tienen el virus se infecta durante la niñez mediante la transmisión perinatal de madre a hijo o la transmisión de niño a niño. Las vacunas han sido excepcionalmente eficaces para impedir que las infecciones crónicas se desarrollen, pero su costo ha detenido la distribución general a niños en países de bajos ingresos y alta incidencia. De manera amplia se han utilizado dos tipos generales de vacunas contra la hepatitis B: la derivada de plasma y la recombinante. La fuentes de inmunógenos (HBsAg) utilizados en estas vacunas son diferentes. La vacuna derivada de plasma obtiene el HBsAg del suero de las personas infectadas en forma crónica con VHB. La vacuna recombinante se produce utilizando tecnología de ADN y el HBsAg resultante es altamente purificado e inactivo. La vacuna contra la hepatitis B derivada de plasma ha demostrado ser altamente inmunogénica y eficaz para prevenir la infección aguda y crónica de VHB en bebés, niños y adultos. Sin embargo, desde el primer caso de infección de VIH informado en 1981, los temores en cuanto a la seguridad de las vacunas derivadas de plasma han aumentado. No obstante, las vacunas recombinantes de última generación han resultado ser tan eficaces como aquellas derivadas de plasma en la prevención de la infección de VHB, evitando a su vez la posible transmisión de VIH y de otros agentes desconocidos asociados a las vacunas derivadas de plasma. Una compañía estadounidense ha desarrollado una nueva vacuna recombinante contra la hepatitis B. Los ensayos en las fases I y II han demostrado que la vacuna es segura y los resultados preliminares de un ensayo clínico en fase III indicaron buena eficacia y seguridad inmune en niños y adultos. Asia es el área hiperendémica por excelencia de la infección por VHB, y el gobierno de un gran país de la región ha aprobado una aplicación para llevar a cabo un ensayo clínico de la vacuna en su jurisdicción. Un instituto de una de sus ciudades más grandes ha recibido recursos para efectuar un estudio aleatorizado, doble ciego, con un grupo experimental y dos grupos de control. Al grupo experimental se le administraría la vacuna recombinante contra el VHB, mientras que a uno de los grupos de control se le aplicaría la vacuna derivada de plasma contra el VHB; al segundo grupo de control se le administraría un placebo. Cuatro hospitales de la ciudad reclutaron a 240 niños nacidos de madres con un diagnóstico positivo de HBsAg y, por lo tanto, con alto riesgo de haberse infectado. Los investigadores informaron sobre el estudio a los padres de los niños y les explicaron el propósito y el procedimiento de la investigación. Al menos uno de los padres de cada uno de los niños debía otorgar su permiso antes de que su hijo pudiera participar en el estudio. A los niños se les administró la vacuna al nacer y luego al cumplir un mes y seis meses de edad. Siete meses después del nacimiento de estos niños, se realizó un seguimiento con cada uno de ellos para evaluar la seguridad y eficacia de la protección de las vacunas. En el momento en que se realizó el estudio, la inmunización con la vacuna contra el VHB era un servicio pagado, no cubierto por el programa nacional ampliado de inmunizaciones. La tasa de cobertura de la vacunación contra el VHB era de menos de 20% en la ciudad, ubicada en el área más desarrollada del país.
5 Alarmado Al Director General de Fomento y Obras Públicas Que Un Grupo de Vecinos de Las Dos Primeras Cuadras de La Calle Fitzcarrald en El Centro de La Ciudad Se Negaba A Pagar El 50