Está en la página 1de 9

REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA

VICERRECTORADO ACADEMICO
DECANATO DE INVESTIGACIÓN Y POSTGRADO
DOCTORADO EN CIENCIAS GERENCIALES
GERENCIA DEL EMPRENDIMIENTO

EL
INTRA
EMPRE
Facilitador:
NDIMIE Dr. Luis Belloso

NTO Estudiante:
Dra. Yanelis Ramos

Maracaibo, noviembre de 2022


Análisis del intraemprendimiento
El primer uso por escrito de los términos 'intrapreneur', 'intrapreneuring,' e
'intrapreneurship' aparece en un documento escrito en 1978 por Gifford Pinchot y
Elizabeth Pinchot; más tarde en 1985 el término se atribuye sólo a Gifford Pinchot.
Intraemprendimiento, refiere más estrictamente al desarrollo de nuevos productos y
procesos que se dan en general en los laboratorios de I+D de las empresas
(principalmente, grandes corporaciones). Hoy en día, se discute que el término
“intraemprendedor” también fue propuesto por Gifford Pinchot, un consultor en
administración, quien lo replicó en su libro Intrapreneuring, en 1985. El término popular
“intraemprendimiento” se deriva de una combinación de “intra” o interno y
emprendimiento, pero es menos técnico (Coduras et al., 2011).

Por otro lado, emprendimiento se relaciona con capacidad empresarial, aun cuando
en realidad es un término mucho más amplio. Say (1803) afirma que el entrepreneur,
es decir, la persona que inicia una pequeña empresa, hace el cambio de recursos
desde una zona de bajo rendimiento a una de productividad alta y de rendimiento
mayor. Son numerosos los términos para describir los esfuerzos emprendedores dentro
de las organizaciones ya establecidas lo que en cierta medida ha entorpecido el
desarrollo de este campo de investigación (Sharma & Chrisman, 1999). De acuerdo
con Coduras et al. (2011), al igual que sucede con la mayoría de conceptos derivados
del emprendimiento, no hay hasta el momento presente una definición consensuada y
única de emprendimiento corporativo.

Así, diversos autores como Morris & Kuratko (2002), Hornsby et al. (2002), Phan et
al. (2009) y Parker (2011) han señalado que no existe un consenso en la terminología,
lo cual provoca que se utilicen como sinónimos las siguientes expresiones:

1. Intraemprendimiento (Susbauer, 1973; Pinchot, 1985; Knight, 1987)

2. Emprendimiento corporativo (Burgelman, 1983; Zahra, 1991; Covin & Slevin, 1991;
Sharma & Chrisman, 1999; Ireland et al., 2003; Kuratko, 2007; Parker, 2011).

3. Emprendimiento estratégico (Ireland & Webb, 2007; Kuratko, 2007).


El intraemprendimiento y el emprendimiento corporativo son considerados como
sinónimos, por varios investigadores. No obstante, Trujillo & Guzmán (2008)
mencionando a Åmo & Kolvereid (2005), argumentan una diferencia conceptual entre
emprendimiento corporativo e intraemprendimiento cuando sostienen que, aun cuando
ambos términos están relacionados y representan procesos incrementales de
renovación en las organizaciones a través de iniciativas de innovación llevadas a cabo
por los empleados.

Dichos términos representan ligeramente diferentes fenómenos de renovación


organizacional. Según estos autores, la diferencia fundamental radica en el
intraemprendimiento está focalizado en las iniciativas independientes o por cuenta
propia de los empleados y el emprendimiento corporativo por iniciativas interna de la
empresa o por cuenta ajena. Adicionalmente, el emprendimiento corporativo está
relacionado con los procesos utilizados por la empresa para fomentar actividades de
innovación, a través de la iniciativa de los empleados; de igual manera, el impacto que
sobre el éxito de la empresa puede tener en el comportamiento de los individuos (Åmo
& Kolvereid, 2005).

De acuerdo con Gálvez (2011), la cultura de intraemprendimiento tiene impacto


positivo y significativo en el comportamiento innovador global de la empresa, en
especial en sus aspectos productivos y de gestión. De igual forma, que al estimular la
sinergia que se produce al combinar la capacidad creativa de los colaboradores de
diferentes niveles y/o departamentos, el trabajo en equipo facilita los procesos que
buscan generar innovaciones.

Como refuerzo de lo anterior, se distinguen estudios empíricos que destacan la


importancia del intraemprendimiento como estrategia de renovación empresarial desde
la innovación (Gálvez, 2011), la cultura organizacional (Benítez-Amado et al., 2010), el
ambiente externo (Agca et al., 2012), el desempeño en términos del total de ventas,
utilidades y rendimiento para los inversores (Marcus & Zimmerer, 2003; Covin & Slevin,
1991), particularmente en entornos turbulentos y cambiantes.

De las ideas expuestas, lo más importante es que el intraemprendimiento ofrece a


los empleados la oportunidad de crear un producto, un servicio o un departamento
dentro de su actual lugar de trabajo. Anima a los empleados a pensar de forma
innovadora sin dejar de mantener sus ideas a salvo dentro de la organización o
empresa. Seguro que no todas las nuevas ideas van a ser extraordinarias, pero si una
organización puede motivar e inspirar a sus empleados para que piensen de forma
innovadora, puede tener un impacto inmenso en el crecimiento y quizás en el
renacimiento de una determinada empresa.

El intraemprendimiento dentro de una organización establecida también puede


evitar que sus servicios/productos se vuelvan obsoletos o anticuados. Los
empleados que están motivados e inspirados para practicar el intraemprendimiento
mantienen los engranajes y mecanismos dentro del tanque de pensamiento de la
operación está constantemente activo lo que significa su constante generación de
nuevas ideas.

Consiste en el fomento de la actividad emprendedora dentro de las empresas y


organizaciones consolidadas. Es una de las estrategias que mejores resultados están
dando cuando las empresas necesitan moverse, ir un poco más allá; cuando han de
innovar. A estas alturas de la partida está claro que las empresas o apuestan por
desplegar estrategias y actividades que permitan el emprendimiento dentro de sus
propias organizaciones o lo van a pasar muy mal.

Apostar por el intraemprendimiento favorece la mejora de los procesos, la resolución


de problemas y la creación de nuevos productos y servicios e incluso de nuevas
unidades de negocio o empresas (todo ello de manera ágil). Está muy vinculado a la
innovación, y tenemos innovación para todos los gustos: en producto, en servicio, en
procesos, en modelo de negocio, en la gestión…

Según lo estudiado, dentro de una organización establecida también puede evitar


que sus servicios/productos se vuelvan obsoletos o anticuados. Los empleados que
están motivados e inspirados para practicar el intraemprendimiento mantienen los
engranajes y mecanismos dentro del tanque de pensamiento de la operación está
constantemente activo lo que significa su constante generación de nuevas ideas.
También crea un entorno de trabajo que fomenta la independencia y la autonomía
dentro de una organización, al tiempo que presenta nuevas ideas y soluciones a
algunos de los problemas existentes.

Según Phil Shaw, cofundador y codirector general de TransPerfect, los


intraemprendedores suelen ser los empleados que tienen un innegable impulso o
espíritu emprendedor. Dentro de la propia empresa, cada empleado ya dirige su propio

negocio. Los empresarios también tienen que depender de la generación de su propio


capital o financiación. El riesgo recae principalmente sobre los hombros del
emprendedor y puede ser una carga pesada de llevar.

Para Bisbal (2020) las empresas necesitan intraemprendedores. No solo es


fundamental que las organizaciones aprendan a identificarlos, sino también que
fomenten un entorno que favorezca el intraemprendimiento. Está muy vinculado a la
innovación, y tenemos innovación para todos los gustos: en producto, en servicio, en
procesos, en modelo de negocio, en la gestión.

Intraemprendimiento o emprendimiento corporativo

Cuando una empresa decide ir un poco más allá en el campo de la innovación,


puede optar por tres caminos: la innovación interna (dentro de casa), la innovación
externa (ver qué hay por ahí fuera) o una mezcla de las dos (innovación híbrida).

Innovación interna

La innovación interna está un poco agotada. Los departamentos de I+D+i y los


directivos iluminados funcionaron en el pasado; ahora necesitan nuevas metodologías
y estrategias. Aun así, van muy lentos.

3 prácticas de intraemprendimiento:

Las tres principales prácticas y, por extensión, las más saludables son:

1. Talleres de reciclaje y capacitación. Son necesarios para que se vayan


asimilando las mecánicas del emprendimiento. Los talleres suelen tratar sobre
nuevos procesos y metodologías innovadoras (formación y talleres de trabajo
sobre design thinking, sprints, scrum, lean startup y otras herramientas menos
sexys o conocidas).

2. Talleres además de plantear retos para resolver internamente.

3. Y la estrella del momento: si unimos todo lo anterior y le damos una capita de


pintura, tenemos los programas de intraemprendimiento (para crear productos e
incluso empresas, aunque la creación de empresas no está nada clara y
depende del modelo).

Innovación externa

La innovación más potente y mejor orquestada está ahí fuera y va mucho más rápido
que la que somos capaces de generar en la empresa. Los startups son las
abanderadas de la innovación y por eso las empresas deben relacionarse con ellas y
aprender de ellas. Trabajan con la nueva «ciencia» de creación de productos y
negocios. Son rápidas, ágiles y algunas simpáticas (aunque muchas innovaciones
cabrean a sectores enteros; tú ya me entiendes). Las principales maneras de
relacionarse con ellas son:

1. Premios: Son una opción barata que permite monitorizar toda la innovación en la
categoría del premio. A mí me encanta, pues es sencilla y tremendamente
efectiva, pero hace falta mucha conexión con todo el ecosistema emprendedor y
una gran comunicación.

2. Retos: Se plantean retos para obtener las mejores soluciones.

3. Y la estrella del momento es la aceleradora corporativa: Se trata de un proceso


por el cual las empresas abren una convocatoria y seleccionan los startups con
las que más les interesa trabajar en el ámbito estratégico y aquellas con las que
les gustaría sondear posibilidades.

El modelo depende de la empresa, de cómo haya definido su aceleradora (cesión de


espacios de trabajo, formación, desarrollo de una prueba de concepto, mentoring,
sesiones con celebrities del mundo del emprendimiento, inversión en el startup, joint
venture, compra de soluciones o servicios, etc.).
Innovación híbrida

Significa quedarse con lo mejor de los dos mundos: el talento de la casa y el que hay
fuera.

El éxito de la definición, implantación y resultados de estas estrategias, mecánicas e


iniciativas corresponde a los departamentos de I+D+i, así que tienen trabajo por
delante.

Para finalizar los líderes de la empresa tienen que ser capaces de apoyar a otros y
de dejarles tomar decisiones, porque quizá lo mejor de este tipo de emprendimiento es
que estos empleados se involucran tanto que sienten que son dueños de la empresa.
Lo cual los convierte en “belongers”, gente que pertenece y encaja a la perfección en la
organización. Además, contar con un intraemprendedor o intraemprendedores de éxito
en una empresa puede contribuir a la formulación de nuevas ideas dentro de una
empresa que tiene los medios y la tecnología para hacerlo y puede disminuir los
riesgos de empezar desde cero. También puede disminuir la competencia al ver que
las ideas e innovaciones tienen lugar dentro de la empresa y no como un enfoque
externo.

Referencias bibliográficas

Agca, V., Topal, Y. & Kaya (2012). Linking intrapreneurship activities to


multidimensional firm performance in Turkish manufacturing firms: an empirical study,
International Entrepreneurship Management, 8 (1), 15-33.
Åmo, B. & Kolvereid, L. (2005). Organizational strategy, individual personality and
innovation behavior. Journal of Enterprising Culture, 13 (1), 7-19.
Benítez-Amado, J., Pérez-Arostegui, M.N. & Tamayo-Torres, J. (2010). Information
Technology-Enabled Innovativeness and Green Capabilities. The Journal of Computer
Information Systems. 51 (2), 87-96
Bisbal, P. (2020) Innovación e intraemprendimiento. Qué es el intraemprendimiento o
emprendimiento corporativo (esic.edu)
Burgelman, R.A. (1983). Corporate entrepreneurship and strategic management:
insights from a process study. Management Science, 29 (12), 1349-1364.
Coduras, A., Guerrero, M. & Peña, I. (2011). Emprendimiento corporativo en España,
GEM España-Fundación Xavier de Salas para la Dirección General de Política de la
Pyme.
Covin, J.G. & Slevin, D.P. (1991). A conceptual model of entrepreneurship as firm
behavior, Entrepreneurship Theory and Practice, 16 (1), 7-25.
Gálvez, E.J. & García D. (2011). Impacto de la Cultura Intraemprendedora en el
rendimiento de las MIPYME del sector turístico colombiano; Un estudio empírico,
Universidad y Ciencia,52, 27-36.
Hornsby, J.S., Kuratko, D.F. & Zahra, S.A. (2002). Middle managers’ perception of the
internal environment for corporate entrepreneurship: assessing a measurement scale,
Journal of Business Venturing, 17 (3), 253-274.
Ireland, D.R. & Webb, J.W. (2007). Strategic entrepreneurship: Creating competitive
advantage through streams of innovation. Business Horizons, 50 (1), 49-59.
Ireland, R.D., Hitt, M.A. & Simon, D.G. (2003). A model of strategic entrepreneurship:
The construct and its dimensions. Journal of Management, 29 (6), 963-989.
Kuratko, D. (2007). Corporate Entrepreneurship, Foundations and Trends in
Entrepreneurship, 3 (2), 1-51. Kelley School of Business, Indiana University, USA
Knight, R. (1987). Corporate Innovation and Entrepreneurship: A Canadian Study.
Journal of Product Innovation Management, 4, 284-297.
Marcus, M.H. & Zimmerer, A. (2003) Longitudinal Study of the Impact of Intrapreneurial
programs in Fortune 500 firms, Journal of Management Research, 3 (1), 11- 22.
Morris, M.H. & Kuratko, D.F. (2002). Corporate Entrepreneurship - Entrepreneurial
development within organizations. Fort Worth, Texas: Harcourt, Inc.
Phan, P., Wright, M., Ucbasaran, D. & Tan, W. (2009). Corporate entrepreneurship:
Current research and future directions. Journal of Business Venturing, 24, 197-205.
Parker, S. (2011). Intrapreneurship or entrepreneurship? Journal of Business Venturing,
26, 19-34.
Pinchot, G. (1985). Intrapreneuring (el empresario dentro de la empresa), cómo
hacerse empresario sin salirse de la empresa. Bogotá: Norma.
Say, J.B. (1803). Traite d’economie politique. New York: Kelley.
Sharma, P. & Chrisman, J.J. (1999). Towards reconciliation of the Definitional Issues in
the Field of Corporate Entrepreneurship. Entrepreneurship Theory and Practice, 24 (1),
11- 27.
Susbauer, J. (1973). Intracorporate Entrepreneurship: Programs in American Industry.
Cleveland: Cleveland State University
Trujillo, M. & Guzmán, A. (2008). Intraemprendimiento: una revisión al constructo
teórico, sus implicaciones y agenda de investigación futura. Cuadernos de
administración, 21 (35), 37-63.
Zahra, S.A. (1991). Predictors and Financial Outcomes of Corporate Entrepreneurship:
An Exploratory Study. Journal of Business Venturing, 6 (4), 259-286.

También podría gustarte