Está en la página 1de 11

RESUMEN PENAL UNIDAD 8: EL TIPO PENAL

PUNTO 1: TIPO Y TIPICIDAD (CONCEPTO, TIPICIDAD, EVOLUCION, FUNCIONES DEL TIPO)

-CONCEPTO

Al establecer nuestra CN en su artículo 18 que nadie puede ser penado sin juicio previo fundado
en ley anterior al hecho, se entiende que la única fuente de producción del derecho penal es la ley,
la cual debe ser estricta, escrita y publica.
Aunque la política criminal pueda opinar acerca de las conductas que deberían constituir delitos,
no serán tales hasta tanto no se las consagre en una fórmula legal que precise que es lo prohibido
y con qué pena se amenaza su comisión.
Asimismo, no todo lo antijurídico es delito, solo será delito aquello que produciendo una lesión lo
haga de tal modo que llame a una respuesta, la pena, destinada a evitar su reiteración.
Las precisiones acerca de lo que es delito tiene que ser dadas únicamente por una ley, a través de
una formula descriptiva del hecho que conmina con la imposición de una pena. A esta fórmula o
descripción se la llama ¨tipo¨
Cuando el tipo describe una conducta realiza una descripción general del hecho prohibido, la
descripción que lleva a cabo, al ser abstracta y general, resulta apta para atrapar cualquier hecho
que tenga las características que detalla

-TIPICIDAD
Cuando una conducta humana realiza un tipo penal, esto es, cumple con todos los elementos que
configuran el tipo, se afirma la existencia de tipicidad.
La tipicidad se establece a través de un juicio de subsunción, mediante el cual quien aplica el
derecho comprueba si la conducta humana se adecua, o no, a la descripción típica. Este proceso
de subsunción requiere que el hecho cumpla con absolutamente todos los requerimientos del
tipo, ya que si alguno falla no habrá tipicidad, sino que se tratara de un hecho atípico.

-EVOLUCION
Se pensó en un primer momento que el tipo era absolutamente neutral y que nada decía respecto
de los demás elementos del delito ya que solamente contenía una descripción de un hecho sin
ninguna otra connotación.
Posteriormente se advirtió que esto no era así, que en verdad el tipo ya hace una valoración al
elegir qué es lo que describiría para ser castigado y además que opera como una especie de figura
rectora, sobre todas las demás categorías del delito, las que condiciona, dejándolas subordinadas
a sus expresiones.
Originariamente, el tipo nada contenía respecto a la subjetividad de la conducta del autor ya que
ello recién se trataba al considerar la categoría de culpabilidad, más el posterior reconocimiento
de que la voluntad debe contener la finalidad llevo a la admisión de que ya en el tipo debe estar
presenta esa finalidad, lo que llevo a la inclusión dentro de el al dolo y la culpa.
Se pretendió exigir del tipo el uso de palabras claras y precisas, de modo tal que su descripción del
hecho no necesitara de ningún complemento. Luego, sin embargo, se comprendió que esto era
imposible, ya que las palabras tienen diferentes acepciones y usos.
-FUNCIONES DEL TIPO

 SELECCIONAR LA CONDUCTA Y LA PENA: El tipo penal elige a través de una actividad


política aquellas que por la gravedad de la lesión que producen socialmente se considera
que no basta con la respuesta reparatoria del Derecho civil, sino que se debe hacer algo
más para evitar que se repitan, ese algo más consagrarlas como delito asignándoles una
pena. Al elegir una pena, también realiza una función de selección que consiste en definir
la pena legal que debería imponerse, esto es un proceso político que debe respetar la
escala de valores o bienes jurídicos protegidos que es perceptible en el código penal.
 CONVOCAR AL CUMPLIMIENTO DE LAS NORMAS: El tipo llama a los ciudadanos a que no
realicen la conducta
 GARANTIZAR EL CUMPLIMEINTO DEL REQUERIMIENTO CONSTITUCIONAL DE LEY PREVIA:
Enunciando los presupuestos que condicionan la aplicación de la pena, el tipo satisface la
exigencia de ley previa

PUNTO 2: CLASES DE TIPOS (DE RESULTADO Y MERA ACTIVIDAD, DE LESION Y DE PELIGRO,


GENERALES/AGRAVADOS/ATENUADOS, COMUNES/ESPECIALES/PROPIOS/DE PROPIA MANO,
SIMPLES Y COMPUESTOS, CERRADOS/ABIERTOS/EN BLANCO, DE ACCION Y DE OMISION,
DOLOSOS Y CULPOSOS)

 TIPOS DE RESULTADO Y DE MERA ACTIVIDAD

Todo delito debe producir una ofensa o lesión conforme el artículo 19 de la CN, pero las formas de
manifestar dicha lesión son distintas.
En los llamados delitos de resultado se debe producir una modificación del mundo exterior y en los
delitos de mera actividad no se produce ese cambio exterior, sino que la misma actividad importa
una lesión para el bien jurídico.
Los delitos de resultado pueden ser de resultado instantáneo o resultado permanente y también
de creación de estado (el resultado producido es permanente en el sentido de irreversible pero la
consumación se logró en un momento)

 TIPOS DE LESION Y DE PELIGRO

En los delitos de lesión, la ofensa se concreta en una efectiva afectación del bien jurídico, en tanto
en los de mero peligro la lesión u ofensa exigida por la CN se revela en el peligro que para el bien
jurídico se presenta y que afecta el derecho de todas las personas a la seguridad personal y a gozar
de sus bienes sin interferencias debidas.
Dentro de los delitos de peligro encontramos a los de peligro concreto y los de peligro abstracto,
que se diferencian en que los primeros producen un efectivo y cierto riesgo para el bien jurídico,
en tanto los segundos para su consumación no pretenden la comprobación de existencia de un
peligro cierto, sino que abstractamente el legislador a considerado que conforme al normal ocurrir
de las cosas el comportamiento llevará a la lesión del bien jurídico y por eso se adelanta la
punición creando una especie de presunción de que el mismo se producirá.
El delito de peligro abstracto se transforma en el momento de su aplicación en delito de peligro
concreto. Los delitos de peligro abstracto más frecuentemente consagrados son los delitos de
tenencia

 TIPOS GENERALES, AGRAVADOS Y ATENUADOS

En el delito básico se encuentran los elementos esenciales para la configuración del hecho que se
considera merecedor de pena, en tanto los agravados o atenuados, también llamados calificados,
se registran ciertas circunstancias objetivas o personales que adjetivan el tipo básico, produciendo
en la pena un incremento una disminución.

 TIPOS COMUNES, ESPECIALES/PROPIOS Y DE PROPIA MANO

Delito común es aquel que no requiere en el sujeto activo la presencia de ninguna circunstancia
calificante en particular, puede ser cometido por cualquiera.
Delito especial o delito propio es aquel en que el sujeto activo debe necesariamente tener las
cualidades exigidas en el tipo o bien actuar en una situación jurídica exigida por el tipo
Delito de propia mano es el que exige que la acción sea cometida directa y corporalmente por el
mismo sujeto activo sin intermediarios como el autor mediato

 TIPOS SIMPLES Y COMPUESTOS

En los delitos simples la consumación con la realización de una única acción descripta en el tipo, en
los compuestos o plurisubsistentes, en cambio, deben desarrollarse dos o más acciones contenidas
en el tipo, las que pueden ser acumulativas o alternativas.

 TIPOS CERRADOS, ABIERTOS Y EN BLANCO

El tipo penal abierto necesita ser complementado por el intérprete al momento de su aplicación.
El tipo penal cerrado contiene en su fórmula todos los elementos necesarios para aplicarlo
El tipo penal en blanco únicamente contiene la sanción, pero no el precepto, que debe ser buscado
en otra ley penal

 TIPOS DE ACCION Y DE OMISION

La acción puede configurarse a través de actos positivos u omisiones, en un hacer o no hacer de lo


que es debido

 TIPOS DOLOSOS O CULPOSOS

Se diferencian en que el delito doloso requiere precisamente dolo (conocimiento y/o intención) en
el accionar del sujeto, mientras que el culposo se basa en que el incumplimiento de normas de
cuidado produce un resultado desvalioso.
PUNTO 3: LA COSTRUCCION COMPLEJA DEL TIPO PENAL

A) TIPO OBJETIVO:
 LOS SUJETOS,
 LA ACCION TIPICA (ELEMENTOS: NUCLEO/ELEMENTOS DESRIPTIVOS/ELEMENTOS
NORMATIVOS)
 LESION
 RELACION DE CAUSALIDAD E IMPUTACION OBJETIVA: RELACION DE CAUSALIDAD
(TEORIAS: TEORIA DE LA EQUIVALENCIA DE CONDICIONES Y TEORIA DE LA CAUSALIDAD
ADECUADA)-LA IMPUTACION OBJETIVA (REQUISITOS INDISPENSABLES PARA IMPUTA
OBJETIVAMENTE UN HECHO/CASOS DE EXCLUSION)

El finalismo logro que se impusiera la sistemática que utilizo para analizar las categorías del delito
y es así como en la dogmática actual generalmente se ubican dentro del tipo no solo datos
objetivos sino también datos subjetivos, cuales son el dolo y la culpa

-TIPO OBJETIVO

El tipo objetivo considera los sujetos, los elementos de la acción típica y la lesión. Dentro del tipo
objetivo también está incluido el vínculo que debe existir entre la acción y el resultado y la
imputación objetiva del hecho.

1. LOS SUJETOS

Sujeto activo es el que realiza u omite la acción descripta en el tipo penal, en la mayoría de los
casos los sujetos activos pueden ser cualquier persona, pero en algunos casos ese sujeto activo
debe ser calificado, ya que debe presentar determinadas características o cualidades.
Sujeto pasivo es el titular del bien jurídico que lesiona la acción típica

2. LA ACCION TIPICA-ELEMENTOS

La acción típica es el concreto comportamiento humano descripto como prohibido y merecedor


abstractamente de pena. Está conformado por el núcleo, elementos descriptivos, elementos
normativos, lesión y la relación de causalidad e imputación objetiva.
El núcleo por lo común se plasma en una expresión verbal, a través de la consideración del núcleo
se puede conocer el bien jurídico protegido, comprobar si fue o no lesionado y en qué momento
ocurrió.
Los elementos descriptivos: Resultan excepcionales los casos en que penalmente está prohibida
toda forma de realización de una acción, ya que generalmente solo se contemplan típicamente
algunos ataques al bien jurídico. Para esto se utilizan datos que, sin modificar los elementos
fundamentales del tipo básico, circunstancian o describen con mayor precisión la acción
penalmente relevante. Estos elementos refieren a cuestiones materiales y pueden conocerse a
través de procesos cognoscitivos comunes.
Los elementos normativos: Los tipos penales en algunos casos contiene elementos para apreciar
los cuales requieren una tarea valorativa, empleando al efecto las pautas que suministre el orden
de conocimiento a que pertenezcan. Pueden ser datos de naturaleza jurídica o cultural.
3. LA LESION

La lesión es la necesaria afectación al bien jurídico que comprende afectaciones por acciones u
omisiones, por actos de efectiva lesión o de peligro y por actos de mera actividad. Si no hay lesión,
no habrá constitucionalmente delito.
El resultado, en cambio, es una lesión, pero no sobre el bien jurídico sino sobre el objeto de
protección, que produce una modificación en el mundo exterior.

4. RELACION DE CAUSALIDAD E IMPUTACION OBJETIVA

Para hablar de un delito de resultado no bastaba con afirmar la existencia de alguna modificación
en el mundo exterior, sino que además debía comprobarse la de un vínculo o nexo entre la acción
y la modificación a la que provisoriamente se consideraba como su consecuencia, de modo tal de
no incurrir en la arbitrariedad.
Doctrinariamente este tema primero se abordó desde la perspectiva de la causalidad,
elaborándose las llamadas ¨teorías de la causalidad¨ pero luego se agregó su consideración desde
una visión normativa, bajo la denominada ¨teoría de la imputación objetiva¨.
Si bien la teoría de la imputación objetiva se elaboró para explicar los delitos de resultado,
finalmente se convino en que sus principios son aplicables a todos los demás.

El problema de la causalidad ha consistido en determinar cuál es la causa productora del resultado


y las que han sido meras condiciones (teorías individualizadoras).
Ser la causa del resultado no implica necesariamente la responsabilidad penal de quien así ha
actuado.
Pueden señalarse las siguientes teorías:
 TEORÍA DE LA EQUIVALENCIA DE LAS CONDICIONES ( CONDITIO SINE QUA NON): Se basa en
el concepto de causalidad de las ciencias naturales.
Todas las condiciones que deteminan un cierto resultado tienen idéntica y equivalente calidad
de causa. Por ende, todas las condiciones son equivalentemente causas.
En el ámbito del Derecho Penal estas nociones se trasladaron a partir de la siguiente
fórmula: una acción es causa si, suprimida idealmente su realización, el resultado no se habría
producido. En cambio, en los delitos omisivos, la omisión es causa del resultado si supuesta
mentalmente la realización de la acción omitida, el resultado no se habría producido.
Para aplicar esta teoría es necesario pensar el hecho como si la acción no hubiera ocurrido o
como si la omisión no hubiera tenido lugar (como si la acción omitida se hubiera realizado).
Como crítica a esta postura se ha señalado que es engañosa porque solo funciona si de
antemano se conoce la causalidad; y si se desconoce esa causalidad, no puede averiguarse con
la teoría de la conditio.

 TEORÍA DE LA CAUSALIDAD ADECUADA: Intenta ser una limitación de la amplia extensión de


la anterior, que tenía muchas dificultades para eliminar del ámbito de la tipicidad condiciones
muy alejadas temporalmente del resultado, que por tanto eran muy dudosas.
Según esta postura, no todas las condiciones son causas, sino solamente aquellas que de
acuerdo con la experiencia general producen habitualmente el resultado.
La crítica a la teoría es que también según la experiencia general los comportamientos
inadecuados producen resultados no habituales.

 TEORÍA DE LA RELEVANCIA TÍPICA DE LA CAUSALIDAD : Constituye otro intento por limitar la


extensión de la teoría de la equivalencia de las condiciones. Sostiene que para comprobar la
relevancia típica del nexo causal es preciso efectuar una correcta interpretación del tipo penal.
Para ello hay que partir de la teoría de la equivalencia de las condiciones y verificar el proceso
causal, pero luego habrá que verificar si se trata de una causalidad típicamente relevante.
La crítica que se le ha hecho es que no da los criterios para determinar cuál sería la correcta
interpretación del tipo.

 LA TEORÍA DE LA IMPUTACIÓN OBJETIVA : Esta postura propone reemplazar la relación de


causalidad por una conexión elaborada en base a consideraciones jurídicas, y no naturales.
Se debe indagar si existe una ley natural que indique que el resultado es consecuencia natural
de la acción humana.
Pero esa sola indagación es insuficiente. Es preciso someter esa causalidad natural a los
criterios jurídicos de valoración del ordenamiento jurídico a fin de determinar si el nexo
natural entre acción y resultado es típicamente relevante.
Verificada entonces la causalidad natural, corresponde precisar:
1. Si la acción del autor ha creado un peligro (o riesgo) jurídicamente desaprobado para la
producción del resultado (primer principio)
2. Si el resultado producido por dicha acción es la realización del mismo peligro (o riesgo) -
jurídicamente desaprobado- creado por la acción (segundo principio)
3. Si el riesgo creado, que se ha materializado en el resultado, se encuentra dentro del
alcance del tipo.
O, en otras palabras, una acción solo puede ser imputada, cuando ha creado un riesgo
jurídicamente desaprobado que se concreta en la producción del resultado

-CREACIÓN DE UN RIESGO JURÍDICAMENTE DESAPROBADO. CASOS DE EXCLUSIÓN. (PRINCIPIO


1)
 EL RIESGO PERMITIDO

Los riesgos que una sociedad tolera porque los considera necesarios para su desarrollo no pueden
ser alcanzados por la tipicidad. Por ende, la acción que no supera los límites del riesgo permitido
no es típica.
En algunas ocasiones los riesgos permitidos tienen una legitimación tradicional, y no puede
asegurarse que sean beneficiosos socialmente. En otras ocasiones el riesgo permitido está
normativamente regulado constituyendo dichas regulaciones pautas para la ponderación de sus
límites. El juicio sobre el carácter permitido del riesgo debe practicarse ex-ante, esto es, en el
momento en que el autor emprende la acción riesgosa, y tiene carácter objetivo.
 DISMINUCIÓN DEL RIESGO

Roxin aclara que no hay creación de riesgo si el autor del hecho modifica un curso causal de tal
manera que aminora o disminuye el peligro ya existente para la víctima, mejorando -por tanto- la
situación del objeto de la acción. Dice este autor que sería absurdo prohibir acciones que no
empeoran, sino que mejoran el estado de bien jurídico, concluyendo que en estos casos no hay
tipicidad. Debe quedar claro que se trata aquí de un único y mismo riesgo ya existente que se
disminuye, y no del reemplazo de un riesgo por otro menor, aunque muchas veces esto se difícil
de delimitar.

-LA REALIZACIÓN DEL RIESGO EN EL RESULTADO. CASOS DE EXCLUSIÓN (P 2)

Se exige que el riesgo no permitido creado por la acción sea el que se concreta en el resultado.
La realización del riesgo no se daría en las siguientes situaciones:

 CUANDO NO SE MATERIALIZA EL PELIGRO (RIESGO): La I.O. queda excluida en el caso en que el


resultado no se produce como plasmación del peligro creado por el autor con su acción, sino
tan solo como una mera casualidad (Roxin habla de una mera conexión casual con el riesgo).
Es decir, hay una mera relación fortuita entre el resultado y peligro (riesgo) jurídicamente
desaprobado. Ejemplo: una persona que ha sido herida por otra, y es llevada al hospital para
su tratamiento, muere a causa de un incendio en ese lugar

 EXCLUSIÓN DE LA IMPUTACIÓN POR FALTA DE REALIZACIÓN DE UN RIESGO NO


PERMITIDO. No basta con la transgresión de la barrera del riesgo permitido, sino que es
preciso que ello haya influido en forma concreta en el resultado. Ejemplo: durante una
maniobra de adelantamiento prohibida en una carretera, se produce un accidente vehicular
porque uno de los neumáticos del coche que la realiza explota repentinamente por defectos
de fabricación. En este supuesto, si bien el conductor violó el reglamento de tránsito y con ello
se excedió del riesgo permitido, no hay imputación objetiva del resultado al infractor porque
el peligro creado por él con su acción no lo produjo

 EXCLUSIÓN DE LA IMPUTACIÓN EN RESULTADOS QUE NO ESTÁN CUBIERTOS POR EL FIN DE


PROTECCIÓN DE LA NORMA DE CUIDADO. Las normas de cuidado han sido dictadas para
establecer los límites del riesgo permitido, dentro del cual debe mantenerse todo ciudadano.
Pero esas normas no están dirigidas a evitar cualquier tipo de resultado dañoso, sino
resultados concretos. Consecuentemente, si el daño producido no es de aquellos que la norma
de cuidado intentaba evitar, no le es atribuible al sujeto. Ejemplo: los reglamentos de tránsito
que imponen la disminución de la velocidad de los automotores al pasar por escuelas, están
destinados a evitar accidentes con niños que concurren a las mismas. Si alguien excede los
límites impuestos por la normativa y con ello causa un accidente que involucra a un adulto, en
ese mismo lugar, evidentemente ha creado un riesgo jurídicamente desaprobado, aunque no
le será imputable puesto que la norma no estaba destinada a evitar ese tipo de resultados.
 LAS CONDUCTAS ALTERNATIVAS CONFORME A DERECHO Y LA TEORÍA DEL INCREMENTO DEL
RIESGO. Estamos ante casos en los que alguien ha creado un riesgo jurídicamente
desaprobado, pero se demuestra que aun si se hubiese mantenido dentro de los límites del
cuidado exigido, el resultado lesivo también se habría producido con un muy alto grado de
probabilidad. Ejemplo: un conductor de un camión quiere sobrepasar a un ciclista en una
carretera, pero al hacerlo no se mantiene dentro de la distancia reglamentaria lateral fijada
para tal fin. Durante la maniobra prohibida de adelantamiento, el ciclista, que estaba ebrio,
cae bajo las ruedas posteriores del remolque, a causa de una maniobra súbita suya hacia la
izquierda, producto de una acción instintiva. Se demostró que el accidente también se habría
producido de haber respetado el camionero la distancia exigida por la
reglamentación. Roxin sostiene que en estos casos hay que establecer si la conducta contraria
a la norma elevó o no el riesgo de producción del resultado. Si ello ocurrió, cabe imputar el
resultado al autor; si no, quedaría excluida la I.O.

-ALCANCE DEL TIPO. CASOS DE EXCLUSIÓN. (P3)

Afirma Roxin que muchas veces, en casos concretos, pese a la realización de un peligro no cubierto
por el riesgo permitido, no puede verificarse la imputación al tipo objetivo. Y ello ocurre porque no
puede afirmarse que el “alcance del tipo”, también denominado “fin de protección de la norma
típica” (o sea, la prohibición de matar, lesionar, dañar, etc.) abarque resultados de la clase de los
producidos en esos casos concretos; o, en otras palabras, porque el tipo no está destinado a
impedir tales sucesos, sino otros.

Esta cuestión adquiere relevancia en tres grupos de casos:

1. LA COOPERACIÓN EN UNA AUTOPUESTA EN PELIGRO DOLOSA (DELIBERADA ): que se da


cuando alguien incita o coopera con otro en acciones que son más peligrosas que la
medida normal. Ej.: A y B llevaron a cabo una competición con motos, estando ambos
bebidos, pero en estado de plena imputabilidad. Durante la carrera B sufrió un accidente
mortal por su propia culpa. ¿Sería posible condenar por homicidio imprudente a A? Es
claro que participar de una carrera de esa naturaleza rebasa claramente el riesgo general
del tráfico automotor, y que el peligro se realizó en el desarrollo que tuvo el suceso. Sin
embargo, se dio en el caso una cooperación en una autopuesta en peligro dolosa, de cuyo
riesgo era suficientemente consciente B (que era plenamente imputable), y pese a
haberse realizado el riesgo en el resultado, éste no estaba comprendido en el ámbito de
protección de la norma y por tanto falta la imputación objetiva.
2. LA PUESTA EN PELIGRO DE UN TERCERO ACEPTADA POR ÉSTE : son casos en los que
alguien no se pone deliberadamente en peligro a sí mismo, sino que se deja poner en
peligro con conciencia del riesgo. Ej.: 1) El acompañante conmina al conductor a que vaya
a velocidad excesiva y prohibida porque quiere llegar a tiempo a una cita. A consecuencia
de la excesiva velocidad se produce un accidente, en el que resulta muerto el
acompañante. 2) Un automovilista que ya no estaba en condiciones de conducir por el
consumo de alcohol admite que le acompañe en su coche otro de los asistentes a la fiesta
a petición expresa de éste. El acompañante resulta muerto en un accidente causado por el
estado alcohólico del conductor. 3) Alguien tiene contactos sexuales con otra persona que
sabe que está infectada con SIDA: tal contacto, incluso sin protección, es impune si ambos
sujetos están informados del riesgo de contagio y son responsables conjuntamente de su
actuación.
3. LA ATRIBUCIÓN A LA ESFERA DE RESPONSABILIDAD AJENA : El fin de protección del tipo
tampoco abarca ya aquellos resultados cuya evitación cae dentro de la esfera de
responsabilidad de otro. Ej.: “A” conduce en la oscuridad un camión cuya parte trasera va
sin alumbrado, y es detenido por una patrulla de policía que le labra acta de infracción. A
efectos de seguridad frente a otros vehículos que pudieran llegar, uno de los policías
coloca en la calzada una linterna con luz roja. La policía le ordena a “A” que prosiga la
marcha hasta la próxima gasolinera, para lo que el coche patrulla marchará detrás para
seguridad del camión sin alumbrado trasero. Pero antes de que “A” arrancara, el policía
retira la linterna de la calzada y a continuación el camión sin alumbrado es embestido por
otro camión, cuyo copiloto resulta muerto. Según Roxin una vez que la policía había
asumido la seguridad del tráfico, el suceso ulterior entraba dentro de su esfera de
responsabilidad y ya por esa razón no se le puede imputar a “A”. El alcance del tipo no
abarca, por tanto, el accidente posterior.

-REQUISITOS INDISPENSABLES PARA IMPUTAR OBJETIVAMENTE UN HECHO: Además de una


relación de causalidad, debe existir una relación de riesgo. Cuando pese a reconocerse una
relación de causalidad no puede comprobarse la relación de riesgo, no podrá sostenerse la
imputación objetiva del hecho al tipo que se estudie. Esta relación de riesgo se conformaría a
partir de la conjugación de los siguientes requisitos:

 Que la acción en cuestión haya creado un peligro jurídicamente desaprobado

 Que el riesgo o peligro causado al bien jurídico sea precisamente el desaprobado


jurídicamente en el tipo penal que se estudia

 Que el resultado se encuentre dentro del ámbito de protección de la norma, es decir, de la


finalidad perseguida por la norma

PUNTO 3B: TIPO SUBJETIVO (DOLO Y CULPA)

Dentro del tipo subjetivo se hallan aspectos que refieren justamente a la subjetividad del autor, a
su fuero íntimo. La razón de esta separación explicativa de los delitos dolosos y culposos se
encuentra en su distinta estructura subjetiva.
Nuestro derecho penal admite exclusivamente la responsabilidad subjetiva, que pueda
presentarse bajo las formas principales de dolo y culpa.
Ambas modalidades de realización de los tipos concretan lesiones a los bienes, sin embargo,
socialmente no son igualmente desvaloradas las acciones realizadas con intención que las
realizadas por imprudencia, aunque produzcan el mismo resultado, y esta distinta valoración
encuentra su reflejo en las leyes penales que castigan más fuertemente al hecho doloso que al
hecho imprudente.
1. EL DOLO
La expresión dolo tiene un significado restringido, ya que trabaja exclusivamente con los que están
definidos en una ley previa a través de su tipificación, es decir los actos típicos, de lo que se sigue
que para nosotros el dolo es la conciencia de realizar el tipo objetivo propio de un delito.
La voluntad de realizar un hecho que, aunque sea muy dañoso no es típico, no es dolo para el
derecho penal, porque no habrá tipicidad objetiva ni por tanto tipicidad subjetiva.
El dolo, como cualquier elemento del tipo, no se presume, sino que debe demostrarse

2. LA CULPA
Como la expresión culpa es utilizada con distintos sentidos, se postula sustituir la expresión culpa
por la de imprudencia.
La culpa o imprudencia consiste en la realización de n tipo como consecuencia de la infracción de
un deber de cuidado. En su subjetividad el autor del delito imprudente no pretendió realizar el
resultado, pero como se atribuye el mismo a su objetiva falta de cuidado, se le imputa a su
persona.
El delito culposo o imprudente no existe intención de cometer un injusto.
Mientras en el delito doloso puede apreciarse la intención de dañar un bien jurídico, en el delito
imprudente se percibe una actitud subjetiva de menosprecio por los bienes jurídicos de los demás
(menosprecio revelado en la falta de cuidados).

También podría gustarte