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EL

INTERROGATORIO
DE PARTE
JAVIER ALBERTO ROMERO JIMENEZ
INTERROGATORIO A LAS PARTES
Es importante dejar establecido que en el actual
CG.P., se puede hacer cualquier clase de preguntas.
Lo anterior significa que pueden hacerse tres clases
de preguntas, así:
1. Pregunta interrogativa, por ejemplo: ¿Dónde se
encontraba usted el
día 20 de julio de 2019?, o cuéntenos todo lo
relacionado con el contrato que usted celebró con el
señor fulano de tal.
2. Pregunta asertiva, por ejemplo: ¿Diga
cómo es cierto sí o no que usted me debe
$100.000? Quien responde debe contestar si
es o no cierta la pregunta, y a continuación
hacer las explicaciones que a bien tenga.
3. Pregunta asertiva afirmativa, por ejemplo:
¿Diga cómo es cierto si o no, que usted me
debe la suma de $100.000 y yo afirmo que es
cierto?
MANERA DE SOLICITAR EL INTERROGATORIO
De conformidad con el artículo 202 del CGP. el
interrogatorio será oral, si la parte que lo solicita
concurre a la audiencia, en caso contrario, el peticionario
deberá formularlo por escrito en pliego
abierto o cerrado, que podrá acompañar al memorial en
que pida la prueba o presentarlo antes de la fecha
señalada para el interrogatorio. Si el pliego está cerrado,
el juez lo abrirá al iniciarse la diligencia. Cuando esta
debe practicarse por comisionado, el comitente.
IMPORTANCIA DE LAS PREGUNTAS
La importancia de la pregunta interrogativa consiste,
en permitirle a quien interroga, elaborar las
preguntas subsiguientes con base en la respuesta
que dé el interrogado. Si no se permitiera la
pregunta libre y sólo fuera admisible la asertiva, se
tendría el inconveniente que si no se sabía de
antemano lo que se iba a preguntar, prácticamente
el interrogatorio resultaba inútil.
No deja de ser aconsejable, para quien pretende
obtener la confesión de la otra parte, que las
primeras preguntas las haga con un sentido
exploratorio y para tal efecto utilice la pregunta
interrogativa. El escenario psicológico de quien tiene
que responder preguntas cortas es muy distinto a
quien tiene que relatar unos hechos; la pregunta
asertiva previene al interrogado, mientras que, la
pregunta interrogativa le da más confianza y
generalmente resulta expresando la verdad.
La pregunta asertiva, por la disyuntiva en que coloca
a la parte, la alerta de que algo grave va a sucederle
si responde en uno u otro sentido y va preparada,
para tomar todas las precauciones tendientes a no
perjudicar el supuesto despacho favorable de sus
pretensiones o de sus excepciones; no sucede lo
mismo con la pregunta interrogativa, para lo cual
generalmente no viene preparada y su relato será
más sincero y útil para la preparación de las
preguntas posteriores.
Art 202 del C.G.P. REQUISITOS DEL
INTERROGATORIO DE PARTE. El interrogatorio será oral.
El peticionario podrá formular las preguntas por escrito en
pliego abierto o cerrado que podrá acompañar al memorial
en que pida la prueba, presentarlo o sustituirlo antes del día
señalado para la audiencia. Si el pliego está cerrado, el
juez lo abrirá al iniciarse la diligencia.
Si el absolvente concurre a la audiencia, durante el
interrogatorio la parte que solicita la prueba podrá sustituir o
completar el pliego que haya presentado por preguntas
verbales, total o parcialmente.
El solicitante puede indicar en su petición que el interrogatorio lo
formulará por escrito, pero que se reserva el derecho de hacerlo
verbalmente: "La parte que solicita la prueba podrá, antes de
iniciarse el interrogatorio, sustituir el pliego que haya presentado
por preguntas verbales, total o parcialmente" (la fórmula no es
necesaria, ya que el artículo 202 autoriza lo transcrito; pero
resulta útil para evitar cualquier discusión inclusive por lealtad).
Igualmente afirma que se formulará por escrito, el escrito que
contiene las preguntas puede presentarse antes de la fecha
señalada para el interrogatorio. Esta medida es muy útil, ya que
muchas veces durante el tiempo que transcurre entre la fecha de
iniciación del proceso y la práctica del interrogatorio (el cual a
veces es de varios años), se obtienen conocimientos que
permiten elaborar en mejor forma el interrogatorio.
Las preguntas por escrito se pueden presentar hasta el día
anterior al señalado para el interrogatorio. Si se anuncia
que el interrogatorio será escrito, pero si el pliego de
preguntas no se allega ni siquiera el día anterior al del
interrogatorio, quien va a interrogar puede comparecer a la
diligencia y hacer las preguntas en forma verbal, lo cual
será válido. Lo anterior, por cuanto que el pliego puede
sustituirse total o parcialmente por preguntas verbales, y si
es así frente a un interrogatorio inicialmente presentado por
escrito, con mayor razón podrán elaborarse preguntas en
forma verbal cuando el interrogatorio por escrito no se
formuló.
PREGUNTAS FORMULADAS POR EL JUEZ
Ya hemos indicado que de conformidad con lo preceptuado en el
art. 202 del C.G.P., una vez que la parte que interroga termina de
preguntar, sea que complete o no las veinte preguntas, el juez
puede seguir preguntando, no solamente para que la parte
interrogada aclare las respuestas dadas, sino para formular
cualquier otro tipo de preguntas que tengan que ver con los hechos
que son sustento de las excepciones o de las pretensiones.
Quizá donde es más importante la facultad que tiene el juez de
preguntar es cuando a la parte que interroga se le agotan las veinte
preguntas y el juez se da cuenta que, a pesar de su esfuerzo, fue
imposible preguntar sobre todos los puntos que interesan al
proceso. No vemos ningún inconveniente en que, cuando a la parte
se le agote el número de preguntas que puede formular, le insinúe
al juez.
LAS PREGUNTAS DEBEN SER PERTINENTES
De conformidad con el artículo 202 del C.G.P., las
preguntas se deben relacionar con la materia del litigio, es
decir, que deben ser pertinentes, o sea, que en forma
mediata o inmediata tengan que ver con el tema de la
prueba.
Igualmente las preguntas deben ser útiles, que es lo
contrario a superfluas, no solamente porque no se
relacionen con cuestión debatida, sino porque sean
repetición de otra pregunta ya formulada, sea en el mismo
interrogatorio u otro anterior cuya copia obre en el proceso.
LAS PREGUNTAS DEBEN SER CLARAS Y
PRECISAS
La pregunta debe ser clara para que el absolvente la
distinga y la responda adecuadamente; además,
debe ser exacta y precisa con el mismo objeto.
Está bien que con el interrogatorio se procure, que la
contraparte confiese, pero no es lícito que el juez
permita que se hagan preguntas que conduzcan a
que el absolvente se equivoque.
PREGUNTAS RELATIVAS A HECHOS QUE IMPLIQUEN
RESPONSABILIDAD CRIMINAL
De conformidad con el art. 202 del C.G.P., cuando se
hagan preguntas al absolvente, que impliquen
responsabilidad criminal, se harán por el juez sin
juramento, con la prevención de no estar obligado a
responderlas. Es una aplicación del principio de que nadie
está obligado a declarar contra sí mismo, cuando se
interroga a una persona sobre su participación en un hecho
delictivo cabe hacer lo mismo que en la indagatoria (sin la
gravedad ni apremio del juramento).
CADA PREGUNTA SE REFERIRÁ A UN SOLO HECHO
Como consecuencia de lo preceptuado en el art. 202 del C.G.P.,
al exigir que las preguntas sean claras y precisas, se referirán a
un solo hecho; referirse a varios les resta claridad y precisión.
Esta exigencia se debe cumplir estrictamente en las preguntas
llamadas “asertivas o asertivas-afirmativas”, ya que, en la
pregunta interrogativa sobre todo lo que exhorta al absolvente a
hablar sobre un determinado hecho no se puede cumplir con la
exigencia anterior. Cuando la pregunta contenga varios hechos,
el juez la dividirá de modo que la respuesta se dé por separado
en relación con cada uno de ellos, y la división se tendrá en
cuenta para los efectos del límite señalado de veinte preguntas.
El juez excluirá las preguntas que no se relacionen
con la materia del litigio, las que no sean claras y
precisas, las que hayan sido contestadas en la misma
diligencia o en interrogatorio anterior, las
inconducentes y las manifiestamente superfluas.
Las partes podrán objetar preguntas por las mismas
causas de exclusión a que se refiere el inciso
precedente. En este evento, el objetante se limitará a
indicar la causal y el juez resolverá de plano mediante
decisión no susceptible de recurso.
EL INTERROGATORIO ES PERSONAL
El artículo 198 del C.G.P., preceptúa que el juez podrá, de oficio o
a solicitud de parte, ordenar la citación de las partes a fin de
interrogarlas sobre los hechos relacionados con el proceso.
Las personas naturales capaces deberán absolver personalmente
el interrogatorio.
El absolvente citado debe concurrir a la audiencia personalmente,
lo cual significa que bajo ningún aspecto puede constituir
apoderado para que responda por él.
Si por confesión debemos entender la narración de hechos
personales o el conocimiento que se tiene de hechos ajenos, es
lógico que la parte conteste sobre éstos.
Cuando una persona jurídica tenga varios
representantes o mandatarios generales cualquiera de
ellos deberá concurrir a absolver el interrogatorio, sin
que pueda invocar limitaciones de tiempo, cuantía o
materia o manifestar que no le constan los hechos,
que no esté facultado para obrar separadamente o
que no está dentro de sus competencias, funciones o
atribuciones. Para estos efectos es responsabilidad
del representante informarse suficientemente.
Cuando la persona es incapaz, comparece a
absolver el interrogatorio su representante y
cuando se trata de las personas jurídicas lo debe
absolver su representante legal o convencional.
Es importante aclarar que bajo ningún aspecto se
pueden constituir apoderados para que
comparezcan a absolver el interrogatorio porque
lo que se quiere es la versión de la parte.
Es importante aclarar que bajo ningún aspecto se pueden
constituir apoderados para que comparezcan a absolver
el interrogatorio porque lo que se quiere es la versión de
la parte.
Cuando se trate de incidentes y de diligencias de
entrega o secuestro de bienes podrá decretarse de
oficio o a solicitud del interesado el interrogatorio de las
partes y de los opositores que se encuentren presentes,
en relación con los hechos objeto del incidente o de la
diligencia, aun cuando hayan absuelto otro en el proceso.
Si se trata de terceros que no estuvieron presentes en la
diligencia y se opusieron por intermedio de apoderado, el auto
que lo decrete quedará notificado en estrados, no admitirá
recurso, y en él se ordenará que las personas que deben
absolverlo comparezcan al juzgado en el día y la hora
señalados; la diligencia solo se suspenderá una vez que se
hayan practicado las demás pruebas que fueren procedentes.
Practicado el interrogatorio o frustrado este por la no
comparecencia del citado se reanudará la diligencia; en el
segundo caso se tendrá por cierto que el opositor no es
poseedor.
El juez, de oficio, podrá decretar careos entre las partes.
ART 199 CGP.. DECRETO DEL INTERROGATORIO. En el
auto que decrete el interrogatorio se fijará fecha y hora para
la audiencia y se ordenará la citación del absolvente.
Cuando se trate de persona que por enfermedad no pueda
comparecer al despacho judicial, se le prevendrá para que
permanezca en su habitación el día y hora señalados. De ser
el caso, el juez podrá autorizar la utilización de medios
técnicos.
PARÁGRAFO. Cuando en un proceso sea parte quien
ostente la condición de Presidente de la República o de
Vicepresidente, la prueba se practicará en su despacho.
ART 200 CGP. CITACIÓN DE LA PARTE A
INTERROGATORIO. 
El auto que decrete el interrogatorio de parte
extraprocesal se notificará a esta
personalmente; el de interrogatorio en el
curso del proceso se notificará en estrados
o por estado, según el caso.
OPORTUNIDAD PARA SOLICITAR EL
INTERROGATORIO
El interrogatorio procesal debe solicitarse en la
oportunidad para la petición de pruebas durante la
primera instancia. En la segunda instancia el
interrogatorio procede únicamente, cuando se dejó
de practicar sin culpa de la parte que lo pidió o si
versa sobre un hecho nuevo.
ART 201 CGP. TRASLADO DE LA PARTE A LA
SEDE DEL JUZGADO. Cuando la parte citada resida
en lugar distinto a la sede del juzgado, el juez
dispondrá que quien haya solicitado la prueba
consigne, dentro de la ejecutoria del auto, el valor que
el juez señale para gastos de transporte y
permanencia, salvo que la audiencia pueda realizarse
por videoconferencia, teleconferencia o se encuentre
en una de las eventualidades que permiten
comisionar. Contra tal decisión no cabe recurso.
ART 203. PRÁCTICA DEL INTERROGATORIO. Antes
de iniciarse el interrogatorio se recibirá al interrogado
juramento de no faltar a la verdad.
En la audiencia también podrán interrogar los
litisconsortes facultativos del interrogado.
El interrogado deberá concurrir personalmente a la
audiencia, debidamente informado sobre los hechos
materia del proceso.
Si el interrogado manifestare que no entiende la pregunta
el juez le dará las explicaciones a que hubiere lugar.
Cuando la pregunta fuere asertiva, la contestación deberá
limitarse a negar o a afirmar la existencia del hecho
preguntado, pero el interrogado podrá adicionarla con las
explicaciones que considere necesarias. La pregunta no
asertiva deberá responderse concretamente y sin evasivas.
El juez podrá pedir explicaciones sobre el sentido y los
alcances de las respuestas.
Si el interrogado se negare a contestar o diere respuestas
evasivas o impertinentes, el juez lo amonestará para que
responda o para que lo haga explícitamente con prevención
sobre los efectos de su renuencia.
El juez, de oficio o a petición de una de las partes,
podrá interrogar a las demás que se encuentren
presentes, si lo considera conveniente.
La parte al rendir su declaración, podrá hacer
dibujos, gráficas o representaciones con el fin de
ilustrar su testimonio; estos serán agregados al
expediente y serán apreciados como parte
integrante del interrogatorio y no como
documentos. Así mismo, durante la declaración el
interrogado podrá reconocer documentos que
obren en el expediente.
ART 204. INASISTENCIA DEL CITADO A INTERROGATORIO. La
inasistencia del citado a interrogatorio solo podrá justificarse mediante prueba
siquiera sumaria de una justa causa que el juez podrá verificar por el medio
más expedito, si lo considera necesario.
Si el citado se excusa con anterioridad a la audiencia, el juez resolverá
mediante auto contra el cual no procede ningún recurso.
Las justificaciones que presente el citado con posterioridad a la fecha en
que debía comparecer, solo serán apreciadas si se aportan dentro de los tres
(3) días siguientes a la audiencia. El juez solo admitirá aquellas que se
fundamenten en fuerza mayor o caso fortuito. Si acepta la excusa presentada
por el citado, se fijará nueva fecha y hora para la audiencia, sin que sea
admisible nueva excusa.
La decisión que acepte la excusa y fije nueva fecha se notificará por estado
o en estrados, según el caso, y contra ella no procede ningún recurso.
ART 205. CONFESIÓN PRESUNTA. La inasistencia del citado a la
audiencia, la renuencia a responder y las respuestas evasivas, harán
presumir ciertos los hechos susceptibles de prueba de confesión
sobre los cuales versen las preguntas asertivas admisibles contenidas
en el interrogatorio escrito.
La misma presunción se deducirá, respecto de los hechos susceptibles de
prueba de confesión contenidos en la demanda y en las excepciones de
mérito o en sus contestaciones, cuando no habiendo interrogatorio
escrito el citado no comparezca, o cuando el interrogado se niegue a
responder sobre hechos que deba conocer como parte o como
representante legal de una de las partes.
Si las preguntas no fueren asertivas o el hecho no admitiere prueba de
confesión, la inasistencia, la respuesta evasiva o la negativa a responder
se apreciarán como indicio grave en contra de la parte citada.
INTERROGATORIO DECRETADO DE OFICIO POR
EL JUEZ
En otras palabras no habrá confesión ficta o
presunta, ni declaratoria de confeso, cuando la parte
no concurra, se niegue a responder o responda
evasivamente, sino que cualquiera de esas
conductas se apreciarán por el juez como indicios en
contra del renuente. El juez pude considerar que
esos indicios son graves y con base en ellos dictar
sentencia si es del caso.
La Corte con relación a los efectos que se producen cuando el
interrogatorio es decretado a petición de parte y la otra no concurre
a absolverlo, o se niega a contestar o da respuestas evasivas, y a
los efectos de indicio cuando existen las anteriores conductas, pero
frente al interrogatorio decretado de oficio, ha dicho con razón:
"Justificase ampliamente la precitada distinción realizada por el
legislador, como quiera que cuando la indagación deviene de oficio,
no es el adversario de la litis quien se esfuerza en provocar la
confesión de una de las partes en aras a lograr el despacho
favorable de sus súplicas, sino el juzgador, motu propio; quien se
interesa en obtener el conocimiento e identificación de los hechos
necesarios para recrear y fundamentar su decisión, sin que, en un
sentido lógico,
pueda atribuirse una misma consecuencia probatoria a los
casos de renuencia injustificada de la parte a concurrir a la
diligencia o a responder las preguntas, sin atender el origen
de la convocatoria, si se considera que, cuando ella se
hace por petición de parte, es posible conocer el propósito
que tendrán las preguntas y, en mayor o menor grado, su
contenido, dado el interés particular en la pretensión o en la
oposición, mientras que, si se hizo de oficio, no se sabe en
concreto, cuál es la finalidad que tiene el juez al ordenar la
práctica de la prueba, en cuanto se entiende que obra en
función del interés general en el proceso.
Se concluye, entonces, que el efecto probatorio en
cuestión, de clara estirpe sancionatoria, no tiene cabida
a favor de un sujeto procesal que en la audiencia
ordenada de oficio no estaba legitimado para interrogar
y que, en su momento, dejó de aprovechar eficazmente
la oportunidad que, in abstracto, concede el artículo
203 del Código de Procedimiento Civil, muy idónea por
cierto, para obtener la “verdad” que es necesaria para
facilitar el despacho benigno de sus pedimentos”.
Sentencia de Casación, noviembre 28 de 2000. Expediente 5.768. Mag. Pon.
Dr. Carlos Ignacio Jaramillo Jaramillo.
DIFERENCIAS ENTRE EL INTERROGATORIO Y EL TESTIMONIO DE
TERCEROS
EL INTERROGATORIO DE PARTE EL TESTIMONIO
1. Las preguntas son enumeradas. 1. Las preguntas no se enumeran.
2. Las preguntas se limitan a 20. 2. Las preguntas son ilimitadas.
3. Busca la confesión de la contraparte. 3. Busca la declaración libre y
4. Las preguntas pueden ser asertivas. espontánea del testigo.
5. La pregunta puede insinuar la 4. Las preguntas no pueden ser
respuestas a fin de obtener la confesión. asertivas.
6. La inasistencia a la audiencia, la 5. No se permiten preguntas
renuencia a responder y las respuestas sugestivas.
evasivas, harán presumir ciertos los
6. La inasistencia, la renuencia a
hechos susceptibles de prueba de
responder y las respuestas evasivas
confesión.
no tiene ninguna consecuencia
procesal para la parte que lo solicita.
Diapositiva de cierre. No la debes modificar.

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