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TEMA 3: LA TIPICIDAD.

EL TIPO COMO INJUSTO


CONCEPTO Y FUNCIONES DEL TIPO
 La tipicidad es la adecuación de un hecho cometido a la descripción que de ese hecho
se hace en la ley penal. Por imperativo del principio de legalidad, en su vertiente del
nullum crimen sine lege, solo los hechos tipificados en la ley penal como delitos
pueden ser considerados como tales.

Ningún hecho, por antijurídico que sea, puede llegar a la categoría de delito si, al mismo
tiempo, no es típico, es decir, si no corresponde a la descripción contenida en una norma penal.

De la amplia gama de comportamientos antijurídicos que se dan en la realidad, el


legislador selecciona aquéllos más intolerables y más lesivos para los bienes jurídicos más
importantes y los amenaza con una pena, describiéndolos en el supuesto de hecho de una
norma penal, cumpliendo así, además, las exigencias del principio de legalidad.

EVOLUCIÓN DEL CONCEPTO DEL TIPO (RELACIÓN CON LA ANTIJURIDICIDAD)


1. En su origen y durante la vigencia del Concepto Clásico de delito el tipo tiene, en este punto
al igual que la antijuridicidad, carácter puramente objetivo: sólo lo integran los elementos
objetivos (externos) del hecho, ya que la tipicidad es una característica de la acción y ésta, en
el concepto causal de acción, es la forma (activa o pasiva) de manifestarse al exterior, con tal
de que dependa de la voluntad, pero sin que el contenido y dirección concreta de esa voluntad
ni los conocimientos o móviles acompañantes se tengan en cuenta en la acción.

2. En el Concepto Neoclásico de delito se producen cambios en el tipo. Por una parte, junto a
quienes siguen defendiendo la tesis del tipo como meramente indiciario, surgen diversas
posiciones que sostienen que el tipo supone ya antijuridicidad.

Por otra parte, comienza a resquebrajarse la concepción de que el tipo sólo contiene
elementos objetivos, desde que se descubre que ciertos delitos contienen elementos
subjetivos del tipo o del injusto, es decir, especiales ánimos, móviles o finalidades, en muchos
casos distintos del dolo, que han de concurrir en el hecho no ya para que haya culpabilidad,
sino para que la conducta sea penalmente típica o que haya un tipo privilegiado.

Ej. El ánimo de lucro en el hurto, o el ánimo de descubrir los secretos o la intimidad de otro en
el descubrimiento y revelación de secretos.

3. El Finalismo sigue concibiendo el tipo como indiciario, pero en cambio incluye siempre una
parte subjetiva (de elementos internos) en el tipo, rompiendo así con la concepción del tipo
como puramente objetivo o al menos predominantemente objetivo (con la excepción de los
tipos con especiales elementos subjetivos del injusto). Concretamente se considera que el dolo
forma la parte subjetiva del tipo de los delitos dolosos, extrayéndolo pues de la culpabilidad
*Lo cierto es que la doctrina mayoritaria hoy, ciertamente incluye elementos subjetivos (en el
sentido de anímicos o internos) siempre en el contenido del tipo, y por tanto una parte
subjetiva en el tipo de injusto, pero sigue considerando que éste tiene carácter objetivo en el
sentido de general.

FUNCIONES DEL TIPO


- La primera función del tipo es la de garantía o plasmación del principio de la legalidad
en su garantía criminal (nullum crimen sine lege), esto es, asegurar que sólo sean delito
las conductas antijurídicas seleccionadas y descritas por la ley penal.

- Cumple una función de determinación (o motivación) general de conductas: como tipo


de injusto, resultante de añadir al indicio de antijuridicidad del tipo positivo la
comprobación de la ausencia de causas de atipicidad y de justificación.

- El tipo cumple una función de llamada de atención. Al destacar que una conducta es
penalmente relevante, intenta alertar a los ciudadanos para que no incurran en
errores de tipo ni de prohibición.

- Por último, la parte positiva del tipo cumple una función definidora y delimitadora de
unos tipos frente a otros, precisando sus elementos característicos.

ESTRUCTURA Y COMPOSICIÓN DEL TIPO


La estructura de los tipos puede ser muy diversa, según los elementos que contengan, pero
como mínimo se presentará la siguiente estructura básica: una parte positiva, comprendiendo
a su vez una parte objetiva y otra subjetiva, y una parte negativa.

PARTE OBJETIVA
Habrá como mínimo los siguientes elementos: un sujeto activo, que requiere las condiciones
de la autoría, una acción o conducta, positiva u omisiva, e implícitamente un bien jurídico que
se ve lesionado o puesto en peligro por la acción, con su titular o sujeto pasivo, así como el
objeto material.

PARTE SUBJETIVA
Requiere siempre dolo o al menos imprudencia como forma menos grave de tipo de injusto, o
puede consistir en una combinación de dolo e imprudencia en los delitos cualificados por el
resultado; además podrán requerirse a veces especiales elementos subjetivos del injusto, o
solo alguna clase de dolo o de imprudencia grave. Por último, la parte negativa del tipo supone
la ausencia de causas de atipicidad y de causas de justificación, con sus requisitos esenciales e
in-esenciales, generalmente objetivos, pero a veces también subjetivos.
CLASES DE DELITOS SEGÚN LA ESTRUCTURA DEL TIPO
SEGÚN LOS ELEMENTOS DEL TIPO OBJETIVO
Por el Autor o Sujeto Activo

- Delitos uni-subjetivos y pluri-subjetivos. Por el número de sujetos los tipos pueden ser:
uni-subjetivos —son la mayoría—, que requieren un solo autor, aunque no importa
que en el caso concreto intervengan varios; o pluri-subjetivos, que conceptualmente
exigen la intervención de más de un autor.

- Delitos comunes y delitos especiales, propios e impropios . Por la cualificación o no del


autor se distingue: delitos comunes, que no requieren cualificación en el autor; y
delitos especiales, que exigen una especial condición, relaciones o cualificación en el
sujeto activo (Pueden ser a su vez propios o impropios)

- Delitos de autoría normal (por dominio del hecho) y “delitos de infracción de deber ”.
La doctrina mayoritaria actual exige para la autoría, es decir, para la auténtica
realización del hecho típico (frente a la simple participación en el mismo), aparte de
llevar a cabo todas las actividades ejecutivas en su caso previstas por el tipo, “dominio
del hecho”.

Por la Acción o Conducta Típica y el Resultado

- Delitos de mera conducta. Sólo requiere una determinada conducta, activa o pasiva,
sin necesidad de un ulterior resultado distinto de aquélla.

- Delitos de resultado. El tipo requiere para la consumación la producción de un


resultado, material o ideal, como consecuencia de la conducta y distinto de la misma,
generalmente posterior, pero a veces simultáneo a ella. Por ello cabe perfectamente
tanto tentativa inacabada como frustración.

- Delitos de propia mano. Frente a los que no lo requieren, en los delitos de propia
mano, que generalmente serán delitos de mera actividad, pero también pueden darse
en los de resultado con modalidades limitadas de acción, el tipo exige que la conducta
típica se realice personalmente, sin intermediarios.

- Delitos de consumación (normal) y delitos de consumación anticipada . Mientras que la


consumación de los primeros requiere la obtención de los fines típicamente
relevantes, o sea, la realización del último acto o la producción del resultado final, en
los “delitos de consumación anticipada” ésta se produce excepcionalmente antes de
darse esas circunstancias.

- Tipos (o delitos) simples, compuestos y mixtos y delitos de hábito.

En los tipos simples o delitos de un acto se describe una sola acción, como matar, lesionar o
calumniar.

Los tipos (o delitos) compuestos o delitos de varios actos requieren pluralidad de acciones sean
tipos de mera conducta o de resultado. A su vez pueden ser tipos complejos o meramente
compuestos.
Los tipos (delitos) complejos se forman por la unión de dos o más acciones, cada una de ellas
delictiva por sí sola, pero que desaparecen dentro del nuevo delito que absorbe el desvalor de
sus componentes. Por ejemplo, el robo en casa habitada que absorbe el allanamiento de
morada.

Los tipos meramente compuestos se integran por diversas acciones, pero no necesariamente
ha de ser cada una delictiva ni, en caso de que lo sean, quedan todas absorbidas en el delito
compuesto. Por ejemplo, en las reuniones o manifestaciones ilícitas donde el reunirse o
manifestarse no es en sí ilícito, pero solo la conjunción de varios elementos crea delito.

En los delitos mixtos el tipo contiene, bajo la misma conminación penal, diversas modalidades
de conducta, bastando que se realice una de ellas para que constituya el tipo. Así, en el
allanamiento de morada se establece entrar o mantenerse en morada ajena; o en el cohecho
se establece el funcionario que recibe o solicita el beneficio indebido.

Por último, los delitos (o tipos) de hábito o habituales exigen una habitualidad en la realización
de la conducta, repitiéndola constantemente a lo largo de un tiempo, así el acoso sexual o los
maltratos habituales a parientes.

Por el Bien Jurídico y el Modo de Afectación del Bien Jurídico

- Los delitos de lesión suponen ya la efectiva lesión o menoscabo del bien jurídico. No
deben confundirse con los delitos de resultado: Pues, en primer lugar, los delitos de
lesión pueden ser tanto de resultado, material o ideal; y, en segundo lugar, como
luego veremos, puede haber delitos de resultado que sin embargo sean sólo tipos de
peligro, concreto o abstracto, para el bien jurídico.

- Los delitos de peligro se consuman sin necesidad de lesión, con el simple del bien
jurídico, suponiendo por tanto un adelantamiento de las barreras de protección a una
fase anterior a la lesión.

- Delitos de consumación (normal) y delitos de consumación anticipada . Como hemos


visto, aunque también los delitos de peligro suponen una anticipación de la
consumación de una actuación imprudente o dolosa eventual antes de la lesión,
normalmente se denomina delitos de consumación anticipada a figuras que recogen
actuaciones con dolo directo, sean delitos de emprendimiento, mutilados de dos actos
o cortados de resultado.

- Delitos instantáneos, permanentes y de estado.

En los delitos instantáneos la consumación se da en cuanto se realiza el último acto o se


produce el resultado, con la lesión o la puesta en peligro del bien jurídico, sin que se cree una
situación antijurídica duradera. En los delitos permanentes se crea con la consumación una
situación antijurídica duradera que se mantiene o puede cesar por la conducta del autor, como
en las detenciones ilegales, el allanamiento de morada activo o pasivo o la tenencia de armas y
explosivos. En los delitos de estado la consumación también crea una situación antijurídica
duradera pero cuyo mantenimiento no depende de la voluntad del agente.
- Delitos uni-ofensivos y pluri-ofensivos (o simples y compuestos ) La segunda
denominación de “simples o compuestos” se da aquí atendiendo no al número de
acciones, sino de bienes jurídicos). Los “delitos uni-ofensivos (o simples)” afectan a un
solo bien jurídico.

Ej. el honor en las injurias, mientras que los “pluri-ofensivos (o compuestos)” afectan a más de
un bien jurídico, como la acusación y denuncia falsas (del art. 456) a la Administración de
Justicia y al honor, el aborto no consentido (del 144) a la vida fetal y a los derechos de la
embarazada a la maternidad, libertad e integridad, o la extorsión (del art. 243) a la libertad y
la propiedad.

Por el Sujeto Pasivo (Titular del Bien Jurídico)

- Generalmente son coincidentes el sujeto pasivo del delito (titular del bien jurídico) y el
sujeto pasivo de la acción, pero hay tipos en que no coinciden, como sucedía en el art.
422 CP 1944 (sin paralelo en el CP 1995)

Automutilación para exención del servicio militar, cuyo sujeto pasivo era el Estado y la sociedad
como titulares de la defensa nacional, pero el sujeto pasivo de la acción era el mutilado, o
como puede suceder en algún caso de la llamada “estafa de seguro” si el autor se provoca
daños a sí mismo o a cosas suyas para cobrar la indemnización del seguro, siendo por ello
sujeto pasivo de la acción, mientras que el titular del bien jurídico patrimonial y por tanto
sujeto pasivo del delito es la entidad aseguradora.

- Según la clase o identidad del sujeto pasivo, se distinguen delitos contra la persona
(física o a veces también jurídica), contra la sociedad, comunidad o colectividad, contra
el Estado y contra la comunidad internacional.

En los delitos contra bienes jurídicos personales en principio es posible un consentimiento


eficaz para eximir, mientras que normalmente no cabe en los otros, salvo algunos casos en que
excepcionalmente el Estado puede autorizar la acción en interés y representación de la
comunidad (como en el art. 368 CP en relación con las drogas)

SEGÚN LOS ELEMENTOS DEL TIPO SUBJETIVO

1. En primer lugar los tipos pueden ser dolosos o imprudentes, pero también caben figuras
especiales con combinaciones dolo/imprudencia (o excepcionalmente dolo/dolo) como los
delitos cualificados por el resultado.

2. En segundo lugar, hay delitos con especiales elementos subjetivos del injusto o del tipo, así
como tipos que sólo admiten la comisión dolosa, pero no la imprudente. Algunos tipos incluso
sólo admiten el dolo directo y no se conforman con el dolo eventual (y por supuesto, menos
aún con la comisión imprudente)
TIPOS DE ELEMENTOS DEL TIPO
Los elementos objetivos del tipo (positivo, aunque lo mismo se puede decir del tipo negativo:
causa de justificación y de atipicidad) pueden ser descriptivos o normativos.

ELEMENTOS DESCRIPTIVOS

 Elementos descriptivos del tipo son aquellos para cuyo conocimiento y comprensión
basta con el común saber empírico y lógico de los hombres sobre sí mismos y sobre las
realidades y fenómenos del mundo exterior, sin necesidad de recurrir a normas para
comprender su significado.

Así, por ejemplo, “matar” en el homicidio, víctima “menor de 16 años” en la violación o delitos
sexuales, “expender medicamentos”, “ofrecer en el mercado productos alimenticios” en
diversos delitos contra la salud pública, “violencia o intimidación” en múltiples delitos, el
carácter “falso de hechos”, documentos o atribuciones en delitos de falsedades o calumnias…

Frente a esto, los elementos normativos del tipo requieren para el conocimiento y
comprensión de su alcance y significado el conocimiento de alguna norma (jurídica, social,
ética…) a la que el elemento está remitiendo. No es exacto, en cambio, definir elementos
normativos del tipo como aquellos que suponen una valoración, pues si bien generalmente las
normas de remisión implicarán una valoración, a veces pueden limitarse a definir o regular un
hecho, persona, objeto…sin valorarlo.

ELEMENTOS NORMATIVOS

 Los elementos normativos de los tipos, al igual que los descriptivos, son prácticamente
innumerables, por lo que citaré solo algún ejemplo concreto.

Así, la condición de “autoridad o funcionario” del sujeto activo de los delitos de funcionarios o
del sujeto pasivo directo en atentados y desacatos, que es un concepto jurídico-penal específico
definido en el art 24 del CP, y que desplaza al concepto administrativo de funcionario o
autoridad; la atribución de “un delito perseguible de oficio” que remite al concepto penal de
delito y al procesal penal de perseguibilidad de oficio; el “arma de fuego” en la tenencia ilegal
de armas, que remite a la normativa administrativa definidora de dichas armas; la condición
de “ajena” de una cosa en diversos delitos patrimoniales, o la actuación en perjuicio de “sus
acreedores” en el alzamiento de bienes, conceptos que remiten a normas de Derecho privado;
el promover la “corrupción” de menores, que remite a las normas ético-sociales
mayoritarias en el ámbito de la moral sexual; igualmente remite a normas y valoraciones
sociales de comportamiento la calificación de unas injurias como “tenidas en el concepto
público por graves”…

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