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AGRARIOS
Dr. Nelson Luis Ramallo Salazar
Dra. Roxana Carmen Rojas Durán
Octubre
2014
PRINCIPIOS GENERALES RECTORES EN LA
ADMINISTRACIÓN DE LA JUSTICIA AGRARIA
JERÓNIMO GONZALES:
“ Se ha desenvuelto una corriente metódica que busca en los grupos de
preceptos de derecho privado, sino normas absolutas o axiomáticas que
dominen la institución respectiva, por los menos orientaciones generales o
direcciones fundamentales que, jugando a modo de principios, informan
la disciplina estudiada y sirven para resolver los problemas concretos.
Estas grandes líneas directrices orientan al juzgador, economizan
preceptos, facilitan el estudio de la materia y elevan las investigaciones a
la categoría de científicas”.
a) PRINCIPIO DE ORALIDAD.
La administración de justicia agraria, tiene a la
oralidad como uno de sus principios fundamentales,
pues su audiencia se constituye en la actividad central
del proceso oral en la que se concentra toda la
actividad procesal. La oralidad , resulta ser el
mecanismo más adecuado para la solución de
conflictos en general.
CHIOVENDA:
“ Según el principio de oralidad las deducciones de las
partes normalmente deben ser hechas de viva voz en
audiencia, es decir, en aquel momento y lugar dados
en que el Juez escucha a las partes y dirige la marcha
de la causa”.
b) PRINCIPIO DE INMEDIACIÓN.
Este principio consiste en el contacto directo y personal
del titular del órgano jurisdiccional con las partes, es la
relación directa entre los sujetos procesales y el manejo
del mismo proceso, así se encuentra establecido en el Art.
76 de la Ley No. 1715.
SERGIO GARCÍA RAMIREZ:
“ …..El principio de inmediación reviste especial relieve y
trascendencia, a tal punto que es requisito sine qua non
para el buen desempeño de otros principios que gobiernan
o debieran gobernar el proceso. En efecto…la oralidad no
tiene sentido alguno si no existe inmediación: el juez debe
enterarse y observar precisamente con el auxilio de sus
propios sentidos; el secretario, por competente que sea,
no sustituye los ojos y los oídos del juzgador.”
c) PRINCIPIO DE CONCENTRACIÓN.
Todas las actividades procesales deben procurar
concentrarse en el menor número posible de actos para así
evitar la dilación y dispersión del proceso, antagónico al
principio de celeridad.
Los Arts. 83 y 84 de la Ley Nacional de Reforma Agraria
señalan que los actos procesales deben realizarse en una
sola audiencia, y por motivos de fuerza mayor , si no se
cumpliere, en otra complementaria.
CHIOVENDA:
“ El principio de concentración impone la reunión de todas
las actividades procesales dirigidas a la Instrucción de la
causa ( pruebas y su discusión) en una sola sesión o en
número limitado, en todo caso, próximas unas a otras”.
d) PRINCIPIO DE DIRECCIÓN:
El gobierno de los procesos es de competencia del titular del órgano
jurisdiccional sin perjuicio de los poderes jurídicos que competen a las
partes. Art. 76 de la Ley No. 1715.
Estas funciones ( dirección del proceso, disciplina en el desarrollo del
proceso, etc.), son ejercidas por el juzgador, quien se halla investido
de suficiente autoridad para poder determinar y garantizar el buen
desenvolvimiento de todos los actuados procesales, evitando,
discusiones impertinentes o intrascendentes.
e) PRINCIPIO DE GRATUIDAD:
Por su carácter eminentemente social, la justicia agraria es gratuita, no
deben los litigantes contribuir al ámbito judicial. Art. 76 de la Ley No.
1715.
e) PRINCIPIO DE PUBLICIDAD:
Todas las actuaciones que se realicen durante la
sustanciación del proceso oral agrario son
absolutamente públicas, por tanto los sujetos
procesales intervinientes tienen acceso irrestricto a
la información y producción de la prueba.
i) PRINCIPIO DE RESPONSABILIDAD.
Los vocales, jueces y funcionarios subalternos de la
Judicatura Agraria son responsables por los daños que
causaren a las partes litigantes, por la comisión de
delitos, culpas, errores inexcusables en la aplicación
de la ley, por lo que responderán penal o civilmente
según lo establece la C.P.E. y las leyes. El Estado
también será responsable por los daños causados por
dichos funcionarios en los casos señalados. Art. 76 de
la Ley No. 1715.
j) PRINCIPIO DE CELERIDAD.
Este principio adquiere gran relevancia en la
administración de justicia agraria pues ésta debe ser
rápida y oportuna en su sustanciación, cuanto en la
resolución de los conflictos. Art. 76 de la Ley No. 1715.
Corroboran con este principio los de oralidad y
concentración, reduciendo al mínimo las posibilidades de
retardación o demora en la sustanciación de las causas.