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I.- Lee el siguiente artículo e identifica si es coherente o no. En caso de que hubieran ideas inconexas,
ordénalas utilizando números que puedas escribir sobre el párrafo.
Artículo
A las 3:45 a.m., poco más de dos horas después, Malaysia Airlines emitió una alerta de "código rojo"
por la desaparición del avión de los radares, que implicaba un nivel de crisis que exigía un despliegue
inmediato de los planes de emergencia.
La información facilitada por funcionarios internacionales y malasios indicó entonces que el Boeing
777-200ER podría haber volado durante horas después del último contacto de voz con los pilotos.
Eso quiere decir que puede que alguien hubiera seguido manejando el avión, pero no podía, o no
quería, comunicarse. La investigación hecha por Malasia incluyó una búsqueda en las casas del
piloto, de 53 años, y el copiloto de 27.
El pasajero más chico tenía apenas dos años. El mayor, 76. Eran un grupo variado: había
veraneantes, viajeros habituales y hasta peregrinos budistas. ¿Qué fue lo que les pasó?
Pero el avión nunca llegó a Beijing a las 6:30 a.m., como estaba planificado, ni se pudo detectar en
ningún otro espacio. Aproximadamente una hora después las autoridades hicieron el anuncio
público de la desaparición.
Hasta ahora se han encontrado restos confirmados del avión, y otros que presuntamente le
pertenecen, en la costa africana y en islas del océano Índico.
Los investigadores malasios no llegaron a ninguna conclusión definitiva sobre lo ocurrido a bordo
del avión, aunque no descartaron la posibilidad de que se hubiera desviado deliberadamente de su
ruta, una posibilidad a la que también aludió una evaluación preliminar de agencias de inteligencia
estadounidenses que se conoció en 2015.
Sucedió hace ya diez años, pero sigue siendo uno de los misterios más grandes de la historia de la
aviación: qué pasó con el vuelo 370 de Malaysia Airlines que desapareció el 8 de marzo de 2014
cuando iba en ruta de Kuala Lumpur a Beijing con 239 personas a bordo.
Un año después, Ocean Infinity, una empresa estadounidense de exploración del fondo marino,
puso en marcha su propia operación en el sur del Índico, pero tampoco logró resultados. Para
entonces Malasia había ofrecido un pago de hasta US$ 70 millones si se encontraba el avión.