ANEXOS

ANEXO 1: GUÍA DE OBSERVACIÓN

ASIGNATURA: PORTAFOLIO I

GUÍA DE OBSERVACIÓN

DOCENTE:

ALUMNA:

Lima -

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INTRODUCCIÓN

La observación es la estrategia fundamental del método científico, y, por tanto, cualquier

técnica de recogida de información psicológica conlleva, de una u otra forma, observación. La
observación es, además, una conducta humana universal que ocurre, también, en la situación de
evaluación entre el sujeto y el evaluador y que se produce sea cual fuere el modelo teórico de éste
(Ballesteros, 2013, pág. 194).

En el presente trabajo se aplicarán los conocimientos adquiridos sobre la observación, se

utilizará la observación como método de recogida de información aplicada al tema elegido.
También se diligenciará un cuadro de registro y un diario de campo es una herramienta que nos
permite incluir información descriptiva de la situación observada.

Finalmente, con el desarrollo de esta actividad se busca aportar nuevos conocimientos al

estudiante y fortalecer los ya adquiridos durante el proceso de formación del curso de observación
y entrevista.

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 1. DATOS GENERALES
• Inicial: F.
• Edad: 5 años 1 mes 22 días.
• Edad actual: 4 años, 9 meses y 4 días.
• Grado de Instrucción: Inicial
• Sexo: Femenino
• Fechas de Evaluación:
• Observadora:
2. Participante
• Niña de 5 años 1 mes 22 de iniciales F.B.L
3. Propósito de la observación

Observar y presentar los acontecimientos realizados entre la figura materna y su menor,

concibiendo si existe una falta de iniciativa por parte de la menor de 5 años 1 mes 22 días de edad
frente a la relación entre ambas.

4. Temporalidad y lapsos específicos de tiempo

Se observará la relación entre la menor y su figura materna durante el día domingo 10 de

abril, jueves 14 de abril y lunes 18 de abril del 2022, en horario tardío y nocturno, con una duración
total de 80 minutos en los días 14 y 18 de abril del 2022, mientras que, en la primera visita, la
observación no participante tendrá una duración de 120 minutos.

5. Objetivos:
• Percibir los acontecimientos de lo que se presenta, especificando los hechos con la
observación.
• Establecer un listado de los acontecimientos con las horas en las que fueron
registradas dichas conductas.
• Identificar si la relación de la menor con su madre puede estar generándole una falta
de iniciativa.

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 • Identificar cuáles son las señales que nos proporciona la menor y su figura materna,
tanto de manera verbal como no verbal que puedan anteceder a las acciones
caracterizadas dentro de la falta de iniciativa.
6. Descripción del contexto

La menor reside en el distrito de Villa María del Triunfo, distrito en el cual la percepción
de inseguridad es de 79.30% y, aunque la familia de la niña observada vive en una zona
urbana con cercanía a una comisaría, la delincuencia es tema existente en calles contiguas.
A pesar de dicha inseguridad que puede atentar contra la integridad de la menor, la
seguridad socioafectiva dentro del hogar supone un punto positivo, ya que no solo son
ambas figuras paternales quienes cuidan de ella, sino que también la abuela de la familia,
así como sus tías y primos, cuidan y velan por su seguridad tanto dentro como fuera del
hogar.
➢ Características de la evaluada

La niña observada, con iniciales F.B.L es una menor de 5 años 1 mes y 22 días de edad,
presenta usualmente adecuada higiene, aunque su cabellera, de color negro siempre se
encuentra alborotada. Con un peso alrededor de los 18 kilos y una talla aproximada de 109,5
cm. De ojos achinados, nariz pequeña y boca también del mismo tamaño. Presenta armonía
en la distribución de su figura y se observa con adecuada salud.

➢ Aspectos Socioeconómicos

La familia de la menor es de nivel socioeconómico medio, puesto que no es la única fuente

de ingresos dentro del hogar, ya que, al ser una familia extendida, todos los integrantes de
la familia aportan de manera equitativa en los gastos respectivos. Así mismo, la menor
observada acude a una institución privada, tal y como su hermana menor y le otorgan todos
los recursos materiales para desarrollarse adecuadamente tanto en el hogar, como en la
escuela.

➢ Aspectos Socioafectivos

Según lo observado, se comprende que la menor observada es una niña con un adecuado
entorno socioafectivo y, esto puede observarse, por el trato amable que su figura materna le
otorga incluso al momento de corregirle, siendo este un motivo por el cuál las normas de la

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 menor no fueron delimitadas adecuadamente. Sin embargo, como aspectos positivos, la
menor se desenvuelve en un entorno comprensivo y que le ayuda a desarrollarse sin la
intervención de castigos físicos. Este tipo de relación socioafectiva se repite entre la menor
con su figura paterna y el resto de la familia extendida, resaltándose entre ellos a la abuela
de la niña.

7. Técnica de observación

a) Proceso de detección:

Observación no participativa.

b) Manejo de indicadores:

Algunos de los indicadores que se lograrán resaltar en la presente intervención

serán la dificultad que presenta la menor al asumir nuevos retos, la expresión de
malestar frente a indicaciones o instrucciones proporcionadas por su figura materna, la
frustración que se denota a través de gritos y quejas, la aparición de estrés ante los retos
cotidianos y, así mismo, la poca capacidad para idear soluciones. El comportamiento
no verbal constante en la observada radicó en el ceño fruncido, mientras que los
comportamientos verbales y de expresión aludieron al llanto, movimiento de piernas
cual berrinche, alargamiento de las palabras y a los murmullos frente a una situación
de malestar.

c) Herramientas a utilizar

Observación no participante, diario de campo, registros anecdóticos.

8. Técnicas de Registro/Observación
1. Diario de campo.
Diario de Campo de la 1era visita
Nombre de quien realiza la observación: Gabriela Mayorga Salazar
Fecha: 10/04/2022 Lugar: Lima/Perú

Tema para observar: Relación entre madre e hija. Hora: 5:37 – 6:45 pm.

Objetivo: Conocer cómo y porqué se observa una baja iniciativa por parte de la menor y si dicha falta de

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iniciativa es consecuencia de la relación madre – hija.
Protagonistas: La menor observada y su figura materna.

Descripción de la observación:
A las 5:37 exactamente, la niña de 7 años salió de su respectiva habitación, se talla los ojos e inmediatamente
llama a su madre, su madre, quién está cortando unas hojas de color verde en la mesa del comedor mientras
observa un tutorial en su celular invita a la menor a sentarse a su lado, ésta inmediatamente acata a la petición de
su madre y se sienta a su lado izquierdo. Una vez allí, F (conoceremos con dicha inicial a la menor) pregunta a
su madre “¿Qué estás haciendo, mamá?” y en respuesta, su madre comenta que se encontraba realizando unas
palmas, como tarea que le habían dejado a F por semana santa y que el lunes debía entregar. F orienta su atención
hacia su madre, tose y despeja con ayuda de sus manos, todo cabello de su rostro. A las 5:39 F pide una hoja para
dibujar y su madre no tarda en otorgarle a la menor aquello que había pedido, de inmediato F arrastra la cartuchera
a través de la mesa de vidrio, situando está a su lado, para comenzar a dibujar. A las 5:42 su madre exclama “¡Lo
hice!” al terminar aquellas palmas con ayuda del tutorial que se había estado reproduciendo, enseñando dichas
palmas a la menor, quién en respuesta repitió “lo hiciste, lo hiciste”. La madre, a quién se conocerá con la inicial
P decide levantarse de la mesa, no sin antes preguntarle a su hija si deseaba tomar algo de gaseosa, F se limita a
asentir y vuelve a centrar su atención en el papel sobre el cual había estado dibujando, su madre regresa y le
otorga dicha gaseosa y F lo toma rápidamente. A las 5:44, la madre comenta a F que después de que termine su
dibujo tendrían que practicar nuevamente las sumas y restas “Ya que debes reforzar, ya que entrarás a un nuevo
colegio y debes entrar sabiendo a sumar y restar”, en respuesta, F comenta “¿Por qué? ¿Por qué sumar y restar? Ya
me está doliendo la cabeza”. Ante la negativa de la menor, la madre vuelve a comentar que le enseñará a sumar
y a restar ya que “tienes que recordar todo lo que se te ha enseñado” y F, con una mueca de disgusto y con el
ceño fruncido acota “¿Por qué si yo ya sabo?” Al oír aquella falta ortográfica P no dudó en corregir con un tono
de voz suave “No se dice así, se dice yo ya sé, y así no deseas que se te enseñe”. A las 5:47 Francis forma sobre
sus labios una sonrisa y levanta con ambas manos la hoja sobre la cual estuvo dibujando, enseñandotanto el dibujo
de un pato morado como de una niña con un vestido gris, F pregunta “¿Se ve bonito?” Su mamáresponde a la
pregunta con otra “¿Por qué el vestido es de color gris?”. F, con cierta mueca de malestar sobre surostro responde
a ello “Rosado”, ante esa respuesta, P vuelve a preguntarle a su hija “¿Y por qué no lo pintaste de ese color”? a
lo que F, con malestar expresado en el tono de su voz añade “Se ve bien también, mamá, está bonito así.” P se
limita a asentir y F comenta a las 5:49 “Mamá, el lápiz no tiene punta, ayúdame, ayúdame”, frente a ese pequeño
berrinche por parte de la menor, la madre comenta que F ya sabe qué debe hacer en
momentos como ese, a lo que F se calma y se dedica a tomar el tajador, tajando su lápiz. P le indica a F que debe

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botar la basura en el tacho que se encuentra en la cocina, sin embargo, pese a aquella indicación, F decide colocar
la basura del tajador en la mesa. A las 5:50 la madre nota que F había dejado la basura sobre la mesa y añade cual
reprimenda no agresiva “Ahí no se bota, a la basura”, a lo que F decide levantarse de la mesa con la basurilla
del tajador para desechar la misma en el tacho de la cocina. De inmediato regresa a la mesa A las 5:52 F decide
romper el silencio y vuelve a mostrarle a su madre el dibujo que había dibujo hace pocos minutos, explicando
una historia detrás del dibujo de la niña. F comenta “La niña está triste porque no tiene comida”, a lo que su
madre no demora mucho en responder con cierta sorpresa en su rostro “¿No tiene comida? ¿Por qué?” a lo que
F, moviendo su mano izquierda trata de explicar “Es que su mamá tampoco tiene comida.” Ante ello, P cuestiona
nuevamente por el color del vestido de la niña “¿Por eso dibujaste el vestido de color gris?” y F, con cierta
mueca de malestar en su rostro y frunciendo nuevamente el ceño añade “Es gris porque me gusta, porque se ve
bonito, así está bonito.” Después de unos cuantos segundos de silencio, y ya siendo las 5:53 F vuelve su mirada
del dibujo hacia su madre, preguntando “¿Cuándo iré al colegio?” y su madre, volviendo su atención de una
hoja que se había encontrado pintando de color amarillo, le responde con una sonrisa en sus labios “Ya mañana
tendrás que ir a tu nuevo colegio, se llama Cinceladas” F, ante esta última palabra cuestiona el porqué de ese
nombre, ya que le parece extraño, a lo que P añade que dicho centro educativo se llamaba así porque hace
referencia a los pinceles. A las 5:55 F dirige su vista finalmente hacia las palmas que su madre había estado
realizando desde el inicio de la observación y que ya se encontraban puestas sobre la mesa, por lo que, tomando
una de esas dos palmas, F pregunta en dirección a su madre, con claro gesto de poco entendimiento y sorpresa
“¿Qué son?”, frente a dicha pregunta, P comienza a explicar detenidamente “Esas son las palmas que te dejaron
para presentar en tu tarea del colegio, con estas palmas recibieron a Jesús cuando entró a Jerusalén”, frente a
sus palabras, F responde “¿Pero Jesús no estaba muerto? Si yo lo vi, estaba clavado en la cruz, había clavos en
sus pies y en sus manos” F procede a levantar sus brazos en un ángulo de 180 grados, copiando aquella forma en
la que, para ella, se encontraba Jesús, al observar dicha acción, su madre le corrige “Ese es Jesús, pero yo me
refiero a Dios.” Ante dicha respuesta, F vuelve a dirigir su atención hacia la hoja en donde se encontraban sus
dibujos y es entonces, a las 5:58, cuando P vuelve a desviar su atención de la hoja a su menor hija, preguntando
“¿Por qué el pato es de color morado?” Yo ya te enseñé que los patitos son de color amarillo, F.” Frente a ello
F responde de manera inmediata, volviendo a fruncir el ceño y alargando las palabras “Porque así está bien,
porque está bonito”. P solo asiente, pero poco después añade “¿Y por qué la persona es marrón?” a lo que F
vuelve a responder con notorio malestar “Porque así está bien, porque está bonito, me gusta, y porque son mis
reglas, P”. Ante la respuesta de su hija, P solo pronuncia el nombre de la menor. A las 6:01 F vuelve a dirigir la
mirada hacia su madre, preguntándole “¿Deseas tener más hijos, P?” Ante eso, la madre solo niega con la cabeza,

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añadiendo “Ya no quiero tener más hijos, está bien con ustedes dos (en referencia a la observada y su hermana
menor, quién se encontraba sentada en el sofá)” Sin embargo, F vuelve a formular una pregunta a su madre,
siendo esta “¿Y por qué no te quitas el ovario? Si ya no quieres tener hijos”. Ante esa pregunta, la madre mostró
en las facciones de su rostro clara sorpresa y limitándose a decir el nombre de su hija en un tono de voz bajo,
continuó pintando las hojas blancas con el marcador amarillo. A las 6:10 ingresa al hogar una prima de F, a quién
saluda amablemente generando un vaivén de derecha a izquierda en dirección a ella, quién solo se limitó a decir
su nombre cual saludo informal. A las 6: 12 su prima vuelve a marcharse y F le despide exclamando su nombre.
A las 6:14 y después de un par de minutos de silencio, F dirige su mirada hacia su madre y le llama, a lo que su
madre le pregunta “¿Ya estás lista para practicar las sumas y las restas?” Ya mañana es tu primer día en la
escuela y debes ir sabiendo eso, F.” F en respuesta pregunta “¿Por qué?” A lo que su madre añade “Porque te
volverán a tomar las sumas y las restas y debes saberlas”. F termina aceptando con un movimiento de cabeza a
modo de afirmación y P se dispone a realizar ejercicios de suma y resta en una hoja bond. A las 6:16, la madre le
pregunta a P “¿Recuerdas cómo se sumaba, F?” ante esa pregunta, F niega con la cabeza y comenta con cierto
disgusto en su rostro “No, no recuerdo nada de la suma, P”. Ante ello, la madre pregunta, volviendo a centrar
su mirada en la menor “¿Cómo no te vas a acordar? Si te he enseñado, F, ten, debemos volver a practicar”. Al
observar el primer ejercicio, F admite “¿Qué es esto, P? No entiendo, no entiendo.” A lo que P comienza a
explicar detalladamente. A las 6:18 F muestra nuevamente frustración en las muecas de su rostro, a lo que P
pregunta “¿Qué sucede?” Y F comenta como razón al porqué no podía realizar el ejercicio “Es que hiciste mal
el pico de uno de los patitos y por eso no puedo contarlos bien, debes hacer bien el piquito”. Ante ello P comienza
a borrar aquel pato y vuelve a dibujarlo. A las 6:19 P vuelve a dejar la hoja de sumas y restas frente a F, a lo que
F observa nuevamente la suma y pregunta “¿Cómo se hace?” y su madre en respuesta acota “F, no siempre
estaré contigo, debes hacerlo bien porque yo no voy a estar a tu lado para apoyarte en la escuela”, sin embargo,
en contradicción a sus palabras, la madre comienza a explicar nuevamente cada uno de los ejercicios. A las 6:24
F interrumpe la explicación de su madre y comenta “Mira mamá, este 8 está mal, lo hiciste mal” a lo que su
madre responde entre risas “Que exigente que eres, F”, a lo que F añade “Pero lo hiciste mal, mamá” y ante ello,
P, con una nueva risa comenta “Exigente como tus respuestas”. A las 6:30, la hermana menor de F se acerca a la
mesa, reclamando por qué su hermana estaba usando sus marcadores, a lo que F responde de manera calmaday
apoyando su mentón sobre uno de sus brazos “No tengo tus marcadores, D, no las tengo, en verdad”, su madre
acota también “D, tu hermana no está usando tus marcadores, ve a sentarte en el sofá.” Ante los quejidos de la
hermana menor, aparece la abuela de la familia, quién se lleva a la hermana menor nuevamente hacia la
habitación. F no se inmuta por tal motivo y vuelve a centrar su atención en la hoja. A las 6:35 F dirige su mirada

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hacia su madre y pide, alargando nuevamente sus palabras, cual queja “Mamá, quiero ver televisión” P responde
“Puedes ver televisión, ve.” Después de levantarse de su silla, F se dirige hacia el sofá de la sala, tomando el
control e intentando cambiar el canal del televisor con el control, sin embargo, falla. De inmediato regresa donde
su madre con el control en una de sus manos “Mamá, el control no sirve, no puedo cambiar los canales”, “Pero
F, ya te dije que ese control no tiene pilas suficientes, debes pedirle a tu abuela que te preste el suyo, no estés
quejándote por algo que ya te dije qué debías hacer”. F, en silencio, se dirige hacia la habitación de su abuela,
ingresa y pide el intercambio de celular sin hacer berrinche alguno. A las 6:36 se sienta sobre el sofá e
inmediatamente se echa sobre uno de sus lados, comenzando a buscar en YouTube. A las 6:38 coloca un vídeo
sobre animales heridos, y P, quién aún continuaba haciendo parte de las tareas de sus hijas sobre la mesa, no
había tomado en cuenta aquello, hasta que, al levantar la mirada, siendo exactamente las 6:40 observa aquello
que su hija estaba mirando. De inmediato, P se levanta y le cambia el canal a la menor. Ante la acción de su
madre, F vuelve a sentarse sobre el sofá y comenta “¿Por qué cambiaste, mamá?” A lo que P, aún con la
amabilidad en el tono de su voz y un tanto sorprendida, añade “Es algo sensible, F, da tristeza, no podemos mirar
eso, hay sangre”, a lo que F, a modo de reclamo añade: “A mí no me da tristeza, yo soy fuerte, P, a ti solo te da
tristeza”. A las 6:45 y cuando su madre se está dirigiendo hacia la puerta principal del hogar, F pasa corriendo
de la casa al patio, siguiendo a su madre y abrazándose a ella, inmediatamente exclamando “Mamá, vamos a la
casa, tengo miedo, está muy oscuro”. Al obtener una negativa por parte de su madre, pues ésta deseaba dirigirse
a la puerta principal para abrir la misma, F comienza a llorar y a gritar, a lo que la madre llama a la abuela para
que ésta sea quién finalmente se dirija a la puerta principal a abrir la misma.

Conclusiones: Se puede añadir que la resolución de las tareas de la menor en cuanto a su ámbito académico, se
está viendo irrumpido por la intromisión de la madre, quién siente necesidad por ser parte de las tareas de su
hija ocasionando así una notoria dependencia por parte de la menor, quién reclama parte de su independencia al
defender sus dibujos de las críticas de su madre. Es importante recalcar que esta sobreprotección vista por parte
de la menor, al facilitarle su desenvolvimiento durante las actividades e incluso, con sus tareas, le puede estar
provocando a F no solo una falta de seguridad que desencadena actos de frustración o malestar, sino que
también le puede estar provocando que, como en el caso de las sumas y restas, la menor prefiera evitar
enfrentarse a retos que pongan en “exposición” sus falencias o su propia incapacidad de iniciativa.
Durante la observación se pudieron observar diferentes momentos en los cuales la menor denota no tener
adecuada iniciativa según corresponde a su edad (entre los 3 y 6 años según la teoría del desarrollo psicosocial)
y prefiere evitar retos que le generen malestar. Es importante comprender que dicha conducta generada por la

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madre, refiere a la intromisión característica que los padres presentan en una enseñanza de tipo permisiva según
la teórica Papalia.

Diario de Campo de la 2da visita

Nombre de quien realiza la observación: Gabriela Mayorga Salazar
Fecha: Lugar: Jr. Lambayeque, Villa María del Triunfo, Lima.
14/04/2022

Tema para observar: Relación madre - hija. Hora: 3:00 – 4:00 pm.

Objetivo: Conocer cómo y porqué se observa una baja iniciativa por parte de la menor y si dicha falta de
iniciativa es consecuencia de la relación madre – hija.
Protagonistas: La menor observada, su hermana menor y su figura materna.
Descripción de la observación:

La observación se llevó a cabo en el patio de la familia de la menor de inicial F, observándose dicha escena al
ser caracterizada por un amplio espacio de tierra, tres casas de perros y algunos artículos antiguos apilados a un
lado de aquel lugar, en el medio del mismo yace un triciclo y las mascotas de la familia rondan por dicho espacio.
Siendo exactamente las 3:00 se pude observar que F, siendo esta la menor de 5 años, se encuentra jugando con
su hermana menor, mientras su madre continúa con la limpieza del patio. De repente, su madre, después de notar
que uno de los baldes de los perros se encontraba lleno de piedras, proclama “¿Quién le colocó piedras al balde
de agua de los perros?” Ante ello, la hermana menor de F, quién estaba jugando en un triciclo ríe, a lo que F
comienza a exclamar “¡Yo traeré agua, yo traeré agua para las mascotas, mamá!” frente a esa exclamación su
madre asintió. A las 3:04 F se dirigió corriendo hacia el interior del baño, llevando consigo el balde blanco el
cuál se encargó de llenar. Segundos después y ante la ausencia de su primogénita, la madre llama con su ceño
un tanto fruncido “F ¿Qué tanto haces en el baño? Apura.” Ante su llamado, F exclama desde el interior de
aquella zona del hogar “¡Sí! Está bien, mamá”, sin embargo, y a pesar de sus palabras, la menor pasó un minuto
más en el baño y, al salir del mismo, murmuró aún mirando dentro de aquel espacio “Sí, ya terminé.” Después
de salir de aquel baño y siendo las 3:07, F se dirigió llevando consigo el balde blanco lleno hasta la mitad al
patio, emitiendo algunos quejidos al resultarle pesado dicho objeto. Después de dejar aquel objeto en el medio
del patio, F se dirigió hacia su mascota, tratando de colocar a uno de sus tres perros, la correa de color marrón,
sin embargo, y después de su primera falla, F decide rendirse y deja a su mascota con la correa puesta de manera

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inadecuada. De inmediato, y siendo las 3:10, F comienza a desempeñar un juego de roles con su hermana menor,
en el cual su hermana menor, aún encima del triciclo es una señora taxista que llevaría a F y a su perro de un
punto del patio a otro. La madre de la menor, al observar ese juego y notar que el perro comenzaba a quejarse,
exclama “¡No, no, cuidado, debes ponerle bien el collar! O de lo contrario podrías matarlo”, frente a esas
palabras, F admite “Pero sí está con el collallín”, ante aquel dicho la madre corrigió la inadecuada palabra que
su pequeña le había comentado “No se dice así, se dice collarín ¿Cómo va a ser collallín?” Al recibir aquella
crítica, F ríe y moviendo la cabeza a modo de negación, admite “Sí se dice así”. Volviéndose nuevamente hacia
el perro con el cual había estado interactuando, F murmura “Te lo pondré bien” en referencia a la correa, sin
embargo, después de unos cuántos intentos, se rinde. A las 3:15 y acercándose a su hermana, F le enseña la
correa y con una sonrisa comenta “A ver tú, aunque no seas un perro” Ante esas palabras, la madre de la menor
comenta rápidamente y cuál regaño “No, no seas chistosa, F, no te juegues así, pobre que le pongas eso a tu
hermana”. F, al ver que su mamá se sienta en la puerta entre el patio y el hogar, F se sienta a su lado, riendo
cómo sus perros habían comenzado a jugar entre ellos. Empero, al notar cómo uno de los perros muerde al otro,
a pesar de ambos estar jugando, F se levanta y comienza a golpear con una de sus manos el lomo de aquel animal,
a lo que su madre y abuela, casi al unísono regañan a F con un “Déjala”, a lo que F vuelve a sentarse en el
umbral de la entrada. A las 3:22 y ante la indicación de su madre, quién comentó “Ve, juega con tu hermana,
ayúdala con el triciclo”, F responde “No, no quiero” ante dicha respuesta, su madre añade con su ceño
levemente fruncido “Anda, por favor”. Arrastrando sus pies y con cierto malestar en su semblante, F comienza
a jugar con su hermana menor, empujando desde atrás aquel triciclo; sin embargo, al ver a su hermana caer y al
notar cómo ésta corre hacia su madre para indicarle que F le había empujado, aunque esto no era cierto, F se
fue hacia un lado del patio, murmurando “Ya no quiero jugar más con niñas como tú”. A las 3:30, y después de
que F estuvo sentada en el umbral de la puerta en silencio y en tanto su madre premiaba a su hermana menor
con palabras, F comienza a remedar las palabras de su madre, copiando frases como “Bravo, hija”, “Muy bien,
D.”, “Graaande”, empero, y ante el último remedo, la madre comenta, con el ceño fruncido y cierto malestar
en su rostro “F, ya me estoy cansando, no me remedes”, al observar el rostro de su madre, F se limita a
comentar “Perdón, mamá, lo siento”. Después de unos minutos de silencio en el cuál F se limitó a ver a su
hermana jugar y mientras conversaba con su madre, y ya siendo las 3:38, la madre comenta tanto para su hija
más pequeña como para F “Ya, pasen, niñas, ya está comenzando a hacer frío”, frente a la indicación, F en
primer lugar negó, aún así, se levantó del lugar y pasó rápidamente al interior de aquella casa.
Conclusiones: En el caso del collarín y su mascota, la menor no resuelve adecuadamente dicho conflicto y en
lugar de buscar alguna solución, decide continuar con un acto que pudo resultar peligroso, esto puede ser una

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clara connotación a una falta de iniciativa según Erikson; sin embargo, al repetirse dicho recuadro minutos
después, y al notarse un interés por parte de la menor en arreglar el collarín de su mascota, se puede comprender
que la falta de iniciativa no es nula, sino que, por el contrario, existe una iniciativa baja y endeble por parte de F
en buscar soluciones, aunque ésta de forma inmediata se ve puesta en segundo lugar. Así mismo, y ante algunas
conductas de malestar que la menor puede tener con su figura materna, se puede suponer que dichas actitudes
pueden ser ocasionadas por la falta de independencia que su madre tiene en relación con F, aún así, dicha
hipótesis se encuentra en proceso.

Diario de Campo de la 3era visita

Nombre de quien realiza la observación: Gabriela Mayorga Salazar
Fecha: Lugar: Jr. Lambayeque, Villa María del Triunfo, Lima.
14/04/2022

Tema para observar: Relación madre - hija. Hora: 6:20 – 7:20 pm.

Objetivo: Conocer cómo y porqué se observa una baja iniciativa por parte de la menor y si dicha falta de
iniciativa es consecuencia de la relación madre – hija.
Protagonistas: La menor observada, su hermana menor y su figura materna.
Descripción de la observación:

La observación se lleva a cabo en la sala del hogar, ambiente de estilo abierto, justamente en la mesa principal,
las horas abordadas de la observación son de las 6:20 pm a las 7:00 pm abordando horas de la noche y más
exactamente, se observó la interacción durante la cena. Sentados alrededor de la mesa se observa a F al lado de
su abuela y a su hermana menor al lado izquierdo del todo. La abuela de F comienza a hablar sobre la importancia
de la vigilia y ante ello, F cuestiona “¿Qué es vigilia, ¿Qué es vigilia?” Ante la pregunta, la abuela inicia la
explicación, mientras se sirve tanto una taza de café como su comida respectiva; sin embargo, F, al ver que su
abuela no le sirve café, comienza a quejarse con un tono de voz algo elevado a lo usual “¡Yo quiero té, yo quiero
té” Ante ello, su madre asiente y después de unos pocos minutos, regresa a la sala, ¡con la taza de té para sus
dos hijas! Empero, y a pesar de su petición, F aclama nuevamente “¡No, yo quiero café, café!”. Su abuela, al oír
las quejas de F, acota a modo de reclamo “Tu mamá no está para que juegues con ella, tú pediste primero té”,
ante la negativa, F añade con notoria molestia en su voz “Si yo voy a tomar té con café, así me sirven a mí”, sin
embargo, ante esa oración la abuela, mientras niega con la cabeza añade con cierta sonrisa en el rostro “si
tomas café te vas a loquear aún más”, F vuelve a acotar “¡Pero yo quiero café con té!” Ante la
exclamación que

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alcanzó a escuchar su madre, ésta añade en dirección a su primogénita “Está bien, está, ya, ahora te sirvo café
con té”. Ante la aceptación de la madre, y siendo las 6:25 la abuela comenta con cierta desaprobación en el tono
de su voz “Pero ¿estará bien si le das café con té?” A lo que la madre, antes de que F se dispusiera a decir algo,
añade “Sí, suele tomar eso a diario.” A las 6:30 y después de servir la cena, F vuelve a gritar con cierta
desesperación “Mamá, mamá ¡no hay sal!” y, frente a aquel grito, la abuela aseveró en tanto la madre se dirigía
a la cocina “Debes aprender a esperar, F. En realidad, ambas deben aprender a esperar.”
A las 6:40 una amiga de la abuela llega a la casa y mantiene una conversación con ella en la sala del hogar, F,
terminando de cenar, se dirige a uno de los lados de su abuela, escuchando con atención la conversación que
mantenía ella con su mejor amiga, irrumpiendo con alguna que otra palabra suelta, las cuales eran entrecortadas
por los regaños de su madre, quién comentaba en su mayoría “F, F, no, no interrumpas”. A las 6:45 el padre de
ambas menores se presenta a la sala y después de saludar a cada uno de los presentes toma asiento. A las 6:50
ambas menores pelean de manera vaga por estar entre los brazos de su padre, a lo que F, con el ceño fruncido y
con un puchero en los labios se para en medio de la sala, observando como su padre le daba un abrazo a su
hermana. Ante ello, el padre llama un par de veces a F, moviendo su mano izquierda en dirección a ella. F de
inmediato se acerca y se abalanza sobre su padre, abrazándole. A las 6:53 comienza a bailar, dirigiéndose hacia
el sofá frente al televisor, allí se siente en compañía de su hermana y comienzan a jugar, pataleando entre ellas
hasta otorgarse, la una a la otra, patadas.

Conclusiones: La menor presenta notorio malestar al no resolver sus conflictos de manera rápida por parte de
su madre, lo cual le lleva a hacer berrinches, a alzar la voz e incluso, a fruncir su ceño, esto puede ser
consecuencia de una iniciativa frustrada ya que no existe una respuesta positiva ni una comunicación
característica de la misma frente a este tipo de retos cotidianos.

Diario de Campo de la 4ta visita

Nombre de quien realiza la observación: Gabriela Mayorga Salazar
Fecha: Lugar: Jr. Lambayeque, Villa María del Triunfo, Lima.
18/04/2022

Tema para observar: Relación madre – hija. Hora: 1:30 – 2:30 pm.

Objetivo: Conocer cómo y porqué se observa una baja iniciativa por parte de la menor y si dicha falta de
iniciativa es consecuencia de la relación madre – hija.
Protagonistas: La menor observada, su hermana menor, la abuela de familia y su figura materna.

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Descripción de la observación:
La observación se llevó a cabo en la sala del hogar de la observada, encontrándose la misma sobre el sofá, con
las piernas recogidas sobre el mueble, una mejilla apoyada en una de las coderas y tarareando una canción, su
madre, sentada en el sofá contiguo, observa de reojo los vídeos que su menor hija observa con atención; sin
embargo, F, al notar que su mamá está observando de reojo dichos vídeos, añade con cierta sonrisa en su rostro
“P, no veas”; ante ese llamado, la madre responde casi de inmediatamente, con cierto ceño fruncido “Ya te dije
que no estés viendo tonterías, siéntate bien y baja el volumen”. A la 1:42 F comienza a cantar en baja voz
mientras cambia el vídeo que había estado viendo, siendo este el de los famosos personajes de FNAF, por uno
de Peppa Pig. F, inclinada hacia adelante prosigue viendo vídeos en YouTube mientras reposa un globo
desinflado en su boca, comenzando a morder el mismo e intercalando dicha acción al inflar dicho objeto. A la
1:47 F deja de jugar con el globo y se dedica a ver la televisión, la madre se va un momento a la cocina, pero, de
inmediato, regresa a la sala, continuando con el doblado de las prendas. La mamá mira la televisión para ver lo
que su menor hija se encuentra observando y F, al notar nuevamente la mirada de su madre en el televisor,
exclama entre risas “Que no mires, no mires”. Cambia de vídeo.
Siendo la 1:50 F se echa sobre el sofá, repitiendo algunos vídeos que ya había visto anteriormente, ante ello, su
madre comenta “¿Otra vez vas a repetir eso?” Ante dicha pregunta, F asiente mientras se cruza de piernas aún
sobre el sofá. Después de unos segundos de que la madre vio dicho vídeo, añadió con cierto desagrado en el tono
de su voz “¿Está comiendo basura?” F asintió nuevamente, ante ello la madre acotó “No estés viendo dibujos
feos, F”, a lo que F, acomodándose sobre el sofá hasta echarse correctamente sobre el mismo añade “No son
feos, a mí no me da miedo”. La madre, ante las palabras de su hija admite con cierta sonrisa sobre sus labios “Sí,
sí, luego no quieres ir al baño”, despeja la mirada del televisor. A las 2:00 la madre exclama “F, ya me toca”, en
referencia al uso del televisor, a lo que F refunfuña, sin embargo, finalmente asiente, entregando el control del
televisor a su madre, quién decide echarse en el sofá contiguo. A las 2:05 la madre, dirigiendo su mirada hacia
su hija, añade “F, sóbame mi pie” a lo que F decide volver a refunfuñar, negando una y otra vez; sin embargo, y
sin otorgar mayor resistencia, se levanta de su sofá, dirigiéndose hacia el sofá donde se encontraba su madre,
sobándole durante unos 10 segundos, antes de echarse sobre ella, abrazándola. Repentinamente, y siendo las
2:07, F añade con cierta risa mientras articulaba palabras “Mamá, debes ponerte flaquita”, la madre, en respuesta,
añade “Si estoy así es por ti, F, porque tuvieron que hacerme cesárea” F niega inmediatamente “No, no, no es
así”, a lo que la madre continúa hablando algunas anécdotas del embarazo que su menor hija se dedica a escuchar
con total atención, centrando su mirada en el rostro de su madre.

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Conclusiones: Se puede resaltar la creatividad de la menor al cumplir satisfactoriamente las consignas generadas
por su madre; sin embargo, y en cuanto al tema de observación, es indiscutible que la menor tiene cierta
complicación para tomar la iniciativa al momento de resolver conflictos, ello quizá al tener a su figura materna
como facilitadora, tal y como se observó en el caso del plumón y del borrador. F tiene adecuada concentración
cuando se dispone a estudiar, quedándose sentada sobre la silla durante periodos de largos minutos.

Diario de Campo de la 5ta visita

Nombre de quien realiza la observación: Gabriela Mayorga Salazar
Fecha: Lugar: Jr. Lambayeque, Villa María del Triunfo, Lima.
18/04/2022

Tema para observar: Relación madre - hija. Hora: 6:00 – 7:00 pm.

Objetivo: Conocer cómo y porqué se observa una baja iniciativa por parte de la menor y si dicha falta de
iniciativa es consecuencia de la relación madre – hija.
Protagonistas: La menor observada, su hermana menor, la abuela de familia y su figura materna.
Descripción de la observación:
A las 6:00 pm, y aun realizándose la observación en la sala, la madre, quién llega de la cocina a la sala dirige su
mirada hacia F, quién se encontraba aún sentada sobre el sofá frente al televisor, comentando en su trayecto “A
practicar la ma, me, mi, eso te lo van a tomar mañana y aún no te he visto practicar”. Al escuchar ello, F gira su
rostro hacia su madre, negando, a lo que su madre añade con disgusto en su rostro “Ya, ya, o me voy a molestar,
apura”, ante dicha petición, F se levantó del sofá, dirigiéndose hacia una esquina de la sala, en donde se
encontraba su espacio orientado al estudio. Siendo las 6:03 y una vez F estuvo sentada en su silla y con todos
los lápices puestos frente a ella, añade con cierto quejido en su voz, nuevamente alargando las palabras “P, no
encuentro hojas, no encuentro hojas”. Ante el pequeño berrinche de su hija, su madre comentó “Está en el fólder,
tú ya sabes dónde está”. Frente a la respuesta de su madre, F se levanta de su pequeña silla, logrando alcanzar
una de las hojas que en primera instancia no había logrado observar, y la cuál se encontraba sobre los libros de
un estante aledaño. A las 6:10, y después de que F estuvo escribiendo sobre una hoja de papel las instrucciones
que su madre le había comentado en un inicio de la observación, F vuelve a quejarse “Mamá, ayúdame, no
encuentro mi plumón rojo, no lo encuentro”. Ante la queja de su hija, la madre añadió en tanto se sentaba sobre
el sofá frente al televisor “¿Buscaste bien? Intenta buscar, está en tu caja de plumones, ahí debe estar”. Después
de rebuscar de manera brusca entre cada uno de los plumones de su caja, F volvió a quejarse con cierto puchero
sobre su labio inferior “Mamá, no lo encuentro, ayúdame, ayúdame”. Su madre, levantándose del sofá declaró

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en aquel corto trayecto que le separaba de su hija “Lo encontraré, de seguro, ya lo verás ¿Qué pasará si lo
encuentro?” Al acercarse a su hija y rebuscar en su caja de plumones, F no pudo evitar reír, pues su madre había
encontrado dicho plumón deseado. Después de tomar el plumón, F volvió a formar “ma, me, mi”. A las 6:15 la
madre dirige nuevamente su atención a su menor hija, guiando su atención desde el sofá hacia la mesita en donde
estaba practicando la menor “F ¿cómo se dice la m con la a?” Inmediatamente, añadió F “Me” Ante la
equivocación, la madre acotó “Pero ¿Cómo sería “Me”, ¿hija?” F acota “¿No es Me?” Ante la pregunta, la madre,
amablemente añade “No, la M por sí sola sería me, pero con la A sería Ma”. A las 6:21 la abuela sale de su
habitación, al ser llamada por la menor, dirigiéndose hacia el salón, hasta ocupar uno de los espacios del sofá
más largo. A las 6:30 la madre pregunta en dirección a su hija, después de hablar por un momento con la abuela
“¿Qué hiciste en la escuela, F?” Ante dicha pregunta, F añade “Hicimos los números, las cabezas, saltamos,
bailamos y dijimos mi mamá me mima” Ante ello, la madre solo añade “Bien, me parece bien”. A las 6:24 F se
levanta de su silla y se dirige hacia el sofá en donde su madre se encontraba sentada, comentando de cerca y a
modo de queja “El borrador, no hay borrador, mamá, no hay borrador” La madre añade “busca en el táper, hija”.
F se dirige nuevamente hacia la esquina en donde usualmente estudia durante las tardes, y rebusca en su táper
transparente, sin embargo, al no encontrar, añade en un tono de voz un poco más elevado “No encuentro, mamá,
no encuentro”. La madre comenta casi de forma inmediata “trae, ahora volveré a encontrar otra cosa más, trae,
F”. F vuelve a dirigirse hacia su madre, llevando en sus manos dicho táper transparente. La madre encuentra
dicho borrador y se lo entrega a su hija, después de ello F vuelve a dirigirse a su lugar de estudios, echando su
mejilla izquierda sobre la mesa mientras sus ojos siguen centrados en el papel sobre el cuál escribe.
A las 6:34 F se dirige hacia su madre, con dos hojas, una en donde se encuentran sus ejercicios y otra en donde
se encuentra el dibujo de una niña y un árbol, frente a ello la madre añade “Está bien, pero… te falta algo” F
cuestiona “¿Qué, mamá?” Y la madre, en respuesta comenta aun fijando su vista en la hoja de papel “Le falta
orejas y nariz, debes hacerlas”. F va corriendo a hacer ambas cosas, y vuelve inmediatamente, mostrando el
nuevo dibujo a su madre, añadiendo a su paso “Para ti, mamá, para ti”.
Conclusiones: Se puede resaltar la creatividad de la menor al cumplir satisfactoriamente las consignas generadas
por su madre; sin embargo, y en cuanto al tema de observación, es indiscutible que la menor tiene cierta
complicación para tomar la iniciativa al momento de resolver conflictos, ello quizá al tener a su figura materna
como facilitadora, tal y como se observó en el caso del plumón y del borrador. F tiene adecuada concentración
cuando se dispone a estudiar, quedándose sentada sobre la silla durante periodos de largos minutos. Así mismo,
se pudo observar cómo la madre aún continúa realizando críticas que quizá pueden ser la raíz de la dependencia
y falta de iniciativa de la menor.

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 2. Registros Anecdóticos
a) Registros Anecdóticos de la primera fecha de Observación (10/04/2022)
Observado F. B. L
Fecha 10/04/2022
Lugar Villa María del Triunfo, Lima.
Hora 5:47 – 5:52 pm
Descripción La menor forma sobre sus labios una sonrisa, y levanta con ambas manos la hoja de papel
del hecho sobre la que había dibujado, enseñando tanto un dibujo de un pato como el de una niña a su
madre. La menor pregunta a su madre “¿Se ven bonitos” a lo que su madre decide
responderle con otra pregunta, refiriéndose al dibujo de una niña con vestido de color gris
“¿Por qué su vestido es gris?” Frente a ello, la menor declara con notorio malestar en su
voz y con su ceño fruncido “Porque se ve bien, mamá, está bonito así.”

Comentario Durante dicho registro anecdótico se puede observar la relación entre madre e hija, la cuál
se caracteriza por críticas no realizadas de manera agresiva pero que promueven un
malestar notorio tanto, de manera no verbal como verbal, por parte de F, ello generado
quizá por el control que F puede percibir por parte de su madre durante ese tipo de
actividades, lo cual no le permite una iniciativa sólida. Es importante recordar que, durante
los 5 años, se debe alentar el juego sin críticas, no una educación netamente formal.

Observado F. B. L

Fecha 10/04/2022

Lugar Villa María del Triunfo, Lima.

Hora 6:18 – 6:24 pm.

Descripción La menor, al no encontrar el tajador sobre la mesa, añade con notorio malestar “¡el lápiz
del hecho no tiene punta, mamá, ayúdame, ayúdame!”, frente a ese berrinche por parte de la menor,
el cual duró unos cuántos segundos, la madre añade “Ya sabes qué hacer en momentos

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 como esos” Ante dichas palabras, la menor detiene sus exclamaciones y, en silencio, se
dirige hacia su habitación, en búsqueda de dicho objeto.

Comentario Falta de iniciativa de la menor durante su primera instancia, lo cual provoca una baja
resolución a los conflictos. Por suerte, su figura materna detiene el berrinche con una
oración otorgada de manera sutil, permitiendo que la menor se tome unos cuántos
segundos para resolver por su cuenta aquel conflicto propio. Es importante resaltar el rol
de la madre para resolver dicha problemática, puesto que, si la acción hubiese sido
abordada de manera distinta, F hubiese continuado con dicho berrinche, aún a sabiendas
de dónde se encontraba aquel tajador.

Observado F. B. L

Fecha 10/04/2022

Lugar Villa María del Triunfo, Lima.

Hora 6:19 – 6:30 pm.

Descripción Después de que la madre de la menor le pregunta a F “¿Recuerdas cómo se sumaba?”,

del hecho ésta, sin observar aún la hoja de papel admite “No, no, no recuerdo nada de la suma”.
Frente a dicha declaración la madre preguntó “¿Cómo no te vas a acordar? Si te he
enseñado, debemos volver a practicar”. Con el ceño fruncido y a pesar de lo comentado,
F vuelve a admitir con cierto malestar en el tono de su voz que no recuerda cómo se
sumaba. F admite “¿Qué es esto, P? No entiendo, no entiendo.” A lo que P comienza a
explicar detalladamente. A las 6:18 F muestra nuevamente frustración en las muecas de
su rostro, a lo que P pregunta “¿Qué sucede?” Y F comenta como razón al porqué no
podía realizar el ejercicio “Es que hiciste mal el pico de uno de los patitos y por eso no
puedo contarlos bien, debes hacer bien el piquito”. Ante ello su madre comienza a
borrar aquel pato y vuelve a dibujarlo. A las 6:19 su madre vuelve a dejar la hoja de
sumas y restas frente a F, a lo que F observa nuevamente la suma y pregunta “¿Cómo se
hace?” y su madre en respuesta acota “F, no siempre estaré contigo, debes hacerlo bien

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 porque yo no voy a estar a tu lado para apoyarte en la escuela”, sin embargo, en
contradicción a sus palabras, la madre comienza a explicar nuevamente cada uno de los
ejercicios.
Comentario Falta de iniciativa para realizar los ejercicios de suma y resta, notándose malestar
anticipado. Además, se observa la relación entre madre e hija, resaltando la reacción de
la figura materna ante los quejidos, describiendo dichas acciones como pasivas y
facilistas, las cuales afianzan la dependencia de la menor hacia la madre de familia,
quién se siente insuficiente o incapaz de realizar por sí sola algo que, con ayuda de la
madre, puede llevar a cabo.

b) Registro Anecdótico de la 2da visita (14/04/2022)

Observado F.L. B

Fecha 14/04/2022

Lugar Villa María del Triunfo, Lima.

Hora 6:20 – 6:25 pm.

Descripción F, al ver que su abuela no le sirve café, comienza a quejarse con un tono de voz algo
del hecho elevado a lo usual “¡Yo quiero té, yo quiero té” Ante ello, su madre asiente y después de
unos pocos minutos, regresa a la sala, ¡con la taza de té para sus dos hijas! Empero, y a
pesar de su petición, F aclama nuevamente “¡No, yo quiero café, café!”. Su abuela, al oír
las quejas de F, acota a modo de reclamo “Tu mamá no está para que juegues con ella, tú
pediste primero té”, ante la negativa, F añade con notoria molestia en su voz “Si yo voy a
tomar té con café, así me sirven a mí”, sin embargo, ante esa oración la abuela, mientras
niega con la cabeza añade con cierta sonrisa en el rostro “si tomas café te vas a loquear
aún más”, F vuelve a acotar “¡Pero yo quiero café con té!” Ante la exclamación que
alcanzó a escuchar su madre, ésta añade en dirección a su primogénita “Está bien, está,
ya, ahora te sirvo café con té”. Las quejas se detienen y la madre se dirige nuevamente
hacia el interior de la cocina.

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Comentario Este tipo de actitudes, observadas en más de una ocasión durante las horas de observación
del día respectivo, pueden ser consecuencia de esa falta de iniciativa que la figura materna
ha provocado en la menor ante ese sobreprotector estilo de crianza, esto puede provocar
malestar por parte de la menor, la cual es observada en su actos verbales y no verbales ya
que, al frustrarse su iniciativa, F solo ve como opción la queja y los gritos para comunicar
lo que desea por parte de su madre.

d) Registros Anecdóticos de la 3 era visita (18/04/2022)

Observado F.B. L

Fecha 18/04/2022

Lugar Villa María del Triunfo, Lima.

Hora 6:10 – 6:15 pm.

Descripción del A las 6:10, y después de que F estuvo escribiendo sobre una hoja de papel las
hecho instrucciones que su madre le había comentado en un inicio de la observación, F vuelve
a quejarse “Mamá, ayúdame, no encuentro mi plumón rojo, no lo encuentro”. Ante la
queja de su hija, la madre añadió en tanto se sentaba sobre el sofá frente al televisor
“¿Buscaste bien? Intenta buscar, está en tu caja de plumones, ahí debe estar”. Después
de rebuscar de manera brusca entre cada uno de los plumones de su caja, F volvió a
quejarse con cierto puchero sobre su labio inferior “Mamá, no lo encuentro, ayúdame,
ayúdame”. Su madre, levantándose del sofá declaró en aquel corto trayecto que le
separaba de su hija “Lo encontraré, de seguro, ya lo verás ¿Qué pasará si lo
encuentro?” Al acercarse a su hija y rebuscar en su caja de plumones, F no pudo evitar
reír, pues su madre había encontrado dicho plumón en su caja de plumones. Después de
tomar el plumón, F volvió a formar “ma, me, mi”.

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Comentario Se puede observar esa relación entre madre e hija, la cual puede estar generando esa
falta de iniciativa por parte de la menor, quién no se desenvuelve en primera instancia,
sino que, en contradicción a ello, prefiere quejarse con su figura materna, pues ve en
ella una manera de lograr rápidamente aquello que anhela, siendo esto un borrador o un
plumón, algo bastante corriente y común.

Observado F.B. L

Fecha 18/04/2022

Lugar Villa María del Triunfo, Lima.

Hora 6:24 – 6:30 pm.

Descripción A las 6:24 F se levanta de su silla y se dirige hacia el sofá en donde su madre se
del hecho encontraba sentada, comentando de cerca y a modo de queja “El borrador, no hay
borrador, mamá, no hay borrador” La madre añade “busca en el táper, hija”. F se dirige
nuevamente hacia la esquina en donde usualmente estudia durante las tardes, y rebusca
en su táper transparente, sin embargo, al no encontrar, añade en un tono de voz un poco
más elevado “No encuentro, mamá, no encuentro”. La madre comenta casi de forma
inmediata “trae, ahora volveré a encontrar otra cosa más, trae, F”.

Comentario Se pudo observar esa relación entre madre e hija, la cual puede estar generando esa falta
de iniciativa por parte de la menor, quién no se desenvuelve en primera instancia, sino
que, en contradicción a ello, prefiere quejarse con su figura materna, pues ve en ella una
manera de lograr rápidamente aquello que anhela, siendo esto un borrador o un plumón,
algo bastante corriente y común.

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ANEXO 2: CONSENTIMIENTO INFORMADO

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ANEXO 3: REGISTRO FOTOGRÁFICO

Hora: 6:40 pm. Hora: 7:00 pm.

Fecha: 10/04/2022 Fecha: 10/04/2022

Hora: 1:00 pm. Hora: 6:00 pm.

Fecha: 14/04/2022 Fecha: 18/04/2022

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REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS:

• Robles, B. (2008). “La infancia y la niñez en el sentido de identidad. Comentarios en

torno a las etapas de la vida de Erik Erikson”. México. Recuperado de:
https://www.medigraphic.com/pdfs/pediat/sp-2008/sp081g.pdf
• Velásquez, M. (2020). “Estilos de Crianza: Una Revisión Teórica”. Perú. Recuperado
de:https://repositorio.uss.edu.pe/bitstream/handle/20.500.12802/7286/Velasquez%20Quis
pe%20Marisol.pdf?sequence=1

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