La publicidad engañosa es aquella que anuncia cosas exageradas y falsas
para llamar la atención del consumidor influyendo en su decisión de compra. Este tipo de publicidad forma una idea alejada de la realidad.
La publicidad engañosa suele ser perjudicial tanto para el consumidor como
para las empresas. Debido a que el comprador no obtiene lo que pide y las empresas pierden credibilidad disminuyendo su número de consumidores.
Hay varios tipos de publicidad engañosa como la publicidad desleal que es
aquella que por su contenido provoca menosprecio hacia otra empresa como por ejemplo Coca-Cola y Pepsi que son marcas que viven en una constante competencia entre ellas ya que se denigran en redes sociales o anuncios.
La publicidad subliminal que es la que presenta un producto de manera breve
que se percibe de manera inconsciente llevando al comprador a su consumo como cuando en las películas o series los personajes usan con mucha frecuencia una marca ya sea de dispositivos electrónicos, cosméticos, etc.
La ilícita atenta contra la dignidad de las personas y vulnera los derechos
conocidos por la constitución como la promoción de productos ilegales como las drogas o la incitación a la violencia. La encubierta es la que no separa claramente la publicidad de la información. A pesar de ser sancionada, encontramos un ejemplo en los influencers que promocionan cierto producto en redes sociales sin mostrar que se trata de publicidad.
Y por último la publicidad que incumple normas específicas como por ejemplo normas que limitan la promoción de tabaco, alcohol, etc.
Por este tipo de publicidades el consumidor tiene una serie de derechos:
- Protección contra los riesgos que puedan afectar su salud o seguridad.
- Información correcta sobre los diferentes bienes o servicios, la educación y
divulgación para facilitar el conocimiento sobre su uso adecuado o consumo.
- Indemnización de los daños y la reparación de los perjuicios sufridos.
- Protección de sus derechos mediante procedimientos eficaces en especial
ante situaciones de inferioridad.
- Protección de sus legítimos intereses económicos y sociales; en particular
frente a las prácticas comerciales desleales y la inclusión de cláusulas abusivas en los contratos.
En conclusión, hay diversos tipos de publicidades engañosas que si el
consumidor no está informado adecuadamente de sus características y peligros, puede verse perjudicado económicamente. A pesar de que estas publicidades son sancionadas, continúan presentes. Una manera de evitarlas sería aumentar la severidad de la sanción respectiva.
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